ELJAZMIN HERRAMIENTAS PARA LA VIDA GUIA DE TRABAJO 2
DISEÑO BI-TRIDIMENSIONAL PROF. FÉLIX E. MORALES Indicadores de logro: Conceptualizar parámetros técnicos y estéticos para la elaboración de cualquier diseño, a partir de los principios básicos del mismo. Manipular los distintos conceptos y etapas de los sistemas constructivos, mediante la realización de trabajos prácticos en pequeña escala y con materiales diversos. INTRODUCCIÓN La palabra diseño proviene de la palabra latina designio, similar a la palabra inglesa design y a la italiana designare. En dichos casos, se observa como las palabras: designio, design y designare se forman a partir de dos monemas: “De” que significa “Pertenecer a” y “Signa-Signum” que significa “señal, insignia, marca”. Dado lo anterior, “diseño” terminaría siendo un concepto que encierra el hecho de elegir signos que serán los elementos constituyentes de algo y que conforman su identidad y pertenencia. El rol del diseñador entonces, es crear formas que extrae del mundo de sus ideas, de su mente, para luego informarle a la materia mediante algún modo de producción la forma que debe adquirir. Cuando se hace referencia a la forma de un objeto, se está refiriendo a todo lo que de éste se puede percibir. La forma se revela mediante una serie de estímulos que son captados por los sentidos de manera integral. Estos estímulos son manejados intencionalmente por el diseñador en la creación de la forma de un objeto o producto, haciendo que este sea atractivo para un determinado mercado. Estos estímulos se denominan atributos formales y se clasifican en dos grandes categorías: atributos perceptivos y atributos compositivos. Atributos perceptivos. Son los atributos que captan cada uno de los sentidos: los geométricos -que están ligados a la vista-, los superficiales -vista y tacto- como el color, la textura, el brillo y la luminosidad, sonoros (oído) y químicos (olfato y gusto. Estos atributos definen la forma sensible del producto diseñado. Atributos compositivos. Componen la organización que el diseñador dispone para los atributos perceptivos con criterios estéticos, para lograr que su producto sea atractivo ante el consumidor. Entre estos se encuentran la unidad, el dinamismo visual, la proporción, el equilibrio, el ritmo y el movimiento. Estos atributos definen la forma estructural del producto u objeto diseñado. EL COLOR El color en sí no existe, no es una característica del objeto, es más bien una apreciación subjetiva nuestra. Por tanto, podemos definirlo como, una sensación que se produce en respuesta a la estimulación del ojo y de sus mecanismos nerviosos, por la energía luminosa de ciertas longitudes de onda. En otras palabras, es una experiencia sensorial provocada por la emisión de luz, reflejada por los objetos sobre la que ésta incide en una determinada intensidad, que responde a las longitudes de onda y a diferentes valores de brillo que lo determinan en sus tres características principales: la “tonalidad o matiz”, la “saturación o intensidad” y la “luminosidad o claridad”. La tonalidad o matiz viene determinada por las diferentes longitudes de onda reflejadas por los objetos y permite la clasificación de los colores, la saturación o intensidad define la mayor o menor intensidad dependiendo de la cantidad de blanco que contiene y la luminosidad o brillo es el atributo que se relaciona con la cantidad de luz o claridad. Un cuerpo opaco, es decir no transparente, absorbe gran parte de la luz que lo ilumina y refleja una parte más o menos pequeña. Cuando este cuerpo absorbe todos los colores contenidos en la luz blanca, el objeto parece negro. Cuando refleja todos los colores del espectro, el objeto parece blanco. Los colores absorbidos desaparecen en el interior del objeto, los reflejados llegan al ojo humano. Los colores que visualizamos son, por tanto, aquellos que los propios objetos no absorben sino que los propagan. El tomate nos parece de color rojo, porque el ojo sólo recibe la luz roja reflejada por la hortaliza, absorbe el verde y el azul y refleja solamente el rojo. Un plátano amarillo absorbe el color azul y refleja los colores rojo y verde, los cuales sumados permiten visualizar el color amarillo. Un objeto blanco contiene una sustancia que no absorbe ningún color del espectro. Todo el espectro se refleja. En el caso del negro, vemos el fenómeno contrario. En realidad, no existen sustancias que absorban totalmente una parte determinada del espectro y reflejen otra al cien por cien. Esto podemos ilustrarlo con el color rojo. De los muchos colores rojos existentes, elegimos primero el bermellón. Miramos qué parte del espectro se refleja en este color y resulta que la parte roja es la parte mayor. Pero además vemos que también están presentes todos los demás colores, principalmente el naranja y el amarillo. Ninguno de los colores es absolutamente puro. Cada uno contiene huellas de los demás. El color más prominente que se encuentra junto al principal es el que más influye en éste. También el blanco, el negro y el gris son puros sólo en teoría. Nunca se refleja una cantidad exactamente igual de cada color. Registro del color Son dos los sistemas de registro del color: el aditivo y el sustractivo. Utilizan modos diferentes para registrar y plasmar el color. El sistema sustractivo es aquel que combina pigmentos (materia en forma de gránulos presente en muchas células vegetales o animales) cian, magenta y amarillo y de la unión de los tres se obtiene el negro, que son los colores básicos de las tintas que se usan en la mayoría de los sistemas de impresión, dibujo y pintura, motivo por el cual estos colores han desplazado en la consideración de colores primarios a los tradicionales. El sistema aditivo, se basa en la suma de radiaciones de diversa longitud de onda, que se combinan a partir de los colores luz primarios: rojo, verde y azul, la suma de los tres produce la luz blanca. En este sistema la mezcla de color se origina por superposición de los colores a modo de filtro, pudiéndose comprobar también que el mecanismo humano de la visión actúa del mismo modo. Es el utilizado en los aparatos electrónicos de producción de imágenes: la televisión y el ordenador. Estos funcionan por puntos que se agrupan en tríos de color (rojo, azul y verde), que se excitan a través de una señal eléctrica. El conjunto de la imagen está compuesto por una red de puntos luminosos de un determinado color que a la distancia adecuada parecen fusionados entre sí. CLASIFICACION DE LOS COLORES Colores Primarios Los colores primarios son aquellos colores que no pueden obtenerse mediante la mezcla de ningún otro, por lo que se consideran únicos. Dependiendo del ámbito se pueden encontrar tres juegos de colores primarios: 1. Los artistas y diseñadores parten de un juego formado por el rojo, el amarillo y el azul. Mezclando pigmentos de éstos colores pueden obtenerse todos los demás tonos. 2. El segundo juego de primarios es el del rojo, verde y el azul, conocidos como primarios aditivos. Son los primarios de la luz y se utilizan en el campo de la ciencia o en la formación de imágenes de monitores. Si se mezclan en distintos tantos por ciento, forman otros colores y si lo hacen en cantidades iguales producen la luz blanca. 3. El tercer juego se compone de magenta, amarillo y cian. Se tratan de los primarios sustractivos y son los empleados por los impresores. En imprenta, la separación de colores se realiza utilizando filtros para restar luz de los primarios aditivos, con lo que se obtienen los colores de impresión por proceso sustractivo. Colores Secundarios Los colores secundarios se obtienen de la mezcla en una misma proporción de los colores primarios. Son el violeta, naranja y verde. Los colores secundarios funcionan bien cuando se usan uno con otro o en combinación con los primarios. Debido a su intensidad, se usan frecuentemente para acentuar, especialmente con colores neutros. Colores Terciarios Mezclando un primario y un secundario se obtienen los llamados colores intermedios (I), que como su nombre indica están "entre medio" de un color primario (P) y un secundario (S) o viceversa. Otra característica de estos colore es que se denominan con los colores que intervienen en su composición, primero citando el color primario y a continuación el secundario: amarillo-verdoso, azul-verdoso, azul- violeta, rojo-violeta, rojo-anaranjado y amarillo-anaranjado. Estos colores intermedios coinciden con los denominados colores terciarios. EL CÍRCULO CROMÁTICO El círculo cromático – también llamado círculo de matices, rueda cromática o rueda de color – es el resultante de distribuir alrededor de un círculo, los diferentes colores que conforman el segmento de la luz visible del espectro solar, descubierto por Newton, y manteniendo el orden correlativo: rojo, naranja, amarillo, verde, azul ultramar y violeta. El círculo cromático más común – el usado por los artistas pictóricos – se basa en el rojo, amarillo y azul, el sistema sustractivo imperfecto que suelen adoptar los profesionales que trabajan con pintura, tejidos u otros materiales reflectores. Los colores primarios de la rueda se combinan también con los secundarios, cada uno de los cuales representa una combinación de primarios adyacentes. También se incluyen seis terciarios, con los que se obtiene un total de 12 colores. La rueda de procesos – basada en el modelo CMYK, de la impresión gráfica – muestra las mezclas de tinta cian, magenta y amarilla. Al contrario que otras ruedas sustractivas, esta muestra un espectro completo de colores, incluidos el rojo, verde y azul como secundarios relativamente puros.