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Biodiversidad

Imagen de un lince (Lynx lynx), una de las cerca de 2.5 millones de especies identificadas que
conforman el patrimonio de la biodiversidad en el mundo.

La biodiversidad o diversidad biológica es, según el Convenio Internacional sobre la


Diversidad Biológica, el término por el que se hace referencia a la amplia variedad de seres
vivos sobre la Tierra y los patrones naturales que la conforman, resultado de miles de millones
de años de evolución según procesos naturales y también de la influencia creciente de las
actividades del ser humano. La biodiversidad comprende igualmente la variedad
de ecosistemas y las diferencias genéticas dentro de cada especie que permiten la
combinación de múltiples formas de vida, y cuyas mutuas interacciones con el resto del
entorno fundamentan el sustento de la vida sobre el mundo.
El término «biodiversidad» es un calco del inglés «biodiversity». Este término, a su vez, es la
contracción de la expresión «biological diversity» que se utilizó por primera vez en octubre de
1986 como título de una conferencia sobre el tema, el National Forum on BioDiversity,
convocada por Walter G. Rosen, a quien se le atribuye la idea de la palabra.1
La Cumbre de la Tierra celebrada por Naciones Unidas en Río de Janeiro en 1992 reconoció
la necesidad mundial de conciliar la preservación futura de la biodiversidad con el progreso
humano según criterios de sostenibilidad o sustentabilidad promulgados en el Convenio
internacional sobre la Diversidad Biológica que fue aprobado en Nairobi el 22 de mayo de
1994, fecha posteriormente declarada por la Asamblea General de la ONU como Día
Internacional de la Biodiversidad. Con esta misma intención, el año 2010 fue declarado Año
Internacional de la Diversidad Biológica por la 61.ª sesión de la Asamblea General de las
Naciones Unidas en 2006, coincidiendo con la fecha del Objetivo Biodiversidad 2010.2
En el año 1994, la Asamblea de la Organización de las Naciones Unidas declaró el 22 de
mayo como Día Mundial de la Diversidad Biológica.

Origen y evolución del término


Heliamphora chimantensis, planta carnívora que únicamente se encuentra en la Gran
Sabana, Venezuela.

Diversas especies epífitas en una selva de América Central (Costa Rica). Los ecosistemas de la zona
intertropical son el hogar de la mayor parte de la biodiversidad mundial actual.

Según la RAE, el término biodiversidad define la “Variedad de especies animales y vegetales


en su medio ambiente”3
Sin embargo el concepto, por su carácter intuitivo, ha presentado ciertas dificultades para su
definición precisa, tal como señaló Fermín Martín Piera4 al argumentar que el abuso en su
empleo podría «vaciarlo de contenido», ya que en sus palabras: «suele acontecer en la
historia del pensamiento que los nuevos paradigmas conviven durante un tiempo con las
viejas ideas», considerando junto a otros autores que el concepto de biodiversidad fue ya
apuntado por la propia teoría de la evolución.
A principios del siglo XX, los ecólogos Jaccard y Gleason propusieron en distintas
publicaciones los primeros índices estadísticos destinados a comparar la diversidad interna de
los ecosistemas. A mediados del siglo XX, el interés científico creciente permitió el desarrollo
del concepto para describir la complejidad y organización, hasta que en 1980, Thomas
Lovejoy propuso la expresión diversidad biológica.5

Definición
Si en el campo de la biología la biodiversidad se refiere al número de poblaciones de
organismos y especies distintas, para los ecólogos el concepto incluye la diversidad de
interacciones durables entre las especies y su ambiente inmediato o biotopo, el ecosistema en
que los organismos viven. En cada ecosistema, los organismos vivientes son parte de un todo
actuando recíprocamente entre sí, pero también con el aire, el agua, y el suelo que los rodean.
Se distinguen habitualmente tres niveles en la biodiversidad:

 Genética o diversidad intraespecífica, consistente en la diversidad de versiones de los


genes (alelos) y de su distribución, que a su vez es la base de las variaciones
interindividuales (la variedad de los genotipos).
 Específica, entendida como diversidad sistemática, consistente en la pluralidad de los
sistemas genéticos o genomas que distinguen a las especies.
 Ecosistémica, la diversidad de las comunidades biológicas (biocenosis) cuya suma
integrada constituye la biosfera.
Hay que incluir también la diversidad interna de los ecosistemas, a la que se refiere
tradicionalmente la expresión diversidad ecológica.

Biodiversidad

Tajinaste.

Biodiversidad intraespecífica (dentro de una misma especie), obsérvense los diferentes tipos de maíz y
sus granos.

La biodiversidad que hoy se encuentra en la Tierra es el resultado de cuatro mil millones de


años de evolución.6
Aunque el origen de la vida no se ha podido datar con precisión, las evidencias sugieren que
pudo haber surgido hace 38007 8 9 a 3235 millones de años.10 Algunas investigaciones más
recientes han abierto la posibilidad de que haya comenzado inclusive hace 4100 millones de
años11 aunque no son aún concluyentes. Hasta hace aproximadamente 600 millones de años,
toda la vida consistía en bacterias y microorganismos.7
La historia de la diversidad biológica durante el Fanerozoico —últimos 540 millones de años—
comienza con el rápido crecimiento durante la explosión cámbrica, periodo durante el que
aparecieron por primera vez los filos de organismos multicelulares.[cita requerida] Durante los
siguientes 400 millones de años la biodiversidad global mostró un relativo avance, pero estuvo
marcada por eventos puntuales de extinciones masivas.[cita requerida]
La biodiversidad aparente que muestran los registros fósiles sugiere que unos pocos millones
de años recientes incluyen el período con mayor biodiversidad de la historia de la Tierra. Sin
embargo, no todos los científicos sostienen este punto de vista, ya que no es fácil determinar
si el abundante registro fósil se debe a una explosión de la biodiversidad, o —simplemente— a
la mejor disponibilidad y conservación de los estratos geológicos más recientes.[cita requerida]
Algunos, como Alroy y otros12 piensan que mejorando la toma de muestras, la biodiversidad
moderna no difiere demasiado de la de 300 millones de años atrás. Las estimaciones sobre
las especies macroscópicas actuales varían de 2 a 100 millones, con un valor lógico estimable
en 10 millones de especies, aproximadamente.
La mayoría de los biólogos coinciden sin embargo en que el período desde la aparición del
hombre forma parte de una nueva extinción masiva, el evento de extinción holocénico,
causado especialmente por el impacto que los humanos tienen en el desarrollo del
ecosistema. Se calcula que las especies extinguidas por acción de la actividad humana es
todavía menor que las observadas durante las extinciones masivas de las eras geológicas
anteriores.[cita requerida] Sin embargo, muchos opinan que la tasa actual de extinción es suficiente
para crear una gran extinción masiva en el término de menos de 100 años.[cita requerida] Los que
están en desacuerdo con esta hipótesis sostienen que la tasa actual de extinción puede
mantenerse por varios miles de años antes que la pérdida de biodiversidad supere el 20 %
observado en las extinciones masivas del pasado.[cita requerida]
Se descubren regularmente nuevas especies —un promedio de tres aves por año—
[cita requerida] y muchas ya descubiertas no han sido aún clasificadas: se estima que el 40 % de

los peces de agua dulce de Sudamérica permanecen sin clasificación.[cita requerida]

Importancia de la biodiversidad
El valor esencial y fundamental de la biodiversidad reside en que es resultado de un proceso
histórico natural de gran antigüedad. Por esta sola razón, la diversidad biológica tiene el
inalienable derecho de continuar su existencia. El hombre y su cultura, como producto y parte
de esta diversidad, debe velar por protegerla y respetarla.
Además la biodiversidad es garante de bienestar y equilibrio en la biosfera. Los elementos
diversos que componen la biodiversidad conforman verdaderas unidades funcionales, que
aportan y aseguran muchos de los “servicios” básicos para nuestra supervivencia.
Finalmente desde nuestra condición humana, la diversidad también representa un capital
natural.13 El uso y beneficio de la biodiversidad ha contribuido de muchas maneras al
desarrollo de la cultura humana, y representa una fuente potencial para subvenir a
necesidades futuras.
Considerando la diversidad biológica desde el punto de vista de sus usos presentes y
potenciales y de sus beneficios, es posible agrupar los argumentos en tres categorías
principales.
El aspecto ecológico
Hace referencia al papel de la diversidad biológica desde el punto de vista sistémico y
funcional (ecosistemas). Al ser indispensables a nuestra propia supervivencia, muchas de
estas funciones suelen ser llamadas “servicios”:
Los elementos que constituyen la diversidad biológica de un área son los reguladores
naturales de los flujos de energía y de materia. Cumplen una función importante en la
regulación y estabilización de las tierras y zonas litorales. Por ejemplo, en las laderas
montañosas, la diversidad de especies en la capa vegetal conforma verdaderos tejidos que
protegen las capas inertes subyacentes de la acción mecánica de los elementos como
el viento y las aguas de escorrentía. La biodiversidad juega un papel determinante en
procesos atmosféricos y climáticos. Muchos intercambios y efectos de las masas continentales
y los océanos con la atmósfera son producto de los elementos vivos (efecto albedo,
evapotranspiración, ciclo del carbono, etc.).
La diversidad biótica de un sistema natural es uno de los factores determinantes en los
procesos de recuperación y reconversión de desechos y nutrientes. Además algunos
ecosistemas presentan organismos o comunidades capaces de degradar toxinas, o de fijar y
estabilizar compuestos peligrosos de manera natural.
Aún con el desarrollo de la agricultura y la domesticación de animales, la diversidad biológica
es indispensable para mantener un buen funcionamiento de los agroecosistemas.14La
regulación trofodinámica de las poblaciones biológicas solo es posible respetando las
delicadas redes que se establecen en la naturaleza. El desequilibrio en estas relaciones ya ha
demostrado tener consecuencias negativas importantes. Esto es aún más evidente con los
recursos marinos, donde la mayoría de las fuentes alimenticias consumidas en el mundo son
capturadas directamente en el medio. La respuesta a las perturbaciones (naturales o
antrópicas) tiene lugar a nivel sistémico, mediante vías de respuesta que tienden a volver a la
situación de equilibrio inicial. Sin embargo, las actividades humanas han aumentado
dramáticamente en cuanto a la intensidad, afectando irremediablemente la diversidad
biológica de algunos ecosistemas y vulnerando en muchos casos esta capacidad de respuesta
con resultados catastróficos.
La investigación sugiere que un ecosistema más diverso puede resistir mejor a la tensión
medioambiental y por consiguiente es más productivo. Es probable que la pérdida de una
especie disminuya la habilidad del sistema para mantenerse o recuperarse de daños o
perturbaciones. Simplemente como una especie con la diversidad genética alta, un
ecosistema con la biodiversidad alta puede tener una oportunidad mayor de adaptarse al
cambio medioambiental. En otros términos: cuantas más especies comprende un ecosistema,
más probable es que el ecosistema sea estable. Los mecanismos que están debajo de estos
efectos son complejos y calurosamente disputados. Sin embargo, en los recientes años, se ha
dejado claro que realmente hay efectos ecológicos de biodiversidad.
Una elevada disponibilidad de recursos en el ambiente favorece una mayor biomasa, pero
también la dominancia ecológica y frecuentemente ecosistemas relativamente pobres en
nutrientes presentan una mayor diversidad, algo que es cierto sistemáticamente en los
ecosistemas acuáticos. Una mayor biodiversidad permite a un ecosistema resistir mejor a los
cambios ambientales mayores, haciéndolo menos vulnerable, más resiliente por cuanto el
estado del sistema depende de las interrelaciones entre especies y la desaparición de
cualquiera de ellas es menos crucial para la estabilidad del conjunto que en ecosistemas
menos diversos y más marcados por la dominancia.
El aspecto económico
Para todos los humanos, la biodiversidad es el primer recurso para la vida diaria. Un aspecto
importante es la diversidad de la cosecha que también se llama la agrobiodiversidad.
La mayoría de las personas ven la biodiversidad como un depósito de recursos útil para la
fabricación de alimentos, productos farmacéuticos y cosméticos. Este concepto sobre los
recursos biológicos explica la mayoría de los temores de desaparición de los recursos. Sin
embargo, también es el origen de nuevos conflictos que tratan con las reglas de división y
apropiación de recursos naturales.
Algunos de los artículos económicos importantes que la biodiversidad proporciona a la
humanidad son:

 Alimentos: cosechas, ganado, silvicultura, piscicultura, medicinas. Se han usado las


especies de plantas silvestres subsecuentemente para propósitos medicinales en la
prehistoria. Por ejemplo, la quinina viene del árbol de la quina (trata la malaria), el digital
de la planta Digitalia (problemas de arritmias crónicas), y la morfina de la planta de
amapola (anestesia). Los animales también pueden jugar un papel, en particular en la
investigación. Se estima que de las 250 000 especies de plantas conocidas, se han
investigado sólo 5000 para posibles aplicaciones médicas.
 Industria: por ejemplo, fibras textiles, madera para coberturas y calor. La biodiversidad
puede ser una fuente de energía (como la biomasa). La diversidad biológica encierra
además la mayor reserva de compuestos bioquímicos imaginable, debido a la variedad de
adaptaciones metabólicas de los organismos. Otros productos industriales que obtenemos
actualmente son los aceites, lubricantes, perfumes,
tintes, papel, ceras, caucho, látex, resinas, venenos, corcho.
 Los suministros de origen animal incluyen lana, seda, piel, carne, cuero, lubricante y
ceras. También pueden usarse los animales como transporte.
 Turismo y recreación: la biodiversidad es una fuente de riqueza barata para muchas
áreas, como parques y bosques donde la naturaleza salvaje y los animales son una fuente
de belleza y alegría para muchas personas. El ecoturismo, en particular, está en
crecimiento en la actividad recreativa al aire libre. Así mismo, una gran parte de nuestra
herencia cultural en diversos ámbitos (gastronómico, educativo, espiritual) está
íntimamente ligada a la diversidad local o regional y seguramente lo seguirá estando.
Los ecólogos y activistas ecológicos fueron los primeros en insistir en el aspecto económico
de la protección de la diversidad biológica.
La estimación del valor de la biodiversidad es una condición previa necesaria a cualquier
discusión en la distribución de sus riquezas. Este valor puede ser discriminado entre valor de
uso (directo como el turismo o indirecto como la polinización) y valor intrínseco.
Si los recursos biológicos representan un interés ecológico para la comunidad, su valor
económico también es creciente. Se desarrollan nuevos productos debido a
las biotecnologías y los nuevos mercados. Para la sociedad, la biodiversidad es también un
campo de actividad y ganancia. Exige un arreglo de dirección apropiado para determinar cómo
estos recursos serán usados.
La mayoría de las especies tiene que ser evaluada aún por la importancia económica actual y
futura. Sin embargo, debemos ser conscientes de que aún nos falta mucho para saber valorar,
no sólo lo económico, si no más aún el valor que tiene para los ecosistemas y ese valor o
precio no lo podemos ni siquiera imaginar.
Se considera generalmente que la expansión demográfica y económica de la especie humana
está poniendo en marcha una extinción masiva, de dimensiones incomparablemente mayores
que las de cualquier extinción anterior. Las causas concretas están en la desaparición
indiscriminada de ecosistemas, por la tala de bosques, la degradación de los suelos,
la contaminación ambiental, la caza y la pesca excesivas,...etc.. La comunidad científica juzga,
en general, que tal extinción representa una amenaza para la capacidad de la biosfera para
sustentar la vida humana a través de diversos servicios naturales y recursos renovables.
Por ello la comprensión de la biodiversidad cultural en su relación con los ecosistemas es
clave, siempre que no se disocien los recursos naturales de su contexto cultural, histórico y
geográfico.
El aspecto científico
La biodiversidad es importante ya que cada especie puede dar una pista a los científicos sobre
la evolución de la vida. Además, la biodiversidad ayuda a la ciencia a entender cómo funciona
el proceso vital y el papel que cada especie tiene en los ecosistemas.

La evaluación de la biodiversidad
Parámetros
La diversidad es una propiedad fenomenológica que pretende expresar la variedad de
elementos distintos. Como cualidad fundamental de nuestra percepción, sentimos la
necesidad de cuantificarla. El desarrollo de una medida que permita expresar de manera clara
y comparable la diversidad biológica presenta dificultades y limitaciones. No se trata
simplemente de medir una variación de uno o varios elementos comunes, sino de cuantificar y
ponderar cuantos elementos o grupos de elementos diferentes existen. Las medidas de
diversidad existentes pues, no son más que modelos cuantitativos o semicuantitativos de una
realidad cualitativa con límites muy claros en cuanto a sus aplicaciones y alcances. El
desarrollo de un concepto matemático lógico y coherente para la modelación de la diversidad
biológica a nivel específico y genético ha sido bastante explorado y presenta un cuerpo
sintético y robusto. La modelación de la diversidad a nivel de ecosistemas es más reciente, y
se ha visto beneficiada por los adelantos tecnológicos (como los SIG).15 Las medidas de
diversidad más sencillas consisten en índices matemáticos que expresan la cantidad de
información y el grado de organización de la misma. Básicamente las expresiones métricas de
diversidad tienen en cuenta tres aspectos:

 Riqueza: Es el número de elementos. Según el nivel, se trata del número de alelos o


heterocigosis (nivel genético), número de especies (nivel específico), o del número de
hábitats o unidades ambientales diferentes (nivel ecosistémico).
 Abundancia relativa: Es la incidencia relativa de cada uno de los elementos en relación a
los demás.
 Diferenciación: Es el grado de diferenciación genética, taxonómica o funcional de los
elementos.
Cada uno de estos índices de la diversidad es unidimensional y de lectura limitada. Las
comparaciones y valoraciones de la diversidad biológica son forzosamente incompletas en
estos términos. Se usan por su carácter práctico y sintético, pero insuficiente frente a modelos
analíticos alternativos multiescalares y multidimensionales que responden mejor a las
necesidades específicas de conservación y manejo. Así, la modelación bidimensional (riqueza
y abundancia relativa) puede considerarse como el estándar “clásico” de medida y expresión
de la diversidad. De acuerdo a la escala espacial en la que se mide la diversidad biológica, se
habla de diversidad alpha (diversidad puntual, representada por α), beta (diversidad entre
hábitats, representada por β) y gamma (diversidad a escala regional, representada por γ).
Estos términos fueron acuñados por Robert Whittaker en 1960 y gozan en general de una
gran aceptación.
Dinámica
La biodiversidad no es estática: es un sistema en evolución constante, tanto en cada especie,
así como en cada organismo individual. Una especie actual puede haberse iniciado hace uno
a cuatro millones de años, y el 99 % de las especies que alguna vez han existido en la Tierra
se han extinguido.
La biodiversidad no se distribuye uniformemente en la tierra. Es más rica en los trópicos, y
conforme uno se acerca a las regiones polares se encuentran poblaciones más grandes y
menos especies. La flora y fauna varían, dependiendo del clima, altitud, suelo y la presencia
de otras especies.
Unidades espaciales y biodiversidad
La distribución de la diversidad biológica actual es el resultado de los procesos evolutivos,
biogeográficos y ecológicos a lo largo del tiempo desde la aparición de la vida en la tierra. Su
existencia, conservación y evolución depende de los factores ambientales que la hacen
posible. Cada especie presenta requerimientos ambientales específicos sin los cuales no le es
posible sobrevivir. Aunque los cambios orográficos y oceanográficos, altitudinales y
latitudinales permiten definir unidades de paisaje con bastante aproximación, la componente
específica de las especies presentes es la que finalmente permite identificar áreas
relativamente homogéneas en cuanto a las características que presenta u ofrece para las
poblaciones biológicas.
Estas unidades de biosfera, pueden ser identificadas como unidades de biodiversidad según
diferentes criterios de valoración: por ejemplo, el número de endemismos, riqueza específica,
ecosistémica o filogenética. Aunque es común argumentar que tal o cual país presenta
determinados índices de biodiversidad, las unidades espaciales de la diversidad biológica son
por definición independientes de los límites o barreras geopolíticas.
Dos de las unidades espaciales vigentes de la biosfera, donde el factor de la biodiversidad
precede en importancia, son las ecorregiones de Global 20016 identificadas por la WWF y
los puntos calientes de biodiversidad o hotspots de Conservation International.17
Global 200 identifica las ecorregiones más importantes del planeta, tanto marinas como
continentales —cuerpos de agua dulce y terrestres— de acuerdo a la riqueza específica, el
número de endemismos y los estados de conservación.18
El término «punto caliente de biodiversidad» fue acuñado por Norman Myers en 1998 e
identifica regiones biogeográficas terrestres importantes según el número de endemismos y el
grado de amenaza sobre la biodiversidad.19 En su última revisión Conservation International
propone 34 hotspots.

Amenazas
Durante el siglo XX se ha venido observando la erosión cada vez más acelerada de la
biodiversidad. Las estimaciones sobre las proporciones de la extinción son variadas, entre
muy pocas y hasta 200 especies extinguidas por día, pero todos los científicos reconocen que
la proporción de pérdida de especies es mayor que en cualquier época de la historia humana.
En el reino vegetal se estima que se encuentran amenazadas aproximadamente un 12,5 % de
las especies conocidas. Todos están de acuerdo en que las pérdidas se deben a la actividad
humana, incluyendo la destrucción directa de plantas y su hábitat.
Existe también una creciente preocupación por la introducción humana de especies exóticas
en hábitats determinados, alterando la cadena trófica.20
Actividades humanas dirigidas al desarrollo que pueden afectar la
biodiversidad
Algunos ejemplos de actividades de desarrollo que pueden tener las más significativas
consecuencias negativas para la diversidad biológica son:

 Proyectos agrícolas y ganaderos que impliquen el desmonte de tierras, la eliminación de


tierras húmedas, la inundación para reservorios para riego, el desplazamiento de la vida
silvestre mediante cercos o ganado doméstico, el uso intensivo de pesticidas, la
introducción del monocultivo de productos comerciales en lugares que antes dependieron
de un gran surtido de cultivos locales para la agricultura de subsistencia.
 Proyectos de piscicultura que comprendan la conversión, para la acuicultura o maricultura,
de importantes sitios naturales de reproducción o crianza, la pesca excesiva, la
introducción de especies exóticas en ecosistemas acuáticos naturales.
 Proyectos forestales que incluyan la construcción de caminos de acceso, explotación
forestal intensiva, establecimiento de industrias para productos forestales que generan
más desarrollo cerca del sitio del proyecto.
 Proyectos de transporte que abarquen la construcción de caminos principales, puentes,
caminos rurales, ferrocarriles o canales, los cuales podrían facilitar el acceso a áreas
naturales y a la población de las mismas.
 Canalización de los ríos.
 Actividades de dragado y relleno en tierras húmedas costeras o del interior.
 Proyectos hidroeléctricos que impliquen grandes desviaciones del agua, inundaciones u
otras importantes transformaciones de áreas naturales acuáticas o terrestres, produciendo
la reducción o modificación del hábitat y el consecuente traslado necesario hacia nuevas
áreas y la probable violación de la capacidad de mantenimiento.
 Riego y otros proyectos de agua potable que puedan vaciar el agua, drenar los hábitats en
tierras húmedas o eliminar fuentes vitales de agua.
 Proyectos industriales que produzcan la contaminación del aire, agua o suelo.
 Pérdida en gran escala del hábitat, debido a la minería y exploración mineral.
 Conversión de los recursos biológicos para combustibles o alimentos a escala industrial.
 La sobrepoblación humana y el antropocentrismo.

Aspectos socioculturales
A los anteriores puede añadirse con sentido la biodiversidad cultural. Los trabajos sobre
biodiversidad biológica están incorporando el estudio, el fomento y la protección de la
biodiversidad cultural, además de la biodiversidad específica, de ecosistemas y de la genética.
Eugenio Reyes Naranjo21 define la Biodiversidad Cultural como diversidad de saberes que
los seres humanos han desarrollado a través de la historia en su relación con la biodiversidad.
Esto incluye creencias, mitos, sueños leyendas, lenguaje, conocimientos científicos, actitudes
psicológicas en el sentido más amplio posible, manejos, aprovechamientos, disfrute y
compresión de entorno natural.
Se trata de comprender la evolución biológica teniendo en cuenta todos los aspectos de la
intervención humana.
/es.wikipedia.org/wiki/Biodiversidad
Definición de Biodiversidad
La biodiversidad o diversidad biológica se refiere a la extensa variedad de seres vivos
existentes en el planeta, es también un sistema dinámico que está en evolución constante.
Este término proviene de la contraccion inglesa “biological diversity”, y se le
atribuye Walter G. Rosen el cual lo mencionó por primera vez en una conferencia en
1986.La distribución de la biodiversidad viene como consecuencia de factores evolutivos
en el área biológica, geográfica y ecológica, por consiguiente cada especie posee un
entorno adecuado a sus necesidades en donde cada uno de estos pueden relacionarse de
manera armoniosa con el medio que lo rodea.

Entre los tipos de biodiversidad encontramos, la diversidad genética, la cual comprende la


variación en los genes de una especie. Sucesivamente tenemos la diversidad de especie, la
cual consiste en la cantidad de especies vivas que residen en un hábitat determinado. Luego
está la diversidad ecológica, que es la variedad de ecosistemas o
comunidades biológicas existentes en un área y el último tipo de biodiversidad es la
diversidad funcional, es la variedad de respuesta de las especies a los cambios ambientales.

Una de las principales amenazas de la biodiversidad ha sido el mismo ser humano, el cual
por medio de sus acciones de deforestación, incendios y contaminación ha ocasionado
daños que no solo afectan a las especies que habitan en esos lugares, sino que también han
dañado al medio ambiente. Alguno de los daños han sido irreversible como por
ejemplo extinción de algunas especies, fragmentación y pérdida de los bosques, arrecifes
entre otros.

Para la preservación de la biodiversidad lo primero que hay que hacer es controlar la


cantidad de individuos que habitan el área, dejar de realizar las actividades que pueden
afectar los recursos naturales, también se tiene que proteger a todas las especies que se
encuentran bajo amenazas de extinción y finalmente crear una conciencia de preservación
del ambiente en cada individuo.

http://conceptodefinicion.de/biodiversidad/
Biodiversidad
Se le llama biodiversidad al conjunto de todos los seres vivos y especies que existen en la Tierra
y a su interacción.
De acuerdo con el Convenio sobre la Diversidad Biológica, que hasta febrero del 2000 había sido
ratificado por 177 países, la biodiversidad es la variabilidad de organismos vivos de cualquier
fuente, incluidos, entre otras cosas, los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemas
acuáticos y los complejos procesos ecológicos de los que forman parte; comprende la diversidad
dentro de cada especie (genética), entre las especies y de los ecosistemas.

La gran biodiversidad es el resultado de la evolución de la vida a través de millones de años,


cada organismo tiene su forma particular de vida, la cual está en perfecta relación con el medio
que habita. El gran número de especies se calculan alrededor de treinta millones; esta cifra no es
exacta debido a que no se conocen todas las especies existentes en nuestro planeta.
El concepto biodiversidad se refiere a los diferentes lugares y formas de vida que existen sobre la
Tierra, tanto los naturales como los creados por el ser humano; por ejemplo, los agroecosistemas.
Tres niveles y dos componentes
Esta sola palabra, biodiversidad , abarca un amplio espectro y por lo tanto tiene diversas
implicaciones. En primer lugar, como consta en su definición, incluye tres niveles: los genes, las
especies y los ecosistemas .
Pero además implica dos componentes: uno tangible —que incluye los recursos biológicos como la
madera o la pesca— y otro intangible, ligado con los conocimientos, las innovaciones y las
prácticas humanas asociadas con la biodiversidad (por ejemplo, las técnicas agrícolas o los
conocimientos científicos).
La definición se extiende hacia un tercer plano pues sus connotaciones están cruzadas también
por valores. Estos son de tipo económico, ecológico, ético, cultural, social, científico, educativo,
recreativo y estético, entre muchos otros.
La diversidad biológica se expresa generalmente en términos del número de especies que viven en
un área determinada.
Cerca del 75 por ciento de la biodiversidad del planeta está concentrada en apenas diecisiete
países, los cuales son considerados megadiversos.
Los ecosistemas
Un ecosistema está formado por una comunidad de organismos que interactúan entre sí y con el
medio circundante. Son complejas redes ubicadas en espacios geográficos determinados y que
pueden ser naturales o creadas por los seres humanos, como los campos de cultivo o las
ciudades.
Los ecosistemas son un bullicio: animales, plantas, hongos, virus y microorganismos en interacción
con la lluvia, la temperatura, el suelo, la salinidad y otros factores... ¡son la biodiversidad en su
mayor nivel! Algunos ecosistemas son los páramos, los manglares y los bosques amazónicos.
La diversidad de ecosistemas se debe a las diferentes condiciones climáticas y geográficas —entre
otras— que ocurren en cada lugar. Por ejemplo, en los páramos las plantas tienen hojas pequeñas
para sobrevivir al frío, mientras en la planicie amazónica los árboles han desarrollado estrategias
para aprovechar los escasos nutrientes del suelo tales como desplegar grandes raíces
superficiales.
Asimismo, en los bosques secos de la Costa viven especies adaptadas a un medio árido, el cual
está determinado por la influencia de la corriente fría de Humboldt, fenómeno que provoca la
disminución de las lluvias durante la mayor parte del año.

Las especies
Una especie es un conjunto de organismos que comparten muchas características —entre ellas,
las genéticas— y que pueden procrear descendientes fértiles; es decir, que pueden reproducirse
(en contraste, los híbridos como la mula no pueden tener progenie).
Ejemplos de especies son el oso de anteojos, el cedro y los seres humanos.
Así, la diversidad de especies se refiere a la variabilidad de animales, plantas, hongos, virus y otros
microorganismos que habitan en un lugar determinado. Este lugar puede ser toda la Tierra, un
país, una región o una isla.
Sin embargo, las especies no están distribuidas uniformemente sobre el planeta, y hay países
como el Ecuador que albergan un número mayor; en países como este muchas de las especies
son endémicas (aquellas cuya distribución está restringida a un área específica, en este caso el
territorio nacional). La iguana marina, que vive únicamente en Galápagos, es una especie
endémica.
Debido a que el número de especies en el mundo es sumamente grande, para facilitar los análisis
se las clasifica en grandes grupos como mamíferos, aves, reptiles, anfibios, peces, insectos o
plantas.
Ver: Utilidad y Clasificación de los seres vivos
Los genes

Los genes son una parte de las células donde está almacenado el material hereditario que pasa de
una generación a otra.
Cada gen posee información sobre una o varias características físicas (como el color de la piel),
controla funciones reguladoras de la vida (como la elaboración de proteínas),o puede albergar
información relacionada con el comportamiento (mayor o menor agresividad).
Sin embargo, los genes de los diferentes miembros de una misma especie no son copias exactas.
Así, las numerosas variedades de maíz que existen en Latinoamérica contienen genes distintos, y
es esta diversidad la que propicia que algunas plantas sean resistentes a las plagas mientras otras
son fácilmente infestadas.
Los tres niveles de la biodiversidad no son excluyentes; por el contrario, éstos se compenetran a
plenitud. Los genes están dentro de las especies y éstas constituyen una parte fundamental de los
ecosistemas.
La biodiversidad es una sociedad que funciona perfectamente y que ha sido formada durante
millones de años. Su conservación incumbe a todos los habitantes de este planeta, y su pérdida
implicará graves consecuencias ecológicas, sociales y económicas.
Componentes de la biodiversidad
Como ya vimos, los componentes de la biodiversidad son dos: la naturaleza misma —lo tangible—
y los conocimientos que tenemos de ella —lo intangible—.
El componente tangible de la biodiversidad está conformado por la variedad de genes, de especies
y de ecosistemas que podemos identificar, manejar y usar. En otras palabras, lo conforman el
material genético, las poblaciones naturales y los recursos de los ecosistemas que pueden ser
evaluados físicamente.
Ejemplos de este componente son los árboles, peces comerciales y plantas medicinales.

El componente intangible de la biodiversidad, por otro lado, está constituido por la variedad de
conocimientos, innovaciones y prácticas, individuales o colectivas relacionadas con la diversidad
biológica. Dentro de este componente se incluyen los saberes de los pueblos indígenas y de las
comunidades campesinas, así como las tecnologías modernas y las innovaciones científicas para
usar los recursos.
Importancia de la biodiversidad
Existe una interdependencia muy estrecha entre todos los seres vivos y entre los factores de su
hábitat, por lo tanto, una alteración entre unos seres vivos modifica también a su hábitat y a otros
habitantes de ahí. La pérdida de la biodiversidad puede acarrear nuestra desaparición como
especie.
La pérdida de la biodiversidad equivale a la pérdida de la calidad de nuestra vida como
especie y, en caso extremo, nuestra propia extinción.

Razones que provocan pérdida de la biodiversidad.


Todas las especies se han adaptado a su medio y si este cambiara simplemente perecerían.
El motivo de la desaparición de las especies es la alteración o desaparición de su hábitat.
La mayoría de las veces la alteración del medio la provoca el hombre: La tala inmoderada obliga a
sus habitantes a emigrar o a morir.
La agricultura no planificada origina la desaparición de las especies que habitaban en esos
renglones antes de ser desmontadas, al igual que la contaminación , la urbanización, la cacería y
el tráfico de especies.
¿Cuál es el valor de la biodiversidad?
¿Cuánto vale la sombra de un árbol frondoso? ¿y los pensamientos que tenemos cuando cae la
tarde sobre un bosque o cuando nos deleitamos con el mar? ¿Cuál es el valor de la biodiversidad?
Vivimos en una sociedad consumista donde la brecha entre ricos y pobres es cada día mayor y en
la cual la naturaleza ha sido observada como un objeto que debe ser explotado. Bajo este modelo
de desarrollo, cuyos objetivos son la acumulación de riqueza y el consumo, lo que "vale" es el
dinero: vaya y pregunte cuál es el "valor" de algo y la respuesta será un precio.
Pero además de ser una fuente de ingresos económicos, la naturaleza tiene otros valores
intrínsecos que son de todo tipo: ecológico, ético, cultural, científico, recreativo y estético. Por
supuesto, dichos valores pueden ser analizados desde perspectivas distintas y sus implicaciones
sobreponerse y complementarse.

Valor económico
Los ecosistemas, las especies y la información genética tienen un valor económico actual y
potencial enorme.
Actividades de toda clase, desde la agricultura, la pesca y el ecoturismo, hasta la explotación
maderera y petrolera, dependen de la existencia de la biodiversidad.
Tintes, fibras, alimentos, medicinas y variedades silvestres de especies cultivadas son apenas una
parte del valor económico actual de la biodiversidad.
Pero además de ser una fuente de dinero a través de la pesca, de la empresa maderera y de la
oferta turística, la biodiversidad tiene un gran valor potencial en la actualidad.
Algunas empresas de los países del Norte cuyas emisiones a la atmósfera, al suelo y al agua
amenazan el equilibrio climático global, canjean dinero por conservación de bosques.
Paradójicamente, la creciente pérdida de biodiversidad se debe al poco valor económico que se le
asigna.
A modo de resumen:
La biodiversidad es toda la variedad de la vida en la Tierra. Puede abordarse de tres maneras:
como variedad de ecosistemas, como variedad de especies y como variedad de genes.

Variedad de ecosistemas
Es la variedad de comunidades de organismos que existen en determinadas regiones; incluye la
variedad de hábitats, de especies que los componen y de procesos ecológicos que ocurren.
Variedad de especies
Es el número de especies diferentes que hay en un área geográfica.
Variedad de genes
Son las diferentes versiones de los genes (unidades de herencia) contenidos en los individuos de
todas las especies del planeta. Estas diferencias, que son heredables, constituyen la materia prima
a partir de la cual ha evolucionado la variada complejidad de los seres vivos en el transcurso de
millones de años.

http://www.profesorenlinea.cl/Ciencias/Biodiversidad.htm
Biodiversidad: ¿qué es, dónde se encuentra y por
qué es importante?
Octubre de 2006, por Naturaleza | Visitas: 433672

Biodiversidad: ¿qué es, dónde se encuentra y por qué es importante?

El término «biodiversidad» refleja la cantidad, la variedad y la variabilidad de los organismos vivos.


Incluye la diversidad dentro de las especies, entre especies y entre ecosistemas. El concepto también
abarca la manera en que esta diversidad cambia de un lugar a otro y con el paso del tiempo.
Indicadores como el número de especies de un área determinada pueden ayudar a realizar un
seguimiento de determinados aspectos de la biodiversidad. La biodiversidad se encuentra en todas
partes, tanto en tierra como en el agua. Incluye a todos los organismos, desde las bacterias
microscópicas hasta las más complejas plantas y animales. Los inventarios actuales de especies,
aunque son útiles, siguen estando incompletos y no bastan para formarse una idea precisa de la
amplitud y la distribución de todos los componentes de la biodiversidad. Se pueden hacer cálculos
aproximados del ritmo de extinción de las especies, basados en el conocimiento actual sobre la
evolución de la biodiversidad en el tiempo. Los servicios de los ecosistemas son los beneficios que las
personas obtienen de los ecosistemas. La biodiversidad desempeña un papel importante en el
funcionamiento de los ecosistemas y en los numerosos servicios que proporcionan. Entre estos, se
encuentran el ciclo de nutrientes y el ciclo del agua, la formación y retención del suelo, la resistencia a
las especies invasoras, la polinización de las plantas, la regulación del clima, el control de las plagas y la
contaminación. En el caso de los servicios de los ecosistemas, lo que importa es no sólo el número de
especies presentes sino también qué especies son abundantes.

¿Por qué preocupa la pérdida de biodiversidad?

La biodiversidad proporciona muchos beneficios fundamentales para el hombre, más allá del suministro
de materias primas. La pérdida de biodiversidad tiene efectos negativos sobre varios aspectos del
bienestar humano, como la seguridad alimentaria, la vulnerabilidad ante desastres naturales, la
seguridad energética y el acceso al agua limpia y a las materias primas. También afecta a la salud del
hombre, las relaciones sociales y la libertad de elección. La sociedad suele tener varios objetivos en
conflicto, muchos de ellos dependientes de la biodiversidad. Cuando el hombre altera un ecosistema
para mejorar uno de los servicios que éste proporciona, su acción suele acarrear también cambios para
otros servicios de los ecosistemas.

Por ejemplo, las medidas para aumentar la producción de alimentos pueden traducirse en menos agua
disponible para otros usos. Como consecuencia de dichas contrapartidas negativas, muchos servicios
han quedado degradados; por ejemplo la pesca, el suministro de agua y la protección frente a los
desastres naturales. A largo plazo, el valor de los servicios perdidos puede superar con mucho los
beneficios que se obtienen a corto plazo al transformar los ecosistemas.

A diferencia de los productos que se compran y se venden en los mercados, muchos de los servicios de
los ecosistemas no se comercializan en éstos ni tienen un precio fácil de conocer. Esto significa que los
mercados financieros desconocen la importancia de la biodiversidad y los procesos naturales en tanto
que fuentes de beneficios para el hombre. En la actualidad, se emplean nuevos métodos para valorar
económicamente beneficios como las actividades recreativas y el agua potable. La degradación de los
servicios de los ecosistemas podría frenarse considerablemente o incluso invertirse si se tuviera en
cuenta el valor económico total de dichos servicios a la hora de tomar decisiones.

Durante el siglo pasado, algunas personas se beneficiaron de la transformación de los ecosistemas


naturales y el aumento del comercio internacional, mientras que otras sufrieron las consecuencias de la
pérdida de biodiversidad y un acceso limitado a los recursos de los que dependen. Los cambios en los
ecosistemas están perjudicando a buena parte de los más pobres del mundo, que son los menos
capaces de adaptarse a dichos cambios.
¿Cuál es la tendencia actual de la biodiversidad?

Prácticamente todos los ecosistemas de la Tierra han experimentado una transformación radical fruto de
la mano del hombre, y continúan transformándose ecosistemas para usos agrícolas, entre otros. La
pérdida actual de biodiversidad y los cambios derivados en el medio ambiente se producen a una
velocidad hasta ahora desconocida en la historia de la humanidad, y no hay indicios de que este
proceso se esté ralentizando. Muchas poblaciones de plantas y animales han declinado en número,
extensión geográfica o ambas variables. La extinción de especies forma parte del curso natural de la
historia de la Tierra. Sin embargo, la actividad del hombre ha acelerado el ritmo de extinción al menos
cien veces respecto al ritmo natural. No resulta sencillo comparar diferentes indicadores de la pérdida de
biodiversidad. El ritmo al que cambia un aspecto de la biodiversidad, como la pérdida de la riqueza de
especies, no tiene por qué reflejar necesariamente un cambio en otra variable, como la pérdida de
hábitat.

Además, algunos aspectos de la pérdida de biodiversidad no son fáciles de medir, por ejemplo, el hecho
de que cada vez sea más frecuente encontrar una misma especie en diferentes partes del planeta o el
hecho de que la biodiversidad esté disminuyendo en su conjunto.

¿Qué factores contribuyen a la pérdida de biodiversidad?

La biodiversidad está disminuyendo a gran velocidad a causa de factores como los cambios en el uso
del suelo, el cambio climático, las especies invasoras, la sobreexplotación y la contaminación. Estos
factores, naturales o provocados por el hombre, se conocen como generadores de cambio y tienden a
interactuar y potenciarse mutuamente. Aunque los cambios en la biodiversidad están vinculados de
forma más evidente a generadores de cambio directos como la pérdida de hábitat, también están
relacionados con generadores indirectos que son la causa de muchos de los cambios en los
ecosistemas. Los principales generadores de cambio indirectos son la evolución de la población
humana, la actividad económica, la tecnología y los factores sociopolíticos y culturales.

En los últimos 50 años diferentes generadores de cambio directos han tenido una importancia decisiva
en diferentes ecosistemas. Por ejemplo, en los ecosistemas terrestres, los cambios en la cobertura de la
tierra han sido el generador de cambio más importante, por ejemplo, la transformación del bosque para
usos agrícolas. Sin embargo, la pesca, y especialmente la sobrepesca, han sido los principales factores
desencadenantes de la pérdida de biodiversidad en los sistemas marinos.

En términos generales, los principales factores que desencadenan la pérdida de biodiversidad son: la
modificación del hábitat (por ejemplo la fragmentación de los bosques), la introducción y propagación de
especies exóticas invasoras fuera de su área de distribución habitual, la sobreexplotación de los
recursos naturales y la contaminación, especialmente la provocada por el abuso de los fertilizantes, que
se traduce en un exceso de nutrientes en los suelos y el agua.

Los recientes cambios climáticos han tenido ya repercusiones importantes sobre la biodiversidad y los
ecosistemas de algunas regiones. A medida que el cambio climático se intensifique, los efectos
negativos sobre los servicios de los ecosistemas superarán en muchas partes del mundo a los
beneficios que se puedan derivar (por ejemplo, una temporada de cultivo más larga). Se prevé que el
cambio climático aumente el riesgo de extinción de especies, inundaciones, sequías, reducción de las
poblaciones y epidemias. Muchos de los generadores de cambio que afectan a la biodiversidad tienen
en la actualidad una influencia mayor a la que tuvieron en el pasado y además se dan simultáneamente.

Las múltiples amenazas podrían tener efectos drásticos e inesperados sobre la biodiversidad, ya que la
exposición a una amenaza con frecuencia hace que una especie sea más vulnerable a otras amenazas.
Los factores que contribuyen a la extinción pueden ser de ámbito tanto local como mundial y tener
efectos inmediatos o a largo plazo. Por ejemplo, la extinción a causa de la pérdida de hábitat puede ser
rápida para algunas especies y durar cientos de años para otras.

¿Cómo podría evolucionar la biodiversidad según los diferentes escenarios posibles?


En la Evaluación de Ecosistemas del Milenio se idearon cuatro escenarios posibles para intentar
conocer el futuro de la biodiversidad y el bienestar humano hasta 2050, e incluso más allá de esta fecha.
Los diferentes escenarios parten de un aumento de la globalización o un aumento de la regionalización
y de un enfoque reactivo o un enfoque preventivo a la hora de hacer frente a los problemas
medioambientales.

En general, según los cuatro escenarios, el suelo agrícola se expandirá en detrimento de la cubierta
forestal, especialmente en los países en desarrollo. Esta situación llevará a un declive continuo de la
biodiversidad, tanto local como mundial, principalmente a causa de la pérdida de hábitat. Los enfoques
medioambientales que inciden en la prevención tendrían más éxito a la hora de frenar esta tendencia.

Se prevé que la biodiversidad acuática y determinadas poblaciones de peces experimenten un declive a


causa de factores como el exceso de nutrientes, la sobrepesca, la invasión de especies exóticas y la
contaminación.
La pérdida de biodiversidad repercutirá en el bienestar del hombre, tanto de forma directa como
indirecta. Los efectos directos incluyen un mayor riesgo de padecer cambios medioambientales
repentinos; por ejemplo, la disminución drástica de las poblaciones de peces, inundaciones, sequías,
incendios forestales y enfermedades. Los cambios también afectarán al bienestar del hombre de forma
indirecta; por ejemplo, en forma de conflictos motivados por la escasez de alimentos y recursos hídricos.

Aunque todos los escenarios prevén un aumento de la renta per cápita, esta situación puede ocultar una
mayor desigualdad, por ejemplo desde el punto de vista de la seguridad alimentaria. Se tendrán que
tomar decisiones importantes sobre los compromisos entre objetivos en conflicto, por ejemplo entre la
producción agrícola y la calidad del agua, o entre el uso del agua y la biodiversidad acuática. Las
políticas que más contribuyen a la conservación de la biodiversidad fomentan al mismo tiempo un mayor
bienestar general del hombre al mantener los beneficios múltiples derivados de los ecosistemas.

¿Qué medidas se pueden adoptar para conservar la biodiversidad?

Informar al conjunto de la sociedad sobre los beneficios que se derivan de la conservación de la


biodiversidad y plantear abiertamente y con visión de conjunto las contrapartidas que surgen al
favorecer unas opciones en detrimento de otras, contribuye a optimizar los beneficios para la sociedad.
Recuperar un ecosistema es, por lo general, mucho más costoso que proteger el ecosistema original,
aunque está adquiriendo una importancia creciente a medida que aumenta el número de áreas
degradadas.

La biodiversidad debe tenerse en cuenta en la agricultura, la pesca y la silvicultura para lograr su


conservación. Estos sectores dependen directamente de la biodiversidad e influyen directamente en
ésta. El sector privado puede contribuir de manera significativa; por ejemplo, incorporando determinadas
prácticas agrícolas. Muchas empresas muestran en la actualidad una mayor responsabilidad corporativa
y preparan sus propios planes de actuación en materia de biodiversidad.

Es imprescindible contar a todos los niveles con organismos sólidos que contribuyan a la conservación
de la biodiversidad y al uso sostenible de los ecosistemas. Los acuerdos internacionales deben prever
medidas para asegurar su cumplimiento y tener en cuenta los impactos sobre la biodiversidad y las
posibles sinergias con otros acuerdos. La mayor parte de las medidas directas para detener o frenar la
pérdida de biodiversidad deben tomarse a nivel local o nacional. Las leyes y políticas adecuadas
desarrolladas por las administraciones centrales pueden habilitar a las administraciones locales para
que incentiven la gestión sostenible de los recursos.

Los instrumentos financieros, como el pago directo por los servicios de los ecosistemas o la transmisión
de la propiedad a particulares, pueden suponer un incentivo económico a la conservación de la
biodiversidad y el uso sostenible de los servicios de los ecosistemas.

La prevención y la intervención temprana se han revelado como los métodos más eficaces y rentables a
la hora de enfrentarse a las especies invasoras. Una vez se ha introducido una especie invasora resulta
sumamente difícil y costoso combatirla y, sobre todo, erradicarla, ya sea mediante productos químicos o
introduciendo otras especies (soluciones que no siempre dan resultado).
Es necesario enfrentarse a los generadores directos e indirectos desencadenantes de la pérdida de
biodiversidad para una mejor protección de la biodiversidad y de los servicios de los ecosistemas. Las
posibles medidas pueden consistir en eliminar subvenciones perjudiciales, fomentar una agricultura
intensiva sostenible, adaptarse al cambio climático, frenar el aumento del nivel de nutrientes en el agua
y los suelos, evaluar el valor económico total de los servicios de los ecosistemas y hacer más
transparentes los procesos de toma de decisiones.

Los espacios protegidos son un aspecto clave de los programas de conservación, pero no bastan por sí
mismos para proteger la biodiversidad en toda su extensión, y no siempre se respetan. Para obtener
resultados, es necesario escoger cuidadosamente el emplazamiento de los espacios protegidos,
asegurándose de que todos los ecosistemas de la zona tengan una representación adecuada.

Glosario

Especies exóticas: una especie exótica es una especie introducida fuera de su área de distribución
normal. Las especies exóticas invasoras son especies que al establecerse y propagarse modifican los
ecosistemas, los hábitats u otras especies.

Biodiversidad: el término «biodiversidad» es una contracción de la expresión «diversidad biológica».


Refleja la cantidad, la variedad y la variabilidad de los organismos vivos. Incluye la diversidad dentro de
una especie (diversidad genética), entre especies distintas (diversidad de especies) y entre ecosistemas
(diversidad de ecosistemas).

Generadores de cambio (de los ecosistemas): cualquier factor natural, o inducido por el ser humano,
que directa o indirectamente causa un cambio en un ecosistema.

Ecosistema: el complejo sistema formado por las comunidades de plantas, animales, hongos y
microorganismos así como por el medioambiente inerte que les rodea y sus interacciones como unidad
ecológica. Los ecosistemas no tienen límites fijos: puede considerarse como ecosistema un único lago,
una cuenca, o una región entera.

Servicios de los ecosistemas: beneficios que las personas obtienen de los ecosistemas. Esto incluye los
servicios de provisión como por ejemplo de alimentos y agua, pero también incluye servicios de
regulación como son el control de inundaciones y epidemias, también los servicios culturales como son
los beneficios espirituales, recreativos o culturales, y por último los servicios esenciales como el ciclo de
los nutrientes que asegura las condiciones que permiten que haya vida en la Tierra.

Modificación del hábitat: cambio de las condiciones medioambientales locales en las que vive un
organismo concreto. La modificación del hábitat puede ocurrir de forma natural como consecuencia de
sequías, epidemias, incendios, huracanes, corrimientos de tierra, erupciones volcánicas, terremotos,
incrementos o reducciones ligeras de las temperaturas o precipitaciones estacionales, etc. No obstante,
la modificación del hábitat está generalmente inducida por actividades humanas como el cambio en el
uso de la tierra, la modificación física de los ríos o la sustracción de agua de estos.

Cobertura de la tierra: cobertura física de la tierra generalmente se refiere a la cobertura vegetal o a la


falta de esta. El término «cobertura de la tierra» está relacionado con «uso de las tierras», pero no son
sinónimos.

http://www.ecologistasenaccion.org/article6296.html

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