Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
El tamaño de la pieza: cuanto más espesor tenga la pieza más hay que aumentar el
ciclo de duración del proceso de calentamiento y de enfriamiento.
La composición química del acero: en general los elementos de aleación facilitan el
temple.
El tamaño del grano: influye principalmente en la velocidad crítica del temple, tiene
mayor templabilidad el de grano grueso.
El medio de enfriamiento: el más adecuado para templar un acero es aquel que
consiga una velocidad de temple ligeramente superior a la crítica. Los medios más
utilizados son: aire, aceite, agua, baño de Plomo, baño de Mercurio, baño de sales
fundidas y polímeros hidrosolubles.
Principio:
El tratamiento de temple consiste en enfriar de manera controlada a la mayoría de las
variantes de aceros aleados previamente calentados a temperaturas de entre 750 °C y 1.300
°C.
Dependiendo del material base, la temperatura y tiempo de calentamiento, y severidad del
enfriamiento se puede conseguir una amplia gama de durezas.
Posterior al temple se realiza un tratamiento de revenido de tipo 1 a temperaturas de entre
200 °C y 300 °C con la finalidad de optimizar la tenacidad y reducir la fragilidad de las piezas.
Equipo:
Durómetro Rockwell
Horno
Beneficios:
Incrementa su dureza
Resistencia al rozamiento
Reduce la cristalización
Incrementa la resistencia mecánica
Limitantes:
Presenta fragilidad
Baja ductilidad
Baja tenacidad
Lista de materiales:
Durómetro Rockwell
Horno
Lista de herramientas:
Tenazas
Equipo de protección personal:
Guantes
Peto
Pantalón de mezclilla
Camisa manga larga
Zapato cerrado
Instrucciones de operación:
1. Seleccionamos una pieza de acero para someterla a pruebas de dureza.
2. Con la ayuda de un durómetro y una carga de 150 kg, tomamos tres medidas
diferentes para promediar la dureza de la pieza:
Medida #1: 18.5 Rockwell
Medida #2: 11.1 Rockwell
Medida #3: 14.0 Rockwell
Dureza Promedio: 14.53 Rockwell
3. Colocamos la pieza en el horno a 120 °C durante 90 min.
4. Una vez cumplido el tiempo de permanencia, se extrae la pieza
5. Rápidamente, sumergimos la pieza en un baño de aceite automotriz para su
enfriamiento, dando movimientos constantes dentro del aceite.
6. Después de un tiempo, sacamos la pieza del aceite y la limpiamos. Con ayuda de una
lija, retiramos el óxido formado.
7. Una vez limpia la pieza, volvemos a tomar la medida de la dureza, aplicando una vez
más el método de promediarla por medio de tres medidas:
Medida #1: 55.5 Rockwell
Medida #2: 59.5 Rockwell
Medida #3: 57.0 Rockwell
Dureza Final Promedio: 57.33 Rockwell
Resultados:
Comparando la dureza promedio inicial, 14.53 Rockwell, con la dureza promedio obtenida
como resultado, 57.33 Rockwell, podemos observar que se incremento en gran medida por
lo que podemos comprobar la teoría investigada acerca de cómo el temple es un buen
tratamiento térmico para aumentar la dureza en un acero aleado.
CONCLUSIÓN.
Para realizar esta práctica, primeramente, se tuvo que hacer una investigación previa para
comprender que era lo que se buscaba comprobar con esta práctica.
Según lo investigado, el temple es usado para aumentar la dureza del acero y una vez
tomada las medidas pertinentes logramos que, ciertamente, este proceso ayuda a
aumentar la dureza del material, aunque su fragilidad y resistencia mecánica se ven
afectadas.
Al realizar las medidas, hay posibilidades de que haya habido errores al tomarlas puesto
que las compañeras no contaban con la experiencia suficiente, por ello decidimos tomar
tres medidas diferentes y promediarlas para reducir el margen de error.