Você está na página 1de 66

-EL ASESINO DE HEROES -

Rafael de Jade
@nu_caja_mas

Contacto: nu.sigma.plus@gmail.com
INTRODUCCIÓN
Nikola es un investigador privado que hace poco comenzó a ganarse la vida en ello,
nunca ha aceptado trabajos muy difíciles y de cierta manera intenta que su vida
transcurra sin esfuerzo. Es el mejor y más viejo amigo de una de las personas más
Importantes en la Ciudad de Ceriliano, “Josué Sierra”; quien después de contactar con
él le pide ayuda para encontrar respuesta a la verdad detrás de los hechos que cuentan
unas cartas anónimas.
Josué no confía en lo que muchos otros le dicen, sobretodo porque mucha de esa
gente lo acusa a él de ser quien envió las cartas que difaman el nombre de personajes
históricos, su amigo Nikola parece ser el único que le cree. Nikola acepta, pero no solo
por tratarse de su mejor amigo, sino porque quiere un cambio en su vida y salir de la
rutina.
Ahora deberá intentar resolver un caso, que a lo mejor, no tenga solo una respuesta.
CAPITULO I
Presentación

Antes de iniciar quiero pedirles disculpas, porque a lo mejor, pensándolo con detalle, no les
presente de forma correcta los protagonistas principales de la historia que les debo contar, y
como narrador este obsesionado con que vean las cosas desde mi punto de vista, pues, a mi
parecer siempre se le resta atención a todas las cosas pequeñas que suceden para que las vidas
de algunas personas converjan, muchas veces motivos de pura casualidad determinan como
una historia se desarrollará.

Fue el interés que parecía tener Nikola por la historia, lo que llevo a Josué Sierra a comenzar a
charlar con él. Un niño del cual todos se burlaban por ser poco masculino y a lo mejor poco
interesado por cualquier actividad que lo hiciera ejercitarse. Bien pudo haber cesado en una
conversación, pero no fue así, de a poco parecía que compartían muchos otros intereses, les
apasionaban los comics, las mismas sagas de juegos, aunque se debe de admitir que en cierto
modo, fue el interés que Nikola tenía de tener un amigo lo que hizo que ciertas cosas que antes
no le interesaban, le comenzarán a interesar. Paso de nunca tocar un balón a intentarlo de vez
en cuando, cambió las historias de fantasía por Ciencia ficción, de cierto modo se acomodó a su
nuevo amigo. ¿Y Josué?... bueno, él simplemente vio como el tiempo lograba que muchos de
sus amigos se desvanecieran, que algunos de sus gustos cambiaran, sin darse cuenta, le toco
asumir algunas responsabilidades mayores cuando su padre enfermo. Y aquel niño social, creció
para ser una persona que pensaba más en sí mismo que en compartir con otros, sin embargo
la amistad de Nikola se mantuvo constante en todo este tiempo, es esta la razón por la cual
Josué no pudo confiar en otro que en mi “Nikola” para encargar la investigación de la verdad
del pasado de su familia.

Perdonen que hable de mí en tercera persona, pero simplemente quise presentarme antes de
comenzar, porque la historia que contare estará llena de vacíos que nunca podré llenar, de
historias que no podré contar y de diálogos que no logre terminar. Sin embargo espero que
baste para explicar mi investigación, fue un año muy movido, lleno de personas que buscaban
respuestas que solo los muertos podían darles. Y muchos otros que aceptaron cualquier otra
respuesta que encontraron.

Mi misión a diferencia de los demás era encontrar la verdad acerca del pasado de la familia
Sierra, sin embargo para poder hacerlo debía adentrarme en todo lo que ocurría alrededor,
solo quiero que recuerden estas palabras por si alguna vez se pierden en mis escritos, sin más
que decir termino esta presentación.
CAPITULO II
La Ciudad de Ceriliano

Una ciudad en crecimiento, hermosa, llena de vida y de oportunidades, Ceriliano es una joya,
que tiene mucha historia para contar. Una historia que los ciudadanos conocían y se sentían
orgullosos de recordar.

Fundada en 1835 luego de que el capitán Tomas Sierra de los Mártires donará algunas de sus
hectáreas de terreno para hacer una iglesia enorme en el centro de un nuevo pueblo como
quería, ya que la topografía del pueblo de los Amanales, donde antes estaban asentados, no lo
dejaría crecer como era debido.

Ceriliano sería un pueblo más ordenado que Los Amanales, con calles más amplias y edificios
dignos de una ciudad importante, muy pronto las familias más influyentes construyeron sus
propias casas y los edificios administrativos alrededor de la iglesia, como era de esperarse la
ciudad progresó hasta nuestros días, donde es motivo de muchas miradas.

Como cualquier otro lugar esta ciudad no está exenta de crimen, pero con una tasa tan baja de
criminalidad para una ciudad, no es de sorprenderse que siempre se hable bien en las noticias
de ella.

Sin embargo la ciudad tenía algo más que contar, entre todas las cartas que serán entregadas
día a día, hoy, dos viejas encomiendas deben ser entregadas. Y viajaron mucho para llegar a su
destino… y esperaron más para ser abiertas.

Una de ellas llega a la Jefa del canal 5, que bien podría haber ignorado ese “sobre amarillento”
pero no lo hizo, mientras tanto otra copia llega a la biblioteca de la ciudad, donde
simplemente es leída. Dos diferentes destinos, el mismo mensaje, en la biblioteca un hombre
abrió la carta, al no estar dirigida a nadie en especial, sino a la biblioteca misma, como que de
una factura o noticia se tratase, dentro de ella habían dos hojas bastante viejas, escritas a
máquina de escribir – ¿Quien sigue usando máquina de escribir?– dice para sí mismo el
bibliotecario, mientras lee lo que dicen las hojas.

Y mientras avanza no le llama mucho la atención nada más que lo viejas que parecen las hojas,
eso sin mencionar el sobre que parece estar listo para hacerse polvo, luego llega a un cuento
que nunca había leído ni escuchado, parece infantil y dulce así que lee con cuidado:

- Mira la Vocecilla-

Oh la pequeña vocecilla “Mira”, ¿Quién es en realidad?, por qué esta acá tal
vocecilla, “ella” parece ser todo lo que es y ha sido siempre… dejó a sus
compañeros porque se cansó de que se lo dijeran.

Nunca pensé que llegaría este momento- dijo la pobre “Mira” con una voz tan
dulce que cada letra sonaba como un por siempre.
¿Cuál? querida “Mira” – le contestó un grito.

El momento en que necesitaría ayuda para saber quién soy.- respondió “Mira” muy
desorientad; de donde venía el grito que se esforzaba por ser escuchado en un gran
silencio ensordecedor que ella misma provocaba con su vocecilla tan particular.

No te preocupaste de eso nunca jamás, ¿porque de repente prestar atención por


tal cosa?- dijo una voz más aguda y segura de quien no era- Acá nadie ha
necesitado ayuda para descubrir quien no es, porque tú deberías de ser ayudada.

“Mira” existía desde que recordaba, una vocecilla entre tanto “vacío” no puede
viajar, ellas esas limitadas a todo aquello que esté lleno, y “Mira” no fue jamás la
excepción, esperando encontrar respuestas por fin, se armó de valor y dijo.

-No soy nada especial pero nadie antes de mi pidió ayuda para saber quién no es, y
no es tu obligación ayudarme pero si lo deseas sería de mucha ayuda.

Y sonriéndole al vacío, entendió la falta de oportunidades que tenía para hallar su


respuesta.

-Te ayudaremos dijeron muchos gritos que al fin se oyeron y no los callaba la
hermosa melodía de “Mira”. Porque al fin ¿quién está mejor preparado para
ayudar a alguien a saber quién es que aquel que falló incontables veces para saciar
esta pregunta ?.

-Acompañando a cada voz, que daría lo que fuera por seguir escuchándola; le
presentaban posibilidades de ser algo raro, algo peligroso, algo milagroso o algo
engañoso. ¿Qué grito no se topó con “Mira” y no pudo más que callar su propio ser
para oír a esa vocecilla?, ¿podría “Mira” ser algo Seductor?

-Quizás esa sea yo- Dijo “Mira” cansada de seguir oyendo gritos y susurros, pero
esta respuesta no satisfacía su pregunta realmente. Y por un momento breve
estuvo a punto de caer en aceptar una mentira como lo habían hecho ya aquellos
anteriores a ella.

-”Mira” no viajaste tanto para aceptar algo tan tonto como una mentira- Se dijo a
sí misma para darse ánimos y su vocecilla fue oída por su aguante, para seguir en
su búsqueda.

Oh “Mira” te espera oír incontables voces que te dirán quienes no son y podrías ser
tú y cada vez que te enteras que no eres ninguna de ellas, estas más cerca de
conocerte a ti misma.

Incontables cantidades de tiempo después, “Mira” seguía siendo nada más que
una vocecilla embriagante al oído del suertudo que pudiera escuchar, pero había
aprendido todo aquello que no era, y eso fue más importante de lo que alguna vez
se imaginó.

“Mira” por primera vez supo algo, el tiempo va dando respuestas, pero son tan
lentas y vagas que a veces es más fácil creerse una mentira para acabar la
búsqueda, entendió a todos aquellos que decían saber quiénes eran, ella desearía
poderlos ayudar como todos esos gritos la ayudaron, pero ellos querían todas las
respuestas y ella sólo tenía más preguntas para todos.
Pronto descubrió que “no puedes ayudar a todo el que no quiere ser ayudado”; y
mientras más aprendes más te vuelves parte de todos aquellos que siguen
buscando quienes no son.

-Pero que te parece, otra vocecilla se acerca a este lugar, “Lumino” Vocecilla que
da cierto abandono al oírla.

- No deseo incomodarlos- dijo la vocecilla Lumino, parecida tanto a “Mira” pero a


la vez era tan diferente.

-No creí que llegaría este día- dijo de nuevo al oír aquel silencio al ser no debía y
estar donde no debía.

-Bienvenida seas- dijo “Mira” - y si deseas ayuda para saber quién eres a lo mejor
pueda ayudarte en tu camino.

Y vendiéndose a la única voz que parece darle lo que quiere, otra más se unió a la
búsqueda.

– Vale la pena archivarlo y buscar luego al escritor– piensa el bibliotecario que resta
importancia a la primera hoja.

Que diferentes que son las personas en sus prioridades, mientras el bibliotecario se
preocupaba por el autor, María Josefa, la jefa del “canal 5” estaba lista para hacer un
escándalo de lo que decía la carta, ni siquiera leyó el cuento, le restó importancia luego del
segundo párrafo.

Es una hermosa tarde de domingo en la ciudad de Ceriliano y el Canal 5 decidió que la noticia
de hoy sería esta extraña carta que un desconocido envió, que relataba una historia jamás
contada.

-Primera Carta-

No sé porque escribo de repente, pero debo de decir que me relaja; como si entrara en silencio
mi mente, hasta hace unos meses quizás nunca había escrito nada sin que me lo pidieran o
fuera estrictamente necesario, ahora siento la necesidad de contar cada cosa que quiero hacer,
las voces se calman cuando escribo, pero también cuando leo, aun no le digo a nadie sobre
ellas, pero estoy escribiendo esto para que quede registro que si alguna vez hubo lucidez en
mí, fue en este momento.

Hace poco diferencié una voz en mi mente, era la voz de un hombre que decía ser el
Conquistador de “Maraquillina”, él había estado murmullando cosas con los demás, pero de
repente pude distinguir lo que decía cada noche a las nueve en punto, no puedo recordarlo
exactamente pero desearía creer que ¡esto! fue lo que escuché, mas no recuerdo con certeza
que fue lo que el Santo quiso decir sino hasta la undécima noche de oírlo repetir sus palabras.
“Oh de mí, son las nueve en punto, tantos miles que me ven como un Santo en la
Catedral de Maraquillina, expulsé a esos miserables de sus tierras y sus casas,
engañados y cegados dejaron todo atrás, yo solía querer honrar a mi Dios de esta
manera, expulsando a todos esos salvajes que no eran más que sembradores que
amaban demasiado a la tierra, tanto como para ofrecerle su adoración.

No me arrepentí de ello hasta ese momento en mi vejez, no quería llevar en mi cruz


delito; traté de escapar a mi destino, que cruel resultó el tiempo, creí que descansaría,
pero heme aquí, mis adorados seguidores, los oí lamentarse y oí alegrarse a otros de mi
muerte, escucha tú, asesino, porque a diferencia de estas almas en soledad yo no sabía
que mi último momento de cobardía me daría descanso, tras esa biblia que atesoré,
escondido está mi último diario, lo he visto durante largos años, sin poder hacer nada
al respecto, no quiero ser más su héroe, que recuerden a alguien más, yo merezco
descanso. Sólo ve y toma el lomo de esa biblia y encontraras mis últimas palabras. “

La noche doce todo fue más claro, mientras leía como de costumbre, sabía que las voces no
tardarían en atormentarme, pero el silencio de esa noche fue mi única compañía, sin embargo
sólo podía pensar en aquello que había escuchado en once ocasiones, no pude hacer nada más
que escribirlo de la mejor forma que pude entender su voz quebrantada y susurrante.

Me gustó tanto estar solo que por primera vez desde ya hace mucho, contemple la idea de
hacer lo que quería esa voz, así que envió ésta carta a las personas correctas para que sea
escuchada, sé que no tienen por qué creer en lo que escribo, pero si desean pruebas sólo deben
de ir a la catedral de Maraquillina .

“Mi sangre corría en una de las infieles, hice lo que debía. Más no quería que esto
figurara ni en mi última palabra. Descansan en paz y de ella y su madre, ya nada que
pruebe “existieron” queda, más que aquello que he visto, en la catedral, debajo de las
fosas de la catacumbas yacen aun encadenados esos huesos.”

No se merece descanso, no se merece ser reconocido, no merece nada y así quiero que
recuerden al gran San Baurelio de la Cruz, pues con esto quedara asesinada su “intachable”
memoria.

Una noticia que solamente dependía de una carta anónima parecía puro sensacionalismo, pero
al tratarse de historia antigua, muchos no sabían cómo reaccionar, entre ellos algunos
cristianos fieles que la tomaron como una broma de muy mal gusto. Pero la mayor parte de
gente tuvo que buscar el nombre en internet, luego que no recordaran exactamente quién era
“San Baurelio”, no a todos les importa mucho la historia de su país, quien los puede culpar.

No se necesitó mucho tiempo para que la noticia levantara una serie de preguntas, la gente
que exigía respuestas, aunque en su mayoría eran personas que quería saber quién envió la
carta, unos cuantos querían saber si en efecto lo que decía era verdad. Entre los curiosos
pocos podían hacer algo para probar la veracidad de las palabras escritas y aún menos
personas estaban dispuestas a hacerlo.

Los días pasaron y aunque algunos diarios mantuvieron la notica en boca de los lectores, no
era su objetivo probar que lo escrito era cierto sino difamar al “canal 5” portal de
sensacionalismo y falta de profesionalismo al presentar “tal cosa” como una noticia ese
domingo.

A lo mejor todo hubiera sido olvidado sino fuese por la generosa donación de un hombre que
pretendía dejar en ridículo al “canal 5”. Josué Gael Sierra, un joven empresario, único heredero
de la prestigiosa Familia Sierra, siempre fue un hombre interesado en la historia, amante de las
artes y buen amigo de las personas correctas para permitírsele dirigir un equipo que hiciera
una cuidadosa excavación debajo de la Catedral – “Sera una buena excusa para donar un
poco de dinero para restaurar la catedral” – fueron las palabras que uso Josué para
convencer a las personas adecuadas de permitirle hacer lo que deseaba.

A una semana de la llegada de la carta, el lunes, un equipo de camarógrafos y peritos estaban


en la catedral, mucha gente estaba reunida en los alrededores, otras oían las noticias, no
parecía posible lo que Josué Sierra oía, debajo de lo que alguna vez fuera una bodega, había
una entrada pequeña a un calabozo cerrado, oscuro y sin ninguna otra salida; olvidado en el
tiempo bajo una buena cantidad de tierra y un nuevo piso que se colocó en 1992, el calabozo
no contenía muchas cosas, sólo un par de platos, cadenas y huesos, que parecían ser de un
adulto y un niño, o así dijeron los peritos forenses.

Bajo estas nuevas evidencias le fue imposible retener la biblia de San Baurelio a la persona que
tenía en su colección. Una pequeña incisión en una costura del lomo fue suficiente para sacar
un pedazo de tela, donde las últimas palabras de San Baurelio estaban escritas, Le pedía
perdón a las dos encadenadas, rogaba por que se salvase su alma, y patéticamente terminaba
con una oración por su bastarda.

Nadie creía que esta carta fuera anónima, mucha gente importante se enojó con Josué Sierra
y María Josefa que hasta ese momento no tenían el placer de conocerse en persona o eso
aseguraban ellos. Sea como sea, el buen nombre de San Baurelio murió esos días, o como la
prensa lo dijo:

“fue brutalmente asesinada su memoria y reescrita la historia por un desconocido y con


complicidad de 2 personas más”.

Josué Sierra tomo muy personal los cargos que los medios le imponían, sentía la necesidad de
encontrar el origen de la carta y sobre todo preguntarle al escritor de la misma de donde saco
la información, no era la clase de persona que conviene tener de enemigo, su carácter era
fuerte y tenía el dinero para llevar a cabo cualquiera de sus caprichos.

Por otro lado al Canal 5, tanta publicidad gratuita le vino como anillo al dedo e intentaron
explotar su popularidad mientras ésta durara.

Se me olvidaba una persona, pero a lo mejor esa persona se le olvido entrar en la historia, el
bibliotecario de Ceriliano, quien no veía las noticias ni mantenía mucho contacto con la
sociedad fuera de la biblioteca, quizás debió de prestar más atención.
CAPITULO III
Inicia la búsqueda del Escritor

No importa que tan chocante o importante sea una noticia, ésta es olvidada por la población
en general si los medios de comunicación así lo quieren, pero hasta que pasara mucha gente
se interesó en saber de dónde venía esta carta.

“Canal 5 informa” parecían los únicos que podían estudiar la procedencia de la misma, al ser
los únicos que contaban con ella, una carta vieja, que fue encargada hace ya 8 años de ser
enviada estas fechas por un ya desconocido en la oficina de correos de un pueblo en la
frontera norte del país.

¿Qué clase de encomienda es ésta?, ¿Cómo es que después de tantos años se logró enviar?,
por lo menos estas preguntas podrían ser respondidas al tomarse la declaración del mensajero
que envió la carta y de las personas a cargo de la pequeña oficina de correos del pueblo donde
salió la encomienda.

Cierto mensajero dijo algo que hasta ese momento nadie más que él sabía, - La otra copia se
entregó el mismo día en la biblioteca, porque así fue como decían las instrucciones que tenía
que ser- ¿Qué otra copia?, – ¿Qué… nadie sabía de la otra copia?, la que está en la biblioteca–
fueron las palabras del mensajero cuando supo que nadie sabía de la otra encomienda, para
empezar ¿Por qué la biblioteca nunca dijo que tenían en su poder una copia en todo este
tiempo?, ¿hay algún involucrado de la biblioteca?... las preguntas eran muchas. El canal 5
debió de ser más cuidadoso con lo que transmitía en directo o más rápido en llegar a la
biblioteca.

Y tal vez más gente hubiera mostrado interés en como un hombre no tenía ni idea de que
pasaba en el mundo fuera de la biblioteca, pero todos llegaron tarde, y otros llegaron muy
temprano*. El diario Faro tenía la primicia de entrevistar a Raúl Dionisio Reyes, quien recibió
la carta y fue quien la abrió y leyó, acaso él sabía lo que contenía, ¿Por qué no le dijo a nadie
que tenía en su poder esa carta?, ¿Tiene algo que ver con el escritor? ; Raúl tenía mucho por
responder aunque aún seguía muy desconcertado por el interés que tenían de escucharlo.

A lo mejor otras persona no podían hablar en este momento con Dionisio pero quien llego
primero logro conseguir la carta, un grupo de especialistas tanto en caligrafía como en historia
y escritura llegaron a examinar la carta que fue archivada en “Varios” y que al estar tan
ocupado Raúl Dionisio atendiendo a los medios que querían preguntarle cosas, tuvo que
atenderlos Marina, otra bibliotecaria, quien supo de inmediato a que se referían cuando
recordó que Raúl le comento sobre una carta que contenía un cuento y que archivo en
“varios”, Marina si veía las noticias, pero hasta ese momento no había razón para creer que
hubiera una conexión entre las dos cosas, más aun cuando su compañero nunca lo mencionó.
Unas horas después estos eran los nuevos datos a considerar:

• Las cartas eran idénticas.


• Cada una había sido escrita con una máquina de escribir Royal 440.
• Por lo menos tenían 20 años de antigüedad, el papel así lo mostraba.
• Adema ninguna carta parecía tener huellas a pesar de que era muy común en las
cartas hechas en esas máquinas de escribir, más si se usaba papel carbón como parece
fue el caso de la presente para hacer una copia.

Los datos fueron anunciados tanto en televisión como en la prensa escrita el día siguiente,
todo gracias a las donaciones de Josué Sierra, pareciera obvio que tenía que ser él quien
financio todo con tal rapidez.

Dos días luego, una nueva razón para preguntarse ¿que tenía que ver la biblioteca en esto? Se
presentó.

Esta vez el sobre era nuevo, pero las hojas dentro eran muy antiguas, de nuevo la copia llego a
las oficinas del “canal 5” pero no fue fácil para ellos recibirla, otras docenas de cartas
estuvieron llegando en las semanas anteriores, eso sin contar los correos electrónicos y las
amenazas que llegaban para que “contaran la verdad” acerca de la carta.

Por muchas razones la biblioteca de nuevo fue la primera en saber de la nueva carta, esta vez
Fue Marina quien la abrió y leyó, el sobre escapo de la vista de los curiosos porque era
demasiando nuevo para levantar sospechas y llego a la biblioteca junto con una docena más
de otros sobres desconocidos, aunque al inicio no parecía nada peculiar, al abrirlo ella
automáticamente sabia de que se trataba, nadie más escribía en un papel tan amarillo y
acartonado con una máquina de escribir royal 440, y mientras muchos intentaban aun hablar
con Raúl, Marina pudo leer con calma y esperar para contar la noticia de la nueva carta.

-Midiana-

Una mañana como cualquiera todos los dioses desconocidos se preguntaron, que
sería de la vida de un ser que contara con el conocimiento del presente, pasado y
futuro, no sólo suyo, sino de todos y todas las criaturas y cosas que existen.

Sería una excentricidad interesante, pero ninguno quería compartir su conocimiento


con otro de sus pares. Pero como culparlos, su naturaleza era proteger su superioridad
ante todas las cosas, eran celosos y cada uno sabía lo tramposo que el otro podía
llegar a ser.

Así que entre sus charlas habituales decidieron algo, Todos los dioses desconocidos
darían su gracia a una joven mujer que no tenía nada de especial más que ser ella
misma. Recibiendo así el don de la sabiduría más allá de cualquier entendimiento y el
don del Conocimiento de todo lo que nadie jamás se ha preguntado.

Oh Midiana una mujer que sin razón aparente parece acaba de despertar y tal
despertar en un mortal no es nada fácil. La pobre Midiana pasó de un estado de shock
a una completa desesperación y delirio, sabiendo bien que pasaría después o qué
pasaría si intentaba cambiar cada detalle.

La desesperación fue precedida por una total calma, pero no por la falta de miedo sino
por el entendimiento del mismo, por primera vez conocía el rostro del miedo. Tampoco
hubo felicidad en ella porque también conocía el rostro del gozo, parecía que hiciera lo
que hiciera o pasara lo que pasara todo era un deja-Vu.

Hay algún ser humano que pueda con tal carga, pues quizás ella lo sepa, pero que
estoy diciendo, ella lo sabe y no le sorprende.

No vuelve a sentir angustia porque sabe cómo no sentirla, ni vuelve a sentir dolor
porque sabe cómo sentirlo, las emociones mortales ya no son su preocupación, al
cerrar los ojos ve como terminara cada camino y sabe que tiene la razón.

Hay algo único en saberlo todo, porque puedes poner a prueba cada uno de tus
conocimientos y estos encajan con los demás hechos que conoces, y si conoces todo,
cada cosa encaja como pieza de rompecabezas.

No sé todo y no quiero saberlo, pero tú, Midiana, lo sabes y sabes cómo no saberlo. Tu
vida pasaras en soledad como un mal chiste de los dioses desconocidos, No fuiste lo
emocionante que creían, ni terminaste con tu vida ni tomaste otra decisión, se
aburrieron y olvidaron otro juguete.

Tu propia existencia es sólo una leyenda, no lo saben y no les importa, Midiana te


convertiste en un libro, uno muy grande y extenso, que cuenta toda la verdad, pero
¿Quién tiene tiempo de leerte? , ¿Quién le interesa lo que dices?, pues tú lo sabes, pero
no te interesa ayudarlos, al fin y al cabo sabes cómo terminara cada uno.

Cierto día esperabas a un viajero, sabias que te preguntaría y más importante sabias
que decirle la verdad o no, de ninguna manera alteraría el resultado final.

Oh gran Señora-dijo el pequeño y humilde hombre- he viajado mucho para encontrarte


y vengo a preguntarte algo, porque se de tu gran sabiduría y conocimiento.

¿Cómo un dios puede manejar saberlo todo?

Pues simplemente no lo sabe- contesto Midiana - .

Y tú sí.

-Claro que si-

Entonces dices ser mayor a los dioses.

Niño- dijo Midiana refiriéndose al joven- no soy un poeta ni un filósofo, los detesto por
predicar mentiras que sacian a su oyente, ni soy portadora de ninguna “fe” a algún ser
superior, tú venias con una pregunta y yo te respondí, ahora vete o quédate, acéptala o
déjala, pero créeme que a tus dioses les da igual lo que hagas o no.

-Midiana querida biblioteca viviente, fuente de un conocimiento total, sonabas tan


altanera que cualquiera podría haber pensado que te creías superior a los “Dioses”,
pero así como un libro no es más que una persona, tu sabes muy bien tu lugar. Las
personas que buscan la verdad muchas veces son cegadas por sus propias mentiras
esperan una respuesta que ya creen conocer, se enojan cuando la verdad no encaja con
sus mentiras y la rechazan.

Ahora te observa uno de esos que bendijo, celoso de tu conocimiento y enojado por tu
gran conocimiento, nunca admitiría que alguien fuera mejor a él, y justo a tiempo
llegaba a tu visita, con todo su ser anhelaría saber lo que tú sabes, y no importaba que
compartieras con él, porque dijeras lo que dijeras el final no era un misterio, ya los
conocías y ninguno era de interés para ti.

Dime Midiana, crees que eres mejor que yo. - Dijo el dios omnipotente - ¿Olvidas quién
te hizo lo que eres?, es que acaso la gran Midiana Ama y señora de la razón absoluta
como todo ser humanos empieza a padecer de la senilidad.

-No es así y tú lo sabes oh gran dios omnipotente, pero yo no me creo nada, lo sé todo,
no me sorprende nada y solamente baso en hechos mis palabras, no confió en las
emociones ya sea que digan ser buenas o malas, no soy más que un montón de
conocimiento encerrado en un contenedor muy frágil y pequeño, no me interesa nada
porque sé cómo acabara todo, tú en cambio quieres gobernar sobre todos y no dejarías
a nadie tener tu poder, Se porque estas acá y no me importaría darte todo mi
conocimiento, pero te advierto que hagas lo que hagas el final es el mismo y no
gobernaras sobre todas las cosas.

“No le temo a nada porque sé cómo no temerle, no soy mejor que nadie y nada es
mejor que yo, y aun así tus ojos me ven como superior oh gran dios omnipotente.“

Oh Midiana, tus últimas palabras podrían haber sido otras pero eso no cambiaría nada,
y aun sabiendo que hacer para que todo cambiara, preferiste este final.-

Y cuando ese dios se apodero de tu conocimiento, sucedió lo que ya sabias, la razón de


ser de toda cosa pensante pierde sentido porque nunca lo tuvo realmente, nada es
importante en realidad, y da igual que hiciera de ahora en adelante, porque ya lo sabía
y no le alegraba ni le enojaba saberlo, en su arrogancia el dios Omnipotente intento
pelear con la verdad que ahora conocía, pero era imposible, sus pensamientos de
grandeza no eran más que tonterías para su nuevo razonar.

Su necesidad de ser temido no era nada más que una emoción que ahora entendía
pero no producía ninguna sensación, perdió significado su propia existencia entre un
universo de existencias, ya no era él, se había transformado en ti, se transformó en
conocimiento, cualquiera podría decir que cayó en tu trampa ahora no estas
restringida a un cuerpo mortal. Perdiste tu vida como ser humano, pero si no eras más
que conocimiento, cambiar de contenedor no afectaría en nada a tu misma existencia.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

-No es un cuento excepcional- pensó Marina, pero justamente era lo que corroboraba que la
carta no era falsa, por lo que se decidió a dar la noticia a los reporteros que esperaban por
tener una charla con Raúl. Una segunda carta, los medios comenzaron a cubrir la nueva
noticia, las ediciones de diarios digitales tenían un nuevo titular, Y el “canal 5” parecía quedar
fuera de los focos hasta que decidieron revisar su correo del día.
Esta vez pocos dudaban de lo escrito, a pesar que todo indicaba que la carta fue enviada hace
pocos días, esto quiere decir que quien escribió la primera encomienda hace tantos años
acaba de enviar una nueva.

¿Qué clase de persona hace algo así?, guardarse tanto tiempo una noticia como esa, y más
importante, de dónde saca toda esa información. En cualquier otra época mucha gente le
hubiera creído que oía a los muertos sin dudar, pero… ¡ahora!, en pleno siglo veintiuno “esta
demente” si piensa que alguien va creerle su jueguito.

-Segunda Carta-
Carta-

Suelo tener que recurrir a la total desesperación en esos sueños, que mis llagas se pudran y
mis extremidades caigan antes que mis más profundos temores se manifiesten de nuevo, día a
día por toda la eternidad suelo recurrir a ti para estar en paz.

Quizás recuerdas esas historias que nos contaban sobre como los héroes nunca mueren, la
literatura está llena de ejemplos de grandes luchadores que dieron su vida por sus ideas y
pasan a ser leyendas inmortales, sus ideas nunca mueren y trascienden más allá de su propia
existencia en este mundo, viven por siempre en el corazón de las personas que los recuerdan;
Oh querida mía, si tan sólo los oyeran gritar...

Ellos buscan morir yo los he oído, sus suplicas, sus deseos, sus miedos, sus ideas; las odian, las
aborrecen como no podrías hacerlo ni a tu peor enemigo, se quejan de lo que hicieron, de lo
que lucharon y consiguieron. Ese deseo de alcanzar sus metas fue motivante en vida, y ahora
desesperante.

Querida te escribo esta carta para que sepas que lo que hago no me hace diferente a ellos, un
idiota más que sólo piensa en ti cuando esas animas no me persiguen, pero así como ellos son
recordados y no desean serlo, me veo y sólo sé que me espera desesperación, quisiera yo que
sólo fuera el miedo al dolor físico, porque puedo acostumbrarme a él o eso me han dicho los
héroes, que digo, quizás me esté volviendo loco, pero sé que debo de ayudarlos, no por ellos,
ni por que sea lo correcto, mucho menos para asegurarme un mejor destino, sino porque me
alejan de ti y no quiero vivir sin ti, mucho menos morir por no tenerte.

Lograre darles lo que desean, lo sé, porque ellos no descansaran hasta obtenerlo, su muerte.
Su real muerte, el olvido, que sepan su verdadero rostro aquellos que tanto los exaltaron para
dar fin a su castigo, sólo así sus visiones cesaran y descansaran por primera vez desde su
muerte.

Son los que no descansan, los grandes luchadores, nada más que lamentables almas que no
son sordas ni ciegas, ahogándose en sus mayores logros, convirtiendo a inocentes ideas en sus
razones. Como iban a saber que ellas no los dejaran descansar, y entre sus palabras sin sentido
los he escuchado decirme:

Todo lo que te dio orgullo vivo, te vuelve loco en unos meses y cada segundo que pasa se
vuelve un horrible recuerdo de quien eras según todos los que te veían, son todas esas voces
en tu cabeza las agujas que no te dan descanso, quieres que paren pero no puedes detenerlas,
intentas todo pero nada funciona, no te escuchan. Intentas ignorarlas, pero el sentimiento que
despiertan es demasiado fuerte, te lleva a verlo recurrentemente, el tiempo pasa y el
sentimiento se hace más fuerte, el tiempo pasa y entiendes que no puedes hacer nada por
detenerlas, deseas hacerte daño pero no puedes.

El tiempo pasa y aceptas que no hay nada que puedas hacer, el tiempo pasa y entiendes que
las voces no se hacen más fuertes sino tú más débil, El tiempo pasa y por primera vez
entiendes que ese es el peso de la inmortalidad.

Apenas llevo unos años oyéndolos y creo entender a que se refieren, porque para mí, sus
suplicas sin sentido son esas agujas en mi mente, que al inicio no fueron más que un problema,
pero con el tiempo fueron desgastando mi interior, esa sospecha a que ellas existían, ese
recelo a contar algo, esa sospecha a que me estaba volviendo loco, me quebraron en días,
pulverizaron mi ser en semanas y en pocos meses me llevaron al borde del suicidio.

Pero soy un cobarde Sofía y la sola idea de no volver a verte invadió mi mente de un miedo
mayor a la locura de esas voces, justo ahí fue cuando logre entenderlas por primera vez, ahora
sé que sólo quieren mi ayuda, para lograr de una vez por todas ser olvidados.

Martoni Fabrizio Bozar prócer de la independencia, puedo hablar tantas cosas malas de ti, que
tu única gran hazaña fue una firma y estar presente, la misma historia te retrata como alguien
duro y de pocos amigos, tú mismo te sentías solo, la única cosa que hiciste por tus hijos fue
morir para que pudieran heredar tu fortuna, nada de esto es nuevo, pero el crimen por el que
serás recordado será tu pena más grande, los doce esclavos que dejaste morir luego que
pidieran un trato más justo, fue un ejemplo cruel para tus demás siervos, pero aún más cruel
fue pedirles que cavaran su fosa común.

Nadie recuerda el nombre de las víctimas, ni sus rostros, y no queda familiar que pueda dar
testimonio que alguna vez existieron, no mereces descanso, ni tampoco recuerdo, no mereces
nada.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Gracias a la colaboración de la biblioteca de Ceriliano, la carta pudo ser estudiada


rápidamente, resulta que no está escrita por la misma máquina de escribir que hizo la primera,
es totalmente diferente, una f está ligeramente más desgastada en esta unidad, eso sin
mencionar que las microabraciones son muy diferentes entre letra y letra en las dos cartas,
todo apunta a que es un muy buen engaño, pero hasta el momento sólo Josué Sierra y su
equipo saben todas estas cosas, porque si en efecto es un engaño, está muy bien hecho, un
papel similar, muy parecido, la misma máquina de escribir, y sobre todo la misma forma de la
carta, una introducción con notas al final de cómo encontrar el lugar que se menciona y luego
un cuento para finalizar.

Un día después la prensa lo confirma, Josué Sierra volverá a financiar una excavación
arqueológica, que esta vez será llevada a cabo por un equipo de antropólogos forenses, para
identificar los cuerpos “si los hay”, y datarlos para ver que en verdad concuerdan con la fecha
que deberían, para este momento hay un rumor en el aire, las voces susurran lo que Josué
Sierra espera encontrar, “Nada de nada”, quien sea que enviara esa carta intentando salirse
con la suya al no creer que pudieran excavar en una propiedad privada estaba equivocado.
Hay ciertas cosas que tienen que saber acerca de los dueños de la finca que ahora están
excavando, La Familia Bozar Moroni quienes conocen a Josué Sierra desde hace mucho, por
motivos de negocios, tanto con su padre cuando vivía, como ahora con él. No son fáciles de
tratar, pero se les aseguro que es extremadamente probable que la carta sea una mentira, por
lo cual estuvieron de acuerdo en colaborar, de cualquier manera, ya muchos habían puesto su
mirada en ellos, de no hacerlo ya no importara si la carta es falsa o no, todos concluirán que es
verdad. Sólo tienen una manera de ganar y es hacerle caso a su socio Josué y confiar en que lo
que les dice es verdad, eso es lo que les molesta, depender de la palabra… de otra persona.

Un montón de cuerpos apilados, se cuentan 15 diferentes fémures hasta el momento, tres de


ellos demasiado pequeños para ser adultos. Quizás si hubieran comenzado un poco más
adelante hubieran encontrado las cabezas los coxis primero, la verdad no soy más que un
observador que veo cómo trabajan los antropólogos, muy cuidadosamente le dan nombres y
números a cada uno, las pruebas para datar su edad exacta tardaran un poco, la finca se
mantendrá cerrada unos días mientras desentierran lo que falta, a nadie le importan mucho
las víctimas, más bien les importa saber cómo fue que tuvo de nuevo la razón el ahora llamado
Asesino de héroes.
CAPITULO IV
-Aquiles Mogrard -

Aquiles Tadeo Mogrard fue un hombre muy apasionado toda su vida, tenía una posición que le
permitía tomarse muchas libertades, estudio arte, historia y filosofía en la universidad. A
diferencia de su padre y madre a Aquiles nunca le gustaron los negocios, aunque siempre tuvo
buenos amigos que supieron aconsejarlo para invertir bien los bienes con los que contaba su
familia.

Era una persona tan sociable de joven que era difícil encontrarlo solo, aunque era consiente
que muchos de los que lo rodeaban sólo estaban con él por intereses personales, siempre supo
distinguir a sus amigos, o al menos eso dicen los que lo conocieron y quedan vivos para dar su
testimonio, porque según parece un hombre con los interese de Aquiles solamente sabe hacer
amigos mayores en edad a él.

Luego de graduarse se casó con Sofia Helena Martinez, una estudiante de historia política un
año menor a él, los dos compartían intereses mutuos y no había razón para pensar que alguno
de los dos fuera infeliz, luego de dos años de estar casados tuvieron a su primer y único hijo,
Hector Gabriel. Con una vida resuelta a tan temprana edad no les importaba hacer dinero, por
lo que hicieron realidad un sueño que tenían juntos al volverse benefactores de una biblioteca,
la biblioteca de los Olivos, un hermoso edificio a las afueras de la ciudad de Maraquilla, fueron
además los administradores del mismo por un largo tiempo. Luego su hijo se casó con una
hermosa chica que conoció mientras estudiaba Farmacología, tuvieron un hijo y todo parecía
ser prometedor para la familia Mogrard.

¿Porque una persona feliz entonces decide suicidarse?, tal vez la respuesta sea que no lo hace,
pero en el caso de Aquiles pareciera que todo se fue a la mierda en muy poco tiempo sin razón
aparente. Nadie sabe las razones con certeza pero un jueves de la tercera semana de febrero
de mil novecientos noventa y siete Sofía acabo con su vida, dejando una herida en Aquiles de la
cual nunca se recuperó, las cuentas comenzaron a apilarse en la biblioteca por culpa de muchos
trabajos de reconstrucción y ampliaciones que comenzaron en la biblioteca. Y aunque su hijo le
ayudo a pagar todo lo que debía, Aquiles ya no quería estar en esa biblioteca, le recordaba
continuamente a Sofía.

A lo mejor con ayuda de su familia Aquiles hubiera salido adelante, pero nadie pudo imaginar lo
que pasaría después, un accidente de avión corto con la vida de todos aquellos que amaba,
mientras viajaban de regreso a su casa de una importante reunión por la disputa de una patente
que le pertenecía a su nieto.

En menos de un año Aquiles perdió a toda su familia, y aunque aún contaba con dinero, decidió
gastarlo en buscar respuestas sobre la caída del avión en que viajaban. Aunque el accidente fue
resuelto nunca obtuvo las respuestas que quería.

Su historia no tiene un final feliz, ni tampoco fue un modelo de superación para nadie. Solo, viejo
y con muy poco dinero restante vivía en un asilo donde apenas y hablaba con otros, fue ahí, en
completa soledad donde este miércoles 24 de enero decidió acabar con su vida tomando 10
veces la dosis de un medicamento para conciliar el sueño.
Nadie llego a su funeral, para ser totalmente sinceros las enfermeras solo tenían un número
registrado, el de su contador, que de vez en cuando llamaba para preguntarle sobre su solvencia
y sobre la venta de su casa. Así que ¿a quién podrían llamar para que llegara?

Su triste historia hubiese quedado olvidada sino fuera porque una semana después de su
muerte, la tercera carta del desconocido de la máquina de escribir se hizo presente.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------.

Tercera Carta

Una voz en particular me hizo que fuera a dejar un mensaje, no me dejaba en paz hasta
comencé a moverme al lugar que quería.

Enfermera-> Llegamos, este es el cuarto, para serle sincero no sabía que le quedara
algún familiar al señor.

Visitante-> Tengo que decirle algo y no había tenido el valor de venir antes.

Enfermera-> El señor Aquiles no lo habían visitado desde hace ya mucho, quizás no lo


recuerde.

Visitante -> Me recordara, ya vera.

Enfermera->Buenos días Don Aquiles, se siente bien hoy.

Aquiles-> Respiración dificultosa-

Enfermera-> Su sobrino Antonio vino a verle, lo recuerda.

Ese nombre fue suficiente para que el Viejo señor Aquiles volviera en si un momento, el casi no
veía, apenas y escuchaba con su oído izquierdo, pero recordaba.

Su mente lo llevo a aquel momento feliz que tuvo con su nieto hace ya más de 10 años, cuanto
ha pasado desde entonces, cuanta soledad y encierro en sus pensamientos ha tenido,
recordando, imaginando, una y otra y otra y otra…. vez, hay un dicho popular que dice que
todo pasado fue mejor, que idea tan tonta pero que mucha gente cree día a día, porque en la
mente del sujeto, el pasado muestra cosas que en el mundo no pueden ser reales, emociones
y momentos que duran para siempre y se deforman, historias e ideas que hacen de una
fantasía un recuerdo.

Y en este caso, la mente de un hombre era una máquina de recuerdos maravillosos.

Aquiles-> Antonio, hijo, cuanto tiempo, dime donde está tu padre.

Visitante -> Espera afuera, sigue enojado por lo de la otra noche.

Aquiles-> Tu padre es un testarudo Antonio, que bueno que saliste a tu madre y un


poco a mí.

Visitante ->Abuelo venia porque quería decirte algo.

Aquiles-Claro, claro, pero antes ayuda a este viejo a recordar Antonio.


Visitante -> Dime abuelo.

Aquiles-> Me estoy volviendo loco recordando cómo es que iba ese cuento que cada
noche pedías que te recitara.

Visitante -> Te lo contare entonces.

-Fu-
Fu-
En una aldea hace ya muchos años, vivía un chico llamado Fu, muy curioso y
laborioso, Fu era un niño que solía recorrer el camino de los sentimientos
como todos en su pueblo, un día tras viajar con soledad Fu se topó con dolor,
todos odiaban a dolor, dolor no viajaba con nadie, así que Fu se acercó a
saludarlo, sólo un hola basto para iniciar una conversación, Sostener una
conversación con dolor no es nada fácil, la gente suele perder la calma y dicen
barbaridades.

Fu viajo con dolor todo ese tramo hasta una encrucijada, donde debía avanzar
si él y sin darle oportunidad de terminar su despedida dolor le dice, “Porque no
te desagrada mi compañía”.

Pues creo que es porque yo te conocía, quizás tú nunca habías viajado conmigo
pero yo te había observado en los demás, aquellos quienes te odiaron. De
donde soy yo, la gente aprecia a aquellos que hacen bien su trabajo y tú
cumples con tu trabajo como nadie más, aunque nadie aprecie lo que haces.

“Porque no disfrutaría la compañía de quien es tan diligente en su empresa”

Y ya sin ninguna contestación para tal respuesta cada quien siguió su camino
sabiendo que quizás algún día se volverían a ver.

-o-

Aquiles-> No recordaba que fuera tan corta, me parecía más bonita en mis
recuerdos sabes.

Visitante -> Tú la contabas mejor por eso debe ser, sabes abuelo debo
confesarte algo acerca de la patente que me hizo ganar ese premio.

Aquiles->Pues cuéntame.

Visitante ->No fui yo a quien se le ocurrió esa idea, pero todos decían que si yo
la presentaba como propia ganaría el premio y los medios se interesarían más
en un joven genio, pero si eso fuera todo no hubiera venido.

Aquiles-> ¡Que me estás diciendo Antonio!

Visitante ->Nadie saboteo el avión el día del accidente, no hay nadie


encubriéndolo, las pruebas demuestran que fue un defecto solamente en
motor lo que provoco esa fuga.

Aquiles-> TÚ NO ERES ANTONIO.

Visitante -> Si no fuera Antonio como se de tu estatuilla, de tus libros en esa


bodega o esos cuentos que tanto me gustaban.
Visitante -> Quiero confesarte que cuando me caí en el lago y rompí los
binoculares de papa,

-NO-

Visitante- >La verdad sólo llore porque sabía que me llevarías a comprar otros
si me veías triste. Odiaba ese lago pero tú lo amabas tanto, ya es tiempo que
dejes de atesorar tanto ese recuerdo.

Aquiles -Vete-

Visitante -> No soy la buena persona que creías, soy un simple oportunista.

Y a punto de entrar en llanto, este viejo que su existencia había perdido sentido y que
sólo vivía para recordar e imaginar cosas que nunca más plasmaría en un papel o en la
mente de algún oyente, pensó que aquellos momentos que por tantos días o tal vez
semanas… o quizás habían sido años, él había adornado en su mente no habían sido
tan felices como los recordaba, pero no recordaba nada más.

Y quizás, tal vez, podría ser, que eso fuera lo que hizo que por un momento recobrara
la lucidez esa senil mente para contestarme lo siguiente.

Aquiles-> hijo no se quien seas, ni se cómo sabes de mis cuentos, pero confió
más en mi nieto que en mis recuerdos y quizás alguna vez conté eso entre mis
lamentos, la verdad no lo sé, extraño a mi familia, no veo bien, escucho u poco,
no hablo con nadie, pase mis últimos días que recuerdo peleando por
respuestas que nadie me supo dar, pero quizás fue porque no era lo que
quería escuchar, agradezco que vinieras a darle voz a un muerto, pero no
entiendo que esperabas oír de mi o no entiendo cuál sería tu motivo
encubierto.

Fuiste una buena persona viejo, descansa en paz por primera vez, porque nadie te
recordara como algo que no eres, no te conocí en persona pero veo que en serio
querías a tu nieto y sí que lo recordabas como nadie, porque tu voz resonaba en su
existencia y no me dejaba dormir ni siquiera pensar con claridad, eras la prueba de
que la gente no le gusta la verdad cuando ésta es diferente a sus recuerdos.

Enfermera-> Ya se va.

Visitante -> Si, debo marcharme.

Enfermera->Debo confesarle que no creí que pudiera hacer hablar al señor


Aquiles, él no había dicho una sola palabra desde hace años, tenemos
pacientes especiales y luego está el señor Aquiles.

Visitante ->El sólo quería hablar con alguien conocido.


Hay varias cosas que todos notaron acerca de esta tercera carta, de nuevo la duda de la
veracidad de la misma era grande, por tercera vez la carta parecía estar escrita con otra máquina
de escribir royal 440, los surcos y espacios entre las letras de la primera y la segunda no
concordaban, pero esta vez, a diferencia de la segunda, se parecían un poco, sin embargo “el
papel” era exactamente del mismo tipo, incluso los dobleces de la hoja parecían estar muy
desgastados y a punto de hacerse polvo.

¿Quién era en realidad este hombre?, porque dedicarle una carta que pone en riesgo el
anonimato del escritor parece una mala jugada. Además que pareciera acabársele las sorpresas,
Aquiles Mogrard no era nadie importante, su nieto a lo mejor lo fue, y la disputa por la patente
quedo muy en el pasado, con la muerte de Aquiles y sin nadie a quien heredar, no había nadie
que se beneficiara de su muerte o del repentino descubrimiento que su nieto en realidad robo
la idea de sus amigos.

Esta vez fue el nuevo dueño de la vieja casa de los Mogrard quien ayudo a darle valides a la
carta, que como de costumbre tenía una parte donde explicaba la localización de las pruebas
físicas de lo que en ella estaba escrito.

Eran unas cuantas anotaciones en un cuaderno viejo y unas cuantas pruebas de laboratorio en
una usb vieja, las notas estaban escritas con la letra de un amigo de Antonio Mogrard, “Kevin
Fernando Uriva Zot” que hace 3 años intento demostrar que él tenía méritos en la investigación
que llevo a Antonio a poder patentar su fórmula, desearía poder ser más exacto con los detalles,
pero no recuerdo nada de eso, no es importante para la historia, ni lo fue en su momento,
aunque muchos pensaban que sí.

Que se pudiera probar la verdad de lo que decía la carta fue decisivo, ya con los hechos
esclarecidos nadie dudó que la carta fuera real y enviada por la misma persona que envió las
primeras dos, pero porque darle importancia a algo tan común en comparación con las dos
primeras bombas que soltó al enviar las primeras cartas. A Josué Sierra no le parecía que fueran
envidas por la misma persona, o incluso que estuvieran conectadas las tres cartas.

No hace falta ser un especialista para darse cuenta de otro detalle, esta carta es diferente a la
primera y la segunda en la forma en que fue redactada, esta vez, el cuento forma parte de la
narración principal, lo hacen un todo. Hay algo más que llama mucho la atención, no es una
narración como las dos anteriores, sino un dialogo, todas esas cosas juntas hacen dudar que las
cartas tengan el mismo origen. Todo esto no debería de preocuparle a nadie si todos creyeran
que hay una persona que puede oír a los muertos, pero nadie quiere creer que eso es posible,
bueno, nadie que importe en esta historia, porque los medios vendían la noticia como si
creyeran en lo que decía el escritor y esta última carta fue vendida apelando a la empatía de la
gente, yo mismo escribí la pequeña biografía de Aquiles Mogrard como recuerdo haberla oído
en el canal 5 ,canal 7 y leído en algunos diarios digitales, y vendió muy bien, muchas personas
estaban al tanto de cada cosa que se publicaba acerca de su vida y su muerte que a pesar de
haberse probado fue un suicidio, cientos pedían fuera investigada para probar que no fue un
homicidio o asesinato disfrazado con esta noticia.

Todos querían que se recordara a Aquiles Mogrard como un gran hombre, que lucho hasta el fin
por su familia, aunque ésta no se lo mereciera, sin embargo, si en realidad creen en lo que
predica el “Asesino de Heroes” recordarlo no le hace ningún bien; Nadie quiere pensar en eso,
solo desean darle descanso al sentimiento que oprime su pecho al oír una historia tan triste
como la que parece haber sido la vida de Aquiles Mogrard.
Y diez días luego de su muerte, su tumba ahora está llena de flores, no todas de extraños, pero
eso nunca lo sabrá el difunto.

CAPITULO V
Obsesión con los detalles

Desde la llegada de la primer carta, algunas personas han puesto la vista en las cartas anónimas
que han estado llegando a la “biblioteca de Ceriliano”; bueno, muchos dirán que lo hacen, pero
pocos en realidad han puesto atención.

Uno de ellos fue “Damian Joel Mezala Rodino” , reportero del canal 5 y columnista del diario
“Origen”, quien desde el inicio tuvo la buena fortuna de contar con acceso a la carta original del
escritor y al sobre, cosa que a pocos les llamo la atención o siquiera pensaron en estudiar. La
tecnología hace que todo sea fácil hoy en día, y con excelentes lentes de aumento y cámaras
digitales, en cuestión de minutos pudo tomar fotografías de la primera carta y su “sobre” para
estudiarlas cuando tuviera más tiempo.

Según lo que dijo en su columna semanal, lo que más llamaba la atención de la carta es su
antigüedad, sea quien sea que la envió hace diez años, por lo menos escribió la carta unos ocho
años antes, porqué el papel es muy viejo y el tiempo se hace notar, los bordes están oscuros y
el centro sigue claro, por la poca luz que recibió en todos estos años, además que los dobleces
de las hojas hacen notar que luego de doblarse fue metida al sobre y no se volvió a abrir. El sobre
es aún más llamativo, un sobre común en Ceriliano en los años ’80, lo que hace creer que el
escritor es oriundo de esta ciudad, pero que hace preguntar cómo no levanto sospechas en el
año que fue enviado al correo. Más cuando se sabe que la carta viajo desde otra ciudad.

A Joel le parecía más fascinante la forma en que llego la carta y el tiempo que tuvo que pasar
para que esta encomienda fuera enviada, que la misma historia contada; luego está el asunto
de cómo fue bien recibida por su jefa, la directora del canal 5, “María Josefa”, quien la recibió
sin dudar cuando supo que tenían correo muy “extraño”; yo mismo le pregunte a María Josefa
la razón de abrir ella misma una carta que no tenía remitente, su respuesta fue la misma que le
dio a Joel, “No tendría porque no recibirla, además a diferencia de algunas amenazas o
peticiones tontas que llegan al canal, esta carta se veía interesante, o así me la describió mi
asistente”.

Con la llegada de la segunda carta Joel casi comente un error muy grave, al desacreditar
completamente que la autoría fuera del mismo sujeto; todo en la carta parecía ser una señal de
alerta, un sobre nuevo, una fecha de envió reciente, desde otra ciudad, pero aun así, reciente,
eso sin mencionar que Joel también noto que la primer carta y la segunda habían sido hechas
con máquinas de escribir diferentes, iguales modelos claramente, pero diferentes. Estaba casi
seguro que Josué Sierra estaba malgastando su dinero y no iba a encontrar nada, y cuando no
encontrara nada iba a poder ver su cara de decepción. Si supiera que pudo ver su cara de
decepción aun cuando se equivocó a lo mejor se sentiría mejor, pero esto lo hizo pensar más a
fondo, comenzó a buscar cosas que conectaran a las dos familias involucradas en los dos
incidentes; altercados entre ellas o alguna persona que supiera de estos incidentes, inclusive si
solo lo supiera como chisme.

La tercera carta se puede decir fue una decepción, el papel era el mismo que se usó en la
primera y segunda, pero esta vez todo era distinto, el sobre, la narración, la maquina usada, el
lugar de envió, de nuevo parecía falsa, pero vendía bien la noticia, y muy pronto fue
autentificada la historia como con las demás. Así que ¿porque parecía que cada una de las cartas
fuera escrita y enviada por una persona diferente?, todo parecía converger a que el supuesto
asesino de héroes no era una persona, sino varias, que sabían muy bien lo que estaban haciendo.
Joel no perdió tiempo en publicar esto en su columna del periódico y en una entrevista de uno
de sus compañeros del canal 5 lo menciono lo mejor que pudo, muy pronto todos comenzaron
a poner más atención a los pequeños detalles.

Y fue un pequeño detalle el que llevo a un niño a toparse con la única persona en el mundo que
viajaba con una máquina de escribir, a lo mejor nadie se enteró al instante de este
acontecimiento que sucedía mientras todos investigaban ¿Quién envió la tercera carta? , pero
que este niño escuchara por televisión como Joel Mezala hablaba lo llevo a seguir a cierto
huésped que se hospedaba en la decimoctava habitación del hotel de sus padres en la carretera.
El hotel solía recibir personas por varios días, al ser un sitio alejado de la ciudad y sin ningún sitio
turístico cercano, podría decirse que sobrevivía gracias a inquilinos frecuentes, gente que
descansaba después de conducir horas y personas que llegaban para alejarse de todo unos días,
no era para nada ostentoso, pero era lo suficientemente barato para considerar no dormir en
tu auto.

Fue ahí donde un 28 de abril del presente año un visitante que pago por una semana de
hospedaje y el hijo de los dueños del hotel observo como entre las pocas cosas del nuevo
inquilino, llevaba una cosa que el niño de 11 años nunca había visto en persona, una máquina
de escribir, en otras épocas no hubiera causado tanta conmoción en un niño ver una máquina
de escribir, pero ahora, ni siquiera sabía diferenciar el modelo y ya tenía un sospechoso.
Obviamente nadie le cree a un niño, a eso hay que agregarle que aunque mucha gente se sumó
a la búsqueda del autor de las cartas, en igual manera había gente que no le interesaba para
nada, en este caso los padres del chico no tenían ni el más mínimo intereses en esta noticia.

Luego que el tiempo pasara, un día cualquiera cuando vio al inquilino salir como tantas otras
veces, tuvo el valor para intentar entrar a la habitación, tomo una copia de la llave del cuarto de
la administración y entro al apartamento, posiblemente estaba muy nervioso, porque a pesar
de que él mismo tuvo la oportunidad de fotografiarlo todo con la cámara de su celular, apenas
y tomo una foto con zoom de la máquina de escribir.

La “royal 440 typewriter” fue una máquina de escribir común en los años 60, la compañía Royal
con sede en New York era conocida por inventar el “Magic Margin” que en su momento fue un
gran avance, sin embargo no había nada especial en este modelo, ni era un modelo compacto
como muchos otros existentes, además que no es para nada liviano, sin embargo que sea
justamente este modelo hace que surjan preguntas, es otro detalle a tomar en cuenta. Y con la
fotografía tomada el muchacho pudo comparar la maquina con algunas imágenes de internet,
la satisfacción que debió sentir al ver que se trataba del mismo modelo del que hablaban en las
noticias lo debió haber alentado a volver a entrar.

Un día después ya conocía el momento exacto en que el inquilino saldría, siempre lo hacía a las
mismas horas, esta vez no tuvo miedo a entrar y tomó una mejor fotografía de la máquina de
escribir, pero no se detuvo en eso, al lado de la maquina había un basurero, el cual estaba lleno
de hojas de papel bastante viejo, todas y cada una de ellas con la misma cosa escrita, un cuento,
por lo que no le importo tomar una.

-Cuento del cesto de la basura-


-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Los días largos

Ciertamente no sé cómo explicarlo a quien vive en la monotonía, y es que siempre que cuento
esta interesante sensación lo único que les cruza por la mente es decirme que la cusa debe ser
lo aburrido de mi día.

Soy simplemente una persona que ciertos días de ciertas semanas de ciertos meses, todo se
mueve más lento o bien yo voy más rápido, porque todo parece durar más de lo que debería,
nadie en realidad cree algo de lo que digo, con lo que al final me acostumbre a parecer
“normal” esos días.

Me hice de una bonita y amplia colección de relojes en los años que intente documentar sin
éxito, como el tiempo pareciera ir más lento esos días, nunca pude probar otra cosa que no
fuera mi total histeria y alteración.

Pero aprendí a aprovechar este tiempo extra que no puedo controlar y que al parecer esta en
mi mente, esos días largos, siempre llevo algo que leer conmigo, aprendí a ajustar un reloj para
ir 1.5293 veces más rápido de lo normal, con lo cual mis días duran 36.58 horas más, tiempo
que uso para un sinfín de cosas aburridas, como ver películas a gran velocidad o leer rápido o
bien terminar mis tareas pendientes, cualquier cosa bajo el asombro de más de una persona.

No soporto a la gente esos días, lentos, torpes, justo todo lo que yo soy cualquier otro día, los
días largos son inclusive más largos “solo”, pero son un gran castigo con cualquier compañía.

Si algo puedo decir es que el tiempo me enseñó a amar estos días, que aunque no controlo,
los disfruto desde el sonar de la alarma por la mañana.

Y mis días seguirían siendo los mismos de siempre si no hubiera aparecido esa maldita
persona, que me hace sentir esa lentitud en el habla, esa torpeza, que veo en los demás pero
reflejada en mí cualquier día; Los nervios me ganan, las palabras no salen de mi boca, los
pensamientos no se ordenan en su presencia y esa maldita risa…
A lo mejor no tengo ninguna idea de cómo evitar que mi cuerpo se comporte así en su
presencia, pero hoy es mi día, hoy la alarma sonó tan lentamente que se con exactitud lo que
me espera.

Todos hablaban entre ellos tan lento, y allí junto a un amigo se encuentra esta estúpida
persona, no quiero ni pronunciar su nombre, pero hoy estoy en todas mis condiciones para no
hacer el ridículo ante cualquier cosa que diga.

-Hola, como andas.

-….

Co- como hizo para hablar tan rápido- Responde maldita sea-

-Bien gracias por preguntar.

-Ja, ja, ja,ja ….

Siempre con esa sonrisa y risa.

Como es posible que mi conversación contigo sea tan fluida, todo aquello se agiliza en mi
mundo cuando me hablas, de ser un día normal no podría seguirte el paso.

-Siempre he querido preguntarte algo

- ¿Qué cosa?-

-El motivo de que lleves un reloj que va tan rápido en tu mano izquierda.

- Es una tontería -

- Pues quisiera oírla.

-Bueno hoy tengo tiempo.-

O eso creía...

Nunca he tenido un día tan corto, nunca nadie me hizo sentir esto, nunca nadie considero
siquiera creerme, este sentimiento, esta extraña persona que me vuelve alguien normal,
dependiente…

NO

Esto no es para mí.

Sería hermoso seguir contigo pero eso jamás volverá a pasar,

Y no porque no lo disfrutara tanto como para desear que no se acabase, sino porque cada día
normal sería una tortura que no quiero soportar, lo sé bien, lo he sentido cada día antes de
este.

No te culpo, me enseñaste la belleza de la compañía ocasional, pero me alejo por mi bien y no


por el tuyo, perdón por ser tan egoísta.
El miedo que sentía que el inquilino notara que faltaban hojas en el cesto de la basura era muy
grande, por lo que no mencionó nada de lo sucedido a sus padres ni a nadie, hasta que unos
días más tarde esta carta y la fotografía que tomo le serían las pruebas necesarias para que todo
el mundo le prestara atención.

El veinte de mayo “Juan Carlos Barraquín Santos” estaba explicándoles a algunos detectives ¿de
dónde saco ese cuento y esa fotografía?, mientras a sus padres les explicaban los pormenores
de la recompensa que había por cualquier información que llevara a la detención del escritor de
las cartas anónimas.

Muchos dicen que fue una lástima que el niño no informara antes de sus descubrimientos, la
verdad es que fue una lástima que solo cuando hay dinero de por medio se le prestara la
atención a lo que te cuenta tu hijo. Los padres del chicho venían escuchando lo que su hijo decía
desde mucho tiempo antes que el inquilino se fuera, pero simplemente no les interesaba en lo
absoluto lo que su hijo decía, luego al largarse les intereso menos lo que su hijo les contase
acerca de su viejo cliente, no fue hasta que televisión anuncio que Josué Sierra había ofrecido
una buena suma de dinero de recompensa por información que llevara al paradero del “escritor
anónimo” que los padres le dieron la atención que tanto había estado esperando el chico.

Aunque no pude hablar mucho con los padres, debo decir que me fue suficiente para notar que
tipo de personas eran, no me extrañaría no le dieran nada del dinero al chico por su
descubrimiento, que sus apellidos sean mencionados en el nombre de su hijo es suficiente
reconocimiento para tales personas. Y aunque la colaboración de Juan Carlos en la historia acaba
en este momento muchos acontecimientos pasaron mientras su historia transcurría,
acontecimientos que deben ser contados, pero quise hacer un paréntesis para llamar la atención
al chico que la merecía.
CAPITULO VI

La extraña manera en la que encontré lucidez al soñar

Antes de seguir quisiera contarles la razón de haber aceptado esta investigación, como ya dije
antes, en parte fue porque Josué es un gran amigo mío, pero eso no es todo.

Hace ya más de un año que murió mi abuela y a diferencia de mucha gente que despide a sus
abuelos y luego simplemente lo supera, mi vida giraba en torno a ella, por lo que para mí significo
un cambio total en lo que hacía. Era la primera persona que veía por las mañanas y la última que
veía por las noches, pero no puedo hacer nada ya, solo avanzar y recordar las cosas que aprendí
de ella.

No soy del tipo sentimental, por lo cual derrame pocas lágrimas en su funeral, fueron más bien
los meses siguientes los cuales no podía dejar de pensar en ella, aunque jamás se lo mencione a
nadie, ni siquiera a mi familia, tampoco soy del tipo que cuenta cómo se siente, aunque creo
que todos en la familia tenemos un poco de eso.

Unas semanas después inconscientemente deje de pensar en eso, pero mi subconsciente no lo


quiso olvidar, no sé muy bien cuando, pero comencé a soñar con ella casi todas las noches, los
sueños no eran del tipo emotivo, tampoco eran tristes, simplemente eran situaciones cotidianas
donde lo único que cambiaba de mi día a día era que mi abuela estaba viva, en el sueño siempre
intentaba explicar cómo es que seguía viva, que a lo mejor solo enfermo y se recuperó, que
nunca estuvo tan grave, siempre encontraba una excusa y siempre terminaba creyéndolo hasta
el despertar.

No necesitaba que alguien más me dijera que soñar siempre con un muerto no es algo que
refleje mucha salud mental, pero que podía hacer al respecto, yo no mando en mis sueños, pero
podía intentarlo y los días siguientes intente tener presente siempre que mi abuela estaba
muerta, así al soñar lo tomaría en cuenta. Muy pronto logre recordar en un sueño esas palabras,
pero mi mente luchaba intentado decirme lo contrario, sin embargo yo era más consiente ahora
y al recordar cosas como su ataúd y su entierro fue para mí solo cuestión de varios intentos para
darme cuenta que estaba soñando.

Las noches siguieron pasando y aunque cada vez era menos recurrente que soñara con mi
abuela, ahora parecía que era más fácil para mí darme cuenta de las mentiras de mi
subconsciente, mis sueños se volvieron lucidos, era consiente para intentar otras cosas en mi
sueño, aunque pocas veces lo intentaba, simplemente seguía cambiando de sueño hasta
despertar.

El tiempo siguió su curso y no me di cuenta pero paso un mes sin que soñara con mi abuela, de
repente un día solo lo note, pase tanto tiempo intentando olvidarlo y cuando por fin lo logre no
sabía cómo sentirme al respecto, solamente reflexione sobre el hecho y algo dentro de mi
suspiro.

No volví a soñar con ella hasta hace unas semanas, esta vez al verla lo único que hice fue ir a
abrazarla, creo que derrame algunas lágrimas, ella nunca dice nada, yo no dije nada pero sabía
que estaba soñando, esta vez ni siquiera me puse a pensar en una razón lógica para lo que estaba
sucediendo, solamente la abrace un rato consiente que estaba soñando, luego no recuerdo nada
más, creo que así es mejor.

Ahora se ha transformado en el recuerdo que hace lucidos mis sueños.

Mi vida necesitaba un cambio, y la encomienda de Josué parecía una manera de mantenerme


ocupado sin pensar en eso, aunque me engañaba, porqué cada personaje en esta historia me
hacía pensar en la muerte. Y como no hacerlo si la propia premisa de esta historia es dañar a
aquellos que recordamos, solo por recordar las buenas cosas que hicieron. ¿Qué clase de castigo
es ese?; de solo pensarlo me mantenía recordando y tratando de olvidar, no soy tan escéptico
como creí que sería.
CAPITULO VII
Un poco de intervención Policial

Aquiles Mogrard nunca se presentó como el protagonista de esta historia, pero fue la carta a
una semana de su muerte lo que extendió como pólvora aquello que Josué Sierra quería que
“fuera conocido por todos”. Como es que de pronto alguien que ya a nadie le importa, ocupa el
primer puesto de todos los medios; Quizás poniendo a tención a las anteriores víctimas, vemos
que hay algo especial en Aquiles Mogrard. Y es que a diferencia de aquellas grandes figuras
históricas, Aquiles era “una persona más”, un pobre desvalido, que paso de tener una familia y
un buena posición Socio-económica, a ser un pobre tipo que solamente inspiraba lastima en los
demás. A las personas de hoy, les encanta eso, sentir empatía por un viejo hombre que no pudo
defenderse por sí mismo.

Para las redes sociales, una noticia como esta, simplemente se extendió como una enfermedad,
no fue necesario mucho para que hubiera más gente pidiendo se investigara de nuevo, claro que
asesinatos seguían sucediendo día a día, pero a nadie le interesaba una vida de la cual no
conocían su historia.

Fue por esa razón que la policía se involucró en la investigación, donde le asignaron la tarea a
un Detective llamado Carlos Varillas, quien tenía un buen grupo de trabajo, sólido y con ideas
clara acerca de lo que se trataba esta petición “especial”. Tuve la oportunidad de hablar muchas
veces con Carlos, no todas las veces fue agradable su compañía, pero recuerdo lo que me dijo
acerca de su asignación al caso la primera vez que lo vi:

“Nunca me gusto que me ordenara que hacer a mí y a mi equipo cuando los intereses son
del sector privado, pero este caso en particular se veía interesante, como detective me
parece un caso menor, una muerte de un pobre viejo olvidado por todos, sin familia, sin
amigos, que perdió la cordura.

Hubiera muerto de todos modos, acelerar su llegada al más allá parece haber sido
estúpido.

Inmediatamente puse a mi equipo a investigar cada parte del incidente, con especial
atención en las personas que lo rodeaban, ya muchas pruebas habían sido tomadas, solo
sería de recabar información.

Odio decir esto pero…

A nadie en la Central le importa una mierda la muerte del viejo, cuando me asignaron a mí
y a mi equipo no buscaban que se hiciera justica, buscan un trofeo…

Buscan la gloria que sería desenmascaras al Asesino de Héroes y demostrar la eficacia del
sector justicia. “

Detective Carlos Esteban Barillas Cap

Al detective se le presentaba la oportunidad, no de resolver un asesinato u homicidio, porque


ya había sido probado que se trató de un suicidio no solo por un doctor, sino por las múltiples
declaraciones que se tomaron de las enfermeras, por la evidencia recabada, porque ese día
nadie llego a visitar a Aquiles Mogrard, quien llevaba mucho tiempo sin ser visitado; Al detective
se le presentaba la oportunidad de colaborar recabando información que pudiera llevarlo a
descubrir al escritor de las cartas, él lo entendió bien, su superior lo dejo claro sin decir mayores
palabras, lo de Aquiles solo era una buena forma de mantener a la gente feliz y de llamar buena
publicidad para la policía, así que no veía problema en ello.

Presentes en el equipo estaban sus compañeros, la segunda al mando Marta Karina Monzón
Sosa, el oficial Fausto Emiliano Ramírez Palermo y por último la detective María Helena
Margarita Martínez Velásquez, era un equipo grande, que debía de manejar mucha información
debido a que no se tenían muchos datos útiles para hacer algún avance real en el caso, la
detective María Helena siempre tuvo una memoria de lo más prolija, de cierta forma eso la llevo
a ser parte de este equipo. Por otro lado, fausto quizás no posea las cualidades de María, pero
siempre estaba listo y enfocado en la resolución de los problemas, metódico y ordenado, Fausto
siempre fue de prestar atención y aprender lento pero seguro, esto llevaba a algunos conflictos
entre él y María, quien no podía dejar de apurarlo o retarlo cuando se presentaba la
oportunidad. Por Ultimo estaba Marta, quizás era la que tenía más experiencia después de
Carlos, Marta no es una mujer de muchos intereses, si no se casó nunca quizás fue porque su
carácter de cierta forma terminaba alejando a aquellos que se acercaban a ella. Hizo de su
trabajo su vida. Al solo haber sido criada por su padre, se puede decir que tanto su carácter
como su pasión por el trabajo, se deben a él.

El grupo centro la atención en la forma en que la carta fue escrita, porque según parecía, el
escritor y la victima tuvieron un encuentro, cosa que fue desmentida por las enfermeras del asilo
donde se encontraba Aquiles, nadie lo había visitado en meses, su última visita fue de su
contador, quien la verdad no parecía ser un sospechoso y fue rápidamente desechado como tal
luego de presentar su declaración, ninguna enfermera en particular parecía llevarse ni bien ni
mal con Aquiles, en algo estaba en lo correcto el escritor, Aquiles ya no era la persona sociable
que fue de joven, al final de su vida era muy solitario y encerrado en sí mismo.

Por más que el equipo intentaba encontrar razones, conexiones o lo que sea para tener
sospechosos, nunca tenían razones concretas para añadir a alguien a su lista, a esto hay que
sumarle que ellos ya tenían en su conocimiento que cada carta había sido escrita con una
máquina de escribir distinta, entonces surgían dudas sobre la autoría “única” de las tres cartas,
luego una idea parecía surgir de la mente de Marta “la máquina de escribir con que fueron
tecleadas estos cuentos, una royal 440, es una máquina de escribir muy común saben, cualquiera
podría haber sido capaz de encontrar una y hacer pasar una carta recientemente escrita, como
una de las anteriores envidas, ya hecho esto, aprovecharse de la publicidad del asesino de héroes
para salir libre de culpas”. El detective Carlos se mantenía abierto a cualquier posibilidad, pero
lo que estaba insinuando Marta era algo interesante, ¿qué pasaría si en verdad fue un
homicidio? Y es que era muy raro que tantas cosas cambiaran de carta en carta, Marta había
abierto las posibilidades con esta idea, porque no solamente debían pensar en “un escritor”
sino en varios, y bajo esa premisa siguieron investigando. Pero el tiempo pasaba y sin otra pista,
no había mucho por hacer.

Semana y media después Estaba llegando la Cuarta carta a la biblioteca, esta vez fue
monitoreada, pero la carta había sido encomendada a enviarse hace mucho tiempo, tal como
fue la primera. Como de costumbre, parece que el escritor sabe cómo tomar sus precauciones
ya que no se encontró ninguna huella, ninguna forma de saber quién la envio, al igual que las
primeras tres, nuevamente toda estaba hecha en una máquina de escribir Royal 440, no
sorprendió a nadie lo cuidadoso que fue el escritor para no dejar huellas que lo delataran, lo
sorprendente era de quien se escribía en la carta, La Familia Sierra, para ser más precisos, la
familia del más grande benefactor de las investigaciones sobre este caso,” Josué Gael Sierra” y
de nuevo todos los reflectores apuntaban a este hombre, pero esta vez él es la víctima.

Las acusaciones nuevamente eran de homicidio, el perpetrador de tal acto, nada más que el
Gran Coronel Sierra, tatarabuelo de Josué Sierra, fundador de la ciudad y héroe del pueblo de
los amanales.

En las ocasiones anteriores, no había familia directa que pudiera brindar ayuda sobre la
investigación, en esta ocasión, estaba Josué Sierra, el detective Carlos quería reunirse con este
sujeto tan curioso, ¿un filántropo acaso?, no creo que nadie piense eso, pero al detective Carlos
Esteban le interesaba saber que pensaba de la nueva carta.

Cuarta
Cuarta carta

Cada que una voz se calla otra toma su lugar, pero mientras esto pasa, cada vez tengo más
tiempo de lucidez, con mi primer escrito fueron dos días, con mi segundo escrito fueron
cuatro, luego diez y pareciera que mi condición mejora; sólo debo ser diligente y no hacer lo
que ellos quieren, sino lo que ellos merecen, yo tengo el poder en mis manos, ellos no son más
que simples voces en mi cabeza, ni siquiera distingo algunos de mis pensamientos, por lo que
no estoy seguro de que ese conteo de días sea correcto.

Ahora sé cómo actuar cuando las voces quieren ser oídas, ya no me importa sus quejidos o sus
gritos constantes, sólo me siento, espero y escucho, porque yo tengo el control, y en mis
manos está que su mensaje sea enviado.

Por primera vez me fue fácil oír quien me hablaba, el “Comandante Tomas Sierra de los
Mártires” dijo llamarse, muchas cosas recuerdo sobre ese nombre, pero ninguna parecía
poderse probar fuera verdad, y no quiero que algo que escribiera quede manchado por no
poder autenticar mi siguiente escrito, ni deseo que crean en mi palabra, sino en pruebas
verificables, por lo cual no escribiré nada de lo que dijo los primeros días.

El día quinto logro recordar algo que para él ya era un asunto sin importancia.

“De las muchas personas que pise para hacer grande mi casa, ya no recordaba un viejo deudor
que me prometió mucho y luego quiso hacerse atrás, Matías Cobrero Obregón, alguna vez
amigo de copas, dueño era de muchas hectáreas de tierra, prometió que me pagaría o las
tierras serian mías, no tenía manera de conseguir esa cantidad de dinero, por lo cual las tierras
ya eran mi propiedad para el jueves 27 de junio de 1812, sin embargo en una jugada sucia, de
una persona sin honor, pidió prestado para pagarme, alguien que no tiene honor no merecía
vivir, rechace su dinero y el lunes 1 de julio de 1812 al anochecer lo fusile en la colina detrás
de mí huerto, ahí está enterrado, junto a un cedro y su dinero”

No necesite de mucha investigación para darme cuenta de quién era este hombre ni de donde
estaba la localización del lugar que mencionaba, mas no encuentro nada de Matías Cobrero
Obregón ni de su familia, la historia lo olvido, la justicia jamás llego para él, y si el karma
existe, olvido actuar en la vida de su asesino.

Habían muchas cosas que llamaban la atención en la nueva carta, pero en esencia volvió a ser
como la vez primera, con un sobre viejo, un cuento, una historia y su personaje principal,
narrado totalmente como debía de ser, con la estructura que debía de tener, tipeado* con la
máquina de escribir correcta. Y no se referían solamente al modeló sino que parece ser la
misma máquina de escribir que hizo la primer carta.

Mucha gente por un tiempo pensó en la posibilidad que fueran escritores distintos, las tres
diferentes máquinas de escribir fueron su primer indicio, los diferentes lugares de envió fueron
el siguiente, pero el papel donde fueron tipeadas* todas parecía conectarlas más allá de dudas
razonables en ese momento, pero ahora que podían diferenciar dos cartas del resto, todo
parecía converger en múltiples escritores.

El responsable de la primera y cuarta carta lo hizo hace ya mucho tiempo, a lo mejor sea
imposible dar con él, pero el escritor de la tercera fue más descuidado, brindó información que
podría ser fundamental para dar con su paradero, casi todos los interesados investigaron e
investigan al respecto, pero solo uno fue capaz de ofrecer una recompensa monetaria por
información, Josué Sierra, pero solo luego de que esta carta se hiciera pública.

*Escribir un texto a máquina o en computadora.

Desde fuera parecía justicia poética, que quien ayudo a demostrar la verdadera historia de dos
familias, ahora le tocaba afrontar la propia. Quien sino el mismo Josué acompaño a los peritos
forenses al lugar que se especificaba y se quedó a observar cómo desenterraban lo que parecía
ser la prueba irrefutable del crimen cometido por su ancestro.

Nadie puede decir exactamente qué sintió al enterarse de esto, pudiera ser pena o ira, eso
explicaría la recompensa que luego de este incidente fue anunciada. Yo en lo personal creo
que fue curiosidad, porque fuera quien fuera el escritor, parecía saber más de historia de lo
que Josué alguna vez leyó.

Pero mientras todos se ocupaban de los hechos históricos, un par de personas leían el cuento
que esta vez adjuntaban, quizás no era tan bello, ni importante como la historia, pero es parte
de la carta, siempre lo ha sido. Una de estas personas fue María, quien comenzó a creer que
nadie había profundizado suficiente en los cuentos, solo los hacían a un lado y olvidaban por
completo que eran parte de la carta. María era más cautelosa y leyó con atención.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
-Noche de Lunes-
-Como de costumbre Sofía y yo cuidamos al Niño de Amanda, No recuerdo desde
cuando lo conozco que me dice tío, si claro, no sé si llegaría a la mitad del mes sin
nuestra ayuda. Aunque Sofía disfruta mucho cuidarlo. Te debo de dejar debo ir a
calmar al niño, gracias por llamar, Adiós.

-No crees que debes dormir.

>Tío me cuentas Otra historia

- Claro pero en vez de lo normal voy a contarte una que creo que tal vez nunca
escuchaste desde esta perspectiva.

-Quizás alguna vez escuches de nuevo esto hijo, porque es una verdad muy aceptada
que la historia la escriben los vencedores, por eso a veces parece que siempre ganan los
buenos en los cuentos, pero tales distinciones sólo existen en los mismos.

>Entonces me contaras el cuento.

-Te lo contare:

-Había una vez un Creador que se sentía solo, más sin embargo su soledad era más
debido a su elección que a su propia condición.

Sin embargo cuentan que aquella soledad le inicio a molestar, no me imagino cuanto
tiempo debió pasar para que tal cosa pasara, y con todos sus conocimientos y
artilugios decidió emprender la tarea de hacer seres gratos de su compañía, que él
consideraba que no cualquiera podría estar cerca de él.

Así que los doto de grandes conocimientos, enorme curiosidad y poder, Sin embargo el
creador nunca aprendió a compartir con otros seres y aunque ellos lo amaban por
haberlos creado se entendían mejor con sus pares, muy pronto se sintió otra vez solo
aunque rodeado de estos seres, la naturales del Creador parecía alejar a todos.

Entonces decidió que crearía otros seres, pero esta vez no quería que lo excluyeran, así
que estas creaciones no las doto de gran poder ni los doto de gran conocimiento
simplemente les dio curiosidad.

Y justamente esta vez los seres al conocerlo no lo dejaron solo en ningún momento. Y
como no hacerlo, eran débiles, frágiles y a causa de su falta de conocimiento peleaban
entre ellos constantemente, se juntaban los que lograban congeniar y daban nombre al
creador mientras otros hacían lo mismo, Parecía no importar la naturaleza tan sola del
Creador que cada vez que se cansaba de su compañía los dejaba solos y al regresar con
ellos siempre estaban ahí para él.

Sin embargo no importa cuánto intentes arreglar algo, si no cambias el verdadero


problema muy pronto todo volverá a fallar de nuevo. Y así el creador se cansó de la
compañía de los seres muy pronto, sin su guía las pobres criaturas peleaban, morían
pero aprendían y se adaptaban.

Sus anteriores creaciones tan curiosas y nobles empezaron a ayudar y otras solamente
a observar, muy pronto aquella observación paso a ser preguntas.
“Porque el creador no dota a estos seres con mejores herramientas o mayor
conocimiento”

Y aquello se convirtió en un grito de igualdad.

Pero al creador no le gustó nada que aquellos menores a él lo cuestionaran, quienes


eran ellos para venir a contradecirlo, si ellos mismos no cumplieron el único propósito
por lo que fueron creados y al exigirles callarse, quedo claro que era imposible que
aceptara haber cometido algún error, y tras una lucha contra aquellos que buscaban
igualdad o algo de justicia los sentencio a perder su libertad.

Odiados por los seres que querían ayudar y por sus pares que no pensaban igual a ellos,
lo único que lamentan es no poder contar su historia.

-Te pareció conocida.

>No tío.

-Bueno, es que la iglesia la cuenta un tanto diferente.- Buenas noches y que descanses.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Esta vez, todos sabían que la carta llego, el correo supo de inmediato de que se trataba y
prácticamente solo las enviaron a sus destinatarios porque así debía ser hecho. Una cosa
resalto de inmediato y era el sobre, viejo como el primero, fue tecleada con la misma máquina
de escribir que la primera, eso ya verificaba su veracidad, pero la carta era tan diferente que lo
más probable es que se trató de otro escritor, luego está la tercera carta, que aunque muy
parecida a ésta, fue escrita con otra máquina de escribir, y enviada con un sobre distinto. Si los
cuentos eran una clave, María solo podía buscar coincidencias entre el primero y el cuarto
cuento, cosa que ya hacía el bibliotecario de Ceriliano comparando los cuentos con literatura
conocida y desconocida para hallar la fuente, pero María no sabía nada de esto aún.

Tuve tiempo de hablar con María varias veces, era la más sociable de su equipo y la razón de
que estuviera tan bien informado de los movimientos hechos por el mismo, fue así como me
entere de la investigación que María llevo a cabo con los cuentos y solo tuve que mencionarle
al bibliotecario para que naciera en ella visitarlo.

Tres cosas importantes sucedieron de la investigación que luego llevarían a cabo maría y el
bibliotecario, pero aunque lo que descubrieron no era verdad, tampoco era mentira.
CAPITULO VIII
-El sospechoso de siempre-

En el pequeño pueblo de los Amanales estaban orgullosos de su historia, los viejos tiempos
cuando todo tenía que ver con su pueblo, cuna de la gran ciudad de Ceriliano, los Amanales fue
un pueblo muy influyente en otras épocas, de no ser por su geografía tan apartada e inclinada
nunca hubiera nacido Ceriliano.

Es en este lugar donde la familia Sierra decidió asentarse y donde su nombre era recordado en
la estatua de Coronel Sierra, todos conocen la historia y muchos libros la cuentan, pero nadie
conocía la historia mejor que Josué Sierra, único hijo de Gael Sierra, último heredero directo de
la familia, quien ahora que ya no estaba su padre se encargaba diligentemente de los negocios
familiares, desde la antigua casa en el pueblo, la cual ahora era en parte museo y finca.

Bajo el control de Josué Sierra las compañías de la familia gozaban de buen prestigio, no había
quien pudiera hablar cosas malas de este hombre, en parte porque poco se sabía de la vida
personal de Josué Sierra. Mucha gente con dinero tiende a ser escandalosa y eso siempre les
causa problemas personales, Josué no era de esos. Otros olvidan a su familia por trabajo, Josué
nunca se casó. Siempre fue una persona muy apartada, incluso con sus compañeros de trabajo
y socios. En parte se debía a la forma de ser de su padre, de lo distante que fue con su madre
mientras estuvo viva y a los pocos amigos que compartieron sus gustos mientras crecía.

La historia siempre llamo la atención de Josué, a lo mejor fue por estar siempre rodeado de las
grandes hazañas acerca de su familia y lo importante que fue su tatarabuelo para su pueblo.
Algo en un hecho real siempre supo levantar su interés más que la literatura de ficción, misterio,
aventura o romance.

Cuando el canal 5 público la noticia de San baurelio, pocos recordaban exactamente quién era,
más allá del nombré y que se trataba de un gran personaje. Pero Josué sabía exactamente quien
fue y los hechos más sobresalientes de su vida, por lo que enterarse de una difamación tan
grande hoy en día, sin ninguna prueba más que una carta, ¡era un chiste!

No voy a entrar en tanto detalle pero cuando se le presentó la oportunidad de probar la falsedad
de lo que decía "canal 5" acepto sin dudarlo, fue un gran golpe para él darse cuenta que estaba
equivocado, luego volverse a equivocar fue motivo suficiente para interesarse en quienes fueran
los que enviaban estas cartas, ¿qué tanta verdad había en los hechos que contaban los libros de
historia?

Su repentino interés hizo que muchos sospecharan de él, hay quienes siguen sospechando
inclusive luego de la llegada de la cuarta carta con los datos de su familiar. Igualmente a Josué
nunca le importó, tenía cosas más importantes que atender, como probar sin lugar a dudas que
los cadáveres exhumados nunca antes habían sido tocados, que las historias de las que hablaban
en las cartas nunca antes fueron contadas y averiguar de qué se trataba todo este juego.

Descubrir al escritor o escritores parecía ser imposible hasta el anuncio de la recompensa, luego
se tornó en un alboroto de pistas falsas y posibles teorías, pero con un poco de paciencia y
suerte sucedido que el día diecinueve de mayo del presente año, los padres de “Juan Carlos
Barraquín Santos” llamaron a la línea habilitada, y su información hubiera sido archivada sino
hubieran indicado que contaban con un cuento inédito que podría pertenecer a una carta futura.
De inmediato tomaron relevancia dentro de la investigación, aunque aún no se quería hacer
ningún anuncio, por si llegaba a resultar falso.

Cuando el equipo de investigación decidió avisarle a Josué, algunos Medio de comunicación ya


habían filtrado la noticia, pero según lo que ellos sabían Josué Sierra ya sabía de esta noticia
desde hace unos días, el control de una primicia movía a todos a creer en chismes y a Josué lo
llevo a creer que tenía al escritor acorralado, todos creían lo que querían creer.

El cuarto de habitación daba muchas pistas, una de las más importantes era la cantidad de hojas
de papel en la basura, cerca de 53 hojas, entre nuevas y de la misma edad que las usadas para
escribir los cuentos, parecía ser que practicaba para no equivocarse, sin embargo al leer el
cuento con detalle en algunas de ellas habían discrepancias, parecía ser que no estuvo
conforme con el final y decidió cambiarlo varias veces. Todo en este lugar apuntaba a que habían
encontrado al escritor, pero no de la primer y cuarta carta, sino de la tercera, Josué lo sabía y lo
desalentaba un poco, porque quizás este hombre no le daría ninguna respuesta, pero era la
única pista real que tenía para avanzar, así que debía seguir adelante.

Mientras tanto la prensa y ahora la policía creían que se les escondían detalles importantes y
aunque tenían razón, sus suposiciones estaban erradas, porque creían que Josué Sierra era
quien los quería detener, a esto se sumó que algunas personas comenzaron un grupo que quería
“parar la difamación de las figuras históricas”, ellos también creían que todo era culpa de Josué
Sierra, su principal razón para pensar así era que había financiado cada investigación hasta
ahora. Las diferentes suposiciones tenían como conclusión que todo era culpa de ese hombre
que no tenía ninguna razón para apoyar tan fervientemente esta investigación.

Josué se equivocó en no darles la importancia merecida a estas personas, porque creía que la
cuarta carta lo exentaba de culpas, cuando en realidad hizo que más personas creyeran que si
alguien tenía información acerca de sus ancestros era el único familiar cercano que quedaba. A
decir verdad yo mismo comencé a creer que Josué estaba involucrado de alguna manera, aunque
nunca se lo mencione, solo seguí observando como intentaba seguir con su día a día mientras
invertía dinero en cazar a su escritor, cosa que parecía cuestión de tiempo luego de hacer
públicos los hallazgos en la habitación de la casa de huéspedes.

Los primeros en enterarse eran los detectives a cargo de Carlos, no les pareció correcto que
tardarán tres días en avisarles y más si sus suposiciones eran que el escritor que buscaban
posiblemente solo envío la tercera carta y que la disfrazó aprovechándose del escándalo. Ahora
que encontrar razones lógicas para tales suposiciones era un reto, luego lidiar con informar a
los medios de comunicación sobre sus suposiciones y corregir las que los mismos medios habían
supuesto.

El 5 de junio con ayuda de un colaborador se da con el paradero del escritor de la tercera carta,
decidió entregarse cuando en televisión vio que todos dudaban de que la tercera carta tuviera
relación real con las demás, o por lo menos eso dijo porque la verdad era que para ese momento
ya lo habían identificado como el inquilino en la habitación. El hombre detrás de la carta era
Caleb Rodrigo Estor Bran, un hombre sin nada especial que de pronto le debía explicaciones a
todos. Josué solo quería respuestas, pero sabía que debía esperar porque primero debía
contestar a la preguntas que tenía la policía, además que entrego la máquina de escribir que
usaba, cuarenta hojas muy antiguas y parte de un libro escrito por Aquiles Mogrard para ser
estudiados y verificar la historia que estaba por contar.
Debió ser porqué nadie lo mencionaba pero ¡sí! había gente que creía en que el escritor hablaba
con los muertos, comenzó siendo un puñado de personas que les impresionó la historia, pero
luego de cuatro hechos verificados, se convirtió en una multitud silenciosa que en parte también
fue culpa de los medios de comunicación. Esta multitud silenciosa solo esperaba que Caleb
pudiera decir la verdad, sea cual sea, para poder dejar de creer en una fantasía.

Los detectives Carlos y Marta llegaron a casa de un tercero, donde los esperaba Caleb, no había
razón para detenerle, por lo menos no en ese momento. Los detectives tenían una serie de
preguntas preparadas, según me conto María, estaban al tanto que Josué Sierra ya le estaba
ofreciendo una cantidad de dinero por contestarle algunas cosas personalmente y Caleb aún no
decía que no, por lo que debían pensar si era un impulso monetario el que lo empujó a hacer
todo este circo.

El detective Carlos sabía muy bien quien era Caleb Rodrigo, sabía qué relación tenía con Aquiles
Mogrard, sabía que él no había enviado las primeras cartas y creía que a lo mejor Caleb
solamente aprovecho el momento. Con presunciones el detective comenzó con preguntas para
corroborar los datos que su equipo había investigado acerca de su pasado. Luego de eso vino
la pregunta que le dio nombre y apellido al asesino de héroes.

-Y dígame señor Estor Bran <Dijo el detective Carlos, impaciente por saber las razones que
llevaron a este hombre a enviar las cartas> ¿cuándo fue la última vez que hablo con el fallecido
Aquiles Mogrard? - Josué esperaba una respuesta corta o una fecha pero no la siguiente
contestación.

"No recuerdo la fecha exacta pero si recuerdo muy bien mis palabras y las de Aquiles, por lo
que si desea le contaré lo sucedido el ultimo día que hable con Aquiles, creo que la
encontrará útil".

"Como todas las veces que nos veíamos, comenzamos hablando de muchas cosas sin
importancia, luego el viejo se puso sentimental y conto lo siguiente:

Ultima charla con el viejo

Cuando conocí a Sofía era una mujer muy vivaz, alegre, que disfrutaba de la compañía de
otras personas y muy amigable con todos, según ella misma contaba no siempre fue así,
cuando era niña, tenía un problema, quizás no sea algo para nada común de afrontar para una
madre primeriza que ve a su hija como un pequeño espejo a su pasado, pero a los 11 años
Sofía oía voces que le susurraban al oído. Eran otros tiempos claramente, y nadie puede
culpar a la madre de Sofía de pensar que la mejor opción para su hija era una limpia; Un brujo
cualquiera fue solicitado y Sofía por primera vez tenía una visión de lo que es un charlatán.

Fueron días muy extraños para la pobre niña, pero aprendió que quizás contar todo lo que
escuchaba no era la solución. Así que cada vez intento ignorar más esas voces; Igual carecían
de sentido y muchas de ellas no tenían nada de interesantes.
Hay algo gracioso sobre ignorar un evento como este, es como caerte de una bicicleta y
pretender que no te golpeaste, el dolor sigue ahí, una niña de 11 años en este caso no es una
buena mentirosa, a las voces no les gustaba ser ignoradas, esto lo noto pronto, la mentira no
se pudo sostener por mucho más tiempo, el dolor que provocaban las voces se notó y la madre
ahora recurrió a un método más religioso. Sofía conoció al segundo charlatán, se le hizo
bastante parecidos sus métodos; saber lo que es un exorcismo no fue tan agradable, según sus
propias palabras. Y claro la repetición de un evento puede hacer a cualquiera persona una
experta en el tema.

Repetición, todos sabemos que la repetición hace que cualquier cosa sea aceptable, nos
adaptamos, ya sea a un lugar o como con Sofía, tolerar el dolor físico y mental, por segunda
vez intento no prestar tanta atención a las voces, y parece que escribir las calmaba, tanto o
más que cualquier cosa que alguna vez se le hubiera ocurrido. Para entonces Sofía aprendió
dos cosas importantes, una, que los farsantes sobran y la más importante:

“Que lo que su madre no sepa, parece no hacerle daño”

Sofía escribió como nunca, pero más que eso, ahora parecía estar feliz. La felicidad es extraña,
puede ser que te la de un objeto, una persona, o bien como en el caso de Sofía la felicidad de
otro. Y mientras más aumentaban las voces, más escribía para calmarlas, nunca le platico a
nadie de lo que escribía, mantenía una cara feliz y sonriente para todos, después de todo era
una niña muy bonita y bien portada, pero que escribía, porque le preocupaba, pocos podrían
entenderlo, pero ella era feliz mientras escribía, era feliz porque su madre era feliz, porque
entonces no compartir con ella lo que tanto le gustaba.

Es interesante cuando uno aprende algo por un error, y a pesar de tener cuidado vuelve a
cometerlo; Tropezar con la misma piedra parece ser algo que nos forja, como martillazos a una
espada. Sofía pensó que tendría una visita de otro charlatán, pero esta vez fue peor de lo que
podía manejar, Para hacer feliz a su madre debía de dejar de escribir.

“Su felicidad dependía de dos cosas, y ahora para tener una debía de sacrificar la otra”

El dolor físico es muy difícil de ignorar, pero ver a su madre orgullosa de ella vale cada punzada
que sentía en la cabeza, cada escalofrió que recorría su cuerpo cuando las voces perdían el
control y la atormentaban, verla feliz lo valía, pobre Sofía. Quizás si hubiera sido más fuerte no
hubiera sucedido lo que paso.

El lápiz junto al papel, las órdenes de las voces nunca fueron más claras, escribe, escribe, solo
debes de escribir te contare una historia, solo debes de anotarla, te contare una historia solo
debes de contarla; Sofía siempre me dijo que si esto hubiera pasado en un lugar donde
estuviera sola, quizás no la hubiera conocido, quizás no hubiéramos cruzado palabras y tal vez
mi suerte no sería la que ahora me envuelve.

Con su madre Observándola y todas sus amigas cerca, esa fiesta sería inolvidable para todos,
Los susurros se convirtieron en gritos, en su oído izquierdo una voz lloraba y en el derecho otra
le ordenaba; un lápiz, en la mano, lágrimas en los ojos, un “perdón mamá” apenas es
entendible saliendo de sus labios.

Te llevas el lápiz al oído, inclinas la cabeza a la derecha y dejas que la mesa haga el trabajo de
dejarte sordo. Nadie puede culpar a la madre de Sofía de tomar las decisiones que tomo, la
soledad de la inconciencia fue una experiencia muy grata, Sofía me cuenta que no disfrutaba
del silencio desde hace tanto, volverla a tenerlo fue muy grato.

Según me siguió explicando, los días siguientes a “ese incidente” hablaron con gente muy
interesante, escribir fue parte de este tiempo, parte muy importante para ella, hablar con
otras personas de lo que pasaba no fue muy fácil, pero con el tiempo parece que se dio cuenta
que podía confiar en ellos. Además aprendió algo interesante, sin el ruido de las cosas todo
sonaba más claro en el oído izquierdo, ella sabía que estaba sorda de ese oído pero tal parece
que ahora descubrió lo poco que tenía que ver la parte física con la mental, nunca le comento
esto a la madre, nunca le comento esto a nadie más que a mí, nunca comente esto hasta
ahora.

Lo último que me dijo fue:

“tres charlatanes conocí en la vida, es curioso cómo no me di cuenta del tercero, quizás fue
porque disfrutaba mucho de este veneno, puto veneno.”

Dejar los medicamentos la llevo a su suicidio, y yo la apoye en su decisión.

Caleb -> Sabes viejo, a ella le hubiera gustado que vivieras lo que te quedaba de vida.

Aquiles-> Para mi ella era mi vida, nunca lo entendió pero yo no la consideraba mía, sino yo me
consideraba de ella, pocos saben que ella es la escritora de muchas de las historias de mi libro,
siempre le gusto escribir, a pesar que le prohibieron usar lápices por mucho tiempo, eso no fue
un pretexto para no seguir escribiendo, la mecanografía se volvió lo más importante para ella.

Caleb -> Siempre tuviste la autoestima muy baja.

Aquiles-> Ella era quien me la levantaba día a día.

Caleb-> Debo regresar a la biblioteca, toma tus medicamentos como yo tomo los míos viejo.

Aquiles->Cuida muy bien de sus cosas, ahora son tuyas Caleb, tú eres lo único que me queda.

Caleb-> Lo está viendo solo desde su punto de referencia viejo, olvida que “para mi” usted es
lo único que me queda.

Muchas cosas en este libro están escritas según las recuerdo, otras según me las contaron, por
lo que podrían no ser exactamente las palabras que las personas dijeron o como ellas se
sintieron, pero la respuesta de Caleb al detective Carlos, fue exactamente como está arriba, así
fue escrita, así fue enviada por él a los medios de comunicación, después de que Caleb
terminará de contar, tanto Marta como Carlos creían tener lo que fueron a buscar, porque
aunque esta respuesta generara varias preguntas más, ya todo era cuestión de tiempo para que
se resolviera; Caleb parecía estar armando un espectáculo, donde su personaje principal era
Aquiles.
CAPITULO IX
-Un personaje sin nada especial -

Una persona promedio jamás en su vida llega a ocupar un lugar en las noticias de las 8pm,
tampoco ve su nombre en la portada de un periódico, y hasta ese viernes de junio, Caleb
Rodrigo era una persona normal. Caleb desde siempre supo mantener un bajo perfil, lo crio su
madre quien debía trabajar para mantenerlos, por lo que algunos días no la veía hasta la noche,
y otros solo sabía que había llegado porque le dejaba listo un pan en la mesa en la mañana y
café caliente en la estufa. Fue durante su niñez que conoció a Aquiles y Sofía Mogrard, grandes
amigos de su madre, lo cuidaban de vez en cuando, y con el tiempo fueron la única familia que
conoció. Mientras crecía no presentó ninguna aptitud que resaltar, no fue un estudiante
mediocre ni excelente, suspendía a veces; fue una persona común en todo sentido. Cuando
tuvo la edad para trabajar los Mogrard le dieron trabajo ayudando en la biblioteca de los olivos
donde término siendo bibliotecario por veintiséis años, estaba feliz con su trabajo, como el
estado subsidiaba una parte importante de los gastos en la biblioteca, el trabajo de Caleb le
daba la estabilidad laboral suficiente como para no querer nada más, sin embargo lo dejo.

Pareciera no tener sentido en un hombre que toda la vida trabajo en el mismo lugar, esto se
debió posiblemente a dos acontecimientos, el primero fue el suicidio de Sofía, que casi era una
segunda madre para Caleb Rodrigo, luego de ello, la salida de la administración de Aquiles,
quien nunca se recupera de la pérdida de su esposa. La biblioteca de los olivos se convirtió en
un mal recuerdo. Quienes aún trabajaron con él dan fe de como su forma se ser cambió, se le
veía más reservado, sin ánimos de seguir en su trabajo.

Luego parece ser que se tomó un tiempo sabático, no tener familia que mantener lo ayudo a
ahorrar lo suficiente como para no tener que preocuparse por dinero el tiempo que le llevará
conseguir trabajo. Y sea lo que sea que hizo en este tiempo nos llevó al día de hoy, donde
acepta haber escrito la carta número tres, por encargó de una persona de la cual no puede
mencionar mucho, pero que el mismo tiempo sacará a la luz.

No menciona nunca de donde salieron los datos de las cartas, no acepta la autoría de ningún
otra carta, pero da una pista importante de quien es el posible autor de algunas, porque junto
con su declaración entrega su máquina de escribir y un libro de cuentos escrito por Aquiles
Mogrard, donde nos encontramos con que son sus cuentos los usados en las demás cartas.

El libro que presenta está hecho con la misma máquina de escribir con la que se hicieron las
cartas y con el mismo tipo de papel, pero compartía algo más, cada uno de los cuentos que
acompañaban las cartas enviadas estaba en este viejo y cercenado libro.

Todo esto llevo a muchas más investigaciones sobre ¿cuál era el motivo de las cartas? , por
parte de muchos particulares y de toda clase de medios de comunicación, algunos llegarán a
concluir cosas muy diferentes a las que este libro intenta probar y otros incluso seguirán
poniendo en duda la razón real de este circo, pero preferiría no entrar en tanto detalle si no
interesa.

Caleb Rodrigo siempre tuvo el tiempo para hablar con Aquiles en los años que le siguieron a la
muerte de Sofía, muchas personas pueden dar fe de estos hechos, pero luego llego un
momento muy oscuro en la vida de Aquiles, con la muerte de su hijo y familia, parece ser que
ya no disfrutaba tanto la compañía de nadie, incluso de aquel que casi crío como un hijo.

No es sorprendente que Caleb tenga tan en alto a Aquiles, y justo por eso comencé a creer que
le estaba dando más protagonismo del que en realidad tenía, nadie lo notaba pero aunque sus
palabras decían que Aquiles no era el autor, sus actos hacían ver todo lo contrario, cada que
recibió una visita para preguntarle sobre eso defendía el misterio detrás de las cartas, pero de
igual manera hacia ver a Aquiles como el genio detrás de todo el escenario que había montado.

Pareciera ser que dejaba fuera a una persona muy importante en los hechos de esta historia,
pero no podía probar nada de eso aún, aunque se lo mencione a dos personas, a Josué Sierra
mientras me pedía un consejo y a María mientras me comentaba de los últimos avances de su
investigación. Igualmente no hubo mucho tiempo para pensar en esta posibilidad, dos días
después llego la quinta carta, esta vez fue un suceso extraño pero tranquilo.

Soledad “la Mestiza perdida”

Mi viaje por el mundo nunca pudo detenerse, no fui yo, fueron mis anteriores almas,
recordándome con lujo de detalle sobre la pobre mestiza perdida, Soledad, su madre parece
haber sabido el camino que recorrería su hija. Nunca supo encajar en ningún lado, la vida
sencilla le parecía una pérdida de tiempo y la vida lujosa y tan inalcanzable jamás fue parte de
sus planes, soledad no era bella, desde pequeña su madre entendió que no sería una mujer
que pudiera elegir esposo.

Dicen que cuando un atributo te hace falta otro lo compensa, soledad quizás no sea una
excepción, ella pronto encontró su camino en los libros, su escaza enseñanza era algo raro en
una mestiza de esa época, leer parecía tan inalcanzable para sus pares, que le causó problemas
con los hombres de su pueblo. Que hace esa mujer opinando en una discusión de
caballeros<le fue dicho tantas veces>, acaso una mestiza puede siquiera entender lo que
discutimos<Reproches que cortan en seco cualquiera de sus opiniones>.

Cuantas veces no quiso tener en sus manos una novela más, pero los pobres no se pueden dar
el lujo de tener un libro, Soledad se perdió, y cada día para ella era un recordatorio de como la
vida carecía de sentido, porque no importara a donde huyera, seguiría estando perdida. Es en
los momentos de más desesperación que algo surge en el ser humano, si no puedo leer
escribiré<Dijo soledad que entre pensamientos ignoraba todo lo que a su alrededor pasaba>
nadie nunca dijo que un pobre no puede escribir un libro, ni se negó a vender papel a quien
contara con una moneda.

Soledad escribía de día, mientras pasaba las noches pensando en las ideas que valía la pena
plasmar al día siguiente en sus ratos libres, era ese espacio entre sus deberes, la única razón
por la que un día tenia valor, y mientras sus pares disfrutaban los placeres de la vida, ella
nunca estaba para nadie, Soledad no sabe a dónde pertenece está perdida<dijo la hija del
dueño de la finca donde laboraba> Me creerían que la otra vez estaba escribiendo, una mujer
fea como ella debería estar preocupándose por no morir sola, no por qué tan apetecible suena
su prosa.

Quien te entiende Soledad, posiblemente nadie, y es que para entenderte deberían ser
capaces de llegar a ti, y ni tu sabes dónde te encuentras. Pasaste toda tu vida escribiendo, y
mientras tus hermanos y hermanas tuvieron familia, tú escribías, pero le hiciste merito a tu
nombre, Soledad, no dejaste que nadie leyera tus historias, nadie jamás pudo encontrarlas,
toda tu vida está en esas hojas, tú eres esas palabras, cada una de esas letras, transformaste tu
vida en historias en esos papeles. Pero quien le interesaría leer lo que una mestiza escribió, te
creíste víctima de tu destino, cuando sólo el miedo fue responsable, y con tu último aliento
sabiendo que final te esperaba, quisiste ser recordada.

Soledad, si el mundo supiera que eres una obra y no una persona, tu cuerpo son 3894
paginas, tu alma 421 historias, soledad eres una mestiza perdida, no olvidada, porque hubo
quien te recordara, pero nadie jamás pudo encontrarte.

A la biblioteca de Careliano llego una persona, su nombre Roberto de Jesús Santizo Merlo.
Venía en representación de su difunto padre, hace ya seis años que había muerto, y entre
muchas cosas que le dejo, estaba lo que él decía era lo único que se arrepentía nunca haber
llevado a cabo.

“ttraigo la carta que le fue dada a mi padre por Aquiles Mogrard, para esta biblioteca, también
tambi n
tengo otra copia, que debo entregar a un medio de co comunicaci
municación,
municaci n, desearía
desear a poder decirles más
m s
acerca de esto pero solo se lo que mi padre me comento. “

Roberto creía que no había dado ninguna información importante, pero al asegurar que fue
Aquiles Mogrard quien entrego la carta a su difunto padre, fue la clave para que a nadie le
quedaran dudas de quien era el escritor.

Días después algunos medios de comunicación lo entrevistaron, le gustaba la atención que esto
le generaba, se le veía en el rostro, cada vez que contaba como su padre le conto de aquel
proyecto que iba a cambiar los libros de historia, pero que luego de que algunos
inconvenientes y la deserción de su líder, Aquiles Mogrard, quedo olvidado por siempre. Según
comentaba Roberto, las cartas estaban guardadas entre las cosas viejas de su padre, él nunca
se atrevió a tirar ni regalar ninguna de sus pertenencias. No sé cuánto de lo que dijo es cierto,
pero el amor que le tuvo a su padre parecía real, un cuarto en su casa donde el tiempo parecía
haberse congelado lo demostró.

En este momento otro acto sucede que es digno de mencionarse, el detective Carlos encontró
la lista de personas que recibió un libro de Aquiles Mogrard, veinticuatro copias fueron hechas,
dos de ellas fueron entregadas a bibliotecas, una se quedó en la biblioteca de los Olivos y
veintiún restantes podrían tener una carta adjunta. Esto podría ser la forma de verificar que
cartas son reales, pero más importante, encontrar un vínculo entre todos los involucrados y la
fuente.

Habían muchos nombres de gente interesante en ese papel, a pesar de ello, solo uno
conseguía levantar el interés de todo el mundo, Gael Sierra, padre de Josué Sierra, quien según
parece recibió una copia del libro del mismísimo autor. Así que, ¿Qué tanto sabía la familia
Sierra sobre estas cartas?, porque todo apunta a que Josué no estaba diciendo toda la verdad
acerca de sus intenciones.

Para muchos reporteros fue más importante la posibilidad que la familia Sierra fuera cómplice,
que encontrar las razones que tuvo el grupo para enviar las cartas, dejando en claro algo que
nadie quería admitir hasta el momento, la cantidad de personas que a los mejor de modo
inconsciente habían aceptado que Aquiles “si escuchaba a los muertos” era cada vez mayor. Y
es que aunque la mayoría manejaba la idea que los mismos involucrados fueron haciéndose del
conocimiento de cada uno de los hechos que las cartas explicaban, a muchos les atrae la
fantasía, nos la venden desde pequeños, no es culpa del ser humano ser un creyente innato.
CAPÍTULO X
–La verdad siempre depende del ojo del observador-

Luego de leer la quinta carta con atención le comente a Josué sobre lo que yo creía era una
“lucha para callar una voz en la cabeza del autor”, ¿pero quién es el autor? ¿Es acaso que
Aquiles Mogrard tomaba sus ideas de otro lugar?

Josué no pensaba como yo, más bien lo toma todo como una señal más de que Aquiles es
quien preparó todo esto, me cuenta como todo apunta a cuál era su idea inicial, pero luego
decidió cambiarlo todo. Le pregunto ¿porque cree que Aquiles haría eso?, Josué parece un
poco decepcionado de que yo no vea las cosas tan claras como él, se exalta un poco y me
explica que fue para que lo recordarán, como todo asesino en serie, solo buscaba
reconocimiento, planeo esto con sus amigos, eso parecía probar la carta con el nombre de
todos a los que Sofía les entregó un ejemplar del libro, algunos además de ser cómplices
sirvieron de víctimas, un engaño tan elaborado no podría haber funcionado de otra manera.

Pero con la muerte de lo único que le importaba en este mundo, su familia, parece haber
abandonado su empresa, olvido todo y sus amigos hicieron lo mismo. Hasta que Caleb puso
todo en marcha de nuevo, para recordarle como el gran hombre que siempre quiso ser. Los
ejemplares de su libro son lo único que prueba su autoría, aunque la mayoría de ellos siguen
sin saberse su paradero.

Para este punto ya todos lo tenían resuelto, no les interesaba oír de nuevo a Caleb intentando
decir que Aquiles no era el autor, solo querían saber ¿cómo hizo para tener toda esa
información?

Abundaban las teorías, casi todas las que valía la pena escuchar tenían a las familias de las
víctimas como los facilitadores de información, algunos ya solo esperaban que Josué Sierra
terminara por apoyar esta teoría con una confesión de sus verdaderas razones para apoyar
estas investigaciones.

La quinta carta fue totalmente opacada por todos estos supuestos, igualmente sus hechos
resultarían ciertos, así que a muchos ya no les interesaba. La búsqueda de respuestas para
muchos había llegado a su fin, se notaba en la disminución de rating, en la disminución de
búsquedas al respecto, pero sobre todo, se notaba en la aceptación de todos los que se
sintieron afectados.

Fui hablar con el bibliotecario al respecto del cuento de esta carta, para este momento las
personas que antes venían a la biblioteca por curiosidad al respecto habían cesado. Él
bibliotecario me conto acerca de Aquiles Mogrard, un escritor tardío, nunca público nada,
pero estos cuentos parecen ser la forma que encontró de llegar a la gente. En Ceriliano la
literatura local tiene un lugar especial en la biblioteca, se le asigna una casilla a cada uno de
los escritores, para poder facilitar encontrar al que escribió lo que buscas. El bibliotecario
abrió un nuevo espacio para Aquiles Mogrard, que hasta ese momento se había mantenido
vacío. Pregunte si tenía alguna referencia de otro escritor local para el cuento de la quinta
carta, pude ver en su cara cierto desconcierto, me pregunto si dudaba que Aquiles Mogrard
fuese el autor de esos cuentos, y sin darme tiempo de contarle algo me dijo lo siguiente:
Una pequeña ficha bibliográfica fue hecha para un apartado en esta biblioteca, a lo mejor
tenga veinticuatro años, permaneció con un pedazo de papel que se titulaba “El dios
omnipotente “, la ficha no tiene fecha, ni número, solo un nombre sin apellido, “Sofía”.

Este nombre nunca significó nada para el bibliotecario, más que curiosidad sobre quien abrió
un apartado vacío para un nombre sin apellido, pero todo comenzó a tener sentido cuando las
cartas comenzaron a tratar sobre Sofía, la esposa de Aquiles y según el bibliotecario
posiblemente la “real” autora de algunos, o a lo mejor todos, los cuentos.

El bibliotecario tenía una teoría, había estado tanto tiempo hablando con la detective María y
con reporteros acerca del caso que se cansó de oírlos y comenzó a unir cabos sueltos, lo que
me dijo me dejo perplejo:

¿Ha notado que la mayoría de personas ve la historia de Aquiles como alguien que sufrió
mucho y no lo merecía?, todos aceptaron con certeza que él es el bueno, se olvidan de algo
importante, su esposa, la mujer que decidió suicidarse a seguir con él. La gente no se suicida
sin razón, pero en sus cartas Aquiles nos convence de lo mucho que la amaba, nos hace
partícipes de como parece luchar para estar con ella, aunque también nos revela que ella sufre,
y lo ha hecho desde muy joven, para cualquier lector esto es solamente un hombre contando
sus penas, pero para mí fue claro, Aquiles era un hombre intentando convencerme de que no
tenía nada que ver en la muerte de su esposa.

Sé que suena un poco fuerte pero solo te pido que lo veas desde mi punto de vista, porque sé
que no es algo que a lo mejor paso por tu cabeza, pero si me permites explicarte veras que
todo parece tener sentido.

Primero, Aquiles nunca aparece como escritor, intente buscar información sobre su libro,
porque a pesar de tener una referencia en otras bibliotecas, ésta nunca abrió un apartado en
“escritores locales” para Aquiles, simplemente lo ignoro, así que le pregunte al anterior
bibliotecario y amigo mío, Agustín Cerrano, quien me dijo que lo único que recuerda es un
hombre arrogante que no podía probar la autoría de su obra, esto se sumó a que la única que
parecía tener un pasado como escritora era su esposa, quien según parece fue editora de
varios artículos en la universidad y gran apasionada por las novelas de misterio, esto lo sé
porque leí algunos de sus artículos que escribió para el periódico del campus universitario, sin
embargo ella tampoco tiene un apartado para escritores en esta biblioteca, o eso creía…

Resulta que mi buen amigo Agustín recordaba a Sofía, decía que era una mujer muy amable,
paciente con su esposo y buena cristiana, pero llena de dudas como todo ser humano. Ella
acudió a él en una ocasión para que le diera su opinión sobre “uno de sus cuentos “, y Agustín
dejo muy claro que recuerda como ella dijo esas palabras. La cuestión es que su cuento no era
un pensamiento muy adecuado para una joven como ella, por lo que Agustín nunca término de
llenar su ficha bibliográfica, y el apartado de esa escritora se mantuvo vacío y esperando otro
cuento que nunca llegó.

Así que, ¿Qué causa hace que Sofía tome la decisión de dejar de escribir cuentos, y más aún, de
acabar con su vida? Aquiles Mogrard culpa a la depresión y a un posible problema mental,
esto me hizo prestar atención, porque pareciera que la que en realidad la que oye cosas es
Sofía… espera, no te precipites a pensar cualquier cosa, solo vuelve a leer lo que parece
contarle a ese tal Caleb Rodrigo, nunca se menciona a sí mismo como un hombre que le
ofreciera problemas o que causará que ella tuviera que aguantarlo, pero describe muy bien que
ella sufría por aquello que parecía oír, a esto debo sumarle que Caleb deja muy en claro que
Aquiles solo fue un mensajero, pero no pareciera que Aquiles Mogrard quisiera ser recordado
solo como mensajero, eso queda muy claro cuando uso los cuentos del libro donde puso su
nombre y apellido. Así que, podría ser que Aquiles le robara a su propia esposa, si aún te parece
muy inverosímil, quisiera que pudieras hablar con Agustín.

Agustín Cerrano, solo alguien de su edad podría saber algo sobre el origen de esta historia,
con noventa y cuatro años me sorprenden que aun recuerde alguna de estas cosas. Este
hombre no tiene ninguna conexión ya con este mundo, oírlo será la forma de corroborar lo
que dice el bibliotecario, creo que es el único que ve como el villano de la historia a este
difunto, teniendo en cuenta su apodo de “asesino” eso es extraño. Prometí mantenerle
informado, aunque no sabía cómo tomaría las cosas si resultaban no ser como él esperaba. Y
después de tomar algunas fotografías del apartado para Sofía y de su letra, procedí a
retirarme.
CAPÍTULO XI
-La lista-

El treinta de mayo del presente año el equipo del detective Carlos llego a la biblioteca de los
Olivos, para ser una biblioteca de más de cien años está demasiado alejada de la ciudad de
Ceriliano y de su propio pueblo “Los Olivos”. Hay pocas razones por las que sigue funcionando,
una de ella fue el gran aporte económico que fue la familia Mogrard mientras estuvo a cargo;
otra es que el edificio es tan viejo que algunos ya lo ven como un patrimonio del país. Verlo es
recordar otras épocas, no puedo decir que mejores para todos, pero si para algunos.

Para ser un edificio tan grande, que solo tres personas estén a cargo de todo demuestra lo
olvidado que está. Cuartos enteros han estado cerrados por años, sellados en la época de
gloria de esta biblioteca, uno de ellos era la oficina que uso Aquiles, un gran salón que desde
hace dieciséis años ya; a nadie le importó. Y a Aquiles dejo de importarle antes que a todos,
comenzó a acumular cosas en él, papeles, proyectos que tenía en mente, incluso había un
candelabro muy grande que nunca llego a ser usado. Entrar a esa oficina era muy difícil, por lo
mismo nadie entraba, no lo necesitaban. Fue un acierto para el equipo de Carlos pensar que
podrían encontrar “algo” en esa habitación. Pero para que eso ocurriera tuvieron que pasar
horas entre tantas columnas de papeles…

La oficina estaba llena de ideas sin realizar, pero fue una que si se llevó a cabo la cual llamo la
atención de Marta, una lista de entregados con fecha Lunes 18 de septiembre de 1995, la cual
contenía veintiún nombres y la palabra “Entregado” escrito en cada uno, la misma lista
detallaba la existencia de dos copias de respaldo en esta biblioteca y dos copias enviadas a
otras bibliotecas, no decía de qué, pero obviamente se trababa de un libro. Algo más se veía
claramente, la letra no era de Aquiles, sino de Sofía de Mogrard.

De esos veintiún nombres algunos resaltaron de inmediato, las familias de cada uno de los
hombres que se mencionaban en las primeras cuatro cartas, claramente exceptuando la
tercera. Eso demostraba algo, Las familias de los afectados estaban involucradas de alguna
manera en el juego que Aquiles nunca terminó.

Obviamente llama la atención un nombre en particular, “Gael Sierra”, el padre de Josué Sierra,
que siempre sostuvo no saber nada de lo que estaba pasando, y que curiosamente se volvió en
el principal benefactor de esta investigación. No estuve presente cuando estos
acontecimientos pasaron pero Carlos, Marta y María me dejaron muy en claro que era lo que
pensaban estaba ocurriendo.

Los libros aún estaban en la biblioteca, en la sección de literatura, apartado 117-RE, “Síntomas
de abstinencia y otros cuentos” el libro de Aquiles no es una recopilación de voces del
pasado, sino un libro de cuentos. ¡En ningún momento hace alusión a oír fantasmas!. Proceden
a tomar una copia y se preparan para anunciar lo encontrado. Son los primeros en ver a
Aquiles como la mente detrás de las cartas y aunque no lo saben en unos días Caleb Rodrigo
va hacer que todos vean a Aquiles de la misma manera que ellos lo ven ahora.
-Síntomas de abstinencia -

Se han preguntado ¿por qué aquellas cosas que nos provocan placer también nos hacen daño
al faltarnos?, más de una vez me topé con una persona que no podía soportar un momento
más sin un trago, un momento más sin un cigarro, un momento más sin ella o él.

¿Qué tan bueno puede ser algo que provoca abstinencia?, pues la respuesta cambia
dependiendo a que el autor se le pregunte, pero siendo sinceros ¿Cómo un dolor puede ser
mejor que otro?

Algunos parecen haberlo comprendido, comenzando a prohibir aquellas drogas que hacen
tanto daño al faltarle a una persona, el opio ha dado tantos momentos felices a tanta gente
que me pregunto si alguien pensó en ello. Las cosas malas parecen pesar más que las buenas.

No, no puede ser eso, de serlo el Amor sería prohibido en todos sus aspectos, basta ver la
literatura para darse cuenta de todos los dramas que causa, las penas que provoca y los
cadáveres de los que es culpable. Aunque el amor también tiene sus prohibiciones y tabúes.

¿Qué otra cosa tienen en común entonces todas las cosas que nos provocan abstinencia?

Pues tanto legales como ilegales, todas nos provocan gran placer, pero cada una un tanto
diferente a las demás.

Quien se enamoró profundamente, siempre recordara ese sentimiento aunque se vuelva a


enamorar. Quien fumaba Opiatos o Jarnala y ahora fuma un cigarro, simplemente sabe que no
es lo mismo.

Lo que prohibimos parece ser aquello que nos provoca un placer mayor, y por lo tanto al no
tenerlo una sensación inmensurable de dolor. El placer es el Demonio, siempre se dice que el
dinero es la raíz de todos los males, algunos los corrigen diciendo que en realidad es el “amor
al dinero”. Para mí es “el placer” que provoca el verdadero culpable.

Es el placer lo que te hace engañar a tu pareja, fumar otro cigarro, tomar otro trago, querer
más poder. Te haces tan dependiente de sentirlo que a falta de él tu cuerpo te falla, no puedes
vivir sin ese sentimiento. Solo hay un síntoma de abstinencia y es la abstinencia al placer.

A lo mejor creen que me olvido de las cosas buenas que provoca el placer al llamarlo “el
demonio”, pero yo les digo a ustedes que se olvidan que el demonio original es un hermoso
Caleb.

Y aunque esto parezca una metáfora muy trillada, la próxima vez que ya no soporten un
momento más sin aquello que les causa tanto placer, no importa lo que sea, porque a lo mejor
sus adicciones son muy diferentes a las mías o tengan un nombre y apellido distinto,
igualmente pregúntense si su vida puede continuar sin sentir ese placer.

Si la respuesta es no, están sufriendo de abstinencia.


CAPITULO XII
-Nadie guarda mejor los secretos que un muerto mudo

Aunque no fue inmediatamente, la lista de los nombres fue liberada a la prensa y todo el mundo
pudo ver el nombre de aquellos hombres de muy posiblemente sabían acerca de las cartas y su
contenido. Razón por la cual la entrega de la quinta carta fue tan anormal a las demás, Roberto
de Jesús simplemente llego a dejarla, no había más secreto que esconder desde su punto de
vista.

La popularidad que alguna vez tuvo estaba acabando, se veía en lo poco que a todos les
importaba saber de qué iba la carta, o eso decían los periodistas. La verdad era que a la gente ya
no le importaba saber sobre la carta porque asumían que igualmente sería cierto. Más de una
persona con la que hable simplemente asumía que el contenido de la carta debía ser cierto,
creían en el escritor, la gente inconscientemente parecía aceptar que el escritor sabía algo que
los demás no y por escritor me refiero a Aquiles.

La quinta carta se suponía sería entregada mucho después de las demás. Pero hay un gran
problema con ese plan, de la lista de veintiún nombres, dieciséis de ellos ya están muertos. Creer
que sus hijos saben sobre sus planes es tener muchas esperanzas.

La Lista:

1. Emiliano Matías Sofobich Nara


2. Julián M. Soriano Melara
3. Juan Carlos Santizo Corrales
4. Bosko Amaran Petrovic Vladts
5. Jhiojana Adamaría Mancini Platz
6. Gael Armando Sierra de los Montes
7. María Marina Pérez Tamira
8. Amanda Carina Bran Sifuentes
9. Leopoldo Sanir Szucharije Pfarns
10. Heidi Magnolia de Smith Corrales
11. Juan Ernesto Florentiní Aturdía
12. Rubén Carlos Bozar Gutiérrez
13. Susana María de la Cruz Chávez
14. Fabián Joel de la Cruz Chávez
15. Saúl Martino Espinoza Paz
16. Hilary Maryan Maerkell Shluts
17. Gorge Damian Torres estrada
18. Roque Mayo Herrera Merlo
19. Sabrina Eliz Cortani Lux
20. Jhon Monty Stellar Cerox
21. Bill D. Murray Turner

Publicarla parecía la mejor idea para que la gente ayude a resolver este misterio. O que alguno
decidiera hablar, lastimosamente nadie llamo para ofrecer alguna información útil. Ningún
familiar tenía idea de en qué estaban metidos sus padres o abuelos, ninguno conservaba una
copia del libro de Aquiles, todo parecía derrumbarse para esta historia destinada a olvidarse…

Olvidaba que nunca adjunte la Quinta carta, pero es que al no saber en realidad cuál sería su
lugar en esta historia, no deseaba que se llamara Quinta. En ella se percibe un ser diferente,
alguien absorbido por su don, más metódico y ordenado a la hora de describirnos lo que quiere
que busquemos. Ya no hace del hombre que desenmascara el personaje principal de la historia,
ni siquiera lo menciona ni lo nombra, simplemente escribe su nombre en una hoja adjunta junto
a las instrucciones a seguir. Ahora claramente él es el protagonista.

-Quinta Carta-
Carta-

No tengo mucho que contarte Sofía, solo soy yo y ellos, los odio ahora más de lo que te amo.

Dude mucho de escribir esto, pero así es, debo pensar que nunca podremos estar juntos en
estas circunstancias, no soy alguien apropiado para querer amar, ni para ser amado. Mi vida se
va intentando comprenderlos, mi mente divaga mientras alguno intenta llamar mi atención. Y
debo decir que me guste que intenten capturar mi atención. De pronto siento que importo, de
pronto dejo de ser solo un hombre para transformarme en algo más. Algo superior a mi
entendimiento. Entendía esto como un castigo cuando todo el tiempo fui solo un niño que se
quejaba porque no me gusto el regalo que recibí.

Si tengo oportunidad en el futuro de poderlo explicar, lo explicare. Pero ahora mismo solo
quiero escribirlo, detallar en papel todas las cosas que me dicten al oído. Hacerlos pelear por
mi atención, ya no peleo por tener tranquilidad. Ahora disfruto del caos que generan al
intentar que los escuche.

Mi querida Sofía, comencé este viaje por ti, nunca pensé que lo seguiría por mí…

Detallé cada uno de los pasos a seguir para que lleves a la justicia a estos seres que cortaron
con la vida tantos y callaron al ver otras injusticias…

Siendo portadores de la ley, no puede ser que escondieran la verdad solamente por amistad,
sus nombres estorban en esas placas conmemorativas. No hace falta decir más, que las
pruebas hablen por si solas.

Es un poco irónico que a las demás cartas les pase lo mismo que a la mujer de su cuento, todas
en su mayoría han desaparecido, pero algo era interesante, en algunas El asesino de héroes le
habla a su amada Sofía, pero en la dedicada a Aquiles, nunca la menciona, obviamente Caleb
monto él cambio, eso nadie lo duda, pero ¿Por qué hacerlo ahora y de esta manera?

Caleb no le ha dicho aun nada importante a ningún reportero, a menos que encuentre una
manera de hacerlo hablar, lo mejor será encontrar otra persona que pueda brindarnos
información.
Capitulo XIII
-Apariencias -

Agustín fue muy amable al recibirme, no diré nada de los hombres de su edad, ni de su carácter,
se ganó que respetara su opinión. Al recibirme fue gentil, sabía por qué venía a verlo; no dudo
un momento en ir directo al grano al hablar de lo que sabía de Sofía:

Conocí a Sofía cuando rondaba los veinte, una época muy diferente a ésta, ella era una
cristiana devota, siempre guardaba la apariencia de niña buena para hacer feliz a su madre,
tenía tanto talento para escribir, sus columnas en los diarios siempre eran un placer de leer.
Yo por supuesto que le aconseje que escribiera algo, ella me veía como un amigo, solo un
amigo…

-- toma un vaso de agua--

Ella iba mucho a la biblioteca de Ceriliano, pero luego comenzó a llegar menos, conoció a
Aquiles, siempre que venía parecía tan vivaz, y si me permite hacer una pausa para contarle
algo sobre Aquiles…

>>Como usted desee. <Le digo>

Últimamente veo mucho que se le menciona como un hombre muy jovial y social, pero él no
tenía muchos amigos antes de conocer a Sofía, prácticamente todos sus amigos eran amigos
de Sofía, ¡si yo sabré de eso! , sé que no es bueno difamar un muerto pero Aquiles no era lo
que todos quieren creer. Pero no perdamos más tiempo con eso, Usted vino a escuchar sobre
Sofía.

>>Tómese su tiempo

A pesar que muchas cosas las he olvidado, uno no olvida una charla con alguien como Sofía.
Y recuerdo una en particular en cierta ocasión que después de mucho pedirle lo intentara,
por fin cedió y escribió un cuento para mi archivo, no recuerdo la fecha exacta pero el año
fue Mil novecientos setenta y ocho. El cuento que escribió se titulaba “El dios Omnipotente”,
una mujer cristiana como ella escribiendo tal barbaridad parecía imposible, la aconseje que
no sería una buena forma de comenzar su ficha bibliográfica como escritora en Ceriliano y le
pedí que pensara en otra historia, después de todo se le daba tan bien.

El tiempo paso y aunque seguíamos en contacto por mucho tiempo se rehusó a enviarme
otro cuento, sin embargo me seguía comentando sus ideas, Yo soy un cristiano hecho y
derecho y déjeme decirle que podría haber golpeado a cualquier otra persona que opinara
cosas como las que Sofía me decía, pero ella confiaba en mí, yo era su confidente. Me
prometió escribir algo, ella era como un buen vino, los años simplemente le hacían ver
mejor, de nuevo no recuerdo la fecha exacta pero fue en Mayo del ochenta y tres, esta vez
su cuento era diferente, dije que lo archivaría, pero ella me hizo prometer no hacerlo, ella
quería guarda su apariencia de buena cristiana, a lo mejor usar un Seudónimo, titulo su
cuento -Tojkas- y desearía poder tener alguna evidencia de que fue ella la primera en
entregármelo, pero solo tengo mi palabra, la palabra de un viejo que no puede ni recordar
tomar sus medicamentos, la palabra de un … de un viejo que la quiere recordar más perfecta
de lo que era.

Pero es que Sofía siempre supo guardar las apariencias, siempre feliz, la última vez que supe
de ella fue en Agosto de Mil novecientos noventa y cinco , luego de negarme a Archivar el
libro de su esposo en la biblioteca, solo me vasto leer un poco para darme cuenta de quién
era el verdadero escritor. Ella Prometió enviarme cuentos si lo recibía, así que lo recibí, pero
nunca lo archive, con el tiempo perdí la copia… y en unos años más tarde también la perdí a
ella.

Agustín conto algunas cosas más, pero nada de eso es necesario escribir, lo mejor será que
mueran con él, fue un gran hombre y todo apunta a que las cartas dirigidas a la biblioteca de
Ceriliano, siempre fueron para él. Desearía poder terminar aquí con esa hermosa descripción
de la persona que fue Sofía, pero alguien más decidió aportar a esta historia su punto de vista.

Sin embargo respeto mucho la memoria que vive en Agustín y me siento un poco mal por
nunca decirle que contaría lo que me dijo e incluso lo que no me dijo, por lo cual acabare aquí
este capítulo.
CAPÍTULO XIV
–Viejos Conocidos-
Conocidos-
2:05 Pm locación: 7ma av. 8 calle de la Zona 1 en la Capital. Casa de Juan Ernesto Florentini Aturdía

Un poco de suerte llevo a Josué Sierra con quien podría resolver sus dudas, Juan Ernesto
Florentiní Aturdía, uno de los tipos que recibieron un libro y aún vive para contarlo, me llamo
para estar presente después de todo, mi trabajo consistía en escuchar todos los puntos de
vista.

Juan ->Conocí a tu padre sabes.

Josué->Pues, muchos lo conocían por todos sus negocios.

Juan ->Era una persona arrogante, pocos que no hicieran negocios con él lo toleraban.

Josué->No tienes por qué decirlo, el me crío, sé muy bien como era, porque no mejor me
cuentas lo que vine a oír.

Nunca me lleve bien con nadie, de cierta forma terminaba alejando a aquellas personas que
querían acercarse a mí, hay quien dice que a lo mejor era una enfermedad. Yo le discutiría
esas palabras, que las personas no me agraden no tiene mucho que ver con que algo falle en
mi cerebro, es más, recuerdo que de niño no pensaba tan radicalmente acerca de las
amistades, pero no tarde mucho en darme cuenta del poco sentido que tenía la vida, quizás
esa fue la razón de que pronto tuviera más “viejos conocidos “que amistades… Perdón, creo
que me desvié un poco de la historia que quería contarte.

No recuerdo como, ni porque, pero la historia llamo mi atención, sin embargo pronto
también me di cuenta de cómo a las personas no les apasionaba lo mismo, la mejor manera
de cortar una conversación con alguien resultaba de contarle algo de historia, prefería ser un
aburrido que un hijo de puta, fue así como en la facultad conocí a Sofía, ella era una mujer
muy bella, de la clase de personas que junta amigos muy fácilmente, sin embargo nunca
preste atención a como era, fue mientras hablaba con otro compañero que la conocí,
recuerdo muy bien lo que la hija de puta me dijo “ si quisiera una opinión formada desde un
punto de vista leería el libro juan ” ;no le gusto que fuera tan cerrado a otra historia. Me
enseño libros que ni siquiera sabía que existían, historias de perdedores de mierda, me abrió
los ojos a la verdad de los que la historia olvida, tengo que admitirlo, era una compañía que
disfrutaba. Mientras avanzaba el tiempo, sin querer supe más de ella, desearía poder decir
que me interesaba algo que no fuera yo, pero mentiría, lo poco que sabía de ella era por el
tiempo que a veces compartíamos o por lo que otro compañero decía de ella.

Nadie me aguantaba por compromiso cuando termine la universidad, muy pronto perdí
contacto con casi todos los compañeros que tenía, sin embargo Sofía siempre supo dónde
estaba, me conto una historia que quiero compartir contigo, quizás eso te ayude con las
dudas que tienes.

-Tojkas-

Hace muchos años, hubo un hombre que aseguraba que una voz era quien le ayudaba a oír, su
nombre era Tojkas, que en el idioma de su pueblo quiere decir, aquel que no escucha. Ese
hombre no conocía la soledad, no conocía la paz, no conocía la felicidad, su vida tenía solo un
motivo, y ese motivo era callar a la voz que le hablaba, todos en su pueblo no podían entender
como tojkas podía asegurar ser sordo y a la vez oír a esta voz, pero la voz tenia malas
intenciones, no estaba cuerda, la voz quería que se derramara sangre, y no buscaba venganza,
no buscaba justicia, esa voz solo quería que dejaran de mencionarla, quería que todas esas
personas que la mantenían existiendo murieran.

Seis años, tres meses dos días y 11 horas fue lo que Tojkas logro aguantar esta voz, abandono
su pueblo el primer año, medito en las montañas por tres años, estuvo cuatro meses en un
convento y por ultimo camino sin saber su destino, hasta que no pudo seguir cargando con el
dolor que la voz le hacía sentir, por eso decidió escucharla y obedecerla.

La voz lo guio por 2 días en los cuales él no descanso, pero nunca se sintió mejor, nunca
experimento tanta paz, hacer lo que le decía parece calmarla y a la vez darle una razón al
pobre hombre que no tenía ya nada porqué vivir.

Cuando llegó a su destino, una choza con cuatro personas era el lugar donde la voz lo guio, ahí
dentro en una piel dormía un anciano, el designio de Tojkas era claro, acabar con la vida del
viejo, y así lo hizo, la voz nunca le dijo su nombre a Tojkas, pero cuando el anciano dio su
último aliento, la voz desapareció, a lo mejor este viejo era el dueño de sus oído. ¡Tojkas había
matado al dueño de sus oídos!, por lo menos eso era lo que repetía cuando lo capturaron.

Y después de darle entierro al anciano de ese pueblo, Tojkas fue sentenciado a morir de la
misma manera que mato al dueño de sus oídos, él nunca supo su suerte, aunque sabía que no
saldría vivo de este lio, por primera vez ninguna voz se comunicaba con él -a lo mejor era el
tormento del dueño de mis oídos lo que escuchaba y por eso me trajo a darle fin- repetía
mientras intentaba explicarles a quienes lo rodeaban porque hizo un acto tan cruel, nadie
entendía porque decía tales cosas, pero muchos escuchaban sus palabras con detalle mientras
contaba su historia, entrada la tarde cuando el sol estaba a punto de ponerse la ley era clara y
la sangre del hombre más longevo de la tribu pedía justicia.

Y así, sin más, cuando la daga que uso para matar al anciano penetro en su cuerpo, entendió
su destino y volvió a oír la voz que había cesado de hablarle, la voz por la cual recorrió todo
este camino, la que le trajo su destino, y sea lo que sea que le dijo parece haber calmado su
espíritu, y al intentar explicar la razón de su crimen dio su último aliento.

Años más tarde acá estoy yo, siguiendo su historia, sus pasos, mientras escucho la historia
detrás del cráneo que se conserva del hombre que vino a darle muerte al dueño de sus oídos.

– ¿Y a qué viene ese cuento? – Exclama Josué al desconocer de la procedencia del mismo, yo
por otro lado sé muy bien al punto que quiere llegar este hombre –Sofía me lo conto mientras
me hablaba sobre una novela que quería escribir, de una persona que buscaba indicios sobre
un problema que lo acechaba, escuchar personas muertas. – le responde Juan.

Josue->Así que todo esto era su idea.

Juan->En efecto.

-<Josué lo ve con cierta incredulidad>


Lo interesante de esto es que nunca había oído tal cuento, ni pude encontrar nadie que
supiera algo de tal aldea, aunque Sofía aseguraba que alguien se lo había contado. Ella era
muy lista, en algún momento creí que además de bella había sido bendecida con una
memoria fotográfica, por las constantes veces que parecía corregir errores históricos o dar
su opinión sobre eventos, aunque deseche tal teoría después de varias pláticas más con ella.

Creo que por eso se casó con Aquiles, a él le encantaba escucharla mentir, eran una pareja
ideal.

– ¿Acaso querías a Sofía? – No pude resistirme a preguntarle a Juan

Eso decían algunos, pero nunca me imaginé junto a ella, la verdad creo que sentía alguna
necesidad por contarme cosas, por tonto que parezca, cada vez que me contaba algo, sentía
la necesidad de buscar de donde procedía, en contadas ocasiones encontré la fuente.

Josué-> ¿Por qué le das tanta vuelta al asunto?, ¿qué me intentas decir?

Sofía siempre fue una buena mentirosa, en pocas ocasiones pude saber cuándo estaba
hablando con la verdad, no podía creer nada de lo que me contaba sin evidencias de ello, y
con estas cartas y las evidencias tú y solo tú eres el culpable que me vuelva a preguntar cómo
es que ella hizo para saber todas estas cosas.

Josué-> ¡Ha!– Josué se decepciona –, pensé que tu cooperarias con la verdad, pero me crees
idiota si piensas que me tragare el cuento de una persona que oye a los muertos. Desearía
haber sido más paciente, pero no, nunca fue mi fuerte.

A mí no me interesa lo que tu intérpretes, pero yo no tengo las respuestas que esperabas, si


algo te puedo asegurar es que si alguien más sabia sobre las fuentes de información a las
que tenía acceso Sofía, esa persona ya está muerta, así que tendrás que buscar entre una
pequeña lista de cadáveres para encontrar respuestas, ahora por favor lárgate de mi casa.

Josué->Disculpa las molestias.

Juan-> No tengo porque hacerlo, solo váyanse.

¡Espere! –interrumpo la pelea – ruego perdone que vengamos con tan poco a pedirle tantas
respuestas, a lo mejor no le sirva de mucho pero ese cuento que usted relato forma parte del
libro de Aquiles, aunque lo escribió Sofía, al igual que el del “Dios Omnipotente”, y quiero
decirle que ella fue quien los escribió, la palabra de un viejo bibliotecario así lo prueba.

¿Usted cree que Aquiles le intento robar el protagonismo a Sofía?

La idea que le había planteado a Juan no le gusto para nada, antes simplemente era su forma
de ser la cual nos había echado, ahora parecía ser su enojo el que nos iba a echar, sin embargo
aunque su rostro mostraba Ira, se sentó y calmándose paso a explicarnos lo que Josué venía a
oír, aunque él mismo Josué no lo supiera.

Aquiles fue mi amigo por muchos años, él a diferencia mía era más sociable y vivaz, aunque
no tanto como Sofía, yo en cambio siempre fui muy reservado, nunca lo llame cuando Sofía
se suicidó, ni cuando su familia pereció en ese accidente de avión, siempre era él quien me
llamaba o visitaba, hasta que supe lo internaron en ese centro Psiquiátrico, nunca más supe
de él hasta hace ya 8 o serán 9 meses, ¿cuándo falleció?
Bueno, la cuestión es que Aquiles fue siempre un gran hombre, devoto esposo y gran padre,
no se quien les metió la idea que él era un ladrón pero si alguien acá es culpable de algo es
esa puta de Sofía. Aquiles no podía vivir sin ella, aun así ella decidió acabar con su vida solo
porque ya no sentía que hubiera razones para estar viva.

¿Quieren una razón de que las cartas existan?, pues fue simplemente un juego que Sofía se le
ocurrió y que todos nos vimos participes, ella es el asesino de héroes. Y la única razón de que
no quisiera reconocimiento parece ser seguirle causando problemas a Aquiles, que a lo mejor
no fue un gran escritor, pero les aseguro que esos cuentos eran de su procedencia.

Luego de desahogarse “Juan” nos invitó a salir de su casa; Josué ahora ya no estaba convencido
que “Aquiles” fuera el escritor, me pidió ordenar las pruebas y algunas ideas y procediera a
contarle con más detalle todo lo que yo sabía y él ignoraba, tanto él como Juan buscaban la
misma cosa, saber ¿dónde Sofía obtuvo esa información?
CAPITULO XV

-Cuando la verdad pese tanto, no esperes que salga a flote


flote--

Justo para la llegada de la Sexta carta suficientes cosas habían pasado como para tener una idea
de ¿Qué era lo que estaba pasando? Y cuál era la verdad detrás de las mismas.

Un viejo la entrego en nombre del exdirector de correos de la ciudad vecina, “Saint Stirling”,
esta entrega debía llegar a la biblioteca. Así se lo pidió Fabián Joel de la Cruz Chávez QEPD creyó
estaría vivo para entregar el mismo la otra copia, pero su amigo, que prefirió quedar “anónimo”,
entrego su última voluntad.

-Tenazas-
Tenazas-

En el poblado de ninfala una pequeña niña nació, ella fue bendecida con el don de
conceder deseos siempre y cuando la persona no los pidiera para sí misma, siendo su
primer deseo concedido desde que ella estaba en el vientre de su madre. Su padre
quería que su esposa no muriera en el parto luego de que este se complicara, según
cuentan los presentes con mucha desesperación se lo pidió a su hija no nacida, “¡que no
lastimara más a su madre!”, que si pudiera “él desearía ser quien sufre”. Y así fue, según
cuentan los habitantes la mujer dejo de sufrir durante el parto, Pero su padre desfalleció
de dolor y en agonía luego de haber nacido la niña y recibir un nombre, “Ulrima” fue
llamada, pronto venerada.

Por el pueblo era un secreto a voces como todo los que le pedían a Ulrima se cumplía
de un modo muy particular siempre y cuando tu deseo fuera para otra persona. Según
me contaron un padre preocupado por la tardanza de su hijo pidió por su pronto
regreso, su hijo regresó al pueblo sin saber de dónde o como, es una lástima que su
padre nunca lo pudiera recibir, nadie más vio al hombre en esos rumbos, algunos le
atribuyen esto a la bebida, pero sin dudarlo los creyentes de Ulrima dicen que fue acto
“Divino”.

Cierta mujer al oír lo que se decía de la niña pidió que su hija eligiera un marido
ejemplar, Muchos dicen que Ulrima nunca entendió porque esta gente le hablaba con
tantos elogios y exaltación, era una niña muy vivaz y le gustaba jugar, hay quien dice que
nunca fue consciente de su don, hay quien dice que sí y eso la mantenía feliz, alegre y
vivaz, por cierto la hija de la mujer que pidió por ella huyo con su hermano dejando a
sus dos pretendientes y su madre en 22 días de llanto. En el pueblo dicen que esto se
veía venir, ¡que no fue una sorpresa!, pero los que creen en Ulrima intentaron consolar
a la madre con la idea que su deseo se hizo realidad.

Se cuenta que en otra ocasión un miserable que solo esperaba la muerte, le pagaron
para que pidiera riquezas para el jefe del pueblo, Así el jefe intento burlar la suerte con
este pequeño arreglo, al día siguiente fue informado de cómo sus hijos encontraron la
muerte mientras cabalgaban hacia el pueblo, su esposa al oír esta noticia muere por la
tragedia, mientras le informan que sus hijos parecen haber encontrado oro en uno de
sus terrenos por lo cual se apresuraron a contarle a su padre, pero encontraron a la
muerte en su camino cuando uno de los senderos en la montaña se derrumbó. El Jefe
era sumamente rico ahora, pero , por más que intento endurecer su corazón, la tristeza
y melancolía lo persiguieron cada día de los 97 que vivió luego de la noticia, el pobre
miserable por otro lado, nunca le fue mejor, con la muerte del jefe del pueblo, todos sus
bienes fueron repartidos por su familia lejana para bien del pueblo, esta suerte le duro
hasta que su vida de mendigo cobro su factura con una enfermedad que lo mato al día
98 luego de pedir su deseo.

Ahí estaba yo, pasando por ese pueblo cuando supe de la niña Ulrima, diosa de los
milagros que deben de pagarse, cuando presencio la mirada de la niña, que ante tanta
vociferación de alrededor ya solo bajaba la cabeza, eh aquí que su madre llevaba la
cuenta de las personas que le había pedido algo, doscientos treinta y una personas—
dijo sin dudarlo un momento—pero como lo puedes asegurar – parece difícil pero solo
cuento lo que tarda en morir el siguiente hombre que le pide algo.

Ahí estaba yo, vi a la niña, le pedí hablarme fuerte porque no oía bien—y tú qué
quieres—me dijo la pequeña, Quiero el descanso eterno para aquellos que lo buscan,
quiero que puedan por fin ser olvidados por todos aquellos que los atormentan, quiero
que no sientan más dolor, Oí de gente que luego de pedirte se les concedían y luego de
unos días morían, se mi destino, conozco mi camino.

Me dicen que la niña siempre fue feliz, no lloro cuando nació, ni mientras crecía, le
gustaba sonreír si alguien un deseo le pedía, nadie pudo calmar su llanto durante esa
agonía.

Dijeron que mi deseo rompía a la niña.

Tenazas, así me llaman desde entonces por estos lares.

A todos nos tomó por sorpresa este cuento que esta vez era ¡todo!

Muchas cartas se perdieron al morir su dueño, está casi le sucede lo mismo, el pueblo de Ninfala
es ahora una pequeña ciudad en las afueras del país, y ese cuento esta vez no está acompañado
de ninguna nota, solo bastaba preguntarle a alguien de ahí si sabía algo acerca de lo que se
mencionaba en la historia, las respuesta fueron rotundos “NO”, pero la carta concordaba con
todo aspecto a la primer máquina de escribir, era parte de ella. La gente lo acepto como cierto,
no hubo mucha investigación, muchos atribuían que la gente del lugar no supiera de la historia
por lo vieja que era, muchas personas ahora aceptaban ciegamente que Aquiles pudo en algún
momento de su vida “Oír a los muertos”.

¿Cómo convences a las personas de algo como esto? Y más importante aún ¿Cómo les
demuestras que están equivocadas luego de que las engañaran así?

Creía haberlo resuelto, pero necesitaba un par de pruebas más y es ahí cuando María llego a
salvarme, ella logro contactar con mucha gente junto a su equipo, familiares de los que les
fueron enviadas copias, amigos de la familia Mogrard, pero ninguno brindo información que
fuera de ayuda para la investigación; excepto alguien que hablo con la prensa, Saúl Martino
Espinoza Paz quien no guardaba la carta de Sofía, ni el libro, pero tenía algo más importante
que contarme, porqué él había conocido a Sofía desde muy joven. María se había dado por
vencida en intentar probarme que su punto de vista estaba correcto, por lo que decidió
enviarme con Saúl, Si lograba que me dijera algo diferente a lo que ya les había dicho a los
investigadores, a lo mejor probaría mi punto.

Para este momento he oído a cada uno de los fragmentos del pasado de Sofía, sin darme
cuenta me desvié completamente de la opinión popular, ya no creo que Aquiles sea el escritor
que busco, pero no sé realmente quien fue Sofía, distintas personas hablan de una Sofía muy
distinta. Mi razón no puede contra sus recuerdos, todos no pueden tener razón, pero varias
fuentes pueden darme una mejor idea de cómo fue “la verdadera Sofía”.

Saúl Martino Espinoza es un hombre muy interesante, a sus ochenta y seis años se le ve vivaz y
muy feliz, tuvo cinco hijos, ya todos casados, un ingeniero civil retirado, que disfruta su retiro
leyendo y viajando.

Todo parece haberle salido bien...

Quisiera preguntarle algunas cosas directamente, pero ya mucha gente hizo eso, todos le
preguntaron sobre Aquiles, como era, de donde lo conoció, si sabe de dónde saco toda esa
información. Así que intente esquivar cada pregunta que pudieran haberle formulado ya,
porque mi tiempo era breve.

Se le veía en la cara lo que esperaba que fuera esta entrevista, alguno podría decir que tenía
todas las respuestas listas…

¿Cuénteme como era Sofía de joven?

Su cara cambió completamente, comencé a pensar que no iba a responderme, no se veía con
ganas de hacerlo. Luego me dijo:

Nadie me había preguntado por ella en un buen tiempo. Le contare con gusto si me responde
primero ¿Qué fue lo que hizo ahora para que pregunte por ella?

Siempre respete a la gente adulta, tengo tantos buenos recuerdo de mi abuela y tan pocos
malos, sin querer me enseño que no puedes hacer cambiar de opinión a un anciano y aunque
pudieras, no deberías, ya se ganó el derecho a estar equivocado. La pregunta que me formulo
me dio la respuesta que necesitaba para atreverme a responderle.

“Le parece poco haber escrito todas estas cartas y enviarlas como si fueran reales. “

No tengo idea de cuánto creía que yo sabía sobre Sofía, pero esa repuesta le basto para
comenzar a contarme con una sonrisa y un café que mando a preparar a su nieta Madeleine,
de pronto mi tiempo parecía haberse extendido.

Que puedo decir de Sofía, todos la conocían bien, creo que hace algunas décadas atrás,
cualquiera hubiera podido responder tu pregunta mejor que yo, seguramente ya sabes que
tenía una enfermedad mental, Esquizofrenia indiferenciada, un término bonito para decir
que no tienen ni puta idea de que es lo que padeces.

Cuando era chica tuvo varios episodios psicóticos, a ella no le gustaba contar estas cosas,
pero debido a que en uno de ellos se clavó un lápiz en su oído izquierdo, a largo plazo
terminaba contándole a todos sobre esto. Usted recordara la carta que enviaron donde
Aquiles cuenta una historia a lo mejor exagerada sobre la Sofía joven, la verdad es que Sofía
no conoció a Aquiles hasta la universidad, y al conocerlo, lo único que hacía era contarle
cosas, los cuentos brotaban de ella naturalmente, no eran mentiras, no eran verdades, su
mundo era una mezcla de estas dos cosas, y para Aquiles esto era fascinante. Se enamoró
perdidamente de ella.

->Y Sofía lo amaba<lo interrumpí y pregunte >

Ella lo quería, mas no puedo decir con certeza que lo amara, por lo menos no tanto como él
la amaba a ella. Y es que Aquiles no veía a Sofía con sus ojos, él la veía con sus oídos.

“Para Aquiles Sofía eran sus historias, por más increíbles que parecieran”

Para darle un ejemplo, su madre era una santa, yo los solía visitar y ella dejaba que Sofía
hiciera lo que quisiera, recuerdo que otros chicos nos dimos cuenta que Sofía oía cosas que
no existían, muy pronto aquello que parecía una niñería fue notado por su madre, ella creía
en su hija, fue como a los ocho años que le diagnosticaron Esquizofrenia. Como no íbamos al
mismo salón en la escuela, yo no me entere de estas cosas sino hasta años después cuando
oí a mi madre y a una vecina hablando al respecto. Nunca entenderé como es que ellas se
distanciaron tanto una de la otra, lo único que se con certeza es que a su madre le afecto
mucho más que a Sofía.

Doña Cecilia, la única mujer que me ha partido el alma al verla llorar sin ser parte de mi
familia. El día que Sofía se fue con Aquiles para no regresar por mucho tiempo.

Y debo decirle que seguía viendo a Sofía en la universidad o cuando iba de visita con Aquiles,
ella siempre se veía tan feliz que por mucho tiempo la llegue a odiar. La empatía que genere
por su madre fue tan fuerte que solo podía odiarla. Ahora que lo pienso, creo que nunca la
perdone realmente por eso, ella me seguía viendo como un amigo, aunque yo a ella no.

Aquiles era otra historia, él se veía como el príncipe que salvo a la princesa, no paraban de
contarnos sus planes de remodelar la biblioteca de los Olivos, incluso luego de graduarnos,
los contactos de trabajo por la familia de Aquiles hicieron que siguiéramos en contacto, por
lo que seguí viendo a Sofía en muchas ocasiones, ya fuera en cenas de negocios o en eventos
festivos.

Cada que la veía me invitaba para que charláramos sobre lo viejos tiempos, para sus treinta
y dos años la mayor parte de sus amigos y conocidos ya sabíamos que Sofía tomaba
medicaciones para la Psicosis, ella tampoco lo escondía, le gustaba contar “como de joven,
esos medicamentos funcionaron tan bien que ella pudo llevar una vida normal”, Se
vanagloriaba de haber vencido a la esquizofrenia y todos le aplaudían, la protegían.

Aquiles luego me conto que cada vez tomaba más pastillas, pero a ella no le gustaba
aceptarlo, tampoco quería hacérselo saber, inventaba historias como que las había perdido
para comprar otro frasco o le pedía a algún amigo ayuda para conseguir otro sin que Aquiles
lo supiera. Él la amaba tanto que nunca le dijo que sabía, la amaba tanto que ignoraba
cuando alguien le hablaba mal de ella, no sé qué tan cierto sea pero en dos ocasiones
circularon rumores de que ella engañaba a Aquiles, mi esposa podría contarle más sobre los
detalles de esos chismes, yo la verdad solo recuerdo que ella era una descarada. Aun
sabiendo lo que la gente decía, le pedía a Aquiles que la llevara a ver al bibliotecario de
Ceriliano, Agustín Cerrano. No sé qué tanto de lo que se dijo sea verdad pero… <divaga unos
segundos, respira y sigue>

A Aquiles esto no le afecto para seguirla amando, pareciera que no le importara lo que los
demás dijeran.

A eso de los cuarenta y tantos años, supe que estaba escribiendo un libro, por muchos años
oí sus cuentos, leí sus columnas en distintos medios y periódicos, pero a pesar de siempre
hablar sobre escribir un libro, los años pasaron y nunca hubo indicios siquiera de su
escritura.

Luego un día recibí una invitación, yo era casi el ultimo me dijo Sofía, me conto sobre su
libro, sus ideas, no menciono mucho, solo me pidió información de mi familia, cosas sin
importancia. Dijo que me enviaría una copia de su libro cuando estuviera listo, hablamos de
muchas cosas más, nunca supe diferenciar cuando ella decía la verdad y cuando mentía,
solamente me hacia el interesado en escucharla. Algunos de mis amigos estaban ansiosos
por leer lo que escribían Ella y Aquiles.

Sin embargo cuando llego tuvo un sabor agridulce para algunos, para comenzar, Sofía no
recibía ningún crédito en el libro, además que a algunos les molesto que sus familias fueran
mencionadas sin su permiso. Según entendí, les parecía difamación. Pero se trataba de
ficción ¿o no?

Yo no recuerdo muy bien la carta que iba dirigida a mí, pero recuerdo que era un cuento
fantástico donde mi tatarabuelo fue el responsable de hacer algo, ya no recuerdo que. Solo
recuerdo que fue algo que le mencione a Sofía. Hasta el día de hoy no sé cuánto de verdad
hay en lo que escribió y cuando de mentiras.

Por mucho tiempo el cuento me fascino, a ella le pareció adecuado darnos datos y pistas de
una forma tan real que debo decir me asusta ahora saber que muchos de ellos eran ciertos.

Hable con ella unas tres semanas antes que se quitara la vida, esperaba a Aquiles para
aconsejarlo sobre las ampliaciones que planeaban hacer en Los Olivos, tenía cincuenta y un
años y por primera vez la vi demostrar una seriedad que no había visto en su persona nunca,
no podía hacer muchas cosas por sí sola, ahora tenía una sirvienta que le traía todo y la
vigilaba, no lo quería decir, pero se veía que odiaba todo eso, me conto que ya nadie creía
sus historias, me dio mucha risa porque le dije que eso era algo sin importancia. Lo último
que recuerdo de ella fue lo que me dijo de la verdad. Una buena mentira es mejor que la
verdad, porque cuando le haces creer una buena mentira a las personas, estas están tan
complacidas de escucharla que desechan toda otra posibilidad. La oí decirme como dos veces
que ya no tenía razones para estar en este mundo.

Aquiles se preocupaba mucho por ella, me menciono que la medicina parecía ya no hacerle
efecto, cada vez estaba peor, por lo que ahora necesitaba supervisión constante, para ese
momento le habían quitado la licencia de conducir.

El día de su suicidio estaba fuera de la ciudad, por lo que solo asistí a su funeral luego, llego
mucha gente, toda la familia Mogrard lo sentía. Pero Aquiles, esa pobre alma murió con ella.
Le presente mi más sentido pésame y debo decir que de nuevo lo hizo. Sofía volvió a dañar a
otra persona que la amaba.
Esa mujer me hizo odiarla hasta en su funeral, y debo decir que lamento admitir que la odie,
porque a diferencia de otros, yo nunca lo demostré, parecía su amigo e incluso todos me
veían así.

Con el paso del tiempo me distancie mucho de Aquiles, tampoco me di cuenta pero todos lo
hicieron, parecía que su esposa era quien en realidad tenía amigos, así debió sentirse en sus
zapatos, lo visite un par de veces en seis años, ya no era el mismo, abandono todo lo que le
importaba. A todos los que me han entrevistado les he dicho que Aquiles se mantuvo firme
ante las adversidades que le puso la vida, pero la verdad es que me sorprende incluso que no
se suicidara antes, ese hombre era solo una sombra de lo que solía ser.

No conocí a su hijo muy a fondo ni a su familia, pero supongo debió ser muy trágico para él
su perdida, no sé lo que es perder un hijo, menos una familia. Lo menos que puedo hacer es
hablar de Aquiles como pienso se lo merece y no como fue en sus últimos días.

<No lo dijo, pero se sobreentendía que eso iba a ser lo último que me iba a decir, sin embargo,
no quería dejarlo con estos pensamientos en la cabeza, jamás me perdonaría volver a dejar a
alguien que fue bueno conmigo así. Le pedí que me contara un poco de sí mismo, al principio
con la intención de agregarlo a este capítulo, pero luego de un rato de escucharlo y reírme con
él, prefiero guardármelo para mí, no hace falta en la historia. Luego me retire, ya tenía lo que
quería, lo que necesitaba, mi trabajo estaba por finalizar.
CAPITULO XVI
-Ultima Oportunidad-
Oportunidad-

Cualquiera estaría feliz de contarle todo lo que sabe a otra persona cuando sabe que le puede
ayudar a salir de su error, pero a veces olvida que a lo mejor la otra persona no quiera aceptar
estar en un error. Y solo un terco intentaría seguir tratando de hacer que crean su punto de
vista, yo falle rotundamente en cada oportunidad que tuve para explicarle lo que sabía a Josué,
esta vez era mi última oportunidad para presentarle lo que me pidió, ¡RESPUESTAS!

Pensé muy bien que es lo que iba a hacer, tome nota de las cosas que iba a decir, y llame a Josué
para presentarle a la única persona viva que a lo mejor sabía de dónde sacaron la información
de su familia.

Solo de pensar en que todo puede salir mal me tenía muy alterado, la persona que fuimos a
ver para este momento ya no esperaba visitas, dijo todo lo que los medios querían escuchar,
se comportó justo como debía, armo el circo que Sofía siempre quiso.

Llegamos a eso de las 2:20 PM, nos recibieron calurosamente, Josué no se presentó como tal
para no causar un revuelo, le pedí que no dijera mucho, era mi turno de demostrarle lo que
sabía. Nos atiende Caleb Rodrigo Estor Bran, a quien todos atribuían haber comenzado este
revuelo. Ningún reportero logro sacarle alguna información al respecto que pudiera darnos una
idea de dónde sacaron la información que contenían las cartas. Por eso mismo decidí jugármelas
a todo o nada.

“Quiero decirle que venimos a verlo hoy porque tenemos una pregunta, pero también
tenemos algo que contarle”

Caleb se veía interesado, pero a la vez seguro, ya todo lo que se podía contar se contó. Sin
dudarlo me dijo que le contara, así que eso hice.

“Sabemos que fue Sofia Mogrard la mente detrás de estas cartas, no intente negarlo, Agustín
conto lo que sabía, hablo conmigo sobre su relación con Sofía, de cómo Sofía escribió una copia
extra para que todos aquellos que quisieran archivarla la enviaran a la biblioteca de los Olivos,
todo fue muy claro desde ahí, Además, usted mismo dijo que Aquiles no escribió esas cartas,
sabíamos que decía la verdad, así que no era de buscar muy lejos, además sabemos que usted
altero algunos cuentos con una de las máquinas de escribir extraídas de la biblioteca de los olivos,
lo hizo para que los cuentos no delataran a Sofía, sabemos esto porque tenemos uno de los
cuentos originales. ”

<Con mucho cuidado le enseñe una foto del sobre viejo que guardaba Agustín en el apartado
de la bibliteca, “El dios omnipotente” se leía con la letra de Sofía>

“Esa es la letra de Sofia mogrard, no hay duda”-> dijo Caleb sin titubear, no podía creer que
Agustín supiera todas esas cosas.

“Pero eso no es todo lo que tenemos, la pista más grande la dio Juan Ernesto Florentiní
Aturdía, él nos ayudó a entender las razones de Sofía, sabemos que simplemente se trababa de
un juego para ella, y no nos sorprende luego que él nos contara como era Sofía, no fue fácil
para él adivinarlo, después de todo, solo les envió sus libros con pocas instrucciones de que
hacer, para Juan resolver este acertijo le llevo muchos años.

Sabemos que cambiaste la carta de su hijo, eras el único que podría haberlo hecho, fue un
buen gesto, para recordar a Aquiles.”

Para este momento, Caleb ya no estaba calmado, estaba pasmado, parecía que no podía creer
lo que le estaba diciendo. Unas palabras iban a salir de su boca “No pueden creer que-” Le pedí
que parara cordialmente, quería terminar de hablar, luego le dije que al terminar lo dejaría
“decir lo que tenía que decir”.

“Sé que parece difícil de creer que lo resolviéramos, pero así es Caleb, esto se acabó, lo
sabemos todo, la enfermedad que hizo a Sofía tener que parar con su juego, nos contó sobre
ella Saúl Espinoza, y sobre lo buena que era mintiendo. Mire, sé que va negar todo lo que le
acabamos de decir, no lo culpo, pero venimos a verlo solo por una pregunta. Si después que le
contamos todo esto usted aun no la quiere responder entenderemos y nos retiraremos. ”

Me vio, a los ojos, totalmente derrotado, mientras Josué solamente escuchaba con una cara
de pocos amigos, luego me dijo que respondería a nuestra pregunta si podía hacerlo.

Deje que Josué le formulase la pregunta, ¿De dónde saco Sofía la información de mi familia?

En los amanales quedaba un hombre, quien fue descendiente directo del tipo que tu
bisabuelo fusilo, ese hombre busco toda su vida respuestas sobre la muerte de su padre, tu
tal vez no lo sepas porque eres muy joven, pero según contaba, en los amanales habían
ciertas cosas que no se hacían y una de ellas era ir al cerro del potro, según parece luego de
muchos años uno de los que ayudo a atar al fusilado no pudo más y le comento en su lecho
de muerte estas cosas a su cuñado, quien no era otro que el hijo del fusilado.

Pero para un viejo, la venganza no es importante ya. Sofía me comento que se enteró de esta
historia luego que hablo con unos habitantes del pueblo, y atesoro la historia aunque
pudiera ser falsa.

No sé cuánto de real hay en esta historia, a ella le encantaba mentir, era muy buena en ello.
Eso es todo lo que se. ¿Y ahora que van a hacer con esta información?

Se le veía preocupado, así que quise confortarlo, le dije que “no se preocupe, si una verdad
pesa demasiado nunca saldrá a flote”, me vio y se puso feliz, entendió bien de quien era la
frase; Luego nos preguntó si queríamos saber la razón que lo llevo a enviar estas cartas,
obviamente escuchamos lo que querida decir.

“Creía que un suceso como este podría alegrar a Aquiles, no sé cuánto con certeza pudo
saber sobre las cartas, pero sabía que recordaba que eran de Sofía; solo eso lograba hacerlo
hablar cuando lo iba a visitar, me costó mucho encontrar copias en la biblioteca y más aún
tener el valor de enviar alguna, sin embargo pude contactar con algunos viejos amigos que
aun querían participar, ya no quedaban muchos, tuve que improvisar con lo que tenía y rezar
porque los demás recordaran lo que tenían que hacer. Muchas cartas ya no existían, por eso
llegaron tan lejanas una de otra. ”

<Y por eso cambio una carta cuando se enteró que había muerto Aquiles, porqué ya no tenía
razón para seguir enviándolas, por eso se expuso tanto. >Le dije.

En efecto, ya no me interesaba más, pero a la gente si y me pareció correcto que recordaran


la buena persona que fue Aquiles, que cuido de mí y de Sofía todo lo que pudo. La única razón
por la que lo recordaban era por ser un terco en descubrir la razón del accidente aéreo de su
hijo. Sufrió tanto que sentí, merecía más respeto.

Josué estaba estupefacto pero tranquilo, podía cerrar un capítulo de su vida, un largo y muy
confuso capitulo, me siguió el juego como si supiera que no estaba siendo totalmente sincero,
no lo pude engañar a él, pero de no hacer lo que hice quizás nunca hubiéramos obtenido
respuestas. Luego Josué pregunta:

“Si esto era solo para que Aquiles lo supiera, ¿Por qué enviaste una copia a la biblioteca?”

Creí que eso se los había explicado Agustín, pero veo que no, una de las únicas cosas que Sofía
pidió fue que se enviara una carta a la biblioteca de Ceriliano, las veinte o veintiún cartas
contenían dos libros en realidad Su asesino de héroes y el cuentario de Aquiles; estas serían
archivadas a diferencia del libro de Aquiles que no lo logró. Ella no quería ser recordada, eso
lo dejo muy en claro, por eso se enviaban anónimas.

Caleb se veía muy distinto, lo había logrado engañar, no con hechos, sino con nombres y
supuestos; yo sabía que él no había podido hablar con todos los conocidos de Sofía, mucho
menos con Agustín, quien pudiera haber sido su amante. Además con esas palabras me dejo
claro que no sabía la razón de que Sofía quisiera enviar las cartas, que obviamente iban dirigidas
a Agustín; o quizás si lo sabía y prefirió no decirme.

Sé que cometí un gran pecado al llenar vacíos con mis suposiciones, al incriminar a Agustín
Cerrano para hacer que me creyera Caleb, pero tenía que hacerlo. Estaba seguro que Caleb no
tenía forma de saber cuánto Sabia Agustín sobre las cartas, y estoy seguro que Agustín sabia
más, aunque lo que sabe se lo llevara a la tumba, porque es un caballero protegiendo la imagen
de una dama.

Le agradecimos a Caleb su tiempo, nos despedimos, no es fácil para mi admitirlo, pero hay miles
de cosas que nunca sabré de este caso, aunque hayan miles de personas que digan haberlo
resuelto ya; no digo haber resuelto el misterio del asesino de héroes, más bien digo que resolví
mi caso y de paso ayude a un amigo.

Dar la noticia no fue tan fácil, mucha gente hablo con las mismas personas que yo, pero no por
eso llego a mis mismas conclusiones, incluso a las personas que me pidieron les informara de
mis progresos les parecía muy difícil de creer comparado con las pistas que ellos tenían, El
bibliotecario de Ceriliano no le hizo gracia que pensara lo opuesto a lo que me dijo. Y claro Caleb
negaría esta entrevista en cualquier otra ocasión. Me topé con un gran problema, aun pudiendo
explicar la carta de los Sierra, ¡no podía explicar la demás!, nadie podía, solo suponían; justo
como lo hice yo. Así que sus ideas eran tan posibles como lo que yo les estaba presentando. Para
ser sinceros, Yo no me creería si fuera ellos.
Mis respuestas no le gustaron a la mayoría, creo que por eso escribí este libro, para que de
alguna manera pudieran entenderme, aunque solamente me importaba la opinión de una
persona, mi amigo Josué Sierra, que se le veía feliz con las respuestas. La admiración que tenía
por la historia no se había esfumado, quiso hacer los cambios necesarios en el museo para contar
la nueva historia, fuera totalmente cierta o no, ya no le preocupaba tanto. Me encanta verlo tan
feliz; por mi parte lamento terminar esta historia sin un cuento. No sé si me volví un buen
mentiroso o solamente tuve suerte que la única persona que podía darnos respuestas me
creyera. Porque dentro de mí sé que existe la posibilidad que esa persona simplemente siguiera
mi juego y me dijera lo que quería escuchar.

Después de todo, ¿por qué me mentiría como hizo con todos los demás?

-FIN-
Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-
CompartirIgual 4.0 Internacional. Para ver una copia de esta licencia, visita
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/.

Você também pode gostar