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PERSPECTIVAS PROGRESISTAS

E l pensamiento progresista ha inspirado diversos liderazgos que


han impulsado la transformación democrática de la sociedad.
El cumplimiento de los derechos humanos, la democratización
del Estado y los medios de comunicación, la igualdad de género,
la ampliación de acceso al espacio público, construyen referentes
para lograr nuevas formas de hacer política, donde la diferencia de
identidades, estilos de vida y derechos de ciudadanía encuentren
canales para la realización de sus reivindicaciones sociopolíticas.

Con el nacimiento de Perspectivas Progresistas, publicación de la


Fundación Friedrich Ebert en México, pretendemos animar el de-
bate público para pensar México desde miradas progresistas, abrir
camino a la sociedad y sus actores para emprender acciones colec-
tivas.

En nuestros días, pensar un país significa:

• Instalar y abrir un debate permanente sobre la construcción social de su iden-


tidad

• Poner a discusión y examen crítico las políticas públicas en diversas áreas con
el objeto de cuestionarlas y reelaborarlas

• Asumir la relevancia de la política y la riqueza del conflicto para la libertad


pública de la ciudadanía y la democratización de las relaciones entre el Estado
y la sociedad

• Elaborar políticas progresistas orientadas a reformar y democratizar la economía


y el Estado con el objeto de garantizar los derechos sociales, profundizar la ig-
ualdad y la justicia distributiva, la libertad individual y la libertad política

• Dialogar en la diferencia para construir proyecto de futuro

Las opiniones vertidas en los documentos que se presentan, las cuales no han sido sometidas a revisión editorial, así como
los análisis y las interpretaciones que en ellos se contienen, son de la exclusiva responsabilidad de sus autores y pueden no
coincidir con las opiniones y puntos de vista de la Fundación Friedrich Ebert. Se permite la reproducción parcial o total de
este documento a condición de que sea mencionada la fuente y se haga llegar una copia al editor. Impreso por Gráficos eFe,
Urólogos 55, Col. El Triunfo, México, D.F., efe5203@gmail.com.

II
Narco-Negocio y seguridad en México:
Conceptos, efectos y posibilidades
de cooperación con los
Estados Unidos

1
2
Introducción

E l tema de la seguridad es uno multidimensional y de relevancia


absoluta para las agendas internacionales, regionales y domés-
ticas. Por ello, la Fundación Friedrich Ebert (FES) en México tiene
el interés de publicar este texto de Philipp Krakau, quien aborda el
tema de los negocios insertos en el mercado de drogas y narcóticos.
Este texto ofrece un análisis sobre los distintos conceptos utilizados
en el tema, así como los efectos y las posibilidades de cooperación
entre México y los Estados Unidos en la materia.
Con el objetivo de fortalecer el debate en torno a la seguridad, es
necesario recordar la transversalidad del tema y sus implicaciones
en las débiles estructuras democráticas de los países de América La-
tina y en particular de México. Hay que tomar en cuenta que des-
pués de los cuestionables resultados del Plan Colombia, las líneas
de tráfico han migrado y se han redefinido, posicionando a México
en un lugar geoestratégico. En respuesta a ello, el gobierno estado-
unidense y mexicano proponen la Iniciativa Mérida que entra ya en
acción y pretende replicar esfuerzos colombianos.
En esta línea, es imprescindible acotar que los retos de la agenda
de seguridad trascienden el problema del narcotráfico o la violencia.
Muchas comunidades a lo largo y ancho de la región se han entre-
tejido con la presencia del mercado mismo. Ello implica un mayor
espectro de infracciones sociales, corrupción, burocracia asociada e
incluso una captura del Estado por la clandestinidad. Así, si bien la
tendencia en las respuestas apunta a la militarización de los terri-
torios para la imposición de control, ello afecta necesariamente a la
población, su confianza en el Estado y los elementos mismos que
constituyen una democracia.
Por todo esto, es primordial señalar que la agenda de seguridad
de un país o de una región debe incluir al individuo, sus preocupa-
ciones y sus comportamientos. El papel que toma el ciudadano en
el espacio público resulta ser sin duda un indicador esencial para la

3
determinación del índice de gobernanza que tiene un determinado
territorio. Por esto, no hay que olvidar que la agenda misma de de-
sarrollo necesita de un ambiente estable y seguro. De igual forma,
no hay manera de lograr crecer la seguridad que siente un grupo de
personas sin desarrollo de por medio.
Para convertir este ciclo en uno virtuoso, es necesario cuestionar
el paradigma mismo en el cual trabaja la respuesta de los gobiernos
en cuanto a drogas y narcóticos y seguridad se refiere. Al observar las
preocupaciones de la ciudadanía y resolver sus necesidades, se pue-
de tratar el tema de forma integral. Ello hace mucho más complejo y
tardado el escenario, sin embargo, sólo dicho método es incluyente,
democrático y ofrece una verdadera perspectiva progresista.

Aram Barra

4
Narco-Negocio y seguridad en México:
Conceptos, efectos y posibilidades de
cooperación con los Estados Unidos
Philipp Krakau*

D esde que el actual presidente de Méxi-


co, Felipe Calderón, declaró la “gue-
rra” contra los cárteles del narco-negocio1
aplico al caso mexicano. En este análisis se
destaca como resultado que los efectos del
narco-negocio en México son varios, que la
en 2006, las repercusiones de las operacio- relación de esos efectos con la seguridad no
nes de dichas organizaciones han sido cada siempre es tan obvia como puede parecer, y
vez mayores. Así, estas actividades se han que es muy importante conocer con mayor
relacionado directamente con la seguridad detalle dicha relación.
nacional mexicana. Pero, ¿en qué consiste El objetivo de la segunda parte es ana-
exactamente esta relación narco-negocio y lizar cuáles son las bases teóricas de la co-
seguridad? operación entre México y los Estados Uni-
Este artículo tiene tres objetivos. En la dos contra el narco-negocio, ya que esta
primera parte pretendo evaluar la relación, cooperación constituye una herramienta
muchas veces dada por hecha, entre el nar- importante en esta lucha. Sostengo el argu-
co-negocio y la seguridad en México. Para mento de que los resultados obtenidos en
ello, propongo un marco teórico, el cual la primera parte, comparados con los de un
análisis similar para los Estados Unidos,
*   Politólogo mail@philipp-krakau.de
nos ayudan a entender por qué esta coope-

Agradezco las contribuciones para este trabajo de ración hasta ahora ha ido asumiendo una
Raúl Benítez (Universidad Nacional Autónoma de México) y forma bastante limitada.
Armando Rodríguez (Colectivo de Análisis de la Seguridad Finalmente, el tercer objetivo es expli-
con Democracia) por sus comentarios valiosos, y de Elisa Gó-
mez (Fundación Friedrich Ebert en México), quien ayudó con car cuáles son los ámbitos de cooperación
la revisión de mi español y la corrección de estilo. más importantes hasta ahora y en cuáles se
De forma habitual, en el discurso mexicano, se hace podría aportar más en el futuro a la lucha
1

referencia al fenómeno del narcotráfico. Sin embargo, Méxi-


co ya es mucho más que un país de tránsito, también es un
contra el narco-negocio, siempre y cuando
país de producción y de consumo de drogas. Por lo tanto, los obstáculos a esta cooperación sean su-
me parece más adecuado hablar del narco-negocio. perados.

5
La necesidad de la claridad conceptual te de actores políticos y/o sociales a través
del discurso que desarrollan. Los actores
En el discurso que se está dando en México normalmente quieren lograr esa inclusión
hoy en día, tanto en el político, el periodís- por razones de prioridad de sus propios
tico, pero también el académico y el social, intereses, de justificación de presupuestos
se puede observar una cantidad de actores o de maneras drásticas de actuar. Ejemplo
que hacen referencia a la seguridad. Los po- de estas últimas son las violaciones de de-
líticos, sobre todo en épocas de elecciones, rechos humanos por parte de fuerzas esta-
prometen restablecer la seguridad pública y tales en nombre de la seguridad.
también la seguridad nacional; la población En ese sentido, la seguritización de cual-
se siente cada vez más insegura, en particular quier asunto en México puede constituir un
en las regiones fronterizas de México. Pero riesgo a la población mexicana. Por lo tan-
también los Estados Unidos están preocu- to, es una aportación al bienestar del pueblo
pados por la creciente inseguridad fronteri- mexicano tratar de definir y aclarar térmi-
za. Esta lista podría continuar; parece que nos y conceptos en el ámbito de seguridad.
existe una gran confusión entre conceptos A parte de eso, definir bien los asuntos que
teóricos y sus implicaciones prácticas con impactan la seguridad del país y la mane-
respecto al tema de la seguridad. ra como la distorsionan debería aclarar el
Esta confusión implica varios riesgos, discurso, rectificar prioridades políticas y
sobre todo en materia de seguridad. Aparte definir bien los verdaderos objetivos y he-
de lo que es el concepto duro de seguridad, rramientas de la política de seguridad.
basado en la vieja doctrina realista-militar
de seguridad territorial-militar, se trata de Conceptos y agendas de seguridad
un tema emocional. Por un lado, eso se da
debido a la propia lógica del tema, cómo Para decidir si un asunto debería ser inclui-
estar inseguro o amenazado puede afectar do en la agenda de seguridad o no o definir
directamente a una persona o una entidad qué agenda le corresponde, propongo se-
territorial. Pero al mismo tiempo, esas emo- guir cuatro pasos:
ciones hacen vulnerables a las personas, I. Definir la amenaza (el sujeto).
dado que esas emociones pueden permitir
II. Definir lo amenazado (el objeto).
que cualquier asunto sea seguritizado.2 Por
seguritización se entiende la inclusión de un III. Definir la forma del impacto de la
determinado asunto político y/o social en amenaza (directa o indirecta).
la agenda de seguridad de un país por par- IV. Definir las (posibles) soluciones.

El primer paso se refiere al sujeto de la


2 
Ver por ejemplo Waever, Ole 1995: Securitization and
Desecuritization, en Lipschutz, R.D., On Security, New York:
amenaza, es decir el asunto concreto y es-
Columbia University Press, o Buzan, Barry, Ole Waever y Jaap pecífico que constituye la amenaza. Es im-
deWilde 1998: Security – A New Framework for Analysis, Boul- portante destacar que éste no se refiere al
der/London: Lynne Rienner. El término de seguritization fue
inventado en el contexto de las discusiones que se dieron a
fenómeno-causa de la amenaza, sino a la
principios de la década de los noventas con respecto al PNUD amenaza misma. En ese sentido, una gue-
y la idea de la Seguridad Humana, en la cual básicamente todos rra civil no sería una amenaza a la seguri-
los problemas económicos, medioambientales y muchos más dad, lo sería la violencia, la falta de gober-
fueron incluidos en la agenda de seguridad.

6
nabilidad y la legitimación de autoridades nazas militares y no-militares. Muchas veces
fuera del Estado, entre otros, que se deriven parece difícil distinguir entre ambas, pero
de esa guerra civil. además resulta ser de limitada utilidad ana-
Definir el objeto de la amenaza signifi- lítica hacerlo especialmente en el caso mexi-
ca destacar qué o quién(es) es o son lo(s) cano: ¿Son los cárteles de drogas y su manera
amenazado(s). De acuerdo a la tabla 13, se de actuar un fenómeno militar o no-militar?
puede distinguir entre por lo menos cuatro Entonces, una amenaza directa se refiere
niveles de objetos de la amenaza. Un fenó- a un fenómeno que pesa sobre un nivel de-
meno puede caer sobre la convivencia en terminado de objetos sin haber pasado por
la comunidad, como puede ser una banda los niveles inferiores anteriormente y que se
que se dedica al robo local. Esto, en el mejor queda en ese mismo nivel sin volverse un
de los casos, se puede resolver por medidas problema para el nivel superior. Por ejem-
no-políticas a nivel local. Si no es el caso, o plo, una invasión militar, por extraña que
si el problema es de mayor extensión geo- parezca hoy en día, normalmente impacta
gráfica o impacto cualitativo, recae en la de forma directa sobre la seguridad nacional
convivencia local/regional/nacional y se por afectar la integridad territorial, la sobe-
resuelve con medidas políticas. El tercer ranía y grandes partes de la población sin
nivel de posibles objetos de una amenaza haber pasado por los otros niveles de ame-
está en la propiedad privada, la integridad naza. Otro ejemplo es un ataque terrorista
física de las personas y el orden público. Un o una catástrofe natural que dependiendo
problema de ese tipo constituye un riesgo de su magnitud, recae directamente sobre
para la seguridad pública. un nivel determinado. En la tabla 1, esas
Por último, un asunto que pone en riesgo amenazas directas son simbolizadas por las
el territorio o la integridad territorial de un flechas horizontales.
Estado, su población en su conjunto y/o su Las flechas verticales, por su parte, re-
soberanía nacional (entendida en términos presentan las amenazas indirectas que nor-
de la capacidad de la nación de ejercer, a tra- malmente afectan un nivel determinado,
vés de los organismos del Estado, su volun- pero al no ser resueltas en éste se vuelven
tad política frente a todos los actores sociales riesgos para el nivel superior. De esa ma-
e individuales dentro y/o fuera del territo- nera, cada problema de ese tipo puede con-
rio) ya es un problema para la seguridad na- vertirse en última instancia en un problema
cional de un determinado Estado-nación. de seguridad nacional. Si ello ocurre o no de-
Como tercer paso habría que definir si pende en buena medida de las formas de
la amenaza sobre un determinado objeto es solucionar los problemas y el éxito que és-
directa o indirecta. Con esta distinción pre- tas tengan al ser aplicadas en cada nivel.
tendo sustituir a la antigua idea aplicada por Estas maneras de solucionar constituyen
Paris4, entre otros, que diferencia entre ame- el cuarto paso en el análisis de la relevancia
de seguridad de un determinado asunto.5 En
el nivel más bajo, se cuenta con maneras
3 
La diferenciación de objetos de las amenazas fue in-
fluida por lo expuesto por Salazar, Ana María 2002: Segu-
de solución no-políticas como lo es la me-
ridad Nacional hoy. El Reto de las Democracias, México D.F.:
Aguilar, pp. 57-70.
4 
Paris, Roland 2001: Human Security. Paradigm Shift 5 
Estos pasos están muy bien desarrollados por Sala-
or Hot Air, International Security 26 (2), p. 98. zar 2002, op.cit.

7
Tabla 1: Niveles de seguridad afectados, por objeto y forma del impacto de la amenaza

Sujeto: La amenaza
Directa Indirecta
Territorio, Población, Seguridad Nacional
soberanía nacional Intento de solución: priorización, medidas excepcionales,
fuerzas armadas, invasión a privasidad, expulsión de
Objeto: Lo amenazado

ciudadanos, declaración de guerra


Propiedad privada, Seguridad Pública
inseguridad física Intento de solución: Mecanismo de represión, fuerzas
personal, orden público públicas, inteligencia, pero sin alterar el Estado de derecho

Convivencia local, Convivencia local/reginal/nacional


regional y/o nacional Intento de solución: Ámbito político, gobierno, Estado de
(solución: política) derecho, mecanismos diplomáticos
Convivencia en la Convivencia local
comunidad (solución: Intento de solución: Ámbito no-político, sociedad, normas
no-política) locales, vías alternas a la intervención gubernamental, iglesia
Fuente: Elaboración propia

diación de la iglesia o los procedimientos nifica que cada vez que el Estado rebasa los
de resolución de conflictos incluidos en la derechos públicos o interviene en la vida
cultura local basados en normas locales. Si privada del ciudadano, dicha actividad
esas instituciones no alivian la situación, el tiene que ser justificada no retóricamente,
problema ya es del siguiente nivel, donde sino verdaderamente por el interés común.
el gobierno trata de solucionar el problema. Si el problema tampoco se resuelve en este
Para esto, el gobierno hace uso preponde- nivel, entonces el Estado y la sociedad ya se
rante del Estado de derecho. Si el problema encuentran frente a un problema de seguri-
en ese nivel tiene carácter nacional, el go- dad nacional.
bierno puede promover un consenso entre Como en este caso ni el Estado ni la socie-
actores involucrados, incluyendo a otros dad lograron resolver el asunto con medidas
actores mediadores como pueden ser orga- regulares, el Estado se ve ahora obligado a
nizaciones no-gubernamentales. aplicar medidas y recursos excepcionales y
Si el problema no queda resuelto en ese le otorga prioridad absoluta a ese asunto.
nivel, se puede hablar de un problema de Eso puede incluir el uso de las fuerzas ar-
seguridad pública. Ahí, el Estado trata de re- madas, declaraciones de guerra, expulsión
solverlo con medidas de represión, fuerzas de ciudadanos y muchas más medidas que
públicas y el sistema de justicia sin rebasar resultan ser sumamente costosas, ocupando
los límites del Estado de derecho. Esto sig- una cantidad de recursos que no se puede

8
gastar en otros asuntos importantes. Sin em- a lo establecido anteriormente– consisten
bargo, de no actuar así o de fracasar en la so- tanto en amenazas directas como indirec-
lución del asunto, el Estado enfrentaría con- tas. En las directas me refiero por ejemplo
secuencias graves como, en última instancia, a posibles ataques terroristas7, catástrofes
la desaparición del mismo, pero también la naturales8, epidemias9 o fuerzas militares
pérdida de control sobre partes del territorio extranjeras, aunque la relevancia de las úl-
frente a otras autoridades fuera del Estado o timas es cada vez menor. Pero, como ya se
incluso la completa falta de legitimación del destacó anteriormente, tanto en el discurso
Estado.6 político, académico, social y periodístico
Cabe destacar que, bajo ninguna cir- del país, como probablemente en términos
cunstancia y en ninguno de esos niveles, el de amenazas reales, por el momento el fe-
Estado debería violar los derechos huma- nómeno más importante para la agenda
nos de sus ciudadanos (o de otras perso- mexicana de seguridad es el crimen, tanto
nas) en nombre de la seguridad. Parecería el narco-negocio y el crimen organizado en su
obvio que la tentación del Estado de hacer- conjunto, como el crimen común.
lo es más grande cuando el asunto se trata Estos fenómenos caen en la categoría
de seguridad nacional, ya que en este caso el de amenazas indirectas. Es decir, no consti-
Estado va a aplicar todas las medidas posi- tuyen una amenaza a la seguridad nacional
bles. Sin embargo, esas acciones nunca son per se, sino que pueden volverse en riesgos
legítimas. Incluso si imagináramos un caso para ella si otros mecanismos de solución a
donde la única forma de salvar al Estado niveles inferiores no resultan ser exitosos.
fuera vía la violación de derechos humanos, Aunque probablemente los efectos del cri-
entonces el Estado ya habría perdido su ra- men común – en términos numéricos – son
zón de ser, su legitimidad, dado que ya no más problemáticos para el país que los del
puede cumplir su parte del pacto social que crimen organizado10, el primero no es un pro-
es precisamente proteger los derechos hu- blema transnacional que requiere de solu-
manos de sus ciudadanos (véase también el ciones bilaterales o multilaterales. De esa
párrafo sobre legitimidad del Estado). observación se deriva mi enfoque en el se-
Esto muestra el riesgo que la seguritiza- gundo y, especialmente, en el narco-nego-
ción de cualquier asunto político y/o social cio. Para analizar entonces el nivel de ame-
lleva consigo para México y el pueblo mexi- naza que constituyen esos fenómenos, hay
cano y, por lo tanto, la importancia que tie- que echar una mirada más cercana a ellos.
ne definir con más alta claridad todos los
conceptos, términos y metas en la agenda
de seguridad en México. Después de los ataques del 11 de septiembre de 2001,
7 

casi toda la flota marina mexicana del Pacífico fue trasladada


al Golfo para proteger las instalaciones petroleras ante un po-
Seguridad y narco-negocio en México sible ataque terrorista. Esto abrió las puertas para amenazas
indirectas, como es el narcotráfico, en la costa del Pacífico.
La seguridad y las posibles amenazas a ella 8 
El huracán Wilma del año 2005 fue el más poderoso
en el Atlántico hasta entonces, causando graves daños, so-
en México –en todas sus fases y de acuerdo bre todo en la península de Yucatán.
9 
Considere el caso de la “gripe humana”, el virus
H1N1.
6 
De forma breve, todo esto queda mostrado en la ta- 10 
Ver Benítez Manaut, Raúl 2009: La Crisis de Seguri-
bla 1. dad en México, Nueva Sociedad 220, p. 173-189, 181.

9
El crimen organizado en México se de- Este aumento se explica por varias razo-
dica a muchas actividades11, entre las que nes. Primero, con la democratización mexi-
el narco-negocio sólo es una. También están cana en el año 2000 se rompió el viejo pacto
incluidas actividades como la trata de per- que antes existía entre el PRI y los cárteles
sonas (mujeres y/o esclavos)12, delitos de de droga, y que consistía en que el gobier-
propiedad (robo de vehículos, casas etc.), no los dejaba operar tranquilamente en su
crimen violento (pandillerismo, robo, ex- territorio bien definido y que, a cambio,
torsión), crimen de cuello blanco (piratería) los cárteles se mantenían tranquilos y poco
y, por supuesto, la cada vez más creciente violentos. Segundo, en las reformas demo-
“industria” del secuestro. Pero como fue cráticas a finales de los años ochenta y prin-
explicado anteriormente, no es el crimen cipios de los noventas se olvidó también re-
organizado per se lo que puede constituir formar los sistemas de seguridad pública,
una amenaza a uno de los niveles de la se- justicia, defensa e inteligencia, lo que abrió
guridad, sino los efectos que éste tiene. Y en espacios a que la violencia se expandiera14.
términos de esos efectos, se puede constatar Tercero, el narcotráfico en México había au-
una clara diferencia entre el narco-negocio mentado de gran manera durante los años
y las otras áreas del crimen organizado. ochenta, cuando los Estados Unidos logra-
Violencia. El efecto más notable para ron cerrar la ruta de droga por el Caribe y,
la población mexicana es la violencia, y por lo tanto, México quedó incorporado en
ese fenómeno muestra de forma más clara la ruta de la cocaína colombiana.
por qué es importante diferenciar entre el En esta época, los cárteles mexicanos ya
narco-negocio y los efectos que éste tiene. existentes fueron adquiriendo poder, por
El narco-negocio no es un fenómeno nuevo los fuertes golpes que sufrieron los cárteles
en México; ha habido narcotráfico “ilegal” de Medellín y de Cali en Colombia; y tam-
desde que fue prohibido la producción y el bién, se empezaron a formar nuevos cárte-
consumo de droga en la década de 1930. Sin les en México. En los años setenta, el único
embargo, hasta los años noventa del siglo cartel importante en el narcotráfico era el
pasado, eso no traía consigo grandes nive- de Sinaloa. Luego, éste se dividió en dos:
les de violencia. Es a partir del nuevo mi- el del Chapo Guzmán y el de Alfredo Bel-
lenio que el narco-negocio se vuelve cada trán Leyva. A finales de los años ochenta y
vez más violento: Hubo 1,080 ejecuciones principios de los noventa aparecen los cár-
atribuidas a la delincuencia organizada en teles del Golfo y de Juárez. Por su parte, los
2001, 1,230 en 2002, 1,290 en 2003, 1,304 en Arellano, que antes solamente eran comer-
2004 y hasta 5,630 en 2008.13 cializadores, fueron ganando poder. Como
último cártel importante nace la Familia
Michoacana; eso se debe, en buena medi-
11 
Chabat, Jorge 2009: Narcotráfico. Empresa transna-
cional, presentación en el foro Globalización y Crimen Organi-
da, al comienzo del “nuevo narcotráfico”,
zado, Universidad Iberoamericana, México D.F., 14 de abril es decir la llegada de las drogas sintéticas,
de 2009. como las anfetaminas de Asia.
12 
Sobre el crecimiento de la trata y exploración de mu-
jeres en México y al nivel mundial, v. p.e. Meléndez, José
2009: Negocio sexual triplica ganancias, El Universal, 15 de
junio de 2009, p. A22. y la Defensa en México 2009. México D.F.: CASEDE, y El Uni-
13 
Benítez Manaut, Raúl, Abelardo Rodríguez Sumano versal, 18 de junio de 2009, p. A4.
y Armando Rodríguez Luna (eds.) 2009: Atlas de la Seguridad 14 
Ver Benítez Manaut 2009, op.cit.

10
Entonces, como cuarto factor, con la se puede estimar, de manera conservadora,
aparición de más competencia para los cár- una cifra de por lo menos 6,250 muertos.18 19
teles, y especialmente cuando se empezó a Eso significa que en los primeros dos años
lentificar el crecimiento del porcentaje de la y medio del sexenio de Calderón, estamos
cocaína consumida en los Estados Unidos viendo una cifra de 11,483 muertos por la
que era traficada por México (2008: 90%)15, narco-violencia. Los estados con mayor
lo que antes era un juego de suma positiva índice de violencia vinculada con el narco-
para los cárteles cambia hacia un juego de negocio son Chihuahua, Durango, Sinaloa,
suma cero, lo que crea aún más violencia Guerrero, Baja California y Michoacán.20
entre los cárteles. Y quinto, la militarización Esta narco-violencia muestra tendencias
de la lucha contra los cárteles a partir del alarmantes. Si se considera, por ejemplo, la
nuevo milenio, y sobre todo bajo el Presi- relación entre la narco-violencia y la tasa
dente Calderón, ha contribuido bastante al general de homicidios en México, la cual
crecimiento de la violencia en México. desde 1997 casi constantemente ha estado
Ese tipo de violencia inter-cartel sobre bajando, se puede notar que en 2005, las víc-
territorio y rutas, sobre todo entre las orga- timas de la narco-violencia constituyeron
nizaciones más grandes que son los cárteles el 6.0% de todos los homicidios, en 2006 el
de Tijuana, Sinaloa, Juárez y del Golfo, es 8.1%, en 2007 el 9.3%, y en 2008 ya el 35.9%.
el que causa el mayor número de muertos Para 2009, se puede estimar que esa cifra
en México, seguido por la violencia entre llegará al 40-45%.21 Entonces, la violencia y
fuerzas estatales y los cárteles, la violencia los abusos de derechos humanos por parte
intra-cartel (p.e. Beltrán Leyva vs. El Chapo de las fuerzas armadas involucradas en la
con sus respectivos seguidores) y, en cuarto “guerra” son una clara amenaza a la pobla-
lugar, la violencia entre los cárteles y per- ción, pero también son, junto con la corrup-
sonas privadas (porque las personas no les ción, uno de los indicadores más claros de
convienen a los cárteles, como pasa en caso la pérdida de control del Estado en algunas
de periodistas, o simplemente por balas regiones del país.
perdidas).16 El número de muertos causa-
do por estos tipos de violencia ha llegado
a niveles alarmantes, sobre todo desde que bertura en línea sobre el narco-negocio en México por el Los
el presidente Calderón declaró la “guerra” Angeles Times, disponible en http://projects.latimes.com/
contra los cárteles. mexico-drug-war/.
En 2005 murieron 1,537 personas por Cálculo del autor que se basa en asumir que el prome-
18 

dio mensual de muertos en los primeros cinco meses del año


violencia relacionada al narco, en 2006 fue- (v. El Universal del 1 de junio) se extienda por todo el año.
ron 2,221, en 2007 un total de 2,673 y en 19 
Los cálculos sobre el número de muertos para cada
2008 alcanzó 5,630 personas.17 Para 2009, año muestran una variación de aproximadamente 10%. En
este ensayo fueron utilizados los números más conserva-
dores.
15 
Hoffmann, Karl-Dieter 2009: Regierung kontra Kar- 20 
El Universal, 18 de junio de 2009, op.cit.
telle: Der Drogenkrieg in Mexiko, Internationale Politik und 21
 Cálculo del autor sobre la base de Benítez Manaut
Gesellschaft 2, 56-77. 2009, op.cit., p. 181 (para las cifras del total de homicidio),
16 
Felbab-Brown, Vanda 2009: The Violent Drug Market y las cifras de muertos por narco-violencia ya menciona-
in Mexico and Lessons from Colombia, Policy Paper No 12, das. La cifra de homicidios para 2009 fue calculada primero
Washington D.C.: Brookings Institution. asumiendo un cambio de cero por ciento a la cifra de 2008
17 
El Universal, 18 de junio de 2009, op.cit. Cifras muy ( 40%), y segundo asumiendo una caída de la cifra con res-
similares se pueden encontrar en: Mexico Under Siege, co- pecto al 2008 con la tasa promedia desde 1997 ( 45%).

11
Gobernabilidad. Los problemas de los lazos con la población en términos de
gobernabilidad fueron polemizados en el legitimidad y dependencia.
discurso en los Estados Unidos y México Legitimidad del Estado. Como conse-
cuando éste último fue caracterizado como cuencia lógica, esto le quita la legitimidad al
un “Estado fallido”. Aunque esa discusión Estado mexicano. Éste ya no está visto como
resulta exagerada y poco útil22, es obvio que el actor que es capaz – ni que está legitimado
el Estado mexicano ha perdido su capaci- – a brindar servicios públicos y protección
dad de actuación – entendida en términos efectiva.24 Las cifras de que en México el 69%
de la capacidad de imponer su monopolio de la población desconfía algo o mucho del
legítimo del uso de la fuerza, de ser provee- ejército, el 52% desconfía de la Secretaría de
dor de protección efectiva a la población, de Seguridad Pública, el 65% de la policía25, el
poder implementar una determinada polí- 68% de jueces y juzgados26 y que el 59% de
tica pública eficazmente y de ser reconoci- la población mexicana se siente insegura27,
do como actor legítimo en asuntos políticos muestran esta crisis de legitimidad.
y sociales en muchos regiones del país. La Lo interesante –pero al mismo tiempo
corrupción que ya invadió a los cuerpos alarmante– de esto es que el Estado no tie-
policíacos y militares, a las organizaciones ne por qué quejarse de esta situación, por-
de seguridad e inteligencia del Estado, a los que es él quien no está cumpliendo con sus
jueces, a la élite política, a los funcionarios obligaciones en primer lugar. Hablando en
públicos de todo tipo, a personas con lide- términos de Hobbes y su teoría de legiti-
razgo en ciertas poblaciones como pueden mación de la existencia del Estado28, éste
ser líderes religiosos, a funcionarios del último, representado por la figura del Le-
sector económico23, en fin, a todo el espacio viathan del antiguo testamento, está creado
socio-político mexicano, presenta obsoletas por los ciudadanos mediante el famoso con-
las instituciones estatales. Las estructuras trato social, en el cual los ciudadanos rinden
locales colapsan, el poder federal no tiene sus derechos de auto defensa al Estado y
la capacidad de reemplazarlas, y el vacío le prometen obediencia. A cambio, el Esta-
que queda está cubierto por seudo autorida- do les garantiza protección ante los demás
des fuera del Estado. ciudadanos y otros Estados. Este dualismo
Esas seudo autoridades entonces empie- de protección-obediencia les abre las puertas a
zan, de forma estratégica y muy exitosa,
a adoptar las funciones del Estado, brin- 24 
Parece que uno de los pocos sectores económicos for-
dando servicios “públicos” a la población, males que están creciendo, a pesar de la crisis económica, es
el de la seguridad privada.
construyendo iglesias, haciendo fiestas y, 25 
Encuesta Seguridad Nacional, SIMO-CASEDE, marzo
sobre todo, ofreciendo puestos de trabajo de 2009, http://www.seguridadcondemocracia.org/biblio-
en regiones sin valor económico nominal. teca/seguridadnacional3.pdf.
26 
Benítez Manaut, Rodríguez Sumano y Rodríguez
De esa manera, comparable a lo que hace Luna (eds.) 2009, op.cit.
la Hezbolah en el Líbano, logran fortalecer 27 
Quinta Encuesta Nacional sobre Inseguridad, ICESI,
2008, http://www.icesi.org.mx/documentos/propuestas/
cuadernos_icesi.pdf.
22 
Cuando se compara México con Estados como Zim- Hobbes, Thomas 1989 (1651): Leviathan: La Materia,
28 

babwe, para dar un ejemplo, se da cuenta de las grandes di- Forma y Poder de un Estado Eclesiástico y Civil, Madrid: Alianza.
ferencias que existen en las capacidades de actuar por parte Esas ideas de Hobbes fueron las primeras que legitimaban,
de esos dos Estados. de forma racionalista, la existencia del Estado, y han tenido
23 
Ver Salazar 2002, op.cit., p. 217 grandes implicaciones para las ciencias políticas hasta hoy.

12
los ciudadanos para salir del Estado natural, desaparecido desde el 2003; ni un caso de
donde en las palabras de Hobbes, la vida es éstos ha sido verdaderamente resuelto.30
“asquerosa, brutal, y corta”, porque los ciu- En segundo lugar, el narco-negocio, la
dadanos viven en completa inseguridad. Eso creciente violencia y el hecho de que el go-
no quiere decir que en México se vive como bierno no está logrando avances en la lucha
en el Estado natural de Hobbes (porque eso contra ellos lleva a los mexicanos a tener un
exactamente sería la situación de un Estado alto grado de desconfianza y descontento
fallido), sino que el Estado mexicano no está con su democracia; 65% de ellos desconfían
cumpliendo su parte del contrato social, que algo o mucho de los partidos políticos, y
es brindarles protección a los ciudadanos. 63% de los diputados.31 Eso constituye una
Por lo tanto, los ciudadanos tampoco tienen tendencia peligrosa, ya que hace crecer un
por qué cumplir la suya, que es obedecer al sentimiento en la población de que la de-
Estado. Visto así, el Estado, por no lograr sus mocracia no es capaz de resolver los pro-
funciones, se resta legitimidad a sí mismo. blemas más urgentes del país, y que antes
Democracia. Las actividades del narco- de la democratización se vivía mejor y con
negocio y la corrupción constituyen un gran mayor seguridad. La corrupción, la viola-
peligro para la joven democracia mexicana. ción de derechos humanos y otros asuntos
En primer lugar, una democracia requiere más fueron los que justo se habían pensa-
de un “ambiente de seguridad mínimo”29, do detener con la democratización. Ahora,
donde cada ciudadano pueda participar, no cuando esta esperanza queda frustrada, la
sólo en las elecciones sino, de forma habi- población mexicana busca maneras de ex-
tual, en los procesos políticos, sin tener que presar su insatisfacción; una de éstas se vio,
temer la muerte por expresarse libremente, por ejemplo, en la cantidad de votos nulos
asociarse con su organización civil favorita que hubo en las elecciones intermedias del
o publicar los resultados de sus investiga- 5 de julio de 2009.
ciones. Estas libertades de expresión y de Costos económicos. A parte de los efec-
prensa, dos ingredientes fundamentales tos políticos y sociales, el narco-negocio
de un sistema democrático, quedan suma- también trae consigo grandes costos para la
mente limitadas por el narco-negocio. In- economía formal. Eso incluye costos directos,
vestigadores ya no publican lo que descu- como pueden ser gastos para policía privada
bren, y la organización civil Reporteros sin y pública (3% del PIB), gastos para la recu-
Frontera sitúa a México en el lugar 140 en su peración de botines (0.1%), seguros (0.8%),
lista de 170 países, ordenados por el grado y salud (1.9%), y costos indirectos, que son
de libertad de prensa en cada país; después aún mayor que los directos e incluyen pérdi-
de México, figuran países como Zimbabwe, das en inversiones y productividad (1.8%),
Belarus, China y Cuba, que no son precisa- consumo y trabajo (5.3%), y transferencias
mente reconocidos como modelos democrá- (2.1%). Sumando estos costos directos e in-
ticos. 46 periodistas han sido asesinados en
México desde el año 2000, y ocho más han
30 
Ver la página web de Reporteros sin Fronteras: http://
www.reporter-ohne-grenzen.de/ranglisten/rangliste-2008.
html para el escalafón de libertad de prensa, y http://www.
rsf.org/en-rapport184-Mexico.html para los datos sobre
México.
Salazar 2002, op.cit., p. 58.
29  31 
Encuesta Seguridad Nacional SIMO-CASEDE, op.cit.

13
directos, se puede estimar que la economía do, antes de que un efecto llegara al nivel
mexicana pierde alrededor de 15% del PIB al donde se le ubica ahora, probablemente
año, debido al crimen y a la violencia.32 Aun- pasó por los niveles inferiores, donde las
que no todo ese costo se debe al crimen orga- medidas de solución fallaron. De todas for-
nizado, sino también al crimen común, hay mas, demostrar todo este proceso para cada
que constatar dos grandes problemas, que una de las variables es una tarea compleja y
se deriven de esos costos. Primero, el crimen queda para otra investigación.
organizado ocupa fondos que podrían ser Analizando entonces la variable de la
gastados en otros asuntos, como puede ser la violencia, resulta que el nivel de seguri-
educación, la salud, el desarrollo de tecnolo- dad afectado por el momento es el de se-
gías (petróleo), el desarrollo del turismo, etc. guridad pública. La violencia, junto con las
De esa manera, el crimen organizado frena violaciones de derechos humanos por par-
el desarrollo social y económico del país. Y te de las fuerzas militares que se pudieron
segundo, al mismo tiempo se crea una fuerte comprobar,33 claramente pone en riesgo la
dependencia de toda la sociedad mexicana propiedad privada, la integridad física de
respecto al crimen organizado. Entonces, las personas y el orden público. Este ries-
para decirlo de una forma polémica: ¿Si ya go tiene que ser diferenciado por regiones
no hay crimen organizado, de qué va a vivir del país; en algunas, sobre todo las regiones
el país? fronterizas del norte, ya no existe seguridad
pública. En otras, la seguridad está amena-
¿Seguridad nacional? zada en mayor o menor grado.
Definir el nivel de seguridad que queda
Considerando los graves efectos que tiene amenazado por los problemas de goberna-
el narco-negocio en ámbitos políticos, so- bilidad resulta más difícil. Si se aplica un
ciales y económicos en México, merece des- enfoque en los diferentes grados de gober-
tacar nuevamente la importancia que tiene nabilidad según las regiones del país, se
evaluar cada uno de esos efectos, en vez de podría hablar de un problema de seguridad
analizar el narco-negocio en su conjunto pública. Sin embargo, si se entiende al Esta-
como un fenómeno abstracto, para deter- do como una entidad inseparable, entonces
minar qué nivel de seguridad, de acuerdo se puede entender a la pérdida de la capaci-
a lo establecido en la tabla 1, está amenaza- dad de acción del Estado y las instituciones
do. Dos observaciones previas me parecen estatales obsoletas, colapsadas y reemplaza-
útiles. Primero, los efectos pueden impac- das por autoridades narcos, como amenaza
tar –y efectivamente lo hacen– en niveles a la integridad territorial y la soberanía na-
diferentes. Esto hace más difícil el análisis, cional y, por lo tanto, como un problema de
sin embargo, muestra la complejidad del seguridad nacional.
fenómeno. No es cuestión de si el crimen Sin embargo, el deterioro de la legitimi-
organizado representa una amenaza a la dad estatal, al contrario de lo establecido
seguridad nacional mexicana o no. Segun- anteriormente, no tiene límites regionales,
sino se extiende por todo el país. El Esta-
32 
Seguridad y Competitividad, IMCO-COPARMEX, oc-
tuber de 2005, www.coparmex.org.mx/contenidos/asam- 33 
Human Rights Watch 2009: Uniform Impunity. Mexi-
bleas/encuentropuebla/presentaciones/20051013%20 co’s Misuse of Military Justice to Prosecute Abuses in Countern-
1130.1%20Newell.ppt. arcotics and Public Security Operations. New York: HRW.

14
do mexicano está cumpliendo su parte del términos analíticos ni de políticas públicas,
pacto social en mayor grado en unas regio- porque carece de las especificaciones nece-
nes y menor grado en otras, pero lo que se sarias. Por el contrario, en términos de la
derive de esto – la falta de credibilidad del seguritización, esta frase corre riesgos, como
Estado y el hecho de que la población acep- ya fue explicado anteriormente.
te al Estado como actor legítimo cada vez Vemos que los factores que son resultado
menos – se puede notar en el país entero. del narco-negocio y que constituyen una
Esto pone en riesgo la soberanía nacional, amenaza para la seguridad nacional del país
lo que hace que a los problemas de legitimi- son los problemas de gobernabilidad, de le-
dad se les puede concebir como riesgo para gitimidad del Estado y los costos económi-
la seguridad nacional. cos del fenómeno. Eso no menosprecia a los
Los riesgos que el narco-negocio consti- problemas de la violencia y de la calidad de-
tuye para la joven democracia mexicana di- mocrática en México. Simplemente me pa-
fícilmente serían concebidos como relevan- rece importante destacar que éstos caen en
tes para la seguridad nacional; esto se debe otra agenda, es decir, en la de la seguridad
al simple hecho de que un sistema autorita- pública y de la convivencia regional/nacio-
rio no es per se más inseguro que un sistema nal. Tampoco eso significa que no se pue-
democrático. Se podría argumentar que, de de luchar contra esos problemas al mismo
acuerdo con la teoría de la paz democrática, tiempo. Por el contrario, es muy deseable
siendo un sistema autoritario aumentaría el que cualquier país tenga una agenda de se-
riesgo de guerra para México. Pero hablar de guridad nacional y una deseguridad pública; y
un problema de seguridad nacional con base esas agendas a veces pueden incluir los mis-
en eso me parece polémico y poco útil. Más mos elementos, como puede ser en el caso
bien, un regreso al autoritarismo probable- de la lucha contra el tráfico de armas. Sim-
mente constituiría un riesgo a la convivencia plemente, para cuestiones de dar prioridad,
local/regional/nacional, lo que se solucionaría del presupuesto, de la transparencia, y sobre
sólo mediante medidas políticas. todo de la protección de los derechos de los
Al final, el caso más claro parece ser los ciudadanos, resulta ser más importante di-
costos económicos del narco-negocio. Con ferenciar bien entre esos fenómenos, definir
ello se impide el desarrollo económico del bien a qué está dirigida una política pública,
país y la economía mexicana se vuelve más y no incluir todo en la agenda de seguridad
dependiente de esta actividad ilícita. Tam- nacional por los motivos ya expuestos.
bién se pone en riesgo la soberanía y, por lo Como última conclusión de esta prime-
tanto, la seguridad nacional. ra parte merece destacar, como ya fue ex-
La forma como los efectos del narco-ne- plicado anteriormente, que el contenido de
gocio están amenazando los diferentes ni- la tabla 2 no es fijo. Es decir, como se trata
veles de seguridad se puede esquematizar de amenazas indirectas, al no ser resueltas
de la siguiente manera: en el nivel donde caen pueden volverse, en
Lo establecido anteriormente muestra última instancia, en amenazas a la seguridad
de forma muy clara que la frase “el narco- nacional. Este peligro parece existente, so-
tráfico es una amenaza para la seguridad”, bre todo, considerando el fenómeno de la
que está usada y abusada mucho en el dis- violencia. ¿Por qué considero a la violencia
curso en México, no es de gran utilidad en como una amenaza a la seguridad pública?

15
Sobre todo por su fuerte componente regio- Efectos del narco-negocio
nal. Entonces, si, por ejemplo, la violencia se en los Estados Unidos
extendiera por todo el territorio mexicano,
causando olas de emigración mucho más Para determinar las posibilidades de una
fuertes que ahora y obligando al gobierno cooperación entre México y los Estados
a admitir que ya no puede garantizar la in- Unidos hay que evaluar, como ya fue hecho
tegridad física de la gente en ninguna parte para el caso mexicano, los efectos que tie-
del país, entonces sí se podría hablar de la ne el narco-negocio en los Estados Unidos.
violencia como una amenaza a la seguridad Esto se debe al hecho de que la cooperación
nacional mexicana. Para que no pase eso rei- con otros Estados siempre representa una
tero la importancia de que el gobierno esté limitación a la soberanía de cualquier Esta-
trabajando en las dos agendas de seguridad, do nación soberano. Por lo tanto, un Estado
la nacional y la pública, al mismo tiempo. nación solamente va a estar dispuesto a co-
operar con otro Estado, siempre y cuando
Asunto interméstico las ganancias de esa cooperación sean más
altas que las pérdidas (en términos de so-
El narco-negocio en México es uno de los beranía, pero también en términos moneta-
asuntos políticos llamados intermésticos, es rios, etc.), y siempre y cuando el asunto sólo
decir, parte de su solución cae en el ámbi- se puede solucionar a través de la coope-
to de la política nacional, y parte en el ám- ración.34 Sin embargo, en este caso se trata
bito internacional. Esto es obvio, ya que el de un asunto interméstico: La cooperación
tráfico de drogas a través de varios países, es importante, pero no es la forma única ni
por esa misma naturaleza, es un fenómeno exclusiva de luchar contra el narco-negocio.
transnacional. Al mismo tiempo, quedó cla- Eso disminuya los incentivos a cooperar en
ro en lo expuesto anteriormente, que una ambos lados de la frontera.
parte importante en la solución también es A parte de eso, el ingrediente más básico
la política nacional. de cualquier cooperación entre Estados so-
Sin embargo, la cooperación internacio- beranos es que los Estados involucrados en-
nal siempre requiere de la buena voluntad tiendan y definan de manera igual – o por lo
de todos los actores involucrados, por lo menos similar – la situación de la que se tra-
tanto, en la segunda parte del artículo pre- ta.35 Por lo tanto, me parece importante eva-
tendo evaluar los incentivos y obstáculos
para la colaboración entre México y los Es- 34 
Keohane, Robert O. 1984: After Hegemony. Coopera-
tados Unidos en la lucha contra el crimen tion and Discord in the World Political Economy. Princeton, NJ:
organizado. Cabe destacar que obviamente Princeton University Press.
hay muchos más países con los cuales una Cuando la idea de la escuela realista, que la coope-
35 

ración sólo era posible en low politics o cuando era impuesta


mejor cooperación sería deseable; entre ellos por un poder hegemónico, dejó de ser la idea mainstream,
destacan Canadá, los países centroamerica- Stephen Krasner y sus colegas empezaron con lo que des-
nos, caribeños y sudamericanos. Simple- pués se denominó la escuela del institucionalismo liberal/ de la
interdependencia con la primera publicación sobre regímenes
mente es por cuestiones de prioridad que internacionales (Krasner, Stephen [ed.] 1982/83, International
en este texto estoy evaluado el caso de la Regimes, Ithaca, NY: Cornell). En aquel tiempo, hablaron de
cooperación con el socio más importante de principios como una de las bases de un régimen, a parte de
México, que son los Estados Unidos. normas, reglas y procedimientos de toma de decisiones. Esta no-
ción de principios luego fue criticada y reemplazada – por

16
Tabla 2: Niveles de seguridad en México, afectados por los efectos del narconegocio

Sujeto: La amenaza
Seguridad Deterioro de Costos
Nacional legitimidad económicos
Probl.
Objeto: Lo amenazado

Seguridad gernabilidad
Pública Violencia

Convivencia
Calidad de
local/regional/
democracia
nacional
Convivencia
local

Fuente: Elaboración propia

luar la forma en la que el narco-negocio tiene los Estados Unidos.37 Sin embargo, esta vio-
efectos en los Estados Unidos. Este análisis lencia que se expande al territorio estadouni-
se hará de manera breve. Lo que es obvio es dense no ha llegado a las formas ni la inten-
que los efectos en los Estados Unidos son sidad que se viven en México, ni siquiera en
muy diferentes que en México. La narco- las regiones fronterizas más débiles; eso se
violencia, que es el efecto más notable a dia- debe, en buena medida, a las mejores capa-
rio en México, apenas se está empezando a cidades y la mayor efectividad del procesa-
sentir en el país vecino, sobre todo en las re- miento penal, a la mayor profesionalización
giones fronterizas. En ellas, las autoridades del sistema de la justicia penal, y a mejores
hablan de un spill-over, un efecto expansivo, estructuras de los cuerpos policiacas, mili-
de la violencia, sobre todo en el estado de tares y de instituciones de inteligencia en el
Arizona36. Éste es un resultado de la estra- país vecino.38 Junto con la violencia coexis-
tegia de los cárteles mexicanos de expandir ten otras actividades como secuestros, que
sus actividades al territorio estadounidense; se están extendiendo hacia el territorio de
esta estrategia también se puede ver por el los Estados Unidos; pero aquí también se
creciente número de jóvenes estadouniden- trata básicamente de las regiones fronterizas
ses que son reclutados por los cárteles en su y de niveles comparablemente bajos.39
lucha por territorio y rutas de transporte en
37
 New York Times, 23 de junio de 2009: Mexican Car-
tels Lure American Teens as Killers.
miembros de la creciente escuela institucionalista – por la 38 
Shirk, David A. 2009: Drug War Violence in Mexico &
idea de una definición común de la situación. the Border Region: Implications for the United States, Testimonio
36
New York Times, 24 de febrero de 2009: Wave of Drug frente al Sub-Committee on Commerce, Justice, and Science
Violence is Creeping into Arizona from Mexico, Officials say; del House of Representatives, http://appropriations.house.
también New York Times, 22 de marzo de 2009: Mexican gov/Witness_testimony/CJS/David_Shirk_03_24_09.pdf
Drug Cartel Violence Spills Over, Alarming U.S., y otros más. 39
Shirk 2009, op.cit.

17
Aparte de esto hay que considerar que el en 2005, los costos económicos sólo por el
narco-negocio en los Estados Unidos, al con- consumo de metanfetaminas llegaron a
trario de lo que sucede en México, no genera 23.4 mil millones de dólares; la mayor parte
problemas de gobernabilidad, de legitimi- de esos gastos ocurrieron en el ámbito de la
dad del Estado ni de la calidad de la demo- salud (adicciones y muerte prematura), por
cracia. Todos esos fenómenos, que son cen- el crimen y la justicia penal, por la crimi-
trales para el funcionamiento de un Estado nalidad para financiar las adicciones, por la
democrático, no resultan ser minados por el pérdida en productividad, y por la separa-
narco-negocio, ni en las regiones fronterizas, ción de niños de sus padres por el consumo
ni mucho menos en el resto del país. de los padres, entre otros factores.42
El efecto más claro del narco-negocio
para la sociedad estadounidense es el con- ¿Seguridad nacional?
sumo de las drogas provenientes de Méxi-
co. Por ejemplo, se estima que para el año Entonces, vemos claramente que el narco-
2007, un 27.5% de la población estadouni- negocio, en comparación con lo que sucede
dense entre 18 y 25 años consumieron ma- en México, no cae en una de las agendas de
rihuana; el porcentaje de este mismo sector seguridad, sea la de seguridad nacional o la
de la población que consumía cocaína es- de seguridad pública. Si hiciéramos un aná-
taba en un 6.4%, la que consumía heroína lisis, como fue hecho para el caso mexicano
en un 0.4%, y la que consumía metanfeta- en las tablas 1 ó 2, nos daríamos cuenta de
minas en un 1.2%, sólo considerando las que los objetos de la amenaza narco-negocio
drogas más importantes traficadas por/ en los Estados Unidos son niveles muy in-
producidas en México. En total, se estima feriores al nivel de la seguridad pública, y
que más de 35 millones de estadouniden- mucho más al nivel de la seguridad nacio-
ses usaron drogas ilegales en 2007.40 Una nal. Aunque todavía habría que hacer este
parte importante de ese consumo de dro- análisis de manera más detallada, está claro
gas en los Estados Unidos se da gracias a que la violencia en el lado estadounidense
la presencia de los cárteles mexicanos en de la frontera sólo se desarrolla de manera
básicamente todo el país; en abril de 2008, limitada – regionalmente y también en su
los únicos dos estados donde no se sabía forma de impacto al pueblo; no llega a tener
de redes locales –de distribución local o de grandes repercusiones a nivel nacional. De
aprovisionamiento de drogas a vendedores igual manera, los Estados Unidos no sufren
locales– eran North Dakota y Maine.41 Eso de problemas de gobernabilidad, de legiti-
nos lleva a los grandes costos económicos, midad del Estado o de la calidad de la de-
a parte de los efectos personales y sociales, mocracia como pasa en el caso mexicano. El
que sufren los Estados Unidos por este alto único factor que es notable de igual manera
nivel de consumo de drogas. Se estima que en México y en los Estados Unidos son los
grandes costos económicos que el fenóme-
40 
U.S. Department of Justice, National Drug Intelli- no trae consigo. Sin embargo, la diferencia
gence Center 2009: National Drug Threat Assessment. Johns-
town, PA: NDIC.
sigue siendo que estos efectos en los Estados
41 
New York Times, 22 de marzo de 2009:The Reach of
Mexico’s Drug Cartels. Gráfico interactivo, disponible en
http://www.nytimes.com/interactive/2009/03/22/us/ 42 
Estudio por la RAND Corporation, v. http://www.
BORDER.html. hon.ch/News/HSN/623754.html.

18
Unidos no causan una dependencia económi- ca. Esto ocasiona que la prioridad que am-
ca del narco-negocio, como está pasando en bos gobiernos le otorgan a la lucha contra
México. Por lo tanto, acabar con el narco- el narco-negocio sea distinta. Lo que está
negocio no pondría en riesgo el funciona- incluido en la agenda de seguridad de cual-
miento de la economía estadounidense ni la quier Estado nación siempre será atendido
seguridad nacional. de manera prioritaria por su gobierno, ya
Observando la política de seguridad que, al no ser así, este Estado pondría en
estadounidense diariamente, queda con- riesgo su propia existencia. Eso nos expli-
firmado este análisis. El gran reto para los ca la paradoja de que los incentivos para los
Estados Unidos en materia de seguridad, Estados Unidos de cooperar de una forma
especialmente después del 11 de septiem- más eficiente e inteligente con México en el
bre de 2001, ha sido la lucha contra el terro- área del narco-negocio son menores que en
rismo internacional y, cada vez más, contra el lado mexicano, aunque obviamente tam-
la proliferación de armas nucleares, aunque bién está dentro de los intereses estadouni-
a veces sí se incluye – de manera retórica – denses disminuir el problema.
al narco-negocio en la agenda de seguridad Por otro lado, aparte de los incentivos,
nacional estadounidense. Las invasiones de hay que considerar los costos de la coopera-
Iraq y Afganistán, los Acuerdos de Fronte- ción. Estos costos pueden ocurrir en térmi-
ra Inteligente, la creación del departamento nos monetarios, de otras obligaciones, de
para Homeland Security, pero también la cre- pérdida de soberanía y capacidad de actua-
ciente desvaluación de los derechos civiles ción del Estado, pero también en términos
y humanos en nombre de la seguridad, nos de costos políticos como puede ser una pér-
muestran que la lucha contra el narcotráfi- dida de credibilidad en la opinión pública,
co no está dentro de la agenda de seguridad etc. En los Estados Unidos, estos costos
de los Estados Unidos. básicamente ocurren en términos políticos.
Por ejemplo, una cooperación efectiva con
Bases de una cooperación México contra el narco-negocio, abordando
México – Estados Unidos el tema del tráfico de armas, siempre impli-
caría limitaciones al derecho de los estado-
Entonces, nos debemos preguntar si existen unidenses de comprar, vender y poseer ar-
las bases suficientes para una cooperación, mas, un derecho que está en la constitución
a un nivel más sofisticado, entre los Esta- bajo la segunda enmienda.
dos Unidos y México en materia del com- Asimismo, dificultar el financiamiento
bate al narco-negocio. Para que existan es- de los cárteles implicaría limitar, de alguna
tas bases, se requiere una definición común manera, el secreto bancario que se encuen-
de la situación. El análisis en este artículo tra bajo especial protección por la cuarta
reveló que el asunto del narco-negocio cae enmienda. Esto muestra los costos políticos
en agendas diferentes en los Estados Uni- excepcionalmente altos que cualquier go-
dos y en México. En México, el fenómeno bierno estadounidense, tratando de coope-
está incluido – por lo menos parcialmente rar de manera realmente efectiva con Méxi-
– en la agenda de seguridad, mientras que co, tendría que enfrentar, especialmente ha-
en los Estados Unidos básicamente se trata blando del tema de las armas, ya que desde
de un asunto económico y de salud públi- los orígenes de los Estados Unidos y como

19
expresión de la alta importancia de la liber- Fuero de ello hay que considerar obstá-
tad personal como uno de los valores prin- culos que no se puede atribuir claramente a
cipales en los que se basa el proyecto nación uno de los dos países, sino que existen entre
estadounidense, la libertad de poseer armas los dos. En esa categoría figuran la descon-
no se ha podido – ni querido – quitar. fianza mutua, la desigualdad de recursos
En el caso mexicano, la perspectiva ha- (humanos, tecnológicos, monetarios, etc.) y
cia estos costos se diferencia en función de la multitud de actores involucrados – por el
los distintos actores políticos y de la socie- federalismo en los dos países, pero también
dad mexicana. Un actor, que cada vez más por la existencia de centenares de institu-
logra tener influencia en la política mexica- ciones en los dos lados de la frontera que,
na, son los militares; su punto de vista se de alguna manera, tratan este asunto.
enfoca, sobre todo, a la pérdida de sobera- Queda claro que por parte de los incen-
nía nacional, la cual se daría con una mayor tivos necesarios para una mayor coopera-
cooperación. Aunque no está claro qué es a ción entre México y los Estados Unidos en
lo que se refieren los militares con “sobera- la lucha contra el narco-negocio, en los dos
nía”, es cierto que con cada acuerdo inter- lados sí existen incentivos, pero los efectos
nacional que un Estado firma, se obliga a del narco-negocio caen en agendas diferen-
comportarse – o no comportarse – de una tes en los dos países y, por lo tanto, no exis-
manera definida, por lo tanto, pierde algo te una definición común de la situación. Por el
de capacidad de actuación. lado de los costos, destaqué que los costos
Otro actor que muchas veces se enfoca de una mayor cooperación que son percibi-
en los costos de la cooperación es la izquier- dos en los Estados Unidos y México depen-
da política que, por viejos sentimientos an- den del actor y de la situación, pero que, so-
tiimperialistas, concibe a la cooperación bre todo en términos de política doméstica,
como una herramienta utilizada por el país son altos. Eso explica, en buena medida, el
vecino para extender su influencia en el hecho de que la política de cooperación en-
continente y en México. Finalmente, un ac- tre México y los Estados Unidos en la lucha
tor silencioso pero influyente, que percibe contra el narco-negocio se está desarrollan-
grandes costos por una mayor cooperación, do de manera bastante reservada.
son los empresarios y las empresas que ga-
nan por el narcotráfico: Se estima, por ejem- La cooperación en la realidad
plo, que una gran cantidad de las camione-
tas Hummer, vendidas en México, está usa- Sin embargo, hay que constatar que en es-
da por el narco-negocio. A parte, destaca tos momentos, la cooperación entre Estados
la debilidad de las instituciones mexicanas Unidos y México en la lucha contra el narco-
como obstáculo a la cooperación por parte negocio está más intensa que nunca. Dicho
del lado mexicano, y la falta de una estra- esto, también está claro que esto no será sufi-
tegia mexicana claramente definida. En fin, ciente como para tener un impacto notable.
se puede observar que el gobierno mexica- La cooperación que se está dando se con-
no, desde hace mucho tiempo y por razo- centra básicamente en la llamada Iniciativa
nes ideológicas y de política doméstica, se Mérida. Ésta fue acordada en el año 2007 y
ha mostrado muy reservado en la cuestión consiste en la transferencias de 1.4 mil mi-
de cooperación con otros Estados. llones de dólares en total, por un periodo

20
de tres años, de Estados Unidos a México, ponsabilidad compartida por el narco-ne-
pero también a Haití, la República Domini- gocio, sufre de varios defectos. Primero, la
cana y los países centroamericanos. cantidad de recursos con los cuales se está
La ayuda que se está otorgando dentro ayudando, en términos monetarios, parece
de ese programa se diferencia en cuatro altamente insuficiente, comparando los 1.4
grupos43. El primero pretende combatir al mil millones de dólares –durante tres años–
terrorismo y al narcotráfico y asegurar la asignados a este programa con los 18 mil
seguridad de la frontera compartida; el ob- hasta 39 mil millones de dólares que son la-
jetivo del segundo es mejorar la seguridad vados por los narcotraficantes mexicanos y
pública y el Estado de derecho; con el ter- colombianos – al año.46
cero se pretende fortalecer las instituciones Segundo, y mucho más grave, la Iniciati-
de procuración de justicia; mientras que el va Mérida no constituye una verdadera co-
cuarto está dirigido hacia la transparencia. operación, ya que en una cooperación, todas
Los recursos son recibidos por la Procura- las partes involucradas tendrían que aportar
duría General de la República (PGR); las algo para que el objetivo compartido fuera
Secretarías de Marina (SEMAR), de Defensa logrado. En este caso, se trata de una trans-
(SEDENA), de Seguridad Pública (SSP), de ferencia – sin duda necesaria – de tecnología
Hacienda (SHCP), de Salud (S. Salud) y de de un lado al otro, pero esa transferencia no
Comunicación y Transporte (SCT); el Cen- puede compensar la carencia de una verda-
tro de Investigación de Seguridad Nacional dera cooperación entre las instituciones de
(CISEN); el Instituto Nacional de Migra- seguridad y los diferentes niveles de gobier-
ción (INM); y la Administración General de no de México y los Estados Unidos.
Aduanas (AGA);44 y consisten básicamente Tercero, el enfoque en el fortalecimien-
en “transferencia de tecnología en equipo, to de instituciones militares y de seguridad
principalmente militar e informático, in- pública encaja bien en la estrategia aplicada
tercambio de información y programas de por el Presidente Calderón, que consiste en
capacitación”.45 Más específicamente, se una militarización de la lucha contra el nar-
pretende lograr los objetivos de los cuatro co-negocio. Sin embargo, queda la pregun-
grupos por la entrega de equipo como avio- ta si ésta es adecuada, correcta y completa,
nes, helicópteros, scanners de ión, hardware considerando el aumento de la violencia ya
y software, chalecos antibalas, escáneres discutido anteriormente y que el porcentaje
móviles de rayos gamma, pero también a de toda la droga traficada entre México y
través de entrenamientos y capacitaciones. los Estados Unidos que llega a ser decomi-
Aunque la Iniciativa Mérida constituye sada por los cuerpos militares y policiacos
un paso importante, sobre todo porque con se encuentra alrededor del 5%.47
ella los Estados Unidos reconocen la res- Por lo tanto, no es la Iniciativa Mérida en
sí, sino el hecho de que la cooperación en-
43 
Rodríguez Luna, Armando 2009: Objetivos y límites de tre los Estados Unidos y México en la lucha
la Iniciativa Mérida, en Benítez Manaut, Rodríguez Sumano contra el narco-negocio no vaya más allá de
y Rodríguez Luna (eds.), op.cit.
44 
Benítez Manaut, Rodríguez Sumano y Rodríguez
ella, lo que muestra la carencia de una visión
Luna (eds.) 2009, op.cit. En esta obra se pueden conseguir,
de forma muy detallada, más datos sobre los cuatro grupos Ibid.
46 

y los montos asignados a cada uno de ellos. Benítez Manaut, Rodríguez Sumano y Rodríguez
47 

45 
Rodríguez Luna 2009: op.cit. Luna (eds.) 2009, op.cit.

21
integral y comprensiva sobre el mismo fenó- dos siguieran esas ideas, como podría ser a
meno del narco-negocio, y sobre las posibles través de un acuerdo paquete. Otro paso muy
maneras de cooperación para abordarlo. importante sería que Estados Unidos ratifi-
cara, por fin, la Convención Interamericana
Cooperación más allá contra la Fabricación y el Tráfico Ilícito de
de la Iniciativa Mérida Armas de Fuego, Municiones, Explosivos y
otros Materiales Relacionados que fue fir-
Por lo tanto, habrá que explorar maneras de mada en 1997, incluso por los Estados Uni-
cooperación que ataquen al fenómeno del dos, quien nunca la ratificó50. Esta conven-
narco-negocio desde sus raíces y síntomas ción constituye el régimen regional de con-
al mismo tiempo. Una breve compilación trol de armas más progresista en el mundo;
de posibilidades – que por supuesto no pre- sin embargo, carece de efectividad por falta
tende ser exclusiva – se hará para concluir de participación del país más importante,
este artículo. los Estados Unidos. Sería de gran impor-
Es cierto que atacar el tráfico de armas tancia para el asunto que los Estados Uni-
es uno de los elementos claves en la lucha dos ratificaran y fortalecieran este régimen,
contra el narco-negocio, dado que alrede- por el simple hecho de que la ruta de los
dor del 90% de las armas usadas por los Estados Unidos a México, aunque siendo la
cárteles en México provienen de los Esta- más importante, no es la única posibilidad
dos Unidos.48 Este asunto sí está contem- para los cárteles mexicanos de tener acceso
plado por la Iniciativa Mérida; pero es im- a armas de fuego.
posible impedir este flujo sólo a través de Otro asunto de gran relevancia es la lucha
mejores tecnologías. También es obvio que contra el lavado de dinero. El intercambio de
los costos políticos, para cualquier gobierno inteligencia que se está dando a través de la
estadounidense de regular, de manera más Iniciativa Mérida y, mucho más eficazmente
efectiva, a los compradores y vendedores de manera informal, ayuda algo. Pero el ver-
de armas, resultan ser políticamente muy dadero problema es mucho más profundo.
altos. Ello parece impedir que los Estados Los cárteles ya no llevan su dinero a México
Unidos, por ejemplo, fortalezcan la prohibi- en grandes maletas y en efectivo; estamos
ción de importación de armas que ya existe, hablando de transferencias bancarias, por
impongan mayor control sobre los vende- internet, y por todo el mundo: Londres, Sui-
dores de armas, o reduzcan el poder de fue- za, Islas Caimán, etc. Entonces, la cuestión
go de las armas disponibles a través de la del lavado de dinero es el factor en el narco-
renovación de la ley de prohibición de rifles negocio donde más se necesita soluciones
de asalto que había expirado en 2004.49 globales; falta un acuerdo global en térmi-
En este asunto, México podría intentar nos de control y de transparencia. Ojalá que
crear incentivos para que los Estados Uni- la crisis económica de 2008/09 sea suficiente
incentivo como para empujar tal acuerdo,
Esta cifra fue admitida por los Estados Unidos, recien-
48 
incluso para los paraísos fiscales, que en mu-
temente por William Hoover, vicedirector para Field Opera-
tions del ATF, frente al Subcomité del Senado de Estados Uni-
chos casos viven de estas prácticas.
dos para Crímenes y Drogas, el 17 de marzo de 2009.
49
 Violence Policy Center 2009: Indicted. Types of Firearms 50 
La convención está ratificada por 30 de los 34 estados
and Methods of Gun Trafficking from the United States to Mexico miembros de la OEA; faltan Canadá, Jamaica, St. Vincent &
as Revealed in U.S. Court Documents. Washington, D.C.: VPC. Grenadines y los Estados Unidos.

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El intercambio de inteligencia es un producto influye su precio y, por lo tanto,
área donde ya se está empezando a dar una la rentabilidad de producir/traficar ese
importante cooperación, sobre todo al nivel producto. Entonces, bajar la demanda de
informal y diario. La inteligencia sí es un drogas es clave para luchar contra el narco-
elemento clave; saber quiénes están dónde, negocio. Eso, originalmente, era una tarea
y qué están haciendo, es la base para la par- de los Estados Unidos; pero, ya que México
te policiaca-militar de la estrategia. Sin em- también es un país consumidor, aquí tam-
bargo, está ausente en esta cooperación un bién se podría lograr mucho a través de una
verdadero fortalecimiento de la estructura cooperación entre los dos Estados.
de inteligencia mexicana, hablando en tér- La necesidad de ella es obvio: se pue-
minos de capacidades. de observar, por ejemplo, que los recursos
Además de lo mencionado, se podría que fueron gastados por los Estados Uni-
pensar en una cooperación en el ámbito de dos cada año en prevención y tratamiento de
la reforma policial y de justicia. Ahí ha- uso de drogas subió de 1.3 mil millones de
bría que atacar tres fenómenos: primero, dólares en 1985 a aproximadamente 5.5 mil
la impunidad general que está presente en millones de dólares en 2001, mientras que
México que deja sin sentido y valor al có- la cantidad gastada cada año en imposición
digo penal, ya que personas involucradas de la ley e interdicción subió, en el mismo pe-
en el narco-negocio (y cualquier otro tipo riodo, de aproximadamente 3 mil millones
de crimen) saben de la alta probabilidad de dólares a 12 mil millones de dólares, de
que nunca serán capturadas. Eso tiene que manera que se estima que hoy en día, del
ver, a su vez, con la falta de capacidades ya 70 al 75% de los recursos de la política de
mencionada, pero también con el hecho de drogas en los Estados Unidos se gasta en
que todas las instituciones estatales, inclu- imposición de la ley, y sólo del 25 al 30% en
yendo las de justicia, están infiltradas por prevención y reducción de demanda.53
el narco-negocio51; entonces, el segundo fe- Sin embargo, una vez creada la deman-
nómeno que habría que frenar es la fuerte da de drogas, al Estado sólo le queda el pa-
corrupción en el país. Tercero, habría que pel de luchar – de manera reactiva – contra
parar las violaciones de derechos humanos aquellos que satisfacen esa demanda. Por
por parte de las fuerzas militares y policia- lo tanto, a los Estados Unidos les falta mu-
cas.52 Esas no sólo constituyen un riesgo a cho que hacer en ese campo, y México, a la
la seguridad pública de las personas que se vez, tendría que procurar que la demanda y
encuentran expuestas a elementos militares los niveles de consumo no aumenten como
o policiacos, sino que también trastornan la pasó en el país vecino, abriendo aquí un
legitimidad del Estado y, por lo tanto, echan campo para una verdadera cooperación.
una mano al narco-negocio. El último ámbito de cooperación, que
De la lógica del mercado se derive normalmente no está incluido en el tema
otro tema que resulta clave para frenar al del narco-negocio, es el del desarrollo ru-
narco-negocio: una reducción de deman- ral mexicano. El campo juega un papel de
da de drogas. La demanda para cualquier
53 
Reuter, Peter 2008: Assessing U.S. Drug Policy. Debate
51 
Zamora Jimenez, Arturo 2003: Criminal Justice and Material for the first Meeting of the Latin-American Com-
the Law in Mexico, Crime, Law & Social Change 40, 33-36. mission on Drugs and Democracy. http://drugsanddemoc-
52 
V. Human Rights Watch 2009, op.cit. racy.org/assessing-us-drug-policy.

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alta importancia en todo el narco-negocio; sería un gran logro contra el narco-negocio,
la pobreza insoportable y las crisis de go- siempre y cuando ese fortalecimiento del
bernabilidad y de legitimidad del Estado Estado no sólo se exprese en presencia fí-
en estas regiones son los ingredientes nece- sica, sino también esté acompañado por un
sarios para que los gerentes del narco-nego- consenso social y una estructura de resolu-
cio puedan desarrollar sus actividades allí. ción de conflictos y acceso relativamente
No estamos hablando de los grandes capos, funcional a la justicia para la población.
sino por ejemplo de la población indígena
en las partes más aisladas y marginadas de Conclusiones
la montaña de Guerrero, que se dedican a
cultivar amapola y a venderla a entre 15 y Queda abierta la pregunta de cómo se
18 pesos por gramo, un gramo que luego se podrían ir bajando los costos –y/o au-
convertirá en heroína y generará ingresos mentando los incentivos– para que se dé
de entre 350 y 700 pesos para los cárteles, una mayor cooperación en los ámbitos se-
dependiendo de su pureza.54 ñalados. La conversión de los efectos del
La falta de alternativas en regiones que narco-negocio en los Estados Unidos en
no tienen un “valor económico formal”, un asunto determinante para la seguridad
debido a la carencia de educación e in- nacional de ese país seguramente ayuda-
fraestructura, hacen que esas regiones se ría, pero eso, por supuesto, no es nada de-
conviertan en uno de los pilares del narco- seable. Por lo tanto, va a depender de las
negocio, sobre todo de la producción y del propuestas y/o peticiones que el gobierno
consumo, y que los narco-empresarios pue- mexicano, superando sus sentimientos na-
den obligar, de manera implícita o explícita, cionalistas, haga llegar a Washington, y de
a los indígenas a cooperar. que en ellas estén incluidos elementos que,
Estas condiciones aumentan fuertemen- tanto al congreso como al pueblo estado-
te los problemas de gobernabilidad y de unidense, les parezca de alta utilidad para
legitimidad del Estado, cuya relación con los Estados Unidos.
la seguridad nacional mexicana ya fue dis- Estos elementos podrían consistir, por
cutida anteriormente. Estamos hablando ejemplo, en package deals, acuerdos paquete,
de regiones en donde el Estado nunca lle- que combinen una mayor regulación de la
gó, donde los gerentes del narco-negocio ya venta de armas por parte de los Estados Uni-
están reemplazando al Estado en términos dos con un intento de disminuir los incenti-
de autoridad. La falta de alternativas para vos de mexicanos de migrar hacia el norte.
la población y, por lo tanto, su dependencia La creatividad de los diseñadores de políti-
del narco-negocio para sobrevivir alimen- cas públicas en ese sentido no está limitada.
tan la crisis del Estado. Lo que está claro es que se debe aceptar la
En este sentido, una cooperación, a tra- idea de que una mayor cooperación sí es ne-
vés de la cual los Estados Unidos ayuden cesaria para el país, y que México no sólo la
al Estado mexicano a recuperar la goberna- está solicitando al país vecino, sino que tam-
bilidad y la legitimidad en esas regiones, bién tiene cómo compensar estos pasos.

54 
El Universal, 25 de mayo de 2009: Esclavos de los Cárte-
les. http://www.eluniversal.com.mx/primera/33032.html.

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