4. ¿Qué es la escuela? Y ¿Cuáles son los procesos propios de su desarrollo?

“El hombre se encuentra condenado a ser libre”.

Jean Paul Sartre

Considerando que la Educación es un fenómeno complejo, cada una de las partes que la
componen e interactúan entre sí, también asumen esa característica, por tanto, establecer
una definición, es igualmente enmarañado. Sin embargo, luego de la revisión de algunos
textos, podemos señalar que la Escuela corresponde a una dimensión determinada por
principios institucionales, donde se construye el conocimiento colectivo, a partir de la
interrelación entre el estudiante, el profesor y el proceso de enseñanza-aprendizaje-
investigación, como parte de la formación del ser humano. En este sentido, la función de la
escuela, está centrada en el desarrollo del hombre, de manera que éste, cumpla con las
necesidades sociales e ideológicas requeridas en un momento determinado de la historia.
En este sentido, los sociólogos franceses Pierre Félix Bourdieu y Jean Claude Passeron,
afirmaron que la escuela es un “lugar de transmisión e imposición de la ideología
dominante”. En este orden, cobra legitimidad la idea de Sartre publicada en su primera obra
filosófica El Ser y la Nada: “Cada hombre es lo que hace con lo que hicieron de él”, es decir,
nuestra existencia sería modelada desde la escuela y otras dimensiones, con el propósito
servir al funcionamiento del establishment.
Sea como sea, para un eficiente funcionamiento, la escuela requiere que la gestión
favorezca el desarrollo educativo de la misma, a través de distintos procesos que
permitirían conseguir la calidad, equidad y pertinencia. En esta línea encontramos en primer
lugar, los Procesos Organizacionales, los cuales apuntan al capital humano y su capacidad
de adaptación a los distintos cambios de la estructura institucional. En segundo lugar,
encontramos los Procesos Educacionales, relacionados con la esfera pedagógica con foco
en la formación integral del hombre, entendida como el conjunto de elementos cognitivos,
valóricos, motrices, volitivos y afectivos. Finalmente, los Procesos Culturales, los cuales
buscan darle sentido e identidad cultural a la escuela.
No obstante, la escuela también puede propiciar la libertad del hombre, en tanto, desarrolle
la esencia del individuo como tal, a través del traspaso del pensamiento crítico, la
internalización del Estado de Derecho, el trabajo colectivo, la restructuración de los axiomas
posmodernos, entre otras manifestaciones humanas. Por lo tanto, la escuela se definiría
como un espacio de dicotomía donde por un lado encontramos la formación integral, para
un ser social e ideológicamente aceptado, y por otro lugar a la formación integral para la
búsqueda del autoperfeccionamiento y la libertad.
Vladimir Coppo Galaz