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Eugenio Redondo
Ho861.4
R-173-a Eugenio Redondo
Potros salvajes /Redondo Eugenio
2017 90 p. : 21 X 13.3 cm.
ISBN 978-9930-9553
1. LITERATURA COSTARRICENSE
I. Autor II. Título
A mí sólo me importa
el testimonio
del momento que pasa
las palabras
que dicta en su fluir
el tiempo en vuelo.
11
Tendrás a tu alcance el insulto,
meditarás sobre las consecuencias de un gargajo
y el supuesto interés por tu salud de tus compañeros.
12
La belleza del tiempo
La oscuridad se eleva
como una tela que ondea
contra las cortezas amarillas;
el chelo sigue sonando:
dos ancianos se sientan cerca de mí,
revisan el menú y conversan.
13
El chelo continúa sonando.
Un pájaro se acerca al viejo mandarino
que aún persiste en dar sus frutos.
Muchas de sus ramas fueron podadas,
pero sus raíces hacen emerger
el centro universal de las tardes,
la ruta que no conocemos de nosotros mismos.
14
Lamento por Phillip Seymour Hoffman
En sus actuaciones,
recoge la inmensidad de nuestras vidas,
el doble atajo al río de nuestro nacimiento,
lo que la brisa se empeña
en restituir en el rostro de cada hombre:
la fe, la duda,
el incomprensible acertijo
de quienes miramos las estrellas
desde la intrincada red de las contradicciones.
Él yace cerca
del remanso de los querubines,
en la hospitalidad de los exiliados de la tristeza.
Un roble en medio del pantano.
La luna se marchita
en la medalla de sus ojos abiertos,
un talismán para jugar
con una manada de potros salvajes,
el cielo nocturno
cuando gira la Estrella Polar sobre sí misma.
15
An Englishman in New York
(Título de una canción de Sting)
16
ríos que suenan distintos
entre las piedras y las corrientes;
la relativa profundidad de sus cauces
fluye como los sonidos de una canción de rock
o de un estándar reactualizado
por un jazzista atrevido y magnífico;
los ríos invisibles que iluminan nuestra existencia,
el mar de los bosques sin paralelo,
el lugar sagrado que todo hombre porta y descubre,
libre ya de las heridas y las decepciones.
17
Una temporada con Charlie Haden
Yo vivo en el exilio;
habito una ciudad, pero poco hablo con mis
/vecinos.
Me he alejado para tratar de entender
la cripta de los bosques,
el saludo natural de los pájaros,
el lenguaje inesperado de una mañana de verano.
18
Cerati
A Joan Bernal
No eras poeta,
pero tus letras decían tanto
de nosotros mismos
que crecimos arrullados
en lo más próximo al paraíso.
19
del abecedario, un moroso sintetizador
que no claudicaba en la oscuridad
previa de los conciertos.
Descansa ya.
No necesitas que te tienda mi mano.
Deposita todo tu dolor
en el paralelo 10 del planeta,
20
Norah Jones cena
Ayer la ví.
Era un lirio
en medio del horror del mundo.
II
21
que se mueve hacia ti entre la inusual multitud
/de un recital.
Recuerdas su rostro:
un bosque de magnolias esparce su sombra.
22
Don´t know why
(Título de una canción de Norah Jones)
23
la niebla que afirma lo que somos,
la oscuridad que dicta las palabras últimas de
/un poema.
II
Pese a todo,
el vecino que padece cáncer
me saluda todos los días;
hay una alejada maravilla
en la rotación del sol
que te hace levantar y bañarte.
Te preguntarás por vos mismo.
Diré que, nuevamente, me he equivocado:
no puedo pedir perdón por ser quien soy.
24
Palés y la salsa
Un destello inicia
cuando un hombre y una mujer bailan salsa.
En el fin del mundo,
Puerto Rico exhibe su mar eterno.
La cadencia de las olas
brilla sobre cientos de poetas
que entregaron su linaje
al puerto repentino de los muertos.
25
la noche de una manera distinta,
con risas y palabras dirigidas
a la planicie de las criaturas,
donde las notas de los timbales
se callan para dar paso a la avenida del viento.
26
Chagall
27
Lao Tse y la esperanza, un 4 de abril
28
Adolescencia
Entreveo el pasadizo,
la escalera múltiple
que me aleja del exilio.
29
Un soldado romano escribe
La luz cruel
aletea en los ojos de los ciegos.
30
TC-48
Escucho lejanos
los gritos de unos niños.
No sé dónde estoy.
No sé qué hago aquí.
Mis compañeros permanecen
exánimes, desmadejados.
31
Son hojas que arriban
como diminutas cucarachas,
esporas provenientes de una edad remota.
Todavía no comprendo.
Sigo escuchando a los niños.
Muevo mis manos para quitar
las amarras del cinturón que me asfixia.
¿Este es el avión? ¿La aeronave
en la que volábamos con destino a El Salvador?
Me levanto con dificultad.
Las ramas abren y cierran el casco hundido del avión.
32
Marea alta
33
Poco a poco, logré saber de vos.
El mundo parecía cerrarse en el fuego de una
/noche prematura.
Ansié escucharte
como un péndulo que detiene un reloj de arena.
Asumí el tiempo y sus constantes oscilaciones:
fluctuaba entre la espera y la esperanza,
el cambio rotundo de lo blanco
a la metáfora amarilla de la desolación.
Te he amado en silencio
como los cometas que se desangran en su trayectoria.
De alguna manera, supe de vos en las largas
/madrugadas de las fronteras,
cuando el búho distingue su presa con la inmediata
/presión de sus garras.
34
Lo que arde
35
Un bipolar en el trapecio
No sé si me llegaste a amar.
La existencia desvanecía su escarcha
entre los horarios y el tráfico,
los minutos consagrados a los cafés y a las comidas.
Yo te amaba como el viento que corre entre los fresnos.
36
el cangrejo que sostenía los gránulos de un
/promontorio
para reponer la tenaza perdida del anclaje.
37
Elevación de las hojas
Constatación
Miro el árbol.
Nadie reconoce
que en sus ramas
el sol forma un océano:
mar abierto, elevación de las hojas.
41
Lápidas
No habrá nadie.
Enrumbaré mi vehículo
por la autopista cercana al cementerio.
Poco antes de cruzar,
avistaré a mi derecha
dos motociclistas que se precipitan hacia la
/oscuridad,
raudos y temerarios.
42
A
43
Síntomas
44
El amanuense
No sé quién es ella;
se desenvuelve
como una morosa mujer.
45
Permanencia
46
Horizonte
47
II
48
Persistencia de los sauces
El viento arrastra
la disolución y el asombro,
lo que se levanta y se olvida.
49
Instrumentos
El bajo, el chelo.
Lo que hubiera deseado poder tocarlos,
ser la música que fluye
como un río cambiante,
el tiempo líquido de las maravillas,
el acorde feliz de los que bailan.
50
Habitante
51
Yo no era parte del reino.
Lo descubrí mucho tiempo después.
Habitaba la poesía, la orilla mínima del silencio.
52
Estalactita
53
la falible migración de los poemas.
La soledad es el bosque congregado,
esa apetencia de gloria nacida entre la greda;
los instantes se quiebran;
el sol se fractura en cientos de aves.
54
Escrito a una mujer
Quiero vivir
para ser una nebulosa de neón
en los charcos amarillos de la tristeza.
55
Concertar el frío, el viento y la lluvia
para dibujar el contorno de la escultura de tus labios.
Déjame ser la arena donde
la espuma se acerca y vuela.
El malecón donde una luciérnaga
persiste en alumbrar el destino de todas las galaxias.
56
Multiplicación
57
Universo
58
Instante
No existe el pasado,
con excepción de la isla íntima de la memoria.
Recuerdo el sol,
su bogar discontinuo entre las nubes,
el camino del jaguar
en la espesura platónica del lenguaje.
Ignoro el futuro.
Los falsos adivinos mascullan
la máscara de los conspiradores,
la rancia solemnidad de los feudos.
59
Retorno
Lluvia intermitente.
La tormenta vuelca el orden aparente de los libros,
la insignificante persuasión de los filósofos.
60
Solsticio
A Francisco de Goya
A Branford Marsalis
61
Core
Dorso
Cincuenta años.
Un día decidí trazar una línea divisoria.
65
Literatura
Sigo escribiendo.
Espero reconciliarme con las orillas,
la vieja arquitectura de los bosques y las aves.
66
Barro
Doloroso intento.
No hay libro definitivo.
Unas líneas que consideramos bendecidas
se revelan devastadas
por ese torpe calco a nosotros mismos.
Tal es mi oficio:
ser sorprendido por las palabras,
destinar una hoja en blanco
al barro de los sueños.
67
Habitación
68
Anaqueles
69
Enumeración de los ángeles
Coltrane,
Miles,
Monk,
Max Roach,
“Bird”,
Mc Laughlin,
Dizzy Gillespie,
Duke,
Bill Evans,
Charles Mingus,
son algunos de mis ángeles.
No les rezo;
siempre están improvisando.
70
El viejo poeta
Tocan la puerta.
71
Poetas en comunión
72
Los emisarios
A mi tío Hernán
73
El viento entre los hombros
Me acerqué a su ataúd;
sostenía un crucifijo dorado entre sus manos.
Tenía la rara cualidad
de caminar en silencio,
inaudible y postergado.
74
del barullo de la época.
Siente el viento entre los hombros.
Respira hondo y se marcha.
75
Navidad
A Magaly Longhan
Llegaremos a la fiesta.
Hablaremos con los jóvenes que fuimos
y aún guardamos en nuestra memoria.
Veinticinco años después.
Cincuenta años después.
Hasta que la muerte se retire
al último de los agujeros negros.
Hasta que un ave marina atisbe
que las cenizas que flotan en el océano
no son los peces habituales.
El mundo cederá su luz.
76
Nos encontraremos donde el mar
se aproxima a tallar la síncopa de las hojas.
77
Caminata
Es invierno.
78
Antípodas
El marco de la ventana,
el puente hacia las antípodas.
A doce horas de distancia,
un niño salta sobre los muros,
una joven se aleja en la ascendencia de un río.
Reclino en mi ventana
la fantasmagoría de los juegos.
79
Tres abordajes a la muerte que nos falta
La celda
II
Uno
Escuchas la canción.
Eliminas todo deseo.
Aspiras a la mejor de las locuras:
postergar el silencio y las constelaciones.
80
III
Bajel
81
He’ s lonely
82
Prefieres recorrer las arenas de Puerto Viejo,
el otro país en los linderos de la cordura.
83
6 de abril del 2013
No le temo a la soledad.
Conozco sus insinuaciones,
la forma en que aborda
los meses de aniversario.
Soy tu precedente,
otra manera de formular un poema.
Déjame florecer en tus manos,
como cuando dibujaste, por primera vez,
el destello del mundo.
84
Imperio
85
Despertar
Me dirijo al sur.
Navegar en el sueño
es cruzar aguas profundas,
los simulacros del antiguo paraíso,
las redes de las nubes.
86
Lo sagrado
No huyo de la presencia.
La poesía es uno de los eslabones perdidos,
la red por donde se escapan
las certezas y las preguntas.
87
Hereje
88
El fresno
No sabes nada.
Sólo estás con tu largo discurso
como las mariposas azules
que vuelan en el ocaso.
89
por la ronda de los famélicos,
los que atesoran oro
en sus esclusas malolientes.
Dices sí.
Te levantas, lees un poema,
y sales al descampado.
90
Heredero
91
Core
92
ÍNDICE
Constatación /41
Lápidas /42
Síntomas /44
El amanuense /45
Permanencia /46
Horizonte /47
Persistencia de los sauces /49
Instrumentos /50
Habitante /51
Estalactita /53
Escrito a una mujer /55
Multiplicación /57
Universo /58
Instante /59
Retorno /60
Solsticio /61
Core
Dorso /65
Literatura /66
Barro /67
Habitación /68
Anaqueles /69
Enumeración de los ángeles /70
El viejo poeta /71
Poetas en communion /72
Los emisarios /73
El viento entre los hombros /74
Navidad /76
Caminata /78
Antípodas /79
Tres abordajes a la muerte que nos falta /80
He’ s lonely /82
6 de abril del 2013 /84
Imperio /85
Despertar /86
Lo sagrado /87
Hereje /88
El Fresno /89
Heredero /91
Core /92
Este libro se terminó de imprimir
en el mes de mayo del año 2017
San José, Costa Rica