El consumo excesivo de frutas puede tener algunos riesgos para la salud como desarrollar diabetes tipo 2 si se consume demasiada fructosa, alterar los electrolitos en personas con enfermedades renales, provocar obesidad y aumento de colesterol si se consume en grandes cantidades, causar trastornos intestinales por exceso de fibra, y afectar negativamente la hipersensibilidad nerviosa. A largo plazo, solo comer frutas puede causar deficiencia de vitamina B12.
El consumo excesivo de frutas puede tener algunos riesgos para la salud como desarrollar diabetes tipo 2 si se consume demasiada fructosa, alterar los electrolitos en personas con enfermedades renales, provocar obesidad y aumento de colesterol si se consume en grandes cantidades, causar trastornos intestinales por exceso de fibra, y afectar negativamente la hipersensibilidad nerviosa. A largo plazo, solo comer frutas puede causar deficiencia de vitamina B12.
El consumo excesivo de frutas puede tener algunos riesgos para la salud como desarrollar diabetes tipo 2 si se consume demasiada fructosa, alterar los electrolitos en personas con enfermedades renales, provocar obesidad y aumento de colesterol si se consume en grandes cantidades, causar trastornos intestinales por exceso de fibra, y afectar negativamente la hipersensibilidad nerviosa. A largo plazo, solo comer frutas puede causar deficiencia de vitamina B12.
Siendo los azúcares como la fructosa los de mayor cuidado,
ya que si excedes la cantidad de fructosa que consumes
diariamente corres el riesgo de poder llegar a desarrollar diabetes tipo 2, ya que esta no estimula la producción de insulina (necesaria para controlar los niveles en sangre) como el azúcar. Los pacientes con problemas de diabetes o azúcar en sangre deben cuidar el consumo de frutas ya que estas aportan a la dieta fructosa, un tipo de azúcar.
Asimismo, si padeces una enfermedad renal debes tener
cuidado con la cantidad de minerales en las frutas que pudieran alterar el equilibrio de los electrolitos en tu organismo.
Los hidratos de carbono procedentes de los propios
azúcares que contienen las frutas pueden convertirse en reserva grasa en caso de consumo de grandes cantidades de fruta, provocando al mismo tiempo obesidad y un aumento del colesterol y triglicéridos
Por otra parte el consumo elevado de frutas ricas en
fibra puede provocar algunos trastornos intestinales, debido precisamente al exceso de fibra.
Los frutos ácidos pueden incidir negativamente sobre la
hipersensibilidad nerviosa y padecimientos crónicos estomacales. Sobre una base a largo plazo, una persona que come sólo frutas puede desarrollar deficiencia de vitamina B-12 que puede conducir a la función del sistema nervioso deteriorado y baja producción de células sanguíneas. Principales fuentes de vitamina B12 son carne, huevos y productos lácteos. Vitamina B12 o coba lámina son producidas por microorganismos que están ausentes en los frutos.
Los cultivos son más susceptibles a la competencia de
hierbas silvestres y plagas, con lo cual muchas cosechas se terminan viendo perjudicadas.
Al no utilizar conservantes ni aditivos los productos tienen una
menor duración presentando signos de descomposición en tiempos sensiblemente más cortos que los elaborados tradicionales.
Una menor vida útil de los alimentos por falta de
conservantes químicos.
Los productos son mucho más caros que los tradicionales,
por la escasez de oferta, por los tiempos productivos, y por la menor densidad de los cultivos o crías.
Una menor oferta de producto proveniente de destinos
alejados, por su impacto en el medio ambiente.
Los productos certificados orgánicos son limitados y reducido