Aspectos negativos

Lucro en la educación: si bien con la implementación de la gratuidad en la educación superior y el

fin del copago en los colegios subvencionados han posicionado el carácter de derecho, aún queda
un gran sector de la población que no accede a una educación gratuita al momento de entrar a la
universidad teniendo que pagar o contraer deudas en banca privada u optando por el CAE para
financiarla. Esto genera que en el futuro que muchos estudiantes no puedan pagar la deuda
contraída cayendo a DICOM quedando financieramente “muertos” sin poder acceder a otro tipo de
créditos. Todo esto pasa por la necia mirada de mercado que aún se tiene de la educación sin
entender que es un derecho universal, pero el Estado aún no garantiza completamente este
derecho.

Agobio laboral y bajos sueldos de los profesores: son los únicos profesionales que se llevan gran
parte de su trabajo a sus hogares como revisar y confeccionar pruebas y trabajos, planificación,
diseño y adaptación de actividades, entre otros, debido a que la mayor parte del tiempo en el colegio
es asignado a hacer clases afectando sus vidas personales y familiares. Así mismo, los profesores
perciben un bajo sueldo con respecto a su trabajo siendo una de las profesiones peor pagadas del
país, también hay que sumar que parte de su trabajo no es remunerado como por ejemplo las
reuniones y atención de apoderados, programación extracurricular como aniversarios,
presentaciones, entre otros, lo que provoca una precariedad de su labor repercutiendo en la calidad
de la educación. Cabe destacar las constantes evaluaciones a las que son sometidos que se suma al
trabajo que realizan, los resultados impactan directamente a sus remuneraciones.

Número de estudiantes por sala: en muchos colegios, los estudiantes son más de treinta por curso,
llegando a cuarenta, y en algunos casos particulares supera esa cifra. Este hacinamiento afecta
directamente la calidad de enseñanza que entrega el docente, pues, al atender a tantos estudiantes,
la atención es menos personalizada lo que provoca un monitoreo menos efectivo de los aprendizajes
de los estudiantes mermando la calidad de ésta.

Baja Calidad de la educación: en general la educación obligatoria chilena no es buena y se ve

reflejada en las distintas evaluaciones estandarizadas como el SIMCE y PISA. En ellas se aprecia un
bajo nivel de los aprendizajes logrando puntajes bajo la media en ambas. La baja calidad de la
educación se debe a los factores mencionados anteriormente sumándole a la falta de apoyo por
parte de los padres y apoderados al colegio. Muchos estudiantes carecen de afecto y disciplina en
el hogar provocando un bajo rendimiento académico, si a esto le sumamos las malas condiciones
labores y salariales de los profesores dan como resultado una baja calidad de la educación. Este
problema se ha transformado en una tónica en las últimas décadas que no ha tenido solución por
distintos motivos y las medidas adoptadas son solamente soluciones paliativas que no atienden el
problema de fondo, entender la educación como un bien de consumo y no como un derecho.