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El efecto de los procesos automáticos sobre los procesos controlados en situaciones de doble

tarea

Antonella Y. Tagliapietra, Ludmila P. Sotomayor, Maribel E. Aguirre, Nayla M. Lizazzu, Santiago


Suarez
Universidad Nacional del Comahue

Resumen
La presente investigación tiene como propósito conocer si los procesos automáticos consumen
recursos atencionales o no. Para lograrlo se llevó a cabo un experimento en el que participaron de
forma voluntaria 20 estudiantes de psicología, los cuales fueron divididos en un grupo
experimental de 10 participantes, y un grupo control, con los participantes restantes. La
participación fue individual. A los sujetos del grupo experimental se les pidió que se pusieran,
sacaran y doblaran un buzo (tarea automática) mientras que de forma simultánea se les realizó
una serie de 20 preguntas (tarea controlada). Al grupo control, en cambio, sólo se les pidió que
respondieran las mismas preguntas, omitiendo completamente la tarea automática. Los resultados
que se obtuvieron demostraron que el grupo experimental cometió más errores que el grupo
control a la hora de responder las preguntas planteadas.

Palabras claves: Atención, Procesos Automáticos, Procesos Controlados, Política de distribución


de recursos atencionales

La presente investigación, tiene como tema general a la atención como un recurso limitado, el cual
debe distribuirse para la realización de tareas concurrentes.
Para entender a los modelos de atención como sistema de recursos limitados, resulta necesario
plantear los modelos anteriores que estudiaron la atención, y las críticas a dichos modelos que
permitieron su surgimiento.
Los primeros modelos atencionales, proponían a la atención como un mecanismo que ante
diversos estímulos, seleccionaba cuáles precisaban de un procesamiento intenso, y cuáles eran
irrelevantes para su procesamiento consciente. Dicha selección, era realizada por un filtro; esta
estructura, en los modelos pre-categoriales se encontraba en el momento posterior a la memoria
sensorial; mientras que en los modelos post-categoriales, actuaba luego de un analizador
semántico. En general, se basaron en experimentos con mensajes dicóticos.
Estos modelos, han entrado en crisis debido a su énfasis en la concepción de la atención como
un sistema que opera exclusivamente guiado por los datos (abajo-arriba).
Posteriormente, tal como lo explica de Vega (1984), surge un nuevo modelo de la atención como
recursos limitados. Éste, plantea que la atención no está solo guiada por los datos, es decir por
las propiedades de los inputs, sino que también está guiada por los conceptos (las expectativas y
los esquemas de los sujetos en un momento dado). Por lo tanto, parece no requerir de un
dispositivo específico de filtro, ya que hay una interacción abajo-arriba, arriba-abajo. Además, se
abandona el paradigma de escucha dicótica, y se lo sustituye por el de doble tarea. El énfasis de
las nuevas investigaciones, recae ahora en los límites atencionales en la realización de tareas, y
no en fenómenos receptivos o de selección.
Dentro de este modelo, se encuentra la teoría de Kahneman, de la capacidad de atención
limitada, el cual propone que los recursos atencionales se deben distribuir, en función de las
demandas entre las estructuras del procesador. Dicha distribución, es llevada a cabo por un
sistema operativo llamado “política de distribución”, el cual depende de cuatro factores, “1)
disposiciones duraderas, relativas a las reglas que gobiernan la atención involuntaria, o lo que
convencionalmente se denomina respuesta de orientación; 2)intenciones momentáneas, relativas
a los esquemas o criterios selectivos activados en un momento dado; 3)evaluación de demandas,
que permite establecer el consumo relativo de recursos atencionales de cada tarea o proceso[…];
4) el arousal o activación varía de unos individuos a otros y en un mismo individuo según las
situaciones o la etapa de su vida” (de Vega 1984; pp.145-146).
En relación a la atención como recursos limitados, la presente investigación tiene como propósito,
conocer si los procesos automáticos consumen recursos atencionales o no.
Según de Vega, los procesos automáticos son rutinas que no consumen atención o lo hacen de
forma muy escasa. Estos se dan como resultado de un sobre-aprendizaje, como en el caso de la
repetición frecuente, haciéndolo difícil de modificar. Dichos procesos, se realizan sin esfuerzo
consciente por parte del sujeto, por lo que suponen una economía al sistema cognitivo. En
situaciones de gran estrés o de arousal elevado, los recursos atencionales se ven disminuidos lo
que significa que sólo pueden realizarse eficazmente procesos automatizados.
Por otro lado, los procesos controlados no son rutinas aprendidas, y por lo tanto, consumen
atención, siendo de esta manera vulnerables a las limitaciones de los recursos disponibles. Sin
embargo, suponen una ventaja ante situaciones nuevas debido a su flexibilidad y adaptabilidad.
Son menos eficaces que los procesos automáticos, pero el sujeto tiene un acceso más directo a
ellos ya que entran de lleno en el foco de la conciencia. Intervienen en aquellas operaciones
cognitivas que se desarrollan con esfuerzo.
Hay que tomar en cuenta que, de Vega propone que los procesos automáticos no requerirían de
recursos atencionales, por ende no afectarían a los procesos controlados en situaciones de doble
tarea.
Esta investigación, está basada en los experimentos de atención dividida los cuales se
contraponen a la idea planteada por de Vega. Uno de ellos, es el de Brown y Poulton, quienes
“realizaron un experimento en donde analizaban sistemáticamente el efecto de interferencia entre
una tarea de codificación y memoria y una tarea de conducción de un automóvil. Los sujetos
debían comprender y memorizar cierta información mientras conducían un auto en zonas
residenciales de poco tráfico o en zonas comerciales” (de Vega 1984; pp.143). Brown y Poulton,
hallaron que los sujetos cometían más errores en las tareas propuestas cuando conducían en
áreas comerciales, indicando que conducir zonas con mucho tráfico requiere más recursos
atencionales, que cuando se realizan otras tareas concurrentes.
Apoyándonos en este estudio mencionado, el cual se interesaba en el efecto de interferencia entre
una tarea controlada y una tarea automática; la presente investigación tuvo como objetivo conocer
si los procesos automáticos consumen recursos atencionales o no, en situaciones de doble tarea;
a diferencia del mismo se utilizó como tarea controlada respuestas a una serie de preguntas; y
como tarea automática ponerse, sacarse un buzo y doblarlo.
Tomando en cuenta lo mencionado anteriormente, adoptamos como hipótesis que los procesos
automáticos van a perjudicar la resolución de la tarea controlada, en situaciones de doble tarea;
ya que los primeros, también requerirían de recursos atencionales.

Método

Participantes
En este estudio participaron de manera voluntaria y anónima, 20 estudiantes de psicología, con
largos años de experiencia de actividad rutinaria de ponerse, sacarse, y doblar un buzo. Los
participantes fueron divididos en un grupo experimental, de 10 participantes con un promedio de
edad 25,3; y un grupo control de 10 participantes con promedio de edad 22,8. Cada grupo está
compuesto por un 80% de mujeres y un 20% hombres.

Diseño
La presente investigación consta de un diseño experimental, de tipo intersujeto, debido a que se
dividió a los participantes en dos grupos, un grupo experimental y otro control. Uno de los grupos,
el experimental, tuvo que realizar una actividad automática junto con una controlada; mientras que
el grupo control solamente la controlada. La variable independiente a manipular es la presencia o
no de una tarea automática, y la variable dependiente el porcentaje de error de la tarea
controlada.

Procedimiento
En este estudio, se les preguntó a estudiantes de psicología si deseaban participar de manera
anónima y voluntaria en el experimento, por lo que se tomó una muestra de 20. A los 20
participantes se los dividió en dos grupos, un grupo control con 10 participantes, y un grupo
experimental con los otros 10 participantes.
Los sujetos participaron individualmente en el experimento, con una duración total de 5 minutos
aproximadamente, en dos momentos. En un primer momento al grupo experimental se le pidió
que realizara una tarea automática, que consistió en ponerse, sacarse, y doblar un buzo,
proporcionado por el equipo de investigación, priorizándola por sobre una tarea controlada, que
debían realizar simultáneamente; la cual consistió en responder 20 preguntas de conocimiento
general (Ver anexo 1).
En el segundo momento, al grupo control se les pidió que realicen la tarea controlada únicamente,
es decir contestar las preguntas de conocimiento general.

Materiales
Se utilizaron como materiales de investigación, una lista de 20 preguntas con una extensión de
una carilla de una hoja A4. En este cuestionario, se presentaron preguntas del tipo general, que
fueron utilizados para la tarea controlada.
Por otro lado se utilizó un buzo, que los participantes tenían que ponerse, sacarse, y doblar
constantemente; una hoja donde se evaluaba si eran correctas o no las respuestas, y una
lapicera.

Resultados
Una vez concluido el experimento, analizamos la cantidad de errores que los participantes de
cada grupo cometieron al responder el cuestionario.
De esta forma, los datos recolectados se cuantificaron, poniendo en evidencia que el grupo
experimental cometió un total de 50 errores, es decir un 25 % del promedio del porcentaje; y que
el grupo control tuvo un total de 35 errores, es decir un 17, 5 % del promedio del porcentaje (Ver
gráfico).
En el grupo experimental se observó una diferencia de 7, 5% del porcentaje de errores cometidos
al responder las preguntas del cuestionario, por encima del grupo control.

Gráfico

Promedio de porcentajes de errores


30
25
25

20 17.5

15

10

0
Grupo experimental Grupo control
Discusión
Nuestro objetivo era conocer si los procesos automáticos consumen recursos atencionales o no.
De acuerdo a los resultados, comprobamos que la hipótesis inicial planteada, de que los procesos
automáticos van a perjudicar la tarea de los procesos controlados, es correcta. Esto se ve
reflejado en los resultados obtenidos, ya que en relación al total de errores cometidos, el grupo
experimental cometió un 7,5 % de errores por encima del porcentaje del grupo control.
Con los resultados anteriormente planteados, podemos corroborar que la idea planteada por de
Vega, de que los procesos automáticos no consumen recursos atencionales presenta
inconvenientes.
Tomando en cuenta el modelo de Kahneman, que explica que la atención tiene una capacidad
limitada, que se tiene que distribuir entre las distintas tareas realizadas simultáneamente, se pudo
refutar la idea de de Vega anteriormente mencionada.
Inferimos que los sujetos al hacer únicamente la tarea controlada, es decir al responder el
cuestionario, dirigieron mediante su política de distribución de recursos atencionales, el total de los
mismos a ella. En cambio al agregar la tarea automática que en este caso era la tarea del buzo,
los recursos atencionales dejan de dirigirse totalmente a la tarea controlada para destinar una
parte de ellos a la tarea automática, generándose un deterioro en la primera.

Referencias
De Vega, M. (1984). La atención. En M. de Vega (Ed.).Introducción a la psicología
cognitiva, (pp. 123-171). Madrid: Alianza.
Anexos
Anexo 1
Cuestionario:
1. ¿Cuándo se festeja el día de la bandera?
2. ¿Cuánto es 9x5?
3. ¿Cuál es el nombre del presidente de Argentina?
4. ¿De qué color es la banana?
5. ¿Qué se festeja en Argentina el día 20 de julio de cada año?
6. El color verde se forma con azul y…
7. ¿Dónde vive papá Noel?
8. ¿Cuánto es 16%4?
9. ¿Cuántas letras tiene la palabra POMO?
10. ¿Cuál es la letra muda del abecedario?
11. ¿Cuál es la capital de Rio Negro?
12. ¿Con qué país limita Argentina al Oeste?
13. ¿Cuantos meses tienen 28 días?
14. ¿Cuántos hijos tiene una mujer que tuvo trillizos?
15. Los que nacen de huevos se llaman…
16. ¿Cuántos lados tiene un pentágono?
17. ¿La ballena es un reptil?
18. ¿Qué debe comerse el día 29 de cada mes?
19. ¿Cuántos pares son 6 botas?
20. ¿A las temperas se les saca punta?

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