Você está na página 1de 46

Taller de Huerto Básico

Por Tomás Schmidt

1
En esta página web encontrarás todo el material de
apoyo que necesitarás durante este taller!

Para más información escribir a:


tschmidt@uc.cl

Segunda versión – Septiembre de 2016

2
Índice de contenidos

Objetivo: enseñar las técnicas y entregar el conocimiento necesario para iniciar una
huerta casera. Y con esto, acercarse a la autosuficiencia.

1. Iniciar la huerta p.6


 Beneficios de la huerta
 Escoger el lugar
 Diseñar la huerta
 Herramientas necesarias
 Instalación de la huerta

2. Suelo y labranza p.11


 Importancia del suelo para la huerta y el mundo
 Propiedades físicas del suelo
 Propiedades químicas del suelo
 Propiedades biológicas del suelo
 Identificar un mal y un buen suelo
 Importancia de la materia orgánica
 Erosión
 Técnicas de labranza y sus objetivos
 Beneficios y perjuicios de la labranza

3. Abonado y mejoramiento del suelo p.16


 Güano
 Cubiertas
 Abono verde
 Fabricación de compost
 Salinidad
 pH y encalado

4. El ciclo y las partes de la planta p.21


 Partes de la planta y su función
 El ciclo de la planta
 Tipos de plantas
 Estacionalidad
 El cultivo según el órgano a cosechar

3
5. Multiplicación y asentamiento de cultivos p.25
 Tipos de semillas
 Preparación de la cama de semillas
 Siembra directa
 Preparación de almácigos
 Reproducción vegetativa

6. Labores culturales p.29


 Desmalezado
 Riego
 Poda
 Tutores
 Cosecha
 Cosecha y almacenaje de semillas

7. Control de plagas p.33


 Definición de plaga
 Suelo sano
 Diversidad económica
 Biodiversidad, refugios y plantas aromáticas
 Dinámica de plagas y control de fechas
 Control manual y uso de preparados

8. Rotaciones, cultivo combinado y planificación p.36


 Importancia de las rotaciones
 Beneficios y perjuicios del cultivo combinado
 Doble cosecha anual
 Planificación, cálculos y registros

9. Cultivo en contenedores p.39


 La falta de suelo
 Principios básicos para la elección de un contenedor
 Tipos de contenedores
 Orientación y posicionamiento de los contendores
 Ejemplos de contenedores

10. Tablas p.43

11. Referencias p.46

4
“El hombre no es un animal que solo puede realizar una tarea. No prospera
cuando se es como un engranaje en una máquina. Las personas están
destinadas por naturaleza a ser polifacéticas y a poseer diversas
habilidades”
John Seymour

5
1. Iniciar la huerta

 Beneficios de la huerta

Tener una huerta en la casa o parcela tiene múltiples beneficios. Como


sabemos, hace mucho tiempo era común tenerla, e incluso hoy una gran cantidad
de familias la sigue teniendo. Esta práctica se ha ido perdiendo, y con ella sus
conocimientos. El objetivo que tiene este taller es difundir estos conocimientos y
técnicas para recuperar las huertas caseras. Claro está que, como todo tema, no hay
solo UNA manera de hacerlo, descubriremos múltiples técnicas y nos darán
contradictorias recomendaciones. En este taller se habla principalmente sobre las
técnicas de Agricultura Orgánica.
En fin, los beneficios de tener una huerta son múltiples:

 Saber cómo cultivar tu propio alimento te acerca a la autosuficiencia.


 Ser más independiente de los precios del mercado y del sistema económico.
 Ahorrar dinero evitando comprar algunos alimentos.
 Conocer la procedencia de lo que comemos
 Recrearse y hacer ejercicio físico.
 Profundizar nuestros conocimientos sobre la naturaleza.
 Evitar el uso de pesticidas y su daño al medio ambiente.
 Evitar el flete de los alimentos y sus costos económicos y medioambientales.
 Recuperar antiguas prácticas y fortalecer la cultura.
 Lo cultivado por uno mismo siempre sabe mejor.
 Trabajar en la huerta siempre puede ser un momento para compartir.

 Escoger el lugar

Para escoger el lugar adecuado para la huerta lo primero que tenemos que
analizar es si disponemos de un terreno grande o uno pequeño, para ver si podemos
elegir el lugar. En segundo lugar debemos analizar de qué tamaño queremos hacer
la huerta. Siempre será mejor partir con una huerta pequeña y luego, con los años,
ir agrandándose. Disponer de unos 10 m² es lo mínimo para tener una huerta y con
50 m² tendremos suficientes verduras para una persona al año. Por lo tanto, para
producir las verduras de una familia de cinco personas necesitaremos 250 m² (un
espacio de 16 x 16 m). Si se quisiera producir todo el alimento necesario, incluyendo
los cereales y alimentos calóricos, para una familia de cinco personas, se requieren
2300 m² (un espacio de 50 x 50 m). Este taller está pensado en la producción
solamente de verduras.
Sabiendo el tamaño de la huerta que vamos hacer necesitamos pensar en
varias cosas para escoger el lugar:

6
 Cercar el lugar para evitar que entren animales como los perros
 Asegurarnos de que ojala el suelo tenga más de 45 cm de profundidad
 No hacer una huerta demasiado grande si no tenemos el tiempo para
trabajarla. Más nos vale concentrar nuestros esfuerzos en un lugar menor y
más productivo, pero siempre aspirando a que sea agrandado en un futuro.
 Elegir el lugar con menor pendiente
 Evitar hacerla en un lugar que se inunde habitualmente
 Asegurarnos de que en primavera lleguen mínimo 5 horas de sol directo al día

Ubicación para la huerta según luminosidad (Jeavons, 2002)

Como vemos en la figura debemos tener claro hacia dónde está el norte e
identificar las cosas que podrían darle sombra a nuestra huerta (Ej: nuestra casa). Si
instalamos la huerta pegada al sur de la casa o un gran árbol no tendrá suficiente sol
directo. Lo ideal es instalarla en el lugar que más sol le llegue. Así, si queremos
cultivar algo en invierno, que no sea la falta de luz lo que nos limite.

 Diseñar la huerta

En este taller se propone el cultivo en bancales o platabandas, las cuales


están divididas por caminos que permiten no tener que pisarlas. Este diseño
contrasta con los clásicos surcos y camellones, método que sólo vamos a elegir si el
sistema de riego que poseemos es por canal e inundación.

7
Comparación entre un bancal y surco con camellones (Jeavons, 2002)

Como vemos en la figura en los bancales se pueden cultivar las plantas más
juntas, pudiendo aprovechar mejor el espacio. Un bancal puede medir entre 0,7 y 1
metro de ancho por todo el largo que uno quiera, aunque se recomienda que no
sean más de 7 metros. Debemos dejar caminos entre los bancales y siempre
evitaremos pisarlos. Luego de la labranza estos quedarán más altos que los caminos.

 Herramientas necesarias

Es muy importante disponer de las herramientas necesarias para trabajar el


huerto. Dentro de lo posible siempre es recomendable comprar herramientas de
buena calidad ya que su duración es mucho mayor y compensan el precio superior.
Las herramientas a utilizar varían según el gusto y preferencia de cada persona.
Nosotros proponemos como esencial:

8
 Una pala hoyera o pala cuadrada
 Una horqueta para tierra (con púas
gruesas y firmes, no delgadas como
la horqueta para heno)
 Una palita jardinera
 Un azadón

 Instalación de la huerta

Luego de haber escogido el lugar y


decidido el tamaño que tendrá la huerta
debemos cercarla si es necesario.
Entonces, el siguiente paso es instalar la
huerta. Deberemos marcar los bancales
en el suelo, cuidando de dejar caminos
marcados entre ellos, como muestra la
figura de la vista general de una huerta. Si Pala y horqueta (Jeavons, 2002)
es posible se pueden poner tablas de
canto para limitar los extremos de los bancales. Éstas ayudarán a evitar que entren
algunas malezas como la chépica y sostendrán la tierra, ya que como se mencionó,

luego de la labranza ésta crecerá quedando hasta quince centímetros sobre los
caminos. Una vez dibujados los bancales lo óptimo será conseguir la mayor cantidad
posible de güano o compost. Con medio saco por metro cuadrado será suficiente
para empezar. Y para terminar la instalación, se debe hacer la primera labranza de la

9
tierra que vamos a cultivar, lo que se explicará en la siguiente sesión de Suelo y
labranza.
Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:
www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “mini manuales
introductorios” encontrarás material de apoyo que te guiará para introducirte en el
tema.

10
2. Suelo y labranza

 Importancia del suelo para la huerta y el mundo

En cualquier sociedad, ya sea moderna o antigua, el suelo es uno de los


recursos más importantes que posee. Gracias al suelo se pueden cultivar la mayoría
de los alimentos y mantener las praderas y bosques. El suelo es un recurso no
renovable, es decir, se regenera de forma tan lenta que es imperceptible para una
vida humana. Muchas sociedades antiguas, incluyendo la Rapa Nui en Isla de Pascua
cayeron por agotar sus suelos cultivables. Hoy no es una excepción, y son millones
de hectáreas al año las que se pierden en el mundo entero.
Para nuestra huerta funciona del mismo modo, si perdemos el suelo que
poseemos ya no valdrá la pena cultivar en él, ya que sus rendimientos serán
mínimos. Por estas razones, nuestros principales esfuerzos deben ir dirigidos en
proteger y mejorar nuestro suelo.

Biodiversidad en el suelo (Sullivan, 2007)

Como vemos en la figura, el suelo es un sistema muy complejo en el cual no


sólo hay partículas de tierra o minerales, también hay materia orgánica en
descomposición, aire, agua, y una infinidad de seres vivos como bacterias, micro
algas, hongos, insectos y lombrices. Todos estos elementos se relacionan entre ellos
y cada uno desempeña una función muy importante en nuestro suelo y el mundo.

¿Cómo puede ser que en la naturaleza, donde nadie labra ni fertiliza la


tierra, se puedan producir miles de plantas y animales nuevos cada año?

11
El objetivo de este taller es explicar cómo lo hace y enseñar técnicas para
imitarla. En la agricultura orgánica se dice: “el agricultor no cultiva plantas, cultiva el
suelo”. Y este suelo se cultiva imitando a la naturaleza, para que así, dentro de lo
posible, ella haga el trabajo por nosotros. Mantener el suelo sano es la clave.

 Propiedades físicas del suelo

Nuestro suelo tiene varias propiedades físicas, químicas y biológicas que lo


van a caracterizar. Las propiedades físicas tienen relación con lo que podemos ver y
tocar en el suelo. Éstas son las siguientes:

 Su textura o las proporciones de arena, arcilla y limo que tiene.


 Se estructura o cómo se juntan las partículas del suelo formando o no
terrones.
 La cantidad de materia orgánica que posee.
 Su porosidad, densidad o aireación.
 Capacidad y velocidad para absorber agua y que ésta no escurra.
 Cuánta agua y por cuánto tiempo es capaz de retener.
 Facilidad de drenaje, inundándose o no.
Es así como por ejemplo, un suelo arenoso puede ser más aireado y fácil de
penetrar por las raíces que un suelo arcilloso, pero por otro lado puede retener
menos agua y se seca más fácil.

 Propiedades químicas del suelo

Las propiedades químicas tienen que ver con lo que no podemos ver, es
decir, la cantidad de nutrientes que hay para las plantas, cómo se mueven en el
suelo y si están o no disponibles para ser Túnel creado por lombriz (Sullivan, 2007)
absorbidos. En general, necesitaríamos un
análisis de laboratorio para determinar todo
esto, pero luego explicaremos algunos
indicadores visuales que nos dirán si están
bien o no. Los principales nutrientes para las
plantas son el nitrógeno (N), el fósforo (P) y el
potasio (K). Un suelo fértil es rico en
nutrientes.

 Propiedades biológicas del suelo

Las propiedades biológicas tienen que


ver con la cantidad y formas distintas de vida

12
que podemos encontrar en nuestro suelo. Un suelo sano está lleno de vida. Un
ejemplo es la cantidad de lombrices que encontremos, que entre más sean mejor
será. Como vemos en la figura de la derecha, las lombrices crean túneles que airean
el suelo, además descomponen la materia orgánica liberando nutrientes y producen
un pegamento que le da estructura al suelo y lo protege. Otro ejemplo son los
hongos, que por debajo del suelo forman redes con las raíces de las plantas y
cooperan el uno con la otra. Hay un sin número de seres vivos, todos son necesarios
y hay que protegerlos.

 Identificar un mal y un buen suelo

Teniendo en cuenta las propiedades del suelo podremos identificar cuál


sería el suelo ideal. El mejor suelo que podríamos encontrar es el de un antiguo
bosque. Si uno hace un hoyo y analiza el perfil del suelo puede ver varias
características:

 La capa de tierra de hoja, que se ha demorado siglos en formarse, es muy


profunda (unos 50 cm)
 Es un suelo esponjoso y aireado
 Está lleno de vida, como lombrices, hongos, insectos y otros seres.
 Tiene buen olor; fresco y dulce.
 Es de color negro
 En la superficie tiene una capa de hojas en descomposición que lo protege
 Tiene buena infiltración y retención de agua
 Es profundo, encontrando arena o roca a más de un metro bajo la superficie
 La vegetación abunda naturalmente
 Es rico en nutrientes

Por otro lado, un mal suelo se puede parecer al relleno que utilizan para los
caminos y construcciones. Sus características pueden ser:

 Es un suelo muy compactado


 Al agua casi no penetra y se encharca
 No tiene casi nada de vida como lombrices
 Es pobre en materia orgánica, no siendo negro.
 Puede ser delgado
 La vegetación no abunda naturalmente
 No tiene mucho olor
 Es pobre en nutrientes

13
 Erosión

La erosión es el proceso por el cual se pierde físicamente el suelo. Si uno


observa, todas las buenas características del suelo se encuentran cercanas a la
superficie, y los primeros centímetros son los más fértiles. Si el terreno está
desprotegido, la lluvia y el viento empiezan a llevarse la capa superficial del suelo,
justo la que es más fértil. Ésta empieza a escurrir hasta llegar a los ríos y luego a un
lago o el mar. De esta manera suelos que antes eran fértiles se vuelven inertes y se
pierden. Hay veces que es tan grave que uno puede observar la erosión semana a
semana. Hay lugares en los que se ha perdido hasta dos metros de suelo. La erosión
es el principal peligro de la agricultura y pone en riesgo la alimentación mundial.
Nuestros esfuerzos tienen que enfocarse en evitarla, y es así como tenemos que
imitar la naturaleza que es capaz de hacerlo. Si no evitamos la erosión, todos
nuestros esfuerzos por abonar y mejorar el suelo serán llevados por la lluvia.

 Técnicas de labranza y sus objetivos

La labranza tiene como objetivo principal mejorar algunas propiedades


físicas del suelo. Al labrar el suelo se busca airearlo y mullirlo, facilitando así la
penetración de las raíces. Además se busca despejar el terreno de malezas para que
estas no estorben en el crecimiento de nuestros cultivos.
Técnica del bancal profundo (Jeavons, 2002)

En la agricultura orgánica se utiliza la técnica del bancal profundo, o doble


excavación. El objetivo es labrar a profundidad para así estimular que las raíces
vayan hacia abajo. Esta técnica logra aprovechar mejor el agua y los nutrientes,
además de permitir cultivar las plantas más juntas y así ganar espacio.
Una vez marcado el bancal, éste se divide en zanjas de unos 40 cm de ancho
y se procede de la manera siguiente:
En el paso 1 se cava una zanja de 30 cm de profundidad. En el paso 2 se
mulle con la horqueta el subsuelo de la zanja otros 30 cm más. En el paso 3, se cava

14
una segunda zanja al lado de la primera echando la tierra sobre la anterior. Se repite
el paso 2 mullendo el subsuelo en la nueva zanja y se repite el proceso avanzando
de zanja en zanja hasta terminar todo el bancal.

 Beneficios y perjuicios de la labranza

Si bien la labranza nos ayuda a airear un suelo que está compactado y lo


deja limpio para poder sembrar tiene bastantes perjuicios. Por esto, debemos evitar
labrar la tierra si no es estrictamente necesario. Algunos perjuicios son:

 Destruye el hogar de los microorganismos que viven en el suelo,


disminuyendo la población de ellos y su actividad tan beneficiosa.
 Expone el suelo a la erosión, quedando suelto y al descubierto.
 Disminuye la cantidad de materia orgánica
 Disminuye la población de lombrices
 Destruye la estructura del suelo
 Destruye los canales de drenaje naturales que tiene el suelo.
Es por esto que una labranza profunda para iniciar el huerto es beneficiosa,
pero una vez asentado y mejorado el suelo es preferible evitarla.

 Importancia de la materia orgánica

Si por un lado la labranza tiene beneficios y perjuicios, la integración de


materia orgánica sólo tiene beneficios. La materia orgánica son todos los restos de
seres vivos que se descomponen en el suelo. La mayoría de las características
beneficiosas que vemos en el buen suelo del bosque es debido a la gran cantidad de
materia orgánica que tiene. Ésta le da el característico color negro a la tierra. La
materia orgánica mejora la absorción de agua y su drenaje, hace más esponjoso el
suelo y le otorga nutrientes a las plantas. Además, retiene los nutrientes para que
no se laven con la lluvia. Por otro lado, la materia orgánica en descomposición es la
que alimenta a todos los microorganismos, lombrices y demás seres del suelo,
potenciando su actividad tan benéfica. Entre más materia orgánica hay en el suelo,
más rico y sano será éste. Es por todo esto que siempre debemos aumentar la
cantidad de materia orgánica de nuestro suelo, lo que veremos en la tercera sesión
de Abonado y mejoramiento del suelo.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Textos de profundización
específicos” encontrarás el texto “Manejo sostenible de suelos” que habla sobre los
principios para mantener la fertilidad de los suelos.

15
3. Abonado y mejoramiento del suelo

Como se vio en la sesión anterior, el suelo es lo más importante y nuestros


esfuerzos hay que dirigirlos a mejorarlo. Un suelo sano se traduce en plantas sanas y
fuertes. A continuación se describen los principales métodos para mejorarlo.

 Güano

El güano es uno de los principales abonos que debemos utilizar, es


medianamente rico en nutrientes y es un gran aporte de materia orgánica. Podemos
conseguir güano de oveja, caballo, vaca, chancho o pollo. Son todos parecidos, a
excepción del güano de pollo, que más adelante se hablará de él.
El güano podemos conseguirlo fresco o maduro, y mezclado con la cama del
animal (aserrín o paja) o puro. El güano ideal es el maduro y puro, pero todos
servirán. Entre más sacos de güano podamos conseguir mejor.
Para aplicar el güano podemos hacerlo de varias maneras. La principal
forma es esparcirlo en la superficie del bancal antes de la labranza, así se integrará
solo cuando labremos el suelo. Siempre debe integrarse antes de la siembra y
esperar a que se descomponga medianamente antes de sembrar o si no quemará
las plantas. Entre más fresco esté el güano más deberemos esperar, y entre mejor lo
mezclemos con el suelo menos tiempo será. En general debemos esperar entre una
semana si está bien maduro y un mes si es que no lo está. Con dos centímetros de
güano podremos ver un efecto en el suelo y con cinco podremos ver un efecto
notable. Hay plantas a las que les gusta el güano poco maduro como a las papas y
otras que no lo toleran, como las zanahorias. Por esto, no echaremos güano todos
los años en el mismo lugar; todo dependerá de nuestra rotación, como veremos
más adelante. También podemos aplicarlo dejándolo en la superficie simplemente,
y si nuestro suelo es sano, las lombrices se encargarán de enterrarlo.
El güano de pollo es muy
concentrado por lo que no
aplicaremos más de un
centímetro y dejaremos que se
descomponga muy bien.

 Fabricación de compost

El compost es parecido al
güano, sólo que lo debemos
fabricar nosotros, para esto
utilizaremos cualquier resto
vegetal, ya sean restos de la Montículo de compost (Jeavons, 2002)

16
huerta, de la cocina, hojas secas o pasto recién cortado. Todo sirve.
Para fabricarlo podemos hacerlo en montículos o dentro de grandes
cajoneras o tambores.
El compost es el producto de la descomposición aeróbica de la materia
orgánica por medio de los microorganismos. Es como hacer tierra de hoja en la casa.
Entonces, como vemos en la figura de abajo, necesitaremos tres materiales
principales. El primer ingrediente son los restos secos, o carbonados, que son más
leñosos o amarillos. El segundo ingrediente son los restos frescos, o nitrogenados,
que son verdes, poco leñosos y blandos. El tercero, que se utiliza en menor
cantidad, es el inóculo, en donde vienen los microorganismos para activar la
descomposición.
El montón de compost necesita humedad y aireación para descomponerse
por lo que debemos mantenerlo mojado y voltearlo cada cierto tiempo. Para
formarlo lo haremos por capas, como se ve en la figura arriba, intercalando uno a
uno los ingredientes, así los tres estarán en contacto.

Ingredientes para el compost (Elaboración propia)


 Cubiertas (Mulch)

Las cubiertas o mulch, es una forma de imitar a la naturaleza. Si nosotros


observamos, el suelo nunca está descubierto naturalmente, o tiene pasto, o pasto
seco, u hojas caídas de los árboles. Estas cubiertas naturales cumplen la función de
proteger y alimentar al suelo. Si dejamos la tierra desnuda se expone a la erosión y
podríamos perderla. En cambio, si está cubierta por los cultivos, por paja u hojas
secas, el suelo se protege y alimenta. Los beneficios de las coberturas son varios:

 Protege al suelo de la erosión


 Evita que se pierda tanta humedad del suelo
 Evita que crezcan tantas malezas
 Aumenta la infiltración de agua

17
 Son refugio para muchos insectos
 Alimenta a las lombrices y otros seres, activándolos

De a poco, la cubierta se irá descomponiendo y se integrará al suelo,


aumentando la cantidad de materia orgánica y abonándola.
La cubierta desaparecerá con los meses y tendremos que reponerla. Las
cubiertas de leguminosas como la alfalfa se descomponen más rápido y son más
nutritivas, en cambio, las de hojas secas duran más y son menos nutritivas.

 Abono verde

Le llamaremos abono verde a cualquier cultivo que instalemos con el


objetivo de integrarlo al suelo y no para consumirlo. El objetivo de esta práctica es
mullir naturalmente la tierra con las raíces de este cultivo y nutrirla al enterrarlo y
descomponerse.
En general estos cultivos los instalaremos en la temporada fría, cuando la
huerta no es tan productiva. De esta manera evitaremos tener la tierra desnuda y
aumentaremos su fertilidad.

Tipos de abonos (Elaboración propia)

Los mejores abonos verdes son las leguminosas como las habas y arvejas ya
que fijan nitrógeno del suelo y luego lo liberan al suelo al descomponerse. Pero esto
no es estricto, ya que cualquier especie que pueda crecer en invierno será útil,
aunque sean malezas. Podemos cultivar avena, centeno o mostaza también.
Siempre es mejor tener un cultivo que no tenerlo, así estos capturan los nutrientes
que se perderían y los liberan después. Si dejaremos un terreno sin cultivar durante

18
la temporada cálida, también podemos cultivar un abono verde, que será aún más
beneficioso que en invierno.
En general, uno labra el suelo antes de la primavera, y esta misma labranza
podemos aprovecharla para enterrar el abono verde que creció durante el invierno.
Nunca debemos enterrarlo después de que florezca.
Apenas se haya cosechado en otoño, uno debe sembrar el abono verde.

 Salinidad

Las sales disueltas en el suelo afectan negativamente a las plantas. Si bien,


hay plantas más resistentes a la salinidad que otras, todas disminuyen su
productividad en ambientes más salinos.
Estas sales pueden presentarse naturalmente en el suelo o ser integradas a
través del riego (que siempre contiene sales, a diferencia de la lluvia), o a través de
fertilizantes o compost.
Los síntomas de exceso de salinidad son parecidos a la falta de agua, pero
también puede incluir la muerte de las puntas de las hojas como le sucede a los
paltos.
Por esto, hay que tomar precauciones como el de no integrar sales al
compost. Si sospechamos alta salinidad en el suelo se puede realizar un lavado de
sales, lo que consiste en un riego muy abundante el cual baje las sales del suelo a
lugares más profundos.

 pH y encalado

En la zona centro de Chile este no es mayor problema, siendo los suelos de


un pH neutro. La acidez de los suelos limita el crecimiento de la mayoría de los
cultivos, disminuyendo las cosechas, pero es fácil de corregir. Si bien lo ideal es
medir el pH de nuestro suelo, no es totalmente necesario. Para neutralizar el pH y
combatir la acidez se puede utilizar la cal agrícola o las cenizas. La cal es barata y la
ceniza es fácil de conseguir. Aplicando medio kilo de cal o cenizas por metro
cuadrado cada tres años podremos mejorar el suelo poco a poco. Puede que se
llegue a necesitar más o tal vez menos. Para aplicarla se debe esparcir bien pareja
en la superficie y luego mezclarla con los primeros 20 cm de suelo. También se
puede hacer sin integrarla y dejándola en la superficie, aunque lo ideal es hacerlo
cuando no haya ningún cultivo. Las cenizas que se utilicen no pueden haber estado
expuestas a la lluvia. El pH que queramos lograr dependerá en parte del cultivo que
queramos instalar, ya que todas las plantas son distintas, como veremos en la
siguiente sesión de El ciclo y las partes de la planta.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl

19
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Textos de profundización
específicos” encontrarás varios textos en la división “sobre abonos y compost”.
Además, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Tablas e ilustraciones”
encontrarás en forma resumida lo que puedes compostar, los tipos de abono y más.

20
4. El ciclo y las partes de la planta

 Partes de la planta y su función

Las plantas tienen diferentes órganos y cada uno cumple una función.
Algunas tienen órganos modificados como las papas y zanahorias, que hace que
cumplan otra función extra. Para poder cultivarlas necesitamos conocerlos e
identificarlos. Sus órganos principales son:

 Hojas: Su función es
hacer fotosíntesis y alimentar a
la planta
 Raíces: Anclan la planta
al suelo y la proveen de agua y
nutrientes
 Tallos y/o tronco:
Sostienen a la planta y
trasladan los nutrientes y el
agua de un lugar a otro
 Yemas: Tienen células
madre, que son capaces de
crear nuevos tallos y raíces.
 Flor: Son para
reproducirse y producir frutos
 Fruto: Contienen las
semillas que serán esparcidas
 Tubérculos (papas),
rizomas y bulbos: Almacenan
energía para crear otra planta
nueva o florecer después.

 El ciclo de la planta

Hay diferentes tipos de plantas, con diferentes ciclos, como veremos más
adelante. En general, las plantas que cultivaremos son anuales y su ciclo es:

 Germina la semilla
 Crece la planta
 Florece
 Produce frutos
 Bota los frutos liberando nuevas semillas (y en general muere)

21
 El ciclo se repite germinando las semillas liberadas

Las plantas que cultivaremos cumplen este ciclo entre 3 y 8 meses.

 Tipos de plantas

Pensando en el cultivo, clasificaremos las plantas en tres tipos según cuánto


tiempo viven.

 Plantas anuales: Luego de cumplir todo su ciclo, mueren, liberando los


frutos. Ej: lechuga, trigo, maíz, acelga, avena, zapallo. Viven una temporada.
 Plantas perennes: Luego de liberar los frutos no mueren, continuando su
crecimiento y floreciendo nuevamente la temporada siguiente. Ej: Todos los árboles,
cibullette, romero.
 Plantas bianuales: Son plantas, que en general, cumplen su ciclo en dos
años. La primera temporada crecen y juntan reservas y la segunda temporada
consumen las reservas para florecer. Ej: zanahoria, cebolla, rabanito, betarraga.

Esta clasificación suele ser un poco confusa porque hay plantas perennes
que cultivamos como anuales, como el tomate y el ají, ya que mueren por el frío en
invierno. Otras plantas que dejan tubérculos como la papa y el topinambur también
son perennes, solo que la parte aérea muere dejando reservas bajo tierra para
rebrotar la temporada siguiente. Este tipo también las cultivamos como anuales, ya
que cosechamos sus tubérculos o papas. Todas las plantas tienen distintas
estrategias para sobrevivir, competir y reproducirse.

22
 Estacionalidad

Los distintos ciclos de las plantas obedecen a las estaciones del año,
prefiriendo crecer en una estación, florecer en otra y así depende de cada planta.
Debemos conocer estas preferencias para saber cuándo sembrar cada planta.
Hay plantas que les gusta vivir su etapa de crecimiento en invierno para
florecer en primavera, como el trigo, la avena y las habas. Otras prefieren crecer en
primavera y verano para florecer en otoño, como el maíz, el zapallo y los porotos.
Por esto, hablamos que hay plantas que son de estación fría, que resisten heladas y
buscan crecer en invierno, y otras de estación cálida, que no resisten las heladas y
las semillas no germinan si no hace calor.
Esta división no es tan estricta, y podemos forzar las plantas a crecer en
otras estaciones o protegerlas del frío, como en los invernaderos. Además, hay
plantas con ciclos cortos que duran una sola estación. Y por último, hay variedades
con distintos ciclos dentro de una misma especie.
En general, la huerta tradicional se divide en una época de gran producción
y trabajo; entre septiembre y mayo más o menos, y otra época en que todo está en
latencia, no hay floraciones y todo crece muy lento, que sería de junio a agosto. En
general, durante la temporada cálida cultivaremos las principales verduras y
durante la fría cultivaremos abonos verdes.

 El cultivo según el órgano a cosechar

Teniendo en cuenta la estacionalidad y los distintos ciclos de las plantas


deberemos tomar la decisión de cuándo cultivar cada verdura según el órgano a
cosechar. Por ejemplo: si queremos cultivar zapallo nos interesa el fruto, que sale a
fines del verano o en otoño, por lo que debemos sembrarla en primavera, ojalá
cuando no hayan heladas, ya que no las resiste. Nosotros queremos que esta planta
cumpla todo su ciclo. En cambio, si queremos cultivar lechugas, no nos interesan sus
semillas, sino sus hojas. No queremos que la lechuga cumpla todo su ciclo, de
hecho, ojalá se mantenga en su etapa de crecimiento y nunca florezca. Como
sabemos que la lechuga florece (se sube) con las altas temperaturas, deberemos
cultivarla desde principios de la primavera.
Un tercer ejemplo son la coliflor o el brócoli. De ellos queremos comer sus
flores, por lo que debemos cosecharlos antes de que esas flores se conviertan en
frutos. Tampoco queremos que cumplan su ciclo completo.
Entonces, para que las plantas realicen su ciclo cuando nosotros queramos
deberemos sembrarlas en la fecha adecuada, como veremos en la siguiente sesión
de Multiplicación y asentamiento de cultivos.
Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:
www.cultivatuhuerto.cl

23
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Tablas e ilustraciones”
encontrarás calendarios de siembra, que te ayudarán a entender algunas diferencias
en los ciclos de las plantas.

24
5. Multiplicación y asentamiento de cultivos

 Tipos de semillas

El método de siembra que realizaremos dependerá principalmente del tipo


de semilla que estemos ocupando. Las semillas grandes (1 cm o más) tienen más
reservas energéticas, lo que hace que germinen con mayor fuerza y no necesiten
tantos cuidados. Por otro lado, las semillas pequeñas (1 mm) tienen menos reservas
energéticas, lo que hace que requieran más cuidado para hacerlas germinar.
Otro criterio de clasificación es si son semillas de temporada fría o
temporada cálida. En general, las de temporada fría son capaces de germinar todo
el año, como la avena. Por otro lado, las de temporada cálida solo germinan si hay
una temperatura mínima, como los porotos.

 Preparación de la cama de semillas

Para que las semillas puedan germinar fácilmente se necesitan varias


condiciones:

 Estar bien enterradas, pero no más de tres veces su largo


 Mantenerse húmedas
 No tener grandes obstrucciones como terrones o palos sobre ellas, para
poder emerger.
 No ser muy antiguas
 Que haya la temperatura mínima para su germinación

25
Teniendo en cuenta estas condiciones y respetando las fechas adecuadas,
podemos sembrar. Siempre hay que recordar que una semilla grande es menos
exigente que una pequeña. Para sembrar ocuparemos uno de los dos métodos
clásicos; sembrando directamente en el suelo donde crecerá la planta, o preparando
almácigos para luego trasplantarlas. La elección del método dependerá de nuestros
intereses, tiempo e instalaciones disponibles, cantidad de semilla que poseamos y
tipo de planta.

 Siembra directa

En general, vamos a sembrar de forma directa las semillas grandes como los
porotos. De todos modos, todas las semillas se pueden sembrar de esta manera.
Hay varias formas de hacerlo.

 Si son semillas grandes podemos


hacer hoyos a la distancia adecuada y
poner dos semillas en cada uno
 Se pueden hacer surcos con el
azadón o pala y tirar las semillas dentro de
él, para luego taparlas, como la figura de la
derecha.
 Se pueden esparcir al voleo sobre el
bancal y luego echar una capa de compost
o tierra sobre ellas
 Si utilizamos cobertura y las
semillas son grandes, podemos no correr la
Siembra por surcos (Seymour, 1981)
cobertura y hacer hoyos a través de ella y
luego taparlas.
 Si utilizamos cobertura y las semillas son pequeñas, deberemos sacar la
cobertura, mullir bien los primeros 5 cm de suelo y luego sembrarlas. Podremos
reponer la cobertura cuando las plantas tengan unos 7 cm de alto.

Luego de la germinación de las semillas, cuando las plantas tengan unos 5 cm,
deberemos ralear, esto significa sacar las plantitas sobrantes para dejar las
definitivas a la distancia adecuada.

 Preparación de almácigos

La otra técnica, muy utilizada, son los almácigos. Estos pueden construirse
con cajones o consiguiendo las bandejas de plumavit que están divididas en
cuadraditos. Los almácigos debemos dejarlos en un lugar protegido de los pájaros y
el frío, pero que les llegue luz, aunque no en exceso. Podemos construirles un mini

26
invernadero con nylon o dejarlos dentro de la
casa, al lado de una ventana de orientación
norte. La tierra que utilizaremos debe ser de
buena calidad, ojala una mezcla mitad compost,
mitad tierra superficial. Deberemos harnear la
mezcla con una malla para sacarle los pedazos
grandes. Una vez que las plantas tengan unos 7
cm las trasplantaremos al lugar definitivo. Los
beneficios de los almácigos son varios:

 Permite adelantar las fechas de siembra


 Ahorrar la cantidad de semillas a utilizar,
evitando ralear
 Mayor control y sobrevivencia de los
plantines
 Menor tiempo gastado en desmalezar
 Se puede seleccionar los mejores
ejemplares para trasplante

De todas maneras hay varios inconvenientes,


algunos son:

 El trabajo extra de preparar la mezcla


para llenar las bandejas
 Es más difícil mantener la humedad en
las bandejas que en el suelo
 El trabajo extra que significa hacer el
trasplante
 Algunas plantas se ven perjudicadas,
como la zanahoria.

Luego de hacer los almácigos hay que


trasplantar los plantines. Se puede hacer a raíz
desnuda o sacándola con su pedazo de tierra.
Siempre preferiremos la segunda opción. Para Método de trasplante (Jeavons, 2002)
esto, simplemente se hace un hoyo y se
entierra el plantín, se tapa con tierra y se presiona suavemente alrededor, como
muestra la figura de la derecha. Finalmente, se riega en abundancia.

27
 Reproducción vegetativa

Además de la siembra, existe otro método de reproducción, utilizado para


plantas perennes. En vez de utilizar semillas usaremos un órgano de la planta como
una raíz gruesa, un bulbo o una estaca. Utilizaremos este método para multiplicar
frutales, berries, algunas plantas
aromáticas, cibullette, etc.
Para reproducir frutales,
berries, romero y otros arbustos
podemos cortar una rama nueva
de unos 20 cm, sacaremos las
hojas de la mitad inferior y la
enterraremos en el sustrato.
Siempre deben quedar al menos
dos yemas o nudos bajo tierra ya
que de ahí saldrán raíces luego de
algunas semanas, obteniendo así
un nuevo ejemplar.
Para reproducir menta,
desenterraremos una parte de la
planta y utilizaremos una de las raíces
gruesas que tiene. Enterraremos en Reproducción por estacas (Seymour, 1981)
el sustrato esa raíz y luego brotará.
Para reproducir cibullette desenterraremos la mata y separaremos los
pequeños bulbos que tiene, los volvemos a plantar separadamente y brotarán.

No solo bastará con poner el cultivo en el lugar que queramos. Durante el


crecimiento de ellos deberemos realizar varias labores, las que veremos en la
siguiente sesión de Labores culturales.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Manuales generales
completos”, En los textos de Seymour, Jeavons y Pia, encontrarás capítulos enteros
dedicados especialmente la multiplicación y asentamiento de cultivos.

28
6. Labores culturales

 Desmalezado

El desmalezado es una labor típica en la huerta y nos tomará mucho tiempo,


en especial cuando sea verano. El objetivo de sacar las malezas, o cualquier planta
que crece donde no queremos que crezca, es evitar que éstas ahoguen a nuestros
cultivos, compitiendo por los nutrientes, agua y luz. Desmalezar no siempre será
necesario, por ejemplo; cuando nuestros cultivos estén grandes las malezas no le
harán daño, o cuando no haya cultivos en el bancal, o solo tengamos un abono
verde tampoco lo harán. Es un trabajo muchas veces evitable.
La principal forma de desmalezar es previniendo, así disminuiremos el
ingreso de malezas y su posterior trabajo de extracción. Hay varios métodos para
prevenir:

 Mantener los caminos bien desmalezados


 Poner tablas enterradas que eviten que malezas perennes entren de los
caminos a los bancales
 Nunca dejar que una maleza florezca dentro ni cerca de nuestra huerta.
 Una labranza anual enterrará las malezas perennes, pudriéndose y
deteniendo su crecimiento.
 Si traemos güano o compost de otro lugar, siempre hacerlo del mismo, ya
que siempre traeremos semillas de malezas nuevas en ellos.
 Si es posible, solarizar el compost o güano externo. Esto se hace en verano,
esparciéndolo en una capa de 5 cm sobre un nylon y cubriéndolo con un nylon
trasparente durante cinco días bajo el
sol.
 Las cubiertas evitan la
emergencia de muchas malezas.
 Los cultivos sembrados
densamente evitan malezas al no
dejar espacio entre ellos

Por más medidas preventivas


que tomemos siempre llegará alguna
maleza y tendremos que extraerlas
tarde o temprano. Entre más
pequeñas estén las malezas más fácil
será. Para esta labor existen pocos
Desmalezado del bancal (Jeavons, 2002)
métodos:

29
 Extracción con la mano, tirándolas y que ojalá salgan con sus raíces. Así
muestra la figura de la derecha.
 Picar la tierra con el azadón o pala, teniendo cuidado de no dañar nuestros
cultivos.

 Riego

Si nuestro suelo es rico en materia orgánica y está protegido por una


cubierta, perderá poca agua y podrá soportar más tiempo sin regarse. El objetivo es
mantener la tierra siempre húmeda, pero no en exceso. Para regar podemos hacerlo
por inundación a través de surcos alimentados por un canal, como en muchos
campos. Pero en general, regaremos con manguera, y para esto debemos tomar en
cuenta:

 Hacerlo con un chorro fino y esparcido, lo más parecido a la lluvia, como


muestra la figura de abajo, para que no erosione la tierra ni dañe los cultivos.
 Entre más pequeñas las plantas (o si son semillas aún) más seguido y menos
abundante debemos regar. Manteniendo siempre húmeda la capa superficial.
 Entre más maduras y grandes las plantas menos seguido y más abundante
debemos regar, así obligaremos a las raíces a ir en profundidad, evitando que los
cultivos compitan entre ellos y aprovechando más el terreno. La capa superficial se
secará debes en cuando, pero en la profundidad siempre estará más húmedo.
 Si se seca mucho el terreno bajarán los rendimientos
 Si regamos mucho dejaremos sin aire el suelo, mataremos los
microorganismos que viven en él y ahogaremos las raíces de los cultivos.

Riego del bancal (Jeavons, 2002)

 Poda

No trataremos en este taller la poda de frutales, pero sí la de algunas


hortalizas. Son muy pocas las hortalizas que hay que podar. Los objetivos de la poda
pueden ser:

30
 Forzar a la planta a que utilice sus nutrientes en producir frutos y no hojas.
 Engañar a la planta evitando su maduración y floración, para que siga
produciendo hojas.
 Eliminar la parte aérea y tapar la subterránea para que la planta resista el
invierno y rebrote en primavera.

En el caso de los tomates podemos ir sacando todos los tallos secundarios y


dejando sólo el central, para estimular la producción de frutos.
Para la albahaca, el cilantro, el perejil y las hierbas siempre evitaremos que
florezcan porque o si no, dejan de producir hojas. Para esto las podaremos
periódicamente a unos 5 - 10 cm de la base, siempre dejando al menos tres yemas o
nudos. Así, la planta se mantiene en su etapa de crecimiento y no entra a la
floración.
Para los ajíes y pimentones los podaremos en otoño en la base de la planta.
Luego cubrimos con tierra y paja para proteger lo que queda de las heladas. La
planta rebrotará con más fuerza en la primavera.

 Tutores

Muchas plantas que cultivamos no serán


capaces de sostenerse por sí solas o son
trepadoras como los porotos, por lo que
deberemos ponerle palos u otra cosa para
sostenerlas. Todo dependerá de los materiales
que tengamos a mano. Por ejemplo, como vemos
en la figura de la derecha, las varas de coligües
son muy útiles.

 Cosecha

El método de cosecha dependerá del


órgano de la planta que nos interesa.

 Los frutos como los tomates, ajíes y


zapallos los sacaremos con la mano y/o tijeras, y
siempre deben quedar con un pedazo del palito o
pedúnculo que los sostiene
 Las hojas de lechuga, acelga y parecidas Tutores para porotos (Seymour, 1981)
podemos ir cosechándolas de a poco, sacando
las más exteriores

31
 Los bulbos y raíces como los ajos, cebollas y zanahorias los arrancaremos
tirando de la parte aérea de la planta
 Los tubérculos como las papas y topinambur tendremos que desenterrarlos
escarbando en la tierra con el azadón, pala u horqueta. Siempre cuidando de no
hacerles daño
 Las semillas como los porotos y arvejas deberemos desgranarlas si es
necesario, separándola de los frutos

 Cosecha y almacenaje de semillas

Si bien podemos comprar constantemente semillas, siempre será mejor si


conseguimos las propias. Para esto deberemos dejar que la planta termine su ciclo
completo de vida, hasta que el fruto esté bien maduro.
Para obtener semillas debemos extraerlas de la mayor cantidad de
ejemplares posibles, y que sean mínimo cinco plantas distintas. Debemos elegir
ejemplares sanos y productivos para que la
descendencia no herede defectos ni
enfermedades.
Una vez cosechadas las semillas bien
maduras deberemos limpiarlas y secarlas bien
sobre un papel en un lugar cálido, ventilado y sin
luz directa. Cuando ya se encuentren bien secas,
luego de algunas semanas, las guardamos en
bolsitas o frascos en un lugar seco y algo frío,
protegido de la luz. Podremos utilizar estas
semillas hasta por cuatro años, aunque cada vez
germinarán menos. Si son buenas, deberían
germinar al menos el 85% de las semillas.
Seleccionar las mejores semillas nos servirá para Almacenaje de semillas en frasco
evitar algunas enfermedades, como veremos en la (Jeavons, 2002)
sesión siguiente de Control de plagas.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Textos de profundización
específicos” encontrarás el manual de Kogan para reconocer malezas, además,
sobre el resto de las labores también puedes revisar en la sub-sección “Manuales
generales completos”, ahí, en los textos de Seymour, Jeavons y Pia encontrán más
información.

32
7. Control de plagas

 Definición de plaga

Llamaremos plaga a
cualquier ser vivo, que al
haber aumentado su
población de forma
exagerada, pone en gran
riesgo la cosecha de algún
cultivo. Ningún ser vivo es
plaga solo por existir.
La agricultura tradicional
usa y abusa de los
pesticidas, poniendo en
riesgo la salud de los
trabajadores, los habitantes
del campo y los consumidores. El dañino uso de pesticidas (Pía, 2005)
Además, rompe todo el equilibrio ecológico de la naturaleza, que mantiene a cada
especie bajo control. Y para peor, los pesticidas no solo matan a las plagas, también
matan a los seres benéficos que controlan a las plagas y otros como las lombrices,
que son tan útiles. Cualquier tonto puede llegar, rociar un veneno y matarlo todo,
pero hay que ser observadores e inteligentes para ocupar métodos más eficaces,
menos dañinos para el medio ambiente, más baratos y saludables.

 Suelo sano

Como hemos insistido en todo el taller, en el suelo sano está la principal


respuesta. Un suelo sano produce plantas sanas, que serán resistentes a las plagas.
Además, un suelo sano está en equilibrio y lleno de vida, la misma vida que
eventualmente controlará la población de la plaga.

 Diversidad económica

Tanto en la agricultura tradicional como en la orgánica, por más trabajo que


se haga en prevenir o controlar una plaga, algún cultivo será atacado y tal vez
perdido. Como esto es casi inevitable, un medio para evitarlo es cultivar la mayor
diversidad de plantas posibles. Una plaga jamás atacará a todas las especies, e
incluso, tampoco atacará a todas las variedades dentro de una especie. Por eso, es
importante cultivar una gran diversidad de verduras y de variedades de estas

33
mismas. Así, si ataca una plaga sólo perderemos una parte de la producción y no
toda ella.

 Biodiversidad, refugios y plantas aromáticas

La naturaleza
es un sistema
equilibrado, en que
todos los seres se
relacionan entre sí.
Algunos se comen a los
otros, otros se ayudan,
se ocupan de refugio
entre ellos, etc.
Entender esta
complejidad que se
muestra en la figura de
la derecha es difícil,
pero sabemos que
para mantenerla
debemos cuidar a cada
ser. La diversidad de
La diversidad y cantidad de seres en la naturaleza (Sullivan, 2007)
plantas que tengamos
es clave, sean útiles o no. Debemos tener plantas de todos los tipos, incluyendo
arbustos. Éstos serán útiles como refugio para los depredadores de las plagas. Tener
siempre plantas en floración también será útil para atraer insectos benéficos.
Las plantas aromáticas atraen con su olor a otros insectos también benéficos y
espantan a algunos perjudiciales.

 Dinámica de plagas, enfermedades y control de fechas

En la huerta siempre será muy importante observar, en especial las fechas


en que van ocurriendo los sucesos. Por ejemplo, las papas sembradas más tarde son
más susceptibles al ataque del tizón. Así podremos ir controlando las fechas,
evitando, dentro de lo posible, que coincidan con el período de vida de la plaga. En
general, en los meses cálidos abundan los insectos y en los fríos no.

34
 Control manual y uso de preparados

Una vez teniendo el suelo sano, mantener la diversidad económica y


ecológica, instalando refugios para los depredadores, plantas aromáticas y flores, y
controlando las fechas de cultivo, aún así, habrá ataques de plagas. Esto no significa
el fin de la cosecha, ya que muchas plagas podremos controlarlas manualmente,
solo debemos sacarlas cuando estén expuestas. Aquí damos unos ejemplos:

 Si los repollos u otra planta está siendo comida por orugas, podemos
sacarlas con la mano.
 Si los caracoles y babosas se están comiendo las lechugas, acelgas u otro
cultivo, debemos salir varias noches a buscarlas y sacarlas.
 Si una planta está llena de pulgones, traemos la manguera y con un chorro
fuerte, pero que no dañe a la planta, los tiramos de ella.
 En algunos casos, con una simple sacudida los pulgones u otro insecto
pueden caer.
 Podemos preparar una lavaza y rociarla sobre las plantas, ésta provocará
que los insectos resbalen y caigan. No hay que ocuparla en exceso.

En el caso de ataque de enfermedades como virus y bacterias hay que sacar


las plantas afectadas y botarlas, sin integrarlas al compost.

Finalmente, el último método para prevenir plagas y enfermedades, en


especial hongos y pudriciones, es el de llevar una estricta rotación de cultivos y una
adecuada asociación de éstos. Esto lo veremos en la sesión de Rotaciones, cultivo
combinado y planificación.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Textos de profundización
específicos” encontrarás gran cantidad de información sobre biopreparados,
plantas repelentes y otras técnicas.

35
8. Rotaciones, cultivo combinado y planificación

 Importancia de las rotaciones

Las rotaciones consisten en ir cultivando diferentes plantas en el mismo


lugar, evitando repetirlas de un año para otro. En general, consisten en planes de
cuatro años.
Hay varias razones para hacer esto:

 Muchas de las enfermedades son transmitidas a través del suelo, por lo que
si repetimos un tipo de cultivo año tras año es muy probable que estas
enfermedades reaparezcan.
 Las plantas extraen distintos nutrientes y en diferentes cantidades desde el
suelo, por lo que si las vamos rotando no sobre explotaremos ninguno, ni dejaremos
alguno sin utilizar.
 Las leguminosas aumentan la cantidad de nitrógeno en el suelo, siempre
será bueno que sean parte de la rotación.
 Algunas plantas, como las papas, al desenterrarlas obligan a perturbar
mucho el suelo, por lo que no es bueno repetir esta acción tan repetidamente.

Teniendo en cuenta estos criterios, elaboraremos nuestro plan de rotación


siguiendo estas normas:

 Esperaremos cuatro años para repetir una familia de plantas en el mismo


lugar
 Haremos una rotación que primero tenga una leguminosa (donante de
nutrientes), luego una planta de alta extracción, luego una de mediana extracción y
para terminar, una de baja extracción, empezando nuevamente con las
leguminosas.
 Si echaremos cal o cenizas, lo haremos cada cuatro años, antes de las
leguminosas
 Evitaremos aplicar güano justo antes de las zanahorias

Para saber la familia de cada hortaliza y qué nivel de extracción de


nutrientes hacen, podemos revisar la tabla general de cultivos, adjunta al final.
Se adjunta también una tabla de rotaciones, que propone qué cultivo poner
antes o después de cada especie.

36
 Beneficios y perjuicios del cultivo combinado

El cultivo combinado consiste en asentar cultivos juntos, ya sea uno al lado


del otro, intercalados, en zig-zag, o como lo deseemos. Hay plantas que prefieren
estar juntas, otras que se perjudican de estarlo y otras que no tienen ningún efecto.
Hay dos tipos de relaciones que pueden entablar las plantas: física o
química. La primera puede ser sirviendo de tutor, dándole sombra o dejando
espacio a otro cultivo. La segunda, consiste en el efecto que generan sobre otros
cultivos las sustancias químicas, que liberan las plantas en el suelo y el aire. Es así,
como unas plantas pueden proteger o estimular el crecimiento de otra. Para decidir
qué cultivos combinar podemos revisar la tabla de alelopatías. También podemos
asociarlas según la profundidad de raíces que poseen. Si cultivamos una planta con

raíces superficiales no competirá directamente con una de raíces profundas, como


vemos en la figura de abajo. En la tabla general se indica la profundidad de las raíces
de cada cultivo.

 Doble cosecha anual

Muchos cultivos los cosecharemos en 3 o 4 meses, lo que nos da tiempo


suficiente para que en el tiempo restante del año podamos poner otro cultivo. Así,
podríamos obtener dos cosechas al año en el mismo lugar. En este caso, tendríamos
que cultivar primero una especie de temporada fría y luego otra de temporada
templada o cálida. Si sus períodos de crecimiento se sobreponen, podemos
adelantar la segunda especie sembrándola en almácigos, cuando la primera aún no
ha sido cosechada.

37
 Planificación, cálculos y registros

Para poner en práctica las rotaciones y la doble cosecha anual, debemos


planificar qué haremos en cada lugar del huerto. Para esto, deberemos tener en
cuenta los cultivos de los años anteriores.
Llevar un registro es muy útil, porque acordarse qué se cultivó en cada lugar
los últimos cuatro años suele ser una tarea difícil.
Al igual que la planificación, deberemos calcular, antes de cada siembra,
cuántas plantas caben en el lugar que queremos utilizar, o cuántas necesitaremos
para el consumo del hogar. De esta forma, determinaremos la cantidad de semillas
que necesitamos y sabremos cuántos almácigos preparar. Par saber estos datos,
tenemos aproximaciones de las distancias entre plantas y sus posibles rendimientos
en la tabla general de cultivos.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Textos de profundización
específicos” encontrarás más información sobre rotaciones de cultivos y cultivo
combinado.

38
9. Cultivo en contenedores

 La falta de suelo

Lamentablemente, al vivir en una ciudad nos vemos enfrentados al gran


problema de la falta de suelo disponible para cultivar. Prácticamente todo el suelo
posee algún tipo de construcción en él y muchos de los que no la tienen
simplemente les llega muy poca luz para poder ser cultivados. Este problema no es
insolucionable y podemos superarlo estableciendo nuestros cultivos en

contenedores que los sostengan. Por ejemplo, se pueden hacer cajoneras sobre la
azotea de un edificio o poner maceteros en la terraza de un departamento y así,
estaremos habilitando estos espacios para nuestros cultivos.

Antes de construir, comparar o conseguir cualquier tipo de contenedor para


nuestros cultivos debemos tomar en cuenta las grandes desventajas que tiene este
sistema de cultivo en comparación con cultivar directamente en el suelo:

 El volumen de suelo explorable para las raíces se reduce


considerablemente, por lo que aumenta la competencia entre plantas
 Las temperaturas oscilan más que en el suelo, por lo que en verano serán
más altas y en invierno más frías, estresando más a las plantas. También varían más
dentro del mismo día.
 Los nutrientes se lavan fácilmente al drenarse junto al agua sobrante
 Requieren infraestructura adicional e importación de sustrato
En consecuencia:

39
 Tendremos menos producción por metro cuadrado
 Requerirán riego más frecuente
 Requerirán mayor fertilización
 Necesitan una inversión inicial mayor
A pesar de todo, posee algunos beneficios:
 Son menos susceptibles a la invasión de malezas
 Pueden disponerse de tal forma que aprovechen más luz solar
 Si lo permiten, pueden trasladarse a un lugar protegidos del sol o las heladas
cuando sea necesario.
Teniendo en cuenta estos factores hay que analizar si es conveniente
instalarlos. De todas formas, se recomienda que si se posee el espacio disponible en
el suelo, jamás debería reemplazarse a este por contenedores. O si se posee más
suelo del que podemos ya cultivar, tampoco se utilice contendores. Esto, a
excepción de la multiplicación de frutales, la propagación por almácigos o algunos
cultivos de invernadero.

 Principios básicos para la elección de un contenedor:

Para enfrentar los problemas mencionados anteriormente se recomienda

40
seguir los siguientes principios:
 Debemos utilizar el mejor sustrato posible, rico en materia orgánica, vida y
nutrientes (revisar sesión 2 de suelo), para aprovechar al máximo cada cm³ del
contenedor.
 Entre más grande sea el contendor mejor
 Debemos asegurar el mejor drenaje posible. El agua sobrante tiene que ser capaz
de salir del contenedor
 El contenedor debe estar libre de agujeros por los que se pueda salir el sustrato
 Los materiales a ocupar deben ser resistentes a la humedad y la pudrición, como
el plástico, la madera impregnada o tratada, cerámica, etc…
 Los contenedores, en especial si van suspendidos en el aire, deben ser
resistentes y estar bien anclados. El sustrato húmedo puede llegar a pesar gran
cantidad.
 Los contendores de paredes más gruesas y materiales más aislantes pierden
menos agua y tienen menos variación en su temperatura

 Tipos de contenedores:

Primero tendremos que diferenciar entre contenedores móviles y


contenedores fijos. Los contenedores móviles lo obligan a uno a utilizar sustratos
más livianos y volúmenes más pequeños con el fin de que sean efectivamente
transportables.
Por otro lado, tenemos los contenedores verticales o suspendidos en el aire y los

41
contenedores de piso. Los primeros pueden aprovechar más la luz en algunos
casos, pero nuevamente tienen limitaciones de peso y con esto de volumen.
Finalmente tendremos contenedores de distintos materiales como piedra,
cerámica, acero, madera y plástico. Si utilizamos madera, ésta tiene que estar bien
tratada.

 Orientación y posicionamiento de los contendores

Al igual como se vio en la sesión 1, hay que tener especial atención con que
a los cultivos les llegue la mayor cantidad de sol posible. Es por esto que si, por
ejemplo, pondremos recipientes colgados en un muro, el mejor muro será el de
exposición norte y el peor (llegando al nivel de ser improductivo) será el muro de
exposición sur.

 Ejemplos de contenedores

 Neumáticos para papas: Podemos sembrar papas en un neumático lleno de


sustrato, una vez que haya crecido a una altura de unos 35 cm, le ponemos otro
neumático sobre el anterior y también lo llenamos de sustrato, y así sucesivamente.
Finalmente las cosechamos desarmando la estructura.
 Bancales de madera en una azotea: Construimos una estructura de madera de
pino impregnada, con los tablones más anchos que se encuentren, ésta idealmente
debe tener una altura mínima de unos 40 cm y el resto de las dimensiones iguales a
un bancal o cama tradicional (1,5 m de ancho por X de largo). Antes de poner el
sustrato, instalamos en el fondo una capa de ripio o arena de unos 5 cm que
asegure el buen drenaje. Finalmente, el interior podemos cubrirlo engrapando
plástico para evitar que el sustrato se pierda por entre los tablones.
 Maseteros de plástico: son livianos y pueden resultar muy económicos.
 Recipientes en base a desechos: Botellas cortadas pueden ser útiles, aunque
muy pequeñas. Por otro lado, los baldes plásticos de 20 litros son muy resistentes y
de un tamaño superior.

Para profundizar los contenidos de esta sesión, ingresa al sitio web:


www.cultivatuhuerto.cl
Ahí, en la sección “biblioteca”, en la sub-sección “Mini manuales
introductorios”, encontrarás el texto “Huerta en la ciudad”, en donde se trata el
tema de los cultivos en espacios reducidos.

42
43
44
45
Referencias:
- Tabla de alelopatía y de rotaciones: Taller de cultivos urbanos (Cultivos
urbanos, Santiago, 2012)
- Jeavons, John (2002). Cultivo biointesivo de alimentos (Ecology Action,
Willits)
- Pía, Fernando (2005). Huerta orgánica Biointensiva (CIESA, Chubut)
- Sullivan, Preston (2007). El manejo sostenible de suelos (ATTRA)
- Seymour, John (1981). El horticultor autosuficiente (Blume, Barcelona)
- Sánchez, Mario. La huerta en la ciudad

46

Você também pode gostar