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ALUMNO:
Carlos Fernando Orellana Aquino
Registro Académico:
201841043
CUI:
3399322362101
La Hipótesis más aceptada sobre el origen del universo se trata sobre la teoría del
Big–Bang, esta explica que el universo se creó espontáneamente en una
explosión hace unos 15 mil millones de años. Eta afirma que el universo estaba
en un estado de muy alta densidad y luego se expandió.
Los hechos anteriores generaron una tremenda polémica entre los círculos debido
a la cierta carencia de fósiles antiguos del hombre primitivo sugeridos por el
propio Darwin.
Pero con el avance del tiempo y los nuevos descubrimientos en fósiles, de seres
anteriores a nosotros se a demostrado casi de manera totalmente innegable que
los seres humanos provienen de una línea sucesiva de cambios biológicos
atreves del tiempo. Pero habiendo todavía un largo camino por recorrer para
desvelar por completo la línea evolutiva del ser humano y de las especies que
surgieron en el planeta tierra.
Los seres humanos son una especie desde el punto de vista naturalista
compartimos las mismas similitudes biológicas con el resto de la especies
animales como por ejemplo los mismos tipos de células, semejantes modos de
producción y miles de genes con formas idénticas.
Si hablamos de las semejanzas entre los seres humanos y los mamíferos las
similitudes aumenta aun mas como la reproducción, la incapacidad de respirar
bajo el agua, y la dependencia a la figura de las madre los primeros años de vida.
Y si citamos los parentescos con los primates de las aptitudes sociales que toma
cada especie, un grado alto de inteligencia, y la morfología, hace aun más
evidente, la relación y origen del hombre en la naturaleza.
Pero la mayor diferencia entre los humanos y cualquier otra especie, es la gran
capacidad intelectual y su consecuente sentido de la realidad, la conciencia del yo,
la voluntad, las metas, los valores morales y éticos del hombre. Y la interminable
capacidad del ser humano para el progreso tanto individual y social; ese
interminable deseo de descubrir y crear.