La historia de la Ingeniería Industrial en la República Dominicana está
vinculada a la instalación y desarrollo de la Industria Azucarera, y a la creación y expansión de las zonas francas.
La primera escuela de Ingeniería Industrial en la República Dominicana
tuvo su origen en la hoy Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), en el año 1966, la cual nace obedeciendo al deseo de la Universidad de capacitar profesionales, técnicos y científicos en áreas no tradicionales, los que resultan indispensables para impulsar con éxito el desarrollo económico y social del país.
Este primer programa de estudios estuvo altamente influenciado por los
programas de prestigiosas universidades, como son: El Instituto Tecnológicos de Monterrey y el Recinto Universitario de Mayagüez; y conseguía preparar al ingeniero denominado: Mecánico Administrador. De esta manera buscaba una primera aproximación a lo que poco a poco se convirtió en una carrera más orientada: La Ingeniería Industrial.
La concentración fuertemente Mecánica del programa inicial se fue
atenuando paulatinamente, poco a poco se cambiaron asignaturas del área electromecánica por asignaturas del área Industrial. No obstante haber sido éste un proceso lento, cabe destacarse que en todo momento iba adecuándose a lo que demandaba el mercado de trabajo (al principio se consideraba que el sector industrial del país no estaba preparado para absorber al ingeniero industrial puro, pero si a un ingeniero que fungiese a la vez de ingeniero mecánico y de administrador).
En el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), se crea la Escuela
de Ingeniería Industrial en el año 1972.
En el año 1987 se inicia en la Universidad Autónoma de Santo Domingo
(UASD), el rediseño curricular durante la Rectoría del Dr. Franklin Almeida R. y unos años más tarde (1993), producto de esa iniciativa, el Departamento de Ingeniería Electromecánica propone la creación de la Carrera de ingeniería Industrial, bajo el nombre de Ingeniería Electromecánica, mención Industrial.
La Ingeniería Industrial dio nueva vida a las Universidades Dominicanas,
fundamentalmente para el desarrollo y manejo de la vida tecnológica e industrial. En nuestro país los primeros Ingenieros Industriales llegados del exterior desarrollaron su experiencia con las áreas de manufactura y en la industria agropecuaria. Entre las primeras empresas llevadas al éxito industrial podemos citar el caso de Neveras Dominicana (NEDOCA), la cual fue reconocida varias veces durante los años 70 por sus altos estándares de calidad y sus importantes trabajos en el desarrollo de la tecnología humana o tecnología blanda.
Por otra parte en la industria agropecuaria, podemos citar el caso de los
importantes avances en el uso de tecnologías apropiadas aplicados en el Consejo Estatal del Azúcar (CEA) por el ingeniero Eulogio Santa ella, que permitieron a esta institución lograr sus mejores niveles de desempeño durante muchos años. Asimismo, gran parte de la fortaleza que exhibe hoy en día el sistema nacional de zonas francas tiene sus orígenes estrechamente relacionados, al profesionalismo y el trabajo tesonero de los primeros grupos de Ingenieros Industriales y tecnólogos especializados en las áreas de producción y manufactura.
Desafortunadamente los trabajos realizados por los pioneros de esta
profesión en nuestro país, coincidieron con una estructura gubernamental paternalista, y una sociedad empobrecida; lo que trajo como consecuencia, el que sectores políticos y obreros tildaran (durante mucho tiempo) al Ingeniero Industrial, como un individuo al que se le paga para cancelar trabajadores.