El concepto de modelo didáctico constituye un instrumento fundamental para
abordar los problemas de la enseñanza en los distintos niveles educativos, en
tanto contribuye a establecer los vínculos entre el análisis teórico y la práctica docente. Cualquier planteamiento educativo que pretenda ser crítico y alternativo no puede prescindir de este supuesto básico (García Pérez, 2000). A lo anterior debe agregarse que cada vez se otorga mayor importancia a los influjos que reciben los alumnos, no sólo como consecuencia de la transmisión explícita en el currículo oficial, sino también como resultado de las interacciones sociales de todo tipo y que, a la postre, forman parte de la corriente de ideas que conecta el ámbito eduativo con el resto de la sociedad. Se trata en definitiva de un “currículo oculto” que termina convirtiéndose en el verdadero currículo operante que garantiza la socialización del estudiante según la lógica del sistema dominante (Torres Santomé, 1991). Dicho con palabras de Doyle (1977), la socialización se produce no sólo a través de la estructura de tareas académicas sino también mediante la estructura de relaciones sociales.
En este marco, es necesario considerar que existen diferentes modelos
didácticos que sustentan por un lado al enfoque educativo tradicional y por otro a las corrientes transformadoras. Entre los modelos propiciados por estas últimas, los llamados modelos didácticos alternativos resultan particularmente apropiados para la enseñanza de las ciencias naturales en general. El enfoque constructivista y el aprendizaje por investigación del alumno atraviesa una etapa de consenso emergente según el punto de vista de Liguori y Noste (2005). Estos autores consideran además la conveniencia de acompañar este enfoque con una reflexión permanente de la propia práctica docente, capaz de generar un conocimiento profesional a partir de un perfil de docente-investigador. Este perfil implica el desarrollo de una serie de capacidades, entre las que se destacan: a) la formulación de situaciones problemáticas adecuadas a la lógica de los alumnos, a la coherencia científica y a las necesidades socio-ambientales, b) el planteo de hipótesis de progresión del conocimiento que, a partir de las representaciones previas, sugieran estrategias de aprendizaje que conduzcan a la construcción de ideas básicas cada vez más amplias y complejas, c) el diseño de actividades que promuevan la investigación por parte de los alumnos y con ello la evolución de los conceptos iniciales, d) la interpretación de los datos significativos que surgen de las actividades desarrolladas para la evaluación de los aprendizajes de los alumnos y de la propia tarea docente.
La Universidad Los Ángeles de Chimbote ha emprendido la adopción de un
Modelo de Educación Abierta y a Distancia, en régimen blended – learning, que busca posicionarla estratégicamente en la sociedad del conocimiento desde un enfoque de responsabilidad social, según la Doctrina Social de la Iglesia.
El modelo parte de la redefinición de los conceptos de liderazgo en la institución,
los cuales se identifican en dos niveles, el liderazgo estratégico accionado por la gerencia y el liderazgo académico ejercido por los docentes.
Unido a estos tipos de liderazgo está la necesidad de reestructurar la universidad
a través de sistemas de gerencias (estructura organizativa en equipo) y la cultura de aprendizaje (ideología y teoría pedagógica de la institución). En ese sentido, la universidad ha adoptado los estándares de calidad que plantea la Norma Internacional, ISO 9001-2000 con el objetivo de conducir a la organización hacia el tránsito a una universidad abierta que demuestre eficacia y eficiencia en los procesos académicos con uso intensivo de las Tecnologías de la Comunicación e Información, TICs.
Este propósito requiere de la implementación y posicionamiento cognitivo de los
instrumentos de planeamiento estratégico gestados desde la Gerencia Corporativa (Proyecto Educativo, misión, visión, política, objetivos, etc), siendo los funcionarios, docentes y administrativos, quienes participarán de manera activa en la estructura, identidad, responsabilidad y adaptación de metas. Esto asegurará la emergencia de un liderazgo académico en el mediano plazo sustentando la transformación de la ULADECH en universidad abierta y a distancia.