Limitaciones de aplicación estructural de los tipos de unidades de albañilería

En la tabla 3 se muestran la posibilidad de aplicación de las unidades de albañilería según

su tipo.

Clasificación para fines estructurales

Para efectos del diseño estructural, las unidades de albañilería tendrán las características
indicadas en la tabla 4:
Tabla 1. Limitaciones de aplicación estructural de los tipos de unidades de albañilería

Posibilidad de aplicación

Tipo Muro en zona sísmica Muro en zona no sísmica

Portante No portante Portante No portante

Aplicable, pero óptima para Aplicable, pero

Sólida óptimas
muy pesada y cargas elevadas muy costosa
costosa
No aplicable tal
Hueca Óptima Aplicable Óptima
cual. Óptima si
se llenan los
No aplicable
Perforada alvéolos con Óptima Aplicable Óptima
salvo que el
concreto
área alveolar
líquido.
Tubular No
seaaplicable
30% o Óptima No aplicable Óptima
menos que el
Fuente: Gallegos, H. &área
Casabone, C. (2005).
bruta.
Tabla 2. Clase de unidad de albañilería para fines estructurales

CLASE DE UNIDAD DE ALBAÑILERÍA PARA FINES

ESTRUCTURALES
VARIACIÓN DE LA
DIMENSIÓN (máxima en RESISTENCIA
porcentaje) CARACTERÍSTICA
ALABEO
A COMPRESIÓN
CLASE (máximo
f´b mínimo en MPa
Hasta Hasta Más de en mm)
(kg/cm2) sobre área
100 mm 150 mm 150 mm bruta

Ladrillo I ±8 ±6 ±4 10 4,9 (50)

Ladrillo II ±7 ±6 ±4 8 6,9 (70)
Ladrillo III ±5 ±4 ±3 6 9,3 (95)
Ladrillo IV ±4 ±3 ±2 4 12,7 (130)
 Ladrillo V ±3 ±2 ±1 2 17,6 (180)
Bloque P (1) ±4 ±3 ±2 4 4,9 (50)
Bloque NP
±7 ±6 ±4 8 2,0 (20)
(2)
Fuente: Norma E.070

1.1.1.1. Unidad de tierra reforzada

Se define el adobe como un bloque macizo de tierra sin cocer, a la cual puede añadirse
paja u otro material para mejorar su estabilidad frente a agentes extremos. Cuando al
adobe se le incorporan otros materiales (asfalto, cemento, cal, etc.) con la finalidad de
mejorar sus características como la resistencia a la compresión y estabilidad ante la
presencia de humedad, se le denomina adobe estabilizado (M-VCS, 2010)

Materia prima

Según la norma E.080 de diseño y construcción con tierra reforzada (2017) los requisitos
de los materiales para la construcción con tierra reforzada son:

a) Tierra: Se debe verificar que la tierra a utilizar contenga un adecuado porcentaje

de arcilla, la cual se determina mediante las pruebas indicadas en la norma E.080.
Asimismo, asegurarse de que el material se encuentre libre de cantidades
perjudiciales de materia orgánica.
b) Agua: la cantidad de agua requerida para moldear las unidades de adobe, no debe
pasar el 20% respecto al peso del contenido seco. Asimismo, es importante
controlar la cantidad de agua que se utiliza, para evitar o disminuir las fisuras
durante el secado. El agua cumplirá los siguientes requisitos:
 El agua debe ser potable o agua libre de materia orgánica, sales y sólidos
en suspensión.
 El agua deberá ser limpia y libre de aceites, ácidos, álcalis, sales, materia
orgánica y otras que puedan resultar perjudiciales.
 El agua de mar solo podrá ser utilizada con la autorización del ingeniero
proyectista y del responsable de la supervisión.

Pruebas para la verificación de presencia de arcilla

Según la norma E.080 (2017) las pruebas para la determinación de presencia de arcilla
son:
 a) Prueba “Cinta de barro”: Esta es la primera evaluación para la determinación de
la existencia de arcilla en el suelo. Esta prueba se realiza en un aproximado de 10
minutos.
El procedimiento es el siguiente:
Utilizando una muestra de barro con la suficiente humedad que permita hacer un
cilindro de 12 mm de diámetro, colocado en una mano, poco a poco aplanar entre
los dedos pulgar e índice, formando una cinta de 4 mm de espesor y dejándola
descolgar lo más que se pueda. Si la cinta alcanzara entre 20 y 25 cm de longitud,
el suelo es muy arcilloso. Si se corta a los 10 cm o menos, indicaría que el suelo
tiene una baja presencia de arcilla.

Figura 1 Prueba de “Cinta de barro” para la verificación de presencia de arcilla

Fuente: sena (1997)

b) Prueba “Presencia de arcilla” o “Resistencia seca”: Esta es la segunda prueba

requerida por la norma E.080 (2017) para verificar la presencia de arcilla en el
material. El procedimiento es el siguiente:
i. Agregando una mínima cantidad de agua al material que se considere
apropiado para emplearla como material de construcción, formar cuatro
bolitas con tierra de la zona tal como se muestra en la figura X. La cantidad
de agua debe ser la mínima necesaria para poder formar las bolitas sobre
las palmas de las manos sin que estas lleguen a deformarse
significativamente a simple vista al secarse.
 Figura 2 Realización de bolas de tierra para la prueba de “Resistencia seca”

Fuente: Norma E.080 (2017)

ii. Dejar secar las cuatro bolitas de tierra por 48 horas, asegurándose de que
estas no se humedezcan o mojen por lluvias, derrames de agua, etc.
iii. Después de 48 horas desecado, presionar las cuatro bolitas secas con el
dedo pulgar y el índice de una mano como se muestra en la figura X. En
caso que las bolitas lleguen a romperse o agrietarse, al menos una sola, se
debe volver a formar 4 bolitas con los mismos materiales y dejando secar
en las mismas condiciones anteriores.

Figura 3 Paso #3 de la prueba de “Presencia de arcilla”

Fuente: Norma E.080 (2017)

iv. Luego de repetir la prueba, si se vuelve a romper, quebrar o agrietar, se

debe desechar la cantera de suelo donde se ha obtenido la tierra. Salvo que
esta se convine con arcilla o un suelo muy arcilloso. En caso que luego de
la prueba no se rompa, quiebre o agriete ninguna de las cuatro bolitas,
dicha cantera puede ser utilizada como material de construcción.

Un grupo importante de autores e instituciones como Tejada, Moromi y Red Habitierra,

entre otros, coinciden en que la resistencia mínima que debe alcanzar una unidad de
albañilería de tierra reforzada debe rondar los valores de 1,00 y 1,20 MPa como mínimo.
Para este estudio se fijó el valor mínimo de resistencia a la compresión simple de 1 MPa,
es decir, 10 Kg/cm2 (Saroza, Rodríguez, Menéndez, & Barroso, 2008).

Ensayos de laboratorio para las unidades de albañilería de tierra reforzada

Según la norma E.080 (2017), existen dos ensayos de laboratorio que se debe aplicar a
las unidades de albañilería de tierra reforzada (adobe) son los siguientes: Ensayo de
esfuerzos de rotura mínima para medir la resistencia del material tierra a compresión o
también llamado “Ensayo de compresión en cubos” y el ensayo de esfuerzos de rotura
mínimos para medir la resistencia del material a la tracción.

El procedimiento para cada ensayo se detalla:

a) Ensayo de esfuerzos de rotura mínimo para medir la resistencia del material tierra
a la compresión:
i. Para poder medir la resistencia a compresión del material, se necesitan
cubos de tierra de 0.10 m de arista.
ii. La resistencia última se calcula conforme a la expresión siguiente:
𝑓0 = 1𝑀𝑝𝑎 = 10.2 𝑘𝑔𝑓/𝑐𝑚2
iii. Los cubos de adobes deberán cumplir con que el promedio de las cuatro
mejores muestras de seis sea igual o mayor a la resistencia última indicada.
b) Ensayo de esfuerzos de rotura mínimo para medir la resistencia del material tierra
a la tracción:
i. La resistencia del material tierra a tracción deberá ser medida mediante el
ensayo brasileño de tracción, en cilindros de 6”x12” o 15.24 cm x
30.48 cm de diámetro y largo.
ii. La resistencia última será de 0.08 𝑀𝑃𝑎 = 0.81 𝑘𝑔𝑓/𝑐𝑚2 .
iii. Las muestras deberán tener una humedad inicial de 20% a 25% para el
control de adobes, y un secado cubierto de sol y viento de 28 días,
debiendo cumplir con que el promedio de las cuatro mejores muestras de
seis sea igual o mayor a la resistencia última indicada.