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UN MARCO CONCEPTUAL PARA LA SEGURIDAD HUMANA, POR SABINA ALKIRE.

Definición de trabajo y Resumen.

La Seguridad Humana tiene varias definiciones y caracterizaciones útiles. Aunque éstas serán
prontamente presentadas y discutidas, este paper apunta a no escoger entre ellas, sino que proveer
una definición de trabajo sobre la Seguridad Humana, y mostrar cómo puede formar la base de las
respuestas operacionales de muchas instituciones diferentes.

La propuesta de definición de trabajo sobre la seguridad humana es la siguiente:

Definición de trabajo:

El objetivo de la seguridad humana es salvaguardar el núcleo vital de todas las vidas humanas de
las penetrantes amenazas críticas, de una forma que es consistente con la realización humana a
largo plazo1.

La seguridad humana toma su forma a partir del ser humano: el núcleo vital debe ser protegido. Las
instituciones que buscan proteger la seguridad humana no serán capaces de promover cada aspecto
del bienestar humano. Pero al menos deberán proteger éste núcleo de las vidas de las personas.

Las próximas secciones introducen los términos de la definición de trabajo en este orden:

Salvaguardar
La seguridad humana es deliberadamente protectiva. Reconoce que las personas y las comunidades
son fatalmente amenazadas por eventos que van más allá de su control: crisis financieras, conflictos
violentos, SIDA, políticas nacionales que recorten las inversiones públicas y privadas en el cuidado
de la salud, un ataque terrorista, escasez de agua, indigencia crónica, o la contaminación de tierras
distantes. Muchas amenazas son más destructivas si vienen por sorpresa. El daño y las muertes de
un terremoto pueden ser minimizadas produciendo construcciones resistentes a los terremotos; los
efectos empobrecedores de una crisis financiera pueden ser mitigados si se toman contramedidas
por adelantado; sistemas de alerta temprana pueden reducir el efecto de la hambruna. Aún así
muchas de estas preparaciones requieren el reconocimiento de estas amenazas, antes de que
ocurran (o a lo más, mientras ocurren). El enfoque de la seguridad humana insta a las instituciones
ofrecer protección, la cual es institucionalizada, no episódica; responsiva, no rígida; preventiva, no
reactiva. De esta forma, las personas enfrentarán las inevitables recesiones “con seguridad”.

Salvaguardar las vidas humanas implica no sólo a las instituciones que tienen la intención de
promover abiertamente la seguridad humana, sino también a las instituciones que de forma no

1
Frases alternativas de la definición incluyen:
1. El objetivo de la seguridad humana es salvaguardar el núcleo vital de todas las vidas humanas. (en
vez de salvaguardar: proteger, escudar, garantizar, defender, mantener, preservar…)
2. El objetivo de la seguridad humana es garantizar varios derechos vitales y la libertad de todas las
personas, sin comprometer su habilidad para perseguir otras metas.
3. El objetivo de la seguridad humana es crear las condiciones políticas, económicas, sociales,
culturales y ambientales en que las personas puedan vivir sabiendo que sus derechos vitales y
libertades están asegurados.
intencional la desvalorizan. Las estrategias que se asocian a proporcionar la seguridad humana,
identifican estas amenazas y luego buscan evitar que sean materializadas, mitigando efectos
perjudiciales para las eventuales, y ayudar a las víctimas a hacerle frente. Pero hay una segunda
aproximación estratégica a la protección de la seguridad humana, la cual es el respeto. Respeto a la
seguridad humana significa que cualquiera sea su objetivo principal, todos los actores, sean
institucionales o corporativos o individuos, deben comprobar que sus acciones no amenazarán la
seguridad humana. Este sentido de respeto tiene una relación cercana con el respeto a las personas
individuales.

El término “salvaguardar” no debe ser malinterpretado. La seguridad humana está centrada en las
personas, no en las amenazas. La seguridad humana es una condición que resulta de una efectiva
política, economía, sociedad, cultura, y ambiente natural, y no por la ejecución de unos
procedimientos administrativos. Pero defender la seguridad humana de forma efectiva, una actitud
proactiva frente a las amenazas –ya sean amenazas repentinas como un terremoto, o las continuas
amenazas que enfrentan los indigentes- es esencial.

Finalmente, el término “salvaguardar” tiene la intención de transmitir un sentido de fiabilidad. Sería


algo sin precedentes no mencionar las dificultades en proteger la seguridad humana con el tipo de
fuerza y efectividad que caracteriza las respuestas a las amenazas a la seguridad nacional. Pero el
objetivo de la seguridad humana es precisamente eso.

Núcleo Vital
La seguridad humana está contenida en su alcance. No cubre todo lo necesario, importante, y los
aspectos profundos de la vida humana. En vez de eso, identifica y protege un limitado núcleo vital
de las actividades y habilidades humanas. Estas pueden ser variadamente descritas por los derechos
humanos fundamentales, las capacidades básicas o las necesidades absolutas.

El “núcleo vital” es un término no-técnico para las preocupaciones que están detrás de la seguridad
humana. Puede ser definido en el espacio de las capacidades, la libertad que las personas deben
tener y ser. Los elementos del núcleo vital son los derechos humanos fundamentales que todas las
personas e instituciones tienen la obligación de respetar o proporcionar. Los derechos y libertades
en el núcleo vital pertenecen a la sobrevivencia, el sustento de la vida, y la dignidad básica. Las
personas que disfrutan de una seguridad rudimentaria, en cuanto a su sobrevivencia, sustento y
dignidad, incluso en circunstancias terribles de pobreza o guerra o desastres; estarán mejor hoy que
billones de otras personas.

La definición de trabajo no especifica los derechos y libertades que pertenecen al núcleo vital más
allá de la identificación de estas tres categorías. La tarea de priorizar entre los derechos y
capacidades, cada uno de los cuales es argumentado como fundamental por algunos, es un juicio
de valor difícil, el cual puede ser trabajado de mejor manera por las instituciones apropiadas. Aun
así, el juicio es necesario para que la seguridad humana sea realista y efectiva. Por lo tanto hay una
tensión predecible entre (i) la necesidad de un compromiso participativo y escrutinio de este
“núcleo” por varios, especialmente por aquellos cuya seguridad está en peligro, y (ii) la necesidad
de que agencias internacionales, ONGs, instituciones públicas, entre otras; definan claramente un
“núcleo vital”, y de crear procedimientos e instituciones que preparen para protegerlo de forma
efectiva. La respuesta imperfecta pero operacional a esta tensión, es mantener una definición de
trabajo conscientemente vaga y amplia de la seguridad humana, y articular procedimientos que
operacionalicen esta definición en situaciones concretas por instituciones limitadas a poblaciones
particulares.

Todas las vidas humanas.


La seguridad humana se centra en las personas; concentra su atención en instituciones de individuos
humanos y sus comunicaciones por todo el mundo. Este énfasis en los seres humanos distingue a la
seguridad humana del objetivo de proteger los territorios del Estado que dominó en las políticas de
seguridad durante el siglo XIX y XX. La seguridad humana cambia ese enfoque hacia las personas,
sin importar su género, raza, religión, etnicidad, ciudadanía, u otras características diferenciales.

De esta forma, en enfoque de la seguridad humana pone en paralelo el movimiento en el desarrollo


económico y el derecho internacional para cambiar el énfasis de objetivos instrumentales (como el
crecimiento, o derechos de Estado), al desarrollo humano y los derechos humanos. Al hacerlo, las
personas se vuelven en el “fin” del desarrollo, y no sólo el “medio” para aumentar la productividad
económica, y estas actividades se terminan centrando en las personas.

Puede ser importante notar que la seguridad humana no obvia la seguridad estatal, como tampoco
abarca toda la agenda de seguridad (que incluye por ejemplo la integridad territorial y la distribución
del poder entre las naciones). Además, el foco de “todas las vidas humanas” no requiere o asume
una motivación humanitaria o altruista. Las acciones que protegen la seguridad humana
ocasionalmente serán justificadas dentro del interés de un grupo o nación, definido estrechamente,
y requerirá un atractivo político. Al mismo tiempo, la seguridad humana esboza cómo los gobiernos
nacionales pueden reorientar sus propias políticas de seguridad, proporcionando el mismo rigor y
fuerza, pero con un énfasis distinto.

Amenazas críticas y agudas.


El enfoque de la seguridad humana se basa principalmente en las vidas humanas. Pero para proteger
las vidas humanas de forma efectiva, los actores deben identificar y prepararse para las amenazas.
Las amenazas para la seguridad humana son críticas- o sea, que amenazan cortar las actividades y
funciones de las vidas humanas. Estas amenazas pueden ser sorpresivas –como un colapso
económico- pero no necesariamente deben serlo, ya que lo que define a una amenaza como crítica
es su nivel trágico. Además, las amenazas son agudas- es decir (i) la amenaza es a larga escala
(considerando a la población; lo que es a larga escala se diferenciará como local vs. Instituciones
internacionales); o/y (ii) la amenaza puede aparecer de nuevo y de nuevo a través del tiempo; no es
un evento anómalo, por el que prepararse estratégicamente no es imposible. Claro que amenazas
agudas puede que no ocurran “en masa”; un hombre puede quedar incapacitado por un accidente
de trabajo, o por un animal salvaje. Esto puede parecer un incidente aislado, sin embargo se repite
millones de veces, calificando la inseguridad en la salud como una amenaza aguda.

Las amenazas a la seguridad humana tienen diferentes mecanismos de operación. Algunos, como el
genocidio o la degradación del suelo, amenazan directamente a la vida. Otras son amenazas
indirectas: por ejemplo, cuando la sobreinversión en lo militar o en el pago de deudas genera menos
inversión en otras áreas, de tal forma que lleva al colapso del sector del cuidado de la salud pública,
o cuando un país tradicionalmente invierte poco en educación. La seguridad humana se relaciona
con la identificación y valoración de los dos tipos de amenazas: aquellas que son deliberadamente
orquestadas, y las que aparecen de forma inadvertida o estructuralmente. Los costos humanos de
ambas son altos.
Realización o satisfacción humana.
La seguridad humana se concentra en un conjunto limitado de actividades individuales y
habilidades, dentro de un subconjunto más pequeño del desarrollo humano y los derechos
humanos. Esto no es suficiente para la realización humana o su florecimiento, lo cual es un proceso
continuo de buscar valores por las personas en grupos y comunidades. Por lo tanto, sería
desafortunado o incluso trágico si las instituciones que buscan lograr la seguridad humana, lograran
su objetivo de tal manera que menoscabara las habilidades de las personas para ser realizadas, y
disfrutar un mayor rango de libertades. La vida de las personas no solo deben ser protegidas porque
sí; sino que deben ser protegidas de forma que sea consistente con su bienestar a largo plazo. La
importancia de los procesos- de la gobernanza, la participación, la transparencia, de la construcción
de capacidades y de instituciones- no puede ser sobreestimada. La forma apropiada de lograr esta
consistencia entre la protección y desarrollo a largo plazo irá variando. Los programas de la pobreza
pueden lograr metas más amplias al incentivar una mayor participación; los campamentos de
refugiados pueden enseñar habilidades vocacionales transferibles, o pueden situarse donde no
degraden el ambiente local. En algunos lugares, los peligros, el clima, o el ritmo del duelo de una
pena pueden ser tan importantes que algunos plazos y consideraciones deben dejarse
temporalmente de lado. Pero no deben dejarse completamente de lado.

La atención a los compromisos grupales e individuales de plazos más a largo plazo, no amenazan el
foco de la seguridad humana, porque la prioridad de la seguridad humana es ser efectiva- proteger
la seguridad humana en hechos y no sólo en intenciones. “En el análisis final, la seguridad humana
es un niño que no murió, una enfermedad que no se propagó, un trabajo que no fue eliminado, una
tensión étnica que no explotó en violencia, un disidente que no fue silenciado”. Las preocupaciones
por factibilidad son reales; por tanto la preocupación por tener resultado prácticos es algo básico
para los esfuerzos de la seguridad humana.

Resumen de la sección Dos a la Cinco:


¿Por qué la seguridad humana ha sido subida a la palestra de muchas conversaciones y grupos? La
energía parece salir de un desajuste entre las amenazas a la seguridad (que han cambiado
dramáticamente con la globalización y los avances tecnológicos) y la respuesta a estas amenazas
por parte de los países y la comunidad internacional. Aunque algunas amenazas han crecido el doble
desde la Guerra Fría, también ha aumentado nuestra capacidad para contrarrestarlas. Otras
amenazas han disminuido. La sección Dos introduce estas temáticas. Identifica tres descripciones
del ambiente alterado de la seguridad, que son notados por casi todo contribuidor a esta discusión:
1) Los cambios empíricamente observables en la naturaleza de las amenazas a la seguridad, y
nuestra habilidad para enfrentarlas.
2) Avances analíticos en la habilidad para entender la interdependencia entre las diferentes
amenazas a la seguridad, y también entre la seguridad de los ciudadanos y las personas del
mundo.
3) Los cambios institucionales junto con las estructuras de la seguridad y en sus niveles
nacionales e internacionales. Estos cambios incluyen en el establecimiento del crimen
internacional y las redes terroristas por un lado, y la profunda cooperación internacional y
colaboración en la resolución de conflictos.

La necesidad de una definición de trabajo de la seguridad humana aparece como un problema:


cómo enmarcar una factible y coherente lista de prioridades para concertar una acción. No es una
pregunta abstracta. El peligro de la no inacción, y el peligro de la disipación, son reales.
Los conceptos de la seguridad humana varían ampliamente (Sección tres). El texto de la UNDP 1994
Human Development Report compilado por Mahbub ul Haq puso el tono para todas las definiciones
que le siguieron, al articular un enfoque universal, preventivo, centrado en la gente, que se focaliza
en “ser libre del miedo y libre de querer”. Rothschild aterriza el concepto de la seguridad humana
identificando vínculos con los conceptos de otros puntos de la historia, y al articular cómo la
seguridad humana extiende el enfoque predominante a la seguridad estatal en Europa. También
propone hacer una seguridad humana menos inclusiva con el fin de hacerla más factible. Otros
autores desarrollan conceptos multidimensionales de la seguridad humana que se enfoca en las
personas pero difiere en los énfasis. Por ejemplo King y Murray dejan la violencia de lado y proponen
un índice de seguridad humana que mida los “años vividos fuera de la pobreza generalizada”.
Leaning y Arie dicen que la seguridad humana es una precondición del desarrollo humano, pero
incluyen en su definición no solo los estándares mínimos de la vida, sino también la seguridad
psicológica y cultural que nace de las redes sociales y actitudes sobre el futuro. Hampson et al.
describe la seguridad humana como un bien público no proporcionado, que protege los valores del
núcleo vital. Thomas defiende una definición amplia, que incluye las necesidades de materiales
básicos, la dignidad humana, la práctica democracia. Paris propone que la seguridad humana debe
verse no como un concepto, sino como una categoría de investigación de las amenazas militares y
no militares hacia las sociedades, grupos e individuos. En la práctica, la Comisión Internacional en
Intervención y Soberanía ven la seguridad humana como un concepto emergente central para las
instituciones nacionales internacionales, particularmente tomando la perspectiva de las Naciones
Unidas bajo este concepto: “Asegurar la seguridad humana es en el sentido amplio, la misión
cardinal de las Naciones Unidas.”

En base a lo anterior, esta definición trabajo de la seguridad humana es bastante amplia, esto puede
ser entendido como iniciativas para proteger la seguridad humana en situaciones concretas, que
como conceptos competentes. También reconoce que mucha de la energía que se necesita para
responder las preocupaciones de la seguridad humana, son determinadas política y racionalmente.
La Sección Cuatro profundiza la discusión de “núcleo vital”. Este término no busca ser preciso;
sugiera un conjunto de capacidades mínimas o básicas, o los derechos humanos. ¿Qué es este
núcleo? Se basa no en un consenso frágil, o en la identificación de amenazas, sino en el
razonamiento práctico sobre lo que es básico para la vida humana. En términos generales, el núcleo
vital de la seguridad humana puede ser visto como un conjunto de libertades humanas, o de
derechos humanos. Este núcleo incluye tanto las libertades políticas como civiles, y las habilidades
económicas, sociales y culturales.

Las fortalezas y limitaciones de esta definición de trabajo se observa considerando un elemento


particular de la seguridad humana, como la libertad de muertes prevenibles y prematuras. Las
personas que intentan sobrevivir –ya sea si es una mujer cerrando su puerta en la noche, o llevando
sus niños a ser vacunados- no eligen entre responder a “amenazas violentas” o “amenazas de
pobreza”. Ellos responden a ambas. La seguridad humana debería hacer lo mismo. Pero las personas
también arriesgan sus vidas como los bomberos y en los deportes, aunque la seguridad humana
debe dejarles la libertad a las personas para realizar actividades valiosas que en cierto nivel son
riesgosas. Además, la protección de la vida es complicado y requiere juicios de valores: qué es
“prevenible”, qué amenazas abarcan más, qué medios se deben usar. Un ejemplo de esto es cuando
se establecen límites de exceso de velocidad para prevenir accidentes automovilísticos. Estos
asuntos recurren a otras dimensiones de la seguridad humana. Por lo que para ser relevante en
diferentes culturas y circunstancias, un marco conceptual debe ser flexible como concreto para
permitir especificaciones que cambian con el tiempo y los contextos. Esto quiere decir que muchas
de las preguntas anteriores e importantes serán resueltas solo con la práctica, después de que tanto
las amenazas como las instituciones sean identificadas.

La Sección Cinco relaciona la definición de la seguridad humana con los conceptos de la seguridad
estatal, desarrollo humano, y los derechos humanos. Hay un número de fuertes similitudes entre la
seguridad humana y la seguridad estatal. Ambos identifican de forma proactiva y priorizan las
amenazas críticas y agudas hacia la población, en base a evidencia empírica y análisis estratégicos.
Ambos también desarrollan respuestas institucionales sistemáticas, comprensivas, duraderas y
coordinadas para seleccionar amenazas que involucran varios actores y un trabajo desde la
investigación al campo de acción. La preparación y los mecanismos de respuesta usan instrumentos
legales, políticos, sectoriales y económicos, como también instrumentos militarmente autorizados.

También son evidentes las diferencias entre ambos tipos de seguridad. Primero, la seguridad estatal
se preocupa de las unidades territoriales y de las personas que moran en ellas. Las acciones que
promueven la “seguridad humana” de otras poblaciones son usualmente justificadas
instrumentalmente, porque las inversiones en su seguridad son beneficiosas para la seguridad
nacional; la seguridad humana se dirige a todas las personas.
En segundo lugar, la seguridad estatal se preocupa significativamente con la distribución relativa del
poder entre los Estados y con la integridad territorial; esta agenda es legítima y complementaria,
pero no es parte de la agenda de la seguridad humana.

La seguridad humana comparte el “espacio conceptual” del desarrollo humano, el cual se centra en
las personas, es multidimensional y está definido en el espacios de las libertades humanas. Pero el
desarrollo humano es un término más amplio, un objetivo holístico que puede captar las
aspiraciones de cualquier sociedad, ya sea rica o crónicamente pobre. El objetivo del desarrollo
humano es el florecimiento o realización de los individuos y sus hogares y comunidades. En
contraste, la seguridad humana tiene un estricto y delimitado ámbito de alcance. Mientras ambos
enfoques responden a los necesitados, la seguridad humana también tiene un aspecto sistemático
preventivo. Mientras el desarrollo humano apunta a “crecer con igualdad”, la seguridad humana se
concentra en una “recesión con la seguridad”. El enfoque de la seguridad humana identifica y se
prepara para las recesiones, conflictos, emergencias, y los eventos más oscuros de la sociedad.
Finalmente, las actividades de la seguridad humana cuentan muchas veces con un tiempo más breve
en el horizonte, e incluyen un trabajo de emergencia de alivio y mantenimiento de la paz, como
también el desarrollo humano a largo plazo.

La seguridad humana y los derechos humanos también están profundamente interconectados.


Ambos se preocupan por identificar un conjunto de preocupaciones universales que le ganen a la
pobreza y la violencia. Sin embargo este paper deja abierta la posibilidad de que porque la seguridad
humana se enfoca en la viabilidad, puede no necesariamente priorizar todos los derechos humanos
por igual, y en la práctica, las diferentes instituciones que respetan o promueven la seguridad
humana, legítimamente priorizan solo ciertos derechos y libertades.

La tarea de conceptualizar la seguridad humana sistemáticamente, puede verse a veces pedante.


En parte, esto puede ser por la naturaleza de la presentación; uno busca textos con amplios análisis
y frases impresionantes e historias de esperanza. Pero hay una seriedad frente a todas la tarea de
proteger la seguridad. No solo los errores son humanos y agonizantes, pero incluso el éxito no se
siente como tal, porque el objetivo de la seguridad humana está incompleto. Las personas que
tienen su núcleo vital asegurado, aún enfrentan un universo de desafíos y obligaciones hacia ellos
que no necesariamente están cumplidas solo por no estar en peligro. Aun así, las instituciones
sociales, políticas, diplomáticas, económicas, militares, científicas y tecnológicas, son incapaces de
proteger a las poblaciones de todo lo que las amenazan. Según con la agenda de la seguridad
humana, todo lo que enfrentan estas instituciones –ya sea si lo trabajan en un nivel local, nacional
o internacional- deben esforzarse en salvaguardar las funciones del núcleo vital de las personas de
todas partes. Y lo deben hacer de tal forma que no comprometan (dañen) a las personas y las
sociedades en un largo plazo. Tal resultado es positivo. Cuando una madre está consciente de que
ella y su familia no están amenazados por algunos problemas (enfermedades, por ejemplo) ella es,
o puede tener una vida más optimista. La seguridad humana puede ser una fuente de esperanza.

Figura 1: Resumen de términos

El objetivo de la seguridad humana es salvaguardar el núcleo vital de todas las vidas humanas
de las amenazas críticas y agudas, sin impedir la realización humana2 a largo plazo.
Proporcionar y promover la seguridad humana a
través de:
Salvaguardar Identificación (de amenazas críticas y agudas)
Prevención (para que los riesgos no ocurran)
Mitigación (para que si los riesgos ocurren el daño
sea limitado)
Respuesta (para que las víctimas o los pobres
crónicos sobrevivan con dignidad y mantengan sus
vidas)

Respetar la seguridad humana a través de:


Identificación, Prevención y Mitigación de los
efectos secundarios predecibles que amenazan la
seguridad humana, sin importar el primer objetivo.
Núcleo vital Un conjunto rudimentario pero multidimensional de
los derechos humanos y las libertades humanas,
basadas en la razón práctica.
Abarca la libertad del miedo y del querer.
A especificar por procedimientos adecuados en
contexto.
Todas las vidas humanas Centrado en las personas – focalizado en los
individuos y sus comunidades.
Universal y no discriminatorio.
Amenazas críticas y agudas Las amenazas críticas cortan las actividades y
funciones del núcleo.
Las amenazas agudas son a larga escala, peligros
recurrentes.
Las amenazas pueden ser directas, como un
genocidio o una guerra civil.
También pueden ser indirectas, como la poca
inversión o un colapso financiero.

2
Realización humana quiere decir cuando uno se siente realizado como persona.
Realización humana a largo plazo La seguridad humana no es suficiente para la
realización humana.
Los procesos de la seguridad humana deben ser
consistentes con el desarrollo humano, al apoyar la
participación, libertad, adecuación institucional, y la
diversidad.

1. Introducción.
La inseguridad humana es un fenómeno antiguo. Amenazas como la hambruna, guerras,
inundaciones, plagas, esclavitud, aparecen en las escrituras antiguas de todo el mundo. Sin
embargo, la inseguridad humana, no es una anomalía histórica. Lo que ha cambiado
considerablemente son los tipos de inseguridad que la gente enfrenta, y las posibilidades
institucionales de sobrellevar la inseguridad.

¿Por qué se necesita un marco conceptual para la seguridad humana? Porque como dice Florini y
Simmons, hay muchos desacuerdos sobre los debates conceptuales, y esta energía debería ser
enfocada en enfrentar las mismas amenazas a la seguridad. En un mundo donde la necesidad
primaria es la acción efectiva y directa, una reflexión conceptual detallada puede parecer falsa y
distractora.

Por otra parte, esta discusión requiere: análisis científicos, tecnológicos y ambientales de las
amenazas a la seguridad; familiaridad con las instituciones locales, nacionales, transnacionales, no
gubernamentales de todo el mundo (entre todas con entendimientos culturales mínimos de
términos como la soberanía, dignidad y seguridad); claridad en la estructura del derecho
internacional y sus variados mecanismos de apoyo formales e informales; y una apreciación
histórica profunda de la seguridad social y sus teorías en el mundo. Hay esperanza de que la claridad
conceptual pueda mejorar el trabajo de operacionalizar la seguridad humana, para aquellos que
están en posiciones de responsabilidad y toma de decisiones. Además, para contribuir a lo anterior
y a crear un contexto de debate y de realización de políticas públicas, este paper procede en cinco
secciones. La siguiente sección introduce el ambiente alterado de la seguridad que ha movilizado la
reconsideración de los recientes enfoques al conflicto, pobreza, y seguridad estatal.

La tercera sección realiza brevemente rondas en las instituciones internacionales, países, e


investigadores que proponen formas alternativas de definir y especificar la seguridad humana.
Aunque la sección concluye que cualquier definición normativa (como esta) que aspira a ser útil,
debe ser lo suficientemente vaga como para incluir las especificaciones diversas. En respuesta a
estas conclusiones, la cuarta sección propone y elabora un marco conceptual para la seguridad
humana. La quinta sección relaciona este marco con la seguridad estatal, el desarrollo humano, y
los derechos humanos. La sexta sección cierra.

2. El ambiente alterado de la seguridad.


¿Por qué la seguridad humana, una noción que abarca sectores y continentes, implica personas y
grupos en mucho niveles; es un enfoque apropiado para estos tiempos? ¿Por qué no es suficiente
para cada institución responsable, responder cada urgencia caso por caso?

La razón fundamental es que los mecanismos salvaguardados para responder a las amenazas a la
seguridad no existen, y esto puede ser por la aparición de nuevas amenazas, más que por un diseño
deliberado. La configuración de las amenazas a la seguridad en este periodo post Guerra Fría de
globalización y avances tecnológicos, claramente son diferentes. Algunas amenazas son antiguas y
persistentes; otras son sin precedentes.

Las oportunidades para contrarrestar estas amenazas también han aumentado: hay una posibilidad
en este mundo contemporáneo de poner nuestros esfuerzos y entendimiento para lograr una
resistencia mejor coordinada hacia las fuerzas que hace insegura la sobrevivencia humana. La
tecnología como los cambios políticos han aumentado las posibilidades de una coordinación más
efectiva; los avances científicos continúan expandiendo nuestros conocimientos; los recursos para
enfrentar las amenazas son parcialmente próximos. Por lo que los problemas residen en el desajuste
entre las amenazas a la seguridad y los mecanismos de respuesta.

El ambiente alterado de la seguridad puede ser esbozado superponiendo diferentes descripciones


de cambios recientes en el ambiente de la seguridad. Empíricos, analíticos e institucionales:

2.1. Cambios empíricos observables.


Pruebas empíricas del aumento de las amenazas son familiares, y nos llegan casi todos los días en
las noticias. Por ejemplo, la naturaleza del conflicto ha cambiado a ser intra-estatal, con una alta
incidencia en las bajas civiles. Las presiones de la población junto con el consumismo contribuyen a
la inseguridad ambiental, el aumento de la inmigración, la importancia el agua y los recursos
energéticos. Crisis económicas, propagación del SIDA, el aumento de la desigualdad, son otros
problemas actuales. Los trágicos eventos durante y después del 11 de septiembre han movilizado
muchos recursos e instituciones en la comunidad mundial, como si nada más existiese para
responder al terrorismo internacional. Otras amenazas y cambios que han aumentado incluyen la
actividad criminal internacional, la proliferación nuclear, enfermedades droga-resistentes, colapso
financieros, amenazas ecológicas, desigualdad tecnológica, conflictos de género, clase, etnicidad, o
religioso.

Las descripciones empíricas de las amenazas o potenciales amenazas a la seguridad son esenciales
para ver el tamaño y profundidad de la amenaza, analizar lo crítica y aguda que puede ser, y para
mapear un paisaje con las amenazas. Sin embargo, estas solo describen una parte del paisaje.

2.2. Avances analíticos.


Los análisis teóricos, cualitativos y cuantitativos revelan las relaciones causales, e interdependencias
que vinculan o activan las amenazas a la seguridad; y forman las bases para las recomendaciones de
acción. Por ejemplo, las interrelaciones entre la pobreza y los conflictos. Aunque la relación no es
tan directa, claramente hay formas en que la pobreza contribuye al conflicto y viceversa. Estas
investigaciones pueden proporcionar ideas para que las instituciones actúen.

2.3. Cooperación internacional.


Las configuraciones y capacidades de las instituciones para responder a las amenazas a la seguridad
están rápidamente cambiando, tanto en los países como internacionalmente. Configuraciones
militares están cambiando en respuesta a las distintas amenazas. Ha aumentado la colaboración
entre agencias para el desarrollo y gobiernos naciones, junto con la elaboración de metas comunes,
lo cual ha permitido a la comunidad internacional revisar más dimensiones de la pobreza de una
forma más participativa y coordinada. Esto también ha pasado en el sector privado.
A pesar de estos avances, aún persiste una división profunda entre el trabajo de alivio de
emergencias, y el trabajo a largo plazo de reducir la pobreza: la comunidad internacional tienen dos
compartimientos separados, humanitarismo y desarrollo. Sin embargo, la necesidad de estas
sociedades no cae en estas dos categorías. La realidad demanda simultáneamente un mayor alivio,
rehabilitación e intervenciones de desarrollo. Por lo que mientras las amenazas han escalado, y las
posibilidades colaborativas también, aún permanece la necesidad de establecer nuevas
instituciones o medidas institucionales para responder a la Seguridad Humana.

3. El Concepto de la Seguridad Humana: Antecedentes históricos e interpretación reciente.


Esta sección revisa los numerosos conceptos de la seguridad humana de los académicos e
instituciones.

3.1. 1994 Informe del Desarrollo Humano y documentos posteriores de las Naciones Unidas.
La frase “seguridad humana”, se asocia mucho a este informe, hecho por Mahbub Haq, incluso
aunque el término circulara desde antes. La intención de la seguridad humana era hacer un puente
entre la libertar del querer y la libertar del miedo. La frase “libertar del miedo” indica ser libre de la
violencia, y la frase “libertad del querer”, ser libre de la pobreza.

El informe también fue creado como una agenda para la Cumbre Social en Copenhague, enfatizando
su preocupación con los seres humanos: “la seguridad humana es un niño que no murió, una
enfermedad que no se propagó, un trabajo que no se eliminó, una tensión étnica que no estalló en
violencia, un disidente que no fue silenciado. La seguridad humana no es una preocupación por las
armas –es una preocupación la vida humana y la dignidad” (1994:22)

El informe identifica cuatro características esenciales de la seguridad humana:


 La seguridad humana es una preocupación universal. Es relevante para todas las personas,
en países pobres y ricos.
 Los componentes de la seguridad humana son interdependientes.
 La seguridad humana es más fácil asegurarla a través de la prevención temprana que
intervenciones posteriores. Es menos costoso.
 Se centra en las persona. Se preocupa de cómo las personas viven y respiran en la sociedad,
cuan libremente ejercitan sus opciones, cuanto acceso tienen al mercado y las
oportunidades sociales –y si viven en conflicto o en paz.

Finalmente, el informe define la seguridad humana como:


1) Seguridad de amenazas crónicas como la hambruna, enfermedad y represión.
2) Protección de disrupciones repentinas y dañinas de los patrones cotidianos de la vida –ya
sea en el empleo, en los hogares o en las comunidades.

El informe desarrolla esta definición en relación a las siente dimensiones de la seguridad humana:
personal, ambiental, económico, político, comunitario, salud y seguridad en la comida. El informe
de 1999 sobre el Desarrollo Humano en la Globalización regresó al tema de la seguridad humana, y
pidió acciones para proporcionar seguridad humana en crisis económicas (por el contexto de la Crisis
Asiática de 1998), como también frente al crimen global, la degradación ambiental, y la
comunicación que amenaza la diversidad cultural (debido a la falta de diversidad en las películas,
lenguas y nomas de la violencia y pornografía, que prevalece en los medios). El informe de 1994
también fue citado por Kofi Annan en el informe a las Naciones Unidas del 2000 “We the People”.
3.2. Rothschild: Vínculos históricos y Asuntos Prospectivos.
Emma Rothschild habla de la “seguridad extendida” (dentro de la cual la seguridad humana se
encuentra) en el pensamiento Europeo. Al hacerlo, nota que los nuevos enfoques en la seguridad
han extendido los conceptos de la seguridad nacional, que son precedidos en cuatro direcciones:

1) “de la seguridad de las naciones a la seguridad de grupos e individuos: se extiende a la baja de


las naciones hacia las personas.
2) de la seguridad de las naciones a la seguridad del sistema internacional, o de un ambiente físico
supranacional: de la nación a la biósfera.
3) extendido horizontalmente. Diferentes entidades (como las personas, naciones y “sistemas”) no
pueden esperar estar seguras o inseguras de la misma forma; por lo que el concepto de
seguridad se extiende de lo militar a lo político, económico, social, ambiental, o seguridad
“humana”.
4) Responsabilidad política para asegurar que la misma seguridad se extienda: está difusa en todas
direcciones de los estados naciones, incluyendo hacia arriba las instituciones internacionales, y
hacia abajo los gobiernos locales o regionales, también hacia los lados por las organizaciones no
gubernamentales, la opinión pública y la prensa, y hacia las fuerzas abstractas de la naturaleza
o el mercado.” (1995)

La propuesta de Rothschild no solo posicionó la seguridad humana relacionándola con enfoques


históricos, también propuso formas para reflexionar sobre cómo la hacen menos inclusiva. Una
propuesta es que la sociedad internacional debería tener los recursos para tener políticas civiles que
previnieran los conflictos, en parte porque obtener el consenso para usar la fuerza en la prevención
de conflictos sería difícil de obtener. Rothschild plantea asuntos destacables como la autoridad,
coerción, generación de recursos, construcción de consenso, y subsidiaridad.

3.3. King y Murray, Thomas, Hampson, y Leaning y Arie.


Un número de autores se han concentrado en la libertad de necesitar o en el aspecto vulnerable de
la seguridad humana, sea causada por la guerra o por eventos estructurales como las crisis
financieras. Por ejemplo, King y Murray definen la seguridad humana como las expectativas
humanas de una vida sin experiencias de la pobreza generalizada. Proponen un índice de la
seguridad humana que incluyen dominios identificados como la salud, educación, ingresos, libertad
política, y democracia.

Caroline Thomas, destaca el aumento de la desigualdad traído por la globalización, y las medidas
insuficientes para resolverlo; escribe que la seguridad humana considera las necesidades básicas, la
dignidad humana y la democracia.

Según Hampson y colegas, el concepto de la “seguridad” puede ser definido como al ausencia de
amenazas hacia los valores del núcleo vital, incluyendo el valor humano más básico: la seguridad
física de la persona. También identifican la protección de las libertades básicas, las necesidades
económicas e intereses. Señalan que la seguridad humana es vista como un bien público
desprovisto, a causa de fallas del mercado y fallas políticas.

Leaning y Arie desarrollaron una propuesta de medición de la seguridad humana con una especial
atención a África. Su definición se basa en el enfoque de desarrollo humano y las capacidades, pero
enfatiza los aspectos psicológicos y no materiales de la seguridad. Describen la seguridad humana
como una precondición para el desarrollo humano.
Proponen tres claves para medir la seguridad humana:
1) Un sentido sustentable del hogar.
2) Redres sociales constructivas y familiares.
3) Aceptación del pasado y una comprensión positiva del futuro.
Estos componentes pueden ser medidos a través de estos indicadores: dislocación social, cambios
en la desigualdad horizontal, y tasas de descuento.

3.4. Paris: La seguridad humana como una categoría de investigación.


Roland Paris señala que la seguridad humana se identifica con una categoría amplia de investigación
sobre las amenazas militares y/o no militares a las sociedades, grupos y personas.

Figura 2

¿Cuál es la fuente de la amenaza a la seguridad?


Militar Militar, no militar, o ambas
Seguridad Nacional Seguridad Redefinida
Estados
(enfoque convencional (ej. Seguridad ambiental y
realista de los estudios de económica, (seguridad
¿Seguridad para quién?
seguridad) cooperativa o comprensiva))
Sociedades, Grupos y Seguridad Intraestatal Seguridad Humana
personas
(ej. Guerra civil, conflicto (ej. Amenazas ambientales y
étnico) económicas a grupos,
sociedades y personas)

3.5. La Comisión Internacional para la Intervención y Soberanía Estatal.


En diciembre del 2001, la Comisión realizó el informe La Responsabilidad de Proteger sobre “el
derecho a la intervención humanitaria” ejercido por algunos países.

Según el informe, la seguridad humana es un concepto emergente. Significa “la seguridad de las
personas- su seguridad física, bienestar económico y social, respeto a la dignidad y valor como seres
humanos, y la protección de sus derechos humanos y libertades fundamentales” (2001:98). Se
enfoca en las necesidades humanas que requieren asistencia y protección. Aunque el informe señala
la necesidad de reorientar las prioridades de la seguridad nacional para incluir no sólo gastos
militares, sino también a la seguridad interna social. Por otra parte, el informe reconoce que no
todos los Estados podrán completar esta responsabilidad, levantando la pregunta de qué hará la
comunidad internacional cuando esto pase, ya que señala que las instituciones internacionales
tienen un rol en salvaguardar la seguridad humana.

3.6. El Banco Mundial y las Voces de los Pobres.


EL Banco Mundial ha contribuido al debate de la seguridad humana, aunque en este caso solo usan
el término de “seguridad”, en el Informe de Desarrollo Humanos 2000. Identifica tres pilares para
reducir la pobreza: facilitar el empoderamiento, mejorar la seguridad y promover oportunidades. El
pilar de la seguridad se describe así: reducir la vulnerabilidad –a shocks económicos, desastres
naturales, enfermedades, discapacidades, y violencia personal- es una parte intrínseca para mejorar
el bienestar e incentivar la inversión en el capital humano.
La contribución de este informe es la fusión orgánica de áreas dispares de estudio: riesgos y
vulnerabilidades, estrategias de gestión del riesgo, y estudios que reconocen las distintas estrategias
dependiendo de la naturaleza y tamaño de la comunidad afectada, al nivel de las personas, la
comunidad internacional y el planeta.

Un focus group empleado para el informe, comentaron que la inseguridad significaba malaria, salud
pobre, violencia policial, violencia doméstica, desempleo, inflación. El Banco Mundial también ha
trabajado sobre el conflicto, llendo a países que han tenido conflictos civiles, desarrollando fondos
post-conflictos en 27 países, y programas de reintegración de personas refugiadas por ej.

3.7. Estructuras de Seguridad Regional.


La seguridad humana no significa que los militares deben diluir su foco en defender la educación
primaria, construcciones de carreteras y control de drogas. Varios escritores se concentran en la
transformación militar y las configuraciones de alianzas necesarias para proteger la seguridad
humana. Desde la perspectiva africana, Adebayo Oyebade y Biodun Alao señalan que los beneficios
del periodo post Guerra Fría es que África quedó libre de las luchas ideológicas occidentales,
pudiendo generar un sistema de seguridad Pan-Africano, que incentivará la integración y
cooperación económica, y un aparato colectivo en la resolución de conflictos. La Nueva Asociación
para el Desarrollo Africano (NEPAD) ha desarrollado un trabajo que engloba una agenda de la
seguridad humana: las condiciones a largo plazo para asegurar la paz y la seguridad en África
requieren políticas públicas que respondan las vulnerabilidades políticas y sociales.

La Organización de los Estados Americanos (OEA) también está reconsiderando su concepto de


seguridad: antes enmarcada en términos militares convencionales, hoy deben considerar varias
amenazas – terrorismo internacional, tráfico de drogas, lavado de dinero, tráfico de armas ilegales,
corrupción institucional, crimen organizado. En algunos países, la pobreza, enfermedades y la
degradación ambiental amenazan aún más la estabilidad y seguridad.

Los enfoques de seguridad regionales presentan varias preocupaciones; en particular las


relacionadas con la soberanía y las posibilidades de intervención. Estas discusiones –como también
los derechos humanos y los valores culturales- surgen como asuntos que requieren
implementaciones.

3.8. Canadá, Noruega, y Japón: Enfoques apropiados.


Estos países han incorporado la seguridad humana en sus marcos de política exterior. Canadá ha
tomado la seguridad humana como el paradigma para su política exterior y ha tomado un rol de
liderazgo en operacionalizarla, al mantener un distintivo foco en la seguridad, paz, desarrollo y la
cooperación internacional a lo largo de la Guerra Fría. Para el 2000 la agenda de seguridad en
Canadá había asuntos como la protección de civiles en conflictos armados, la reforma de las
sanciones de regímenes para mitigar los resultados humanitarios negativos, el impulso de los
derechos de las mujeres en lugares como Afganistán, y la necesidad de intervención humanitaria
para proteger de que haya una futura Ruanda por ej.

Noruega también se focaliza en la libertad del miedo dentro de la seguridad humana, e identifica
una agenda de prevención, el control de armas pequeñas, y operaciones de paz. Ambas naciones
fundaron una seguridad humana que pone énfasis en la protección de las personas. Fundaron la Red
de Seguridad Humana, cuyas reuniones anuales atraen ONGs y actores gubernamentales de 13
países, incluyendo Austria, Canadá, Chile, Grecia, Irlanda, Jordania, Malí, Países Bajos, Eslovenia,
Suiza, Tailandia. Se han movilizado frente a respuestas prácticas hacia las amenazas a la seguridad
humana.

Japón mantiene la definición más amplia de la seguridad humana, la cual “cubre todas la amenazas
que afectan la sobrevivencia humana, la vida cotidiana y la dignidad”. Particularmente, Japón no
prioriza la libertad del miedo sobre la libertad del querer, sino que las mantiene como objetivos
duales. Japón enfatiza en el fortalecimiento de los esfuerzos para lidiar con las amenazas hacia las
vidas humanas y la dignidad, como la pobreza, la degradación ambiental, drogas ilícitas, el crimen
organizado transnacional, enfermedades infecciones como el SIDA, el aumento de refugiados y las
minas antipersonales; requiriendo la cooperación entre varios actores de la comunidad
internacional, incluyendo gobiernos, organizaciones internacionales y la sociedad civil para
enfrentarlas.

Otros países han tomado acción para salvaguardar la seguridad humana, como Tailandia que trabaja
para proteger a los ciudadanos de Burma, y en el Congo y Burundi.

3.9. Voces Críticas.


La agenda de la seguridad humana naturalmente ha recibido críticas. Una de las críticas es su
vaguedad: Roland Paris señala que la seguridad humana es como el desarrollo sustentable –todos
están de acuerdo con eso, pero pocas personas tienen una clara idea de los que significa.
Definiciones existentes de la seguridad humana tienden a ser extraordinariamente expansivas y
vagas, abarcando todo desde la seguridad física al bienestar psicológico, lo cual entrega una pobre
guía a los hacedores de políticas públicas, y poco sentido a los académicos. Esta vaguedad igual
puede tener un valor positivo al mantener juntos coaliciones de intereses dispares.

Otra crítica es la incoherencia y la arbitrariedad. Cuando las potenciales amenazas son tan amplias,
¿cuáles son los criterios? Muchas veces la importancia de una amenaza a la seguridad humana es
señalada aparte de las otras amenazas, o algunas aparecen ser elegidas arbitrariamente o en
respuesta a los intereses de quienes sean responsables.

Por lo general, la seguridad humana es considerada ser muy amplia para ser usada. En la práctica,
la noción está siendo investigada y su implementación en círculos dispares. Sin embargo, una mejor
forma de interpretar la discusión conceptual puede ser concluir que una concepción adecuada de la
seguridad humana debe comprometer no solo una definición de trabajo, sino también un recuento
del proceso por el cual las instituciones, personas o naciones pueden adaptarse y operacionalizar el
concepto a una forma que sea relevante para sus propias capacidades institucionales y contextos
culturales. Un concepto de la seguridad humana debe incluir un recuento de los elementos que
contiene, y los procesos por los que la seguridad adquiere sus dimensiones.

4. Elementos de la Seguridad Humana.


Esta sección dará cuenta de cómo los elementos o dimensiones de la seguridad humana puede ser
coherentemente identificadas, y los diferentes tipos de investigaciones, consultas, y juicios que
subrayan el proceso.

4.1. El Punto Focal: ¿Consenso? ¿Amenazas?


¿Cuál debe ser la base epistemológica de un concepto de la seguridad humana? Una posibilidad
lógica es el consenso entre las instituciones, dado que esto se requiere para operacionalizar la
seguridad humana. Pero un acuerdo universal parece menos plausible, eso demuestra la historia de
los derechos humanos, ya que la existencia de acuerdo internacional formal no es equivalente a un
acuerdo en la práctica; el debate de los derechos humanos continua aun habiendo naciones que
han ratificado varios documentos. Por lo que ciertamente el consenso aunque insuficiente para la
base de la seguridad humana, es una parte integral de esta.

Otra forma de conceptualizar la seguridad humana es “nombrar las amenazas” cuyas respuestas
deben ser desarrolladas. Bajo esta perspectiva, los elementos de la seguridad humana serían las
amenazas a la recesión, agresión, degradación del suelo, contaminación, terrorismo, y otras que
tienen la suficiente magnitud como para calificar como amenazas. Sobre esto Ullman en
“Redefiniendo la Seguridad”, señala que además de las amenazas militares, eventos como el
aumento de la población, urbanización, y migración deberían ser consideradas como nuevas
amenazas. Pero enfocarse solamente en las amenazas tampoco es suficiente.

4.2. El Núcleo Vital


Se refiere a un conjunto de funciones fundamentales relacionadas a la vida digna. El término
“núcleo” hace referencia a que las instituciones no podrán proteger cada aspecto de la vida, pero sí
podrán proteger su núcleo.

La seguridad humana gana coherencia cuando especifica cuidadosamente lo que está tratando de
proteger: los eventuales elementos de la seguridad humana que toman forma en base a las
reflexiones de las personas, de sus propias experiencias y conocimientos, y de sus valores y
necesidades. Esta base epistemológica puede ser la razón práctica, y ya ha sido aclamada como la
fundación del desarrollo humano, y en algunos casos, de los derechos humanos.

También se destaca una característica que emerge más de un enfoque basado en las personas, que
de uno basado en las amenazas, y es que algunas instancias de la seguridad humana pueden ser
identificadas sin una respuesta inmediata, dejando abierta la posibilidad de que los “miedos y
necesidades” pueden ser identificados sin que haya una respuesta institucional –como el miedo de
una mujer que va a casa a una situación de violencia recurrente por parte de su esposo.

4.3. Especificando el Núcleo Vital: capacidades y derechos


El enfoque de las capacidades se compone de la libertad para disfrutar valores básicos como ser
alimentado, tener confianza, poder caminar sin miedo, poder vestir lo que uno quiere, poder opinar.
Esta libertad se preocupa con la oportunidad real que debemos tener para cumplir con lo que
valoramos, por lo que incluye las libertades civiles y políticas, y las positivas, económicas, sociales o
culturales. Las implicaciones de este enfoque son varias, primero solidifica el foco de la seguridad
humana en los seres humanos; segundo, enfatiza lo que la gente valora; tercero, también ofrece
una base para la realización humana en general; y cuarto, presenta una relación significativa entre
el desarrollo humanos y los derechos humanos.

Como puede ser evidente, los derechos fundamentales y las capacidades básicas comparten el
mismo terreno básico. No es necesario escoger entre ellos. Cada enfoque tiene sus propias
fortalezas, por ej. el enfoque de los derechos humanos defiende la pluralidad de los derechos. El de
las capacidades enfrentan directamente los asuntos necesarios a priorizar.

4.4. Un ejemplo del núcleo vital: la Libertad de prevenir una muerte prematura (sobrevivencia)
Al enfocarse en el lado humano de la seguridad (en vez de las amenazas solamente), las distinciones
tradicionales entre la muerte causada por guerras violentas o terrorismo o desastres naturales, y la
muerte causada por colapsos económicos, falta de salud o estructuras de seguridad social,
criminalidad y la degradación ambiental; se rompen. En segundo lugar, se hace una diferencia con
que la seguridad humana esté enmarcada en término de libertad y no en términos de hacer cumplir
las esperanzas de vida máxima, ya que las personas regularmente ponen sus vidas en riesgo por
deportes o emergencias, y esta decisión voluntaria y consciente de tomar riesgos quiere decir que
lo que suceda no sería atribuido a una brecha de la seguridad humana. Por esta razón, el núcleo
vital es descrito en el lenguaje de la libertad.

Una tercera observación, es que los juicios de valores difíciles aún son necesarios, como el ej. del
límite de la velocidad al conducir. Por otra parte, se necesita de una perspectiva a largo plazo para
construir un mundo que asegure a las personas de muertes prematuras. Por ej. la educación
primaria es una de las mejores formas para mejorar la salud a largo plazo, la adecuada gestión de
los recursos del agua y energéticos son necesarios para sobrevivir y prevenir conflictos. Obviamente,
la definición de “muerte prematura” es solo un aspecto de la seguridad humana. Porque hay varios
tipos de inseguridades humanas que este enfoque no incluye, como la libertad de condiciones de
salud no fatales; libertad de la hambruna crónica, de ser prisionero, de la violación, o ser
encarcelado si uno tiene la religión “correcta” o por no vestirse apropiadamente. Tampoco incluye
la libertar del apartheid o de la esclavitud o de la esterilización involuntaria.

4.5. La seguridad humana multidimensional


Un marco conceptual que no reconoce los múltiples valores intrínsecos estaría incompleto. Aunque
muchos señalan que ampliar un objetivo compromete su factibilidad. Por lo que la atracción por
definiciones más estrictas proviene de la idea de que el número de elementos conceptuales en una
definición corresponde a la amplitud de ésta. La tensión entre factibilidad y amplitud seguirá en las
discusiones sobre la seguridad humana.

4.6. Amenazas críticas y agudas


Es necesario identificar las amenazas al núcleo vital de las vidas de las personas. Esta sección
identifica varias distinciones en el riesgo y análisis de amenazas: directas vs. indirectas, e
idiosincráticas vs. riesgos covariantes.

Las amenazas directas son causadas deliberada o intencionalmente por un grupo, sean terroristas,
Estados, facciones rebeldes, o grupos paramilitares. Los órganos del Estado también pueden
amenazas la seguridad, como las fuerzas policiales que violan derechos humanos golpeando o
torturando prisioneros.

Las amenazas indirectas o estructurales son acciones por los grupos o sistemas o instituciones cuyas
amenaza a la seguridad humana es un subproducto de una acción realizada por otras razones. Por
ej: el mercado de armas pequeñas puede desestabilizar una región. También pueden ser actos de
omisión.

Los riesgos idiosincráticos afectan a las personas o sus hogares. Los riesgos covariantes afectan a
grupos –ya sean grupos pequeños como comunidades, o grandes como nacionales.

4.7. Adecuación institucional


Trata sobre cómo la seguridad humana se relaciona con las instituciones existentes y las
organizaciones. Existen dos enfoques de cómo las instituciones se acercan a la seguridad humana:
la directa proporción de seguridad humana, y el respeto.
5. La seguridad humana y otras políticas conceptuales: coherencia y distinciones.

El desafío final de este paper es responder al concepto de seguridad humana vinculado a la


seguridad estatal, desarrollo humano, y las iniciativas de derechos humanos.

5.1. La seguridad humana la seguridad estatal


Dentro de las diferencias se encuentra la presentación o substancia de la agenda de seguridad, se
dice que la seguridad humana presentan una promesa de mayor cooperación pero quizás poco
realista en el orden internacional. Otra diferencia es la población que se considera. Las agencias del
Estado tienen diferentes responsabilidades con los ciudadanos que con la población internacional.

En segundo lugar, la seguridad estatal tiene un objetivo adicional que es diferente a la seguridad
humana: maximizar el poder del Estado, como meta de la política exterior en las teorías realistas.
Solo hay desacuerdos entre estas agendas cuando se dice que compiten entre sí, como en el debate
de la intervención y “la soberanía responsable”. Pero algunos conceptos de la seguridad estatal
también pueden desminar la seguridad humana.

5.2. La seguridad humana y el Desarrollo humano


El concepto de desarrollo humano se refiere a la expansión de las libertades de las personas o
capacidades, no sólo en términos de ingresos, sino también en áreas como la salud, educación,
tecnología, ambiente, empleo. Ambos conceptos comparten cuatro perspectivas fundamentales: se
centran en las personas, son multidimensionales, tienen miradas amplias de la realización humana
en el largo plazo, y responden a la pobreza crónica.

También hay diferencias: la seguridad humana tienen una naturaleza más estricta. El núcleo vital
que define la seguridad humana esta comprimido en un conjunto de capacidades básicas. El fin de
la seguridad humana no es la expansión de todas las capacidades, sino la proporción igualitaria de
las capacidades vitales a las personas. El desarrollo humano es más extensivo e incluye asuntos que
no son básicos. Otra diferencia es que la seguridad humana busca responder amenaza s como la
violencia y crisis económicas. Reconoce que las guerras son una posibilidad real, y que la inversión
en la prevención de los conflictos es esencial. El desarrollo humano se concentra en engendrar
progreso. Una tercera diferencia es el horizonte de tiempo. Para el desarrollo humano se invierte
un monto considerable de esfuerzos en construir instituciones, capacidades, y hacer que las
acciones sean sustentables en el tiempo. La seguridad humana comparte esto, pero a veces debe
actuar en periodos cortos de tiempo y sin participación.

5.3. Los derechos humanos y la seguridad humana


Los derechos humanos se han vuelto en una normativa ampliamente aceptada en las relaciones
internacionales y la política exterior. La seguridad humana y los derechos humanos están
profundamente interconectados en su motivación y áreas de preocupación. Ambos enfoques
buscan responder a proteger los derechos y libertados de las personas; aunque la seguridad humana
puede ser instrumental para los países de otras maneras. Ambos responden a la violencia y la
pobreza. Ambos consideran los derechos humanos como indivisibles. La diferencia entre ambos es
que la seguridad humana explícitamente reconoce la necesidad de priorizar y discutir los elementos
de la seguridad humana. Los activistas de derechos humanos señalan que cada derecho es
igualmente fundamental e indivisible, y que ninguna institución puede legitimar escoger uno.
Probablemente la divergencia más significativa entre la seguridad humana y los derechos humanos,
no es conceptual. La diferencia se encuentra en los instrumentos a instituciones que implementarán
la seguridad humana. Por ej. los activistas de derechos humanos generalmente usan instrumentos
legales para prevenir abusos a los derechos humanos, o para castigar a transgresores; la seguridad
humana usará fuerzas políticas, económicas y quizás militares para intentar realizar la seguridad
humana con la misma fuerza que caracteriza los esfuerzos de la seguridad nacional. Evidentemente
una ganancia para la seguridad humana será una ganancia para los derechos humanos y viceversa.
La pregunta queda en cómo ambos enfoques pueden fortalecerse y complementarse entre sí.

Conclusión

Este paper ha presentado un concepto de trabajo de la seguridad humana, sobre sus principales
definiciones, características y discusiones de la literatura. Se muestra cómo el concepto puede ser
coherente, basado en la razón práctica, en cómo se especifican sus procesos para que factible y
apropiada. La definición retiene varios grados de libertades. Pero las situaciones concretas tienen
menos. Están contenidos por datos, realidades políticas, recursos limitados y por las necesidades de
acciones urgentes. Aunque la seguridad humana no es un concepto no familiar, y aunque se
superpone con conceptos que subrayan sistemas de la seguridad estatal, el desarrollo humano y la
protección de los derechos humanos; su énfasis distintivo genera una contribución valiosa que
requiere el presente ambiente alterado de la seguridad. Dicho esto, las decisiones, los equilibrios de
peso, los juicios de valores, son encontrados en la textura de los problemas reales. Para poner la
seguridad humana en práctica, se necesita enfrentar estos desafíos.

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