Capítulo 2.

Las etapas del proceso de la investigación1

Marie-Fabienne Fortin, José Cöté y Bilkis Vissandjée

El proceso de investigación científica se lleva a cabo generalmente de una forma

ordenada y a través de una serie de etapas. Es el sentido mismo del término
“proceso” el que sugiere las fases progresivas que conducen a una meta.

En esta obra, el proceso de la investigación ha sido dividido según tres fases:

conceptual, metodológica y empírica. Cada una cubre etapas del trabajo
determinadas. Antes de emprender el examen detallado de cada una de las etapas
mencionadas del proceso de la investigación, nos detendremos en los principales
términos propios del proceso de la investigación científica.

3.1 Definición de los términos ligados a la investigación científica

Observación

La observación es la clave del conocimiento y constituye el elemento central del

proceso de investigación. Observar, es considerar con atención a fin de conocer
mejor y comprender la realidad. La observación científica está estrechamente ligada
a la teoría, la cual explica las relaciones entre los hechos observados y las
propuestas (Seaman, 1987). El investigador puede partir de una teoría para ir hacia
la observación, o por el contrario ir de la observación a la teoría. Los medios
utilizados por el investigador para observar varían en función de lo que es
observado. La observación se encuentra en cada una de las etapas de una
investigación. Basada en los conocimientos previos, ella es el reflejo de teorías que
son verificadas bajo la forma de hipótesis debido a la acuciosidad y la intuición del
investigador.

Concepto

Los conceptos son los elementos fundamentales del lenguaje que trasmiten los
pensamientos, las ideas y las nociones abstractas, pues resumen y categorizan las
observaciones concretas. Los conceptos sirven para unir el pensamiento abstracto
y la experiencia sensorial. El término mismo de “concepto” se encuentra en la base
de la investigación ya que son los conceptos y sus relaciones mutuas, las que
constituyen las propuestas teóricas que son verificadas bajo la forma de hipótesis
por la investigación. Un concepto es una idea abstracta que representa las

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Marie-Fabienne Fortin. Le processus de la Recherche. De la conception á la réalisation, Décarie Éditeur inc.
Québec Canada, 1996. Material de apoyo para la materia de Metodología para la Investigación Política del
Dr. Héctor Zamitiz Gamboa. Traducción Marilúz Suárez.
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manifestaciones de ciertos comportamientos o características como el dolor, la

salud, el shock nervioso, por ejemplo.

Construcción

Una variante de la noción de concepto es la de “construcción”. Según Kerlinger

(1973), la construcción es un concepto especialmente inventado o adoptado por el
investigador con una meta científica precisa. El término construcción generalmente
tiene un significado más teórico que empírico, a menos que se encuentre ligado con
un hecho observable o con un fenómeno. Por ejemplo, la construcción del “sostén
social” no puede ser observada a menos que sea materializado en una realidad
tangible como la cantidad de cambios que una persona recibe de sus amigos o de
su entorno.

Variable

Aunque los términos concepto, construcción y variable sean a veces utilizados de

manera intercambiable, no pertenecen al mismo contexto de aplicaciones. Cuando
un concepto es puesto en acción en una investigación toma el nombre de “variable”.
Las variables son las cualidades, propiedades o características de objetos, de
personas o de situaciones que son estudiadas en una investigación. Una variable
puede tomar diferentes valores para expresar grados, cantidades, diferencias, etc.
Es un parámetro en el que los valores numéricos son asignados (Kerlinger, 1973).
Por ejemplo, el peso expresa diferentes valores que afectan a los objetos que son
más o menos pesados o más o menos ligeros.

Por definición, una variable tiene una propiedad inherente de variación y de

asignación de valores. Polit y Hungler (1995) precisan que la actividad de
investigación es iniciada con el fin de entender cómo y por qué los valores de una
variable cambian y cómo son asociadas con los diferentes valores de otras
variables.

Tipos de variables

Las variables pueden ser clasificadas de diferentes maneras según se utilicen en

una investigación. Algunas pueden ser manipuladas y otras controladas. Los tipos
de variables más comúnmente señaladas en las obras metodológicas son: 1) Las
variables independientes y dependientes, 2) Las variables de atributos, y 3) Las
variables externas.

1) LAS VARIABLES INDEPENDIENTES Y DEPENDIENTES

Las variables independientes y dependientes están ligadas en el estudio de tipo

experimental, en el sentido de que una afecta a la otra. Esta relación forma la base
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de la predicción y se expresa por la formulación de hipótesis. La variable

independiente es la que el investigador manipula en un estudio experimental para
medir el efecto sobre la variable dependiente. La variable independiente o
explicativa es frecuentemente llamada el tratamiento o la intervención, o
simplemente la variable experimental. A título de ejemplo, si se considera la
hipótesis según la cual una enseñanza estructurada ofrece a los pacientes tratados
por una cirugía cardiaca, disminuir su ansiedad, la variable independiente es la
enseñanza estructurada (en la cual se quieren medir los efectos) y la variable
dependiente (el nivel de ansiedad, en ese caso) es el que sigue el efecto esperado
de la variable independiente: es el comportamiento, la respuesta o el resultado
observado que se debe a la presencia de la variable independiente. La variable
dependiente es frecuentemente llamada la “variable criterio” o la “variable
explicada”. Hay que observar que en un estudio, puede haber diversas variables
dependientes sometidas al efecto de una o de varias variables independientes.

2) VARIABLES DE ATRIBUTOS

Las variables atributos son las características de los sujetos en un estudio. Son
generalmente las variables demográficas: edad, escolaridad, género, estatus
marital, ingresos, etnia, etc. La elección de variables atributos se encuentra
determinada en función de las necesidades del estudio. Una vez que los datos son
recogidos, la información sirve para trazar un perfil de características de los sujetos
de muestra.

3) LAS VARIABLES EXTERNAS

Son variables que pueden tener efectos inesperados y modificar los resultados de
una investigación. Ellas están presentes en todos los estudios y pueden influenciar
a la vez, a la variable independiente y a la variable dependiente. En el estudio del
tipo experimental, los sujetos son repartidos de manera aleatoria en los grupos de
manera que las variables extranjeras sean distribuidas aleatoriamente y no actúen
sobre las diferencias observadas entre los grupos (Contandriopoulos et coll. 1990).
En ausencia de la repartición aleatoria, el investigador debe reconocer sus variables
y tratar de limitar su influencia. Las variables extranjeras definidas por el
investigador al principio del estudio, pero que no pueda ser controladas, son
llamadas “variables confusas”. Frecuentemente, estas variables son introducidas en
el estudio y tomadas en cuenta en los análisis estadísticos (Burns y Grove, 1993).
Las variables de entorno físico y social, las variables demográficas y las
características individuales son frecuentemente citadas como variables
potencialmente confusas.

Definiciones conceptuales y operativas

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Los conceptos y las construcciones pueden ser definidos de dos formas, ya sea por
las definiciones conceptuales o por las definiciones operacionales. Una definición
conceptual define una construcción o un concepto con la ayuda de otras palabras,
como las definiciones encontradas en un diccionario. Una definición operativa
precisa las acciones o los comportamientos, expresados el describir cómo una
variable será medida. Según Kerlinger (1973), una definición operativa asigna una
significación a una construcción o a un concepto, al precisar las actividades o las
operaciones necesarias para medir el concepto o la construcción. Son las
instrucciones las que precisan como las observaciones serán hechas. Las
definiciones operacionales son esenciales en la investigación científica no solo
porque ellas permiten medir las variables, sino también porque ellas sirven de
puente entre la teoría y la observación (Kerllinger, 1973).

El proceso tendente a hacer operativo un concepto hace resurgir los lazos entre el
pensamiento y la experiencia, al delimitar cómo un concepto o una idea abstracta
será identificada y medida en términos concretos. Ciertas variables son más difíciles
de operacionalizarse que otras. Por ejemplo, es más fácil definir de manera
operativa los pesos, la talla o el ingreso familiar que conceptos de soledad y de
estimación propia. La preocupación de delimitar el significado acordado de los
conceptos por los participantes de la investigación justifica esta precisión. Como lo
indican Polit y Hungler (1995), es importante que los investigadores estén atentos
en la descripción de las bases conceptuales y metodologías de los conceptos
claves.

3.2 Fases y etapas de los procesos de la investigación

El proceso de la investigación incluye tres fases o etapas principales: 1) la fase

conceptual, 2) la fase metodológica y 3) la fase empírica. Estas etapas del proceso
no son independientes en absoluto ya que se relacionan para permitir una mejor
clarificación del objeto de estudio. Por ejemplo, en la fase conceptual, la primera
etapa consiste en definir un tema o área de investigación. En la segunda etapa, esta
área será examinada en función de los trabajos anteriores, redefinido, después
apoyado por un marco conceptual o teórico; y la tercera etapa, que proporcionará
una perspectiva más definida de estudio.

Fase conceptual

 Elegir y formular un problema de investigación

 Inventariar los escritos pertinentes
 Elaborar un marco de referencia
 Enunciar la meta, las preguntas de investigación o las hipótesis

Fase metodológica
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 Elegir un supuesto que guíe la investigación.

 Definir la población y la muestra
 Definir las variables
 Elegir los métodos de recolección y de análisis de los temas

Fase empírica

 Recabar los temas

 Analizar los temas
 Interpretar los resultados
 Comunicar los resultados

Fase conceptual

Conceptualizar supone un proceso, es una forma ordenada de formular las ideas,

de documentarlas alrededor de un sujeto preciso, que lleve a una concepción clara
y organizada del objeto de estudio. Para llegar a un buen fin en una investigación,
hay que aprender a pensar y hacer una buena pregunta, ( o varias preguntas)
encontrar una respuesta y verificar la validez de dicha respuesta.

La fase conceptual comienza cuando el investigador “juega” con una idea para
orientar su investigación. La idea puede provenir de una observación, de un
documento, de un interés con relación a un conocimiento en particular, o incluso de
un concepto. Frecuentemente el investigador descubre que su problema de
investigación es muy vasto para enunciar una sola pregunta, por lo que éste deberá
ser delimitado de manera que el estudio sea realizable.

Una revisión de la literatura proporcionará al investigador una comprensión de los

escritos existentes, situando todo su objeto de investigación en el contexto de los
conocimientos actuales. El conocimiento de los escritos anteriores relacionados con
el problema de investigación sugiere el tipo de pregunta que debe formularse y la
metodología apropiada para responderlas. La lectura de los trabajos anteriores
permite igualmente delimitar un marco conceptual o teórico que proporcione una
perspectiva de estudio. Estas actividades conducen progresivamente al enunciado
del objetivo, a las preguntas de la investigación o a las hipótesis.

La importancia de la fase conceptual es frecuentemente subestimada en el proceso

de la investigación. Sin embargo, ella parece ser una fase crucial, ya que el análisis
de una situación problemática necesita de una pregunta de investigación bien
formulada. Más aún, las observaciones sobre el campo temático, deberá
alimentarse de trabajos anteriores y de teorías que deberán justificar su pertinencia
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en el marco de los conocimientos actuales. Esta fase de conceptualización supone

entonces una etapa importante, ya que ella proporciona a la investigación sus
cimientos, su perspectiva y su alcance.

Sus cuatro principales etapas son descritas en los párrafos siguientes.

1) ELEGIR Y FORMULAR UN PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN

La etapa inicial del proceso de la investigación consiste en identificar un problema

de investigación que interese o preocupe al investigador y revista importancia para
la disciplina. Este problema puede estar asociado a las preocupaciones científicas
o sociales y representar comportamientos, observaciones, creencias, etc. Una
revisión inicial de los escritos pertinentes es esencial para esta etapa, con la
finalidad de situar dicho problema dentro del contexto de los conocimientos
actuales.

De manera general, el investigador elige un tema, con el fin de definir una pregunta
de investigación que pueda ser estudiada empíricamente. En el proceso de
formulación de una pregunta de investigación precisa, es importante considerar su
pertinencia, su alcance teórico y práctico, así como sus dimensiones metodológicas
y éticas.

En suma, la formulación de un problema de investigación consiste en desarrollar

una idea a través de una progresión lógica de opiniones, argumentos y hechos
relativos al estudio que se quiera emprender. El problema de investigación se
articula en el principal enunciado con relación al tema de interés.

Para formular un problema de investigación es esencial consultar los trabajos

anteriores, apoyarlo en un marco de referencia apropiado y ordenar todos los
elementos que forman parte del problema. La consulta de los trabajos anteriores
relativos al sujeto estudiado permitirá delimitar un marco de referencia teórico o
conceptual apropiado.

2) INVENTARIAR LOS ESCRITOS PERTINENTES (ESTADO DEL ARTE)

Un inventario de escritos es un texto que resume varios autores sobre un tema

preciso, para establecer vínculos entre ellos y exponer su problemática común
(Tremblay, 1994). Una revisión de escritos teóricos y empíricos pertinentes sobre
un tema de interés, permite determinar el nivel actual de conocimientos relativos al
problema de investigación a estudiar. El inventario de los escritos permite
determinar también los conceptos o la teoría que servirán de marco de referencia,
lo cual permite también poner de relieve las fortalezas y las debilidades de los
estudios examinados.
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3) ELABORAR UN MARCO DE REFERENCIA

De manera general el marco de referencia define la perspectiva según la cual el

problema de investigación será abordado y sitúa el estudio en un contexto
significativo. Es una estructura que une todos los componentes de un estudio. Se
distingue el marco conceptual y el marco teórico. La referencia con los conceptos
proveniente de teorías, de experiencias o de investigaciones, permite desarrollar el
marco conceptual en una situación particular. En cuanto al marco teórico, explica
las relaciones que existen entre los conceptos estudiados. Así, el marco de
referencia, ya sea teórico o conceptual, orienta la formulación de asuntos de
investigación o de hipótesis y determina la perspectiva del estudio.

4) ENUNCIAR EL OBJETIVO, LAS PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN Y LAS HIPÓTESIS

En el marco de una investigación, los términos “objetivo” “preguntas de

investigación” e “hipótesis” son equivalentes más o menos, en el sentido de que se
introducen en el por qué del estudio, aunque sean formulados de manera diferente.
La objetivo es más general y las preguntas e hipótesis precisan dicho objetivo.
Según el estado de conocimientos sobre el objeto de estudio, se utilizarán ya sea,
las preguntas de investigación, o las hipótesis.

La objetivo es un enunciado que indica claramente lo que el investigador quiere

hacer en el curso del estudio. Puede tratarse de explorar, de identificar, de describir,
o incluso de explicar, o de predecir tal o cual fenómeno. Según el tipo de
investigación, se formularán las preguntas. Si se trata de un estudio exploratorio o
descriptivo, se enunciarán las preguntas de investigación. Las preguntas de
investigación son enunciados interrogativos precisos, escritos en presente, y que
incluyen la o las variables del estudio. En el caso de estudios correlacionados y
experimentales se formularán las hipótesis. Las hipótesis son enunciados formales
de relaciones presumiblemente entre dos variables o más; enunciados de
predicción de los efectos esperados del estudio.

Fase metodológica

En el curso de esta fase, el investigador determina los métodos que utilizará para
obtener las respuestas a las preguntas que aparecen en la investigación o la
hipótesis formuladas. Define un postulado apropiado según lo que se trate de
explorar: describir un fenómeno, examinar asociaciones y diferencias o verificar
hipótesis. El investigador define la población y elige los instrumentos de medición
más apropiados para efectuar la recolección de los datos. Se asegura también que
los instrumentos elegidos sean fiables y válidos. Estas diversas decisiones
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metodológicas son importantes para asegurar la confiabilidad de los resultados de

investigación. Esta fase supone cuatro etapas, que a continuación describimos.

1) ELEGIR UN DISEÑO DE INVESTIGACIÓN

Esta paso depende de la naturaleza del problema de investigación. El diseño de
investigación es el plan lógico elaborado y utilizado para la investigación para
obtener respuestas a las preguntas de la misma. El diseño debe especificar cuál de
los diferentes tipos de investigación serán utilizados y como el investigador planifica
el control de las variables. La elección del diseño depende del problema en cuestión
y del estado de los conocimientos alrededor del mismo. Los elementos del diseño
de investigación son: la muestra, las condiciones según la cuales los temas serán
recopilados, los métodos para recolectar los datos y la elección del método de
análisis.
2) DEFINIR LA POBLACIÓN Y LA MUESTRA
Una vez que el asunto a estudiar ha sido precisado, documentado por los escritos
e insertado en un diseño apropiado, el investigador caracteriza a la población al
establecer los criterios de selección para el estudio, precisa la muestra y determina
el tamaño. La población comprende todos los elementos (personas, grupos,
objetos) que comparten características comunes, las cuales son definidas por
criterios establecidos para el estudio. Con relación a esto, hay que distinguir entre
la población determinada y la población accesible. La población determinada se
refiere a la población que el investigador requiere estudiar y por la cual desea hacer
generalizaciones; la población accesible, es la parte de la población determinada
que está al alcance del investigador. Ella puede estar limitada a una región, a un
pueblo, a un establecimiento, etc. Una muestra es un subconjunto de elementos o
de sujetos de la población, que son invitados a participar en el estudio. Es una
réplica, en miniatura, de la población determinada.
3) DEFINIR LAS VARIABLES
Las definiciones conceptuales de las variables proporcionadas por el marco de
referencia sirven de guía para la definición operativa de las variables. Esta
operación permite observar y medir los conceptos. Las definiciones operativas
asignan un significado unos conceptos o una variable, precisando las actividades o
las operaciones necesarias a su medida.
4) ELEGIR LOS MÉTODOS DE RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN Y DE ANÁLISIS DE LOS
TEMAS
Para esta etapa el investigador describe los métodos de recolección de los temas
que serán utilizados. Diversos instrumentos pueden servir para medir las variables
de un estudio. Los instrumentos de medición pueden ser las entrevistas, los
cuestionarios, las guías de observación, las escalas de medida, etc. El investigador
describe las características de los instrumentos y trata los aspectos de fiabilidad y
de validez. Prevé, en tanto sea posible, los problemas que podrían surgir del
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proceso de colecta de temas. El investigador precisa igualmente los tipos de análisis

estadísticos que serán utilizados en el tratamiento de los temas.

Fase empírica
El plan de investigación elaborado en la fase precedente, es puesto en aplicación.
Esta fase incluye la recopilación de temas en la práctica, seguido de la organización
y del tratamiento de los temas. Para hacer esto, se utiliza la estadística, tanto
descriptivas e inferencial o, según el caso, análisis de contenido. A continuación se
pasa a la interpretación, después a la comunicación de los resultados. A partir de
los resultados, se pueden proponer nuevos caminos de investigación y formular
recomendaciones. Las cuatro principales etapas son explicadas a continuación.
1) RECOLECTAR LOS DATOS

La recolección de los datos se efectúa según un plan establecido. Es la colección

sistemática de información ante los participantes, con la ayuda de los instrumentos
de medida elegidos. En esta etapa, se debe precisar el desarrollo de la recolección
de los datos, así como las etapas preliminares que deban conducir a la obtención
de las autorizaciones requeridas para efectuar el estudio.

ANÁLISIS DE LOS DATOS

El análisis de los datos permite producir resultados que puedan ser interpretados
por el investigador, los cuales son analizados en función del objeto de estudio; lo
que se trata de explorar o describir fenómenos, o de verificar las relaciones entre
variables. Es importante consultar datos estadísticos. El análisis cualitativo reúne y
resume, bajo la forma narrativa, los temas no numéricos. No importa cuál sea la
naturaleza del tratamiento de los temas, es necesario preparar un plan de análisis
previo.

3) INTERPRETAR LOS RESULTADOS

Una vez que los datos han sido analizados y los resultados presentadas con la
ayuda de tablas y de cifras, el investigador las explica en el contexto de su estudio
y a la luz de trabajos anteriores. En relación a estos resultados, puede obtener
conclusiones en relación con la teoría, la práctica y la investigación, y proponer
recomendaciones, no sólo para la aplicación práctica, sino también para las
investigaciones futuras.

4) COMUNICAR LOS RESULTADOS

Los resultados de una investigación pueden no ser de utilidad si no son

comunicados en el ámbito nacional e internacional. A fin de hacer conocer los
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resultados de su estudio, el investigador debe producir un reporte de investigación,

una memoria o una tesis, en la cual describa cada una de las etapas seguidas. Los
resultados son también comunicados en congresos, conferencias, o son publicados
en revistas de carácter científico o profesional.

3.3 Etapas de la investigación cualitativa

En el caso de un enfoque cualitativo, ciertas etapas del proceso de la investigación

se efectúan simultáneamente o de manera interactiva. Las etapas principales son:

1) La formulación de un problema general de investigación a partir de una

situación concreta, que comprenda un fenómeno que pueda ser descrito y entendido
según los significados acordados por los eventos de los participantes (McMillan y
Schumaker, 1989), o incluso hablando de un concepto. 2) El enunciado de
preguntas precisas en vista de explorar los elementos estructurales, las
interacciones y los procesos que permitan describir los fenómenos, elaborar el
concepto; 3) La elección de técnicas para la recolección de información
(observaciones, entrevistas, grabaciones.); 4) La elección de un contexto social y
de una población (muestra teórica); 5) La recolección de información y el análisis de
donde está sacada una descripción detallada de sucesos recogidos por los
participantes habiendo vivido tal situación o experiencia; 6) la elaboración de
hipótesis interpretativas a partir de conocimientos obtenidos en vista de dar una
significación a la situación; 7) la reformulación interactiva del problema, de las
preguntas o las modificaciones y la integración del concepto en la medida que añada
temas nuevos (Gauthier, 1992).
Las etapas del proceso de la investigación descritas en los párrafos anteriores
representan una concepción ideal de lo que el investigador espera realizar. Sin
embargo, el proceso sigue rara vez un modelo secuencial fijo. La realización de una
etapa, en ocasión de la formulación del problema, requiere de un inventario de los
escritos, lo que se hace simultáneamente con la delimitación del tema a estudiar.

3.4 Resumen

Antes de emprender una investigación es apropiado conocer los términos ligados al

campo de la investigación científica, como “la observación”, “el concepto”, “la
variable”, “la definición conceptual”, “la definición operativa”. La observación,
elemento central del proceso de la investigación, está estrechamente ligada a la
teoría, la cual explica las relaciones entre los hechos observados. Los conceptos
son imágenes mentales formadas a partir de la realidad, porque resumen y definen
las observaciones; los conceptos sirven para ligar el pensamiento abstracto y la
experiencia sensorial. Las variables son las cualidades, propiedades o
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características de las personas o de las situaciones que son estudiadas en una

investigación.
Una variable puede tener diferentes valores: es un parámetro en el cual los valores
numéricos son asignados. Los tipos de variables incluyen variable independiente,
dependiente, atributos y externas. La variable independiente es la que el
investigador manipula para medir el efecto sobre la variable dependiente. Los
cambios obtenidos en lo que es un rasgo de la variable dependiente son presumidos
con causas de la variable independiente. Las variables atribuidas son las
características de los sujetos que sirven para describir la muestra. Las variables
externas son las del entorno físico y social y corren el riesgo de confundir los
resultados del estudio.

Los conceptos pueden ser definidos de dos formas, ya sea por las definiciones
conceptuales, ya sea por definiciones operativas. Una definición conceptual define
al concepto a través de otras palabras. Una definición operacional precisa las
acciones a emprender para medir una variable.

En suma, el proceso de la investigación comprende una serie de etapas progresivas

que permiten la realización de un proyecto de investigación: las fases conceptuales,
metodológicas y empíricas, y las etapas correspondientes. En un paradigma
cualitativo, las etapas de los procesos de la investigación se efectúan
frecuentemente de manera simultánea.