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Deslizamientos… ¿Qué son? ¿Qué los causan y que efectos tienen?

Luis Enrique Villafuerte Bermúdez¹

Los deslizamientos han apagado millones de vidas y han causado


incuantificables pérdidas económicas alrededor del mundo a través de los años.
Con el fin de evitar más pérdidas se han desarrollado diversas metodologías de
evaluación y gestión de riesgos por deslizamientos, por lo que es importante
primero entender la definición de deslizamiento, los múltiples detonantes que
los causan y los efectos de los mismos.
En este texto se pretende conseguir que el lector pueda entender qué son los
deslizamientos, el motivo por el cual se producen o se producirán y cuáles son
las consecuencias dependiendo del detonante que los originan.
Una de las primeras definiciones de deslizamiento fue propuesta por Terzaghi
en 1950, refiriéndose a “un rápido desplazamiento de masa de roca, suelo
residual, o sedimento adyacente a una pendiente, en donde el centro de
gravedad de la masa en movimiento avanza en dirección hacia abajo y hacia
afuera de la pendiente”. En 1967, Morton & Streitz definen a los deslizamientos
como parte de una categoría más general de un proceso de erosión llamado en
inglés “mass-wasting”, seguramente mal traducido al español como
“desperdicio de masa”. Sin embargo, este término hacía alusión al proceso de
movimiento de pendiente descendiente de materiales de la superficie terrestre
por gravedad, sea esté rápido o lento, siempre y cuando este movimiento
exceda la fuerza de la gravedad. En 1976, Radbruch-Hall & Varnes coinciden
con la definición de Terzaghi, con la particularidad que la enfocaban
exclusivamente a taludes existentes. En 1991, Cruden realiza un análisis
histórico del término deslizamiento ya que erradamente se creía que solo aludía
a suelo por lo cual, basado en “The working Party” en el inventario mundial de
deslizamientos en 1990, presentó una definición simple y fácil de entender de
deslizamiento como “un movimiento de masa de roca, suelo o detritos hacia
abajo de una pendiente”, la cual es aceptada por Popescu en 2002.
Los factores que causan deslizamientos y sus efectos de igual manera se han
estudiado a través del tiempo, ya en el año de 1950, Terzaghi dividió las causas
¹Luis Enrique Villafuerte Bermúdez: Ingeniero Civil de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador y actualmente
estudiante de Maestría en Ingeniería Civil con énfasis en Geotecnia en la Pontifica Universidad Javeriana de Bogotá.

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detonantes en dos grandes grupos. El primero grupo asociado a causas externas
que resultarían en un incremento de esfuerzos de corte a través de la superficie
potencial de deslizamiento como los cambios de geometría de los taludes, la
descarga en el pie del talud, la carga en la cresta del talud, vibraciones y
sacudidas producidas por sismo, el rápido descenso del nivel de agua y los
cambios en el régimen de agua. El segundo grupo relacionado con causas
internas que repercutirían en un descenso de la resistencia cortante del suelo
en las condiciones de equilibrio del talud como la presencia de lubricación a
causa del agua, el aumento de la superficie piezométrica, cambios estructurales
progresivos en los materiales que forman la pendiente, la meteorización y la
erosión por filtración. En 2005, Duncan coincide con Terzaghi en exponer que
la causa de las fallas de los taludes se da porque el esfuerzo cortante del suelo
es menor que el esfuerzo cortante requerido para el equilibrio y que para que
esto ocurra debe existir una disminución del esfuerzo cortante en el suelo y un
incremento en el esfuerzo cortante requerido para el equilibrio.
Terzaghi resume todos los detonantes de deslizamientos, principalmente en 5,
el agente transportador, los esfuerzos tectónicos causados por movimientos de
placas y sismos o explosivos, el peso de los materiales que forman el talud, y el
agua.
El primer detonante, el agente transportador, se origina en la etapa de
construcción o por erosión produciendo el incremento de la altura o incremento
de la pendiente lo que se traducirá en cambios del estado de esfuerzos en el
material que forma el talud en cualquier tipo de material que este constituido
y causando un incremento de esfuerzos cortantes en las condiciones de
equilibrio del talud. En el caso de materiales rígidos, arcilla fisurada y pizarras
también causará una apertura de juntas y originará la reducción de la presión
capilar asociada con el hinchamiento.
El segundo agente, los esfuerzos tectónicos, se suscita por los movimientos
entre placas tectónicas provocando una gran deformación en la corteza
terrestre en cualquier tipo de material y causando un incremento del ángulo de
la pendiente y por ende un incremento en los esfuerzos cortantes en las
condiciones de equilibrio del talud.

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El tercer agente, los esfuerzos tectónicos o por explosiones, se producen por
sismos o el uso de explosivos induciendo a alta frecuencias de vibración en todo
tipo de materiales produciendo un cambio transitorio de estado de esfuerzos e
incrementos en los esfuerzos cortantes en las condiciones de equilibrio del
talud. Este tercer agente, dependiendo del tipo de material ocasionara efectos
diferentes en las condiciones de equilibrio del talud; para materiales tipo loess,
arenas ligeramente cementadas o gravas ocasionará daños en los contornos
intergranulares y por ende un decremento de la cohesión y el incremento de
esfuerzos cortantes; para materiales arenosos sueltos de granulometría media
o fina en estado saturado iniciará el reacomodo de los granos generando una
licuefacción espontánea.
El cuarto agente, el peso de los materiales que forman el talud, se producen
por procesos que crearon el talud. El primer proceso está relacionado al
fenómeno de creep en la pendiente del talud compuesto por materiales duros,
arcillas fisuradas, pizarras y restos de viejos deslizamientos y el segundo
proceso está relacionado al fenómeno de creep en estratos débiles por debajo
del pie del talud conformado por materiales rígidos descansando en materiales
plásticos. Ambos procesos causan la apertura de juntas cerradas y la creación
de nuevas aperturas, traduciéndose en la reducción de la cohesión en las
condiciones de equilibrio del talud y originará la reducción de la presión capilar
asociada con el hinchamiento.
El quinto agente, y por lo general el más influyente causante de los
deslizamientos es el agua. Existen 7 procesos o eventos en los que interviene
este agente detonador y actúa de varias maneras. El primer evento es la lluvia
o el derretimiento de la nieve, en arena húmeda se presenta desplazando del
aire en los vacíos incrementando la presión de poro y disminuyendo la
resistencia friccional en las condiciones de equilibrio del talud; en rocas con
presencia de diaclasas o pizarras el agua ocasiona desplazamientos de aire en
las juntas abiertas causando el mismo efecto que en la arena húmeda; en
materiales rígidos, arcillas fisuradas y algunas pizarras, el agua origina la
reducción de la presión capilar asociada la hinchamiento causando
hinchamiento y disminución de la cohesión en las condiciones de equilibrio del
talud; en rocas de cualquier tipo el agua produce meteorización química

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originando la debilitación de los contornos intergranulares y por ende la
disminución de la cohesión en las condiciones de equilibrio del talud; el segundo
evento es el “Frost” o congelamiento, en limos y en limos arenosos el agua
ocasiona la formación de capas de hielo y su posterior derretimiento
incrementando el contenido de agua de suelos en capas superiores produciendo
una disminución de la resistencia friccional en las condiciones de equilibrio del
talud; mientras que en rocas con presencia de diaclasas el agua origina la
expansión debido al congelamiento consiguiendo ensanchar las juntas
existentes y produciendo nuevas disminuyendo la cohesión en las condiciones
de equilibrio del talud; el tercer evento es el “dry spell” o sequías, el agua
provoca contracción en suelos arcillosos y produce grietas de contracción
disminuyendo de igual manera la cohesión en las condiciones de equilibrio del
talud; el cuarto evento es el rápido descenso del nivel de agua, en arenas finas
y limos previamente drenados este evento origina filtraciones hacia la pata del
talud y produce un exceso de presión de poro disminuyendo la resistencia
friccional en las condiciones de equilibrio del talud; el quinto evento es el
rápido cambio de la elevación de la tabla de agua, en arenas sueltas de
granulometrías medias o finas en estado saturado, este evento produce el inicio
del reacomodo de los granos y el incremento espontáneo de la presión de poro
ocasionando un efecto de licuefacción espontánea; el sexto evento es el
aumento de la tabla de agua en un acuífero distante, en capas de limo o arena
entre o bajo capas de arcilla este evento causa el aumento de la superficie
piezométrica en el material que forma el talud lo que ocasiona un incremento
en la presión de poro y una disminución de la resistencia friccionaste en las
condiciones de equilibrio del talud. Finalmente el séptimo evento es la
filtración de una fuente artificial de agua, en limos saturados la filtración hacia
el talud incrementa la presión de poro y disminuye la resistencia friccionaste
en las condiciones de equilibrio del talud; en arenas finas y arenas húmedas la
filtración desplaza el aire en los vacíos y elimina la tensión superficial
disminuyendo la cohesión en las condiciones de equilibrio del talud; en
materiales tipo Loess, este evento remueve el aglutinante soluble y destruye el
enlace intergranular ocasionado de igual manera la disminución de la cohesión
en las condiciones de equilibrio del talud; en arenas finas y limos la filtración

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ocasiona la erosión sub superficial ocasionando que la pendiente del talud sea
socavado e incrementando los esfuerzos cortantes en las condiciones de
equilibrio del talud.
Duncan expone que existen varios procesos que pueden reducir la resistencia al
corte del suelo como el incremento de presión de poro, el agrietamiento, el
hinchamiento, el desarrollo de estrías, la descomposición de rellenos de roca
arcillosa, el fenómeno de creep bajo cargas sostenidas, la lixiviación, el
ablandamiento de la deformación, la meteorización y las cargas cíclicas. Otro
tipo de procesos causan el incremento de esfuerzos cortantes dentro del suelo
como la aplicación de cargas en la cima del talud, la presión de agua en grietas
en la cima del talud, el incremento del peso del suelo debido al incremento de
contenido de agua, la excavación en el fondo del talud, caída en el nivel de
agua en la base del talud y movimientos por sismos.
En 1978, Varnes señaló que existen múltiples factores externos e internos
causantes de deslizamientos que pueden reducir la resistencia cortante y a la
vez incrementar los mismos esfuerzos, por lo que, en el año de 1984, Popescu
planteó que es más apropiado emplear el término “factores causales” que las
“causas” de deslizamientos per se. Popescu plantea que las condiciones del
suelo son criterios que influencian, pero no son causas de deslizamientos, las
condiciones del suelo son parte de las condiciones necesarias para el desarrollo
de una inestabilidad de una pendiente a las que se le debe añadir criterios de
esfuerzos de medio ambiente, presiones de poro y temperatura. Las
condiciones causales pueden ser naturales u ocasionadas por el hombre, pero
deben cambiar las condiciones estáticas del suelo lo suficiente para causar que
un deslizamiento se produzca. Según Popescu, existen dos grupos de factores
causales: el primero son los factores causales preparatorios que hacen a la
pendiente susceptible al movimiento sin iniciarlo realmente y tendiendo así a
situar la pendiente en un estado “marginal” en el que puede fallar en algún
momento en respuesta a las fuerzas desestabilizadoras dependiendo del nivel
de actividad y los segundos factores causales desencadenantes que inician el
movimiento y pasan del estado “marginal” al estado inestable. Los factores
causales están divididos de acuerdo a su efecto (preparatorios o
desencadenantes) y su origen (condiciones del suelo y geomorfológicas, físicas

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o procesos realizados por el hombre), que se resumen en cuatro grupos de
condiciones causales como lo propone el “Working Group on Causes of
Landslides (WP/WLI,1994): el primero grupo son las condiciones del suelo que
considera como causa la debilidad plástica del material, la sensitividad, la
colapsabilidad, el grado de meteorización, la rotura, las diaclasas o juntas, la
masa de discontinuidades orientadas adversamente, las estructuras de
discontinuidades orientadas adversamente, el contraste de la permeabilidad y
los efectos en el agua subterránea en contraste con su rigidez; el segundo grupo
de condiciones causales se asocia con procesos geomorfológicos como el
levantamiento tectónico, el levantamiento volcánico, la repercusiones
glaciales, la erosión fluvial en el pie del talud, la erosión por olas, la erosión
lateral, la erosión subterránea, la depositación de cargas en la cresta del talud,
la remoción de vegetación; el tercer grupo de condiciones causales está
relacionado con los procesos físicos como la intensidad de lluvia de corta
duración, el derretimiento rápido de hielo, la alta precipitación prologada, el
incremento rápido descenso del nivel de agua, los sismos, las erupciones
volcánicas, la rotura del borde de lagos en cráteres, la descongelación del
permafrost, la congelación y descongelación de suelos expansivos; el cuarto
grupo de condiciones causales se relaciona con procesos hechos por el hombre
como la excavación de los taludes o sus pies, la carga de taludes en la cresta,
la irrigación, el defectuoso mantenimiento de sistemas de drenaje, la
deforestación, la minería, la creación de presas de desechos sueltos y
vibraciones artificiales causada por vehículos y otros factores.
En 2005, Cornforth coincide con muchas de las causas de deslizamientos
propuestas por como llamó Terzaghi “eventos o procesos en los que el agente
entro en acción”, pero propone una causa dominante que en términos legales
se llama “proximate cause”. En 1976, Radbruch & Varnes expone las causas y
los efectos de los deslizamientos en términos regionales, especialmente en
estudio de mecánica de rocas, expone que las principales causas son el clima,
la topografía, la litología, la historia tectónica, la distribución de la roca, su
estructura, la vegetación, la pendiente, la erosión, el fracturamiento de la roca
y la condición de esfuerzos, produciendo efectos a una escala más grande, como
sismos e inundaciones, además de afectar el trabajo del hombre directa e

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indirectamente causado pérdida de vida y económicas, llenando reservorios,
contaminando los ríos con detritos.

En conclusión, la definición de deslizamiento más fácil de entender y aceptada


por la mayoría de personas afines a la ingeniería o alejados de este campo
reconoce la definición de deslizamiento como “un movimiento de masa de roca,
suelo o detritos hacia abajo de una pendiente” (Cruden, 1991). En cuanto a las
causas que originan un deslizamiento se puede concluir que tanto Terzaghi
como Duncan coinciden en exponer que la causa de las fallas de los taludes se
da porque el esfuerzo cortante del suelo es menor que el esfuerzo cortante
requerido para el equilibrio y que para que esto ocurra debe existir una
disminución del esfuerzo cortante en el suelo y un incremento en el esfuerzo
cortante requerido para el equilibrio. Terzaghi propone que los agentes
externos resultarían en un incremento de esfuerzos de corte y agentes internos
que implicarían una disminución de esfuerzos cortantes. La determinación de
las causas de deslizamiento y sus efectos depende de los agentes (el agente
transportador, los esfuerzos tectónicos causados por movimientos de placas y
sismos o explosivos, el peso de los materiales que forman el talud, y el agua) y
de los eventos o procesos que dichos agentes ejecuten sobre el material
produciendo efectos físicos y efectos sobre las condiciones de equilibrio.
Popescu, en lugar de plantear causas de deslizamientos prefiere utilizar
factores causales que los divide en dos grupos: los factores causales
preparatorios que hacen a la pendiente susceptible al movimiento sin iniciarlo
realmente y tendiendo así a situar la pendiente en un estado “marginal” en el
que puede fallar en algún momento en respuesta a las fuerzas
desestabilizadoras dependiendo del nivel de actividad y los factores causales
desencadenantes que inician el movimiento y pasan del estado “marginal” al
estado inestable. Los factores causales están divididos de acuerdo con su efecto
(preparatorios o desencadenantes) y su origen (condiciones del suelo y
geomorfológicas, físicas o procesos realizados por el hombre). Terzaghi,
Cornforth, Duncan, Wright, & Brandon, Radbruch-Hall & Varnes coinciden en
muchos de los detonantes y procesos que producen deslizamientos y todos

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concuerdan en los diferentes efectos que pueden causarse de acuerdo con el
tipo de material y las condiciones que se encuentren los detonantes.

Bibliografía
 Cruden, D. M. (1991). A simple definition of a landslide. Bulletin of
Engineering Geology and the Environment, 43(1), 27-29.
 Cornforth, D. (2005). Landslides in practice: investigation, analysis, and
remedial/preventative options in soils. Wiley.
 Duncan, J. M., Wright, S. G., & Brandon, T. L. (2005). Soil strength and
slope stability. John Wiley & Sons.
 Popescu, M. E. (2002). Landslide causal factors and landslide remediatial
options. In 3rd International Conference on Landslides, Slope Stability
and Safety of Infra-Structures.
 Fell, R., Ho, K. K., Lacasse, S., & Leroi, E. (2005). A framework for
landslide risk assessment and management. Landslide risk management,
3-25.
 Morton, D. M., & Streitz, R. (1967). Landslides. California Div. of Mines
and Geology, Mineral Info. Service, 20, 123-129.
 Radbruch-Hall, D. H., & Varnes, D. J. (1976). Landslides—cause and
effect. Bulletin of the International Association of Engineering Geology-
Bulletin de l'Association Internationale de Géologie de l'Ingénieur, 13(1),
205-216.
 Terzaghi, K. (1950). Mechanism of landslides (p. 83-122). Harvard
University, Department of Engineering.

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