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Practiquémosla, y ent6nces sí podrá la sociedad llenar su objeto:

ent6nces habrá igualdad porque habrá justicia: libertad porque habrá CAPITULO IX
moralidad: ent6nces no habrá hombres á quienes mandemos salir del mun- FORMAS DE GOBIERNO
do por falta de asiento en el banquete de la natlU'llleza: ent6nces quedarán
satisfechas todas las necesidades sin economía, pero tambien sin exceso:
ent6nces entrarán en armoDÍa la razon y las pasiones; el espíritu y la came; LAs FORMASde gobierno por sí solas no tienen poder bastante para dejar
ent6nces, en fin, podremos ver realizada la verdadera f6rmula del sistema satisfecho el objeto de la asociacion civil. La república como la aristocra-
social. cia, la monarquía moderada como el despotismo ilimitado, haráná los
CUALQUIERFORMADE GOBIERNO,con tal que se consiga LA MAYOR pueblos felices 6 desgraciados segun sea el poder que efectivamente dirija
SUMADE GARANTIASINDIVIDUALES á costa de LA MENORACCIONADMI- á la sociedad: el poder ilustrado por la inteligencia, produce el bienestar, ó
NISTRATIVA 11. sea el órden en el progreso: el poder apoyado en la fuerza y dirigido por el
capricho del que manda, produce la opresion, ó sea la duracion en elinfor-
tunio. Estas son en realidad las dos únicas especies de gobierno que han
dirigido hasta ahora y que pueden dirigir en lo sucesivo á la humanidad.
Segun la primera, la sociedad y los gobiernos se han formado en beneficio
del hombre: conforme á la segunda, el hombre y la sociedad están destina-
dos á satisfacer los antojos de los gobernantes.
En el fondo de todas las disputas de los políticos con respecto al nom-
bre de los gobiernos y á su organizacion, no se halla otra cosa que la
indagacion de la fórmula que dé por resultado el estado moral de los miem-
bros que forman la asociacion: será exacta y producirá buenos efectos
cuando diga verdad, ó lo que es lo mismo, cuando lleve al poder á los
representantes de la legítima· soberanía, que es la soberanía de.la razon;
falsa y desorganizadora, cuando no haga mas que arrebatar el derecho de
mandar á quien únicamente le corresponde: el derecho de mandar, ósea la
soberanía de hecho, supone el ejercicio de un poder capaz de hacer el bien,
ó lo que es igual, inteligente y benéfico; luego cuando una sociedad trata
de buscar la forma de gobierno, no hace mas que examinar cuál sea en ella
el modo de conceder el poder, es decir, la direccion de la fuerza comun, al
legítimo representante de la inteligencia y de la bondad.
La cuestion de formas de gobierno merece ocupar nuestra atencion,
precisamente por su ninguna importancia; y para que no se crea que esto
no pasa de ser una paradoja, recuérdese que es de aquí que nacen los he-
chos que se llaman cr(menes polfticos, en los cuales se culpa un error del
entendimiento mas bien que un extravío del corazon; se castiga no á un
11 Esta es la fórmula que presenta A. Thierry en su prólogo" los "DIEZ ~os DB ESTUDIO», y enemigo del reposo y bienestar de la sociedad, sino á un enemigo del po-
que nosotros vamos" desarrollar. der director, y cuya culpa quizá no es otra que haber amado mas la libertad

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Y dignidad de sus semejantes que su propio bienestar: se usa de la fuerza p.arecen haber seguido en política la doctrina de la decadencia de la espe-
social para destruir, no á quien le desea un mal. sinoá quien piensa hacerle Cie humana, tan c.o~~a á la que se sigue en todas las otras ciencias. que
un bien. e~ la de la perfectibilidad; y Rousseau. Maquiavelo y Montesquieu. extra-
Al ver la importancia que dan los políticos á las formas de gobierno, v~ados por este falso modo de ver las fOlmas de gobierno. llegan á anun-
seria fácil creer que la felicidad del género humano es un secreto cuya ciar que el arte de vivir en sociedad se va olvidando de dia en dia.
solucion se encierra en el nombre y las divisiones del poder encargado de Concl~yamos pues, que el absolutismo. la monarquía y la república
dirigir la sociedad; 6 un producto cuya calidad se trata de mejorar, no son ~as bIen ~ultados que medios de civilizacion. El porvenir de la hu-
obrando sobre la materia prima de que se forma. sino sobre la máquina que mamdad está c~o en la obediencia á la razon; pero no llegará á poseerlo
lo elabora. perf~tamente. smo cuando todos los miembros que la forman esten en
Pero una asociacion no dará jamas otros resultados que los que sean capacIdad de hacer uso de su razono 610 que es lo mismo. cuando todos los
conformes con el desarrollo moral de sus miembros. «Las instituciones hombres sean HOMBRES 2, Es verdad que es tan grande la parte del género
sociales son la expresion social de las ideas comunes: las ideas comunes humano que ~~ J;X'rsiempre desheredada del uso de su inteligencia,
son el resultado colectivo de las ideas individuales; y las ideas individua- que esa suposlclon. SIno ~ una quimera en la realidad. lo es en el tiempo.
les la forma de ser y de sentir del hombre 1». Así pues, para obrar sobre las y apénas puede la generaclOn actual hablar con seriedad en tal concepto.
instituciones sociales. es preciso empezar por obrar sobre el espíritu y el pero por lo ménos.nos sirve para conocer cuál es el fin que debemos pr~
corazon de los individuos que forman la asociacion. po~ernos al estudiar las formas de gobierno; y que el bello ideal de la
La importancia que se ha concedido á las formas de gobierno, hanaci- SOCI~ad cons~ste no en tener esta 6 aquella forma de gobierno. sino en no
do del viejo error que ha considerado siempre á la sociedad ántes que al n~ltar ~ mnguna. Por eso Proudhon. cuyo entendimiento parece lilla
hombre; el medio ántes que el fin. enCIclopedia de cuanto ha pensado el entendimiento humano bueno y
Es tanto mas necesario estar prevenidos contra este falso modo de exa- malo, ~er~ero y falso. exclama en un sublime arrebato de entusiasmo
minar las cuestiones sociales. cuanto que así se paraliza la atencion sobre humamtario: «Yo no estoy por la monarquía ni por la república; estoy por
palabras, que no hacen mas que ocultar el verdadero objeto que se solicita. la ANARQUIA, es decir. por la carencia de todo gobierno».
República y monarquía, aristocracia y gobiernos mixtos, ¿qué son?: me- Empero: por el mis~o hecho de no dar ninguna importancia á las for-
dios de conseguir el objeto de la sociedad. Pues ent6nces, ¿por qué no mas de gobIerno. se deja comprender fácilmente que nuestra predileccion
ponerse de acuerdo en los medios cuando los fines son idénticos? ¿Por qué en tratándose de ellas se fijará en la que suponga ménos estudio y artificio:
exponerse así á hacer fuego sobre sus mismos aliados. solo por no acor- en la qu~ es~ mas de acuerdo con la naturaleza del hombre, choque ménos
darse en el grito de guerra que los ha de dar á conocer? con sus mstintos •.presente ménos tentaciones de abuso; en la que única-
Es esto aun mas temible é infructuoso, porque los hombres general- mente es compatible con la natural igualdad del género humano LA DE-
mente van guiados en la eleccion de instituciones, por el nombre mas bien MOCRACIA: Si no le damos importancia á la forma de gobierno ¡por qué
que por la naturaleza de ellas: por los recuerdos de lo que han sido, no por razon habriamos de pensar en la monarquía. es decir, en esa pirámide de
la conviccion de lo que podrán ser. ¡Cuánta compasion no inspiran esos h~mbres, sobre cuyo vértice se coloca al mortal que nos señala el naci-
hombres que devorados por la fiebre que produce el amor á la libertad, nos mIento 6 la casualidad. para decirle: «mortal. quedas libre de la suerte
han propuesto por modelos de instituciones libres á las repúblicas de la comun de la humanidad, tu carácter te concede la impecabilidad: manda y
antigüedad. solo porque en ellas el mayor número tenia la plena libertad e~plota á ese pueblo que te sirve de pedestal?» ¿Qué motivo podría indu-
de tiranizar al menor! Razon tiene lbierry para decir que los escritores CImOSá someter nuestra inteligencia, y sacrificar nuestra voluntad al ca-

2 y~hemos dicho que la defmicion del HOMBRE, segun M. Bonald es: una inteligencia
I Donoso Cortés. servida por órganos. '

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pricho de un hombre que vale tanto como cada uno de,los otros, y mucho libres 4: en fin, en que están en perfecta armoDÍa la marcha del individuo y
ménos que todos juntos? ¿Cómo habriamos de gastar nuestras facultades la marcha de la sociedad, supone necesariamente el desarrollo delindivi-
intelectuales en el estudio de esas mentiras de convencion en que se funda duo, por lo ménos en cuanto sea necesario para que se halle en capacidad
la monarquía constitucional? ¡Escándalo de impotencia de la razon huma- de sostener sus derechos, 6 sean los medios de cumplir sus deberes; y de
na! Cansadas las inteligencias del despotismo, y hallando que los pueblos cumplir sus deberes, ó sea de respetar por sí mismo su fin y el fin de los
no estaban en capacidad de llegar todavía hasta la democracia, mandan demas. Miéntras los hombres no lleguen á ese estado,·no tendremos por
hacer alto á la humanidad, y le proponen un sistema cuyas basas son fic- qué escandalizamos de ver al Cristianismo prestando la sancion de un
ciones, cuyos medios son chicanas, cuyos resultados son absurdos. El Dios á todos los gobiernos cualquiera que sea su forma; ántes bien, debe~
equilibrio de los poderes, si fuera cierto, produciría su inmovilidad ó su mos ver.en él la única garantía de los derechos del hombre, el único respe-
mutua invasion. El rey reina y no gobierna: si este principio fuera verda- to que puede contener la voluntad del déspota que se halle encargado.de
dero, el monarca no tendría otro objeto que llenar un puesto que quedaría dirigir el pueblo 3.
mejor ocupado por un nombre ó por una estátua: el mejor rey seria el mas Es por esto que damos tanta importancia á LA EDUCAOON, 6 sea AL
imbécil 3. La independencia de los poderes: si fuera posible que las cáma- DESARROu.o del individuo; pues creemos que el único modo de conseguir
ras llegaran algun dia á estar formadas por los verdaderos escogidos del un sistema estable de sociedad que realice el 6rden por medio de la liber-
pueblo, y que por esto quisieran obrar de acuerdo con sus intereses y no tad, es poniendo al individuo en capacidad de hacer buen uso de su razono
con la voluntad del rey, sucederia que ó este se sometia destituyendo el La civilizacion, como lo ha enseñado M. Guizot, consiste en el desarro-
ministerio, y ya cedía la independencia real; ó que disolveria las cámaras y llo del individuo y en el desllrrollo de la sociedad; pero este no es sino el
apelaria á la voluntad, ó segun refiere la historia, á los reales del pueblo, y medio, á la vez que el resultado de aquel: la humanidad en su marcha,de
aquí faltaba la independencia del poder legislativo: teniendo el podeneal progreso, puede compararse á un ejército que marcha á conquistar una
la facultad de declarar la guerra y las cámaras la de darle ejércitos, ó las plaza: avanza sobre el terreno, y para andar con seguridad, deja unas trin-
cámaras ceden á la voluntad del rey, y entónces es irrisorio el derecho de
cheras y forma otras mas adelante: las trincheras conservan susconquis-
ellas, ó el rey á las cámaras, y la nacion tendrá que rendirse á su enemigo ... tas, pero estas solo han sido ganadas por los esfuerzos individuales: las
Un sistema.quese funda en ficciones no puede dar otros resultados. No se instituciones políticas son las trincheras que impiden el retroceso del indi-
vuelvan los ojos á la Inglaterra: la Inglaterra no es un país monárquico sino viduo.
aristocrático: ni su libertad y prosperidad se deben á los parlamentos sino
Las formas de gobierno, lo repetimos, son buenas cuando ponen la
al poder municipal.
direccion de la sociedad en poder de la inteligencia, dando desde luego por
Ahora bien: aunque reconocemos que las formas democráticas son las
resultado el desarrollo moral del individuo: son malas, cualquiera que sea
mas sencillas y conformes con la igualdad y dignidad del hombre, no po-
su nombre, cuando la direccion de la sociedad queda entregada al capricho
demos ocultarrios que son al mismo tiempo las mas delicadas, y las que de la fuerza.
suponen un estado mas adelantado en los que están llamados á practicar-
las. «Ese gobierno al cual concurren todos los entendimientos, porque to-
dos tienen derecho de concurrir á él: ese gobierno en que ningun ciudada- 4 TocquevilIe.
no se diferencia de los demas: en que nadie tiene posibilidad de ejercer un
5 Un monarca ve~eramenl~ ~s~ano solo podria ejercer su poder practicando aquel títu-
poder tiránico: en que todos los hombres son perfectamente libres, porque lo adoptado por el Jefe del Cnstiamsmo, servus servorum Dei. Uamando Jesus á sus discí-
pulos, les dijo: "Sabeis que los que poseen el poder entre los gentiles los mandan como
son enteramente iguales, y enteramen~ iguales porque son perfectamente
duetios, y.sus príncipes tienen poder sobre sus personas. Vosotros no lo hareis así; sino que
el que q?lera elevarse se hará vuestro siervo, y el que quiera ser el primero entre vosotros
será el sIervo de todos; porque el hijo del hombre no ha venido á ser servido sino á servir ... »
3 Un rey constitucional, como decia Napoleon, es un animal que se engorda. Márcos, x, 42 á 45.

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El órden es aquel estado de la sociedad en que todo concurre á realizar ligencia, y nos da así el ejemplo del único pueblo en que la mayoría ejerce
su fin. Cuando los ciudadanos no conocen ese fm, y están, desde luego, el legítimo poder, del único pueblo en que la mayoría tiene el derecho de
mandar.
expuestos á contrariado, tienen necesidad de obedecer á los que estén en
La monarquía, como todos los grandes hechos de la humanidad, tiene
capacidad de llevarlos por el buen camino. Entonces tienen que seguir la
civilizacion de la obediencia. El progreso es lento, y hasta parece á veces su razon de existencia en el estado de civilizacion en que se encuentra el
género humano 6.
que se retrocede, pues es un retroceso efectivo para la humanidad toda
detencion; y de aquí resulta que si los gobernados hacen alguna conquista ¡Quién sabe hasta cuando tendremos que soportar el triste espectáculo
intelectual y se adelantan á los que mandan, desprendiéndose del poder de la humanidad en tutela! Si queremos que se acerque el dia de su
tutelar, arrastran en su marcha todas las instituciones que los detienen, y redencion, consagremos al desarrollo del individuo los momentos que
verifican lo que se llama una revo/ucion, que en realidad no viene á ser ahora perdemos discutiendo sobre el desarrollo de la sociedad: consagre-
mas que un paso avanzado en la carrera de la civilizacion. mos al estudio de la moral, el tiempo que ahora empleamos en las indaga-
Miéntras los individuos que forman una nacion no estén en capacidad ciones de la política'.
de ejercer sus facultades de acuerdo con su fm, no pueden realizar la ver- 6 «No se concibe que una institucion, sea la que se quiera, dure y progrese por largo tiempo,
dadera democracia; necesitan tutores, que serán en menor ó en mayor nú- sin que la abonen su legitimidad y su armonía con la utilidad p6blica 6 las necesidades de la
mero, segun sea el círculo á que extienda sus radios la inteligencia. ~a.,. Esto dice, hablando de las comunidades religiosas, Gonzalo Marón.
La felicidad de las naciones no está, pues, cifrada en el número de sus Parécenos que será muy fácil ir cOplprendiendo el título de esta obra: EL C1usnANISMOy
LAUBERTAD. El objeto que deben prdponerse los amigos de la libertad del hombre, es buscar
gobernantes, sino en su moralidad é inteligencia. Cuando los gobernantes el desarrollo del individuo, para ir sustituyendo el uso de las almas al de las armas. La
reunan esas condiciones, los pueblos alcanzarán el mayor grado de felici- libertad que necesita el género humano es el derecho de no ser gobernado, no el de gober-
nar; y miéntras las soci~es no se compongan de hombres capaces de direccion y de
dad de que sean capaces, sea uno ó sean muchos los que los forman. Solo
reglas, sino de entes dotados de movimientos mecánicos voluntarios, y diferentes de los
son desgraciados y miserables aquellos pueblos cuyos directores son los brutos solo en que conocen la desgracia de su suerte, no hay que esperar mucho en la verda-
representantes de la fuerza, ya sea uno, ya sean muchos los que la ejerzan: dera y legítima libertad; el termómetro de esta es el estado moral de los individuos.
Para que se vea que esto no es nuevo y que los católicos comprenden de mucho tiempo atras
lo último es peor, porque es mas fácil contentar el capricho de uno solo que
la libertad política, vamos á copiar un diálogo de San Agustin, citado por Balmes, al capftu-
el de muchos. lo LXVllI de «El Protestantismo comparado con el Catolicismo.,.
Mediten bien los pueblos sobre estas verdades para que sepan lo que cAgustin.- Los hombres 6 los pueblos ¿tienen acaso tal naturaleza, que sean del todo eter-
nos, y no puedan ni perecer ni mudarse?- Evodio.- ¿Quién duda que son mudables, y que
tienen'que esperar de las doctrinas del materialismo que les enseñan sus
están sujetos' la accion del tiempo?-Agustin.- Luego si el pueblo es muy templado y grave,
falsos amigos. Solo hay dos especies de gobierno, el de la inteligencia y el y ademas muy solícito del bien coDiun, de manera que cada cual prefiera la conveniencia
de la fuerza: el primero es posible en los pueblos que tienen moral, y desde páblica á la utilidad propia, ¿no es verdad que será bueno establecer por ley, que este
luego, en los pueblos que pueden ser dirigidos por la conciencia: el segun- pueblo se elija // mismo los mogistrados para la administracion de la república? - Evodio.-
Ciertamente.- Agustin.- Pero si el mismo pueblo llega á pervertirse de manera que los ciu-
do es necesario en los pueblos de estragadas costumbres, y que necesitan dodanos pospongan el bien público al privado. si vende sus votos, y corrompido por los
para ser contenidos de la cuchilla del verdugo. O la moral para poder ser ambiciosos, entrega el mando de la república á hombres molvados y criminales como él
libres; ó el verdugo para poder conservar unidos á los hombres que solo ¿no es verdad que si hay algun varon recto, y ademas poderoso, hará muy bien en quitarle á
ese pueblo la potestad de distribuir los honores, y concentrar este derecho en manos de
obedecen á sus intereses.
pocos buenos y tambien de uno solo? - Evodio.- No cabe duda -Agustin.- Y pareciendo tan
La democracia, en realidad, no ha existido jamas. Ni aun en los Estados opuestas estas leyes que la una otorga al pueblo la potestad de los honores, lo que la otra le
Unidos del Norte de América, puede decirse que exista la verdadera de- niega, y siendo imposible que ambas se haIlen vigentes á un mismo tiempo, ¿por ventura
deberemos decir que alguna de ellas es injusta, 6 que no fué ·conveniente su establecimien-
mocracia, á pesar de ser ese el país en que mas se ha extendido la educacion to? - Evodio.- De ninguna manera.,.
popular: lo que sucede alli es que la clase inteligente compone la mayoría De ~o esto lo que se deduce es, que los pueblos como los hombres que no tienen juicio,
de la nacion, y la direccion de esta queda desde luego en poder de la inte- necesItan tutores; y que para que lleguen á su mayoridad y puedan emanciparse, es preciso
educarlos.

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