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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD YACAMBÚ

BARQUISIMETO – EDO. LARA

ANÁLISIS DEL CÓDIGO DE ÉTICA PROFESIONAL DEL

PSICÓLOGO DE VENEZUELA

BACHILLER:

FLORES R. ALEJANDRA E. V-17.468.239

BARQUISIMETO, 20 DE NOVIEMBRE DE 2016


Introducción

La ética hace referencia a la conducta moral del individuo, esta se incentiva


desde que el sujeto cuenta con herramientas cognitivas y neuronales para
comprender este término tan subjetivo. Su significado varía culturalmente,
socialmente, personalmente y profesionalmente, este último con el fin de crear
unos parámetros objetivos en el desarrollo de ciertas actividades económicas.

Para estandarizar esto se crea un código, que no es más que una


composición de signos con valor intangible dentro de un sistema. Son normativas
que regulan el ejercicio.

La unión de ambos conceptos fijan normas comportamentales dentro de un


organismo o una profesión y aunque no se establecen castigos es de carácter
obligatorio su cumplimiento.

La profesión de la psicología no es la excepción, más aun cuando trata con


el aspecto más íntimo y subjetivo del individuo, un aspecto particular en vista que
los pensamientos y emociones se pueden exteriorizar y el paciente necesita
privacidad y profesionalismo al tratar estos temas.

De igual manera al ser una profesión que maneja aspectos tan subjetivos
se intenta con el código de ética profesional del psicólogo brindar estructura y
parámetros para su ejecución y desarrollo.

A continuación se realizará un breve resumen de los artículos que


particularmente considero más imperiosos y con mayor importancia al momento
de ejercer esta profesión.
Análisis del Código de Ética Profesional del Psicólogo en Venezuela

Inicialmente este código de ética establece una normativa unificada a nivel


nacional, sin brindar apertura en el cambio o toma de decisiones con respecto al
mismo, esto lo establece el primer artículo que reza lo siguiente:

“Artículo 1: El presente Código es de obligatorio cumplimiento


para todo Psicólogo que ejerza la profesión en Territorio Venezolano.
Ningún Colegio de Psicólogos podrá promulgar normas deontológicas
profesionales que contraríen o menoscaben en cualquier forma las
establecidas en este Código.”

A su vez, en su artículo nro. 2 establece cuales son el resto de normativas


que rigen la profesión, sin menoscabar ni contraponer unas con las otras, puesto
que cada una de ellas sirve para regular aspectos con formas legales diferentes.

“Artículo 2: También son obligatorias para el Psicólogo las


disposiciones contenidas en la Ley del Ejercicio de la Psicología y en los
Reglamentos, Acuerdos, Resoluciones y demás decisiones de la Federación
de Psicólogos de Venezuela, del Colegio en cuya jurisdicción ejerza la
profesión y del Instituto de Previsión Social del Psicólogo.”

De igual manera hay artículos que describen o expresan lo obvio de esta y


todas las profesiones u oficios, por lo que considero innecesario hacer referencia
tal como se observa en el siguiente artículo:

“Artículo 4: El ejercicio de la Psicología constituye una profesión


eminentemente digna y humana.”

El siguiente artículo intenta regular características inherentes a la


personalidad, lo que es poco objetivo y realista, puesto que existen aspectos
individuales que no miden la calidad del profesional, esto con referencia a:
“Artículo 6: Fuera del ejercicio de la Psicología, y aún en el
ámbito de la vida privada, el psicólogo debe mantener en alta estima su
propia dignidad personal y profesional.”

Este código a su vez incentiva al quehacer social, el compromiso, el


desarrollo constante personal y profesional, pues motiva estos aspectos y los
señala como deber del psicólogo el mantenerse actualizado y el prestar su servicio
desinteresado:

“Artículo 12: El Psicólogo debe prestar su colaboración


desinteresada en todas las actividades que puedan contribuir al
desarrollo de la Psicología como ciencia y como profesión.

Artículo 14: Es éticamente ineludible para el profesional de la


Psicología, una constante preocupación por la formación intelectual,
esforzándose por estar en permanente actualización de
conocimientos respecto a los adelantos de la ciencia.”

En el ámbito de la psicología constantemente hay investigaciones,


actualizaciones y desarrollos científicos, puesto que el individuo cada vez se va
reestructurando y readaptando a su entorno, esto obliga a mantener una
búsqueda constante de saberes sin descuidar el conocimiento de campo.

“Artículo 17: Al Psicólogo le está absolutamente vedado hacer uso


con fines profesionales de medios, recursos y técnicas que sugieran la
consumición de drogas o substancias estupefacientes; de lo
contrario, se hacen acreedores a la más grave sanción ética, sin perjuicio
de lo dispuesto por el Código Penal.”

Con respecto a este artículo se hace referencia a una cierta confusión que
existe entre el público en general y por qué no, entre algunos profesionales, con la
profesión de la psiquiatría, quienes pueden medicar con el fin de tratar ciertos
síntomas característicos de las enfermedades mentales. El psicólogo sólo puede
trabajar con las herramientas proporcionada por sus estudios académicos
contentivos de estrategias psicoterapéuticas, sin promover u obligar al consumo
de medicamentos psicotrópicos o no.

“Artículo 20: Está prohibido al Psicólogo dar informes


tendenciosos, otorgar certificaciones y prescripciones de complacencia, y
en todo caso, expedir certificaciones e informes sin estudio previo
basado en la observación directa y personal.”

Este artículo continua vigente, sin embargo a nivel personal debe


reestructurarse cuanto antes considerando los siguientes aspectos, primero, la
tecnología en la actualidad brinda herramientas idóneas para realizar atención,
tratamientos e intervenciones psicológicas sin la necesidad que el paciente o
cliente se encuentre presente, esto considerando las necesidades y exigencias
que a su vez hace el entorno, donde estos no siempre cuentan con el tiempo
necesario para dirigirse a un consultorio u oficina de atención psicológica, y el
psicólogo se le dificulta también el movilizarse hasta los mismos, otro aspecto no
menos importante es la atención a ciertas patologías, que limitan al individuo en su
movilización natural hacia el centro de atención, un ejemplo de ello es el trastorno
psicológico de la agorafobia, donde el sujeto teme de manera excesiva y limitante
a los espacios abiertos o la fobia social lo que también limita al paciente en su
desenvolvimiento personal y que sus síntomas no mejorarán sin la debida
atención psicológica y psiquiátrica.

“Artículo 22: Atenta contra la ética profesional del Psicólogo


aceptar más de un cargo remunerado cuando esto signifique el
cabalgamiento de sus horarios.”

Esta norma no es solo inherente de la profesión de psicología, lo es a


todas, en vista que al realizar actividades de esta forma no permite que realice sus
funciones adecuadamente además que limita la obtención de oportunidades
laborales a otros colegas.
“Artículo 26: El Psicólogo debe prestar atención con igual grado de
celo profesional a todos los consultantes, sea cual sea su
nacionalidad, raza, sexo, edad, credo religioso, ideas políticas o
posición social.”

A pesar que esto sería lo ideal, el psicólogo tiende a especializarse en


áreas puntuales y específicas, teniendo a su vez el derecho de establecer cuál
sería su población de atención, el hecho de obtener un título en psicología no
limita o elimina ciertas creencias, si el profesional considera que no sería objetivo
con cierto grupo de pacientes es más ético que los remita a un colega especialista
en el área o con más o mayor tolerancia hacia ciertas personas.

“Artículo 39: Las placas exteriores para anuncios de los


Psicólogos en consultorios, clínicas, institutos, oficinas y otros, no
contendrán más datos de los ya señalados y sus dimensiones no
podrán exceder de 20 x 60 centímetros

.Artículo 40: Las placas exteriores para anunciar


establecimientos relativos al ejercicio de la Psicología sólo contendrán
el nombre del establecimiento, y nunca tendrán dimensiones superiores
a un (1) metro de alto por dos (2) metros de largo. Deben ser
confeccionados sin artificios luminosos y dentro de la mayor sencillez.

Artículo 41: Las tarjetas de presentación del Psicólogo como tal


no contendrán más datos que los indicados en la letra a) del artículo
38 y podrán incluir el símbolo: Psic. Aquellos Psicólogos que
representan a una institución con personalidad jurídica podrían usar
el logotipo de tal institución, siempre que esto no colida con lo establecido
en el artículo 38 de este Código.

Artículo 42: Está prohibido al Psicólogo toda forma de


competencia desleal. Se presume ésta en la oferta o sugerencias
publicitarias de curaciones milagrosas o mágicas, por medio de frases,
dibujos o signos similares.”

Estos artículos hacen referencia a una competencia leal y unificada, es


cierto que el mercado es demandante y cada profesional ofrece servicios de tal
manera de obtener más clientes, sin embargo se establecen ciertas limitantes con
el fin que exista un respeto a la profesión y al colega, se busca que el psicólogo
haga su cartera de clientes sin atropellar o menoscabar el trabajo de los demás,
pertenezcan al gremio de psicólogos u otra profesión.

“Artículo 74: Los materiales preparados por miembros de una


organización como parte de sus obligaciones en la misma y con
recursos de ésta son propiedad de la organización. Dichos materiales
sólo deben utilizarse o publicarse con la autorización de la misma
y las ganancias o beneficios que de ellos provinieren, deben ser
justamente repartidos entre los colaboradores.”

En este particular se empieza a establecer el concepto de privacidad,


característica que rige la profesión de la psicología a nivel mundial.

“Artículo 103: El Psicólogo no está en la obligación de rehabilitar,


si esta es la situación, pero sí, al menos, de instrumentar estrategias
de intervención que permitan aliviar el conflicto o problema”

Este artículo es importante al momento de desmitificar la labor del


psicólogo, sobre todo cuando existe una relación dependiente como la que existe
entre padres e hijos, entre parejas, con docentes, etc.

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