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PASTOR:

ROBERTO HERMINZUL AGUIRRE


http://robertoherminzul.blogspot.com

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EL DIVORCIO A LA LUZ DE LA EXEGESIS BIBLICA
Este estudio no pretende ser, ni es la voz oficial de la iglesia, ni la última palabra respecto al divorcio,
Espero que sea de ayuda para muchos hermanos que sienten la necesidad de tener a la mano
Un punto de vista sobre esta problemática que aqueja a muchos dentro de la iglesia.
Primera edición Marzo 2013
Segunda edición mayo 2014

INTRODUCCION

Este estudio y recopilación sobre el tema del divorcio, lo hago con el propósito de dar un poco de luz y
orientación para aquellos hermanos que sufren, bien sea porque han tenido que recurrir a él o para
algunos para los cuales no es aceptable, y simplemente es un pecado más que se comente. De igual
forma Para los que están en una encrucijada sin saber qué camino tomar, para otros que por diversos
motivos, tuvieron que recurrir al desafortunado divorcio, por la ruptura de sus matrimonios y otros
que por sus conciencias atribuladas, no saben si fue lo mejor o lo peor que pudieron haber hecho, y en
fin, como una guía para todo aquel que quiere saber un poco más de este tema.

JUSTIFICACIÓN
Muchas son las causas que arrastran a esta situación y como algunos no tienen una base escritural
sobre el tema, la mejor forma de pronunciarse es diciendo: “es pecado, eso no lo manda Dios, el
matrimonio es para toda la vida, es hasta que la muerte los separe”.
Otros no estaremos pasando por la misma situación, pero no por esto dejaremos de dar un concepto
sobre lo terrible que es la separación, o el triste abandono del hogar, por diversas causas, lo cual
irremediablemente está llevando al divorcio, algo que lleva en si a que muchos quieran de nuevo a
formalizar una nueva relación sentimental.
Lo más terrible es cuando se persigue con indolencia y falta de misericordia a los afectados, negándoles
hasta el saludo viéndoseles como estorbos para la obra de Dios, tildados de pecadores, simples objetos
que solo sirven para ocupar un puesto en la congregación, o en otras situaciones solo para ofrendar y
diezmar.
Qué bueno sería colocarnos en la situación de los que verdaderamente han sufrido la pérdida de su
hogar, por causas de infidelidad conyugal, aberraciones o abandono de su hogar y ver como ellos, en
algunos momentos de su vida, sienten como más terrible el desprecio de sus hermanos que la misma
ruptura de su hogar. Que Dios no ayude a cambiar tantas posturas dogmáticas, e inmisericordes que a
veces tenemos como hijos de Dios. Claro hay que hacer la salvedad de aquellos que han echado mano
de esta puerta de escape si así se le pudiera llamar, para renunciar a sus parejas por causas
injustificadas y así pretender ser alabados por Dios y por la iglesia. No se les está haciendo una apología
de sus conductas, así que en este estudio no pretendo atacar ni defender el tema del divorcio, mal
haría, si ni aun cristo ni sus apóstoles lo hicieron, lo único que pretendo, desde el punto de vista de las

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escrituras es ayudar un poco al esclarecimiento del tema, aunque no quiero decir que tengo la última
palabra, pues este estudio se hace en base a apuntes que he tomado de talleres y enseñanzas dadas
por nuestros líderes a lo largo de varios años. Entre ellos: Magister Cosme Damián Vivas, mi profesor en
el instituto bíblico pentecostal. Héctor Raúl Betancur, directivos a nivel nacional y distrital, cada uno de
ellos al escucharlos he tomado apuntes que brindan una luz teológica sobre lo que se expone y que
personalmente también he venido investigando sobre el tema expuesto a continuación.
Este estudio en la parte de sustentación teológica lo he dividido en cuatro secciones que en mi opinión
personal, es lo más saludable, en cada una de ellas, apoyado escrituralmente con la palabra, pues al fin
de cuenta no es nuestra opinión personal la que debe contar, sino la exegesis de cada uno de ellos,
pues casi siempre es más fácil para nosotros aferrarnos a los conceptos humanos, que a lo que dice la
biblia, en otros casos se cita la biblia, dándole una interpretación literal, dogmática, espiritualizando
algo que no es de espiritualizarlo, pero en esto la palabra de Dios habrá de ayudarnos a aclarar
nuestros pensamientos.
Una razón fundamental para esto es que, muchos cuando hablan de divorcio, usan la palabra re
casamiento, (una palabra que difícilmente se encuentra en el diccionario y hasta en los buscadores de
internet, más bien fue inventada a la fuerza, para atacar a los que se han divorciado y se han casado de
nuevo. Bueno no sé cómo se le podrá llamar entonces a la renovación de votos que se ha
acostumbrado a realizar en las iglesias, eso no es bíblico y como si esto no se ha atacado, y ¿no es esto
una forma de re casamiento disimulado en una supuesta renovación de votos?)
Usan textos de un lado y otro, porque lo importante es defender el concepto que se tenga, esto no es
saludable, ni nunca lo ha sido, esto es lo que tiene a más de uno confundido sobre el tema.
Las fuentes bíblicas que hay sobre el tema deben tomarse por separado en primera instancia cada una,
para que puedan formar un mapa conceptual de lo que es el tema, cuando ya hay una idea general de
todo esto es fácil comprender, las fuentes bíblicas, sus contenidos y como cada una de ella fue
importante para sus receptores iniciales, y como nos aportan hoy algo sumamente importante para
nosotros. Esto nos dad una idea de la importancia de saber quién lo dijo, como, porque y para quien,
Algunos comentarios particulares pero que son de conocimiento público nos darán una clara idea de
cómo otros ven esta problemática, y lo que dicen algunas leyes sobre el tema.
Preocupante es que siendo cristianos, renacidos de nuevo por la palabra, todavía estén impregnadas en
nuestras vidas tantas posturas católicas, indolentes, intransigentes que cuando se habla de divorcio;
parece que la puerta de salida para algunos nunca hubiera sido hecha.
La biblia y propiamente Dios, nos hablan de la institucionalidad del matrimonio, de su carácter santo y
humano, de sus estructuras basadas en el amor, respecto, compañerismo y fidelidad mutua, pero en
ninguna parte de las escrituras se habla de una cláusula de permanencia, como la que nosotros mismos
nos hemos diseñado. “Hasta que la muerte los separe” aferrados a este concepto, muchos tomaron la
decisión de seguir montados en el tren del matrimonio, no importando que estuviera desnivelada la
vía. En esta sociedad machista, las mujeres tuvieron que soportar la infidelidad de sus esposos, el mal
trato, la indiferencia, las aberraciones sexuales, amparadas en el concepto social, es que el matrimonio
es para toda la vida, y no importa como es él o ella, hay que estar siempre juntos.

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Todo esto para una sociedad que acepto una ética religiosa, moralista y complaciente con los caprichos
masculinos es aceptable, pero donde quedan los derechos en los cuales Dios también defiende a la
mujer, porque desde el antiguo testamento hasta el nuevo, vemos a un Dios maravilloso que defiende
la institucionalidad del matrimonio pero igualmente defiende los derechos vulnerados de la mujer, si
esta sociedad machista estuviera cerca de la palabra del señor se darían cuenta de ello,
Dios constituyo el matrimonio para el compañerismo, la ayuda mutua, por esto dijo: le hare ayuda
idónea, saco a Eva de la costilla de adán, y dijo el, esto es hueso de mi hueso y carne de mi carne, Adán
entendió entonces el valor de la mujer que Dios le había dado.
En mateo el señor Jesús declaro cual ha sido la voluntad de Dios en cuanto a la permanencia del
matrimonio, “por tanto lo que Dios junto no lo separe el hombre” usted podrá decir que acá hay un
mandamiento, un consejo o una cláusula de permanencia si así lo desea, pero en la práctica y ya desde
el antiguo testamento esto no estaba sucediendo pues cuando miremos la postura Deuteronomista,
nos daremos cuenta que la reglamentación de moisés, fue dada por algo que ya estaba sucediendo en
el pueblo de Israel, y Dios le permite legislar en cuanto al problema.
Alguien dirá, pero fue moisés el que permitió dar carta de divorcio, y no Dios. Y pregunto ¿Moisés fue
una rueda suelta?, ¿no tenía quien le gobernara?, ¿se le oculto a Dios para legislar por cuenta propia
solo lo pertinente al Divorcio, o Dios se tapó sus ojos y oídos, para no darse cuenta de lo que estaba
haciendo su siervo?
Recordemos que moisés solo hasta sus 80 años de edad, fue llamado por Dios, le fue dada la ley, los
decretos y estatutos santos, eso significa que moisés no iba a mandar o permitir algo que contradijera
la voluntad de Dios para su pueblo. Además las escrituras no hablan de toda la problemática social y
familiar que vivieron los israelitas en 40 años de peregrinación por el desierto, y si moisés permitió
algo, se dio dentro de la peregrinación por el desierto, y porque fue algo que no solo Israel había
aprendido en Egipto, sino algo con lo cual ellos tuvieron que convivir, así que no podemos pensar que si
los impíos tienen dificultades en sus hogares, los nuestros no los vallan a tener, esto sería algo ilógico.
La indisolubilidad del matrimonio es una ley en la iglesia católica, en la cual nadie, a no ser por sus 28
causales que dan la nulidad al matrimonio católico , se puede volver a casar por la misma, las cuales
luego miraremos, y que son aceptables entre ellos, el divorcio no existe, solo se aplica la nulidad de
este, en otras palabras entendidas desde nuestra percepción; la iglesia católica ejerce un poder tal, que
un matrimonio realizado bajo sus cánones es irrompible, indisoluble, y acá, digo algo que he venido
meditando, y es en la hipocresía que en ocasiones manejamos, claro cuando no se trata de nosotros
mismos.
Como cristianos hemos odiado las practicas católicas, hemos dicho que son del diablo, mudamos el
rostro para decir: Es la babilonia, la gran ramera, todo lo que se practica en ella, para nosotros ha sido
influencia del mismo diablo, su bautismo no cuenta, sus otros sacramentos igualmente, ha pero
cuando una persona se convierte a cristo, abandonando su vida de pecado y religiosidad, y nos damos
cuenta que es casada por la iglesia católica, como en algunos casos ha pasado, particularmente con las
personas que fueron casadas y que sus matrimonios no fueron legalizados por la ley, y que por lo tal, ya
no viven con su pareja, por infidelidad, separación o desaparición, etc. Cuando estas personas se

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quieren divorciar, para organizar sus vidas con una nueva pareja y con el señor, allí si sale a relucir el
fanatismo, nuestra intolerancia he hipocresía.
El matrimonio católico inmediatamente se convierte en algo sagrado, irrompible, allí a esta persona
que está casada, pero separada se le dice. “usted está casada(o) ante Dios” y nos olvidamos de
toda el agua sucia que hemos arrojado sobre los sacramentos católicos. Yo diría entonces porque no
aceptamos a las personas católicas con su bautismo herrado, la comunión, la confirmación, porque no
hacemos entonces todo lo que ellos hacen, si lo que hacen es aceptado por Dios y tiene su bendición, o
es que solo el matrimonio viene hacer el único realizado ante Dios, ¿los otros ritos ante quien se
hacen? Ante el hombre u el diablo, usted que responde a esto.
No estoy en contra de un matrimonio celebrado por la iglesia católica y debidamente registrado ante
las leyes civiles, lo cual es totalmente legal y aceptable, pues también la escritura dice, que debemos
someternos a toda autoridad, presente en la tierra. Lo no aceptable es la falta de intolerancia hacia
circunstancias particulares que muchos viven, y en vez de darles una salida, los amarramos a un rito y
nos ponemos no de parte de las escrituras sino más bien de los conceptos de la humanidad, vinculados
al tradicionalismo católico. En otros casos igualmente dañinos y no de verdaderos cristianos, hemos
tenido que oír de parte y parte, para no tener que afrontar un divorcio y tener el camino libre. “Que
Dios haga la obra y lo corte” ¡lo corte! Esto es que lo quite del camino matándolo, o haciéndole morir.
Esto como se le llama, usted de pronto pensara, ¡ha! si como yo soy la parte inocente a mi Dios si me
va a escuchar. Quiero decirle esto es un pecado y no crea que Dios va a responderle un capricho
personal.
Cuando el apóstol dijo: despojémonos de todo peso y del pecado que nos acedia, esto incluye
despojarnos del pensamiento y la tradición católica, seamos defensores de lo que la biblia dice, no de
lo que la religión nos enseñó, tampoco le abramos la boca a Dios, para poner palabras que él nunca
dijo, y te invito a estudiar este tema, y no solo buscar acá, lo que te interesa, sino la verdad que puede
ayudarte a ti o algún otro creyente en una situación difícil en su hogar.
El problema ha radicado en que aprendimos a leer la biblia, pero sin despojarnos del pensamiento
católico, por esto no alcanzamos a evidenciar todo lo grande que es el Dios maravilloso, así, que te
invito a abrir tu mente para que Dios hable a tu vida.
Por esto al realizar este estudio, la idea es poder mirar los casos pertinentes que nos afecta en nuestro
entorno cristiano, y como poder manejarlos.

Reseña de divorcio en Colombia


La superintendencia de Notariado y Registro de Colombia reveló que en el año 2009 se oficializaron
10.618 divorcios, frente a los 9.436 que se presentaron en el año 2008. Esta cifra representa un
aumento del 12.52% comparado con el año anterior.

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Uno de los factores sobre el alto crecimiento en el número de divorcios es el denominado “'divorcio
exprés”, una ley que rige desde el 2005 en Colombia y que agiliza los trámites de divorcio cuando la
pareja está de acuerdo.
De esta forma las parejas en Colombia pueden divorciarse en apenas unos minutos si hay mutuo
consentimiento, con un simple trámite ante un notario a través de abogado titulado.
Bajo el gobierno de Alfonso López (1974-1978) Colombia estableció el matrimonio civil, anulable con el
correspondiente divorcio. Sólo con la Constitución de 1991 se admitió el divorcio para los matrimonios
realizados por la Iglesia Católica.
Las generaciones nacidas a mediados del siglo XX la tasa de divorcios llegaban a 30%, mientras que
entre los colombianos nacidos de 1960 a 1964 la tasa de divorcios y separaciones alcanza a 45,5% de
los matrimonios contraídos. Actualmente el índice de divorcios se establece que uno de cada dos
matrimonios que se celebra anualmente termina en separación y un 50% de las parejas que no se
divorcian tienen relaciones insatisfactorias.
Una de las causas del incremento de los divorcios en el país podría ser que tanto hombres como
mujeres están asumiendo nuevos roles dentro de las relaciones, lo que está generando una
competencia entre las parejas. Las mujeres laboran, son profesionales y esto genera independencia
económica lo que las lleva a pensar que solas pueden criar a sus hijos sin sumisión.
El divorcio, según la Organización Mundial de la Salud OMS, causa estrés crónico. Un matrimonio infeliz
incrementa en 35% las posibilidades de enfermarse y acorta la expectativa de vida en un periodo de 4
años.
En Es importante resaltar que el nivel de las demandas para el trámite de divorcios se concentra en los
principales departamentos como Cundinamarca (Bogotá), Antioquia, Atlántico, Valle y Santander,
mientras que en las zonas rurales no se encuentran crecimientos significativos para estos períodos
entre ellos Amazonas, Guainía, Guajira, Guaviare, Putumayo, Sucre, Vaupés y Vichada.
En españa hay tres divorcios por cada cuatro matrimonios.
"La ruptura familiar está creciendo de forma alarmante", dice el presidente del Instituto de Política
Familiar.
La vieja frase de "Lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre" ya no se estila en España: por cada
cuatro nuevos matrimonios se rompen tres, lo que sitúa la tasa nacional de ruptura en el 69%.
Las cifras son llamativas. "La ruptura familiar está creciendo de forma alarmante", ha declarado el
presidente del Instituto de Política Familiar (IPF), Eduardo Hertfelder, quien ha presentado este viernes
los datos de rupturas matrimoniales.
Según estos datos, España es, junto a Bélgica, el país de la Unión Europea con mayor tasa de
ruptura/nupcialidad. Se rompe un matrimonio cada 3,7 minutos, con lo que, en un día, se acaban 387
matrimonios.
La Comunidad de Madrid es la región en la que más han crecido las rupturas. Así, en 2007 se
registraron 19.000 frente a las 23.000 bodas celebradas durante el año. Estas cifras colocan a Madrid

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con una tasa de ruptura del 83%, en el cuarto puesto del ranking nacional por detrás de Gran Canaria,
Cataluña y Baleares, ambas con un índice de 85%. Canarias es un caso especialmente singular: allí se
rompen cinco matrimonios por cada cuatro nuevos casamientos.

Divorcio antes que separación


El divorcio se diferencia de la separación de hecho en que, dependiendo del ordenamiento jurídico de
cada país, puede tener o no algunos efectos jurídicos; por ejemplo para los casos de Chile esta
situación fáctica puede ser causal para solicitar la declaración de divorcio. Respecto a la separación
legal en tanto, ésta sí es reconocida legalmente en diversos ordenamientos jurídicos, teniendo en
consecuencia un mayor número de efectos jurídicos que la separación de hecho, aunque a diferencia
del divorcio, no pone término al matrimonio.
Por otro lado, no se debe confundir con la anulación del matrimonio, que no es más que el declarar que
el matrimonio nunca existió, y que no solo se encuentra normado en el ordenamiento jurídico de
algunos países, sino que, además, se encuentra regulado en el derecho canónico con larga data. Al
año 2011, solo las Filipinas y Ciudad del Vaticano no permiten el divorcio en su ordenamiento jurídico.
Por otro lado, recientemente Malta ha votado a favor de su inclusión a través de un referéndum no
vinculante realizado en el mes de mayo de 2011, aprobándose posteriormente su legalización en
el Parlamento durante el mes de julio; así, después de Chile (que la aprobó en 2004), Malta se
transforma en el último país que la ha legalizado. Cabe indicar que en el Congreso de Filipinas en tanto,
se ha iniciado a fines del primer semestre de 2011 un debate en torno a una potencial ley que la anexe
en su ordenamiento jurídico.

Otras investigaciones indican que una de las potenciales causas en el incremento de las tasas de
divorcio ha sido el cambio de roles dentro del matrimonio, principalmente asociado a la incursión de las
mujeres en el mercado laboral gracias a crecientes oportunidades en educación y empleo en conjunto
con políticas más activas de inclusión,14 indicándose que en muchos casos, la relación entre un mayor
número de horas dedicadas al trabajo y la probabilidad de divorcio es más fuerte en aquellas
familias de ingresos medios y en las que el marido desaprueba el trabajo de la esposa, o bien, en las
que el marido trabaja menos horas que la esposa haciendo que la interacción de pareja disminuya,
especialmente en el caso de los primeros años del matrimonio. Por otro lado, y respecto a la
independencia lograda por la mujer al acceder al mundo del trabajo, varias investigaciones aluden a la
existencia de una débil relación con la probabilidad de divorcio.
Causas bastante más raras pero a veces no menos frecuentes son el ronquido insoportable de uno de
los cónyuges, falta de higiene personal, adicciones a distracciones, política, deportes o hobbies.

Causas jurídicas

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Según el ordenamiento jurídico de cada país, las causas de divorcio pueden ser varias, entre las que se
pueden mencionar el mutuo disenso, la bigamia, existencia de alguna enfermedad física o mental que
ponga en riesgo la vida del otro cónyuge, la violación de los deberes inherentes al matrimonio,
abandono malicioso, entre otros.
Por ejemplo, dentro de las causas del rompimiento matrimonial que están en el Código Civil de Puerto
Rico, se encuentran: la primera es por la muerte de uno de los cónyuges; la segunda, si el matrimonio
se declara nulo y la última por el divorcio ilegalmente obtenido y también si existe agresión hacia la
pareja. Se obtiene el divorcio si hay adulterio, si uno de los cónyuges es condenado por un delito grave,
por embriaguez habitual o uso constante de morfina o cualquier otro narcótico. Trato cruel o injurias
graves, abandono por un término mayor de un año, disfunción eréctil permanente sin solución
presentada después del matrimonio. El conato del marido o de la mujer para corromper a sus hijos o
prostituir a sus hijos, la propuesta del marido para prostituir a su mujer, la separación de ambos
cónyuges por un periodo de tiempo sin interrupciones de más de dos años y la enfermedad mental
incurable de los cónyuges sobrevenida después del matrimonio, por un periodo de más de siete años,
cuando impida gravemente la convivencia.

Historia
La institución del divorcio es casi tan antigua como la del matrimonio, si bien muchas culturas no lo
admitían por cuestiones religiosas, sociales o económicas.
La mayoría de las civilizaciones que regulaban la institución del matrimonio nunca la consideraron
indisoluble, y su ruptura generalmente era solicitada por los hombres. Aunque en algunas de ellas, el
nacimiento de un hijo le otorgaba al vínculo el carácter de indisoluble.
En muchas sociedades antiguas también era motivo de muerte, como en la antigua Babilonia, donde el
divorcio podía ser pedido por cualquiera de los cónyuges, pero el adulterio de las mujeres era penado
con la muerte.
Los celtas practicaban la endogamia (matrimonio de personas de ascendencia común o naturales de
una pequeña localidad o comarca), excepto los nobles que solían tener más de una esposa. Era habitual
la práctica de contraer matrimonio por un período establecido de tiempo, tras el cual los contrayentes
eran libres, pero también era habitual el divorcio.
En América, los Aztecas solo podían tener una esposa y se la Denominaba,
Cihuatlantli, Nociuauh o Áhuatlantli (esto es mujer legítima), y aunque se aceptaba la poligamia, solo la
primera mujer tenía el carácter de esposa. En este contexto, el divorcio era consentido, pudiendo ser
solicitado tanto por el hombre como por la mujer; así, al lograrse -vía sentencia judicial- se quedaba
habilitado para contraer nuevamente matrimonio.
Entre los hebreos, los varones podían repudiar a sus esposas sin necesidad de argumentar la causa de
tal actitud, bastaba con informar al Sanedrín. También existía el divorcio por mutuo disenso, pero las
razones de las mujeres eran sometidas a un análisis más riguroso que las del hombre.
También en la antigua Grecia existía el divorcio por mutuo disenso y la repudiación, pero el hombre
debía restituir la dote a la familia de la mujer en caso de separación.

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En el alto Imperio romano los casos más frecuentes eran los de concubinato y la unión libre, en todas
las clases sociales. El matrimonio, cuando se practicaba, obedecía a un objetivo puramente económico:
la transmisión del patrimonio a los descendientes directos en vez de otros miembros de la familia o la
sociedad y a una política de perpetuar la casta de los ciudadanos. Si se carecía de patrimonio era
innecesario casarse, y si se era esclavo, imposible (recién a partir del siglo III les estuvo permitido
casarse a los esclavos). La inestabilidad de las parejas parece haber sido muy frecuente y el número de
divorcios muy alto.
En el bajo Imperio romano el divorcio era algo poco común, hasta la época de los emperadores, en
donde se acuñó la máxima "matrimonia debent esse libera” (los matrimonios deben ser libres) en
donde el esposo o la esposa podían renunciar a él si así lo querían.
Con la llegada del cristianismo, el divorcio se prohibió debido a la concepción del matrimonio como un
sacramento instituido por Dios y cuyo vínculo era irrompible. A partir del siglo X, aunque el divorcio
estaba prohibido, existía la Nulidad matrimonial, es decir, el matrimonio se declaraba nulo si se
demostraba que no había existido por diferentes razones. Eran los tribunales eclesiásticos quienes
tramitaban las declaraciones de nulidad matrimonial.
Sin embargo, la Reforma de Lutero, admitió el divorcio aunque únicamente en casos muy graves. Esta
reforma, incluso provocó que Inglaterra abrazara la misma debido a que su rey, Enrique VIII deseaba
divorciarse de su esposa, Catalina, y la Iglesia de Roma no se lo permitía.

Tipos de divorcio
En la mayor parte de los ordenamientos jurídicos se contemplan algunos de los siguientes tipos de
divorcios:
Divorcio por mutuo consentimiento
Es la disolución del vínculo matrimonial que se obtiene gracias a una sentencia judicial que pone fin a
un procedimiento el cual se inició por una solicitud en la que ambos cónyuges estuvieron de acuerdo
en realizar y han cumplido con todos los requisitos legales que la ley marca para lograr se dicte
sentencia.
Procedimiento genérico: Estando de acuerdo ambos cónyuges comparecen o se presentan (por escrito
o de forma personal y verbal dependiendo de cada legislación) ante la autoridad judicial competente
(normalmente un juez familiar) y solicitan se decrete en sentencia definitiva el divorcio, por lo que, una
vez que los cónyuges realizan todos los pasos legales, obtienen la sentencia de divorcio.

Divorcio sin el consentimiento de alguna de las partes


Siempre y cuando tenga sustento en alguna de las causales que el ordenamiento jurídico del respectivo
país o estado mencione.

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En general, es la disolución del vínculo matrimonial que se obtiene gracias a una sentencia judicial que
pone fin a un procedimiento el cual inició por la petición o demanda de uno de los cónyuges en la cual
dicho cónyuge solicitante sin el consentimiento del otro pide al Juez la terminación del vínculo
matrimonial y la petición o demanda tiene apoyo en hechos que la ley considera como suficientes para
que se otorgue el divorcio (causales de divorcio)".
En algunos países o localidades este es conocido como divorcio necesario (contested divorce, en
inglés). Para solicitar al Juez que se decrete el divorcio necesario, es requisito que el cónyuge solicitante
pruebe que su esposo o esposa ha realizado o incurrido en hechos que la ley marca como suficientes
para que opere el divorcio.
Las causales de divorcio de cada país varían en función de su propio ordenamiento jurídico, pudiéndose
encontrar:
Violencia intrafamiliar (lesiones, injurias, violencia psicológica o física).
Adicciones que afecten al núcleo familiar o a alguno de sus integrantes (Ejemplo adicción a drogas,
juegos, etc.).
Ser sentenciado a pena corporal por delito grave que no alcance el beneficio de libertad bajo caución o
fianza.
Adulterio.
Bigamia.
Incitar u obligar a cualquier integrante a cometer un delito.
Conductas que ponen en peligro la integridad física o psicológica de cualquiera de los integrantes de la
familia.
Abandono injustificado del hogar.
Infecciones de transmisión sexual incurables.
Falta de cumplimiento intencional a las obligaciones alimentarias.
Delito cometido en contra de uno de los cónyuges o de los hijos.

28 causales de nulidad canónica para el matrimonio


http://www.diocesisdecanarias.es/preguntarespuesta/temas-de-actualidad/nulidades-matrimoniales-motivos-
para-la-nulidad.html

Nulidades matrimoniales:

¿Cuáles son los motivos para que el matrimonio por la Iglesia sea nulo?

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Muchas personas tienen ideas muy equivocadas de lo que es una nulidad matrimonial por la Iglesia.
Dicen cosas como: "La Iglesia sólo da la nulidad a los ricos...”, "La nulidad por la Iglesia vale millones..."
¿Es esto realmente así?

Son 28 los motivos- impedimentos por los cuales un matrimonio celebrado por la Iglesia puede ser
declarado nulo. Veamos cuáles son las causas que hacen nulo un matrimonio por la Iglesia católica:

1. Carecer de suficiente uso de razón, que hace incapaz para el matrimonio (canon 1.095,1 del Código
de Derecho Canónico).

2. Tener un grave defecto de discreción de juicio acerca de los derechos y deberes esenciales del
matrimonio, que hace incapaz para el matrimonio (canon 1.95, 2).

3. No poder asumir las obligaciones esenciales del matrimonio por causas de naturaleza psíquica
(canon 1.095,3).

4. Ignorar que el matrimonio es un consorcio permanente entre el varón y una mujer, ordenado a la
procreación de la prole mediante una cierta cooperación sexual (canon 1.096,1). Esta ignorancia no es
presumible después de la pubertad. (Canon 1.097,2).

5. El error acerca de la persona. (Canon 1.097, 1).

6. El error acerca de una cualidad de la persona, cuando esa cualidad es directa y principalmente
pretendida (canon 1.097,2).

7. El engaño doloso acerca de una cualidad del otro contrayente que por su naturaleza puede perturbar
gravemente el consorcio de vida conyugal (canon 1.098).

8. El error acerca de la unidad, de la indisolubilidad o de la dignidad sacramental del matrimonio


cuando determina la voluntad. (Canon 1.099).

9. La simulación total, que se da cuando el que se casa no quiere el matrimonio mismo (canon 1.101,2).

10. La simulación parcial por la exclusión de la indisolubilidad (que es una propiedad esencial del
matrimonio) con un acto positivo de la voluntad (cánones 1.101,2 y 1.056).

11. La simulación parcial por exclusión de la fidelidad (que es una propiedad esencial del matrimonio)
con un acto positivo de la voluntad (cánones 1.101,2 y 1.056).

12. La simulación parcial por haber excluido la unidad (que es una propiedad esencial del matrimonio)
con un acto positivo de la voluntad (cánones 1.101,2 y 1.056).

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13. La exclusión, con un acto positivo de la voluntad, de la sacra mentalidad (canon 1.101,2) ya que
entre los bautizados sólo es matrimonio válido el que es sacramento (canon 1.055,2).

14. La exclusión, con un acto positivo de la voluntad, de la prole (que es elemento esencial del
matrimonio) (canon 1.101,2). El matrimonio está ordenado, por su misma índole natural, a la
generación y educación de la prole (canon 1.055).

15. El matrimonio celebrado bajo condición de que algo se realice en el futuro, que es aquel en el que
la voluntad de uno o de ambos subordina el nacimiento del vínculo al cumplimiento de una
circunstancia o acontecimiento (canon 1.102).

16. El matrimonio contraído por violencia o por miedo grave, para librarse del cual alguien se vea
obligado a casarse (canon 1.103).

17. Impedimento de edad: el varón antes de los 16 años cumplidos y la mujer antes de los 14 años
cumplidos (canon 1.083). El fundamento está en la falta de madurez psíquica y biológica.

18. La impotencia cierta, antecedente y perpetua (canon 1.084).

19. Impedimento de vínculo por un matrimonio anterior aunque no haya sido consumado (canon
1.085).

20. Impedimento de disparidad de culto: el contraído entre dos personas, una bautizada en la Iglesia
católica y otra no bautizada (canon 1.086). Este impedimento es perfectamente dispensable en
determinadas condiciones.

21. Impedimento de orden sagrado, incluyendo el diaconado, el presbiterado y el episcopado (canon


1.087).

22. Impedimento de voto público perpetuo de castidad en un instituto religioso (canon 1.088).

23. Impedimento de rapto (canon 1.089).

24. Impedimento de crimen (canon 1.090).

25. Impedimento de consanguinidad: siendo nulo los matrimonios de todos los ascendientes y
descendientes entre sí, tanto legítimos como naturales (canon 1.091).

26. Impedimento de afinidad: en línea recta en todos los grados, (canon 1.092).

27. Impedimento de pública honestidad (canon 1.093).

28. Impedimento de parentesco legal por adopción, (canon 1.094).

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Observando todas estas causas de nulidad matrimonial dentro del orden canónico, observamos que no
se dice nada acerca de lo que sí dijo Jesús en mateo 19 sobre la salvedad para que exista un divorcio,
esto es actos en contra de naturaleza, fornicación, adulterio, etc., la pregunta que me aqueja es, ¿la
iglesia no acepta lo que la biblia dice Referente a la causa legal para el divorcio? Esto es el adulterio, la
homosexualidad, el lesbianismo, sodomía, zoofilia, pederastia, etc. Pero si expone 28 argumentos que
naturalmente no dejan de ser importantes tenerlos en cuenta, y quiero preguntarte ¿estos si tienen
que ser más importantes que lo que dijo el señor?
La iglesia católica, no acepta el divorcio, para ellos es indisoluble, más para cristo Jesús, el divorcio es la
salida a graves problemas internos dentro del matrimonio relacionados no con la convivencia, sino con
la infidelidad y las perversiones, tendremos entonces que seguir dándole la razón a la iglesia católica o
nos atreveremos a mirar lo que la escritura enseña al respecto.

Divorcio unilateral o in causado


En algunas partes del mundo, como España y la Ciudad de México, existe otra modalidad de divorcio
que es unilateral o in causado, debido a que no requiere del consentimiento de ambos cónyuges, ni la
expresión de una causa concreta que lo justifique o se tenga que probar en juicio, para que el Juez de lo
familiar decrete la disolución del matrimonio en el corto plazo. Motivo por el cual, se le llama con
frecuencia divorcio exprés.
Con esta reforma, en la ciudad de México y otros Estados del mismo país, primero se decreta el divorcio
y después se tramitan uno o más expedientes para la resolución de los temas relativos a la patria
potestad, guarda y custodia de los menores, pensión alimenticia, derecho de convivencia o visita,
partición de bienes, y en su caso, compensación a favor del cónyuge que se haya dedicado
prioritariamente a las labores del hogar y la crianza temprana de los hijos, que pueden llevarse varios
meses o años más.
Una de las principales críticas a esta modalidad de divorcio se centra en que no busca solucionar las
necesidades sociales más apremiantes, que consisten en problemas de abandono, la negativa a
contribuir con el sostenimiento del hogar, violencia intrafamiliar e infidelidad, como se puede apreciar
en los datos estadísticos oficiales; y por el contrario, privilegia la libertad individual, al punto que
solamente basta que manifieste por escrito que ya no quiere seguir en matrimonio, como sucede en el
caso del repudio, para que se decrete la disolución de su vínculo y la persona interesada pueda
contraer nuevas nupcias.

Sentencia de divorcio
Los puntos que comúnmente decreta una sentencia de divorcio judicial son:
Disolución del vínculo matrimonial y en consecuencia la aptitud de los divorciados para contraer
nuevas nupcias.
Las medidas adicionales que decreta el juez de familia como son:
Si existe o no y en qué porcentaje pensión alimenticia que deberá pagar el padre a la madre o
viceversa. Nuestra sociedad ha ido cambiando y en muchas localidades los roles de vida también han
evolucionado y las mujeres son un pilar en la manutención económica del hogar, al grado que en

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algunos casos se han convertido en las proveedoras de las finanzas de la familia dejando a los hombres
el rol de supervisión de hogar y educación de hijos, motivo por el cual de forma más repetitiva a los
hombres la autoridad judicial les otorga el derecho de que la mujer les pague una pensión alimenticia y
de igual forma más reiteradamente nos encontramos con casos en los cuales los hijos concebidos se
quedan bajo la guarda y custodia del padre.
Repartición de bienes que se adquirieron durante el matrimonio. En la mayoría de las legislaciones, los
bienes obtenidos o adquiridos durante el matrimonio pertenecen por igual a ambos cónyuges (excepto
en las legislaciones que se contempla el matrimonio bajo el régimen de separación de bienes), no así
los bienes provenientes de herencias que pertenecen enteramente al cónyuge que los recibiera o las
donaciones. Sin embargo en algunas legislaciones se permite las capitulaciones
matrimoniales o acuerdos prenupciales donde los cónyuges pueden determinar todo tipo de
cuestiones inherentes a los bienes anteriores al matrimonio y también a los obtenidos con
posterioridad, inclusive hasta se suelen establecer indemnizaciones ante una eventual ruptura del
vínculo que los unía.
Situación jurídica de los padres en relación a los hijos, dentro de lo que encontramos:
A que progenitor le corresponde la guarda y custodia del o los menores (aunque puede ser
compartida).
Establece la forma de convivencia que tendrá con sus hijos la madre o el padre que NO tiene la guarda
y custodia.
Las obligaciones que cada progenitor tendrá que cumplir respecto de la manutención alimentaria de los
hijos (pensión alimenticia). La sentencia judicial de divorcio fija si el padre o la madre o ambos
aportarán económicamente para solventar las necesidades alimentarias de los hijos, y fija de igual
forma qué porcentaje o qué importe deberá aportar el deudor alimentario. Por pensión alimenticia la
mayoría de las legislaciones mundiales contempla que la integran la comida, vestido, estudios y
esparcimiento.
Respecto de la pensión alimenticia, esta puede ser efectiva hasta tanto los hijos cumplan la mayoría de
edad, que –según la legislación de cada país- puede ser a los 18 o a los 21 años, momento en el cual los
cónyuges dejan de tener la obligación legal de mantenerlos económicamente. Esta obligación, en
muchos casos, no se extingue si el hijo tiene algún padecimiento físico o mental que le impidiera
mantenerse por sus propios medios o necesita la manutención para proseguir con sus estudios. Por el
contrario, puede extinguirse antes de las edades mencionadas si el menor fuera emancipado por sus
padres.

Anulación del Matrimonio por lo civil

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La anulación del matrimonio es un procedimiento distinto del divorcio. Un matrimonio se puede anular
cuando en su constitución no se siguió alguna de las formalidades exigidas por la ley o cuando se
realizó a pesar de mediar un procedimiento legal. Las causales de divorcio, por el contrario, presuponen
un matrimonio válido y surgen una vez constituido éste.

Nulidad absoluta

Hay causas de nulidad que son absolutas, es decir, que operan por fuerza de la propia ley y producen
por sí mismas la inexistencia del vínculo matrimonial. Por ejemplo, es nulo el matrimonio de una
persona menor de edad que no tiene la edad que la ley establece como requisito indispensable para
poder casarse; o el matrimonio de una persona que se ha casado anteriormente sin que ese primer
matrimonio haya sido invalidado. De darse una de estas circunstancias, no existe realmente el
matrimonio.

B. Anulabilidad
Hay otras causas que son de mera anulabilidad del matrimonio, es decir que dependen de que una
parte interesada tenga la intención de plantearlas ante un tribunal para que se declare nulo el
matrimonio por no haberse cumplido algún requisito legal al momento de contraerlo.

¿QUE ES NULIDAD MATRIMONIAL?


Un acto jurídico es nulo cuando no se han cumplido los requisitos establecidos en la ley, nulidad
significa invalidez, respecto a la invalidez o nulidad del matrimonio existen unas causales contempladas
en el artículo 140 del código civil las cuales son las siguientes:
Cuando existe un vínculo matrimonial anterior, ya sea respecto al hombre, a la mujer o ambos.
Cuando se ha celebrado entre un hombre y una mujer que están entre sí en el primer grado de línea
recta de afinidad legitima, por ejemplo, el padrastro con la hijastra.
Cuando se ha celebrado entre el padre adoptante y la hija adoptiva o viceversa el hijo adoptivo y la
madre adoptante.
Cuando los contrayentes están en la misma línea de ascendientes o descendientes, o son hermanos.
Cuando no ha habido libertad en el consentimiento. Esta causal solo puede ser alegada por la persona
que fue obligada a consentir.
Cuando uno de los contrayentes ha matado o hecho matar al cónyuge con quien estaba unido en
matrimonio anterior.

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Cuando se ha contraído por fuerza o miedo que sea lo suficientemente fuerte para obligar a obrar a
una persona sin libertad. Esta nulidad solo puede ser alegada por la persona a la que se le haya inferido
la fuerza.
Cuando no se ha celebrado ante Juez y testigos competentes.
Cuando haya faltado el consentimiento de uno de los contrayentes o de los dos.
Cuando ha habido error respecto a ambos contrayentes o de uno de ellos.
Cuando ambos contrayentes sean menores de catorce años.

Respecto a la causal de que uno o ambos contrayentes han hecho matar al cónyuge con quien estaba
unido en matrimonio anterior, la Corte Constitucional a través de sentencia C-271 de 2003 declaro esta
causal exequible en el entendido de que la nulidad por conyugicidio se configura cuando ambos
contrayentes han participado en el homicidio y se ha establecido su responsabilidad por homicidio
doloso mediante sentencia condenatoria ejecutoriada; o también cuando habiendo participado solo un
contrayente, el cónyuge inocente proceda a alegar la causal de nulidad dentro de los tres
meses siguientes en que tuvo conocimiento de la condena.

¿QUÉ ES LA NULABILIDAD DEL MATRIMONIO?

MATRIMONIO CELEBRADO POR PERSONA DIFERENTE DEL OFICIAL DE REGISTRO CIVIL. El Oficial De
Registro Civil es el único y exclusivo, conforme a ley, que puede declarar casados a una pareja (L 996
Art. 78). ¿La razón? Es que el matrimonio es un acto del poder estatal (Samos Oroza, Ramiro, “Apuntes
de Derecho de Familia. Tomo 1”, Sucre, Bolivia: JUDICIAL, 2da, 1995, pp. 141).
PAREJA DEL MISMO SEXO. Esta causa de nulidad de matrimonio está siendo abandonado últimamente
en las legislaciones.
“ARTICULO 78.- FALTA DE CELEBRACION POR EL OFICIAL Y DE DIFERENCIA DEL SEXO. El matrimonio es
nulo:
1º Si no ha sido celebrado por el oficial del registro civil, salvo el caso de excepción permitido por el
artículo 43.
2º Si resulta no haber diferencia de sexo entre los contrayentes.
ARTÍCULO 43.- MATRIMONIO RELIGIOSO CON EFECTOS CIVILES
No obstante, el matrimonio religioso será válido y surtirá efectos jurídicos cuando se lo realice en
lugares apartados de los centros poblados donde no existan o no se hallen provistas las oficialías del
registro civil, siempre que concurran los requisitos previstos por el Capítulo II del presente título (Arts.
44 – 54: Edad, salud mental, libertad de estado, consanguinidad , ausencia de afinidad, prohibición por
vínculos de adopción , inexistencia de crimen, terminación de la tutela, plazo para nuevo matrimonio

16
de la mujer, asentimiento para el menor y permiso para los menores huérfanos, abandonados,
extraviados o con situación irregular) y se lo inscriba en la Registraduría civil más próxima, debiendo el
celebrante enviar para ese fin al oficial del registro civil el acta de celebración y demás constancias bajo
su exclusiva responsabilidad y sujeto a las sanciones que se establecerán en su caso, sin perjuicio de
que puedan hacerlo los contrayentes o sus sucesores. ” (L 996).
CARACTERES DE NULIDAD DE MATRIMONIO
INCONFIRMABLE. No es susceptible de confirmación.
La confirmación es un acto jurídico unilateral, espontaneo y consciente en virtud del cual la persona
que podía invocar anulabilidad renuncia a esta y haciendo desaparecer vicios y defectos del acto,
validándolo.
DECLARACIÓN JUDICIAL. Para la Nulidad De Matrimonio es necesaria la declaración judicial expresa.
ACCIÓN Y PLAZO DE NULIDAD
Puede ser accionado por cualquier interesado. No solo las partes.
Esta acción es imprescriptible. Y se lo lleva a cabo como un proceso ordinario de hecho ante el juez de
familia del lugar donde se celebró el matrimonio.
ANULABILIDAD ABSOLUTA
Es la sanción imprescriptible específica de los vicios de la voluntad de ambos contrayentes o de los
vicios del consentimiento de alguno de ellos y de las incapacidades.
Se trata de una nulidad de protección concebida en interés exclusivo de incapaz o de la víctima del
error, dolo o violencia, con el fin de permitirle quedar a salvo d una operación jurídica que,
hipotéticamente, le ha ocasionado un perjuicio. (L 996 Arts. 44, 46 – 50).
La anulabilidad absoluta es de orden público, por eso puede ser demandada por cualquiera que tenga
interés legítimo y actual, por el Ministerio público, los mismos contrayentes, padres o ascendientes. Sin
embargo no puede ser declarada de oficio por el juez.
Es susceptible de enmendarse por caducidad (L 996 Art. 80, II), también es susceptible de enmendarse
por sobrevenir por alguna causa de hecho (L 996 Art. 81).

CAUSAS DE ANULABILIDAD ABSOLUTA DEL MATRIMONIO


MINORÍA DE EDAD. El varón antes de los dieciséis años (16) cumplidos y la mujer antes de los catorce
años (14) cumplidos, no pueden contraer matrimonio. Aunque el juez puede conceder dispensa de
edad por causas graves y justificadas (L 996 Art. 44).
Esa causa grave es el embarazo. La causa justificada para contraer matrimonio aunque sean menores
de edad para casarse es que la pareja ya hayan vivido juntos como esposos.
Si existe la dispensa judicial no procede la Anulabilidad Absoluta Del Matrimonio.

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PARENTESCO. Es otra causa de anulabilidad absoluta del matrimonio. En línea directa el matrimonio
está prohibido entre ascendientes y descendientes, sin distinción de grado, y en línea colateral entre
hermanos (L 996 Art. 47).
Es una de las causales de anulabilidad absoluta ya que “El parentesco es la relación o conexión que
existe entre las personas que descienden de un mismo tronco o raíz, o que están unidas por vínculos de
sangre, de adopción o matrimonio civil o de hecho reconocido judicialmente” (CASTELLANOS T., G.,
“Derecho Familia”, Sucre, Bolivia: Gaviota del Sur, 2011, página 12).
Si existe la dispensa judicial no procede la Anulabilidad Absoluta Del Matrimonio.
AUSENCIA DE LIBERTAD DE ESTADO. Es también causa de anulabilidad absoluta del matrimonio.
No puede contraerse nuevo matrimonio antes de la disolución del anterior. Si los nuevos esposos
oponen la invalidez del matrimonio anterior, ella se juzgará previamente. (L 996 Arts. 82, 46)
DELITO CONYUGAL DE HOMICIDIO. Es otra causa de anulabilidad absoluta del matrimonio. No pueden
casarse dos personas cuando la una ha sido condenada por homicidio consumado contra el cónyuge de
la otra.
Mientras el proceso penal este pendiente, se suspende la celebración del matrimonio.
CARACTERES DE ANULABILIDAD ABSOLUTA DEL MATRIMONIO
Es subsanable, por la voluntad de los contrayentes o por expresa disposición de la ley.
Es confirmable, por acuerdo de los contrayentes o por el transcurso del tiempo.
Es prescriptible. Para accionar la anulabilidad relativa existe un plazo de caducidad, que es de dos años.
ACCIÓN Y PLAZO PARA DEMANDAR LA ANULABILIDAD ABSOLUTA DEL MATRIMONIO
La anulación puede ser demandada por los mismos cónyuges, por sus padres o ascendientes y por
todos los que tengan un interés legítimo y actual, así como por el ministerio público.
La acción para anular el matrimonio, en los casos de minoría de edad, parentesco, ausencia de libertad
de estado y delito conyugal de homicidio, es imprescriptible, cuando no se la sujeta a un término de
caducidad o el vicio se subsana por sobrevenir alguna circunstancia de hecho como llegar a la mayoría
de edad, sentencia de divorcio, existir una dispensa judicial o haber cumplido la condena (L 996 Art.
83). La acción de anulación del matrimonio no se trasmite a los herederos, sino cuando hay demanda
pendiente a tiempo del deceso de quien podía interponerla (L 996 Art. 90).
EFECTOS DE LA ANULABILIDAD ABSOLUTA DEL MATRIMONIO
Mientras no haya sentencia judicial de declaración de anulabilidad absoluta de matrimonio pasada por
autoridad de cosa juzgada, surte los mismos efectos que el matrimonio.
El matrimonio anulado produce sus efectos, como si hubiera sido válido, hasta que la sentencia de
anulación pasa en autoridad de cosa juzgada, si se lo contrajo de buena fe por ambos cónyuges.

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Existiendo buena fe sólo por parte de uno de los esposos, el matrimonio produce sus efectos
únicamente a favor de éste.
Pero si ambos esposos estuvieron de mala fe, se considera que el matrimonio no existió nunca respecto
a ellos.
En cualquier caso, el matrimonio anulado surte efectos con relación a los hijos (L 996 Art. 92).
ANULABILIDAD RELATIVA
Es la sanción que recae sobre el matrimonio si hubo voluntad exteriorizada por error o violencia, falta
de publicación, falta de asentimiento a menor de edad, oposición presentada, impotencia sexual,
enajenación mental, interdicción declarada judicialmente e inobservancia de “luto de viudez” por 300
días.
La anulabilidad relativa no es de orden público; de ahí que el Ministerio Público no puede pedirla sino
en su calidad de representante legal de los incapaces (interdictos L 996 Art. 85), ni corresponde la
declaratoria de oficio por el juez y de ahí también, que el acto sea confirmable (L 996 Art. 84, 85 y 87
todos in fine), y la acción sea prescriptible: dos años (L 996 Art. 89).
El matrimonio puede anularse a demanda del contrayente que no expresó su voluntad o no la dio
afirmativa, al ser interrogado por el oficial del registro, salvo que hubiese suscrito el acta matrimonial o,
en caso contrario, cohabitado después de la celebración.
CAUSAS PARA LA ANULABILIDAD RELATIVA DEL MATRIMONIO
VOLUNTAD EXTERIORIZADA POR ERROR O POR COACION. En el momento de la celebración del
matrimonio los contrayentes expresan su consentimiento con voluntad libre, afirmativa y
contundentemente pero con error sustancial sobre la identidad del otro contrayente. Piensan que se
están casando con Juan, pero este es Pedro.
El error es creer lo falso verdadero (Escuela Clásica). Es la falta de concordancia entra la voluntad
deseada y la voluntad declarada (Escuela alemana).
También se puede anular el matrimonio si existe coacción en el momento de la celebración. En las
áreas rurales de Bolivia es común la celebración de matrimonio por coacción del padre que descubrió a
joven en la cama de su hija.
La coacción es la fuerza o violencia que se hace a una persona para precisarla que diga o ejecute alguna
cosa. En este sentido el empleo de la coacción origina múltiples consecuencias de orden civil y familiar,
ya que los actos ejecutados, bajo coacción adolecen del vicio de nulidad, y en el orden penal, por que
daría lugar a diversos delitos, especialmente los atentatorios contra la libertad individual.
FALTA DE ASENTIMIENTO A MENOR DE EDAD. El menor de edad no puede casarse sin el asentimiento
de su padre y de su madre. En el caso de discordia, decide el juez.
Si el uno ha muerto, está ausente o de otra manera impedido de manifestar su voluntad, basta el
asentimiento del otro.

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En defecto de los padres, el asentimiento lo da el tutor. El padre o la madre que no ejerce su autoridad
puede exponer motivos graves por los que no hubiera dado su asentimiento, en caso de ejercer dicha
autoridad, que el juez considerará resolviendo lo que sea pertinente.
El menor, cuando se le niega asentimiento, puede también ocurrir al juez, quien, después de escuchar a
las partes y al fiscal, le concederá la autorización siempre que concurran motivos graves para la
realización del matrimonio.
Los menores huérfanos, abandonados, extraviados o con situación irregular, recabarán el permiso del
órgano administrativo de protección de menores o del establecimiento público o privado que tenga la
tutela, o persona particular a quien se acuerde la tenencia, si no hay padres conocidos o en ejercicio de
su autoridad (L 996 Art. 53, 54).
OPOSICIÓN PRESENTADA. La Oposición Presentada inicia la anulabilidad relativa del matrimonio.
Las personas que pueden deducir oposición al matrimonio son los padres, el tutor, el cónyuge, ex-
cónyuge o sus herederos, el afín, persona que ha sido condenada por homicidio consumado contra el
cónyuge de la otra, la mujer viuda, divorciada o cuyo matrimonio resulte invalidado, no puede volver a
casarse sino después de trescientos días de la muerte del marido, del decreto de separación personal
de los esposos o de la ejecutoria de la nulidad.
Todas estas personas deben denunciar la oposición ante Ministerio Público. En caso de que la denuncia
se haga ante el oficial del registro civil, éste la comunicará inmediatamente al ministerio público.
El oficial del registro remitirá la oposición al juez instructor de familia para que la resuelva, previa
noticia fiscal con citación y emplazamiento de los pretendientes y el opositor.
El efecto de la oposición es: suspende la celebración del matrimonio.
El opositor cuya oposición es rechazada puede ser condenado al resarcimiento del daño que haya
causado, salvo que se trate de algún ascendiente o del ministerio público.
IMPOTENCIA SEXUAL. La impotencia permanente para la cópula carnal, cuando es anterior al
matrimonio, puede aducirse como causa de anulabilidad por uno u otro de los cónyuges.
La impotencia para engendrar o concebir sólo puede aducirse como causa de anulación del matrimonio
cuando uno de los cónyuges carece de los órganos de reproducción. En este caso, la acción
corresponde al otro cónyuge, siempre que no haya conocido el defecto antes del matrimonio, y no
puede proponerla después de tres meses de haber descubierto dicho defecto (L 996 Art. 88).
ENAJENACIÓN MENTAL. La enajenación mental es la anormalidad psíquica que produce descontrol de
la actividad intelectual y volitiva, en forma general y temporalmente estable.
Es causa de anulabilidad relativa del matrimonio. Aunque si los enajenados antes del matrimonio y
recobrados durante él por una acción de nulidad u otra causa que deja sin efecto la enajenación como
causa de anulabilidad relativa.
INTERDICCIÓN DECLARADA JUDICIALMENTE. No puede contraer matrimonio el declarado interdicto por
causa de enfermedad mental (L 996 Art. 45). Si fuera así, se puede demandar la anulabilidad relativa.

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Una Enfermedad Mental es toda denominación general para toda perturbación mental mayor de
origen orgánico y/o emocional, caracterizado por pérdida de contacto con la realidad, a menudo con
alucinaciones e ilusiones.
La Alucinación es la sensación subjetiva que no corresponde a estímulos externos. Por ejemplo:
la Auditiva, percepción de sonidos irreales. Puede alegarse como vicio del consentimiento.
La Ilusión es la percepción errónea con estímulo. A diferencia de las alucinaciones, en la ilusión hay
estímulo. Es más frecuente cuanto más inmaduro es una persona y a medida que se va madurando las
ilusiones van disminuyendo. Las ilusiones son signo de inmadurez, aunque existe controversia en
cuanto a la edad que determina la madurez. Si la demanda de interdicción está pendiente, se suspende
la celebración del matrimonio hasta que se pronuncie la sentencia y pase ésta en autoridad de cosa
juzgada.
INOBSERVANCIA DE “LUTO DE VIUDEZ” POR 300 DÍAS. Es otra causal de anulación relativa de
matrimonio. Si la viuda quiere casarse antes de los trecientos (300) días después de enviudar, los
interesados legitimados pueden oponerse por posible confusión de paternidad si naciese un hijo (a).
No se sabría con certeza si es hijo del fallecido o del nuevo marido.

¿Cuánto tiempo dura y cuánto cuesta un proceso de nulidad matrimonial?


Depende de cada caso y del trabajo de cada Tribunal. Existen unos plazos legales que hay que respetar.
Normalmente se puede resolver una causa entre un año o año y medio e incluso menos. Cada Tribunal
tiene estipuladas unas tasas de las cuales te informarán. En cualquier momento del proceso se puede
solicitar "Media Pobreza" (pagar la mitad de los gastos) o "Pobreza" (abonar una cantidad simbólica
asequible). A estas peticiones sólo se pueden acoger personas realmente necesitadas. Los procesos se
llevan exactamente iguales sean abonando la cantidad o solicitando pobreza o media pobreza si
procede.
Los gastos de abogado, peritos, etc. corren por cuenta del demandante.

¿Basta con celebrar la boda en la iglesia o hay que hacer un trámite


adicional?
Según la Registradora nacional de Colombia Cuando se va realizar algún trámite de tipo legal y como
prueba del estado civil, el único documento válido es el Registro Civil de Matrimonio, por eso es
importante registrar la unión de la pareja y para ello hay que acudir a una notaría o Registraduría, o al
consulado si se casa en el exterior. Esto aplica también para los matrimonios celebrados por el rito
católico, No basta con una simple acta matrimonial religiosa.

¿El matrimonio se tiene que registrar en la misma ciudad en la que se


celebró la boda?
No. El artículo 118 de la Ley 1395 de 2010 señala que “Todos los actos, hechos y providencias que
deban inscribirse en el registro civil o que afecten el mismo, podrán inscribirse en cualquier oficina
autorizada para cumplir con la función de registro civil del territorio nacional o en los consulados de

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Colombia en el exterior”. Esta norma eliminó el requisito de territorialidad que antes se exigía para la
inscripción en el Registro Civil.

¿Qué pasa si no se registra el matrimonio?


Si el matrimonio no es registrado no hay manera de probar legalmente que éste existe, lo cual puede
ser determinante en procesos de sucesiones, sustituciones pensionales y otros.
En Colombia existen dos maneras de divorciarse:
1. Ante Notaría:
La solicitud de divorcio ante notaría debe ser presentada a TRAVES DE ABOGADO CON LICENCIA
VIGENTE.
Esta posibilidad se da cuando los cónyuges se han puesto de acuerdo en finalizar su relación para lo
cual se realiza todo el trámite ante una notaría debiéndose elevar escritura pública la cual debe
contener:
La escritura pública debe contener si existirán obligaciones alimentarías entre cónyuges y el manejo de
la convivencia entre ellos en el futuro.
Si existen hijos menores, se debe pedir el concepto del defensor de familia, el cual tarda en promedio
15 días y en el acuerdo se requiere la descripción expresa y detallada de quien ejercerá la custodia y
manutención de los niños, así como el régimen de visitas.
Con el divorcio se debe liquidar la sociedad conyugal de bienes. Esto es independiente al divorcio y
requiere un proceso adicional. El precio está basado en la cantidad y valor de las propiedades en
común.
Los cónyuges pueden otorgar poder al abogado para que firme el divorcio en nombre de ellos, si así lo
desean.

2. Ante Juez:
Se da cuando alguno de los cónyuges invoca una de las siguientes causales (y no se logró consenso
para tramitar el divorcio por mutuo acuerdo ante notaria o por mutuo acuerdo ante juzgado):
Las relaciones sexuales extraconyugales de uno de los cónyuges, salvo que el demandante las haya
consentido, facilitado o perdonado.
El grave e injustificado incumplimiento por parte de alguno de los cónyuges de los deberes que la
ley les impone como tales y como padres.
Los ultrajes, el trato cruel y los maltratamientos de obra.
La embriaguez habitual de uno de los cónyuges
El uso habitual de sustancias alucinógenas o estupefacientes, salvo prescripción médica

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Toda enfermedad o anormalidad grave e incurable, física o síquica, de uno de los cónyuges, que ponga
en peligro la salud moral o física del otro cónyuge e imposibilite la comunidad matrimonial
Toda conducta de uno de los cónyuges tendiente a corromper o pervertir al otro, o a un descendiente o
a personas que estén a su cuidado y convivan bajo el mismo techo
La separación de cuerpos, judicial o de hecho, que haya perdurado por más de dos años
El consentimiento de ambos cónyuges, manifestado ante Juez competente y reconocido por éste
mediante sentencia.

ANALISIS DE LA PARTE TEOLOGICA SOBRE EL DIVORCIO

PRIMER PUNTO
Basado en la ley Deuterocanónica
Mi deseo es que podamos analizar cada uno de los cuatro puntos por separado, mirando sus abismos
teológicos, esto es, el histórico, cultural, geográfico y hasta el lingüístico, así nos daremos cuenta de
que en ocasiones somos nosotros los que mesclamos lo uno con lo otro, no haciendo las propias
salvedades del texto.
Por ejemplo desde el punto de vista histórico, la postura Deuteronomista no puede estar vinculada con
la postura paulina en 1 corintios, porque no es ni siquiera profecía, sino más bien una regulación hacia
una práctica común en la época, segundo las épocas son distintas, pueden haber más de mil años de
diferencia, tercero las circunstancias son distintas, pues mientras que Deuteronomio trata del divorcio,
aplicado por el hombre a la mujer, en corintios ese no es el punto a tratar, sino más bien las
separaciones entre parejas por diversos motivos, sin estar necesariamente el divorcio presente en la
mente de pablo. Ya Jesús en mateo 19 hace referencia a este hecho que menciona Deuteronomio
debido a la pregunta que hacen algunos, referente al divorcio, y entra a decir que antes de Moisés todo
esto se estaba dando, pero debido a la dureza del corazón del mismo hombre. En la cual su machismo
amparado en sus conceptos o propias leyes, les permitía separarse dejando a sus esposas por cualquier
causa, y esto estaba sucediendo aun en otras culturas distintas a la de Israel, Miremos...

Deuteronomio 24:1-4 Divorcio y matrimonio visto desde la regulación mosaica


"Si un hombre se casa con una mujer, pero luego deja de quererla por haber encontrado en ella algo
indecoroso, sólo podrá despedirla si le entrega un certificado de divorcio. Una vez que ella salga de la
casa, podrá casarse con otro hombre. "Si ocurre que el segundo esposo le toma aversión, y también le
extiende un certificado de divorcio y la despide de su casa, o si el segundo esposo muere, el primer
esposo no podrá casarse con ella de nuevo, pues habrá quedado impura. Eso sería abominable a los
ojos del Señor. "No perviertas la tierra que el Señor tu Dios te da como herencia.

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La disolución del matrimonio por medio del divorcio era una práctica que existía en Israel y en otras
naciones del antiguo Oriente aún mucho antes de la historia propia de Israel. La legislación
deuteronómica procuro regular según el pasaje bíblico, la disolución ilegal del matrimonio y el
matrimonio de la mujer divorciada, pues ya que según el contexto se violaban los derechos de la mujer
al ser despedida de casa de su marido, sin más ni más.
O en otros casos la mujer después de haber sido repudiada por su marido, permanecía bajo el mismo
techo, expuesta a las humillaciones de su marido.
El texto comienza diciendo: Cuando alguno tomare mujer y se casare con ella, si no le agradare…
Parece que la práctica de los divorcios era algo muy común entre los israelitas y otras naciones, quienes
con toda probabilidad, se habían familiarizado con la costumbre.
Recordemos que cuando se escribe el texto han pasado muchos siglos de historia, el libro de
Deuteronomio data su relato del año 1200 AC, aprox. Pero su redacción propia puede abarcar muchos
siglos más tarde por parte de una de las escuelas teológicas. Como esta práctica estaba demasiado
arraigada para ser abolida, fue tolerada por Moisés. Y pensando en que este hombre actuaba en la
dirección de Dios, hay que decir que el señor le permite legislar en cuanto a esta problemática que se
vivía.
La permisividad del divorcio reconoció su legalidad con dos condiciones, capaces de evitar en gran
parte los males inherentes al sistema permitido, miremos estas dos condiciones.

1. Que el acto del divorcio había de estar certificado en un documento escrito, cuya preparación,
con formalidad legal, proporcionaría tiempo para reflexión y arrepentimiento, un documento
escrito que simbolizaba el repudio público de la esposa y la disolución del matrimonio. El
esposo tenía que entregar personalmente la carta de divorcio a su esposa. Esta acción era un
acto legal que validaba la disolución del matrimonio y daba a la mujer la libertad de casarse con
otro hombre, Y salir libre de su casa, sin ningún vínculo que la siguiera comprometiendo a estar
al lado de su marido.
Esto en sí, ha sido y será el espíritu con que dios ha intervenido en esta problemática social.

2. El esposo también tenía que despedir a la mujer de su casa. Este acto era necesario para validar
el divorcio y afirmar la disolución legal de su relación con la mujer que había sido su esposa. En
caso de que la esposa divorciada se casara con otro, ella no podría, al terminarse este segundo
casamiento, ser restaurada a su primer marido, por deseoso que él estuviera de recibirla.
Algunos piensan que este versículo está a favor del divorcio, pero este no es el caso, Se deben
leer los cuatro versículos para entender el punto central del pasaje. La intención no es sugerir
que el hombre se divorcie de su esposa por cualquier capricho o razón. El divorcio era un acto
final y permanente para la pareja. Si un hombre al casarse con su mujer encontraba algo
indecente en ella y la despedía, no podría nunca más volverse a casar con ella. Aun cuando
hubiera muerto la persona con quien esta mujer había establecido una nueva relación (24.4).

24
Esta restricción era para prevenir un nuevo matrimonio a la ligera después de un divorcio. La
intención más clara era hacer pensar a la gente dos veces antes de divorciarse.
El pasaje bíblico sigue diciendo:
¿SI ENCONTRARE EN ELLA ALGO INDECENTE? Un hombre que tomaba a una mujer para ser su esposa y
consumaba el matrimonio por medio de la relación sexual tenía el derecho de divorciarse de ella si
hallaba en ella alguna cosa vergonzosa. Pero la tradición judía estaba dividida en la interpretación de
esta expresión que (En heb. es erwath dabar). Y sobre esto había dos puntos de vista.

1. La escuela rabínica conocida por el nombre de su líder, Shamai, interpretaba que era infidelidad
conyugal.

2. La escuela rabínica de Hillel lo interpretaba de una manera más amplia. Para Hillel y sus discípulos,
cualquier cosa que desagradaba al esposo era motivo suficiente para que un hombre repudiara a su
esposa.
Sin embargo, el significado de “erwath dabar” no es muy claro. La palabra se refiere a la violación de la
pureza y santidad dentro del matrimonio. La “cosa vergonzosa” que el esposo encontraba en su esposa
no era el ADULTERIO, esto es una infidelidad sexual antes del matrimonio, por una razón bien
justificada, Porque la penalidad para ello era la muerte, el texto bíblico que leeremos a continuación es
muy claro sobre la infidelidad.
Mas si resultare ser verdad que no se halló virginidad en la joven, entonces la sacarán a la puerta de la
casa de su padre, y la apedrearán los hombres de su ciudad, y morirá, por cuanto hizo vileza en Israel
fornicando en casa de su padre; así quitarás el mal de en medio de ti. Si fuere sorprendido alguno
acostado con una mujer casada con marido, ambos morirán, el hombre que se acostó con la mujer, y
la mujer también; así quitarás el mal de Israel. Deuteronomio 22:20-22

Es posible, por lo tanto, que “erwath dabar” designaba un problema o una actitud que el esposo
encontraba en su esposa, que requería de su parte la disolución de su matrimonio por medio del
divorcio. Pero no se especifica claramente que era eso indecente que él, podía encontrar en su
compañera.
La frase traducida “cosa indecente” es literalmente “desnudez de una cosa”. Y de igual forma su
significado exacto es incierto. Se halla sólo una vez más en la Biblia, en Deuteronomio 23:13,14, donde
se refiere al excremento humano no cubierto, y la Versión Reina Valera lo traduce “cosa inmunda”.
Tal vez signifique “cosa repugnante”. Por esto pienso que la frase no intenta definir las causas que
justifican el divorcio, sino que sencillamente significa que el marido encontró en su esposa algo que le
desagradó muchísimo, a tal grado que decidió divorciarse de ella.
Después de la disolución legal del matrimonio y de la ceremonia de despedida, la mujer divorciada
podía casarse con otro hombre.
Deuteronomio 24:2 Y salida de su casa, podrá ir y casarse con otro hombre.

25
Pero, si su segundo marido se divorciaba de ella o moría, el primer esposo no podía tomar la mujer
que había sido su esposa y casarse con ella por segunda vez. La razón para la prohibición del segundo
matrimonio era que la mujer había sido mancillada. En nuestro contexto esto sería como haberla
avergonzado y humillado públicamente dejándola desamparada y frágil, frente ante la sociedad.
No podrá su primer marido, que la despidió, volverla a tomar para que sea su mujer, después que fue
envilecida; porque es abominación delante de Jehová, y no has de pervertir la tierra que Jehová tu
Dios te da por heredad. Deuteronomio 24:4

La palabra Hebrea. Traducida mancillada aparece en levítico miremos:


Además, no tendrás acto carnal con la mujer de tu prójimo, contaminándote con ella.
Levítico 18:20
Aquí hay algo vergonzoso, indecente y humillante en el caso de un hombre que se acuesta con la mujer
de su amigo, Para describir la contaminación del hombre que comete adulterio.
Así que el uso de esta palabra para describir el matrimonio de una mujer dos veces divorciada, esto es
repudiada por su primer esposo, y que el primero la quisiera volver a tomar como esposa, era
moralmente imposible, (solo había esa excepción según la ley, y no significa que hoy, en la gracia
tengamos que seguir el mismo patrón), esto era visto como una abominación delante de jehová. La
mujer que vivía con un hombre, después con otro, y que después regresaba a su primer marido,
cometía un acto que no agradaba a Dios, y su acción traía pecado sobre la tierra y contaminaba la
relación del pueblo con Dios.
Jesús usó este pasaje para limitar divorcios solamente para casos de adulterio.
También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio. (Recordemos que ese
repudio no estaba justificado en una infidelidad conyugal de la esposa) Pero yo os digo que el que
repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, hace que ella adultere; y el que se casa con la
repudiada, comete adulterio. Mateo 5:31.32
Por esto, se puede hablar de una legislación permisiva; cuando Jesús citó el pasaje de Deuteronomio
24 y comentó acerca del matrimonio y el divorcio. En Mat 19:1-9. Puso énfasis sobre el hecho de que
en el principio "no era así", indicando que el divorcio fue una legislación necesaria porque los seres
humanos no cumplían el ideal de un matrimonio, que dure toda la vida o como aplican muchos el
concepto, “hasta que la muerte los separe”. Desgraciadamente, hasta hoy el divorcio representa el
fracaso de la pareja en adaptarse en las relaciones interpersonales de tal manera que puedan vivir sus
vidas en armonía y felicidad.
Moisés dio las bases para el divorcio debido a las condiciones prevalecientes en su día. Tomó en cuenta
las condiciones sociales y la actitud general hacia las mujeres en aquel entonces, que prácticamente
estaban en desventaja social, así que en parte esta legislación fue para proteger la parte más débil de
un tratamiento cruel de parte del esposo. Aunque según la legislación, ellas no tenían el derecho de
pedir o solicitar formalmente una separación o divorcio, (Hoy esto es posible, gracias a los derechos
que gozan las mujeres dentro de nuestra cultura y sociedad). Tenemos que adaptar los principios que

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Moisés dio y aplicarlos a las circunstancias que existen en cada país o región del mundo. Esto no es
para hacer más fácil el proceso del divorcio; más bien es para reconocer las imperfecciones de la
naturaleza humana y subrayar el hecho, que Dios nos perdona todo pecado; aun el divorcio, y quiere
que tomemos los pasos que pueden reconciliarnos con Dios y los seres humanos.
O si usted cree que el divorcio es un pecado aberrante, he imperdonable más que otros pregúntese
porque no fue incluido en las siguientes listas. 1 Corintios 6:9-11; Efesios 4:23-30; Colosenses 3:5-12;
Apocalipsis 21:8
Dios a través de Moisés había incluido de igual forma una ley que daba ventajas a los recién casados, en
cuanto a poder tener la mejor relación posible.
Cuando alguno fuere recién casado, no saldrá a la guerra, ni en ninguna cosa se le ocupará; libre
estará en su casa por un año, para alegrar a la mujer que tomó. Deuteronomio. 24:5
Los recién casados debían permanecer juntos el primer año. Esto era para evitar colocar excesiva carga
sobre una nueva relación no asentada y darles una oportunidad de madurar y fortalecerse antes de
enfrentar las numerosas responsabilidades. Un jardinero comienza colocando una semillita en un
pequeño recipiente y espera a que eche raíces antes de plantarla en el campo. Permita que su
matrimonio se fortalezca protegiéndolo de excesivas presiones y distracciones externas, especialmente
al comienzo. Y no espere ni demande mucho de los recién casados para que no les falte el tiempo ni la
energía para establecer su matrimonio.
Hoy en día es todo lo contrario, los noviazgos se dan dentro de un contexto de pasiones desenfrenadas,
algunos tienen relaciones sexuales previas al matrimonio, con el concepto, “es para saber si me puedo
entender con el (ella) cuando nos casemos”.
Se vive con tanta intensidad un noviazgo, que cuando se llega matrimonio ya se ha perdido esa magia
tan maravillosa, de poder entrar a conocer realmente a la otra persona en la intimidad, a pesar de todo
esto no ha cambiado para nada, el que muchos fracasen en el matrimonio.

RESUMEN PRIMER PARTE:


 Lo que hasta entonces observamos es que esta práctica del repudio o divorcio fue algo que fue
reconocido y regulado por Dios, para preservar la identidad del matrimonio
 Aunque Dios no estableció esta ley del divorcio, pues ya existía, el sí intervino no para abolirla,
si no para regular la práctica y que tuviera unas normas morales que pudieran proteger a la
mujer divorciada o repudiada de su marido.
 La iglesia cristiana de igual forma no ha establecido esto en nuestra sociedad, no nos
inventamos el divorcio, yo creo que más bien se le ha salido al paso a algo que con nombre de
divorcio o separación, también ha convivido con nosotros, y esto, porque los miembros de
nuestras congregaciones son seres humanos, no somos ángeles celestiales que no tiene
problemas, aunque lamentablemente la taza de divorcios en Colombia se están acentuando en
católicos y cristianos por igual.

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 El divorcio legalizado en este pasaje no está basado en un adulterio, sino en aquello indecente o
desagradable que el marido encontrara en su mujer, algo de lo que se valieron los fariseos para
adoptar más de 80 normas sobre la disolución del matrimonio.
 Esta no puede ser la causa por la cual hoy se puedan dar los divorcios, pues no estamos bajo la
ley sino bajo la gracia. Y a partir del nuevo testamento hay otra nueva legislación que fue
enseñada por Jesús. No puedes levantarte un día de tu cama y decir, como mi esposa se negó a
tener relaciones íntimas con migo, me divorcio de ella.
 En este texto vemos reflejado que Dios protege a la mujer, porque esta no se podía separar del
marido, no es el caso del nuevo testamento donde pablo dice: mando no yo si no el señor que
la mujer no se separe de su marido, esto lo dice porque allí el texto está basado en lo que si se
podía hacer de acuerdo a la norma y cultura griega vigente, la mujer si se podía separar de su
marido, lo cual le daba favorecimientos a las mujeres, Pero el ideal divino es que esta al igual
que su marido no lo hiciera por causas injustificadas.
 ¿Quieres tu separarte de tu esposa(o) basado en Deuteronomio 24:1-5? Tus vagas excusas son:
Es que se perdió el amor, no me satisface, es muy vieja(o) para mí, no es responsable.
Pero vamos a continuar con este estudio de este tema, pero al menos lo que podemos extraer
de este libro de Deuteronomio.
ESTAS NO SON EXCUSAS, DIOS QUIERE QUE SALVES TU MATRIMONIO ANTES QUE PERDELO

SEGUNDO PUNTO
Al mirar este segundo punto habrá que tener muy en cuenta el tiempo que registra el profeta, las
circunstancias que se dan, ya que la situación no es la misma que en Deuteronomio, el punto central no
es el divorcio, sino la infidelidad del pueblo Israel hacia Dios, por esto no se pueden tomar las palabras
de él tan a la ligera, y decir que como acá, en este pasaje bíblico, el declara que aborrece el repudio,
esto sea algo absoluto que lo dijo para todas las épocas y todas las circunstancias, lo que hay que
comprender en sí, no es que el señor repudia el acto, sino las circunstancias que están llevando a
muchos a cometer el acto, ese es el fondo del asunto que hay que tener muy en cuenta.

Más diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y la mujer de tu juventud, contra la cual
has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la mujer de tu pacto. ¿No hizo él uno, habiendo en él
abundancia de espíritu? ¿Y por qué uno? Porque buscaba una descendencia para Dios. Guardaos,
pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales para con la mujer de vuestra juventud. Porque Jehová
Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová
de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales. MALAQUIAS 2:-10-
No es nada accidental que Dios hubiera usado la figura del matrimonio humano para hablar de la
relación o alianza con su pueblo Israel: es decir la honra al matrimonio humano glorifica a Dios y la
honra a Dios glorifica nuestro matrimonio.

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Pero hay que mirar el contexto de lo que realmente Dios quiere enseñar, pues el tema central del texto
es la infidelidad de Israel hacia Dios, pues este no ha sido leal, y ha abandonado el pacto de su
juventud, esto es el principio con el cual fueron llamados, por un solo Dios, sirviendo a uno solo y
soberano señor, el tema secundario es algo que trae a la luz, lo que está sucediendo y Dios lo usa como
algo para ilustrar su desagrado hacia el comportamiento desleal de Israel.
El v. 10 abre la sección con el tema central de la fe bíblica y mensaje clave del Deuteronomio.
Al observar los siguientes pasajes de la biblia a continuación, nos podremos dar cuenta cual es el
propósito del señor,
Mal 2:10.11
¿No tenemos todos, un mismo padre? ¿No nos ha creado un mismo Dios? ¿Por qué, pues, nos
portamos deslealmente el uno contra el otro, profanando el pacto de nuestros padres? Prevaricó Judá,
y en Israel y en Jerusalén se ha cometido abominación; porque Judá ha profanado el santuario de
Jehová que él amó, y se casó con hija de dios extraño.

Israel solo tiene a Jehová por Dios y solo ha conocido a un único Dios, ninguno de los antepasados
conoció, adoro, y sirvió a otro. Deuteronomio 6:4-5, esto es lo que llama el profeta el pacto de nuestros
padres. No se está hablando en este pasaje bíblico, de un matrimonio civil entre un hombre y un mujer,
sino de la relación de Israel con Dios, el portarse deslealmente, significaba que Israel caminaba por la
idolatría, abandonando al señor con el cual habían hecho un pacto, comparando este tema de la
unicidad de Dios se resalta, además la repetición, de la palabra “uno” (traducido aquí como “un
mismo” y “único”). Los vv. 10 y 16 presentan el mismo tema, pero desde la vía negativa: la palabra
“deslealtad” (bagad, traducida aquí como “traición”) aparece cinco veces (en los vv. 10, 11, 14, 15, 16).
Detrás de todo esto, lo que sigue es traer una clara enseñanza y amonestación al pueblo, tras la
analogía del matrimonio, en el cual probablemente también estaban fallando, pues es lo más lógico
que cuando el hombre le falla a Dios, le falle de igual forma a su pareja.
Y por esto se toca el asunto de los problemas conyugales y la espiritualidad personal. El v. 13 añade
otra acusación a las contenidas en los vv. 10-12. Además de casarse con mujeres paganas, los hombres
de Judá se divorciaban de sus esposas judías, para casarse con extranjeras.
Hay varias posibles razones para que esto estuviera sucediendo en el pueblo de Israel.
Un posible motivo para esta actitud era la lujuria, el deseo de tener esposas más jóvenes y sensuales.
Un segundo posible motivo era el prestigio, dado que las naciones no judías en aquel momento de la
historia, ostentaban el poder, así que tener una mujer no judía podía haber sido una ventaja económica
y política.
Otra situación es que por lo general en la cultura judía los que se casaban eran demasiado jóvenes, los
hombres podían hacerlo a partir de los 13 años y las mujeres desde menor edad. Es posible que las
lágrimas que cubrían el altar de Jehová (v. 13) fueran las de las esposas divorciadas, repudiadas por sus
maridos, por causas que para ellas eran totalmente desagradables, entonces Repudiadas y

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abandonadas por sus esposos, estas van al templo a quejarse de su suerte cruel y a derramar su
aflicción delante del Señor.
De acuerdo con estos tres puntos de interpretación, el Señor, movido a compasión a la vista de sus
lágrimas, anuncia que ya no aceptará más los sacrificios de los hombres que eran responsables del
dolor de las mujeres divorciadas.
La demanda de Malaquías, recordémoslo, no cae en momentos de abundancia y armonía. En la época
de Malaquías el divorcio era algo más que se daba por incompatibilidades interpersonales. Tenía, en la
mayoría de los casos, un móvil socioeconómico, como ya se dijo. El matrimonio con una mujer
extranjera traía para el judío dinero y posición. Los vecinos de Judá tenían más posibilidades
económicas y materiales que la empobrecida comunidad judía del pos exilio. La filosofía del hombre
judío era: “En tiempos de penurias, Dios se hace de la vista gorda”. Sin embargo, el mensaje de
Malaquías indica que el matrimonio con mujeres extranjeras (paganas) traía el peligro de la idolatría y
la infidelidad a Dios. Esto fue lo que le paso al rey salomón término inclinado a los dioses de sus
mujeres las cuales desviaron su corazón. Recordemos lo siguiente: No existe una ética para la
abundancia y otra para la escasez. Las demandas de Dios son para todos los miembros de su pueblo,
pobres o no.
Otra interpretación para el verso 15
“¿No hizo Dios una esposa para Adán? Tenía poder para hacerlo de otra manera, si lo hubiera deseado.
¿Y por qué hizo solamente una? Porque buscaba una descendencia santa, propósito que hubiera sido
frustrado si le hubiera dado más de una esposa”.
Con esta interpretación, que relaciona el contenido del versículo más con la monogamia que con la
unicidad de Dios, Malaquías fundamenta su argumentación contra el divorcio en el relato de la
creación, Gen 2:21-24. Divorcio que obviamente no estaba respaldado por actitudes de adulterio de
sus esposas, al cual Malaquías no está haciendo alusión, esto significa que su desaprobación igual que
la nuestra debe ser la misma.
Pues en este caso podían recurrir los hombres a la lapidación, sustentados en la ley.
Acá en Malaquías más bien el problema es por causas sociales en las cuales los hombres sacaban el
mejor partido. Es muy interesante que Jesús hizo lo mismo cuando los fariseos le preguntaron sobre el
tema del divorcio, Mat. 19:4-6. En este último texto lo que Jesús hace es:
Limitar el divorcio a un solo acto (fornicación)
Lo explico (por la dureza del corazón del hombre) aquí la palabra dureza determina, el carácter
inflexible que se tenía al no perdonar la esposa o pasarle por alto faltas que probablemente se podían
solucionar sin el abandono o divorcio.
Lo regulo (no lo abolió, sino que lo que se procuro fue el evitar más daño entre las parejas y poder
disuadir los divorcios por cualquier causa.

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El verso 16 dice: Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de
iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis
desleales.
Esta afirmación de no debe tomarse de una forma absoluta, porque Dios mismo le dio carta de
divorcio a la rebelde Israel. Lo que se debe entender es que lo que a Dios, le desagrada es la injusticia.
Ella vio que por haber fornicado la rebelde Israel, yo la había despedido y dado carta de repudio; pero
no tuvo temor la rebelde Judá su hermana, sino que también fue ella y fornicó.
Jeremías 3:16

Observando el abandono que tuvo Israel de parte de Jehová cuando peco siendo rebelde y adultera, a
la luz de Deuteronomio 24, se puede decir que fue despedida con carta de divorcio, esto es. Israel
quedo libre por un momento de Dios, para que escogiera su propio camino aunque su pecado debía ser
castigado con la muerte a la luz del contexto.
No veo por qué entonces cuando si hay causas justificadas, para que se dé un divorcio, como por
ejemplo: que uno de los dos, termine siendo un homosexual, pederasta o abusador sexual de algún
hijo, adultero, pervertido, teniendo actos sexuales con animales, abandono de hogar, etc. Muchos
queriendo ser más justos que Dios, pretender mantener a algunos encadenados para toda la vida a algo
que no se puede arreglar de ninguna manera.
En una oportunidad conocí el caso de un hermano casado, este había perdido el hogar, pues su
compañera se había ido con otro hombre, de esa segunda relación, nacieron varios hijos, y en el
momento de conocer el caso, esta mujer continuaba viviendo con su segundo compañero, la persona
que me comentaba esta situación, me decía, le estamos orando al señor para que este hogar se arregle,
y que esta mujer vuelva con su esposo.
Muchas preguntas surgen como por ejemplo:
¿Cuál hogar? Será esto un modelo de hogar, una mujer que abandona a su esposo y se organiza con
otro, luego tiene varios hijos con su amante, como podrá regresar con tranquilidad a su primer marido.
Ahora hay que tener en cuenta algo, Si la mujer que abandono a su esposo, ama a su segundo marido,
ya no ama a su primer esposo, de igual forma su marido la ama, lo mismo que a sus hijos y no quiere
perder esta relación.
¿Escuchara Dios una oración de estas?
¿Forzaremos nosotros a Dios, a reparar un hogar donde las partes no lo quieren?
Pero mientras que la mujer tiene otra relación estable, tiene un compañero u hijos que le aman, ¿será
justo que el primer esposo de esta mujer, tenga que quedarse por el resto de su vida, esperando que el
señor le devuelva la esposa que él nunca le quito?
¿Cómo podremos aplicar acá las palabras de pablo? “Quédese sin casar”, en palabra esto suena bien,
pero una cosa es lo que uno que no vive el problema dice, otra lo que siente el que vive el problema y

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que esta solo(a), yo digo es muy fácil obrar hipócritamente y querer atar cargas pesadas sobre los
demás, pero esa carga que quiero poner sobre mi hermano, ¿seré capaz de llevarla sobre mis
hombros?
Los que hoy vivimos feliz mente casados, no podemos ser ajenos a que dentro del hogar, se viven
muchas situaciones que muchos no sabrán llevar, todos los seres somos diferentes y muchos viven un
calvario de matrimonio.

En resumen:
Malaquías nos ofrece este panorama:
 El hombre, en su pecaminosidad, es capaz de quebrantar el ideal divino, siendo complaciente
con la poligamia, el divorcio, y aunque el divorcio y el nuevo matrimonio fueron permitidos en
tiempos antiguos, bajo restricciones legales específicas, nunca estas prácticas fueron mandadas
o divinamente aprobadas por Dios. Fueron simplemente toleradas, pero no conforme a la
vendita voluntad de Dios, esto siempre ira acompañado de cicatrices profundas, sufrimientos
interiores incontables, y quebrantos exteriores. Sean las causas y las circunstancias las que sean.
No más seria recordar el sufrimiento que afrontaban las mujeres en los tiempos de moisés,
mujeres abandonadas, divorciadas a la fuerza por parte de sus esposos, solo por algo que a él le
desagradaba.
O la situación final de las mujeres en el contexto de Malaquías, cambiadas por una mejor
posición económica, o una mujer más joven, esto es lo que en fin Dios reprocha los motivos y
las causas injustificadas. El sufrimiento que viven muchas mujeres y hombres hoy por la
infidelidad de su cónyuge, es algo que solo lo sufre quien lo vive, Dios no es ajeno a este
sufrimiento, bueno sería para muchos que el pensara como nosotros, pero los pensamientos y
las disposiciones de Dios son totalmente opuestos a lo nuestro, crea esto. Él es más
misericordioso y compasivo que nosotros, aunque nosotros queramos imitarlo.
De muchos casos de divorcio que hoy se presentan, si la mayoría agotara todos los recursos en
defender la institucionalidad del hogar, lograrían salvar muchos matrimonios, pero al menor
hueco que se abre, se mira como una oportunidad para zafarse una carga para echarse otra
encima más pesada, esta es la dureza del corazón del hombre. El no querer perdonar, no querer
luchar por el hogar en el cual hay de por medio en muchos casos hijos, que se derrumbarían
psicológicamente, al ver que de la noche a la mañana, todo lo que era, gozo y paz en casa,
termino convertido en puñado de polvo.

 Que esta situación que se dad en el contexto cultural de Malaquías, no se de en el nuestro, al


menos por parte de creyentes bautizados si estos fueran temerosos del señor, Dios nos guarde
de esto, que un hijo de Dios, sea hombre o mujer, busque el divorcio solo porque tiene sus ojos
en alguien para ser su amante, solo por ser más joven o el que tenga más dinero, y ya no quiera
vivir más con sus esposa(o), o por una situación económica difícil de resolver dentro del hogar,
si esto se presentara claro que como iglesia tendríamos que protestar y decir “inaceptable”. Y
tendríamos que dejar esto a conciencia de quien lo haga sin la aprobación pertinente, y si es el
caso, aplicar una disciplina, claro teniendo en cuenta las reglas disciplinarias que nos en seña el

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señor, Y saber que con misericordia y verdad se corrige el pecado, pues nuestras disciplinas no
deben ser eternas, esto es mi punto de vista, pues así como a los que en la iglesia han robado,
fornicado, y hecho tantas cosas, se les ha perdonado y se les ha puesto a servir de nuevo, ¿Por
qué a un divorciado no? Cuál sería la diferencia entonces, sería más malo poner a servir a un
divorciado que a otro que ha fallado, en algún pecado distinto, por esto no estamos llamados a
frustrar a una persona que se ha arrepentido y Dios le ha restaurado.

TERCER PUNTO
Cuando se entra a mirar esta parte hay que usar de un poco de imaginación y de interpretación para no
decir lo que cristo nunca dijo, porque acá, el repudio o divorcio es algo que Jesús en lo particular no
está colocando sobre la mesa de discusión, para que otros lo aprueben como bueno o malo, ahora él
pone de manifiesto algo, que el que repudia a su mujer, “SALVO” esto es al menos que haya cometido
una falla, porque no se trata de justificar a quien ha hecho lo malo, sino más bien de dar la oportunidad
a quien tiene méritos, es algo de lo que debemos estar de acuerdo con el señor, porque si no hay una
causa justificada, para el divorcio, menos lo habrá para que exista un segundo compromiso, sin que el
primero se haya disuelto, primero ante Dios y segundo legalmente, porque más que nosotros el que
conoce todo sabrá si existen las causas morales suficientes para el divorcio, entonces lo que podemos
decir es que según las palabras de cristo se necesitan los méritos para que el divorcio sea algo legal,
aceptable, aunque los méritos sean negativos para la parte inocente, es igualmente beneficiada,
porque lo que rompe el vínculo matrimonial es la infidelidad de alguna de las dos partes.

Mateo 19:1-
Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, y se casa
con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada, adultera. Mateo 19:9
Comparemos este texto con otras traducciones y notaremos algo maravilloso. Hay solo una forma en
que el señor Jesús está aprobando el divorcio, y es por una infidelidad conyugal, o en el sentido más
amplio de la palabra fornicación, una inmoralidad sexual, no hay escusas según el contexto de este
pasaje para un nuevo matrimonio. Si llegare haber otro se caerá automáticamente en el adulterio.
(SP-BLS) (“biblia en lenguaje sencillo”). Y yo les digo que si su esposa no ha cometido
ningún pecado sexual, ustedes no deben divorciarse de ella ni casarse con otra mujer.
Porque si lo hacen, serán castigados por ser infieles en el matrimonio.

(PDT) (“palabra de Dios para todos”) Entonces les digo que si un hombre se divorcia de su
esposa y se casa con otra mujer, es culpable de cometer adulterio. La única razón para que un
hombre se divorcie y se case de nuevo es que su esposa tenga relaciones sexuales con otro
hombre.

(TLA) (“traducción en lenguaje actual”) Y yo les digo que, si su esposa no ha cometido


ningún pecado sexual, ustedes no deben divorciarse de ella ni casarse con otra mujer.
Porque si lo hacen, serán castigados por ser infieles en el matrimonio.

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(DA) (“Traducción israelita mesiánica”) Ahora, lo que Yo les digo a ustedes: cualquiera que se
divorcie de su mujer, excepto por razones de inmoralidad sexual, y se casa con otra
mujer, comete adulterio.

Ya en mateo 5:32 dentro del sermón de la montaña, Jesús se había referido al tema del “repudio de la
mujer” en esta ocasión tiene que ver con el contraste de la ley y la ética de Jesús, en la ley de moisés
se permitía dar carta de repudio, es decir, de divorcio, a la esposa. Jesús presenta ahora una nueva ética
que en definitiva, remite al estado original del matrimonio, según se puede apreciar en Mateo 19:9 la
ocasión para la declaración de Jesús es la pregunta de los fariseos, quienes para tentarlo le interrogan:
¿está permitido al hombre repudiar a su mujer por cualquier causa? (Mt.19:3) , y luego, después de
escuchar la respuesta del señor (Ver. 4-6) le vuelven a preguntar: ¿ porque, pues, mando moisés darle
carta de divorcio y repudiarla?. El señor va a firmar que todo se debió a una PERMISION producto de la
obstinación de los israelitas.
En marcos 10:1-12 se narra el mismo encuentro de Jesús con los fariseos, es bueno tener en cuenta los
puntos en que ambos relatos difieren.
Mientras que mateo incluye la cláusula<< por cualquier causa>> marcos la omite. En marcos Jesús,
habla de la posibilidad de que la mujer también repudie a su marido.

Mar, 10: 11.12


Cualquiera que repudia a su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra ella; y si la mujer repudia
a su marido y se casa con otro, comete adulterio.
Otro dato muy importante es que marcos no incluye la salvedad que se afirma <<salvo por causa de
fornicación>>. Esto nos lleva a suponer que los recetores de marcos son personas que pertenecen a la
comunidad eclesial gentil, mientras que mateo tiene como receptores a la gente de la nación judía.
En el derecho romano y griego se contemplaba la posibilidad de que la mujer también se divorciara del
esposo, mientras que entre los israelitas esto era imposible, en la cultura hebrea la mujer es propiedad
del marido, por lo tanto no tiene el derecho a divorciarse, además, entre los gentiles se podía dar el
divorcio por cualquier motivo. Nótese que en marcos la respuesta de Jesús se dirige a sus discípulos en
privado, mientras que en mateo el señor responde a los fariseos que lo interrogaron.
Todo el que repudia a su mujer, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada del
marido adultera. Lucas. 16:18

Encontramos la versión más breve del relato, pues solo dice: << todo el que repudia a su mujer y se
casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada del marido adultera>> en este caso no
podemos solo leer y quedarnos en la opción que Lucas nos dad. Hay que leer las otras versiones sobre
el relato.
Algunos siguiendo el principio hermenéutico de que el texto más antiguo es el más cercano a la
fidelidad, afirman que Jesús no aprobaba el divorcio por ningún motivo pues así lo consigna marcos,

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que es el evangelio más antiguo. Esto puede ser verdad, pero también hay que tener en cuenta el dato
que ha dado antes: marcos se dirige a una iglesia gentil, mientras que mateo, a una iglesia formada por
israelitas.
Ahora entremos a analizar el texto de mateo 19:9 vamos a la pregunta de los fariseos:
¿Está permitido al hombre repudiar a su mujer por cualquier causa?
No hay duda de que los fariseos tienen en mente el texto de Deuteronomio 24:1- que dice: Cuando
alguno tomare mujer y se casare con ella, si no le agradare por haber hallado en ella alguna cosa
indecente, le escribirá carta de divorcio, y se la entregará en su mano, y la despedirá de su casa.

Las palabras hebreas (erwat dabar) son las que dieron dolor de cabeza, y lo siguen dando, una
traducción literal seria, “por la exposición de una cosa” la palabra erwat, según el diccionario significa:
partes de vergüenza, sexo y la palabra dabar significa: cosa, hecho, acto, asunto, palabra.
De modo que la expresión tiene que ver con un asunto relacionado con el sexo, con algo vergonzoso, o
indecente que el esposo hallaba en su mujer. Por eso, algunos creían que se refería al hecho de que una
mujer casada se expusiera intencionalmente a las miradas de un hombre distinto a su marido. Con el
correr del tiempo, esto llego a interpretarse como cualquier cosa que le desagradara al esposo, aun el
hecho de preparar una comida que no era del agrado de él.
En el tiempo de Jesús dos corrientes bien notorias desde el antiguo testamento predominaban, en
cuanto a la interpretación de Deuteronomio. 24:1, una escuela era la de hillel, que permitía el divorcio
por cualquier cosa; muy ajustado a (Deuteronomio. 24:1), la otra escuela era la de Shammay, quien
solo permitía el divorcio por motivo de adulterio. Así que los fariseos quieren ver con cual escuela está
de acuerdo el señor.
En su respuesta podemos notar que él no está de acuerdo ninguna de las dos. El señor Jesucristo
responderá que el motivo por el cual se puede permitir el divorcio es << por causa de fornicación>>. La
palabra griega que se traduce por fornicación es << pornéia>>que puede referirse a:
Una relación sexual prematrimonial. Recordemos que entre los hebreos había un compromiso antes del
matrimonio, en este caso la salvedad consistiría en que si la mujer no era virgen al momento de
consumar el matrimonio, el esposo podía darle carta de divorcio
Un adulterio, si este es el sentido aquí, entonces la pregunta es ¿porque no uso Jesús la palabra griega
para adulterio, en cambio si la usa inmediatamente después? La palabra aquí para adulterio es: (zenut)
la gran probabilidad es que Jesús estaba siendo mucho más objetivo y futurista con su postura, pues
pornéia es una palabra que recoge todas las actividades deshonestas con las cuales se podía llegar a
dar un divorcio legalmente justificado.
Cualquier tipo de desviación sexual, lo cual incluye las dos opciones anteriores, estas desviaciones
pueden ser: lesbianismo, homosexualismo, prostitución, zoofilia, pedofilia, pederastia, aberraciones.
etc...

35
Los eruditos piensan que fornicación aquí tiene que ver con los concubinatos o los matrimonios que
eran prohibidos por la ley, cuya lista a continuación la encontramos en levítico 18:6-18
ANEXO
Estaba prohibido, lo siguiente según el código sacerdotal:
Un hombre casarse con su hermana o media hermana Lev. 18:6-18; 20:17-21
Casarse con una tía Éxodo. 6:20; Números. 26:59
Casarse con una hija Lev. 18:7,4
Casarse con un hermano o una hermana Lev. 18:9; Deuteronomio. 27:22
Casarse con uno de los familiares Lev. 18:8, 14; Deuteronomio. 27:23
Casarse con una cananita, Deuteronomio. 7:3.
A los Sacerdotes les estaba prohibido casarse con una ramera o una divorciada Lev. 21:7 También fue
prohibido a los sacerdotes casarse con una viuda y sólo podía tener una esposa, Lev. 21:13, 14

Probablemente estos sentidos estaban en la mente de Jesús, aunque hay que tener en cuenta que
quizá el no compartía la interpretación de Shammay, esto quiere decir, que él no consideraba el
adulterio como la única razón para el divorcio, ya que es todo probable que muchos males más se
estaban dando, dentro del matrimonio pero como no estaban contemplados en la ley, simplemente se
pasaban por alto. Como tampoco estaba de acuerdo con hillel, pues no admitía el divorcio por
cualquier causa leve, de esta manera los fariseos no pueden acusarlo de adhesión a ninguna de las dos
escuelas.
Jesús dice:
De esta manera, los que se casan ya no viven como dos personas separadas, sino como si fueran una
sola. Por tanto, si Dios ha unido a un hombre y a una mujer, nadie debe separarlos. Mateo 19.6

"Nadie debe separarlos" realmente aquí no hay una orden sino más bien un consejo que Jesús da a los
que quieren tentarle, pues ellos (amparados en la ley de Moisés que permitía el divorcio por cualquier
causa) estaban quebrantando el ideal divino, que es que el hombre viva con una sola mujer.
En la realidad el hombre si venia separando, lo que se había unido amparados en la flexibilidad de la
ley, (por cualquier causa), lo que Jesús dice es: que el hombre (amparado en la permisividad de la ley)
no debía, separar lo que Dios ya había unido.
No es lo mismo cuando hay un pecado, como pornéia, esta acción indiscutiblemente separa lo que el
hombre quiere tener junto, pues dice: los dos serán una sola carne, y pablo dice: ¿O es que no saben
que el que se une con una prostituta se hace un solo cuerpo con ella? Así dice la Escritura: "Los dos
serán un solo ser". 1 Corintios. 6:16. Se puede decir que ante Dios hay dos cosas que hacen legal un
matrimonio.

36
1. El compromiso social, el cual es ratificado con la boda, celebrada de acuerdo a las leyes de cada
cultura, en nuestro caso el juez, notario, pastor que hace la parte civil
2. La consumación del matrimonio donde los dos entran a ser una sola carne

El matrimonio es un pacto solemne que se hace ante la sociedad y ante Dios, pues el respalda lo que se
haga acá en la tierra en su voluntad, por eso cuando hay una infidelidad por parte de alguno de los dos
cónyuges, este pacto aunque algunos no lo quieran aceptar, se rompe, naturalmente ante Dios, así siga
figurando ante la sociedad.
Yo me pregunto, ¿porque tantos se esfuerzan en mantener unido, lo que ya está desunido, bien sea por
separación forzosa, inmoralidad o infidelidad?

Quiero colocar estos ejemplos:


 Tomemos el caso de una creyente mujer, se casa y después de dos meses, se da cuenta que su
compañero no le gustan tanto las mujeres, sino que simplemente se casó para quedar bien con
su familia, pero en realidad es un homosexual, al mes siguiente lo encuentra sosteniendo
relaciones íntimas con otro hombre, al sentirse descubierto decide irse de la casa y vivir con esa
persona.
¿Qué podemos aconsejar, a aquella hermana que vive esta situación?
Que ore y ayune para que Dios le cambie el marido
Que se lo aguante hasta la muerte
Que lo perdone
Que tiene que quedarse sola, hasta que venga el señor

 Un hermano joven de 21 años se casa con una joven de 16, ella tiene miedo de tener relaciones
sexuales con él, pasan varios meses y ella decide no hacer vida marital con su esposo, al final
ella decide regresarse para su casa y abandona a su esposo, después de algunos días ella con su
familia decide radicarse en el exterior.

¿Este hermano tendrá que quedarse solo todo el resto de su vida?


¿Si el matrimonio en la parte intima nunca se consumió, le une moralmente algo a su esposa?

 Una pareja se casan y la convivencia por parte de uno de los dos es desastrosa, el varón se
convierte en un hombre sin moral, borracho, vicioso, agrede constantemente a su esposa, física
y verbalmente, finalmente toman la decisión de dejarse. A los días ella conoce del evangelio y se
arrepiente entregando su vida al señor, decide buscar a su marido pero este no aparece, nadie
dad razón de él, pasan los años y finalmente se presume que ha muerto, pero la hermana desea
casarse pues no alcanzo a tener hijos de su esposo, esta joven aun y cree que no tiene por qué
estar sola, esperando que aparezca su esposo.
¿Qué podríamos decirle a esa hermana?, quédese sola, hasta que su esposo la llame, o se
verifique que si ha muerto.

37
El propósito cuando uno se encuentra con estos casos tan sorprendentes, no es aconsejar
inmediatamente el divorcio, claro que si uno pude ayudar a que exista la reconciliación, es aceptable,
pues este es el camino que cristo nos manda a agotar siempre, pero si no se puede arreglar las cosas,
tampoco podemos ponernos en el lugar de Dios, y querer hacer de lo imposible algo posible.

Pablo dice y mirémoslo en varias versiones:


La casada está unida a su esposo mientras el esposo vive. Pero si el esposo muere, ella queda en
libertad de casarse con cualquier hombre, con tal de que sea cristiano. 1 Corintios. 7:39

(RV1865) La mujer casada está atada por la ley, mientras vive su marido; mas si su marido muriere, libre
es para ser casada con quien quisiere; solamente en el Señor.

(RV2000) La mujer [casada] está atada a la ley, mientras vive su marido; mas si su marido muriere, libre
es; cásese con quien quisiere, con tal que sea en el Señor.

Interpretando el texto a la luz de la ley mosaica (No nuestras leyes actuales) Vemos que la biblia nos
habla es de la LEY MOSAICA, la cual no permitía a la mujer separarse del marido. Pero la misma le
daba al hombre, no después de muerto sino en vida, la facultad de separarse o divorciarse de su
esposa.
Entonces este texto no debe ser aplicado en nuestro sentido, ni en nuestra cultura de hoy, sino en la
comprensión de su significado original, pablo habla en el contexto de la ley judía, No en el de la gracia
ni tampoco en cuanto a las leyes civiles occidentales, pues no existían probablemente en su momento.
¿Quién se puede volver a casar en caso de una infidelidad, no del que ha venido del mundo con el
problema, sino del que estando en la iglesia comete la falla de infidelidad?
Ajustándonos al texto de Mateo 19:9 se contempla que debe existir una infidelidad para que se pueda
justificar el divorcio, pero no habla directamente si se justifica al que comete la infidelidad.
Pues el texto no habla en primer lugar a la iglesia, si no a los fariseos y discípulos. Ya sería una cuestión
de conciencia del que cometió la falla y por su puesto la iglesia tiene autonomía dada por Dios para
juzgar dichos casos y puede sentar una disciplina, si el creyente es un servidor(a), quedando quieto de
sus funciones dentro de la iglesia por un tiempo según se considere necesario, pero esto no significara
que nunca más podrá volverle a servir al señor en cualquier oficio dentro de la iglesia.
Pues si el señor puede perdonarle ¿quién somos nosotros para no perdonar? Esto es en cuanto al que
cometió la falla, no al hermano o hermana que contrae el matrimonio con una o un divorciado, porque
¿Qué culpa tendría él o ella?
El texto bíblico dónde Jesús, hace la salvedad, no está tampoco condenando a quedarse solo(a), al que
ha cometido la falla, menos a que no se pueda casar de nuevo, esto es algo que nosotros en nuestra
38
falsa manera de ver la santidad y la justicia divina, nos hemos inventado, condenando así, al culpable
de infidelidad a no rehacer su vida legalmente, pero me pregunto: ¿será mejor tener un divorciado,
casado de nuevo en la iglesia? O ¿un separado y fornicando en el mundo?
Pero claro que en caso de que no exista tal infidelidad, o acto consignado en la palabra Porneía,
ninguno de los dos esta moralmente libre para volverse a casar, pues en tal caso habría un pecado
llamado adulterio. Esto es lo que está claramente consignado en las palabras de Jesús, sin quitarle o
añadirle algo distinto.
También habría que hacer una salvedad con el que viene de afuera del mundo con un problema como
este, porque los hemos tenido, y vienen con segundos hogares ya establecidos con muchos años de
convivencia familiar, en tal caso cada pastor debe saber que hacer en cada caso.
Si dentro de un hogar cristiano alguno de los dos, por algún problema se separa, sin que exista de por
medio una infidelidad, de parte de alguno de los dos, y ninguno de los dos quiere llegar al divorcio, allí
en esta situación es donde pablo dice: “quédese sin casar”. Otro será el caso que presenta pablo
referente a los matrimonio mixtos que luego veremos.

En conclusión de esta parte, se puede decir entre otras cosas, lo siguiente:


 El ideal de Dios para el matrimonio es la monogamia y la estabilidad del mismo, Dios no
aprueba la infidelidad conyugal. El espera que la pareja que se ha unido en matrimonio solo
pierda esa unión por la muerte, no por ninguna otra causa
 El divorcio es el resultado del corazón obstinado del ser humano, moisés lo permitió porque de
dos males era el menos malo. Lo mismo ocurre hoy en día; el divorcio no es el ideal, pero por
causa de la maldad y los problemas que se generan dentro del ser humano, a veces el divorcio
resulta ser lo menos malo.
 El divorcio debe ser una decisión que se toma después de haber agotado todos los recursos.
 El divorcio no es obligatorio en caso de infidelidad, pues todavía queda el recurso del perdón y
la reconciliación, esto quiere decir que un esposo(a), que ha sido traicionado por su cónyuge
puede perdonar y restaurar la relación si así lo desea, esto debe ser algo voluntario y no debido
a la presión ejercida por terceros, coaccionando a alguna de las partes, una reconciliación así,
no surgirá del corazón sino de las conveniencias humanas.
Jesús no se adhirió a ningún punto de vista humano, solo a lo justo considerando que hay cosas dentro
del matrimonio que aunque haya voluntad de perdonar y se agoten los recursos, la mejor salida es el
divorcio, esta es la salvedad que el mismo dad.

CUARTO PUNTO
El divorcio a la luz de 1 Corintios 7
La biblia no trata solo de los ideales divinos para el hombre y la sociedad, sino también de aquellas
realidades de vida humana, que son "fuertes" y pecaminosas y que operan en un nivel inferior a lo
ideal. Los ideales son reforzados con promesas y mandamientos, mientras que las realidades que no

39
son ideales son toleradas en silencio o refrenadas por legislación, todo para que así las pasiones y
practicas pecaminosas del hombre sean guardadas dentro de ciertos límites.
Es por esto que el silencio y una legislación negativa, en asuntos de comportamientos que no son lo
que Dios desea, necesitan estudiarse cuidadosamente.
El ideal divino para el matrimonio incluye, por lo menos, los siguientes cuatro factores, que son
autoritativamente enseñados en Génesis 2:18-25; Marcos 10:2-12; Lucas 16: 18 y 1 Corintios, 7:39.
En cambio (Romanos 7:1-14) necesita aplicarse cuidadosamente ya que contiene una alegoría, no una
afirmación doctrinal al respecto, una alegoría es una metáfora extendida, donde se está comparando la
iglesia con el matrimonio, la ley con la gracia. En esto pasajes se Presenta el ideal supremo de Dios.

La monogamia del matrimonio (un varón y una mujer). Nótense las palabras de cristo que
exponen el ideal original. "por esto el hombre (singular) dejara…. Y se unirá a su mujer (singular), y los
dos serán una sola carne" (Mt. 19:5; Mr.10:7-8).

La permanencia del matrimonio. El matrimonio de cristo es "... dejará…y se unirá…" (Versión


moderna. Quedará unido...")

La intimidad del matrimonio. El matrimonio es para una relación y un compañerismo íntimos en


los cuales la personalidad del hombre y la mujer encuentran su satisfacción y realización... los dos serán
una sola carne.

La mutualidad del matrimonio. El matrimonio es para que sus contrayentes se colmen


mutuamente, es decir, en una relación plenamente satisfactoria para los dos, como esta expresado en
las palabras " ayuda idónea" (Gén. 2:18).
Pero el hombre, en su pecaminosidad e iniquidad, es capaz de reventar y quebrantar el ideal divino. Ya
que vive en un nivel que no es el ideal.
Siendo esto así, la poligamia, el divorcio, el re casamiento vemos como fueron todos permitidos en
tiempos del antiguo testamento, aunque bajo restricciones legales específicas. Nunca estas prácticas
son mandadas o divinamente aprobadas por Dios. Son toleradas y casi Siempre van acompañadas de
cicatrices profundas, sufrimientos interiores incontables, y quebrantos exteriores. Sean la causa y las
circunstancias las que sean.
Cristo indico que el ideal divino puede ser quebrado completamente, y dijo: Por tanto, lo que Dios
junto, no lo separe el hombre. Mat. 19:6. Aunque no utilizo la palabra " divorcio", el divorcio está
claramente implicado. Las dos expresiones " juntar" y " separar " forman una antítesis directa; todo lo
que signifique la una, la otra lo revoca.
La biblia menciona ya en el nuevo testamento dos causas específicas del quebranto de la unión
matrimonial. “Recordemos que en el antiguo testamento ya habíamos visto también las dos formas de
separación, la que se daba por causas no bien claras, esto es lo indecente que el esposo encontrara en
su esposa y la situación social en los tiempos de Malaquías, donde una mejor postura económica o una
mujer más joven era la oportunidad de abandono del hogar. Al mirar estas dos causas que nos presenta
el nuevo testamento vemos como hay más peso o argumentos reales para que exista un divorcio.

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1. El pecado grave de la fornicación Mt. 5:32 y 19:9
2. El abandono premeditado del cónyuge no creyente 1 Corintios. 7:15

Sin embargo, en ninguno de los dos casos se manda el divorcio, ni es una cosa que siga de forma
automática. El ideal es que no proceda, de allí que no encontremos direcciones especificas al respecto,
ya que el divorcio pudiera no producirse.
Debemos establecer primero el hecho triste de la ruptura de la unión matrimonial, que cuando se
origina por fornicación, es una quiebra que hace legitimó el divorcio, si una de las dos partes quisiera
que se diera, no tiene condena divina, para esto podemos leer Mat. 5:32; 19:9. Textos donde
encontramos lo que suele decirse "la cláusula de la excepción" (salvo por causa de fornicación)
pudiera ser que exista alguna duda textual en cuanto a la última parte de Mateo. 19:9…Y el que se casa
con la repudiada adultera, pero esta se aplica solo en el caso de que no exista realmente una
infidelidad. (Como veremos más adelante cuando pablo dice: quédese sin casar, pues el no justifica
una separación donde no haya una infidelidad)
Algunos tienen la idea que Jesús en Mateo 19, hablaba solo a los judíos, pero en cierta forma ellos son
los que se acercan a Jesús para preguntarle, pero la respuesta está abierta a judíos y a gentiles. Pues así
se deja ver en la expresión que Jesús uso para adulterio (pornéia) palabra griega de uso común entre
los gentiles, si esto fuera así habría que relegar todo el sermón del monte de los olivos.
Otro de los rechazos gira alrededor de las palabras fornicación (pornéia) y adulterio. Se pretende que
fornicación es una referencia al pecado sexual antes del matrimonio y que adulterio describa la
infidelidad posterior al casamiento.
Existen pasajes en que tal distinción parezca clara, y otros en que ambas palabras son mencionadas
como pecados separados (por ejemplo, Mt. 15:19 y Gal. 5:19), pero no podemos ser dogmáticos y
distinguir agudamente entre los dos términos.
En el comportamiento sexual ilícito no podemos aplicar un término exclusivamente a la parte
prenupcial y el otro al pos nupcial, no se puede justificar bíblicamente. En la mayoría de los casos en el
antiguo testamento la palabra adulterio claramente indica una relación sexual ilícita con la esposa de
otro, pero no siempre es absoluta la distinción (por ejemplo: Jeremías. 23:14; Os. 4:2), fornicación,
generalmente, es usada en referencia a la lascivia y la prostitución (y figurativamente a la idolatría) y no
excluye a personas casadas.
El nuevo testamento también utiliza adulterio para denotar la relación sexual ilícita con el cónyuge de
otro, pero tiene muchos instantes en que no hay indicación definida que aclare si hay personas casadas
involucradas (Lucas. 18:11; Juan 8:3; He. 13:4). Tampoco son especificas las personas solteras en los
muchos usos de fornicación (por ejemplo: Juan, 8:41; Hch, 15:20,29; 21:25 y Ef., 5:3), En 1 Corintios 5:1
y 7:2-5 hay referencia a la fornicación en cuanto a personas casadas.
Sin embargo, la siguiente distinción parece justificable, adulterio, aparentemente, es una referencia
más bien a actos pos nupciales específicos; mientras que fornicación es:

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Un término general, que describe todo tipo de comportamiento sexual ilícito, incluyendo el adulterio.
Una referencia a una vida entregada a tales prácticas como la lujuria y la prostitución.
El contexto de mateo 19:9 es diferente al de 5:32, pero un estudio, palabra por palabra, de este último
nos daría luz adicional sobre la legitimidad del divorcio- por causa de la fornicación
De estos pasajes me veo obligado a sacar la conclusión que el pecado de fornicación es de una
naturaleza tan devastadora, que revienta y destroza el vínculo más sagrado y profundo del ser humano,
el de su matrimonio. Decir menos significaría estimar este pecado abominable más livianamente que
como los estimo cristo mismo.
El pasaje de 1 Corintios 7, es el documento más importante que tenemos de pablo en relación con este
asunto y merece consideración cuidadosa, la iglesia de corinto había cuestionado a pablo sobre cosas
que tenían que ver con el matrimonio. En este capítulo pablo traza cuatro principios, que son las pautas
a tener en cuenta.
Bajo ciertas circunstancias el estado de soltero(a), puede tener sus ventajas, pero está rodeado de
peligros. El matrimonio es una salvaguardia contra el mal, lo cual no quiere decir que sea inferior en
valor, no se da la idea de que el celibato sea más santo que el matrimonio, pero si, que es una posición
más precaria.
El ideal de Dios es que marido y mujer no sean separados más que por la muerte. Y si una separación
tiene lugar sin que haya de por medio (pornéia), dos cursos de acción se abren (7:10-11)
1. Separación sin un nuevo matrimonio- "quédese sin casar" porque se podría incurrir en dos
males, un adulterio, o un delito castigado por la ley, llamado Bigamia, pues la ley no permite un
matrimonio, sin que se haya disuelto el primero.
2. Reconciliación- "Reconcíliese con su marido".
El creyente (hombre o mujer) no tiene derecho de divorciar al incrédulo sobre una base religiosa. El
vínculo matrimonial contraído antes de la conversión no puede alterarse por el creyente después de la
conversión por ser " un yugo desigual" (7:12-14). El creyente no puede iniciar una separación sobre la
base de fe o falta de fe.
Si el cónyuge incrédulo insiste en la separación, " sepárese" esto es lo que manda de manera permisiva
el apóstol; " pues no está el hermano o la hermana sujeto a servidumbre en semejante caso."
Los primeros tres principios nos presentan grandes dificultades en cuanto a su interpretación. Esto
cambia con el cuarto. Existen serias diferencias en la interpretación. Del versículo 15. Esta acción
constituye un veredicto apostólico. Tenemos que clarificar su autoridad, contenido y resultados.
Su autoridad. El cambio de " no yo, sino el señor" (v. 10) a "yo digo, no el señor" (v. 12) es muy
significativo, aunque frecuentemente pasado por alto. Es la única vez que esta forma es encontrada en
todos los escritos de pablo. Señala que el problema mencionado es los vs. 10-11 es tratado
autoritativamente por el señor. Sin duda el apóstol se refiere a la enseñanza de cristo sobre el divorcio,
tal como se hallaba en la tradición de la iglesia en ese tiempo, la que fue más tarde grabada en los
evangelios. Sin embargo el problema en los vs, 12 a 15 no ha sido tratado antes. Aquí pablo transmite

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un veredicto apostólico autoritativo en relación, no con el divorcio legal. Sino con la deserción
irresponsable, motivada por antagonismo religioso en intolerancia.
Su contenido " sepárese" es el veredicto apostólico. Si el cónyuge incrédulo se separa del creyente, el
creyente no tiene, ni el derecho de forzar el incrédulo a quedarse, ni la obligación de impedirle que
haga oficial la separación. La frase " sepárese" es bastante enfática, como notaremos más tarde.
Sus resultados El creyente que se encuentra con tal separación, " no está sujeto a servidumbre".
¿Quiere decir el apóstol con esto que la deserción premeditada constituya una rotura tal del circulo
matrimonial, que las solemnes promesas del día de la boda sean canceladas, y el cónyuge inocente se
constituya en un individuo soltero, no casado, libre de compromisos y responsabilidades del
matrimonio?
Pues a mi parecer, no creo que el apóstol pablo; este sugiriendo algo que ni en la boca de cristo estuvo
presente.
La primera objeción es que tal afirmación por el apóstol sería una contradicción de la clara enseñanza
de cristo. Pablo estaba, sin embargo, plenamente consciente del hecho de que iba más allá, aunque no
en contra, de su maestro. Por esto no recurre a las palabras y la enseñanza de cristo, sino a su propia
autoridad apostólica (vs. 10- 12). Pablo es muy cuidadoso en delinear autoridad en este capítulo.
Primeramente habla sobre la base de: " mando. No yo, si no el señor..." de esta manera se refiere
específicamente al ministerio de enseñanza de cristo y a su autoridad. Luego habla en su propia
autoridad apostólica, sabiendo que tiene un mandato del señor. Esto incluye el pasaje bajo
consideración. Finalmente, la prudencia, divinamente iluminada, le enseña y le hace decir: " a mi juicio
" (en mi opinión"). Concluimos en esta parte que pablo se da cuenta cuando está dentro de la
enseñanza de cristo, y se sujeta a la revelación y la iluminación ya que estas son absolutas, por el
contrario su postura está condicionada por el tiempo y la cultura.
Cristo, en su enseñanza, trataba con el repudio (la expulsión), pablo, por otra parte, habla de la
deserción premeditada de parte de un incrédulo. Hay una gran diferencia entre la expulsión y la
deserción irresponsable.
También hay una diferencia en el tono y modo de expresarse en los vs. 10 y 11, donde trata con el
vínculo matrimonial de creyentes, y el precepto decisivo del v, 15 donde es considerada la deserción
premeditada. En los ver. 10.11 es una orden apostólica: " que la mujer no se separe del marido. Que el
marido no abandone a la su mujer", y en medio el imperativo de: "quédese sin casar, o reconcíliese..."
en el v. 15 tenemos el contraste del precepto permisivo: " sepárese. (Que se marche) pues no está el
hermano o la hermana sujeto a servidumbre.
Pablo no está contradiciendo a su maestro. Esta declarando un principio, tal como tuvo que hacer en
otros muchos instantes, para regular casos sin precedente en la iglesia entre los gentiles.
La segunda objeción pudiera hacerse en base de, un suavizar del verdadero significado de " sepárese "
o " no sujeto a servidumbre" por ejemplo, un intérprete cree que la palabra " servidumbre" en el v. 15
no puede referirse al estado matrimonial. Más bien, según él, pudiera ser una referencia a la relación
con el pecado o con Dios. El mismo admite, sin embargo, que el verbo " ligado" (a) en los vs. 27 y 39,
claramente se refiere al matrimonio, porque tiene (en griego) la misma raíz que " servidumbre". El

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concluye que, aunque se haya producido una separación y con ella una cierta libertad, esto no disuelve
la unión matrimonial y sus vínculos.
Otros comentaristas llegan a la conclusión contraria; (favoreciendo solo a la parte creyente, hombre o
mujer, que tiene que afrontar la rotura total de su matrimonio, por la parte no creyente).
La gravedad del pecado de la deserción. En el caso del marido es un acto de infidelidad hacia su esposa
e irresponsabilidad hacia su familia. Tal hombre, dice pablo en 1 Timoteo 5:8, es peor que un incrédulo.
En el caso de la mujer, deserción constituye un acto de rebeldía contra el orden de Dios y de los
hombres.
Ordena a los creyentes sobre la base de las palabras de señor "no separarse" (Mt. 19: 6; 1 Corintios.
7:10-11) si ellos, no obstante, insisten en "separarse", pueden llevarlo a cabo, pero violan la ley de
cristo y se les " sujeta a servidumbre"(para usar la frase del v. 15) para ( quedarse sin casar" en los vs.
10.11 es mencionada especialmente la mujer. Aunque haya dejado de estar ligada a un marido, está
ligada por un mandamiento. En caso de que hubiere existido un caso real, (de divorcio), aunque
implícitamente así parece sugerirlo la exhortación de pablo. La mujer de este caso había obtenido un
divorcio según la ley griega que era fácil de obtener, pero pablo rehusó reconocer la validez del mismo.
El hecho de que la mujer había obtenido el divorcio lo muestran las instrucciones de pablo en el
sentido de que debía quedarse sin casar. O reconciliarse con su marido. Porque no había una disolución
del matrimonio. Ella entonces seguía siendo la mujer del hombre de quien se había divorciado. El
divorcio no había producido la disolución del matrimonio como en el caso de mateo 5:32. Si hubiese
sido en este aspecto había obtenido su divorcio por adulterio y seria libre para casarse de nuevo.
La palabra " separarse " en los versículos 10 y 11 significa " divorciarse ", los léxicos griegos así lo
definen. De modo que si el cónyuge pagano busca el divorcio, el cónyuge cristiano puede consentir.
También: " si aquel que permanece en el paganismo demanda el divorcio, el cristiano no está bajo
obligación de oponerse. " lo que quebranta y destruye el matrimonio es el hecho de que se mantenga
separado. Pablo utiliza una condición de realidad y, por tanto, está pensando en un caso actual. Los dos
verbos son de permanencia: " si se mantiene separado, que se mantenga separado”. !Punto! el
matrimonio termino, que quede así... la deserción en realidad es como el adulterio en su efecto. Ambos
rompen el vínculo matrimonial.
Lo que cristo anticipo y prohibió aquí se hace realidad y experiencia. El hombre en su pecaminosidad,
no solo por una vida de fornicación, sino también por un acto de voluntad, ejerce y tiene el poder de
separar lo que Dios ha juntado.
La fe y la incredulidad son capaces de separar tan radicalmente como cualquier otra causa.
Las palabras de pablo " no... sujeto a servidumbre " admito que aquí, igual como en el párrafo anterior,
hay lugar para diferencias. Es verdad que la palabra traducida " servidumbre" no echa una luz
concluyente sobre el significado del concepto. Lo que, si, hace claramente, es declarar libre al creyente.
En esto la mayoría de los comentaristas están de acuerdo, pero no están definidas, la naturaleza,
anchura y profundidad de esta libertad. Tampoco nos ayudara mucho un estudio del uso de la palabra
en el total de la biblia, aunque si resulta útil mirar varias versiones, el versículo 15:

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Biblia nueva versión internacional. (NVI-1999) Sin embargo, si el cónyuge no creyente decide separarse,
no se lo impidan. En tales circunstancias, el cónyuge creyente queda sin obligación; Dios nos ha llamado
a vivir en paz.
Biblia en lenguaje sencillo. (SP-BLS) Pero si el esposo o la esposa no cristianos insisten en separarse,
que lo hagan. En estos casos, la esposa o el esposo cristianos no están obligados a mantener ese
matrimonio, pues Dios quiere que vivamos en paz.
Biblia latinoamericana 1995. (BL95) Si el esposo o la esposa no creyente se quiere separar, que se
separe. En este caso el esposo o la esposa creyente no están esclavizados, pues el Señor nos ha llamado
a vivir en paz.
Pechita en español (SyEspañol) No obstante, si el no creyente se divorcia, que se divorcie. En tal caso
el hermano o la hermana no están sujetos, pues a paz nos llamó Dios.
Todas estas versiones nos muestran su sentido amplio de la palabra, por esto no podemos quedarnos
con una sola versión para saber el significado de un pasaje bíblico.
Es así que vemos que Pablo tiene instrucciones específicas para:
 Las relaciones entre marido y mujer 7:1-5.
 Tiene una palabra llana para los no casados y las viudas. Ves. 7-9
 Tiene una palabra clara y decisiva para maridos y mujeres creyentes. Ves. 10.11
 Tiene un mandato definido para maridos creyentes en relación con sus esposas incrédulas y
viceversa. Ves. 12-14.
Como podemos ver la legislación de pablo se basa en estos grupos cada uno diferentes, Solteros y
viudas de la iglesia, los casados que son miembros de la iglesia (ambos) Y los creyentes casados con
personas que no son creyentes, es decir, matrimonios mixtos.

Cuando pablo dice "quédese sin casar", lo dice a las parejas creyentes y que su separación de hecho no
forma parte de una ( porneía), causa por la cual según cristo, no solo una separación sería admisible,
sino hasta el mismo divorcio. Pero no se lo dice al creyente que ha sufrido el abandono por parte de su
compañero no convertido.
De esta parte se puede decir que " la fornicación y la deserción premeditada" constituyen causas
escrituralmente legitimas para la disolución de la relación matrimonial. Sin embargo, debe enfatizarse
que tal disolución no es conforme a la perfecta voluntad y el propósito benevolente de Dios. Es uno de
los males del pecado y, como un cáncer, que opera en la humanidad.
El perdón, la reconciliación y restauración se acercan más al ideal de Dios, no importa cuales hayan sido
las causas del quebranto.

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EL NUEVO MATRIMONIO
La consideración de nuevas nupcias de personas divorciadas, a la luz del nuevo testamento, es aún más
difícil que el estudio sobre el divorcio. El nuevo testamento menciona el problema del divorcio, pero
mantiene silencio sobe el nuevo matrimonio de los involucrados. Esto no es sorprendente, porque la
biblia no manda o legisla los comportamientos que están fuera de lo normal. Lo que hace es regular,
prohibir y juzgar tal vida, así que, no esperemos hallar mandamientos y permisos para nuevas nupcias.
Tampoco una condena hacia los mismos. El Dios que promulga los ideales más altos y nobles no
pueden legislar ideales inferiores, aunque pueda permitir al hombre vivir y operar en un nivel por
debajo de lo ideal.

Las escrituras aclaran de manera abundante que Dios da mandamientos, más que consejos. Dios dice:
"harás esto" antes de: " es mejor que hagas esto" su perfección exige algo absoluto.
Por esto debemos esperar un silencio divino y / o buscar prohibiciones y regulaciones para guiarnos en
el asunto del nuevo casamiento de personas divorciadas.

El nuevo matrimonio encontrado en el nuevo testamento debe examinarse cuidadosamente sobre la


base de la clasificación de los involucrados.

Viudas y viudos. Para tales personas el casamiento nuevo ni se manda, ni se prohíbe. Se acepta como
un privilegio y es asunto de sabiduría y conveniencia humanas (1 Corintios. 7:6-9)
Personas divorciadas por causa de fornicación o deserción irresponsable. En esto la biblia guarda
silencio. Las nuevas nupcias ni son mandadas, ni prohibidas, como se entenderá en un estudio
cuidadoso de los pasajes. Siendo así, se hace un asunto de la conciencia personal delante de Dios y de
la sociedad. (Ya que como la biblia caya, respecto a esto, tampoco podemos hablar nosotros y entrar a
juzgar un nuevo matrimonio, sobre la base de santidad o verdad, ya que Dios es más bueno que
nosotros mismos, y él sabe todas las cosas que vive cada uno).
Sabiduría y conveniencia personales, iluminadas por el espíritu santo, siguen siendo la guía. La iglesia o
ministro que legisla en contra va más allá de las escrituras. Ejemplo: decir que un hermano(a) por
casarse de nuevo, peca o está condenado, es como aprovechar el silencio de Dios, para nosotros hablar
por él, o decir que no puede servir en la congregación esto nos hace jueces en lo que ni siquiera Dios se
atreve a juzgar.
La palabra no hace énfasis si el culpable deba casarse de nuevo, o quedarse simplemente solo(a), es
cuestión de conciencia y legislación individual.
En las palabras de cristo en Mateo 5:32 y 19:1-9, no hay nada que prohíba que personas divorciadas
por causa de fornicación, vuelvan a casarse. Ni siquiera hay un reflejo negativo del señor al respecto del
nuevo matrimonio en tales casos.

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Tampoco hay legislación en los escritos de los apóstoles en general, ni específicamente de pablo en 1
Corintios. 7:15, que hiciera pecaminoso el nuevo estado civil de un creyente que fue abandonado.
La iglesia o ministro que lo declare pecaminoso asume poderes divinos de legislación autoritativa no
derivados de la revelación. Pude concebirse que una congregación este ansiosa por expresar los ideales
más altos de Dios antes de enfrentarse a las realidades de la vida. Puede ser que busque la
preservación de su propia pureza antes que servir como una agencia de Dios en la redención del
hombre pecaminoso. Hay que admitir que tal iglesia tendría una razón para legislar en contra del nuevo
matrimonio de individuos divorciados a causa de fornicación o a causa de deserción. Según las
circunstancias, tal legislación pudiera ser prudente y saludable, sin embargo, la iglesia no puede para
ello reclamar una autoridad de revelación, porque no la hay. Antes tendría que razonar desde el
silencio escritural y la prudencia social.
Tampoco nos autoriza la biblia, en Mateo 5:32 y 19:9, para que distingamos entre la parte inocente y la
culpable en el asunto de un nuevo compromiso matrimonial. Si esto parece demasiado permisivo, no
olvidemos que es cristo quien habla. Su silencio aquí es difícil de interpretar. Sin embargo, él es el todo
sabio. No hagamos de su silencio un permiso positivo, ni una legislación negativa.

El negar la legitimidad y el privilegio de re- hacer la vida marital después del divorcio causado por
fornicación o por la disolución de la unión matrimonial al ocurrir la deserción, es introducir nuestros
propios sentimientos y juicios en los silencios de cristo y pablo. Pudiera, incluso, contradecir el consejo
saludable del apóstol encontrado en 1 Corintios. 7:1-9, (especialmente en los vs. 8.9). Y colocar
nuestro juicio y sabiduría por encima de la sabiduría del creador, quien dijo: " no es bueno, que el
hombre este solo; le hare ayudad idónea para él "(Gen, 2:18).
De nuevo hay que enfatizar que el perdón, la reconciliación y la restauración son preferibles y mucho
más ideales. Sin embargo, si estas no son posibles, no pueden prohibirse el divorcio y el nuevo estado
conyugal sobre la base de las palabras de cristo o de pablo.
Ahora hablemos de los que fueren divorciados por causas que no sean las de fornicación y deserción.
Tomar decisiones concernientes a este grupo presenta un problema práctico, que es complicado, pero
un problema menos difícil para evaluar y juzgar bíblicamente.
Dos hechos se destacan en: Mt. 5:32; 19:9; Mr. 10:2-9; Lucas. 16:18 y 1 Corintios. 7:10.11. Hay divorcios
que ocurren por razones distintas a la fornicación o la deserción. Esto está claramente implicado por las
palabras de cristo. El divorcio viola el orden de la creación de Dios (Mr. 10:6-9). Constituye una
transgresión de una ley básica de Dios, quebranta una institución divina y destruye un ideal divino.
Luego, también, como tan llanamente enseña cristo, llega a ser muy fácil mente causa de adulterio (Mr.
5:32). La misma actitud y veredicto son expresados por pablo en 1 Corintios. 7:10.11. Que nadie
disminuya lo grave del pecado del divorcio con todas sus consecuencias malas y sus juicios, cuando
tiene lugar por razones distintas a las encontradas en Mateo 5:32; 19:9 y 1 Corintios. 7:15.
El re casamiento de los que han sido divorciados por causas, que no sean las de fornicación y deserción,
constituye adulterio. Este es el veredicto uniforme de cada uno de los cuatro pasajes que nos dan los

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cuatro narradores del evangelio de Jesucristo, los cuales registran las palabras de cristo. (Mt. 5:32; 19:9;
Mr. 10:11.12: Lucas, 16:18). A más de esto, Pablo expresa su veredicto en cuatro imperativos:
Que la mujer no se separe del marido
Quédese sin casar
Reconcíliese
Y que el marido no abandone a su mujer (1 Corintios. 7:10.11) este es un hecho bíblico sumamente
solemne y serio, donde no queda lugar para debate, modificación o excepción. De manera que incurren
en dos pecados; la transgresión de una ley básica de Dios y el adulterio. Y, ciertamente como dice la
biblia; " el camino de los transgresores es duro" (Prov. 13:15). No se menciona por que el re casamiento
en este caso constituya adulterio. Nuestra conclusión lógica suele ser que Dios no ha reconocido la
separación y los sigue reconociendo como una carne. Sin embargo, esto es un razonar humano, no
revelación divina. Al contrario, pablo reconoce a la mujer separada como una mujer " sin casar" (7:11),
y con la actualidad del divorcio. Dice: ". Lo que Dios junto, no lo separe el hombre" (Mr. 10:9). Lo cierto
es que el hombre es capaz de separar, lo cual es considerado transgresión; es entonces cuando su re
casamiento se constituye adulterio.
Anexo final:
Tengamos en cuenta esto último, en muchas congregaciones hay creyentes que han pecado, bien sea,
que han caído en adulterio, fornicación, robo y muchas cosas más, pasado algún tiempo se han
arrepentido y hasta han venido a formar parte de una directiva de la iglesia, siendo de gran bendición
en la iglesia.
Pero un divorciado parece no tener cabida en este grupo, en algunas congregaciones son aislados de
todo servicio, condenados a vivir como parias dentro de la iglesia, yo me hago una pregunta será que
nuestra convivencia con ellos acá, es inadmisible por parte del creador, o más bien él nos recordara,
como al comer con publicanos y rameras era asediado por los escribas y fariseos, para acusarle. En
ocasiones digo: como se parecen muchos a esa sociedad discriminadora y fanática de los tiempos de
Jesús, creo que algunos aun siendo cristianos no comerían con cristo, porque era comilón y bebedor,
no sé cómo se le puede decir a los que aún no conocen a cristo, que él es la resurrección y la vida, que
es perdón y amor, cuando no mostramos el amor de cristo y aún menos el perdón a quien ha fracasado
en su vida. ¿Somos más santos y justos que nuestro creador? ¿Cristo solo perdono a rameras? O ¿No
perdono también a divorciados en su época? ¿Colocaremos un letrero a la entrada de nuestras
congregaciones que diga, no se aceptan divorciados ni próximos al divorcio? Recordemos que no somos
los dueños de esta iglesia, el dueño es Jesucristo, Dios de amor y misericordia. Amen

BIBLIOGRAFIA
Comentarios bíblicos, Matthew Henry, mundo hispano, siglo veintiuno
Diccionario bíblico
El divorcio en Colombia agencias Madrid 05/09/2008 19:21 actualizado: 05/09/2008 20:51
Enciclopedia Wikipedia
Magister Cosme Damián Vivas apuntes Mateo 19
Héctor Raúl Betancur apuntes 1 Corintios 7
Apuntes seminarios pastorales dados por el honorable consistorio de ancianos
Biblia Reina Varela 1960, 1995 edición de estudio.

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