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Universidad de la República

Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación


Departamento de Romanística y Español
Instituto de Lingüística
Gramática del Español I
Práctico: Unidades sintácticas

La decadencia de la bolita

Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego de la bolita sin entrar en espinosas controversias.
Desde luego, se trata de un asunto complejo y puede ser examinado según criterios muy diferentes.
Las personas sencillas afirman simplemente que se trata de una decisión de los chicos, arbitraria, inexplica-
ble y —por lo tanto— indigna de ser discutida.
Los psicólogos, antropólogos, electrotécnicos y aun los contadores suelen llamar la atención sobre la in-
fluencia de otros entretenimientos de emoción más sostenida, como la televisión, el billar japonés, el
cerebro mágico o las palabras cruzadas.
Los Refutadores de Leyendas niegan que haya existido jamás un juego semejante y se oponen con argu-
mentos inexpugnables al mito de la vieja niñez romántica.
Por el contrario, los Hombres Sensibles aseguran que la desaparición del juego de las bolitas es el
resultado de una conjura universal.
Este punto de vista es muy interesante y vale la pena elucidarlo.
En su monografía Faltan bolitas, el pensador de Flores, Manuel Mandeb, plantea un interrogante que nos
deja perplejos. Veamos.
"...Este juego parece haber empezado a languidecer en 1960. Pero puede afirmarse que en ese momento
ya hacía por lo menos cincuenta años que se jugaba. Entonces había veinte millones de habitantes en el país.
Y no era demasiado audaz afirmar que, en el medio siglo de su auge, el juego de la bolita había sido
practicado por diez millones de individuos en uno u otro momento de sus vidas. Ahora bien: ¿cuántas bolitas
poseía cada niño aficionado, como promedio? Digamos cincuenta. Multipliquemos: cincuenta por diez
millones. Son quinientos millones de bolitas. Bien, volvamos al presente: ¿alguno de ustedes ha visto una
bolita en el último año? Seguramente no. Yo pregunto: ¿dónde están los quinientos millones de bolitas?
¿Quién las tiene?
"Y no me digan que el tiempo las destruyó porque el viento y la lluvia no son suficientes para destrozar
una bolita...
"...Las canchas han sido arrasadas y hasta pavimentadas, los hoyos fueron rellenados, los jugadores se
han visto tentados por otras disciplinas. Alguien está borrando todo vestigio del paso de las bolitas por esta
tierra..."

Alejandro DOLINA, Crónicas del Ángel Gris, Planeta, Buenos Aires, 2005.
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CONSIGNAS DE TRABAJO

1. Indique, fundamentando, si las secuencias subrayadas son sintagmas o no. No olvide considerar la
estructura de la que forman parte.
2. Identifique los sintagmas nucleados por las palabras recuadradas. Clasifíquelos de acuerdo con la
naturaleza de su núcleo y corrobore la segmentación propuesta. Fundamente.
3. Reconozca todos los sintagmas presentes en la secuencia destacada con negrita.
Universidad de la República
Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación
Departamento de Romanística y Español
Instituto de Lingüística
Gramática del Español I
Práctico: Unidades sintácticas

EJEMPLOS DE RESOLUCIÓN

1. Pasos a seguir:

a) Extraer el ejemplo del texto:

Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego de la bolita sin entrar en espinosas controversias.

b) Aplicar algunas de las pruebas para la identificación de sintagmas:

PRONOMINALIZACIÓN / SUSTITUCIÓN: *Resulta difícil hablar sobre {ella/eso} de la bolita sin entrar en
espinosas controversias.

c) Concluir si la secuencia subrayada es o no un sintagma: no lo es.


d) Redactar la respuesta:

“La desaparición del juego” no es, en este contexto, un sintagma. Una prueba de ello es que, si se sustituye la
unidad sintáctica nucleada por “desaparición” por un pronombre personal (“ella”) o un pronombre demostrativo
(“eso”), el resultado de no incluir “de la bolita” daría lugar a secuencias anómalas: *“Resulta difícil hablar sobre ella
de la bolita sin entrar en …”; *“Resulta difícil hablar sobre eso de la bolita sin entrar en …”. Esto es porque el sintagma
cuyo núcleo es “desaparición” incluye “de la bolita”: “Resulta difícil hablar sobre eso sin entrar en espinosas
controversias”. En este último caso, el demostrativo “eso” se puede intercambiar por el sintagma nominal “la
desaparición del juego de la bolita”, manteniendo un significado equivalente.
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2. Esquema de trabajo:

Desde luego, se trata de un asunto complejo y puede ser examinado según criterios muy diferentes.
criterio  sustantivo = sintagma nominal
SN: criterios muy diferentes (según eso)

NOTA: Repare en que lo anterior, si bien muestra un razonamiento correcto del ejercicio, no puede funcionar
como una respuesta adecuada en un nivel universitario. Es imprescindible, en todos los casos, ensayar
resoluciones como las de 1. d) del ejemplo anterior.
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3. Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego de la bolita sin entrar en espinosas controversias.

SINTAGMA NÚCLEO CLASIFICACIÓN COMPROBACIÓN


en espinosas “en”: preposición sintagma Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego de la bolita
controversias preposicional sin entrar allí.
(SP)
espinosas “controversias”: sintagma Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego de la bolita
controversias sustantivo nominal (SN) sin entrar en ellas/eso.
espinosas “espinosas”: sintagma Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego de la bolita
adjetivo adjetival (SAdj) sin entrar en Ø controversias. // Resulta difícil hablar sobre la
desaparición del juego de la bolita sin entrar controversias
espinosas. // Resulta difícil hablar sobre la desaparición del juego
de la bolita sin entrar en muy espinosas controversias /
controversias muy espinosas.

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