intercambiar ideas y sentimientos, a través de una lengua, por medio del habla. Entonces, el ser humano comunica, primero, por la necesidad innata de socializar y, segundo, por la capacidad que éste tiene de formular pensamientos. Todo ser humano nace con la facultad de adquirir un lenguaje, pero lo desarrollamos por que vivimos en sociedad. Roger Fowler nos dice que el lenguaje es un aspecto intrínseco de nuestra herencia humana, y es natural porque es general a la especie; además es el atributo más típicamente humano y universalmente reconocido como único en el hombre. El lenguaje es parte del carácter esencial del hombre; éste es un animal especializado en el lenguaje. Todos los aspectos del sistema de comunicación que emplea naturalmente están determinados por su tipo de organismo. Después de todo, esto es lo natural: que el hombre, como cualquier otra criatura, se comporte comunicativamente de la manera en que se lo ordena su naturaleza. El mundo del lenguaje es mucho más vasto y más complejo de lo que los gramáticos han llegado a demostrar. Dentro de la lingüística existen algunas disciplinas de reciente creación, que nos están permitiendo vislumbrar cuál es su verdadera extensión y complejidad, tales son la sociolingüística y la etnología. Uno de los aspectos que más se está tratando son las relaciones que se establecen entre lenguaje y la sociedad. El aspecto esencial del lenguaje es el de ser un sistema de comunicación inserto en una situación social; por lo tanto, no solo es un proceso cognoscitivo, sino también un comportamiento simbólico, actividad esencial y genuinamente social.