Você está na página 1de 8

El conflicto del Sáhara Occidental: un análisis desde la paz y el conflicto.

Diego Barchín Iniesta

En este ensayo, analizaré el conflicto del Sáhara Occidental tratando de implementar y


utilizar los conceptos que hemos trabajado a lo largo del curso sobre la investigación de
la paz y sobre la resolución, prevención y gestión de los conflictos.
Este conflicto se caracteriza por ser complicado y de mucha duración en el tiempo, ya
que comenzó como tal, tras la retirada de España del territorio, al ser este una antigua
colonia española, en 1975 y se extiende hasta nuestros días. El conflicto del Sáhara
Occidental ha pasado por muchas y muy diversas etapas, desde escaladas de tensión
hasta llegar al punto de producirse un conflicto bélico y de ahí a pasar un enfriamiento
del belicismo, para luego volver a incrementarse las tensiones diplomáticas.
En este conflicto, a lo largo de toda su historia han participado muchos y muy distintos
factores, como son los actores principales, el reino de Marruecos y el Frente Polisario,
auto llamándose oficialmente como República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y
otros actores con mayor o menor importancia en unos momentos u otros del conflicto.
España al ser la antigua potencia colonizadora, y, sobre todo, la Organización de las
Naciones Unidas (ONU) al ser la principal parte mediadora entre las dos partes en
conflicto.
El Sáhara occidental, a día de hoy, es uno de los diecisiete integrantes de la lista de
territorios no autónomos de las Naciones Unidas bajo supervisión de su Comité
Especial de Descolonización. Junto a otros territorios como Gibraltar, las Islas Caimán
o Malvinas o la Polinesia Francesa.
Primero, analizaré el conflicto en su totalidad y posteriormente pasaré a analizar las
herramientas o conceptos de la asignatura aplicables a él.
En 1970, la ONU aprueba la Resolución 2711, por la que se aprueba la celebración en el
Sáhara español de un referéndum de autodeterminación.1 Tras negarse los primeros
años, España accede en 1974 a celebrarlo movido por la presión en el territorio y por la
antipatía hacia la situación de la Comunidad Internacional.
La dictadura franquista puso en marcha la preparación del referéndum a partir de 1974 y
anuncia que este tendrá lugar en 1975. Pero los continuos ataques diplomáticos
marroquíes y la guerra de guerrillas con el Frente Polisario que se fundó en 1973 unido
a la gran dificultad de realizar un censo de población para la votación del referéndum
debido entre otras cosas al gran número de población nómada complicaron y retrasaron
el proceso.2 En este punto, Marruecos que se oponía a la consulta, pidió al Tribunal
Internacional de Justicia que se pronunciara sobre si el Sáhara era “cosa de nadie” (res
nullius), entonces la ONU pidió a España que paralizase el proceso hasta que este
tribunal se manifestase.3

1
Asamblea General (14 de diciembre de 1970) Resolución 2711 (1970) de 14 de diciembre de 1970.
Organización de la Naciones Unidas, disponible en
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/2711(XXV)&Lang=S&Area=RESOLUTION
2
Boukhari Ahmed 2004, “Las dimensiones internacionales del conflicto del Sáhara occidental y sus
repercusiones para una alternativa marroquí” Nº 16/2004 Real Instituto Elcano
3
Arasa, Daniel 2008. “Historias curiosas del franquismo”. Ediciones Robinbook pp. 362-363
El reino de Marruecos sufría una crisis interna que se materializaron, incluso, en dos
intentos de golpe de Estado por parte del ejército en 1971 y 1972, de este modo, el
gobierno marroquí usaba la invasión saharaui como tema para desviar la atención
interna.
Aquí es reseñable que España estaba dispuesta desde un principio a abandonar el
territorio y sus obligaciones como potencia administradora, pero fue debido a y a la
crisis interna que he mencionado anteriormente que el gobierno marroquí vio la
oportunidad de anexionarse un territorio para así desviar la atención y solventar las
crisis internas de su propio país.
En este contexto, el rey marroquí, Hassan II insta a su población mayor de 18 años y
desarmada a realizar una marcha el 6 de noviembre de 1975. Esta se realizó con el
previo repliegue de las tropas españolas y puesta de minas en la frontera, y por la tarde
de ese 6 de noviembre había acampadas en territorio del Sáhara español más de 50.000
civiles. El Consejo de Seguridad a través de otra resolución muy poco tiempo después
de esto “deploraba la realización de la marcha” e “instaba a Marruecos a que retire
inmediatamente del territorio del Sáhara Occidental a todos los participantes en la
marcha”4. Pero, en el marco de la Guerra Fría, EEUU y Francia dieron el visto bueno al
movimiento que hizo Marruecos, ya que Argelia y el Frente Polisario eran cercanos a la
Unión Soviética.5
Este posicionamiento de Marruecos desobedeciendo la Resolución del Consejo de
Seguridad, viéndose fuerte para ello gracias al apoyo de EEUU y Francia se puede
identificar con el tipo de imperialismo político e incluso imperialismo militar que
menciona Galtung cuando habla de los tipos de imperialismo que derivan de las
relaciones entre las naciones de Centro y las naciones de Periferia. Este imperialismo
militar hace que el Centro, en este caso EEUU y Francia ofreciese seguridad y
protección a la Periferia, en este caso Marruecos, con independencia de lo que pudiese
acarrear el conflicto. 6

4
Consejo de Seguridad (6 de noviembre de 1975) Resolución 380 (1975) de 6 de noviembre de 1975.
Organización de las Naciones Unidas, disponible en
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=S/RES/380%20(1975)
5
Boukhari, A., op. cit., 2004
6
Galtung, 1985 en Harto de vera, Fernando (2004) Investigación para la paz y Resolución de los
conflictos. Valencia. Tirant lo Blanch. P. 188
Fuente: Wikipedia, disponible en:
https://es.wikipedia.org/wiki/Marcha_verde#/media/File:Gr%C3%BCner_Marsch_Kart
e-es.png

Unos días después se materializan los Acuerdos de Madrid, el 14 de noviembre de


1975, en los que España manifestaba su intención ante el mundo de abandonar el
territorio del Sáhara Occidental definitivamente. En estos acuerdos España manifestaba
que la descolonización culminaría completamente cuando la opinión de la población
saharaui se hubiese expresado válidamente, aquí, el estado español estaba haciendo una
defensa del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación. 7
La indecisión de España apartándose a un lado, manifestando simplemente la “defensa
del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación” fue una forma de retirarse de la
zona sin determinar quién debería gestionarla ni ejercer la soberanía fue una de las
principales causas para que el conflicto se desarrollase como se desarrolló. Aquí el
gobierno español sin ser completamente consciente al tomar estas decisiones, impuso lo
que en el futuro se demostraría como una situación de violencia estructural, al
desarrollarse el conflicto posterior. Violencia estructural entendida como “escenarios
dentro de los que muchos individuos pueden infligir una enorme cantidad de daño a
otros seres humanos sin haberlo pretendido, simplemente realizando sus obligaciones
rutinarias como un trabajo definido por la estructura… La violencia estructural es
entonces percibida como daño no intencional, infligido a los seres humanos… como un
proceso que opera lentamente, en forma de pobreza en general, y hambre en particular,
erosionando y finalmente asesinando seres humanos.”8

7
Carrillo Salcedo, Juan Antonio (1979). “La posición de España respecto de la cuestión del Sahara
occidental: de la Declaración de Principios de Madrid al comunicado conjunto hispano-argelino”. Revista
de Política Internacional (163) pp. 119-120
8
Galtung, 1985 en Harto de vera, Fernando (2004) Investigación para la paz y Resolución de los
conflictos. Valencia. Tirant lo Blanch. p. 138
Además, esta posición de España al mostrar “defensa del derecho del pueblo saharaui a
la autodeterminación” pero no resolver y traspasar la soberanía directamente al pueblo
saharaui, dejándola esta en manos de nadie fue una de las grandes causas del conflicto,
y, que si España hubiese gestionado correctamente se podría haber evitado el conflicto o
haber sido minimizado en gran medida.
Después de que España tomase esta posición Marruecos comunicó al Secretario General
de la ONU que habían aprobado la reincorporación del territorio a Marruecos y
Mauritania en base a realidades históricas. Pero la ONU se mostró contraria al no ver
suficientes motivos de naturaleza histórica como para justificar esta anexión. 9
Los Acuerdos de Madrid no supusieron una transferencia de soberanía real sobre el
territorio ni concedieron a ninguno de los firmantes el estatus de potencia
administradora. Por ello, el territorio se mantuvo como no autónomo. Esto unido a que
la Organización para la Unidad Africana (RASD) admitió como estado miembro a la
República Árabe Saharaui Democrática en 1984 con el correspondiente reconocimiento
internacional de buena parte del mundo, hizo, que los Acuerdos de Madrid perdieran
mayor valor jurídico y político. Por todo esto la invasión marroquí y el conflicto paso a
ser inevitable.
Sobre el terreno la evolución del conflicto armado fue los primeros años una guerra de
guerrillas que motivaba el Frente Polisario. En los primeros años, hasta 1978, el Frente
Polisario consigue varias campañas militares de éxito tanto en el frente norte como en el
sur. Es en este año 1978 cuando Mauritania empieza a no verle sentido a la contienda y
acaba renunciando a todas las reivindicaciones sobre el territorio y calificaría la guerra
como injusta y fratricida en los Acuerdos de Argel. Posteriormente y al mismo tiempo
que la OUA, Mauritania reconocería la RASD.
En esta situación de conflicto en ningún momento hay ninguna situación de paz, al
menos entendida desde el concepto de paz positiva que para que la haya se tienen que
cumplir una serie de características que se sintetizan en estas tres: a) la realización de la
justicia, que no la hay porque en ningún momento se llega durante todo el conflicto a
una visión compartida por ambos contendientes de justicia, ya que tienen visiones
diametralmente opuestas, b)mantenimiento del orden, tampoco lo hay ya que hay
situaciones de conflicto armado directo y c) tranquilidad de espíritu. 10
En este conflicto se ve perfectamente la definición que, el profesor Harto de Vera da, de
la paz y la guerra entendida como los extremos de un continuum. Aquí la paz y la guerra
se distinguen en cuanto grado hay en una situación de uno o del otro, lo que diferencia
que haya más grado de uno o de otro es de cómo se utilicen los métodos políticos o
militares para conseguir el fin último que no es más que el poder.
A la hora de catalogar este conflicto se puede utilizar la tipología que realiza Djalili en
1986 especialmente para los conflictos que surgen en el Tercer Mundo y que recoge
Harto de vera. Basándonos en esta escala el Conflicto que es objeto de nuestro análisis
sería desde su naturaleza y motivación una Guerra Internacional de motivaciones
territoriales, ya que, aunque no es reconocido por todo el mundo, la RASD es
reconocido por la OUA. Y desde la perspectiva de la extensión sería una guerra local ya

9
Carrillo Salcedo, J.A., op.cit., 1979 p.122.
10
Harto de Vera, Fernando (2004), Investigación para la paz y Resolución de los Conflictos. Valencia.
Tirant lo Blanch. p. 135
que repercute sobre dos países, aunque otros muchos países como España, Francia u
otros tengan papeles destacables en unas etapas u otras del conflicto.11
A principios de los 80, los combates alcanzarían su máxima intensidad y Marruecos
creó un gran muro defensivo por la sorpresiva duración que estaba tomando la guerra.
Este muro, junto a la visión a la que estaban llegando ambas partes en conflicto que era
que no iban a poder concluir la batalla con una victoria militar hizo que la intensidad y
la cadencia de los combates se redujese drásticamente entre los años 1986 y 1988. 12
Tras llegar a esta conclusión los contendientes “evalúan que el coste del conflicto es
demasiado elevado, en comparación con el coste de una solución negociada, se produce
la detención del conflicto”13

Fuente: Wikipedia, disponible en:


https://es.wikipedia.org/wiki/Muro_marroqu%C3%AD#/media/File:Western_sahara_w
alls_moroccan_map-es.svg
A principios de 1989 se da el primer encuentro entre el rey Hassan II y el Frente
Polisario. A petición del rey, el Frente Polisario decretaría una tregua unilateral como
gesto de apoyo al diálogo. Todo esto no tenía ninguna finalidad y no se concretó nada,
por falta de intención marroquí. Esto acabó con una vuelta al conflicto armado cuando
las fuerzas saharauis penetraron 50 km más allá de los muros. La rotura de estas
negociaciones hace que ambas partes lleguen a la conclusión de que hay un empate

11
Djalili (1986) en Harto de Vera, F op. cit., 2004 pp. 148-149
12
Boukhari, A., op. cit., 2004
13
Harto de Vera, F op. cit., 2004 p. 213º
estratégico, pero que a la larga por las ventajas institucionales y otras la situación podría
ser favorable a Marruecos.14
La ONU buscando una solución publica la Resolución 40/50 del 2 de diciembre de 1985
por la que instaba a las dos partes en conflicto a varias cosas: a) a negociar directamente
con el fin de alcanzar, b) el alto el fuego y c) convenir las modalidades de un
referéndum de autodeterminación para el pueblo saharaui.15 Como era de esperar
Marruecos se opuso a esta Resolución.
Dados los fracasos en las negociaciones se llevó a cabo la posibilidad de una
intervención militar con fines humanitarios, para que se de esta son necesarios los
siguientes criterios según Fisas16, estos son:
- Existencia de una violación grave de los derechos humanos fundamentales
- Una situación de urgencia y necesidad de actuar,
- Haber agotado todos los otros medios no militares,
- Proporcionalidad entre el uso de la fuerza y los objetivos perseguidos,
- Carácter limitado de la operación en el tiempo y en el espacio,
- Autorización del Consejo de Seguridad.
Debido a la nueva coyuntura internacional que surge tras la caída del muro de Berlín y
al estancamiento de las negociaciones ante la oposición de Marruecos. Provoca que el
Secretario General de las Naciones Unidas presentase unas Propuestas Conjuntas de
Arreglo para aplicar las propuestas que mencionaba la antes mencionada Resolución
40/50. Este plan, ahora sí debido en gran medida al contexto internacional, recibió la
aceptación tanto de Marruecos, del Frente Polisario y el aval del Consejo de Seguridad
de Naciones Unidas.
Este acuerdo se manifestaría en el envío al territorio de la MINURSO (Misión de las
Naciones Unidas para el Referéndum del Sahara Occidental) el 6 de septiembre de
1991. Este despliegue provocó el mismo día de su llegada el establecimiento del alto el
fuego, y comenzó la búsqueda e identificación de potenciales votantes sobre la base del
último censo que realizó con anterioridad España, este primer plan no cumplió con las
fechas establecidas debido a intereses privados que entorpecieron la labor, así como la
caída de la URSS y la entrada de la Federación Rusa en el Consejo de Seguridad de la
ONU.
Tras la época de aumento de la tensión que se vivió durante la época de Boutros Ghali
como Secretario General de la ONU entre 1992-1996, llegó la etapa de Kofi Annan, que
designó a James Baker como mediador en el conflicto. Este reinició conversaciones con
el Frente Polisario y con Marruecos, estas reuniones desbloquearon las tareas de
identificación de votantes para el censo concluyéndolas en enero de 2000, el censo lo
completaron unos 86.000 saharauis. Marruecos volvió a obstruir una vez más el proceso
interponiendo recursos de apelación que se consideraban legales de unas 130.000
personas para que fuesen incluidas en el censo.
Esto lo podría haber solventado la ONU, pero una vez más la burocracia y otras
presiones internas como la de Francia que no veía con buenos ojos una descolonización

14
Boukhari, A., op. cit., 2004
15
Asamblea General (2 de diciembre de 1985) Resolución 40/50 (1985) de 2 de diciembre de 1985.
Organización de las Naciones Unidas, disponible en
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/40/50&Lang=S
16
Fisas, Vicenç (1998). Cultura de Paz y Gestión de Conflictos. Barcelona. Editorial Icaria. p. 90
del Sahara occidental ya que podría traer desestabilización a la zona según ellos
hicieron que no se llevaran a cabo medidas. Esto culminó con la declaración abierta por
parte de Marruecos de que consideraban inaplicable el Plan de Arreglo y que solamente
estaban dispuestos a considerar una solución a través de un dialogo franco con la otra
parte, y que reconociese de antemano su soberanía sobre el Sahara occidental. El Frente
Polisario rechazo esta postura inmediatamente e insistía en que había que seguir el Plan
de Arreglo tal y como se había encaminado y celebrar un referéndum de
autodeterminación.
Despues de esto Marruecos presentó un Proyecto de Acuerdo Marco que establecía dos
cosas clave: a) un período de 5 años (en vez de 6 meses como decía el Plan de Arreglo)
durante los cuales el territorio del Sahara occidental permanecería sobre la soberanía
marroquí y b) al final de este período, un referéndum decidiría el futuro del territorio en
el cual y cito al Proyecto “tendría derecho a voto toda persona que haya residido en el
territorio durante el año que precede al referéndum”. Esta segunda disposición buscaba
la creación de un cuerpo electoral integrado mayoritariamente por ciudadanos
marroquíes que decantarían el referéndum sobre el lado de Marruecos.
Este modo de llevar a cabo el Acuerdo Marco, que establecía esos 5 años de ocupación
y soberanía marroquí implicaba que el ganador del referéndum de autodeterminación se
lo “llevase todo”, esto desde la Teoría de Juegos es un Juego de suma cero según el que
la ganancia de uno de los participantes significa pérdidas netas para el otro.17
Las siguientes negociaciones, entre las que destacan, el Plan Baker II, y demás
renovaciones y prolongaciones de la MINURSO, hasta llegar al punto que sigue en
pleno funcionamiento en nuestros días sin haber podido celebrar aún un referéndum, no
es sino síntoma de la gran dificultad del conflicto, de la inflexibilidad de las partes, en
parte provocada por la ONU al no respetar en su momento el derecho de
autodeterminación de los pueblos como detalla su Carta. Así como mostrar
“impaciencia” por dos años, -que son los que tardarían en resolverse las 130.000
apelaciones que interpuso Marruecos- para celebrar el referéndum, y mostrar
“indulgencia” ante la espera de 5 años que proponía el Proyecto de Acuerdo Marco
propuesto por Marruecos.
Como conclusión, en mi opinión, este conflicto pasó por momentos clave en lo que se
podría haber resuelto de una manera justa. Estos ‘puntos de inflexión’ son para mí, el
momento en el que España no declara la soberanía de ninguna de las dos partes y solo
manifiesta “defensa del derecho saharaui al derecho de autodeterminación”, y otro
momento de posible resolución clave es el que manifiesto en el párrafo anterior en el
que la ONU apoyó el plan marroquí de ocupación del territorio y posterior celebración
del referéndum pasados 5 años.
Bibliografía.
Arasa, Daniel 2008. “Historias curiosas del franquismo”. Ediciones Robinbook
Asamblea General (14 de diciembre de 1970) Resolución 2711 (1970) de 14 de
diciembre de 1970. Organización de la Naciones Unidas, disponible en:
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/2711(XXV)&Lang=S&Area=RES
OLUTION

17
Harto de Vera, F op. cit., 2004 pp. 220-221
Asamblea General (2 de diciembre de 1985) Resolución 40/50 (1985) de 2 de diciembre
de 1985. Organización de las Naciones Unidas, disponible en
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/40/50&Lang=S

Boukhari Ahmed 2004, Las dimensiones internacionales del conflicto del Sáhara
occidental y sus repercusiones para una alternativa marroquí nº16/2004 Real Instituto
Elcano

Carrillo Salcedo, Juan Antonio (1979). La posición de España respecto de la cuestión


del Sahara occidental: de la Declaración de Principios de Madrid al comunicado
conjunto hispano-argelino. Revista de Política Internacional (163) pp. 119-120

Consejo de Seguridad (6 de noviembre de 1975) Resolución 380 (1975) de 6 de


noviembre de 1975. Organización de las Naciones Unidas, disponible en
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=S/RES/380%20(1975)

Fisas, Vicenç (1998). Cultura de Paz y Gestión de Conflictos. Barcelona. Editorial


Icaria

Harto de Vera, Fernando (2004), Investigación para la paz y Resolución de los


Conflictos. Valencia. Tirant lo Blanch.
Marcha Verde, Wikipedia, consultado el 18 de junio de 2017, disponible en:
https://es.wikipedia.org/wiki/Marcha_verde

Você também pode gostar