Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Introducción.
Por otra parte existe un gran consenso de que una de las fundamentales ventajas
competitivas que deben desarrollar los países menos desarrollados es el
conocimiento, la formación y preparación de su capital humano.
Las condiciones del mundo actual y el nuevo valor del conocimiento le confieren hoy a
la Educación Superior una significativa importancia como generadora y difusora del
mismo. De este modo se estrecha aún más el vínculo entre educación, conocimiento,
progreso científico-tecnológico y desarrollo social.
Todo ello hace que, entre otras circunstancias, la educación en general y la educación
superior en particular, se encuentren sometidas a inusitadas tensiones que la
compulsa a avanzar hacia nuevos paradigmas y metas que involucran el afán de
alcanzar niveles cada vez más altos y pertinentes, que se encuentran convocado a
partir de la búsqueda de la excelencia educativa.
Una premisa imprescindible para lograr este fin, lo es sin lugar a dudas, el contar
con profesionales capacitados. De aquí el hecho de que resulte factible afirmar que
la valoración de la pertinencia de la educación superior en la época actual tiene
como condición esencial el aporte de la misma al desarrollo económico-social,
determinado esto por la vinculación de las instituciones docentes a la práctica
social, a través de nuevas y diversas formas de vínculo con empresas y entidades 1.
Para ello resulta imprescindible examinar, aunque sea en una aproximación inicial, el
desarrollo histórico y actual de los principales cambios en el contexto socioeconómico
de la Universidad, que constituyen una importante premisa de este análisis.
Utilizamos este concepto, preconizado por la OIT y diversos autores, por el carácter
abarcador que propone al considerar los diferentes elementos tecnológicos, técnicos,
económicos, organizacionales y humanos que constituyen los reales procesos de
trabajo; en oposición al tradicional concepto de mercado de trabajo, que aunque es
utilizado, posee un importante sesgo economicista.
1
Martín, E. y Henríquez, R. D. (1996): “La Formación del profesional y las exigencias sociales” en Mar del Norte,
Año 11 No 3, Diciembre, Chimbote-Perú.
2
Evolución de las exigencias externas al proceso de formación de profesionales.
Utilizamos este término en su sentido más al uso en nuestro medio, como graduados
universitarios de pregrado.
3
Por primera vez la universidad comienza a tener conexiones más definidas e
inmediatas a través de su participación en el desarrollo socioeconómico, que se
consolida también con el desarrollo científico- tecnológico de la sociedad
contemporánea.2
La nueva situación mundial a partir de los años 30 del presente siglo XX avizora una
efectividad positiva de la universidad con relación a la sociedad a partir de fórmulas de
influencia en el desarrollo económico, apreciándose un incremento del Producto
Interno Bruto (PIB) y una influencia de forma mistificante en la socialización del
capitalismo, resaltando que cada individuo posee parte del capital a través de los
conocimientos que "vende" al capitalista, lo que sirve de argumento ideológico a los
defensores de estas teorías. 3
Todo ello sirve de base al desarrollo de la teoría del Capital Humano que describe al
hombre con un determinado grado de conocimientos y habilidades, de competencias,
en oposición a otras que enfatizan en la utilización de recursos financieros e
inversiones sólo en medios de producción y tecnológicos, abogando en este caso por
la necesidad de invertir en el desarrollo del hombre.
2
Yñigo, E; Lazo, J. (2003) "Algunos problemas de la adaptación de los graduados de nivel superior al
desarrollo de su actividad laboral" en Problemas de la economía de la Educación Superior No. 19. CEPES-UH,
La Habana.
3
Drucker, P. (1993): La sociedad postcapitalista. Ediciones Sudamericana, Buenos Aires.
4
Es en los años 50 y 60 donde se destaca, y se pone de manifiesto para muchos, que el
contenido de la educación no sólo es económico sino social, por lo que a la Educación
Superior se le agregan funciones de desarrollo social. Esto implica que la formación no
se ve como un perfil técnico solamente sino también como un perfil social de desarrollo
individual.
En la década de los años 60 se genera una crisis en el desarrollo de los valores en los
principales países capitalistas como Francia, Estados Unidos (Guerra de Viet Nam)
etc., que comienza a influir de alguna manera en los procesos educativos de muchos
países del mundo. Paralelo al auge de este período, el Capitalismo Monopolista de
Estado comienza a cambiar, la sociedad cambia, se acentúa la crisis económica y
moral; ante este peligro inminente aparecen los esbozos del neoliberalismo y sus
influencias negativas.
Hasta entrada la década de los años 70 la Educación Superior toma auge en América
Latina destacándose en particular la formación de pregrado y su relevancia, conferida
a raíz de la visión de que la educación era el motor principal de la movilidad social
ascendente de la población y del crecimiento económico del país, sin embargo, la
palpable realidad coadyuvó a abandonar los criterios optimistas sobre la educación. 4
En el caso de América Latina, al agravarse la situación económica, deja como
consecuencia un creciente desempleo y una Educación Superior con exceso de
graduados sin puestos de trabajo.
En la década de los años 80, a partir de los procesos de globalización neoliberal que
conllevó en la Universidad el auge de la privatización, los cambios en las concepciones
tradicionales de financiamiento, etc.; varios sistemas universitarios occidentales
estrenaron nuevos marcos jurídicos, caracterizados, entre otras notas, por la
autonomía de la universidad, siendo este un argumento fundamental para el logro de
los objetivos de progreso de la Educación Superior en dichos países, derivándose la
diversificación, flexibilización y la competencia que promocionarían niveles más altos
de calidad y excelencia.
4
Filmus, D. (1992): Demandas populares por educación. AIQUE, Buenos Aires.
5
Por otro lado, los gobiernos cambian sus estrategias a favor de exigir una rendición de
cuentas (Accountability) a fin de demostrar que las decisiones tomadas y las acciones
ejecutadas están dirigidas a la mejora de la calidad de la institución. A juicio de los
expertos el inequívoco interés de los gobiernos en la exigencia de un sistema de
evaluación institucional es una clara expresión de la creciente atención a la dimensión
extrínseca de la calidad y a la vez presupone un claro síntoma de que la sociedad
parece no estar dispuesta a seguir aceptando que las universidades sólo saben
autojustificarse y desea conocer las actividades que desarrollan. 5
Existen otros factores que justifican el desarrollo del proceso de evaluación: la propia
globalización y sus intrínsecos y vertiginosos procesos de regionalización e
internacionalización, la expansión de los Sistemas de Enseñanza Superior pone de
manifiesto las significativas debilidades de los mismos, las restricciones económicas
fuerzan a una mayor eficiencia, eficacia y efectividad, la aparición de diversas
instituciones que empiezan a asumir funciones que antes se consideraban exclusivas
de la Universidad; por todo ello la sociedad exige un mayor aporte al desarrollo
nacional, así como evidencias de la calidad de la acción y gestión de la universidad.
Varias investigaciones dieron cuenta de la crisis del modelo del estigmatizado, por
Brunner, como “Estado Benefactor” y el desfase existente entre la demanda de la
5
Estaba Briceño, E. 2003. La experiencia de Venezuela en el ámbito de la evaluación de sistema educativo.
(Documento fotocopiado).
6
sociedad y lo que efectivamente brinda el sistema educativo, caracterizándose, entre
otros aspectos, por la desvinculación de la escuela del mundo del trabajo. 6
Actualmente la valoración que se hace del conocimiento como fuente de poder por su
capacidad como generador de alto valor agregado, la correspondencia con los cambios
políticos, económicos, sociales y ambientales, ocurridos en el mundo ha cobrado una
importancia creciente.
6
Filmus, D. (1992): Demandas populares por educación. AIQUE, Buenos Aires.
7
desarrollo a favor del conocimiento. En consecuencia el mundo de hoy se va dictando
por las transformaciones tecnológicas que son las que modifican las demandas de la
transformación del sistema educativo.[ 7]
7
Yñigo, E. Lazo, J. (2003) "Algunos problemas de la adaptación de los graduados de nivel superior al
desarrollo de su actividad laboral" en Problemas de la economía de la Educación Superior No 19. CEPES-UH,
La Habana.
8
Filmus, D. (1992): Demandas populares por educación. AIQUE, Buenos Aires.
Márquez Tavera Silverio. Artículo: La gestión del cambio en la Universidad Autónoma “Gabriel René Moreno”
(Documento fotocopiado).
9
Filmus,D (1993): "El papel de la educación frente a los desafíos de las transformaciones científico-
tecnológicas". AIQUE, Buenos Aires.
8
competitividad, el crecimiento de la capacitación del sistema empresarial, el máximo
aprovechamiento de tecnologías, las nuevas profesiones que surgen a ritmo acelerado
y desaparición de otras y el amplio mundo laboral que las predetermina.
Para acercarnos más al fenómeno universidad- impacto social debemos señalar que
una formación esencialmente academicista y desvinculada del mundo del trabajo
tiende a caer en el mecanicismo y el adiestramiento instrumentalista. Por esto la
universidad debe acercarse al conocimiento de la realidad, utilizando de forma más
intensiva el mundo del trabajo como recurso pedagógico y además, articulando
acciones conjuntas con empresas, sindicatos, y la s restantes instituciones del entorno
universitario.
Este germen de cambio nos indica que el nivel de las ocupaciones, los factores
educación, grado de escolaridad, ciertas competencias y un conjunto de conocimientos
y valores, relacionados con las nuevas áreas de la ciencia y la tecnología serán cada
vez más importantes para alcanzar un empleo y una permanencia, y pueda implicar
mejoría económica y participación en los niveles de bienestar social.
La reorganización del mundo laboral hace referencia a una verdadera revolución de las
competencias requeridas para los futuros niveles y tipos de empleo y trabajo . Las I.E.S
deben comprender que la formación de sus educandos no debe ser más pensada en
los términos en los que se encuentran hoy laborando los profesionales que hizo
egresar hace diez años. Lo que se debe pensar y planificar es el tipo de ciudadano y
trabajador que operará dentro de los próximos cinco, diez y quince años, al menos.
Como tendencia existe una fuerte reconstitución de los mercados laborales en donde la
demanda por tareas de baja competencia laboral tiende a disminuir, mientras que hay
9
un incremento en la necesidad de la sociedad por mayores niveles de competencias de
la fuerza de trabajo; los movimientos laborales y del mundo del trabajo tienden al
crecimiento del sector de servicios y a la reducción de las horas de trabajo. Asimismo
hay un significativo incremento de los teletrabajo, formados por equipos muy
competentes, incluso fuera de fronteras.
Esto implica que las I.E.S deben relacionar sus misiones, visiones y funciones
directamente con la sociedad civil, sus actores y sectores de vanguardia y con el
sistema empresarial, sobre todo de carácter social. 11
La reorganización del ámbito laboral impone a las I.E.S requerimientos que hacen
variar la concepción de los antiguos modelos educativos. Se exige una educación
flexible, elevar sus requisitos de calidad social y de pertinencia para formar
profesionales que dominen como lenguaje común la modelación de los procesos, como
el más elevado requerimiento de la polivalencia en el mundo laboral y del trabajo en
equipo, de pleno desarrollo de una formación tendiente a la unidad dialéctica de la
10
Didriksson, A. (1996). Una agenda del presente para la construcción del futuro de la Educación Superior de
América Latina y el Caribe. En: A. Didriksson (Ed), La UNESCO frente al cambio de la Educación Superior en
América Latina y el Caribe. CRESALC/UNESCO, Caracas.
11
UNESCO (1995): Documento de Política para el Cambio y el Desarrollo en la Educación Superior.
UNESCO-París.
10
creación-innovación-producción, de modo que puedan innovar en el mundo del trabajo
hacia una sociedad sostenible.
Los esfuerzos que se encaminan en este sentido, deben, tanto en los cambios de los
sistemas nacionales como de su proyección regional e internacional, formar
ciudadanos del mundo plenamente capacitados para interactuar en sociedades cada
vez más interdependientes y correlacionadas, sobre la base de la globalización de las
economías y las tecnologías. 12
12
Lazo Machado, J. Iñigo Bajos, E. (2003). La calidad de la Educación Superior Cubana. Revista Cubana de
Educación Superior. Vol. XVII. No3. P. 30- 64. CEPES, Cuba.
13
Macedo, B. (1996). La UNESCO y la Educación Superior. En: L. Caló (Ed). Los nuevos escenarios
universitarios ante el fin de siglo. CRESALC/ UNESCO, Caracas.
11
tecnología demandados por el estado, las empresas y otros sectores institucionales y
sociales.
Pero también es preciso que las universidades se aboquen al estudio de los grandes
problemas que afectan a la sociedad con el objetivo de caracterizar e identificar la
naturaleza de los mismos y las propuestas de acciones necesarias para mejorar la
calidad de vida de la población.14
Eso significa que el proceso de trabajo no debe funcionar como barrera al pleno
desenvolvimiento de las capacidades y potencialidades del trabajador no como forma
de mutilación de sus facultades individuales y colectivas sino como catalizador de su
desarrollo. 16
12
actitud positiva hacia el aprendizaje, y el autoaprendizaje e innovación continua, así
como la disposición permanente para adaptarse a los cambios, y contribuir de forma
novedosa a la transformación de los objetos estudiados.
Son diversos los atributos que pueden considerarse recursos. En general, son todos
aquellos activos, capacidades, competencias, procesos, información, conocimientos.
controlados por la organización y que le permiten concebir e implementar estrategias
para elevar su eficiencia, eficacia, efectividad e impacto.
Estos recursos pueden dividirse en cuatro categorías: capital financiero, capital físico,
capital humano y capital organizacional.
Lo común de las reglas de captación del capital financiero, constituido por todas las
fuentes monetarias que la organización puede emplear para concebir e implementar
sus estrategias; y de la adquisición del capital físico, compuesto por la tecnología física
13
empleada, es decir, planta y equipos, hace que, poseerlos, sea un camino abierto, lo
cual no significa que sea fácil de transitar, pero si es imitable, repetible.
Hablamos por tanto del saber hacer humano, “del saber cómo se sabe”, de procesos y
conocimientos generados por individuos y; a un nivel superior, grupos de individuos,
que difícilmente pueden ser apropiados o copiados, como sucede con las tecnologías
y los métodos de obtención de recursos monetarios. Ello es así porque sólo se dan en
las acción de esos individuos o equipos de trabajo.
Las fortalezas de una organización, las que permiten aprovechar plenamente las
oportunidades del entorno y combatir las amenazas, se concentran cada vez más en
combinaciones adecuadas de recursos que sólo los capitales humano y organizacional
pueden generar y que son la fuente válida de creación de ventajas competitivas
sostenibles.
Por otra parte, la orientación del flujo de capitales y tecnologías entre países
desarrollados y de éstos hacia los países subdesarrollados va modificando su cauce a
favor de la búsqueda de una fuerza laboral de cualidades superiores.
14
Siendo así, en el mundo de hoy, donde el intercambio desigual se profundiza y las
ventajas competitivas se concentran por lo general en unos pocos países altamente
desarrollados, formar profesionales de nivel superior en nuestras universidades,
dotados de aptitudes y habilidades que los capaciten para generar individual y
colectivamente un quehacer profesional no sólo de alta competencia, sino además
distintivo, basado en una cultura nacional propia, abre, sin lugar a dudas, nuevas y
sólidas posibilidades al desarrollo de nuestras economías.
• Validez social.
• Correspondencia con el contexto de un país, sistema político, cultura, economía,
comunidades y sociedades concretas.
• Considerar las tendencias internacionales de la globalización de las economías y
las tecnologías, como un elemento significativo que contribuye al desarrollo de
prácticas y lenguaje común entre profesionales de los diferentes países, de
modo que sirvan para paragonarse entre ellos y países.
15
nacimiento de nuevos paradigmas que refuerzan la necesidad de un nuevo tipo de aprendizaje
que incluye la formación de competencias y que sirven en diversos ordenes de la vida, además
se ha establecido la importancia de dichas competencias.
Sin embargo es preciso analizar qué demandas se exigen actualmente a las lES y qué tipo de
competencias se precisa para dar respuesta a las mismas, al respecto, al referirnos a la
relación educación-mundo del trabajo, sostenemos que las transformaciones mundiales
colocan al conocimiento como el factor principal de la competitividad de las naciones, y que
esta situación de centralidad del conocimiento hace necesario definir que tipo de educación es
la que se necesita y a que exigencias se da respuesta.
Por otra parte el capital y la tecnología tienden a instalarse en naciones que maximicen
sus beneficios en cuanto a la nueva tecnología, se plantea que su localización
dependerá principalmente de la calidad del capital humano existente donde ella se
asiente. Los recursos naturales, el capital y la nueva tecnología, se desplazarán
rápidamente alrededor del mundo y los productos y tecnologías ya no podrán
considerarse nacionales.
También se significa, que no es sólo al desarrollo científico -tecnológico al que debe dar
respuesta el sistema educativo, así se habla de la conformación de una nueva
ciudadanía en la que hay que dar respuestas a lo social, o sea, a aspectos como la
oportunidad laboral, el ascenso social, la formación de la personalidad individual y
requerimientos supranacionales.
Son cuatro ejes a los que las IES deben apuntar y dar direccionalidad para la
conformación de esta nueva ciudadanía y que al mismo tiempo den respuesta a la
situación de anomia:
16
a) La integración nacional, b) el fortalecimiento del sistema democrático, c) mayores
niveles de justicia social y e) parámetros más altos de productividad y competitividad
internacional.
Esta problemática se ha convertido en uno de los puntos centrales del debate educativo
en el ámbito mundial y con referencia podemos citar el caso de los Estados Unidos,
donde a partir de la constatación de que "más del 50% de los jóvenes abandonan los
estudios sin los conocimientos o preparación básica que necesitan para obtener y
conservar un buen empleo'', la Secretaría del Trabajo de los EEUU convocó a
representantes de escuelas, empresas y sindicatos del gobierno a discutir la temática.
17
-Comprensión global del proceso tecnológico fortalecido por una sólida
formación lógico- matemática, estadística e informática.
•Las nuevas formas de organización del trabajo avanzan hacia una mayor
versatilidad de las tareas específicas, hacia la desaparición de los puestos de
trabajo fijos, se abre la rotación y un amplio espectro de tareas en conexión con
contenidos heterogéneos en un solo empleado, es por ello que una de las
características básicas del nuevo tipo de formación debe ser la polivalencia,
polifuncionalidad y flexibilidad.
De esta forma se rompería el histórico divorcio entre la cultura escolar y laboral. Pero al
mismo tiempo la escuela debe educar en valores y principios éticos tales como la
integración social, la igualdad, la solidaridad, la honestidad, que no sólo permiten
desenvolverse en la vida familiar, cultural, comunitaria y política, sino también darle un
sentido más profundo, más crítico y colaborativo a su actividad laboral, y a los fines con
que son utilizados los avances científico-tecnológicos.
Las nuevas relaciones entre educación, trabajo y empleo en los últimos años propone
también nuevos retos del mundo del trabajo a los sistemas de educación y, por ello,
podemos resumir las principales enseñanzas extraídas de las experiencias de países
que han logrado en los últimos años combinar con éxito innovaciones en sus sistemas
de educación y prosperidad económica, acompañándolos de una alta tasa de empleo.
20
Si bien dichas innovaciones se enfrentan con especiales dificultades a la hora de ser
aplicadas en los países en vías de desarrollo, los modelos en los que se basan pueden
serles igualmente útiles, así los países del “Sur" se enfrentan a gravísimos problemas
de desempleo, con un escaso margen de maniobra a causa de numerosas
circunstancias: deuda externa, limitado poder de negociación de sus exportaciones,
reducción de las inversiones públicas y privadas, precariedad de los sistemas de
formación, elevado crecimiento de la población activa, reducción del crecimiento de los
puestos de trabajo, privatización de las economías, que en este último caso trae
consecuencias en el empleo, en la estabilidad de los contratos, en la movilidad
profesional y en las exigencias de cualificación.
Así los últimos años se ha caracterizado por lo que ha dado en llamarse el paro o
desempleo estructural sin fronteras, que es por lo general un desempleo de larga
duración y que afecta a un gran número de personas "inadaptadas al empleo'', a causa
principalmente de una formación insuficiente para adaptarse a la evolución de la
economía, y por lo tanto la capacidad de adaptación, basada en una formación flexible,
se convierte en el principal seguro contra el paro para la mayoría de las personas, pues
como indican la mayoría de los análisis contemporáneos un dictamen del Comité
Consultor para la Investigación y el Desarrollo Industrial perteneciente a la Comunidad
Europea, en los próximas años va a ser necesaria una reducción sumamente
importante de los trabajadores no calificados y una mano de obra mucho más
calificada, período en la que el factor humano ha pasado a ocupar el primer plano entre
todos los medios de producción.
Sería un grave error, además de una injusticia, limitar el acceso a estas tecnologías por
considerarlas sofisticadas o caras, puesto que hoy ya forman parte del paisaje de la
vida cotidiana, que ha modificado el modo de actuar de la sociedad, es cada vez más,
el puente digitalizado entre el hogar, el trabajo y la sociedad. Las TICs pertenecen, de
hecho, a lo que llamamos cultura general, que es objeto de la enseñanza inicial básica.
La educación terciaria de primer ciclo debe volver a dar una educación sólida, y no
necesariamente a preparar para una profesión concreta. Educación generalista y
esencial, de perfil amplio. El objetivo de una educación generalista es ofrecer una
cultura amplia, multicultural, que ayude a aprender a cómo se sabe, de forma crítica e
independiente. La ciencia y la tecnología que se trasmite en alianza con el entorno
22
empresarial, excluye el dogmatismo, la intolerancia, y sobre todo la superstición y
autoridad de la tradición. Lo importante no es ya explicar a los estudiantes lo que tienen
que pensar, sino cómo pensar. Se trata de saber, de saber cómo se sabe, de aprender
a aprender; y sobre todo de motivar el aprendizaje a lo largo de la vida (L.L.L, lifelong
learning).
23
En Canadá, aunque no generalizado, existen los “cooperative program” donde los
estudiantes combinan desde primer año y de manera creciente períodos de trabajo con
actividades docentes bajo la dirección de la universidad en coordinación con las
industrias y sectores de los servicios.
En universidades españolas existe un Consejo Social que los vincula con la sociedad y
tiene la función de ejercer la supervisión de las actividades económicas y del
rendimiento de sus servicios.
Tenemos aquí un punto de partida para que la universidad estudie los problemas
sociales que colinden con sus aulas y utilice la retroalimentación en la búsqueda de
soluciones que potencien su pertinencia social y su prestigio logrando un marcado
protagonismo en la vida del país, no solo brindando sino recibiendo influencias y
demandas de las comunidades como elemento de reflexión para el trazado de políticas
y elaboración de concepciones de desarrollo en aras de la excelencia. 17
17
Vega, J. F. (2001) Tesis de Maestrías en Ciencias de la Educación Superior. CEPES- U.H. Cuba.
25
En Cuba el desarrollo de la Universidad Cubana ha estado fuertemente relacionado a
la evolución histórico social de la nación y con las tendencias más reconocidas
internacionalmente. Desde la fundación de la Universidad de la Habana en 1728,
transitando por las reformas de Enrique José Varona en 1900, las reformas
universitarias en revolución en 1962, la reestructuración universitaria en 1976, el
período de madurez universitaria a partir de 1989 a raíz de la rectificación de errores y
tendencias negativas y hasta nuestros días, siempre han estado a través de los años,
las nociones de dirección.
26
diversas y crecientes demandas de la dinámica del mundo del trabajo y el avance de la
sociedad.
27
docentes, por ejemplo, hospitales, fábricas, granjas agrícolas, institutos de
investigación, etc), donde se interrelacionan la labor de profesores y estudiantes
universitarios con profesionales y especialistas del sector correspondiente,
produciendo una relación bidireccional que garantiza la actividad de los que se
forman, es decir, los estudiantes se forman en el mundo real donde se desarrolla el
proceso productivo o asistencial vinculándolo a la vida y creando condiciones
favorables para la inserción profesional de los futuros graduados. Se produce
fundamentalmente retroalimentación sistemática desde los centros productivos y de
servicios sobre las nuevas tecnologías, softwares profesionales y metodologías que se
introducen, contribuyendo a la actualización y enriquecimiento de la formación
profesional. 19
Este profesional al que aspira la educación superior debe, además de ser de perfil
amplio, ser portador de elevadas convicciones ideológicas, con plena conciencia sobre
sus deberes y responsabilidades ciudadanas, con conocimientos, hábitos, habilidades
y aptitudes que le permitan la suficiente creatividad, innovación e independencia desde
el mismo inicio de su inserción en la vida profesional. 20
28
socioeducativos de los sistemas educativos que deben asumir retos en la formación de
los trabajadores y profesionales que participarán activamente en los nuevos sistemas
productivos y de servicios.
Este aprendizaje reafirma los enfoques pedagógicos que sustentan una actividad social
de reproducción y producción de conocimiento mediante la cual se asimilan los modos
sociales de actividad y de interacción de los conocimientos científico-tecnológicos bajo
condiciones de orientación e interacción social.
29