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Los Sindicatos en su Laberinto, Vigencia de los Derechos Laborales Internacionales en México, 2000-2012

“LOS SINDICATOS EN SU LABERINTO, VIGENCIA DE LOS DERECHOS


LABORALES INTERNACIONALES EN MÉXICO, 2000-2012”

DOCUMENTO METODOLÓGICO
Los Sindicatos en su Laberinto, Vigencia de los Derechos Laborales Internacionales en México, 2000-2012

Índice.

Contenido. Página

Introducción. I

1.- Justificación de la Importancia del Tema de Investigación. X

2.- Objetivos de la Investigación. XIII

3.- Planteamiento y Delimitación del Problema. XV

4.- Preguntas de Investigación. XIX

5.- Marco Teórico y Conceptual de Referencia. XXI

6.- Formulación de Hipótesis. XXVIII

7.- Prueba Empíricas o Cualitativas de la Hipótesis. XXIX

Conclusiones y Nueva Agenda de Investigación. XLIII

Bibliografía Básica. XLIX


Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

INTRODUCCIÓN

Porque a todos nos debería preocupar la necesidad de analizar los problemas que atañen
a nuestra sociedad mexicana actual y de manera más específica los relacionados con el
sustento cotidiano, de los cuales en esta ocasión trataremos el sindicato y los derechos
laborales internacionales. Para un mayor entendimiento y con el objetivo de orientar al
lector sobre la forma en la cual será diseñada la investigación se presentará una parte
metodológica, donde se describe con precisión la importancia de estudiar “Los
sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en
México, 2000-2012”, los objetivos planteados, la delimitación y el planteamiento preciso
del problema a estudiar, las preguntas de investigación y las hipótesis desprendidas de
éstas. Asimismo, se puntualiza la forma en que se constataron y falsearon las hipótesis
que guían este estudio, por otra parte se describirán las fuentes de información las cuales
serán para el apoyo de la formación del documento, finalmente se llegará a la parte donde
se describirán las conclusiones a las cuales se llegó con la investigación realizada.

La presente investigación, surge del interés por tratar un tema que no es nuevo, pero si es
uno de los más importantes hoy en día; el sindicato la influencia dentro del derecho
laboral, las leyes internacionales, la situación económica y social que conlleva a la
decisión de asociarse y protegerse dentro del recinto laboral para buscar nuevas
oportunidades, y la esperanza de una mejor calidad de vida, abordamos al objeto de
estudio a partir de sus manifestaciones materiales cuyo origen es explicado y determinado
en última instancia por factores económicos, sin dejar de lado el papel del sujeto histórico-
social transformador de esos factores económicos, legales y políticos.

Este trabajo, parte de la premisa de que a medida que la ciudadanía se involucre en las
prácticas gubernamentales y en los procesos de rendición de cuentas, podrá revertir de
manera gradual las malas prácticas, costumbres y desatención que los ciudadanos hacia
el gobierno y al mismo tiempo, constituirá un elemento importante para abatir la
corrupción, impulsar la transparencia y contribuir a la transformación del gobierno y una
administración pública más democrática que no se vea rebasada por las demandas de la
sociedad en sus diferentes aspectos.

Lo que se pretende demostrar con estas investigaciones, es que si la sociedad conozca


más los temas sociales, políticos y económicos de México y así tendrá elementos para
criticar corregir y exigir de su gobierno una mayor atención y solución en los problemas
cotidianos; para un desarrollo integral de un México necesitado de crecimiento y mejor

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

calidad de vida.

A través de la historia se ha comprobado que la asociación entre iguales ya sea por puro
interés, o necesidad burocrática la clase trabajadora que integra este tipo de
agrupaciones, se ha visto condicionada a realizar un esfuerzo extraordinario para evitar la
desventaja en la dualidad económico - política, en que siempre se ha encontrado.

Ese esfuerzo originó dos de las conquistas de mayor relevancia, la figura del sindicato, y
el derecho laboral, los cuales al mismo tiempo que ha evolucionado gradualmente,
también se ha visto afectada por diversos vicios. Como el mal manejo por parte de los
representantes, quienes perjudican por ambos lados, al realizar actos fraudulentos y en
contra del trabajador, además de frenar el progreso natural de la figura del sindicato.

En México durante las últimas décadas el derecho laboral y el movimiento sindical han
impulsado importantes elementos al desarrollo nacional. En su forma moderada el
movimiento sindical ha luchado por la defensa de los derechos del hombre y la mujer; así
como por la promoción de valores y principios universalmente reconocidos como la
igualdad, la no discriminación y la no violencia, justicia en la prestación del trabajo,
mejorar la calidad de vida y establecer una valorización del trabajo.

Los derechos laborales representa el rescate de la economía del país y sobre todo es el
mejor instrumento para mejorar las condiciones de trabajo, dignificar la calidad de vida de
la clase trabajadora y tener una valorización del trabajo, lográndolo a través de una nueva
cultura laboral, regida por las condiciones políticas, económicas, sociales y culturales del
momento.

Esta investigación es el resultado del análisis de las relaciones individuales de trabajo y lo


que implica la renuncia de los derechos de los trabajadores durante la relación de trabajo
y aún después de está, pues corresponde poner de manifiesto que muchas veces el
trabajador desconoce sus derechos, al permitir que sean violados o limitados por el patrón
que constantemente está buscando la forma de no cumplir ciertas responsabilidades, ya
sea en el momento de expresar el acuerdo mutuo o al expresar la voluntad del trabajador;
por lo que este trabajo tiene por objeto presentar una propuesta a los funcionarios de la
Juntas de Conciliación y Arbitraje con respecto al tema de los derechos laborales
irrenunciables.

Corresponde a las Juntas de Conciliación y Arbitraje el solucionar las controversias


laborales que ante ellas se presentan, en el que se respeten y cumplan las normas de

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

trabajo, al momento en que surge la terminación de la relación de trabajo o del conflicto,


para evitar la renuncia de derechos de los trabajadores, dado que toca a esos
funcionarios, el corregir o subsanar deficiencias u omisiones en las relaciones de trabajo,
así como en sus formas de terminación de conflictos; esto, basado en el hecho de que el
trabajador no conoce sus derechos y que tal circunstancia es aprovechada por el patrón
que pone de manifiesto renuncia de derechos en perjuicio del primero.

Desde una perspectiva histórica, el trabajo de las personas ha transitado desde


esquemas caracterizados por el esclavismo por parte de quienes se consideraban los
más fuertes, hasta el establecimiento de mecanismos de sometimiento por aquellas
personas o grupos sociales que detentan la propiedad de los medios de producción y que
encuentran respaldo a sus pretensiones de flexibilizar las relaciones de trabajo en
detrimento de los derechos laborales de los trabajadores, con la instrumentación de
políticas públicas a favor de los intereses empresariales.

En los tiempos contemporáneos, la situación del trabajo en México se manifiesta de


manera particular en los bajos ingresos de la clase trabajadora, que les limita tener un
adecuado nivel y calidad de vida, lo que se agrava de forma significativa a partir de que
los denominados tecnócratas ascienden al poder gubernamental en el periodo
presidencial de Miguel de la Madrid (19821988) e imponen un modelo económico de corte
neoliberal.

A raíz del ascenso de neoliberales al poder, en los últimos 25 años, los trabajadores han
resentido el efecto de las políticas y programas públicos que únicamente han favorecido a
los empresarios con el argumento de que los esquemas de trabajo, así como el marco
jurídico laboral vigente, son obsoletos y rígidos para hacer frente a los mercados
internacionales y a las innovaciones tecnológicas. Consideraciones empresariales
gubernamentales, que a los ojos de los trabajadores no se pueden obviar, pero que no
deben tomarse como argumentos para que no se mejoren sus remuneraciones y les
impongan la necesidad de percibir el trabajo con ideas de que otros pueblos, como los
orientales, han modificado sus valores hacia las actividades laborales para poner en
práctica nuevas formas de realizarlas y los empresarios han intentado imponer la
denominada nueva cultura laboral con dicho propósito.

Es importante para toda sociedad tener un marco jurídico que garantice nuestros
derechos como personas para lograr la armonía y la convivencia dentro de ella, de igual
manera es importante tener una legislación que contenga los derechos irrenunciables a

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los trabajadores y que sean plasmados y reconocidos en una ley suprema para
garantizarlos frente al abuso y la explotación.

La investigación se orienta al estudio de los derechos del trabajador y a las relaciones


individuales de trabajo, haciendo mención de lo que implica la renuncia de los derechos
de los trabajadores durante la relación de trabajo y aún después de ésta, se hará también
un análisis de la importancia del principio de irrenunciabilidad de los derechos laborales,
como principio protector y defensor de la clase trabajadora, ya que muchas veces sus
derechos son violados o limitados por el patrón; se mencionara los medios para
solucionar los conflictos que surgen entre patrón y trabajador y sus posibles soluciones
que tienen para someter sus diferencias a un mejor arreglo para ambas partes.

Acogerse a la ley es fundamental para defender y proteger los derechos del trabajador,
corresponde a las Juntas de Conciliación y arbitraje el solucionar las controversias
laborales que ante ellas se presentan, en que se respeten y den cumplimiento a las
normas de trabajo, al momento en que surge la terminación de la relación de trabajo o del
conflicto, para evitar la renuncia de los derechos de los trabajadores, corresponde a los
funcionarios, corregir o subsanar las deficiencias u omisiones en las relaciones de trabajo,
esto es un hecho importante; ya que el trabajador no conoce sus derechos y tal
circunstancia pone en desventaja al trabajador y corresponde a estos órganos hacer una
defensa legal para los trabajadores.

Flexibilización de las relaciones laborales ha logrado una mejor comprensión de los


efectos que ha tenido el movimiento obrero en la vida nacional, es necesario empezar por
saber los conceptos básicos qué se entiende por la lucha sindical, y cuál ha sido la
participación para la mujer; Lo cual abordaremos más adelante.

La reforma laboral se ha traducido en desregulación de las relaciones laborales. En la


medida en que la ley es más laxa, la negociación colectiva cobra un mayor peso en la
ordenación de las condiciones de trabajo.

Las organizaciones sindicales son elementos centrales en la dinámica social y política,


dada su capacidad de participar en decisiones que afectan no sólo a las condiciones de
trabajo sino en general al desarrollo de la sociedad. Podemos definirlas como estructuras
de poder para la defensa de los intereses de los trabajadores/as, que se reconocen como
clase diferenciada, con intereses contrapuestos a los del empresariado. Es decir un
sindicato es la organización de los trabajadores y trabajadoras, su medio de negociación
con el empresariado y el estado para la adecuada regulación de las relaciones laborales.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La debilidad que experimenta el sindicalismo en la actualidad es evidente. Su incapacidad


de hacer frente a las medidas conservadoras de flexibilización del mercado laboral se
traduce para trabajadores y trabajadoras en inestabilidad, pérdida de poder adquisitivo,
desempleo. Ante esta situación de crisis el sindicalismo ha de afrontar nuevos desafíos,
entre otros la adecuación a las características de la clase obrera actual, fragmentada y
diversa; y por lo tanto desarrollar una acción sindical que se oriente a la defensa de los
intereses comunes, pero que también contemple las necesidades diferenciadas.

Como organización, los sindicatos se dotan de una estructura con diferentes niveles de
responsabilidad, donde se produce un reparto de tareas y donde se establecen
mecanismos para la toma de decisiones. En este sentido, los sindicatos se han
configurado como instituciones complejas, poco dinámicas, en las que se ha impuesto la
burocratización y el centralismo frente a la participación y la democracia.

Hay que señalar que son numerosos los factores que influyen en esta acumulación de
poder: la extensión del campo de actividad que hace más complicado su funcionamiento y
que fuerza a la especialización técnica para garantizar el buen funcionamiento de la
organización, la opción por un sistema de participación indirecta a través de delegaciones,
la jerarquización de las estructuras de toma de decisiones, la centralización de los
procesos de negociación colectiva, los compromisos de las direcciones sindicales en
organismos estatales y paraestatales.

En cualquier caso la ausencia de democracia en las organizaciones sindicales, tiene


importantes consecuencias como la baja implicación y la pérdida de iniciativa de las bases
y las dificultades para que se produzca debate interno abierto, crítico, no controlado por
las élites, pero especialmente influye en la pérdida de radicalidad y de capacidad de
lucha, de resistencia, de oposición, es decir en la pérdida de la capacidad de movilización
sindical. Algunos estudiosos del tema llegan a afirmar que los sindicatos ya no
representan los intereses de los trabajadores/as, sino de los dirigentes de los mismos.

En este contexto, la plena integración de las mujeres en las organizaciones sindicales


resulta cuando menos compleja. Es un hecho constatado que las mujeres participan en
las organizaciones sindicales, es decir se implican de forma activa, en mayor o menor
grado, en la dinámica sindical: acuden a informarse acerca de sus derechos laborales, se
afilian a las organizaciones sindicales, participan en movilizaciones, las promueven y
dinamizan, son elegidas como representantes sindicales y se integran en las estructuras
de dirección de los sindicatos.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Con el objetivo de orientar al lector sobre la forma en la cual será diseñada la


investigación se presentará una parte metodológica, donde se describe con precisión la
importancia del tema de estudio, los objetivos planteados, la delimitación y el
planteamiento preciso del problema a estudiar, las preguntas de investigación y las
hipótesis desprendidas de éstas. Asimismo, se puntualiza la forma en que se constataron
y falsearon las hipótesis que guían este estudio, por otra parte se describirán las fuentes
de información las cuales serán para el apoyo de la formación del documento, finalmente
se llegará a la parte donde se describirán las conclusiones a las cuales se llegó con la
investigación realizada.

Ahora bien; en cuanto a las técnicas que se utilizaron para la elaboración de la


investigación “Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales
internacionales en México, 2000-2012” se utilizará el método descriptivo, toda vez que
la finalidad de este método es el describir situaciones y eventos. Decir como es y cómo se
manifiesta determinado fenómeno. Se encuentran la documental y de campo, recabando
libros y consultando revistas y periódicos históricos, así como páginas de Internet
relacionadas con el tema en comento. Por lo que respecta a los Métodos utilizados, éstos
consisten en el Método cualitativo, y por otra parte el Método Analítico mismo que me
auxilió a razonar la información obtenida.

En nuestra investigación expondremos brevemente los puntos importantes de cada


capítulo como resultado del análisis efectuado sobre el tema. Este trabajo de
investigación se integra por cinco capítulos que establecen aspectos como los siguientes:

Al revisarse las recapitulaciones se vuelven indispensables para hacer un diagnóstico


general del estado actual que guardan los elementos recopilados a lo largo del trabajo en
el acontecer nacional.

De esta manera temas como Trabajador, Patrón, Relación de Trabajo, Asociación, y


Derecho laboral, se hacen imprescindibles en el índice principal de los universos a ser
revisados, considerando que los apartados teóricos han arrojado gran claridad al análisis
del caso en concreto.

En nuestro primer capítulo nos enfocamos a una propuesta teórico-conceptual sobre el


movimiento sindical y el derecho laboral, abordando el tema de los sindicatos en su
aspecto etimológico, retomando aspectos sindicales, con la plataforma metodológica, que
nos brinda una mirada particular a nuestra investigación. Analizamos conceptos generales
exclusivos del derecho del trabajo, de los cuales se nutre el sindicato en México, dando

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

pauta y fijando parámetros para su desempeño, con el objeto de estar en condiciones de


llevar a cabo una visión del mismo, que nos facilite la comprensión a lo largo del presente
trabajo.

El mundo del sindicalismo Mexicano encierra algunos conceptos importantes los cuales
pueden confundirse con el concepto de sindicato, estos conceptos son los de asociación y
coalición. Motivo para hacer una diferenciación clara respecto a estos conceptos. El
Derecho del Trabajo, nace a raíz de las extremas necesidades por parte de grandes
grupos de individuos, y como tal tiene como objeto el responder a los reclamos que
provocaron las convulsiones sociales, registradas en México, en la primera década del
siglo XX, como más adelante en el desarrollo del siguiente capítulo se detalla.

El segundo capítulo la antecedentes del sindicato y del derecho mexicano del trabajo, la
razón es dar a conocer sus antecedentes históricos y en que ordenamientos legales se
encuentran plasmados.

Para entender los orígenes del movimiento sindical y del derecho mexicano de trabajo, es
necesario abordar las etapas históricas más importantes desde un punto de vista socio-
político, cuyo factor fue y será primordial para el nacimiento y desarrollo de dichos
movimientos, es por eso que en este capítulo se desarrollan las tres etapas históricas más
importantes para el estudio de este tema, los cuales son los antecedentes históricos antes
de la Revolución Mexicana; la constitución política de 1917, la cual sienta las bases para
el desarrollo de la ideología social, tomando en consideración que manifiesta los
principios básicos para un mejor desarrollo entre los factores de la producción plasmados
en el artículo 123 constitucional, por último, las primeras organizaciones obreras post-
revolucionarias. Dicho capitulo dará las bases históricas para conocer el movimiento
sindical y del derecho mexicano del trabajo sobre todo entender su finalidad esencial la
cual es el estudio, mejoramiento y defensa de los intereses comunes colectivos e
individuales de los trabajadores.

En el tercero capitulo, el sindicato y los derechos laborales internacionales en la


legislación Mexicana, nos referimos al estudio jurídico del sindicato con base en los
elementos básicos que exige la ley, para la constitución del mismo tomando en cuenta al
trabajador, su voluntad individual y colectiva y así defender sus derechos laborales.
Hacemos referencia a la regulación vigente del sindicato en México, respetando la
jerarquía en primer término, con la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en el nivel inferior a la Ley Federal del Trabajo y por último al Código Civil.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Agotando lo que cada uno pudiera aportar para un mejor progreso.

Por lo que se refiere a la estructura de los sindicatos, existen algunos elementos que
forman parte de esta y que deben de ser transmisores de una nueva cultura laboral, como
lo es el comité ejecutivo, el cual es estudiado junto con la asamblea constitutiva, la
asamblea general, el patrimonio sindical, así como los derechos y las obligaciones de los
trabajadores y del sindicato, la disolución y los efectos de este, de igual manera resulta
necesario establecer el momento en que los sindicatos adquieren personalidad y
capacidad jurídica para realizar todos aquellos fines para lo que fueron constituidos.

En el cuarto capítulo, Reforma Sindical, irrenunciabilidad de los derechos laborales,


formas de terminación de los conflictos individuales de trabajo, es el estudio de los
sindicatos, su organización y funcionamiento. Tomando en cuenta la clasificación legal,
Comisión interna de carácter obligatorio, para vigilar las actuaciones de los sindicatos en
donde se establece y clasifica a los sindicatos gremiales, de empresas, industriales,
nacionales de industrias y de oficios varios, sindicalismo oficial, además de veremos la
Irrenunciabilidad de los derechos laborales y las formas de terminación de los conflictos
individuales de trabajo. Mencionaremos las diferentes condiciones que los trabajadores
tienen para organizarse y para defender sus derechos individuales y colectivos, en sus
diferentes organizaciones creadas para tales fines.

Finalmente, en el quinto capítulo Actualidad y Perspectiva en el derecho laboral y


sindical, se analiza pero con un enfoque inclinado más a lo cotidiano, que a lo teórico. De
ninguna manera tratamos de generalizar en cuanto a la corrupción y deshonestidad de los
representantes, pero si se considera prudente señalar que dicha situación se presenta en
forma frecuente y sin la debida sanción.

Las viejas prácticas del corporativismo sindical, como la ausencia de transparencia, la


sumisión frente al Estado y el clientelismo, no han desaparecido, aunque perviven en un
nuevo contexto político y con otros significados. No es nuestra intención analizar aquí la
historia del corporativismo en México. Sin embargo, para entender el papel actual de los
sindicatos mexicanos, es importante ver hasta qué punto la transición hacia la democracia
y el fin del dominio del partido único han cambiado dicho sistema. Y también veremos la
nueva cultura laboral contemporánea, sus elementos posturas de sus partes, y
prospectiva Laboral y sus retos del mundo del trabajo.

En este estudio sociológico del sindicato. Mencionamos claramente, como los


trabajadores y las empresas tienen las mismas posibilidades jurídicas para defender sus

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

derechos.

De esta manera, todos los temas que se presentan en esta investigación constituyen una
abstracción que facilita el estudio, pero que a la vez invita a interrelacionar
permanentemente la metodología, el soporte teórico-conceptual y el desarrollo temático,
hasta arrojar unas inferencias a propósito del tema tratado.

Por último, se especifican las conclusiones, que son el producto del estudio de todos los
ordenamientos sociales y políticos que citamos; son propuestas que pretenden ayudar a
la comprensión de las circunstancias que obligan el éxodo de mexicanos cada año,
Tratamos de aportar ideas conscientes, apegadas a nuestra realidad política, social,
económica y cultural, pero sobre todo, apegadas al a la realidad de nuestro país. No
pretendemos revolucionar e ir en contra de nuestro sistema social mexicano, más bien,
pretendemos aportarle nuevas ideas a partir de un cambio radical de mentalidad en
nuestra sociedad, siempre en apoyo de los grupos más vulnerables y de la distribución
equitativa del poder.

De esta forma ha quedado establecido el contenido de la presente investigación, misma


que en todo momento busca contribuir para lograr un desarrollo integral entre la sociedad
y su gobierno.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1.- JUSTIFICACIÓN DE LA IMPORTANCIA DEL TEMA DE INVESTIGACIÓN.

Este trabajo, parte de la premisa de que a medida que la ciudadanía se involucre en las
prácticas gubernamentales y en los procesos de rendición de cuentas, podrá revertir de
manera gradual las malas prácticas, costumbres y desatención que los ciudadanos hacia
el gobierno y al mismo tiempo, constituirá un elemento importante para abatir la
corrupción, impulsar la transparencia y contribuir a la transformación del gobierno y una
administración pública más democrática que no se vea rebasada por las demandas de la
sociedad en sus diferentes aspectos.

Lo que se pretende demostrar con estas investigaciones, es que si la sociedad conozca


más los temas sociales, políticos y económicos de México y así tendrá elementos para
criticar corregir y exigir de su gobierno una mayor atención y solución en los problemas
cotidianos; para un desarrollo integral de un México necesitado de crecimiento y mejor
calidad de vida.

El movimiento obrero, está exigiendo un cambio en la estructura del sindicalismo, siendo


necesario una dirigencia que demande y responda de las necesidades prioritarias de los
trabajadores, que se deje atrás las crisis económicas sociales, para alcanzar niveles de
vida mejores para la clase trabajadora, impulsar procesos de transformación nacional,
fortaleciendo la democracia sindical, la pluralidad, la autonomía, el respeto y la tolerancia
a la libertad de organización, de expresión y manifestación.

En las últimas décadas del siglo XX, es cuando la globalización cobra mayor auge y deja
ver la vigencia de los derechos laborales internacionales y la problemática social, no sólo
en nuestro país, sino de manera generalizada en el mundo, a través de importantes
acontecimientos mundiales que han dado lugar a una nueva realidad muy compleja que
refleja diversas interrogantes a resolver.

Es en este momento, cuando el interés actual por la globalización y la amplitud del tema,
ha despertado diversas cuestiones de organización y reestructuración de los sistemas
productivos del mundo entero, transformando de manera indiscutible las relaciones
obrero-patronales que lleva consigo el proceso.

Esto, combinado con la adopción de medidas que rompen con los parámetros sindicales,
debido a las constantes presiones empresariales y gubernamentales, con el constante
aumento de la competitividad comercial, traducido en la disminución de los costos de
producción y el aumento de reformas laborales para lograr mantener los empleos y atraer

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

nuevas inversiones.

Es por ello, que en el presente trabajo, se analizará de manera muy particular el impacto
que ha tenido el sindicalismo de la mano con los derechos laborales, dentro de la
dinámica de la internacionalización, tomando como base una de las teorías de la
globalización, llamada “internacionalización de capital”, la cual nos habla de un proceso
de formación del capital global, entendido como una forma nueva y desarrollada del
capital en general, para llegar a comprender y explicar la problemática planteada.

La presente investigación supone que el sindicalismo mexicano, como un conjunto de


agrupaciones en la defensa de los derechos laborales, juega un papel primordial como
impulsor del desarrollo económico del país, al sumar las fuerzas productivas a la lucha
competitiva en el mercado mundial, para lo cual, se vuelve necesaria su modernización
constante ante las nuevas exigencias.

Hay quienes afirman que el sindicato es un obstáculo para el desarrollo industrial y


empresarial, mientras que otros señalan que es un alivio y un tutor de la clase
trabajadora, por esta razón es necesario hacer un estudio detallado del origen y evolución
de éste incluyendo su regulación mediante los derechos laborales, su naturaleza jurídica y
su trascendencia en la vida del país, y en el ámbito internacional.

Partiendo de que el trabajo no es el resultado del libre albedrío del hombre, sino, el
resultado de un estado de necesidad, siendo un imperativo de las condiciones sociales y
económicas que privan en nuestra sociedad contemporánea, es el Sindicato el que
establecerá las condiciones favorables para que se manifieste o pueda manifestarse la
voluntad del trabajador.

El Derecho Laboral es un derecho popular, emanación directa de la clase social oprimida


por una minoría privilegiada; así mismo fue producto de la importancia que en México han
alcanzado las diversas formas de protección hacia la clase trabajadora. Esto influyó para
optar por el estudio del Sindicato y su importancia con el Derecho del Trabajo, por ser una
de las instituciones más significativas que tutela a la clase trabajadora.

La diversificación de las características y condiciones de trabajo de los sujetos que


componen la clase trabajadora ha ido determinando la aparición de cambios en la
estructura organizativa de los sindicatos. La revisión de documentación interna generada
por las organizaciones sindicales (materiales congresuales, resoluciones, publicaciones
específicas...), así como sus declaraciones públicas, evidencian una preocupación

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

creciente por los derechos laborales locales como internacionales. El discurso sindical ha
incorporado referencias a problemas específicos de globalización y competencia de
mejora, que orientan la negociación colectiva y en general las líneas de acción social y
sindical.

Es importante para toda sociedad tener un marco jurídico que garantice nuestros
derechos como personas para lograr la armonía y la convivencia dentro de ella, de igual
manera es importante tener una legislación que contenga los derechos irrenunciables a
los trabajadores y que sean plasmados y reconocidos en una ley suprema para
garantizarlos frente al abuso y la explotación.

La presente investigación es un estudio de los derechos del trabajador así como de las
relaciones individuales de trabajo, haciendo mención de lo que implica internacionalmente
los derechos de los trabajadores durante la relación de trabajo y aún después de ésta,
haremos también un análisis de la importancia del principio de irrenunciabilidad de los
derechos laborales, como principio protector y defensor de la clase trabajadora, ya que
muchas veces sus derechos son violados o limitados por el patrón; haremos mención de
los medios para solucionar los conflictos que surgen entre patrón y trabajador.

Acogerse a la ley es fundamental para entender los derechos del trabajador, y la vigencia
de los derechos laborales internacionales para solucionar controversias laborales que
ante ellas se presentan, en que se respeten y den cumplimiento a las normas de trabajo,
corresponde a los funcionarios, corregir o subsanar las deficiencias u omisiones en las
relaciones de trabajo, esto es un hecho importante; ya que el trabajador en muchas
ocasiones no conoce sus derechos y tal circunstancia pone en desventaja al trabajador y
corresponde a estos órganos hacer una defensa legal para los trabajadores.

A través de antes mencionado nuestra finalidad es resaltar la importancia de respetar los


derechos del trabajador y el principio básico de la irrenunciabilidad de los derechos del
trabajador que en suma son los derechos de cada individuo porque todos formamos parte
de la clase trabajadora o del empleador.

Por todo lo anterior, efectuar un estudio que permita guiar la evolución del sindicato en
México, y reconocer la vigencia de los derechos laborales internacionales, y retirar las
barreras a las que se enfrenta para continuar evolucionando, identificando posibles
soluciones para contribuir a una sociedad más justa y equitativa. Finalmente, En este
estudio exploratorio se tratará, en todo lo posible de integrar diferentes puntos de vista,
manteniendo un enfoque objetivo.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN.

OBJETIVO GENERAL

Analizar de manera exploratoria, los antecedentes, que dieron origen a las primeras
ideologías sindicales, definir su situación actual y perspectiva de los derechos laborales
internacionales en México, observar los efectos de la globalización en el sindicalismo
mexicano, y describir el papel de los mismos en el desarrollo económico del país,
revisando el avance que hasta la fecha se ha alcanzado en este rubro y temas en los que
todavía se tienen pendientes. Y Establecer las necesidades esenciales y apremiantes de
la asociación del hombre.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

• Enlistar una breve semblanza histórica sobre el sindicalismo y los derechos


laborales y como han transcendido a través de la historia en nuestro país, en
diversas cuestiones del ámbito familiar, cultural, ideológico además de los grandes
cambios sociales que transformaron la realidad política, cultural y económica en
las últimas décadas.
• Establecer el concepto de sindicato y derecho laboral estableciendo su relación
estrecha.
• Determinar la importancia que han adquirido en los diferentes ámbitos del
desarrollo: social, político, y económico internacional.
• Analizar como la asociación de los individuos genera un cambio transcendental en
la vida de sus agremiados bajo los lineamientos del derecho laboral.
• Determinar si los derechos laborales internacionales contribuyen a la unificación
de los trabajadores mexicanos y a su vez se traduce en mejor calidad de vida.
• Establecer las necesidades esenciales y apremiantes de la asociación del hombre.
• Evaluar al sindicalismo como un factor real de poder.
• Consolidar al sindicalismo y al derecho laborar como la garantía social de los
trabajadores.
• Determinar al trabajo no como el resultado del libre albedrío del hombre, sino, el
resultado de un estado de necesidad, siendo un imperativo de las condiciones
sociales y económicas. Es el Sindicato el que establecerá las condiciones
favorables para que se manifieste o pueda manifestarse la voluntad del trabajador
y al derecho laboral como el elemento para lograrlo.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

• Determinar si el derecho laboral y la autonomía de los sindicatos siguen siendo


temas pendientes de la consolidación democrática del país.
• Determinar la importancia en la vida jurídica y en general que tiene y ha tenido en
México el sindicato, desde sus conceptos en todos los géneros, seguido de sus
requisitos y formas legales para su constitución y la importancia tan grande que ha
generado en nuestro país desde su creación y reconocimiento.
• Entender que la reforma en el ámbito laboral y de un cambio en su cultura y sus
prácticas, hará que el gobierno sea de gran apoyo para los procesos democráticos
en las empresas y para la ampliación de la autonomía sindical. Y al no llevarse a
cabo corre el riesgo de perder una oportunidad única para apuntalar la
transparencia y las posibilidades de participación en los sindicatos, una forma de
proteger a los más débiles sin afectar la productividad.
• Determinar si el derecho laboral fue producto de la importancia que en México han
alcanzado las diversas formas de protección hacia la clase trabajadora.
• Analizar al sindicalismo y su importancia en el Derecho del Trabajo.
• Determinar si el sindicalismo y el derecho laboral es una de las instituciones más
significativas que tutela a la clase trabajadora.
• Demostrar que el sindicalismo mexicano es una de las herramientas que se
desplegaron en el contexto corporativo bajo el que está diseñado el Estado, y que
ha sido funcional para todos los actores políticos.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3. PLANTEAMIENTO Y DELIMITACIÓN DEL PROBLEMA.

Ahora más que nunca en nuestro país la población trabajadora desempeña un papel
protagónico en el proceso de desarrollo y es sujeto fundamental del mismo sin embargo,
hablar de desarrollo no implica automática mente el mejoramiento de la condición social
del individuo, como si solo fuera favorecido pasivo de este proceso. Por el contrario,
creemos que ya es tiempo de que se le reconozca su papel estratégico, no solo en la
promoción del desarrollo económico y social, sino también en los avances democráticos y
en la transmisión de nuestra cultura y valores.

La justicia y la equidad no se han logrado sin antes pasar por una evolución desde
tiempos antiguos y han sido diversos los campos en los que se ha estudiado, tales como
la justicia social, la distribución de la riqueza, las clases sociales, entre otros.

La sociedad está integrada exclusivamente por seres racionales y libres que buscan un
bien y una perfección que no pueden obtener de forma aislada. Para conocer mejor a la
sociedad y comprender más a fondo su naturaleza y sus fines, necesitamos tener una
idea clara acerca del hombre, de su posición en el mundo y sus fines.

Los trabajadores al ser seres humanos y formar parte de una empresa o unidad
económica, requieren de medios de defensa para que se respeten sus derechos; es así
como se crean los sindicatos.

El derecho laboral y la autonomía de los sindicatos siguen siendo temas pendientes de la


consolidación democrática del país. La redefinición de las relaciones entre el Estado y la
sociedad, al igual que la recuperación de la mayoría de los sindicatos como órganos
representativos y defensores de los derechos de los trabajadores, es vital para la
democracia mexicana. En virtud de lo anterior, surge la siguiente interrogante: ¿por qué
se considera al sindicalismo mexicano como un factor real de poder?

Recordemos que los factores reales de poder que rigen en el seno de cada sociedad son
esa fuerza activa y eficaz que informa todas las leyes e instituciones jurídicas de la
sociedad en cuestión.

El sindicalismo mexicano es una de las herramientas que se desplegaron en el contexto


corporativo bajo el que está diseñado el Estado, y que ha sido funcional para todos los
actores políticos. Es por ello que a pesar de los reclamos y críticas sobre la forma en que
dicho sindicalismo se ha desarrollado, poco ha cambiado y es probable que no haya
transformaciones sustanciales en el futuro inmediato, a pesar de lo ocurrido con Luz y

XV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Fuerza del Centro y el Sindicato Mexicano de Electricistas en los días recientes.

Los sindicatos mexicanos enfrentan un desafío de adaptación importante, en un contexto


donde no únicamente cuentan con un fuerte desprestigio ante la opinión pública, sino que
la estructura económica global ha generado cambios en la forma en que las personas se
emplean y obtienen bienestar por ello. La idea de la estabilidad y el empleo de largo
plazo, parecen ser no únicamente aspiraciones de la vieja época, alimentadas por una
norma laboral sin actualizarse, sino también irrealizables en el esquema de producción y
competencia actual, donde el empleo eventual, por honorarios, o incluso informal, han
sobrepasado ampliamente al del trabajo formal.

En términos políticos, los sindicatos tienen un peso relativo mayor con respecto al que
tenían en el pasado, fundamentalmente los llamados "oficiales", debido a que con la
alternancia política se perdió el centro ordenador de las relaciones de poder que dominó a
la época priísta. Al igual que lo que pasa con los gobernadores, el peso de organizaciones
como las sindicales se ha incrementado debido a los intereses que representan, pero
también por la falta de contrapesos políticos eficaces que permitan a sus agremiados, y a
los ciudadanos, controlarlos y someterlos a escrutinio público.

El diseño del Estado mexicano está basado en una lógica corporativa para su
funcionamiento, así nació y no es posible que cambie si no se modifican de raíz los
cimientos de la política mexicana. Con el objeto de garantizar control y estabilidad, se
construyeron relaciones de poder caracterizadas por estructuras clientelares, que sirven
de base para proveer de legitimidad a distintos espacios políticos. Para asegurar
viabilidad, el Estado mexicano descansó en la creación de estructuras corporativas que
permitían tomar decisiones e instrumentarlas con el menor nivel de conflicto político
posible. Para ello, se crearon organizaciones sindicales cuya función era encapsular el
conflicto laboral y controlarlo de la mejor manera, para evitar no únicamente costos de
legitimidad, sino también dar certeza a otras organizaciones y actores políticos sobre su
papel en la lucha por el poder. Esto estaba mediado por el Presidente, quien cosechaba y
retribuía las lealtades, pero también castigaba las traiciones.

Debemos reconocer que el Estado mexicano sigue siendo corporativo, a pesar de la


alternancia política de los años recientes, y no hay razón para que se modifique esta
situación en el futuro inmediato. Independientemente de qué partido gobierne, el
neocorporativismo mexicano es un aspecto clave para comprender cómo se toman
decisiones y se dan las relaciones de poder. Todos los partidos políticos mexicanos, así

XVI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

como los gobiernos, descansan sus estructuras en relaciones corporativas que son
alimentadas por distintos tipos de organizaciones, pero hay un peligro del que los partidos
no han sido conscientes: de la misma forma en que las instituciones cayeron en manos de
los partidos, los partidos están cayendo en manos de organizaciones o actores políticos
como los sindicatos.

Ahora bien, mientras que el gobierno sigue interviniendo en la libertad y la autonomía


sindicales, permitiendo que sus intereses políticos y económicos influyan en los asuntos
internos de las organizaciones de trabajadores. La “toma de nota”, el mecanismo utilizado
para desplazar a los líderes sindicales, podría interpretarse como un procedimiento
administrativo, como el simple registro público de un sindicato. En realidad, se trata de
una autorización gubernamental que, en la mayoría de los casos, constituye un proceso
largo, burocrático y político, decidido por el gobierno del estado o el federal. Mientras que
las empresas, por ejemplo, pueden registrar su organización en forma autónoma, solo con
la participación obligada de un notario, los sindicatos dependen del Estado.

La solución a estos puntos conflictivos no depende solo de las decisiones y de la actitud


de las instituciones gubernamentales. Los propios sindicatos tienen que asumir un papel
activo. La alianza entre sindicatos tradicionales e independientes, revela la posibilidad de
establecer alianzas en defensa de la autonomía sindical.

Las viejas prácticas del corporativismo sindical, como la ausencia de transparencia, la


sumisión frente al Estado y el clientelismo, no han desaparecido, aunque perviven en un
nuevo contexto político y con otros significados. No es nuestra intención analizar aquí la
historia del corporativismo en México. Sin embargo, para entender el papel actual de los
sindicatos mexicanos, es importante ver hasta qué punto la transición hacia la democracia
y el fin del dominio del partido único han cambiado dicho sistema.

La construcción de la gobernabilidad democrática requiere de la reforma en el ámbito


laboral y de un cambio en su cultura y sus prácticas. Si no hay apoyo para los procesos
democráticos en las empresas y para la ampliación de la autonomía sindical, el gobierno
corre el riesgo de perder una oportunidad única para apuntalar la transparencia y las
posibilidades de participación en los sindicatos, una forma de proteger a los más débiles
sin afectar la productividad.

Aunque algunos sindicatos vienen defendiendo estas banderas desde hace años, la
mayoría deberá redefinir sus objetivos y sus costumbres, de manera de demostrar que no
solo constituyen un actor social y político constructivo, que puede recuperar la influencia

XVII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

perdida, sino que además son capaces de actuar con mayor legitimidad y fuerza en los
ámbitos regional e internacional.

Para saber qué se puede esperar en el futuro respecto a este tema, es necesario voltear
al pasado y entender su evolución, así como comprender el presente y los problemas que
se enfrentan, para solventar el futuro que si bien es muy prometedor en contexto.

Con el presente trabajo, se pretende ir a las raíces del movimiento sindical como acción
colectiva, como pensamiento moderno y en síntesis como praxis transformadora y de
evolución. Un retorno al pasado remite a la memoria colectiva dispersa en el tiempo, al
encuentro con los precursores simbólicos en cada momento histórico y en distintos
escenarios y a la comprensión del sindicalismo en sus diversas motivaciones iniciales.

No se pretende encontrar una solución a todos los conflictos que surgen al estudiar el
Sindicalismo, pero desde luego el cúmulo de opiniones vertidas sobre este tema, abren el
camino que indudablemente conducirá a. una adecuada solución al problema que
constituye un movimiento de asociación, tanto obrero como patronal.

Este texto es un acercamiento al sindicalismo moderno en México, con la sustentabilidad


del derecho laboral en los movimientos obreros histórico. Para el análisis se optó por unas
herramientas teórico metodológico desde una perspectiva crítico-política, que indica que
hay más caminos posibles.

XVIII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

4. PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN.

¿Qué se espera del sindicalismo?

¿Hasta qué punto el sindicalismo ha contribuido al desarrollo armónico de la sociedad?

¿Cuál podría ser un enfoque equilibrado del movimiento sindical en nuestra cultura
mexicana?

¿La autonomía institucional del sindicato representa la dinámica actual del movimiento
sindical?

¿Existe una relación estrecha entre el concepto de sindicato y derecho laboral?

¿Cuál es la importancia que han adquirido el sindicato y derecho laboral en los diferentes
ámbitos del desarrollo: social, político, y económico internacional?

¿Cómo la asociación de los individuos genera un cambio transcendental en la vida de sus


agremiados bajo los lineamientos del derecho laboral?

¿Es la globalización sindical un problema para su fortalecimiento y manifiesto?

¿Los derechos laborales internacionales contribuyen a la unificación de los trabajadores


mexicanos y traduciéndolo en una mejor calidad de vida?

¿La asociación del hombre es una necesidad esencial y apremiante?

¿Es el sindicalismo un factor real de poder?

¿Se puede consolidar al sindicalismo y al derecho laborar como garantías sociales de los
trabajadores?

¿Qué papel desempeñan los sindicatos mexicanos en un país inmerso en un proceso de


alta competitividad mundial? y ¿Cómo deben ser estos sindicatos en este ambiente
globalizador?

¿Es el Sindicato el ente que establecerá las condiciones favorables para que se
manifieste o pueda manifestarse la voluntad del trabajador? y ¿Es el derecho laboral el
elemento para alcanzarlo?

¿El derecho laboral y la autonomía de los sindicatos siguen siendo temas pendientes de
la consolidación democrática del país?

¿La reforma en el ámbito laboral y el cambio en su cultura y prácticas, harán que el


gobierno sea de gran apoyo para los procesos democráticos en las empresas y para la

XIX
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

ampliación de la autonomía sindical?

¿El derecho laboral fue producto de la importancia que en México ha alcanzado las
diversas formas de protección de la clase trabajadora?

¿Cuál es la importancia del Derecho del Trabajo en el sindicalismo?

¿El sindicalismo y el derecho laboral es una de las uniones más significativas que tutela a
la clase trabajadora?

¿El sindicalismo mexicano es una de las herramientas que se desplegaron en el contexto


corporativo bajo el que está diseñado el Estado, y que ha sido funcional para todos los
actores políticos?

XX
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5. MARCO TEÓRICO Y CONCEPTUAL DE REFERENCIA.

Dentro de la investigación titulada “Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los


Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012”, en lo concerniente a su
marco teórico conceptual (sustento metodológico) abarcar varios aspectos históricos, y
resultan relevantes los conceptos de sindicalismo, genero, discriminación y
apoderamiento, ya que esta investigación está basado en la literatura del sindicalismo y el
derecho laboral, en los antecedentes jurídico-políticos respecto a su parte doctrinal e
histórica; en cuanto a los comentarios, las críticas, las opiniones y conclusiones
plasmadas, son de carácter personal derivadas de la información recopilada.

En nuestro primer capítulo nos enfocamos a una propuesta teórico-conceptual sobre el


movimiento sindical y el derecho laboral, abordando el tema de los sindicatos en su
aspecto etimológico, retomando aspectos sindicales, con la plataforma metodológica, que
nos brinda una mirada particular a nuestra investigación. Analizamos conceptos generales
exclusivos del derecho del trabajo, de los cuales se nutre el sindicato en México, dando
pauta y fijando parámetros para su desempeño, con el objeto de estar en condiciones de
llevar a cabo una visión del mismo, que nos facilite la comprensión a lo largo del presente
trabajo.

El mundo del sindicalismo Mexicano encierra algunos conceptos importantes los cuales
pueden confundirse con el concepto de sindicato, estos conceptos son los de asociación y
coalición. Motivo para hacer una diferenciación clara respecto a estos conceptos. El
Derecho del Trabajo, nace a raíz de las extremas necesidades por parte de grandes
grupos de individuos, y como tal tiene como objeto el responder a los reclamos que
provocaron las convulsiones sociales, registradas en México, en la primera década del
siglo XX, como más adelante en el desarrollo del siguiente capítulo se detalla.

El segundo capítulo la antecedentes del sindicato y del derecho mexicano del trabajo, la
razón es dar a conocer sus antecedentes históricos y en que ordenamientos legales se
encuentran plasmados.

Para entender los orígenes del movimiento sindical y del derecho mexicano de trabajo, es
necesario abordar las etapas históricas más importantes desde un punto de vista socio-
político, cuyo factor fue y será primordial para el nacimiento y desarrollo de dichos
movimientos, es por eso que en este capítulo se desarrollan las tres etapas históricas más
importantes para el estudio de este tema, los cuales son los antecedentes históricos antes
de la Revolución Mexicana; la constitución política de 1917, la cual sienta las bases para

XXI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

el desarrollo de la ideología social, tomando en consideración que manifiesta los


principios básicos para un mejor desarrollo entre los factores de la producción plasmados
en el artículo 123 constitucional, por último, las primeras organizaciones obreras post-
revolucionarias. Dicho capitulo dará las bases históricas para conocer el movimiento
sindical y del derecho mexicano del trabajo sobre todo entender su finalidad esencial la
cual es el estudio, mejoramiento y defensa de los intereses comunes colectivos e
individuales de los trabajadores.

En el tercero capitulo, el sindicato y los derechos laborales internacionales en la


legislación Mexicana, nos referimos al estudio jurídico del sindicato con base en los
elementos básicos que exige la ley, para la constitución del mismo tomando en cuenta al
trabajador, su voluntad individual y colectiva y así defender sus derechos laborales.
Hacemos referencia a la regulación vigente del sindicato en México, respetando la
jerarquía en primer término, con la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en el nivel inferior a la Ley Federal del Trabajo y por último al Código Civil.
Agotando lo que cada uno pudiera aportar para un mejor progreso.

Por lo que se refiere a la estructura de los sindicatos, existen algunos elementos que
forman parte de esta y que deben de ser transmisores de una nueva cultura laboral, como
lo es el comité ejecutivo, el cual es estudiado junto con la asamblea constitutiva, la
asamblea general, el patrimonio sindical, así como los derechos y las obligaciones de los
trabajadores y del sindicato, la disolución y los efectos de este, de igual manera resulta
necesario establecer el momento en que los sindicatos adquieren personalidad y
capacidad jurídica para realizar todos aquellos fines para lo que fueron constituidos.

En el cuarto capítulo, Reforma Sindical, irrenunciabilidad de los derechos laborales,


formas de terminación de los conflictos individuales de trabajo, es el estudio de los
sindicatos, su organización y funcionamiento. Tomando en cuenta la clasificación legal,
Comisión interna de carácter obligatorio, para vigilar las actuaciones de los sindicatos en
donde se establece y clasifica a los sindicatos gremiales, de empresas, industriales,
nacionales de industrias y de oficios varios, sindicalismo oficial, además de veremos la
Irrenuciabilidad de los derechos laborales y las formas de terminación de los conflictos
individuales de trabajo. Mencionaremos las diferentes condiciones que los trabajadores
tienen para organizarse y para defender sus derechos individuales y colectivos, en sus
diferentes organizaciones creadas para tales fines.

XXII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Finalmente, en el quinto capítulo Actualidad y Perspectiva en el derecho laboral y


sindical, se analiza pero con un enfoque inclinado más a lo cotidiano, que a lo teórico. De
ninguna manera tratamos de generalizar en cuanto a la corrupción y deshonestidad de los
representantes, pero si se considera prudente señalar que dicha situación se presenta en
forma frecuente y sin la debida sanción.

Las viejas prácticas del corporativismo sindical, como la ausencia de transparencia, la


sumisión frente al Estado y el clientelismo, no han desaparecido, aunque perviven en un
nuevo contexto político y con otros significados. No es nuestra intención analizar aquí la
historia del corporativismo en México. Sin embargo, para entender el papel actual de los
sindicatos mexicanos, es importante ver hasta qué punto la transición hacia la democracia
y el fin del dominio del partido único han cambiado dicho sistema. Y también veremos la
nueva cultura laboral contemporánea, sus elementos posturas de sus partes, y
prospectiva Laboral y sus retos del mundo del trabajo.

En este estudio sociológico del sindicato. Mencionamos claramente, como los


trabajadores y las empresas tienen las mismas posibilidades jurídicas para defender sus
derechos.

Los temas que se presentan en esta investigación constituyen una abstracción que facilita
el estudio, pero que a la vez invita a interrelacionar permanentemente la metodología, el
soporte teórico-conceptual y el desarrollo temático, hasta arrojar unas inferencias a
propósito del tema tratado.

Por último, se especifican las conclusiones con base a toda la información que integra
esta investigación y que fue analizada en su oportunidad.

En el último apartado denominado de “Conclusiones y Nueva Agenda de Investigación”,


se establecen las conclusiones resultantes del proceso de investigación relativo al estudio
“Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales
en México, 2000-2012”, en los cuales se dan a conocer diversas propuestas sobre el
tema, mismas que son útiles para nueva agenda o nuevos caminos para futuras
investigaciones, derivadas de lo expuesto dentro del estudio.

5.1 Marco Teórico Conceptual.

INTRODUCCIÓN
CAPITULO 1 Contexto del sindicato y el derecho laboral
1.1 Contextualidad básica.
1.1.1 Trabajador.

XXIII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1.1.2 Patrón.
1.1.3 Etimología de palabra trabajo.
1.1.4 Relación de Trabajo.
1.1.5 Organización.
1.1.6 Empresa.
1.1.7 Establecimiento.
1.1.8 Gremio.
1.1.9 Coalición.
1.1.10 Asociación.
1.1.11 Derecho de asociación.
1.2 Contexto sindical.
1.2.1 Sindicalismo.
1.2.2 Federación.
1.2.3 Confederación.
1.2.4 La asamblea.
1.2.5 Libertad sindical.
1.2.6 Sindicato.
1.2.6.1 Etimología y concepto del término sindicato.
1.2.6.2 Clasificación de los sindicatos.
1.2.6.3 Tipos de sindicatos.
1.2.6.4 Prohibiciones del sindicato.
1.2.6.5 Derechos y obligaciones de los sindicatos.
1.2.7 Autonomía y democracia sindical.
1.2.8 La Huelga.
1.2.8.1 Justificación de la Huelga.
1.2.8.2 Objetivo de la Huelga.
1.2.8.3 Procedimiento y calificación de la Huelga.
1.2.8.4 Terminación de la Huelga.
1.2.8.5 Patrimonio sindical.
1.2.8.6 Contrato ley.
1.3 Contexto laboral.
1.3.1 Derecho sindical.
1.3.2 Derecho obrero.
1.3.3 Derecho social.
1.3.4 Derecho laboral.
1.3.5 Derecho del trabajo.
1.3.5.1 Surgimiento del derecho del trabajo.
1.3.5.2 Principios del derecho del trabajo.
1.3.6 Cultura del trabajo.
1.3.6.1 Concepto de cultura del trabajo.
1.3.6.2 La cultura y el derecho del trabajo.
1.3.7 Características de los derechos de los trabajadores.
1.3.8 Características del Derecho Mexicano del Trabajo.
1.3.9 El conflicto en el derecho del trabajo.
1.3.9.1 Origen de los conflictos.
1.3.9.1.1 Cuestión social.
1.3.9.1.2 Factores de la producción.
1.3.9.1.3 Lucha de clases.
1.3.9.2 Conflictos de trabajo artículo 123.
1.3.9.2.1 Solución de los conflictos.
1.3.9.2.2 Medios de solución.

XXIV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1.3.9.3 Formas de terminación del conflicto individual.


1.3.9.3.1 Convenio.
1.3.9.3.2 Desistimiento.
CAPITULO 2 Antecedentes del sindicato y del derecho mexicano del trabajo
2.1. Colaboración entre individuos para satisfacer sus necesidades.
2.2 Movimiento sindical en México, causas y orígenes.
2.3 El sindicato en México. Una breve historia.
2.3.1 La colonia.
2.3.2 México independiente.
2.3.2.1 La constitución de 1814 y 1857.
2.3.2.2 Legislación de Maximiliano.
2.3.2.3 Código civil de 1870.
2.3.3 Época Porfirista.
2.4 Época posrevolucionaria
2.4.1 La revolución de 1910.
2.4.2 Constitución de 1917.
2.4.3 El artículo 123.
2.5 Movimiento social obrero mexicano.
2.6 El sindicalismo contemporáneo.
2.6.1 El Obrero del Siglo XX.
2.7 Organizaciones obreras post-revolucionarias.
2.7.1 Confederación regional obrera mexicana.
2.7.2 Confederación general del trabajo.
2.8 Breves antecedentes del Derecho Mexicano del Trabajo
2.8.1 La Legislación en el México de la Independencia.
2.8.2 La condición de los trabajadores en los años de 1821 a 1856.
2.8.3 La Constitución de 1857.
2.8.4 La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 1917.
2.8.4.1. La Ley Federal del Trabajo de 1931.
2.8.4.2 La Ley Federal del Trabajo de 1970.
2.8.4.3. La Ley Federal del Trabajo en nuestros días.
CAPITULO 3 El Sindicato y los derechos laborales internacionales en la legislación
Mexicana
3.1 Derecho laboral y movimiento sindical internacional.
3.1.1 Tratado de libre comercio: Regulación del trabajo.
3.1.2 Derecho jurídico sindical y política sindical en México.
3.2 La ley laboral en la constitución de los sindicatos.
3.3. Personalidad Legal y jurídica.
3.4 Estructura legal de los sindicatos.
3.4.1 El mando sindical.
3.4.2 Limitaciones legales.
3.5 La disolución de los sindicatos.
3.6 La innovación del sindicalismo mexicano.
3.6.1 El sindicalismo oficial.
3.7 Vigencia jurídica del Sindicato.
3.7.1 La Constitución Política de los Estados Unidos mexicanos.
3.7.2 Vigencia de los convenios internacionales.
3.7.2.1 Organización Internacional del Trabajo convenio Núm. 87
3.7.3 La Ley Federal del Trabajo.
3.7.4 Legislación de seguridad social.
3.7.5 Jurisprudencia.

XXV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3.8 Federaciones y confederaciones sindicales.


3.8.1 Condiciones para el Registro.
3.9 El Sindicato como frente a problemas sociales.
3.10 El Sindicato como mediador con el Estado.
3.10.1 Concertación.
3.10.2 Dentro de una Crisis la Concertación Social es la pauta del Sindicato.
3.10.3 Movimiento social y sindical.
3.10.4 Escenario favorable para el desarrollo.
3.10.5 Concertación Social.
3.10.6. Elemento de la Concertación.
3.11 El sindicato y su estrategia partidaria.
3.11.1 El poder político del sindicato.
3.12 La Organización Internacional del Trabajo.
3.12.1 Antecedentes
3.12.2 Declaración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) relativa a los
principios y derechos fundamentales en el trabajo y su seguimiento.
3.12.3 Políticas.
3.12.4 Convenios.
CAPITULO 4 El Sindicato, irrenunciabilidad de los derechos laborales, Formas de
terminación de los conflictos individuales de trabajo
4.1 Reforma y Acción Sindical.
4.1.1 Naturaleza, y control del sindicato.
4.1.2 Medio jurídico y legal.
4.1.3 Normas generales básicas del sindicato.
4.1.4 La Comisión interna dentro del sindicato.
4.2 La organización y disciplina sindical.
4.2.1 Clasificación de los sindicatos.
4.2.2 Sindicatos de trabajadores y patrones.
4.2.3 Sindicatos de Empresas, ramas de la industria.
4.3 Trabajo sindical.
4.3.1 Desempeño de los sindicatos.
4.3.2 La Huelga como búsqueda de institucionalidad.
4.3.3 El Control del estado del sindicalismo.
4.3.4 La Democracia en el diseño mismo de la política gubernamental.
4.3.5 La política laboral.
4.4 Irrenuciabilidad de los derechos laborales.
4.4.1 Referencia sobre las prestaciones que tienen los Trabajadores.
4.4.2 Derechos irrenunciables a los trabajadores.
4.4.3 Respeto a los derechos laborales.
4.4.4 La justicia social en el artículo 123 fracción XVIII Constitucional.
4.5 Formas de terminación de los conflictos individuales de trabajo.
4.5.1 El convenio.
4.5.2 El desistimiento.
4.5.2.1 De la acción.
4.5.2.2 De la demanda.
4.5.3 La transacción.
4.5.3.1 El laudo.
CAPITULO 5 Actualidad y Perspectiva en el derecho laboral y sindical
5.1 La nueva cultura laboral.
5.1.1 Antecedentes.
5.1.1.1 Concepto de nueva cultura del trabajo.

XXVI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.1.1.2 El acuerdo nacional de productividad.


5.1.1.3 Los convenios de productividad.
5.1.2 Elementos.
5.1.2.1 Las personas y el trabajo.
5.1.2.2 Las organizaciones y la productividad.
5.1.3 La nueva cultura laboral y los derechos laborales.
5.1.3.1 Postura empresarial.
5.1.3.2 Postura del movimiento obrero.
5.2 Prospectiva Laboral.
5.2.1 Los retos del mundo del trabajo.
5.2.1.1 Productividad y competitividad.
5.2.1.2 Competencias laborales.
5.2.2 Política laboral.
5.2.2.1 Enfoque económico.
5.2.2.2 Reforma laboral.
5.2.3 Proyectos de reformas a la legislación laboral.
5.2.3.1 Proyecto oficialista.
5.2.3.2 Proyecto UNT.
5.3 Sindicalismo, expresión formada para la defensa de intereses comunes.
5.3.1 Garantía social de la asociación de los trabajadores.
5.3.2 El pensamiento político y social.
5.3.3 Los medios y fines de protección de los derechos laborales.
5.3.4 El sindicalismo el brazo fuerte en el derecho laboral.
5.4 La situación que vive el sindicalismo en México.
5.4.1 La crisis del sindicalismo en México.
5.4.2 Las funciones de los dirigentes en el sindicalismo.
5.5 La autonomía de acción sindical.
5.5.1 Medios estatales para lograr el control.
5.5.2 Libertad oficial del sindicato.
5.5.3 El espacio dentro de la libertad sindical.
5.5.4 Autonomía sindical.
5.5.5 Cooperación patrón - sindicato.
5.5.6 La fortaleza del sindicato.
5.5.7 Mejor calidad de vida.
5.5.8 El bien común sobre lo individual.
5.6 Efecto Social, Económico y Político.
5.6.1 Convenios laborales internacionales.
5.6.2 La alta competitividad mundial, momento del fortalecimiento sindical.
5.6.3 Reforma del derecho sindical.
5.6.4 Surgimiento de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT).
5.6.5 Política electoral y corporativismo sindical.
5.6.6 Propensiones del sindicalismo mexicano.
Conclusiones
Bibliografía

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

6. FORMULACIÓN DE HIPÓTESIS.

HIPÓTESIS PRINCIPAL.

Al Establecer las necesidades esenciales y apremiantes de la asociación del hombre, la


situación actual y perspectiva de los derechos laborales internacionales en nuestro país,
se podrá instituir los efectos de la globalización en el sindicalismo mexicano, al igual que
describir el papel de los mismos en el desarrollo económico del país. Además al revisar el
avance que hasta la fecha se ha alcanzado en este rubro y temas en los que todavía se
tienen pendientes, se demostrar que no solo constituyen un actor social y político
constructivo, que puede recuperar la influencia perdida, sino que además son capaces de
actuar con mayor legitimidad y fuerza en los ámbitos regional e internacional.

HIPÓTESIS SECUNDARIAS.

1.- Determinar al trabajo no como el resultado del libre albedrío del hombre, sino, el
resultado de un estado de necesidad, siendo un imperativo de las condiciones sociales y
económicas que privan en nuestra sociedad contemporánea, y es el Sindicato el que
establecerá las condiciones favorables para que se manifieste o pueda manifestarse la
voluntad del trabajador, y el derecho laboral su aliado.

2.- En el devenir del hombre y a lo largo de su existencia, el trabajo de las personas ha


transitado de sistemas de sometimiento a un marco jurídico laboral tutelar de sus
derechos sustantivos, y ante los embates de una postura económica neoliberal y del
encanto de una denominada nueva cultura laboral, se identifica una orientación de
sometimiento cognitivo cultural de los trabajadores para la flexibilización de la relación de
trabajo en deterioro de sus derechos laborales y de su nivel de vida.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

7.- PRUEBA EMPÍRICAS O CUALITATIVAS LAS HIPÓTESIS.

En la presente Investigación se intentó comprobar las siguientes hipótesis:

HIPÓTESIS PRINCIPAL:

Al Establecer las necesidades esenciales y apremiantes de la asociación


del hombre, la situación actual y perspectiva de los derechos laborales
internacionales en nuestro país, se podrá instituir los efectos de la
globalización en el sindicalismo mexicano, al igual que describir el papel
de los mismos en el desarrollo económico del país. Además al revisar el
avance que hasta la fecha se ha alcanzado en este rubro y temas en los
que todavía se tienen pendientes, se demostrar que no solo constituyen
un actor social y político constructivo, que puede recuperar la influencia
perdida, sino que además son capaces de actuar con mayor legitimidad y
fuerza en los ámbitos regional e internacional.

La anterior hipótesis está comprobada ya que del desarrollo del estudio nos podemos dar
cuenta que el trabajo es una actividad que dignifica al ser humano, se ha catalogado de
diferentes formas, pero es un medio que le ha permitido alcanzar diversas metas y un
mejor nivel de vida y satisfacción personal, a su vez es un derecho que se ha ganado a lo
largo de la historia a base de mucho esfuerzo.

Desde una perspectiva histórica, económica, social y laboral, los trabajadores han sido
sometidos por parte de quienes han detentado el poder de la propiedad y de los medios
de producción, y hasta el poder político, para acrecentar su capital sin descaro alguno;
situación que se inició a revertir con el surgimiento del derecho del trabajo en el siglo XIX.

Es cierto, que el fenómeno de la globalización ha generado grandes cambios en lo


político, económico, social y cultural; ha logrado relacionar al comercio con el movimiento
de capitales y la productividad, rebasando las fronteras de los países, apoyándose en las
innovaciones tecnológicas y de comunicación.

Este proceso de globalización se ha vinculado con la internacionalización del capital, la


cual ha traído cambios fundamentales en el proceso productivo y en el proceso del
trabajo, es decir, en las formas de producción y de organización del trabajo, en las formas
de contratación y negociación, en las formas de incrementar la competitividad y
productividad. Por ello, las teorías de la globalización se han desempeñado en este

XXIX
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

estudio como el fundamento teórico para comprender estos cambios, que se reflejan en la
dinámica de los mercados y la internacionalización del capital, así como del papel del
trabajador en la nueva división internacional del trabajo.

La internacionalización del capital se traduce en la internacionalización del proceso


productivo. Es así como se ha dado lugar a la mundialización de los mercados, al
intercambio y a los servicios globales y a la cultura global; otro resultado de este proceso
es la proliferación de empresas trasnacionales, que han aprovechado las diferencias
salariales, así como los incentivos fiscales, los subsidios de bienes y servicios, además la
cercanía geográfica de los países.

Aunado a ello, la política neoliberal y la tendencia a aumentar la competitividad y


productividad en el mercado global ha determinado en gran medida la flexibilización del
trabajo, que tiene como propósito la flexibilización de la contratación y la precarización del
empleo, impactando cuestiones de carácter global como el desempleo creciente del
mercado formal, la propagación del mercado informal, la disminución de la seguridad
social, la privatización de empresas estatales, propuestas de reformas para transformar
las leyes laborales, así como la disminución de la población sindicalizada.

En el escenario sindical, la tendencia internacional ha sido flexibilizar las condiciones de


trabajo, a través de la subcontratación y el pactar individualmente las condiciones de
trabajo, sin la necesidad de pactarlas de manera colectiva, es decir, a través del sindicato,
lo cual genera las condiciones para explotar aún más a los trabajadores. Esto aunado a la
reducción de la plantilla del personal fijo, con la contratación de varios servicios en
empresas especialmente constituidas para tales propósitos, entre otras, las agencias de
empleo temporal.

La forma de organizar el trabajo, como se ha visto, ha evolucionado encontrando diversos


sistemas de trabajo, con la finalidad de incrementar la productividad, atendiendo a las
necesidades de la sociedad global o, como menciona Octavio Ianni, de una fábrica global.
Estos procesos productivos son la división internacional del trabajo tradicional, el
Taylorismo, el Fordismo, el Toyotismo y el Postfordismo o la llamada flexibilidad laboral,
que han sido funcionales en su momento dentro de la historia de la creciente
industrialización.

Estos cambios en la producción han determinado en mucho la actividad empresarial, pues


se intenta garantizar menores costos de producción y distribución, adoptando nuevos

XXX
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sistemas que permitan disminuir los costos en mano de obra y agilizar la producción,
tomando medidas como la flexibilización de las relaciones laborales.

Ante este escenario, las estructuras sindicales tienden a quedar desfasadas, igual que
sus tácticas y luchas, provocando el debilitamiento de las fuerzas del sindicalismo
nacional e internacional.

Es evidente notar que los trabajadores han tratado de dar respuesta al reto de la
mundialización, incorporándose a las organizaciones sindicales; se han organizado a nivel
regional y mundial, sin limitarse a la operación local o nacional, funcionando como un
medio de acción importante para los trabajadores y creando organizaciones sindicales
mundiales como las Confederaciones Sindicales Mundiales, como son: la Federación
Sindical Mundial (FSM), la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales
Libres (CIOSL) y la Confederación Mundial del Trabajo (CMT); las Confederaciones
Regionales, como la Organización Regional Interamericana del Trabajo (ORIT) y la
Confederación Latinoamericana de Trabajadores (CLAT), entre otras, las cuales han
tenido como característica principal el intercambiar información entre ellos y, en algunos
momentos, han sido instrumentos de solidaridad.

Los elementos que se han planteado para lograr una modernización sindical, consisten
principalmente en la capacitación para poder obtener una mayor calidad en el servicio,
alcanzando las competencias laborales que se requieren para una competitividad en el
mercado laboral, para mantener y defender su materia de trabajo; propiciar que los
dirigentes y candidatos a ser líderes sindicales sea gente comprometida a velar por los
intereses de los trabajadores, con propuestas innovadoras y que sean elegidos mediante
procesos democráticos. Esto no sólo implica que los elijan los trabajadores, sino que
también haya una alternancia en las dirigencias, para evitar prácticas de corrupción y
vicios internos.

Finalmente, como se menciona en el presente estudio, la existencia del sindicato no tiene


nada que ver con la continuación de las prácticas de impunidad y corrupción, puesto que
resulta insostenible ante la nueva coyuntura global, en un mundo donde la competitividad
y la productividad, así como la capacitación y la calidad se imponen. Es por ello que los
sindicatos deben recobrar el camino y los fines para los cuales fueron creados, eliminando
su corrupto y deshonesto actuar político y sosteniendo un cambio real, a través de normar
debidamente los procesos internos, para que sean democráticos, representativos y
transparentes.

XXXI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El hombre es un ser libre e inteligente, y como tal, responsable de sus actos, lo necesario
es ponerlos en condiciones de libertad para que se desenvuelvan según sus facultades.

HIPÓTESIS SECUNDARIAS

1.- Determinar al trabajo no como el resultado del libre albedrío del


hombre, sino, el resultado de un estado de necesidad, siendo un
imperativo de las condiciones sociales y económicas que privan en
nuestra sociedad contemporánea, y es el Sindicato el que establecerá
las condiciones favorables para que se manifieste o pueda manifestarse
la voluntad del trabajador, y el derecho laboral su aliado.

Como se demuestra de la lectura de la presente investigación, la anterior hipótesis resulto


ser cierta, de acuerdo a los puntos antes señalados y al análisis de la información
revisada en el presente trabajo, se afirma que en el devenir del tiempo, el trabajo de las
personas ha transitado de sistemas de sometimiento a un marco jurídico laboral tutelar de
sus derechos sustantivos, y ante los embates de una postura económica neoliberal y del
encanto de una denominada nueva cultura laboral, se identifica una orientación de
sometimiento cognitivo cultural de los trabajadores para la flexibilización de la relación de
trabajo en deterioro de sus derechos laborales y de su nivel de vida.

El derecho del trabajo surge como respuesta a los movimientos y reclamos de la clase
trabajadora, en especial las agrupaciones de trabajadores, para hacer valer, inicialmente,
algunos derechos laborales de naturaleza colectiva (la asociación sindical y la huelga,
entre otros) y que no se tuvieran jornadas de trabajo excesivas, condiciones insalubres y
de explotación parte de quienes los tenían sometidos.

En México, a pesar de tantos años de historia sindical, hemos visto cómo el


sindicalismo mexicano ha sido rebasado por mucho, ante los embates de la
globalización y los grandes cambios en el mundo del trabajo.

El movimiento sindical ha sido severamente impactado, reflejándose en la tasa de


sindicalización, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios y en la
capacidad de abarcar y negociar en el terreno laboral.

Su característica corporativa le significó que haya funcionado durante muchos


años como un sistema para mantener y ampliar el poder del Estado y al mismo

XXXII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

tiempo como sistema de dominación de los grupos sociales, especialmente de la


fuerza laboral. Este corporativismo permitió la consolidación y funcionamiento
de la sociedad y el Estado, contribuyendo a consolidar la nación y el Estado,
ampliando el poder y la fuerza del sindicalismo en la política. Los líderes
sindicales ocuparon durante décadas numerosos puestos en el poder legislativo y
llegaron a tener amplios márgenes de representatividad sindical y política.

El punto medular de este estudio se ha centrado en aportar los elementos


teóricos e históricos, para conocer cuáles han sido los impactos de la
globalización que han influido en las organizaciones sindicales, como son
cuestiones de carácter global derivadas del avance tecnológico, el desempleo
creciente, la pérdida de bienestar y la desregulación laboral que no garantiza
los derechos del trabajo y, derivado de esto, se ha propuesto la consecuente
modernización sindical.

Una vez analizada la realidad de la coyuntura mundial en sus diversas


manifestaciones dentro de la globalización, el papel del sindicalismo en México
se centra en su necesaria participación en la actividad económica y social del
país, el cual deberá recobrar su calidad de actor fundamental en el mundo del
trabajo, convirtiéndose en factor de cambio, dando sentido a las
transformaciones laborales, que servirán para ser una institución útil a los
trabajadores.

La participación de agrupaciones sindicales en el desarrollo del país logra un


equilibrio en la relación de cooperación trabajador-empresa, durante la
implementación de los procesos productivos y nuevas formas de organización de
las empresas en cuanto al trabajo.

Es común que se piense que los sindicatos son como dinosaurios en proceso de
extinción, por su incapacidad para adaptarse a los cambios que existen en el
entorno, así como por sus prácticas de corrupción y apoyo para legitimar al
partido en el poder.

XXXIII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Sin embargo, se observa que el sindicalismo es indispensable en México para


evitar la desregulación masiva de los derechos adquiridos con relación al
trabajo, ya que puede funcionar si se le introducen diversos cambios que
renueven y modernicen la organización sindical en México.

La modernización sindical debe entenderse como la necesidad del sindicato de


adaptarse al entorno, a los cambios y a los retos que tiene frente a la
globalización. La unidad del movimiento sindical es una alternativa ante los
procesos de globalización económica y los cambios en el mundo del trabajo, ya
que se puede observar que el sindicalismo mexicano se encuentra actualmente en
decadencia, sin proyecto, disperso, confrontado y dividido ante un entorno
internacional adverso.

Se ha podido confirmar que la ausencia de formación y capacitación de los


cuadros sindicales y sus dirigentes, así como su falta de preparación, hace
imposible una condición de igualdad ante el empresario, frenando las
posibilidades para obtener una defensa adecuada, mejores condiciones y promoción
para sus trabajadores.

Estos elementos, sumados a la falta de participación responsable de todos las


miembros, a la corrupción y desviaciones de muchos dirigentes sindicales en
función de sus intereses particulares o de grupo, es la causa que ha provocado
que el sindicalismo en México se encuentre sumido en una crisis de credibilidad
y de efectividad en el cumplimiento de su verdadera vocación: la defensa de los
derechos laborales y que, en consecuencia, vaya perdiendo gran número de
trabajadores afiliados por el mismo hecho, lo cual opera en sentido inverso de
su fortaleza para cumplir su misión histórica.

La actividad sindical, como hemos visto, está regulada en el ámbito nacional e


internacional, es un derecho que tienen los trabajadores de asociarse libremente, y
México no es la excepción, aún cuando no haya la cultura suficiente para lograr hacer que
las organizaciones sindicales sean un mecanismo eficaz y efectivo para los fines para los
cuales fueron creadas, es inoperante carecer de ellos ya que iríamos en contra de
principios constitucionales e internacionales, en lugar de pensar en el individualismo y en

XXXIV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

la desaparición del sindicato en nuestro país, debemos enfocarnos a opciones que


permitan a estas organizaciones manejarse adecuadamente, con transparencia,
democracia y vinculadas al entorno y necesidades actuales, a la modernización sindical.

Es necesario entender deben hacerse cambios acordes a los nuevos tiempos que
estamos viviendo, en función de los cambios económicos y tecnológicos, ya que de no
hacerlo tendrán un crecimiento limitado y no tendrán una rápida incorporación a la
economía mundial, ya que el no implementar medidas necesarias para estar acorde a la
coyuntura internacional, implican riesgos de exclusión de aquellos países que no estén
preparados para atender eficientemente las demandas de calidad y competitividad propias
del mundo globalizado.

Por lo tanto, el sindicalismo tiene bajo su responsabilidad una misión insustituible que es
contribuir a la construcción de los nuevos esquemas laborales, donde se exija el respeto a
la dignidad de la persona y su trabajo, lo cual no es una tarea sencilla, pues se tendrán
que implementar diversas acciones para retomar su fuerza como actor social y no como
actor político. Esas acciones van dirigidas a las transformaciones internas de las
organizaciones sindicales que deben producirse en cuanto a la democracia, transparencia
y participación de los trabajadores.

Solamente así los sindicatos recobrarán entonces su calidad de actores fundamentales en


la sociedad, convirtiéndose en factores de cambio, dando sentido a las transformaciones
laborales y considerando por supuesto la función de ser útiles para los trabajadores.
Aunque claro está, sin dejar de lado la impostergable reforma laboral que se adecúe a la
realidad y a las necesidades de las relaciones de trabajo contemporáneo, sobre todo en el
marco jurídico, y no sentarse a añorar los excesos del sindicalismo corporativo que está
visto que no regresarán, ya que en la actualidad, como se ha visto, la flexibilidad que en
las relaciones de trabajo se está dando, poco a poco permite el surgimiento de nuevas
formas como las outsourcing, que van buscando la manera de hacer más difícil el
reconocimiento de los derechos laborales, como es la antigüedad y las prestaciones,
entre otras vindicaciones laborales.

Por lo anterior se puede mencionar que el sindicalismo fue y será un fenómeno necesario,
el cual, deberá de responder a la idea de justicia social de la clase trabajadora, marcando
este movimiento, un episodio en la vida social, determinando la unión natural de los
hombres en la lucha de justicia, determinado por la desigualdad que produjo el liberalismo
económico y la desigualdad en la prestación del trabajo.

XXXV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.- En el devenir del hombre y a lo largo de su existencia, el trabajo de


las personas ha transitado de sistemas de sometimiento a un marco
jurídico laboral tutelar de sus derechos sustantivos, y ante los embates
de una postura económica neoliberal y del encanto de una denominada
nueva cultura laboral, se identifica una orientación de sometimiento
cognitivo cultural de los trabajadores para la flexibilización de la relación
de trabajo en deterioro de sus derechos laborales y de su nivel de vida.

Esta hipótesis también resulta cierta, las personas necesitan trabajar para disponer de un
ingreso que les permita cubrir, en principio, sus necesidades básicas de alimentación,
ropa y vivienda, lo que presupone una retribución económica justa para acceder a los
bienes y/o servicios que satisfagan dichos requerimientos.

Consideración que implica, en términos económicos laborales, un pago justo por las
tareas realizadas en condiciones de un trabajo decente; o sea, una remuneración
adecuada por el trabajo realizado, lo que en un sistema económico de corte neoliberal no
ocurre de esta manera, en razón de que existe una gran demanda de empleos bien
pagados y la oferta es de escasos empleos con bajos salarios, y las políticas laborales de
los gobiernos neoliberales no se orientan a modificar las condiciones socioeconómicas de
la clase trabajadora.

Por el contrario, como parte de un sometimiento cognitivo cultural, se insiste en la


urgencia empresarial de que los trabajadores modifiquen su manera de ver y sentir el
trabajo, para lo cual se ha intentado imponer la denominada nueva cultura laboral y la
exigencia de la reforma laboral acorde a los reclamos patronales de flexibilizar la relación
y los esquemas de trabajo, en deterioro de los derechos laborales de los trabajadores.

En este contexto, el análisis de la hipótesis planteada, nos indica que actualmente hay
una postura gubernamental empresarial para tener un sometimiento cognitivo cultural de
los trabajadores orientado a la flexibilización de la relación de trabajo, en deterioro de sus
derechos laborales y de su nivel de vida.

El análisis se realizó de forma documental, considerando la evolución del trabajo en


diferentes etapas que conforman el México Contemporáneo, los principios del derecho del
trabajo, los derechos laborales consagrados en la Carta Magna y la Ley Federal del
Trabajo, los Convenios Internacionales en la materia, y de manera específica la revisión
del concepto de la nueva cultura laboral, la prospectiva laboral enmarcada en los
conceptos de productividad, competitividad y competencias laborales, la revisión de las

XXXVI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

políticas públicas laborales de los dos periodos presidenciales del PAN en el poder
federal, y las propuestas de reformas laborales, la oficialista y la de la UNT, y de las
pretensiones de las autoridades laborales de la Administración Pública Federal para el
periodo 2006-2012 de concretar la tan sonada Ley Abascal pero disfrazada de una
política social ajena a los intereses de la clase trabajadora.

Objetivo General Objetivos específicos Preguntas Hipótesis Desarrollo


Analizar de manera • Enlistar una breve ¿Qué se espera del Determinar al trabajo no CAPITULO 1 Contexto del
exploratoria, los semblanza histórica sindicalismo? como el resultado del sindicato y el derecho
antecedentes, que dieron sobre el sindicalismo y ¿Hasta qué punto el libre albedrío del hombre, laboral
origen a las primeras los derechos laborales sindicalismo ha sino, el resultado de un 1.1 Contextualidad
ideologías sindicales, definir y como han contribuido al estado de necesidad, básica.
su situación actual y transcendido a través desarrollo armónico siendo un imperativo de 1.1.1 Trabajador.
perspectiva de los derechos de la historia en de la sociedad? las condiciones sociales y 1.1.2 Patrón.
laborales internacionales en nuestro país, en ¿Cuál podría ser un económicas que privan 1.1.3 Etimología de
México, observar los efectos diversas cuestiones del enfoque equilibrado en nuestra sociedad palabra trabajo.
de la globalización en el ámbito familiar, del movimiento contemporánea, y es el 1.1.4 Relación de Trabajo.
sindicalismo mexicano, y cultural, ideológico sindical en nuestra Sindicato el que 1.1.5 Organización.
describir el papel de los además de los grandes cultura mexicana? establecerá las 1.1.6 Empresa.
mismos en el desarrollo cambios sociales que ¿La autonomía condiciones favorables 1.1.7 Establecimiento.
económico del país, transformaron la institucional del para que se manifieste o 1.1.8 Gremio.
revisando el avance que realidad política, sindicato representa pueda manifestarse la 1.1.9 Coalición.
hasta la fecha se ha cultural y económica en la dinámica actual del voluntad del trabajador, y 1.1.10 Asociación.
alcanzado en este rubro y las últimas décadas. movimiento sindical? el derecho laboral su 1.1.11 Derecho de
temas en los que todavía se • Establecer el ¿Existe una relación aliado. asociación.
tienen pendientes. Y concepto de sindicato y estrecha entre el 1.2 Contexto sindical.
Establecer las necesidades derecho laboral concepto de sindicato 1.2.1 Sindicalismo.
esenciales y apremiantes de estableciendo su y derecho laboral? 1.2.2 Federación.
la asociación del hombre. relación estrecha. ¿Cuál es la 1.2.3 Confederación.
• Determinar la importancia que han 1.2.4 La asamblea.
importancia que han adquirido el sindicato 1.2.5 Libertad sindical.
adquirido en los y derecho laboral en 1.2.6 Sindicato.
diferentes ámbitos del los diferentes ámbitos 1.2.6.1 Etimología y
desarrollo: social, del desarrollo: social, concepto del término
político, y económico político, y económico sindicato.
internacional. internacional? 1.2.6.2 Clasificación de
• Analizar como la ¿Cómo la asociación los sindicatos.
asociación de los de los individuos 1.2.6.3 Tipos de
individuos genera un genera un cambio sindicatos.
cambio transcendental transcendental en la 1.2.6.4 Prohibiciones del
en la vida de sus vida de sus sindicato.
agremiados bajo los agremiados bajo los 1.2.6.5 Derechos y
lineamientos del lineamientos del obligaciones de los
derecho laboral. derecho laboral? sindicatos.
1.2.7 Autonomía y
democracia sindical.
1.2.8 La Huelga.
1.2.8.1 Justificación de la
Huelga.
1.2.8.2 Objetivo de la
Huelga.
1.2.8.3 Procedimiento y
calificación de la Huelga.
1.2.8.4 Terminación de la
Huelga.
1.2.8.5 Patrimonio
sindical.
1.2.8.6 Contrato ley.
1.3 Contexto laboral.
1.3.1 Derecho sindical.
1.3.2 Derecho obrero.
1.3.3 Derecho social.
1.3.4 Derecho laboral.
1.3.5 Derecho del trabajo.

XXXVII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1.3.5.1 Surgimiento del


derecho del trabajo.
1.3.5.2 Principios del
derecho del trabajo.
1.3.6 Cultura del trabajo.
1.3.6.1 Concepto de
cultura del trabajo.
1.3.6.2 La cultura y el
derecho del trabajo.
1.3.7 Características de
los derechos de los
trabajadores.
1.3.8 Características del
Derecho Mexicano del
Trabajo.
1.3.9 El conflicto en el
derecho del trabajo.
1.3.9.1 Origen de los
conflictos.
1.3.9.1.1 Cuestión social.
1.3.9.1.2 Factores de la
producción.
1.3.9.1.3 Lucha de clases.
1.3.9.2 Conflictos de
trabajo artículo 123.
1.3.9.2.1 Solución de los
conflictos.
1.3.9.2.2 Medios de
solución.
1.3.9.3 Formas de
terminación del conflicto
individual.
1.3.9.3.1 Convenio.
1.3.9.3.2 Desistimiento.
CAPITULO 2
Antecedentes del
sindicato y del derecho
mexicano del trabajo
2.1. Colaboración entre
individuos para satisfacer
sus necesidades.
2.2 Movimiento sindical
en México, causas y
orígenes.
2.3 El sindicato en
México. Una breve
historia.
2.3.1 La colonia.
2.3.2 México
independiente.
2.3.2.1 La constitución de
1814 y 1857.
2.3.2.2 Legislación de
Maximiliano.
2.3.2.3 Código civil de
1870.
2.3.3 Época Porfirista.
2.4 Época
posrevolucionaria
2.4.1 La revolución de
1910.
2.4.2 Constitución de
1917.
2.4.3 El artículo 123.
2.5 Movimiento social
obrero mexicano.
2.6 El sindicalismo
contemporáneo.
2.6.1 El Obrero del Siglo
XX.

XXXVIII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.7 Organizaciones
obreras post-
revolucionarias.
2.7.1 Confederación
regional obrera mexicana.
2.7.2 Confederación
general del trabajo.
2.8 Breves antecedentes
del Derecho Mexicano del
Trabajo
2.8.1 La Legislación en el
México de la
Independencia.
2.8.2 La condición de los
trabajadores en los años
de 1821 a 1856.
2.8.3 La Constitución de
1857.
2.8.4 La Constitución
Política de los Estados
Unidos Mexicanos 1917.
2.8.4.1. La Ley Federal
del Trabajo de 1931.
2.8.4.2 La Ley Federal del
Trabajo de 1970.
2.8.4.3. La Ley Federal
del Trabajo en nuestros
días.

Objetivo General Objetivos específicos Preguntas Hipótesis Desarrollo


Analizar de manera • Determinar si los ¿Es la globalización En el devenir del hombre CAPITULO 3 El Sindicato
exploratoria, los derechos laborales sindical un problema y a lo largo de su y los derechos laborales
antecedentes, que dieron internacionales para su existencia, el trabajo de internacionales en la
origen a las primeras contribuyen a la fortalecimiento y las personas ha legislación Mexicana
ideologías sindicales, definir unificación de los manifiesto? transitado de sistemas de 3.1 Derecho laboral y
su situación actual y trabajadores ¿Los derechos sometimiento a un marco movimiento sindical
perspectiva de los derechos mexicanos y a su vez laborales jurídico laboral tutelar de internacional.
laborales internacionales en se traduce en mejor internacionales sus derechos sustantivos, 3.1.1 Tratado de libre
México, observar los efectos calidad de vida. contribuyen a la y ante los embates de comercio: Regulación del
de la globalización en el • Establecer las unificación de los una postura económica trabajo.
sindicalismo mexicano, y necesidades trabajadores neoliberal y del encanto 3.1.2 Derecho jurídico
describir el papel de los esenciales y mexicanos y de una denominada sindical y política sindical
mismos en el desarrollo apremiantes de la traduciéndolo en una nueva cultura laboral, se en México.
económico del país, asociación del hombre. mejor calidad de identifica una orientación 3.2 La ley laboral en la
revisando el avance que • Evaluar al vida? de sometimiento cognitivo constitución de los
hasta la fecha se ha sindicalismo como un ¿La asociación del cultural de los sindicatos.
alcanzado en este rubro y factor real de poder. hombre es una trabajadores para la 3.3. Personalidad Legal y
temas en los que todavía se • Consolidar al necesidad esencial y flexibilización de la jurídica.
tienen pendientes. Y sindicalismo y al apremiante? relación de trabajo en 3.4 Estructura legal de los
Establecer las necesidades derecho laborar como ¿Es el sindicalismo deterioro de sus derechos sindicatos.
esenciales y apremiantes de la garantía social de un factor real de laborales y de su nivel de 3.4.1 El mando sindical.
la asociación del hombre. los trabajadores. poder? vida. 3.4.2 Limitaciones
¿Se puede consolidar legales.
al sindicalismo y al 3.5 La disolución de los
derecho laborar como sindicatos.
garantías sociales de 3.6 La innovación del
los trabajadores? sindicalismo mexicano.
¿Qué papel 3.6.1 El sindicalismo
desempeñan los oficial.
sindicatos mexicanos 3.7 Vigencia jurídica del
en un país inmerso Sindicato.
en un proceso de alta 3.7.1 La Constitución
competitividad Política de los Estados
mundial? y ¿Cómo Unidos mexicanos.
deben ser estos 3.7.2 Vigencia de los
sindicatos en este convenios
ambiente internacionales.
globalizador? 3.7.2.1 Organización
Internacional del Trabajo
convenio Núm. 87

XXXIX
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3.7.3 La Ley Federal del


Trabajo.
3.7.4 Legislación de
seguridad social.
3.7.5 Jurisprudencia.
3.8 Federaciones y
confederaciones
sindicales.
3.8.1 Condiciones para el
Registro.
3.9 El Sindicato como
frente a problemas
sociales.
3.10 El Sindicato como
mediador con el Estado.
3.10.1 Concertación.
3.10.2 Dentro de una
Crisis la Concertación
Social es la pauta del
Sindicato.
3.10.3 Movimiento social
y sindical.
3.10.4 Escenario
favorable para el
desarrollo.
3.10.5 Concertación
Social.
3.10.6. Elemento de la
Concertación.
3.11 El sindicato y su
estrategia partidaria.
3.11.1 El poder político
del sindicato.
3.12 La Organización
Internacional del Trabajo.
3.12.1 Antecedentes
3.12.2 Declaración de la
Organización
Internacional del Trabajo
(OIT) relativa a los
principios y derechos
fundamentales en el
trabajo y su seguimiento.
3.12.3 Políticas.
3.12.4 Convenios.
CAPITULO 4 El Sindicato,
irrenunciabilidad de los
derechos laborales,
Formas de terminación de
los conflictos individuales
de trabajo
4.1 Reforma y Acción
Sindical.
4.1.1 Naturaleza, y control
del sindicato.
4.1.2 Medio jurídico y
legal.
4.1.3 Normas generales
básicas del sindicato.
4.1.4 La Comisión interna
dentro del sindicato.
4.2 La organización y
disciplina sindical.
4.2.1 Clasificación de los
sindicatos.
4.2.2 Sindicatos de
trabajadores y patrones.
4.2.3 Sindicatos de
Empresas, ramas de la
industria.

XL
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

4.3 Trabajo sindical.


4.3.1 Desempeño de los
sindicatos.
4.3.2 La Huelga como
búsqueda de
institucionalidad.
4.3.3 El Control del
estado del sindicalismo.
4.3.4 La Democracia en el
diseño mismo de la
política gubernamental.
4.3.5 La política laboral.
4.4 Irrenuciabilidad de los
derechos laborales.
4.4.1 Referencia sobre las
prestaciones que tienen
los Trabajadores.
4.4.2 Derechos
irrenunciables a los
trabajadores.
4.4.3 Respeto a los
derechos laborales.
4.4.4 La justicia social en
el artículo 123 fracción
XVIII Constitucional.
4.5 Formas de
terminación de los
conflictos individuales de
trabajo.
4.5.1 El convenio.
4.5.2 El desistimiento.
4.5.2.1 De la acción.
4.5.2.2 De la demanda.
4.5.3 La transacción.
4.5.3.1 El laudo.

Objetivo General Objetivos específicos Preguntas Hipótesis Desarrollo


Analizar de manera • Determinar al ¿Es el Sindicato el Al Establecer las CAPITULO 5 Actualidad y
exploratoria, los trabajo no como el ente que establecerá necesidades esenciales y Perspectiva en el derecho
antecedentes, que dieron resultado del libre las condiciones apremiantes de la laboral y sindical
origen a las primeras albedrío del hombre, favorables para que asociación del hombre, la 5.1 La nueva cultura
ideologías sindicales, definir sino, el resultado de un se manifieste o pueda situación actual y laboral.
su situación actual y estado de necesidad, manifestarse la perspectiva de los 5.1.1 Antecedentes.
perspectiva de los derechos siendo un imperativo voluntad del derechos laborales 5.1.1.1 Concepto de nueva
laborales internacionales en de las condiciones trabajador? y ¿Es el internacionales en cultura del trabajo.
México, observar los efectos sociales y económicas. derecho laboral el nuestro país, se podrá 5.1.1.2 El acuerdo
de la globalización en el Es el Sindicato el que elemento para instituir los efectos de la nacional de productividad.
sindicalismo mexicano, y establecerá las alcanzarlo? globalización en el 5.1.1.3 Los convenios de
describir el papel de los condiciones favorables ¿El derecho laboral y sindicalismo mexicano, al productividad.
mismos en el desarrollo para que se manifieste la autonomía de los igual que describir el 5.1.2 Elementos.
económico del país, o pueda manifestarse sindicatos siguen papel de los mismos en 5.1.2.1 Las personas y el
revisando el avance que la voluntad del siendo temas el desarrollo económico trabajo.
hasta la fecha se ha trabajador y al derecho pendientes de la del país. Además al 5.1.2.2 Las organizaciones
alcanzado en este rubro y laboral como el consolidación revisar el avance que y la productividad.
temas en los que todavía se elemento para lograrlo. democrática del país? hasta la fecha se ha 5.1.3 La nueva cultura
tienen pendientes. Y • Determinar si el ¿La reforma en el alcanzado en este rubro y laboral y los derechos
Establecer las necesidades derecho laboral y la ámbito laboral y el temas en los que todavía laborales.
esenciales y apremiantes de autonomía de los cambio en su cultura se tienen pendientes, se 5.1.3.1 Postura
la asociación del hombre. sindicatos siguen y prácticas, harán demostrar que no solo empresarial.
siendo temas que el gobierno sea constituyen un actor 5.1.3.2 Postura del
pendientes de la de gran apoyo para social y político movimiento obrero.
consolidación los procesos constructivo, que puede 5.2 Prospectiva Laboral.
democrática del país. democráticos en las recuperar la influencia 5.2.1 Los retos del mundo
• Determinar la empresas y para la perdida, sino que además del trabajo.
importancia en la vida ampliación de la son capaces de actuar 5.2.1.1 Productividad y
jurídica y en general autonomía sindical? con mayor legitimidad y competitividad.
que tiene y ha tenido ¿El derecho laboral fuerza en los ámbitos 5.2.1.2 Competencias
en México el sindicato, fue producto de la regional e internacional. laborales.
desde sus conceptos importancia que en 5.2.2 Política laboral.
en todos los géneros, México ha alcanzado 5.2.2.1 Enfoque

XLI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

seguido de sus las diversas formas económico.


requisitos y formas de protección de la 5.2.2.2 Reforma laboral.
legales para su clase trabajadora? 5.2.3 Proyectos de
constitución y la ¿Cuál es la reformas a la legislación
importancia tan grande importancia del laboral.
que ha generado en Derecho del Trabajo 5.2.3.1 Proyecto oficialista.
nuestro país desde su en el sindicalismo? 5.2.3.2 Proyecto UNT.
creación y ¿El sindicalismo y el 5.3 Sindicalismo,
reconocimiento. derecho laboral es expresión formada para la
• Entender que la una de las uniones defensa de intereses
reforma en el ámbito más significativas que comunes.
laboral y de un cambio tutela a la clase 5.3.1 Garantía social de la
en su cultura y sus trabajadora? asociación de los
prácticas, hará que el ¿El sindicalismo trabajadores.
gobierno sea de gran mexicano es una de 5.3.2 El pensamiento
apoyo para los las herramientas que político y social.
procesos democráticos se desplegaron en el 5.3.3 Los medios y fines
en las empresas y para contexto corporativo de protección de los
la ampliación de la bajo el que está derechos laborales.
autonomía sindical. Y diseñado el Estado, y 5.3.4 El sindicalismo el
al no llevarse a cabo que ha sido funcional brazo fuerte en el derecho
corre el riesgo de para todos los laboral.
perder una oportunidad actores políticos? 5.4 La situación que vive
única para apuntalar la el sindicalismo en México.
transparencia y las 5.4.1 La crisis del
posibilidades de sindicalismo en México.
participación en los 5.4.2 Las funciones de los
sindicatos, una forma dirigentes en el
de proteger a los más sindicalismo.
débiles sin afectar la 5.5 La autonomía de
productividad. acción sindical.
• Determinar si el 5.5.1 Medios estatales
derecho laboral fue para lograr el control.
producto de la 5.5.2 Libertad oficial del
importancia que en sindicato.
México han alcanzado 5.5.3 El espacio dentro de
las diversas formas de la libertad sindical.
protección hacia la 5.5.4 Autonomía sindical.
clase trabajadora. 5.5.5 Cooperación patrón -
• Analizar al sindicato.
sindicalismo y su 5.5.6 La fortaleza del
importancia en el sindicato.
Derecho del Trabajo. 5.5.7 Mejor calidad de
• Determinar si el vida.
sindicalismo y el 5.5.8 El bien común sobre
derecho laboral es una lo individual.
de las instituciones 5.6 Efecto Social,
más significativas que Económico y Político.
tutela a la clase 5.6.1 Convenios laborales
trabajadora. internacionales.
• Demostrar que el 5.6.2 La alta
sindicalismo mexicano competitividad mundial,
es una de las momento del
herramientas que se fortalecimiento sindical.
desplegaron en el 5.6.3 Reforma del derecho
contexto corporativo sindical.
bajo el que está 5.6.4 Surgimiento de la
diseñado el Estado, y Unión Nacional de
que ha sido funcional Trabajadores (UNT).
para todos los actores 5.6.5 Política electoral y
políticos. corporativismo sindical.
5.6.6 Propensiones del
sindicalismo mexicano.

XLII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

CONCLUSIONES Y NUEVA AGENDA DE INVESTIGACIÓN.

En México la regulación de las relaciones laborales tiene como principio a tutelar el de


proteger y mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, por eso el derecho laboral
mexicano desarrolló conceptos como el de irrenunciabilidad, la protección así como la
reivindicación al trabajador. En este sentido, cuando se plantea la necesidad de una
reforma laboral, se tiene que partir de aquella que respete el contenido del artículo 123
constitucional y sus elementos básicos como el derecho al empleo, a un salario digno y a
la libertad sindical.

Asistimos a un contexto de competencia global donde el mercado laboral no está exento


de la presión que dicha competencia implica; donde sobre todo los países del oriente, con
China a la cabeza, han pauperizado el salario y las condiciones laborales con el propósito
de elevar la producción y de concentrar el mayor capital externo para su inversión. Los
efectos negativos de tales prácticas inhumanas, han generado en el mercado laboral
mundial la quiebra de muchas industrias, como la del zapato en México; o bien la
recomposición de las grandes transnacionales que ven en esos territorios las ventajas que
los consoliden como líderes en el mundo, dejando de lado los impactos negativos a la
clase trabajadora de allende el oriente.

Tales circunstancias nos obligan a sumarnos al resto de los países en cuanto a proteger
los derechos laborales de todos los trabajadores en el mundo, en razón de sus derechos
humanos, tal y como se ha pactado en el concierto de las Naciones Unidas. En este
sentido, respetar el principio de un pago justo por las tareas realizadas es decir, una
remuneración adecuada por el trabajo realizado, así como los mínimos de seguridad
social asociados al empleo.

El reto en estas condiciones, obliga al Estado en su conjunto a conciliar las posiciones


justas de la relación capital-trabajo, en un marco de competencia global. Por un lado la
exigencia de la reforma laboral acorde a los reclamos patronales de flexibilizar la relación
y los esquemas de trabajo; y por la otra la de proteger los derechos laborales de los
trabajadores.

Luego entonces, el sindicalismo en México lejos de quedarse al margen debe informarse


plenamente de los nuevos retos así como de las mejores prácticas mundiales que
permitan incentivar la generación de empleos como la protección de los derechos
laborales. Su intervención debe ser cautelosa y certera, pero siempre encaminada a

XLIII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

aportar una mejor solución, que beneficie y garantice una estabilidad laboral para sus
agremiados.

La aportación de ideas y propuestas de nuestro sindicalismo, deben estar orientadas a


apoyar y elevar el nivel de producción, hacer consiente a los dueños del capital que una
alianza obrero-patronal como en Japón sienta las condiciones del despegue económico
del país. Por lo que sus aportaciones a la reforma deben ser concretas, congruentes y
pertinentes; sin menoscabo de la defensa de los derechos de los trabajadores y en
consideración al contexto de competencia actual.

Dar el paso a esta nueva visión, pasa por evolucionar en las relaciones del sindicalismo
con el Estado. Recordemos que el sindicalismo mexicano ha sido el pilar del
corporativismo, que en su momento histórico permitió al sistema político mexicano
articularse en torno al cumplimiento de las banderas y programa de la Revolución
Mexicana, y que rindió frutos para la estabilidad política de su momento, pero que derivó
en una concentración de poder donde los intereses de los trabajadores pasaron a
segundo plano.

El desafío es grande, actualmente los liderazgos sindicales no solo sufren un fuerte


desprestigio ante la opinión pública, sino que el mercado laboral ha generado cambios en
la forma en que las personas se emplean. Además, en su momento el Estado mexicano
propicio la creación de estructuras corporativas que permitían tomar decisiones e
instrumentarlas con el menor nivel de conflicto político posible. Mitigar y controlar el
conflicto producto de las demandas de los trabajadores, se volvió la vocación de los
liderazgos de los sindicatos, algunos de ellos creados exprofeso, dándole sustento a la
legitimidad del gobierno y a las carreras políticas de los que participaban con el partido en
el gobierno en la lucha por el poder.

En las nuevas reglas del juego, el Estado tiene que dejar de intervenir ya sea directa o
indirectamente en asuntos Sindicales, garantizando con el marco regulatorio un piso
parejo para todos. Por lo que la reforma debe unificar todos los marcos normativos en uno
solo, en el que se reproduzcan todas las condiciones y prestaciones que son iguales para
cualquier trabajador, y se marquen las diferencias y limitaciones que pueda tener el
ejercicio de ciertos derechos tomando en cuenta el servicio que se presta y la finalidad del
mismo.

El mercado laboral en México sigue manteniendo prácticas injustas y en la mayoría de las


ocasiones el trabajador se ve en la necesidad de aceptar las condiciones establecidas por

XLIV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

el empleador aún cuando tenga que firmar papeles en blanco para que el patrón a su libre
albedrío pueda hacer uso de él en forma de una renuncia y dejar sin defensa en sus
derechos al trabajador; por lo que la defensa de los derechos laborales solo es posible en
tanto sea transparente toda forma de contratación, conforme a la Ley.

Como hemos señalado, la tendencia a aumentar la competitividad y productividad en el


mercado global ha determinado en gran medida la flexibilización del trabajo, que tiene
como propósito la flexibilización de la contratación y la precarización del empleo,
impactando cuestiones de carácter global como el desempleo creciente del mercado
formal, la propagación del mercado informal, la disminución de la seguridad social, la
privatización de empresas estatales, propuestas de reformas para transformar las leyes
laborales, así como la disminución de la población sindicalizada.

A nivel mundial, la tendencia es flexibilizar las condiciones de trabajo, a través de la


subcontratación y el pactar individualmente las condiciones de trabajo, sin la necesidad de
pactarlas de manera colectiva, es decir, a través del sindicato, lo cual pone en riesgo los
derechos laborales de los trabajadores. Además de la reducción de la plantilla del
personal fijo, con la contratación de servicios de “outsourcing”. En México, el sector
empresarial pugna por la flexibilización, tomando en cuenta el desarrollo tecnológico, lo
que es negociable en tanto no atente contra la estabilidad en el empleo y la libertad
sindical para la negociación de las condiciones laborales.

El fenómeno del corporativismo también ha evolucionado, observamos cómo a partir del


cambio de régimen en el año 2000 con el ascenso del PAN a la presidencia de la
república, las grandes centrales obreras como la CTM, CROC, etc. Perdieron los niveles
de negociación del pasado, lo que debilitó y dividió aún más los vínculos entre la cúpula
sindical corporativa y el partido oficial, al no tener los apoyos y privilegios del pasado
reciente. Donde su capacidad de mediar por los derechos de los trabajadores no solo
perdió fuerza sino que la recomposición de los liderazgos se guio por una lógica de perder
el menor poder posible ante las nuevas autoridades, poniendo por delante los intereses
de los líderes que no los de los trabajadores.

Cambiar la visión del nuevo sindicalismo en México es urgente ante los vertiginosos
cambios del mercado laboral, y de las propuestas de un nuevo marco normativo que
regule las posibles nuevas condiciones laborales. Esta visión, deberá recobrar su calidad
de actor fundamental en el mundo del trabajo, convirtiéndose en factor de cambio, dando

XLV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sentido a las transformaciones laborales, que servirán para ser una institución útil a los
trabajadores.

Su participación es condición fundamental para evitar la desregulación masiva de los


derechos adquiridos con relación al trabajo. La nueva visión sindical debe entenderse
como la necesidad del sindicato de adaptarse al entorno, a los cambios y a los retos que
tiene frente a la globalización. Lo cual atraviesa por el reto de consolidar la unidad del
movimiento sindical, ya que se puede observar que el sindicalismo mexicano se
encuentra actualmente en decadencia, sin proyecto, disperso, confrontado y dividido,
tanto en el sindicalismo llamado oficial como en las grandes centrales como la CTM,
CROC, entre otras.

En ese contexto, urge la formación y capacitación de los cuadros sindicales y sus


dirigentes, para estar en condiciones de igualdad ante la negociación con los
empresarios, ya que de eso depende que en las reformas se tenga la capacidad de
entender el contexto, dimensionar la magnitud de los cambios propuestos, y garantizar a
la par los derechos de los trabajadores.

También es el momento ya de que la capacitación de los trabajadores deje de ser una


bandera solo para la presión en la negociación de condiciones laborales, y se convierta en
la plataforma de despegue de las nuevas condiciones para la productividad del país, al
garantizar al “capital” que contará con el talento humano que requieren los cambios
tecnológicos de la actualidad, con estándares a nivel mundial. Por lo que los modelos de
capacitación deben estar orientados a la certificación de competencias laborales que
demande el mercado laboral tanto nacional como internacional, abriendo con ello una
pluralidad de opciones de contratación, mejor remuneradas y enlazadas con las
necesidades de talento humano que exigen los cambios tecnológicos.

Esto permitiría un cambio sustancial de la cultura laboral en los sindicatos, para que los
trabajadores compartan la visión, misión y valores de la empresa, así como crear la
cultura de una mejora continua en todos los procesos que se realicen y, por supuesto,
desarrollar una cultura de servicio.

Como se analizó, los conflictos individuales de trabajo surgen por desequilibro de los
factores de la producción o por violación a un derecho, siendo los más comunes los de
naturaleza jurídica y de contenido económico, esto en virtud de que frecuentemente
existen violaciones de cláusulas de carácter económico; o que son el resultado del

XLVI
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

incumplimiento de prestaciones otorgadas por la ley, en beneficio de los trabajadores o


por interposiciones a los convenios celebrados al inicio de la relación de trabajo.

En este sentido, la reforma laboral debe reconocer que los derechos laborales
irrenunciables tienen la finalidad de proteger al trabajador de los actos unilaterales y
arbitrarios por parte del patrón, lo que significa que ante las formas de terminación del
conflicto de trabajo como son el convenio, el desistimiento y la transacción, la Junta de
Conciliación y Arbitraje debe poner más atención para evitar que se dejen sin efectos
disposiciones del Derecho del Trabajo. Por lo que los funcionarios del trabajo deben
vigilar el pleno cumplimiento de los derechos laborales, inclusive mediante la asesoría
legal correspondiente, en el sentido de evitar el que celebren convenios con el patrón
después de que los tribunales del trabajo emiten laudo condenatorio que favorece al
trabajador, aun cuando se encuentre pendiente de resolverse el amparo planteado en su
contra e inclusive ya resuelto ese juicio de garantías, el cual no favorece al quejoso, de tal
forma que el laudo dictado queda firme de forma definitiva.

Lo anterior se complica en la realidad, cuando observamos que en los procesos se


dificulta cuando no es que se restringe el acceso a la información laboral, además de que
se hacen lentos los trámites de los asuntos, generando con ello desconfianza de los
órganos de atención.

Aunado a lo anterior, en la materia laboral no se requiere título profesional para defender


a un trabajador o un patrón, lo que provoca que el nivel de argumentación sea deficiente
técnicamente hablando, poniendo en riesgo los intereses del quejoso.

En este sentido, consideramos adecuado la creación de los tribunales judiciales de lo


social que se encarguen de resolver las controversias laborales, así como las de
seguridad social (esto supone la desaparición de las juntas con su característica tripartita
que constitucionalmente tiene el carácter administrativo, pues pertenecen al poder
ejecutivo). Estos órganos deberán ser equivalentes en lo federal como en lo local a todos
los aspectos ya señalados.

PROPUESTA DE POLÍTICAS PÚBLICAS

• Constituir tribunales judiciales de lo social que se encargue de resolver las


controversias laborales, así como las de seguridad social.

Líneas de acción

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1. Diseñar el nuevo marco de administración de justicia laboral con la


participación de las Juntas federales y locales de conciliación y arbitraje;
además de las barras de abogados y centros de enseñanza superior
especializados en derecho laboral.

2. Coadyuvar desde los centros académicos especializados en los


diagnósticos y propuestas para la constitución de los tribunales judiciales
de lo social.

• Unificar todos los marcos normativos en uno solo, en el que se reproduzcan todas
las condiciones y prestaciones que son iguales para cualquier trabajador, y se
marquen las diferencias y limitaciones que pueda tener el ejercicio de ciertos
derechos tomando en cuenta el servicio que se presta y la finalidad del mismo.

Líneas de acción

1. Compendiar todos los conceptos comunes de los marcos normativos en la


materia, a la luz de los derechos laborales establecidos en la Constitución.

2. Programar en un plazo no mayor a dos años la publicación del nuevo


marco normativo.

3. Instrumentar los mecanismos de actualización del nuevo marco respecto a


los posibles cambios constitucionales, en un marco de total transparencia y
acceso a la información.

• Diseñar y conformar el Instituto de Profesionalización en materia de derecho


laboral.

Líneas de acción

1. Establecer los alcances de formación del Instituto, bajo un modelo de


certificación de competencias laborales en materia laboral.

2. Definir los mecanismos de financiamiento, evaluación y supervisión de la


operación del Instituto.

XLVIII
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

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Diccionario de la Lengua Española, Décima Octava Edición, ED. Espasa-Calpe, Madrid,


1958.

Hemerografía

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Periódico obrero Luz núm. 7; 21 de julio de 1917.

Periódico obrero Luz. núm. 14; 12 de septiembre de 1917.

Periódico obrero Revolución Social. núm. 5, 30 de mayo de 1915. Artículo de Genoveva


Hidalgo, "También la mujer desea emanciparse".

Periódico obrero Trabajo y Producción, Prospecto, enero de 1917.

Tribuna Roja, núm. 25; 16 de agosto de 1916.

Mesografía

www.historiadecananea.com.mx

www.oit.org.mx

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Otras fuentes.

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Octava Época Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de


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Octava Época, Instancia: Tribunales Colegiados eje Circuito, Fuente: Semanario Judicial
de la Federación, Tomo: XII- Julio, Página: 301

LV
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

"LOS SINDICATOS EN SU LABERINTO, VIGENCIA DE LOS DERECHOS


LABORALES INTERNACIONALES EN MÉXICO, 2000-2012"
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Índice
INTRODUCCIÓN ........................................................................................................................................1
CAPITULO 1 Contexto del sindicato y el derecho laboral ............................................................10
1.1 Contextualidad básica........................................................................................................... 10
1.1.1 Trabajador. ....................................................................................................................... 10
1.1.2 Patrón. .............................................................................................................................. 11
1.1.3 Etimología de palabra trabajo. ....................................................................................... 12
1.1.4 Relación de Trabajo. ....................................................................................................... 14
1.1.5 Organización. .................................................................................................................. 15
1.1.6 Empresa. .......................................................................................................................... 17
1.1.7 Establecimiento............................................................................................................... 18
1.1.8 Gremio. ............................................................................................................................. 19
1.1.9 Coalición. ......................................................................................................................... 20
1.1.10 Asociación. .................................................................................................................... 22
1.1.11 Derecho de asociación. ................................................................................................ 29
1.2 Contexto sindical. .................................................................................................................. 32
1.2.1 Sindicalismo. ................................................................................................................... 32
1.2.2 Federación. ...................................................................................................................... 34
1.2.3 Confederación. ................................................................................................................ 36
1.2.4 La asamblea. .................................................................................................................... 38
1.2.5 Libertad sindical.............................................................................................................. 39
1.2.6 Sindicato. ......................................................................................................................... 46
1.2.6.1 Etimología y concepto del término sindicato. ....................................................... 46
1.2.6.2 Clasificación de los sindicatos. .............................................................................. 52
1.2.6.3 Tipos de sindicatos. ................................................................................................. 53
1.2.6.4 Prohibiciones del sindicato. .................................................................................... 53
1.2.6.5 Derechos y obligaciones de los sindicatos. .......................................................... 53
1.2.7 Autonomía y democracia sindical. ................................................................................ 55
1.2.8 La Huelga. ........................................................................................................................ 56
1.2.8.1 Justificación de la Huelga. ...................................................................................... 57
1.2.8.2 Objetivo de la Huelga. .............................................................................................. 59
1.2.8.3 Procedimiento y calificación de la Huelga. ........................................................... 60
1.2.8.4 Terminación de la Huelga. ....................................................................................... 61
1.2.8.5 Patrimonio sindical. ................................................................................................. 62
1.2.8.6 Contrato ley. .............................................................................................................. 62
1.3 Contexto laboral. ................................................................................................................... 64
1.3.1 Derecho sindical. ............................................................................................................ 64
1.3.2 Derecho obrero. .............................................................................................................. 66
1.3.3 Derecho social................................................................................................................. 67
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1.3.4 Derecho laboral. .............................................................................................................. 67


1.3.5 Derecho del trabajo......................................................................................................... 68
1.3.5.1 Surgimiento del derecho del trabajo. ..................................................................... 69
1.3.5.2 Principios del derecho del trabajo.......................................................................... 72
1.3.6 Cultura del trabajo. ......................................................................................................... 78
1.3.6.1 Concepto de cultura del trabajo. ............................................................................ 78
1.3.6.2 La cultura y el derecho del trabajo. ........................................................................ 81
1.3.7 Características de los derechos de los trabajadores.................................................. 82
1.3.8 Características del Derecho Mexicano del Trabajo. .................................................... 88
1.3.9 El conflicto en el derecho del trabajo. .......................................................................... 93
1.3.9.1 Origen de los conflictos. ......................................................................................... 93
1.3.9.1.1 Cuestión social. ................................................................................................. 94
1.3.9.1.2 Factores de la producción. ............................................................................... 96
1.3.9.1.3 Lucha de clases. ................................................................................................ 97
1.3.9.2 Conflictos de trabajo artículo 123......................................................................... 100
1.3.9.2.1 Solución de los conflictos. ............................................................................. 101
1.3.9.2.2 Medios de solución. ........................................................................................ 102
1.3.9.3 Formas de terminación del conflicto individual. ................................................. 105
1.3.9.3.1 Convenio........................................................................................................... 106
1.3.9.3.2 Desistimiento. .................................................................................................. 107
CAPITULO 2 Antecedentes del sindicato y del derecho mexicano del trabajo ........................109
2.1. Colaboración entre individuos para satisfacer sus necesidades. ................................ 109
2.2 Movimiento sindical en México, causas y orígenes. ....................................................... 113
2.3 El sindicato en México. Una breve historia....................................................................... 120
2.3.1 La colonia. ..................................................................................................................... 120
2.3.2 México independiente................................................................................................... 125
2.3.2.1 La constitución de 1814 y 1857............................................................................. 127
2.3.2.2 Legislación de Maximiliano. .................................................................................. 130
2.3.2.3 Código civil de 1870. .............................................................................................. 131
2.3.3 Época Porfirista............................................................................................................. 132
2.4 Época posrevolucionaria .................................................................................................... 134
2.4.1 La revolución de 1910. ................................................................................................. 134
2.4.2 Constitución de 1917. ................................................................................................... 139
2.4.3 El artículo 123. ............................................................................................................... 140
2.5 Movimiento social obrero mexicano. ................................................................................ 142
2.6 El sindicalismo contemporáneo. ....................................................................................... 151
2.6.1 El Obrero del Siglo XX. ................................................................................................. 155
2.7 Organizaciones obreras post-revolucionarias. ................................................................ 156
2.7.1 Confederación regional obrera mexicana. ................................................................. 156
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.7.2 Confederación general del trabajo. ............................................................................. 159


2.8 Breves antecedentes del Derecho Mexicano del Trabajo ............................................... 161
2.8.1 La Legislación en el México de la Independencia. .................................................... 164
2.8.2 La condición de los trabajadores en los años de 1821 a 1856. ............................... 167
2.8.3 La Constitución de 1857. .............................................................................................. 168
2.8.4 La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 1917. .......................... 172
2.8.4.1. La Ley Federal del Trabajo de 1931. .................................................................... 177
2.8.4.2 La Ley Federal del Trabajo de 1970. ..................................................................... 181
2.8.4.3. La Ley Federal del Trabajo en nuestros días. .................................................... 184
CAPITULO 3 El Sindicato y los derechos laborales internacionales en la legislación
Mexicana ..........................................................................................................................................191
3.1 Derecho laboral y movimiento sindical internacional. .................................................... 191
3.1.1 Tratado de libre comercio: Regulación del trabajo. .................................................. 196
3.1.2 Derecho jurídico sindical y política sindical en México............................................ 197
3.2 La ley laboral en la constitución de los sindicatos. ......................................................... 202
3.3. Personalidad Legal y jurídica. ........................................................................................... 205
3.4 Estructura legal de los sindicatos. .................................................................................... 208
3.4.1 El mando sindical.......................................................................................................... 210
3.4.2 Limitaciones legales. .................................................................................................... 212
3.5 La disolución de los sindicatos. ........................................................................................ 213
3.6 La innovación del sindicalismo mexicano. ....................................................................... 213
3.6.1 El sindicalismo oficial. ................................................................................................. 215
3.7 Vigencia jurídica del Sindicato. .......................................................................................... 217
3.7.1 La Constitución Política de los Estados Unidos mexicanos.................................... 217
3.7.2 Vigencia de los convenios internacionales. .............................................................. 221
3.7.2.1 Organización Internacional del Trabajo convenio Núm. 87 ............................... 221
3.7.3 La Ley Federal del Trabajo. .......................................................................................... 225
3.7.4 Legislación de seguridad social. ................................................................................. 226
3.7.5 Jurisprudencia. ............................................................................................................. 227
3.8 Federaciones y confederaciones sindicales. ................................................................... 231
3.8.1 Condiciones para el Registro. ..................................................................................... 236
3.9 El Sindicato como frente a problemas sociales. .............................................................. 237
3.10 El Sindicato como mediador con el Estado. ................................................................... 238
3.10.1 Concertación. .............................................................................................................. 240
3.10.2 Dentro de una Crisis la Concertación Social es la pauta del Sindicato. ............... 241
3.10.3 Movimiento social y sindical. .................................................................................... 242
3.10.4 Escenario favorable para el desarrollo. .................................................................... 242
3.10.5 Concertación Social. .................................................................................................. 243
3.10.6. Elemento de la Concertación. ................................................................................... 244
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3.11 El sindicato y su estrategia partidaria. ............................................................................ 245


3.11.1 El poder político del sindicato. .................................................................................. 246
3.12 La Organización Internacional del Trabajo. .................................................................... 248
3.12.1 Antecedentes ............................................................................................................... 248
3.12.2 Declaración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) relativa a los
principios y derechos fundamentales en el trabajo y su seguimiento. ........................... 249
3.12.3 Políticas. ...................................................................................................................... 252
3.12.4 Convenios. ................................................................................................................... 253
CAPITULO 4 El Sindicato, irrenunciabilidad de los derechos laborales, Formas de
terminación de los conflictos individuales de trabajo ................................................................256
4.1 Reforma y Acción Sindical. ................................................................................................ 256
4.1.1 Naturaleza, y control del sindicato.............................................................................. 256
4.1.2 Medio jurídico y legal.................................................................................................... 262
4.1.3 Normas generales básicas del sindicato. .................................................................. 266
4.1.4 La Comisión interna dentro del sindicato. ................................................................. 272
4.2 La organización y disciplina sindical. ............................................................................... 276
4.2.1 Clasificación de los sindicatos. ................................................................................... 277
4.2.2 Sindicatos de trabajadores y patrones. ...................................................................... 278
4.2.3 Sindicatos de Empresas, ramas de la industria. ....................................................... 279
4.3 Trabajo sindical. .................................................................................................................. 292
4.3.1 Desempeño de los sindicatos. .................................................................................... 292
4.3.2 La Huelga como búsqueda de institucionalidad. ...................................................... 293
4.3.3 El Control del estado del sindicalismo. ...................................................................... 298
4.3.4 La Democracia en el diseño mismo de la política gubernamental. ......................... 303
4.3.5 La política laboral.......................................................................................................... 305
4.4 Irrenuciabilidad de los derechos laborales....................................................................... 308
4.4.1 Referencia sobre las prestaciones que tienen los Trabajadores. ........................... 308
4.4.2 Derechos irrenunciables a los trabajadores. ............................................................. 310
4.4.3 Respeto a los derechos laborales. .............................................................................. 311
4.4.4 La justicia social en el artículo 123 fracción XVIII Constitucional. .......................... 313
4.5 Formas de terminación de los conflictos individuales de trabajo. ................................ 316
4.5.1 El convenio. ................................................................................................................... 319
4.5.2 El desistimiento............................................................................................................. 325
4.5.2.1 De la acción............................................................................................................. 325
4.5.2.2 De la demanda. ....................................................................................................... 329
4.5.3 La transacción. .............................................................................................................. 330
4.5.3.1 El laudo. ................................................................................................................... 332
CAPITULO 5 Actualidad y Perspectiva en el derecho laboral y sindical ..................................336
5.1 La nueva cultura laboral. .................................................................................................... 336
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.1.1 Antecedentes. ................................................................................................................ 337


5.1.1.1 Concepto de nueva cultura del trabajo. ............................................................... 338
5.1.1.2 El acuerdo nacional de productividad. ................................................................ 342
5.1.1.3 Los convenios de productividad. ......................................................................... 347
5.1.2 Elementos. ..................................................................................................................... 350
5.1.2.1 Las personas y el trabajo. ..................................................................................... 351
5.1.2.2 Las organizaciones y la productividad. ............................................................... 353
5.1.3 La nueva cultura laboral y los derechos laborales. .................................................. 354
5.1.3.1 Postura empresarial. .............................................................................................. 356
5.1.3.2 Postura del movimiento obrero. ........................................................................... 358
5.2 Prospectiva Laboral. ........................................................................................................... 361
5.2.1 Los retos del mundo del trabajo. ................................................................................ 362
5.2.1.1 Productividad y competitividad. ........................................................................... 362
5.2.1.2 Competencias laborales. ....................................................................................... 365
5.2.2 Política laboral. .............................................................................................................. 369
5.2.2.1 Enfoque económico. .............................................................................................. 370
5.2.2.2 Reforma laboral. ..................................................................................................... 374
5.2.3 Proyectos de reformas a la legislación laboral. ........................................................ 376
5.2.3.1 Proyecto oficialista. ............................................................................................... 376
5.2.3.2 Proyecto UNT. ......................................................................................................... 381
5.3 Sindicalismo, expresión formada para la defensa de intereses comunes. ................... 402
5.3.1 Garantía social de la asociación de los trabajadores. .............................................. 402
5.3.2 El pensamiento político y social. ................................................................................ 405
5.3.3 Los medios y fines de protección de los derechos laborales. ................................ 409
5.3.4 El sindicalismo el brazo fuerte en el derecho laboral. .............................................. 413
5.4 La situación que vive el sindicalismo en México. ............................................................ 421
5.4.1 La crisis del sindicalismo en México. ......................................................................... 427
5.4.2 Las funciones de los dirigentes en el sindicalismo. ................................................. 433
5.5 La autonomía de acción sindical. ...................................................................................... 437
5.5.1 Medios estatales para lograr el control. ..................................................................... 437
5.5.2 Libertad oficial del sindicato. ...................................................................................... 439
5.5.3 El espacio dentro de la libertad sindical. ................................................................... 441
5.5.4 Autonomía sindical. ...................................................................................................... 442
5.5.5 Cooperación patrón - sindicato. .................................................................................. 447
5.5.6 La fortaleza del sindicato. ............................................................................................ 447
5.5.7 Mejor calidad de vida. ................................................................................................... 449
5.5.8 El bien común sobre lo individual............................................................................... 451
5.6 Efecto Social, Económico y Político. ................................................................................. 453
5.6.1 Convenios laborales internacionales. ........................................................................ 466
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.6.2 La alta competitividad mundial, momento del fortalecimiento sindical. ................ 470
5.6.3 Reforma del derecho sindical. ..................................................................................... 478
5.6.4 Surgimiento de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT). ...................................... 485
5.6.5 Política electoral y corporativismo sindical. .............................................................. 488
5.6.6 Propensiones del sindicalismo mexicano. ................................................................ 490
Conclusiones ...................................................................................................................................495
Bibliografía .......................................................................................................................................502
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

INTRODUCCIÓN

Porque a todos nos debería preocupar la necesidad de analizar los problemas que atañen
a nuestra sociedad mexicana actual y de manera más específica los relacionados con el
sustento cotidiano, de los cuales en esta ocasión trataremos el sindicato y los derechos
laborales internacionales. Para un mayor entendimiento y con el objetivo de orientar al
lector sobre la forma en la cual será diseñada la investigación se presentará una parte
metodológica, donde se describe con precisión la importancia de estudiar “Los
sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en
México, 2000-2012”, los objetivos planteados, la delimitación y el planteamiento preciso
del problema a estudiar, las preguntas de investigación y las hipótesis desprendidas de
éstas. Asimismo, se puntualiza la forma en que se constataron y falsearon las hipótesis
que guían este estudio, por otra parte se describirán las fuentes de información las cuales
serán para el apoyo de la formación del documento, finalmente se llegará a la parte donde
se describirán las conclusiones a las cuales se llegó con la investigación realizada.

La presente investigación, surge del interés por tratar un tema que no es nuevo, pero si es
uno de los más importantes hoy en día; el sindicato la influencia dentro del derecho
laboral, las leyes internacionales, la situación económica y social que conlleva a la
decisión de asociarse y protegerse dentro del recinto laboral para buscar nuevas
oportunidades, y la esperanza de una mejor calidad de vida, abordamos al objeto de
estudio a partir de sus manifestaciones materiales cuyo origen es explicado y determinado
en última instancia por factores económicos, sin dejar de lado el papel del sujeto histórico-
social transformador de esos factores económicos, legales y políticos.

Este trabajo, parte de la premisa de que a medida que la ciudadanía se involucre en las
prácticas gubernamentales y en los procesos de rendición de cuentas, podrá revertir de
manera gradual las malas prácticas, costumbres y desatención que los ciudadanos hacia
el gobierno y al mismo tiempo, constituirá un elemento importante para abatir la
corrupción, impulsar la transparencia y contribuir a la transformación del gobierno y una
administración pública más democrática que no se vea rebasada por las demandas de la
sociedad en sus diferentes aspectos.

Lo que se pretende demostrar con estas investigaciones, es que si la sociedad conozca


más los temas sociales, políticos y económicos de México y así tendrá elementos para
criticar corregir y exigir de su gobierno una mayor atención y solución en los problemas
cotidianos; para un desarrollo integral de un México necesitado de crecimiento y mejor

1
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

calidad de vida.

A través de la historia se ha comprobado que la asociación entre iguales ya sea por puro
interés, o necesidad burocrática la clase trabajadora que integra este tipo de
agrupaciones, se ha visto condicionada a realizar un esfuerzo extraordinario para evitar la
desventaja en la dualidad económico - política, en que siempre se ha encontrado.

Ese esfuerzo originó dos de las conquistas de mayor relevancia, la figura del sindicato, y
el derecho laboral, los cuales al mismo tiempo que ha evolucionado gradualmente,
también se ha visto afectada por diversos vicios. Como el mal manejo por parte de los
representantes, quienes perjudican por ambos lados, al realizar actos fraudulentos y en
contra del trabajador, además de frenar el progreso natural de la figura del sindicato.

En México durante las últimas décadas el derecho laboral y el movimiento sindical han
impulsado importantes elementos al desarrollo nacional. En su forma moderada el
movimiento sindical ha luchado por la defensa de los derechos del hombre y la mujer; así
como por la promoción de valores y principios universalmente reconocidos como la
igualdad, la no discriminación y la no violencia, justicia en la prestación del trabajo,
mejorar la calidad de vida y establecer una valorización del trabajo.

Los derechos laborales representa el rescate de la economía del país y sobre todo es el
mejor instrumento para mejorar las condiciones de trabajo, dignificar la calidad de vida de
la clase trabajadora y tener una valorización del trabajo, lográndolo a través de una nueva
cultura laboral, regida por las condiciones políticas, económicas, sociales y culturales del
momento.

Esta investigación es el resultado del análisis de las relaciones individuales de trabajo y lo


que implica la renuncia de los derechos de los trabajadores durante la relación de trabajo
y aún después de está, pues corresponde poner de manifiesto que muchas veces el
trabajador desconoce sus derechos, al permitir que sean violados o limitados por el patrón
que constantemente está buscando la forma de no cumplir ciertas responsabilidades, ya
sea en el momento de expresar el acuerdo mutuo o al expresar la voluntad del trabajador;
por lo que este trabajo tiene por objeto presentar una propuesta a los funcionarios de la
Juntas de Conciliación y Arbitraje con respecto al tema de los derechos laborales
irrenunciables.

Corresponde a las Juntas de Conciliación y Arbitraje el solucionar las controversias


laborales que ante ellas se presentan, en el que se respeten y cumplan las normas de

2
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

trabajo, al momento en que surge la terminación de la relación de trabajo o del conflicto,


para evitar la renuncia de derechos de los trabajadores, dado que toca a esos
funcionarios, el corregir o subsanar deficiencias u omisiones en las relaciones de trabajo,
así como en sus formas de terminación de conflictos; esto, basado en el hecho de que el
trabajador no conoce sus derechos y que tal circunstancia es aprovechada por el patrón
que pone de manifiesto renuncia de derechos en perjuicio del primero.

Desde una perspectiva histórica, el trabajo de las personas ha transitado desde


esquemas caracterizados por el esclavismo por parte de quienes se consideraban los
más fuertes, hasta el establecimiento de mecanismos de sometimiento por aquellas
personas o grupos sociales que detentan la propiedad de los medios de producción y que
encuentran respaldo a sus pretensiones de flexibilizar las relaciones de trabajo en
detrimento de los derechos laborales de los trabajadores, con la instrumentación de
políticas públicas a favor de los intereses empresariales.

En los tiempos contemporáneos, la situación del trabajo en México se manifiesta de


manera particular en los bajos ingresos de la clase trabajadora, que les limita tener un
adecuado nivel y calidad de vida, lo que se agrava de forma significativa a partir de que
los denominados tecnócratas ascienden al poder gubernamental en el periodo
presidencial de Miguel de la Madrid (19821988) e imponen un modelo económico de corte
neoliberal.

A raíz del ascenso de neoliberales al poder, en los últimos 25 años, los trabajadores han
resentido el efecto de las políticas y programas públicos que únicamente han favorecido a
los empresarios con el argumento de que los esquemas de trabajo, así como el marco
jurídico laboral vigente, son obsoletos y rígidos para hacer frente a los mercados
internacionales y a las innovaciones tecnológicas. Consideraciones empresariales
gubernamentales, que a los ojos de los trabajadores no se pueden obviar, pero que no
deben tomarse como argumentos para que no se mejoren sus remuneraciones y les
impongan la necesidad de percibir el trabajo con ideas de que otros pueblos, como los
orientales, han modificado sus valores hacia las actividades laborales para poner en
práctica nuevas formas de realizarlas y los empresarios han intentado imponer la
denominada nueva cultura laboral con dicho propósito.

Es importante para toda sociedad tener un marco jurídico que garantice nuestros
derechos como personas para lograr la armonía y la convivencia dentro de ella, de igual
manera es importante tener una legislación que contenga los derechos irrenunciables a

3
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los trabajadores y que sean plasmados y reconocidos en una ley suprema para
garantizarlos frente al abuso y la explotación.

La investigación se orienta al estudio de los derechos del trabajador y a las relaciones


individuales de trabajo, haciendo mención de lo que implica la renuncia de los derechos
de los trabajadores durante la relación de trabajo y aún después de ésta, se hará también
un análisis de la importancia del principio de irrenunciabilidad de los derechos laborales,
como principio protector y defensor de la clase trabajadora, ya que muchas veces sus
derechos son violados o limitados por el patrón; se mencionara los medios para
solucionar los conflictos que surgen entre patrón y trabajador y sus posibles soluciones
que tienen para someter sus diferencias a un mejor arreglo para ambas partes.

Acogerse a la ley es fundamental para defender y proteger los derechos del trabajador,
corresponde a las Juntas de Conciliación y arbitraje el solucionar las controversias
laborales que ante ellas se presentan, en que se respeten y den cumplimiento a las
normas de trabajo, al momento en que surge la terminación de la relación de trabajo o del
conflicto, para evitar la renuncia de los derechos de los trabajadores, corresponde a los
funcionarios, corregir o subsanar las deficiencias u omisiones en las relaciones de trabajo,
esto es un hecho importante; ya que el trabajador no conoce sus derechos y tal
circunstancia pone en desventaja al trabajador y corresponde a estos órganos hacer una
defensa legal para los trabajadores.

Flexibilización de las relaciones laborales ha logrado una mejor comprensión de los


efectos que ha tenido el movimiento obrero en la vida nacional, es necesario empezar por
saber los conceptos básicos qué se entiende por la lucha sindical, y cuál ha sido la
participación para la mujer.; Lo cual abordaremos más adelante.

La reforma laboral se ha traducido en desregulación de las relaciones laborales. En la


medida en que la ley es más laxa, la negociación colectiva cobra un mayor peso en la
ordenación de las condiciones de trabajo.

Las organizaciones sindicales son elementos centrales en la dinámica social y política,


dada su capacidad de participar en decisiones que afectan no sólo a las condiciones de
trabajo sino en general al desarrollo de la sociedad. Podemos definirlas como estructuras
de poder para la defensa de los intereses de los trabajadores/as, que se reconocen como
clase diferenciada, con intereses contrapuestos a los del empresariado. Es decir un
sindicato es la organización de los trabajadores y trabajadoras, su medio de negociación
con el empresariado y el estado para la adecuada regulación de las relaciones laborales.

4
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La debilidad que experimenta el sindicalismo en la actualidad es evidente. Su incapacidad


de hacer frente a las medidas conservadoras de flexibilización del mercado laboral se
traduce para trabajadores y trabajadoras en inestabilidad, pérdida de poder adquisitivo,
desempleo. Ante esta situación de crisis el sindicalismo ha de afrontar nuevos desafíos,
entre otros la adecuación a las características de la clase obrera actual, fragmentada y
diversa; y por lo tanto desarrollar una acción sindical que se oriente a la defensa de los
intereses comunes, pero que también contemple las necesidades diferenciadas.

Como organización, los sindicatos se dotan de una estructura con diferentes niveles de
responsabilidad, donde se produce un reparto de tareas y donde se establecen
mecanismos para la toma de decisiones. En este sentido, los sindicatos se han
configurado como instituciones complejas, poco dinámicas, en las que se ha impuesto la
burocratización y el centralismo frente a la participación y la democracia.

Hay que señalar que son numerosos los factores que influyen en esta acumulación de
poder: la extensión del campo de actividad que hace más complicado su funcionamiento y
que fuerza a la especialización técnica para garantizar el buen funcionamiento de la
organización, la opción por un sistema de participación indirecta a través de delegaciones,
la jerarquización de las estructuras de toma de decisiones, la centralización de los
procesos de negociación colectiva, los compromisos de las direcciones sindicales en
organismos estatales y paraestatales.

En cualquier caso la ausencia de democracia en las organizaciones sindicales, tiene


importantes consecuencias como la baja implicación y la pérdida de iniciativa de las bases
y las dificultades para que se produzca debate interno abierto, crítico, no controlado por
las élites, pero especialmente influye en la pérdida de radicalidad y de capacidad de
lucha, de resistencia, de oposición, es decir en la pérdida de la capacidad de movilización
sindical. Algunos estudiosos del tema llegan a afirmar que los sindicatos ya no
representan los intereses de los trabajadores/as, sino de los dirigentes de los mismos.

En este contexto, la plena integración de las mujeres en las organizaciones sindicales


resulta cuando menos compleja. Es un hecho constatado que las mujeres participan en
las organizaciones sindicales, es decir se implican de forma activa, en mayor o menor
grado, en la dinámica sindical: acuden a informarse acerca de sus derechos laborales, se
afilian a las organizaciones sindicales, participan en movilizaciones, las promueven y
dinamizan, son elegidas como representantes sindicales y se integran en las estructuras
de dirección de los sindicatos.

5
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Con el objetivo de orientar al lector sobre la forma en la cual será diseñada la


investigación se presentará una parte metodológica, donde se describe con precisión la
importancia del tema de estudio, los objetivos planteados, la delimitación y el
planteamiento preciso del problema a estudiar, las preguntas de investigación y las
hipótesis desprendidas de éstas. Asimismo, se puntualiza la forma en que se constataron
y falsearon las hipótesis que guían este estudio, por otra parte se describirán las fuentes
de información las cuales serán para el apoyo de la formación del documento, finalmente
se llegará a la parte donde se describirán las conclusiones a las cuales se llegó con la
investigación realizada.

Ahora bien; en cuanto a las técnicas que se utilizaron para la elaboración de la


investigación “Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales
internacionales en México, 2000-2012” se utilizará el método descriptivo, toda vez que
la finalidad de este método es el describir situaciones y eventos. Decir como es y cómo se
manifiesta determinado fenómeno. Se encuentran la documental y de campo, recabando
libros y consultando revistas y periódicos históricos, así como páginas de Internet
relacionadas con el tema en comento. Por lo que respecta a los Métodos utilizados, éstos
consisten en el Método cualitativo, y por otra parte el Método Analítico mismo que me
auxilió a razonar la información obtenida.

En nuestra investigación expondremos brevemente los puntos importantes de cada


capítulo como resultado del análisis efectuado sobre el tema. Este trabajo de
investigación se integra por cinco capítulos que establecen aspectos como los siguientes:

Al revisarse las recapitulaciones se vuelven indispensables para hacer un diagnóstico


general del estado actual que guardan los elementos recopilados a lo largo del trabajo en
el acontecer nacional.

De esta manera temas como Trabajador, Patrón, Relación de Trabajo, Asociación, y


Derecho laboral, se hacen imprescindibles en el índice principal de los universos a ser
revisados, considerando que los apartados teóricos han arrojado gran claridad al análisis
del caso en concreto.

En nuestro primer capítulo nos enfocamos a una propuesta teórico-conceptual sobre el


movimiento sindical y el derecho laboral, abordando el tema de los sindicatos en su
aspecto etimológico, retomando aspectos sindicales, con la plataforma metodológica, que
nos brinda una mirada particular a nuestra investigación. Analizamos conceptos generales
exclusivos del derecho del trabajo, de los cuales se nutre el sindicato en México, dando

6
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

pauta y fijando parámetros para su desempeño, con el objeto de estar en condiciones de


llevar a cabo una visión del mismo, que nos facilite la comprensión a lo largo del presente
trabajo.

El mundo del sindicalismo Mexicano encierra algunos conceptos importantes los cuales
pueden confundirse con el concepto de sindicato, estos conceptos son los de asociación y
coalición. Motivo para hacer una diferenciación clara respecto a estos conceptos. El
Derecho del Trabajo, nace a raíz de las extremas necesidades por parte de grandes
grupos de individuos, y como tal tiene como objeto el responder a los reclamos que
provocaron las convulsiones sociales, registradas en México, en la primera década del
siglo XX, como más adelante en el desarrollo del siguiente capítulo se detalla.

El segundo capítulo la antecedentes del sindicato y del derecho mexicano del trabajo, la
razón es dar a conocer sus antecedentes históricos y en que ordenamientos legales se
encuentran plasmados.

Para entender los orígenes del movimiento sindical y del derecho mexicano de trabajo, es
necesario abordar las etapas históricas más importantes desde un punto de vista socio-
político, cuyo factor fue y será primordial para el nacimiento y desarrollo de dichos
movimientos, es por eso que en este capítulo se desarrollan las tres etapas históricas más
importantes para el estudio de este tema, los cuales son los antecedentes históricos antes
de la Revolución Mexicana; la constitución política de 1917, la cual sienta las bases para
el desarrollo de la ideología social, tomando en consideración que manifiesta los
principios básicos para un mejor desarrollo entre los factores de la producción plasmados
en el artículo 123 constitucional, por último, las primeras organizaciones obreras post-
revolucionarias. Dicho capitulo dará las bases históricas para conocer el movimiento
sindical y del derecho mexicano del trabajo sobre todo entender su finalidad esencial la
cual es el estudio, mejoramiento y defensa de los intereses comunes colectivos e
individuales de los trabajadores.

En el tercero capitulo, el sindicato y los derechos laborales internacionales en la


legislación Mexicana, nos referimos al estudio jurídico del sindicato con base en los
elementos básicos que exige la ley, para la constitución del mismo tomando en cuenta al
trabajador, su voluntad individual y colectiva y así defender sus derechos laborales.
Hacemos referencia a la regulación vigente del sindicato en México, respetando la
jerarquía en primer término, con la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en el nivel inferior a la Ley Federal del Trabajo y por último al Código Civil.

7
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Agotando lo que cada uno pudiera aportar para un mejor progreso.

Por lo que se refiere a la estructura de los sindicatos, existen algunos elementos que
forman parte de esta y que deben de ser transmisores de una nueva cultura laboral, como
lo es el comité ejecutivo, el cual es estudiado junto con la asamblea constitutiva, la
asamblea general, el patrimonio sindical, así como los derechos y las obligaciones de los
trabajadores y del sindicato, la disolución y los efectos de este, de igual manera resulta
necesario establecer el momento en que los sindicatos adquieren personalidad y
capacidad jurídica para realizar todos aquellos fines para lo que fueron constituidos.

En el cuarto capítulo, Reforma Sindical, irrenunciabilidad de los derechos laborales,


formas de terminación de los conflictos individuales de trabajo, es el estudio de los
sindicatos, su organización y funcionamiento. Tomando en cuenta la clasificación legal,
Comisión interna de carácter obligatorio, para vigilar las actuaciones de los sindicatos en
donde se establece y clasifica a los sindicatos gremiales, de empresas, industriales,
nacionales de industrias y de oficios varios, sindicalismo oficial, además de veremos la
Irrenuciabilidad de los derechos laborales y las formas de terminación de los conflictos
individuales de trabajo. Mencionaremos las diferentes condiciones que los trabajadores
tienen para organizarse y para defender sus derechos individuales y colectivos, en sus
diferentes organizaciones creadas para tales fines.

Finalmente, en el quinto capítulo Actualidad y Perspectiva en el derecho laboral y


sindical, se analiza pero con un enfoque inclinado más a lo cotidiano, que a lo teórico. De
ninguna manera tratamos de generalizar en cuanto a la corrupción y deshonestidad de los
representantes, pero si se considera prudente señalar que dicha situación se presenta en
forma frecuente y sin la debida sanción.

Las viejas prácticas del corporativismo sindical, como la ausencia de transparencia, la


sumisión frente al Estado y el clientelismo, no han desaparecido, aunque perviven en un
nuevo contexto político y con otros significados. No es nuestra intención analizar aquí la
historia del corporativismo en México. Sin embargo, para entender el papel actual de los
sindicatos mexicanos, es importante ver hasta qué punto la transición hacia la democracia
y el fin del dominio del partido único han cambiado dicho sistema. Y también veremos la
nueva cultura laboral contemporánea, sus elementos posturas de sus partes, y
prospectiva Laboral y sus retos del mundo del trabajo.

En este estudio sociológico del sindicato. Mencionamos claramente, como los


trabajadores y las empresas tienen las mismas posibilidades jurídicas para defender sus

8
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

derechos.

De esta manera, todos los temas que se presentan en esta investigación constituyen una
abstracción que facilita el estudio, pero que a la vez invita a interrelacionar
permanentemente la metodología, el soporte teórico-conceptual y el desarrollo temático,
hasta arrojar unas inferencias a propósito del tema tratado.

Por último, se especifican las conclusiones, que son el producto del estudio de todos los
ordenamientos sociales y políticos que citamos; son propuestas que pretenden ayudar a
la comprensión de las circunstancias que obligan el éxodo de mexicanos cada año,
Tratamos de aportar ideas conscientes, apegadas a nuestra realidad política, social,
económica y cultural, pero sobre todo, apegadas al a la realidad de nuestro país. No
pretendemos revolucionar e ir en contra de nuestro sistema social mexicano, más bien,
pretendemos aportarle nuevas ideas a partir de un cambio radical de mentalidad en
nuestra sociedad, siempre en apoyo de los grupos más vulnerables y de la distribución
equitativa del poder.

De esta forma ha quedado establecido el contenido de la presente investigación, misma


que en todo momento busca contribuir para lograr un desarrollo integral entre la sociedad
y su gobierno.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

CAPITULO 1 Contexto del sindicato y el derecho laboral

1.1 Contextualidad básica.

Es prioridad fundamental, conocer una serie de conceptos concatenados, a cuyo


conocimiento es conveniente habituarnos. Por lo que realizaremos un breve análisis de
cada uno de ellos, mismo que nos facilitará entender nuestro principal tema de estudio,
capítulo a capítulo a lo largo del presente trabajo.

Esta serie de conceptos básicos muestran diversas ideas, que nos permiten tener un
panorama amplio y a su vez, elegir el más adecuado para llegar a una conclusión.

1.1.1 Trabajador.

Un segundo concepto que consideramos complemento de lo anterior, es el de trabajador.


La Ley Federal del Trabajo también lo define en el siguiente artículo:

"ARTICULO 8o.- Trabajador es la persona física que presta a otra, física o moral, un
trabajo personal subordinado.

Para los efectos de esta disposición, se entiende por trabajo toda actividad humana,
intelectual o material, independientemente del grado de preparación técnica requerido por
cada profesión u oficio."

De esto se desprende que el concepto de trabajador sea atributo exclusivo de la persona


física, también que a diferencia del concepto de patrón, aquí si se menciona la existencia
de la subordinación.

Solo podríamos agregar, el elemento de la retribución, que es lo que el trabajador


obtendrá como resultado a cambio de ese trabajo personal subordinado. Respecto a esto,
recordemos el segundo párrafo del artículo antes citado.

Entonces para que la prestación de servicios se origine, consideramos indispensables los


siguientes elementos:

a) el trabajador invariablemente será una persona física,

b) esa persona física presta un servicio a otra ya sea física o moral,

c) el resultado de ese servicio será la remuneración,

d) el servicio se hará en forma personal, y

e) de manera subordinada.

10
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Al hablar de personal debemos entender, que el servicio prestado, debe desempeñarse


por esa persona y no por otra diferente. Si sucediera así se caería en la figura del
intermediario, misma que no entra en nuestro marco de estudio.

En cuanto al sexo es indiferente, ya que de todos es conocido el artículo de nuestra


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que establece:

"ARTICULO 4.- El varón y la mujer son iguales ante la ley". Con esto queda admitido el
balance de sus derechos en materia laboral.

1.1.2 Patrón.

El aprovechamiento alevoso del fuerte sobre el débil; ha hecho que la historia del hombre,
sea la incansable búsqueda de su progreso mismo, específicamente la protección de
aquél que trabaja. En el título primero de nuestra ley Federal del Trabajo, encontramos el
siguiente artículo, en su primer párrafo:

"ARTICULO 10.- Patrón es la persona física o moral que utiliza los servicios de uno o
varios trabajadores."

La definición que la Ley hace nos parece incompleta, no hace mención de dos aspectos
importantes con los que podemos encerrar todo lo que conlleva la palabra patrón.

El primero podríamos decir que va implícito, éste es la subordinación de aquélla persona


que presta el servicio y el segundo es la retribución, remuneración o salario que recibirá la
misma por prestar el servicio.

Es precisamente la fuerza de trabajo, el elemento central de toda relación de trabajo y es


necesaria para que surja ésta figura.

Por lo que se refiere a que el patrón sea persona física o moral, para los efectos que
produce es indistinto, ya que ambos podrán solicitar los servicios de uno o más
trabajadores.

Para Néstor de Buen también es incompleto, hace la siguiente observación: "omite


destacar el elemento " Subordinación " y hace caso omiso de la obligación de pagar el
salario. De ello deriva que siendo correcto el concepto, resulte insuficiente'.1

El mismo autor concluye en lo siguiente: " Patrón es quien puede dirigir la actividad laboral

1
De Buen L: Néstor, Derecho del Trabajo. T-l, tercera edición, Porrúa, México, 1979. p 452.

11
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de un tercero, que trabaja en su beneficio, mediante retribución".2

Lo que sí podemos asegurar, independientemente de cualquier definición, es que la


mayoría de los autores coinciden en dos elementos característicos, mismos que José
Dávalos hace mención:

• El patrón puede ser una persona física o moral,

• Es quien recibe los servicios del trabajador",3

1.1.3 Etimología de palabra trabajo.

A lo largo de la historia, la forma predominante del trabajo fue la esclavitud (trabajo


forzoso, donde un hombre domina a otro y le impide tomar decisiones en libertad). A partir
de mediados del siglo XIX, la esclavitud comenzó a disminuir y fue declarada ilegal.
Desde entonces, el trabajo asalariado pasó a ser la forma dominante del trabajo.

El término “trabajo” tiene varios sentidos o acepciones que, aunque no coincidan


exactamente, guardan entre sí un parentesco muy próximo. Se habla habitualmente de
“trabajo”, como actividad productiva, como aplicación o ejercicio de facultades humana
para la producción de medios y condiciones de vida.4

Se puede hablar otras veces de trabajo como resultado de dicha actividad productiva,
como materialización o concreción de un esfuerzo laboral.

Hay ocasiones que el término trabajo se utiliza como sinónimo de ocupación o empleo. De
todas estas acepciones la de más frecuente uso, y también la que emplea el término con
más propiedad, es la de trabajo-actividad.

El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española en su vigésima segunda


edición, define al “trabajo”, como: “Esfuerzo humano aplicado a la producción de riqueza,
en contraposición a capital”.5

Ahora bien, el concepto del trabajo puede ser abordado desde diversos enfoques. Su
definición básica indica que es la medida del esfuerzo hecho por los seres humanos. Para
la visión neoclásica de la economía, por ejemplo, es uno de los tres factores de la
producción, junto a la tierra y al capital.

2
ibídem, p. 453.
3
Davalos José, Derecho del Trabajo I, tercera edición, Porrúa, México, 1990, p. 98
4
Valverde Martín, Antonio, et al. Derecho del Trabajo, Tecnos, Madrid, España, 1991, pág. 25
5
Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, México, DF., Porrúa, Vigésima Segunda Edición,
2008.

12
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Esta concepción del trabajo indica que un individuo realiza una cierta actividad productiva
por la que recibe un salario, que es el precio del trabajo dentro del mercado laboral. La
relación de trabajo entre el empleador y el empleado está sujeta a diversas leyes y
convenios, aunque también existe lo que se denomina como trabajo en negro (aquellas
contrataciones realizadas en forma ilegal y que permiten la explotación del trabajador).

Otras formas de trabajo posibles son el trabajo autónomo productivo (a través del cual se
ejercen las profesiones liberales y el comercio, por ejemplo), el trabajo informal de
supervivencia y la servidumbre, entre otras).

Aunque existe el trabajo ad honorem que no implica una retribución económica


(generalmente realizado con fines sociales o educativos), se considera que el trabajo es
una actividad realizada a cambio de una contraprestación económica.

Cabe recordar que, el hombre sólo puede satisfacer sus necesidades mediatamente por
una intervención consciente y planteada. Esa intervención se hace mediante el trabajo. La
apreciación de la necesidad del esfuerzo laboral para la especie humano vale para toda
época y para todo lugar. Ahora bien, los tipos de prestación de trabajo y el contenido de
los actos de trabajo dependen en gran medida de cómo esté organizada la producción de
medios y condiciones de vida en las distintas sociedades, es decir, de la división del
trabajo.

A medida que ha ido avanzando el proceso de división del trabajo se ha ido haciendo más
fuerte y evidente la organización y determinación de sus condiciones por parte de la
sociedad. El carácter social del mismo, sólo importó en las economías de autoconsumo
como trasfondo o marco general, que suele manifestar directamente en las economías de
intercambio, en el que el trabajo se convierte en unos de los objetos o elementos
materialistas de determinadas relaciones sociales complejas, como la del dueño con el
esclavo, o la del señor y el siervo, o la del amo y el criado.

Desde que las relaciones de trabajo hicieron su aparición ha existido algún tipo de
regulación jurídica. Las finalidades que persigue esa regulación suelen ser tres. La
primera es la indicación del mecanismo por el cual el fruto o resultado del trabajo puede
pasar del trabajador a otra persona. Esta indicación lleva implícita la respuesta a la
cuestión de la causa o motivación central del acto de trabajo, que es normalmente la
adquisición de medios de vida.6

6
Cfr. VALVERDE MARTÍN, Antonio, Óp. Cit., pág. 27.

13
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La segunda finalidad de la regulación jurídica de las relaciones de trabajo es la


determinación del modo y de las circunstancias en que se presta el esfuerzo laboral, así
como de las contrapartidas que lo compensan; lo que hoy llamamos determinación o
fijación de las condiciones de trabajo. El cumplimiento de esta finalidad de fijación de
condiciones de trabajo ha suscitado la aparición de instrumentos normativos específicos
del mundo del trabajo, para así regular de forma unitaria una contratación en masa.

La última finalidad descansa de la organización del trabajo y el reconocimiento con la


empresa. Tal finalidad es la predisposición de medios jurídicos de coordinación e
integración de la actividad en grupo, que se pueden resumir en las facultades de dirección
del empleador o empresario.7

De lo anterior podemos concluir que, el trabajo además de otorgar los medios para el
desarrollo de la empresa, dignifica al ser humano, dotándolo de inteligencia, organización,
decisión, crecimiento, progreso y disciplina para futuras vicisitudes, cuya finalidad es
atacar al ocio.

1.1.4 Relación de Trabajo.

La consecuencia de los conceptos anteriores, podríamos aludir que es el de relación de


trabajo. Al respecto para un adecuado análisis haremos una reseña histórica.

Euquerio Guerrero refiere dos principales corrientes, la contractualista y la


anticontractualista. La primera sostiene que en el principio de todo acto laboral, es
ineludible un acuerdo de voluntades y ya si se enfoca a producir efectos jurídicos, lo que
llamaremos contrato, aplicando el Derecho del Trabajo, por ajustarse al marco laboral.

Mientras que la segunda, partidaria de la doctrina llamada de la Relación del Trabajo o de


la Incorporación, porque sustenta que desde el momento en que el trabajador empieza a
prestar ese servicio personal subordinado, es cuando de verdad surgen los derechos y
obligaciones, tanto para el patrón, como para el trabajador, resultando banal el que
efectúen contrato o no.8

Son a la vez, dos figuras distintas complementarias, porque al darse un acuerdo de


voluntades para prestar un servicio con características antes señaladas, se crea una
relación de trabajo, es decir una situación jurídica específica. Por tanto se aplicarán
estatutos jurídicos laborales, cuyos efectos a producir, provienen de la Ley,

7
Ibídem, págs. 28 y 29.
8
Apud, Guerrero Euquerio, Manual de Derecho del Trabajo, decimosexta edición, Porrúa, México, 1989, pp. 30,31.

14
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

específicamente del contrato. Aunque esto último, no siempre se llegue a cometer.

Lo que sí sucede, es que a partir del momento en que se engendre una relación de este
tipo, surgirán en forma automática las normas de trabajo que la regirán.

Tocante a lo anterior, Alberto Trueba Urbina nos dice que: " En realidad la relación es un
término que no se opone al contrato, sino lo complementa, ya que precisamente aquélla
es originada generalmente por un contrato, ya sea expreso o tácito..."9

Nos hallamos ante una divergencia de opiniones, en cuanto al elemento central de la


relación de trabajo. Para Mario de la Cueva, más que opinión nos ofrece una descripción:
"[es una situación objetiva que se crea entre un trabajador y un patrono por la prestación
de un trabajo subordinado, cualquiera que sea el acto o la causa que le dio origen, en
virtud del cual se aplica al trabajador un estatuto objetivo,..."10

Para ultimar diríamos entonces, que todo gira en cuanto a que se lleve a cabo la
prestación del servicio, por existir trabajador y patrón, además de que se manifestarán
derechos y obligaciones. Todo esto dará lugar sin duda, a la relación de trabajo.

A propósito nuestra Ley Federal del Trabajo menciona en el Titulo Segundo llamado
Relaciones Individuales de Trabajo:

CAPITULO I DISPOSICIONES GENERALES

"ARTICULO 20.- Se entiende por relación de trabajo, cualquiera que sea el acto que le dé
origen, la prestación de un trabajo personal subordinado a una persona, mediante el pago
de un salario.

Contrato individual de trabajo, cualquiera que sea su forma o denominación,' es aquel por
virtud del cual una persona se obliga a prestar a otra un trabajo personal subordinado,
mediante el pago de un salario.

La prestación de un trabajo a que se refiere el párrafo primero y el contrato celebrado


producen los mismos efectos."

1.1.5 Organización.

Para tener una visión de lo que es la organización en general, en primer lugar la


analizaremos desde el punto de vista etimológico, posteriormente daremos el concepto

9
TRUEBA URBINA Alberto, Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, sexta edición, Porrúa, México, 1981, p. 278.
10
DE LA CUEVA Mario, El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo T-1, decimoprimera edición, Porrúa, México,
1978, p. 187.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

mismo, que nos servirá como base para entender otros que más adelante estudiaremos y,
así obtener una idea clara de los sindicatos.

En primer lugar la acepción “Órgano, deviene del latín organum (herramienta, instrumento
musical), y este del griego opyavov (instrumento, herramienta), órgano fisiológico derivado
de epyov (acción, obra, trabajo).”11

En cuanto a la organización, “es un grupo social, estructurado con una finalidad. Conjunto
de elementos personales, reales e ideales, es decir, una empresa donde no existe una
finalidad lucrativa.”12

Ahora bien la organización, “es la acción y efecto de organizar u organizarse; y organizar,


es establecer o reformar una cosa, sujetando a reglas él número, orden, armonía y
dependencia de las partes que la componen o han de componerla”.13

Por otra parte, para el Dr. De la Cueva en sentido general la organización, “es la
estructuración de un instituto al servicio del futuro de los trabajadores y la substitución de
la responsabilidad personal por la responsabilidad social de todas las personas que
utilicen el trabajo ajeno.”14

El autor citado tomo como Organización cualquier grupo de personas, el cual constituye
una institución, con la finalidad de ayudar y proteger a los trabajadores, así como la de
cumplir sus objetivos.

Por otra parte desde el punto de vista del Derecho Administrativo, la Organización, “es el
sistema de empresas de participación estatal, es una forma de organización a la que el
estado recurre como uno de los medios directos de realizar su intervención en la vida
económica del país.”15

Por eso “la Organización implica la existencia de planes y la adecuación a ellos en el


desenvolvimiento de los propósitos previos, no obstante las vicisitudes incongeturables
provenientes de lo externo en el orden social genérico, el exceso de organización
conduce a la regimentación de los países, que es el cuadro más parecido y fotografía real
a veces de los pueblos tiranizados, que no se equiparan por ello solo a los más sólidos.”16

11
Coraminas, Juan. Diccionario Crítico etimológico de la lengua Castellana, V.III, Ed. Gredos, Madrid, 1989.
12
Cabanellas de Torres, Guillermo. Diccionario Jurídico Elemental, Ed. Heliasta, Argentina, 1995, Pág. 226.
13
Cf. Diccionario de la Lengua Española, decimoctava edición, ED. Espasa-Calpe, Madrid, 1965
14
De la Cueva, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo Tomo II, décima primera edición actualizada
por Porfirio Marquet Guerrero, Ed. Porrúa, México, 2001, Pág. 286.
15
Fraga Gabino. Derecho Administrativo, vigésima novena edición, Ed. Porrúa, México, 1999, Pág. 165
16
Cabanellas, Guillermo. Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual, Tomo IV, catorceava edición revisada,

16
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Cuando hablamos de Organización, nos referimos a la agrupación de ciertos elementos,


como de personas, de estructuras, de finalidades, etc., en los que serán fundamentales
para un mejor desempeño de la misma; por ejemplo, la producción de bienes o servicios
es fundamental la organización.

Ahora al analizar la organización sindical específicamente, podemos decir, que el buen


funcionamiento de un sindicato depende de la forma en que esta se haya organizado y
estructurado; para que se desarrollen con eficacia sus actividades se necesita la
colaboración y participación activa de sus miembros y, es conveniente que sean las
mismas organizaciones las que dividan sus tareas entre sus afiliados.

Entre otras palabras, entendemos que el sindicato como organización implica un conjunto
de actividades que debe de abarcar los ámbitos: jurídico, económico, político y social, lo
cual es indispensable para alcanzar sus objetivos.

Así pues “la Organización de la profesión, así como la ordenación de las relaciones entre
sus miembros y aun la distribución a estos derechos y obligaciones de naturaleza sindical
y hasta laboral, constituyen una consecuencia de la previa atribución al sindicato de
autonomía...”17

1.1.6 Empresa.

Este concepto lo expone la propia Ley Federal del Trabajo en él:

"ARTICULO 16.- Para los efectos de las normas de trabajo, se entiende por empresa la
unidad económica de producción o distribución de bienes o servidos..."

Lo anterior nos obliga a pensar que el propio concepto de empresa establece la


responsabilidad de la misma, frente a cada uno de los trabajadores, es decir, la atención
del patrón en toda relación de trabajo, es desplazada por la figura patrimonial de empresa.

De esto inferimos, que hoy en día una empresa la mayoría de las veces, no sólo
pertenece a una persona, sino a varias. También hay que aclarar, para que no haya lugar
a confusión que, patrón no es sinónimo de empresa, ya que la empresa es el lugar de
trabajo y no debemos personalizarla.

José Dávalos establece algunos elementos de la empresa, manifestándolos en el


siguiente orden:

actualizada por Luis Alcalá-Zamora y Castillo, Ed. Heliasta, Argentina, 1985, Pág. 708.
17
García, Abellán, Juan. Introducción al Derecho Sindical, ED. Aguilar, Madrid, 1985, Pág. 105

17
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

"1.- Elementos esenciales.- trabajadores y patrones, capital, organización y dirección, y


por último la consecución de un fin común.

2.- Elementos accidentales.- domicilio, nombre comercial, explotación de marca, etc."18

1.1.7 Establecimiento.

Existe otra figura que se halla íntimamente relacionada a la anterior y para su adecuada
exposición, la presenta al mismo tiempo la Ley Federal del Trabajo en el artículo
siguiente:

"ARTICULO 16.- y por establecimiento la unidad técnica que como sucursal, agencia u
otra forma semejante, sea parte integrante y a la realización de los fines de la empresa".

En cuanto al establecimiento externamos, que el origen de éste, es la necesidad a la que


se enfrentó la empresa, de competir al hallarse en una época complicada, que le
permitiera crear unidades semejantes entre sí, pero complementarias, distintas o
independientes hacia la unidad superior, es decir, a la empresa. Así se fundaron tantos
establecimientos, según las carencias que se les presentaron.

Alberto Briceño Ruiz, consideró que: "...El establecimiento es una extensión del centro de
trabajo quien labora en el establecimiento debe de contar con los mismos beneficios y
derechos".19

Los establecimientos que imperen, detentarán las particularidades de sujetarse a una sola
organización, dirección y administración, convergentes en una unidad superior llamada
empresa.

Hablamos entonces de un género y de una especie, con una característica en común,


tanto empresa como establecimiento están encaminadas a la persecución y realización de
un fin específico.

En donde el origen es la empresa y el establecimiento la consecuencia, misma que podría


nunca llegar a concurrir.

Con todo lo anterior podemos inferir algunas particularidades que poseen los
establecimientos, por lo que mencionamos que son:

a) semejantes, por tener las mismas características a la primera.

b) autónomas, porque a pesar de tener similitudes en común, no son del todo iguales, ya
18
DAVALOS José, ob.cit, p.p. 103,104
19
BRICEÑO RUIZ Alberto, Derecho Individual del Trabajo .s. ed. Harta, México, 1985, p. 162.

18
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

que se sitúa en diferentes zonas geográficas, varían los niveles de vida y sobre todo su
administración distará una de otra.

c) complementarias, por perseguir todas un fin común, e

d) independientes, porque no todas nacen en igual momento, además de que el origen de


alguna, no debe afectar a las existentes, y más aún a la misma empresa. Lo mismo
ocurrirá en caso de sucumbir alguna de ellas.

1.1.8 Gremio.

Esta figura aparece por la necesidad de aquellos hombres que laboran bajo condiciones
injustas, por lo que se vieron empujados a formar agrupaciones, con un elemento en
común, poseer el mismo oficio desempeñándolo por cuenta propia, sin depender de
nadie.

José Dávalos nos da su propia definición de gremio señalando lo siguiente:" y aparecen


los gremios, que eran agrupaciones de individuos dedicados a un mismo oficio..."20

Dichas agrupaciones de personas poco a poco se fueron subdividiendo a su vez, de


acuerdo a las diversas ramas de la producción. Aunque era de esperarse, que resultaría
complicado el que una agrupación novata pudiese controlar en tan poco tiempo toda la
producción.

El gremio poseía una configuración detallada que contenía un tipo de procedimiento para
ingresar a dicha agrupación. Se fijaron también, el principio de reciproca ayuda
económica entre ellos, así como su peculiar forma de autoregularse, donde sus
integrantes eran los autores.

Referente a lo anterior Manuel Alonso Olea, menciona lo siguiente: "El gremio fue así un
ente asociativo dotado de un poder regulador de las condiciones de trabajo, el gremio fue
una fuente del derecho; el gremio fue un grupo social autoregulado."21

Alberto Briceño Ruiz, complementa lo anterior señalando que; "Estas organizaciones


tenían una estructura jerárquica que partía del maestro (señor, dueño de vidas y
haciendas); los oficiales (coordinadores del trabajo y directores de estas organizaciones) y
los aprendores del trabajo, sin prerrogativas o derechos."22

20
DÁVALOS José, Óp. Cit. p. 6
21
ALONSO OLEA Manual. Introducción al estudio del Trabajo, cuarta edición. Revista de Derecho Privado, España,
1981, p. 168.
22
BRICEÑO RU1Z Alberto, op.cit. p. 53

19
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Aportamos el siguiente concepto a modo de conclusión, destacando que gremio es el


conjunto de personas con un mismo oficio que se unen creando sus propias normas de
actuación, así como su jerarquía, y cuyo fin es el apoyo mutuo.

1.1.9 Coalición.

La palabra coalición deriva del Latín coalitum, que significa reunirse, juntarse, liga, unión;
la coalición es el parto entre varias instituciones, políticas, económicas y sociales para la
realización de una acción común.23

Definición del tratadista francés Paul Pie, "coalición es la acción concertada de cierto
número de obreros o cierto número de patronos, para la defensa de sus derechos o de
sus intereses comunes"24

La coalición sería únicamente el camino para llegar al Sindicato, es el simple acuerdo de


trabajadores para la defensa de sus intereses comunes, pero no se identifica ni con la
huelga ni con la asociación sindical, aun cuando es un antecedente necesario de estas
instituciones y normalmente desemboca en ellas.

Es sin embargo frecuente la formación de una coalición, sin que llegue a producirse la
huelga o a crearse un Sindicato.

En consecuencia, la coalición es un acto previo a la huelga, pero no es únicamente su


antecedente, ni se agota en ella, ya que subsiste a lo largo de la suspensión de los
trabajos; si en algún momento desapareciera el acuerdo de los trabajadores, terminaría la
huelga, pues se rompería la unidad y el propósito de defender sus intereses comunes.

Tampoco debe confundirse a la coalición con la asociación sindical: aquélla es el acuerdo


temporal de un grupo de trabajadores para la defensa de un interés actual; una vez
satisfecho este interés o cuando se revela de imposible realización, cesa la coalición. La
asociación sindical, por el contrario, es una organización permanente para el estudio y
defensa de intereses actuales permanentes y de los futuros.

En nuestra Constitución Política se encuentran diferencias marcadas entre ambas figuras,


propiamente en el Artículo 123 fracción XVI del apartado "A" y en la Ley Reglamentaría en
su Artículo 355.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación señala tres requisitos para que exista la
coalición a fin de que se realice en forma gregaria o solidaria entre los trabajadores: que
23
Diccionario Enciclopédico Grijalvo. Tomo I p. 43.
24
Cfr. Lastra Lastra. Manuel. Derecho Sindical. Segunda Edición. Porrúa. México 1993. p. 263

20
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

se coaliguen cuatro o más; que tengan intereses comunes que defender, y que dependan
de un mismo patrón.

Pensamiento del Doctor Luis P. Frescura, en su obra Curso de Legislación del trabajo: El
hombre es un ser gregario, y que la idea de la cooperación, la de unir las propias energías
las de los demás, ha aparecido en todos los tiempos y lugares como una necesidad vital,
la asociación nace espontáneamente del medio social. Es tan natural como la libertad del
individuo y nada puede impedir combinar sus esfuerzos y actuar en común y no solo ni
aislado. La naturaleza y las necesidades del hombre hacen pues, de la Asociación
Sindical un derecho primordial que el legislador no puede prohibir25

La coalición junto con el derecho de asociación profesional, son "el punto de partida de
todo derecho colectivo del trabajo"26

La coalición es también una manifestación inicial de la "conciencia de clase", frente a una


situación determinada de defensa de intereses. El derecho de coalición es el antecedente
"sociológico jurídico y cultural del derecho y ejercicio profesional"27

El Artículo 355 de la Ley Laboral, nos da la definición de la coalición, es una de tantas


instituciones que integran el Derecho Colectivo, y que a pesar de ser ésta el precedente
de la Asociación Profesional y de la Huelga, y que los legisladores tanto en el Código
Laboral derogado como el vigente, no tan sólo no la regularon sino que, fueron imprecisos
para definir la coalición, dificultando a los trabajadores que pudieran hacer un mejor uso
de ella en beneficio del interés colectivo.

Los elementos enunciados anteriormente, integran los requisitos de fondo para que tenga
existencia jurídicamente la coalición.

La coalición o acto de voluntad, solo requiere la satisfacción de los requisitos siguientes:

a)La calidad de trabajadores,

b)Que se propongan a la realización de un fin que sea del interés común al grupo,

c)Que los trabajadores en un grupo sea mayor en un número de tres,

d)Que presten sus servicios a un mismo patrón o empresa,

e)Siendo además su actitud transitoria sujeta al cumplimiento del fin propuesto.

25
Cfr. RAMOS, Eusebio. Derecho Sindical Mexicano y las Instituciones que Genera. Segunda Edición.
Cárdenas Editores. México. 1978. Pág. 14.
26
LÓPEZ Aparicio Alfonso. El Derecho Latinoamericano del Trabajo .T-ll. U.N.A.M. México. 1974. p. 64.
27
ídem. P. 64

21
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La coalición es, en principio, una forma de organización pasajera que paulatinamente


tiende a institucionalizarse, adquiriendo un carácter permanente y unitario a través del
Sindicato.

Para nosotros la coalición es la unión accidental de trabajadores no sindicalizados para


alcanzar sus fines ya sea de tipo salariales o de trabajo y que así mismo puede influir para
provocar la huelga, siendo esto un pacto o acuerdo reflexivo de los trabajadores o
patrones, trayendo consigo siempre la lucha entre ambos.

1.1.10 Asociación.

La Enciclopedia Jurídica Omeba la define como:" la acción y efecto de asociarse, o sea de


unirse dos o más personas con una finalidad determinada, que puede ofrecer muy
diversos aspectos o intenciones: políticas, religiosas, benéficas, culturales, profesionales,
mercantiles, etc."28

Mientras que el Diccionario Jurídico Mexicano aporta lo siguiente:" acción y efecto de


asociar del latín ad, a, y socius, compañero, juntar una cosa o persona con otra."29

La aparición de la asociación no fue del todo fácil, por las condiciones que prevalecieron
durante la época de la Colonia y de la Independencia. Esta situación no duro mucho, pues
el hombre al poseer una naturaleza social, comenzó a organizarse.

En todos los tiempos de la historia del hombre, su vida siempre se ha caracterizado por
una idea definida de agruparse, la magnitud de ésta acción, será proporcional a qué tanto
sean sus necesidades.

Hay factores internos en el hombre, que permiten el nacimiento de la fuerza, que sólo se
logra con la unión, unión que encierra ese ánimo de concentración y conciencia de clase.

El fundamento legal de ésta figura la encontramos en el encabezado del siguiente Titulo


del Código Civil para el Distrito Federal, en el siguiente artículo:

TITULO DECIMOPRIMERO DE LAS ASOCIACIONES Y DE LAS SOCIEDADES DE LAS


ASOCIACIONES

"ARTICULO 2670.- Cuando varios individuos convienen en reunirse de manera que no


sea enteramente transitoria, para realizar un fin común que no esté prohibido por la Ley y
que no tenga carácter preponderantemente económico, constituyen una asociación."
28
Enciclopedia Jurídica Omeba. Driskill, T-XXV. Argentina 1986, p. 842.
29
Diccionario Jurídico Mexicano. Instituto de Investigaciones Jurídicas, A-CH, Quinta adietan, Porrúa, México, 1992,
p. 246.

22
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Para Mario de la Cueva, asociaciones es:" una unión permanente de personas,


constituida por la realización de un fin, distinto al reparto de utilidades."30

Agregamos entonces que, asociación es la unión de voluntades, que dicho ánimo de


unión lleva el carácter de permanente, sin perseguir fines de lucro, sino la defensa de sus
derechos, por poseer intereses afines ante una misma carencia.

Asociación profesional.

Es un hecho innato a los hombres el unirse al convivir al asociarse, el hombre por


naturaleza es social, no se puede concebir a una persona aislada, disgregada y por lo
consiguiente dicha unión trae la consecución de un fin.

El ser humano al establecer relaciones con sus iguales, comenzó a especializarse en un


determinado saber. De dicho conocimiento surgió la capacitación y profesionalización del
trabajo. A partir de este momento, las asociaciones profesionales surgieron a la vida
jurídico-social.

En Roma la asociación era designada con distintos nombres: societas, ordo sodalitas o
soladicium, collegium, corpus, universitas. Los dos primeros eran los más frecuentes y,
además, no se empleaban exclusivamente para indicar la asociación, sodalitas era una
asociación de tipo religioso: collegium, era una asociación con fines de culto y por
mandato del Estado, corpus y universitas implicaban la personalidad jurídica de la
asociación31

Las asociaciones privadas solían organizarse con un estatuto, una asamblea general, un
consejo de administración y uno o varios representantes especiales o permanentes para
los negocios o los litigios.

En México, toda clase de asociaciones y sociedades tienen su fundamento en el Artículo


9° Constitucional que consagra la garantía de asociarse o reunirse pacíficamente con
cualquier objeto lícito estableciendo la limitante que sólo los ciudadanos mexicanos
podrán hacerlo con fines políticos.

Las asociaciones profesionales son agrupaciones formales, es decir, constituidas


jurídicamente por personas que ejercen una misma profesión para la realización de fines
relacionados con su actividad profesional. Las asociaciones profesionales se distinguen
de los sindicatos de clase en que estos giran no sólo alrededor del ejercicio de la misma

30
DE LA CUEVA Mario, EL Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo. T-ll, cuarta edición. Porrúa. México, 1986, p. 238.
31
DE BUEN LOZANO. Néstor. Derecho del Trabajo. T Il. Décima Edición. Porrúa. México. 1994. Pág. 590.

23
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

profesión, sino de la pertenencia a igual clase, y su finalidad fundamental es la defensa de


los intereses de clase. En todo caso, el carácter laboral de los sindicatos y sus notas
peculiares confieren a los mismos una sustantividad propia y una importancia especial, de
tal modo que, aunque estén organizados, corporativa o verticalmente, según las distintas
ramas de la actividad económica, se consideran generalmente como una categoría
distinta y separada de las asociaciones profesional cuya nota fundamental es estar
basadas en un hecho tan principal como es la profesión, de donde reciben cierto carácter
natural, en cuanto formalización de los extensos vínculos naturales existentes entre los
que realizan el mismo trabajo y una importancia social innegable, en cuanto servicio a la
comunidad, que tiene como consecuencia generalmente el reconocimiento de carácter
público a estas instituciones por las legislaciones positivas.

El origen de las asociaciones profesionales es muy remoto, encontrándose antecedentes


de ellas en la Antigüedad, especialmente en Roma con los collegla. En la Edad Media y
siglos posteriores, adquirieron gran importancia, sobre todo en su modalidad de gremios.
La Revolución burguesa determinó su abolición, primero en Francia y posteriormente en
los demás países europeos. Sin embargo, pronto empezaron a resurgir aspirando a
recuperar un puesto preeminente. Las asociaciones profesionales se relacionan con el
Estado, con los ciudadanos y con los profesionales que las forman.

Respecto al Estado, realizan funciones de representación administrativa y política y


eventualmente también funciones consultivas. En cuanto a terceras personas, cumplen la
función fundamental de orientar y regular el ejercicio de la actividad profesional, en orden
al mejor cumplimiento de su función social y más perfecto servicio de los particulares y
vigilan la realización efectiva por los profesionales de esta orientación. En relación a sus
miembros, además de las de régimen interior, gobierno y administración de la asociación
profesional, con personalidad jurídica propia, ostentan funciones de reglamentación del
ejercicio profesional y disciplinario contra las infracciones de la misma e incluso pueden
desarrollar funciones accesorias de tipo asistencial, como las de mutualidad y previsión.
Como forma genérica de la organización profesional, nuestro ordenamiento constitucional
reconoce expresamente la libertad y derecho de asociación profesional de los
trabajadores y patrones, según se desprende de lo dispuesto por la fracción XVI del
artículo 123, que a la letra anuncia: “tanto los obreros como los empresarios tendrán
derecho para coaligarse en defensa de sus respectivos intereses, formando sindicatos,
asociaciones profesionales, etc.”.

24
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Dionisio J. Kaye define a la asociación profesional como “la reunión o agrupamiento de


individuos, con ánimo permanente, que tienen comunidad de problemas y de intereses,
así como afinidad de actividad o profesión; o cuando menos íntima conexión o identidad
entre sus actividades que persiguen el análisis y mejoramiento de sus cuestiones
derivadas de esa actividad”.32

La asociación tiene su fuerza en la identificación de problemas, intereses, y formas de


convivencia. En términos generales, la asociación existe: cuando varios individuos
convienen en reunirse, de manera que no sean enteramente transitorias para realizar un
fin común, que no esté prohibido por la ley y que no tenga carácter preponderantemente
económico.

La asociación profesional gira en torno del problema social trabajo, es decir, sobre cuáles
van a ser las condiciones que ofrezca el patrón para con el trabajador, para así sufragar la
equidad laboral.

Ferruccio Pergolesi nos dice que la asociación profesional no solamente se nutre del
problema social del trabajo, sino también de los siguientes factores: La trascendencia de
sus fines, más allá del interés particular de sus miembros.

Su organización colectiva o profesional.

La constitución y libre disposición de un patrimonio propio.

La factible renovación y cambio flexible de sus integrantes.

La peculiar representación que se confiere a su cuadro de dirigentes.33

Es menester advertir que, Mario De la Cueva diferencia entre la libertad de asociación y la


libertad sindical. “La libertad de asociación es un derecho que se concede contra el poder
público, en cambio la libertad sindical es un derecho de clase frente a otra, una protección
contra determinados poderes sociales”.34

En este orden de ideas, el poder público se constituye a través de los ordenamientos de


carácter general, mientras que el poder social, se estatuye a través de las relaciones de
los seres humanos.

Tipos de Asociaciones.

32
KAYE, Dionisio J., Óp. Cit. pág. 325
33
PERGOLESI, Ferruccio. Diritto sindacale. Padua, Cedam, 1964, páginas 86 y 88.
34
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo II, Décima Quinta Edición, Porrúa,
México, DF., 2007, págs. 240-242

25
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Las asociaciones profesionales se pueden clasificar en tipos diversos atendiendo a varias


circunstancias; en primer lugar, según la naturaleza de la actividad profesional, las hay
agrícolas, de la industria, del comercio, de la navegación, de las distintas profesiones
libres y, en general, de cualquier ocupación de tipo manual o intelectual. Por razón de la
amplitud de sus fines, pueden ser generales, que abarquen todos los de la profesión y
particulares o limitadas a un objetivo más reducido y concreto.

Asimismo, desde un punto de vista jurídico, las asociaciones pueden ser de Derecho
público o privado, según el carácter o categoría que les atribuya el poder político.

Como todos sabemos, el derecho de asociación profesional se consigna en la fracción


XVI del apartado A del artículo 123 constitucional. En este precepto, la asociación
profesional puede ser de trabajadores y de patrones.

Ambas asociaciones persiguen objetivos diferentes, que a saber son: la asociación


profesional de trabajadores es un derecho social que tiene por objeto luchar por el
mejoramiento de las condiciones económicas de los trabajadores y por la transformación
del régimen capitalista; en tanto que la asociación profesional de los patrones tiene por
objeto la defensa de sus derechos patrimoniales, entre estos la propiedad.

Asociación civil.

Se le considera como un contrato plurilateral por el que dos o más personas se obligan a
la realización permanente de un fin común no prohibido por la ley, y que no tenga un
carácter preponderante económico (Art. 2670 del Código Civil para el D.F.) Aunque de
ordinario existen aportaciones en bienes y cuotas de los socios y que sirven de medio
para alcanzar o promover la finalidad social de la asociación civil; sin embargo, no son
esenciales a este contrato dichas prestaciones, ya que pueden faltar unas y otras.

Así mismo es el conjunto de los asociados para un mismo fin y persona jurídica por ellos
formada y que requiere de diferentes características, para el nacimiento, que se rige por el
Código Civil para el D.F., conforme a los Artículos 2670, 2671, 2673, 2677, 2680, 2687,
3071, a 3073. También requiere que se inscriba en el Registro Público de la Propiedad,
obtener permiso previo en la Secretaria de Relaciones Exteriores.

Asociación en participación.

La Asociación en Participación es un contrato de carácter mercantil por el cual una


persona concede a otras que le aporten bienes o servicios, una participación en las
utilidades y en las pérdidas de una negociación mercantil, de una o varias operaciones de

26
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

comercio (Art 252 de la Ley General de Sociedades Mercantiles). Que contiene


determinadas características: a) No tiene personalidad jurídica. Toma el carácter de
sociedad momentánea por constituirse para un acto jurídico determinado y se regula por
los Artículos 252, 253, 254, 257, al 259, de la Ley antes mencionada.

Asociación religiosa.

La Asociación Religiosa son agrupaciones con fines meramente religiosos y no lucrativos,


dotado de personalidad jurídica por un acto especial de una autoridad administrativa, con
capacidad jurídica para adquirir bienes necesarios para cumplir con el objeto de las
mismas, según se desprende del Artículo 6 de la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto
Público. Debiendo reunir determinadas características y requisitos conforme a los
Artículos 25 del Código Civil del D.F., 27 y 130 de nuestra Carta Magna., 17 y 21 de la
Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público.

Asociaciones políticas.

Los partidos políticos son asociaciones organizadas de ciudadanos para conquistar el


poder y desde él encauzar la marcha de los asuntos públicos hacia el bien común.

Teniendo que reunir ciertos requisitos y características conforme a lo establecido en el


Articulo 25 en materia civil. Artículo 41 Constitucional y a lo establecido en el Código de
Procedimientos Electorales.

Asociaciones profesionales.

Las asociaciones profesionales, consisten en la unión de trabajadores o patrones para la


defensa de sus intereses comunes. Si son de carácter temporal, se denominan
Coaliciones y si son permanentes, se le llaman Sindicatos.

Los trabajadores han tenido la necesidad de agruparse para compensar la inferioridad


que representa el encontrarse solos o aislados frente al patrón o empleador. Larga y
penosa ha sido la lucha sostenida en todos los tiempos por la clase trabajadora, en busca
siempre de mejores condiciones de vida y de trabajo.

El carácter asociativo del hombre es sinónimo de integración social. La vecindad, la


amistad, el compañerismo, el trabajo mismo, constituyen una división permanente de
compañía; la soledad supone aislamiento. El deseo de comunidad, de copertenencia a un
grupo social determinado.

En la tradicional división del orden jurídico en privado, público y social está implicado el

27
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

concepto de asociación. En privado pueden quedar incluidas las asociaciones civiles y las
sociedades mercantiles; en las instituciones de derecho público, la reunión y la
asociación, y en las derecho social, la coalición y la asociación sindical.

López Aparicio expresa respecto de la Asociación Profesional: Ante leyes que no sólo la
desconocieron sino que trataron de ahogarla, cobro vida y vigor hasta llegar a imponer su
realidad en la legislación. El derecho escrito no creó el Sindicato, fue la vida social la que
lo engendró, impulsó y fortificó hasta lograr su pleno reconocimiento como institución
jurídica."35

La Asociación Profesional tiene determinadas características y que se encuentran


consagradas en la fracción XVI del Apartado "A" de los Artículos 123 y 5o del máximo
ordenamiento, Artículo 25 de lo civil en el D.F., 374 y 365 de la Ley de la materia.

El Maestro Mario de la Cueva expresa que el Sindicato o Asociación Profesional, es un


fenómeno necesario en la vida actual y que su realidad social es indiscutible. Su historia
demuestra que se ha impuesto al derecho y al estado.

Estos tres datos: Necesidad, Realidad Social y el haberse impuesto al derecho y al estado
y que las realidades sociales, cuando constituyen unidades con fines propios, tienen como
comunidades humanas, el mismo derecho que los hombres a ser reconocidos como
sujetos del orden jurídico. La personalidad jurídica no es una concesión que el estado
pueda otorgar o negar, sino que; se impone al derecho; el orden jurídico individualista
pudo afirmar la Doctrina de la ficción, pero no puede hacerlo el derecho actual.

Porque las normas jurídicas tienen como soporte la vida social y esta es: Hombre y
comunidades humanas con fines específicos.

La Asociación Profesional existe en la vida social y ha sido reconocida por nuestra Carta
Magna como portadora de los intereses colectivos; luego no podría el Estado y su
Derecho desconocerla, porque violarían el máximo ordenamiento

La personalidad jurídica de las asociaciones profesionales en materia de trabajo, es


distinta a la persona jurídica creada por el Derecho Privado, que protege patrimonios. La
Asociación Profesional, protege intereses humanos de otra especie, esto es, representa
los intereses colectivos de los trabajadores o de los patrones. En primer término, es
portadora del principio de igualdad jurídica, por cuanto hace de los trabajadores una
potencia idéntica al empresario.

35
LOPEZ Aparicio, Alfonso. Historia del Movimiento Obrero en México. Jus México. 1952. p. 200

28
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La Asociación Profesional obra en representación y beneficio de sus miembros, tiene


personalidad jurídica, capacidad para celebrar y reformar el Contrato Colectivo del
Trabajo; en la inteligencia de que estos pactos podrían estimarse provisionalmente, como
la composición de los intereses colectivos de trabajadores y patrones.

A nuestra consideración estimamos que la Asociación Profesional es una forma de


agruparse de los hombres y necesario de la vida cotidiana y actual, ya que si no
estuvieran agrupados no conseguirían los fines que persiguen y así mismo obtendrían los
beneficios que persiguen para el mejoramiento de la relación laboral que existe entre el
trabajador y el patrón, el mismo Estado tiene la obligación de respetar la existencia de la
Asociación Profesional, teniendo la función de regular la relación existente entre los
trabajadores y los patrones.

1.1.11 Derecho de asociación.

El derecho de asociación se encuentra establecido como una garantía constitucional,


regulada en el Artículo 9° que dice: “No sé podrá coartar el derecho de asociarse o
reunirse pacíficamente con cualquier objeto licito; pero solamente los ciudadanos de la
república podrán hacerlo para tomar parte en los asuntos políticos del país...”

La disposición constitucional precedente, otorga la facultad de asociación con cualquier


objeto lícito, que es la base para entender en primer lugar que es la asociación profesional
y que son los sindicatos.

De esta manera, cuando la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, habla
de asociarse, se refiere a que las personas o individuos tienen libertad de formar grupos
de cualquier tipo, siempre y cuando no transgredan la propia constitución y, demás Leyes
que emanen de ella.

Podríamos decir que la asociación pertenece a todos los seres humanos.

Ahora bien la asociación es paralela a la reunión, pero existe una variante; la primera se
constituye con ánimo de permanencia; la segunda tiene una existencia breve.

Mario de la Cueva nos dice que “la asociación es una unión permanente de personas,
constituida para la realización de un fin...”36

Por el origen o los fines que contiene la asociación entendemos que la libertad de
asociación es un derecho político, esto es que los hombres pueden estar juntos, ya que

36
De la Cueva, Mario. Óp. Cit. Pág. 238.

29
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

es una garantía con la que cuentan para decidir el futuro de su unión y así establecer un
procedimiento para cumplir con los fines propuestos.

Para entender mejor la asociación profesional, mencionaremos brevemente las causas de


su origen y la época en la que surge. En los siglos XII y XIII, dentro de las corporaciones,
las fraternidades o las hermandades, cuyo propósito esencial era de naturaleza mutual. A
partir del siglo XVI, se rompe la unidad entre los maestros y los compañeros, la cual
provoca que las fraternidades cambien su denominación por las de asociaciones de
compañeros, cuyas formas constituyen un antecedente real de nuestros sindicatos.

Posteriormente en Francia, mediante la Ley de Chapelier, el Edicto de Turgort,


prohibieron la asociación de los obreros para la defensa de sus intereses.

Las asociaciones Inglesas, primeras de la historia contemporánea, usó él termino trade-


unión, equivalente a asociación de oficios o profesiones, y en Francia, con la influencia de
Inglaterra nació la formula asociación profesional; y en 1866, una asociación de zapateros
toma el nombre de sindicato y dio a su comité administrativo la designación de cámara
sindical. Finalmente, la ley Francesa de 1884 emplea la palabra sindicato, pero añadió el
calificativo de profesional.

Para J. Jesús Castorena, la Asociación Profesional “es un fenómeno inminentemente


sociológico. El acto jurídico que realizan los hombres solo estructura la sociedad que se
da como resultado de su convivencia, de la similitud del trabajo de las condiciones de
vida, de las económicas.”37

Entonces por la índole de la asociación, calificamos a las asociaciones y sindicatos en


profesionales o de oficio, de empresa o de industria general o particulares y, de oficios
varios, entre otras especies.

En lo que se refiere a asociaciones de carácter mixto, de patrones y de trabajadores, la


legislación positiva no suele admitirlos, excepto intentos corporativos.

En principio la asociación profesional no fue reconocida como tal, por ejemplo en Francia
fue prohibida por la ley Chapelier y tipificada en el código penal de 1810.

En el caso de México no puede hablarse de la existencia de normas destinadas a prohibir


la organización de los trabajadores en asociaciones profesionales. Puede decirse que él
artículo noveno de la constitución de 1857, en donde se consignaba en forma vaga el

37
Castorena, J. Jesús. Manual de Derecho Obrero, octava edición, s.e. México, 1994, Pág. 231.

30
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

derecho de asociación y reunión, constituía el único apoyo que este cuerpo jurídico
brindaba a las agrupaciones artesanales y obreras que comenzaron organizarse por esos
años.

Consideramos, que la asociación profesional surgió, entre otros factores por los
siguientes:

En primer lugar la asociación profesional es el resultado de la íntima relación que crea el


trabajo entre los hombres y, que esto desboca en la constitución de un organismo social
llamado Sindicato.

Otro elemento que dio origen a esta institución, fue el espíritu de solidaridad que surgió
entre determinados trabajadores, como por ejemplo, los maestros, los oficiales y los
aprendices.

Así mismo, jugó un papel importante la estructuración de las ciudades, la división del
trabajo y la creación de oficios distintos, el advenimiento del régimen corporativo, el cual
es un sistema en que las personas de una misma profesión, oficio o especialidad, se unen
para la defensa de sus intereses comunes.

Ahora bien la asociación profesional implica una similitud y una relación de profesiones,
en la cual surge la solidaridad, con el fin de un mejor desenvolvimiento del sindicato y, así
evitar errores que llevarían a la no existencia del sindicato mismo.

La Asociación Profesional fue consagrada por el Constituyente de 1917, como una


garantía social en el artículo 123 fracción XVI constitucional, sólo pueden ejercerla los que
tengan la calidad de trabajadores u obreros y empresarios o patrones, quienes tendrán
facultad para coaligarse en defensa de sus respectivos intereses formando Sindicatos o
Asociaciones Profesionales.

Podemos decir que el derecho de asociación profesional representa el clímax de las


clases obreras para la protección y defensa de sus intereses específicos que se pueden
dar hasta contra el Estado y esto implica el poder y la fuerza de la clase obrera hasta para
hacerlo desaparecer.

Por eso la asociación profesional, en suma, “Constituye el instrumento de la lucha de


clases, en el que se busca el desarrollo de la misma, el cual implica la revisión de los
principios de la economía y del Estado, negación de los valores morales y culturales,
decisión de implantar nuevas fórmulas y nuevas estructuras, en la que determina una

31
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

posición de lucha entre la clase obrera y patronal”.38

Así es y, estamos de acuerdo con el maestro Castorena, al decir que la asociación


profesional es un instrumento utilizado por la clase trabajadora, mediante la cual busca
agruparse, que este caso sería en Sindicatos, para mejorar su posición social y alcanzar
un nivel con dignidad y bienestar económico.

No solo los trabajadores buscan estabilidad dentro del trabajo, sino que también los
patrones, ya que le preocupa el aumento y mejoramiento de la producción. No hay que
olvidar que también los patrones pueden formar sindicatos, los cuales se llaman
sindicatos de patrones. Es de resaltar, que la lucha de clases se da dentro de este
contexto, porque unos buscan el mejoramiento de las condiciones de trabajo que en este
caso serían los obreros, y otros presionan para obtener una mejor producción y una mejor
calidad del producto.

Así mismo, debe descansar sobre una base fundamental que es: estar establecida
libremente, es decir, deben de conformarla sobre una base voluntaria de los miembros
que la van a integrar.

Dentro de la asociación profesional, encontramos una cantidad de elementos que sirven


para contribuir a crear esta asociación.

Uno de esos elementos, es el de que los hombres que se dedican a una sola actividad u
oficio; buscan formas en las cuales se puedan apoyar para defenderse de la organización
capitalista y del empresario, ya que estos contemplan el trabajo como una mercancía, en
la cual pretenden adquirirla al menor precio posible.

1.2 Contexto sindical.

1.2.1 Sindicalismo.

Respecto del sindicalismo podemos decir antes de dar varios conceptos, que en el marco
de la crisis de los últimos años, ha venido sufriendo cambios con el paso del tiempo, está
en constante movimiento de acuerdo o en base a la sociedad.

El autor Raúl Trejo nos dice que, “los cambios recientes en el sindicalismo indican el
surgimiento de un nuevo movimiento obrero[ Si en síntesis la generación de
trabajadores que forman en la actual sociedad de masas y que al menos potencialmente,
aspira a un sindicalismo nuevo, con estructura, prácticas y demandas congruentes en el

38
Castorena, J. Jesús. Óp. Cit. Pág. 230.

32
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

país que ahora tenemos.”39

En lo que más ha influido la crisis actual es que dichas prácticas sindicales son producto,
básicamente, de las necesidades que tal crisis plantea como verdaderas exigencias a los
sindicatos y a las organizaciones sociales en general, por eso no se puede atribuir de
manera exclusiva al desarrollo de la crisis la causa fundamental de los nuevos procesos ,
por lo tanto, estos parecen ser también resultado de la combinación de fenómenos y
procesos que desde hace tiempo, décadas, se han desarrollado en el capitalismo
contemporáneo.

En opinión del Dr. Cabanellas, el sindicalismo es la “tendencia y régimen de organización


de los trabajadores a través de los sindicatos, el cual existe predominio de estos en las
relaciones Laborales o en la vida del Estado”.40

En el concepto anterior notamos que se crea un movimiento amplísimo, constituidos por


sindicatos, estructurados principalmente por estos, en la que señala el fundamento de la
organización laboral, en la cual puede llegar a que este movimiento influya en la toma
redecisiones y en la conducción del Estado y hasta podríamos decir en la administración
del mismo, y en las relaciones Laborales.

Podemos encontrar diferentes sindicalismos en los cuales buscan convertirse en un


movimiento único y de grandes dimensiones en el que agrupe la mayor parte de personal;
por mencionar algunos como por ejemplo:

El Sindicalismo comunista, “utiliza la fuerza sindical para la implantación de ideas


tomadas como propios de una revolución universal”. El sindicalismo cristiano que adopta
una fórmula de amplia colaboración social, que reconoce la legitimidad de principio de las
organizaciones obreras y sin imponer radical transformación en el régimen de la
propiedad y en el sistema de explotación industrial[, y así podríamos mencionar otros
como Sindicalismo De Estado, Sindicalismo Horizontal y Sindicalismo Revolucionario”.41

El sindicalismo en opinión del autor De Ferrari, “Fundamentalmente la lucha del hombre


fuera de las organizaciones políticas, no en contra de un sistema de gobierno, sino contra
una época y un sistema de vida”.42

39
Trejo, Raúl. Diez Proposiciones Sobre El Movimiento Obrero De Hoy, Economía informal, No. 101,
Facultad de Economía, UNAM, México, 1983, Pág. 23.
40
Cabanellas, Guillermo. Óp. Cit. Tomo IV, Pág. 171
41
Ibíd., Pág. 172 y siguientes.
42
De Ferrari, Francisco. Derecho del Trabajo, Vol. IV, segunda edición, ED. Desalma, Argentina, 11974,
Pág.124.

33
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El anterior concepto, nos habla de una lucha del hombre no contra las organizaciones
políticas ni contra un sistema de gobierno sino contra la época; quiere decir que el hombre
busca dentro de una sociedad y del tiempo, mejores condiciones y elevar su nivel de vida,
ya que con el transcurso del tiempo la sociedad va cambiando y a la vez cambia las
Leyes; están ajustándose al sistema de vida ay a la época, por esos e dice que el hombre
lucha contra la época y el sistema de vida de la misma, ya que tiene que ajustarse a los
cambios de una sociedad en movimiento; podemos decir que el sindicalismo es un
producto de la cultura o del entorno social obrero, y tienen que ver con la vida del espíritu.

El sindicalismo será y seguirá siendo como fue en su origen la fuerza espontánea y con
absoluta libertad, guardando cierta distancia de los sistemas jurídicos del Estado.

Básicamente el Sindicalismo es un movimiento obrero que es una corriente ideológica, en


que se abre paso la sociedad y en tiempo, que su único objetivo es ilustrar cambiar la
forma de pensar y, el bienestar de los trabajadores; considerando este movimiento obrero
de gran importancia que en un momento dado se convierte en un instrumento de presión
dirigido a la sociedad y al Estado, para cambiar las políticas Laborales.

1.2.2 Federación.

La Federación es el conjunto de sindicatos comprendidos dentro de una misma entidad


federativa que se constituye para el estudio, mejoramiento y defensa de los intereses de
los sindicatos que la integran.43

En el anterior concepto, del autor José Antonio Vázquez, existe similitud con el que define
al sindicato. Teniendo en común, factores como la asociación, constituida para el estudio,
mejoramiento y defensa de sus intereses.

La actual Ley Federal Del Trabajo es ambigua, ya que no brinda un concepto claro para
definir a la Federación y sólo se limita a mencionar en su Artículo 381:

Únicamente los sindicatos "podrán formar Federaciones y Confederaciones", y añade que


esta organización se regirá por lo establecido en las disposiciones aplicables al sindicato.

El Maestro De la Cueva, brinda una definición "formal" denominada así, precisamente


porque se carece de una disposición legal que absorba el contenido del concepto.
Diciendo que: "la Federación- son las uniones sindicales constituidas para el estudio,
mejoramiento y defensa de los intereses y derechos de la clase trabajadora44. Definición

43
VÁZQUEZ, José Antonio. Derecho del Trabajo Apuntes de José Romero Lagañas. México, 1969. pág. 58.
44
Cfr. DE LA CUEVA. Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Traba», óp. cit. Pág. 367.

34
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de la cual se desprenden dos elementos:

a) Los sujetos que crean la Federación no son propiamente dicho, los trabajadores
considerados individualmente, sino las estructuras sindicales debidamente creadas
a la luz del derecha

b) La finalidad de estas figuras jurídicas, es similar a la que legal mente corresponde a


los sindicatos, como lo hemos señalado anteriormente. Por lo que nos unimos al
criterio del Maestro Mario de la Cueva.

La Federación es la unión de sindicatos para la defensa de sus intereses comunes y se


presenta dentro de una misma Entidad Federativa.

Teniendo el sindicato la libertad absoluta para incorporar y desincorporarse de


determinadas federaciones de la que formen parte.

Como lo menciona en el Artículo 382 de la Ley Federal del Trabajo vigente: "los miembros
de las federaciones o Confederaciones podrán retirarse de ellas, en cualquier tiempo,
aunque exista pacto en contrario"45. Imperando el principio de la libertad sindical.

Por lo que hace a los requisitos de formación de las Federaciones, será suficiente retomar
paralelamente a los requisitos que la ley laboral enuncia, para formar sindicatos, los
cuales son:

a) Requisitos de Fondo.

1- Las Federaciones, igual que los Sindicatos, deben formarse con Sindicatos Obreros o
Empresariales, y nunca por la unión de ambos, es decir, no se aceptarán las
organizaciones mixtas, mismas que no están reconocidas legalmente.

2.- La finalidad perseguida por los Sindicatos es la lucha en defensa del trabajo.

Cabe señalar una diferencia importante entre la Federación y los Sindicatos, y es la


facultad de exigir, negociar y celebrar tos contratos ley, al igual que el hecho de emplazar
a huelga, que son facultades exclusivas pertenecientes a los Sindicatos.

3.- Requisitos: en cuanto a los miembros de las uniones, mientras que los Sindicatos son
integrados por' personas físicas, las Federaciones lo hacen con personas jurídicas. Por lo
tanto, el requisito único es la existencia de Sindicatos y Federaciones que harán las veces
de miembros constituyentes.

45
LEY FEDERAL DEL TRABA/O. Comentada TRUEBA URBINA, Jorge, septuagésima cuarta edición, Porrea,
México, 1995, pág. 220.

35
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

b) Requisitos de Forma.

Son análogos a los examinados a propósito de los Sindicatos, los cuales se enuncian a
continuación;

1.- Cada Sindicato o Federación debe acreditar su personalidad demostrando que está
debidamente constituido. Acto seguido, deberán convocarse en asamblea para decidir el
ingreso a la Federación, esto se realizará mediante el voto democrático de los
trabajadores y en su caso los representantes sindicales.

2.- En acuerdo de asamblea, se aprobarán tos estatutos que contendrán: la denominación


y domicilio y los de sus miembros, y la forma en que éstos, estarán representadas en la
directiva y en las asambleas.

3.- Por último, el registro se realizará ante la Secretaria del Trabajo y Previsión Social, en
los términos del Artículo 385 del código laboral vigente.

En conclusión, por cuanto hace a la estructura y vida de las Federaciones, éstas son
personas jurídicas, y sus órganos ejecutivos son la directiva y la asamblea.

El patrimonio se forma con aportaciones hechas por los Sindicatos miembros, el monto de
las cuotas, la forma y tiempo del pago, estarán reglamentados por los estatutos que rigen
la vida interna de la Federación; así como las sanciones a las que se harán acreedores
los socios por omisión o retraso de dichas contribuciones.

1.2.3 Confederación.

Para el estudio y análisis de la Confederación, utilizaremos el criterio vertido en la


Federación. La Ley Federal del Trabajo no distingue entre ambas figuras jurídicas.

El Maestro José Antonio Vázquez enuncia a la Confederación como: "el conjunto de


Federaciones de dos o más Entidades Federativas, constituida igualmente para et
estudio, mejoramiento y defensa de los intereses, no solamente de las Federaciones, sino
de los Sindicatos que las integran"46.

Comparando los conceptos de Federación y Confederación, encontramos que la


diferencia estriba en que, mientras que la primera la presenta dentro de una Entidad
Federativa, la Confederación abarca un territorio más extenso, que es de dos o más
Entidades Federativas.

46
VÁZQUEZ, José Antonio. Derecho del Traban) II. Apunta tomados de la cátedra. Recopilación de José
Romero Láminas, óp. cit. pág. 58.

36
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Para Mario De la Cueva, la Confederación es: "la cúspide de las organizaciones obreras
que tiene como objetivo el estudio y defensa de los intereses del trabajo y la preparación
de un mejor planeta para todos.47

Ambos autores, pretenden remarcar la función importante de la Confederación así como


la esfera jurídica, al señalar que:

a) La Confederación está en la cúspide y el ámbito de sus facultades comprende a


varias Entidades Federativas, teniendo un rango de representación sindical
superior a organismos como: las asociaciones de trabajadores, Federaciones
Locales o Regionales, Federaciones Estatales, o Sindicatos Nacionales de
Industria.
b) Está constituida para el estudio y defensa de los intereses tanto de las
Confederaciones, como de sus Sindicatos miembros, creando las instancias
necesarias para alcanzar sus metas.

Los objetivos de las Confederaciones son:

La reivindicación de la clase explotada para conseguir su mejoramiento en todos los


órdenes.

Su libertad respecto a la opresión capitalista. Contrarrestar la organización agresiva de los


explotadores y;

Perfeccionar las tácticas, adoptando como base de la Confederación las asociaciones de


trabajadores en general.

La estructura de la Confederación se basa:

En la democracia sindical, expresada a través de las resoluciones mayoritarias de las


asambleas y de sus congresos, teniendo como objeto la realización del programa de
acción y la declaración de los principios contenidos en los estatutos.48

Los requisitos de formación de las Confederaciones, debe observarse lo dispuesto por los
Artículos conducentes y aplicables de los Sindicatos, y que son:

a) Requisitos de Fondo.

1.- Deben formarse con Sindicatos Obreros o Empresariales.

47
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo. óp. cit. pág. 367.
48
ESTATUTOS DE LA CROC. Colección de Cuadernos Obreros, Secretaria del Trabajo y Previsión. Social,
México, 1987, pág. 20.

37
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.- En cuanto a los miembros, el único requisito es que sea integrado por personas
jurídicas, Sindicatos y Federaciones de una o varias Entidades Federativas.

b) Requisitos de Forma.

1.- Deben acreditar estar debidamente autorizados y acto seguido, deberán convocar a
asamblea para decidir democráticamente su ingreso a la Confederación.

2.- La asamblea constituyente deberá aprobar los estatutos, mismos que se regirán por lo
dispuesto en el Artículo 383 de la Ley Federal del Trabajo vigente, observando sus
lineamientos.49

El registro, observará lo pactado por el Artículo 385 de la legislación laboral actual, que a
la letra dice:

Artículo 385. "Para los efectos del artículo anterior, las Federaciones y Confederaciones
remitirán por duplicado:

I. Copia autorizada del acta de la asamblea constitutiva;

II.Una lista con la denominación y domicilio de sus miembros;

III. Copia autorizada de los estatutos; y

IV. Copia autorizada del acta de la asamblea en que se haya elegido la directiva..."50

La estructura y vida de las Confederaciones se regirá por lo establecido en sus estatutos y


el órgano directivo será la asamblea y su directiva. Su patrimonio estará formado por las
aportaciones de sus miembros.

1.2.4 La asamblea.

Es un órgano del sindicato, el más importante porque en ella, como dice Camelutti se
sedimenta la voluntad del mismo. La asamblea es un órgano y su contenido son las
manifestaciones de voluntad de la misma. La asamblea es el órgano del mismo modo que
lo son los comités ejecutivos del Sindicato, con la diferencia de que la asamblea tiene una
función legislativa, de mayor rango, y el comité ejecutivo sindical cumple los acuerdos de
aquella y atiende los asuntos administrativos.51"

Las asambleas se clasifican en ordinarias y extraordinarias:

49
Cfr. DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, op.cit. págs. 369 y 370.
50
LEY FEDERAL DEL TRABAJO. Comentada por TRUEBA URBINA, Jorge, septuagésima cuarta edición,
Porrúa, México. 1995. pág. 221.
51
CLIMENT BELTRAN. Juan B. Óp. Cit. p. 81

38
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

a) ordinarias, son las que se celebran para los fines previstos normalmente en los
estatutos; y

b) extraordinarias, son las que se celebran para tomar acuerdos sobre situaciones
urgentes y que requieren anticiparse a la celebración de las ordinarias.

Las asambleas deben celebrarse conforme a las reglas establecidas en los estatutos, en
primer lugar, mediante una convocatoria, quórum requerido para sesionar y además un
quórum para tomar decisiones. En el caso de que la directiva no convoque oportunamente
a las asambleas previstas en los estatutos, los trabajadores podrán solicitarlo y cuando
representen el 33% del total de los miembros del Sindicato o de la sección, por lo menos;
podrán solicitar de la directiva que convoque a la asamblea y si no lo hace dentro de un
término de 10 días, podrán los solicitantes hacer la convocatoria, en cuyo caso, para que
la asamblea pueda sesionar y adoptar resoluciones, se requiere que concurran las dos
terceras partes del total de los miembros o de la sección.

La resoluciones deberán adoptarse por el 51% del total de los miembros del Sindicato o
de la sección, por lo menos (o sea, la mayoría absoluta).

La forma en que se desarrolla la asamblea, es por la elección de una mesa de debates;


para que haya imparcialidad en la conducción de la misma, designar los auscultadores,
que llevan el registro de los asistentes para acreditar las credenciales con que
comparecen, el quórum, es el de votación, y que puede ser secreto, verbal, el acta de
asamblea, pues no debe esperarse para su autorización a la asamblea subsiguiente, en
los casos que la importancia de los acuerdos motiven su aplicación inmediata.

1.2.5 Libertad sindical.

La libertad sindical ha sido una de las aspiraciones supremas del hombre. Ha luchado y
aún lo hace por lograrla.

El concepto de libertad, auspiciado por el humanismo, protegido por la idea que defiende
al derecho natural, suelen entenderse como un beneficio otorgado al hombre: el derecho
de libertad como una concesión, olvidando que el hombre es libre, esto es, que la libertad
es una cualidad intrínseca al hombre y que los demás hombres determinan son los límites
de su libertad.52

La libertad, como fundamento de un sistema jurídico ha encontrado su contrario en la idea

52
DE BUEN LOZANO, Néstor. óp. cit. p.613

39
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de lo social.

La libertad sindical se predica como derecho del hombre, del individuo, a pesar que el
sindicalismo, al que se refiere en la expresión que comentamos es, por esencia una
estructura colectiva.

En muchos sentidos la libertad ha dejado de ser protagonista del derecho. Si se sigue


este camino, podrá alcanzarse la conclusión de que el reconocimiento de la libertad
sindical es un acto de soberanía del pueblo intocable para el Estado.

El Artículo 1o de la Constitución de 1917 cambió los términos de la disposición de su


antecesora: "En los Estados Unidos Mexicanos todo individuo gozará de las garantías que
otorga esta Constitución, las cuales no podrán restringirse ni suspenderse, sino en los
casos y con las condiciones que ella misma establece.53

La libertad sindical, como concepto, no tolera sólo una interpretación gramatical sino
exige, además una toma de partido, lo que lógicamente conlleva la posibilidad esencial de
la discrepancia.

En realidad la dificultad conceptual obedece, a la tendencia predominante en el siglo


pasado y en la primera mitad de éste, tal vez hasta la etapa inmediata a la Segunda
Guerra Mundial, de catalogar los derechos, aún los de sentido social, en función de ser
derechos humanos.

La libertad sindical está consagrada en el convenio N° 87 de 1948, de la Organización


Internacional del Derecho del Trabajo (O.I.T) ratificado por México, que conforme al
Artículo 6 de la Ley Laboral, forma parte del Derecho Positivo, al disponer que los tratados
internacionales celebrados y aprobados en los términos del Artículo 133 de la
Constitución son aplicables a las relaciones de trabajo en todo lo que beneficie al
trabajador, a partir de la fecha de la vigencia.

El convenio referido contiene cuatro Artículos fundamentales relativos a la libertad sindical


y a la protección del derecho de sindicación.

La libertad, como fundamento de un sistema jurídico ha encontrado su contrario en la idea


de lo social. Esta idea puede admitir múltiples variaciones, desde un socialismo cristiano,
que hace residir en la caridad los límites al propio comportamiento, a un espíritu
comunitario, imbuido en la idea de que hay una obra común que le incumbe realizar al

53
DE LA CUEVA, Mario El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo. T-II. Quinta Edición. Porrúa,
México,1989.p.273

40
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

todo social como entidad, y del cual forman parte las personas subordinadas a este bien
superior.

La libertad positiva, puede ejercerse de dos manera diferentes. La primera supone la


concurrencia de, por lo menos, veinte trabajadores en servicio activo; la segunda
constituye un acto meramente individual si bien su perfeccionamiento es bilateral. En el
caso de los sindicatos patronales la ley exige que concurran tres patrones, por lo menos.

La propia ley establece medios de coacción lícita para inducir a los trabajadores a
constituir sindicatos o adherirse a los ya constituidos. La más importante de estas
medidas consiste en la llamada cláusula de exclusión de ingreso, además hay otras
cláusulas denominadas de preferencia sindical.

La libertad negativa, suele expresarse como el principio de libertad individual negativa,


afirmando que a nadie se puede obligar a formar parte de un sindicato, a no formar parte
de él o a permanecer en un sindicato.

Por regla general se afirma que este derecho es ilusorio frente a la existencia de la
cláusula de exclusión e, inclusive, de ello se intenta derivar la anticonstitucionalidad, que
se funda en la tesis individualista de la libertad sindical.

La cláusula de separación se expresa diciendo que si un trabajador renuncia o es


expulsado del sindicato, el patrón con el que tenga celebrado contrato colectivo de trabajo
tendrá obligación, sin responsabilidad alguna, de separar al trabajador. En el caso
interesa la separación por renuncia y no por expulsión.

En el caso de la libertad negativa, el trabajador es libre para permanecer afiliado, para no


afiliarse o para separarse. No se podrá obligar, lícitamente, a que haga otra cosa. Pero si
se le presiona con la amenaza de la pérdida del empleo, para el caso de que ejerza su
derecho.

En muchos sentidos la libertad ha dejado de ser protagonista del derecho, poco a poco ha
dejado de ser el elemento motor del derecho para ser sustituido por el estado de
necesidad y consecuencia, que es el derecho imperativo.

La libertad sindical y el orden jurídico: son muy amplias las dimensiones de la libertad
sindical, pero los Sindicatos no son instituciones soberanas y en su actividad tampoco
ejercen funciones de soberanía, una observación que resulta de verdad innecesaria. No
obstante, sirve para afirmar que los Sindicatos están sometidos al orden jurídico nacional.

41
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Nuestra Carta Magna, dice en su Artículo 133, es la Ley Suprema de país, por lo que
todas las autoridades, habitantes y organizaciones sociales, que se muevan dentro de su
ámbito territorial tienen que obedecerla: nada ni nadie puede estar por encima de ella, por
que equivaldría a colocarse sobre la voluntad soberana del pueblo; y si todos pretendieran
hacerlo, se llegaría al caos. Por otra parte la libertad sindical no es un privilegio, los cuales
por lo demás, no son posibles en nuestro derecho, salvo los otorgados por el Artículo 28 a
los autores y artistas para la reproducción de sus obras, sino un derecho Constitucional
declarado y protegido, al igual que todos los derechos, forman parte del orden jurídico
Constitucional.

Por lo tanto, los Sindicatos están sometidos a las jurisdicciones civiles, penales,
administrativas y sociales, creadas por el pueblo en la Constitución y estructuradas en las
leyes respectivas. A este respecto el Artículo 13 de nuestra Ley fundamental previene que
ninguna persona o corporación puede tener fuero, en consecuencia, en los casos de
responsabilidad, los Sindicatos están sometidos a los jueces competentes.

Mario de la Cueva considera que la Constitución garantiza la libertad negativa de


asociación profesional y no puede la ley ordinaria destruir el principio, invocando los
siguientes argumentos:

a) La renuncia al Sindicato es un derecho de libertad negativa de asociación profesional y


no es debido que su ejercicio implique la sanción durísima de pérdida del empleo.

b) Es falso que la cláusula tenga por objeto evitar el desmembramiento del grupo a
consecuencia de las maniobras del empresario.

c) Utilizar el contrato colectivo de trabajo para resolver los problemas internos de la


asociación profesional obrera, es desnaturalizar su esencia.

d) La cuestión fundamental consiste en la evidente contradicción entre la cláusula de


exclusión por separación y el principio de la libertad sindical positiva y negativa, de
asociación profesional. El ejercicio de un derecho no puede determinar la aplicación de
sanciones. Cuando se aplica la cláusula de exclusión por separación, garantiza el Estado
a la asociación profesional contra el ejercicio de un derecho asegurado en la Constitución
a los trabajadores, esto es, viola el principio de la libertad individual de asociación
profesional; y no puede actuar de esta manera, porque el Estado está obligado a respetar

42
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

y hacer cumplir la Constitución."54

Las apreciaciones anteriores nos conducen a un replanteamiento del problema de la


contradicción aparente entre diversas normas reglamentarias: el Artículo 358, expresión
individualista de la libertad sindical, positiva y negativa, que nadie puede obligar a un
trabajador a afiliarse o a separarse de un sindicato.

En términos tales que esa obligación pudiera recibir apoyo de autoridad. Cosa distinta es
la sanción de pérdida de trabajo por renuncia o expulsión sindicales, que se integra como
un derecho colectivo frente al patrón y que éste debe cumplir, sin mayor responsabilidad,
separado -y no despidiendo- al trabajador.

En la práctica de nuestro medio el Estado si interviene en las organizaciones sindicales,


muchas veces determinando a los líderes, la táctica de lucha, pero son problemas
originados por la práctica viciosa que se denomina como charrismo sindical.

Nosotros consideramos que la libertad sindical es la facultad que tienen los individuos
para agruparse o formar coaliciones, sindicatos, o el de unirse en una asociación
profesional, para defender sus intereses comunes inherentes a las relaciones de trabajo y
que beneficien a la comunidad trabajadora.

Teniendo el Estado la obligación de regular y respetar la voluntad del individuo conforme


a lo que establece nuestra Carta Magna.

Según José Geraldo de Freitas, la libertad sindical: “Se refiere al derecho de los
trabajadores y patronos, expresado en poderes individuales y colectivos en virtud de los
cuales, sin ningún tipo de distinción o discriminación, sin requerir autorización previa; y sin
injerencias, tienen derecho a constituir libremente (en forma autónoma e independiente)
las organizaciones sindicales que estimen convenientes para la mejor defensa de sus
derechos e intereses, así como también el de afiliarse o no a organizaciones sindicales
existentes, establecer su forma de organización, administración, participación, elección de
sus autoridades y toma de decisiones de conformidad con lo que establezca el
ordenamiento jurídico respectivo”.55

Este principio es fundamental en el estudio del derecho sindical, debido a que en él se


concentra la esencia de la institución sindical. Tiene una doble referencia: colectiva e
individual. La colectiva trata de la libertad que la ley garantiza para que se integren
54
DE LA CUEVA Mario, óp. cit. pp. 385 y siguientes
55
Véase.- http://es.wikipedia.org/wiki/Libertad_sindical#Enlaces_externos.- Portal web de wikipedia, 2009.-
Fecha de revisión.- domingo 22 de marzo de 2009.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sindicatos de trabajadores o patrones, así como el reconocimiento estatal a las


organizaciones laborales registradas. La referencia individual sería la libertad del
trabajador de pertenecer o no a un sindicato, y este concepto de libertad individual dentro
de la doctrina del derecho del trabajo se desglosa en dos vertientes: libertad positiva de
afiliación y libertad negativa de asociación profesional.56

La libertad positiva de afiliación sindical se refiere al ejercicio pleno de la facultad otorgada


a cada individuo de pertenecer o no a un sindicato. Creemos que no podría encontrarse
ningún sistema colectivizante si con ese afán se desconocieran los derechos
fundamentales de decisión que posee cada individuo. Por ello, el legislador tuvo presente
este aspecto tan singular para garantizar a los trabajadores tanto la libertad de afiliación
como el correlativo a no afiliación.

Si bien es cierto que, autores como el maestro Cabanellas refieren como antecedente
lejano a las primeras formas de asociaciones profesionales y sus diversas expresiones
históricas (corporaciones primitivas, sodalites y collegias, colegios romanos, agrupaciones
de artesanos, mercaderes y otras formas de asociacionismo profesional), en realidad la
libertad sindical es consecuencia de la llamada Revolución Industrial, el cambio del
sistema productivo y sus consecuencias.

La libertad sindical se compone de dos derechos:

• El derecho a la libertad (en su forma más primitiva referido a la posibilidad de elegir con
independencia de factores externos el destino propio);

• El derecho a la asociación. Ambos son derechos inherentes a la esencia humana, luego,


la libertad sindical es un derecho inherente a la esencia humana y por tanto a ella se
imprimen las consecuencias respectivas.

Se parte de la idea del derecho de asociación que aplicado al ámbito de las relaciones
laborales reconoce la posibilidad de conformar sindicatos u otras organizaciones
colectivas cuyo objetivo principal es la defensa de los intereses de los trabajadores.

Siendo ello así, y partiendo de la definición básica de libertad antes expuesta, debe
llegarse a la conclusión según la cual la libertad es un derecho natural, esto es, que tiene
el hombre por la naturaleza misma de su condición.

Por ende, tanto en el concepto de libertad como en el de asociación son inherentes a los

56
Cfr. BERMÚDEZ CISNEROS, Miguel. Óp. Cit., pág. 285

44
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

derechos humanos fundamentales y siendo ello así, al hablar de libertad sindical –como
especie de libertad de asociación- se le imprime, patenta y sella su carácter como
derecho humano fundamental; y con ello -desde luego- las consecuencias respectivas.

Por lo tanto, la libertad sindical resulta de esa fusión de la teoría de los derechos humanos
y el derecho del trabajo.

Por lo general, se atiende a este aspecto distinguiendo entre la esfera individual y la


colectiva así como también al sentido positivo y negativo.

En otro orden de ideas, el Dr. Étala nos precisa como características esenciales o formas
de manifestación de la libertad sindical –en cuanto al aspecto individual y positivo- los
siguientes: “a) El derecho de los trabajadores de constituir las asociaciones sindicales que
estimen convenientes; b) la potestad de afiliación a las organizaciones sindicales ya
constituidas; c) la permanencia en una asociación sindical; d) la reunión y desarrollo de
las actividades sindicales (ejercicio de la actividad sindical); e) el peticionamiento ante las
autoridades y los empleadores; y f) la participación en la vida interna de las asociaciones
sindicales eligiendo libremente a sus representantes, ser electos y postular candidatos”.57

En cuanto al aspecto individual y negativo, precisa el precitado autor que se refiere con
ello a la consideración de la potestad de un individuo a no afiliarse a ninguna organización
sindical (siendo que allí se agote la clasificación de las características esenciales y
merezca por ello la crítica de algunos doctrinarios).

Por otra parte, con relación al aspecto colectivo de la libertad sindical, precisa el autor –
luego de un extenso análisis sobre la autonomía sindical- que frente al Estado están
planteados los tópicos sobre la exigencia de una autorización previa, así como también:

• El derecho a constituir las organizaciones que se estime convenientes.

• El derecho a redactar los estatutos y reglamentos.

• El derecho de elegir libremente a sus representantes; d) el derecho a organizar su


administración; y e) el derecho de no ser disueltas o suspendidas por vía administrativa.

Dentro, del aspecto colectivo de la libertad sindical, distingue también el autor, sus
características o formas de manifestación frente al empleador; señalando las siguientes:
a) la no injerencia patronal; y b) las subvenciones económicas.

57
Cfr. ÉTALA, Carlos Alberto. Interpretación y aplicación de las normas laborales, Astrea de Alfredo y Ricardo
de Palma, Argentina, Buenos Aires, 2004, pág. 116.

45
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En la actualidad, existen diversos tratados internacionales que incorporan a la libertad


sindical (directa o indirectamente). A continuación se hace referencia a los más
relevantes:

• La Convención Americana sobre Derechos Humanos suscrita en la Conferencia


Especializada Interamericana Sobre Derechos Humanos (San José de Costa Rica del 7 al
22 de noviembre de 1969) cuyo artículo 16 refiere a la libertad de asociación con fines
laborales.

• La Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, que contiene en su


artículo 23.4 el derecho de toda persona a fundar sindicatos y sindicarse para la defensa
de sus intereses.

• Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos adoptado el 16 de diciembre de


1966 y vigente desde el 23 de marzo de 1976, en cuyo artículo 22 también se establece la
libertad de asociación de orden laboral, sin permitir al Estado menoscabar el ejercicio de
la libertad sindical.

• Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales adoptado el 16


de diciembre de 1966 y vigente desde el 3 de enero de 1976, cuyo artículo 8 refiere
ampliamente a la libertad sindical.

Como se verá más adelante, estos instrumentos internacionales nos servirán como marco
en la legitimación de la vida de los sindicatos.

1.2.6 Sindicato.

La asociación profesional puede llegar a la confirmación de un sindicato, sin olvidar que la


base de un sindicato, está contenido en el derecho de asociación, pero básicamente
podemos encontrar, que para formar sindicatos en defensa de los intereses tanto de
trabajadores como de patrones; se encuentra contenido en el Artículo 123 fracción XVI de
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y reglamentada en la Ley
Federal del Trabajo en su Artículo 356 referente al sindicato.

Ahora bien antes de entrar a dar el concepto de sindicato expresaremos la etimología del
organismo antes mencionado.

1.2.6.1 Etimología y concepto del término sindicato.

La palabra sindicato, ha sido tomada del idioma francés tiene como antecedente. Roma y
Grecia, deriva del griego sundiké cuyo significado es justicia comunitaria o bien idea de

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administración en atención a la comunidad.

En uno de los textos del jurista Gayo, de su gran obra el Digesto, encontramos referencias
a la palabra sindicato a los que se les permitió fundar colegios, sociedades y otros tipos
de agrupaciones, semejantes a la República, tales como áreas común y actor o sindié o
porque a la comunidad, obviamente tratando de expresar la idea de representación, se
afirma que la palabra sindicato fue utilizada por primera vez en una federación parisiense
denominada Chambre Syndicales du Batiment de la Sainte Chapalle aproximadamente en
el año de 1810, dicha palabra sirvió entonces para denominar organizaciones.

El término se manifiesta confuso, en cuanto a que el margen del Derecho Laboral, tiene
una connotación mercantil propia, en los Estados Unidos de Norteamérica inclusive los
organismos obreros norteamericanos usan el nombre de unión en lugar de sindicato.

Como quiera que sea, la expresión sindicalismo se ha arraigado en nuestro idioma, en


cuanto refleja una institución de defensa de los grupos sociales, y no parece que las
dificultades que presenta su uso pueda llegar a determinar un cambio terminológico".58

Según otra definición de sindicato desde el punto de vista etimológico considera varios
aspectos:

a) El término romano Colligia guarda relación con nuestra terminología.

b) En el régimen corporativo a partir de los siglos XII y XIII, los compañeros formaron
dentro de sus corporaciones, fraternales, cuyo propósito esencial era de naturaleza real,
al romperse la unidad entre los maestros y compañeros, particularmente a partir del siglo
XVI, las fraternidades cambiaron legalmente su denominación por la de Asociationes
Compa Moniques y Geselle Werbands formas iniciales que constituyen el antecedente
real de nuestro sindicato.

c) Dentro de la vigilancia de la Ley Chapelier y de las leyes prohibitivas de Inglaterra, las


asociaciones inglesas, primeras en la historia contemporánea, usaron el término Trade-
Unión, de ahí nació en Francia la fórmula de la asociación profesional.

d) Máximo Leroy afirma que en 1886 una asociación de zapateros tomó el nombre de
sindicato, y su comité administrativo la designación de cámara sindical, de investigación
de los archivos, se desprende que éste debe haber sido el primer organismo obrero
denominado así.

58
DE BUEN LOZANO. Néstor Derecho del Trabajo. Tomo II, Novena Edición, Porrúa, México, 1992. página 593.

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e) La ley francesa de 1884 empleó la palabra sindicato, pero añadió el calificativo de


profesional"59

Analizada la etimología del vocablo, objeto de nuestro estudio, a continuación


procedemos a tratar su concepto.

En opinión de Graciela Bensusan Areous, el sindicato es “la asociación de trabajadores o


patrones de una misma profesión, oficio o especialidad similares o conexos, integrada
para el mejoramiento, y sobre todo, para la defensa de los intereses comunes de los
asociados”.60

El concepto anterior se puede decir que los sujetos son los trabajadores y los patrones, ya
que ambos están facultados tanto por la norma fundamental como por la ley
reglamentaria, para agruparse en defensa de sus propios intereses, siempre y cuando lo
hagan respetando la profesión, siendo oficio o especialidad de cada persona, con la
finalidad de que las agrupaciones tengan un buen funcionamiento y se evite que surjan
conflictos internos de dichas asociaciones.

El sindicato si bien es una coalición, es a su vez permanente y no como la coalición que


también es de trabajadores y patrones, pero con la diferencia de que es una reunión
transitoria, pasajera, para la resolución de un problema común pero temporal.

Por su parte Guillermo Cabanellas, al referirse a esta organización nos dice que el
Sindicato, “es toda unión libre de personas que ejerzan la misma profesión u oficio
conexos, que se constituya con carácter permanente y con el objeto de defender los
intereses profesionales de sus integrantes o ara mejorar sus condiciones económicas y
sociales”.61

Del concepto anterior podemos observar que dicho autor nos proporciona una concepción
más clara y amplia respecto del sindicato en el que utiliza una palabra básica para
conformar una asociación profesional, la de unión, porque sin esta, no se lograría integrar
un grupo organizado para defender sus intereses, sin olvidar que dicha agrupación debe
ser libre, es decir que no necesita existir ninguna presión por parte de la autoridad para
que se agrupen las personas.

Esta concepción de Sindicato es más manejable y comprensible, fácil de entender, sin


59
DE LA CUEVA. Mario, Nuevo Derecho del trabajo. Tomo II, Séptima Edición Porrúa México. 1993.
páginas 248 y 249.
60
Bensusan Areous, Graciela. Estudio del Marco Jurídico que apoya a la Organización Sindical del Trabajo,
Ed. Por el Instituto Nacional de Estudios del Trabajo, México, 1985, Pág. 26.
61
Cabanellas, Guillermo. Óp. Cit. Pág. 174.

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encontrar términos que muchas veces pueden distorsionar un concepto o confundir y


llegar al grado de que el contenido sea algo confuso y, que podría acarrearnos una mala
interpretación del concepto de que se trate.

Para Juan García Abellán, el Sindicato, “es una agrupación institucional de productores a
los fines de ordenar las profesiones, defenderlas y representarlas jurídicamente en
régimen de autogobierno y colaboración con el Estado respecto a su acción económica y
política social”.62

Del anterior concepto se desprende una noción jurídica del sindicato en la que notamos a
la vista las realidades sindicales del presente, pero condicionada a su vez por un mínimo
de previsión respecto de evoluciones futuras y, a la vez permitir la incorporación de
tendencias diversas bajo el denominador común de la profesionalidad como condición
necesaria de cualquier ordenación del trabajo dependiente.

Consideramos imprescindible resaltar el carácter institucional y público que atribuimos al


sindicato, lo que implica el reconocimiento de su carácter estructural de la comunidad
política en la que se crea, porque el trabajo bien organizado no es un movimiento
económico, político, social: es mucho más que eso.

Las acciones y tareas que deben realizarse para conseguir tal propósito, requieren de
conocimiento, capacidad y habilidades principalmente de los dirigentes sindicales, y
conciencia de los trabajadores, para cumplir su misión específica en la lucha sindical.

La Organización Internacional del Trabajo reafirma el principio de que los trabajadores


deben tener el derecho de pertenecer a un sindicato para estar en condiciones de
defenderse o defender sus intereses; los sindicatos no solo deben estar libres de toda
presión extraña, sino que es menester, además, que está, bien organizados, bien
informados y bien dirigidos.

Al agruparse los trabajadores de un sindicato están dando forma a un instrumento social


para mejorar su nivel de vida, el de su familia y el de la comunidad.

El mejor método a emplear en el cambio para entender la íntima esencia del sindicato, es
aludir a las notas que lo caracterizan, es decir, nos referimos a los aspectos externos o
íntimos que lo vivifican. Las estructuras y las formas que el sindicato adopta no son más
que consecuencia de la naturaleza de sus principios.

62
García Abellán, Juan. Óp. Cit. Pág.108

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No imaginamos, pues, un sindicato cuyo origen, organización, fines y medios, hayan sido
señalados por el Estado imperativamente en un acto de creación jurídica, sin base
sociológica estructural. Diríamos entonces que el Sindicato gravita hoy considerablemente
en los movimientos de opinión sobre los problemas centrales del mundo moderno, pues
aunque se invoque que tales organismos no tienen título para hacerlo, sino en materia de
índole económica o social, las de tal naturaleza llenan en nuestros días la mayor parte de
las consideradas como esfera política.

Dentro del sindicato reconocemos que existe una unidad colectiva real, directamente
alienable y formada sobre actitudes colectivas, hasta el punto de constituir un marco
social estructurable, que tiende hacia el equilibrio particular de la forma de la sociedad.

En cualquier caso, la integración sindicato-sociedad es un fenómeno necesario,


irreversible e inevitable. De cómo se realiza esta integración, depende, en gran parte, el
futuro de la humanidad.

La relación Estado- Sindicato, podría ser sintomática de una condición de subdesarrollo si


se parte de la ecuación de que a mayor libertad sindical, mayor desarrollo económico y a
menor libertad sindical, menor desarrollo económico.

Definición Legal de Sindicato.

Respecto a la Ley Federal del Trabajo, en su artículo 356 Título Séptimo, en el cual se
habla de los sindicatos, federaciones y confederaciones que dice: "Sindicato es toda
asociación de trabajadores o de patrones constituidos para el estudio, mejoramiento y
defensa de sus respectivos intereses".63

El sindicato de trabajadores es un instrumento de lucha, el de patrones de defensa, en la


práctica y por la utilidad que podría presentar la constitución formal del sindicato de
patrones, existen agrupaciones patronales, que sin estar constituidos como sindicatos
defienden sus intereses.

En el artículo 356 de la Ley referida, se persiguen objetivos diferentes, según sea la


asociación profesional que se constituya, en el caso de los trabajadores el objetivo de sus
sindicatos se deriva de un Derecho Social que los impulsa a luchar por el estudio y
mejoramiento, de las condiciones económicas, sociales y la defensa, las mismas en el
presente y en el futuro.

63
Ley Federal del Trabajo, México 2005.

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En tanto que la asociación de los patrones su objeto es diferente, es defender sus


derechos patrimoniales, destacando en esto la propiedad.

En el concepto anterior observaos que es general, es decir que abarca a todos los
trabajadores, patrones y empresas contenidas dentro del apartado A del artículo 123; al
referirnos que es general entonces un sindicato entraría en la categoría de una
comunidad, porque los miembros que constituyen esta comunidad, tienen el mismo
sentimiento subjetivo de edificar un todo, con la finalidad de conseguir objetivos
concretos.

Los sindicatos, son cuerpos reales, es decir, son órganos que persiguen fines
determinados, que son una simple suma de intereses individuales. Esto es que los
sindicatos reales están sometidos a las jurisdicciones civiles, penales, administrativas y
sociales, creados por el pueblo en la constitución y estructurados en las Leyes
respectivas.

“Los sindicatos no nacen para un simple vivir, pues, dada la naturaleza dinámica del
Derecho del Trabajo, tiene una misma misión que cumplir, por lo tanto, pertenecen a su
esencia ser entes activos, organizaciones de lucha por la justicia para el trabajo”64

Ahora la finalidad del sindicato es propia, como en las mismas condiciones en que la
legislación es una función propia del pueblo. En otro aspecto, en el viejo y nuevo
continente, al sindicato lo consideran como un movimiento político, con un propósito de
modificación de las bases del orden jurídico.

Así pues el sindicato pertenece a la especialidad asociativa integrada por un conjunto de


voluntades coincidentes en obtener un mejoramiento clasista y de las condiciones
Laborales. Con esto se ratifica la índole de asociación que los sindicatos poseen, por ser
ajenos a los fines lucrativos a no revestir, sino ocasional y limitada actividad para ellos.

Al respecto diríamos que la asociación constituye el género; y el sindicato, la especie;


ahora bien encontramos diferencias entre asociación y sindicato:

Primero, que la asociación ha de tener un objetivo común, aunque puede comprender a


personas de toda condición, mientras el sindicato ha de tener igual pero con una
diferencia, de que en este solo agrupara a personas de un mismo oficio o especialidad.

Segundo, la esfera de las asociaciones la fijan los estatutos; la sindical está señalada por

64
De la Cueva, Mario. Óp. Cit. Tomo II, Pág. 290

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la ley.

Tercero, el sindicato puede recibir donaciones y legados y no las asociaciones, salvo


estar reconocidas como la utilidad pública.

Cuarto, la acción sindical puede ejercer para asegurar la defensa de los intereses
colectivos de la profesión; la acción colectiva de la asociación solo cabe ejecutarla cuando
los intereses de la agrupación hayan sido perjudicados.

Por lo tanto la formación de los sindicatos resulta hoy un fenómeno de producción casi
automática allí donde existe un núcleo importante de trabajadores, ya sea dispersa en
distintas actividades, ya sea situación más frecuente integrando una especialidad laboral
o constituyendo un conglomerado de oficios o tareas, pero con unidad de dependencia
empresarial.

Al darse estos presupuestos, bien sé a por iniciativa de algunos trabajadores con mayor
conciencia de clase o mayor adoctrinamiento político o bien sea esto cada vez más los
preponderante por expansión de sindicatos similares o federaciones de los mismos, se
producen los primeros contactos específicos para asociarse procesionalmente.

Este proceso normal, el de suma, existe lo opuesto; el de división, cuando un sindicato en


funcionamiento se escinde, como resultado de discrepancias internas, sobre todo por
errores o fracasos que a su conducción se achacan.

Cuando se crea un sindicato por un grupo de dirigentes provisionales que cuentan


además con cierto número de potenciales asociados, comienza un periodo, más o menos
extenso, de trámite y consultas preliminares, de índole predominantemente privada.

Dicho grupo integrado por partidarios del sindicato va dando forma a la entidad va
madurándola, hasta lograr la armonía en los propósitos de todos ellos.

Finalmente los sindicatos les incumbe en primer término el de cumplir con la lealtad y
defender a sus asociados, individual y colectivamente en el ámbito laboral.

1.2.6.2 Clasificación de los sindicatos.

El artículo 360 de la Ley Federal del Trabajo, nos estipula que los sindicatos de
trabajadores se clasifican en:

I. “Gremiales.- Los formados por trabajadores de una misma profesión, oficio o


especialidad.

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II. De empresa.- Los formados por trabajadores que presten sus servicios en una misma
empresa.

III. Industriales.- Los formados por trabajadores que presten sus servicios en dos o más
empresas de la misma rama industrial.

IV. Nacionales de industria.- Los formados por trabajadores que presenten sus servicios
en una o varias empresas de la misma rama industrial, instaladas en dos o más entidades
federativa, y

V. De oficios varios.- Los formados por trabajadores de diversas profesiones. Estos


sindicatos sólo podrán constituirse cuando el municipio de que se trate, el número de
trabajadores de una misma profesión sea menor de veinte”.

Por otra parte, el artículo 361 de la ley en estudio nos prescribe que los sindicatos de
patrones pueden ser:

“Los formados por patrones de una o varias ramas de actividades, y Nacionales, los
formados por patrones de una o varias ramas de actividades de distintas entidades
federativas.”

1.2.6.3 Tipos de sindicatos.

La forma de los sindicatos depende de la combatividad y autonomía que poseen, y estos


pueden ser:

1. Sindicatos Blanco.- Cumple formalmente todos los requisitos legales, pero actúa
bajo los designios del patrón.
2. Sindicato Amarillo.- Pretende la colaboración de clases; es base de su filosofía
buscar la armonía entre el patrón y los trabajadores.
3. Sindicato rojo.- Es el sindicato revolucionario y por lo mismo manda su acción en
la lucha de clases.65

1.2.6.4 Prohibiciones del sindicato.

Las prohibiciones que se impone a los sindicatos, el artículo 378 les niega:

I. Intervenir en asuntos religiosos; y

II. Ejercer la profesión de comerciantes con ánimo de lucro”.

1.2.6.5 Derechos y obligaciones de los sindicatos.

65
DÁVALOS, José. Óp. Cit., págs. 7 y 8.

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La vida de las organizaciones sindicales implica una serie de derechos y obligaciones a


quienes participan en ella. No podría ser otro modo, porque la esencia de la integración
sindical es que participen en ella muchas personas, que sean acreedoras de derechos
comunes y que de esa forma obtengan mayor efectividad y eficacia en su
cumplimentación y reclamo, ya que la finalidad misma del sindicato consiste en la defensa
de sus respectivos intereses.

Pero la integración del trabajador en un sindicato también acarrea una serie de


obligaciones, es decir, no sólo derechos.

Los derechos de los agremiados a sindicatos son:

• “Derecho de asistir a las asambleas.

• Derecho de participar en las elecciones sindicales, como candidato, o bien votando para
la elección.

• Derecho a que se le rindan cuentas de la administración sindical.

• Derecho a que el sindicato gestione y defienda, en su caso, sus relaciones con la


empresa”.66

En cuanto a las obligaciones que adquieren los trabajadores al integrarse en un sindicato,


tenemos:

• Pagar las cuotas conforme a los estatutos.

• Cumplir con los estatutos sindicales.

• Cumplir con las comisiones que se les encarguen de acuerdo con la asamblea.67

Actualmente el artículo 377 establece las obligaciones en cuanto al funcionamiento de los


sindicatos:

I. “Proporcionar los informes que les soliciten las autoridades del trabajo, siempre que se
refieran exclusivamente a su actuación como sindicatos.

II. Comunicar a la autoridad ante la que están registrados, dentro de un término de diez
días, los cambios de su directiva y las modificaciones de los estatutos, acompañando por
duplicado copia autorizada de las actas respectivas; y

III. Informar a la misma autoridad cada tres meses, por lo menos, de las altas y bajas de

66
BERMÚDEZ CISNEROS, Miguel. Óp. Cit., pág. 291
67
Ibídem, pág. 292.

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sus miembros”.

1.2.7 Autonomía y democracia sindical.

Las agrupaciones sociales para que puedan funcionar en la vida pública requieren de
cierta determinación para poderse manejar; esta determinación se fundamenta en la
capacidad de toma de sus decisiones, la cual debe de ser libre, directa, inmediata, veraz y
sin escrúpulos. Estos ingredientes constituyen el principio de autonomía sindical.

Por otra parte, los miembros integrantes de una agrupación sindical deben contar con la
capacidad de elección de sus representantes, misma que debe de ser libre y satisfactoria
de sus anhelos, metas y en concordia a sus principios. A esta característica se le
denomina democracia sindical.

Principio de autonomía sindical.

La palabra "autonomía" ha estado relacionada con la causa de la emancipación del


proletariado desde hace tiempo. A principios del siglo XIX el anarquista Johan Most la
utilizaba en América para nombrar una de las características del comunismo libertario, y
en 1920 el marxista Karl Korsch designaba la "autonomía industrial" como una forma
superior de socialización.

El teórico de los Consejos Obreros, Pannekoek, habla de autoactividad refiriéndose a “la


acción independiente de los trabajadores, lo que a la postre es la autonomía obrera”.68

Al derecho a la sindicalización le corresponde al individuo y así se proclama


constitucionalmente, el resultado de ello es que el sindicato constituya una organización
autónoma a la cual se le faculta a dictar sus propias normas y cuyo imperio nace de la
misma condición de autonomía de que el sindicato disfruta como grupo social.69

En resumen, la autonomía sindical es el derecho de los trabajadores y sus sindicatos a


conducirse con independencia del patrón, del gobierno y de los partidos políticos, es el
derecho a que ningún poder externo intervenga de alguna manera en su vida interna,
mucho menos violente sus estatutos, normas propias que se han dado los trabajadores
para regular el funcionamiento de sus organizaciones y elegir a quienes les representen.

Este principio asume cierta importancia en la vida interna y externa del sindicato, pues se

68
Véase.- Ensayo: M. Amorós. ¿Qué fue la autonomía obrera? Charla en la nave ocupada La Rabia, de
Barcelona, 23 de enero de 2005, publicada en http://www.klinamen.org/textos/charlaautonomia.pdf. Portal
revisado el domingo 22 de marzo de 2009.
69
Cfr. BERMÚDEZ CISNEROS, Miguel. Óp. Cit., pág. 285

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rige por la voluntad mayoritaria de todos sus afiliados, mediante los mecanismos y
procedimientos establecidos en el Estatuto Sindical, bajo los principios del voto libre,
secreto, directo y universal de todos sus afiliados.

Porque son los propios trabajadores con su participación quienes deciden con base en su
Estatuto Sindical la vida de su organización. Eligen a sus representantes, los revocan o
destituyen y determinan cuáles son las demandas por las que van a luchar.

Las únicas que deciden son las mayorías, sin intromisiones, en la vida interna de las
organizaciones sindicales.

Principio de democracia sindical.

El principio de democracia sindical puede ser explicado a partir del poder soberano de las
mayorías, porque el sindicato surge de la mayoría expresada en una asamblea, en el
seno sindical, la asamblea es el órgano máximo del sindicato.

Para la praxis sindical, no es la violación de los derechos de la asamblea lo que preocupa,


sino el que con frecuencia aparezcan quebrantamientos en la interrelación que debe
existir entre la asamblea y la directiva sindical, irregularidades que se presentan bien por
una directiva y que trata de ignorar el poder fundamental de la asamblea, o porque la
colectividad esté tan deficientemente integrada que aun siendo una mayoría no parezca
más que una minoría. En un ambiente sindical con los aspectos anteriores se vivirá un
sindicalismo insano, guiado por una directiva prepotente que conducirá siempre a la
organización hacia fines particulares, divorciada del poder de la asamblea.70

Las rupturas sindicalistas se deben a una mala organización, administración e integración


de los representantes de un sindicato.

1.2.8 La Huelga.

La huelga es un derecho de los trabajadores como colectividad como coalición, de


ninguna manera es una potestad individual para laborar o no laborar. Su fundamento
jurídico lo encontramos en las fracciones XVII y XVIII del artículo 123 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Una huelga es una acción emprendida de forma individual, o por un colectivo social,
consistente en dejar de hacer alguna actividad o función individual o colectiva, con objeto
de ejercer una presión social y alcanzar, así, un objetivo concreto.

70
Cfr. BERMÚDEZ CISNEROS, Miguel. Óp. Cit., pág. 285

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La huelga también puede definirse como: “toda perturbación producida en el proceso


productivo y principalmente la cesación temporal del trabajo, acordado por los
trabajadores, para la defensa y promoción de un objetivo laboral o socioeconómico”71.

El profesor Mario De la Cueva define a la huelga como: “el ejercicio de la facultad legal de
las mayorías trabajadoras para suspender las labores en las empresas, previa
observancia de las formalidades legales, para obtener el equilibrio de los derechos e
intereses colectivos de los trabajadores y patrones”.72

Internacionalmente la huelga es reconocida como un derecho fundamental de los


trabajadores (derecho de huelga), constitutivo de la libertad sindical. Consiste
básicamente en dejar de trabajar con el objetivo de conseguir ventajas laborales o
sociales.

Según la Organización Internacional del Trabajo, el derecho de huelga es uno de los


medios legítimos fundamentales de que disponen los trabajadores y sus organizaciones
para la promoción y defensa de sus intereses económicos y sociales.73

Normalmente se emplea como medio de ejercer presión en las negociaciones con el


empleador, para obtener una mejora en las condiciones laborales, pero ocasionalmente
se utiliza como represalia con otros fines.

Desde el punto de vista legal, la huelga es la suspensión temporal del trabajo llevada a
cabo por una coalición de trabajadores.

Para los efectos de la huelga se entenderá que el sindicato es una coalición permanente.

Como conclusión podemos decir que, la huelga es la suspensión concertada del trabajo,
llevada a cabo para imponer y hacer cumplir condiciones de trabajo, que respondan a la
idea de la justicia social, como un régimen transitorio, en espera de una transformación de
las estructuras políticas, sociales y jurídicas, que pongan la riqueza y la economía al
servicio de todos los hombres y de todos los pueblos, para lograr la satisfacción integral
de su necesidad.

1.2.8.1 Justificación de la Huelga.

El desequilibrio entre los factores de producción, derivado del aumento del costo de la

71
JARDON ARANGO, Ignacio. Marxismo y Filosofía en Gramsci, Parteluz, España, Madrid, 1995, pág. 220.
72
DE LA CUEVA, Mario. Óp. Cit., pág. 331
73
Véase.- www.ilo.org/global/lang--es/index.htm. Portal de la Organización Internacional del Trabajo. Sección
Huelga. Fecha de visita: domingo 22 de marzo de 2009.

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vida, trae como consecuencia el surgimiento de la huelga.

La Constitución Federal al referirse a las huelgas, determina que se producen cuando


tengan por objeto conseguir el equilibrio entre los factores de la producción armonizando
los derechos del trabajo con los del capital, lo cual es una declaración general que se
encuentra reproducida y reglamentada por la Ley Federal del Trabajo.

En el Titulo Séptimo, Capítulo VI, articulo 426 de la Ley en estudio, se reconoce el


derecho a los sindicatos de trabajadores o patrones para solicitar a las Juntas de
Conciliación y Arbitraje las modificaciones de las condiciones de trabajo, cuando existan
circunstancias económicas que lo justifiquen, lo que indica que dentro de las relaciones
laborales se dan circunstancias internas o externas que alteran el equilibrio dentro de los
factores de producción y a ello concretamente se refiere la fracción II del propio precepto,
que expresamente señala que el aumento del costo de la vida origina un desequilibrio en
el capital y el trabajo.

En el mes de febrero de 1917 se consolido la naturaleza jurídico constitucional de la


trilogía del derecho colectivo de trabajo: sindicato, contrato colectivo y huelga. Nos parece
que podríamos cambiar aquí la colocación de los ángulos: la sindicación y las
convenciones colectivas son derechos sustantivos, en tanto la huelga es un derecho
adjetivo e instrumental, en el sentido de que es un procedimiento para imponer una
solución sustantiva. Por lo tanto el nuevo triangulo seria: la sindicación y las convenciones
colectivas los ángulos sustantivos de base y la huelga el ángulo tercero., cuya misión
consistiría en la contemplación de las vibraciones sociales y económicas para conquistar,
en lucha con el capital, la mejor realización de los principios sindicales y la fijación de
condiciones humanas de prestación del trabajo.

A partir de la Declaración de los Derechos del Hombre y Ciudadano, la Huelga ha sufrido


una transformación radical: la mayoría de los trabajadores pueden suspender las
actividades de la empresa o establecimiento, en la inteligencia de que el patrono y la
minoría disidente están obligados a respetar la decisión.

La huelga pertenece a la esencia misma del derecho del trabajo, porque la historia
muestra que es la garantía mejor para la creación y aplicación de un derecho que se
aproxime a la idea de la justicia social. Por lo tanto, y teniendo a la vista las normas
constitucionales afirmamos, que cualquier medida para evitar o limitar su ejercicio violaría
la esencia de nuestra Carta Magna.

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Ahora bien, con fundamento en el artículo 446 de la Ley de la materia, la huelga


justificada es aquella cuyos motivos son imputables al patrón.

De acuerdo con Roberto Báez Martínez, “para que se dé la huelga es necesario que el
patrón incumpla con sus obligaciones individuales y colectivas”.74

1.2.8.2 Objetivo de la Huelga.

La Huelga tiene por objetivo:

• Conseguir el equilibrio entre los diversos factores de la producción, armonizando los


derechos del trabajo con los del capital.

• Obtener del patrón o patrones la celebración del contrato colectivo de trabajo y exigir su
revisión al terminar el período de vigencia.

• Obtener de los patrones la celebración del contrato ley y exigir su revisión al terminar el
periodo de su vigencia.

• Exigir el cumplimiento del contrato colectivo de trabajo o del contrato-ley en las


empresas o establecimientos en que hubiese sido violado.

• Exigir el cumplimiento de las disposiciones legales sobre participación de utilidades.

• Apoyar una huelga que tenga por objeto alguno de los enumerados anteriormente.

• Exigir la revisión de los salarios contractuales a que se refieren los artículos 399 Bis y
419 Bis.

En el primer supuesto, tanto el sindicato como la coalición pueden ejercitar el derecho de


huelga.

En el segundo supuesto, sólo el sindicato podrá suspender las labores en la empresa o


establecimiento. Conforme a la tesis 38/97, existe la obligación del Presidente de la Junta
de Conciliación y Arbitraje cerciorarse de la inexistencia de algún contrato colectivo
previo, pues si su otorgamiento es la única finalidad de la suspensión de labores y debe
darse por concluido el procedimiento relativo.

En la tercera hipótesis, únicamente el sindicato podrá ejercitar el derecho de huelga.

En cuanto al cuarto caso, solamente el sindicato podrá hacer uso del derecho de huelga.

En el quinto supuesto, la coalición de trabajadores o el sindicato podrán ejercitar el

74
Ley Federal del Trabajo. Comentada por Roberto Báez Martínez, PAC, México, DF., 2006, pág. 621.

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derecho de suspensión de actividades.

En el sexto supuesto, tanto el sindicato como la coalición podrán hacer estallar la huelga.

En el último caso, se podrá exigir la revisión de salarios contractuales a través del


sindicato, quien tendrá la facultad de ejercitar el derecho a huelga.

1.2.8.3 Procedimiento y calificación de la Huelga.

Antes de explicar la calificación de la Huelga es necesario señalar las etapas del


procedimiento de Huelga.

• Gestación.- La gestación comienza en una asamblea, previamente convocada, en


donde la mayoría de los trabajadores deciden emplazar a huelga, elaborando así su
escrito petitorio describiendo el objeto y fecha del estallamiento de la huelga.

• Prehuelga.- Esta etapa comienza con la presentación del pliego petitorio a las
autoridades o al patrón. Esta fase que tiene por objeto avenir a las partes mediante la
celebración de una audiencia conciliatoria.

• Suspensión de labores o huelga.- En esta etapa, deben suspenderse las actividades


precisamente el día y hora señalados (se acostumbra colocar banderas rojinegras como
símbolo del ejercicio del derecho) de lo contrario se estima que desapareció la voluntad
mayoritaria de los trabajadores.

• Calificación de la huelga.- En esta etapa la autoridad laboral analiza el comportamiento


de los sujetos, valorando su conducta, es decir, la actividad del tribunal se desarrolla con
posterioridad al estallamiento del movimiento huelguístico.75

De conformidad con el artículo 923 de la Ley, no se dará trámite al escrito de


emplazamiento de huelga cuando éste no sea formulado conforme a los requisitos
señalados por el artículo 920 (requisitos de forma), sea presentado por un sindicato no
titular del contrato colectivo o contrato-ley o cuando se demande la firma de un contrato
colectivo y ya exista uno depositado en la Junta; en este sentido, el Presidente de la Junta
deberá cerciorarse de lo anterior y, en su caso, resolver y notificar el acuerdo de
desechamiento al promovente.

La disposición anterior faculta al Presidente de la Junta para que califique los requisitos
de fondo y requisitos de forma de la huelga, no obstante que de los artículos 444 y 459 se
advierte que la Junta califica a una huelga cuando esa huelga ha sido decretada y que la

75
Cfr. DÁVALOS, José. Óp. Cit., págs. 72 y 75.

60
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Junta, no el presidente de la misma, es la titular de la facultad para calificar la inexistencia


de la huelga.

Además, la propia ley en el artículo 926 dispone que durante el período de prehuelga la
Junta no prejuzgue sobre la existencia o inexistencia de la huelga. De esta manera, el
artículo 923 limita al derecho de huelga establecido en las fracciones XVII y XVIII del
artículo 123 constitucional, autorizando que se deseche el emplazamiento y evitando así
que nazca la huelga.

La Huelga puede ser calificada de existente o inexistente.

A. Una Huelga es existente cuando cumple con los requisitos de forma y fondo
contemplados en los artículos 450 y 920 de la Ley Federal del Trabajo.

B. La Huelga inexistente si se dan los siguientes supuestos legales:

• Si la suspensión de labores se realizó por los trabajadores que no representan la


mayoría en la empresa o establecimiento.

• Si carece de objeto legal.

• De no cumplirse los requisitos formales.

• No puede declararse la inexistencia por causas diversas de las expuestas en la solicitud.

• De no solicitarse la declaración de inexistencia, la huelga será considerada para todos


los efectos legales conducentes por haberse concedido tácitamente.

Por otra parte, existe la figura de la Huelga ilícita, la cual tiene lugar:

• Cuando la mayoría de los huelguistas ejecuten actos violentos en contra de las personas
o propiedades de la empresa.

• En caso de guerra, cuando los trabajadores pertenezcan a establecimientos o servicios


que dependan del gobierno.

1.2.8.4 Terminación de la Huelga.

Son causas de terminación de la Huelga:

• Acuerdo entre las partes.

• Allanamiento del patrón, siempre y cuando cubra a los trabajadores los salarios dejados
de percibir.

• Por laudo arbitral de la persona o comisión elegida por las partes para tal efecto.

61
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

• Por laudo de la junta de conciliación y arbitraje, en el caso de que los trabajadores


huelguistas sometieran sus diferencias al arbitraje de la autoridad.

• El desistimiento de la acción, si así lo decide la autoridad o el patrón tiene la voluntad de


reanudar actividades.

1.2.8.5 Patrimonio sindical.

El maestro Mario de la Cueva, considera que el patrimonio de los sindicatos tiene dos
aspectos uno activo y otro pasivo:76

a) Patrimonio activo, que son los bienes y derechos y lo constituyen las cuotas sindicales,
y que están consisten en un porcentaje sobre el salario que aportara periódicamente cada
trabajador al Sindicato del que forme parte, y que suele retener el patrón del salario del
mismo, para esa finalidad, sobre la forma del pago y monto de las cuotas sindicales, estos
descuentos están autorizadas por la Ley Laboral, con la salvedad de que los trabajadores
que devenguen únicamente el salario mínimo estarán exentos de ese pago.

La cuota en consecuencia, es una aportación del trabajador al sindicato para subvenir a la


subsistencia del mismo y a las actividades que tiene que desarrollar, el patrimonio debe
aplicarse a los fines del sindicato, y a tal efecto la directiva está obligada a la rendición de
cuentas a la asamblea.

b) Patrimonio pasivo, que son las deudas y cargas.

1.2.8.6 Contrato ley.

La definición que nos da la ley de contrato colectivo y contrato ley coinciden en todo. Una
y otra se refieren a una rama determinada de la industria, en una circunscripción territorial,
o en el país. El propósito es uniformar las condiciones de trabajo en ciertas categorías
profesionales o ramas de la industria.

Este instrumento es una consecuencia, un estado superior, en la evolución del contrato


colectivo. Así se le considera como un elemento democratizador que unifica las
condiciones generales de trabajo en las diferentes ramas de la industria y el comercio.

Esta figura no es más que un pacto que los sindicatos de trabajadores pueden negociar
con los patrones o imponérselo mediante la huelga, en realidad constituye un instrumento
concertador del Estado, que dentro de nuestro sistema, garantiza su plena ingerencia y

76
Cfr. DE LA CUEVA, Mario. Óp. Cit. p. 360

62
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

capacidad de decisión.77

En nuestra legislación laboral mencionan y regulan los principios generales, ante que
autoridades se presentará la solicitud para que nazca el contrato ley, el contenido legal
que contendrá todos los datos como son el nombre, domicilio, duración, reglas, planes,
cláusulas de admisión y exclusión, debiendo respetar diferentes normas, estableciendo a
partir de cuándo empezará a surtir efectos, teniendo una diferencia del contrato colectivo
y el contrato-ley, este último no tiene titular si no que es "administrado" por el Sindicato
que demuestre tener mayoría. Se establece la duración, vigencia y terminación del
mismo.

El contrato-ley es el grado mayor en la evolución del contrato colectivo de trabajo; nace de


éste, pero se independiza y deviene una institución con perfiles propios; su propósito de la
unificación nacional de las condiciones de trabajo, para conseguir iguales y mejores
beneficios a todos los trabajadores, para obtener la estabilidad de las mismas condiciones
de trabajo, para unir a los trabajadores de distintas empresas por el interés económico
común y para evitar la concurrencia desleal entre los empresarios.

El contrato-ley es el último peldaño en la evolución de las convenciones colectivas.


Constituye un grado próximo a la ley, pues si ésta se extiende a todos los trabajadores
estableciendo sobre los mínimos constitucionales, el mínimo legal en la República para
todas las prestaciones de servicios, el contrato ley se eleva sobre los mínimos
constitucionales, Internacionales y legales, a fin de ofrecer a los trabajadores de cada
rama de la actividad económica y social, mediante una renovación periódica, niveles de
vida más justos.

Sus grandes propósitos son la unificación regional y nacional de las condiciones de


trabajo, como el esfuerzo más noble para realizar el principio de igualdad de todos los
seres humanos y conseguir, en función de esa idea, la unión de los trabajadores de las
distintas empresas de cada rama de la actividad económica y social. Es la más fuerte
manifestación en el campo del derecho del trabajo, de la unidad de la clase trabajadora,
que actualiza en él, el derecho de los trabajadores a un nivel decoroso de vida. Es
asimismo, la convicción de que la unión de las fuerzas del trabajo en la lucha contra el
capital, es el camino mejor hacia la justicia social; si la unión de los trabajadores de cada
empresa ha sido y es un valor inestable, la unidad de trabajo en cada rama regional o
nacional de la actividad económica social, eleva ese valor en una proporción geométrica.
77
SANTOS AZUELA Héctor. Elementos de Derecho del Trabajo. Porrúa. México. 1994. p. 167

63
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Sus fórmulas de la idea de lo justo: en cualquier punto del territorio nacional, el hombre
debe tener las mismas oportunidades a una existencia decorosa; la concurrencia
económica entre las empresas no debe hacerse mediante la explotación de la mano de
obra.78

La Ley laboral, lo define como el convenio celebrado entre uno o varios Sindicatos de
patrones, con el objeto de establecer las condiciones según las cuales debe prestarse el
trabajo en une rama determinada de la industria, y declarado obligatorio en una o varias
Entidades Federativas, en una o varias zonas económicas que abarquen una o más de
dichas entidades, o en todo territorio nacional.

Los contratos colectivos con el simple depósito ante la Junta Federal o Local, entraran en
vigor, pero el Contrato-ley estará supeditado a la satisfacción de varios requisitos.

1.3 Contexto laboral.

1.3.1 Derecho sindical.

Dentro de este punto, una vez que ya analizamos lo que son los sindicatos o el concepto
de sindicato, entraremos a estudiar el Derecho Sindical. En este tema observamos que
alcance tiene este mismo y, que es lo que comprende y a quienes regula este derecho.

Derecho Sindical, A) es la norma que reglamenta la formación y función de las


asociaciones profesionales de trabajadores y patrones, B) sus relaciones en posición
frente al estado y C) los conflictos colectivos de trabajo.79

El concepto anterior nos habla de que el Derecho Sindical es un instrumento que regula a
los sindicatos de trabajadores y de patrones, es decir en el momento en que los obreros
tienen por objetivo formar o agruparse en una organización, para defender sus intereses
respectivos, y además también regula las relaciones de estos mismos con relación al
Estado.

En cierta manera se dice que regula la formación de los sindicatos de trabajadores y


patrones, porque muchas veces encontramos sindicatos que no cumplen con sus
objetivos, es decir que principalmente cuando se crea una organización de esta
naturaleza, es para proteger y ver por los intereses de los obreros, que consideramos que
es la principal función de dicha asociación profesional.

Podemos decir que el Derecho Sindical forma parte del Derecho Social, contenido en el
78
DE LA CUEVA, Mario. Óp. Cit. p. 485
79
Cf. De la Cueva, Mario. Óp. Cit. Tomo II, Pág. 294.

64
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

artículo 123 constitucional.

El Dr., Santos Azuela, dice que el Derecho Sindical, “es la disciplina jurídica que regula la
constitución y actividad de la asociación profesional por cuanto respecta a su relación y
proyección hacia el Estado”.80

El anterior concepto ordenamos que es una disciplina del derecho que abarca el público,
del trabajo y corporativo, el cual estudia y reglamenta el fenómeno jurídico del Derecho
Social, asociaciones y corporaciones profesionales y sus relaciones de éstas frente al
Estado. Por lo tanto el derecho sindical produce cierta injerencia en el trabajo organizado
y en cierta manera en la dirección de la empresa y vida de la misma.

Básicamente el Derecho Sindical, dentro del derecho del trabajo es un elemento


importante ya que sirve para asegurar y mejorar el contenido del Derecho Individual del
Trabajo y de la Seguridad Social.

Con esto queremos decir que es un instrumento que sirve para mejorar el estatus y
derechos Laborales y así elevar las condiciones de vida de los trabajadores y el respeto
de los mismos.

Al aparecer el Derecho Sindical, los trabajadores obtuvieron un triunfo, alcanzaron el


objetivo de defenderse contra el capital y presionar al Estado, para lograr así estructurar y
construir una sociedad mejor en que los obreros tengan un mayor desenvolvimiento,
aprovechamiento y rendimiento para ampliar el desarrollo de la misma sociedad, así
mismo dignificar su existencia.

Por su parte Carro Igelmo dice que el Derecho Sindical, “es la facultad de constituir
agrupaciones profesionales, así como de ejercitar los derivados de tales asociaciones”.81

El anterior concepto podemos notar que la libertad de asociación profesional da origen al


Derecho Sindical apreciamos este derecho se encuentra condicionado por una doble
presión; Por una parte surge una inserción en el orden general de las Ciencias Jurídicas,
esto lleva a remitir a los supuestos de autonomía, independencia, singularidad, etc., de
otra, desde el punto de vista sociológico del carácter asociativo o institucional que se le
atribuye al sindicato, con características de que es innegable, del cual depende la
genérica concepción del derecho regulador de aquel, su naturaleza, amplitud y limitación.

Al derecho Sindical lo podemos observar desde dos puntos de vista; el subjetivo y

80
Santos Azuela, Héctor. Curso Inductivo de Derecho Sindical y del Trabajo, ED. Porrúa, México, 2005.
81
Carro Igelmo, Alberto José. Introducción al Sindicalismo, s.e. España, 1971, Pág.11.

65
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

objetivo; desde el subjetivo este derecho no es exclusivo del individuo sino que, hay que
extenderlo a los demás derechos con los que cuentan las personas.

En cuanto al objetivo, el Derecho Sindical es igualmente a la organización y ordenamiento


estructural de las agrupaciones profesionales que lo alimentan y no limitándolo a una
regularización interna del sindicato, es decir que o hace una vida interior introspectiva,
esto es que su actividad sea interna, esta se proyecta hacia fuera robusteciéndose con
ello sus posibilidades de incidencia en la relación laboral.

1.3.2 Derecho obrero.

Se analizará al derecho obrero a través de la problemática de la denominación apropiada


de nuestra rama jurídica, Que ha originado que se le asigne con varios términos.

Entre los más usuales podemos mencionar los siguientes: Derecho Obrero, Derecho
Laboral, Derecho del Trabajo y Derecho Social.

Ahora procederemos al estudio de cada una de ellas. Apreciando la similitud o diferencia


de tos términos usados o si existe alguno que sea capaz de englobar a la rama jurídica
objeto de nuestro estudio.

El concepto obrero dice Roberto Muñoz Ramón:

Se refiere sólo a una rama de la clase trabajadora, o sea aquella que realiza una actividad
manual; en el caso, el concepto de trabajador es el género y el obrero una de sus
especies, por esta razón en la Ley Federal del Trabajo para designar a quien presta el
servicio, material o intelectual, siempre se utiliza el concepto trabajador. Con excepción
del Artículo 5o Fracción VI), en que se usó la palabra obrero para establecer el pago
semanario del salario de los trabajadores manuales.82

Por su parte, el jurista Néstor de 8uen, dice:

La expresión "Derecho Obrero" resulta ser limitada y peligrosa porque podría dar la idea
que no queda bajo la esfera jurídica de este término, la protección de los trabajadores no
manuales y los del campo.83

Nosotros, compartimos los anteriores criterios, toda vez que, como se apuntó en su
oportunidad; el término Derecho Obrero, resulta ser rechazado porque sus alcances son
limitados, al hacer únicamente referencia a la labor desarrollada por el trabajador de las

82
RAMÓN MUÑOZ. Roberto. Derecho del Trabajo, Tomo I, s/e, Porrúa, México, 1976, pág. 104.
83
DE BUEN L, Néstor. Derecho del Trabajo. Tomo I, octava edición, Poma. México 1991, págs. 27 y 28.

66
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

fábricas llamado comúnmente obrero. Dejando a un lado, actividades de otro tipo


previstas en la Ley Federal del Trabajo.

1.3.3 Derecho social.

El nombre más adecuado para nuestra rama jurídica debe ser aquél que refleje su
formación histórica, la materia de su regulación y su naturaleza jurídica actual.

Este término brota por la necesidad de dirimir la problemática social. Emana de la ruptura
de los cuadros corporativos y da pauta al nacimiento de la gran industria, agregando que
si social es el contenido del problema, social debe ser el derecho creado para su
resolución.

Sin embargo, el término Derecho Social resulta ser muy amplio para aplicarlo a la rama
jurídica.

Este concepto abarca todo lo concerniente al trabajo y a la seguridad social. También, el


término social abarca ramas jurídicas como el Derecho Agrario, Derecho Asistencial y
Derecho Económico, entre otros.

Coincidimos con el maestro Sánchez Alvarado, el cual cita: "es una denominación
demasiado amplia, abstracta, redundante e imprecisa, ya que el vocablo social es
demasiado amplio, todo derecho es social, no obstante; existe una corriente moderna que
considera al derecho social como una rama independiente del derecho público y del
derecho privado, siendo el derecho social el género y el derecho del trabajo la especie".84

1.3.4 Derecho laboral.

El Derecho Laboral puede considerarse como sinónimo en todo momento del Derecho del
Trabajo, argumento que expone el autor Roberto Muñoz Ramón, quien señala: "que este
término es utilizado desde 1929, introducido por el jurista José Castán Tobeñas. También
señala que el Diccionario de la Real Lengua Española utiliza el adjetivo laboral para
señalar: que es perteneciente o relativo al trabajo, en varios aspectos como el económico,
jurídico y el social."85

Podemos concluir, que el término laboral, puede ser utilizado como sinónimo del derecho
del trabajo, porque como se apuntó con anterioridad, éste no es contrario ni se
contrapone al de derecho laboral.

84
DAVALOS. José. Derecho del Trabajo I. óp. cit. pág. 13.
85
RAMÓN MUÑOZ. Roberto. Derecho del Trabajo, óp. cit. pág. 106.

67
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Aunque el Derecho Laboral y el derecho del trabajo llevan un mismo significado, parece
ser que los tratadistas se inclinan por usar el término derecho del trabajo, entre otras
razones, porque así se le denomina a la actual legislación: "Ley Federal del Trabajo".

1.3.5 Derecho del trabajo.

La denominación derecho del trabajo es la mejor acogida por los tratadistas, porque su
amplitud engloba todo fenómeno del trabajo bajo esta definición; pueden agruparse todas
las relaciones laborales.

La expresión derecho del trabajo invariablemente hace referencia al conjunto de normas


que regulan la relación de trabajo, surgida entre quien realiza una determinada actividad y
de aquella persona física o moral que demanda o requiere la concreción de dicha
actividad para la generación de un bien o la prestación de un servicio.

En el campo de la ciencia jurídica, el derecho del trabajo se define como el conjunto de


principios, instituciones y normas que pretenden realizar la justicia social dentro de las
relaciones laborales, a través de la defensa y promoción de las condiciones generales de
trabajo, y para que el mismo tenga una visión integral, debe ser entendido como
ordenamiento positivo y como ciencia86. Su estudio y análisis implica una consideración
de su origen, en especial del derecho del trabajo mexicano, y la descripción de su historia
reciente y principios rectores.

Podemos conceptuar al derecho del trabajo como:

El conjunto de normas relativas a las relaciones que directa o indirectamente derivan de la


libre, subordinada y remunerada prestación de servicios personales; cuya función es
producir el equilibrio de los factores en juego mediante la relación de justicia social.

A continuación, exponemos los motivos que nos llevan a denominar a la rama jurídica
como Derecho del Trabajo:

1). Aún cuando el término trabajo, no comprende cuestiones de seguridad social, las
relacionadas con este concepto, tales como: riesgos profesionales, seguro social, fondo
de ahorro, habitaciones y otros; tienden a independizarse de la rama del derecho del
trabajo para integrarse a otra disciplina jurídica y autónoma de aquella que se denomina
derecho de la seguridad social.

2). El Artículo 123 Constitucional, plantea las bases de ésta y las intitula: "Del Derecho y
86
Cfr., Santos Azuel, Héctor, “Derecho del Trabajo”, en Lastra Lastra, José Manuel (coord.), Diccionario del
Derecho del Trabajo, Porrúa, México, 2001, p. 68.

68
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

la Previsión Social donde se codifica nuestra legislación laboral y se denomina Ley


Federal del Trabajo.

1.3.5.1 Surgimiento del derecho del trabajo.

En esencia, el derecho del trabajo surgió como consecuencia de la aparición de grupos


sociales homogéneos económicamente desvalidos y a la toma de conciencia de clase que
se contrapone al liberalismo económico y egoísmo de la clase empresarial, lo que origina
una desigualdad social; aspecto que parece ser el único que se presenta en cada
momento de la historia y en cada rincón del mundo de todas las épocas y de todos los
lugares. El desarrollo del derecho del trabajo es, finalmente, la historia del trabajo humano
como actividad aplicada a la utilidad y es la historia de su formación como sistema de
derecho, y, por tanto, su origen se remonta a la vida misma;87 Sin embargo, es necesario
acotar su aparición formal en términos de tiempo y espacio.

El surgimiento del derecho del trabajo se ubica en Europa durante el siglo XIX, a raíz de
ciertos hechos sociales que ponen de manifiesto condiciones deplorables de los
trabajadores y las desigualdades sociales entre quienes detentan la propiedad de los
medios de producción y de aquéllos que sólo tienen su fuerza de trabajo.

Como un punto de referencia cronológica, Baltasar Cavazos Flores dice que es en


Inglaterra con la llamada Revolución Cartista, por el hecho de referirse a las cartas
dirigidas al Parlamento de 1842, donde apareció el derecho del trabajo.88

En el escenario político social europeo del siglo XIX, así como en los Estados Unidos de
Norteamérica, el derecho del trabajo tuvo que romper el embrujo del pensamiento
individualista y social, a fin de imponerse a la burguesía y a su estado, a través de las
armas que le permitía el Estado y el derecho a la manifestación pública y pacífica y las
peticiones a la autoridad y otras que no eran lícitas, como la asociación sindical no
autorizada y la huelga. Esa lucha obrera persiguió tres metas fundamentales: a) las
libertades, sindical, de negociación y contratación colectiva, b) un derecho individual del
trabajo que propiciara un mínimo de justicia social, y c) una previsión social que
defendiera a los hombres contra las consecuencias de los infortunios del trabajo.89

87
Cfr., Kurczyn Villalobos, Patricia, “Razón de ser del derecho del trabajo”, Revista Jurídica, Boletín Mexicano
de Derecho Comparado, México, año 1995, núm. 82, revisado el 07/02/2007 en
http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/boletin/cont/82/art/art7.htm.
88
Cfr. Cavazos Flores, Baltasar, 40 Lecciones de Derecho del Trabajo, novena edición, Trillas, México, 2005,
p. 22.
89
Cfr., De la Cueva, Mario, óp. cit., nota 74, pp. 1213.

69
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La aparición y formación del derecho del trabajo se explica en tres etapas o estadios: la
primera denominada la era heroica, concomitante al desarrollo del capitalismo salvaje,
que se caracteriza por la gestación del movimiento obrero y la acción represiva del Estado
en complicidad con el empresariado; la etapa de la tolerancia, en la que el Estado cesa la
acción persecutoria en contra de los movimientos obreros, pero la clase patronal utiliza
golpeadores para combatir a los trabajadores; y la etapa de la reglamentación o de
reconocimiento en la legislación ordinaria de los derechos laborales y de los principios e
instituciones, que caracterizarían al nuevo derecho del trabajo como un estatuto jurídico
de protección y defensa para los trabajadores.90

En la denominada era heroica se luchaba por la idea del derecho del trabajo, pues las
libertades, sindical, de huelga y de negociación y contratación colectiva son su finalidad
inmediata, la condición para que pudiera nacer el derecho sustantivo en una sociedad en
la que su estado era impotente frente a la fórmula de laiserfaire, laiserpaser de los
fisiócratas. Fue en Inglaterra donde se conquistaron las libertades colectivas.91

Con la aparición en 1848 del Manifiesto comunista, que marca la entrada del marxismo a
la lucha de clases como el pensamiento básico de los trabajadores, y las revoluciones
europeas de mediados del siglo XIX, se da el tránsito a la era de la tolerancia; es así, que
la edad heroica concluyó con el reconocimiento de las libertades de coalición y asociación
sindical; en 1824 el Parlamento inglés reconoció la libertad de asociación; Francia esperó
hasta el año de 1864 la derogación de las normas penales que sancionaban la formación
de los sindicatos y la aparición de huelgas; en Alemania la evolución fue más compleja y
en 1872 una ley del recién formado imperio generalizó las libertades. Los trabajadores
pudieron asociarse libremente, sin temor a ser perseguidos y sin que el Estado pudiera
impedir su formación, pero las reformas a las leyes penales y la consiguiente libertad de
asociación, no trajeron consigo su reconocimiento legal como personas jurídicas a las
recientes asociaciones; razón por la cual los empresarios no estaban obligados a negociar
o contratar colectivamente las condiciones de trabajo.92

La etapa de la reglamentación o del reconocimiento de las instituciones y de los principios


fundamentales del derecho del trabajo, se identifica de igual forma en el siglo XIX;
destacan las acciones del Imperio Alemán, el cual se constituyó en 187193, donde

90
Cfr., Olvera Quintero, Jorge, óp. cit., nota 35, pp. 2324.
91
Cfr., De la Cueva, Mario, op.cit ., nota 74, pp.1516.
92
Cfr., Ibídem, pp.1618.
93
Cfr., Wikipedia enciclopedia libre, “Alemania”, revisado el 27/03/2007 en

70
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Bismarck comprendió la misión que desempeñaba la burguesía y se puso a su servicio


para que se lanzara a la lucha económica y a la conquista de los mercados
internacionales, pero se percató que la prosperidad de la economía no podía fincarse
sobre la miseria de las masas e inició la llamada política social , primer apartamiento
general de los principios de la Escuela económica liberal; una política que llevaría a una
nueva actitud del poder público, el intervencionismo de estado . En 1881 Bismarck
anunció la institución de los seguros sociales y años más tarde el Reichstag revisó la ley
de 1869 referente a la reglamentación de las relaciones de trabajo del siglo XIX94.

Posterior a la primera guerra mundial, en Europa se dan dos acontecimientos


trascendentales para la evolución del derecho del trabajo: la creación de la Organización
Internacional del Trabajo en el Tratado de Versalles de 28 de junio de 1919 y la
promulgación de la Constitución alemana de Weimar el 11 de agosto de 1919, la que
dedicó un capítulo a los derechos del trabajo; esta nueva manera de ser del derecho del
trabajo confirmó la tesis de Gustav Radbruch acerca del derecho social del porvenir95 ;
quien mencionó que el derecho social no es simplemente la idea de un Derecho especial
destinado a las clases bajas de la sociedad, sino que envuelve un alcance mucho
mayor.96

Para el caso de México, se encuentran antecedentes de la etapa de la prohibición del


derecho del trabajo mexicano en el código penal de 1872, el cual impuso a aquellos que
cerraran una negociación, un confinamiento de ocho días y una multa por la realización de
tal acto. De hecho México no recorrió la etapa de la prohibición y entró inmediatamente a
la etapa de la tolerancia, en razón que figuras como la asociación profesional y la huelga
no se encontraban prohibidas.

Los códigos civiles de 1870 y 1884 toleraban la asociación profesional y la huelga,


aunque esto no implicara que dichas figuras constituyeran un derecho para los
trabajadores.

Con la Constitución de 1917, en especial su artículo 123, se inicia la etapa de la


reglamentación del derecho del trabajo en virtud de que se constituye como una parte de
las garantías sociales de los hombres; en la carta magna se reconocen los aspectos
relativos al derecho individual y al colectivo del trabajo. En las dos leyes legislativas de

http://es.wikipedia.org/wiki/Alemania.
94
Cfr., De la Cueva, Mario, op.cit ., nota 74, pp. 1819.
95
Cfr., Ibídem, pp. 2021.
96
Cfr., Sánchez Castañeda, Alfredo, Las transformaciones del derecho del trabajo, UNAM, Instituto de
Investigaciones Jurídicas, México, 2006, serie Doctrina Jurídica, núm. 342, pp. 34.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1931 y de 1970, se reconoce y se reglamenta el derecho a un trabajo con una


remuneración justa, el derecho a la estabilidad laboral, el derecho de poder formar
coaliciones o sindicatos, el derecho de negociar colectivamente y, entre otras cosas, el
derecho a la huelga.97

Durante la segunda mitad del siglo XX se manifiesta la crisis del Estado interventor o de
bienestar, las políticas nacionales como internacionales sufrieron una transformación
diametralmente distinta en las que en ese momento eran utilizadas, ya que se inició un
proceso de globalización económica, en donde muchos conceptos, como la soberanía
nacional, antes inmutables, tuvieron que ser replanteados ante la creación de una
sociedad internacional más integrada. En dicho periodo se manifiestan cambios radicales
en la organización del trabajo e innovaciones tecnológicas, amén de la economía de
mercado, que dan origen a la nueva era de la historia del derecho del trabajo: la
flexibilidad laboral98.

En la etapa de la flexibilidad laboral, el estado regresa al libre mercado, al libre juego de la


competencia, pero ahora dentro de un proceso de internacionalización y liberalización del
comercio a nivel mundial. Hacia finales del siglo XX el Estado se encuentra inmerso en un
proceso de desregulación y de transnacionalización de las economías locales, en donde
la mundialización de las economías nacionales se manifiesta a través de varias formas:
por medio del nacimiento y expansión de las empresas multinacionales, los movimientos
migratorios, y, entre otros, por los procesos de integración económica regional.

Las relaciones de trabajo adquieren otra forma en el nuevo plano de la economía y se


caracterizan por la inestabilidad en el empleo y la precarización del mismo, y la
desindexación automática de los salarios en función de la evolución del costo de la vida.

1.3.5.2 Principios del derecho del trabajo.

Al hablar de principios se hace referencia a lo que da sustento, origen o razón a “algo”, y


al relacionarlos a la expresión derecho del trabajo se hace mención a sus fundamentos
connaturales.

El término principio deriva del latín principium, de princepsipis príncipe, y en tiempos


históricos significó “comienzo y origen”; en la época clásica se usó el plural
principioaorum, para designar una norma o principio; así mismo, denota el origen y
desarrollo de criterios fundamentales expresados en reglas o aforismos que tienen
97
Cfr., Ibídem, p. 5.
98
Cfr., Ibídem, p. 6.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

virtualidad y eficacia propia, su más pura esencia responde a una general aspiración que
se “traduce en la realización de su contenido99”.

Plá Rodríguez100 señala que los principios del derecho del trabajo son las líneas
directrices que informan algunas normas e inspiran directa o indirectamente una serie de
soluciones, por lo que pueden servir para promover y encauzar la aprobación de nuevas
normas, orientar la interpretación de las existentes y resolver los casos no previstos, y
describe estos principios como principios jurídicos, normativos, indeterminados y de
relajamiento.

Para el mismo autor, 101un principio es algo más general que una norma porque sirve para
inspirarla, para entenderla, para suplirla, y constituyen el fundamento del ordenamiento
jurídico del trabajo, por lo que no puede haber contradicción entre ellos y los preceptos
legales, y enumera los siguientes principios:

1. Principio protector, el cual se concreta en tres ideas:

a) in dubio, pro operario;

b) regla de la aplicación de la norma más favorable

c) regla de la condición más beneficiosa

2. Principio de la irrenunciabilidad de los derechos.

3. Principio de la continuidad de la relación laboral.

4. Principio de la primacía de la realidad.

5. Principio de la razonabilidad.

6. Principio de la buena fe.


102
El principio protector se refiere a la protección que se otorga al trabajador; da
preferencia a una de las partes, con la finalidad de crear igualdad sustantiva y real entre
las partes; el fundamento de este principio estriba en el propósito de nivelar
desigualdades, que no consiste en igualar a las personas, sino en la nivelación de las

99
Cfr., Lastra Lastra, José Manuel, “Principios ordenadores de las relaciones de trabajo”, Boletín Mexicano de
Derecho Comparado, núm. 100, 2001, revisado el 12/04/2007 en
http://www.jurídicas.unam.mx/publica/rev/boletin/cont/82/art/art7.htm
100
Cfr., Plá Rodríguez, Américo, Los principios del derecho del trabajo, segunda edición, Depalma, Argentina,
1978, p. 9.
101
Cfr. Ibídem, pp. 1019.
102
Cfr., Reynoso Castillo, Carlos, “Prólogo”, en Sánchez Castañeda, Alfredo, Las transformaciones del
derecho del trabajo, UNAM, Instituto de Investigaciones Jurídicas, serie Doctrina Jurídica, núm. 342, México,
2006, p. XX.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

desigualdades. La necesidad de protección del trabajador tiene un doble fundamento: el


signo distintivo del trabajador es su dependencia, su sometimiento a las órdenes del
empleador. Esa dependencia afecta a la persona del trabajador, y la dependencia
económica que si bien no es conceptualmente necesaria, se presenta en la gran mayoría
de los casos, pues en general sólo pone su fuerza de trabajo al servicio de otro, y se ve
obligado a ello para la obtención de sus medios de vida.

Se identifican tres formas de aplicación del principio protector: a) la regla in dubio pro
operario , criterio que debe utilizar el juez o el intérprete para elegir entre varios sentidos
posibles de una norma, aquel que sea más favorable al trabajador; b) la regla de la norma
más favorable , determina que en el caso de que haya más de una norma aplicable, debe
optarse por aquella que sea más favorable aunque no sea la que hubiese correspondido
de acuerdo a los criterios clásicos de la jerarquía de las normas; y c) la regla de la
condición más beneficiosa , criterio por el cual la aplicación de una nueva norma laboral
nunca debe servir para disminuir las condiciones más favorables en que pudiera
encontrarse el trabajador103. En el artículo 6º de la Ley Federal del Trabajo se señala lo
relativo a la condición más beneficiosa:

Artículo 6o.Las Leyes respectivas y los tratados celebrados y aprobados en los términos
del artículo 133 de la Constitución serán aplicables a las relaciones de trabajo en todo lo
que beneficien al trabajador, a partir de la fecha de la vigencia.

El principio de irrenunciabilidad104 se refiere a la imposibilidad jurídica de privarse


voluntariamente de una o más ventajas concedidas por el derecho laboral en beneficio
propio, y al contrario de lo que ocurre en el derecho común donde rige el principio de
renunciabilidad, en el derecho del trabajo rige el principio opuesto, que es el de la
irrenunciabilidad; lo que se ha convertido en un principio propio del derecho del trabajo.105

En la Constitución Política Mexicana, específicamente en los incisos g) y h) de la fracción


XXVII del apartado “A” del artículo 123, se menciona lo tocante a la irrenunciabilidad:

XXVII. Serán condiciones nulas y no obligarán a los contrayentes, aunque se expresen en


el contrato:

a) Las que estipulen una jornada inhumana por lo notoriamente excesiva, dada la índole
del trabajo.

103
Cfr., Sánchez Castañeda, Alfredo, óp. cit., nota 112, p. 23.
104
Cfr., Ibídem, p. 24.
105
Cfr., Ibídem, pp. 2425.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

b) Las que fijen un salario que no sea remunerador a juicio de las Juntas de Conciliación y
Arbitraje.

c) Las que estipulen un plazo mayor de una semana para la percepción del jornal.

d) Las que señalen un lugar de recreo, fonda, café, taberna, cantina o tienda para efectuar
el pago del salario, cuando no se trate de empleados en esos establecimientos.

e) Las que entrañen obligación directa o indirecta de adquirir los artículos de consumo en
tiendas o lugares determinados.

f) Las que permitan retener el salario en concepto de multa.

g) Las que constituyan renuncia hecha por el obrero de las indemnizaciones a que tenga
derecho por accidente del trabajo, y enfermedades profesionales, perjuicios ocasionados
por el incumplimiento del contrato o por despedírsele de la obra.

h) Todas las demás estipulaciones que impliquen renuncia de algún derecho consagrado
a favor del obrero en las leyes de protección y auxilio a los trabajadores.

Asimismo, en el artículo 5º fracción XIII de la Ley Federal del Trabajo, se indica que no
producirá efecto legal, ni impedirá el goce y el ejercicio de los derechos, sea escrita o
verbal, la estipulación que establezca:

XIII. Renuncia por parte del trabajador de cualquiera de los derechos o prerrogativas
consignados en las normas de trabajo.

El principio de continuidad 121 parte de la consideración de que el contrato de trabajo es


un contrato de tracto sucesivo; es decir, que la relación laboral no se agota mediante la
realización instantánea de cierto acto sino que dura en el tiempo; el término “continuidad”
alude a lo que se prolonga, a lo que se mantiene en el tiempo, a lo que continúa; y es,
precisamente, esa la idea central que se quiere evocar con este principio establecido a
favor del trabajador. En consecuencia, puede no ser invocado ni ejercido por éste. Dicho
principio tiene los siguientes alcances: preferencia por los contratos de duración
indefinida, amplitud para la admisión de las transformaciones del contrato, facilidad para
mantener el contrato a pesar de los incumplimientos o nulidades en que se haya incurrido,
resistencia a admitir la rescisión unilateral del contrato por voluntad patronal,
interpretación de las interrupciones de los contratos como simples suspensiones y,
prolongación del contrato en casos de sustitución del empleador.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El alcance de la continuidad señalada en el principio anterior, se aprecia en los artículos


35, 36, 37, 38, y 39 de la Ley Federal del Trabajo:

Artículo 35.Las relaciones de trabajo pueden ser para obra o tiempo determinado o por
tiempo indeterminado. A falta de estipulaciones expresas, la relación será por tiempo
indeterminado.

Artículo 36.El señalamiento de un obra determinada puede únicamente estipularse


cuando lo exija su naturaleza.

Artículo 37.El señalamiento de un tiempo determinado puede únicamente estipularse en


los casos siguientes:

I. Cuando lo exija la naturaleza del trabajo que se va a prestar;

II. Cuando tenga por objeto substituir temporalmente a otro trabajador; y

III. En los demás casos previstos por esta Ley.

Artículo 38.Las relaciones de trabajo para la explotación de minas que carezcan de


minerales costeables o para la restauración de minas abandonadas o paralizadas, pueden
ser por tiempo u obra determinado o para la inversión de capital determinado.

Artículo 39.Si vencido el término que se hubiese fijado subsiste la materia del trabajo, la
relación quedará prorrogada por todo el tiempo que perdure dicha circunstancia.

Por lo que se refiere a la rescisión unilateral del contrato por voluntad patronal, la
Constitución Política Mexicana prevé que las diferencias o los conflictos entre el capital y
el trabajo, se sujetarán a la decisión de una Junta de Conciliación y Arbitraje, formada por
igual número de representantes de los obreros y de los patronos, y uno del Gobierno; de
manera específica el artículo 48 de la Ley Federal del Trabajo menciona lo siguiente:

Artículo 48.El trabajador podrá solicitar ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, a su


elección, que se le reinstale en el trabajo que desempeñaba, o que se le indemnice con el
importe de tres meses de salario.

Si en el juicio correspondiente no comprueba el patrón la causa de la rescisión, el


trabajador tendrá derecho, además, cualquiera que hubiese sido la acción intentada, a
que se le paguen los salarios vencidos desde la fecha del despido hasta que se
cumplimente el laudo.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El principio de primacía de la realidad106, significa que en caso de discordancia entre lo


que ocurre en la práctica y lo que surge de documentos o acuerdos, debe darse
preferencia a lo primero; es decir, a lo que sucede en el terreno de los hechos. La primera
razón de su fundamento resulta del principio de buena fe: la realidad refleja siempre
necesariamente la verdad; la segunda deriva del propio contenido de contrato que supone
actividad humana prolongada en el tiempo; y la tercera proviene de la desigualdad
económica y cultural que normalmente separa a las partes en el contrato de trabajo;
justamente esa desigualdad fue uno de los supuestos que dieron origen al derecho del
trabajo, que busca compensar con desigualdad jurídica la desigualdad económica inicial.

El principio de racionalidad107 estriba en la afirmación esencial de que el ser humano, en


sus relaciones laborales, procede y debe proceder conforme a la razón, este principio es
lo que se ha llamado la regla del equilibrio conveniente o de racionalidad o de las
relaciones sustanciales.

El principio de la buena fe108 subyace en todas las instituciones jurídicas, tiene suma
importancia en materia de interpretación de la ley, de los contratos, la posesión y la
prescripción, y se considera un principio rector de “todos los actos jurídicos”; se ubica en
la esfera de un valor fundamental, en el orden de la dignidad humana y jerarquía de los
valores jurídicos, en virtud de que implica la “presencia de vivencias axiológico jurídicas
de comunidad”. Engendra una norma completa que se eleva a la categoría de un principio
general de derecho: todas las personas, todos los miembros de una comunidad jurídica,
“deben comportarse de buena fe en sus reciprocas relaciones”.

El artículo 31 de la Ley Federal del Trabajo hace referencia a la buena fe respecto a los
contratos y las relaciones de trabajo:

Artículo 31.Los contratos y las relaciones de trabajo obligan a lo expresamente pactado y


a las consecuencias que sean conformes a las normas de trabajo, a la buena fe y a la
equidad.

Adicional a la anterior clasificación de los principios del derecho del trabajo, se identifican
los señalados por el Dr. Nestor de Buen, quien los califica de fundamentales e identifica
en la Ley Federal del Trabajo vigente: a) el equilibrio en las relaciones entre trabajadores

106
Cfr., Ibídem, pp. 2526.
107
Cfr., Ibídem, p. 26.
108
Cfr., Lastra Lastra, José Manuel, “La buena fe en el trabajo: ¿Un principio que se difumina?”, Derecho y
conocimiento: anuario jurídico sobre la sociedad de la información y del conocimiento, año 2005, núm. 3, pp.
121130, revisado el 12/04/2007 en http:/dialnet.inirioja.es/servlet/auto?codigo=94553.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

y patrones, como fin de las normas de trabajo (artículo 2º); b) el concepto de justicia social
(artículos 2º y 17); c) el trabajo como derecho y deber sociales (artículos 2º y 3º); la
libertad, la igualdad, la dignidad y la salud de los trabajadores como fines del derecho
laboral (artículo 3º).109

Ante los cambios que ha tenido el mundo del trabajo, con efectos adversos a instituciones
del derecho del trabajo, como el contrato de trabajo y la subordinación, se plantean
diversas interrogantes a la vigencia de los principios del derecho del trabajo y se llega a
afirmar de que en realidad sólo hay un gran principio del derecho del trabajo, que se
identifica con la razón de ser de esta rama del ordenamiento jurídico: el principio de
protección del trabajador;110 Del cual también se pone en duda su eficacia jurídica, en
virtud de los problemas que aquejan a la clase trabajadora en una economía neoliberal y
con una actitud de indiferencia del Estado por atender problemas como la disminución del
poder adquisitivo de los trabajadores, el desempleo y la economía informal, entre otros.

1.3.6 Cultura del trabajo.

La cultura como expresión de creencias, valores, prácticas, formas de organización y de


conciencia, entre otros aspectos, sólo se hacía corresponder a grandes grupos sociales y
no se pensaba en lo relativo a subgrupos como los obreros, y ante esta situación se optó
en hablar de culturas con adjetivos, como la cultura obrera.111

Al asociar la palabra cultura con el concepto trabajo se está vinculando la dinámica de un


grupo social dedicado a una actividad económica con la extorización de su estatus de
convivencia colectivo, interpretado como la suma de interrelaciones personales e
influenciado por factores exógenos inducidos o circunstanciales; estatus que se interpreta
en función de aspectos psicológicos, económicos y sociales, y refleja un determinado
comportamiento grupal en el presente y permite explicar su prospectiva en el futuro
inmediato.

1.3.6.1 Concepto de cultura del trabajo.

El diccionario de la Real Academia Española define a la cultura como él o artístico,


científico, industrial, en una época y de un grupo social; definición que se puede trasladar

109
Cfr., Sánchez Castañeda, Alfredo, óp. cit., nota 112, p. 26.
110
Cfr., Plá Rodríguez, Américo, óp. cit., nota 116, pp. 2223.
111
Cfr., Guadarrama Olivera, Rocío, “El debate sobre las culturas laborales: viejos dilemas y nuevos
desafíos”, en Guadarrama Olivera, Rocío (coord.), Cultura y trabajo en México: Estereotipos, prácticas y
representaciones , Universidad Autónoma Metropolitana – Unidad Iztapalapa, México, 1998, p. 27.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

al mundo del trabajo como cultura del trabajo o cultura laboral que se refiere al grupo
social de los trabajadores.

La cultura del trabajo, que incorpora la referente a la obrera, ha sido definida como la
configuración específica de reglas, normas y significados sociales del trabajo,
modificables e intercambiables, que caracterizan los espacios sociales del trabajo112. Es
así, que las personas al realizar las tareas propias del trabajo, ya sea en su individualidad
como en un esfuerzo colectivo, generan y desarrollan una cultura, hacen historia, buscan
ideales y transforman su conducta social; considerando al trabajo como una actividad
constante y permanente.113

En el contexto económico y político de la década de los 90s y principios del siglo XXI, se
afirmó que la solución a los problemas generados por los procesos de transformación o
reestructuración industrial se encuentra en el cambio de actitudes hacia el trabajo, así
como en las reglas y acuerdos que rigen el mundo laboral, y sin embargo, un análisis
crítico de dichos procesos no coincide exactamente con lo que dio por llamarse la “nueva
cultura laboral114”.

El surgimiento de lo que se puede llamar cultura obrera mexicana, se ubica en el entorno


laboral de los años comprendidos de 1860 a 1880, en los que se constatan expresiones
artísticas, educativas y literarias que contenían una serie de valores éticos y normas
estéticas, con un componente de marcada influencia del romanticismo europeo con una
ascendencia cultural hispánica, francesa e italiana, a través de compañías artísticas que
organizaban espectáculos y obras teatrales, en las que el público asistente eran
artesanos y operarios; así mismo, se incorpora en la cultura obrera mexicana el
nacionalismo cultural mexicano, que es parte del proceso de constitución del Estado
nacional y en el cual el liberalismo social mexicano descubrió las raíces de un México
independiente en las ideas de nacionalismo y emancipación mexicana.115

En los años señalados, con la promoción de los grupos mutualistas se identifican


acciones orientadas a la instrucción de las primeras letras, el aprendizaje de los oficios, la
creación artística y literaria de los trabajadores, donde es posible diferenciar los

112
Cfr., Ibídem, p. 28.
113
Cfr., Cfr., Kurczyn Villalobos, Patricia, óp. cit. nota 102, p. 1
114
Cfr., Guadarrama Olivera, Rocío, óp. cit., nota 127, pp. 3334.
115
Cfr., Trujillo Bolio, Mario, “El entramado de la cultura obrera entre los trabajadores urbanos”, en
Guadarrama Olivera, Rocío (coord.), Cultura y trabajo en México: Estereotipos, prácticas y representaciones ,
Universidad Autónoma Metropolitana – Unidad Iztapalapa, México, 1998, pp. 5556.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sentimientos, las desventuras, las formas de fraternidad, la veneración al trabajo, así


como las reivindicaciones laborales y la situación marginal de la mujer trabajadora.116

Caso especial es el trabajo de los mineros de fines del siglo XIX y de la primera década
del siglo XX, periodo en el cual se manifiesta la industrialización porfirista; los trabajadores
estaban lejos de ser una masa aislada * , ya que estaban a disgusto por las condiciones
en que se desarrollaba el trabajo debido a los requerimientos de calificación como por los
sistemas de trabajo prevalecientes, y conservaron un grado de control y participación en
su trabajo, de tal modo que lo veían como parte de una batalla colectiva. Por otro lado, si
se considera la importancia de la industria minera entre 1890 y la cuarta década del siglo
XX, se entiende que como clase trabajadora les resultaba difícil cambiar su status de
grupo y, en consecuencia, representaron una cultura de trabajo sui géneris, sin hacer de
lado el peligro que conlleva la naturaleza de sus labores.117

Para explicar la cultura del trabajo del siglo XX se hace necesario considerar la
importancia que tiene la cultura de una sociedad nacional en la manera de organizar,
realizar y evaluar el trabajo, lo cual se complica por la existencia de diversas culturas en
función de factores étnicos, geográficos, políticos, económicos, educativos y religiosos, en
un contexto socio histórico de 300 años de dominación, de lucha por la independencia, de
guerra entre conservadores y liberales, de invasión francesa y norteamericana, de los
años de la consolidación del Estado mexicano, del porfiriato, de la revolución social de
1910, del estado benefactor, de la industrialización del país, de los movimientos sociales,
de los vaivenes del modelo económico de corte neoliberal y de sus consecuentes crisis y
generación de problemas de aumento de pobreza, desempleo, economía informal,
deterioro del nivel de vida, inmigración e inseguridad.

Para entender la cultura laboral mexicana, es necesario hacer, por un lado, una
interpretación de la misma a través de estereotipos que tratan de aprender, de manera
general, los rasgos más singulares de la relación de los trabajadores mexicanos con su
trabajo y, por otro lado, el análisis de información empírica obtenida por medio de técnicas
de recopilación de datos y de encuestas, que permiten captar la diversidad de las
actitudes, valores y comportamientos hacia el trabajo.118

116
Cfr., Ibídem, p. 81.
117
Cfr., Cárdenas García Nicolás, “En busca de la identidad de los mineros mexicanos. De la masa aislada a
la comunidad diferenciada”, en Guadarrama Olivera, Rocío (coord.), Cultura y trabajo en México: Estereotipos,
prácticas y representaciones , Universidad Autónoma Metropolitana – Unidad Iztapalapa, México, 1998, p.
115.
118
Cfr., Robles Gil, Luis Reygadas, “Estereotipos rotos. El debate sobre la cultura laboral mexicana”, en

80
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

1.3.6.2 La cultura y el derecho del trabajo.

Durante las dos últimas décadas del siglo XX el trabajo de las personas se supeditó de
manera radical a los cambios e innovaciones tecnológicas y al desarrollo de los sistemas
de información, y se vio afectado por la globalización de la economía, la no intervención
del Estado en los aspectos laborales para garantizar un salario justo, y enfrentó los retos
de la calidad, la productividad y la competitividad a nivel local, regional, nacional e
internacional; pero siempre persistió en la clase obrera un constante reclamo por mejorar
sus condiciones de trabajo, mismas que eran diferentes en cuanto a la naturaleza de la
actividad económica de los centros de trabajo y la ubicación geográficas de los mismos,
como el caso de las maquiladoras de la frontera norte, y lo que se ha denominado cultura
del trabajo era, por tanto, distinta en los diferentes sectores económicos y en las distintas
zonas geográficas del territorio nacional, y los estereotipos que se habían acuñado de
manera errónea (trabajadores flojos, sin iniciativa, despreocupados del trabajo, entre otros
calificativos peyorativos) no correspondían a los reclamos de la clase trabajadora:
necesidad de contar con un empleo digno y bien reenumerado, seguridad social,
retribución a los resultados organizacionales, condiciones de trabajo para la salud y la
integridad física.119

La cultura laboral de ese periodo, no la inducida desde el grupo en el poder, sino la que
es producto de la dinámica del trabajo y de las interrelaciones colectivas, tanto al interior
de los centros de trabajo, como de la manifestación cultural de los grupos sociales
surgidos del mundo del trabajo (ferrocarrileros, azucareros, metalúrgicos, petroleros,
maquiladores y operarios de la industria automotriz y electrónica, electricistas,
telefonistas, huleros, textileros, trabajadores de la aviación, panaderos, entre otros), es
variada de acuerdo a los rasgos socioeconómicos característicos de dichos grupos
sociales, los cuales tienen en la actualidad un grado diferencial de desarrollo en razón de
sus conquistas colectivas de trabajo y de su manera de enfrentar los cambios inevitables
de la modernidad; situación que contrasta con la condiciones laborales de la gran mayoría
de trabajadores de las micro, pequeñas y medianas empresas, los cuales no alcanzan a
recuperar su poder adquisitivo, y obliga a muchos de ellos a emigrar a la frontera norte o
que se inserten en la economía informal, y que en el peor de los casos estén

Guadarrama Olivera, Rocío (coord.), Cultura y trabajo en México: Estereotipos, prácticas y representaciones ,
Universidad Autónoma Metropolitana – Unidad Iztapalapa, México, 1998, pp. 125128.
119
Cfr., Ibídem, pp. 135136.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

desempleados o trabajen en condiciones adversas sin contar con ninguna prestación o


seguridad social.

De acuerdo a la encuesta nacional del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM


de 1994120, se confirmó la idea de que los mexicanos se ven así mismos como personas
industriosas, además de que consideran al trabajo como un valor importante y los datos
obtenidos de dicha encuesta permitió afirmar que las persona entrevistadas se
consideraron como laboriosas (en la encuesta referida se aplicó un cuestionario acerca de
valores a un total de 3,416 personas de 195 localidades), asimismo ese estudio aportó
información interesante sobre el valor que le asignaron a la eficiencia y capacidad
individual al trabajo.

Un aspecto sustancial de la cultura laboral es la educación y la capacitación de los


trabajadores, basta recordar que cada vez más trabajadores han adquirido parte
importante de su calificación laboral en escuelas y centros de capacitación, lo cual es
representativo de un rasgo de una cultura laboral que otorga prioridad a la capacitación
formal por encima del aprendizaje tradicional del oficio121.

Es así, que la cultura del trabajo, como la manifestación de valores y actitudes de las
personas en el espacio laboral, encuentra una conexión con el derecho del trabajo
mediante la expresión de conductas apegadas a los ordenamientos laborales en un marco
de respeto mutuo entre empleadores y trabajadores, y no de manera contraria a lo
deseado por la pretendida nueva cultura laboral, que utiliza conceptos psicológicos
laborales para un sometimiento de los trabajadores a los fines empresariales, en
detrimento de los derechos laborales de quienes esperan una adecuada retribución por su
trabajo.

1.3.7 Características de los derechos de los trabajadores.

El Derecho del Trabajo, es un derecho protector de la clase trabajadora, por ser la parte
frágil de la relación de trabajo, y como tal, existe a favor del trabajador el derecho de exigir
el cumplimiento de las normas de éste que obran establecidas en la Ley a su favor y es
deber del patrón el cumplir con las mismas, los funcionarios del trabajo (Presidentes de la
Juntas, Auxiliares, Secretarios, Actuarios y Procuradores), quienes deben en todo
momento cuidar el cumplimiento y aplicación exacta de esas normas protectoras del
trabajo, basados en las siguientes características:

120
Cfr., Ibídem, pp. 145 148.
121
Cfr., Ibídem, p. 150.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

A) La irrenunciabilidad.- Es necesario señalar este concepto tan importante en las


características de los derechos de los trabajadores, por lo que hablaremos más
ampliamente en otro capítulo, pero brevemente señalaremos lo que debemos de entender
como derechos laborales irrenunciables.

Una de las características o atributo es la irrenunciabilidad de derechos es un beneficio a


favor de los hombres y mujeres que viven de la prestación de su fuerza de trabajo, es
decir no opera en lo que se refiere a los derechos de los trabajadores el principio de que
todo derecho, en cuanto tal, es susceptible de renunciarse, porque al contener la
legislación laboral un mínimo de garantías sociales a favor de los trabajadores, como tal
no procede la renuncia de esos derechos, y si lo hacen, dicha renuncia es nula de pleno
derecho y en su lugar se aplican las disposiciones contenidas en la Ley Federal del
Trabajo; tales derechos que a través de la historia los trabajadores obtienen como logros
y conquistas laborales a su favor, se consagran hasta nuestros días en el artículo 123,
apartado “A”, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos vigente.

B) Imprescriptibles.- Esta característica de los derechos de los trabajadores, se debe de


entender que no se extinguen por el transcurso del tiempo ni prescriben a favor de
terceras personas, lo único que puede prescribe en perjuicio del trabajador son las
acciones para ejercitar los derechos establecidos en la Ley Federal del Trabajo.

Porque es clara la Ley Federal del Trabajo vigente, al establecer en el Título Décimo, la
Prescripción, esto en sus artículos 516 a 521, de donde se desprende de su simple
lectura, que dicho título únicamente nos habla de los tiempos en que opera la prescripción
de las acciones para ejercitar y hacer valer esos derechos de los trabajadores, más nunca
habla de prescripción de los derechos de los trabajadores, siendo muy clara y especifica
la Ley Laboral en comento; por lo que al ser los derechos de los trabajadores conquistas
de los mismos, tanto individual o colectiva por conducto de su sindicato, son siempre en
beneficio de la clase trabajadora y no así las acciones de los trabajadores para hacer
valer esos derechos.

Por tanto los derechos de los trabajadores al ser imprescriptibles, todos esos derechos
ganados a lo largo del tiempo a favor de la clase trabajadora, jamás podrán ser reducidos
o anulados, ni por órdenes del patrón, ni por convenio entre patrón y trabajador, o por
voluntad propia del trabajador.

Es importante señalar que cuando el trabajador que fallece o muere, transmite a sus
beneficiarios los derechos y acciones que adquirió en vida el trabajador fallecido, sin

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

necesidad de juicio sucesorio, protegiendo a la familia del trabajador, por tanto sus
derechos y acciones no se extingue con la muerte del trabajador; por lo que el artículo
115 de la Ley Federal del Trabajo establece: “Los beneficiarios del trabajador fallecido
tendrán derecho a percibir las prestaciones e indemnizaciones pendientes de cubrirse,
ejercitar las acciones y continuar los juicios, sin necesidad de juicio sucesorio”.

Además en íntima relación con este precepto legal se encuentra el artículo 774 de la Ley
Laboral multicitada, porque el término no corre sino que se suspende, ya que el trabajador
mostró interés al ejercitar sus acciones antes de la prescripción y no por el hecho natural
de la muerte se van a perder esas acciones, el término se suspende hasta que los
beneficiarios ejerzan las acciones, con el fin de no dejar en estado de indefensión a su
beneficiarios y se les cause un grave perjuicio de difícil reparación; por lo que este artículo
mencionado establece: “En caso de muerte del trabajador, mientras tanto comparece a
juicio sus beneficiarios, la Junta hará la solicitud al Procurador de la Defensa del Trabajo,
en los términos y para los efectos a que se refiere el artículo 722 de esta Ley”.

C) Inembargables.- Es importante conocer primero que significa la palabra salario, la cual


deriva de la voz latín salarium, y tiene varias acepciones como: sueldo, paga,
remuneración, honorarios, jornal, etcétera. El salario es una obligación que tiene el patrón
de pagar al trabajador por su servicio prestado. Existe una máxima que encontró su
antecedente en la Constitución del 1857, el cual dice: “Nadie puede ser obligado a prestar
trabajos personales sin la justa retribución, y sin su pleno consentimiento”.

Desde el punto de vista económico, el salario para el trabajador es un ingreso o rédito por
el trabajo subordinado, para el patrón por el contrario se consideraría como un egreso o
costo, ya que se considera dentro de los costos de producción de bienes y servicios, es
decir, el costo de un trabajo personal subordinado.

Al trabajo no se le puede considerar como una mercancía a la cual se le puede determinar


un precio, sino por el contrario, consideramos que el salario es el pago al trabajador por el
esfuerzo realizado y el tiempo invertido en él.

El Doctor Mario De la Cueva define al salario como “la retribución que debe percibir el
trabajador por su trabajo, a fin de que pueda conducir una existencia que corresponda a la
dignidad de la persona humana, o bien una retribución que asegure al trabajador y a su
familia una existencia decorosa”122.

122
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo I, Óp. cit., p. 297.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El artículo 82 de la Ley Federal del Trabajo define al salario de la siguiente manera:


“Salario es la retribución que debe pagar el patrón al trabajador por su trabajo”.

El salario además está integrado, según por el artículo 84 de la Ley Laboral anteriormente
invocada, por: “El salario se integra con los pagos hechos en efectivo por cuota diaria,
gratificaciones, percepciones, habitación, primas, comisiones, prestaciones en especie, y
cualesquiera otra cantidad o prestación que se entregue al trabajador por su trabajo”.

El salario es el medio, por el cual el trabajador puede dar sustento tanto a él como a su
familia de forma decorosa, tal y como lo establece el artículo 85 de la Ley Federal del
Trabajo, al establecer: “El salario debe ser remunerador y nunca menor al fijado como
mínimo de acuerdo con las disposiciones de esta Ley. Para fijar el importe del salario se
tomarán en consideración la cantidad y la calidad del trabajo”.

De aquí que es importante tomar en cuenta dos elementos que son propios del salario:

1) Remunerador: ya que debe ser proporcional al tiempo invertido y a la prestación de


servicios realizados.

2) Salario Mínimo: es el que se encuentra fijado por la Ley.

El artículo 90 del ordenamiento legal invocado, establece que:

“Salario mínimo es la cantidad menor que debe recibir en efectivo el trabajador por los
servicios prestados en una jornada de trabajo.

El salario mínimo deberá ser suficiente para satisfacer las necesidades normales de un
jefe de familia en el orden material, social y cultural, y para proveer la educación
obligatoria de los hijos.

Se considera de utilidad social el establecimiento de instituciones y medidas que protejan


la capacidad adquisitiva del salario y faciliten el acceso de los trabajadores a la obtención
de satisfactores”.

El artículo 123, apartado “A”, fracciones VI, VII y VIII, de la constitución, consagra:

“VI. Los salarios mínimos que deberán de disfrutar los trabajadores serán generales o
profesionales. Los primeros regirán en las áreas geográficas que se determinen; los
segundos se aplicarán en ramas determinadas de la actividad económica o en
profesiones, oficios o trabajos especiales”.

85
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades
normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la
educación obligatoria de los hijos. Los salarios mínimos profesionales se fijarán
considerando, además, las condiciones de las distintas actividades económicas.

Los salarios mínimos se fijaran por una comisión nacional integrada por representantes de
los trabajadores, de los patrones y del gobierno, la que podrá auxiliarse de las comisiones
especiales de carácter consultivo que considere indispensable para el mejor desempeño
de sus funciones”.

“VII. Para trabajo igual debe corresponder salario igual, sin tener en cuenta sexo ni
nacionalidad”.

“VIII. El salario mínimo quedará exceptuado de embargo, compensación o descuento”.

El salario es inembargable, pero existe su excepción a esta característica, es decir si el


salario pretende buscar asegurar a la persona una existencia decorosa, por lo tanto los
salarios y todas demás percepciones ordinarios o extraordinarias que por cualquier
concepto obtenga el trabajador pueden retenerse en virtud de mandamiento de autoridad
judicial competente, fijándose previamente un porcentaje en oportunidad provisional y en
su momento definitiva que será descontado del salario íntegro del trabajador. De aquí que
la Ley Federal del Trabajo es considerada proteccionistas de la clase trabajadora, pero va
más allá, se expande tal protección e inclusive a la familia del propio trabajador, como
ejemplo concreto: el pago de pensión alimenticia a favor de sus esposa y/o hijos, o de las
personas que dependan económicamente de ellas como es el caso de sus ancianos
padres (Arts. 110 y 112 L. F. T.).

El artículo 51, fracción IV, de la Ley Federal del Trabajo, establece en lo que más nos
interesa, lo siguiente: “Son causa de rescisión de la relación, sin responsabilidad para el
trabajador:[ IV. Reducir el patrón el salario del trabajador”.

Con el artículo 51 de la Ley Laboral en cita, quedo claro la intención del legislador de
proteger y defender al trabajador contra cualquier acto que infrinja un menoscabo contra
el salario del trabajador, al prohibir las reducciones que haga el patrón al salario del
trabajador, sin que medie ordenamiento judicial.

El salario debe pagarse únicamente al trabajador, la excepción a esta regla se produce


cuando el trabajador se encuentra imposibilitado para efectuar personalmente el cobro, en
este caso, el patrón podrá pagar el salario del trabajador a la persona que designe éste

86
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

como apoderado que conste en carta poder ante dos testigos como único requisito. Si el
patrón paga el salario a otra persona que no sea el apoderado del trabajador, y no
acredite tal circunstancia, el patrón no se libera de la obligación de pagar el salario (Art.
100 L. F. T.).

Dicho lo anterior consideramos que, el salario es la remuneración que recibe el trabajador


por parte del patrón, por la prestación de servicios, que le va a permitir cubrir sus
necesidades de forma digna y decorosa, así como también las de su propia familia; por lo
que al ser inembargables el salario del trabajador además es protectora de los interese
propios de la familia de éste.

D) Preferentes.- El artículo 123, apartado “A”, fracción XXIII, de la Constitución Política


de los Estados Unidos Mexicanos, consagra que: “Los créditos a favor de los trabajadores
por salario o sueldos devengados en el último año, y por indemnización, tendrán
preferencia sobre cualesquiera otros en los caso de concurso o quiebra”.

El artículo 113 de la Ley Federal del Trabajo establece: “Los salarios devengados en el
último año y las indemnizaciones debidas a los trabajadores son preferentes sobre
cualquier otro crédito, incluidos los que disfruten de garantía real, los fiscales y los a favor
del Instituto Mexicano del Seguro Social, sobre todos los bienes del patrón”.

El artículo 114 de la Ley Laboral invocada dispone que: “Los trabajadores no necesitan
entrar a concurso, quiebra o suspensión de pagos o sucesión. La Junta de Conciliación y
Arbitraje procederá al embargo y remate de los bienes necesarios para el pago de los
salarios e indemnizaciones”.

De lo anterior entendemos que al ser el salario del trabajador imprescriptible,


inembargable y sobre todo irrenunciable, además tiene la característica de ser preferentes
ante cualquier crédito, es decir, siempre serán reconocidos en primer lugar, primacía
absoluta, las deudas que tenga el patrón con el trabajador sin necesidad que éste entre a
juicio con los demás acreedores y sean reconocidos sus derechos mediante sentencia.

Por lo que al ser la Ley Federal del Trabajo de naturaleza proteccionista a favor del
trabajador, prevé que en caso de incumplimiento del patrón en el pago de su salario,
queda protegido el trabajador al incluir el importe de tres meses de salario y los salarios
caídos o vencidos, porque se concederá indemnización en los términos de los artículos 50
y 52 de la Ley Federal del Trabajo, por ser los derechos de los trabajadores preferentes
ante cualquier crédito.

87
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Por lo que es muy clara la Ley Federal del Trabajo al establecer a favor del trabajador,
que la Junta de Conciliación y Arbitraje procederá al remate de todos los bienes
embargados al patrón y con el producto del remate se procederá al pago de los salarios e
indemnizaciones de los trabajadores, esto en el caso de que el patrón no tenga dinero
para pagar sus deudas adquiridas con el trabajador.

1.3.8 Características del Derecho Mexicano del Trabajo.

Surgen tomando en cuenta las circunstancias y movimientos laborales del país como son
las diferencias ideológicas, el espíritu de las normas protectoras del trabajo, las
circunstancias de cada Ley Laboral en particular y así señalar las características de un
ordenamiento laboral específico, que son:

A).- El Derecho del Trabajo es un Derecho de la Clase

Trabajadora.- El Doctor Mario De la Cueva dice que “La separación de los hombres en
los propietarios de la tierra y de la riqueza y en los sin-tierra-y-sin riqueza, es la causa
generadora de la división y de la lucha de clases de las sociedades que viven el sistema
de la propiedad privada123”.

Consideramos que el Derecho del Trabajo surge como un derecho que tiene como fin, por
sobre todas las cosas, la estabilidad económica del trabajador (de su propia familia) y la
seguridad de su empleo, pero que en la actualidad va más haya sin perder esta
característica, también se ha convertido en un derecho de coordinador y armonizador de
los derechos del capital y el trabajo.

El Derecho del Trabajo no es meramente regulador de relaciones de trabajo, sino más


bien se trata de un ordenamiento jurídico protector de quienes prestan un servicio
personal a otro, es decir, al ser un derecho de la clase trabajadora, su objeto principal es
el establecer beneficios para los trabajadores.

El artículo 132 de la Ley Federal del Trabajo establece las obligaciones que tienen los
patrones, pero así, como la Ley impone obligaciones a los patrones, también este
ordenamiento invocado en su artículo 134 establece cuáles son las obligaciones de los
trabajadores. La Ley Laboral en comento, contiene disposiciones favorables para los
patrones, de lo que podemos apreciar que puramente no se trata de un derecho de la
clase trabajadora, sino de un derecho dictado para restablecer el equilibrio entre los
sujetos de la producción. Teniendo sustento este argumento que el Derecho Mexicano del

123
Ibídem, p. 88.

88
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Trabajo no es un derecho solo de la clase trabajadora, es la prohibición establecida en el


artículo 123 apartado “A”, fracción IX, inciso f, de la constitucional, que establece la
siguiente prohibición: “El Derecho de los trabajadores a participar en las utilidades no
implica la facultad de intervenir en la dirección o administración de las empresas”.

Nos dice el jurista Baltasar Cabazos Flores que “el Derecho del Trabajo en la actualidad
tiene, definitivamente, que estar basado en tres principios esenciales, a saber: el respeto
mutuo de derechos, la comprensión recíproca de necesidades y la coordinación técnica
de esfuerzos124”, es decir, debe superar el principio de lucha de clases y sustituirlo por el
de armonía entre las mismas basado en estos postulados.

Por lo que concluimos el Derecho del Trabajo en nuestro país, no es solo un derecho de
la clase trabajadora, ya que le impone a ésta, obligaciones correlativas del derecho de los
patrones, lo cual se encuentra plasmado en la Ley Federal del Trabajo es su artículo 2° al
disponer que “Las normas de trabajo tienden a conseguir el equilibrio y la justicia social en
las relaciones entre trabajadores y patrones”.

B) El Derecho del Trabajo como un derecho protector de la clase trabajadora.-


Entendemos esta característica la cual consiste en la tutela del trabajador contra su
estado de necesidad, por ser la clase económicamente débil, la más castigada por la
economía nacional, nulificando de pleno derecho las renuncias que haga valer el
trabajador, lo cual se encuentra establecido en el artículo 123 apartado “A”, fracción
XXVII, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y en el artículo 5
fracción XIII y 33 de la Ley Federal del Trabajo.

Este proteccionismo de las normas del trabajo parte del supuesto de las diferencias de
situaciones en que se encuentra patrón y trabajador; circunstancias que motivaron el
crear un sistema de mínimos y máximos, a favor de los trabajadores, determinando de
pleno derecho, que son nulas las renuncias que los trabajadores hagan de sus derechos,
porque al ser la Ley Federal del Trabajo, cuyas disposiciones son de orden público,
contienen un mínimo de garantías sociales, por tanto al contener un mínimo de derechos
consagrados a favor del trabajador les dan el carácter de irrenunciables. Las leyes
laborales contienen normas protectoras que establecen límites de la capacidad física para
trabajar por parte de los trabajadores, el señalamiento de un salario mínimo, descansos
por semana, vacaciones, atención médica y seguridad social.

124
CABAZOS FLORES, Baltasar. 40 Lecciones de Derecho Laboral, Óp. cit., p. 34.

89
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En México se ha venido manifestando que está característica del Derecho del Trabajo, en
las relaciones de trabajo, como protector de los trabajadores se ha ido perdiendo, al existir
convenios de productividad a través de los cuales se acuerdan retribuciones saláriales en
función no del trabajo realizado por los trabajadores, sino sobre la base de la oferta y la
demanda del producto o servicio prestado. Además de que dichos convenios se estipulan
condiciones de trabajo que significan una intensificación del trabajo, lo cual va en
detrimento de la salud y la vida de los trabajadores. En la actualidad, al buscarse mayor
productividad, se transfiere gran parte del costo de la competitividad, de la tecnología y
rentabilidad de las empresas, a los trabajadores, esto es, que se promueve la
productividad, a costa de los derechos y empobrecimiento de los trabajadores, por lo cual
consideramos que el Derecho del Trabajo no debe perder su carácter de tutelar del
trabajador en sus derechos esenciales.

Por lo que consideramos que debemos de perfeccionar las normas de trabajo para
suprimir rigideces, que son resultado de las violentas circunstancias históricas en las que
nacieron, pero es inaceptable desbaratar los derechos esenciales e inalienables de los
trabajadores.

C) El Derecho del Trabajo como un mínimo de garantías sociales para los


trabajadores.- El Doctor José Dávalos nos dice respecto de esta característica del
Derecho del Trabajo parte de la máxima “arriba de las normas laborales todo, por debajo
de ellas nada”125. Se ha adoptado tanto por la Doctrina como en la Jurisprudencia
nacional, es decir, que el Derecho del Trabajo constituye un mínimo de garantías para los
trabajadores, en razón de su dignidad humana; derechos que pueden ser mejorados por
medio de la contratación laboral individual o colectiva, pero nunca reducidos. Por tanto las
prerrogativas contempladas en el artículo 123 constitucional y en la Ley Federal del
Trabajo son las condiciones mínimas que habrán de observarse en todas las prestaciones
de trabajo.

El artículo 56 de la Ley Federal del Trabajo, nos habla de esta característica al establecer:
“Las condiciones de trabajo en ningún caso podrán ser inferiores a las fijadas en esta
Ley[ ”.

Sin embargo, hay beneficios que favorecen a los trabajadores pero que no pueden ser
objeto de mejoras, no de exigencia a través del contrato colectivo de trabajo. Como
ejemplo de lo anterior tenemos a la participación de los trabajadores en las utilidades de
125
DÁVALOS, José. Derecho del Trabajo I, Óp. cit., p. 17.

90
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

las empresas. La Comisión Nacional para la participación de los Trabajadores en las


Utilidades de las Empresas, conforme a lo dispuesto en los artículos 123 apartado “A”,
fracción IX, inciso a, constitucional y 118 de la Ley Federal del Trabajo, fija el porcentaje
de participación, para lo cual tendrá en cuenta las condiciones generales de la economía
nacional, las necesidades de fomentar el desarrollo industrial del país, el derecho del
capital a obtener un interés razonable y la necesaria reinversión de capitales.

En este orden de ideas, consideramos que la Ley Laboral no solo se establece mínimos a
favor de los trabajadores, sino que también se consignan garantías al capital y que, por
ende, se deben incluir al caracterizar el ordenamiento laboral.

Consideramos que la esencia del Derecho del Trabajo, se configuran con el


establecimiento de derechos mínimos para los trabajadores, la irrenunciabilidad de esos
derechos, del principio de que en caso de duda debe apegarse a lo que más favorezca al
trabajador, entre otros más.

D) El Derecho del Trabajado como un derecho reivindicatorio del proletariado.- El


Doctor José Dávalos apunta que: “El Derecho del Trabajo es reivindicatorio, porque busca
restituir a la clase trabajadora en el goce de sus derechos, clase que ha sido
tradicionalmente explotada en el sistema capitalista”.126

El trabajador representa en la sociedad un papel principal e importante porque su


esfuerzo, su energía y su capacidad en la jornada laboral son instrumento y fuente del
capital que a su vez se convierte en riqueza y progreso si se aplica equitativamente en
beneficio de todos, mereciendo como consecuencia el trabajo respeto y reconocimiento
por parte del gobierno como del patrón.

Es la clase trabajadora que a través del tiempo quien sobrevive en la pobreza y en la


injusticia, perdiendo garantías y sustentos legales para favorecer abiertamente a los
dueños del capital en detrimento de la fuerza laboral.

Consideramos que está característica se refiere a que el artículo 123 constitucional tiene
dos finalidades; la protección a los trabajadores y al trabajo, como factor de producción.
Estas dos finalidades coinciden con las características de la función tutelar del Derecho
del Trabajo.

En cuanto a la segunda finalidad, el artículo 123 constitucional no se limita únicamente a


la protección y tutela de los trabajadores, sino que trasciende con los preceptos que

126
Ibídem, p. 18.

91
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

integran el artículo 123 de la Carta Magna, para reivindicar la participación de la clase


trabajadora en la producción económica.

E) El Derecho del Trabajo como un derecho irrenunciable e imperativo.- La


imperatividad absoluta del Derecho del Trabajo quedó consignada en el artículo 123,
apartado “A”, fracción XXVII, inciso h, de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, que establece: “XXVII.

Serán condiciones nulas y no obligarán a los contrayentes, aunque se expresen en el


contrato: [ h) Todas las demás estipulaciones que impliquen renuncia de algún derecho
consagrado a favor de los trabajadores en las leyes de protección y auxilio a los
trabajadores”.

En la Ley Federal del Trabajo en su artículo 5°, fracción XIII, establece que: “Las
disposiciones de esta Ley son de orden público, por lo que no producirá efecto legal, ni
impedirá el goce y el ejercicio de los derechos, sea escrita o verbal, la estipulación que se
establezca:[ XIII. Renuncia por parte del trabajador de cualesquiera de los derechos o
prerrogativas consignados en las normas de trabajo”.

El Doctor Mario De la Cueva considera que la Ley Federal del Trabajo es omisa pues “no
prohibir la renuncia del patrón a los mandamientos que pudieran favorecerle, lo que es
consecuencia de que la ley del trabajo esté dirigida a la defensa de la energía de trabajo,
considerada como el valor más alto en la escala social127”. Son los derechos laborales
irrenunciables que protege al trabajador, tomando en consideración su estado de
necesidad, por ser la parte débil en la relación de trabajo.

Con respecto a lo imperativo del Derecho del Trabajo implica que no puede dejarse la
observancia de la norma laboral a sus destinatarios. La imperatividad consiste, además
de ser un beneficio para los trabajadores, en el deber impuesto a éstos para exigir el
respeto de sus derechos.

La imperatividad en el Derecho del Trabajo, como lo apunta el Doctor Mario De la Cueva,


“impone al estado la función social de vigilar la aplicación de las normas a todas las
prestaciones de trabajo, de poner en conocimiento de los empresarios las violaciones que
hubiese encontrado a fin de que las corrijan, y cuando la recomendación no sea acatada,
imponer las sanciones que autorice la Ley”.128 Consideramos que solamente así es como

127
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo I, Óp. cit., p. 100.
128
Ibídem, p. 101.

92
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

surte efectos plenos la imperatividad del Derecho del Trabajo en beneficio de la clase
trabajadora y de la justicia social.

1.3.9 El conflicto en el derecho del trabajo.

1.3.9.1 Origen de los conflictos.

Los conflictos de carácter laboral no son algo nuevo, ni corresponde a una época en que
el derecho del trabajo ha desarrollado elementos legales para regir las relaciones
laborales de la manera más justa posible. Los conflictos son una parte integral de las
relaciones en todas las actividades humanas, la aparición del derecho del trabajo tuvo
como antecedente indiscutible el abuso del hombre por el hombre, el aprovechamiento
ventajoso del fuerte sobre el débil, el desprecio inhumano del económicamente poderoso
sobre el indigente. Por ello se ha dicho, que la historia del derecho del trabajo no es en sí
otra cosa que la lucha del hombre en la búsqueda de su progreso, de su libertad y de su
seguridad y en consecuencia normar y reglamentar las relaciones obrero patronal y
disminuir la fricción dentro del ambiente laboral.

Los conflictos o las diferencias entre los trabajadores y patrones son expresión de
pugnas, dificultades, choques, litigios, controversias, y necesidades que se relacionan con
el trabajo y cuando ellos no pueden avenirse, entonces se requiere de un tercero que se
encargue de solucionar esos conflictos, llámese árbitros o tribunales y entre nosotros
Juntas de Conciliación y Arbitraje, órganos de la jurisdicción social.

Krotoschin define a los conflictos de trabajo, en sentido amplio, se entienden las


controversias de cualquier clase que nacen de una relación del derecho laboral, o sea que
esta relación se haya establecido entre un empleador y un trabajador individual (contrato
individual del trabajo) o entre grupos de trabajadores y patrones; pero también cuando la
relación pertinente al derecho laboral existe entre un empleador o un trabajador y el
Estado.129

De la Cueva entiende como Conflictos de Trabajo a las diferencias que se suscitan entre
trabajadores y patrones, solamente entre aquellos o únicamente entre estos, en ocasión o
con motivo de la formación, modificación o cumplimiento de las relaciones individuales o
colectivas de trabajo.130

129
Cfr. KROTOSCHIN, Ernesto. Tratado Practico de Derecho del Trabajo, Volumen I, Cuarta Edición,
Ediciones Depalma, Buenos Aires Argentina, 1987, págs. 639-640.
130
Cfr. Cit. por TRUEBA URBINA, Alberto. Nuevo Derecho Procesal del Trabajo. Cuarta Edición. Editorial
Porrúa, México 1980, pág. 178

93
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Sin duda que cualquier definición expresa la imposibilidad de encontrar una fórmula
perfecta, porque precisamente en toda definición se incluye el definido y se omiten los
casos respectivos de suspensión, nuevas condiciones laborales, así como los hechos que
tienen conexión con el trabajo.

La productividad se vuelca, de los mercados locales hacia los crecientes horizontes del
consumo tanto nacionales como mundiales, originando una nueva ciencia: la Economía.
La cual se desarrolla increíblemente, surge la transformación de los métodos de
producción, sustituyendo el trabajo manual por el instrumento mecánico, como
comentábamos anteriormente. Esta verdadera revolución industrial ocasiona un nuevo
fenómeno, a las inconformidades de los trabajadores como la inmigración masiva hacia
los nuevos centros fabriles, dando origen a las populosas zonas urbanas, alrededor de los
crecientes centros de trabajo.

Todo esto origina un nuevo tipo de relaciones humanas, en torno a un factor nuevo: el
trabajo colectivo, a través de una nueva fórmula: un sistema económico de mayor
producción, mediante la utilización de los recursos técnicos de elaboración programada.

Simultáneamente, se intensifican las relaciones humanas y con ella los conflictos


adheridos a las necesidades de la misma convivencia forzada en los centros de trabajo
así como en la aglomeración.

1.3.9.1.1 Cuestión social.

Si por cuestión se entiende el complejo de problemas que derivan de la cooperación y


convivencia de clases, estratos, y estamentos sociales distintos, por hábitos de vida y por
su ideología y visión del mundo, las contradicciones y pugna entre esas clases de una
misma sociedad, en lo que a producción de bienes se refiere, originan los conflictos de
trabajo.

Y esa contradicción y pugna entre capital y trabajo, es decir, entre los ingresos que son
intereses o beneficios de una parte, y los que son salarios de otra, constituye el contenido
de la cuestión social en el sentido moderno de la palabra, hasta nuestros días, cada
sociedad humana contempla su cuestión social en la que sigue imperando el principio de
lucha de clases por los caminos de la reforma social para la transformación del mundo en
que vivimos en el batallar constante entre el capitalismo y el socialismo, a fin de que cada
país encuentre el rumbo a seguir y los elementos para lograr la transformación social, que

94
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

por razones de justicia social tendrá que suprimir el régimen de explotación del hombre
por el hombre.

Originariamente la cuestión social que identificada como una cuestión obrera,


incluyéndose en ella la idea de justicia social, que aparece en los años 1840 a 1850 como
exigencia de la justicia en las relaciones laborales. Con respecto a la cuestión social,
Messner hace resaltar la crisis de la cultura poniendo de manifiesto las raíces espirituales
y culturales, de donde advierte que la cuestión moderna trasciende al ámbito económico y
social, apuntando cada vez más a la esfera de lo espiritual y cultural, pero no obstante, la
cuestión social fue dominada por el punto de vista económico-social, predominando
también las formas organizativas de tipo técnico económico, como una fuerza impulsora
en función de la colectivización del hombre.131

El trabajador es el único ser en la Naturaleza que conscientemente expide energía o


fuerza de trabajo, esta energía o fuerza de trabajo, a su vez, produce otra energía o
fuerza más poderosa: el capital, que como aquella y en su unión genera riqueza, en el
mejor de los casos, pero en el peor solo genera pobreza, hambre y destrucción; a través
de la historia, la acumulación del capital se ha hecho a base de la explotación de la fuerza
de trabajo, mediante el sistema de su adquisición o compra lo más barato posible y de su
venta lo más caro que se pueda realizar en el mercado de la economía municipal,
primero, nacional, después y el ultimo internacional o mundial.

En esta forma es como el trabajo ha tenido su primer contacto con el Derecho Social del
presente y por lo mismo ha propiciado que el trabajador, en el referido derecho, se
transforme en persona que ya no vende su energía o fuerza de trabajo, como sucedía en
el derecho burgués, sino que valiéndose de ella se beneficia así mismo y a la sociedad de
la que es efectivamente miembro activo.

La contratación que privaba en el derecho laboral antiguo y que daba lugar a la


intervención de la subordinación y dependencia, en la actualidad, dentro del derecho del
trabajo que proviene del derecho Social, se ha transformado en el pacto laboral social,
donde no tienen cabida dichos vocablos porque en realidad lo que existe es la
coordinación que da origen al mencionado pacto, que no es un simple convenio entre el
cual las partes intervienen, sino algo más que eso; es, como su nombre lo indica, una

131
Cfr. Ibídem. págs. 173-174

95
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

coordinación de intereses dirigidos hacia un mismo fin, que no puede ser otro que el de la
producción, distribución y consumo de riquezas en común.132

Es así como el trabajador ha dejado de ser un empleado subordinado y dependiente de la


empresa que por una parte generaba nada más riquezas y por otra producía solo
miserias; siendo para aquellas las primeras mencionadas y las últimas de las señaladas
para el trabajador, lo que es una injusticia social ya que la clase trabajadora genera
riqueza no solo para el patrón sino también para su país.

A partir de hoy el trabajo, la fuerza del mismo y el trabajador ya no tienen obligaciones


sino únicamente derechos sociales, tales como el derecho al capital, el derecho al trabajo
y el derecho a la producción, distribución y consumo de los bienes y riqueza materiales
que provenían del capital y que solo eran para él, no obstante que en el proceso de la
acumulación correspondiente también había intervenido el trabajador, su fuerza de trabajo
y el trabajo mismo.

1.3.9.1.2 Factores de la producción.

Los economistas clásicos distinguen tres agentes de la producción: la Tierra, el Trabajo y


el Capital. Estos factores producen conflictos en las actividades industriales, pero
principalmente los elementos dinámicos, capital y trabajo; el primero por su afán
exagerado de obtener mayores utilidades en detrimento del trabajo, y este por defenderse
contra la explotación que implica la producción capitalista.

Los factores de producción son los recursos que una empresa o una persona utiliza para
crear y producir bienes y servicios.

En la teoría económica se considera que existen tres factores principales de producción:


el capital, el trabajo y la tierra.

El capital: Se refiere a todos aquellos bienes o artículos elaborados en los cuales se ha


hecho una inversión y que contribuyen en la producción, por ejemplo máquinas, equipos,
fábricas, bodegas, herramientas, transporte, todos estos se utilizan para producir otros
bienes o servicios.

El trabajo: Se refiere a todas las capacidades humanas, físicas y mentales que poseen los
trabajadores y que son necesarias para la producción de bienes y servicios.

132
cfr. DELGADO MOYA, Rubén. El Derecho Social del Presente, Porrúa, México 1977, págs. 550-551.

96
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La tierra: Este factor de producción no se refiere únicamente a la tierra en sí (el área


utilizada para desarrollar actividades que generen una producción); en el factor tierra
también se incluyen todos los recursos naturales de utilidad en la producción de bienes y
servicios, por ejemplo los bosques, los yacimientos minerales, las fuentes y depósitos de
agua, la fauna.

Cada uno de estos factores rinde, en el curso del proceso de producción, un servicio
productivo que los otros no pueden proporcionar: Cada uno de ellos es indispensable para
la producción. Así es que cada uno de ellos recibe su parte del producto creado gracias a
la acción conjunta. El obrero cobra por su trabajo salario; el capitalista recibe por los
servicios proporcionados por su tierra.

Entre el capital y el trabajo, se han originado diferencias en las que cada una de las partes
defiende y reclama lo que considera su derecho; los obreros, el producto de su trabajo y
los patrones la plusvalía y su renta para acrecentar sus bienes. Las fuerzas contendientes
han aumentado su importancia, en concordancia con el desarrollo industrial. Las
contiendas se han hecho más rudas, han adquirido caracteres de serios conflictos, que al
colocar en pugna a dos partes cuyo papel económico es eminente de cooperación, han
restado vitales energías a la industria e influido por tanto en la organización social.133

Cada uno de estos factores tiene una compensación o un retorno. Por ejemplo, el capital
tiene como compensación los beneficios o ganancias del mayor valor que le añade a los
productos, el trabajo tiene como compensación los salarios, y la tierra tiene como
compensación la renta que se obtiene de ella al utilizarla.

En la actualidad, con los grandes cambios a nivel de producción, también se pueden


considerar como factores de producción la capacidad empresarial y el entorno
tecnológico; sin embargo, tradicionalmente, los tres factores explicados (capital, trabajo y
tierra) son los que predominan en la teoría económica. Con la combinación de los factores
de producción, se busca eficiencia en la producción para, así, obtener mayores utilidades
en las empresas.

1.3.9.1.3 Lucha de clases.

La lucha de clases es un concepto o una teoría que intenta explicar la existencia de un


conflicto de intereses entre diferentes clases sociales, donde este sería un antagonismo
inherente a toda sociedad estratificada en clases dominadas y clases dominantes. La

133
Cfr. Ibídem. pág. 174

97
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

cooperación de los factores de la producción es exigencia fundamental del régimen


capitalista, más como puede reclamarse cooperación cuando el capital ha venido
ejerciendo tradicionalmente explotación del trabajo; he aquí, la causa de los conflictos
entre el capital y el Trabajo, en pocas palabras el origen de la lucha de clases. Por esto es
certera la tesis de Marx: La historia de toda sociedad hasta nuestros días no ha sido sino
la historia de la lucha de clases.

El origen de esas aspiraciones contradictorias son siempre las diferencias de situación y


condiciones de vida de las clases en que se divide toda sociedad; es la historia de la
lucha de clases, hombres libres y esclavos en una palabra opresores y oprimidos se
enfrentan manteniendo una lucha constante, en donde toda la sociedad va dividiéndose
en dos grandes clases que se enfrentan; la burguesía y el proletariado que es una clase
revolucionaria cuando tiene la perspectiva de su tránsito inminente al proletariado,
defendiendo así sus intereses futuros cuando abandonan sus propios puntos de vista para
adoptar los del proletariado.

Esta lucha de clases se define por las características inherentes a cada una, de un lado la
clase explotada, oprimida pero a su vez productora de bienes y servicios, creadora y
modificadora de la realidad que la rodea y por la misma razón revolucionaria en tanto
pretende cambiar el orden establecido. Del otro lado está la clase explotadora defensora
de los beneficios que goza a expensas de la otra clase, sin interés en modificar la realidad
que les beneficia y por la misma razón reaccionaria.

Así, la lucha de clases, no la de Marx y Engels sino la que nosotros describimos, es la que
dio origen al Derecho Social, que es promotor del mejor reparto de la justicia entre todos
los miembros de una verdadera comunidad, en el presente el Derecho Social y el derecho
del trabajo se han identificado plenamente al combatir ambos la lucha de clases, lo cual
ha hecho que con su fusión arrollaron los últimos vestigios del capitalismo; las estructuras
del capitalismo y la injusta forma de pensar han sido reducidas a su mínima expresión
sociopolítico económica y en su lugar se han establecido el nuevo régimen social que
epiloga la cadena de miserias que padecieron muchos en beneficio de unos cuantos, la
lucha de clases ese gran fantasma que recorrió el mundo apenas ayer, ha muerto; el
capital y el trabajo, los instrumentos de producción y la fuerza de trabajo, al fin han sido
socializados.134

134
Cfr. MOYA PALENCIA .Óp. Cit. págs. 335-338

98
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Las luchas de trabajo se han venido agitando a través de los tiempos, condicionándose su
desenvolvimiento a la acción sindical 8obrera que debe pugnar por la reivindicación
económica social de los trabajadores, remuneración justa de la fuerza del trabajo,
garantía de sus derechos y socialización de las empresas. El fenómeno del trabajo ofrece
serios problemas económicos y sociales, y provoca graves conflictos obrero-patronales,
puramente obreros o patronales, relacionados con el contrato de empleo y sus
consecuencias, lo que viene a justificar la función intervencionista del Estado moderno,
que se manifiesta en la sociedad por la expedición de leyes protectoras de los laborantes
y por la creación de instituciones oficiales de conciliación y arbitraje para solucionar los
conflictos contenciosos del trabajo, para que a través de la jurisdicción laboral logren
prácticamente la reivindicación de sus derechos y el consiguiente cambio total de las
estructuras económicas.

En el artículo 123 constitucional se prolija la lucha de clases enfrentando a los sindicatos


obreros frente a las asociaciones de empresarios, no solo para el mejoramiento
económico de los trabajadores sino para la reivindicación de los derechos, la lucha de
clases no solo tiene lugar en las relaciones de la producción económica sino en cualquier
relación laboral en que una persona presta un servicio a otra, en el proceso de la creación
del artículo 123 constitucional se advierte que no solo crearon derechos para los
trabajadores en relación con el trabajo de carácter económico sino en lo que respecta al
trabajo en general que no produce riqueza, en el cual se especificaron entre otros a los
empleados comerciales, domésticos y artesanos.135

En el neoliberalismo se habría experimentado una serie de métodos de lucha de la


burguesía internacional para acelerar la destrucción de la estructura del proletariado y
otros grupos periféricos al gran capital. Junto a esto, ocurre una serie de transformaciones
sociales que desintegran las estructuras clásicas de identificación de la modernidad
industrial. Esto se puede leer a través de los relatos de la posmodernidad. Así, la relación
dialéctica entre la lucha de clases y las transformaciones estructurales es decisiva en la
relación entre el capital y el trabajo. En la actualidad, hay una mayor dispersión de la
clase obrera, con muchos más sectores incorporados a ésta. Las condiciones subjetivas
(conciencia de clase) de la lucha de clases se han debilitado, pero las condiciones
objetivas cuantitativas y cualitativas se han reforzado. Esto último se entiende a través de

135
Cfr. TRUEBA URBINA, Alberto. Óp. Cit. págs. 175-176.

99
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los paralelos en los mecanismos de extracción de plusvalía en el liberalismo industrial y el


neoliberalismo.

1.3.9.2 Conflictos de trabajo artículo 123.

Los conflictos o diferencias entre los trabajadores y patrones son expresión de pugnas,
dificultades, choques, litigios, controversias y necesidades, que se relacionan con el
trabajo y cuando aquellos no pueden avenirse, entonces se requiere de la intervención de
un tercero que se encargue de solucionar esos conflictos, llámense árbitros o tribunales y
entre nosotros Juntas de Conciliación y Arbitraje.

La legislación mexicana, y en consecuencia la doctrina, iberoamericana ha preferido el


uso del término conflicto para referirse a las diferencias de intereses entre las partes de
las relaciones de trabajo, y en general, para cualquier circunstancia, contienda o polémica
de intereses vinculados con las relaciones de laborales, con independencia de que los
titulares sean trabajadores o empleadores.

Para entender mejor los conflictos de trabajo analizaremos lo que algunos autores
entienden por conflicto.

Para Pérez Botija, los conflictos laborales aluden a las fricciones que pueden producirse
en las relaciones de trabajo.

Desde un paro en masa, que pone en peligro la vida de una comunidad, hasta la más leve
controversia sobre si cierta empresa ha impuesto o no una sanción injusta a uno de sus
empleados.136

De la Cueva, define a los conflictos de trabajo como las diferencias que se suscitan entre
trabajadores y patrones, solamente entre aquellos o únicamente entre estos, en ocasión o
con motivo de la formación, modificación o cumplimiento de las relaciones individuales o
colectivas de trabajo.

Los conflictos del trabajo análogamente a los caracteres que reviste el contrato de empleo
son de dos clases individuales y colectivos, individuales los que surgen entre trabajador y
patrón a propósito del contrato de trabajo ; y colectivos los originados entre un grupo o
sindicato obrero de uno o varios patrones sobre cuestiones de orden profesional general:
Por lo que la distinción de estas contiendas se establece por los sujetos que intervienen

136
Cfr. Ibídem. pág. 178

100
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

en el conflicto fundamentalmente por su objeto, por supuesto el conflicto es individual


aunque sean varios los obreros que demanden al patrón.

Se hace una clasificación de los conflictos de trabajo que puede colegirse de nuestra
legislación, es la siguiente.

a) Obrero Patronales: Conflictos suscitados entre trabajadores y patronos con motivo del
contrato o relación de trabajo o de hechos íntimamente relacionados con ellos.

b) Interobreros: Conflictos entre trabajadores derivados del contrato o delación de trabajo


o de hechos estrechamente concatenados con ellos. Cuando la pugna surge entre
sindicatos, al conflicto se le denomina intergremial o intersindical.

c) Interpersonales: Conflictos entre patrones originados por el contrato de trabajo o de


hechos íntimamente vinculados con la relación obrero patronal.137

La terminologías del artículo 123 constitucional supone el contenido de los conflictos,


como controversias, choques o pugnas estableciendo como sinónimos los conflictos de
conflictos o diferencias, que hacen defectuosa cualquier definición que toma uno como
esencia del otro, así la fracción XX del apartado A) del artículo 123 establece las
diferencias y los conflictos entre el capital y el trabajo, se sujetaran a la decisión de una
Junta de Conciliación y Arbitraje formada por igual número de representantes de los
obreros y de los patrones y uno del gobierno.

En esta fracción se establece que los asuntos se ventilan en las Juntas de Conciliación y
Arbitraje para hacer valer los derechos por la fuerza de la ley. Dadas las circunstancias
generales de los trabajadores, el legislador entendió la necesidad de que dichos conflictos
se resolvieran rápidamente y con principios tutelares.

La desigualdad entre las partes exige la aplicación de principios rectores distintos para
regular los procesos y para el pronunciamiento de las soluciones legales, son por lo tanto,
la forma y el contenido procedimental la variante en dichos juicios.

1.3.9.2.1 Solución de los conflictos.

Para el buen funcionamiento de la vida social es necesario que se desarrolle dentro de un


régimen de derecho, no podemos concebir al hombre en su relación con los semejantes
sin que esta quede determinada por un conjunto de normas jurídicas de las cuales se
puede incluso no tener conciencia y solo, o una intuición.

137
Cfr. Ibídem pág. 182

101
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Pero además el mundo de las relaciones jurídicas esta hecho fundamentalmente pensado
en que los destinatarios de las normas las cumplirán espontáneamente atendiendo a
satisfacer el compromiso por sí mismo.

El derecho parte del supuesto de que los destinatarios de la norma habrán de cumplirlas
por propia decisión, sin embargo, acepta la decisión contraria y en base a ello organiza
todo un sistema para lograr el cumplimiento aún en contra de la voluntad del obligado;
parece evidente que no tendría sentido una organización jurídica que a la vista del
incumplimiento reiterado de las normas jurídicas solo tuviera el remedio de hacerlas
efectivas por la fuerza.

Eso obliga que al construir al derecho se tenga que pensar, en su factibilidad al margen
de los fines tradicionales que el derecho debe perseguir justicia, seguridad jurídica, y bien
común.

El problema no solo radica en que al margen de cualquier ideología social que se


sustente, siempre está presente la lucha de clases que forzó una interpretación agresiva
de las relaciones nacidas entre los sectores de la producción. Un matiz importante deriva
de la irrenunciabilidad de los derechos de los trabajadores, prevista en el artículo 123
constitucional apartado “A” fracción XXVII, incisos g y h) que exige contemplar con
cuidado aquellas formas de solución de los conflictos laborales que pueden significar una
afectación de derechos protegidos. Sin embargo esto no sucede cuando el conflicto afecta
a la definición de un derecho y no precisamente a su incumplimiento.138

La confrontación de intereses, aún cuando sea de carácter jurídico por el hecho de surgir
entre quienes se vinculan de manera inicial por factores económicos, mantiene esa
identificación.

Ciertamente los conflictos de trabajo siempre tienen un fondo de orden económico y su


afectación principal es de esa naturaleza.

1.3.9.2.2 Medios de solución.

Originariamente, en nuestro país, las controversias o conflictos entre trabajadores y


patrones correspondieron a los tribunales judiciales en congruencia con la prestación de
servicios regulados por los códigos civiles; pero al margen de estas relaciones privadas, la
formación del proletariado y su lucha en el régimen de producción capitalista, pusieron de
relieve la falsa ubicación de sus relaciones en dichos Códigos patrimoniales, así como la

138
Cfr. NESTOR DE BUEN L., Óp. Cit. págs. 89-90.

102
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

necesidad de otros sistemas para la solución de los conflictos. A partir de las leyes
revolucionarias y de la vigencia del artículo 123 constitucional los conflictos fueron
dirimidos por tribunales de conciliación y arbitraje, aunque en el juicio laboral tiene otro
sentido más que individualista, eminentemente social.

La aplicación de los sistemas de conciliación y arbitraje en los conflictos del trabajo, tan
solo vino a significar en la practica la substitución de la voluntad de las partes en conflicto
por quienes intervenían en la conciliación y ejercían el arbitraje para decidir
imparcialmente el conflicto; por la conciliación se llegaba a un acuerdo entre las partes
que los teóricos denominaban autocomposición y por el arbitraje la sustitución de la
voluntad de las partes en el conflicto se efectuaba por un tercero, juez o tribunal, que
decidía el conflicto por para conservar el equilibrio entre aquellas, independientemente de
las personas en pugna y del fondo de las controversias laborales.139

Por otra parte, la solución de los conflictos laborales tiene dos vertientes, medios directos
y medios indirectos los primeros se identifican por la ausencia de terceros en la
resolución, es decir que la resolución directa proviene de las partes.

Son medios indirectos cuando la solución requiere la intervención de un tercero, por


decisión de los interesados o por medidas procesales obligatorias, la decisión estatal de
intervenir en los conflictos laborales responde a la supremacía de la soberanía del Estado,
al cual corresponde a la seguridad y por ello velar por la certeza jurídica ya que es al
Estado al que le corresponde administrar procurar e impartir justicia, por ello ha de
hacerlo respecto de los conflictos laborales.

Este fundamento varía con la evolución del concepto de soberanía estatal y en la medida
en que se limite al ejercicio de funciones administrativas los medios indirectos descienden
en importancia para cederla a los medios de solución directa.

Son medios Indirectos.

A) La conciliación, llamada solución interpartes

B) La mediación, y

C) El arbitraje

Una segunda clasificación determina a los medios directos:

A) El jurisdiccional (solución jurisdiccional por sentencia colectiva.)

139
Cfr. TRUEBA URBINA, Alberto. Óp. Cit. pág. 189

103
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

B) El administrativo, cuando culmina con un laudo o un acto reglamentario de la


administración

C) El mixto, que tanto puede combinar medios directos con alguno de los clasificados
como medios indirectos; el ejemplo puede ser la conciliación directa interpartes y la
necesaria ramificación u homologación del convenio ante las autoridades que las leyes
determinen.

En México; Néstor de Buen opta por clasificar los medios de solución en tres grupos:

1) Solución de manera directa.

2) Con intervención de terceros.

3) La solución por medio de juicio.

1) Solución directa entre las Partes.

En este punto se mencionan los medios por los cuales las partes en un conflicto laboral
llegan a una solución directa.

A. Pago, entendido como el cumplimiento de las prestaciones demandadas de una de las


partes, casi siempre por el trabajador.

B. Transacción, pondría considerarse como el acuerdo entre las partes para determinar
las formas de solución o de pago del conflicto, sin que pueda justificarse la legalidad de
disminuciones en las prestaciones, que constituyen derechos nacidos de la esencia de la
relación de trabajo aunque igual pueden surgir de los contratos individuales o colectivos
de trabajo.

2) Solución con intervención de terceros.

En esta opción, el tercero puede ser designado por las autoridades o por las partes de
común acuerdo; la designación puede hacerse a una persona o en cuerpo colegiado, casi
siempre de composición tripartita. Algunos terceros pueden fungir como representantes
de cada una de las partes pero habrá un tercero neutral. Señalaremos tres medios
aplicables a la solución de conflictos laborales con intervención de terceros.

A) Conciliación: Si a la confesión se le ha llamado la reina de las pruebas, este medio de


solución bien podría considerarse la reina de las soluciones, es el medio idóneo para
resolver cualquier conflicto individual o colectivo, equivalente al acuerdo interpartes, solo

104
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

que acompañados por un tercero preparado para invitarlas a la reflexión y a su buena


disposición. Se trata de una orientación para resolver el conflicto.

B) Arbitraje: Es la instancia de un tercero neutral ajeno a las partes, como deben serlo
siempre los terceros, a quien se somete el conflicto y quien dictará una resolución final,
cuyo cumplimiento tanto puede ser obligatorio como opcional dependiendo del mandato
legal.

Solución mediante juicio.

Este sistema se emplea cuando las partes que intervienen en un conflicto laboral no
llegan a una solución con los medios ya mencionados anteriormente.

1.3.9.3 Formas de terminación del conflicto individual.

Como estudiamos anteriormente, la solución de los conflictos de trabajo es una cuestión


esencial para la justicia social y no menos importante la terminación del conflicto
individual, el cual analizaremos en este apartado.

Un proceso laboral como cualquier otro proceso, tiene una terminación natural; el laudo o
la sentencia que acoja las pretensiones de cualquiera de las parte o de ambas, si se
ejercieron varias por el actor y respecto de alguna o varias de ellas el laudo estimo
procedentes las excepciones o defensas.

Pero cuando ocurre que no se llegue al laudo y que concluya el proceso antes de su
dictado, las causas pueden ser múltiples: el actor desiste de la instancia, sin que lo
alcance la prescripción a efecto de reanudar después el pleito desde sus inicios. El actor
renuncia a su derecho si este es renunciable, dejando sin efecto la pretensión hecha valer
lo que, en el lenguaje habitual de nuestros procedimientos suele llamarse desistimiento de
la acción.

Puede ocurrir, en sentido inverso, que el demandado que interpuso oportunamente una
oposición, a la pretensión (excepciones y defensas), considere conveniente desistir de
ella y aceptar lo que el actor reclama, conducta procesal que se llama allanamiento. O
bien se da el caso de que las partes lleven a cabo un contrato de transacción, lo que es lo
mismo que un convenio que ponga fin al conflicto y que sea aprobado por la junta.

Finalmente, el actor puede dejar de actuar, poniendo de manifiesto en forma tácita el


deseo de no proseguir con el pleito, al menos esa es la presunción de la ley que equipara

105
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

tal conducta a un desistimiento dando lugar a la caducidad que en nuestro sistema laboral
afecta no a la instancia sino a la pretensión.140

Así el artículo 773 de la Ley Federal del Trabajo menciona que se tendrá por desistida de
la acción intentada a toda persona que no haga promoción en el término de 6 meses,
siempre que esa promoción sea necesaria para la continuación del procedimiento.

Cuando se solicite que se tenga por desistido el actor de las acciones intentadas, la Junta
citará a las partes a una audiencia.

Es pertinente advertir que la Ley Federal del Trabajo no hace referencia específica ni al
desistimiento expreso ni al allanamiento; en alguna medida si bien no con sentido
estrictamente procesal, admite los convenios como lo menciona el artículo 33, todo
convenio o liquidación, para ser válido, deberá hacerse por escrito y contener una relación
circunstanciada de los hechos que lo motiven y de los derechos comprendidos en el. Será
ratificado ante la Junta de Conciliación y arbitraje, la que lo aprobara siempre que no
contenga renuncia de los derechos de los trabajadores; y en cuanto a la caducidad, la
regula con mayor amplitud. Sin embargo, es evidente que tanto el desistimiento, conducta
del actor orientada a la cancelación o abandono de la pretensión, como el allanamiento;
conducta del demandado orientada al abandono de las excepciones y defensas y a la
aceptación de la pretensión contraria.

1.3.9.3.1 Convenio.

El convenio es el resultado de un acuerdo de dos o más personas para crear, transferir,


modificar o extinguir obligaciones según el Código Civil del Distrito Federal; cuando se
trata de fijar nuevas condiciones de trabajo para dar fin a un conflicto que hubiere tenido,
precisamente ese objeto.

La Ley Federal del Trabajo admite su modificación a la vista como lo marca en el artículo
57 que el trabajador podrá solicitar de la Junta de Conciliación y Arbitraje la modificación
de las condiciones de trabajo, cuando el salario no sea remunerador o sea excesiva la
jornada de trabajo, o concurran circunstancias económicas que la justifiquen.

En general estos convenios pueden celebrarse, a nivel individual, en los términos del
artículo 33 de la Ley Federal del Trabajo que señala es nula la renuncia que los
trabajadores hagan de los salarios devengados, de las indemnizaciones y demás
prestaciones que deriven de los servicios prestados. Todo convenio o liquidación, para ser

140
Cfr. DE BUEN LOZANO, Néstor. Óp. Cit. págs. 531-532

106
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

válido, deberá hacerse por escrito y contener una relación circunstanciada de los hechos
que lo motiven y de los derechos comprendidos en él. Será ratificado ante la Junta de
Conciliación y Arbitraje, la que lo aprobara siempre que no contenga renuncia de los
derechos de los trabajadores. Si bien de ser favorables a los trabajadores no se podrá
invocar su nulidad por falta de sanción de la autoridad.141

Ciertamente la primera reacción ante un conflicto es lograr la victoria y si no se logra de


inmediato pocos atribuirán el resultado negativo a los defectos de uno mismo.

Dada la vocación del procedimiento laboral hacia la conciliación en algunos casos exigida
constantemente por la ley, resulta claro que el convenio puede ser una forma frecuente de
terminación anormal de los procesos, esto es, sin llegar al laudo.

El problema es más notable cuando el convenio se intenta celebrarlo después de dictado


un laudo condenatorio, encontrándose pendiente de resolución el amparo propuesto o,
inclusive resuelto este en forma contraria al quejoso de manera que el laudo tenga una
definitividad rotunda.

En realidad, los llamamos convenios son verdaderos contratos de transacción, definidos


en el artículo 2944 del Código Civil del Distrito Federal como aquel en el que las partes
haciéndose recíprocas concesiones, terminan una controversia presente o previenen una
futura.142

El convenio es un acto jurídico necesario en toda negociación para llegar a un buen


acuerdo sin necesidad de llegar a un proceso que requiere de más tiempo, y así dar fin a
una controversia dando una solución equitativa para ambas partes.

1.3.9.3.2 Desistimiento.

El desistimiento es una declaración por la cual el actor renuncia, bien al derecho


sustantivo a que se refiere su pretensión, bien a la acción en el sentido que le hemos
dado de derecho subjetivo público; en el primer caso se extingue el derecho, en el
segundo, se deja sin efecto el procedimiento, volviendo las cosas al estado en que se
encontraban antes de la presentación de la demanda.

En materia civil el desistimiento no consentido por el demandado produce la obligación de


pagar costas daños y perjuicios a la parte contraria salvo que esta lo consienta en un
convenio, solo en el caso que se haga valer antes del emplazamiento a juicio, el actor

141
Cfr. DE BUEN LOZANO, Néstor. Derecho Procesal del Trabajo. Óp. Cit. págs. 92-93.
142
Cfr. Ibídem pág. 535

107
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

quedara liberado de responsabilidad. Ahora bien si el desistimiento es de la pretensión no


exige, para su validez dicho consentimiento, sin perjuicio de la responsabilidad económica
consiguiente. En la instancia, si el demandado no lo consiente, será ineficaz para detener
el proceso.

Ello se debe, fundamentalmente a que el demandado tiene pleno derecho a buscar una
sentencia absolutoria que concluya, de una buena vez, el conflicto antecedente, incluso la
situación del proceso le puede ser favorable, no así al actor, de manera que no le
convenga el desistimiento, ni a un a cambio del pago de costas daños y perjuicios.
Tratándose del desistimiento de la pretensión, es claro que la situación se equipara a una
sentencia favorable al demandado.

En el proceso laboral mexicano no hay condena en costas, lo que es congruente con su


sentido proteccionista y la condición de actores que en una regla general que admite muy
pocas excepciones, suelen tener los trabajadores. Pero aunado al problema de
prescripción, resulta evidente que, salvo en juicios de menor cuantía, el desistimiento lleva
implícito la pérdida del derecho sustantivo sea de la pretensión o sea de la instancia.143

Es así como en este capítulo estudiamos sobre la explotación sin la conciencia de la


situación es lo que provoca el inmovilismo que enmarca la lucha de clases del siglo XXI.
Para el proletariado el reto consiste en unificar las luchas sectoriales de los trabajadores
desempleados, las mujeres trabajadoras de salarios reducidos, los trabajadores precarios,
los jubilados, los inmigrantes, y otros afectados por las transformaciones de las nuevas
revoluciones burguesas.

Además de la importante aportación del artículo 123 constitucional que regula


postconflictos de carácter laboral y la defensa de los derechos protegidos consagrados en
la Constitución Mexicana como máxima garantía, cuestión importante para la clase
trabajadora

143
Cfr. ibídem pág. 533

108
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

CAPITULO 2 Antecedentes del sindicato y del derecho mexicano del trabajo

2.1. Colaboración entre individuos para satisfacer sus necesidades.

El hombre para que pueda vivir en sociedad es necesario que establezca relaciones con
sus similares. Dichas relaciones deben estar acordes con los principios de ayuda,
resistencia, defensa, reciprocidad y solidaridad.

Con base a lo anterior, el hombre como individuo unitario no puede satisfacer sus
necesidades biopsíquicas por lo que requiere la ayuda de sus semejantes.

En los diferentes estadios del desarrollo de la sociedad ha existido la mutua colaboración


entre individuos para satisfacer sus necesidades, obtener bienes y servicios. La
cooperación es lo que ha dado sentido a la vida del hombre en sociedad, rasgo
importante del progreso y civilización en la obra colectiva de la humanidad.

La práctica de la cooperación aplicada a los problemas sociales y económicos surge


desde las primeras etapas de la civilización.

A lo largo de la historia humana ideas utópicas de carácter filosófico, político, económico o


social han influido en el desarrollo de los pueblos y de manera consecuente en el
desarrollo del pensamiento corporativo a través de textos que tratan de organizar una
sociedad justa en el trabajo colectivo y fraternal.

La asociación humana es una necesidad tan importante que es atendida por múltiples
disciplinas del orden social, y todas ellas se preocupan por darle a este fenómeno la más
clara y objetiva ubicación en su objeto de estudio.

El derecho social, precisa y da fórmulas para regular las formas de asociación de las
personas según sea la intención u objetivo por el que decidieron asociarse; en otras
palabras, el Derecho sirve para dar seguridad jurídica, legitimación, personalidad,
identidad, y ante todo, vida jurídica social.

Los que gustan de observar al hombre como fenómeno universal, han descubierto que las
necesidades personales siempre han sido atendidas en sociedad. Desde la primera
asociación biológica, de madre-hijo, hasta instituciones jurídicas como la del mismo
matrimonio, y otras tantas más, en que los integrantes de una sociedad se dan cuenta de
que quieren alcanzar objetivos comunes, y que ven que la pluralidad hace viable un
esfuerzo, una idea, una vida social.

De modo que el hecho de asociarse, les brinda a las personas no solo la posibilidad de

109
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

satisfacer sus necesidades más inmediatas, sino incluso la posibilidad de su


supervivencia misma. Es por eso que siempre se buscan fórmulas simples que la
sociedad contemple, lo mismo que el Derecho, y que hagan posible alcanzar los objetivos
previamente contemplados, para llegar de esta manera a ser partícipe de su propia
historia.

Como consecuencia de lo señalado hasta el momento, nos damos cuenta de que lo


primero que hay que hacer es definir qué es una asociación.

Resulta de importancia señalar los elementos que debe contar toda asociación humana.

Perder la unicidad, y buscar el acompañamiento, es el hombre que deja de ser


simplemente individuo, y se convierte en persona humana.

No existe grado de superioridad uno frente al otro, en la asociación todos operan con igual
autoridad, aunque la misma asociación nombre representantes suyos para con terceros.

En alguna comisión o encargo. Toda asociación debe tener un propósito, y si son varios,
uno fundamental, y su existencia y desarrollo deberán darse en función de ese propósito.

Con lo anterior, entendemos que la presencia misma de la conducta de asociación


humana hace que los que pertenezcamos a una sociedad, busquemos, para la
satisfacción de nuestras necesidades, fórmulas para su mejor supervivencia, por lo que
concluimos que el mismo Estado es una de ellas; sin embargo, podemos encontrar otros
elementos que serán las que surjan a partir del espectro de necesidades a resolver. Es
por ello que podemos decir que hay miles de fórmulas asociativas, repetimos: El Estado,
la familia, el matrimonio, las instituciones religiosas, sindicales, laborales, patronales,
campesinas, educativas, culturales de cualquier índole, etc., son formas organizativas que
el Derecho ofrece para alcanzar lo que los seres humanos precisan.

La familia es por naturaleza la primera escuela de libertad y de asociación. Si bien no


escogemos a los miembros de la familia, y en ésta debe cultivarse el respeto y obediencia
a los mayores, es ahí donde primero se aprende la convivencia y los criterios para elegir
qué hacer y cómo comportarse ante determinadas relaciones. Se aprende también a
escuchar y a respetar a los demás, así como a acercarse o alejarse de determinada
compañía, se aprende a superar en común las múltiples dificultades, así como a celebrar
y alegrarse con los demás. Estos elementos, entre otros, son los pilares de la asociación
entre las personas.

El ser humano, independientemente de sus creencias religiosas, su inclinación política,

110
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sus capacidades o intereses, busca en la vida respuestas a sus inquietudes, necesidades


y aspiraciones; el hombre no puede buscar esas respuestas solo, porque nadie puede
hacer, ni saber todo lo que necesita para vivir y porque, una vez adultos, tenemos a
nuestro cargo a otras personas. En ese sentido cada asociación de personas es una
respuesta. El gran drama de la existencia humana y la infinidad de preguntas y
necesidades que tenemos todos no tiene una respuesta, sino muchas, tantas como
personas hay en el mundo, y su realización pasa por el sinnúmero de relaciones que
establecen las personas entre sí. Desde el grupo de amigos, hasta el equipo científico,
desde la junta para sembrar tabaco, hasta el partido político, cada grupo humano
constituye un intento de respuesta a disímiles necesidades. La primera de éstas está en lo
más profundo de nuestro ser, muchas veces oculto, y es la de la trascendencia, es la
necesidad de conocernos a nosotros mismos y dominar el mundo al punto de
sobreponernos a todas sus limitaciones. Las otras necesidades son las que se ven, la
comida, la ropa, el transporte, la vivienda, el entretenimiento, la salud, la educación, la
seguridad social, la libertad, la realización de nuestros sueños y aspiraciones, etc. Todas
las personas buscamos alcanzar cada vez mayores grados de satisfacción de estas
necesidades, para lo cual, ya se dijo, nadie puede trabajar solo, ni nadie tiene la última
palabra, ni la Iglesia, que siendo depositaria del mensaje de: “Aquel que es la Verdad y la
Última Palabra de todo”, no puede hacer más que anunciarlo y acompañar a las personas
y a la sociedad en el empeño por alcanzar realidades más plenamente humanas, que son
las que Dios quiere para todos.144

De modo que la libertad de asociación forma parte de los derechos inalienables de las
personas y la sociedad, porque sin ésta, la persona queda privada de realizar una de sus
dimensiones esenciales, la de la socialización.

Pero si aún no compartiésemos esta visión del mundo, hay una razón para reconocer y
alentar el ejercicio de la libre iniciativa personal y la libre asociación, y es precisamente el
hecho de que, en última instancia, nadie puede conocer o controlar el sinnúmero de
formas y relaciones éticamente aceptables por los que fluye la vida, y nadie puede saber
cuáles son las mejores soluciones a los diversos problemas, o dominar los gustos y
preferencias de las personas. Si se intentase, ya conocemos el resultado, sociedades
improductivas y enfermas que sólo pueden buscar fuera lo que sus propias limitaciones
no le permiten encontrar dentro.

144
Cfr. //www.vitral.org/vitral/vitral79/jyp2.htm.- Portal de internet visitado el día: lunes 06 de abril de 2009.

111
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El bien de una nación debe ser fomentado y procurado por sus propios ciudadanos a
través de medios pacíficos y graduales. De este modo cada persona, gozando de libertad
de expresión, capacidad de iniciativa y de propuesta en el seno de la sociedad civil y de la
adecuada libertad de asociación, podrá colaborar eficazmente en la búsqueda del bien
común.

Ahora bien, la libertad de asociación, como todas las expresiones de la libertad humana,
tiene un único límite: el de la dignidad de la persona humana.

Tal como somos libres para hacer el bien y dar cada cual, de forma individual o
asociados, respuestas diversas a nuestras necesidades, también tenemos libertad para el
mal. No vale la pena enumerar todo lo que de mal han hecho diversas asociaciones en la
historia de la humanidad, ni es discutible la necesidad de que existan límites a esta
capacidad negativa. Una de las funciones de las leyes del Estado Moderno es
precisamente salvaguardar el bien común, que no es la suma de los bienes individuales,
sino el conjunto de condiciones sociales, formas de convivencia y recursos de todo tipo,
que son patrimonio de todos en la sociedad, y sin las cuales la vida humana se haría
imposible.

Las leyes deben proteger los derechos fundamentales de las personas y los grupos. De
ahí que las mismas deben prohibir a las asociaciones de personas realizar actos que
vayan en contra de la dignidad humana y deben existir parámetros para inscribir y
anunciar sus objetivos y formas de funcionamiento, para que puedan ser evaluados con
respecto a la ley positiva y aceptada o no el funcionamiento de tal organización. Así no
serían aceptadas, por ejemplo, organizaciones que se basen en la violencia o en la
discriminación de algún grupo social o etnia.145

La libre asociación debe ser entendida como una necesidad y una fortaleza que debe ser
estimulada en la sociedad y defendida de peligros, no como un mal que debe tolerarse y
controlarse en función de intereses de algún grupo o partido, porque ninguno, ni siquiera
el que está en el poder por voluntad popular, debe considerarse superior a los demás
grupos o guía absoluto de la sociedad, ya que “ello supone la destrucción de la verdadera
subjetividad de la sociedad y de las personas ciudadanos, como ocurre en todo
totalitarismo”.146

145
Cfr. http://www.vitral.org/vitral/vitral79/jyp2.htm.- Portal de internet visitado el día martes 07 de abril de
2009.
146
HABERMAS, Jürgen. Teoría de la acción comunicativa, I. Racionalidad de la acción y racionalización

112
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.2 Movimiento sindical en México, causas y orígenes.

Entre los antecedentes del sindicalismo, Trueba Urbina menciona "la sociedad particular
de socorros mutuos.. posteriormente se estimó que el sistema cooperativo de consumo
era más benéfico que el mutualista".147

Esta organización llegó a contar en sus filas, en octubre de 1874, con más de ocho mil
trabajadores, en su mayoría artesanos y obreros de hilados y tejidos.

Existe muy arraigado el mito de que los sindicatos obreros constituyeron el mejor producto
del socialismo frente a las injusticias sociales y tropelías cometidas por el capitalismo
contra la masa obrera.

La sociedad, el Estado, el Derecho y el Capital, todo era contrario a la organización de los


trabajadores. El orden jurídico individualista y liberal, encerró al hombre en sí mismo y le
aisló de sus semejantes para explorar mejor el trabajo. La regularización del contrato de
arrendamiento de servicios y las leyes penales significaron el triunfo del capital sobre el
hombre inmisericordemente degradado devenir de una máquina, al menos valiosa de las
utilizadas en la fábrica, de la burguesía. Así probó que al Capital no le interesan los
derechos humanos pues lo importante era el desarrollo intocable de la economía
capitalista. Aparentemente, la negociación de la libertad sindical colabora al empresario
en la misma condición de trabajo, pero, según un adagio que se atribuye a Adam Smith
cada capitalista es, en sí mismo, una coalición.

El nacimiento y el desarrollo del sindicalismo no fueron obra de teorías o filosofías


sociopolíticas, sino un proceso dialéctico natural y necesario de los años primeros del
siglo pasado: el tránsito del tratado individual a la manufactura y a la fábrica, engendró la
miseria de cientos de miles de trabajadores, que se convirtieron en una fuerza de
inconformidad permanente; una contradicción se desembocó en el movimiento sindical y
en el posterior derecho del trabajo. Marx describió aquella miseria con la más profunda
tristeza, el relato, empero, si bien pertenece a un pasado lejano, continuará siendo válido
en mucho de los pueblos del tercer mundo:

“La totalidad del sistema capitalista de producción descansa sobre el hecho de que el
trabajador vende su fuerza de trabajo como cualquier mercancía. La división del trabajo
unilateriza este trabajo-mercancía, otorgar al hombre para particularizar habilidad, a

social, Taurus Humanidades, México, Distrito Federal, 2006, pág. 158.


147
Cfr. Ley Federal del Trabajo. Comentada por Alberto Trueba Urbina, Séptima Primera Edición, Porrúa,
1993.

113
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

saber, la de ejecutar una parte de la obra por hacer. La aportación de la clase trabajadora,
devenida superflua por la máquina, quiere decir, esa porción que deja de ser
indispensable para el mejor funcionamiento del capital, por un lado, se hunde en la
desigualdad, lucha entre el trabajador manual y la empresa manufacturera en contra de la
máquina y por el otro lado, abarrota todas las ramas sencillas de la industria y colma el
mercado de trabajo, con lo que abate el precio de la fuerza de trabajo. Un gran consuelo
aparente para el trabajador empobrecido, consciente de hacerlo creer que sus
sufrimientos, por una parte, sean temporales, y por otra, que la máquina lamente se
adueñe de la totalidad de la rama de producción, lo cual aminoran la extracción e
intensidad de la acción destructora. Pero allí donde la máquina se adueña aun lentamente
de una rama de la producción, provoca una miseria crónica en el grupo de trabajadores
con los que entra en concurrencia; y si el adueñamiento es rápido, actúan masivamente y
en forma aguda”.148

La historia universal no conoce ningún otro espectáculo tan espantoso como la paulatina
ruina, que se le arrastro durante varios decenios de los trabajadores manuales ingleses,
que concluyó en 1838 con la destrucción de los tejedores. Muchos de ellos murieron de
hambre, en tanto muchos otros tuvieron que ayunar diariamente.

La crítica contemporánea estima que las causas mediatas del sindicalismo fue la
revolución industrial, que no sólo acabó con el trabajo libre y arrojó a la miseria más
espantosamente, según la frase de Marx, a los que no pudieron absorber las fábricas,
sino que, además, sustituyó la reacción de persona a persona con la de dominio del
empresario sobre el conglomerado obrero: en el sistema corporativo, la relación de trabajo
se cumplía en forma individual y era de naturaleza personal entre el maestro dueño del
taller y trabajador efectivo y el compañero o aprendiz, esto es, era una relación entre
trabajadores. En cambio, en el régimen capitalista, el empresario fijaba, en un documento
unilateral, al que se le daba el nombre de Reglamento de Fábrica, las condiciones de
prestación de servicios, que podían ser aceptadas o rechazadas, pero jamás discutidas.

El sindicalismo fue la consecuencia natural de la formación de la comunidad obrera,


nuevo ente social que proclamaría el nacimiento de un interés general que en aquellos
tiempos se le nombró el interés profesional, que no era siempre suma de los intereses de
los trabajadores presentes, sino el trabajo de hoy y mañana, por lo tanto, un interés para
que contemplara también a los hombres que vendrían del futuro. Para la consumación de

148
DE LA CUEVA, Mario. Óp. Cit., pág. 250

114
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

esta nueva perspectiva, las comunidades obreras reclamaron la supresión de los delitos
de coalición, asociación y huelga, y en el reconocimiento de su derecho a sindicalizarse y
exigir la negociación y contratación colectiva, mediante, en la última instancia, por el
procedimiento de huelga.

Las causas inmediatas de las asociaciones sindicales fueron la miseria de los


trabajadores y el trabajo en común: en las primeras fábricas deben haber conservado los
obreros de su tragedia, de la mentira de las leyes y de la injusticia del régimen en el que
vivían. La semejanza de la vida, del interés y de propósitos, unió a los hombres, de tal
suerte que en aquellas fábricas se formaron de manera natural, como un imperativo vital,
las primeras asociaciones de trabajadores. Así relatan los autores ingleses el origen de
las trade-unions; y así se le formó en el año de 1906 el Gran Circulo de Obreros Libres del
Estado de Veracruz.

El Gran Círculo de Obreros estaba constituido por 28 sucursales:

• “14 de ellas están integradas por obreros de las fábricas textiles.

• 6 por artesanos de distintos oficios.

• 6 por trabajadores de profesiones no especificadas.

• y uno por empleados ferrocarrileros y obreros textiles.

• Uno por obreros de los ingenios azucareros y peones de campo”.149

El sindicalismo fue un fenómeno necesario, pero respondía también a la idea de la


justicia. Fue un episodio en la vida social: la unión natural de los hombres para la justicia.
Por lo tanto, podemos definir al sindicato diciendo que es un grupo social necesario,
determinado por la desigualdad que produjo el liberalismo económico, la consiguiente
miseria de los trabajadores y la vida en común en la fábrica, organizado por la relación de
un fin: justicia y trabajo.

Con lo anterior podemos decir que, el sindicato era visto como una asociación de poder,
indisoluble a la relación de trabajo. Esta concepción se adecuo al momento histórico de la
sociedad económica-política, sin embargo, no debemos olvidarnos que el sindicalismo es
un proceso de emergencia social y cultural, en base a los factores reales de poder.

En el mismo sentido podemos decir que, la raíz y origen de los sindicatos se encuentra en

149
LEAL, Juan Felipe. Del Mutualismo al Sindicalismo en México 1843-1910, El Caballito Editores, México,
DF. 1991, pág. 27

115
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los llamados gremios.

El gremio era simplemente una asociación de todas las personas que se dedicaban a
determinado comercio o industria. Generalmente estaban establecidos en una misma
calle, que recibía el nombre de la especialidad respectiva: calle de los talabarteros, de los
curtidores, de los orfebres, de los plateros, su objeto era defender los intereses del oficio
correspondiente, limitar el número de los que podían dedicarse a la actividad respectiva,
fijar los salarios de los obreros y establecer las condiciones generales que asegurasen la
prosperidad de la profesión.

A mediados del siglo XII existían gremios de artesanos en toda Europa occidental. En
algunas ciudades la pertenencia al gremio era voluntaria, pero en otras el gremio ejercía
un poder absoluto, y quien quisiera ejercer ese oficio tenía que integrarse en la
asociación.

Los gremios funcionaban como una agrupación obligada de los trabajadores de una
localidad que se dedicaban a una misma profesión. Hubo, por lo tanto, en Europa desde
la Alta Edad Media, época de la que datan las primeras noticias de su aparición, un
crecimiento acumulativo de este tipo de asociaciones a la par que aumentaba la población
y se diversificaba y segmentaba la producción. Los gremios más genuinos fueron los que
tuvieron un carácter industrial, pero su éxito hizo que se generalizaran en otros colectivos
del mundo agrario y comercial. No siempre este tipo de agrupaciones se denominó
gremio. En la Baja Edad Media y comienzos del siglo XVI gremio era una palabra que
hacía alusión genérica a todo tipo de colectivo.

Algunas de las medidas más básicas que pusieron los gremios fueron:

• Nadie no podía realizar su oficio en la ciudad si no le era concedido el permiso del


gremio.

• Todos los maestros artesanos debían trabajar las mismas horas.

Estaban prohibidas las horas extra con fin de producir más. Trabajaban en los talleres
desde la salida hasta la puesta del sol. En verano, al ser el día más largo, podían trabajar
bajo la luz del sol 12 ó 14 horas. Sin embargo en invierno, que oscurecía pronto solo
podían trabajar 6 ó 7 horas. Al mediodía tenían un pequeño intervalo para comer. Las
horas las señalaban las campanas de la iglesia o del ayuntamiento.

• En un mismo oficio, en todos los talleres se debía usar el mismo tipo de herramientas y
también los mismos materiales, que eran proporcionadas por el gremio a un determinado

116
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

precio.

• A cada maestro artesano se le permitía tener como máximo un determinado número de


aprendices.

• Además el gremio vigilaba la calidad del producto y establecía su precio final.150

Por otra parte, existían las asociaciones de oficiales que se consideran como precursores
de los actuales sindicatos, debido a su defensa de los derechos de los trabajadores.
Trabajadores empleados en el gremio y por el gremio. Pero a los desocupados, que eran
mayoría en ese entonces, nadie los protegía ni se ocupaba de sus derechos. Los oficiales
eran tan enemigos de la competencia como los maestros.

El asociacionismo oficial es una fórmula para promover la modernización de las


estructuras laborales, ya que facilita la progresiva formación de las personas y supone un
medio para disponer de organizaciones empresariales que gestionen de forma adecuada
sus recursos, compitiendo con los operadores comerciales y consiguiendo valores
añadidos que individualmente no serían posibles.

Antecedentes del Derecho Mexicano del Trabajo entendiéndose el porqué de la


protección y tutela hacia el trabajador por parte del legislador al establecer en nuestra
Constitución Federal los mínimos a observarse en toda relación de trabajo y en las causas
de terminación del conflicto, porque no solo reconoce la libertad de trabajo, también reúne
en su conjunto los derechos del trabajador para protegerlo y tutelarlo ante el patrón.

El Doctor Mario De la Cueva apunta que “El Derecho mexicano del trabajo es un estatuto
impuesto por la vida, un grito de los hombres que solo sabían de explotación y que
ignoraban el significado del término: mis derechos como ser humano”.151

El Derecho del Trabajo, nace a raíz de las extremas necesidades por parte de grandes
grupos de individuos y como tal tiene como objeto el responder a los reclamos que
provocaron las convulsiones sociales, registradas en México, en la primera década del
siglo XX, como más adelante en el desarrollo de este capítulo se detalla.

El Derecho del Trabajo en México y su desarrollo hasta nuestros días, rama importante de
reciente formación autónoma derivada en sus inicios del Derecho Privado y más
recientemente del Derecho Público y Social, es consecuencia necesaria de las luchas de
clase, cuyos orígenes en el mundo se remonta desde varios siglos, existiendo

150
Cfr. http://historia.mforos.com/725447/7773530-gremios-y-artesanos/
151
Ibídem, p. 38.

117
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

antecedentes concretos; por esta razón iniciamos el presente capítulo de antecedente a


partir del México Precolombino.

El pueblo azteca integrado por guerreros y de naturaleza nómada, no pudieron establecer


sus costumbres con fuerza de ley, no existía identificación con la tierra, que es el principio
del derecho de propiedad. La inmigración azteca fue de norte a sur, lo que influyó mucho
en sus costumbres, pues los pueblos establecidos del norte estaban mucho más
atrasados que los del sur.

En el norte, el principio social, fue la familia, que al crecer formaba una tribu. El interés se
limitó a la caza y en las tierras aledañas los siervos trabajaban en el campo.

Por el contrario, en el sur, encontramos ya desarrollado el principio de la nacionalidad y el


derecho de propiedad como elemento social que hace la diferencia entre las castas.

El pueblo azteca desarrolló ambas posturas, que una vez unidas comenzó el orden social
a crear una distinción en las labores, como eran el campo, la guerra y la artesanal, y no
obstante que había distinciones sociales, no creaban esa costumbre tan fuerte que
pudiéramos llegar a considerarla Ley.

Se sabe que las ocupaciones a que se dedicaban los antiguos mexicanos, satisfacían sus
propias necesidades primarias y estaban encaminadas hacia la preservación de sus
propias culturas. En la civilización maya, por ejemplo, su principal ocupación era la
agricultura, cultivaban maíz, cacao, fríjol y algodón.

Estos trabajos agrícolas junto con la caza y la pesca, eran comunes y una vez que
obtenían los productos los repartían por partes iguales.

Es así, como en el México prehispánico, aunque había división del trabajo,


especialización del trabajo y trabajadores, no existía una verdadera reglamentación que
regulara las labores desempeñadas; por tal razón, en éste periodo no podemos hablar de
disposiciones legales protectoras del Derecho del Trabajo.

En la Colonia dentro de las diversas organizaciones precortesianas es la esclavitud la


base del trabajo como función económica y, por lo mismo, la negación de la relación
laboral propiamente dicha.

Durante la Colonia, se expidieron las Leyes de Indias, España creó una serie de
mandamientos legislativos más humano de los tiempos modernos, señala el jurista
Euquerio Guerrero que “tales mandamientos de las Leyes de Indias de 1561 a 1769, y en

118
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

muchos de ellos se encontraban disposiciones extremadamente interesantes; que existían


prevenciones que limitan la jornada, que aluden al salario mínimo, que señalan una
protección en el trabajo, a las mujeres y a los niños; pero el espíritu que las anima es más
bien el humanitario y cristiano de los Reyes Católicos a quienes las peticiones de los
frailes que tanto defendieron a nuestros indígenas o de algunos virreyes bondadosos,
llevaron a proteger a los naturales contra los abusos de encomenderos ambicioso”152.

En está época se marca concepción de una nueva sociedad integrada por criollos,
mestizos e indígenas, que van definiendo sus propias formas de vida, arte y cultura.

Lo más importante de esa época, es la figura del aprendiz que surgía dentro de los
llamados gremios, los cuales eran asociaciones profesionales cuyo fin consistía en la
regulación del trabajo entre sus asociados y en el mandamiento de un monopolio contra
terceros. Sin duda, es aquí, en dónde empieza a dar la figura de la relación laboral,
aunque en ese tiempo no se reconocía.

El sistema de gremios de la Colonia era distinto al régimen corporativo europeo; en el


Viejo Continente, las corporaciones disfrutaban de una gran autonomía que dictaban en el
terreno de la economía y para regular las relaciones de trabajo de los compañeros y
aprendices valían por voluntades de ellas, sin necesidad de homologación alguna. En la
Nueva España, las actividades laborales estuvieron regidas por las Ordenanzas de
Gremios a través de las corporaciones gremiales que fueron un acto de poder de un
gobierno absolutista que restringía la producción en beneficio de los comerciantes de la
península; aun cuando las Ordenanzas contenían diversas disposiciones, los maestros
gremiales gozaban de una cierta autonomía para dictar las reglamentaciones
complementarias.

La estructura jerárquica de los gremios estaba formada por aprendices, compañeros u


oficiales y maestros. El deber esencial del aprendiz, consistía en aprender un oficio y
obedecer al maestro.

El aprendiz, una vez que adquiría los suficientes conocimientos del oficio, éste debía
prestar sus servicios bajo otra categoría que era la de oficial, por lo que en ese momento
quedaba protegido por un contrato de trabajo, siendo además obligación por parte del
mismo, seguir agremiado por lealtad y sin poder aspirar a llegar a ser maestro.

152
GUERRERO, Euquerio. Manual de Derecho del Trabajo, Óp. cit., p. 22.

119
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Esta situación motivo la necesidad de formar gremios de oficiales y compañeros que se


enfrentaron a verdaderas luchas con las agrupaciones de los maestros que buscaban
privilegios para su clase, así como prolongar el período de aprendizaje con la única
finalidad de explotar a aquellos aprendices a los que ya se les podía otorgar la calidad de
oficiales, pues de ésta forma no se les permitía ascender a dicha categoría y por ende, no
les pagaban un salario ni los contrataban, situación que les permitía mantenerse en el
poder.

Por otro lado, los oficiales o compañeros, utilizaron agrupaciones para combatirlos y evitar
la explotación y los continuos abusos de que eran objeto los aprendices por los maestros.

Los gremios de la Nueva España se extinguieron legalmente dentro del régimen colonial,
algunas ordenanzas del siglo XVII se ocuparon de la libertad de trabajo, pero fueron las
Cortes quienes las acabaron. Si bien la Ley del 8 de junio de 1813 autorizaba a los
hombres avecinados en las ciudades del reino para que se establecieran libremente las
fábricas y oficios que quisieren sin necesidad de permiso o pertenencia a algún gremio,
fue el Decreto Constitucional de Apatzingán, debido a José María Morelos y Pavón, con
un profundo sentimiento liberal y humano el que declaró en su artículo 38 que “ningún
género de cultura, industrial o comercio, puede ser prohibido a los ciudadanos excepto los
que formen la subsistencia pública”153.

2.3 El sindicato en México. Una breve historia.

2.3.1 La colonia.

Es importante el estudio de los antecedentes de los Sindicatos en México, razón por la


cual iniciamos el presente estudio partiendo en la época de la colonia.

Cuando el trabajador, dominado por España, era considerado como un esclavo al que
había que explotar al máximo y cuya actividad no era reglamentada por ninguna ley que
evitara los abusos.

La cultura indígena fue aniquilada mediante la acción combinada de la violencia militar, la


conversión al cristianismo y, sobre todo, por la creciente mercantilización de toda la
sociedad; a la reorganización de la tenencia de la tierra siguió el establecimiento de
impuestos para cubrir los gastos de la Corona Española.

El tributo en especie pronto se convirtió en tributo en dinero, donde el trabajador se vio

153
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo I, Óp. cit., p. 40.

120
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

obligado a participar en la economía colonial.

Los únicos antecedentes de legislación que provocaron la defensa de los derechos de los
trabajadores, se dieron a partir de la promulgación de las Leyes Nuevas y las Leyes de
Indias.

Las primeras prohibieron la esclavitud de los indígenas y el que los indios prestaran
servicios personales a los españoles, y los definidos como trabajos involuntarios y no
remunerados. Y las leyes de Indias, tenían como objetivo brindar seguridad y protección a
los indígenas mexicanos.

En esta conjunto de leyes se pueden apreciar disposiciones de gran interés para el


derecho del trabajo: Dar seguridad a los indios de recibir una retribución justa, jomada de
trabajo, salario mínimo y la prohibición de tiendas de raya, estableciendo sanciones a
quienes no cumplieran estas disposiciones.

Ordenamiento emanado de Ias facultades de los reyes católicos, para brindar protección a
los nacionales mexicanos. Sin embargo, con resultados negativos, debido a la nula
aplicación de estas leyes.

Lo anterior, debido a la desigualdad existente en todos los aspectos entre el indio y el


conquistador, este último sólo tenía interés en conseguir y obtener ganancias de sus
bienes sin importarle en absoluto las violaciones cometidas en agravio de los indios.

Se puede considerar a este cuerpo de leyes, como un intento por parte de la corona a
igualar los derechos del indio y el amo, considerando estas leyes como una medida de
misericordia en favor de una clase cruelmente explotada

Figuras como la mano de obra indígena y, la encomienda, se encargaron de desconocer


totalmente sus derechos como seres humanos y fueron considerados como cosas
susceptibles de posesión y dominio, quedando a discreción del dueño el disponer de sus
esclavos e indígenas.

Dentro del viejo derecho español, existieron regulaciones jurídicas que operaron durante
la colonia y fueron:

a) Las Leyes de Indias,

b) Las Siete Partidas y;

c) Las Leyes Nuevas.

121
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Las anteriores legislaciones entraron en desuso a partir de la Independencia. Se tenía la


idea de que la independencia del país, sería un remedio eficaz a la problemática social
existente, pero el régimen de libertad que se instauró con la Independencia, no mejoró en
mucho, persistiendo las prácticas del trabajo forzado y la esclavitud.

A manera de conclusión, podemos decir que la colonia se identifica con el régimen feudal,
en el cual la riqueza está basada en la propiedad de la tierra. Asimismo durante esta
época, y dentro del proceso de información cultural impone sus valores a una clase social
trabajadora que crece y sufre posteriormente el impacto del desarrollo industrial.

Las ordenanzas.

Otra figura que contribuyó al detrimento de las condiciones de trabajo en México dentro
de la colonia, fueron Las Ordenanzas. Figura rigurosa de los oficios, por medio de las
ordenanzas de los gremios.

Se basaron en un sistema corporativo de la organización del trabajo, de estos gremios


nació la pequeña burguesía industrial, representadas por maestros y artesanos, mismos
que estaban a cargo de peninsulares, dejando en escala a los mestizos, indios y negros.

Con el crecimiento de la producción, creció también la competencia, donde los indígenas


demostraron su habilidad para desempeñarse en la industria.

Se restringía la admisión de nuevos miembros, haciendo cada vez más largo el periodo
de aprendizaje y poniendo barreras a los oficiales para ascender en el escalafón,
obstaculizando al indígena para llegar al título de maestro.

La mentalidad feudal de estas corporaciones tomaron medidas tendientes a evitar la


implantación de nuevos procedimientos de producción y la importación de productos,
declarándose la lucha entre las corporaciones formadas por artesanos y los comerciantes.

Una idea acerca de las condiciones de los indígenas durante la etapa colonial la describe
Alejandro de Humboldt

Las condiciones de vida y de trabajo que privaban en las postrimerías del régimen colonial
a principios del siglo XIX en los obrajes, sorprende al viajero que visitaba aquellos talleres,
no sólo la extremada imperfección de sus operaciones técnicas en la preparación de los
tintes, sino más aún la insalubridad del obrador y el mal trato que se da a los trabajadores,
hombres libres, indios y de color, están confundidos con galeotes que la justicia distribuye
en las fábricas para hacerlos trabajar un jornal.

122
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Unos y otros están cubiertos de andrajos, desnutridos y desfigurados, cada taller parece
más bien una cárcel: Las puertas que son dobles, están constantemente cerradas, no
permitiendo salir a los trabajadores de la casa; los que son casados, solamente los
domingos pueden ver a su familia. Todos son castigados irremisiblemente si cometen
faltas contra el orden establecido en la manufactura.154

Observamos al igual que el punto anterior, que dentro del período de las ordenanzas, los
naturales mexicanos no gozaban de ninguna protección o garantía de carácter laboral,
fueron tratados como esclavos siendo hostigados por los capataces, quedando sus vidas
a las disposiciones de los terratenientes, continuando con la agonía y la desesperación de
una clase en busca de una protección social que viera por sus derechos laborales,
lamentablemente carecían de la fuerza de organización para elevar sus peticiones, o
mejor dicho las condiciones históricas no fueron propias para encaminar una lucha en
defensa de sus intereses comunes.

La Legislación en el México de la Independencia.

A pesar del espíritu profundo del pensamiento social de José María Morelos y Pavón, el
siglo XIX en México, no conoció el Derecho del Trabajo: en su primera mitad siguió
aplicándose el viejo derecho español, las Leyes de Indias, la Siete Partidas, la Novísima
Recopilación y sus normas complementarias.

Desde el principio de la guerra de Independencia, ni una vez concluida ésta, no se


encuentran disposiciones precisas que pudiéramos considerar derechos de los
trabajadores, esto es, en ninguno de los bandos, declaraciones, constituciones, etcétera,
existen precedentes protectores de la clase trabajadora.

El Doctor Néstor de Buen señala que “la subsistencia de las disposiciones vigentes en la
Nueva España podría inferirse de los artículos 1° y 2° del Reglamento Provisional Político
del Imperio Mexicano, antecedentes remotos de nuestro artículo 123 constitucional
vigente, y que decían: “Art. 1° Desde la fecha en que se publique el presente reglamento,
queda abolida la constitución española en toda la extensión del imperio”. Art. 2° “Quedan,
sin embargo, en su fuerza y vigor las leyes, órdenes y decretos promulgados
anteriormente en el territorio del Imperio hasta el 24 de febrero de 1821, en cuento no

154
DE HUMBOLDT, Alejandro. Citado por DAVALOS. José. DERECHO DEL TRABAJO I. óp. cit. pág.53 y 54.

123
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

pugnen con el presente reglamento, y con las leyes y decretos expedidos, o que se
expidieren en consecuencia de nuestra independencia”155.

El 6 de diciembre de 1810, se dio en la ciudad de Guadalajara lo que conocemos como el


Bando de Hidalgo, que en su artículo 1° ordenaba a los dueños de esclavos que les
diesen la libertad, en el término de diez días, so pena de muerte.

Por su parte Ignacio López establece en lo que llamó los Elementos Constitucionales, por
lo que señalamos lo que consideramos más importante, pues estableció en su artículo 24
igualmente, la proscripción de la esclavitud, y en su artículo 30 decretaban la abolición de
los exámenes de artesanos, que quedarían calificados solo por su desempeño, lo que
constituye importante y claro antecedente a la eliminación del sistema gremial heredado
de la Nueva España.

Las Cortes de Cádiz expiden la Constitución española, la cual fue jurada en España el 19
de marzo de 1812 y en la Nueva España, el 30 de septiembre del mismo año, cuya
vigencia fue por demás precaria. Ésta Constitución fue suspendida por el virrey Venegas,
y retomada por Callejas en alguna de sus partes, para que por decreto de Fernando VII,
de fecha 4 de mayo de 1814, se restauraba el sistema absolutista (publicado en la Nueva
España el 17 de septiembre del mismo año), concluyera su vigencia. Por lo que en el mes
de marzo de 1820, como consecuencia del levantamiento de Riego, Fernando VII volvió a
establecer en vigor la Constitución y el virrey Apodaca la juró el 31 de mayo, pero en está
no se establece norma o disposición alguna, ni siquiera relativa a la libertad de trabajo o
industrial, ya que subsistía en España el régimen corporativo. Éste fue prohibido por el
Real Decreto de 20 de enero de 1834, acontecimiento importante, pues se concluye que
nuestro país se adelantó respecto de España, al menos en la intención de los documentos
dictados a través de la lucha por la independencia en establecer la libertad de trabajo y de
industria.

En los Sentimientos de la Nación o 23 puntos, a los cuales da lectura por José María
Morelos y Pavón, el 14 de septiembre de 1813, en Chilpancingo, establece en lo más
importante que nos interesa de está obra, en el punto 12° se señala “que como la buena
ley es superior a todo hombre, las que dicten nuestro Congreso deben ser tales que
obliguen a constancia y patriotismo, moderen la opulencia y la indigencia, y de tal suerte
se aumente el jornal del pobre, que mejore sus costumbres, aleje la ignorancia, la rapiña y

155
DE BUEN L., Néstor. Derecho del Trabajo, Óp. cit., pp. 299 y 300.

124
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

el hurto156”. Además en su punto 15° insiste en la prohibición de la esclavitud y también de


la distinción de castas.

El Decreto Constitucional para la libertad de la América Mexicana, disposición que fue


sancionada el 22 de octubre de 1814, en Apatzingán, a instancia de José María Morelos y
Pavón, disponía en su artículo 38 la libertad de cultura, industrial y comercio, a favor de
todos los ciudadanos.

Agustín de Iturbide en su Plan de Iguala, dado el 24 de febrero de 1821, señala en su


artículo 12 “todos los habitantes de él (del imperio mexicano), sin otra distinción que su
mérito y virtudes, son ciudadanos idóneos para optar cualquier empleo”.157

El 18 de diciembre de 1822, se da el Reglamento Provisional Político del Imperio


Mexicano, citado al principio de éste punto, es intranscendente porque no menciona nada
respecto a posibles derechos vinculados al trabajo.

Tampoco en la Constitución de 4 de octubre de 1824, existe disposición alguna que


pueda establecer antecedente de derechos laborales; pero es en este momento donde
México adoptó la forma de república representativa, popular, federal.

La Constitución centralista y conservadora de 29 de diciembre de 1836, también es


omisa, en atribuir cualquier derecho laboral. Tal disposición en cuanto su vigencia
concluyó el 6 de octubre de 1839.

Por lo que es hasta el proyecto de la nueva Constitución de 1856 en el que aparecerá esa
inquietud al discutirse la necesidad de atender el problema de los trabajadores.

2.3.2 México independiente.

El movimiento independiente comprendió en México un período de once años que fue de


1810 a 1821; sus causas fueron internas y externas.

Dentro de las causas internas se encuentran las sociales que correspondieron primero a
la desigualdad social; los criollos se sentían relegados por los peninsulares, los mestizos
no eran tomados en cuenta porque fueron concebidos en relaciones ilegítimas.

Por lo que hace a los indígenas, éstos querían librarse del tutelaje de las Leyes de Indias,
las castas se encontraban en condiciones infrahumanas, y en general el descontento era
unánime.

156
Ibídem, p. 300.
157
Ibídem, p. 301.

125
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Las causas económicas se debían a la dependencia económica de la Nueva España con


España, que tendían a impedir el libre comercio exterior se cobraban elevados impuestos
y España estaba en decadencia.

Por lo que hace a las causas externas, se consideraron a las ideas de los enciclopedistas
y economistas. Las cuales pugnaban por principios como: Los nuevos sistemas de
libertad, de tolerancia, de igualdad; tal es el caso de pensadores como Montesquieu,
Voltaire y Rousseau, los cuales ya no aceptaban el derecho divino de tos reyes y se
planteaba la división de los poderes.

Otras causas externas fueron:

a) La Revolución Industrial que había triunfado en Inglaterra a finales del siglo XVIII,
donde se estableció el sistema maquinista sobre el artesanal.

b) La Independencia de los Estados Unidos de 1776 que sirvió de ejemplo a países


Latinoamericanos.

c) La Revolución Francesa con los principios de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano.

d) El Liberalismo, en general, con movimientos libertarios establecidos en sociedades


secretas, los cuales complementaron el panorama de inquietudes.

En las primeras décadas de México Independiente, a partir de 1810, el poder económico y


religioso conservó un fuerte control sobre el trabajo manual.

Se promulgó el sistema productivo basado, casi en su totalidad, en la explotación mestiza


e indígena. Desde el panorama de los trabajadores, el cambio de época colonial al México
Independiente no representó beneficio alguno.

Los trabajadores del campo y los urbanos representaban básicamente las dos principales
categorías laborales, dentro de las cuates se engloba también a los que prestaban
servidos domésticos y de los dedicados a las artesanías.

A los factores como la depresión económica, inflación y desempleo en que se encontraba


el país, se agregaron la importación de productos extranjeros. Esta introducción de
mercancías causó graves perjuicios a los artesanos, principalmente a los textileros,
teniendo como consecuencia inmediata la iniciación de amplios movimientos de
asociación como medio de enfrentar a este proceso de empobrecimiento en que vivían.

Las condiciones de trabajo dentro de las industrias fabriles se regían por una disciplina

126
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

severa, en donde se Ie3 imponían reglamentos dictados sin consenso, las mujeres y los
niños fueron incorporados a las fábricas, obteniendo salarios inferiores a los que percibían
los hombres.

No mejoraron la condición del peonaje mexicano con la independencia. Los gobiernos que
sucesivamente ascendían al poder, se olvidaban de los aspectos comerciales e
industriales.

En esta época nos encontramos con jomadas de trabajo de dieciocho horas y salarios
inferiores, por lo que hace a la mujer obrera y los niños, se les destinaba un salario aún
menor al de los hombres.

Durante el gobierno de Antonio López de Santa Anna en 1843, se crearon las juntas de
Fomento de Artesanos y las Juntas de Menores, que tenían como objetivo brindar la
protección a la industria nacional.

Estas primeras organizaciones sustituyeron a los antiguos gremios, pero sólo fueron
buenas intenciones, en realidad, la situación económica y demográfica nacional dejaba
mucho que desear.

Concluyendo podemos decir que, anterior al movimiento armado de 1310, la pequeña y


mediana burguesía industrial feudal, buscaba la posibilidad de un cambio que asegurara
el establecimiento de la propiedad privada, en oposición al monopolio de la propiedad
territorial, detentada por la Corona Española.

Este movimiento desde sus inicios, puso de manifiesto la importancia movilizadora y


transformadora de las ideas avanzadas, de las instituciones políticas revolucionarías y del
nuevo poder político.

2.3.2.1 La constitución de 1814 y 1857.

Se promulgó en octubre de 1814, el Decreto Constitucional para la libertad de la América


Latina. Tuvo dos partes, una, que conformaba la independencia y la religión, declarando
traidor a todo el que se opusiera, directa o indirectamente a la Independencia.

Se plasmó en este ordenamiento como única religión la católica, y otorgaba la facultad del
sufragio a todos los mexicanos, sin que mediara restricción. Declarando la igualdad de
condiciones a los españoles, criollos, mestizos, indios y castas.

El Decreto Constitucional de Apatzingán, expedido por el Decreto de Anáhuac a


sugerencia del jefe de las tropas libertadoras, Don José María Morelos, con un sentido

127
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

liberal y humano, declaró en su Artículo 38: "ningún género de cultura, industria o


comercio, puede ser prohibido a los ciudadanos, excepto los que forman la soberanía
pública".158

La Constitución de Apatzingán fue de corte liberal, un documento franco, resultado de una


evolución ideológica previa.

Esta constitución debe su nombre a que se juró con toda solemnidad en la población de
Apatzingán, el 22 de octubre de 1814. Las ideas plasmadas en dicho documento fueron
principalmente obra de Don José María Morelos, contempló aspectos como:

a) Libertad para los esclavos de otros países que pisaran territorio mexicano.

b) Quedaba limitada dentro de cierta extensión, la tenencia de la tierra, para evitar el


latifundismo.

c) Declaró la enseñanza obligatoria y gratuita.

d) La división de poderes en ejecutivo, legislativo y judicial.

Para Concluir diremos que la declaración de derechos de aquella asamblea, es uno de los
documentos jurídicos más completos del siglo XIX, posee, un relevante sentido
individualista y liberal, la importancia de las ideas relativas a la libertad de profesión,
industria y trabajo, y libertad de asociación, y el principio de que ninguna persona
quedaba obligado a prestar un servicio sin que recibiera a cambio una justa retribución y
sin su pleno consentimiento.

Sin embargo, nos adherimos a la conclusión del maestro Oe La Cueva, cuando dice: "que
a pesar del pensamiento social de Morelos, el siglo XIX en México no conoció el Derecho
del Trabajo. Toda vez que se aplicó el viejo derecho español, en donde la situación de los
trabajadores no sólo no mejoró, sino que más bien sufrió las consecuencias de la crisis
política, social y económica en que se debatió la sociedad".159

La condición de los trabajadores en los años de 1821 a 1856.

Al concluir la guerra de Independencia, no parece que la condición del peonaje mexicano


haya mejorado. Los gobiernos que a través de los años detentaban el poder, estaban
demasiado ocupados en la política, que seguramente vivían en un estado de anarquía y
de inseguridad social, dejaron a su suerte los aspectos comerciales e industriales.

158
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, óp. cit. pág. 40.
159
Ibídem. págs. 40 y 41.

128
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Entre 1821 y 1856 es poca la información que existe respecto de esa época. Expone
Guadalupe Rivera Marín que “hacia 1823 nos encontramos con jornadas de trabajo de
dieciocho horas laboradas y salarios de dos reales y medio; para la mujer obrera y los
niños se destinaba un real semanario. Pero más grave aún, treinta y un años más tarde,
en 1854, los obreros percibían salarios de tres reales diarios –sin que la jornada hubiera
disminuido en más de una hora- lo que significa que en treinta y un años el aumento de
los salarios fue de seis centavos”.160

Bajo el gobierno de Antonio López de Santa Anna, se dan las primeras organizaciones
artesanales sustantivas de los antiguos gremios fueron creados hacia 1843, e inclusive,
son de aquella misma época las llamadas Juntas de Fomento de Artesanos y las Juntas
Menores que trataron de fomentar la protección a la industria nacional y defenderla de la
competencia de los productos extranjeros, en el que se trataba además de crear fondos
de beneficencia pública, mediante la aportación de cuotas semanales, para el socorro de
los beneficios, con el objeto de establecer, en última instancia, cajas y bancos de ahorro.

“En1856 –señala Gastón García Cantú- nuestro país tenía un poco más de 7 millones de
habitantes. El valor de la producción agrícola ascendía a unos 210 millones de pesos
anuales. Había 8 fábricas de papel, 46 de hilados y tejidos –movidas por maquinaria- que
producía más de 870 mil piezas de manta al año. En otras fábricas más pequeñas se
elaboraban, principalmente, aguardiente de caña, jabón, aceites, vasijas, alfarería, loza;
una variedad cuyo valor anual, con el de las telas, se hizo ascender a cerca de 100
millones de pesos”.36 Dejando mucho que desear la situación económica y demográfica
nacional; además de ésta tan precaria industria, había una producción minera más
importante de la que, en el mismo año de 1856, se obtuvo oro por valor de 1,049,222,
plata por 16,636, 955, más unos seis y medio millones en barras para la exportación y
otros dos millones en diferentes productos mineros.

La constitución de 1857

La revolución de Ayutla, tuvo como consecuencia inmediata la caída del dictador Antonio
López de Santa Anna, con la finalidad de obtener el reconocimiento de los derechos
fundamentales del hombre.

Esta revolución se caracterizó por el pensamiento individualista y liberal que imperaba en


esa época.

160
Ídem, p. 301.

129
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

A la caída del poder de Santa Anna, se convocó a un Congreso Constituyente, que se


efectúo en la ciudad de México entre los años de 1856 y 1857. Dando como resultado la
Constitución de 1857.

Esta Constitución fue de corte individualista y liberal, teniendo importantes disposiciones


concernientes al trabajo, consignaba libertades como las de profesión, industria y trabajo,
en el texto de sus respectivos artículos, en donde se adoptaron principios como:

a) Se facultaba al individuo a abrazar la profesión, industria o trabajo que te acomode


siendo útil y honesto y para aprovecharse de sus productos.

b) Nadie puede ser obligado a prestar trabajos personales sin la justa retribución y sin su
pleno conocimiento.

c) Carece de valor al contrato, pacto o convenio que tuviera por objeto el menoscabo, la
pérdida, o el irrevocable sacrificio de la libertad del hombre.

d) Se hace el primer llamado en favor de que los trabajadores participen de las utilidades
de las empresas, pero cayeron en el vacío.161

Este marco de ideas individualistas, defensoras de la propiedad y de un sistema


económico liberal, impidieron el reconocimiento del derecho del trabajo por parte del
constituyente de 1857.

Como resultado del Congreso Constituyente, se aprobó el Artículo 5°. de la Constitución,


pero resultó ser muy tímido, del cual dos años después, dio origen al Artículo 123 de la
Constitución de 1817, el cual planteaba entre otras circunstancias, la nula obligación a
prestar trabajos personales, sin la justa retribución y sin su pleno consentimiento. Así
como el hecho de que no podía autorizar contrato que tuviera como consecuencia la
pérdida o menoscabo de la libertad del hombre.

Se consideraban inexistentes los convenios que tuvieran como objeto la proscripción o


destierro del trabajador.

2.3.2.2 Legislación de Maximiliano.

En este período sufre México en régimen monárquico, como resultado de la imposición de


Maximiliano de Habsburgo como emperador.

Maximiliano, para sorpresa del grupo que lo había llevado al poder, elaboró una

161
BRICEÑO RUIZ, Alberto. DERECHO INDIVIDUAL DEL TRABAJO, Harla, México 1987, pág. 81.

130
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

legislación de carácter social, que tenía como objetivo primordial el desarrollo de la


nación, pero encausado no sobre la explotación del hombre, sino tutelando los intereses
del campesino y del trabajador.

Dicha legislación se denominó "Estatuto Provisional del Imperio", el cual tenía un capítulo
relativo de las garantías individuales, prohibía los trabajos gratuitos y forzados, se
denunciaba el supuesto por el cual nadie podía obligar sus servicios sino temporalmente y
por virtud del cual se ordenaba a los padres o tutores autorizar el trabajo de los menores.

Durante el imperio se expidió un ordenamiento legal denominado "Ley del Trabajo del
Imperio", la cual facultaba a los campesinos para separarse en cualquier tiempo de la
hacienda a la que prestara sus servicios, jornada de trabajo de sol a sol con sus
respectivas dos horas intermedias de reposo, descanso semanal, pago de un salario en
efectivo, la reglamentación de las deudas de los campesinos, el libre tránsito a los
comerciantes a los centros de trabajo, suprimiendo las cárceles privadas y la no
aplicación de castigos corporales, la elaboración de escuelas en las haciendas en donde
habitaran más de veinte familias, la inspección del trabajo, se establecían las sanciones
pecuniarias por la violación de las normas anteriores y comprendían las demás
disposiciones complementarias.

Lo anterior, quedó como un grupo de disposiciones positivas con buenas intenciones,


pero que no hicieron eco por las circunstancias que privaban en el país y por lo tanto, no
tuvo mayores consecuencias.

2.3.2.3 Código civil de 1870.

Durante la vigencia del Derecho Civil, la situación del trabajador estaba en total
desamparo contra la acción del despido, el Artículo 2586 de este cuerpo legal de 1870,
establecía que el obrero que se hubiera ajustado sin señalar término durante el cual
debería trabajar, ni obra determinada que debería concluir podría y debería ser despedido
a voluntad suya o del que le empleó, sin que por esto pueda pedir indemnización.

Es decir, se dejaba al arbitrio de las partes la duración de la jomada de trabajo, quedando


de manifiesto el derecho del trabajador a "despedirse", sin que ello generara
responsabilidad a su cargo.

Este Código Civil, tenía un matiz remarcado al proteccionismo total en favor del patrón,
donde se entendía por patrón a la persona a quien se prestaba el servicio, dejando a su
arbitrio la terminación del contrato, sin responsabilidad alguna.

131
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

No obstante lo anterior, este ordenamiento fue superior al Código Civil Francés, al no


confundir el trabajo con un alquiler de obras.

Reglamentó el servicio doméstico, las obras a destajo, el servicio por jomada, las obras a
precio alzado, así como el aprendizaje, en donde a falta da reglamentación sobre el
salario, el código civil, contemplaba la posibilidad de estarse a la costumbre del lugar.
Tomando en cuenta la ciase del trabajo, sexo, edad, y aptitud para trabajar.

En conclusión, el Código Civil de 1870 trató de dignificar el trabajo, estableciendo que la


prestación de servicios no era semejante o similar al contrato de arrendamiento, porque
esta circunstancia equiparaba al hombre con una cosa, situación que subrayó este
código, plasmado en un sólo título aplicable a todas las actividades del hombre.

El código de 1870 se encargó de agrupar las figuras del mandato, el ejercicio de las
profesiones y el contrato de servicios.

Sin embargo, al igual que las legislaciones que tuvieron su práctica en esos años, la
situación de los trabajadores siguió igual en términos generales.

2.3.3 Época Porfirista.

Se designa con ese nombre a un amplio período de nuestra historia comprendido entre
los años de 1877 y 1910, durante esta época el General Porfirio Díaz asumió la
Presidencia de la República para convertirse en dictador, el cual modificó las condiciones
del país hasta transformarlo en un incipiente estado capitalista.

Este período se caracterizó por la protección y privilegios otorgados a las inversiones


extranjeras en la gran mayoría de las actividades económicas de la Nación.

Por las condiciones antes referidas, podemos considerar al porfiriato como la dictadura de
los terratenientes aliados al clero y a las fuerzas armadas, bajo el amparo del gobierno.

Debe contemplarse a la política económica de Porfirio Díaz diferente puntos de vista, que
produjeron una completa transformación del país:

a) Se procuró superar el constante déficit de la hacienda pública que arrojaban los


gobiernos anteriores. Sin embargo, para ello se utilizaron procedimientos que* ponían en
riesgo el desarrollo de las actividades económicas, teniendo como consecuencia que se
revirtieron en contra de la población.

b) La problemática agraria (1893) era atendida de manera equivocada, por un lado se


acabó en parte con el latifundismo que ejercía la iglesia. Las compañías deslindadoras y

132
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

las Leyes de Colonización sirvieron para gestar un exagerado latifundismo laico,


ocasionando que grandes extensiones de la tierra estuvieran en manos de unos cuantos
hacendados.

c) La entrega de importantes actividades económicas del país a intereses extranjeros.

d) Se impidió la participación directa del clero y del ejército en la vida económica del país,
proporcionando a estos sectores cómodas situaciones, obteniendo a cambio el respaldo y
la lealtad condicional.

La industria en México durante la época porfirista, tuvo poca afluencia, la mayoría de las
fábricas eran de hilados y tejidos o para industrializar el tabaco.

Las condiciones de los trabajadores eran pésimas, se les endeudaba a través de la tienda
de raya, los salarios eran sumamente bajos, las jomadas de trabajo eran de sol a sol y se
les impedía toda posibilidad de asociación y defensa de sus derechos; lo anterior bajo el
respaldo de las autoridades nacionales, que se encargaban de reprimir por la fuerza,
cualquier manifestación de inconformidad de los trabajadores.

Al periodo comprendido de 1900 a 1904 correspondió al sexto periodo del porfiriato,


donde se hacía más difícil el control de gobierno. Por un lado la disputa por posiciones
políticas por parte de) partido oficial, con perspectivas a suceder at dictador y por otro
lado se encontraba el descontento de un gran sector de la población, que actuaban en
agrupaciones de obreros o círculos liberales, que terminaron por integrar uno de los más
importantes partidos políticos de oposición, el liberal mexicano.

La problemática de la época era cada vez mayor y la inconformidad de los trabajadores


más decidida y poco comprendida por las autoridades. Esas razones se canalizaron en
movimientos obreros como los acontecidos en el Boleo, Cananea y Río Blanco.

Se desarrollaron nuevos grupos sociales que fueron a la postre los que se enfrentaron a
la dictadura.

Los ricos hacendados se vieron afectados en sus privilegios que les otorgaba el sistema
de gobierno, y como consecuencia se lanzaron a luchar por el poder político, a éste se le
agregaron dos importantes sectores sociales: La masa de esclavos y peones, los cuales
no poseían nada y eran duramente explotados por los latifundistas; el otro bando era
formado por individuos y obreros, los cuales vivían en condiciones similares a las del peón
acasillado y que representaron el germen de un proletariado sujeto a graves injusticias por
parte de los patrones.

133
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El General Porfirio Díaz pudo reelegirse una vez más, pero antes de que tomara posesión
para el que sería su octavo gobierno, estalló en su contra el movimiento armado de 1910.

Podemos afirmar que la dictadura generó en su propio seno, las contradicciones que el
pueblo de México trató de resolver mediante el recurso armado, y es a partir precisamente
de la caída de Porfirio Díaz cuando inicia en México la transición del movimiento obrero
organizado de agrupaciones mutualistas y cooperativistas a organizaciones sindicales,
más estructuradas en base a principios políticos e ideológicos.

2.4 Época posrevolucionaria

2.4.1 La revolución de 1910.

Debemos entender por revolución, la modificación violenta de los fundamentos


constitucionales de un estado, abordado el presente concepto podemos ahora entrar al
estudio del presente apartado.

El movimiento armado que se inició en noviembre de 1910 que se conoce como


"Revolución Mexicana", tuvo como propósito principal derrocar a la dictadura de Porfirio
Díaz, para transformar radicalmente las condiciones económicas, políticas y sociales del
país.

La participación en este movimiento abarco diversos sectores de la Nación, todos ellos


con intereses particulares.

El sector de los ricos hacendados mexicanos que tuvo en Francisco I. Madero su


representación. Los cuales propiciaron el estallido de la revolución, para capturar el poder
público y lograr ciertos privilegios en las principales actividades económicas, de los cuales
habían sido desplazados por las compañías extranjeras.

Los restantes sectores de la población, lo constituían los grandes grupos de peones


acasillados y los pequeños núcleos de obreros, que vieron en el movimiento
revolucionario la oportunidad para emanciparse de la opresión y nivelar las grandes
desigualdades económicas y sociales a las que estuvieron sujetos.

Una de las mayores oposiciones la mantuvo el Partido Liberal Mexicano, integrado por los
Hermanos Flores Magón, de pensamiento anarcosindicalista. Ese partido nació del
esfuerzo del círculo Liberal "Ponciano Arriaga", fundado en el estado de San Luis Potosí,
en 1899.

Dos años después convocó a una reunión de círculos liberales en la misma ciudad de San

134
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Luis, y en 1903 se organizó el círculo Liberal al que se la sumaron nuevos miembros.

En su plataforma de principios, el Partido Liberal Mexicano trató de recoger los principales


anhelos de los trabajadores y divulgó la idea de la rebelión por medio del periódico
"Regeneración", que pronto fue prohibido por el gobierno.

Cabe señalar que los medios de comunicación jugaron un gran papel en la difusión de los
programas de los trabajadores en lucha, sin embargo, estos medios fueron reprimidos por
el gobierno de Porfirio Díaz llegando inclusive a la destrucción de las imprentas.

El programa del Partido Liberal Mexicano contempló dentro de su programa 52 puntos, en


los cuales se contenían las cuestiones básicas de la República en orden social,
económico y jurídico, Además del propósito de derrocar al gobierno del General Díaz, que
se planteó la solución de los problemas fundamentales, dentro de los cuales se
encontraban los siguientes puntos:

• Establecer un máximo de ocho horas de trabajo y un salario mínimo.

• Prohibir en lo absoluto el empleo de niños menores de catorce años.

• Obligar a los patrones a pagar indemnizaciones por accidente de trabajo.162

El desarrollo que había alcanzado México en nada beneficiaba al pueblo, ni a los


trabajadores que estaban sujetos a penosas condiciones laborales. Lo que los impulsó a
organizarse para presentar algunas peticiones tendientes a mejorar su situación.

La dictadura nunca supo encausar dichos problemas laborales y como consecuencia de


esa incapacidad por parte de las autoridades, estallaron movimientos obreros en
diferentes puntos del país.

Entre los de mayor importancia deben mencionarse la huelga de Cananea, la de Rio


Blanco, la ferrocarrilera de 1908, las de Tizapan de 1909 y la de 1916, férreamente
reprimidas por el porfirismo y el gobierno de Carranza.

La huelga de Cananea estalló en junio de 1916, sostenida por varios miles de


trabajadores, la cual emplazó a una empresa minera norteamericana, movimiento que fue
cruelmente aplastada por el presidente Díaz.

La huelga de Río Blanco, la sostuvieron los obreros de la comarca de Veracruz, Puebla y


Tlaxcala, a fines de 1906. y a principios de 1907. El conflicto fue sometido al arbitraje del

162
MORENO, Daniel. Derecho Constitucional Mexicano. Décima Primera edición, Porrúa. México. 1991, pág.
218 a 220.

135
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

General Díaz, quien dicto su laudo a principios de 1907, el cual recayó en favor de los
intereses del capital, la cual tuvo un triste final, sufriendo la masacre de los huelguistas.

La huelga ferrocarrilera, gremio que gozaba de gran fuerza, que tuvo su origen a
principios de 1908, donde los jefes de San Luis Potosí castigaban a los obreros
sindicalizados, pero al igual que los anteriores, fueron reprimidos por el General Díaz

La huelga de Tizapán, comienza en marzo de 1909, los cuales tenían una jornada
excesiva y un salario poco remunerador, cerca de mil operarios se lanzaron a la huelga en
la fábrica textil de Tizapán, que finalmente fueron derrotados.

Al respecto de estos movimientos nos permitimos transcribir un párrafo del autor León
Díaz Cárdenas que nos ejemplifica el sentir de tos obreros de aquella época, el cual
señala:

La huelga de Cananea fue la iniciación primordial de las luchas sociales en México, y ella
fue obra de conexión con los trabajadores de la junta organizadora del Partido Liberal
Mexicano, los obreros encontraron en la huelga y en la organización sindical una forma
natural y lógica de lucha. Los capitalistas internacionales, representados por Greene,
tomando primero una actitud llena de falsedad y marrullería, ordenando, con insolencia a
las autoridades nacionales que protegieran sus botines de saqueo más tarde ordenando
la masacre de los trabajadores, sin piedad ninguna".163

Por otra parte el Plan de San Luis Potosí, fue el movimiento por medio del cual Francisco
I. Madero, planteaba un cambio democrático, que planteaba el antirreeleccionista. Este
movimiento tiene su origen inmediato el 5 de octubre de 1910, el cual invitaba al
movimiento armado contra la dictadura porfirista, y que a la postre dio origen a la
dictadura de más de tres décadas, del General Díaz.

Con la expedición de la Constitución de 1914, se cerró el capítulo de la revolución armada


de 1910 a 1917 y se abrió el camino del orden constitucional que ha permitido el
desarrollo del país hasta nuestros días.

Como conclusión podríamos señalar algunos aspectos de carácter social que aún rigen la
vida de los mexicanos dentro de las cuales podríamos señalar

a) Se reitera la destrucción del latifundismo y la creación de la pequeña propiedad.

b) En lo relativo a la cuestión obrera, pugna por la expedición de leyes sobre accidentes


163
DÍAZ CÁRDENAS. León. CANANEA. PRIMER BROTE DEL SINDICALISMO EN MÉXICO. Editorial popular
de los trabajadores. México, 1976, pág. 85.

136
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de trabajo, pensiones de retiro, jornadas, higiene y seguridad en los talleres, fábricas y


minas, y un punto importante es que dispone que se reconozca tanto la personalidad
jurídica de las uniones y sociedades de trabajadores como el derecho de huelga, prohíbe
el pago de jornales por medio de vales.

c) En lo concerniente a tas relaciones familiares, establece la protección de los hijos


naturales y la creación de una ley de divorcio.

El avance del capitalismo en México, bajo los auspicios de la dictadura del General
Porfirio Díaz, hace surgir de manera precisa y consciente al proletariado mexicano, pese a
los finales trágicos.

Consagrándose en los movimientos huelguistas de Cananea y Río Blanco, el desarrollo


de la organización Sindical, Organización que habría de conducirlo a las primeras
conquistas, por su reivindicación.

Legislaciones estatales.

Diversas fueron las legislaciones de trabajo que se iniciaron en las entidades, entre otras
encontramos algunas leyes que brindan la base del derecho del trabajo y reglamentan
cuestiones de corte sindical. De esta forma encontramos un gran avance para la
regulación de las relaciones obrero patronales.

Citaremos las que consideramos las más sobresalientes por su contenido y que fueron:

1.- La ley de Bernardo Reyes, el 9 de noviembre de 1906, que establecía la


responsabilidad civil del patrón por infortunios de trabajo, otorgaba al trabajador asistencia
médica; indemnización y pensión en caso de una inhabilitación.

2.- El 2 de septiembre de 1914 en Jalisco, que consignaba en la legislación laboral el


descanso obligatorio del domingo, exceptuando a trabajadores de los servicios públicos;
contempla un periodo vacacional de ocho días al año y jornada de ocho horas.

3- El mismo año en Jalisco el 7 de octubre de 1914, ley de Manuel Aguirre Berlanga,


enunciaba el concepto de trabajador, establecía una jomada máxima de nueve horas,
fijando un salario para los mineros y para los trabajadores del campo, prohibía el trabajo a
los menores de nueve arlos, a los mayores de nueve pero mayores de doce, debían de
concurrir a la escuela para recibir la instrucción elemental. Se obligaba al patrón a pagar
los riesgos de profesionales, indemnizando al trabajador con salario íntegro en caso de
inhabilitación.

137
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

4.- En el Estado de Veracruz se expide el 4 de octubre de 1914, la ley de Cándido Aguilar,


que contienen aportación de previsión social, obligando a mantener hospitales o
enfermerías, con personal e instrumentación necesarias. Los patrones debían mantener
escuelas de instrucción elemental se crea la inspección del trabajo para verificar el
cumplimiento de la ley, y resolver las controversias obrero-patronales.

5.- En el mismo Estado de Veracruz, el 6 de octubre de 1915, se expide la ley de Agustín


Millán, que reconoce las asociaciones profesionales, antecedente sin duda de tos
sindicatos. Otorgando a estas asociaciones personalidad jurídica y fomentó la
organización gremial.

6.- En Yucatán se expide, el 14 de mayo de 1915, la legislación del general Alvarado,


creando el consejo de Conciliación y el Tribunal del Arbitraje, a este tribunal se
encomienda lograr el equilibrio entre los factores de la producción.

Se reconoce la huelga, como instrumento de defensa de la clase trabajadora, para casos


extremos.

Parte primordial de estos programas políticos, anteriores a la revolución social de 1910,


fueron las reivindicaciones sociales de los trabajadores y el reconocimiento de sus
derechos.

Las anteriores legislaciones laborales expedidas en los estados a partir de 1904, sirvieron
de fundamento al constituyente de 1917, quien más tarde plasmara el espíritu social en
dicha constitución.164

El constituyente de 1917, otorgó a las legislaturas de los Estados, la facultad para expedir
leyes en materia de trabajo.

En lo relativo a las leyes de trabajo de los estados, resaltaremos la importancia de la ley


del trabajo del Estado de Veracruz del año de 1928, y del 14 de enero de 1918, la cual
formó el primer cuerpo de leyes del continente americano, que contempló el derecho del
trabajo, sirviendo de modelo a las leyes estatales posteriores, y operó como un
antecedente en la Ley del Trabajo de 1931.165

En conclusión podríamos señalar que la ley del trabajo de Veracruz, aporto el principio de
la libertad sindical y el derecho de huelga, con los cuales produjo beneficios en el
desarrollo del movimiento obrero hasta nuestros días.

164
Cfr. Briceño Ruíz, Alberto. DERECHO INDIVIDUAL DEL TRABAJO. Óp. Cit. pág. 82 a 85.
165
MUÑOZ RAMÓN. Roberto. Derecho del Trabajo óp. Cit. pág. 201.

138
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.4.2 Constitución de 1917.

Nace a la luz del derecho, la declaración de derechos sociales, que es fuente del Derecho
Agrario y del Derecho del Trabajo. Tiene como antecedente la rebeldía del hombre que
sufría vejaciones e injusticias en el campo, en las minas, en las fábricas y en el taller.

Emana de la tragedia y del dolor de un pueblo y fue creación natural y propio de la cultura
del mexicano, del hombre que venía de ofrecer su vida en la lucha armada.

Los Estados de Jalisco y Veracruz hicieron grandes aportaciones al derecho del trabajo,
en el primero se expidió un decreto sobre la jornada de trabajo, descanso semanal y
obligatorio y vacaciones, y en Veracruz se decretó lo que merece el título de primera ley
del trabajo de la Revolución Constitucionalista.

En este Estado se promulgó la primera ley de asociaciones profesionales de la República.

En Yucatán en 1915 se expidió un conjunto de leyes que se conocen como "las cinco
hermanas: agraria, de hacienda, el catastro, de) municipio libre y del trabajo".166

Este cuerpo legal declaró algunos de los principios básicos que integrarían el Artículo 123
de la Constitución. De tal forma que en el derecho del trabajo está destinado a cubrir las
necesidades de una clase social; el trabajo no debería ser considerado como una
mercancía; y que las normas contenidas en el cuerpo legal, sirven para facilitar la acción
de los trabajadores organizados en su lucha con los detentadores del capital, estas
normas contienen un mínimo de normas legales que deben disfrutar los trabajadores, las
cuales se verán engrandecidas por vía de los contratos colectivos y en los laudos del
tribunal de arbitraje.

La ley reglamentó las instituciones colectivas como son: las asociaciones, los contratos
colectivos y las huelgas, y por lo que hace al derecho individual aborda cuestiones como;
la jornada máxima, descanso semanal y salario mínimo. Contiene normas relativas al
trabajo de mujeres y de los menores de edad.

La ley creó las Juntas de Conciliación y el Tribunal de Arbitraje, órganos facultados para
dirimir los conflictos de trabajo, individuales y colectivos, de naturaleza jurídica o
económica, considerándoseles amplias prerrogativas para poner fin a las controversias
que se suscitaban entre el obrero y el capital.

Este nuevo documento promulgado por el constituyente de 1917, consagra principios de

166
DE LA CUEVA. Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, óp. Cit. pág. 40.

139
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

orden social, junto a los derechos individuales que fueron la preocupación de las
constituciones de corte liberal del siglo anterior.

Esta Constitución de 1917, es un documento amplio en el que se preservan garantías


individuales, y de igual forma organiza el Estado Mexicano y sus respectivos órganos de
gobierno, las facultades de quienes intervienen en la Administración Pública Federal, así
como las relaciones laborales, estableció una educación laica y gratuita y estableciendo
que las tierras y aguas son propiedad original de la nación. Prohíbe los monopolios y
sobre todo fija con precisión las condiciones de trabajo en México, estableciendo el
principio de coaligarse en defensa de sus respectivos intereses formando para tal efecto
sindicatos, o asociaciones profesionales.

Con la expedición de esta constitución de 1917, se pone fin a la revolución armada de


1910 a 1917, y es con la promulgación de este documento donde encontramos el
antecedente del sindicalismo mexicano, creándose organismos de representación obrera
como:

• La Confederación Regional Obrera Mexicana.

• La Confederación General de Trabajadores.

• Los Sindicatos Católicos.

• La Confederación General de Obreros y Campesinos de México.

• La Confederación de Trabajadores de México y,

• La Unión General de Obreros y Campesinos.

Sin embargo, consideramos que pese a las múltiples centrales obreras y a la diversidad
de corrientes sindicales no encontramos en la actualidad una organización que represente
realmente los intereses de los obreros de nuestro país que los lleve a lograr la
reivindicación de sus respectivos intereses económicos y sociales.

2.4.3 El artículo 123.

Este precepto legal obligó a las legislaturas locales a expedir leyes en Materia de Trabajo,
de acuerdo a las necesidades regionales.

En la actualidad está federalizada la legislación del trabajo, como resultado de la


demanda de los propios trabajadores.

Con la aprobación del Artículo 123 Constitucional, se estableció un régimen en materia

140
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

laboral, que se consolido sin duda como una de las más auténticas de la Revolución
Mexicana.

Se consigna en forma expresa el derecho de asociación sindical contemplando sus


posibles consecuencias fácticas o jurídicas, en su Fracción XVI, establece el derecho de
asociación profesional en general.

Al respecto, el maestro Trueba Urbina comenta:

...en cuanto que si la legislación del trabajo ha de reivindicar los derechos del proletariado,
tal reivindicación descansa en el principio marxista de lucha de clases y función
revolucionaria de la asociación sindical obrera, porque sin duda que el derecho de
asociación profesional de los trabajadores en particular está alentado en dichos principios
y teoría de la reivindicación.167

El constituyente en su afán de promover el espíritu del proletariado mexicano, para iniciar


una nueva etapa en la dinámica de la supresión del régimen de explotación del trabajo
humano, ordeno a través de su Artículo 11 transitorio que las bases del Artículo 123
entraron en vigor a partir del 1a de mayo de 1917.

De tal forma que se depositaba en las manos de tos trabajadores su propio destino,
iniciándose nuevas esperanzas en el movimiento obrero.

Pese al impulso que fomentó el Artículo 123 Constitucional al movimiento obrero


mexicano, originando con este hecho la formación de organizaciones de trabajadores, no
podemos afirmar que se ha alcanzado su destino histórico.

Desde la formación de la primera Central Nacional, el 21 de mayo de 1918, denominada


Confederación Regional Obrera Mexicana, hasta las organizaciones de más reciente
creación, no ha podido alcanzar una verdadera hegemonía sindical, ni aún la
Confederación de Trabajadores de México, que postulaba la supresión de las clases
sociales, ha logrado captar los cambios de la clase obrera con políticas que confunden o
desconciertan a sus agremiados y sin embargo, la naturaleza revolucionaria del derecho
de asociación, independientemente de sus dirigentes, será la que propicie el cambio
mediante la revolución proletaria, consiguiendo de ese modo la supresión de la
explotación capitalista.

Concluyendo, podríamos decir que entre estos derechos sociales que postulaba el

167
TRUEBA URBINA, Alberto. Nuevo Derecho Administrativo del Trabajo. Tomo II. Porrúa, México, 1973, pág.
1373.

141
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Artículo 123 Constitucional, está el de asociación profesional para obreros y campesinos,


coaligándose en defensa de sus respectivos intereses, formando sindicatos, para
confrontar al trabajo con el capital que es la base de la lucha de ciases, logrando con este
hecho el mejoramiento económico de los trabajadores.

2.5 Movimiento social obrero mexicano.

La historia del movimiento sindical en nuestro país, tal y como lo conocemos en la


actualidad, está totalmente ligada a la formación, desarrollo, consolidación y decadencia
del Estado semibonapartista emergido de la Revolución de 1910-17, consolidado durante
la época del Cardenismo. La actual crisis que vive el Estado mexicano también se
expresa en la crisis del corporativismo y por tanto de los sindicatos afines a esta norma.

El nacimiento definitivo del movimiento sindicalista en México se dio con el proceso de


industrialización que apareció prácticamente después de la revolución de independencia,
pero que no avanzó de manera significativa sino hasta el fin de la intervención francesa.
La industria, en su mayoría textil y minera, se desarrolla y con ella los primeros grupos de
obreros organizados. La organización en aquel entonces era de carácter mutualista, es
decir sociedades de asistencia que los obreros construían para apoyarse en caso de
alguna desgracia. En 1865 aparecen los primeros grupos anarquistas, los cuales serán
dominantes durante todo el siglo XIX. Durante esta fase, la actitud del Estado, ya sea
encabezado por Juárez, Lerdo o Díaz, fue de combatir formalmente cualquier tipo de
organización o lucha. La organización más importante de dicha época fue el Gran Círculo
Nacional de Obreros de México, formado en 1872, a esa organización rápidamente se
integraron la mayoría de los las sociedades obreras existentes en diversas partes del
país. Las ideas anarquistas del Gran Círculo no le impidieron entrar en contacto con el
gobierno y para 1879, el gobierno porfirista interviene en un conflicto interno apoyando a
una fracción, la cual se apodera del aparato, el movimiento se divide y el gobierno
porfirista combina la complacencia hacia los grupos afines a él y la represión absoluta en
contra de todo tipo de disidencia.

El movimiento tiende a reorganizarse en dos vertientes: la defensa de los derechos de los


trabajadores y la posición al gobierno de Díaz. Así surgen los Círculos liberales de los
cuales surge el Partido Liberal Mexicano, que impulsa en 1911 la Confederación Nacional
de Trabajadores, como una alternativa de carácter radical a la Casa del Obrero
Mundial(COM), la cual es una derivación del sindicalismo, anarquista de palabra y
colaboracionista en los hechos, que provenía de los círculos de la época porfirista.

142
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La represión, que todos los grupos en el gobierno ejercieron sobre el movimiento de


Flores Magón, así como una política sectaria hacia el movimiento campesino, llevó a la
liquidación del movimiento anarquista más combativo. Mientras tanto la política de
colaboración de clases de la Casa Obrero Mundial tuvo su punto culminante con la
alianza que sellaron sus dirigentes con Obregón en Febrero de 1915, que se cristalizó en
la formación de los "batallones rojos", grupos de obreros armados que combatieron en
contra de los ejércitos campesinos de Villa y Zapata. Una vez que el movimiento
campesino fue derrotado militarmente, el Gobierno de Carranza procedió a la ilegalización
de la organización luego de un intento de huelga general entre los meses de julio y agosto
de 1916. La represión incluyó condenas a muerte en contra de muchos dirigentes y tuvo
un efecto bastante traumático para muchos trabajadores que habiendo combatido al lado
de Carranza, ahora se veían reprimidos por él.

Con la represión a la Casa Obrero Mundial en 1916, podríamos decir que termina la
primera fase en la historia del sindicalismo mexicano. El Estado que se funda a partir de la
constitución de 1875 es francamente burgués, en esta fase de lento desarrollo de las
fuerzas productivas, el desarrollo y las luchas del proletariado por mejores condiciones de
vida se entrelazan en contra de la herencia feudal. En esta fase, una democracia
burguesa como la que sueñan los constituyentes del 57, es imposible. El Estado a la par
que impulsaba la industrialización, establecía para ello una alianza con el capital
extranjero y con los terratenientes semifeudales del campo, únicos con el capital
disponible para invertir.

En este contexto, la superexplotación de la mano de obra del campo y la ciudad no podía


generar más que condiciones para una insurrección. En este sentido el Estado,
especialmente el porfirismo, no podía aceptar la existencia de organizaciones sindicales
como tal. Compró y protegió organizaciones mutualistas pero nada más. La organización
sindical aparecía entonces como sinónimo mismo de subversión.

Las luchas de Cananea y Río Blanco son un emblema de lo que tenía que enfrentar el
sindicalismo y el movimiento obrero en aquellos tiempos.

Desde principios de 1906 en Cananea también se había prendido el fervor revolucionario,


Lázaro Gutiérrez de Lara, que sostenía relaciones epistolares con Ricardo Flores Magón y
recibía el periódico “Regeneración”, organizó el "Club Liberal de Cananea", donde se
propagaban ideas que no solamente eran contrarias al régimen de dictadura de Porfirio
Díaz, sino que expresaban principios de transformación social profunda, influidos por los

143
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

ideales del socialismo, que entonces aún no se había dividido por estas latitudes en
socialismo autoritario y socialismo libertario, sino que se hablaba de reivindicaciones
sociales inmediatas y de luchas encaminadas a la Revolución Social finalista.

Cabe recordar que en Cananea había descontento entre los trabajadores de la empresa
norteamericana que explotaba las minas de cobre – The Cananea Consolidated Cooper
Company - que pagaba unos salarios bajísimos y permitía que a los trabajadores se les
tratara inhumanamente por parte de los empleados norteamericanos, especialmente por
algunos capataces.

El uno de junio de 1906 comenzó la huelga. El pliego de condiciones que presentaron a la


empresa los obreros huelguistas - condiciones que el abogado patronal califico de
absurdas - decía:

“Primero: Queda el pueblo obrero declarado en huelga.

Segundo. El pueblo obrero se obliga a trabajar bajo las condiciones siguientes:

• La destitución del empleo del mayordomo Luis (nivel 19).

• El mínimo sueldo del obrero será de cinco pesos, con ocho horas de trabajo.

• En todos los trabajos de "Cananea Consolidated Cooper Co.", se emplearán el 75% de


mexicanos y el 25% de extranjeros, teniendo los primeros las mismas aptitudes que los
segundos.

• Poner hombres al cuidado de las jaulas que tengan nobles sentimientos para evitar toda
clase de irritación.

• Todo mexicano, en los trabajos de esta negociación, tendrá derecho al ascenso, según
se lo permitan sus aptitudes”.168

La huelga de Cananea fue el primer suceso de importancia capital en las luchas obrero-
patronales, tanto por los ideales que se manifestaban en el proletariado, ideales de
innegable esencia libertaria y anarquista, como por sus consecuencias inmediatas y la
influencia que posteriormente había de tener en el desarrollo del movimiento obrero
mexicano, prostituido por el liderismo politizado y gansteril. Los antecedentes inmediatos
de la huelga de Río Blanco pertenecen, sin ninguna clase de dudas, a la propaganda
magonista, que se había extendido considerablemente desde que apareció Regeneración,
el 7 de agosto de 1900.

168
www.historiadecananea.com.mx

144
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

A mediados de 1906 se había creado en Río Blanco una "Sociedad de Obreros Libres".
Bien pronto se fundaron círculos afines en Puebla, Querétaro, Jalisco, Oaxaca y Distrito
Federal, los cuales reconocían al de Río Blanco como centro director.

Ningún Estado y menos un Estado burgués se funda sobre la nada y en aquel entonces,
la burguesía nacional se enfrentó al hecho consumado de que las masas campesinas
habían destrozado las bases fundamentales de las estructuras semifeudales en el campo,
ocupando tierras y liquidando físicamente a muchos terratenientes, y por otro lado la
dinámica misma del proceso revolucionario había enfrentado a esta misma burguesía, al
otro sustento económico del Estado porfiriano: el capital extranjero.

No quedaba otra más que optar por apoyarse en el ejército para sostenerse en el poder y
asumir como propias ciertas reivindicaciones sociales del movimiento campesino y obrero,
que si bien había sufrido importantes derrotas no estaba sofocado. Había en el seno
mismo de la facción constitucionalista grupos muy radicales como los de Lucio Blanco y
Francisco J.

Mújica, que podían insubordinarse en el caso de que las "promesas" de Carranza y


Obregón no asumieran un carácter de compromiso serio.

De esta forma la Constitución de 1917 es el acta de fundación de un Estado donde la


burguesía tiene un poder endeble y muchas cuentas pendientes: educación, salud,
trabajo, tierra, independencia, etc.

La segunda etapa comienza con la llamada “era del corporativismo”. En este sentido, el
Estado que surge de la revolución, obligado -por su carácter de clase- a realizar el
programa político de la burguesía, pero forzado por las fuerzas que lo llevaron al poder a
realizar una serie de reformas, se ve en la necesidad de construir esos mecanismos de
consenso que no posee y sin los cuales no podría aspirar a sostenerse. Como lo pueden
mostrar los levantamientos armados que se sucedieron durante los siguientes 20 años, el
ejército no podía ser el único garante de la estabilidad del gobierno.

El 3 de mayo de 1918, en la Ciudad de Coahuila, se funda la Confederación Regional


Obrera de México, con Luis N. Morones a la cabeza.

Los sindicalistas, que intuían la maniobra, no participaron en la formación de la


Confederación Regional Obrera de México, ya que formarían el Gran Grupo Central de
Trabajadores (CGT).

En la presidencia de Venustiano Carranza, el Gran Grupo Central de Trabajadores se vio

145
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

suprimido, por lo que desapareció.

A partir de la Confederación Regional Obrera de México se funda el Partido Laborista


Mexicano que surgió como uno de los elementos electorales de la campaña de Obregón y
de Calles.

Es a partir de este momento, cuando se estructura la simbiosis entre el sindicalismo


corporativo y el Estado, donde se consolidó el corporativismo, tomando en consideración,
la huelga ferrocarrilera de enero a marzo de 1921 en la que se agrupan también los
electricistas, tranviarios y telegrafistas. Esta lucha se generó por el reconocimiento de una
confederación sindical de ferroviarios ajena a la Confederación Regional Obrera de
México y cercana al Grupo Central de Trabajadores.

Derivado de lo anterior, la política del Estado se orientó a promover la Confederación


Regional Obrera de México, llegando a acuerdos de paz y la creación de movimientos
disidentes.

El Partido Comunista Mexicano se caracterizaba por una política sectaria, que nunca se
enfrascó en la tarea de construir puntos de apoyo dentro de la Confederación Regional
Obrera de México.

Como parte de la política represiva del Presidente Plutarco Elías Calles, se establece en
1931 la Ley Federal del Trabajo, la cual surge con una abierta intención de someter a una
rigurosa normatividad la defensa de los intereses de los trabajadores con el fin de
establecer un control sobre ellos: el Estado por medio de las Juntas de Conciliación y
Arbitraje, se resguarda el derecho de declarar legal o ilegal una huelga, con lo cual,
adquiere la potestad de manipular este derecho según sus necesidades. El Estado
también se atribuye la capacidad de reconocer la existencia o no de un sindicato y así
mismo establece que los contratos colectivos se tendrían que celebrar con un sindicato
reconocido. Estas medidas tenían como objetivo que las relaciones laborales sólo se
establecieran con aquellos sindicatos que el gobierno considera conveniente.

Es dable decir que, la promulgación de la Ley Federal del Trabajo tuvo un carácter
reaccionario y conforma un elemento más en el movimiento obrero.

A pesar de todo, las movilizaciones obreras no paraban, las organizaciones sindicales


antigubernamentales cundían por doquier y la influencia del movimiento comunista crecía
a pesar de las detenciones y la ilegalidad.

Bajo esas condiciones, el periódico “El Machete” llegaba a tirar más de 50 mil copias. A

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

pesar de su notable influencia, en comparación de su tamaño, el Partido Comunista no


asumió una posición correcta frente al movimiento sindical oficialista y se conformó con
mantener la Confederación Sindical Unitaria.

A principios de 1935 se crea el Comité Nacional de Defensa Proletaria, organización en la


que los comunistas aceptaron entrar como medio para enfrentar la represión estatal y
preparar condiciones para regresar a la legalidad.

Las divisiones en el seno de la burguesía adquirieron un carácter crítico en 1935, cuando


ante el auge del movimiento huelguístico, específicamente expresado en la lucha de los
obreros de "La vidriera" de Monterrey, el gobierno nuevamente se ve en la disyuntiva de
reprimir u obligar a los patrones a ceder.

Plutarco Elías Calles, partidario de la represión, declaró públicamente la necesidad de dar


un escarmiento a luchar "por el bien de la patria y la economía", lo que atizó el conflicto
que terminaría con su expulsión del país un año después.

La posición de Cárdenas fue más bien la de utilizar todas las armas legales para construir
un movimiento obrero "aliado del gobierno revolucionario". De este modo, lejos de poner
trabas a la formación del Comité Nacional de Defensa Proletaria, impulsó la participación
en él de las organizaciones sindicales afines al gobierno, las cuales por cierto, también se
estaban impregnando de la radicalización de aquel entonces y emprendían luchas
reivindicativas.

La Confederación de Trabajadores de México no surgió como un producto de las


intenciones gubernamentales para controlar al movimiento obrero, sino que fue un
genuino proceso de unificación del movimiento sindical en proceso de radicalización y de
construcción de una identidad propia, ante el cual, el Estado decidió involucrarse, o más
bien, involucrar a sus organizaciones afines con el objetivo de evitar la pérdida definitiva
de influencia sobre el mismo.

La Confederación de Trabajadores de México se constituyó el 24 de febrero de 1936


sobre la base de la intervención de la corriente oficial dirigida por Fidel Velásquez y los 5
“lobitos”, la de Lombardo Toledano y la Comunista.

A finales de 1936 estalló una crisis en el seno de la dirección de la Confederación de


Trabajadores de México, ya que Fidel reclamaba las principales posiciones de la misma,
las cuales estaban controladas por comunistas, entre ellos Valentín Campa; la situación
se resolvió en favor de Fidel Velásquez por iniciativa de Earl Browder. El documento

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

también resolvía "reconocer los acuerdos del IV Consejo y la autoridad del Comité
Nacional que encabeza el compañero Lombardo Toledano”.169

El Partido Comunista Mexicano fue obligado a aceptar su separación de la dirección de la


Confederación de Trabajadores de México y a buscar la construcción de un supuesto
Frente Popular Antifascista.

En 1936-1938 se disputaron luchas importantísimas en todos los sectores, ferrocarrileros,


petroleros, electricistas, las masas trabajadoras construían una identidad propia y el
Partido Comunista Mexicano tenía la oportunidad histórica de confluir en ese movimiento
para darle un carácter genuinamente independiente de la burguesía y su Estado. Este,
mientras tanto, actuaba a la defensiva, apareciendo siempre detrás de un hecho
consumado del lado del más fuerte.

Al desertar de la lucha, el Partido Comunista Mexicano dejó en bandeja de plata al


movimiento en manos de la alianza burocrática oficialista que aprovechó la ocasión para
construir un pacto sobre la base de la ideología de la burguesía nacionalista gobernante.

El Cardenismo, se basó en el oportunismo de dirigentes como Lombardo Toledano y Fidel


Velásquez para establecer en el terreno de la relación con el gobierno, una subordinación
total, la cual se comenzaba con cargos políticos por medio de un partido casi único.

En el terreno de la relación obrero patronal, la Confederación de Trabajadores de México


tendió desde 1938 a evitar que los trabajadores estallaran luchas; así el número de
huelgas pasó de 319 en 1938 a 98 en 1942.

Bajo la tutela del Estado, se desarrolló una burguesía parasitaria totalmente dependiente
tanto del capital internacional como de los subsidios y beneficios que le reportaba el
sector estatal de la economía. No obstante el periodo que va de 1930 a 1970, transformó
totalmente la realidad de los mexicanos, la población se concentró en las ciudades y el
proletariado creció hasta convertirse en la fuerza social más importante.

Conforme al Anuario Estadístico de la OIT, “en 1940 apenas el 20% de la población vivía
en zonas urbanas, para 1978 el porcentaje era del 65%. En 1970 el 58.2% de la población
laboraba en actividades del campo, para 1980 ese porcentaje había disminuido a menos
del 30%, mientras que el sector manufacturero creció hasta llegar al 18% de la población
ocupada; al mismo tiempo 41% se dedicaba a minería, construcción y servicios”.170

169
Cfr. CAMPA, Valentín. Mi Testimonio, Ediciones de Cultura Popular, 1985, pág. 130-135
170
OIT, anuario estadístico. 2006, visible en www.oit.org.mx

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Como resultado del proceso de diversificación del capitalismo en México, se crearon


diversos estratos, medios, sectores que van desde la pequeña burguesía urbana y rural
hasta las capas más beneficiadas del proletariado; su crecimiento fue un tanque de
oxígeno para el régimen, que sin muchas contemplaciones reprime salvajemente
cualquier expresión de lucha de los trabajadores y los jóvenes, siendo ejemplar la heroica
lucha de los trabajadores ferrocarrileros, que fue aplastada en sangre en 1959 y la lucha
estudiantil de 1968, la cual terminó en la matanza del 2 de octubre, por sólo citar dos
ejemplos.

La crisis de mediados de los años setentas (75-76), puso fin a este periodo de crecimiento
sostenido, a partir de ahí las crisis se han repetido de forma continua, 1982-83, 1987-88,
1994-95 y finalmente la actual, que aún no estalla en toda su expresión, han tenido
efectos devastadores en la estabilidad- otra envidiable- del régimen mexicano.

Las luchas de los trabajadores y jóvenes en todo este período obligaron a la burguesía a
modificar sus mecanismos de control, pasando de priorizar la represión física de masas, a
priorizar la represión selectiva, utilizando al máximo sus mecanismos de control
ideológico.

Es justo reconocer que en estos tiempos había una sobreestimación de fuerzas por parte
del movimiento sindical independiente, bajo la idea de que el corporativismo estaba
acabado. La realidad era que a pesar del desgaste, tanto el sistema como el sindicalismo
corporativista conservaban importantes reservas, esto aunado a la práctica sectaria del
independentismo, hizo que se lograra atravesar el temporal con un sindicalismo oficialista
diezmado pero no acabado.

En el sexenio de Miguel de la Madrid no existió crecimiento económico, por lo que el


capitalismo mexicano entró en la crisis más severa desde la posguerra. En virtud de lo
anterior, el gobierno recurrió a una serie de pactos económicos donde se condenaba a la
población trabajadora a una brutal reducción salarial, tan sólo en el periodo de 1982 a
1992 el salario se hizo tres veces más pequeño, gracias a la inflación y a los topes
salariales. La incapacidad de la burguesía nacional para desarrollar al país se puso
manifiesta; coyuntura que permitió a una capa de tecnócratas totalmente afín a las
políticas del imperialismo norteamericano, asumir el control de la situación.

Durante esta etapa se comienza a desarrollar otro proceso, las burocracias sindicales

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

cada día reciben menos tajada del pastel, por lo que la misma debilidad económica de las
finanzas públicas hace que el derroche de los charros se convierta en un privilegio que el
Estado no se podía seguir dando, lo que genera una paulatina diferenciación entre los
intereses de ciertos sectores de la burocracia sindical y los del Estado.

No debemos olvidar que el movimiento magisterial dio una batalla histórica que demostró
que la alternativa no es crear sindicatos independientes, sino democratizar los sindicatos
de masas que ya existen.

El 28 de noviembre de 1998 en la ciudad de México se creó la Unión Nacional de


Trabajadores, que integra a más de 150 sindicatos y en torno a un millón trescientos mil
afiliados.

La época del “neoliberalismo”, se caracteriza por una profunda embestida contra todos los
derechos de los trabajadores, lo que ha generado una profunda crisis en el seno del
sindicalismo corporativo.

El surgimiento de la Unión Nacional de Trabajadores es producto de las presiones desde


abajo, del fermento social en la base de los sindicatos. Fue así como algunos sectores del
sindicalismo oficial decidieron que era el momento de adaptarse a los nuevos tiempos,
con el fin de no perder sus posiciones privilegiadas en el seno de la burocracia sindical,
cuya dirigencia máxima (Congreso del Trabajo y Confederación de Trabajadores de
México) conforme se agudizan todas las contradicciones pierde poder de negociación con
el régimen.

El primero en actuar fue el dirigente de los telefonistas Francisco Hernández Juárez,


amigo personal de Carlos Salinas y actualmente miembro del Consejo Nacional del
Partido Revolucionario Institucional.

Durante el sexenio del Lic. Carlos Salinas de Gortari se organiza, junto con otros
sindicatos, la formación de la Federación de Sindicatos de Bienes y Servicios (FESEBES),
posteriormente en unión con Elba Esther Gordillo, de la cúpula del magisterio oficial y
Antonio Rosado del Sindicato del Seguro Social, todos ellos alguna vez diputados del
Partido Revolucionario Institucional y parte de su dirección nacional, forman en 1995 el
Foro de Sindicatos ante la nación.

Ninguno de estos dirigentes tiene la idea de la emancipación de la clase obrera o algo por
el estilo. De hecho todos ellos firmaron todos los pactos sociales que, tanto Salinas como
Zedillo les propusieron para apretar aún más el cuello de la clase obrera mexicana.

150
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El principal punto de convergencia de ellos es el cuestionamiento a la Confederación de


Trabajadores de México y el Congreso de Trabajo como los voceros oficiales de la clase
obrera mexicana ante el gobierno. Tampoco la defensa de la democracia sindical es uno
de sus atributos, cuando así lo han considerado necesario, no han dudado en emplear
grupos de choque para reprimir otras corrientes sindicales en su seno, implementar
fraudes para mantenerse en el poder o meter a la cárcel a aquellos que les estorbaban.

Cuando muere Fidel Velásquez a mediados de 1998, hacen pública su intención de


formar una nueva central, hecho que provocará una ruptura con aquellos sectores
oficialistas que no estaban dispuestos a llegar al punto de escindir al Congreso del
Trabajo (Elba Esther Gordillo).

2.6 El sindicalismo contemporáneo.

Después de la Segunda Guerra Mundial, los Estados democráticos pusieron en práctica


un nuevo modelo político-económico: el Estado de Bienestar. Esta forma política
pretendía, a través de una doble redistribución de la renta desde el Estado (programas de
bienestar y reactivación de la demanda), conseguir el crecimiento del consumo y
reestructuración del Mercado.

El laissez - faire que había caracterizado a las democracias liberales en los años
anteriores pasa a convenirse en un modelo de fuerte intervención y regulación Estatal.

Este modelo funcionó durante más de veinte años con considerable éxito: crecimiento
económico sostenido, pleno empleo, inversiones públicas, extensión de los servicios
sociales, lo que permitió un desarrollo y aumento del nivel de vida en estos países.

La combinación en muchos de los países occidentales del Welfare State y las políticas
Keynesianas con partidos socialdemócratas en el gobierno generó un clima de consenso
y estabilidad social al tiempo que hizo posible una alianza con el movimiento sindical,
logrando éste reconocimiento, presencia institucional y voz en la esfera política.

En estas condiciones, el sistema productivo y el mercado de trabajo se caracterizaban por


la solidez y la estabilidad. Un rentable sector industrial, basado en la industria pesada, la
química, el metal, etc., junto a un creciente pero todavía no mayoritario sector terciario,
dominaba el sistema productivo de aquellos años. Paralelo a él, un mercado de trabajo
definido por el pleno empleo la homogeneidad de la clase trabajadora (preeminencia del
obrero industrial>, y la estabilidad en el puesto de trabajo.

El movimiento sindical resultó favorecido por esta coyuntura. El sindicalismo se vio

151
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

reforzado política, institucional y organizativamente; acuerdos con el poder político y éxito


de sus reivindicaciones, presencia institucional, crecimiento de la afiliación y amplia
representación y legitimidad ante la clase trabajadora.

La llegada de la crisis económica a comienza de los años setenta cambian radicalmente


este escenario. El freno del crecimiento económico, los fenómenos e inflación, el déficit
público o crecimiento fiscal del Estado y desempleo masivo, comienzan a verse en la
mayoría de las democracias occidentales como consecuencia generalizada de la recesión
económica.

Tras el Welfare State se instaura un nuevo modelo, el neoliberalismo, que preconiza una
nueva vuelta al mercado como agente regulador fundamental.

El sector industrial sufre una grave crisis: pérdida de competitividad y empleo. Los pilares
del sostenimiento industrial de los sesenta: naval, siderurgia, química, han de afrontar una
profunda reestructuración y reconversión en sus empresas; el sistema industrial hasta
entonces existente, deja de ser rentable y la organización de la producción ha de
adaptarse a las nuevas existencias del mercado: descentralización del proceso
productivo, menor cantidad de bienes producidos, subcontratación de la producción en
unidades más pequeñas. En palabras de Sabel, comienza a hablarse de una pluralidad de
futuros industriales.

A su vez, derivado de los efectos de recesión y reestructuración del sistema productivo, el


mercado de trabajo cambia en una doble vertiente:

- Transformaciones cuantitativas: crisis de empleo.

- Transformaciones cualitativas: el empleo se diversifica en trabajo temporal, fijo, a


tiempo, parcial, y se precariza en economía sumergida, mercados secundarios de trabajo.
De la homogeneidad de los años sesenta se encuentra el empleo industrial,
semicualificado, a tiempo completo y por tiempo indefinido.

El mercado de trabajo que antes de la crisis había funcionado como elementos


aglutinante de la clase trabajadora, es un elemento desestructurado de la misma.

En virtud de lo anterior, los sindicatos tienen una doble cara:

A nivel macro: el sindicato como institución de voz y su papel en la esfera de lo público.-


Desde esta perspectiva, se considera al sindicato como una organización de intereses
que, superando los límites de la empresa y del proceso productivo; es capaz de

152
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

representar y articular demandas en el ámbito de la política pública. Como consecuencia


de lo anterior, surgen tres modelos sindicales, los cuales responden a la desigualdad en la
participación de la vida pública, estos son:

• Modelo italiano o reivindicativo, definido por:

• Sindicatos con bajo poder político.

• Clase trabajadora movilizada.

• Sindicatos de clase: fuerte ideologización.

• Estado débil; falto de legitimidad, y

• Pluralismo sindical.

• Modelo anglosajón o descentralizado, caracterizado por:

• Fragmentación de los conflictos.

• Separación de la política y la economía.

• Mutua autonomía de las partes (Estado, sindicatos, empresarios).

• Modelo europeo o concentrado, determinado por:

• Concentración de las relaciones industriales.

• Cooperación del sindicato en la política industrial.

• Coordinación y acercamiento de los intereses.

• Grandes decisiones por grandes organizaciones.

Nivel micro: los recursos organizativos del sindicato y su actuación en el centro del
trabajo.- Para poder analizar este apartado, es necesario agotar dos temas: la
negociación colectiva y la afiliación.

La negociación colectiva puede considerarse como elemento integrante de los distintos


sistemas de relación industrial.

Junto a la negociación colectiva hay que tomar en consideración otros factores, tales
como el contexto sociopolítico, “cultura sindical”, o “el entorno productivo e ideológico.

A partir de los años ochenta, y coincidiendo con la superación del ajuste industrial, y
económico, dos clases de proceso están teniendo lugar en relación al contenido y ámbito
de la negociación colectiva:

153
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

- La necesidad del enriquecimiento de los contenidos de la negociación colectiva,


pasando a significar, más allá de acuerdos sobre incrementos salariales, compromisos
que incluyan negociaciones sobre nuevas tecnologías, reducción de jornada, regulación
de la productividad, condiciones de trabajo y empleo.

- Una atención renovada a la negociación colectiva a nivel micro, es decir, en el centro de


trabajo. Después de las experiencias en los setenta del neocorporatismo, políticas o
pactos o concertación, parece que la tendencia en los ochenta se orienta, sin obviar, en
los acuerdos de alto nivel, hacia la descentralización de la negociación colectiva.171

A partir de la recesión económica de los setenta, el sindicalismo en los países


occidentales sufre, de manera generalizada, una crisis de afiliación.

Esta caída de las tasas de afiliación, puede interpretarse desde una doble consideración.

- Perspectiva estructural: aquella que relaciona la desafiliación con los cambios de


estructura social. El repliegue a la esfera de lo privado.

- Perspectiva laboral: aquella que relaciona las tasas de afiliación con aspectos
relacionados con la estructura laboral y con las funciones del sindicato.172

La crisis de la afiliación de los últimos años, coincidiría y sería consecuencia del


individualismo imperante en la sociedad y del consiguiente desinterés por los asuntos y
acciones colectivas.

Por otra parte, el sindicalismo industrial afianzado en los años setenta, definió su
estrategia en relación al paradigma del trabajador en esa etapa, es decir, del obrero
industrial.

El sistema productivo y el mercado de trabajo que resultan de la crisis, provocan una


profunda crisis de representación en el sindicalismo de los países occidentales, la base
tradicional de la afiliación sindical, el obrero de cuello azul, pierde importancia (cualitativa
y cuantitativa), ya que no es la única realidad ni la mayoría en el mercado de trabajo.
Nuevos trabajadores y multiplicación de los intereses: parados, jóvenes, mujer,
empleados del sector de servicios, trabajadores de la economía sumergida, pasan a
formar parte de las bases potenciales del sindicato.

El argumento de la diversidad y la pluralidad de intereses entroncan directamente con la


teoría de Olson y su “lógica de acción colectiva, cuan mayor es un grupo, mayores y más
171
Cfr. http://revistas.ucm.es/cps/11308001/articulos/POSO9090120065A.PDF
172
Ídem.

154
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

dispersos serán los intereses, por tanto, más difícil resulta la consecución de la eficacia.173

2.6.1 El Obrero del Siglo XX.

Durante los últimos 20 años, como hemos señalado, México ha vivido una
reestructuración en torno a su estructura económica. Las ramas motrices de la economía
han pasado, primero de las manos del Estado a las del sector privado, esto
fundamentalmente durante los sexenios de De la Madrid y Salinas; Otro momento de esta
transferencia fue el periodo zedillista, marcado por la crisis del 95 que determinó la
consolidación de un entramado financiero industrial que controlaba para 1988 el 34% del
PIB y que tenía como eje de articulación a la banca. Actualmente estamos viviendo una
fase de transferencia del control de dicho entramado principalmente al capital
norteamericano, no obstante todo este proceso, en lo que hace a la estructura industrial
como tal, no se han sufrido grandes modificaciones, es decir este proceso no ha implicado
una transformación de la estructura industrial, con excepción de la industria maquiladora,
la cual genera más del 40% de la producción manufacturera.

Para 1990, del total de la población económicamente activa (PEA) el 66.2% correspondía
a trabajadores asalariados (cerca de 16 millones), de este total de asalariados, el 47.3%
estaban considerados como obreros (7,526,520) y de estos el 51.3% (3,862,294) estaban
empleados en la industria de la transformación (manufactura, minería, electricidad,
construcción, etc.)

En ese año el total de trabajadores sindicalizados urbanos era de 7,826,571, es decir un


49% del total de los trabajadores asalariados y un 30 % del total de las personas
económicamente activas.174

Los datos de los años posteriores no señalan alguna disminución del peso de los
asalariados en la PEA, ni del nivel de sindicalización: Entre 1988 y 1997 el porcentaje de
población asalariada con respecto del PIB pasó del 71.6 al 70.8%, es decir, se mantuvo
estable, en lo que se refiere al nivel de sindicalización, como ya señalamos, en 1990
constituía un 49% del total de los asalariado, para 1996 era el 46%.

En el año 2001 el 34.2% del empleo se concentra en la producción manufacturera, el


18.6% en comercio y el 19.4 en servicios personales.

El peso del sector manufacturero también se ha mantenido estable, especialmente por la

173
Cfr. OIT, anuario estadístico, 2006.
174
Cfr. OIT, anuario estadístico. 2006.

155
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

expansión de las exportaciones, las cuales han aumentado un 400% en estos últimos 10
años, en este terreno los porcentajes de sindicalización tampoco han variado de manera
significativa; en 1991 el 87% de las empresas grandes contaba con sindicato, para 1995
el porcentaje era del 89% y el porcentaje de sindicalizados era del 63.9%. En las
empresas medianas el porcentaje pasó del 84 al 84.5% en el mismo periodo y en las
pequeñas del 66 al 60.1% y en las empresas micro pasó del 6.9 al 9.5% es decir creció.

2.7 Organizaciones obreras post-revolucionarias.

2.7.1 Confederación regional obrera mexicana.

La Constitución de 1917 forjó las bases para la construcción de un Estado poderoso y


centralizado, proporcionando una ideología oficial capaz de atraer y mantener la fidelidad
de una coalición de varias clases sociales. Este documento fue la encarnación de las
ideas y maneras de actuar que desde 1913 habían ido madurando poco a poco, pero que
la estrechez del liberalismo de Carranza habían impedido realizar y expresar en términos
nacionales.

A la Constitución siguió un año más tarde, la fundación de la primera organización obrera


propiamente dicha y de carácter moderno y nacional: La Confederación Regional Obrera
Mexicana (CROM). Su creación representó un triunfo de los dirigentes obreros que
decidieron aprovechar la mayor debilidad de la clase trabajadora del país, es decir, la
incapacidad para transformarse en un foco de acción política independiente, con objeto de
garantizar un futuro mejor mediante la alianza con personalidades políticas.175

Este agrupamiento sindical tendría organizaciones textiles de Puebla, Tlaxcala y Veracruz


que difundieron la formación de grupos mixtos de campesinos, asalariados, y ejidatarios,
con evidente sello clasista. Así se integraba, por primera vez, un movimiento proletario de
obreros y campesinos que no solamente lucharía por la defensa de sus intereses
económicos al amparo de la ley, sino que, también, aspiraba que sus demandas de
justicia social modificaran algún día los preceptos establecidos. Es que de esta manera
arranca el movimiento sindicalista que se dirigía contra un régimen que moderaba a la
revolución.176

Fue un grupo de trabajadores encabezado por Luis N. Morones, dirigente del sindicato de
electricistas, el que, el 20 de febrero de 1917 constituyendo el Partido Socialista Obrero,
transformaba la consigna de lucha de acción directa por la acción múltiple.
175
Palavicini F. Mi vida revolucionaria, págs. 239-242.
176
Echeverría R. Política y sindicatos en México. Facultad de Derecho, págs. 29-33.

156
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En la convención obrera iniciada en la ciudad de Tampico, el 13 de Octubre de 1917, se


pusieron de manifiesto las dos tendencias reinantes, pues mientras los viejos teóricos del
movimiento obrero nacional permanecían leales al anarcosindicalismo, los elementos
encabezados por Morones, se definían por una política de entendimiento con el gobierno
de Carranza.

El 22 de Marzo de 1918 cuando en la Legislatura del Estado de Coahuila, creó y organizó


un verdadero organismo nacional, denominado CROM. De tal organismo resultó
Secretario General, Luis N, Morones, cuya preponderancia en el movimiento obrero
continuaba creciendo.

Con la creación de la CROM; tomó fuerza el colaboracionismo, siendo pocas las


agrupaciones obreras que se sustrajeron a su política. La American Federation of Labor
proponía en nuestro país, a todas las organizaciones proletarias nacionales a establecer
relaciones recíprocas y solidarias entre los trabajadores organizados de México y Estados
Unidos. Esto, sin olvidar una acción futura acerca del movimiento obrero, con vistas al
panamericanismo proletario.

En el período del General Álvaro Obregón quien gobernó de 1920 a 1924, significando la
primera etapa de su gobierno por el cumplimiento de sus mandatos constitucionales en
cuanto al problema obrero campesino se refería.

La CROM desligada de Carranza en el momento oportuno, se acomodó al nuevo régimen


alcanzando gran preponderancia. Luis N. Morones fue nombrado agente confidencial del
Gobierno obregonista ante la Casa Blanca, y su influencia se hizo mayor en la política
nacional.

En el año de 1922 se celebró en la ciudad de Guadalajara, por obreros católicos, un


congreso en el que se constituyó la Confederación Nacional Católica del Trabajo
consagrando al Sacratísimo Corazón de Jesús. El deseo el clero mexicano de dirigir el
movimiento obrero, influyendo en los sectores proletarios más retrasados políticamente,
no consiguió, a pesar de sus esfuerzos, impedir que el referido congreso se precisara el
sentido clasista que lo animaba.

En algunas entidades federativas, como Veracruz, el movimiento obrero campesino


tomaba incremento por la ayuda que el Gobierno local impartía, suscitándose una lucha
violenta en su contra por parte de los sectores de la burguesía nacional y terratenientes
unidos, apoyados por las fuerzas federales y guardias blancas, creada por los grandes

157
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

propietarios de la tierra y armadas por los jefes militares. Es así, que en este Estado se
llevaron a cabo los movimientos huelguísticos más importantes de esa época.

El 1o de febrero de 1923, las tropas de la guarnición de la plaza de la ciudad de México,


habían reprimido la huelga de los tranviarios por medio de las armas. El general Obregón
declaró estar dispuesto a morir antes que permitir que en el país reinara la anarquía. Su
ministro de Gobernación, el general Calles había hecho uso de la fuerza y seguiría
empleando el mismo procedimiento, a fin de otorgar a la sociedad las garantías que
justamente reclama. De este modo fue como ocurrió el proceso del movimiento obrero en
el período presidencial del General Álvaro Obregón.177

La llegada de Calles a la presidencia de la República inaugura una nueva coalición de


fuerzas políticas que desembocará en una época termidoriana, en la que los elementos
avanzados de la revolución mexicana serán derrotados y perseguidos. El gobierno de
Calles logra conformar una coalición burguesa más amplia, rodeada de una aureola
obrerista.

El obrerismo de Calles se manifestaba esencialmente en el poder despótico de la


burocracia sindical. Efectivamente, el más poderoso instrumento de Calles fue hasta
1928, el dirigente de la CROM y su pantalla política, el Partido Laboralista Mexicano, no
sólo se conformó una alianza con el gobierno de Calles; en realidad se produce una
verdadera simbiosis, de tal suerte que los dirigentes de la CROM pasan a formar parte del
aparato estatal mismo, así, hacia 1927 tienen 11 de los 48 senadores, 40 de los 272
diputados, dos gobernadores, un miembro del gabinete (el propio Luis N. Morones, ocupa
la Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo).

La CROM constituía en 1924 un formidable aparato burocrático incorporado al Estado, era


la organización más importante y poderosa del país. En términos generales, tenía una
influencia decisiva entre los tipógrafos, los obreros de la industria textil, los trabajadores
portuarios, los empleados de teatro, espectáculos públicos, empleados del gobierno,
además agrupaba una masa heterogénea poco organizada que incluía desde jornaleros
agrícolas, vendedores ambulantes, sirvientas, toreros, y una unión de prostitutas de la
ciudad de México. La base social de la CROM se caracterizaba por ser de carácter
artesanal, por el peso de masas pauperizadas no proletariadas y por la importante
presencia de empleados y burócratas. En cambio, los sectores como la industria
petrolera, eléctrica y ferrocarrilera era en donde esta organización tenía menos influencia.
177
Mancisidor J. El movimiento social en México, pág. 88.

158
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

De cualquier manera, la composición de la CROM reflejaba el atraso industrial del país.

Luis N. Morones como Secretario de Industria, Comercio y Trabajo se oponía a la


renovación de instalaciones y maquinaria y propugnaba abiertamente el desarrollo de
empresas de tipo semiartesanal. El liderazgo despótico burocrático moronista, versión
urbana del caudillismo rural, constituyó una poderosa palanca para quebrar el espinazo al
movimiento obrero independiente. Este se mostró siempre muy orgulloso de la enorme
disminución del número de huelgas y de huelguístico durante el período en donde fijé
Secretario. Era la prueba palpable de sus tesis reaccionarias pequeño burguesas sobre la
necesaria armonía entre el trabajo y el capital. Pero la explicación del descenso
huelguístico se encuentra, por el contrario en el control despótico que ejercía Morones no
sólo sobre el proletariado organizado de la CROM, sino muy especialmente en la juntas
de conciliación y arbitraje.

Pero et enorme peso de la CROM y del grupo de Morones al interior del Estado mexicano
no sólo se explica por la necesidad de controlar y reprimir al movimiento obrero. Morones
constituyó un factor clave para garantizar el equilibrio político coyuntural de la nueva
coalición de fuerzas que representa el gobierno de Calles; en efecto, Morones es utilizado
como contrapeso frente a la poderosa a la caudillista y agrarista de la revolución, como
muro de contención que permite ensanchar los intereses dominantes al darle el gobierno
una gran capacidad de maniobra y una gran autonomía para reorganizar el aparato del
Estado. Esto, fue en el fondo, la contradicción que precipitó la caída de Morones y la
extinción del poderío de la CROM a partir de 1928.

El aparato moronista sindical y la CROM se ubicó como un aparato reaccionario del


Estado y no como un movimiento reformista, ya que, detrás del poder obrero en el
gobierno de Calles se escondía una trágica derrota proletaria.

2.7.2 Confederación general del trabajo.

Sin duda alguna, la lucha del movimiento obrero independiente y la de oposición sería la
que permitiría, años más tarde, la unificación del movimiento obrero mexicano. A pesar
del poder aparentemente omnímodo de la CROM y de Morones, la verdadera memoria
histórica del proletariado mexicano se acumula en el seno de la CGT, creada desde 1921,
en el movimiento de inspiración anarco-sindicalista y en el movimiento comunista.

La oposición obrera durante la segunda mitad de los años 20s se desarrolla con grandes
dificultades en los sectores industriales más importantes, que constituyen ya claramente

159
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

centros de intensa proletarización. En contraste con la base social característica de la


CROM, la oposición obrera tiende a florecer en los sectores industriales más avanzados,
en las actividades económicas de menor carácter y tradición artesanal.

Así se ejerce una importante influencia en la industria petrolera del golfo de México, entre
los ferrocarrileros, los telefonistas, los tranviarios; en Jalisco y Durango la oposición
obrera controla algunas organizaciones mineras; en Veracruz ejerce influencia en la
industria eléctrica y los transportes; en Tampico en la industria petrolera, la eléctrica y los
transportes. Pero también enfrenta a la CROM en el sector manufacturero más tradicional:
la industria textil del centro de México (Puebla, D.F., Estado de México).

Dos corrientes ideológicas fundamentales se desarrollan en los medios obreros de la


oposición: el anarco-sindicalismo, estrechamente ligado a los conflictos en la industria
textil del centro del país, así como a la lucha de los petroleros del Golfo de México. La
segunda tendencia es dirigida por el Partido Comunista, y su importancia se manifiesta
sobre todo en el conflicto ferroviario de 1926-1927.

De estas dos corrientes ideológicas, una de sus organizaciones más importantes fue
creada desde 1921 con la participación de anarquistas y comunistas: la Confederación
General de Trabajo. En esos momentos el joven proletariado vive momentos importantes
de agitación, que marcan la primera fase del movimiento obrero combativo de los años
20s. En ese momento, algunos sectores de la pequeña burguesía radical y ciertos
dirigentes obreros se proponen a la creación de la CGT.

La CGT planteó la lucha de clases como principio fundamental de la organización obrera y


como objetivo supremo del movimiento proletario el comunismo libertario. En cuanto a los
métodos de lucha en contra de la clase capitalista, propone la acción directa por medio de
la huelga general, se opone a todo tipo de reformismo sindical tendiente a establecer
mejores métodos de colaboración entre trabajo y capital. En poco tiempo, ésta
organización logra desarrollar una enorme influencia en la industria textil, petrolera, etc.
Meses después de su fundación aparecen discrepancias entre la corriente hegemónica y
los comunistas, la discusión de éste problema precipita la salida de los comunistas de la
CGT.

Al iniciarse el período gubernamental de Elías Calles los grupos vinculados al


anarcosindicalismo han perdido fuerza entre las masas trabajadoras. Uno de los factores
fue la represión brutal que ejerce el gobierno mexicano en cada conflicto, a los militantes
de la CGT, que no cuentan con una organización política adecuada para defenderse. En

160
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

segundo lugar, la aparición de algunas fracciones en el seno de la CGT que producen


diferencias y escisiones importantes, aunada a la absorción por parte del Estado
mexicano de varios dirigentes nacionales de la CGT.

En 1925 el partido comunista emprende una campaña por el "Frente Único" con el
objetivo de desarrollar un trabajo unitario entre las masas obreras y campesinas y de
llevar a la práctica una política de ofensiva y defensiva frente a la CROM. En
consecuencia, se organizan los pactos de solidaridad y de apoyo mutuo entre distintas
federaciones obreras autónomas. De ésta manera, se establece un "Comité de Unidad
Proletaria", que este comité será el embrión de la Confederación Sindical Unitaria de
México, creada a principios de 1929.

En 1925 los comunistas que habían apoyado al gobierno de Obregón en la lucha contra el
levantamiento huertista de 1923, habían apoyado la candidatura de Calles en el mismo
año, enfrentándose a una nueva situación percatándose del nuevo carácter del gobierno
de Calles. El Partido Comunista Mexicano inicia una política sutil y flexible, que al mismo
tiempo que atacaba a los dirigentes moronistas de la CROM y a los anarco-sindicalistas
de la CGT, hacía esfuerzos por desarrollar la lucha en la base de las organizaciones
obreras.

2.8 Breves antecedentes del Derecho Mexicano del Trabajo

El presente capítulo tiene como finalidad el describir brevemente antecedentes sobre el


nacimiento del Derecho Mexicano del Trabajo y su desarrollo hasta nuestros días,
basados en un panorama históricos, entendiéndose el porqué de la protección y tutela
hacia el trabajador por parte del legislador al establecer en nuestra Constitución Federal
los mínimos a observarse en toda relación de trabajo y en las causas de terminación del
conflicto, porque no solo reconoce la libertad de trabajo, también reúne en su conjunto los
derechos del trabajador para protegerlo y tutelarlo ante el patrón.

El Doctor Mario De la Cueva apunta que “El Derecho mexicano del trabajo es un estatuto
impuesto por la vida, un grito de los hombres que solo sabían de explotación y que
ignoraban el significado del término: mis derechos como ser humano178”.

El Derecho del Trabajo, nace a raíz de las extremas necesidades por parte de grandes
grupos de individuos y como tal tiene como objeto el responder a los reclamos que

178
Ibídem, p. 38.

161
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

provocaron las convulsiones sociales, registradas en México, en la primera década del


siglo XX, como más adelante en el desarrollo de este capítulo se detalla.

El Derecho del Trabajo en México y su desarrollo hasta nuestros días, rama importante de
reciente formación autónoma derivada en sus inicios del Derecho Privado y más
recientemente del Derecho Público y Social, es consecuencia necesaria de las luchas de
clase, cuyos orígenes en el mundo se remonta desde varios siglos, existiendo
antecedentes concretos; por esta razón iniciamos el presente capítulo de antecedente a
partir del México Precolombino.

El pueblo azteca integrado por guerreros y de naturaleza nómada, no pudieron establecer


sus costumbres con fuerza de ley, no existía identificación con la tierra, que es el principio
del derecho de propiedad. La inmigración azteca fue de norte a sur, lo que influyó mucho
en sus costumbres, pues los pueblos establecidos del norte estaban mucho más
atrasados que los del sur.

En el norte, el principio social, fue la familia, que al crecer formaba una tribu. El interés se
limitó a la caza y en las tierras aledañas los siervos trabajaban en el campo.

Por el contrario, en el sur, encontramos ya desarrollado el principio de la nacionalidad y el


derecho de propiedad como elemento social que hace la diferencia entre las castas.

El pueblo azteca desarrolló ambas posturas, que una vez unidas comenzó el orden social
a crear una distinción en las labores, como eran el campo, la guerra y la artesanal, y no
obstante que había distinciones sociales, no creaban esa costumbre tan fuerte que
pudiéramos llegar a considerarla Ley.

Se sabe que las ocupaciones a que se dedicaban los antiguos mexicanos, satisfacían sus
propias necesidades primarias y estaban encaminadas hacia la preservación de sus
propias culturas. En la civilización maya, por ejemplo, su principal ocupación era la
agricultura, cultivaban maíz, cacao, fríjol y algodón.

Estos trabajos agrícolas junto con la caza y la pesca, eran comunes y una vez que
obtenían los productos los repartían por partes iguales.

Es así, como en el México prehispánico, aunque había división del trabajo,


especialización del trabajo y trabajadores, no existía una verdadera reglamentación que
regulara las labores desempeñadas; por tal razón, en éste periodo no podemos hablar de
disposiciones legales protectoras del Derecho del Trabajo.

162
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En la Colonia dentro de las diversas organizaciones precortesianas es la esclavitud la


base del trabajo como función económica y, por lo mismo, la negación de la relación
laboral propiamente dicha.

Durante la Colonia, se expidieron las Leyes de Indias, España creó una serie de
mandamientos legislativos más humano de los tiempos modernos, señala el jurista
Euquerio Guerrero que “tales mandamientos de las Leyes de Indias de 1561 a 1769, y en
muchos de ellos se encontraban disposiciones extremadamente interesantes; que existían
prevenciones que limitan la jornada, que aluden al salario mínimo, que señalan una
protección en el trabajo, a las mujeres y a los niños; pero el espíritu que las anima es más
bien el humanitario y cristiano de los Reyes Católicos a quienes las peticiones de los
frailes que tanto defendieron a nuestros indígenas o de algunos virreyes bondadosos,
llevaron a proteger a los naturales contra los abusos de encomenderos ambicioso179”.

En esta época se marca concepción de una nueva sociedad integrada por criollos,
mestizos e indígenas, que van definiendo sus propias formas de vida, arte y cultura.

Lo más importante de esa época, es la figura del aprendiz que surgía dentro de los
llamados gremios, los cuales eran asociaciones profesionales cuyo fin consistía en la
regulación del trabajo entre sus asociados y en el mandamiento de un monopolio contra
terceros. Sin duda, es aquí, en dónde empieza a dar la figura de la relación laboral,
aunque en ese tiempo no se reconocía.

El sistema de gremios de la Colonia era distinto al régimen corporativo europeo; en el


Viejo Continente, las corporaciones disfrutaban de una gran autonomía que dictaban en el
terreno de la economía y para regular las relaciones de trabajo de los compañeros y
aprendices valían por voluntades de ellas, sin necesidad de homologación alguna. En la
Nueva España, las actividades laborales estuvieron regidas por las Ordenanzas de
Gremios a través de las corporaciones gremiales que fueron un acto de poder de un
gobierno absolutista que restringía la producción en beneficio de los comerciantes de la
península; aun cuando las Ordenanzas contenían diversas disposiciones, los maestros
gremiales gozaban de una cierta autonomía para dictar las reglamentaciones
complementarias.

179
GUERRERO, Euquerio. Manual de Derecho del Trabajo, Óp. cit., p. 22.

163
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La estructura jerárquica de los gremios estaba formada por aprendices, compañeros u


oficiales y maestros. El deber esencial del aprendiz, consistía en aprender un oficio y
obedecer al maestro.

El aprendiz, una vez que adquiría los suficientes conocimientos del oficio, éste debía
prestar sus servicios bajo otra categoría que era la de oficial, por lo que en ese momento
quedaba protegido por un contrato de trabajo, siendo además obligación por parte del
mismo, seguir agremiado por lealtad y sin poder aspirar a llegar a ser maestro.

Esta situación motivo la necesidad de formar gremios de oficiales y compañeros que se


enfrentaron a verdaderas luchas con las agrupaciones de los maestros que buscaban
privilegios para su clase, así como prolongar el período de aprendizaje con la única
finalidad de explotar a aquellos aprendices a los que ya se les podía otorgar la calidad de
oficiales, pues de ésta forma no se les permitía ascender a dicha categoría y por ende, no
les pagaban un salario ni los contrataban, situación que les permitía mantenerse en el
poder.

Por otro lado, los oficiales o compañeros, utilizaron agrupaciones para combatirlos y evitar
la explotación y los continuos abusos de que eran objeto los aprendices por los maestros.

Los gremios de la Nueva España se extinguieron legalmente dentro del régimen colonial,
algunas ordenanzas del siglo XVII se ocuparon de la libertad de trabajo, pero fueron las
Cortes quienes las acabaron. Si bien la Ley del 8 de junio de 1813 autorizaba a los
hombres avecinados en las ciudades del reino para que se establecieran libremente las
fábricas y oficios que quisieren sin necesidad de permiso o pertenencia a algún gremio,
fue el Decreto Constitucional de Apatzingán, debido a José María Morelos y Pavón, con
un profundo sentimiento liberal y humano el que declaró en su artículo 38 que “ningún
género de cultura, industrial o comercio, puede ser prohibido a los ciudadanos excepto los
que formen la subsistencia pública180”.

2.8.1 La Legislación en el México de la Independencia.

A pesar del espíritu profundo del pensamiento social de José María Morelos y Pavón, el
siglo XIX en México, no conoció el Derecho del Trabajo: en su primera mitad siguió
aplicándose el viejo derecho español, las Leyes de Indias, la Siete Partidas, la Novísima
Recopilación y sus normas complementarias.

180
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo I, Óp. cit., p. 40.

164
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Desde el principio de la guerra de Independencia, ni una vez concluida ésta, no se


encuentran disposiciones precisas que pudiéramos considerar derechos de los
trabajadores, esto es, en ninguno de los bandos, declaraciones, constituciones, etcétera,
existen precedentes protectores de la clase trabajadora.

El Doctor Néstor de Buen señala que “la subsistencia de las disposiciones vigentes en la
Nueva España podría inferirse de los artículos 1° y 2° del Reglamento Provisional Político
del Imperio Mexicano, antecedentes remotos de nuestro artículo 123 constitucional
vigente, y que decían: “Art. 1°.

Desde la fecha en que se publique el presente reglamento, queda abolida la constitución


española en toda la extensión del imperio”. Art. 2° “Quedan, sin embargo, en su fuerza y
vigor las leyes, órdenes y decretos promulgados anteriormente en el territorio del Imperio
hasta el 24 de febrero de 1821, en cuento no pugnen con el presente reglamento, y con
las leyes y decretos expedidos, o que se expidieren en consecuencia de nuestra
independencia181”.

El 6 de diciembre de 1810, se dio en la ciudad de Guadalajara lo que conocemos como el


Bando de Hidalgo, que en su artículo 1° ordenaba a los dueños de esclavos que les
diesen la libertad, en el término de diez días, so pena de muerte.

Por su parte Ignacio López establece en lo que llamó los Elementos Constitucionales, por
lo que señalamos lo que consideramos más importante, pues estableció en su artículo 24
igualmente, la proscripción de la esclavitud, y en su artículo 30 decretaban la abolición de
los exámenes de artesanos, que quedarían calificados solo por su desempeño, lo que
constituye importante y claro antecedente a la eliminación del sistema gremial heredado
de la Nueva España.

Las Cortes de Cádiz expiden la Constitución española, la cual fue jurada en España el 19
de marzo de 1812 y en la Nueva España, el 30 de septiembre del mismo año, cuya
vigencia fue por demás precaria. Ésta Constitución fue suspendida por el virrey Venegas,
y retomada por Callejas en alguna de sus partes, para que por decreto de Fernando VII,
de fecha 4 de mayo de 1814, se restauraba el sistema absolutista (publicado en la Nueva
España el 17 de septiembre del mismo año), concluyera su vigencia. Por lo que en el mes
de marzo de 1820, como consecuencia del levantamiento de Riego, Fernando VII volvió a
establecer en vigor la Constitución y el virrey Apodaca la juró el 31 de mayo, pero en está

181
DE BUEN L., Néstor. Derecho del Trabajo, Óp. cit., pp. 299 y 300.

165
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

no se establece norma o disposición alguna, ni siquiera relativa a la libertad de trabajo o


industrial, ya que subsistía en España el régimen corporativo. Éste fue prohibido por el
Real Decreto de 20 de enero de 1834, acontecimiento importante, pues se concluye que
nuestro país se adelantó respecto de España, al menos en la intención de los documentos
dictados a través de la lucha por la independencia en establecer la libertad de trabajo y de
industria.

En los Sentimientos de la Nación o 23 puntos, a los cuales da lectura por José María
Morelos y Pavón, el 14 de septiembre de 1813, en Chilpancingo, establece en lo más
importante que nos interesa de esta obra, en el punto 12° se señala “que como la buena
ley es superior a todo hombre, las que dicten nuestro Congreso deben ser tales que
obliguen a constancia y patriotismo, moderen la opulencia y la indigencia, y de tal suerte
se aumente el jornal del pobre, que mejore sus costumbres, aleje la ignorancia, la rapiña y
el hurto182”. Además en su punto 15° insiste en la prohibición de la esclavitud y también de
la distinción de castas.

El Decreto Constitucional para la libertad de la América Mexicana, disposición que fue


sancionada el 22 de octubre de 1814, en Apatzingán, a instancia de José María Morelos y
Pavón, disponía en su artículo 38 la libertad de cultura, industrial y comercio, a favor de
todos los ciudadanos.

Agustín de Iturbide en su Plan de Iguala, dado el 24 de febrero de 1821, señala en su


artículo 12 “todos los habitantes de él (del imperio mexicano), sin otra distinción que su
mérito y virtudes, son ciudadanos idóneos para optar cualquier empleo183”.

El 18 de diciembre de 1822, se da el Reglamento Provisional Político del Imperio


Mexicano, citado al principio de éste punto, es intranscendente porque no menciona nada
respecto a posibles derechos vinculados al trabajo.

Tampoco en la Constitución de 4 de octubre de 1824, existe disposición alguna que


pueda establecer antecedente de derechos laborales; pero es en este momento donde
México adoptó la forma de república representativa, popular, federal.

La Constitución centralista y conservadora de 29 de diciembre de 1836, también es


omisa, en atribuir cualquier derecho laboral. Tal disposición en cuanto su vigencia
concluyó el 6 de octubre de 1839.

182
Ibídem, p. 300.
183
Ibídem, p. 301.

166
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Por lo que es hasta el proyecto de la nueva Constitución de 1856 en el que aparecerá esa
inquietud al discutirse la necesidad de atender el problema de los trabajadores.

2.8.2 La condición de los trabajadores en los años de 1821 a 1856.

Al concluir la guerra de Independencia, no parece que la condición del peonaje mexicano


haya mejorado. Los gobiernos que a través de los años detentaban el poder, estaban
demasiado ocupados en la política, que seguramente vivían en un estado de anarquía y
de inseguridad social, dejaron a su suerte los aspectos comerciales e industriales.

Entre 1821 y 1856 es poca la información que existe respecto de esa época. Expone
Guadalupe Rivera Marín que “hacia 1823 nos encontramos con jornadas de trabajo de
dieciocho horas laboradas y salarios de dos reales y medio; para la mujer obrera y los
niños se destinaba un real semanario. Pero más grave aún, treinta y un años más tarde,
en 1854, los obreros percibían salarios de tres reales diarios –sin que la jornada hubiera
disminuido en más de una hora- lo que significa que en treinta y un años el aumento de
los salarios fue de seis centavos184”.

Bajo el gobierno de Antonio López de Santa Anna, se dan las primeras organizaciones
artesanales sustantivas de los antiguos gremios fueron creados hacia 1843, e inclusive,
son de aquella misma época las llamadas Juntas de Fomento de Artesanos y las Juntas
Menores que trataron de fomentar la protección a la industria nacional y defenderla de la
competencia de los productos extranjeros, en el que se trataba además de crear fondos
de beneficencia pública, mediante la aportación de cuotas semanales, para el socorro de
los beneficios, con el objeto de establecer, en última instancia, cajas y bancos de ahorro.

“En1856 –señala Gastón García Cantú- nuestro país tenía un poco más de 7 millones de
habitantes. El valor de la producción agrícola ascendía a unos 210 millones de pesos
anuales. Había 8 fábricas de papel, 46 de hilados y tejidos –movidas por maquinaria- que
producía más de 870 mil piezas de manta al año. En otras fábricas más pequeñas se
elaboraban, principalmente, aguardiente de caña, jabón, aceites, vasijas, alfarería, loza;
una variedad cuyo valor anual, con el de las telas, se hizo ascender a cerca de 100
millones de pesos185”. Dejando mucho que desear la situación económica y demográfica
nacional; además de ésta tan precaria industria, había una producción minera más
importante de la que, en el mismo año de 1856, se obtuvo oro por valor de 1,049,222,

184
Ídem, p. 301.
185
Ibídem, p. 302.

167
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

plata por 16,636, 955, más unos seis y medio millones en barras para la exportación y
otros dos millones en diferentes productos mineros.

2.8.3 La Constitución de 1857.

Al concluir la Revolución de Ayutla, la cual tenía como objetivo, el derrocar la dictadura


personalista de Antonio López de Santa Anna, con la finalidad de obtener el
reconocimiento de los derechos fundamentales del hombre, integrar su nacionalidad y
conquistar su independencia y la libertad y la justicia para sus hombres; movimiento
armado que significo el triunfo del pensamiento individualista y liberal de la época.

Una vez derrocado Antonio López de Santa Anna, se convocó a un Congreso


Constituyente, el cual se llevó acabo en la Ciudad de México entre los años de 1856 y
1857, que tiene como logro la Constitución de 1857.

En dicho Congreso Constituyente, tiene como resultado uno de los documentos jurídicos
más importantes del siglo XIX, como es la declaración de derechos del Congreso, es de
sentido individualista y liberal, que tuvo importantes disposiciones relativas al trabajo; y los
artículos 4° y 5° que consignaron las libertades de profesión, industria y trabajo, el
principio de que “nadie puede ser obligado a prestar trabajos personales sin justa
retribución y sin su pleno consentimiento186”.

En la Constitución de 1857, en su artículo 4° estableció. “A ninguna persona se le podrá


impedir el dedicarse a la profesión, industria, comercio o trabajo que le acomode, siendo
lícitos”. Y el artículo 5° dispuso:

“Nadie Puede ser obligado a prestar servicios personales sin la justa retribución y sin su
pleno consentimiento”.

En el Congreso Constituyente de 1856 y 1857, en dos ocasiones se propuso el tema del


Derecho del Trabajo, pero no se obtuvo tal reconocimiento, en virtud de que el valor
absoluto que los defensores del individualismo que le otorgaban a la propiedad privada y
la influencia de la escuela económica liberal, constituyeron obstáculos insalvables. Ignacio
Ramírez (nigromante) reprochó a la Comisión dictaminadora el olvido de los grandes
problemas sociales, puso de manifiesto la miseria y el dolor de los trabajadores, hablo del
derecho a recibir un salario justo, siendo la esencia del artículo quinto, y además en un
hecho histórico habla por primera ocasión de la necesidad de que el trabajador a participe
en los beneficios de la producción, antecedente inmediato de la participación de las
186
DÁVALOS, José. Derecho del Trabajo I, Óp. cit., p. 57.

168
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

utilidades de la empresa; situación que la asamblea no le dio la importancia debida por


parte de sus diputados. En contra de este pensamiento, en sesión de 8 de agosto de
1856, en torno al debate sobre las libertades de profesión, industrial y trabajo, Ignacio
Vallarta leyó un discurso en el que expuso la explotación de que era objeto los
trabajadores y la urgencia de evitarla; pero cuando todo hacía creer que propondría el
reconocimiento constitucional de los derechos del trabajo, concluyo diciendo en armonía
con el pensamiento individualista y liberal, que las libertades de trabajo e industria no
permitían la intervención de la Ley, es decir que estas cuestiones no pueden entrar en la
Constitución, sino que tales problemáticas se deben dejar a las leyes reglamentarias.

El 5 de febrero de 1857, fue jurada la Constitución por el Congreso y por el Presidente


Comonfort. Documento que contiene el pensamiento liberal que no permitió que se
consagraran derechos a favor de la clase trabajadora, que pudieran normar o regular las
condiciones en la prestación de los servicios.

Años después, México es objeto de un régimen monárquico, resultado de la imposición de


Maximiliano de Habsburgo como Emperador en nuestro país; personaje que elaboró una
legislación social tendiente al desarrollo de la Nación, pero no sobre la base de la
explotación del hombre, sino buscando proteger campesinos y trabajadores.

En el Capítulo de las garantías individuales consagradas en los artículos 69 y 70 del


Estatuto Provisional del Imperio, se prohibieron los trabajos gratuitos y forzosos; no
podían obligarse los trabajadores a prestar sus servicios indefinidamente; se dispuso que
los padres o tutores debieran autorizar el trabajo de los menores.

Con fecha 1° de noviembre de 1865, expidió otra Ley que llamo Ley del Trabajo del
Imperio, que consagró la libertad de los campesinos de separarse en cualquier tiempo de
la finca a la que prestaran sus servicios; una jornada de trabajo de sol a sol, con dos
horas intermedias de reposo; descanso semanal; pago de salarios en efectivo;
reglamentación de las deudas de los campesinos; libre acceso a los comerciantes a los
centros de trabajo; supresión de las cárceles privadas y de los castigos corporales;
escuelas en las haciendas en donde habitaran veinte o más familias; inspección del
trabajo; sanciones pecuniarias por violación de las normas anteriores y demás
disposiciones complementarias.

Estas disposiciones que surgieron en el imperio de Maximiliano, solo quedaron como


buenas intenciones, las cuales no tuvo consecuencias.

169
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En un intento de dignificar el trabajo, el Código Civil de 1870, estableció que la prestación


de servicios no era equiparable al contrato de arrendamiento, pues el hombre no es igual
a una cosa. Tal ordenamiento legal en cita reúne en un solo título a todas las actividades
del hombre, se agruparon las figuras del mandato, el ejercicio de las profesiones y el
contrato de servicios.

La Huelga de Cananea de 1906, en la que los trabajadores exigían la obtención de


mejores salarios y la supresión de los privilegios que se otorgaban a los empleados
norteamericanos por parte de las empresas. La huelga fue aplastada con lujo de violencia
con intervención de tropas norteamericanas. La Huelga de Río Blanco, Orizaba, en el
Estado de Veracruz, el día 7 de enero de 1907, al igual que la Huelga de Cananea,
establecimiento de la jornada de ocho horas, al principio de igualdad de salario y al
derecho de preferencia de los mexicanos. Río Blanco se convierte en la razón máxima
para que el régimen revolucionario prohíba, después las tiendas de raya.

El legislador del Estado de México, con fecha 30 de abril de 1904, dictó una Ley, que
establecía la obligación de prestar atención médica requerida y pagar el salario a los
trabajadores, hasta por tres meses, en caso de accidentes por riesgos de trabajo; Ley que
fue propuesta por el gobernador José Vicente Villada.

El manifiesto y programa del Partido Liberal presidido por Ricardo Flores Magón, que fue
publicado en el año de 1906, se analizó la situación del país en esa época y las
condiciones de los obreros y campesinos, proponiendo reformas de fondo a los
programas políticos, agrarios y del trabajo. Contiene además, algunos principios e
instituciones que fueron consagradas en la Declaración de Derechos Sociales de la
Constitución de 1917: mayoría de trabajadores mexicanos en todas las empresas e
igualdad de salarios para nacionales y extranjeros; prohibición del trabajo de los menores
de nueve años; jornada máxima de ocho horas; descanso semanal obligatorio; fijación de
salarios mínimos; reglamentación del trabajo a destajo; pago del salario en efectivo;
prohibición de los descuentos y multas; pago semanal de las retribuciones; prohibición de
las tiendas de raya; anulación de las deudas de los campesinos; reglamentación de la
actividad de los medieros; el servicio doméstico y el trabajo a domicilio; indemnización por
accidentes de trabajo; higiene y seguridad en las fábricas y talleres; y habitaciones
higiénicas para los trabajadores.

En el Estado de Nuevo León se expido el 9 de noviembre de 1906, otra Ley similar a la


del Estado de México; definió el único riesgo de trabajo que contemplaba y que era el

170
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

accidente de trabajo, como “aquel que ocurre a los empleados y operarios en el


desempeño de su trabajo o en ocasión de él187” y fijó indemnizaciones que alcanzaban, en
caso de incapacidad permanente, el importe de hasta dos años de salario.

El 5 de octubre de 1910, Francisco I. Madero expidió el Plan de San Luis Potosí.


Desconoce el régimen porfirista y convoca al pueblo al restablecimiento de la Constitución
y a la lucha por el principio de la “No Reelección”.

En Aguascalientes se decretó en la Ley de 23 de agosto de 1914, que consagraba la


reducción de la jornada de trabajo a ocho horas, se implementó el descanso semanal y se
prohibió la reducción de salarios.

En San Luis Potosí, un decreto de 15 de septiembre de 1914, fijó los salarios mínimos; lo
que trascendería al Estado de Tabasco, que además se reduce a ocho horas la jornada
de trabajo y se cancelaron las deudas de los campesinos.

En Jalisco el gobernador Manuel M. Diéguez, expido un decreto sobre la jornada de


trabajo, descanso semanal obligatorio y vacaciones. El 7 de octubre de 1914, Aguirre
Berlanga, publicó un decreto que se le ha llamado ”primera ley del trabajo de la revolución
constitucionalista”, sustituida y superada por el decreto de 28 de diciembre de 1915 que
reglamentó la jornada de trabajo de nueve horas, la prohibición del trabajo de los menores
de nueve años, los salarios mínimos en el campo y en la ciudad, la protección del salario,
el trabajo a destajo, la aceptación de la teoría del riesgo profesional y la creación de las
Juntas de Conciliación y Arbitraje.

En Veracruz, el 4 de octubre de 1914, Manuel Pérez Romero implementó el descanso


semanal, y el 19 del mismo mes y año se expidió la Ley del Trabajo del Estado, por
Cándido Aguilar, que establecía la jornada máxima de nueve horas, el descanso semanal,
el salario mínimo, el riesgo profesional, las escuelas primarias sostenidas por los
empresarios, la inspección del trabajo, la organización de la justicia obrera y la
organización de tribunales del trabajo denominadas Juntas de Administración Civil.

Posteriormente, el 6 de octubre de 1915, Agustín Millán promulgó la primera Ley de


Asociaciones Profesionales de la República.

En Yucatán, Salvador Alvarado expidió las leyes llamadas “Las Cinco Hermanas”: La Ley
agraria, de hacienda, del catastro, del municipio libre y del trabajo. Esta última de
importancia, porque reconoció y estableció algunos de los principios básicos, que
187
Ibídem, p.59.

171
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

posteriormente integrarían el artículo 123 constitucional, como son: el Derecho del


Trabajo tiene como fin dar satisfacción a los derechos de una clase social; el trabajo no es
una mercancía; el conjunto de normas de la Ley sirven para hacer más fácil la acción de
los trabajadores organizados en su lucha contra los patrones; dichas normas establecen
los beneficios mínimos a que tiene derecho los trabajadores. Estos principios debían
desarrollarse en los contratos colectivos y en los laudos del tribunal de arbitraje.

En septiembre de 1916, el gobernador de Coahuila, Gustavo Espinoza Mireles, expidió un


decretó, por el cual se creó, dentro de los departamentos gubernamentales, una sección
de trabajo, y en el mes de octubre de ese año, expidió una Ley sobre accidentes de
trabajo, para abrir la posibilidad de que, en los contratos colectivos de trabajo se
establecieran las normas para la participación de los trabajadores en las utilidades de las
empresas, lo que se ha considerado como la primera Ley sobre este tema.

El Plan de Guadalupe condensó los propósitos de la lucha por el restablecimiento de la


vigencia de la Constitución violada, desconoce a los tres poderes federales y a los
gobernadores de los estados que no se adherían al movimiento constitucionalista. Y es en
esta parte de la historia en donde surge: la nueva Constitución de 1917, con la
consagración de los derechos sociales de los trabajadores y el derecho mexicano del
trabajo, abriendo el camino a disposiciones más amplias que, desde los años veinte,
distinguen a nuestros ordenamientos legales.

2.8.4 La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 1917.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 5 de febrero de 1917, se


considera de las más innovadoras en el mundo y es considerada por algunos de carácter
social, ya que contiene en sus artículos 27, 28 y 123, disposiciones de carácter social que
van encaminadas a la protección de las clases económicamente débiles.

Para llegar a ello, previamente Don Venustiano Carranza promulga el 14 de septiembre


de 1916, un decreto de reforma al Plan de Guadalupe, con el propósito de establecer la
lucha por el restablecimiento de la vigencia de la Constitución de 1857; la cual le facultó
para que pudiera convocar a un Congreso Constituyente; por lo que el 19 de septiembre
del mismo año, convocó a elecciones para el Congreso que se celebraría en Querétaro.

A nombre de Don Venustiano Carranza se presentó un proyecto base de Constitución,


con el que se pretendió reformar la fracción X del artículo 73 del mismo ordenamiento,
que facultaría al Congreso de la Unión, a legislar exclusivamente en materia de trabajo en

172
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

toda la República. No se hicieron esperar las inconformidades por parte de los miembros
del Congreso y como consecuencia de ello, la Comisión del Congreso, estableció en el
preámbulo del Artículo 123, el derecho de las legislaturas de los Estados y el Congreso de
la Unión para dictar leyes en materia de trabajo, considerándose como benéfica esta
medida, en función de que cada uno de los Estados de la República conocía sus
necesidades y las condiciones del mismo, por lo que resultaba más sencillo y más
práctico encomendar a los estados la expedición de la leyes de trabajo. Elaborándose así
formalmente la legislación del Trabajo en México. Al artículo 5° se le agregaba el párrafo
“El contrato de trabajo solo obligará a prestar el servicio convenido por un periodo que no
exceda de un año y no podrá extenderse en ningún caso a la renuncia, pérdida o
menoscabo de cualquiera de los derechos políticos y civiles188”.

El artículo 5° constitucional, del cual mencionaremos los puntos que consideramos más
importantes para el desarrollo de nuestro tema establece que: “A ninguna persona podrá
impedírsele que se dedique a la profesión, industria, comercio o trabajo que le acomode
siendo lícitos. El ejercicio de esta libertad solo podrá vedarse por determinación judicial,
cuando se ataquen los derechos de terceros, o por resolución gubernativa, dictada en los
términos que marque la Ley cuando se ofenda los derechos de la sociedad.

Nadie puede ser privado del producto de su trabajo, sino por resolución judicial. Nadie
podrá ser obligado a prestar trabajos personales sin la justa retribución y sin su pleno
consentimiento, salvo el trabajo impuesto como pena por la autoridad judicial, el cual se
ajustará a lo dispuesto en las fracciones I y II del artículo 123. El contrato de trabajo solo
obligará a prestar el servicio convenido por el tiempo que fije la Ley, sin poder exceder de
una año en perjuicio del trabajador , y no podrá excederse, en ningún caso, a la renuncia,
pérdida o menoscabo de cualquiera de los derechos políticos o civiles[ ”.

De lo que podemos afirmar que toda persona es libre de dedicarse a la actividad que
mejor le acomode siempre que está sea lícita, y que no se ofendan los derechos de
terceros entre los cuales se pueden englobar los derechos de la sociedad.

De igual manera proteger el salario y la libertad de elección de un trabajo al definir que


nadie puede ser obligado a prestar trabajos personales sin la justa retribución y pleno
consentimiento, a lo cual solo existe una excepción que es el trabajo impuesto como pena
por la autoridad judicial.

188
DÁVALOS, José. Constitución y Nuevo Derecho del Trabajo, Segunda edición, Porrúa, México,
1991, p. 42.

173
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

También es importante el destacar que no se le puede obligar a un trabajador a prestar


sus servicios por más de un año en una empresa, si él no lo desea; y esto es de gran
trascendencia porque no esclaviza al trabajador a un empleo y le da la oportunidad al
mismo, si recibe un mejor oferta de trabajo al aceptarla sin ninguna consecuencia en su
contra.

El contrato de trabajo tampoco puede obligar a la renuncia de los derechos políticos o


civiles como lo es el caso de una elección popular, o el de no alistarse en la Guardia
Nacional, como lo establece el artículo 36 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos.

La importancia de éste artículo constitucional, es que establece las bases, sobre las
cuales se da la libertad de trabajo y su protección hacia el trabajador, de una justa
retribución por sus labores desempeñadas.

Posteriormente el artículo 123 constitucional, es en el cual recae toda la importancia de


reglamentar las condiciones en las cuales se debe de prestar un trabajo, así como las
obligaciones de los patrones.

El artículo 123 constitucional nace a partir de la idea de proteger a los trabajadores y de


proporcionales un mínimo de garantías sociales, al mismo tiempo que establecía bases
firmes en lo relativo al Trabajo y a la Previsión Social; que posteriormente fueron parte
importante de la Ley Federal del Trabajo. Siendo éste artículo, el resultado más
importante de la Revolución Mexicana; porque consagro un mínimo de derechos a favor
de los trabajadores, que en ningún caso podrán ser inferiores a estos límites, pudiendo
mejorarlos pero nunca empeorarlos, esto en razón, de que las cláusulas laborales son
imperativas y en el caso que contravengan dichas normas se tendrán por no puestas, ya
que como nos hemos referido en los puntos anteriores, no contábamos dentro de nuestra
legislación con ningún artículo que reglamentara las condiciones en las cuales se debía
prestar el trabajo, ni en las que se les otorgara a los trabajadores ciertos derechos. Es por
ello que los legisladores comienzan a ser un poco más humanos y dan una mirada hacia
los trabajadores, para terminar con la explotación por parte de los patrones y tratar de
equilibrar, las relaciones entre ambos, y de no estar la balanza solo de un lado.

De igual manera, se instituyó el Derecho de asociación profesional a favor de los


trabajadores y patrones en defensa de sus propios intereses; otorgó como derecho de los
trabajadores el ejercicio de la huelga, para equilibrar los conflictos entre la fuerza de
trabajo y capital; así mismo, concedió a los patrones la realización de paros, siempre que

174
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sean por exceso de producción y para mantener los precios en un límite costeable, con la
autorización previa de la Junta Central de Conciliación; constituyéndose para el
conocimiento de los conflictos de trabajo las Juntas de Conciliación y Arbitraje.

Así la Constitución de 1917 otorgó a la fuerza de trabajo la categoría económica que le


corresponde dentro de la relación obrero-patronal, restituyéndole al trabajador su calidad
de persona, incluyendo los derechos mínimos que le garanticen una existencia decorosa;
surgiendo la primera “Declaración de los Derechos Sociales”, que reivindica a la clase
trabajadora del país.

Es el artículo 123 constitucional que está encaminado a la protección de los trabajadores


y al mejoramiento de sus condiciones económicas y alcanzar un nivel de vida digno de la
clase obrera. Y lo más importante de éste artículo es que sentó las bases para la creación
de la Ley Federal del Trabajo que viene a ser la culminación del citado artículo.

Una vez facultado tanto el Congreso de la Unión, como las legislaturas estatales, se
comenzaron a expedir leyes locales en materia de trabajo, en casi toda la República,
entre las más importantes por la trascendencia que tuvieron en el desarrollo del Derecho
del Trabajo se encuentran, la Ley de Trabajo del Estado de Veracruz y las Leyes de
Yucatán.

La Ley del Estado de Veracruz fue expedida por el gobernador Cándido Aguilar en 1918,
siendo la primera de la República y el modelo para las leyes de las restantes Entidades
Federativas, sus disposiciones más importantes son las relativas a: la participación de los
trabajadores en las utilidades de las empresas, regula la huelga y contratos especiales
como el de los aprendices, domésticos, empleados y agricultores; así mismo rige el
trabajo de la mujer y el de los menores de edad, la asociación profesional, el contrato
colectivo, los riesgos profesionales, el reconocimiento pleno de la libertad sindical, entre
muchos otros.

De las segundas leyes, es decir las de Yucatán, la primera se expide el 2 de octubre de


1918, durante la gubernatura de Felipe Carrillo Puerto; y la segunda, es la Ley de Álvaro
Torres Díaz del 16 de septiembre de 1926, las que imitan el modelo de la Ley de
Veracruz, pero modifican ligeramente la cuestión del sindicato y la huelga, surgiendo así
un sin fin de leyes en toda la Republica que dan a los trabajadores tratamientos distintos.

Hubo algunos conflictos colectivos y huelgas que se extendían a dos o más entidades,
pero ninguno podría intervenir en la solución de los mismos, pues no tenían competencia

175
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

fuera de sus fronteras. Por lo que el 15 de noviembre de 1928, se reunió en México una
asamblea obrero-patronal, a la que le fue presentada por la Secretaría de Gobernación
para su estudio, un proyecto de Código Federal de Trabajo, siendo el antecedente de la
Ley de Trabajo de 1931, sin embargo no se pudo aprobar, ya que necesitaba
modificaciones la Constitución. Por lo que el Presidente Emilio Portes Gil el 26 de julio de
1929, propuso la reforma a la fracción X del artículo 73 Constitucional y el proemio del
artículo 123 del mismo ordenamiento, que posteriormente se modificaron y establecieron
que la Ley Federal del Trabajo sería unitaria y que se expediría por el Congreso Federal,
correspondiendo su aplicación a las autoridades Federales y a las Locales mediante una
distribución de competencias incluida en la misma reforma; la segunda modificación le
otorgó a la Nación el dominio directo sobre todos los productos del subsuelo, por lo que
los asuntos que pudieran afectarlo se estudiarían y resolverían por las autoridades
nacionales.

Con estas reformas y los movimientos armados que existieron, se sentaron las bases
para la expedición de una Ley Federal del Trabajo que pudiera aplicar en todos los
Estados de la República, derogando las Leyes expedidas con anterioridad tanto por el
Congreso, como para las legislaturas de los Estados. Es el proyecto que fue enviado por
el Presidente Pascual Ortiz Rubio al Congreso, el cual fue debatido y modificado para su
aprobación; promulgándose la Ley Federal del Trabajo el 18 de agosto de 1931.

Esta Ley hace una amplia reglamentación del Contrato de Trabajo y en su artículo 17 lo
define como “aquel por virtud del cual una persona se obliga a prestar a otra, bajo su
dirección y dependencia, un servicio personal mediante una retribución convenida”.

Dotándoseles a los trabajadores, de una regulación que les facilite la prestación de sus
servicios y les otorgue muchos beneficios.

La anterior reforma a la Constitución, no fue la única que se realizó; durante el periodo


presidencial de Adolfo López Mateos, hubo importantes modificaciones al artículo 123
constitucional, esto como consecuencia de la inconformidad que tenían los obreros y que
se veían reflejada en los actos violentos; por lo que en 1960 se adicionó el apartado “B” al
artículo anterior, para regular las relaciones de trabajo del Estado y sus trabajadores.

Es la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917, que en su espíritu


consagra la Declaración de los Derechos Sociales, al contener los derechos mínimos a
favor de la clase trabajadora por la prestación de sus servicios; habla de la jornada de
trabajo máxima de ocho horas, lo que permite que se fije una jornada menor a ese tiempo;

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

establece que por cada seis días de trabajo habrá uno de descanso, por lo menos; así
como contiene la idea de los salarios mínimos; entre otras. Es el mínimo de derechos que
el legislador quiso asegurar a favor de los trabajadores, mismos que nadie puede
arrebatarle, pues las condiciones de trabajo en ningún caso podrán ser inferiores a los
mínimos establecidos en el artículo 123 constitucional, en este caso nos referiremos al
apartado “A”, así como a su ley reglamentaria, que más adelante comentaremos
detalladamente en el capítulo respectivo, y que es tema de esta investigación que se
desarrolla.

2.8.4.1. La Ley Federal del Trabajo de 1931.

En este punto hablaremos de la Ley Federal de Trabajo de 1931, que entró en vigor el 18
de agosto de 1931, misma que estuvo vigente hasta el 30 de abril de 1970, que tomando
en base las leyes como la de Veracruz, Yucatán, Nuevo León y Jalisco, llegó a ser la Ley
del Trabajo más completa de su tiempo, y a su vez sirvió de base a nuestra Ley Federal
de Trabajo actual; en la Ley de 1931 podemos observar en forma un tanto más delimitada
los conceptos importantes de toda legislación laboral; recogiendo la tendencia a
considerar la relación patrón-trabajador como un contrato, pues lo define en su artículo 3
“Trabajador es toda persona que presta a otra un servicio material, intelectual o de ambos
géneros, en virtud de un Contrato de Trabajo”; este concepto nos da la idea de lo que es
un trabajador y establecer una diferencia en el tipo de trabajo que puede ser material o
intelectual, o de ambos géneros, pero consideramos incompleto el concepto de
trabajador, al carecer de dos elementos importantes como la subordinación a una
determinada persona, en este caso el patrón; y otro de los puntos es el de recibir una
retribución a cambio de su trabajo, pero a pesar de no ser completo el concepto que nos
proporciona, a nuestro juicio fue la mejor definición de trabajador que se realizó en la
época en que se publicó la Ley en cita; porque también se podrá considerar que no son
de vital importancia los conceptos de subordinación hacia el patrón y el de salario a
cambio de trabajo, y bien podrían ser definidos en otro aspecto de la relación obrero
patronal.

En lo referente al concepto de patrón, el artículo 4 establece:

“Patrón es toda persona física o moral que emplee el servicio de otro, en virtud de un
contrato de Trabajo”; este es un concepto completo al definir de manera acertada al
patrón como la posibilidad de ser una persona física o moral, además establece que una
relación nunca nace de un contrato de trabajo, con base en esto se puede asumir la

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

existencia de un contrato ya sea verbal o escrito, lo cual podría comprobarse ya sea con
el mismo contrato escrito o con la presentación de testigos para el caso del contrato
verbal.

Por otro lado el artículo 17 señala que “contrato individual de trabajo es aquél por virtud
del cual una persona se obliga a prestar a otra, bajo su dirección y dependencia, un
servicio personal mediante una retribución”. Es importante señalar que las normas
laborales se imponían a las partes de la relación de trabajo, que no quedaba está a su
capricho la fijación de las condiciones fundaméntales, existiendo un respeto a la voluntad
expresada, tal y como se establece en su artículo 33 que señala: “El contrato de trabajo
obliga a lo expresamente pactado a las consecuencias que sean conforme a la buena fe,
el uso o a la Ley”; lo que implicaba que en ningún caso serán renunciables las
disposiciones que favorezcan a los trabajadores (Art. 15), siendo esta la prerrogativa
importante a prevalecer, pues la Ley Federal del Trabajo de 1931 fija cuales son las
causas que afectan de nulidad al contrato de trabajo, y por tanto le restan obligatoriedad a
pesar de constar en documento escrito, esto favorece a los trabajadores en parte, ya que
si de alguna manera se afectaban sus intereses o condiciones de trabajo, no podía ser
obligado a cumplir con su contrato.

Por lo que a continuación citaremos algunas de estas causas contenidas en el artículo 22


de la Ley de 1931, que son:

I. “Las que estipulen una jornada mayor que la permitida por esta Ley”;

II. “Las que estipulen trabajos para niños menores de doce años”;

IV. “La que constituyan renuncia por parte del trabajador de cualquiera de los derechos o
prerrogativas otorgadas por esta Ley”;

V. “Las que establezcan por consideraciones de edad, sexo o nacionalidad, un salario


menor que el que se pague a otros trabajadores en la misma negociación por trabajo de
igualdad eficiencia, en la misma clase de trabajo o igual jornada”;

VIII. “La que fijen un salario inferior al salario mínimo”;

X.- “Las que señalen un lugar de recreo, fonda, cantina, café, taberna o tienda para
efectuar el pago de salarios, siempre que no se trate de empleados de esos
establecimientos lo cual si es permitido”.

178
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Una vez que observamos algunas fracciones del artículo 22 de la Ley de 1931, podemos
decir que fue uno de los más importantes en términos generales, por tratar los casos en
que el trabajador quedaba sin responsabilidad ante el patrón, al no cumplir con un
contrato de trabajo injusto y ventajoso a favor del patrón.

El artículo 23 precisa que el Contrato de Trabajo debía constar por escrito salvo en los
casos previstos en el artículo 26, los cuales se referían a los trabajadores de labores del
campo, del servicio doméstico, trabajos temporales que no excedan de 60 días y los
trabajos para obra determinada, en estos casos de contrato podía celebrarse en forma
verbal.

Además de regular el Contrato Individual de Trabajo, define el Contrato Colectivo y


estipula las causas en que podía darse por terminado; dentro de dichas causas las que
consideramos más relevantes son: por mutuo consentimiento, por causas estipuladas
expresamente en el contrato, por terminación de la obra y por cierre total de la empresa;
el artículo 78 precisa “por cada seis días de trabajo disfrutará el trabajador de un día de
descanso, cuando menos”, por medio de este artículo se establece el descanso
obligatorio una vez a la semana, y aunque no precisa cual día, se asume que es el
domingo.

El artículo 79 indica que las mujeres gozarán de ocho días de descanso antes del parto y
un mes de descanso posterior, percibiendo el mismo salario; también se fija el salario
mínimo que deben percibir los trabajadores, dependiendo de las condiciones de vida de
cada región; y acerca del reglamento Interior de trabajo, establece las horas de entrada y
salida; lugar y momento en que deben comenzar y terminar las labores, día y lugares de
pago, disposiciones disciplinarias y forma de aplicarlas y de la misma forma ya se
reglamentó el trabajo de las mujeres y de los menores de edad, lo cual en anteriores
legislaciones no se hizo.

A continuación citaremos algunas obligaciones de los patrones, el artículo 111 de la Ley


de 1931 establece la obligación del patrón de dar preferencia en la contratación a los
trabajadores de nacionalidad mexicana, a los que hayan trabajado para él con
anterioridad y a los trabajadores agremiados a cualquier sindicato lícito; cuando los
patrones ocupen los servicios de más de cien trabajadores y las fábricas estén situadas
en una de las poblaciones, deberán proporcionales vivienda a los trabajadores, por las
que podrán cobrar una renta que no exceda del medio por ciento mensual el valor de la
finca.

179
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Otra obligación del patrón fue la de cubrí las indemnizaciones por accidentes de trabajo y
por enfermedades profesionales; proporcionar útiles, instrumentos y materiales para
ejecutar el trabajo convenido; conceder a los trabajadores tiempo necesario para ejercicio
de su voto en las elecciones populares; cumplir con las disposiciones de reglamento
interior de trabajo y permitir a las autoridades la práctica de inspecciones en su empresa.

Cambiando un poco la idea, vemos a mencionar las causas de suspensión temporal de


los Contratos de Trabajo en la Ley de 1931, estableciendo en su artículo 116 como tal: la
falta de materia prima en la empresa, la falta de fondos para la prosecución normal de
trabajo, el exceso de producción con relación a las circunstancias económicas y a las
circunstancias del mercado, de la empresa, y el hecho de que el trabajador contraiga
alguna enfermedad que sea contagiosa.

Pero también es importante señalar que el artículo 16 concedía al derecho común la


categoría de fuente de nuestra disciplina laboral, por lo que en diversas ocasiones se
pretendió invocar el Código Civil como supletoria a la Ley Federal de Trabajo; por lo que
el imperio de la voluntad resultaba restringido; por tal situación no fue decisivo para lograr
la plena autonomía. En la Ley de 1931, en su artículo 181, se intentó determinar la
presunción de existencia del contrato, entre quien presta un servicio personal y quien lo
recibe, pero con la deficiencia de estimar la existencia del consentimiento, dado que solo
bastaba que un patrón sostuviera que no había manifestación de su consentimiento para
que la carga de la prueba recayera al trabajador. También fue posible, al amparo de esta
Ley, celebrar contratos de prestación de servicios profesionales, técnicos o de comisión
mercantil, para que a pesar de las circunstancias reales en que se desarrollara la labor,
estas figuras salientes del ámbito del Derecho del Trabajo, en atención a la voluntad de
las partes.

Consideramos en este punto que la Ley Federal del Trabajo de 1931, marcó un
considerable avance en materia de relaciones laborales; y esto vino como consecuencia
de las arbitrariedades que padecieron los trabajadores en años anteriores; y en lo
referente a las obligaciones y derechos tanto del trabajador como el patrón, en esencia
son las mismas que en la actualidad, en esta Ley que por su importancia histórica, en ella
se realizaron brillantes funciones a favor del trabajador, uno de los fines para los que fue
creada, fue principalmente la de otorgar protección a los trabajadores y resultó uno de los
medios que más han apoyado el progreso de la economía nacional y la elevación al
mejoramiento de las condiciones del trabajador como empleado.

180
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2.8.4.2 La Ley Federal del Trabajo de 1970.

El artículo 123 constitucional, apartado “A”, fija los derechos de los trabajadores, dejando
a esta la Ley su reglamentación específica. Durante el gobierno del presidente Adolfo
López Mateos fue indispensable realizar algunas adaptaciones a la primera Ley Federal
del Trabajo, en virtud del impulso industrial del país y las exigencias sociales de la
relación de trabajo que, ante el avance del colectivismo, implicaron la aceptación de
nuevos tipos de contratación y el mejoramiento de varios conceptos de alcance universal.

Las transformaciones sociales y económicas que surgieron en nuestro país, posteriores a


la Ley Federal del Trabajo de 1931, fueron factores importantes para formular una nueva
Ley que respondiera adecuadamente a las exigencias de la época y a los constantes
cambios de la vida diaria.

En razón de lo anterior, el 1° de mayo de 1970, entró en vigor una nueva Ley Federal del
Trabajo, misma que fue promulgada por el Ejecutivo Federal, el día 23 de diciembre de
1969 y publicada en el Diario Oficial de la Federación el día 1° de abril de 1970.

La nueva Ley en principio cubriría las aspiraciones más relevantes de la clase


trabajadora, pues se otorgó a ésta una serie de beneficios no incluidos en la legislación
anterior, sin embargo, el sector patronal se opuso rotundamente a estas concesiones y el
monto de los beneficios se reconsideró, quedando a salvo los intereses de ambas partes.

La nueva Ley de 1970 contiene conceptos y principios que son aceptados por la Doctrina
y Jurisprudencia; establece el principio de que el trabajo es un Derecho y un Deber Social
y no es artículo de comercio porque es energía humana y no de trabajo, exige respeto a la
dignidad y libertad de quien lo presta y debe efectuarse en condiciones que aseguren la
vida, la salud y un nivel decoroso para el trabajador y su familia.

Consigna la idea de que las normas de la Ley Laboral son únicamente los derechos
mínimos de cada trabajador, que pueden superarse con los convenios colectivos de
trabajo. Separó al Derecho del Trabajo del Civil, por primera vez, dejó de ser un estatuto
regulador de relaciones patrimoniales y asumió que su función era la Seguridad Social,
garantizando al trabajador, la estabilidad en su trabajo y la fijación de las condiciones de
la prestación de los servicios. Haciendo del Derecho del Trabajo, el derecho general de
las prestaciones de servicios. Incluyó el principio de que el simple hecho de la prestación
de un servicio personal crea una relación jurídica que determina la aplicación de las
normas laborales.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Estableció la capacitación obligatoria y permanente, que le permita al trabajador hacer


frente al perfeccionamiento de la maquinaría, de los instrumentos técnicos de la
producción y de los procedimientos técnicos de trabajo, pero dejó a las partes el
establecer la forma en cómo se adquiría, por lo que no llegó a tener los alcances
deseados.

Reguló el trabajo de la mujer con la modalidad impuesta para la defensa de la maternidad;


en cuanto al salario determino que debería de ser suficiente para satisfacer las
necesidades del trabajador y de su familia; recogió instituciones como el derecho de
antigüedad, el aguinaldo, el derecho a las invenciones realizadas por los trabajadores,
etcétera; y completó la regulación de la Ley Federal del Trabajo de 1931 sobre los
trabajos especiales, reconoció como principios la libertad sindical, por ser elemento
esencia de la democracia social.

De esta manera se constituyó nuestra Ley Federal del Trabajo, que a decir del Doctor
Mario De la Cueva “no es, ni quiere ser, todo el Derecho del Trabajo; es solamente una
fuerza viva y actuante, que debe guiar a los sindicatos en su lucha por mejorar las
condiciones de prestación de los servicios, y a los patrones para anteponer la injusticia
que existe en sus fábricas. Tampoco es una obra final, por lo que deberá modificarse en
la medida en que lo exija el proceso creciente del progreso nacional y superar
constantemente, hasta la meta final, las condiciones de vida de los hombre sobre cuyos
cuerpos está construida la civilización189”.

Así la Ley Nueva retoma los principios de la Declaración de Derechos y contempla con
mayor fuerza la idea de la justicia social. De tal manera que a partir de la Declaración, la
legislación laboral ha seguido una marcha ascendente en beneficio de la clase
trabajadora; debido a su naturaleza dinámica, siendo un estatuto que se adecua
permanentemente a las transformaciones sociales y económicas de cada pueblo y de la
comunidad internacional para defender y mejorar las condiciones de vida de los
trabajadores, en espera de la suspensión de la explotación del hombre por el hombre y
por el Estado.

Consecuentemente se hicieron diversas modificaciones a las normas Constitucionales


como a las disposiciones de la Ley Federal del Trabajo, pero siempre teniendo como
objetivo regular la relación de trabajo de forma tal que permita mejorar, las condiciones de
trabajo, de vida y de salud del trabajador.
189
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo I, Óp. cit., p. 60.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La Ley Federal del Trabajo contempla por primera vez lo que es: el trabajo como un
derecho y un deber social, igualdad para los trabajadores (Art. 3°), derecho y deber son
dos principios del Derecho del Trabajo; libertad para trabajar (Art. 4°), es otro principio del
Derecho del Trabajo, los derechos laborales irrenunciables de los trabajadores, la
interpretación de ésta ley, del contrato de trabajo, del reglamento del trabajo será a favor
del trabajador (Art. 18), contiene características de los derechos del trabajador; los
convenios o liquidaciones serán ratificados ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, los
aprobará cuando no tengan renuncia de derechos de los trabajadores (Art. 33), reitera la
irrenunciabilidad de los derechos del trabajador; reinstalación o indemnización, a opción
del trabajador (Art.48); aumenta a seis días de vacaciones pagadas por el primer año de
servicio (Art. 76); si el trabajador no cumple un año de servicio tendrá derecho a una
remuneración proporcional al tiempo de servicios prestados al mismo patrón (Art. 79,
segundo párrafo); el pago de aguinaldo (Art. 87); la libertad del trabajador a percibir un
salario, al igual que los salarios devengados (Arts. 98 y 99), contiene el principio de
igualdad; los descuentos autorizados en el salario del trabajador, serán a favor de la
esposa, hijos, ascendientes y nietos, decretado por autoridad competente (Art. 110,
fracción V), permite el embargo del salario para el pago de pensiones alimenticias en
beneficio de las personas señaladas anteriormente (Art. 112, en relación con el artículo
110, fracción V), contiene la característica de inembargabilidad del salario, excepto
cuando provenga de autoridad judicial competente; el patrón pagará los gastos para
sostener los estudios de uno de sus trabajadores o de uno de sus hijos de éstos, el patrón
proporcionará capacitación y adiestramiento a sus trabajadores (Art. 132 fracciones XIV y
XV).

De igual manera que existieron reformas sustantivas en las normas del Derecho del
Trabajo, también se modificaron las normas adjetivas.

Partiendo de que la Ley Federal de Trabajo de 1970, independizo radicalmente al


Derecho del Trabajo del Derecho Civil, el derecho procesal del trabajo adquirió la función
social que le correspondía, pues es un proceso cuya finalidad esencial es la búsqueda de
la Justicia Social, para los trabajadores.

En 1979 se hizo una reforma procesal cuya iniciativa no fue conocida por las partes, el
proyecto no fue discutido, pero pese a esto, fue aprobada, creándose un Nuevo Derecho
Procesal del Trabajo. Es un proceso social que crea su propio sistema, recogiendo lo

183
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

mejor del proceso dispositivo y del inquisitorio; originándose instituciones que le dieron
carácter nuevo y propio.

Es éste, la Junta está obligada a tomar las medidas necesarias para lograr la mayoría
económica, concentración y sencillez procesal.

Lo anterior lo realizaría por medio de la suplencia de los defectos de la demanda del


trabajador, obligación de la Junta de tener por ejercitadas las acciones y por puestas las
excepciones que en base a los hechos le corresponde al actor, ordenando que se corrijan
las irregularidades y omisiones cometidas en el trámite del juicio, para efectos de
regularizarlo. Teniendo la obligación de eximir al trabajador de la carga de la prueba.

Para poder agilizar y simplificar el proceso laboral es muy importante el principio de


oralidad e inmediatez, inclinándose la ley mexicana por hacerlo preponderante oral. Para
los mismos efectos, existía la facultad inquisitiva del tribunal para ordenar, sin la
necesidad de petición de las partes, la práctica de todas las pruebas y diligencias para
esclarecer la verdad.

A partir de la reforma, la Procuraduría de la Defensa del Trabajo tiene una


responsabilidad y participación decisiva, para actuar sin solicitud de los trabajadores, ya
que puede el Tribunal nombrar un procurador en auxilio, en caso de que se deje de
promover durante el término de tres meses para poder continuar con el proceso.

Por tanto todas y cada una de las normas, decretos, reformas y modificaciones tienen
como denominador común mejorar las condiciones de vida del trabajador, mediante una
regulación más completa de su prestación de trabajo, que le otorgue derechos que le
aseguren la vida, la salud y una existencia decorosa. Sin olvidar, que seguirá
modernizándose este derecho en función de que se desarrolla conforme a las
circunstancias actuales de los trabajadores.

2.8.4.3. La Ley Federal del Trabajo en nuestros días.

El presente punto tiene como finalidad ver los aspectos positivos y negativos de la Ley
Federal del Trabajo, a la luz de las demandas del sector patronal, que están planteando
que se lleven a cabo las reformas a la Ley Federal del Trabajo de 1970 y al artículo 123
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Las leyes laborales en México hasta nuestros días no han sido modificadas; los cambios
se han efectuado por lo pronto en los contratos colectivos de trabajo. Sin embargo, desde
1988 se inició un debate, que aún no termina acerca de la necesidad de flexibilizar la Ley

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Laboral. Las primeras propuestas de modificación provinieron de la Concanaco y de la


Coparmex. El punto central era la flexibilidad del trabajo, justificando por el nuevo entorno
de globalización del mercado y la producción, la modernización de los procesos
productivos, la necesidad de proporcionar mayor confianza a los inversionistas y, sobre
todo, de elevar la producción y la calidad.

En aquellas propuestas iniciales se comprendían los tres aspectos clásicos de la


flexibilidad del trabajo, además de la limitación de los conflictos obrero-patronales. En
cuanto a la flexibilidad numérica se proponía revisar el concepto de indemnización por
despido, simplificar el retiro del trabajador y el concepto de salario caído, así como
replantear el proceso de rescisión del contrato. En la funcional se plantea flexibilizar la
jornada de trabajo, establecer la polivalencia y las comisiones de productividad. En lo
salarial replantear el concepto de salario remunerador y fijar el salario en función de la
productividad y de las condiciones económicas de cada empresa; reformular la idea de
prestación económica y establecería con base en las capacidades de cada empresa, así
como implementar el salario por hora.

En 1989 la diputación obrera logró que el Congreso sometiera a consulta popular las
modificaciones a la Ley Federal del Trabajo a través de la Secretaria del Trabajo, pero
ésta no llegó a emitir resultado público.- Es desde ese año a la fecha , los empresarios
nacionales y extranjeros han reclamado una ley del trabajo y los sindicatos se han dividido
entre los que se oponen a toda modificación (sindicalismo independiente, CTM, SME) y
los que aceptan los cambios que no afecten derechos adquiridos; sobre todo hablan de la
necesidad de incorporar un nuevo capítulo acerca de la modernización y productividad
(STRAM, FAT).

En 1995 la polémica acerca del cambio de la Ley Federal del Trabajo se reforzó con el
Plan Nacional de Desarrollo del gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León, en cuyos
planteamientos se encuentra la necesidad de flexibilización de los mercados laborales.

Después de la crisis económica que sacudió al país en diciembre de 1994, el Partido


Acción Nacional fue el primero en presentar y proponer una iniciativa de reforma para
modificar el artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y a
la Ley Federal del Trabajo.

La Exposición de Motivos de la iniciativa del decreto que reforma al artículo 123 de la


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que señala que el Congreso
Constituyente de 1917, instituyó a nivel constitucional, por primera vez en el mundo, la

185
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

tutela jurídica de los derechos sociales, entendidos como los principios e instituciones que
garantizan condiciones laborales justas. Gracias a este esfuerzo, el artículo 123
constitucional, sienta las bases para darle al trabajador los elementos mínimos que le
corresponden por la prestación de sus servicios. En la iniciativa se propone reformar la
fracción I del mencionado artículo constitucional, que establece la jornada máxima de 8
horas; con la reforma se señala una duración máxima del tiempo semanal de 40 horas,
actualmente es de 48 horas semanales. Al reducir el tiempo total de trabajo se favorece la
creación de nuevos empleos, y se abate el grave problema de desempleo. Como
consecuencia de la reducción de los días de descanso por cada cinco de trabajo. Debe
quedar claro que no se trata de trabajar menos sino de abrir nuevos espacios para que
otros trabajen, y otorgar más tiempo al trabajador para que convivan con su familia y así
promover a integración familiar considerando la familia como base de la sociedad.

De lo anterior planteado, consideramos que dicha modificación es un tanto tendenciosa,


ya que si relacionamos la propuesta con el artículo 56 de la Ley Federal del Trabajo,
correspondiente al Título Tercero denominado Condiciones de Trabajo, el cual dispone
que el trabajador y el empleador podrán en cualquier momento modificar, de mutuo
acuerdo, las condiciones de trabajo, mejorándolas o deduciéndolas en forma definitiva o
temporal; posteriormente podrían los patrones alegar que para salvar puestos de trabajo,
además de reducir la jornada laboral se alentaría también a reducir en cuanto al tiempo
efectivamente laborado, es decir si de mutuo acuerdo, trabajadores o el sindicato con el
patrón, establecen que la jornada de trabajo sea de treinta y cinco horas en vez de
cuarenta horas, disminuyendo el salario proporcionalmente a la jornada de trabajo
reducida, incuestionablemente se causaría una merma al poder adquisitivo de compra de
los trabajadores; por lo que nos preguntamos si realmente se cumpliría el objetivo de
crear más puestos de trabajo mediante la reducción de la jornada de trabajo, ya que en
nuestro país no se realizan estadísticas que cumplan y vigilen tal objetivo.

Es la Ley Federal del Trabajo de 1970, que en la actualidad nos rige y establece
reformadas normas protectoras de la clase trabajadora; por lo que también existe un
Proyecto de reforma del Partido Acción Nacional a la citada Ley, la cual consiste en que
debe ser motivo de análisis y discusión.

Hasta el momento han revisado su proyecto inicial en diversas ocasiones y han propuesto
un proyecto de ley consistente en una nueva y distinta Ley Federal del Trabajo, cuyos

186
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

artículos han servido de base para la reflexión por parte de otros partidos políticos,
particularmente por el Partido de la Revolución Democrática.

Tal proyecto con el que se pretende reformar la Ley Federal del Trabajo cambia principios
básicos del derecho laboral que habían privado a México, al denunciar el carácter tutelar
del Estado con respecto a la parte más débil de la relación laboral y sustituirlo por la
función de vigilante del equilibrio entre los factores de la producción. Otro cambio
importante en los principios es la sustitución de la idea de justicia social por la promoción
del empleo y de la productividad. La capacidad de las empresas para emplear o
desemplear de acuerdo con las necesidades de la producción; en este sentido, se
introducen las nociones de contrato de aprendizaje, con su periodo de prueba; el fin de la
relación de trabajo con la inclusión de una prima de antigüedad, independientemente de la
causa de terminación, que sustituye a los 20 días por año, a los tres meses, y a la anterior
prima de antigüedad de 12 días por año; flexibiliza el trabajo discontinuo, y reglamenta el
empleo de subcontratista.

El artículo 33 inserto en el Capítulo II referente a la Duración de las relaciones de Trabajo,


de la iniciativa de decreto que reforma la Ley Federal del Trabajo dispone que: “las
relaciones de trabajo pueden ser por tiempo indeterminado o eventualmente para obra o
tiempo determinados. A falta de estipulación expresa, se presumirá que la relación es por
tiempo indeterminado salvo que atendiendo a las circunstancias d la misma, deba
presumirse que se trata de obra o tiempo determinado”; por lo que se desprende de tal
situación tiende a flexibilizar a los contratos por tiempo indeterminado, debilitando el
principio de estabilidad en el empleo, impulsa la creación de nuevos contratos o
relaciones de trabajo que implican un menor costo para el sector patronal, poniendo en
peligro la vida y la salud de los trabajadores, al mermar sus condiciones de trabajo.

En cuanto a flexibilidad interna, se especifica que las condiciones de trabajo pueden


cambiar hacia arriba o hacia abajo, además se amplía la capacidad de la empresa para
mover a sus trabajadores entre puestos y geográficamente, así sus días y horas de
trabajo; en particular la distribución del tiempo semanal de trabajo, que propone de 40
horas, a criterio del empleador según las necesidades de la producción; plantea la
obligación del obrero de laborar horas extras y en los días de descanso obligatorio si la
producción lo requiere, establece el privilegio de la capacidad sobre la antigüedad para
ascender en el escalafón.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Al respecto, en la Exposición de Motivos de la iniciativa de decreto que reforma a la Ley


Federal del Trabajo, en su Título tercero referente a las condiciones de trabajo, establece
en el Capítulo I que, las condiciones de trabajo pueden modificarse en cualquier sentido,
siempre y cuando se respeten los mínimos legales y los principios fundamentales
respectivos. Así, el artículo 56 de la Ley Federal del Trabajo que se propuso reformar,
establece que ” El trabajador y el empleador podrán en cualquier momento modificar, de
mutuo acuerdo, las condiciones de trabajo, mejorándolas o reduciéndolas en forma
definitiva o temporal. Es caso de reducción de las condiciones, se hará un convenio
escrito en el que se mencionen las circunstancias que justifiquen la modificación,
debiendo observarse lo dispuesto en el artículo anterior”.

El artículo 55 establece que “Las condiciones de trabajo en ningún caso podrán ser
inferiores a las fijadas en la ley y deberán ser proporcionadas a la importancia de los
servicios e iguales para trabajos iguales, sin que puedan establecerse diferencias por
motivos de raza, nacionalidad, sexo, edad, credo religioso, o Doctrina política, salvo las
modalidades expresamente consignadas en esta ley”.

Por tanto la propuesta antes referida da la pauta para flexibilizar las normas laborales al
pretender poner al trabajador y patrón en igual de circunstancias sin tomar en cuenta la
vulnerabilidad del primero, bajo la necesidad y amenaza del desempleo.

El Doctor José Dávalos opina al respecto diciendo que “la flexibilización no busca corregir
rigideces, sino que tiene el propósito de desmantelar el Derecho del Trabajo y
desvertebrar instituciones esenciales del derecho individual, colectivo y procesal. Y
agrega, que por medio de ésta, se pretende establecer el cambio de turnos, la diversidad
de funciones y la variación del lugar del trabajo, a voluntad del patrón; un excelente
pretexto para fastidiar a los empleados y luego despedirlos, una moderna forma de pasar
por encima de la dignidad de la persona humana190”.

Consideramos que cualquier planteamiento que se haga acerca de la flexibilidad interna,


deberá responder, precisamente, a una necesidad productiva y no a un ejercicio arbitrario
del poder patronal, además que las compensaciones que se fijen sean justas; para ello
deben intervenir las organizaciones de los trabajadores para evitar que el empleador
altere unilateralmente diversos aspectos en las condiciones de trabajo para provocar la
renuncia del trabajador sin costo de despido alguno.

190
DÁVALOS, José. Tópicos Laborales, Óp. cit., pp. 724 y 725.

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Con respecto a la flexibilidad salarial (salario en función de productividad o calidad), la


propuesta del Partido Acción Nacional no hace mención de la realidad que vive el salario,
y mucho menos propone algo para defender a tal condición de trabajo, no propone
tampoco una sola forma de salario, por ejemplo el salario por hora, sino que abre la
posibilidad de establecer múltiples formas de pago con mayor claridad que en la ley
actual.

En esté orden de ideas, consideramos que el proyecto panista se caracteriza por


proponer una flexibilidad de carácter unilateral, es decir, de unilateralidad patronal, ya que
no es una flexibilidad que implique un acuerdo con la parte obrera, sino por el contrario
atenta contra los derechos laborales irrenunciables que durante décadas de lucha han
adquirido la clase trabajadora y que es extensiva a sus familias, al pretender la renuncia
de derechos laborales, en beneficio de unos cuantos que forman la clase patronal, en la
relación de trabajo.

Solo podemos observar que existen bilateralmente en dos aspectos que menciona el
proyecto y son: cuando los cambios en la tecnología o en la organización del trabajo que
afecten el empleo; pues hay muchos cambios tecnológicos u organizaciones que no
suponen reducción de personal y todos quedan a la discrecionalidad patronal; y los
programas de productividad y capacitación. En éstos se sigue el actual modelo de
convenios de productividad impulsados por la Secretaria del Trabajo en los que deben
especificarse las metas y acciones que tales programas, los indicadores de productividad,
el tipo de información que debe proporcionar a los trabajadores, el monto de los bonos y
la capacitación.

Consideramos que un planteamiento alternativo podría ser la flexibilidad bilateral en


sentido amplio. Esta idea podría abrir realmente un espacio amplio y nuevo de acción a
los obreros y sería diferente de la simple defensa de la rigidez como derechos ganados;
además de la participación de los trabajadores en la productividad y sus beneficios; su
derecho a acceder a la información y de negociación colectiva.

La reforma del Derecho del Trabajo, tanto en su aspecto individual como colectivo, debe
de tomar en cuenta las particularidades del país y no importar ideas de modelos ajenos al
contexto nacional, consideramos que la flexibilidad en las normas laborales debe permitir
conciliar la protección de los trabajadores con la flexibilidad de condiciones de trabajo. El
detrimento de uno de los derechos laborales irrenunciables de los trabajadores, implica el
detrimento de la sociedad en su conjunto. Considerando que el permitir renuncia de

189
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

derechos laborales es delicado y riesgoso, se distorsionaría el alma social del Derecho del
Trabajo, de consecuencia que trascenderían a disminuir aún más los derechos mínimos
de los trabajadores que a lo largo del tiempo han obtenido hombre y mujeres que viven de
su trabajo.

190
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

CAPITULO 3 El Sindicato y los derechos laborales internacionales en la legislación


Mexicana

3.1 Derecho laboral y movimiento sindical internacional.

“En la Declaración de Derechos Sociales del Tratado de Vérsalles, se expresa que el


principio rector del Derecho Internacional del Trabajo consiste en que el trabajo no debe
ser considerado mercancía o artículo de comercio191”.

En la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo 123, consagra


en su parte inicial, al referirse al trabajo, esto sin definirlo, al decir: “Toda persona tiene
derecho al trabajo digno y socialmente útil;[”.

El trabajo debe ser una actividad que posibilite a las personas disponer de un ingreso
para satisfacer, de manera principal, sus necesidades básicas y aquellas otras que
incidan en una mejor calidad de vida, y el derecho del trabajo la garantía jurídica que
disponen los trabajadores para hacer efectiva su aspiración a un trabajo digno y útil.

Desde la óptica de las personas que realizan un trabajo, la palabra derecho ha de


entenderse de manera subjetiva; es decir, como derecho subjetivo: el interés jurídico
protegido; una voluntad concreta de la ley subjetivizada; o sea, considerada desde el
punto de vista de aquel que puede pedir su actuación.192

La expresión derechos laborales, de acuerdo a lo antes señalado, se interpreta como el


conjunto de derechos subjetivos que les son propios a los trabajadores por el simple
hecho de estar sujetos a una relación de trabajo.

De manera objetiva, los derechos laborales se enmarcan en el derecho del trabajo,


definido como un ordenamiento positivo y como ciencia. Sus contenidos, según Héctor
Santos Azuela, 139 se refieren a:

1. El derecho individual, que comprende, a su vez, la autonomía privada en las relaciones


de trabajo; las condiciones generales de trabajo, y los regímenes especiales de trabajo.

2. La previsión social, dentro de la que se incluye el trabajo de mujeres, el estatuto laboral


de los menores, el derecho habitacional, el régimen sobre higiene y seguridad, la
capacitación profesional y los riesgos de trabajo.

191
BORRELL NAVARRO, Miguel. Análisis Práctico y Jurisprudencial del Derecho Mexicano del
Trabajo, Quinta edición, Sisita, México, 1998, p. 68.
192
Cfr., De Pina, Rafael y De Pina Vara, Rafael, óp. cit., nota 88, p. 242.

191
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3. El derecho sindical que incluye la organización profesional, el pacto sindical o contrato


colectivo de trabajo y el derecho de huelga.

4. La administración laboral, que comprende la naturaleza, organización y funciones de


las autoridades del trabajo, y

5. El derecho procesal del trabajo.

En los siguientes temas se hace mención de los derechos laborales sustantivos, a


diferencia de los derechos laborales procesales y de los derechos de clase o colectivos
señalados, de una manera muy importante y trascendental, en la Carta Magna de 1917.
Así mismo, se indican las normas individuales del trabajo incorporadas en las Leyes
Federales del Trabajo de 1931 y 1970, a fin de explicar la tesis de que la Nueva Cultura
del Trabajo es en detrimento de los derechos laborales de los trabajadores y de su nivel
de vida, ante los embates de una clase empresarial egoísta y de un Estado ajeno a los
reclamos de la clase trabajadora por mejorar su salario y sus condiciones de trabajo.

En México, la entrada al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC-AN),


añade un nuevo escaño de carácter regional a esta estructuración jurídica y económica
que ordena a los sindicatos. De tal manera, en una evaluación del marco metodológico,
podemos ubicar el marco institucional de la política sindical en tres niveles:

a) nivel internacional

b) nivel regional

c) nivel nacional.

- Evolución de 1900 a 1950

En este período se da un florecimiento del movimiento sindical en el ámbito mundial.


Particularmente en economías altamente industrializadas. Esto se debió a la evolución y
los logros de los conflictos laborales que habían tenido lugar durante el siglo XIX,
incluyendo la estructura ideológica del marxismo, la Internacional Socialista, la Reforma
en Inglaterra. La culminación de estos movimientos fue el establecimiento del Estado de
Bienestar en la mayoría de las economías industrializadas de la época, y la creación de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT), en 1919, que en sus primeras regulaciones
intenta uniformar los principios laborales en el ámbito internacional.

Solamente a partir de los años cuarenta, con el Convenio Nº 87 y el Convenio Nº 98, se


trata de regular internacionalmente la actuación de los sindicatos.

192
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El Convenio Nº 87 establece la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación,


y el Convenio Nº 98 regula la sindicación y la negociación colectiva.

Sin embargo, es necesario reconocer que anteriormente se había aprobado, en 1937, el


Convenio Nº 11, en cuanto al derecho de asociación en la agricultura; más adelante, en
1974, el Convenio Nº 135, sobre los representantes de los trabajadores y, en 1978, el
Convenio Nº 141, que regula las organizaciones de trabajadores rurales.

- Evolución de 1950 a la fecha

A partir de los años cincuenta se pueden percibir transformaciones en el movimiento


sindical en este nivel.

Como es sabido, a partir de la Segunda Guerra Mundial se efectúan unas transferencias


de industrias, de una economía con altos y bajos costos, en busca de una mayor
competitividad. Uno de los elementos de la producción más fácil de reducir es la mano de
obra, debido al diferencial que existe en las diversas economías y que no se aplica de
igual manera para las materias primas o para otro tipo de insumos.

Así, muchas industrias cambian su localización, de países con altos niveles, a países con
bajos niveles salariales, esto es, de economías altamente industrializadas, a economías
en desarrollo. Con esto, la producción obtiene una reducción considerable de costos en la
mano de obra.

La consecuencia más inmediata de este proceso fue un gradual debilitamiento de los


sindicatos y de las asociaciones gremiales en las economías altamente industrializadas,
por dos motivos: el primero es que los asalariados de estas economías pierden sus
empleos, que se van a otras economías; y los trabajos que anteriormente a este período
se efectuaban en las industrias, ahora se transforman frecuentemente en puestos del
sector servicios, que en general no forman la fuerza de los sindicatos.

Otro motivo es que continuamente se condiciona de diversas maneras la contratación de


los trabajadores en estas economías, por ejemplo, cubriendo una plaza con dos tiempos
medios, lo cual permite una evasión de la militancia sindical, con obreros que no pueden
participar activamente en los sindicatos, debido a que no tienen un tiempo completo.

Una segunda consecuencia, esta vez en las economías en desarrollo, es que los
sindicatos que se encontraban en la mayoría de los casos en un proceso de
consolidación, no lograron afianzarse como una fuerza representativa y contundente, a
partir de este período, para lograr avances en los logros laborales.

193
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Esto se debe, en la mayoría de los casos, a la oferta excesiva de mano de obra que hacía
bajar los salarios y los estándares laborales a niveles aun menores, proporcionalmente,
que los que se tenían en los años cuarentas o cincuentas.

Con el proceso de globalización, esto se profundiza, así como las contradicciones entre la
clase trabajadora y la clase empresarial.

La OIT hace una recapitulación de sus principios y regulaciones a partir de los sucesos
antes referidos. Así, en la Conferencia Internacional del Trabajo, en su LXXXVI Reunión,
en Ginebra, junio de 1998, se emitió la Declaración de la Organización Internacional del
Trabajo, relativa a los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo, donde se
establecen, entre otros elementos:

Considerando que la OIT es la organización internacional de mandato constitucional y el


órgano competente para establecer Normas Internacionales de Trabajo y ocuparse de
ellas, y que goza de apoyo y reconocimiento universales en la promoción de los derechos
fundamentales en el trabajo como expresión de sus principios constitucionales;
considerando que en una situación de creciente interdependencia económica urge
reafirmar la permanencia de los principios y derechos fundamentales inscritos en la
Constitución de la Organización, así como promover su aplicación universal.

- La Conferencia Internacional del Trabajo

1. Hay que Recordar;

a) que al incorporarse libremente a la OIT, todos los Miembros han aceptado los principios
y derechos enunciados en su Constitución y en la Declaración de Filadelfia, y se han
comprometido a esforzarse por lograr los objetivos generales de la Organización en toda
la medida de sus posibilidades y atendiendo a sus condiciones específicas;

b) que esos principios y derechos han sido expresados y desarrollados en forma de


derechos y obligaciones específicos en convenios que han sido reconocidos como
fundamentales dentro y fuera de la Organización.

2. Declara que todos los Miembros, aun cuando no hayan ratificado los convenios
aludidos, tienen un compromiso que se deriva de su mera pertenencia a la Organización
de respetar, promover y hacer realidad, de buena fe y de conformidad con la Constitución,
los principios relativos a los derechos fundamentales que son objeto de esos convenios,
es decir:

194
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

a) la libertad de asociación y la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho


de negociación colectiva;

b) la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio;

c) la abolición efectiva del trabajo infantil; y

d) la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación.1

3. Reconoce la obligación de la Organización de ayudar a sus Miembros, en respuesta a


las necesidades que hayan establecido y expresado, a alcanzar esos objetivos haciendo
pleno uso de sus recursos constitucionales, de funcionamiento y presupuestarios, incluida
la movilización de los recursos y apoyo externos, así como alentando a otras
organizaciones internacionales con las que la OIT ha establecido relaciones, de
conformidad con el artículo 12 de su Constitución, a respaldar esos esfuerzos:

a) ofreciendo cooperación técnica y servicios de asesoramiento destinados a promover la


ratificación y aplicación de los convenios fundamentales;

b) asistiendo a los Miembros que todavía no están en condiciones de ratificar todos o


algunos de esos convenios, en sus esfuerzos por respetar, promover y hacer realidad los
principios relativos a los derechos fundamentales que son objeto de estos convenios; y

c) ayudando a los Miembros en sus esfuerzos por crear un entorno favorable de


desarrollo económico y social.

4. Decide que, para hacer plenamente efectiva la presente Declaración, se pondrá en


marcha un seguimiento promocional, que sea creíble y eficaz, con arreglo a las
modalidades que se establecen en el anexo que se considerará parte integrante de la
Declaración.

5. Subraya que las normas del trabajo no deberían utilizarse con fines comerciales
proteccionistas y que nada en la presente Declaración y su seguimiento podrá invocarse
ni utilizarse de otro modo con dichos fines; además, no debería en modo alguno ponerse
en cuestión la ventaja comparativa de cualquier país sobre la base de la presente
Declaración y su seguimiento.

Se puede decir que estos son los nuevos principios laborales mínimos que la OIT puede
aceptar en este período de globalización.

En relación con México, en el informe de la Organización Internacional del Trabajo del año
2001, en cuanto a la libertad de asociación, la libertad sindical y el reconocimiento efectivo

195
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

del derecho a la negociación colectiva, se explican los medios de apreciación de la


situación, en una evaluación del marco institucional (pp. 142-145).

La Legislación mexicana reconoce y garantiza plenamente el principio del derecho de


sindicación y de negociación colectiva.

Estos principios se regulan de manera específica en la Constitución Política de los


Estados Unidos Mexicanos, que establece en su artículo 9º, que no se podrá coartar el
derecho de asociarse o reunirse pacíficamente con cualquier objeto lícito. El artículo 123,
Apartado A, fracción XVI, del mismo ordenamiento, dispone que tanto los obreros como
los empresarios tendrán derecho para coaligarse en defensa de sus respectivos intereses,
formando sindicatos, asociaciones profesionales, etc. Asimismo, el Apartado B, fracción
X, del mencionado artículo, establece que los trabajadores tendrán el derecho de
asociarse para la defensa de sus intereses comunes.

Por otra parte, la Ley Federal del Trabajo (LFT), título séptimo, sobre las “Relaciones
colectivas de trabajo”, contempla disposiciones relativas al Contrato Colectivo de Trabajo
y al Contrato-Ley, dispuestos en los capítulos III y IV.

De manera concreta, los artículos 441, 356, 357, 359 y 381 de la Ley Federal del Trabajo,
establecen respectivamente que:

Los sindicatos de trabajadores son coaliciones permanentes. El sindicato es la asociación


de trabajadores o patrones, constituida para el estudio, mejoramiento y defensa de sus
respectivos intereses. Los trabajadores y los patrones tienen el derecho de constituir
sindicatos, sin necesidad de autorización previa. Los sindicatos tienen derecho a redactar
sus estatutos y reglamentos, elegir libremente a sus representantes, organizar su
administración y sus actividades y formular su programa de acción. Los sindicatos pueden
formar federaciones y confederaciones, las que se regirán por las disposiciones de este
capítulo II, del título VII, en lo que sean aplicables.

3.1.1 Tratado de libre comercio: Regulación del trabajo.

Se fundamenta básicamente en el Tratado de Libre Comercio para América del Norte y el


Acuerdo de Cooperación Laboral de América del Norte.

Los siguientes son lineamientos que las partes se comprometen a promover, bajo las
condiciones que establezca su legislación interna, sin que constituyan normas comunes
mínimas para dicha legislación. Su propósito es delimitar áreas amplias de atención en
que las partes han desarrollado, cada una a su manera, leyes, reglamentos,

196
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

procedimientos y prácticas que protegen los derechos y los intereses de sus respectivas
fuerzas de trabajo.

1. Libertad de asociación y protección del derecho a organizarse.

2. Derecho a la negociación colectiva.

3. Derecho de huelga.

4. Prohibición del trabajo forzado.

5. Restricciones sobre el trabajo de menores.

6. Condiciones mínimas de trabajo.

7. Eliminación de la discriminación en el empleo.

8. Salario igual para hombres y mujeres, según el principio de pago igual por trabajo igual,
en un mismo establecimiento.

9. Prevención de lesiones y enfermedades ocupacionales.

10. Indemnización en los casos de lesiones de trabajo o enfermedades ocupacionales.

11. Protección de los trabajadores migratorios.

Esta legislación es de aplicación general para los tres países que forman el TLC: Canadá,
Estados Unidos y México. Este acuerdo paralelo requiere de un amplio análisis, sin
embargo, un problema inmediato de carácter aplicativo es que no se proporcionan
mecanismos de obligatoriedad ni de seguimiento del mismo.

3.1.2 Derecho jurídico sindical y política sindical en México.

Los sindicatos en México se han creado al cobijo del Estado. La relación sindicato-Estado,
en México, se ha caracterizado por la constante intrusión que tiene el último en la vida de
los sindicatos, mediante diversos organismos como: la Secretaría de Gobernación
(órgano de seguridad del Gobierno), la Secretaría del Trabajo, el Instituto Mexicano del
Seguro Social e instituciones políticas y sociales.

En el artículo 123, de la Constitución mexicana de 1917, fracción XVII, se reconoció el


derecho de los patronos al paro y el de los trabajadores a la huelga, con lo cual se
transformó el sentido de dicha figura, de una simple libertad que tan sólo habilitaba a
aquellos para que se abstuvieran de realizar sus labores, en un derecho de supremo
rango.

197
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La fracción XVIII, del mismo artículo 123 de la Constitución, establece limitantes al


ejercicio irrestricto de dicho derecho, diferenciándose la huelga lícita de la ilícita, amén de
justificar el requerimiento procesal de que los trabajadores comuniquen, con 10 días de
antelación, el estallamiento del conflicto, en el momento preciso de suspender las labores,
en el caso de afectar servicios públicos.

Son huelgas lícitas las que tengan por objeto conseguir el equilibrio entre los factores de
la producción, armonizando los intereses del capital y del trabajo.

Son huelgas ilícitas las que se realizan en forma violenta, por la mayoría de los
huelguistas, sobre las personas o las propiedades, o bien, en caso de guerra, cuando
aquéllas pertenezcan a los establecimientos y servicios dependientes del Estado.

En la fracción XIX se reconocieron solamente los paros ilícitos que no se identifican con la
libertad de los patrones para suspender temporalmente el trabajo como forma de presión
contra los trabajadores, sino restringidos de manera expresa, a la cesación temporal del
trabajo frente al exceso de producción en la empresa y con el propósito esencial de
mantener los precios en un límite costeable, debiendo de obtener cuando menos
formalmente la aprobación respectiva de la Junta Competente de Conciliación y Arbitraje.

La Ley Federal del Trabajo, 2 título 7, capítulos III y IV, sobre Relaciones Colectivas en el
Trabajo, contiene cláusulas relacionadas con el Contrato Colectivo de Trabajo y con el
Contrato-Ley.

En el artículo 441 se establece:

Los sindicatos de trabajadores son coaliciones permanentes.

Artículo 356. Sindicato es la asociación de trabajadores o patrones, constituida para el


estudio, mejoramiento y defensa de sus respectivos intereses.

Artículo 357. Los trabajadores y los patronos tienen el derecho de constituir sindicatos, sin
necesidad de autorización previa.

Artículo 359. Los sindicatos tienen derecho a redactar sus estatutos y reglamentos, elegir
libremente a sus representantes, organizar su administración y sus actividades y formular
su programa de acción.

Artículo 381. Los sindicatos pueden formar federaciones y confederaciones, las que se
regirán por las disposiciones de este capítulo VI, del título VII, en lo que sean aplicables.

El Gobierno mexicano, desde principios del siglo XX, propició la organización de un

198
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Congreso Nacional Obrero, con objeto de mantener el control del movimiento sindical.

El sindicalismo en México va aparejado con la evolución del movimiento obrero


profesionalmente organizado en el país. Un primer encuentro sindical, realizado en 1917,
logró congregar a 116 organizaciones, observándose la formación de tres grandes
corrientes de opinión, todas ellas vinculadas a movimientos socialistas.

Se creó la Confederación Regional Obrera de México (CROM), que adoptó el modelo del
sindicalismo laborista inglés, según algunos autores, adoptando la opinión y experiencias
sindicales del Reino Unido, firmemente vinculado al partido político Laborista Mexicano,
creado en 1918.

A medida que la CROM lograba fortalecerse, el subsidio oficial le permitió subsistir sin el
apoyo directo de las cuotas de los miembros, de manera que se consolidó con el
consenso del Gobierno.

Más tarde, sucedió lo mismo con otras organizaciones de trabajadores, como la


Confederación de Trabajadores de México (CTM), el Sindicato de Trabajadores de la
Educación (STN), entre otros.

Aparentemente, la estructura sindical se ha mantenido sin cambios desde sus inicios, las
que han tenido una serie de innovaciones han sido las políticas económica, social y
laboral con importantes repercusiones.

Previo a 1980, tenemos unas políticas económica, social, cultural y sindical, que
corresponden a una etapa del país, ésta va a ser abruptamente modificada a partir de
1982 con el gobierno de Miguel de la Madrid; este cambio se va a reflejar en materia
laboral y en materia sindical.

Los derechos establecidos en la Constitución, en la Ley Federal del Trabajo y en otros


ordenamientos, son irrenunciables. Lo que se propugna a partir de 1982, especialmente
con la mutilación de los contratos colectivos, es la renuncia a estos derechos. En las
revisiones contractuales realizadas durante el período 1982-2000, que estamos
analizando, frecuentemente la alternativa era cerrar la planta o mutilar el contrato, es decir
perder el trabajo o renunciar a derechos laborales obtenidos anteriormente.

Sería necesario aquí puntualizar el hecho de que anteriormente a ese período también
existían violaciones a la Constitución y a la Ley, pero podríamos decir que eran
excepciones a la norma, sin embargo, a partir de los años ochentas se estandarizan estas
formas de violación y se aceptan como algo normal.

199
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En muchas de las empresas establecidas en los últimos veinte años, particularmente en el


sector de maquiladoras, es donde se ha pugnado constantemente por mantener a los
sindicatos bajo control, debido a que al industrial maquilador extranjero le ofrecen una
serie de adecuaciones, y en esa serie se incluyen el tipo de sindicatos que más se adapte
a la empresa, sin descartar la posibilidad de que no haya sindicato, que es un caso común
en Tijuana, Baja California Norte y Sonora.

En Tamaulipas, donde la tradición sindical es más fuerte, y en las ciudades de la frontera


norte de Tamaulipas, la sindicalización en las maquiladoras es de casi 100%. Otro caso
es el de las maquiladoras que se están interiorizando en Guanajuato, Yucatán,
Guadalajara, Monterrey y Hermosillo.

A pesar de este conjunto de factores que golpean duramente al movimiento sindical y a


los derechos de los trabajadores, en la Memoria de Cumplimiento del Gobierno Mexicano,
presentada ante la Organización Internacional del Trabajo, se establecen los esfuerzos
desplegados o previstos con miras al respeto, la promoción y la realización de los
principios y derechos. Entre ellos se establece:

En México la libertad de sindicación, y de negociación colectiva son derechos de plena


vigencia. Por el momento, la legislación y la práctica nacionales satisfacen las
necesidades reales de acuerdo al proceso de desarrollo social y a los planteamientos de
los trabajadores y empleadores a través de sus organizaciones.

Marco jurídico.

En él capitulo anterior analizamos la evolución de los sindicatos en México, en el cual


estudiamos desde la época colonial hasta la creación de la Ley Federal del trabajo de
1931, logramos establecer como la clase obrera con sus constantes luchas y movimientos
fueron abriéndose paso para que se les reconocieran sus agrupaciones y así poder tener
un mecanismo de defensa respecto a sus intereses, logrando que el estado aceptara a
estas organizaciones como un instrumento mediante el cual los obreros lograran
establecer un equilibrio entre el trabajo y el capital.

Con este movimiento tanto los trabajadores como los patrones se evocaron a la creación
de instrumentos que regularan el trabajo. También se crearon mecanismos para la
regulación de los sindicatos, es decir, reglas en las cuales se permitiera la creación de
estos organismos, tanto como su estructuración como la reglamentación, así mismo su
vida externa e interna.

200
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Estos elementos están contenidos en la Ley Federal del Trabajo vigente, las cuales
contemplan su creación; no solamente regula sindicatos de obreros sino también de
patrones (Artículo 356).

Los sindicatos, tanto en México como en los demás países demócratas del nuevo mundo,
han llegado a ser entidades muy fuertes dentro de la sociedad.

Agrupan miles y miles de trabajadores, obtienen ingresos cuantiosos por las cuotas de
sus agremiados y las ministraciones directas que han conseguido de los patrones, a
través de las contrataciones colectivas.

Lo que procede, en nuestro modo de ver, es considerar que cuando una institución nace
dentro de la colectividad, a medida que aumenta su fuerza debe aumentar su
responsabilidad. Entes colectivos poderosos e irresponsables son la peor amenaza para
el orden jurídico.

Para formar un sindicato, según lo dispone la ley en el citado Artículo 356, es necesario
que se reúnan trabajadores o patrones. La definición actual, a diferencia de la que existía
en la Ley de 1931 ya no requiere la característica de que los integrantes del sindicato
sean de una misma profesión, oficio o especialidad o de profesión, oficio o especialidades
similares o conexos.

La reforma parece acertada puesto que la mayor parte de los sindicatos que la propia ley
reconoce, no tiene las características que implicaron los requisitos antes citados y que
son propios tan solo de los sindicatos gremiales. Ahora la ley engloba en el citado Artículo
356 a todo tipo de sindicatos con la condición de que debe tratarse de trabajadores o de
patrones, excluyendo, como es 1ogico, los llamados sindicatos de personas que no son
trabajadores y que adoptan ese nombre y la mixta.

Por otra parte los hombres y las mujeres trabajadoras pueden formar parte de un
sindicato y participar en su administración y dirección, con la sola prohibición que los
obreros menores de dieciséis años no puede formar parte de la directiva de los sindicatos,
como tampoco los trabajadores que sean de nacionalidad extranjera.

Ahora bien los instrumentos jurídicos que regulan a los sindicatos, son aquellos que van a
marcar o determinar cuál va a ser el mecanismo para que una agrupación pueda
constituirse y los pasos a seguir, así como su estructuración; y en cierta forma su finalidad
para la cual fueron creados; podríamos decir que son medios de control, los cuales van a
limitar su expansión de acuerdo a los intereses de las autoridades o de la empresa, en un

201
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

momento dado.

Estos elementos de control son en primer lugar, la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, específicamente el artículo 123 fracción XVI, a pesar que otorga el
derecho social de la libertad de asociación, no obstante el permitirla, busca de alguna
manera controlar a los sindicatos. El otro mecanismo regulador de las agrupaciones de
obreros, es la Ley Federal del Trabajo, en ella se regulan aspectos de forma y fondo.

Otro mecanismo que regula el sindicato son los Convenios Internacionales de la


Organización Internacional del Trabajo ratificados por México, a que deberán sujetarse las
agrupaciones sindicales, no solo de México sino de otros países, claro con la aprobación
de las autoridades correspondientes, como lo podemos ver en el convenio 87, relativo a la
libertad sindical y a la protección del derecho de indicación contenido en el Artículo 2.193

Finalmente, como instrumento regulador de dichas organizaciones, están los estatutos de


cada agrupación, los cuales controlan la vida interna de estas asociaciones; decimos
también que estos son elementos de control, porque la misma Ley Federal del Trabajo
requiere que estos tengan dichos preceptos, para que se dirijan de acuerdo con los
intereses de sus miembros.

3.2 La ley laboral en la constitución de los sindicatos.

Estos requisitos, son elementos jurídicos, sociales y humanos, los cuales le van a dar
personalidad jurídica. Dentro del derecho comparado existe un sistema general: el de la
constitución libre de sindicatos, los cuales no los conduce a adquirir la personalidad
jurídica mediante la inscripción previa, y pueden actuar como asociaciones de hecho y así
realizar todas las actividades sindicales, con el fin de intervenir ante todo género de
autoridades en defensa de la comunidad obrera que representan.

Por otra parte la doctrina clasifica estos requisitos en dos grupos, de fondo y forma. Los
primeros se subdividen en dos elementos, materiales o substanciales que deben concurrir
a la constitución del sindicato, entre ellos, las calidades de las personas que concurren a
su organización y funcionamiento y las finalidades que se propongan realizar los
trabajadores. Los segundos, son los que señala la ley para el reconocimiento de la
personalidad jurídica de la asociación.

La Ley Federal del Trabajo sugiere una clasificación tripartita de los requisitos para la

193
Convenios de la Organización Internacional del Trabajo Ratificados por México, sexta edición, ED.
Secretaría del trabajo y Previsión Social, México, 2002, Pág. 152.

202
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

constitución de un sindicato: fondo, forma y en cuanto a las personas.

Requisitos de fondo.

Los requisitos de fondo son los elementos que integran el ser social del sindicato, ya que
es una Más aún, nuestra ley prevé la libertad para pertenecer a una asociación de esta
naturaleza o de dejar de pertenecer al mismo. Puede ser, como ya mencionamos, una
organización de trabajadores o de patrones, sin que pueda darse la posibilidad de que
unos y otros integren una misma agrupación profesional, puesto que no son posibles los
sindicatos mixtos, es decir, la constituida por patrones y trabajadores.

Por consiguiente, la asociación de personas que no contengan una de las características


mencionadas, podrá ser una asociación civil o mercantil, pero no un sindicato.

Los requisitos de fondo, son los elementos que sirven para integrar la unidad sociológica
sindical; estos requisitos son: de personas, objeto y de organización.

Pero solamente analizaremos el objeto y la organización conjuntamente, ya que en cuanto


al requisito de personas lo estudiaremos en el siguiente punto, por considerarlo
importante y porque requiere más atención por ser la base fundamental del sindicato.

En cuanto al objeto, interpretando a la ley, se forma un sindicato para el estudio,


mejoramiento y defensa de los intereses comunes de sus agremiados.

Sin embargo, el texto constitucional prevé que los sindicatos pueden realizar otro tipo de
actividades que sean afines a su esencia, de las cuales podemos citar económica,
política, culturales, etc. Lo que le da oportunidad a los sindicatos a realizar obras en
beneficio de sus afiliados y sobre todo reunir un patrimonio considerable en beneficios
colectivos de los trabajadores.

Es menester, que la Ley Federal del Trabajo faculta a los sindicatos a realizar actos
mercantiles, teniendo la prohibición de ejercer el comercio con fines de lucro, según el
Artículo 378 fracción II de la Ley. Por lo que “los objetos de transformación social, siempre
que sigan cauces pacíficos y constructivos, pueden ser legalmente perseguidos por los
sindicatos."194

Dentro de la finalidad política en la Ley de 1931, les estaba vetado a los sindicatos
intervenir en política, posteriormente al ser modificado el ordenamiento, las agrupaciones
obreras tienen participación activa y directa en la vida política del país,

194
Castorena, J. Jesús. Óp. Cit. Pág. 240.

203
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

independientemente de su ideología, como lo es el de las grandes centrales obreras,


afiliadas como uno de sus sectores del partido oficial, la Confederación de Trabajadores
de México (CTM), o la ideología de los trabajadores universitarios que se encuentran
afiliados a partidos de izquierda, siguiendo con la tradición de las leyes de reforma les
está prohibida su intervención en asuntos religiosos.

Por otra parte y con relación a la organización, la vida externa e interna de los sindicatos
se encuentra organizada mediante estatutos que son las normas jurídicas que rige su
destino. En nuestra legislación él Artículo 371 de la Ley Federal del trabajo, establece una
serie de disposiciones que son el mínimo que deben de contener los estatutos para que
los sindicatos puedan ser registrados.

Requisitos formales.

En cuanto a los requisitos de forma, son los que debemos entender como todos aquellos
procedimientos y formalidades necesarias para la legal organización de los sindicatos.

Esto quiere decir, es el elemento primordial en el cual el sindicato se ajustará a las reglas
en las cuales se le dará el reconocimiento, la personalidad jurídica y el registro, que sin
éstos requisitos el sindicato no será reconocido por nuestra legislación y carecerá de
personalidad jurídica para ejercer derechos y contraer obligaciones.

Cuando hablamos de legal organización, nos referimos a que estos procedimientos deben
seguirse conforme a la ley ya que al omitirla representaría un problema, es decir, se
entraría en conflicto con las autoridades encargadas de revisar que se cumplan con estos
requisitos dictados por la Ley Federal del Trabajo reglamentaria del Artículo 123
constitucional.

Dentro de estas exigencias se encuentra: copia simple de la asamblea por la cual los
trabajadores se reúnen por primera vez y acuerdan integrarse en un frente común
denominado sindicato.

Una segunda condición es la lista con los nombres y domicilios de sus integrantes, así
como el nombre y domicilio del patrón, empresa o establecimiento por el cual se prestan
los servicios.

Un requisito más es la presentación de una copia simple de los estatutos, y como lo


afirma Bermúdez Cisneros, “es el elemento de carácter formal en la integración sindical,
en realidad es de fondo porque a través de él establece obligaciones y derechos

204
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

fundamentales dentro de la función sindical”.195

Como un cuarto requisito tenemos la presentación de una copia simple del acta de la
asamblea en que se hubiere elegido la mesa directiva, siendo posible que la elección se
efectúe el mismo día de la asamblea constitutiva, por lo que puede ser inscrito en la
misma acta, sin embargo en elecciones se harán constar en sus respectivos actos, mismo
que deberán ser entregados a la autoridad competente.

"Al hablar de requisitos formales, como el nombre lo indica, nos referimos a las
formalidades que servirán para constatar la realidad de los actos constitutivos".196

Todo lo referente al acto constitutivo del sindicato, la adopción de sus estatutos y la


designación de su primera mesa directiva, son decisiones que los trabajadores toman
libremente, para el mejor funcionamiento de su organización, no aceptando la ingerencia
de las autoridades del trabajo.

3.3. Personalidad Legal y jurídica.

Los sindicatos legalmente constituidos son personas Jurídicas y tienen capacidad para
adquirir bienes muebles e inmuebles destinados inmediata y directamente a los objetivos
de la agrupación, para defender ante todas las autoridades los derechos de sus
agremiados, y ejercer las acciones judiciales o administrativas que en cada caso
específico procedan, independientemente de las acciones colectivas que sea preciso
intentar en favor de sus agremiados.

A partir de la Carta Magna de 1917, a los sindicatos se les reconoce su personalidad


jurídica, como lo podemos ver en sus fracciones XVI al XIX del Artículo 123, en donde se
reconocieron a las asociaciones de obreros representantes de los intereses y derechos
colectivos.

Con la constitución de 1917, en la cual se dio origen a la parte social, dentro de la Carta
Magna, que la componen los artículos 3°, 25, 26, 27, 28 y 123, por lo que podemos decir
que el Derecho del Trabajo ya no se encuentra ni en el Derecho Público ni en el Derecho
Privado, ya que este forma parte del nuevo Derecho Social.

Consideramos que la personalidad jurídica de los sindicatos nace cuando se constituyen y


en el momento de que las autoridades reciben la solicitud de registro, de tal suerte que
dicho registro es únicamente el elemento que sirve para darle autenticidad a la existencia

195
Bermúdez Cisneros, Miguel. Óp. Cit. Pág. 194.
196
De la Cueva, Mario. Óp. Cit. tomo II, pág. 336.

205
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

del sujeto de derechos y obligaciones.

Ahora como nos dice el artículo 374 de la Ley Federal del Trabajo que, “los sindicatos
legalmente constituidos son personas morales...”, por lo que podemos entender, e
interpretar este Artículo que los sindicatos legalmente constituidos son personas jurídicas.

Sin embargo a las personas jurídicas se dividen en dos grupos: las físicas y las morales,
“El primer término corresponde al sujeto jurídico individual, es decir, al hombre en cuanto
tiene obligaciones y derechos; se otorga el segundo nombre a las asociaciones dotadas
de personalidad (un sindicato, una sociedad mercantil) como ambas designaciones son
ambiguas, preferimos decir persona jurídica individual y persona jurídica colectiva”.197

Por lo que podemos decir que la persona jurídica individual, individualiza a la asociación,
la cual hace diferente a otras agrupaciones e impenetrable a las restantes instituciones
sociales; por lo que a ésta se le deposita la representaci6n jurídica total de los intereses y
derechos de la comunidad.

Por su parte, Ferrara cuando habla de la personalidad jurídica dice que es producto del
orden jurídico, nace por el reconocimiento del derecho objetivo definiendo a las personas
jurídicas colectivas como " asociaciones o instituciones formadas por la consecución de
un fin y reconocidos por la ordenaci6n jurídica como sujetos de derecho."198

De lo antes mencionado, concluimos que para Ferrara, la voluntad humana puede crear
una asociación, sin embargo, no tiene poder de producir un sujeto de derecho, sino que
sólo integra el elemento material de la asociación, pero el requisito formal es obra del
derecho.

En términos generales, el Dr. de la Cueva, coincide con Ferrara, creándose la


controversia en lo que se refiere a la naturaleza que Ferrara le da al reconocimiento, “la
personalidad jurídica de las comunidades menores no es una donación del estado, sino el
reconocimiento de una realidad social, cuyos intereses deben ser protegidos por el orden
jurídico”.199

Planteadas varias teorías referentes a la personalidad jurídica, la controversia se presenta


en los siguientes términos: es la de determinar si el registro tiene efectos declarativos de
la personalidad de los sindicatos, o si por el contrario sus efectos son constitutivos de la
personalidad.
197
García Maynez, Eduardo. Introducción al Estudio del Derecho, ED. Porrúa, México, 2005, Pág. 271.
198
Ferrara, citado por García Maynez, Óp. Cit. Pág. 290.
199
De la Cueva, Mario. Tomo II, Óp. Cit. Pág. 348

206
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La fracción XVI del artículo 123, nos da la pauta a seguir, al mencionar que obreros y
empresarios tendrán derecho para coaligarse, formando sindicatos para la defensa de sus
intereses.

Es indudable que la personalidad jurídica resulta del acuerdo de constitución. El registro


en nada influye sobre su nacimiento.

Por su parte la Ley Federal del Trabajo en su artículo 357, afirma que trabajadores y
patrones podrán constituirse libremente en sindicatos, sin la necesidad de autorización
previa, pero existen en nuestra legislación contradicciones como la emanada del Artículo
368 de la misma ley, que a la letra dice, n el registro del sindicato y de su directiva,
otorgado por la Secretaria del Trabajo y Previsión Social o por las Juntas Locales de
Conciliación y Arbitraje, produce efectos ante todas las autoridades”.

Así mismo, de acuerdo al artículo 692 fracción IV, "los representantes de los sindicatos
acreditaran su personalidad con la certificación que les extienda la Secretaria del Trabajo
y Previsión Social, o la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, de haber quedado
registrada la directiva del sindicato”.

Por lo que consideramos que la personalidad jurídica nace en el mismo momento de la


asamblea constitutiva y la verdadera naturaleza del registro, es la de poner del
conocimiento de las autoridades una situación jurídica ya dada por los registrados y con
ello su capacidad para actuar en el campo jurídico, consecuentemente, el reconocimiento
debe partir desde el momento de su constitución, en estricto apego a lo estipulado por
nuestra Carta Magna.

Una vez establecida la personalidad jurídica, veremos que la ley se las limita, tal como lo
marca el Artículo 374, ya que el sindicato por su propia naturaleza sólo tiene capacidad
patrimonial, esto es el derecho de adquirir y enajenar bienes muebles e inmuebles,
realizar lógicamente actos jurídicos con relación a esos bienes, tiene facultad para la
defensa de sus miembros, siempre y cuando el trabajador así lo solicite o el trabajador
puede presentarse sin la representación sindical según lo marca el artículo 375 de la Ley
Federal del Trabajo.

Prácticamente podríamos decir que el registro es una condición suspensiva en la que


pone en juego la capacidad jurídica de obrar y la de representar a los socios en la defensa
de los derechos individuales que les correspondan.

Finalmente, la desaparición de la personalidad jurídica se da por dos causas; la disolución

207
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

del sindicato, prevista en el artículo 379 de la ley, y al cancelarse el registro en las causas
señaladas por él Artículo 369, previo l juicio correspondiente ante la Junta de Conciliación
y Arbitraje.

3.4 Estructura legal de los sindicatos.

La Ley federal del Trabajo regula la organización de los sindicatos, a la cual sus miembros
deberán sujetarse, y al no hacerlo, el sindicato no podrá ser constituido y no podrán
registrar su agrupación, para esto se requiere una buena organización, dirección,
información, administración y gestión que haga de la acción sindical el medio adecuado
para optimizar los recursos con que cuenta el sindicato.

El buen funcionamiento de un sindicato depende de la forma en que haya organizado y


estructurado; para que se desarrollen con eficiencia sus actividades se necesita la
colaboración y participación activa de sus miembros, y es conveniente que sean las
mismas organizaciones los que dividan sus tareas entre sus afiliados, este derecho a
redactar sus estatutos, reglamentos y organizar su administración está contemplado en el
Artículo 359 de la Ley Federal del Trabajo.

El estatuto de un sindicato, expresara la forma en que este debe organizarse y establece


a su vez los órganos que los forman y sus atribuciones.

Ahora bien, para la organización y dirección de un sindicato se requiere de personas


ampliamente capacitadas para la toma de decisiones, conocedores de la realidad política,
económica y social, y ante todo con el espíritu de conciencia de clase.

Forma.

La forma de los negocios jurídicos, dentro de la doctrina se dividen en tres categorías:


consensuales, formales y solemnes.

La forma, una manera de expresar la voluntad, se traduce a ciertos negocios los cuales se
dan por escrito como lo señala el artículo 24 que dice, “las condiciones de trabajo deben
hacerse constar por escrito cuando no existen contratos colectivos aplicables”.

Pero el contrato colectivo de trabajo contiene términos casi iguales a las condiciones de
trabajo, en la que deben otorgarse también por escrito, bajo pena de nulidad de acuerdo
al artículo 390 de la Ley Federal del Trabajo, y de la misma manera se hará por escrito el
reglamento interior de trabajo, según lo dispuesto en el Artículo 424 de la citada ley.

Así podemos decir que la constitución de un sindicato es, en ese sentido, formal. Por lo

208
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

que la misma ley determina el levantamiento del acta de asamblea, cuya copia entre otros
documentos, habrá de remitirse a la autoridad registral, como lo indica el artículo 365
fracción I.

Hay ocasiones que para la constitución de sindicatos así como para hacer constar sus
asambleas o las reformas a los estatutos, son celebradas estas ante Notario Público con
la finalidad de que dé fe del acto y lo protocolice; puede ser conveniente pero no
necesario ya que la ley no lo exige. Tal vez ya en casos muy conflictivos, se acude
también al expediente de que esté presente un inspector de trabajo, pero no es
indispensable aunque sería una buena medida política.

Estatutos.

Los estatutos sindicales son las reglas internas que gobiernan al sindicato, deben estar
escritos en lenguaje claro y sencillo para que el trabajador pueda entenderlas sin
dificultad, y ponerse a la disposición de todos los miembros de manera que conozcan sus
derechos y obligaciones sindicales.

Una vez aprobados los estatutos por la asamblea, serán la norma elemental, la cual regirá
la vida de los sindicatos. Así mismo la ley en su Artículo 359, faculta a los sindicatos para
redactar sus estatutos y reglamentos sin intervención de ninguna autoridad.

Los sindicatos no pueden nacer sin estatutos, puede afirmarse que se trata de un
elemento esencial, constitutivo. En realidad los estatutos se vinculan de tal manera que
los sindicatos, que no es posible concebir la existencia jurídica de una agrupación de esta
naturaleza, que carezca del estatuto.

La aprobación del primer estatuto corresponde hacerla en el momento de su constitución.


Los estatutos constituyen las normas fundamentales que sirven para el desenvolvimiento
de una entidad ya concreta, con vida propia.

El estatuto es el instrumento que expresa el objeto del negocio jurídico colectivo creador
del sindicato. Puede definirse como “la norma aprobada en forma colectiva, que determina
los fines del sindicato, las relaciones del sindicato y sus miembros y los sindicatos con
terceros”.200

En nuestra legislación el artículo 371 de la Ley Federal del Trabajo, establece una serie
de disposiciones que son el mínimo que deben contener los estatutos para que sindicatos

200
De Buen Lozano, Néstor. Derecho del Trabajo, tomo II, Quinta edición actualizada, ED. Porrúa, México,
2005, Pág. 695.

209
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

puedan ser registrados, mismos que podríamos resumir de la siguiente manera:

A) Nombre del Sindicato

B) Domicilio

C) Objeto

D) Duración

E) Condiciones de admisión

F) Obligaciones y derechos

G) Motivos y procedimientos de expulsión

H) Forma de convocar a asamblea

I) Procedimiento de elección de directiva

J) Duración de la mesa directiva

K) Administración de sus bienes

L) Forma de pago y monto de las cuotas sindicales

M) Época de presentación de cuentas

N) Liquidación del patrimonio sindical

O) Demás normas que apruebe la asamblea

Ahora bien el estatuto es un elemento esencial, ya que está vinculado de tal manera que
no es posible imaginar la existencia jurídica de los sindicatos, si carece de ellos, serian
agrupaciones sin capacidad, que no podrían cumplir cabalmente con los fines para fueron
creados.

3.4.1 El mando sindical.

Las personas jurídicas actúan por medio de sus representantes o apoderados como les
llama la Ley Federal del Trabajo. “La representación es una relación jurídica por virtud de
la cual una persona llamada representado, haciendo recaer sobre esta los efectos
jurídicos de su gestión”.201

La posibilidad de la representación obrero-patronal tiene su punto de partida en la fracción


XVI, del apartado A del artículo 123 constitucional, y en cuanto a la ley reglamentaria se

201
Lastra Lastra, José Manuel. Óp. Cit. Pág. 305.

210
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

encuentra en sus artículos 375 y 376, indica que: “los sindicatos representan a sus
miembros en la defensa de los derechos individuales que le correspondan. Por lo que a la
representación del sindicato se ejercerá por su secretario general o por la persona que
designe la directiva”.

Como anteriormente lo mencionamos, la representación de los sindicatos se ejercerá por


su secretario general, por lo que la función de este implica la representación de los
trabajadores que integran la organización, ante las autoridades, la empresa y la
comunidad. Su personalidad se acredita con el registro sindical y la toma de nota ante las
autoridades laborales de acuerdo con el Artículo 365 de la Ley Federal del Trabajo.

Es responsable también de la planeación, dirección y ejecución de los programas que se


instrumentan en las secretarias del comité ejecutivo.

La dirección sindical debe tener una buena planeación por escrito expresada en
documentos y planes en los que se plantea los grandes objetivos, programas de acción y
declaración de principios, con base en esto se establece las estrategias políticas que
indican el camino a seguir instrumentándolo en programas de trabajo de la organización,
así también, de apoyo a otras organizaciones.

El dirigente sindical debe conocer las técnicas de la política, de la administración y la


gestión. El ser dirigente o líder sindical requiere capacidad, don de mando y, sobre todo
identificación con todos sus colaboradores y miembros de la base. También encauza,
conduce, coordina, enseña y está al frente de un grupo que trabaja para lograr objetivos;
el dirigente es el líder pero también es el responsable de la acción sindical.

Se debe tener presente que el dirigente delega funciones, nunca responsabilidades, este
dirige a los secretarios que ejercen la función de acuerdo a su especialidad.

El dirigente sindical, especialmente el secretario general y/o el secretario de trabajo y


conflictos son los responsables, de los trámites jurídicos ante las autoridades laborales,
para iniciar y seguir hasta su ejecución los juicios laborales colectivos o individuales que
requiera la organización.

Aparentemente esta facultad es exclusiva de los sindicatos de trabajadores, ya que se


indica que se otorga sin perjuicio del derecho de los obreros para obrar o intervenir
directamente, cesando entonces a petición del agremiado, la intervención del sindicato.

Esta facultad, cuyo ejercicio requiere acreditar la afiliación del representado, corresponde
a la esencia de los fines sindicales, por lo que se trata de una regla cuya aplicación

211
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

práctica es relativa ya que la necesidad de acreditar la afiliación del trabajador de que se


trate, puede superarse mediante el otorgamiento de mandato en simple carta poder en los
términos de lo ordenado en el Artículo 692 de la Ley Federal del Trabajo.

Existe en esta materia, la modalidad de representación en instancias tripartitas, como es


el caso de la Comisión Nacional y Regional de los Salarios Mínimos, la Comisión Nacional
para la Participación de los Trabajadores en las utilidades de las empresas, el Instituto del
Fondo Nacional de Vivienda para los trabajadores, el Instituto Mexicano del Seguro
Social, la Junta Federal y Local de Conciliación y Arbitraje, etc. Así mismo el sindicato
puede asumir la representación de intereses individuales, colectivos o de clase.

3.4.2 Limitaciones legales.

En la Ley Federal del Trabajo de 1931, existía prohibición para que los sindicatos
participaran en la política. Sin embargo, a partir de 1940 se derogo la prohibición de
intervenir en asuntos políticos por parte de los sindicatos.

En la Ley de 1931 en su artículo 249 se conservó la siguientes prohibiciones: intervenir en


asuntos religiosos; ejercer la profesión de comerciantes con ánimo de lucro; uso de la
violencia sobre los trabajadores libres para obligarlos a que se sindicalicen; y fomentar
actos delictivos contra personas o propiedades.

Por lo que los legisladores posteriormente decidieron extirpar de la ley del trabajo las
referencias a hechos delictivos, suprimió las dos últimas prohibiciones.

Así el artículo 378, dejó únicamente las dos prohibiciones; no intervenir en asuntos
religiosos y no ejercer la profesión de comerciante con ánimo de lucro.

Por lo tanto los sindicatos pueden realizar toda actividad política, porque la misma en
cierta manera forma se encuentra vinculada con la existencia de la agrupación de
obreros.

En la primera prohibición que especifica la ley que, los sindicatos no podrán intervenir en
asuntos religiosos., en este aspecto la prohibición deriva de una razón política. Como
sabemos, nuestro pa1s es muy católico y si un sindicato interviniera como persona moral
en asuntos religiosos, no nos imaginamos como esta prohibición afectar1a a una
población con tradición y arraigada a ésta, en la que se verían afectados tanto en su
agrupación como a su religión, por eso el estado fue astuto al plasmar esta prohibición en
la legislación laboral, para evitar que el sindicato tuviera mayor poder que la que posee él
mismo.

212
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Referente a la segunda prohibición si un sindicato actúa, en forma constante como


comerciante ( y de ello se inferirá el ánimo de lucro, necesariamente ), se estará
desvirtuando su esencia, y por tal motivo se podría cancelar su registro, ya que dejaría de
tener los requisitos legales, como lo estipula el artículo 369 fracción II de la Ley Federal
del Trabajo; como ejemplo, en México hay sindicatos de maniobras de servicio público en
zonas, bajo jurisdicción federal, que han actuado simplemente como empresarios de
mano de obra y no como organizaciones gremiales.

3.5 La disolución de los sindicatos.

Indirectamente, la disolución de los sindicatos aparece mencionada a propósito de los


estatutos, reglamentada en el artículo 371, cuya fracción XIV se refiere a las normas para
la liquidación del patrimonio sindical y en relación al artículo 379 que dispone: n los
sindicatos se disolverán:"

1 Por el voto de las dos terceras partes de los miembros que lo integran; y,

2 Por transcurrir el término fijado en los estatutos”.

Por otra parte en el artículo 380, nos dice que: en caso de disolución del sindicato el
activo se aplicará en la forma que determinen sus estatutos. A falta de disposición
expresa, pasará a la Federación o Confederación a que pertenezca y si no existen, al
Instituto Mexicano del Seguro social”.

La liquidación sindical se hará por parte de los funcionarios que el propio sindicato
designe a través de la asamblea que acuerde la disolución. Ahora no se exigirá
publicaciones especiales en las que se den aviso a terceros, a los propios agremiados, ni
se indicara que habrá que dar aviso de disolución a la autoridad registral, pero esto tiene
relación con lo dispuesto en el Artículo 369 de la Ley Federal del Trabajo.

Cuando el sindicato es disuelto de acuerdo a lo que ha llegado la asamblea, las


condiciones de trabajo no sufrirán ningún cambio, es decir que se mantendrán como
cuando existía la agrupación; esta es una postura acertada ya que no es posible cambiar
las condiciones de trabajo que marca la ley con las posturas del sindicato o con las
posturas hechas por este mismo.

3.6 La innovación del sindicalismo mexicano.

La etapa de transición en México, desde el 2 de julio de 2000 hasta el primero de


diciembre, se definió con los nombramientos del equipo con el que el nuevo presidente

213
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Vicente Fox podrá empezar a gobernar el país al principio de su sexenio.

Las promesas del nuevo gobierno han sido muy claras en cuanto a combatir la pobreza y
hacer reflejar la nueva etapa que vive la nación en alguna elevación del bienestar
económico de los trabajadores. En esta perspectiva, se convierte en pivote fundamental el
área económica, pero de manera particular también los nombramientos en las secretarías
de Desarrollo Social y del Trabajo y Previsión Social (stps). En cuanto a los trabajadores
asalariados, y en especial los sindicalizados, vamos a abordar la problemática que se
presenta con Carlos Abascal Carranza al frente de la stps.

Su nombramiento fue conflictivo, de entrada, por sus antecedentes como presidente de la


más grande confederación de empresarios del país, la Confederación Patronal de la
República Mexicana (Coparmex) y por su anteriores vínculos ideológicos con el
sinarquismo. De hecho, varias organizaciones laborales protestaron ante su
nombramiento o como lo dijera el senador del prd Demetrio Sodi de la Tijera: "Hubiera
preferido un secretario del Trabajo dedicado a defender a los trabajadores y no uno
interesado en los intereses del sector patronal". Por lo demás, la actuación de Carlos
Abascal ha sido en general muy complaciente con las formas corporativas de proceder de
los sindicatos del Congreso del Trabajo. Sin embargo, ¿será así la posición del nuevo
secretario del Trabajo? Lo que no se puede negar es que Abascal Carranza conoce la
problemática laboral y patronal mexicana: nuestra interrogante se refiere más a su labor
como secretario de Estado, en la que, de acuerdo con el código de ética expresado el día
de la toma de posesión, el primero de diciembre de 2000, su desempeño deberá estar
apegado a los intereses nacionales y no a los de grupos particulares de empresarios.

El sindicalismo mexicano, por su parte, no llega con fuerza y unidad a este período de
transición política, sino en crisis y con múltiples corrientes. En el amplio panorama de las
expresiones de organización de los trabajadores en México, en las últimas décadas del
siglo xx el movimiento sindical ha desembocado en tres corrientes representativas. La
primera se expresa en el modelo del sindicalismo corporativo que proviene de la década
de 1930 y que luego se convirtió en instrumento de control sobre el movimiento obrero, en
un modelo de industrialización basada en la sustitución de importaciones, que recibía
prebendas de los sucesivos gobiernos posteriores a Lázaro Cárdenas. La segunda surgió
justo en los años de 1990, aunque con antecedentes en varias luchas específicas de
tiempo anterior, como una escisión dentro del Congreso del Trabajo y ante la pasividad
del sindicalismo corporativo para enfrentar las consecuencias de las prolongadas crisis

214
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

económicas; se formó el Foro sobre Sindicalismo ante la Nación, del cual nació
posteriormente, en 1997, la Unión Nacional de Trabajadores (unt). La tercera corresponde
a tendencias más radicales de grupos de trabajadores que, enfrentándose también al
corporativismo del Congreso del Trabajo, concibieron la unt sólo como un movimiento
reformista, y se plantearon, aunque de manera muy dispersa, una estrategia de
confrontación con gobierno, patrones y sindicalismo oficial.

La síntesis de este panorama de corrientes de organización obrera, y no tanto el


antecedente histórico del nuevo secretario del Trabajo, es lo que puede ayudar a
vislumbrar las perspectivas de los sindicatos en el momento de transición política que vive
el país, cuando, después de setenta y un años, el pri ha perdido la Presidencia de la
República y la ha cedido al pan en la persona de Vicente Fox Quezada.

3.6.1 El sindicalismo oficial.

Desde la época del presidente Lázaro Cárdenas, el mundo político de México estuvo
dominado por un sistema corporativo autoritario, que en el ámbito de los sindicatos tuvo
sus antecedentes en el pacto corporativo de Álvaro Obregón con los obreros de la Casa
del Obrero Mundial en tiempos de la revolución y en la alianza establecida entre la
Confederación Revolucionaria de Obreros Mexicanos (crom) de Luis N. Morones con los
gobiernos de los años veinte. A partir de Cárdenas, quedaron establecidos los pilares de
un modelo que perduró con estabilidad hasta los años sesenta: gobierno, empresarios,
partido de Estado y sindicatos, que produjeron la estabilidad del período del "milagro
mexicano" hasta fines de la década de 1960. El pacto social, sin embargo, se fue
modificando poco a poco, y el sector obrero de ser un interlocutor en la elaboración y
aplicación de las políticas públicas se convirtió en un aliado subordinado dentro del
modelo industrial.

El modelo de una economía protegida entró en profunda crisis en los años setenta y
explotó sobre todo en 1981. El gobierno de Miguel de la Madrid lo cambió radicalmente en
1982. Se impuso el llamado modelo neoliberal del libre comercio. Se acabaron los
grandes recursos del proteccionismo y se profundizaron los programas de austeridad.
Con ello, el sindicalismo oficial ni siquiera fue llamado a consulta en la elaboración de las
políticas públicas.

Empezó a crecer la tasa de desempleo y subempleo; cayó progresivamente el poder


adquisitivo de los salarios al enfrentar los niveles terribles de inflación. En 1988, los
salarios compraban sólo 40 por ciento de lo que lograban en 1976.

215
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Disminuyeron también los programas sociales de educación, salud, vivienda y otros


servicios. En el caso específico de la ciudad de México, el terremoto de 1985 vino a
agudizar todavía más la situación. Con ello, no debe sorprender que, con la agudización
de la crisis económica, la población dejó de votar en masa por el pri en la coyuntura
política de 1988. Se puede suponer con facilidad que en julio de 1988 ganó el Frente
Democrático Nacional (fdn) la Presidencia de la República con Cuauhtémoc Cárdenas; el
triunfo oficial se le otorgó a Carlos Salinas, quien fue presidente de México hasta 1994.

Durante su periodo, el presidente Salinas pudo levantar los índices macroeconómicos del
país y controlar el proceso inflacionario ofreciendo una apertura comercial sin precedentes
y firmando un tratado para incorporar a México a Estados Unidos y Canadá, pero el
sistema volvió a caer estrepitosamente en 1994. El nuevo gobierno persistió y profundizó
el mismo programa de ajuste del sexenio anterior. El producto interno bruto (PIB) creció
9.8 por ciento y la productividad del sector manufacturero ascendió a 12.6 por ciento, pero
el empleo en ese sector bajó 9.9 por ciento y los salarios reales también descendieron
21.9 por ciento. En el nuevo modelo se concentró la riqueza del país en unas pocas
manos, porque los grandes empresarios fueron los únicos que obtuvieron enormes
ganancias, mientras la población en general empobrecía.

Aunque Ernesto Zedillo pudo ganar con cierta holgura la Presidencia de la República en
1994, la nueva correlación de fuerzas políticas con las reformas hacía cada vez más difícil
el fraude electoral en las proporciones en que se dio en 1988. La crisis, la escasez de
recursos, los fenómenos cotidianos de corrupción de los funcionarios gubernamentales
del partido en el poder, el crecimiento en la defensa del voto por parte de la sociedad civil,
etcétera, causaron serios problemas electorales al pri. En julio de 1997, el pri perdió la
mayoría en el Congreso de la Unión y también perdió de manera contundente el gobierno
del Distrito Federal, para ceder lo al prd y su candidato, Cuauhtémoc Cárdenas. Este
proceso culminó en el ámbito nacional con la derrota del pri en su candidato a la
Presidencia de la República, Francisco Labastida Ochoa, el 2 de julio de 2000, y el triunfo
del pan con Vicente Fox Quezada.

En los noventa, tuvimos un nuevo contexto político en México y el sindicalismo oficial,


ligado de manera estructural y estatutaria al pri, siguió experimentando la misma debacle
que el partido de Estado. Este sindicalismo oficial en decadencia, representado por el
Congreso del Trabajo, constituye, sin embargo, todavía una de las corrientes sindicales
en México que tienen peso como actor político. La muerte de Fidel Velásquez en 1997 no

216
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

lo modificó en nada; la dirección provisional, convertida luego en definitiva, en el


Congreso de la ctm en febrero de 1998, la ha mantenido Leonardo Rodríguez Alcaine,
cuya figura simboliza, sin las cualidades de Fidel, las tendencias corporativas más
atrasadas del sindicalismo oficial; así lo ha seguido mostrando en su nueva reelección
amañada al frente del suterm en el año 2000. Esta corriente representada en las
organizaciones del Congreso del Trabajo se encuentra en crisis y a la defensiva por los
efectos de un modelo neoliberal aplicado férreamente por los gobiernos de los tres últimos
sexenios, con los cuales mantiene una alianza subordinada dentro de la militancia
estatutaria dentro del pri. Este corporativismo sindical ha entrado en una crisis mayor, al
igual que el pri, en el momento de la primera alternancia política de la Presidencia en
México, en 2000, después de setenta y un años.

3.7 Vigencia jurídica del Sindicato.

El Derecho Laboral moderno se forjó superando las etapas de la prohibición y de la


tolerancia, para llegar al período actual, el de la regulación jurídica.

En el Constituyente de Querétaro se materializó uno de los más viejos anhelos de los


trabajadores: el poder unirse para luchar, como clase social, en defensa de sus derechos
laborales. A la supremacía económica, psicológica y de mando del patrón, opusieron los
trabajadores su número, su unidad y los mecanismos jurídicos idóneos para nivelar la
desigualdad social entre los factores de la producción; impusieron los instrumentos para el
cambio: el sindicato, la negociación colectiva y la huelga.202

Los sindicatos han jugado un papel fundamental en la construcción de la Nación;


consolidados en la representatividad y en la democracia, están llamados a ser parte
central de las nuevas alboradas de México.

3.7.1 La Constitución Política de los Estados Unidos mexicanos.

La libertad de asociación se encuentra consagrada en el artículo 9 de nuestra


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Para ahondar en el tema, resulta necesario analizar los artículos: 9; y la fracción XVI,
Apartado “A” del artículo 123 constitucional.

Artículo 9 constitucional.- “No se podrá coartar el derecho de asociarse o reunirse


pacíficamente con cualquier objeto lícito; pero solamente los ciudadanos de la República

202
Cfr. DÁVALOS, José. Tópicos Laborales. Derecho Individual, Colectivo y Procesal. Trabajos específicos.
Seguridad Social. Perspectivas, Tercera Edición, Porrúa, México, DF., 2000, pág. 281

217
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

podrán hacerlo para tomar parte en los asuntos políticos del país. Ninguna reunión
armada tiene derecho a deliberar”.

No se considerará ilegal, y no podrá ser disuelta, una asamblea o reunión que tenga por
objeto hacer una petición o presentar una propuesta por algún acto a una autoridad, si no
se profieren injurias contra ésta, ni se hiciera uso de violencias o amenazas para
intimidarla u obligarla a resolver en el sentido de que se desee”.

De acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos comentada por
el Instituto de Investigaciones jurídicas, el artículo que se comenta consagra tanto la
libertad de asociación como la de reunión.

Por libertad de asociación se entiende “el derecho de toda persona de asociarse


libremente con otras para la consecución de ciertos fines, la realización de determinadas
actividades o a la protección de sus intereses comunes; por su parte, la libertad de
reunión alude “al derecho o facultad del individuo para reunirse o congregarse con sus
semejantes para cualquier objeto lícito y de manera pacífica”.203

El mismo Instituto de Investigaciones Jurídicas advierte que, “a diferencia de la libertad de


asociación, al ejercer la libertad de reunión no crea una entidad jurídica propia con
sustantividad y personalidad diversa e independiente de la de cada uno de sus
componentes; además, una reunión, contrariamente con lo que ocurre con una
asociación, es transitoria, esto es, su existencia está condicionada a la realización del fin
concreto y determinado que la motivó, por lo que una vez logrado éste, tal acto deja de
existir”.204

Las libertades de asociación y de reunión, al igual que la libertad general, en tanto


derecho subjetivo público, no surgió, a excepción del caso de Inglaterra, sino con
posterioridad con las Declaraciones de Derechos incluidas en las constituciones de varias
colonias norteamericanas y la Declaración Francesa de los Derechos del Hombre y
Ciudadano, de 1789, si bien ésta última no la contempló expresamente.

Conforme a la tradición del common law, las libertades de asociación y de reunión se


consagraron expresamente en la Enmienda I a la Constitución de los Estados Unidos, en
el año de 1791. A partir de ahí, pero con diversas restricciones, estas libertades se
consagraron a través de la mayoría de las constituciones de los Estados Democráticos.

203
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Comentada por el Instituto de Investigaciones
Jurídicas, UNAM, México, D.F., 2008, pág. 48.
204
Ibídem, págs. 1 y 2.

218
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La Declaración Universal de los Derechos del Hombre, adoptada por las Naciones Unidas
en 1948, la proclamó en los siguientes términos: “Toda persona tiene derecho a la libertad
de reunión y de asociación pacíficas” (artículo 20); asimismo, figura no solamente en el
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (artículo 22), sino también el Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (artículo 8), ambos
aprobados por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 16 de diciembre de 1966,
vigentes desde 1976, y ratificados por México el 24 de marzo de 1981, siendo el
instrumento el término más preciso sobre el particular.

El derecho de libre asociación, al igual que muchos otros derechos humanos, deriva de la
necesidad social de solidaridad y asistencia mutua. Así, surgen asociaciones y partidos
políticos, sindicatos obreros, asociaciones y colegios profesionales, sociedades civiles y
mercantiles, fundaciones culturales, de beneficio y ayuda mutua, comités de lucha y
defensa, centros y clubes deportivos, etcétera.

En cambio, la misma libertad sindical como un derecho social, se encuentra plasmada en


el Apartado “A” del artículo 123, fracción XVI de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos.

Fracción XVI, Apartado “A” del artículo 123 constitucional: “Toda persona tiene
derecho al trabajo digno y socialmente útil; al efecto, se promoverán la creación de
empleos y la organización social para el trabajo, conforme a la ley.

El Congreso de la Unión, sin contravenir a las bases siguientes, deberá expedir leyes
sobre el trabajo, las cuales regirán:

Entre obreros, jornaleros, empleados, domésticos, artesanos y de una manera general,


todo contrato de trabajo.

Tanto los obreros como los empresarios tendrán derecho para coaligarse en defensa de
sus respectivos intereses, formando sindicatos, asociaciones profesionales, etcétera”.

Al considerar la Corte que "...la fracción XVI del Apartado A del artículo 123 reconoce la
libertad de asociación en la forma específica de sindicación...", está colocando los
derechos sociales en un segundo término, ya que, desde su punto de vista, los derechos
sociales están encuadrados dentro de las garantías individuales. Esta apreciación de la
corte resulta sumamente importante en la medida en que establece una jerarquía entre
los derechos colectivos y los derechos individuales.

Si bien es cierto que la fracción XVI del apartado "A" del artículo 123 garantiza el derecho

219
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de los trabajadores a formar asociaciones, dicho derecho también se otorga a los


empleadores. Lo que nos llevaría a pensar que dicha fracción no garantiza un derecho de
clase -de la clase trabajadora-, en la medida en que a los empleadores también se les
garantiza el derecho de asociación.

Por otro lado, a pesar de que la Constitución mexicana se integra por una serie de
contenidos sociales, ésta, como ya se anotó anteriormente, nace cobijada por un manto
liberal. En la lógica de vivir en un país con una democracia liberal, la interpretación de la
corte tiene que ser dentro de esa misma dinámica. Finalmente el Estado mexicano, al
igual que todo Estado moderno, parte de una serie de ficciones: la igualdad entre los
individuos, en donde todos gozan de los mismos derechos y obligaciones; la libertad
jurídica y la propiedad (como realidad material concreta y como abstracción jurídica que
sigue al titular de la misma).

Para resumir lo anterior, esquematizamos las características contenidas en los preceptos


9 y fracción XVI del artículo 123 de nuestra Constitución Federal.

ARTICULO 9 CONSTITUCIONAL

ARTÍCULO 123 APARATADO “A” FRACCIÓN XVI CONSTITUCIONAL

• Pertenece a todos los hombres

• Es una garantía individual

• Es un derecho general

• Es un derecho frente al estado

• Pertenece única y exclusivamente a los trabajadores y patrones

• Es un derecho de clase

• Es el derecho universal del hombre a asociarse con los demás

• Es un derecho especial

• Es un derecho de una clase social frente a otra clase social, aun cuando también es un
derecho frente al estado

• Es un derecho de clase cuya finalidad es conseguir el mejoramiento de las condiciones


de vida del trabajador al obligar a los patrones a tratar con las asociaciones profesionales
(negociación colectiva)

220
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3.7.2 Vigencia de los convenios internacionales.

Desde la creación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 1919, las normas
internacionales del trabajo han sido siempre el principal instrumento de su acción para la
promoción de la justicia social. El objetivo perseguido era y sigue siendo la mejora general
de la condición del hombre en el trabajo mediante la adopción de instrumentos
normativos. El recurso sistemático a la adopción de instrumentos normativos con el fin de
proteger los derechos del hombre, característico de la OIT, ha servido en buena medida
de modelo a otras organizaciones internacionales después de la Segunda Guerra
Mundial.

Desde el comienzo, la OIT ha tenido la preocupación de lograr que los instrumentos


normativos adoptados fueran, en los hechos, efectivos.

Esta voluntad de ponerlos en ejecución concretamente ha llevado a la aparición


progresiva de diversos mecanismos de control para vigilar el efecto dado a los convenios
y las recomendaciones en la práctica, una vez adoptados por la Conferencia Internacional
del Trabajo y ratificados por los Estados.

En el ámbito de la libertad sindical, como en los demás ámbitos abarcados por las normas
internacionales del trabajo, el procedimiento regular de control se cumple en dos
instancias, la Comisión de Expertos en Aplicación de Convenios y Recomendaciones y la
Comisión de Aplicación de Normas de la Conferencia Internacional del Trabajo.

3.7.2.1 Organización Internacional del Trabajo convenio Núm. 87

Luego de la adopción del Convenio núm. 87, la Conferencia Internacional del Trabajo
adoptó una resolución en su 31.ª reunión de 1948 por la que invitaba al Consejo de
Administración a iniciar consultas con las Naciones Unidas con el fin de introducir mejoras
en los organismos internacionales existentes para lograr precisamente la salvaguarda de
la libertad sindical.

Rápidamente el Consejo de Administración de la OIT observó que las disposiciones de la


Constitución relativas a las memorias anuales, a las reclamaciones y las quejas (artículos
24 a 34) sólo se referían a los convenios ratificados y que, para salvaguardar
verdaderamente la libertad sindical y su aplicación en la práctica, era necesario crear un
mecanismo adicional que abarcase también las situaciones respecto de las cuales los
convenios pertinentes no han sido ratificados. Este órgano adicional, denominado
Comisión de Investigación y de Conciliación, tendrá el cometido de realizar

221
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

investigaciones, con autoridad e imparcialidad, sobre cuestiones de hecho planteadas en


las quejas directamente comunicadas a la OIT o remitidas para su examen por el
ECOSOC.

Establecido en 1951, el procedimiento de control del Comité de Libertad Sindical ha


demostrado una eficacia innegable en el curso de los años. Los casos de progreso
registrados en todos los ámbitos de la libertad sindical son la prueba irrefutable de su
eficacia. Además de velar por que los sindicalistas se beneficien de las garantías
judiciales tradicionalmente reconocidas en un Estado de derecho — y que prevén todos
los grandes instrumentos internacionales de derechos humanos —, el Comité logró
obtener en un número apreciable de casos la liberación, la reducción o la anulación de
sentencias manifiestamente injustas o desproporcionadas.

Asimismo, controló la aplicación del derecho de los trabajadores y de los empleadores, sin
ninguna distinción y sin autorización previa de constituir las organizaciones que estimen
convenientes, así como el de afiliarse a ellas.

Otorgó una atención particular al ejercicio en la práctica del derecho de las organizaciones
de elegir libremente sus representantes, de redactar sus estatutos y formular sus
programas, y de organizar su administración.

Dentro del ámbito de protección previsto por el Convenio número 87, el Comité ha
dedicado una atención muy especial al reconocimiento del derecho de huelga y su
ejercicio, lo cual era muy necesario en el decenio de los años 1980 en que se observó un
cierto aumento de las restricciones relacionadas con el ejercicio del derecho de huelga.
Además, el Comité debió también solicitar la reinscripción inmediata en los registros de
las correspondientes organizaciones que anteriormente habían sido objeto de disolución
por vía administrativa.

En el marco de las garantías previstas por el Convenio número 98, el Comité se esforzó
por reducir los actos de discriminación antisindical y de injerencia patronal indicando la
necesidad de establecer procedimientos rápidos, imparciales y objetivos para los
trabajadores que consideran ser víctimas de tales prácticas. El Comité recordó asimismo
la obligación, de naturaleza preventiva, de establecer por vía legislativa sanciones
suficientemente disuasivas para prevenir esos actos. Asimismo, veló por fomentar la
negociación colectiva voluntaria y de buena fe. Al igual que el respeto del derecho de
huelga, la acción del Comité en el ámbito de la protección de los trabajadores contra los
actos de discriminación antisindical se acentuó notablemente a partir del decenio de los

222
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

años 1980.

La libertad sindical, como tema objeto de convenios de la OIT, encuentra en el Convenio


87 su más acabada expresión ; sin embargo, cabe señalar que no es la única norma
internacional o convenio que se refiere al tema, pues existen otros importantes que se
refieren a otros aspectos del tema: por ejemplo, el Convenio 11 sobre el derecho de
asociación de los trabajadores agrícolas de 1923; el Convenio 135 sobre las facilidades a
los representantes de los trabajadores de 1973; el Convenio 141 sobre la organización de
los trabajadores rurales de 1977. Entre esas normas de libertad sindical cabe la atención
sobre uno de los más importantes pronunciamientos que la OIT ha hecho en los últimos
años, entre otros temas, la libertad sindical: nos referimos a la “Declaración de la OIT
relativa a los principios fundamentales del trabajo y su seguimiento”205, que como se
recuerda, se trata de una declaración adoptada por la Conferencia Internacional del
Trabajo en su octogésima sexta reunión, celebrada en Ginebra, Suiza, el 18 de junio de
1998, y en donde se señala que todos los miembros de la OIT, aun cuando no hayan
ratificado los Convenios considerados como fundamentales, tienen la obligación de
promover y hacer realidad los principios relativos a los derechos fundamentales que son
objeto de esos convenios, principios entre los cuales se encuentra la libertad de
asociación y la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho de negociación
colectiva.

El Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo sobre la libertad sindical y la


protección del derecho de sindicalización entró en vigor el 4 de junio de 1950, mientras
que en México su vigencia data de abril de 1951, tiene 21 artículos y una amplia gama de
temáticas específicas por medio de las cuales se manifiesta o puede manifestarse la
libertad sindical, entre los cuales podemos señalar:

• Obligatoriedad de los miembros de la OIT para cumplir con el Convenio 87.- La


solicitud de un país para formar parte de la OIT lleva consigo aparejadas una serie de
consecuencia legales, y tal vez una de las más importantes sea el de aceptar las
obligaciones que, llegado el caso, tendrá que cumplir como miembro de tal organización
internacional. Una de esas obligaciones es precisamente cumplir con los convenios que la
OIT adopte. Los países miembros de la OIT, una vez que un convenio internacional ha
sido adoptado por la conferencia, se comprometen a someter a las instancias

205
La presente información representa una síntesis de los documentos vertidos en la página de internet:
www.oit.gob.mx. Portal visitado el domingo 26 de abril de 2009.

223
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

competentes del país con el fin de que dicha norma internacional adquiera plena vigencia
en el plano nacional; en los casos en los que el sistema de integración de una norma
internacional al ámbito nacional no exija trámite alguno, esto no sería necesario. Pero
ambos casos, una vez que el Convenio Internacional ha adquirido vigencia y es norma de
derecho positivo interno, la exigibilidad de su cumplimiento se actualiza.206

• Derecho de los trabajadores a constituir organizaciones.- El derecho de los


trabajadores a constituir organizaciones es uno de los reconocimientos más importantes
que la OIT ha hecho en materia social. Desde el punto de vista de la estructura del
Convenio 87, se trata de un derecho genérico respecto del cual, el mismo convenio lo
explicita en todo su articulado, indicando de manera concreta los aspectos y modalidades
en que aquél se manifiesta.

• Derecho de los empleadores a constituir organizaciones.- El campo de aplicación


del Convenio 87 involucra tanto a trabajadores como a empleadores, a pesar de que es
sobre todo, en el primer caso en donde generalmente se centra más la atención y los
análisis de esta norma internacional.207

• No se necesita autorización previa para constituir una organización.- El Convenio


87 en buena medida busca ofrecer un derecho casi absoluto de asociación profesional; es
desde este punto de vista desde donde tiene que ser analizado el señalamiento del
convenio, en el sentido de que no se necesita autorización previa para constituir una
organización. Desde el punto de vista técnico lo interesante no sólo es el eventual trámite
que se tiene que seguir para reconocer la voluntad de la agremiación, sino los efectos
hacia el futuro y ante terceros tiene ese reconocimiento o registro. Como se recuerda, el
registro sindical, dependiendo de cada país, tiene efectos declarativos si sólo se señala y
constata la preexistencia de un sindicato, o tendrá efectos constitutivos si la existencia del
sindicato sólo se da a partir de ese reconocimiento o registro. El Convenio 87 pareciera
tratar de desechar la segunda opción. En el caso mexicano, paradójicamente, con la
excepción de la tramitación de un amparo con motivo de la negativa de registro, pareciera
reconocerse la teoría de los efectos declarativos y, en ese sentido, alejarse del Convenio
87. Relacionado con este aspecto el que el mismo Convenio refiere al señalar que la
adquisición de la personalidad jurídica de un sindicato no debe ajustarse a condiciones

206
Cfr. REYNOSO CASTILLO, Carlos. Acerca de la Libertad Sindical en el Convenio 87 de la OIT. Artículo
publicado en la página de internet: www.juridicas.unam.mx de fecha domingo 26 de abril de 2009, págs.92 y
93.
207
Ibídem, pág. 94

224
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

cuya naturaleza limite la aplicación del mismo instrumento internacional.

En el caso mexicano, la personalidad jurídica la tiene un sindicato al momento de solicitar


su registro; sin embargo, se trata de una personalidad imperfecta y sólo con alcances
limitados para el único caso de que si se le niega el registro sindical, pueda interponer las
acciones legales que considera convenientes.208

• Los trabajadores y empleadores deben observar sus estatutos, como única


condición para su afiliación.- Uno de los aspectos relevantes en el nacimiento y vida de
una organización sindical es sin duda su organización. Este derecho que el Convenio 87
otorga tiene un alcance importante en la medida en que permite que los agremiados
puedan establecer normas con base en las cuales el sindicato funcionará y habrá de
tomar sus decisiones. Con base a lo anterior, existen dos ángulos importantes a tener en
cuenta: uno, el relativo a la manera como el Convenio 87 lo considera, y dos, la forma
como en varios países el estatuto sindical se regula. Sobre el primer punto la norma
internacional señala al estatuto sindical como el único requisito posible para condicionar la
afiliación a un sindicato. En el caso mexicano, como se recuerda, la ley señala que un
sindicato que desee registrarse debe presentar copia autorizada de los estatutos ante la
autoridad registral (federal o local), y que entre los contenidos mínimos de un estatuto
sindical están precisamente las condiciones de admisión de sus miembros.209

• Las autoridades públicas deben abstenerse de intervenir en las organizaciones.- El


Convenio 87, si bien tiene primordialmente como destinatarios a los trabajadores y a los
empleadores, también se dirige a las autoridades competentes en cada país,
estableciendo una obligación de no hacer, es decir, de abstenerse de intervenir en las
organizaciones.210

• Observancia de la legalidad.- La idea de la legalidad se encuentra plasmada en esta


norma en varios de sus artículos: señala que al ejercer los derechos del convenio todos
deben respetar la legalidad; es decir, se asume que el convenio no busca excluir o limitar
una perfecta compatibilidad y armonía entre el orden jurídico nacional y las normas
internacionales, que como ésta, se incorporan al mismo.211

3.7.3 La Ley Federal del Trabajo.

208
Ibídem, página 96.
209
Ídem.
210
Ibídem pág. 97.
211
Ídem.

225
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En 1970, surge una llamada "Nueva Ley Federal del Trabajo". A cargo de su elaboración
estuvo una comisión designado por la Secretaria del Trabajo, la cual fue presentada al
congreso como una iniciativa presidencial. Sin embargo, esta "nueva LFT" se caracteriza
por la igualdad a la de 1931, sus bases se mantienen casi idénticas. De lo más rescatable
que se puede encontrar en los cambios es la incorporación de:

• Reglamentación del derecho constitucional a la vivienda, esto da como resultado la


creación del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda (Infonavit).

• Elimina algunas normas restrictivas del derecho a la huelga, introducidas en 1942.

• Estas son las modificaciones que sirven como antesala al periodo que tocaremos
enseguida, cabe mencionar que hasta la década de los 80´s la LFT mantuvo los rasgos
fundamentales de sus inicios, a pesar de los ataques que se han emprendido contra ella
por parte de las patronales, incluso gobiernos.

De los artículos 356 a 385 de la Ley Federal del Trabajo se norma la constitución,
funcionamiento, derechos, obligaciones y disolución de los sindicatos.

3.7.4 Legislación de seguridad social.

Es importante hacer referencia a este ordenamiento legal ya que es una parte que regula
al derecho del trabajo en beneficio de los trabajadores en cuanto a la seguridad social, y
es un derecho irrenunciable a todo trabajador y está regulado por nuestra Constitución
Mexicana en su artículo 123 donde se hace mención a los accidentes de trabajo,
enfermedades profesionales de los trabajadores en ejercicio de su trabajo o en su
consecuencia pagar las incapacidades permanentes total o parcial.

De esta manera la Seguridad Social tiene como fin proteger a los habitantes de la
República, de las contingencias de enfermedades y accidentes, sean o no de trabajo,
cesantía, desempleo, maternidad, incapacidad temporal y parcial, invalidez, vejez,
nupcialidad, muerte, sobrevivencia y cualquier otro riesgo que pueda ser objeto de
previsión social, así como de las cargas derivadas de la vida familiar y las necesidades de
vivienda, recreación que tiene todo ser humano.

La Seguridad Social debe velar porque las personas que están en la imposibilidad sea
temporal o permanente de obtener un ingreso, o que deben asumir responsabilidades
financieras excepcionales, puedan seguir satisfaciendo sus necesidades,
proporcionándoles, a tal efecto, recursos financieros o determinados servicios, y de esta

226
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

forma asegurar el bienestar de la clase trabajadora ante los diferentes riesgos que pueda
tener en su vida laboral y no quedar desprotegido.

3.7.5 Jurisprudencia.

La jurisprudencia es la interpretación jurisdiccional del Derecho positivo que, conforme la


legislación mexicana, sólo pueden realizar los tribunales federales. Para que pueda
considerarse que existe una jurisprudencia aplicable, es necesario que la interpretación
de la ley se ejecute sobre casos concretos, se repita al menos en cinco ocasiones y
siempre en el mismo sentido, y dicha práctica adquiera un valor general. La ley de amparo
establece como jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia las ejecutorias o
sentencias de la misma, funcionando en pleno siempre que lo resuelto en ellas se
encuentre en cinco ejecutorias no interrumpidas por otra en contrario y que hayan sido
aprobadas por lo menos por 14 ministros.

En este apartado haremos referencia a algunas tesis de jurisprudencia donde veremos la


importancia de la irrenunciabilidad de los derechos de los trabajadores.

CESIÓN DE DERECHOS. AL NO ESTAR PREVISTA EXPRESAMENTE EN LA LEY


FEDERAL DEL TRABAJO E IMPLICAR RENUNCIA DE DERECHOS, ES INAPLICABLE
DICHA FIGURA JURÍDICA EN MATERIA LABORAL.

El artículo 33, primer párrafo, de la Ley Federal del Trabajo prevé que es nula la renuncia
que los trabajadores hagan de los salarios devengados, de las indemnizaciones y demás
prestaciones que deriven de los servicios prestados, cualquiera que sea la forma o
denominación que se le dé; por su parte, el artículo 1418 del Código Civil para el Estado
de Tamaulipas dispone que habrá cesión de derechos cuando el acreedor transfiere a
otro los que tenga contra su deudor, lo que implica una renuncia a favor de otro de un
derecho que se tiene sobre una cosa. Por tanto, no cabe la posibilidad de aceptar esa
figura porque además de no estar prevista expresamente en la legislación laboral, los
derechos que adquieran los trabajadores o sus beneficiarios, originados por los servicios
laborales que presten a un patrón, son inalienables por su calidad de irrenunciables, pues
constituyen derechos adquiridos bajo la tutela de la Ley Federal del Trabajo.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS PENAL Y DE TRABAJO DEL


DÉCIMO NOVENO CIRCUITO.

Clave: XIX.2o.P.T., Núm.: 11 L

227
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Amparo directo 376/2007. Ricardo Guerrero Rodríguez y otra. 8 de agosto de 2007.


Unanimidad de votos. Ponente: Olga Iliana Saldaña Durán. Secretaria: Minerva Castillo
Barrón.

Como bien lo menciona la anterior tesis la renuncia que hagan de sus salarios
indemnizaciones y las prestaciones cualquiera que fuere su forma o denominación los
trabajadores son nulos porque son derechos inherentes a los trabajadores que por el
simple hecho de haber prestado su fuerza de trabajo ante un patrón la retribución de su
salario debe ser íntegro y solo le corresponde al trabajador, por lo que la cesión de
derechos no cabe en materia laboral por ser una figura jurídica que viole los derechos de
los trabajadores.

RENUNCIA BAJO COACCIÓN O ENGAÑO. CORRESPONDE AL TRABAJADOR


ACREDITAR LOS HECHOS EN QUE LA SUSTENTA.

Cuando el trabajador manifiesta que firmó la renuncia al trabajo mediante coacción o


engaño, bajo la promesa de que lo liquidarían al cien por ciento de las prestaciones que
percibía, a él corresponde demostrar tales circunstancias, siendo insuficiente para
acreditar lo aseverado las documentales en las que aparece que fue separado por
reajuste de personal o reestructuración, en virtud de que con ellas no se acredita
plenamente el hecho en el que se sustentó el engaño para obtener la renuncia.

SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.


Clave: I.6o.T. , Núm.: 288 L

Amparo directo 11986/2005. Banco Mercantil del Norte, S.A., Institución de Banca
Múltiple, Grupo Financiero Banorte. 26 de enero de 2006. Unanimidad de votos. Ponente:
Genaro Rivera. Secretaria: Claudia Gabriela Soto Calleja.

Debemos estar en el entendido de que cuando un trabajador renuncia tiene que probar su
dicho y no son suficientes pruebas el presentar la documental en las que aparece que fue
separado por reajuste de personal o reestructuración, pero también es cierto que deben
de recibir sus prestaciones que fija la Ley Federal del Trabajo las cuales no son
renunciables a favor del patrón, ya que es algo que solo a este se le debe de retribuir, y la
ley es clara cuando menciona que aun cuando se pacten estas deposiciones serán nulas.

RENUNCIA DE DERECHOS EN MATERIA LABORAL. NO LA CONSTITUYE EL


CONVENIO EN EL QUE EL TRABAJADOR ACEPTA PRESTACIONES INFERIORES A
LA CONDENA IMPUESTA AL PATRÓN, SI ÉSTE IMPUGNÓ EL LAUDO RELATIVO

228
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

MEDIANTE JUICIO DE AMPARO DIRECTO, Y EL ACUERDO DE VOLUNTADES SE


SUSCRIBE CON EL FIN DE EVITAR RIESGOS EVENTUALES PARA LAS PARTES.

De acuerdo con los artículos 123, apartado A, fracción XXVII, incisos g) y h), de la
Constitución y 33 de la Ley Federal del Trabajo, la renuncia formulada por los
trabajadores respecto de ciertos bienes o prestaciones derivados de los derechos que en
su favor tutela la propia Constitución o la ley, es nula y carece de efectos jurídicos. Por
tanto, para la operancia de esta causa de nulidad es presupuesto la existencia de un
derecho subjetivo inherente a la esfera jurídica del trabajador y que éste, mediante un
acto voluntario (convenio de liquidación) pacte con el patrón el no ejercicio de ese
derecho o abdique de recibir lo que le corresponde. En consecuencia, no existe la
renuncia de derechos si en el expediente del juicio laboral en el que se dictó laudo a favor
de la parte obrera, se encuentra pendiente de resolver el juicio de amparo directo
promovido por la patronal condenada, y tanto ésta como la trabajadora celebran un
convenio (transacción) en el que, por un lado, deciden concluir la relación laboral en
términos del artículo 53, fracción I, de la Ley Federal del Trabajo; y por el otro, convienen
en el pago de las prestaciones materia de la condena, aunque en términos cuantitativa o
cualitativamente distintos o incluso inferiores a los que prevé la ley o el contrato de
trabajo. Es así, porque no puede afirmarse que los derechos laborales reconocidos en el
laudo pertenezcan de manera incontrovertible a la esfera jurídica del obrero; ya que tal
resolución se encuentra sub júdice en función del juicio de amparo directo promovido por
la patronal, situación que implica la posibilidad de que se prive de efectos al laudo y que,
incluso, se decida absolver a la enjuiciada. En tales condiciones, el presupuesto necesario
para la operancia de la nulidad (la existencia de un derecho), propiamente no se
configura, lo que se corrobora aún más si en el convenio cuya nulidad se pide las partes
hacen constar que lo celebran para evitar la eventualidad de recibir un perjuicio mayor, o
bien, que en función de lo pactado la patronal desiste del juicio de amparo directo
promovido, o alguna otra cuestión similar que ponga de manifiesto que ese acuerdo de
voluntades se lleva a cabo ante la posibilidad de obtener un fallo desfavorable al
resolverse el juicio de amparo directo.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO DEL


QUINTO CIRCUITO. Clave: V.2o.C.T. , Núm.: 3 L

229
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Amparo directo 31/2006. Adán Candelario González Sánchez y otros. 14 de junio de


2006. Unanimidad de votos. Ponente: David Solís Pérez. Secretario: Rafael Alberto
Vázquez Elizondo.

En la tesis anterior analizamos la celebración de convenio entre las partes cuando donde
el trabajador acepta condiciones inferiores a la impuesta al patrón cuando este impugna el
laudo relativo con un juicio de amparo directo, la Constitución en su artículo 123 apartado
fracción XXVII en los encisos g) y h) y el artículo 33 de la Ley Federal del Trabajo señalan
que serán condiciones nulas aunque se expresen en el contrato y las que constituyan
renuncia hecha por el obrero a las indemnizaciones a que tenga derecho; pero en caso de
que las partes pacten un convenio donde el trabajador decide concluir la relación laboral y
a su vez recibir el pago de las prestaciones que cuando estas sean inferiores a las
condenadas al patrón.

Esta medida se toma en consideración del beneficio al trabajador ya que cuando se


interpone un juicio de amparo contra un laudo, el resultado puede absolver al patrón
dejando en indefenso al trabajador en cuanto a sus derechos, por lo que es más
recomendable llegar a dicho acuerdo donde ninguna de las partes salga perjudicada y así
evitar riesgos eventuales.

CONTRATO COLECTIVO DE TRABAJO DEL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO


SOCIAL. LA CLÁUSULA PACTADA SOBRE VALORACIÓN DE PRUEBAS ES NULA
POR IMPLICAR RENUNCIA DE DERECHOS.

De la interpretación sistemática de los artículos 123, apartado A, fracción XX, de la


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 5o., fracción XIII, y último párrafo,
386 y 391 de la Ley Federal del Trabajo, se concluye que la cláusula contenida en un
contrato colectivo de trabajo sobre valoración de pruebas es nula y debe tenerse como no
puesta por implicar renuncia de derechos y prerrogativas consignadas en las normas
laborales, toda vez que la valoración de pruebas, por imperativo constitucional, es una
facultad reservada exclusivamente a la autoridad jurisdiccional. En tal virtud, si mediante
convenio celebrado entre el Instituto Mexicano del Seguro Social y su sindicato se
adicionó al contrato colectivo de trabajo una cláusula en la que se establece que la base
de datos del sistema integral de administración de personal tiene valor probatorio pleno,
tal cláusula es nula de pleno derecho, pues determinar su validez sería tanto como
aceptar la posibilidad de que en un futuro se pueda pactar que la confesional y la
instrumental de actuaciones, entre otras, tengan cierto valor, con la consecuencia de que

230
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

la autoridad laboral esté impedida para valorarlas y únicamente decida sobre el derecho
que a cada parte le corresponda, lo cual es inadmisible y contrario a lo previsto en los
numerales 841 y 842, así como en el capítulo XII, relativo a las "Documentales", del título
trece de la Ley Federal del Trabajo.

CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO QUINTO CIRCUITO. Clave: XV.4o.,


Núm.: 11 L

Amparo directo 793/2007. Instituto Mexicano del Seguro Social. 6 de marzo de 2008.
Unanimidad de votos. Ponente: Inocencio del Prado Morales. Secretario: Ciro Alonso
Rabanales Sevilla

La tesis señalada hace una referencia sobre la valoración de pruebas incluida en una
cláusula del contrato colectivo de trabajo, la cual debe tenerse por no puesta por implicar
renuncia de derechos, y la valoración de pruebas es una competencia de la autoridad
jurisdiccional y no del propio instituto, así la presentación de las pruebas corresponde
ejercerla la parte que se sienta afectada en la esfera de sus derechos laborales y no
corresponde pactarse en el contrato colectivo de trabajo.

Para comprender el derecho es importante hacer un estudio el marco jurídico que regulan
al derecho Laboral desde la Constitución hasta las leyes más específicas, estableciendo
los principios básicos y fundamentales de los derechos irrenunciables a los trabajadores y
estos son protegidos e invocados por ordenamientos jurídicos que regulan las relaciones
obrero patronales cuyo objetivo es garantizar el mejor desempeño laboral, y que pueden
ser invocados por cualquiera de las partes para la defensa de sus derechos.

3.8 Federaciones y confederaciones sindicales.

• CONCEPTOS

El propósito de los sindicatos ha sido el de afiliar a todos los trabajadores del país; sobre
el desarrollo de esta idea han tomado cuerpo y estructura jurídica las federaciones y
confederaciones, que constituyen las formas más avanzadas de la sindicación. A través
de ellas se logra no solo la unidad de los trabajadores en la empresa y en las ramas de la
industria y del comercio sino que se consigue el ideal obrero de la unidad nacional de la
clase trabajadora.

En 1912 se crea la Casa del Obrero Mundial, cuyo propósito fue unir a todos los
sindicatos del país que entonces se encontraban en un grado incipiente de desarrollo. La
confederación más importante de la República Mexicana es la CTM o Confederación de

231
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Trabajadores de México, que está constituida por los sindicatos, federaciones y


confederaciones amalgamadas en el sector obrero que forma parte integrante y
fundamental del Partido Revolucionario Institucional La Confederación de Trabajadores de
México nació con el lema que fije el grito de combate del marxismo "por una sociedad sin
clases"; sin embargo la evolución del sindicalismo y de la propia Confederación de
Trabajadores de México ha llevado a que la postura originalmente adoptada se haya visto
reducida en sus pretensiones, de tal suerte que sus tácticas de lucha ya no contienen la
agresividad de sus inicios; no obstante, nadie puede negar que el movimiento obrero a
través de la CTM ha producido beneficios indiscutibles para la clase trabajadora. Los
grandes sindicatos nacionales que la componen son titulares de los contratos colectivos
de trabajo más avanzados no sólo en nuestro país sino en toda Latinoamérica. Tal vez, se
ha perdido el propósito o finalidad mediata que a los sindicatos asigna el maestro Mario
de la Cueva, por cuanto su propósito de transformar la vida social ha quedado por lo
menos encubierto en sus actuales tácticas de lucha. Al lado del movimiento obrero
organizado, existe una corriente sindical independiente y libre que por lo menos en teoría
representa los anhelos de libertad de la clase trabajadora, el problema que en lo personal
hemos visto en el desarrollo del sindicalismo en México, no tiene que ver con las formas
de sindicación que repetimos van desde las más simples hasta las más acabadas, sino en
la pérdida paulatina de una conciencia de clase que haga participar a todos los
trabajadores no solo en las luchas por obtener mejores condiciones de trabajo, sino
también en la lucha política para transformar las bases mismas de la sociedad y del
estado. Los líderes de los grandes sindicatos nacionales quizá también se han visto
empujados por esta corriente y las propias conquistas que los trabajadores han ido
incorporando en los contratos colectivos de trabajo, constituyen un freno en la lucha que
debe ser siempre permanente de la clase trabajadora.

• DENOMINACIÓN

No hay obligación de llevar en su nombre las palabras federación o confederación. La


mayoría las adopta para señalar claramente el grado de evolución de su asociación, y la
amplitud de alcance y poder político indudable.

• OBJETO

Tampoco su objeto es intrínsecamente diferente del que tiene el sindicato, no sólo por
disposición constitucional sino por el envío que el artículo 381 hace al 356 de la Ley
Federal del Trabajo, en lo que resulta aplicable. Puede decirse que es más amplio en las

232
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

federaciones y confederaciones porque aglutina o puede aglutinar los intereses directos


de trabajadores o de patrones de muchas actividades o ramas de industria, y con alcance
presumiblemente nacional, todos los intereses de la clase en un momento dado.

• SUJETOS

Dicho está que aunque los sujetos originales son los sindicatos, no hay óbice para que
participen federaciones y confederaciones en la integración de otras federaciones y
confederaciones. Lo importante es que se trata de personas morales previa y legalmente
constituidas conforme al derecho del trabajo mexicano.

"Los miembros de las federaciones o confederaciones", dice el artículo 382, de la Ley


Federal del Trabajo, "podrán retirarse de ellas, en cualquier tiempo, aunque exista pacto
en contrario".

• FORMAS

Tampoco hay formas reguladas legalmente; así que priva el principio de autonomía
sindical y suprasindical del artículo 359 de la Ley Federal del Trabajo.

• NACIMIENTO O CONSTITUCIÓN

A tenor del artículo 384, las federaciones y confederaciones deberán registrarse ante la
Secretaría del Trabajo y Previsión Social. Su importancia es justipreciada en su
competencia federal.

Para el registro deben acompañar su solicitud, por duplicado (artículo 385 de la Ley
Federal del Trabajo), la copia autorizada del acta de la asamblea constitutiva; una lista
con la denominación y domicilio de sus miembros; copia autorizada de los estatutos y de
la asamblea en que se haya elegido la directiva, documentos que deben estar firmados
por los funcionarios mencionados a propósito del sindicato, señalados por la ley o por los
estatutos.

Los estatutos de las federaciones y confederaciones, independientemente de los


requisitos aplicables del artículo 371, contendrán:

I. Denominación y domicilio y las de sus miembros constituyentes;

II.Condiciones de admisión de nuevos miembros, y

III.Forma en que sus miembros estarán representados en la directiva y en las asambleas.

• FUNCIONAMIENTO

233
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Para cumplir su objeto, las federaciones y confederaciones gozan de capacidad, pueden


acreditar su personalidad, tienen las obligaciones, prohibiciones y responsabilidades
señaladas para los sindicatos, y pueden, durante su vida, modificar sus estatutos, cambiar
estructura, realizar fusiones, alianzas, frentes, etcétera.

A pesar de lo anterior, no pueden jurídicamente asumir la función reservada por la ley a


los sindicatos específicamente en asuntos laborales.

Y en general, son las federaciones y las confederaciones obreras las que tienen asiento
en las negociaciones con el Estado y otros factores reales de poder, para establecer los
grandes acuerdos nacionales.

Es más claro en ellas el sentido de acción colectiva y de participación activa en las


cuestiones económicas, ecológicas, de seguridad y de tecnología, que la vida actual y la
inmediata plantea a las naciones. El siglo XXI ya está aquí y los caminos no esperan.

• SU FUNDAMENTO JURÍDICO

En términos generales las disposiciones de la Ley Federal del Trabajo de 1931 se


conservaron en la vigente, adaptándolas a la nueva terminología y a los principios en los
que se afirma la libertad sindical.

Si bien la fracción XVI del artículo 123 constitucional no hace mención al término
federaciones y confederaciones, creemos con el maestro Mario de la Cueva que tampoco
lo excluye. El artículo 255 de la Ley de 1931 expresaba que: "los sindicatos pueden
formar federaciones y confederaciones", disposición que pasó a integrar el artículo 381 de
la Ley Federal del Trabajo de 1970. Por su parte, el Convenio 87 de la Organización
Internacional del Trabajo del año de 1984 en su artículo 5o. Señala: "Las organizaciones
de trabajadores y de empleadores tienen el derecho a constituir federaciones y
confederaciones, así como el de afiliarse a las mismas".

En el aspecto conceptual, la ley vigente no contiene una definición, por ello el maestro
Mario de la Cueva propone una formal y sustancial. La definición formal la expresa en los
términos siguientes: "Las Federaciones y Confederaciones son las uniones sindicales
constituidas para el estudio, mejoramiento y defensa, de los intereses y derechos de la
clase trabajadora". Los elementos que integran esta definición son los siguientes: a) los
sujetos creadores no son los trabajadores en lo individual sino las organizaciones
sindicales ya formadas; b) la finalidad de las federaciones y confederaciones es la misma
que corresponde a los sindicatos, pero se lleva acabo ya no dentro de intereses concretos

234
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

o particulares sino con base en las necesidades y en los ideales de la clase trabajadora.

La definición sustancial sería la siguiente: "Las Federaciones y Confederaciones es la


cúspide de las organizaciones obreras que tienen como misión el estudio, mejoramiento y
defensa de los intereses del trabajo y la preparación de un mundo mejor para todos".

Hemos dicho en otras ocasiones que el valor del principio de la libertad sindical cubre
tanto a los sindicatos como a las federaciones o confederaciones. De esta manera el
artículo 381 de la ley dispone que las federaciones y confederaciones se regirán por las
disposiciones del capítulo relativo a los sindicatos, y relaciones colectivas de trabajo, en lo
que sean aplicables. Los principios de la libertad sindical son pues de aplicación estricta a
la formación, vida y acción de las federaciones y confederaciones: libertad frente al estado
y la empresa y las libertades positiva, negativa y de separación o renuncia de cada
organización respecto de la que formen parte; así, el artículo 382 de la ley vigente
dispone: "los miembros de las Federaciones y Confederaciones, podrán retirarse de ellas,
en cualquier tiempo, aunque exista pacto en contrario".

De conformidad con el artículo 381 de la ley, las federaciones y confederaciones son


uniones de sindicatos. La fórmula ha tenido sin embargo que adaptarse a la evolución del
movimiento obrero y podemos decir que las federaciones se integran con sindicatos, en
tanto las confederaciones se integran con sindicatos y federaciones. Esto último, en virtud
de que los grandes sindicatos nacionales con frecuencia cuentan con un mayor número
de miembros que el de las propias federaciones.

REQUISITOS PARA SU CONSTITUCIÓN

Estos requisitos se dividen en requisitos de fondo y en requisitos de forma.

Los requisitos de fondo podemos mencionarlos en la forma siguiente: deben formarse con
sindicatos obreros o empresariales, por lo tanto, las organizaciones mixtas no están
reconocidas por la ley. La finalidad de las federaciones y confederaciones es la lucha en
defensa del trabajo. La finalidad de las federaciones y confederaciones es el estudio de
los problemas del trabajo, el apoyo moral y económico a cada sindicato en sus conflictos
con la empresa y el señalamiento de las metas políticas por alcanzar. En cuanto a los
miembros que las constituyen, las federaciones y confederaciones se integran con
personas jurídicas esto es, con sindicatos, a diferencia de estos últimos que se integran
con personas físicas. Consecuentemente, el requisito para el nacimiento de las
federaciones y confederaciones será la existencia de los sindicatos y federación que van

235
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

a actuar como miembros constituyentes.

Los requisitos de forma son entre otros los siguientes: a) Cada sindicato o federación
debe aprobar la medida tendiente a su constitución, por lo que los sindicatos deben
reunirse en asamblea para decidir su ingreso a la federación o confederación respectivas;
b) La asamblea, aprobará los estatutos, lo que en términos del artículo 383 de la ley
contendrán denominación y domicilio, tanto de la federación o confederación como de sus
miembros, condiciones de adhesión de nuevos miembros y forma en que sus miembros
estarán representados en la directiva y en las asambleas; c) La Asamblea Constituyente u
otra posterior deben nombrar la directiva.

• EL REGISTRO DE LAS FEDERACIONES Y CONFEDERACIONES

En los términos del artículo 384 de la ley vigente, las federaciones y confederaciones
deben registrarse ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social independientemente de
que los sindicatos integrantes sean total o parcialmente de jurisdicción federal o
puramente locales. El registro sólo se puede negar, por las mismas causas que se niega a
los sindicatos y que se especifican en el artículo 366 de la ley. Para los efectos de registro
de las federaciones y confederaciones deben remitir a la Secretaría del Trabajo por
duplicado: copia autorizada del acta de la Asamblea Constitutiva; una lista con la
denominación y domicilio de sus miembros; copia autorizada de los estatutos y copia
autorizada del acta de la asamblea en la que se haya elegido la directiva.

• ESTRUCTURA Y ACTIVIDADES

Las federaciones y confederaciones son personas jurídicas y sus órganos máximos son la
asamblea y la directiva, por lo que nada nuevo puede decirse a este respecto que las
distinga de los sindicatos. Solamente se agrega por el maestro Mario de la Cueva que el
patrimonio de las uniones se forma con las aportaciones de las federaciones y
confederaciones, debiendo ser los estatutos los que fijen las cuotas respectivas, la forma
y época de los pagos y las consecuencias que se producen de no hacerlo.

• EXTINCIÓN

Por disposición del artículo 381 de la Ley Federal del Trabajo, la parte relativa a la
extinción de sindicatos es aplicable a las organizaciones suprasindicales.

3.8.1 Condiciones para el Registro.

El registro es un acto por el cual, la autoridad da fe de haber quedado constituido el

236
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sindicato. Como hemos repetido muchas veces el registro es un acto declarativo y no


constitutivo de la asociación.

A continuación veremos los actos y elementos necesarios que se requieren para otorgar
el registro a un sindicato, esto es, obtener la resolución administrativa por la cual nace a la
vida jurídica una asociación sindical.

• SOLICITUD ANTE LA AUTORIDAD COMPETENTE

La solicitud de registro debe hacerse ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje o en la


Secretaría del Trabajo y Previsión Social (a través de la Dirección General de Registro de
Asociaciones), pero no indistintamente.

• COMPETENCIA

Por competencia se entiende: "La capacidad o aptitud del órgano investido de jurisdicción
para ejercerla en un proceso determinado, en razón de la materia, del valor del territorio o
de la organización judiciaria".

• COMPETENCIA FEDERAL

Son de competencia federal los sindicatos que estén formados por trabajadores que
presten sus servicios en empresas cuya rama industrial se encuentre en alguno de los
supuestos de la fracción XXXI del artículo 123 constitucional.

La solicitud de registro de estos sindicatos se hará en la Dirección General de Registro de


Asociaciones dependiente de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

• COMPETENCIA LOCAL

Por exclusión, los trabajadores que laboren en empresas cuyas actividades no se


contemplan en el precepto legal antes citado, serán de competencia local, es decir,
deberán presentar su solicitud de registro ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.

3.9 El Sindicato como frente a problemas sociales.

Desde épocas remotas el Sindicato, siempre ha estado muy a la alternativa de los


sucesos que han marcado y cambiado desde un punto de vista social la vida en México, y
cabe mencionar que la participación ya directa o indirecta del sindicato ha sido
preponderante y quizá hasta definitiva en la solución que se ha tomado respecto de un
problema social que se deriva de una acción que el Estado ha tomado en cuenta a
realizar, el estado coma máxima autoridad política, social, administrativa y jurídica en

237
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

nuestro país ha tenido que tomar decisiones quizá "benéficas", para la sociedad pero no
bien vistas por ésta, basta recordar el problema que se dio en el sexenio del licenciado
López Portillo cuando se ocurrió la flamante idea de Nacionalizar la banca privada, donde
la sociedad no estuvo del todo de acuerdo en dicha nacionalización, hubo movilizaciones
sindicales pues, se consideraba que ya no serían los mismos derechos y garantías
laborales que percibían los trabajadores bancarios, hubo incluso que hacer reformas a las
leyes en dicha materia, a fin de no dejar en estado de indefensión a dichos trabajadores,
fue una acción estatal que originó movilizaciones y cambios metódicos en la sociedad
mexicana de aquel entonces; pero quizás una de las acciones tomadas por parte del
estado, sería las reformas que en materia de educación se dieron allá por la década de
los ochentas, que ante tal actitud los sindicatos de dichas ramas intervinieron a fin de dar
pronta solución y que el estado, aceptara no solo la intervención sindical sino también la
participación directa para la mejor solución al problema.

Y si en realidad hiciéramos un recuento de todas las participaciones en que ha intervenido


el sindicato en general para con los problemas y acciones sociales que se han originado
por causas de un acto estatal, no acabaríamos siquiera de numerarlas, más sin embargo,
es por demás sabido que no es un secreto a voces que se sabe qué importancia tiene en
la actualidad la intervención sindical en México, no solo en las resoluciones sino inclusive
en las decisiones que definen a un país como el nuestro, donde bien que mal el estado no
se ordena ni se manda solo sino también necesita de otros factores o grupos para su
toma de decisiones u opiniones, como lo analizaremos en los siguientes subcapítulos.

3.10 El Sindicato como mediador con el Estado.

Como ya se comentó el Estado y el Sindicato han ido de la mano al buscar llegar a un


acuerdo común entre ambos, para dar la mejor solución que como alternativa se plantea
para la solución de problemas a través de la concertación.

Más sin embargo antes de llegar a una exacta y exigente concertación, no hay que olvidar
que en nuestro México es donde el sindicalismo ha estado a merced del gobierno
(Estado), una de las razones principales que ha dado paso a que el sindicato sea sublime
ante las exigencias del gobierno sería desde un punto de vista muy personal en las
caducas leyes laborales que resultan completamente insuficientes para cubrir TODOS
LOS PROBLEMAS LABORALES DE LA SOCIEDAD CONTEMPORÁNEA, por tal motivo
esto nos conlleva a la necesidad de que los máximos representantes sindicales y por
ende, el sindicatos que estos representan tengan la necesidad de llegar a acuerdos

238
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

denominados "PACTOS SOCIALES", con la finalidad de que por medio de éstos de una u
otra manera complementen lo que las leyes no son capaces de otorgar.

Es decir, pese a la supuesta madurez de sindicatos y empresas para atender en concreto


la realidad de las condiciones de estas nuevas generaciones de trabajadores que se
integra a la sociedad laboral mexicana; hay aún de manera abundante cierto pragmatismo
al sindicato y claro al contrato colectivo que de éste se deriva, por ende, se da mucho un
sindicalismo blanco muy entregado al patrón y por lógica subordinado al estado por viejos
pactos sociales y políticos, que garantizan al gobierno cierta y relativa paz social y claro a
los líderes un apoyo tal como para enfrentar a los afiliados, tanto a aquellos rebeldes
como a las no muy contadas organizaciones o grupos de trabajadores denominados
independientes.

Claro es de expresarse cómo las libertades sociales que en materia laboral se dieron en
1917 con cargo a los patrones resultó entonces como cheque en al portador al propio
Estado por las molestias que en futuro le trajeron al propio estado, la clara consecuencia
ha sido la mediatización del sindicalismo, en pocas palabras los líderes charros que de
una u otra manera han sabido manipular a sus agremiados, consiguiendo con esto una
diversificación compleja del sistema laboral mexicano, para caso de ejemplo, basta tan
sólo mencionar el disfraz del famoso apartado "B" del artículo 123 constitucional, que
obvio a los trabajadores al servicio del estado los deja del mejor derecho que otorga el
apartado "A" de dicho artículo; o también las reglamentaciones especiales a los
trabajadores bancarios o universitarios que solo han interesado al estado, con fines muy
directos pero claro como alternativas de solución que obviamente se han dado entre el
estado y los "representantes sindicales".

Lógico es que el estado no iba a dejar al arbitrio del sindicato la exacta aplicación el
resultado de problemáticas de interpretación, ejecución o realización del pacto social que
a la postre sería mejor y más exacto a través de la llamada concertación social, por tal
caso de las existencias de las famosas juntas de conciliación sirvió como base para
establecer la administración de justicia laboral, dando vida además a las famosas
comisiones tripartitas (integradas por representantes de los sectores obrero-patronal-
gubernamental).

El tripartismo ha venido funcionando como en su momento fue la Comisión Nacional


Tripartita del presidente Luis Echeverría Álvarez o la Alianza para la Producción del
licenciado José López Portillo, y qué decir del famoso Pacto para la Estabilidad

239
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Económica Competitividad y Empleo de Miguel de la Madrid. Hoy se perpetúa, en el


modelo de relaciones laborales diseñado en nuestro país, la referencia a la democracia
sindical es una constante si se analiza el tema en realidad a pesar de las exigencias del
Convenio 87 de la O1T, el mecanismo de la Ley Federal del Trabajo deja mucho que
desear, en cuanto al ejercicio puro de la libertad sindical, de tal manera que se pierde
entre los vericuetos del capricho político. Hay, además otros factores a considerar la
historia del sindicalismo en México (ya analizada en los capítulos anteriores) comprueba
que desde 1917 las dos mayores centrales sindicales han nacido supeditadas al interés
del Estado. En ambos casos Las Centrales han orientado su vida alrededor de una
Alianza con el Gobierno que las ha constituido en instrumento de poder y factor político, y
de paso, en mecanismos de control del movimiento obrero en beneficio de un sistema que
en México vivimos como una curiosa combinación de democracia y corporativismo. Lo
primero, en las declaraciones genéricas sobre libertad y autonomías sindicales que
algunos creen ciertas y lo segundo, en las realidades concretas de un férreo control del
estado sobre la vida sindical. No obstante, tampoco faltan medidas populistas en ejemplos
concretos en beneficio inclusive de sindicatos independientes, que pueden llegar a
tomarse como expresiones de justicia social y que en el fondo son simplemente
mecanismos políticos indirectos por lo cual considero que democracia en doctrina y
corporativismo en la práctica. Mala combinación para una alternativa de solución en la
concertación social.

3.10.1 Concertación.

En esa reunión el profesor Alonso Olea habló poco y dijo mucho. Y en sustancia señaló
que la concertación social, "convenio para convenir" es la expresión más cabal de la
presencia de organismos intermedios entre el Estado y los ciudadanos, ignorados por
quienes hicieron posible el movimiento revolucionario de 1789, demasiado influido por las
teorías de Juan Jacobo, para quien sólo había Estado y ciudadanos (con la Ley de
Chapelier como muestra) pero evidentes en la nueva etapa constitucional que acepta
como punto de partida la libertad sindical y, por ende, la presencia de las organizaciones
de clase como interlocutores principales, y de los partidos políticos. Y a esos institutos,
que lo son, corresponde en principio el protagonismo de la concertación alimento del
Estado en la búsqueda de la tranquilidad social, que intenta lograr en un juego
esencialmente democrático en el que las decisiones de los sindicatos de trabajadores y
de las organizaciones empresariales pueden constituir el fundamento principal del marco

240
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

legislativo.

No es nada fácil dar un concepto único o bien definido de la Concertación Social en la


cual bastante ha tenido que ver hasta la actualidad el sindicalismo en México, por tal
motivo es necesario tomar en cuenta las palabras del maestro Manuel Alonso Olea que
aunque no siempre se está de acuerdo no se pueden ignorar sus puntos de vista, cabe
agregar que este trabajo fue presentado como ponencia en el Segundo Curso
Internacional de Derecho del Trabajo Comparado (INS.IVSXUIZ. UNAM). En septiembre
de 1986.

Dijo Alonso Olea: "En sistemas socioeconómicos tan complejos como los actuales,
caracterizados por una extremada división del trabajo, es muy tenue la división que
separa el interés particular de los grupos y de sus asociaciones, incluidas las de
trabajadores y empresarios, de los intereses generales de la comunidad que el Estado
articula". De ello deriva que el esfuerzo de conciliación no pueda quedar a cargo de la
acción del Estado, de manera exclusiva, ni del encuentro sólo de los sectores sociales. Es
necesaria una acción conjunta. "De donde se saca, dice Alonso Olea que de alguna forma
debe tratarse de establecer un puente o atadura entre las estructuras públicas de poder,
estructuras formales representadas por los poderes legislativo y ejecutivo estatales, y las
estructuras que ya no son informales, sino formales y constitucionalizadas de poder de los
intereses particulares."

3.10.2 Dentro de una Crisis la Concertación Social es la pauta del Sindicato.

La concertación social aparece como un efecto inteligente de una situación de crisis.


Obviamente con ambientes diferentes, necesidades distintas y estructuras de celebración
también discrepantes, pero la concertación social está siempre vinculada a fenómenos de
conflicto económico y social

Hay razones abundantes. Si las cosas no van bien y se pretende resolverlas por la vía
directa, las consecuencias son terribles en horas de trabajo perdidas con motivo de las
huelgas y, lo que es aún más grave, en el esfuerzo directo de cada empresa por encontrar
un camino de solución.

Por el contrario, en etapas de esplendor económico como fue en Europa, en general, la


década de los sesenta, los sindicatos compiten entre sí en la consecución de mejores
condiciones colectivas.

La razón más clara está en el impacto de la crisis sobre el empleo, además, la afiliación

241
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sindical disminuye dados los resultados tan poco elocuentes de la gestión sindical, lo que
obliga a las Centrales a buscar alianzas donde antes había rivalidades, haciendo un frente
común que les permita conservar el trabajo a cambio de ceder en salario.

La crisis supone, además, concesiones importantes en orden a la pérdida de la


estabilidad, adaptándose formas de contratación temporal. Es claro que al hablar de
crisis, se debe precisar que se trata, por regla general, de los procesos de decadencia del
mercado, típicos del capitalismo.

3.10.3 Movimiento social y sindical.

Sin dejar de considerar que también tiene importancia la representatividad y confianza en


los cuadros de dirección en el lado empresarial, PLÁ sostiene con razón que no será
posible un compromiso "si los delegados no son representativos, si el movimiento obrero
no es disciplinado, si cada trabajador no se siente ligado por la negociación efectuada".

Este vigor sindical debe basarse en dos elementos concurrentes: la autenticidad y el


poder de convocatoria.

Habrá autenticidad cuando se trate verdaderamente de defender los derechos de los


trabajadores "sin influencia empresarial, política ni estatal".

El poder de convocatoria se manifestará no tanto por el número de afiliados de cada


organización sindical sino por el impacto de su actuación precisamente en el ámbito de
los trabajadores no sindicalizados pero que, de todas maneras, siguen las líneas de
conducta de las organizaciones más representativas.

• COORDINACIÓN SINDICAL PARA LA PERFECCIÓN DE LA CONCERTACIÓN

Dependiendo del ámbito de la concertación, la intervención de los sindicatos,


federaciones o confederaciones será de diferente nivel y, en todo caso, cuando se trate
de pactos nacionales, es evidente que será indispensable la búsqueda de un
entendimiento entre las organizaciones de tercer grado más representativas.

PLÁ advierte que es difícil lograr la totalidad de las adhesiones de los sindicatos y
trabajadores libres pero que "Si no se logra la totalidad de las adhesiones, que son las
que suponen el grado máximo de eficiencia, cuanto más numerosas sean las adhesiones
y más intensa la coordinación, los resultados serán mejores."

3.10.4 Escenario favorable para el desarrollo.

La posibilidad de la concertación no es la misma si la sociedad a la que se dirige es

242
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

desarrollada, o si está inmersa en los problemas del desarrollo. De la misma manera, la


concertación necesita de la democracia y es incompatible, a pesar de que se adopten
meras formas exteriores, con soluciones autoritarias.

En los países económicamente desarrollados se dan condiciones económicas más


favorables para el clima de entendimiento y compromiso que las que pueden presentarse
en aquellos países que son subdesarrollados, éstos están propensos a tensiones,
insatisfacciones, conflictos y problemas de toda índole que acompañan a toda situación
de estancamiento y atraso."

Por otra parte, la relación entre el gobierno y los gobernados debe estar fundada en una
confianza suficiente de que los logros que se obtengan en el diálogo se conviertan en
medidas reales y no en simples declaraciones etéreas.

En una sociedad desconfiada como la que se suele ver en estos tiempos, la concertación
puede convertirse en un propósito de lograr entendimientos que eduquen a los hombres
responsables de la política y de la economía, sin que parezca que están en juego
decisiones fundamentales del Estado. Quiere decir que la concertación, realizada desde
abajo, acumulando poco a poco los elementos que la conforman de manera real y no
ficticia, puede ser un sano ejercicio de educación a la sociedad. Exige renovación sindical
y conciencia empresarial de la absoluta necesidad de que haya empleo, ya que de otra
manera no hay capacidad de consumo de sus productos. Y lo que es más importante: al
Estado le significa la posibilidad de la paz social, sin la cual los sistemas políticos pueden
encontrarse en callejones sin salida.

3.10.5 Concertación Social.

Hay ciertos antecedentes de pactos sociales mexicanos, lo he mencionado, haciendo


alusión a la "Alianza para la Producción" de 1977 y el "Pacto de Solidaridad Nacional" de
1983. Quizá, en otras etapas tuvieron cierta eficacia participativa, particularmente en los
años de auge, efímero, de la Comisión Nacional Tripartita (1971-1974).

Desde su alta responsabilidad de Secretario de Energía, Minas e Industria Paraestatal,


del Mazo, puntualizaría en una de las frases transcritas que el pacto social,
"fundamentado en la negociación" será el camino para lograr la renovación industrial. En
alguna medida con ello Del Mazo comprometía al Sector Obrero a una acción de sacrificio
consciente. En el fondo, a compartir con el Estado y con el Sector Privado la
responsabilidad de la crisis que le es, por supuesto, totalmente ajena en sus causas.

243
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Conviene, no obstante la lejanía real, repasar rápidamente algunas de las características


de ese fenómeno sin antecedentes conocidos.

La concertación "convenio para convenir" en la siempre aguda concepción de Alonso


Olea, constituye un sistema de "composición" de intereses que necesariamente tienen
que aparecer trabados entre sí, porque si funcionan en capas distintas e independientes a
un lado el público, y a otro privados tan poderosos, parece incurrirse en un dislate político.

"El fundamento práctico de la concertación social radica, pues, en una determinada


necesidad político económica coyuntural."

3.10.6. Elemento de la Concertación.

Ya antes hicimos referencia, al contenido o materia de la concertación, sin embargo, es


oportuno agregar una nota adicional. Ésta consistirá en que la concertación no puede
tener una pretensión de universidad, quiere decir, de solución de todos los problemas no
contemplados en las leyes.

Demófilo de Buen ha dicho que " Instaurar dentro del orden jurídico la vigencia de una
moral individual entrañaría, entre otras cosas, un cándido y excesivo respeto por las
buenas intenciones, reales o simuladas". En cambio "La vida social requiere
inexcusablemente concordancia sobre ciertos principios cardinales.

La concertación debe ser corta de alcances y, en rigor, no debe competir, salvo en el


ámbito salarial, con los convenios colectivos, dejando a éstos la solución de los grandes
problemas de fijación de las condiciones de trabajo. Es evidente que la concertación ha
nacido sin ley. La cuestión fundamental está, sin embargo, en la respuesta a la pregunta
de si la concertación está sometida a la ley, no tanto a la que determine su celebración
misma y sus alcances.

La concertación suele contemplar situaciones inesperadas, no previstas en las leyes. De


esa manera se convierte en una rara justificación de lo nuevo, aunque elimine
prerrogativas para lograr otros fines que se estiman superiores.

Un buen ejemplo de esa decisión se encuentra en los cambios profundos que un derecho
de tanto prestigio como la estabilidad en el empleo ha sufrido ante los embates de la
crisis.

Es indudable que el pacto social merma los alcances del convenio colectivo y, por lo
mismo, reduce la conflictividad.

244
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La concertación social no excluye la celebración de los convenios colectivos, aunque


límite de manera importante su alcance.

No obstante, no hay que olvidar que la concertación es solución coyuntural, salvo que la
crisis se convierta en condición permanente de la economía y que tiene, por lo mismo, un
final.

Por muchas razones la posibilidad del pacto social, tendría que ser breve y, al mismo
tiempo, ampliamente comprensiva de lo esencial del pacto, destacando su carácter
contingente, nacido de un propósito común de raíces sectoriales que el Estado recoge y
hace suyo.

En el equilibrio difícil del contenido, la respuesta democrática o corporativa del pacto


social debe ser única y directa a resolver la problemática que se presenta.

3.11 El sindicato y su estrategia partidaria.

Es indudable dejar de pasar por alto la gran actitud y participación social, económica y
política que ha tenido el Sindicato en México y su relación con los partidos políticos que
han conllevado a la unión de fuerzas y poderes que logran hasta la fecha que el partido
del poder y el Sindicato de mayorías (CTM) se mantengan en el poder, hay por supuesto,
cierto premio político. Por la vía del grupo más conservador del Partido Revolucionario
Institucional, el denominado "Sector Popular", se integra a la política estatal un buen
número de connotados representantes del comercio, servicio, industrias y actividades
profesionales.

A ochenta y dos años del inicio de la Revolución Mexicana que fue, además burguesa, a
pesar de su verbo social y, en el mejor de los casos, absolutamente vertical en sus
decisiones más progresivas, invocar la Revolución resulta anacrónico frente a la
Institución que con mayor exactitud predica el mismo nombre del Partido en el poder, en
ello y de la misma manera se esfuman las diferencias ideológicas entre quienes están en
el poder político y los que se conforman con el económico.

De ahí en los intentos formales de concentración social que nuestra historia comprueba:
Comisión Nacional Tripartita, Alianza para la Producción y Pacto de Solidaridad Nacional,
el Sector empresarial haya contribuido, no sólo con disciplina sino con entusiasmo, a
poner en vigor instrumentos etéreos y sin valor alguno salvo el que los genera.

A continuación daré un breve consejo de la participación activa de los Sindicatos en la


vida política del país.

245
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

3.11.1 El poder político del sindicato.

Las soluciones que se han dado pueden oscilar entre las precauciones de la Carta D'
Amiens que al invocar la autonomía del sindicalismo y de la acción obrera, rechazó la
participación de los sindicatos en la organización del Estado hasta la incorporación de los
miembros de la Confederación de Trabajadores de México al Partido Revolucionario
Institucional por mandato del estatutario y sin acto concreto de adhesión. En ese sentido,
sigue siendo válida la separación entre sindicatos políticos y sindicatos de gestión,
aceptando el primer grupo un apartado especial para aquellos que merecen el calificativo
de sindicalismo revolucionario.

No debe confundirse, sin embargo, el sindicalismo político con la organización política de


los trabajadores, nada sobre éste particular hay matices distintos.

En México el sindicalismo nace bajo la evidente influencia de la decisión estatal. La


Constitución en 1918, de la Confederación Regional Obrera Mexicana es el resultado de
un Congreso convocado por el Gobernador del Estado de Coahuila. Cuando en 1936 se
forma la Confederación de Trabajadores de México, la influencia del presidente Lázaro
Cárdenas es indiscutible. La relación estrecha entre el denominado eufemísticamente
"Movimiento Obrero" y los gobiernos "revolucionarios" es una prueba de lo mismo. No
obstante, al dictarse en 1913 la primera Ley Federal del Trabajo, la fracción I del Art. 249
prohibía a los sindicatos "intervenir en asuntos religiosos o políticos". Es precisamente
Lázaro Cárdenas quien inicia la reforma de precepto para suprimir la segunda prohibición.

La ley vigente mantuvo la misma tesis y no incluye entre las prohibiciones a los sindicatos
el intervenir en política. De hecho, el Partido Revolucionario Institucional que se constituye
fundamentalmente como una unión de sectores, junto al campesino y al popular, incluye
el sector obrero.

Las condiciones actuales de México, en donde es evidente desde hace poco más de una
decena de años, una lucha frontal de organÍ2aciones sindicales de izquierda, al margen
de ese "Movimiento Obrero" que mencionamos antes, han producido una clara
politización de esos grupos sindicales independientes, lo que acusa, en este momento,
una notable radicalización de las luchas obreras.

Es normal que las cosas sean así. Entender la vida sindical al margen de la vida política
es imposible. En el fondo el sindicalismo es la lucha política, aunque no sea
necesariamente partidista.

246
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

"Sería inclusive, inviable, una absoluta separación, toda vez que el sindicato no deja de
ser, en el sentido amplio de la expresión, un ser político".

Otra variable que influye en el peso específico de las organizaciones sindicales es el


sector de la economía en que se ubica. Veamos a continuación que ramas de la
producción dominan las principales organizaciones sindicales.

La FSTSE es, después de la CTM, el otro pilar del Congreso del Trabajo y del PRI. Sus
sindicatos agrupan a los empleados y trabajadores del gobierno federal. Se trata de
organizaciones antiguas, bastante estructuradas, con amplios recursos de control y con
fuerza frente a las autoridades de las secretarías y departamentos del Estado. Su
liderazgo ha sido un frente permanente de reclutamiento para la clase política.

Para un estudio sobre la FSTSE véase Carlos Sirvent, "La burocracia en México, el caso
de la FSTSE", en Estudios Políticos, núm. 1., México, 1975.

A parte de la CTM, dentro del Congreso de Trabajo, la CROC es otra Confederación que
cuenta con federaciones estatales en casi todos los estados, con excepción de Colima,
Guerrero y Nayarit, casi todos los sindicatos de sus federaciones son pequeños, o
corresponden a agrupaciones de pequeños propietarios. La mayor fuerza de la CROC la
representan los trabajadores de los restaurantes.

El sindicato de mayor peso afiliado a la CROC es el de la fábrica automotriz General


Motors cuya vinculación obedece a un circunstancial alejamiento.

Otra de las confederaciones de relevancia nacional que forma parte del Congreso del
Trabajo es la CROM tiene su mayor fuerza en la industria textil, sobre todo en los estados
de Puebla, Tlaxcala y Veracruz.

El SNTE es vital al Estado, en el corto y, desde luego, en el largo plazo.

El STFRM ha disminuido ligeramente su importancia por el desarrollo de las carreteras y


la fuerza de los transportes, no obstante sigue siendo un reducto de poder significativo por
algunas de las funciones institucionales de los ferrocarriles, inclusive, en el propio PRJ la
CTM integra con otros organismos paralelos el denominado Sector Obrero cuyo
protagonismo político en México nadie puede poner en duda.

A partir de la reforma política promovida por el presidente López Portillo, el acceso de los
partidos políticos de izquierda a la Cámara de Diputados, generalmente por la vía de la
representación proporcional, ha permitido su intervención firme en las decisiones más

247
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

importantes para normar la vida del país. Sin embargo uno de los efectos colaterales de
mayor significación ha sido, precisamente, el enlace entre esos partidos y los sindicatos,
en una clara acción de renovación de la vida sindical cuyas consecuencias inmediatas
han sido la acción enérgica de los sindicatos independientes en ámbitos antes reservados
para las agrupaciones tradicionales, tanto el PRD con su CID y CUD, con sus líderes
morales, Cárdenas y Muñoz Ledo así como el naciente Partido del Trabajo, han tenido
gran intervención política y están ejerciendo una notable influencia en el mundo sindical
mexicano.

3.12 La Organización Internacional del Trabajo.

3.12.1 Antecedentes

El Organización Internacional del Trabajo (OIT), fue creada en el año 1901 en Bruselas,
como una Asociación Internacional para la protección legal de los trabajadores. Esta
Asociación realizó en Berna varias conferencias diplomáticas; y para 1906 se celebraron
los dos primeros convenios internacionales de trabajo.

Fueron trabajadores de Estados Unidos, Francia e Inglaterra, quienes lucharon por que
hubiera un organismo internacional que protegiera los derechos de los trabajadores.

Su fundación también se basó en motivaciones de carácter político, ya que no había


mejoras en la situación de los trabajadores, cuyo número crecía constantemente a causa
del proceso de industrialización, lo cual provocaría conflictos sociales. Otra de las
preocupaciones de esta organización era también, que el descontento causado por la
injusticia constituyera una amenaza para la paz y armonía universal.

Al término de la primera guerra mundial los países aliados crearon en 1919 la Sociedad
de las Naciones, a la que supuestamente tendrían acceso casi todos los países, pero
excluyeron a México; en las bases de la Sociedad no se establecía la perfecta igualdad de
todas las naciones y razas.

En las conferencias de paz en París, a fines de 1918 y principios de 1919, México declaró
públicamente y notificó oficialmente que jamás había reconocido la doctrina Monroe ni la
reconocería, porque atacaba la soberanía y la independencia de nuestro país.212 Sin
embargo, México quedó dentro del área de influencia norteamericana, y las relaciones
con el exterior al terminar el periodo armado de la Revolución estuvieron más

212
Cfr., Ulloa, Bertha, óp. cit. nota 38, p. 821.

248
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

determinadas que en el pasado por su relación con los Estados Unidos de Norte
América.213

En ese contexto internacional, en 1919 se creó la Organización Internacional del Trabajo


(OIT) como parte del Tratado de Versalles que terminó con la Primera Guerra Mundial, y
reflejó la convicción de que la justicia social es esencial para alcanzar una paz universal y
permanente.214

Se considera a la OIT como un organismo especializado en materia de trabajo y de


justicia social, su misión fundamental lo constituye la formulación del derecho
internacional del trabajo, actividad que se materializa al adoptar en sus Conferencias
Internacionales, convenios y recomendaciones.215

México ingresó a la OIT en el año de 1931 y a fines de 2007 ha adoptado 69 convenios,


que se insertan en el derecho internacional del trabajo, y de conformidad con el artículo
133 constitucional, la Carta Magna, las leyes del Congreso de la Unión que emanen de
ella y los tratados que estén de acuerdo con la misma y sean aprobados por el Senado de
la República, son la ley suprema de la Nación:216

Artículo 133. Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión que emanen de ella y
todos los Tratados que estén de acuerdo con la misma, celebrados y que se celebren por
el Presidente de la República, con aprobación del Senado, serán la Ley Suprema de toda
la Unión. Los jueces de cada Estado se arreglarán a dicha Constitución, leyes y tratados,
a pesar de las disposiciones en contrario que pueda haber en las Constituciones o leyes
de los Estados.

3.12.2 Declaración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) relativa a los


principios y derechos fundamentales en el trabajo y su seguimiento.

Considerando que la creación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) procedía


de la convicción de que la justicia social es esencial para garantizar una paz universal y
permanente.

Considerando que el crecimiento económico es esencial, pero no suficiente, para


asegurar la equidad, el progreso social y la erradicación de la pobreza, lo que confirma la

213
Cfr., Meyer, Lorenzo, óp. cit., nota 45, p. 846.
214
Cfr., Organización Internacional del Trabajo, La OIT: ¿Qué es, Qué hace?, México, 2005, revisado el
05/06/2007 en http://ilo.org/global/About_the_ILO/langes/ docNameWCMS__082366/PDF.
215
Cfr., Charis Gómez, Roberto, “Organización Internacional del Trabajo”, en Lastra Lastra, José Manuel
(coord.), Diccionario de Derecho del Trabajo, Porrúa, México, 2001, p. 190.
216
Cfr., De la Cueva, Mario, óp. cit., nota 74, p. 37.

249
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

necesidad de que la OIT promueva políticas sociales sólidas, la justicia e instituciones


democráticas.

Considerando que, por lo tanto, la OIT debe hoy más que nunca movilizar el conjunto de
sus medios de acción normativa, de cooperación técnica y de investigación en todos los
ámbitos de su competencia, y en particular en los del empleo, la formación profesional y
las condiciones de trabajo, a fin de que en el marco de una estrategia global de desarrollo
económico y social, las políticas económicas y sociales se refuercen mutuamente con
miras a la creación de un desarrollo sostenible de base amplia.

Considerando que la OIT debería prestar especial atención a los problemas de personas
con necesidades sociales especiales, en particular los desempleados y los trabajadores
migrantes, movilizar y alentar los esfuerzos nacionales, regionales e internacionales
encaminados a la solución de sus problemas, y promover políticas eficaces destinadas a
la creación de empleo.

Considerando que, con el objeto de mantener el vínculo entre progreso social y


crecimiento económico, la garantía de los principios y derechos fundamentales en el
trabajo reviste una importancia y un significado especiales al asegurar a los propios
interesados la posibilidad de reivindicar libremente y en igualdad de oportunidades una
participación justa en las riquezas a cuya creación han contribuido, así como la de
desarrollar plenamente su potencial humano.

Considerando que la OIT es la organización internacional con mandato constitucional y el


órgano competente para establecer Normas Internacionales del Trabajo y ocuparse de
ellas, y que goza de apoyo y reconocimiento universales en la promoción de los derechos
fundamentales en el trabajo como expresión de sus principios constitucionales.

Considerando que en una situación de creciente interdependencia económica urge


reafirmar la permanencia de los principios y derechos fundamentales inscritos en la
Constitución de la Organización, así como promover su aplicación universal.

La Conferencia Internacional del Trabajo

1. Recuerda:

A. “Que al incorporarse libremente a la OIT, todos los Miembros han aceptado los
principios y derechos enunciados en su Constitución y en la Declaración de Filadelfia, y se
han comprometido a esforzarse por lograr los objetivos generales de la Organización en
toda la medida de sus posibilidades y atendiendo a sus condiciones específicas;

250
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

B. Que esos principios y derechos han sido expresados y desarrollados en forma de


derechos y obligaciones específicos en convenios que han sido reconocidos como
fundamentales dentro y fuera de la Organización.

2. Declara que todos los Miembros, aun cuando no hayan ratificado los convenios
aludidos, tienen un compromiso que se deriva de su mera pertenencia a la Organización
de respetar, promover y hacer realidad, de buena fe y de conformidad con la Constitución,
los principios relativos a los derechos fundamentales que son objeto de esos convenios,
es decir:

A. A libertad de asociación y la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho


de negociación colectiva;

B. La eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio;

C. La abolición efectiva del trabajo infantil; y

D. La eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación.

3. Reconoce la obligación de la Organización de ayudar a sus Miembros, en respuesta a


las necesidades que hayan establecido y expresado, a alcanzar esos objetivos haciendo
pleno uso de sus recursos constitucionales, de funcionamiento y presupuestarios, incluida
la movilización de recursos y apoyo externos, así como alentando a otras organizaciones
internacionales con las que la OIT ha establecido relaciones, de conformidad con el
artículo 12 de su Constitución, a respaldar esos esfuerzos:

A. Ofreciendo cooperación técnica y servicios de asesoramiento destinados a promover la


ratificación y aplicación de los convenios fundamentales;

B. Asistiendo a los Miembros que todavía no están en condiciones de ratificar todos o


algunos de esos convenios en sus esfuerzos por respetar, promover y hacer realidad los
principios relativos a los derechos fundamentales que son objeto de esos convenios; y

C. Ayudando a los Miembros en sus esfuerzos por crear un entorno favorable de


desarrollo económico y social.

4. Decide que, para hacer plenamente efectiva la presente Declaración, se pondrá en


marcha un seguimiento promocional, que sea creíble y eficaz, con arreglo a las
modalidades que se establecen en el anexo que se considerará parte integrante de la
Declaración.

251
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5. Subraya que las normas de trabajo no deberían utilizarse con fines comerciales
proteccionistas y que nada en la presente Declaración y su seguimiento podrá invocarse
ni utilizarse de otro modo con dichos fines; además, no debería en modo alguno ponerse
en cuestión la ventaja comparativa de cualquier país sobre la base de la presente
Declaración y su seguimiento.”

3.12.3 Políticas.

El término política se interpreta como el arte de aplicar, en cada época de la historia,


aquella parte del ideal que las circunstancias hacen posible,217 y en este sentido las
políticas de la OIT se circunscriben a sus principios y derechos fundamentales del trabajo,
y tienen como premisa el trabajo decente y se orientan a la concreción de cuatro objetivos
estratégicos:218

§ Promover y materializar los principios y derechos fundamentales en el


trabajo.

§ Generar mayores oportunidades para que mujeres y hombres consigan


empleo e ingresos dignos.

§ Ampliar la cobertura y eficacia de la protección social universal.

§ Fortalecer el tripartismo y el diálogo social.

De acuerdo a las prioridades del nuevo milenio establecidas por la propia OIT219, para
cada uno de los objetivos señalados corresponde una serie de programas focales
internacionales (inFocus), los que concentran e integran sus diferentes actividades a fin
de optimizar su impacto y su cobertura. Los programas InFocus relacionados con los
cuatro objetivos estratégicos son:

• § Promoción de la Declaración de la OIT.


• § Erradicación del trabajo Infantil.
• § Respuesta a las crisis y reconstrucción.
• § Conocimientos teóricos y prácticos y empleabilidad.
• § Intensificación del empleo mediante el desarrollo de pequeñas empresas.
• § Seguridad y salud en el trabajo y medio ambiente.
• § Seguridad social y económica.

217
Cfr., De Pina, Rafael y De Pina Vara, Rafael, op. cit., nota 138, p. 410.
218
Cfr., Organización Internacional del Trabajo, óp. cit., nota 183, p. 11.
219
Cfr., Ídem.

252
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

• § Diálogo Social, Legislación y Administración del Trabajo.

Aunado a lo anterior, cabe destacar lo señalado por Juan Somaria, Director General de la
OIT a partir de marzo de 1999: “El objetivo primordial de la OIT es promover
oportunidades para que las mujeres y hombres consigan un trabajo decente y productivo
en condiciones de libertad, igualdad, seguridad y dignidad humana”.220

Como antecedente a lo antes señalado, la Conferencia Internacional del Trabajo de junio


de 1988, adoptó la Declaración de la OIT relativa a los principios y derechos
fundamentales en el trabajo, reafirmando el compromiso de los Estados Miembros de la
Organización de respetar los principios relativos a cuatro categorías de derechos
fundamentales en el trabajo y promover y materializar su aplicación universal.: a) los
derechos de libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho de negociación
colectiva; b) la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio; c) la
erradicación efectiva del trabajo infantil; y d) la eliminación de la discriminación en materia
de empleo y ocupación221.

Como una política de eficacia de las cuatro categorías de derechos fundamentales, se


identifica la promoción de la Declaración de la OIT, que tiene un triple propósito: a)
concienciar sobre la Declaración en los países y regiones así como a escala internacional;
b) profundizar en el conocimiento de cómo estos principios y derechos fundamentales
refuerzan el desarrollo, la democracia y la igualdad, y ayudan a habilitar a todos los
hombres y mujeres; y c) promoverpolíticas que materialicen estos principios y derechos
dentro de las condiciones de desarrollo de cada país. Así mismo, la cooperación técnica
se considera una política primordial para llevar a la práctica los principios y derechos
fundamentales en el trabajo y asegurar que el progreso social acompaña al crecimiento
económico.222

3.12.4 Convenios.

La OIT y sus estructuras tripartitas empleadores, trabajadores y gobiernos han erigido un


sistema de normas internacionales relacionadas con las materias del trabajo, ya que las
normas fundamentales del trabajo definidas en la Declaración de la OIT, sólo representan
una parte de su actividad normativa; las normas que constituyen el sistema referido,
adoptan la forma de convenios y recomendaciones internacionales del trabajo; los

220
Cfr., Organización Internacional del Trabajo, óp. cit., nota 183, p. 12.
221
Cfr., Ibídem, p. 14.
222
Cfr., Ídem.

253
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

convenios son tratados internacionales sometidos a la ratificación de los Estados


miembros de la OIT; las recomendaciones son instrumentos no obligatorios –a menudo
relacionados con los mismo temas de los convenios que establecen orientaciones para la
política y la acción nacional.223

Se hace notar que los fundadores de la OIT reconocieron en 1919 que la economía global
necesitaba reglas claras para garantizar que el progreso económico estuviese en sintonía
con la justicia social, la prosperidad y la paz social; al año de 2007 no se cristalizó tal
anhelo de justicia social, y en la actualidad la OIT ha desarrollado un amplio Programa de
Trabajo Decente que asume mucho de los mismos desafíos a los que tuvo que hacer
frente en sus inicios.224

Al año de 2006 la OIT había adoptado 187 convenios y 198 recomendaciones referidos a
una amplia gama de temas; de los convenios 8 son fundamentales y 4 prioritarios. Los
fundamentales abarcan temas que son considerados como principios y derechos
fundamentales en el trabajo: la libertad de asociación y la libertad sindical, y el
reconocimiento efectivo del derecho de negociación colectiva; la eliminación de todas las
formas de trabajo forzoso u obligatorio; la abolición efectiva del trabajo infantil; y la
eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación. Estos convenios
también están incluidos en la Declaración de la OIT relativa a los principios y derechos
fundamentales en el trabajo, y en 1995 la OIT lanzó una campaña para lograr la
ratificación universal de estos ocho convenios:225

• § Convenio sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación,


1948 (núm. 87)
• § Convenio sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva, 1949
(núm. 98)
• § Convenio sobre el trabajo forzoso, 1930 (núm. 29)
• § Convenio sobre la abolición del trabajo forzoso, 1957 (núm. 105)
• § Convenio sobre la edad mínima, 1973 (núm. 138)
• § Convenio sobre las peores formas de trabajo infantil, 1999 (núm. 182)

223
Cfr., Ibídem, p. 15.
224
Cfr., Organización Internacional del Trabajo, La necesidad de la justicia social – Introducción a las Normas
Internacionales del Trabajo, revisado el 20/10/2007 en
http://www.ilo.org/public/spanish/standards/norm/introduction/need.htm.
225
Organización Internacional del Trabajo, Convenios y recomendaciones – Introducción a las Normas
Internacionales del Trabajo, revisado el 12/06/2007 en
http://www.ilo.org/public/spanish/standards/norm/introduction/what.htm.

254
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

• § Convenio sobre igualdad de remuneración, 1951 (núm. 100)


• § Convenio sobre la discriminación (empleo y ocupación), 1958 (núm. 111)

Los cuatro convenios que la OIT ha designado como instrumentos "prioritarios", por lo
cual impulsa a los Estados Miembros a su ratificación, en razón de su importancia para el
funcionamiento del sistema de normas internacionales del trabajo, corresponden a los
siguientes:226

· Convenio sobre la inspección del trabajo, 1947 (núm. 81)

· Convenio sobre la inspección del trabajo (agricultura), 1969 (núm.129)

· Convenio sobre la consulta tripartita (normas internacionales del trabajo), 1976 (núm.
144)

· Convenio sobre la política del empleo, 1964 (núm. 122)

Respecto al trabajo decente227, la OIT señala que éste resume las aspiraciones de los
individuos en lo que concierne a sus vidas laborales, e implica oportunidades de obtener
un trabajo productivo con una remuneración justa, seguridad en el lugar de trabajo y
protección social para las familias, mejores perspectivas para el desarrollo personal y la
integración social, libertad para que los individuos manifiesten sus preocupaciones, se
organicen y participen en la toma de aquellas decisiones que afectan a sus vidas, así
como la igualdad de oportunidades y de trato para mujeres y hombres.228

Fines que no se reflejan en las condiciones de trabajo y remuneraciones de la mayoría de


los trabajadores mexicanos ante los embates de una economía neoliberal en la que
prevalecen intereses de la clase empresarial, y se pretende la imposición de ideas de una
nueva cultura laboral que, como dominio cognitivo y axiológico, intentan medrar las
aspiraciones de los trabajadores para tener un mejor nivel de vida a través de una justa
retribución a su trabajo.

226
Cfr., Ídem.
227
* La OIT, define trabajo decente como aquel trabajo productivo en condiciones de libertad, equidad,
seguridad y dignidad, en el cual los derechos son protegidos y que cuenta con remuneración adecuada y
protección social.
228
Cfr., Organización Internacional del Trabajo, óp. cit., nota 183.

255
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

CAPITULO 4 El Sindicato, irrenunciabilidad de los derechos laborales, Formas de


terminación de los conflictos individuales de trabajo

4.1 Reforma y Acción Sindical.

En un sentido genérico el sindicato tiene un régimen legal potestativo, pues son libres
para regular y establecer sus normas.

Los sindicatos como asociación profesional gozan de una autonomía tal, que es libre de
organizarse y estructurarse de acuerdo a sus propias necesidades, sin tener que observar
más requisitos legales de los que van de acuerdo a su propio género y en tal caso serían
lineamientos a seguir, vinculados al fenómeno de lucha de clases.

4.1.1 Naturaleza, y control del sindicato.

Al hablar del registro debemos añadir que como la Ley no distingue ante qué clase de
autoridades, debe entenderse que produce efectos ante toda clase, aunque no sean de
carácter laboral. Como ya mencionamos, el registro es un acto administrativo por medio
del cual una autoridad reconoce la legal existencia de un sindicato, otorgándole un
número y fecha que lo identifican. En éste aspecto, la función del Estado en el proceso de
registro, es la de cerciorarse de que han sido cubiertos los requisitos.

La ley menciona que los sindicatos están obligados a proporcionar los informes que les
soliciten las autoridades del trabajo, debiendo comunicar a la autoridad de todo cambio
que se efectúe.

Al respecto Euquerio Guerrero nos comenta: En nuestro país, constituido como una
República Federal, encontramos que coexisten normas jurídicas que son aplicables en
toda la República, a las que se les denomina federales y otras que solo imperan dentro de
cada Estado, miembro de la Federación y que se les llama locales.

En ciertos casos como en materia Civil o Penal, existen leyes aplicables para asuntos
federales y otras en específico creadas para cada Estado. En nuestro caso, en materia de
trabajo, sólo hay una Ley siendo al mismo tiempo federal y local. Esto es, que
corresponde a las autoridades de los Estados, aplicar las leyes del trabajo en sus
respectivas jurisdicciones.

En el caso del Distrito Federal, encontramos autoridades locales y federales que conocen
de asuntos comunes o locales y de asuntos federales. Por consiguiente tendremos:

Juntas Federales de Conciliación - su función es avenir a las partes.

256
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Junta Federal de Conciliación y Arbitraje - es solo una y reside en la Ciudad de México.

Juntas Locales de Conciliación - la única diferencia es que las atribuciones se ejercen por
los Gobiernos de los Estados.

Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje - conoce de aquello que no compete a la Junta


Federal de Conciliación y Arbitraje.229

Para una mejor exposición, la Ley Federal del Trabajo nos proporciona las siguientes
acepciones que maneja de cada una de estas autoridades, contenidas en el Titulo Once,
llamado Autoridades del Trabajo y Servicios Sociales:

CAPITULO X JUNTAS FEDERALES DE CONCILIACIÓN

"ARTICULO 592.- Las Juntas Federales de Conciliación funcionarán permanentemente y


tendrán la jurisdicción territorial que les asigne la Secretaria del Trabajo y Previsión
Social. No funcionarán estas Juntas en los lugares en que esté instalada la Junta Federal
de Conciliación y Arbitraje.

Cuando la importancia y el volumen de los conflictos de trabajo en una demarcación


territorial no ameriten el funcionamiento de una Junta Permanente, funcionará una
accidental.

CAPITULO XI JUNTAS LOCALES DE CONCILIACIÓN

ARTÍCULO 601.- En las entidades federativas funcionarán Juntas Locales de


Conciliación, que se instalarán en los Municipios o zonas económicas que determine el
Gobernador.

ARTÍCULO 602.- No funcionarán las Juntas de Conciliación en los Municipios o zonas


económicas en que estén instaladas Juntas de Conciliación y Arbitraje.

CAPITULO XII JUNTA FEDERAL DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE

ARTICULO 604.- Corresponde a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje el


conocimiento y resolución de los conflictos de trabajo que se susciten entre trabajadores y
patrones, sólo entre aquéllos o sólo entre éstos, derivados de las relaciones de trabajo o
de hechos íntimamente relacionados con ellas, salvo lo dispuesto en el artículo 600
fracción IV.

CAPITULO XIII JUNTAS LOCALES DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE

229
Apud, GUERRERO Euquerio, óp. cit. p. 445 a 455.

257
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

ARTÍCULO 621.- Las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje funcionarán en cada una
de las Entidades Federativas. Les corresponde el conocimiento y resolución de los
conflictos de trabajo que no sean de la competencia de la Junta Federal de Conciliación y
Arbitraje."

A continuación citaremos tesis de jurisprudencia relacionada con el tema que nos ocupa:

"SINDICATOS, OTORGAMIENTO DE PODERES POR LOS SECRETARIOS


GENERALES DE LOS. Los secretarios generales de los sindicatos tienen facultades para
otorgar poderes porque de conformidad con lo dispuesto por el artículo 368 de la Ley
Federal del Trabajo, el registro del sindicato y de su directiva, otorgado por la Secretaria
del Trabajo y Previsión Social o por las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje,
produce efectos ante todas las autoridades; a su vez, el artículo 374 dispone que los
sindicatos legalmente constituidos son personas morales y el diverso 376 señala que la
representación del sindicato se ejercerá por su secretario general o por la persona que
designe su directiva, así pues, si conforme a éste último artículo, en el caso, era el
secretario general el representante de la organización sindical sin que en sus estatutos se
encontrara limitación a dicha representación, éste podía delegar el poder como lo hizo, y
al aprobarlo así la Junta se adecuó al contenido del diverso artículo 694 de la Ley Federal
del Trabajo que permite a las organizaciones sindicales otorgar poder, aun mediante
simple comparecencia."230

SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.


Amparo Directo 11766/95. Aguilar Feria David y otros. 9 de enero de 1996. Unanimidad
de votos. Ponente: Carolina Pichardo Blake. Secretaria: María Marcela Ramírez Cerrillo.

Tratando el punto de la representación, es apropiado que señalemos una figura


importante en la vida de todo sindicato como es, la Procuraduría de la Defensa del
Trabajo, cuyas funciones se señalan en el Titulo Once titulado, Autoridades del Trabajo y
Servicios Sociales, en el artículo siguiente:

CAPITULO III PROCURADURÍA DE LA DEFENSA DEL TRABAJO.

"ARTICULO 530.- La Procuraduría de la Defensa del Trabajo tiene las funciones


siguientes:

I. Representar o asesorar a los trabajadores y a sus sindicatos, siempre que lo

230
Novena Época Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta Tomo: III, febrero de 1996 Tesis: I. 6o. T.25 L Página: 487

258
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

soliciten, ante cualquier autoridad, en las cuestiones que se relacionen con la aplicación
de las normas de trabajo;

II. Interponer los recursos ordinarios y extraordinarios procedentes , para la defensa del
trabajador o sindicato, y

III.Proponer a las partes interesadas soluciones amistosas para el arreglo de sus


conflictos y

IV.hacer constar los resultados en actas autorizadas."

Las autoridades del trabajo sólo reconocen a sindicatos que acrediten su registro y el de
su Directiva. Un aspecto importante, vinculado al tema del registro es el llamado " toma de
nota".

Después de todos los trámites a que debe sujetarse el sindicato para registrarse, suelen
aparecer modificaciones, mismas que deben ser comunicadas a la autoridad. Es
precisamente a éste acto administrativo, de avisar de cualquier cambio realizado, lo que
se conoce como" toma de nota".

Dicha atribución se le otorgaba a la dependencia encargada del registro de la asociación,


pero en la actualidad se sustituye está atribución por la de resolver sobre los cambios del
registro. Podríamos decir, que ahora debe llevar el visto bueno de la autoridad. Lo anterior
nos da pie para comentar que, mientras que el primero sólo era un mero acto de dar
conocimiento, el segundo implica dar una resolución, después de haber conocido ya del
asunto.

Además, la Ley proporciona un mínimo de organización, dispuesto para que el sindicato


se relacione jurídicamente con toda clase de personas y para que lleve una existencia
activa relacionada con los fines de su existencia.

Todo esto se hace constar en un cuerpo de normas, llamados estatutos, que se elaboran
para obtener su registro. Estos son las normas que regulan la conducta de los asociados,
en primer lugar entre sí, en segundo para con el sindicato y por último con todo tipo de
personas. Dicha potestad debiera más bien atribuírsele a la Directiva entrante, a fin de
mantener un principio de renovación constante.

En ocasiones se llegan a producir otro tipo de resultados, ya que la elaboración de los


estatutos requiere de un extremo cuidado, podría manipularse y encaminarse a fines
distintos de los reales. Esto sin duda, cambiaría las bases ideológicas del movimiento

259
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

obrero, por unos ficticios.

Por todo esto, opinamos que el derecho que tiene el trabajador de asistir y participar en
las asambleas, es un acto personalísimo e intransferible. Donde una vez registrado el
sindicato, se estará en aptitud de defender los intereses propios.

Podemos concluir que el registro, no es el acto que constituye el sindicato ni con el que se
crea, puesto que con autorización o sin ella, el sindicato existe desde el momento en que
se fusionan los trabajadores con ese ánimo de asociarse, que al expresarse, nace como
persona jurídica. Pero si es el acto jurídico por el cual el Estado a través de la Secretaria
del Trabajo, o en su defecto de las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje, reconoce al
sindicato.

Nos resulta interesante citar las siguientes tesis de jurisprudencia, relacionadas con lo
expuesto:

"SINDICATOS, SU REGISTRO DEBE TRAMITARSE ANTE LA AUTORIDAD LABORAL


COMPETENTE. Si bien es cierto que el artículo 365 de la Ley Federal del Trabajo
establece diversos requisitos que deben cumplirse para solicitar el registro de un
sindicato, no menos cierto es que satisfechos los requisitos debe tramitarse el registro
ante la autoridad del trabajo que sea competente, pues sancionar lo contrario sería tanto
como que un sindicato pudiera registrarse ante cualquier autoridad del trabajo por el
simple hecho de allegar la documentación que en el referido precepto legal se exige, lo
cual no es jurídicamente posible."231

SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.


Amparo en revisión 456/90. Sindicato Nacional de trabajadores del Fideicomiso Fondo
Nacional de Habitaciones Populares. 27 de junio de 199O.Unanimidad de votos. Ponente:
J. Refugio Gallegos Baeza. Secretario: José Luis Martínez Luis.

"SINDICATOS, REGISTRO DE LOS. CANCELACIÓN, EFECTOS. De acuerdo con lo


establecido por los artículos 365, 368 y 374 de la Ley Federal del Trabajo, la personalidad
jurídica de un sindicato nace cuando se encuentra legalmente constituido y registrado
ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, momento éste en que surge como
persona moral, produciendo efectos ante todas las autoridades; por lo que, al quedar

231
Octava Época Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación
Tomo: VI Segunda Parte-2 Página: 670

260
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

cancelada su inscripción, por cualquier motivo, deja de existir como persona moral."232

PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.


Amparo en revisión 43/81. Pipino Martínez y otros. 26 de abril de 1982. Unanimidad de
votos. Ponente: José Martínez Delgado.

"SINDICATOS, REGISTROS DE LOS. El registro es indispensable para que un sindicato


exista jurídicamente, por lo que mientras el registro subsista, el sindicato registrado tiene
la presunción de satisfacer todas las exigencias legales."233

Amparo directo 3616/57.- Sindicato de Choferes del Sitio Belmar, Puerto Aéreo y Zonas
Federales de Mazatlán.- 2 de septiembre de 957.- Unanimidad de votos.-Ponente:
Gilberto Valenzuela.

Antes de acudir a las autoridades, el sindicato ya es una persona jurídica, pero


imposibilitada para actuar con respecto a la naturaleza de la asociación. En cuanto al
nombre, éste da derecho a usarlo en exclusiva para impedir que otra persona lo use, a
cambiarlo y en tal extremo a perderlo por disolución del mismo.

También es obligatorio señalar en forma concreta el objeto del sindicato, su importancia


radica en que tiene una estrecha relación con su capacidad de ejercicio. Así, los
sindicatos pueden celebrar todo acto jurídico que se relacione con el fin.

Relacionado con lo anterior, J. Jesús Castoreña nos comenta:”...El objeto real de los
sindicatos es la defensa y el mejoramiento de las condiciones económicas y de las
condiciones de trabajo de sus miembros. Es pues, obligatorio ese fin para los sindicatos,
si dejan de cumplirlo, o realizan uno distinto, pierden la calidad de asociación profesional y
procede la cancelación de su registro, ya que dejan de reunir el más importante de los
requisitos de su existencia."234

En cuanto al funcionamiento del sindicato, es imperante hacer mención de las cláusulas


de exclusión, empezando por definirlas como, normaciones en los contratos colectivos,
cuya finalidad consiste en el empleo exclusivo de trabajadores miembros del sindicato
titular de dicho contrato y en la separación del empleo, del trabajador que sea expulsado o
renuncie a participar de dicho sindicato.

Para comprender lo anterior, es primordial explicar en primer término a las cláusulas y en

232
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación Época: 7ª
Volumen: 157-162 Página: 154
233
Instancia. Cuarta Sala Fuente; Semanario Judicial de la Federación Época: 6a. Volumen. III Página: 101
234
CASTORENA J. Jesús, .Manual de Derecho Obrero, sexta edición, México, 1984, p.239.

261
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

segundo, proporcionar la definición que nuestra Ley Federal del Trabajo hace de los
contratos que contempla.

La cláusula de exclusión de ingreso, es una regla del contrato colectivo, que precisa al
empresario a no admitir como trabajadores en su empresa sino a quienes estén afiliados.

En cuanto a la cláusula de exclusión por separación, diremos que también es una regla
que asigna la facultad de los sindicatos para pedir la separación del trabajo al empresario,
de los miembros que renuncien o sean expulsados, del sindicato al que formaban parte.

La primera, no contradice los principios constitucionales, pues estimula a los trabajadores,


hacia una integración de las agrupaciones sindicales. Además de instituir un medio legal
de incitar al trabajador a formar parte de algún sindicato. Por lo que la consideramos un
principio al servicio del fortalecimiento y consolidación del sindicato.

En el Titulo Séptimo titulado Relaciones Colectivas de Trabajo, de nuestra Ley Federal del
Trabajo, encontramos que:

CAPITULO III CONTRATO COLECTIVO DE TRABAJO

"ARTICULO 386.-Contrato Colectivo de trabajo es el convenio celebrado entre uno o


varios sindicatos de trabajadores y uno o varios patrones o uno o varios sindicatos de
patrones, con objeto de establecer las condiciones según las cuales debe prestarse el
trabajo en una o más empresas o establecimientos."

Mientras que al contrato - ley, lo hallamos en el mismo Título de la Ley:

CAPITULO IV CONTRATO - LEY

"ARTICULO 404.- Contrato - Ley es el convenio celebrado entre uno o varios sindicatos
de trabajadores y varios patrones, con objeto de establecer las condiciones según las
cuales debe prestarse el trabajo en una rama determinada de la industria, y declarado
obligatorio en una o varias entidades federativas, en una o varias zonas económicas que
abarquen una o más de dichas entidades, o en todo el territorio nacional."

4.1.2 Medio jurídico y legal.

La personalidad y capacidad jurídica Así, se les llama personas en el lenguaje jurídico, a


los seres capaces de tener derechos y contraer obligaciones. La persona jurídica siendo
el sujeto capaz de ser titular de derechos y obligaciones, puede ser capaz por decirlo de
otra manera, de ejecutar actos jurídicos y de intervenir en relaciones jurídicas, en
resumen es la materia capacitada por el Derecho para actuar jurídicamente como sujeto

262
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

activo o pasivo.

Existen ciertas entidades que no poseen la realidad material, como son las asociaciones,
y que por la necesidad de otorgarles capacidad para obligarse y ejercer derechos propios,
el Derecho les ha reconocido capacidad jurídica, dando origen a la figura de la
personalidad jurídica.

Aplicándolo a la figura del sindicato, José Dávalos comenta: "Esto es, el sindicato puede
comparecer ante las autoridades a representar y a defender a sus agremiados, sólo
comprobando que tiene personalidad jurídica, con la copia certificada del registro sindical
y de su directiva, otorgado por las autoridades de trabajo"235

El hablar de la capacidad, nos obliga mencionar que se ha dividido en dos: de goce y de


ejercicio, siendo la primera la aptitud que tiene el sujeto de ser titular de derechos y
obligaciones, mientras que la segunda, es la aptitud del sujeto para ejercitar esos
derechos y cumplir con sus obligaciones.

El siguiente razonamiento nos ayudará a entender un poco más lo anterior. Si la


capacidad de goce está expresa en toda persona física o colectiva, entonces la
desaparición de ambas, por lógica extinguiría de forma simultánea a la personalidad. No
sucede lo mismo tratándose de la capacidad de ejercicio, el ejemplo lo tenemos en los
incapaces quienes pueden ejercitar1 sus derechos, tan sólo con la figura del
representante.

Si ciertos grupos adquieren perfiles establecidos, tienen voluntad de unirse y satisfacen


los requisitos exigidos por la Ley, entonces formarán sindicatos que gocen de
personalidad jurídica en nuestro país.

Al respecto Baltasar Cavazos Flores, menciona: "En realidad el sindicato se constituye en


el momento de ser aprobado por la Asamblea y adquiere así lo que podríamos llamar
"capacidad de goce".236

Así, los efectos jurídicos que produce la persona jurídica en la asociación profesional, los
resumimos en la capacidad de ésta, para intervenir en las relaciones jurídicas que se
presenten; es decir, en el caso del sindicato ya como sujeto de derechos y obligaciones
se entiende que una vez adquiridos son independientes, de los derechos y obligaciones
que corresponderían a los trabajadores considerados en forma individual.

235
DAVALOS José, Tópicos Laborales. Porrúa, México, 1992, p. 166.
236
CAVAZOS FLORES Baltasar, Hacia un Nuevo Derecho Laboral, segunda edición, Trillas, México, 1994. p. 231

263
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Son momentos sucesivos dentro del desarrollo de una institución jurídica, cuya finalidad
que se persigue con la sindicalización, solo puede conseguirse teniendo la facultad para
ejecutar esos derechos y obligaciones que permite la Ley. Y no es sino hasta el
otorgamiento del registro cuando el sindicato puede actuar, ya investido de capacidad. La
siguiente tesis jurisprudencial nos señala:

"SINDICATOS. SU PERSONALIDAD. La personalidad de un sindicato no nace desde el


momento de su registro, sino desde la época de su constitución; aquel les dará y
reconocerá determinados derechos y su falta les ocasionara determinados perjuicios; pero
de ninguna manera adquieren una personalidad nueva, por el hecho del registro"237

El tema de naturaleza jurídica de los sindicatos, en nuestra opinión, se trata de una


asociación profesional con carácter permanente, características propias y reguladas por la
autoridad laboral competente, a través de normas encaminadas a reglamentar un todo,
con fines bien definidos, mismos que son base de diversas y múltiples relaciones
jurídicas.

La personalidad de los sindicatos nace desde su constitución, el registro es sólo el


elemento que da autenticidad a la existencia del sujeto de derechos y obligaciones. De
esto depende su capacidad de actuación frente a terceros y autoridades. Lo grave de
esto, es que se pretenda subordinar el nacimiento de la personalidad jurídica de los
sindicatos, a un acto meramente administrativo.

"SINDICATOS, REGISTRO DE LOS. RESOLUCIÓN QUE LO NIEGA O CONCEDE NO


ES IMPUGNABLE EN AMPARO DIRECTO. Para el registro de una agrupación sindical,
se sigue un procedimiento meramente administrativo, que consiste en la debida
comprobación, ante las autoridades competentes de trabajo, de los requisitos que la ley
exige para considerar constituida dicha agrupación, según se desprende de lo dispuesto
en los artículos 365 y 366 de la Ley Federal del Trabajo.

Por lo tanto, la decisión que recae a una solicitud de tal naturaleza es un acto no
jurisdiccional, en tanto que dicho procedimiento no se ventilan contiendas o conflictos
entre los sujetos de una relación laboral, y la resolución relativa, no decide ningún
conflicto jurídico o económico, individua) o colectivo. Por ello, los actos que emanan de
aquel procedimiento, son actos fuera de juicio, que si bien son susceptibles de
impugnarse a través del juicio constitucional, la vía correcta es el amparo indirecto, de

237
Instancia: Cuarta Sala Fuente: Semanario Judicial de la Federación Época: 5ª Tomo: XLVIII Página: 273

264
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

acuerdo con lo dispuesto por el artículo 114, fracción III de la Ley de Amparo."238

PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO DEL NOVENO CIRCUITO. Reclamación 5/93.


Presidente del Tribunal de Arbitraje para los Trabajadores al Servicio de las Autoridades
del Estado de San Luis Potosí. 15 de abril de 1993. Unanimidad de votos. Ponente:
Guillermo Baltazar Alvear. Secretario: Esteban Oviedo Rangel.

Decimos entonces que la personalidad individualiza a la asociación, por ser distintivo y


diferente al de cualquier otra agrupación, por lo que la hace respetable. La personalidad
de los sindicatos está latente en todo momento para actuar en el ámbito económico y ante
la autoridad, para defender sus intereses colectivos y representar a cada uno de los
miembros del sindicato, en defensa de los derechos que surgen de las relaciones
individuales de trabajo. La siguiente tesis de jurisprudencia nos confirma lo anterior,
diciendo:

"SINDICATOS, PERSONALIDAD DE LOS. La personalidad de los sindicatos no se


adquiere precisamente hasta que obtiene su registro, sino desde el momento en que
llenan los requisitos que para quedar constituidos como tales, establece el artículo 242 de
la Ley Federal del Trabajo; por lo que si el acto que el sindicato reclama en amparo,
consiste precisamente sobreseer fundándose en su falta de personalidad por la carencia
del registro, cuando es por la negativa de éste requisito, contra lo que justamente
reclama."239

Amparo en revisión 1302/38, Sección 2a.- Sindicato de la Empacadora de Conservas.- 16


de agosto de 1938.- Mayoría de tres votos.- Disidentes. Trigo e Iñárritu.

Enunciamos ya, como se da origen a la personalidad del sindicato, ahora es momento de


abordar el tema de su desaparición, donde podríamos concluir señalando dos causas
lógicas. Primero, la disolución del sindicato mismo y segundo, que una vez formado el
sindicato, se cancele su registro. Tal y como lo señala la tesis jurisprudencial que a
continuación insertamos:

"SINDICATOS. CANCELACIÓN DEL REGISTRO DE LOS. REQUISITOS. El artículo 369


de la Ley Federal del Trabajo, establece dos únicos supuestos que dan motivo a la
cancelación de un sindicato, que concretamente se refieren a la disolución del mismo y
1
por dejar de tener los requisitos legales, estos requisitos consisten en la finalidad

238
Octava Época, Instancia: Tribunales Colegiados eje Circuito, Fuente: Semanario Judicial de la Federación,
Tomo: XII- Julio, Página: 301
239
Instancia: Cuarta Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación, Época: 5ª, Tomo: LVII, Página: 1616

265
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

intrínseca y teórica de un sindicato, mejoramiento y defensa de los intereses de los


trabajadores, así como el número de agremiados, y demás requisitos formales previstos
por la ley, por lo que, si no se presenta la falta de alguno de esos requisitos, es
improcedente la cancelación."240

'SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO. Amparo directo 503/95.


Sindicato Unitario de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Puebla. 29 de
noviembre de 1995. Unanimidad de votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario:
José Mario Machorro Castillo.

En resumen, decimos que la naturaleza de la asociación profesional, es el acto jurídico


por el cual los hombres se unen para realizar un fin lícito, dando origen a una entidad
nueva, dotada de un régimen propio y órganos representativos para llevar a cabo dicho
fin. Regulada por la Ley Federal del Trabajo, como acto jurídico que lo estructura y
organiza como sindicato.

4.1.3 Normas generales básicas del sindicato.

El órgano supremo es la Asamblea, de carácter deliberante cuyas decisiones obligan a la


totalidad de sus integrantes. Y si la consideramos como la máxima institución
democrática, luego entonces en los miembros del sindicato radica la soberanía, ellos son
quienes deben gobernarse, creando sus normas para imponerlas, y si se diera el caso,
sancionar a todo infractor.

Como persona moral, también se requiere de varios representantes para actuar


jurídicamente, siendo éstos quienes conformen a la mesa directiva, con la obligación de
rendir cuentas en un lapso de tiempo determinado. La expresión de la voluntad del
sindicato, puede traducirse en realizaciones concretas, desarrolladas por uno o varios
individuos, los cuales obrando con honestidad no deben ir más allá de la voluntad de la
colectividad y no deben comprometer al sindicato más de lo que les es autorizado.

"SINDICATOS, REGISTRO DE LOS. NEGATIVA Y REPRESENTACIÓN. Conforme a lo


previsto en los artículos 374, 376 y relativos del Código laboral, los sindicatos legalmente
constituidos son personas morales y tienen capacidad jurídica, entre otras cosas, para
defender ante todas las autoridades sus derechos y ejercitar las acciones
correspondientes; de este modo, la representación del sindicato es ejercida por su
secretario general o por la persona que designe su directiva; sin embargo, la falta de
240
Novena Época, Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito, Fuente: Semanario Judicial de la Federación
y su Gaceta, Tomo: III, enero de 1996, Tesis: VI. 2o.19L, Página: 354

266
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

registro de la agrupación sindical impide la existencia legal, como persona jurídica, de esa
agrupación, sin que obste que las personas físicas promoventes del juicio de garantías se
ostenten como directivos de la agrupación señalada como quejosa, así como para fines
del trámite relativo al registro que se pretendió ante la autoridad responsable, se hubiese
admitido la representación correspondiente, puesto que es innegable que al haberse el
registro cuestionado, debe entenderse que no existe la representación argumentada, por
la simple razón de que es imposible representar a una persona legalmente inexistente."241

TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO CUARTO CIRCUITO. Amparo en revisión 203/81.


Sindicato Único de Trabajadores Académicos de la Universidad de Yucatán. 21 de enero
de 1982. Unanimidad de votos. Ponente: José de Jesús Rodríguez Martínez.

Dicho órgano tiene funciones considerables, por ser el único responsable ante el sindicato
y extraños en caso de excederse en sus facultades.

Debemos añadir que la responsabilidad, es una situación jurídica en la que se encuentra


toda persona obligada a un hacer o no hacer, conforme a la norma. En cuanto a la
responsabilidad civil podemos decir que, la finalidad es reparar los efectos del daño
causado, derivado del incumplimiento de una obligación. La característica principal aquí,
es restituir las cosas hasta donde sea posible, al estado en que se encontraban antes de
causar el daño.

En la vida sindical, la conducta de los representantes produce efectos a la agrupación,


que en ocasiones se traducen en menoscabos, por lo que se debe exigir, se indemnicen
pérdidas, pues el responsable civil debe pagar lo causado.

Por desgracia un hecho así, culmina con todas las ilusiones de cada una de las
asociaciones. Esta y otras tantas razones han sido motivo para que se tenga cada vez
más un estricto control y observancia hacia los representantes para con sus miembros y
no tanto para con la autoridad.

Otro punto en contra para los integrantes de un sindicato son los avances tecnológicos,
que cada vez más se han incorporado a las empresas, y en consecuencia obteniendo el
desplazo masivo de los trabajadores.

Estas realidades nos obligan a pensar en lo indispensable que resulta para los sindicatos,
revisar estructura y estrategias a seguir en cada centro de trabajo, con el único fin de

241
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación Época: 7A
Volumen: 157-162 Página: 154

267
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

conservar la vigencia de los sindicatos, por lo que se precisa mantener a los trabajadores
con incentivos para su permanente afiliación.

Los mismos integrantes de los sindicatos, deben revisar que en verdad reciban la
capacitación y adiestramiento que requieren para el adecuado desempeño de su labor, y
que es imperioso aplicar en todas las empresas. Con esto se asegurara que sean ellos
quienes ocupen los nuevos puestos que se generen con los citados avances tecnológicos.

Ligado a lo anterior Rubén Delgado Moya nos dice:"...la sindicación resuelve


favorablemente para el trabajador su contratación en masa que individualiza a los sujetos
que la integran. La sindicación, en este aspecto, debe entenderse como una interrelación
que unifica y separa en los derechos a todos los miembros que la integran."242

Los trabajadores en México luchan por conseguir la reivindicación de sus derechos, con
tantos levantamientos lograron cambios en la sociedad, pero en la actualidad para llegar a
una plena armonía, es necesario que una estricta aplicación de la ley impere por sobre
todas las cosas.

La desconfianza hacia los líderes sindicales crece cada vez más y es comprobable en
diversos sindicatos que ponen en relieve la insuficiencia de una regulación estatutaria de
su situación funcional. Por lo que urge adoptar medidas legislativas con mayor detalle
respecto a que, quien pretenda dirigir debe disfrutar de sus derechos civiles.

El sindicato al elaborar sus estatutos lo hace en asamblea, bajo conocimiento de sus


miembros y obliga igualmente a todos. Dentro de esto, se fijan bases y condiciones que
deben ser acatadas.

La situación de ineficiencia por parte de ciertos líderes sindicares y la necesidad prioritaria


de defender los derechos de los sindicalizados da pauta a realizar algunas reformas que
los beneficien.

Cuando la directiva tiene varios años en el poder y control de algún sindicato, cae en la
negligencia, desanimo, desinterés colectivo, etc., donde sucede que en su inicio el trabajo
es eficaz, abanderando y procurando en realidad el bienestar de los sindicalizados. Y a
medida que se van acumulando esos años, pasa que se abocan más a las ganancias que
les podría proporcionar el tomar un acuerdo unilateral, en el cual no se cuenta con la
aceptación de los miembros, efectuando ciertos arreglos desleales.

242
DELGADO MOYA Rubén. El Derecho Social del Presente. Porrúa, México, 1977, p.468.

268
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Estos líderes estimulan con demagogia y al final pactan con el oponente, asegurando a
los trabajadores que sólo se ha conseguido mucho menos de lo obtenido, y que eso ha
sido lo mejor para todos, tales decisiones ignoran por completo a sus miembros. El estar
al frente por mucho tiempo resulta insano, siendo necesario fijar límites que produzcan
nuevos y mejores ideales, congruentes a su realidad.

Tal es el caso del artículo 371 de la Ley Federal del Trabajo, estipulado en el Título
Séptimo llamado Relaciones Colectivas de Trabajo, en su Capítulo II el cual nos señala el
camino sobre el cual se deben establecer los estatutos para un sindicato.

"ARTICULO 371.- Los estatutos de los sindicatos contendrán:

I. Denominación que le distinga de los demás;

II. Domicilio;

III.Objeto;

IV. Duración. Faltando esta disposición se entenderá constituido el sindicato por


tiempo indeterminado;

V. Condiciones de admisión de miembros;

VI. Obligaciones de derechos de los asociados;

Vil. Motivos y procedimientos de expulsión y correcciones disciplinarias. En los casos de


expulsión se observarán las normas siguientes;

a) La asamblea de trabajadores se reunirá para el sólo efecto de conocer de la expulsión.

b) Cuando se trate de sindicatos integrados por secciones, el procedimiento de expulsión


se llevará a cabo ante la asamblea de la sección correspondiente, pero el acuerdo de
expulsión deberá someterse a la decisión de los trabajadores de cada una de las
secciones que integren el sindicato,

c)El trabajador afectado será oído en defensa, de conformidad con las disposiciones
contenidas en los estatutos.

d)La asamblea conocerá de las pruebas que sirvan de base al procedimiento y de las que
ofrezca el afectado,

e)Los trabajadores no podrán hacerse representar ni emitir su voto por escrito.

f) La expulsión deberá ser aprobada por mayoría de las dos terceras partes del total de los

269
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

miembros del sindicato.

g)La expulsión sólo podrá decretarse por los casos expresamente consignados en los
estatutos, debidamente comprobados y exactamente aplicables al caso.

VIII. Forma de convocar a la asamblea, época de celebración de las ordinarias y quorum


requerido para sesionar. En el caso de que la directiva no convoque oportunamente a las
asambleas previstas en los estatutos, los trabajadores que representen el treinta y tres
por ciento del total de los miembros del sindicato o de la sección, por lo menos, podrán
solicitar de la directiva que convoque a la asamblea, y si no lo hace dentro de un término
de diez días, podrán los solicitantes hacer la convocatoria, en cuyo caso, para que la
asamblea pueda sesionar y adoptar resoluciones, se requiere que concurran las dos
terceras partes del total de los miembros del sindicato o de la sección.

Las resoluciones deberán adoptarse por el cincuenta y uno por ciento del total de los
miembros del sindicato o de la sección, por lo menos;

IX.Procedimiento para la elección de la directiva y número de sus miembros;

X. Periodo de duración de la directiva;

XI. Normas para la administración, adquisición y disposición de los bienes, patrimonio del
sindicato;

XII.Forma de pago y monto de las cuotas sindicales;

XIII.Época de presentación de cuentas;

XIV.Normas para la liquidación del patrimonio sindical, y

XV.Las demás normas que apruebe la asamblea."

La fracción X nos resulta un tanto incompleta, si atendemos que para el mejor


funcionamiento, sería preciso manejar el tiempo de duración del periodo, proponiendo que
quedase la fracción de la manera siguiente:

"X. Los cargos de dirección no podrán ser ejercidos por un tiempo mayor a tres años y no
existirá la reelección."

Creemos con esto mejorar la calidad del tiempo de funciones, en que dure la directiva en
el cargo como representante sindical, obteniendo así un instrumento útil para evitar lo que
ya se ha comentado y que se presenta día tras día en muchos sindicatos - Autoritarismo y
Demagogia -.

270
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Analizando de igual manera la última fracción del artículo que nos ocupa, el cual nos dice:
"XV. Las demás normas que apruebe la asamblea"; podemos proponer una modificación
en cuanto a concretar esa norma manejándolas como obligatorias para todos. Esto es en
razón de que tales normas son emanadas de los acuerdos aprobados por la Asamblea, y
no que quedasen al margen.

Al concretar las normas que creemos indispensables para mejorar el manejo en los
sindicatos, hacemos la propuesta de la siguiente manera:

"XV. Las normas obligatorias para todo sindicato son:

-establecer cláusulas donde los miembros tengan libertad de participación en la


aportación de ideas, para la redacción de sus estatutos.

-especificar las condiciones laborales para todo trabajador dependiendo de sus funciones.

-fijar propósitos viables para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores
miembros del sindicato.

-defender los intereses que conformen la esencia del sindicato. Considerando de suma
importancia:

-condicionar al pleno goce de sus derechos civiles, el cargo de representante,

-implantar cursos de conocimientos jurídicos y demás que se consideren convenientes a


los representantes, tomar parte en la inspección del trabajo, para que se rindan cuentas
detalladas y comprobadas,

-participar en el control de designación de cargos,

-determinar el tiempo de duración específico para cada cargo,

-insertar un sistema conciliador en caso de conflictos por intereses, entre miembros y


representantes,

-hacer ineficaz la acción que haya comprometido al sindicato, más allá de la voluntad de
los miembros,

-y marcar la incapacidad del dirigente infractor, para desempeñar cargos similares en un


futuro."

Lo que nos hizo argumentar todo lo anterior, es precisamente que nunca se han hecho
valer las propuestas reales de los miembros de un sindicato, tan solo aquellas emanadas
por los líderes o por marcados miembros que las hacen aplicables a todos ellos.

271
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Si el trabajador cuenta con mejores condiciones de vida, se tendrá mejor resultado y


rendimiento en el trabajo que desempeñen, que en su conjunto se verá reflejado ya a
nivel empresa. Los sindicalizados ya no deben permitir abusos por parte de quienes los
dirigen, porque si bien es cierto que éstos son la cabeza, también es cierto que sin los
demás integrantes del cuerpo no se tendría esa fuerza, fuerza que sólo se logra a través
de un sindicato.

En concreto siendo la asamblea el órgano constituyente del sindicato, ésta tendrá a su


cargo el tomar toda resolución, designar a sus colaboradores, conocer de faltas e imponer
sanciones, ya que funge como órgano legislativo y en él se concentran todas estas tareas.

4.1.4 La Comisión interna dentro del sindicato.

Es prioridad la creación de una comisión, ya que nos encontramos día a día que en la
mayoría de los sindicatos lo que más se maneja, son intereses personales sin que importe
mucho la situación del sindicalizado, que como sabemos es el trabajador a quien no sólo
se le afecta a nivel personal y laboral, sino además que todo este embrollo recae en su
familia.

Por lo anterior, es nuestro deseo contribuir con éstas ideas que nos parecen prosperaría
el nivel de vida, de quienes poseen la fuerza real de nuestro país, con percepciones de no
abusos, no robos, no demagogia, no negligencia y no desinterés.

Podemos aducir diversas razones para explicar la incapacidad de ciertos órganos de


dirección de las asociaciones sindicales. Algunas veces la ambición desmedida ya sea
económica o política de los dirigentes o representantes de dichas asociaciones, otras los
métodos inestables y autoritarios de administrar los asuntos del sindicato. También ocurre
que se realicen cambios de representantes, en los cuales no se consulta a los
trabajadores y han sido los últimos en enterarse.

El desarrollo sindical muestra dirigentes que se agrupan en torno a un caudillo, de quien


esperan favores personales a cambio del apoyo que le brindan, utilizando la fuerza del
sindicato al cual dirigen, cuyo papel es tan importante que hace que su existencia interese
en todos los aspectos de la vida nacional.

Dicha conducta hace que la vida sindical se mueva por cauces ficticios de tal forma que la
fuerza real que podría representar, se reduce a negociaciones personales traducidas a
corrupción y a un foco central con matices fraudulentos. Fundamental es en todo
sindicato, el papel que desempeña la persona física que lo dirige y representa, ya que de

272
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

su conducta depende el buen funcionamiento de la organización y el cumplir con sus fines


originales.

"SINDICATOS, COALICIÓN ENTRE PATRÓN Y TRABAJADORES. No debe admitirse


que, bajo la apariencia de sindicatos de trabajadores que pugnan por los intereses de su
clase, existan organizaciones de trabajadores que olvidándose de ésos intereses de
clase, se coaliguen con el patrón en defensa de los intereses de éste, y de esta manera,
dejen de cumplir con la finalidad esencial que exige la ley para la existencia de un
sindicato, razón por la que cuando tal cosa ocurra, debe aplicarse lo preceptuado por el
artículo 244, fracción II, de la Ley Federal del Trabajo, según el cual el registro de un
sindicato se cancelará cuando deje de tener los requisitos que la Ley señala, debiendo
interpretarse esto en el sentido de que esos requisitos no están constituidos solo por los
que el artículo 242 de la Ley Laboral exige, sino también por el relativo a que la
organización tenga como objeto el mejoramiento de los agremiados. Como esto último,
evidentemente, no puede lograrlo una agrupación en la que no todos sus miembros tienen
la calidad de trabajadores, tiene que concluirse que un sindicato donde no todos los
agremiados son asalariados y, por añadidura, forman parte de ella elementos
pertenecientes a la clase patronal, no puede considerarse como un sindicato de
trabajadores en los términos de los artículos 232 y 233 de la Ley Laboral."243

Amparo directo 3706/62. Sindicato de Choferes y Similares del Estado de México. 20 de


junio de 1963. 5 votos. Ponente: Ángel Carvajal.

El problema de las sanciones por irregularidades, constituye uno de los más complicados,
pues la realización de una acción eficaz se ve imposibilitada por apoyo de las autoridades
con los que cuentan muchos de los infractores, más sin en cambio se actúa con celeridad
en contra de los trabajadores ante las demandas en su contra.

Sucede que siempre sale beneficiado el representante, el poder sancionador debe ser
ejercido en forma enérgica, pues es necesario buscar la conciliación democrática que
represente una garantía de justicia, tomando en cuenta que los intereses comprometidos
en la lucha obrera tienen una relación directa con la vida social y política de un país.

Sabemos que en ocasiones los representantes carecen de conocimientos jurídicos


básicos, les falta conciencia de clase, hacen negociaciones en donde entregan las causas
de sus representados sacrificando el interés de los mismos.

243
Instancia: Cuarta Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación, Época. 6ª, Volumen: LXXII, Página:
22

273
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En cuanto a niveles laborales, siempre el representante patronal tendrá una amplia


preparación, en cambio los representantes del trabajador, presentan muy pocos
conocimientos. Creemos indispensables que quienes representen a éstos últimos sean
conocedores, mínimo de la legislación laboral.

Lamentable es que algunos sindicatos, que se supone luchan por sus intereses de clase
trabajadora, escatimen el goce de los derechos fundamentales. Si es inhumano que lo
haga un patrón, mucho más lo será si es el propio sindicato.

Podríamos cimentar el progreso de los sindicatos ante el Gobierno, en el respeto a la


autonomía de la figura del sindicato. Consideramos que de ninguna manera la solución es
eliminar la intervención que se tiene por parte del Gobierno. Hoy en día pareciera que los
trabajadores seguros están de tener un futuro incierto, con tan sólo unirse a un sindicato,
que disfraza su entrega total por un sin fin de abusos.'

Las organizaciones sociales están obligadas a adoptar las medidas que permitan
incorporarlas a la realidad. Los sindicatos se cuentan entre las principales organizaciones
de la sociedad, por lo que no pueden sustraerse de los nuevos vientos que recorren al
México actual. La situación socio - política del país, sorprende la figura del sindicato en
una severa crisis de funcionalidad y representatividad, agobiado por la dispersión que
dificulta su constitución.

En la Ley Federal del Trabajo, Titulo Séptimo, Capítulo II, tenemos al artículo 377 con tres
obligaciones de los sindicatos, para las autoridades. Dicho artículo establece:

"ARTICULO 377,-Son obligaciones de los sindicatos:

I. Proporcionar los informes que les soliciten las autoridades del trabajo, siempre que se
refieran exclusivamente a su actuación como sindicatos;

II. Comunicar a la autoridad ante la que estén registrados, dentro de un término de diez
días, los cambios de su directiva y las modificaciones de los estatutos, acompañando por
duplicado copia autorizada de las actas respectivas,

III.Informar a la misma autoridad cada tres meses, por lo menos, de las altas y bajas de
sus miembros."

Nuestra propuesta es incrustar sólo una obligación, ya no dirigida hacia las autoridades,
sino como una responsabilidad para con sus miembros. Ya sea como un artículo
consecutivo, ó anexándolo a ese mismo artículo en una cuarta y última fracción, diciendo:"

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Establecer una comisión con carácter de auditor interno, que conozca toda actuación del
sindicato."

Se ha impulsado un movimiento con el fin de transformar y cambiar la concepción que se


tiene del sindicato en general, y borrar la idea que se tiene de sinónimo de corrupción,
aunque admitimos que en varios casos los dirigentes sindicales han desvirtuado su papel
y sus funciones arrastrando a sus organizaciones sindicales.

La esencia original del movimiento sindical no tiene más que un objetivo, la defensa de los
intereses legítimos de los trabajadores. Y el objetivo principal que tenemos es conquistar
las mejores condiciones en materia laboral, además de lograr la efectiva participación de
los trabajadores en la elección de sus dirigentes.

El sindicato, ante la nación debe ser el espacio de debate para dar respuesta oportuna a
los planteamientos de sus miembros, además tomando en cuenta los patronales y
gubernamentales. Participan también en la elaboración del Derecho Laboral, por cuanto
son, hasta cierto punto, los creadores de los pactos colectivos de condiciones de trabajo,
que constituyen con la ley, decretos, usos, costumbres y jurisprudencia, las fuentes
principales de aquel derecho. Además los sindicatos se proponen intervenir en forma
directa o indirecta en la administración de justicia del trabajo. Quieren participar y a veces
lo consiguen, en las funciones inspectoras relacionadas con el cumplimiento de las
normas de trabajo.

Pero la principal finalidad es la de regular el trabajo en su manifestación contractual,


considerándolo como un medio de pacificación social, como órgano para mejorar a las
clases tanto obrera como patronal y como elemento de transformación económica.

Por la transformación de las relaciones industriales, los procesos productivos, y la


necesidad del gobierno mismo de consolidar una plataforma social de apoyo, el sindicato
está nombrado a desempeñar un papel protagónico en la dualidad económico - laboral,
como de los acuerdos en materia político - sociales.

Lo que se debe lograr es que se asuma la defensa de los intereses de clases, para
presentar una propuesta atractiva, sino en función de sus organizaciones, si de una
actuación conjunta. Es indispensable aprovechar el momento político que vive el país
para buscar la unión de las distintas organizaciones de trabajadores y consolidar un frente
que reivindique al sindicato.

En materia económica, los sindicatos luchan por mantener su presencia en las áreas

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

estratégicas. La idea es revitalizar la función social del sindicato, dotándolos de mayor


autonomía con el propósito de aumentar su responsabilidad.

El líder que no representa una verdadera fuerza política, debe dejar de funcionar como el
interlocutor válido frente al Gobierno, para dar lugar a que ese vacío sea saturado con
nuevas figuras más prepositivas y con superiores márgenes de legitimidad y
representación.

Las faltas por el representante sindical, es la prueba más clara del principal problema que
afrontan este tipo de asociaciones. Lo correcto y apegado a la ley es que éste sea un
representante, un negociador, portador de la voluntad colectiva de los trabajadores y que
está obligado a actuar en forma honesta.

Las organizaciones sindicales estando integradas por individuos, lo natural consiste en


que respondan al palpitar de todos ellos, manifestación traducida en una superación
constante de mejoramiento. La disyuntiva del sindicato en México, es la de transformarse
para sobrevivir o quedar en un alto grado de indefensión preparándose para morir.
Nosotros optamos por la primera opción.

4.2 La organización y disciplina sindical.

Dentro del sindicato, constituye un elemento esencial para la adecuada realización de sus
fines. Los sindicatos independientemente del beneficio inmediato de sus miembros,
poseen fines propios, trascienden a las generaciones que los constituyen y sobre todo,
son ellos quienes luchan por la sociedad futura. Sin duda los sindicatos tienen como
sustrato a personas físicas pero sus fines son para cada trabajador, la creación de
condiciones de trabajo justas para el futuro inmediato y la preparación de un mundo cada
vez mejor.

En la historia de los sindicatos las primeras comunidades humanas que impusieron su


personalidad, hasta llegar a tener importancia en el plano jurídico.

Se puede decir que la personalidad jurídica de los sindicatos no fue una donación del
gobierno, sino un reconocimiento de una realidad social, cuyos intereses deben ser
protegidos por el orden jurídico.

En México en su legislación laboral se reconocieron a los sindicatos como representantes


de los intereses y derechos colectivos. Transformaron la huelga de simple hecho
productor de efectos, en acto jurídico, facultaron a los sindicatos mismos a solicitar de las
Juntas de Conciliación y Arbitraje fijara las condiciones colectivas de trabajo que deberían

276
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

regir en las empresas o ramas de industrias en sustitución de las contenidas en los


contratos colectivos y sujetos a revisión, y al prohibir el para empresarial, la suspensión o
terminación unilateral de los trabajos de empresa. Autorizó a los patrones, cuando
concurrieran circunstancias de fuerza mayor que lo justificaran, solicitando a las mismas
Juntas de Conciliación y Arbitraje, los autorizara a suspender o dar por terminado parcial
o totalmente sus actividades.

Los sindicatos como ya mencionamos, son comunidades creadas por grupos de


trabajadores coaligados en otras tantas asambleas constitutivas.

En dichas asambleas es la totalidad de quienes serán los miembros fundadores del


sindicato, y a su vez es la que autoriza los estatutos.

Los estatutos aprobados por la asamblea, es la norma fundamental que regirá la vida de
los sindicatos, el artículo 359 de la Ley Federal del Trabajo, faculta a los sindicatos para
redactar sus estatutos y reglamentos, elegir libremente a sus representantes, sin la
intervención ninguna autoridad y formular su programa de acción, planear su
administración.

La estructura de la comunidad sindical se compone así, la directiva está subordinada a los


estatutos y a la asamblea, y es responsable ante ésta.

La personalidad de los sindicatos nace desde su constitución y así lo establece el artículo


374 de nuestra Ley laboral e indica: "los sindicatos legalmente constituidos son personas
jurídicas".

La personalidad jurídica no es ni de Derecho Público ni de Derecho Privado. Se trata de


una personalidad social.

También mencionar que, la personalidad jurídica sindical está presente en todo momento
para actuar frente al capital y ante cualquier autoridad, en defensa de los intereses
colectivos de la comunidad obrera y en representación de cada uno de los trabajadores,
en defensa de los derechos que derivan de las relaciones individuales de trabajo.

4.2.1 Clasificación de los sindicatos.

Los aspectos de organización del sindicalismo ejercen una influencia insospechada en las
condiciones generales de existencia de los trabajadores y patrones, el artículo 357 de
nuestra Ley laboral, establece que: "los trabajadores y los patrones tienen el derecho de
constituir sindicatos sin necesidad de autorización previa".

277
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

4.2.2 Sindicatos de trabajadores y patrones.

Los sindicatos de trabajadores siguiendo el criterio de profesionalidad que no atiende sólo


a la actividad, también, al lugar en que se realiza, esto es, a la naturaleza de la empresa,
se dividen de la manera siguiente:

a) Gremiales
b) De empresa
c) Industriales
d) Nacionales de Industria
e) De oficios varios

Los sindicatos patronales aceptan igualmente una división, pero el primer criterio de
clasificación prevista en el artículo 361 fracción X de la Ley Federal del Trabajo, no se
acompaña de una denominación específica. Así se habla de "sindicatos formados por
patrones de una o varias ramas de actividades". Y en su fracción II, los sindicatos
nacionales se integran cuando los patrones realizan sus actividades en distintas entidades
federativas. El primer grupo corresponde a un concepto local de sindicatos de
trabajadores, y el segundo de patrones, precisando sus características.

a) Sindicatos gremiales.

El artículo 360 de nuestra Ley Laboral, en la fracción 3C, establece que los sindicatos
gremiales están formados por trabajadores de una misma profesión, oficio o especialidad,
independientemente de las empresas o ramas a la que pertenecen, ello supone que
comprende a trabajadores calificados, de ahí su cariz etilista y restringido.

La forma gremial del sindicalismo es el más antiguo, constituye el lazo que une al
sindicato con las viejas estructuras provenientes de la Edad Media, en el sindicato gremial
es la actividad común la que une a los hombres, pero en los términos de la Ley el
concepto supera sus limitaciones originales y comprende a todo tipo de actividades,
profesionales, oficios o especialidades.

Los sindicatos gremiales son instrumentos eficaces para trabajadores especializados y


poco numerosos, pero tienen serias desventajas, limitan la cohesión e identificación
proletaria que de manera natural tienden a formarse en los centros de trabajo, en
provecho de una conciencia gremialista correspondiente a un estudio ya superado de la
producción, en México suele constituirse las más de las veces dentro de la circunscripción
de algunas empresas, lo que refuerza su carácter de aislamiento, cuando éste no es el

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

caso y se forman con trabajadores de las fábricas donde residen sus intereses vitales,
para dispensarlos en tanto sindicatos como oficios existan.

Esta forma de sindicatos, parece la más natural, pero ha sido combatida y se le acusa de
crear división entre los trabajadores. Cada especialidad de obreros se preocupa por los
problemas particulares sin importarles los de otros. Trata de lograr las mejores
condiciones para los compañeros de la misma labor, y en ocasiones, se llega a
antagonizar con los trabajadores de otro gremio, por que resaltan la importancia del
trabajo, argumentando que su trabajo es de mejor calidad.

4.2.3 Sindicatos de Empresas, ramas de la industria.

La trayectoria de la organización de los trabajadores está íntimamente ligada al desarrollo


histórico de producción se puede decir que la forma como una sociedad produce sus
bienes necesarios, determinan la forma de cómo los trabajadores se organizan para
defender sus intereses.

Así podemos mencionar que los trabajadores se han transformado constantemente, así
tenemos al movimiento ludista de ahí se pasaron a mutualista, después al cooperativismo,
de esta etapa, a las masas de resistencia y de ahí a las ligas de trabajadores, más
adelante se crearon las uniones según el oficio, es decir por tos gremios y finalmente, la
formación de todos los trabajadores que laboran en un centro de trabajo,
independientemente del oficio que desempeñen.

En la legislación laboral mexicana en su artículo 1° 360, fracción II precisa que los


sindicatos de empresa, son formados, "por trabajadores que presten sus servicios en una
misma empresa". El factor que se tiene en cuenta es solamente la adscripción a una
negociación.

El sindicato de empresa como forma primaria de organización puede recuperar, sí existen


las condiciones, el sentido inicial de la unión de los trabajadores, en suma, el sentido de
empresa puede ser una isla de democracia en el océano del sindicalismo corporativo, no
siempre ha sido una solución final, solo la conquista de un espacio de democracia primer
paso en una perspectiva de clase.

Se puede decir que los sindicatos de empresa en nuestro país reflejan dos expresiones
de una misma realidad. Por una parte, los afiliados en conjunto suman una cantidad digna
de tomarse en cuenta desde un punto de vista político, para algunas centrales sindicales
este tipo de organización es su base. Y por el otro aspecto, el factor geográfico, la

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

diversidad organizativa y el reducido impacto económico de muchos de ellos, los han


relegado políticamente, por tal razón los trabajadores aluden a este tipo de organización
tratan un aspecto concreto, generalmente la lucha por la democracia sindical.

La Ley establece en su artículo 360, fracción II, que el sindicato de empresa está
constituido por trabajadores que prestan sus servicios en una misma empresa. Por lo
consiguiente los integrantes del Comité Ejecutivo y Comisiones tienen que ser
trabajadores de la misma empresa, por ello cuando un patrón negocia el contrato
colectivo con un sindicato de empresa debe de hacerlo con el comité Ejecutivo, formado
por trabajadores de la misma.

Referente a la elección del Comité Ejecutivo de un sindicato de empresa, pueden


participar únicamente los trabajadores que laboran en ella. Otras de las características de
un sindicato de empresa es la negociación colectiva, actividad que requiere
necesariamente del conocimiento de cuestiones técnicas indispensables, así como el
manejo de la Ley respectiva, la información acerca de los aumentos salariales que en el
mercado se está obteniendo, el conocimiento de la capacidad económica de la empresa,
la ubicación de esta última en relación con las otras empresas de su misma rama, y sobre
todo percibir la disposición de los trabajadores para apoyar el pliego de peticiones, son
algunos puntos que deben de ser manejados al efectuar una negociación.

Se tiene la idea bastante difundida respecto de que los obreros con sindicatos de
empresa no consiguen una buena revisión, las causas o motivos pueden ser: que la
mayoría de los trabajadores del comité ejecutivo, no han hecho de la diligencia sindical un
oficio o un actividad especializada, no tienen experiencia en las técnicas para negociar,
por lo consiguiente están en desventaja ante un contrincante que la mayoría de las veces
está fogueado en la actividad, la inexperiencia provoca con mucha frecuencia errores
fatales para los trabajadores, a veces es más fácil para un empresario llegar a un acuerdo
con un asesor que con los trabajadores.

El sindicato de empresa tienen más riesgos de ser una organización con poca vida
sindical, lo cual influye de manera decisiva en la revisión contractual o salarial, pues toda
revisión es un expresión de la lucha de clases y si en ésta no participan los obreros de
manera activa y no hay presión ante la patronal, las demandas serán resueltas en su
mínima expresión. En tales condiciones, un dirigente que no es expresión de un
movimiento democrático se concreta a informarle a las bases los resultados de la
negociación.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En términos generales se podría decir que algunos patrones prefieren resolver los
conflictos capital-trabajo sin la intervención de gente extraña a la fábrica para este tipo de
empresarios, la relación ideal entre obreros y patrones sólo es posible si existe una
estrecha vinculación de ambos, por ello promueven la idea de concebir a la fábrica como
un núcleo familiar en donde la revisión salarial o problema laboral se resuelve mejor con
la participación exclusiva de los afectados con el fin de que todo quede en los límites de la
fábrica, todo esto eminentemente ideológico y ha sido muy bien manejado e
implementando en algunas empresas, no sería exagerado decir que esta relación
personal ha desempeñado una importante papel en la idea que el obrero tiene del
empresario. De esta forma de persuasión ideológica, aunada al pago de salarios por
encima de la media nacional y prestaciones casi excepcionales, ha hecho que los obreros
de dichas empresas rechacen la intervención de extraños en los conflictos y los vean
realmente como elementos de intromisión, incluso desde el punto de vista económico no
coinciden que la gente ajena a la empresa disponga de un porcentaje o una cuota por su
intervención en la negociación.

En esta relación tan familiar, los obreros se sienten privilegiados, por el trato recibido por
parte de los patronos.

Por otro lado, al sindicato de la empresa se le ve como una organización inestable para el
capital y peligrosa para el trabajo. Por considerar que las repercusiones afectan por igual
a los dos factores de la producción, se puede decir de una serie de normas que ambas
partes deberán cumplir como condición para que la empresa exista. Es necesario que
sindicato y empresa, además de cumplir con lo estipulado, tenga un clima de relaciones si
no cordiales por lo menos de un no enfrenta miento constante, de esto la parte patronal
comprende mejor la necesidad de tener buenas relaciones con su contrario, sabe que de
ello dependerá en gran medida el éxito de su empresa. Con toda seguridad producirá en
mejores condiciones que si opta por imponer una relación tirante con el sindicato.

En el sindicato de empresas se tiene una representación más directa de los trabajadores,


debido a que está integrado exclusivamente por los obreros de un centro de trabajo, dicha
representación solamente recaerá en quienes laboran en él.

En (as empresas medianas pueden tener una mejor identificación entre los dirigente y los
dirigidos. En este tipo de organizaciones es menos factible la profesionalización de la
diligencia sindical, por lo que los elegidos buscarán actuar, en la medida de sus
posibilidades cerca de sus trabajadores que es su base esencial de apoyo.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En la actualidad algunos sindicatos de empresa han contribuido a mantener separadas las


luchas de la clase trabajadora, es decir, la estructura misma de los sindicatos de empresa,
es la que facilita la tendencia a no rebasar los límites del centro laboral, pues para ello la
fábrica o empresa donde trabajan es su mundo, el principio y el fin de su lucha.

Cabe precisar que la falta de integración de muchos sindicatos no se debe solamente al


tipo de organización que tienen, en última instancia tal fenómeno es producto del atraso,
del movimiento sindical en su conjunto, hay excepciones como en el caso del sindicato de
ferrocarrileros, telefonistas, electricistas, por mencionar algunos.

Los Sindicatos de empresa que han llevado a cabo una lucha por separarse de líderes
charros o centrales colaboracionistas, una vez que lo logran y se vuelven independientes
no solamente de los charros, incluso de la clase trabajadora, y al no establecer ningún
vínculo con otras organizaciones trae como consecuencia, no obtener reivindicaciones ya
logradas por otros sectores, con esta actitud los más beneficiados son los patrones, y no
hay avance político ni ideológico por consecuencia estas limitaciones perjudican al
momento de negociar la venta de la fuerza de trabajo.

Sin duda alguna las relaciones capital-trabajo, es una problemática compleja que requiere
de una capacidad excepcional y de un trabajo en equipo.

A manera de conclusión, podemos decir que la celebración de una negociación en un


sindicato de empresa, existe la posibilidad de una mayor participación de los trabajadores
de base, y ellos son los que deciden su destino laboral.

Sindicatos de industrias

En cuanto al sindicato de industria, el artículo 360, fracción III, establece que son "los
formados por trabajadores que prestan sus servicios en dos o más empresas de la misma
rama industrial".

El factor que aglutina es la actividad empresarial, surge así el concepto de rama


industrial, que por cierta razón omite precisar.

Ahora bien, lo común es una actividad que puede referirse a distintas cosas, a la materia
prima, a las instalaciones, a la especialidad de los trabajadores, al tipo de organización, al
producto final, a sus canales de distribución. El sindicato industrial presenta sin duda,
ventajas considerables, expresan una unión externa que amplía la fuerza obrera.

Puede afirmarse que constituye un verdadero sindicato clasista, por otra parte, corren el

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

riesgo los trabajadores que ingresen a ellos, de ser gobernados desde fuera, sin
contemplar realmente el interés específico de los obreros de una determinada empresa.

En el sindicato industrial donde la depuración debe de ser más rigurosa. Sus dirigentes,
ajenos a las grandes decisiones políticas de las centrales obreras, cumplen su función,
por regla general, arreglando conflictos con ventajas económicas personales y a espaldas
de sus representados, todo ello generado por que no existe una comunicación y
coordinados de los mismos.

Sindicatos Nacionales de Industria.

El artículo 360, fracción IV, de nuestra Ley laboral indica que los sindicatos "nacionales de
industria, son los formados por trabajadores que prestan sus servicios en una o varias
empresas de la misma rama industrial instaladas en dos o más Entidades Federativas".

En cuanto a la esencia de los sindicatos nacionales de industria tienen características


semejantes a los industriales, sin embargo, su jerarquía es mayor y constituyen el peldaño
inmediato inferior a las federaciones, en ocasiones las superan para convertirse, por si
misma, en unidades confederadas. Así, los estatutos de la CTM artículo cuarto señala
que, se estructurará para los efectos legales y de su régimen interno de la manera
siguiente.

I. Por federaciones locales, estatales y regionales. III. Por sindicatos regionales y


nacionales de industria.

La contratación colectiva en los sindicatos nacionales de industria se suscriben entre un


solo sindicato y varias empresas, también se da el caso de suscribir el contrato entre un
solo sindicato y una sola empresa gigantesca, con varias plantas en la República. La
aspiración más evidente de un sindicato nacional de industria es llegar a pactar un solo
contrato con todas las empresas de la rama.

Los sindicatos nacionales existentes en varias ramas productivas. Poseen un espacio


bastante amplío entre la fuerza sindical y la patronal, implica una organización social
distribuida en varios estados de la República ya que las secciones sindicales se
encuentran en numerosos puntos del territorio mexicano. La estructura del sindicato
nacional de industria aplica la posibilidad de superar con toda amplitud las lucha s
aisladas o locales, la misma estructura de estos sindicatos posibilita la formación de
corrientes sindicales en el conjunto del país y fortalece el juego de corrientes sindicales en
su interior, se da la posibilidad de ligarse más fácilmente al movimiento social existente en

283
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

otras ramas y al movimiento obrero en su conjunto. Los sindicatos nacionales de industria


por su estructura, sus fines, su capacidad de acción, planta la posibilidad de establecer
alianzas con los partidos políticos, con el estado y con las demás fuerzas sociales que
constituyen la estructura social mexicana.

Los sindicatos nacionales de industria se comprenden globalmente como una forma de


representación obrera ante las empresas y las instituciones políticas, de manera más
amplía. Se conciben como de los más avanzados medios o instrumentos de que disponen
los trabajadores para asumir una presencia organizada en el conjunto de la sociedad,
también son considerados como medio de expresión y combate de núcleos
fundamentales de la clase obrera mexicana, finalmente se conciben como mecanismos
que permiten a los obreros reconocer su situación social ante las demás clases en el
complejo de relaciones que constituyen la sociedad y el Estado en México.

En su aspecto más general los sindicatos nacionales de industria son producto de la lucha
social de los trabajadores mexicanos, son mecanismos de articulaciones de los
asalariados por rama económica, son medios organizativos para cohesionar a conjuntos
fundamentales de la clase obrera y para establecer relaciones con otras clases sociales y
el Estado. Por otro lado, los sindicatos nacionales constituyen un medio de educación
sindical, social y política de los trabajadores, las luchas por rama de actividades forman la
base de su educación sindical y social, luchas que son determinadas por las relaciones
existentes entre las clases mismas.

Por consiguiente, los sindicatos nacionales de industria desempeña un papel central en el


espacio socio político de la lucha entre las clases y, por lo mismo, constituyen un
excelente medio de aprendizaje para la lucha social y política.

Los sindicatos nacionales son aquellas organizaciones que aglutinan a los trabajadores
del conjunto de una rama industrial, tienen corno base las secciones establecidas por
cada centro de trabajo o región en la misma rama industrial.

La situación interna de los sindicatos nacionales puede ser flexible o rígida, dependiendo
de quienes están en la dirección general y la política que desarrollen, dependen también
de los procesos democráticos locales y la relación con los órganos centrales del sindicato.

Los sindicatos nacionales están ubicados en los principales sectores económicos, como
son: extractivos, manufacturero, servidos y agrario. Desde otro punto de vista,
considerando la estructura jurídico-político del trabajo en México, los sindicatos

284
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

nacionales de industria se pueden ubicar en el espacio establecido por los apartados A y


B del artículo 123 Constitucional, el primer apartado corresponde a los trabajadores que
laboran para empresas privadas y se rigen por la Ley laboral vigente al apartado B
corresponde los trabajadores de empresas públicas, de organismos descentralizados y de
los poderes públicos rigiéndose por la Ley Federal de los trabajadores al servicio del
Estado. En los espacios marcados por ambos apartados se localizan los sindicatos
nacionales representativos, desde los conservadores hasta los más combativos.

En la Ley federal del trabajo en su artículo 360, fracción III, como ya lo comentamos, se
proporcionan la definición jurídica más difundida y aceptada por los sindicatos nacionales
de industria, de acuerdo a la definición y a la práctica social es posible recoger dos
variantes de estos sindicatos: los nacionales de empresa y los nacionales de rama. Los
apartados constitucionales reconocen y garantizan los derechos obreros más
elementales, sin embargo, es idea generalizada que la reglamentación del apartado B es
más restrictiva que la del apartado A, especialmente en el ejercicio de huelga.

Para el caso de los sindicatos nacionales, el ejercicio pleno del derecho de huelga en
todas las empresas e instituciones del Estado es un punto de primer orden.

"La primera convocatoria para una asamblea revolucionaria nacional del proletario
mexicano así denominó el veinte de noviembre de 1965 por veintisiete Federaciones y
sindicatos obreros incluyéndose la Federación de sindicatos al servicio del estado a pesar
de no ser sector obrero del partido sino del llamado sector popular".244

La idea principal era crear un clima de unidad, eliminar conflictos personales entre líderes
obreros y destacar las ventajas que resultaría de esta unidad, a nivel demandas
reivindicativas y los conflictos laborales.

En el mes de febrero de 1966 promovido por el partido oficial y aprobado por Gustavo
Díaz Ordaz surge el Congreso del Trabajo, su lema fue la Unidad y Justicia social.
Estableció su cede en la ciudad de México.

Con la formación del C. T., desaparecieron organizaciones como el Bloque de Unidad


Obrera B.U.O., y la Central Nacional de Trabajadores, C.N.T., DIRIGIDA POR Fidel
Velázquez y Rafael Galván respectivamente.

A fines de los años 70', se modificó el Congreso del Trabajo, y quedó como la máxima

244
Reina José Luis y/o. Tres estudios sobre el movimiento obrero en México, edit. Jornada 80 Colegio de
México, 1989, página 75.

285
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

instancia de coordinación y organización del sindicalismo oficial.

El congreso del Trabajo es una organización coordinadora de las treinta y tres


organizaciones obreras y sindicatos que se congregan en su seno.

Es un foro que sirve para discutir asuntos de las diversas organizaciones obreras que la
conforman.

El C.T., realiza el papel de interlocutor válido entre la clase trabajadora organizada y el


gobierno, en la discusión de las políticas económicas como son, los topes salariales y
disposiciones económicas, que son aceptadas en su mayoría por las organizaciones que
lo integran.

En el C.T., encontramos aglutinados, grandes y pequeñas centrales y organismos de


trabajo del sector servicios.

La máxima instancia de dirección del C.T., es la Asamblea Nacional o Gremial y los


sindicatos nacionales.

La Asamblea Nacional del C.T., se reúne cada cuatro años a excepción de las Asambleas
Extraordinarias convocadas por el Consejo Nacional.

El Consejo Nacional está integrado por el Comité Ejecutivo de todos los grupos
representados por el C.T., cada organización tiene un voto dentro del Consejo, el cual se
reúne cada seis meses principalmente para definir los procedimientos de elección de
representantes para el Comité y el subcomité.

El Congreso del Trabajo es la organización más grande que el movimiento obrero


mexicano ha tenido, un intento por unificar relativamente a la clase obrera.

"El Congreso del Trabajo ha subordinado y subordina hoy en día sus formas de
organización y de lucha a lo que denomina interés nacional".245

Desafortunadamente ésta situación ha prevalecido hasta nuestros días. Definitivamente el


aparato gubernamental en turno, la representación obrera oficial y el sector económico y
político se unen para evitar que los trabajadores mexicanos tengan una vida digna y de
progreso. Tanto en lo individual como en sus organizaciones sindicales.

Los sindicatos nacionales afiliados al Congreso del Trabajo son principalmente:

1. Sindicatos de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana.


245
Silva Gilberto Y/o Hacia la Constitución de la Central Única de Trabajadores, editorial G.V., Instituto de
Investigaciones Económicas. México 1986. Página 66.

286
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

2. Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la


República Mexicana.

3. Sindicato Mexicano de Electricistas.

4. Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.

5. Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana.

6. Sindicato Nacional de Trabajadores de la educación.

7. Sindicato de Trabajadores de la Producción Cinematográfica de la República


Mexicana.

8. Sindicato de Trabajadores Técnicos y Manuales de los Estudios y Laboratorios de la


Producción Cinematográfica.

9. Asociación Nacional de Actores.

10. Asociación Sindical de Pilotos y Aviadores.

11. Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación.

12. Asociación Sindical de Ingenieros de Vuelo.

13. Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Nuclear.

En estos sindicatos nacionales, su fuerza social y política radica en la medida que


agrupan a trabajadores de áreas estratégicas y servicios fundamentales.

Observándoles bien, las primeras seis organizaciones son los mejores ejemplos de los
sindicatos nacionales, agrupan a los núcleos fundamentales de trabajadores de una rama.
Las seis siguientes son casos en que formalmente mantienen una estructura de sindicatos
nacionales, pero en la práctica, vienen a constituir organizaciones de tipo gremial. De
todos los sindicatos afiliados al Congreso del Trabajo, el Sindicato Único de Trabajadores
de la Industria Nuclear, el Sindicato Mexicano de Electricistas y el Sindicato de
Telefonistas, son tres los sindicatos que más frecuentemente promueven discusiones
sobre los problemas globales del país y constituyen un puente político entre las
organizaciones insurgentes y las-oficiales.

El Sindicato Único de Trabajadores de la Industrial Nuclear el Sindicato Mexicano de


Electricistas y el sindicato de Telefonistas no pertenecen a la C.T.M. u otra central obrera,
tampoco acepta, por sus estatutos, la afiliación forzosa a los partidos políticos, sin
embargo, el Congreso del Trabajo ha ramificado en sus asambleas (1966 y 1978) y en

287
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sus reuniones periódicas que todos sus miembros tienen la obligación de afiliarse al PRI.

"Por el contrario parte está el Sindicato Único de Trabajadores electricistas de la


República Mexicana quien en su asamblea celebrada a fines de 1980, incorporó en sus
estatutos una cláusula donde se establece que sus afiliados pertenecen obligatoriamente
al PRI."246

Las siete organizaciones restantes del Congreso son, en gran medida, de orden nacional
gremial, Unión Litográfica de la República Mexicana, Alianza de Tranviarios de México,
Alianza de Uniones y Sindicatos de Artes Gráficas. Sindicato Industrial de Trabajadores
del Ramo de la Lana y Conexos, Sindicato de Trabajadores de Publicaciones Herrerías,
Liga Autónoma de Trabajadores Marítimos y Conexos del Puerto de Veracruz y la
Asociación de Supervivientes de la Casa del Obrero Mundial, estas organizaciones tienen
grupos de trabajos que están conscientes de su labor social, respecto a defender el
derecho de sus corporaciones.

La composición del Congreso conduce a algunas observaciones. La primera, la existencia


de dos pilares que sostienen la inmensa estructura; las confederaciones por un lado y los
sindicatos nacionales de industria por el otro, la vida social y política del Congreso
descansa en el juego, en las relaciones creadas entre estas dos columnas, quienes toman
acuerdos que son decisivos.

En el análisis de cada central en particular también sobresale la presencia de los


sindicatos nacionales. La confederación de Trabajadores de México está formada por
federaciones estatales, federaciones por rama y por sindicatos nacionales de industria; las
primeras se forman en cada entidad del país, las segundas son como las federaciones
femenil y juvenil. También la C.T.M. está constituida por sindicatos nacionales que un
número de 31 corresponden a otras tantas ramas de actividad. En la C.T.M. se tiene que
las federaciones constituyen las estructuras principales.

Los sindicatos nacionales que respaldan a dicha organización, son del área de
energéticos y sus derivados.

1. Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana

2. Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana.

3. Sindicato de Trabajadores de la Industria Química, Petroquímica, Carboquímica y

246
LEAL, Felipe Juan y/o Organización y sindicalismo, edit. Siglo XXI, México, 1985, pág. 24

288
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Similares de la República Mexicana

Los dos primeros sindicatos tienen una importancia fundamental en la C.T.M. ya que los
trabajadores organizados en ramas depende en gran medida del conjunto de la actividad
económica social del país. El tercer sindicato engloba obreros cuya actividad es esencial
en la transformación de productos naturales para el uso y provecho de diversas ramas de
la industria manufacturera, son los tres sindicatos con mayor presencia político-social en
el interior de la C.T.M. los dos primeros con una trayectoria de varios lustros en las luchas
obreras, el tercero, con menos actividad en la historia, tiene amplias perspectivas de
incrementar su presencia y actividad.

La C.T.M. También cuenta con sindicatos nacionales en la industria manufacturera y


corresponden a las ramas más importantes conviene destacar algunas de ellas:

1. Sindicato Nacional de la Industria Azucarera y similares de la República Mexicana.

2. Sindicato Nacional de la Industria Aceitera. Jabonera, Oliogenosas, despepitadora,


Compresoras de Algodón, Insecticidas similares y conexos de la República Mexicana.

3. Sindicato Único de Trabajadores de la Industria de la carne.

4. Sindicato de Trabajadores de la Industria láctea, similares y Conexos de la República


Mexicana.

5. Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria de productos alimenticios


Envasados.

6. Sindicato de Trabajadores de la Industria Embotelladora de Aguas Gaseosas y


similares de la República Mexicana.

Estos sindicatos corresponden a ramas fundamentales de la Industria alimentaria donde


se producen artículos de consumo generalizado. Desde un punto de vista social estos
sindicatos son decisivos para mantener incrementar o disminuir los productos alimenticios
que se consumen en México, desde el punto de vista los fondos sindicales que manejan.
Los sindicatos de la industria azucarera e industria de la carne son quienes hacen
ostentación de sus contribuyentes a la C.T.M. y a organismos como el Banco OBRERO,
aún cuando jurídicamente son sindicatos nacionales, no han alcanzado la actividad social
y política reiterada como en los sindicatos de mineros ferrocarrileros.

La forma jurídica del sindicato nacional de industria no basta para que se constituyan
como tales, es necesario que los obreros se organicen en poderosas fuerzas sindicales,

289
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

para ello es necesario que los trabajadores de una rama se cohesiones y luchen como un
ejército, en secciones en toda la amplitud del país. Así es la estructura y funcionamiento
de la C.T.M.

Si comparamos a los sindicatos nacionales de industria con el de empresa, de oficios


varios, gremiales e industriales, evidentemente son pequeños, pero unidos todos, su
presencia política se deja percibir en el conjunto del movimiento obrero, con una fuerza
incomparable mayor que la ejercida por los sindicatos antes mencionados.

Por otro lado, hay sindicatos nacionales que no forman parte de las estructuras oficiales,
estos sindicatos luchan y funcionan como mecanismos que permiten con mayor fuerza
defender los derechos de los obreros, órganos de lucha que garantizan la continuidad y la
política de las corrientes autónomas. Está el caso del Sindicato Nacional de Trabajadores
de la Industria del Hierro y el Acero SNTTHA que agrupa a trabajadores de varias
empresas de la rama como son: Mexicana de Envases Seal Power, Ersa Cortinas
Excélsior, es un sindicato nacional ligado a la política del Frente Auténtico del Trabajo
EAT que ha influido en el movimiento sindical mexicano y particularmente en las
corrientes democráticas e independientes.

También están los sindicatos nacionales afiliados a la Unidad Obrera Independiente, UOI,
ésta corriente sindical en la que sus líderes se han distinguido por difundir y practicar un
sindicalismo sectario respecto a las demandas obreras y con posiciones de rechazo a la
presencia de comentes políticas especialmente a las organizaciones de izquierda, en
México la UOI ha logrado influenciar en varias ramas, entre ellas están: Sindicato
Nacional Independiente de Trabajadores de la Producción, Transformación y Ensambles
Metálicos Similares y Conexos, Sindicato Nacional de Trabajadores del Transporte
Similares y Conexos Ricardo Flores Magón, El organismo donde están afiliados estos
sindicatos tienen la peculiaridad de contar con otros sindicatos de empresas
correspondientes a las mismas ramas donde están afiliados los sindicatos nacionales. El
caso más notable es el sector automotriz, donde están los de Mexicana de Autobuses,
Nissan Mexicana y Volkswagen de México.

Los sindicatos nacionales tiene su características muy marcadas, así se puede precisar,
que es la forma de organización más utilizada por los trabajadores ubicados en ramas
estratégicas o de servicios fundamentales, como es el petróleo, electricidad, la
metalúrgica, que tienen repercusiones en el conjunto de la economía, en el medio social y
en el área de la política de servicios, transportes terrestres y aéreos, sistemas de

290
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

comunicación y en el educativo.

Respecto a la capacidad de movilizar recursos materiales y humanos a lo largo y ancho


del país le corresponde a los sindicatos nacionales una gran fuerza y mejores condiciones
para intervenir en la vida social. La magnitud de su fuerza es superior a la expresada por
los sindicatos de empresa, y confederaciones, o algunos partidos políticos opositores,
desde este punto de vista parece normal considerar que solo la C.T.M. y el P.R.l.
representan un poder superior al de los sindicatos nacionales.

Las luchas de los sindicatos nacionales han conquistado mejores condiciones de trabajo,
salarios y prestaciones relativamente superiores a las obtenidas por el conjunto de la dase
obrera.

Las luchas de los sindicatos nacionales han concluido, en ocasiones, en políticas


salariales que han beneficiado al conjunto de la clase obrera.

Estos sindicatos han propuesto se impulse la democracia sindical e independiente frente


al gobierno, la necesidad de ejercer la democracia política, una mejor distribución de la
riqueza, una política de nacionalización y la defensa de la soberanía nacional.

La fuerza de los sindicatos y sus planteamientos políticos-sindicales los han convertido en


líderes de los mayores movimientos de masas ocurridos en México.

Los movimientos más amplios e importantes, están vinculados a la actividad sindical,


tenemos los de, ferrocarrileros, mineros, de maestros y electricistas.

Los sindicatos nacionales de industria han formado fuerzas destacadas en los momentos
cruciales de la vida política mexicana, en el cardenismo, avilacamachismo, participaron
como fuerzas decisivas en el juego político nacional, en todo tiempo y en la actualidad
también.

Algunas directivas de sindicatos nacionales han planeado democratizar la vida sindical,


enfrentándose a la política del gobierno, que no está dispuesto a permitir que los
sindicatos, en particular los nacionales obtengan una vida autónoma respecto al sistema
sindical y político. Solo será posible dicha democratización cuando se incluyan a las
organizaciones obreras y particularmente de los sindicatos nacionales a tomar decisiones
que beneficien claramente a la clase obrera trabajadora y con ello tener un nivel de vida
digna, social, política y económicamente estable.

Los sindicatos nacionales son una forma particular de organización social que por su

291
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

cuerpo y por su vinculación con la sociedad, están llamados a desempeñar papeles de


primer orden en el presente y futuro de México.

4.3 Trabajo sindical.

4.3.1 Desempeño de los sindicatos.

El sindicato tiene como funciones principales, el mejorar las condiciones económicas del
trabajo y de salud de sus agremiados a través de la contratación colectiva que puede ser
de dos tipos:

A) Contrato-Ley

B) Contrato colectivo de trabajo.

En el artículo 386 de la Ley Federal del Trabajo, se define al contrato colectivo del Trabajo
como: " El Convenio celebrado entre uno o varios sindicatos de trabajadores y uno o
varios patrones, o uno o varios sindicatos de patrones, como objeto de establecer las
condiciones según las cuales debe presentarse el trabajo en una o más empresas o
establecimientos ".

En el artículo 387 se dice que: " El patrón que emplee trabajadores miembros de un
sindicato tendrá obligación de celebrar con éste cuando lo solicite, un contrato colectivo.

Si el patrón se niega a firmar el contrato, podrán los trabajadores ejercitar el derecho de


huelga consignado en el artículo 450: " Asimismo la Ley Federal del Trabajo define al
Contrato-Ley como un convenio celebrado entre uno o varios patrones, con objeto de
establecer las condiciones según las cuales debe prestarse el trabajo en una rama
determinada de la industria y declarado obligatorio en una o varias entidades federativas,
en una o varias zonas económicas que abarquen una o más de dichas entidades o en
todo el territorio nacional".

En el artículo 405 dicha Ley precisa que ese tipo de Contrato-Ley puede celebrarse para
industrias de jurisdicción federal o local.

Por otra parte la Ley Federal del Trabajo en su artículo 406 precisa que pueden solicitar la
celebración de un Contrato-Ley los sindicatos que representen las dos terceras partes de
los trabajadores sindicalizados por lo menos de una rama de la industria en una o más
zonas económicas que abarque una o más de dichas entidades o en todo el territorio
nacional.

Por lo tanto, la Ley Federal de Trabajo otorga como función a los sindicatos la celebración

292
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de estos tipos de contratos ya que estos representan legalmente el interés profesional de


los trabajadores.

Sin embargo se debe considerar también que organizados en diferentes etapas de


desarrollo de movimiento obrero en México, los sindicatos de burócratas, a partir del
cardenismo, han garantizado por medio de sus dirigencias el control de los trabajadores al
servicio del estado. Este control se inicia cuando el estado niega a los trabajadores al
excluirlos de la Ley Federal del trabajo, el derecho a la contratación colectiva y le restringe
el derecho de huelga a una sola causal. Con ello los sindicatos pierden los instrumentos
fundamentales para mejorar las condiciones económicas de sus afiliados. Por estas
razones entre otras, el gobierno no puede temer a una organización sindical de burócratas
que ha engendrado dirigencias sindicales profesionales, que han ejercido control sobre
las bases a través de estructuras autoritarias que concentran el poder en un reducido
grupo dirigente,

4.3.2 La Huelga como búsqueda de institucionalidad.

La huelga; se considera como un instrumento para lograr los propósitos finales del
sindicalismo. La huelga está considerada como un medio de acción directa ya que a
través de ésta se persigue la consecución de objetivos inmediatos que harán factible el
objeto final que es la libertad sindical como condición de la constitución de los sindicatos.

El derecho a la huelga es un derecho social anterior a toda regulación jurídica. En la etapa


en que el trabajo no merecía la preocupación jurídica del legislador, de manera que el
patrón, en tanto que depositario de la fuerza económica, podía decidir libremente sobre su
empresa, la huelga constituía la reacción natural, defensiva de los trabajadores, ante la
injusticia. Ello ocurre, en alguna medida en Río Blanco, en 1907, cuando los trabajadores
espontáneamente, se niegan a volver al trabajo. En otra etapa de mayor conciencia
política la huelga se convierte en una conducta activa, dinámica, que expresa no ya la
decisión de no trabajar, sino la intención de suspender el trabajo en una negociación. La
huelga de Cananea en 1906 apoyada por una organización política definida: el Flores
Magonismo, es un buen ejemplo de este tipo de huelga que en México se repite no en el
Porfirismo, sino en plena revolución el 31 de julio de 1916 provocando la ira de
Venustiano Carranza.

El derecho de huelga, al menos, en el significado que le damos, encuentra su fundamento


en la norma escrita. Deriva del conocimiento que hace el Estado de la existencia de ese
derecho social que mencionamos.

293
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La huelga es definida por varios tratadistas de la siguiente manera:

De la cueva dice.- " La huelga es el ejercicio de la facultad legal de las mayorías obreras
para suspender las labores en las empresas, para obtener el equilibrio de los derechos o
intereses colectivos de trabajadores y patrones."

Trueba Urbina opina que: "La huelga en General" "es la suspensión de labores en una
empresa o establecimiento con objeto de conseguir el equilibrio entre el capital y el
trabajo, obteniéndose un mejoramiento económico, específicamente en el contrato
colectivo de trabajo..." (Nuevo derecho. Ed. 1975 p. 368).

Néstor de Buen Lozano: la huelga es "La suspensión de labores en una empresa o


establecimiento decretada por los trabajadores, con el objeto de presionar al patrón para
la satisfacción de un interés colectivo." (Derecho del Trabajo p. 844).

Los requerimientos de Fondo y Forma los encontramos inmersos en los Art. 450 y 451 de
la Ley Federal del Trabajo los cuales en caso de su inobservancia originaria que una
huelga es tallada se declarará inexistente por la autoridad del trabajo, la cual a petición de
la parte contraria en el sentido de que no se han cumplido con los requisitos en mención,
hará la declaratoria correspondiente.

Por lo tanto se debe considerar que los requisitos establecidos en los Art. 450 y 451
vienen a darle al patrón o empresario una cierta protección en contra de aquellos
movimientos huelguísticos que tengan por objeto lesionar los intereses de este por causas
políticas o personales tanto del dirigente sindical como del mismo sindicato. Si bien es
cierto que la huelga es considerada como un medio de acción para lograr los objetivos por
los cuales se han constituido los sindicatos, también lo es que estos medios de acción de
ninguna forma deben convertirse en medios de presión injustas en contra del capital ya
que existe y debe existir entre el capital y el trabajo ya que el uno no podría subsistir sin el
otro.

Debemos hacer también una reflexión en cuanto a la mala aplicación de estos requisitos
por parte de las autoridades competentes ya que por error, corrupción o presiones
políticas se puede llegar a declarar como inexistente una huelga que en realidad no lo es,
vendría a romper en forma total con los principios derivados de la libertad sindical, la cual
no busca, sino el equilibrio total entre el capital y el trabajo.

La Huelga: defensa Fundamental del Obrero

En la Ley federal del Trabajo en su Título Octavo Art. 72 se refiere a la Huelga "es la

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

suspensión temporal del trabajo llevada a cabo por una coalición de trabajadores." Esta
constituye la principal arma y defensa que históricamente ha hecho uso el sindicalismo
mexicano; considerándose que los sindicatos son coaliciones permanentes y su carácter
de suspensión pueden abarcar una o varios establecimientos: siendo existente si persigue
como objetivo el equilibrio entre los factores de la producción y si se quiere celebrar o
revisar el contrato colectivo de trabajo o bien, el contrato Ley, Además de que se presume
de exigir el cumplimiento de tales contratos, apoyar la participación de utilidades, las
revisiones de los salarios contractuales o bien, una huelga por solidaridad.

Su declaración de ilicitud se presenta cuando las personas o las propiedades y en caso


de guerra, cuando los trabajadores pertenezca a establecimientos o servicios que
dependan del gobierno. Y se declara inexistente, cuando no persiga el objetivo que marca
el mencionado art. 450 de la L.F.T.; cuando no sea una huelga mayoritaria y cuando no
cumpla los requisitos administrativos para el procedimiento de huelga.

Las autoridades del trabajo controlan a los organismos tripartitas que sólo están de
parapeto. Como lo vienen a ser: la Secretaria del Trabajo y previsión Social las Juntas de
Conciliación y Arbitraje, Infonavit, el Tribunal Federal de Conciliación y arbitraje y demás
organismos. En donde éstos constituyen dependencias del Ejecutivo Federal. Pero para
partir del análisis es conveniente definir qué es lo que se entiende por autoridad del
trabajo.

De una manera sencilla podemos definir a las autoridades del Trabajo como aquellas que
de conformidad con la Ley, tienen la facultad de aplicar, vigilar y procurar el cumplimiento
de las normas laborales, dentro de su respectivo ámbito de competencia. (Art. 523 L.F.T.)
Los organismos que se forman de manera tripartita. Es decir participan en sus decisiones
los obreros, los patrones y el Estado. Pero ¿eso significa que las decisiones de algunos
autoridades como las de la Junta de Conciliación y Arbitraje, Infonavit, Servicio Nacional
del Empleo, la Comisión Nacional para la Participación de los Trabajadores en las
Utilidades de las empresas y demás organismos tengan vida soberana?. Porque la
soberanía radica en la voluntad de sus miembros y se realiza a través de los cuerpos
representativos que se consignen en sus propios estatutos. A su vez el Art. 3o
Constitucional considera la democracia no solamente como una estructura Jurídica y un
régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento
económico, social y cultural del pueblo. Y los hombres en el poder en lugar de hacer su
capricho, deberán ser simples ejecutores de la soberana voluntad de la base. En este

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

caso sería que estas autoridades ejecutaran únicamente la voluntad del Tripartidismo.

Parece ser que los organismos tripartidistas son de una sola decisión, el del sector
gobierno. Porque ante esta situación, con toda seguridad que ni cuentan ni aceptan la
votación del sector obrero: ya que tienen en sus manos todos los controles. Donde se
presenta un Tripartidismo antidemocrático.

Los sindicatos realizan estudios, defensas y mejoramientos de las condiciones de trabajo,


sin embargo, los estudios que estos realizan^ diré que son muy escasos, esto "representa
un mecanismo para regular las presiones y es un mecanismo para negociar las
reivindicaciones de los trabajadores. " A este Néstor de Buen afirma que los Trabajadores
no deben limitarse a formular peticiones dirigidas a la obtención de mejorar su condición,
sino que deben de perseguir los fines del sindicalismo, cualquiera que sea su tendencia.

Partiendo de la idea de que los obreros son el motor de la producción y que sin ellos
prácticamente la sociedad no puede existir, entonces la huelga mediante el paro de
actividades constituye una fuerza de la clase obrera dentro de la sociedad. Dice Severo
Iglesias que la huelga general muchas veces tiende a convertirse en una huelga política; y
la lucha política de la clase obrera general tiende a convertirse en una insurrección. La
huelga, es pues, un fenómeno social, donde puede intentar la mejoría o el cumplimiento
de las condiciones de trabajo.

En cuanto al mejoramiento diremos que en el plano laboral las experiencias principales se


refieren a luchas por salarios, por lograr contratos colectivos y enfrentar las violaciones
patronales a los mismos en contra de los despidos masivos. Así mismo por disminuir la
jornada y los ritmos de trabajo.

De todo lo anterior se deduce lo siguiente:

1- El sindicalismo mexicano y aún más los líderes obreros no se preocupan por presentar
o realizar investigaciones que tiendan a proteger, los intereses de sus agremiados. Según
datos obtenidos sólo el 0.95 por ciento del total corresponden a estudios. Bajo esta
perspectiva se puede afirmar, que urge verdaderamente, que el sindicalismo cambie su
enfoque de receptor pasiva y tienda no únicamente a aceptar beneficios sociales y
políticos que se le presenten, sino que su obligación es investigar constantemente bajo
una perspectiva de estudios, mejoramientos mediatos o inmediatos para el sector obrero.
Por lo que verdaderamente urge, que se cambie la mentalidad del líder obrero,

2.- Los mejoramientos que persigue el sindicalismo en México son verdaderamente

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

menesterosos, indigentes, según las mejoras que promueve el sindicalismo en México


sobre todo el sector burócrata estas, "son actividades sindicales que tienden a aumentar,
demandar o aceptar un nuevo salario e insistir sobre un proyecto de reducción de horas
de trabajo. " Aún bajo esta idea, las mejoras que se promueven son bien escasas, es
decir de un 100 % se presenta únicamente el 6.66 % con tendencias a mejorar salarios o
a reducir horas de trabajo.

Por otro, las característica anterior, para las centrales sometidas completamente al
gobierno, como es el caso de la C. T. M. Tema y ha tomado este hecho como una simple
presión política para aumentar su fuerza o discrepar ante alguna situación específica pero
sin autorizar que se promueva abiertamente dicha reducción de la jornada de trabajo.

En cambio los llamados sindicatos "independientes" buscan otro tiempo de mejorar en su


contratación colectiva como son : vivienda, Transporte, guardería, etc. Además son los
que han logrado una reducción en su jornada de trabajo y prestaciones que buscan
integrar su salario.

3. Lo que realiza casi como única actividad, es mantenerse a la defensiva, por medio de
paros, emplazamientos o protestas y huelgas, por cierto, estas en su generalidad se
realizan por no cumplir el contrato colectivo o violarlo y no pagar su salario pactado. Sin
embargo los empresarios Sienten que al hacer uso legal y socialmente de estas defensas
se le está agrediendo, acosando y que se le asalta en sus bienes que con "tanto esfuerzo
construyó " y así el obrero se encuentra controlado y envuelto en una protección frágil de
papel: la Huelga por ciento que las "defensas " se mantienen en más del 25 % del total de
sus reclamos. Parece ser que el sindicalismo en México lo que busca es defenderse sin
buscar reivindicaciones.

Por otro lado los trabajadores del Estado está todavía más desprotegido ya que sus
líderes pregonan los que no hacen ni harán; por ejem. "en diciembre de 1972, se anunció
la reducción de la jornada de trabajo de los empleados públicos a 40 hrs. Por semana; la
CTM (Fidel Velázquez Sánchez) desarrolló a partir de entonces una demagógica
campaña a favor de la semana de 40 hrs. Con pago de 56, minutos que no se concretizó
aún a la fecha " de 1999 con el nuevo líder a la muerte de Fidel Velázquez en Junio de
1997su sucesor "la güera" Alcaine.247

4.- En México se agudiza el fenómeno del "sindicalismo independiente" esto bien se

247
Daniel Molina, "cuadernos Políticos" Abril - Junio de 1977, tomo 12, p.71

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

puede presumir que se presenta, porque los obreros en el país buscan verdaderos líderes
sindicales que representen fielmente sus interés sindicales que representen fielmente sus
intereses gremiales. Pero de fondo se considera que es la misma situación de que el
obrero "ve" el logro de sus objetivos sindicales por el peso del control jurídico que
densamente se encuentra sobre ellos. El control jurídico no los permite lograr
reivindicaciones obreras. Por otro lado se supone que el problema no son los líderes
sindicales: antes fue Luis N. Morones, después Vicente Lombardo Toledano, Fidel
Velázquez Sánchez y actualmente desde Junio de 1997 Rodríguez Alcaine, ¿después
quién será?, los líderes cambian, lo que no cambia es el control, más bien, este se
acentúa.

Los conflictos intersindicales conlleva a la división y como mera suposición, se refiere que
la separación que se origina en algunas centrales sindicales no es ficticia, se lucha por la
división y se logra o la escisión o la depuración. Lo que no logra el sindicalismo
independiente o como se le quiera calificar sacudirse el control político que ejerce el
Estado, porque estas chocan brutalmente contra el control jurídico en México, el cual
funcionalmente es un filtro que los detiene.

Aquí la interrogante se presenta es la siguiente: ¿La separación o independencia sindical


se presenta únicamente en los sindicatos sometidos al control oficial o bien se presenta
un proceso reversible?. El supuesto que se maneja es el que; los sindicatos sometidos al
control oficial buscan regresar a sus pinzas de control a los sindicatos independientes. De
ser cierto lo anterior, debemos admitir entonces de que un sindicato independiente se
encuentra dentro de los ya independizados.

4.3.3 El Control del estado del sindicalismo.

En Estado mexicano controla el movimiento obrero, sin tener la intención de crear su


capítulo controvertido, si lo hago con la intención de analizar el intervencionismo del
Estado en la vida Sindical de nuestro País. Trataré de mencionar algunos rasgos
importantes en los cuales se presenta el fenómeno del control, represivo, manipulativo y
jurídico que ejerce el apartado gubernamental sobre el sindicalismo mexicano. Para ello
orientaremos nuestra discusión a esta interrogante primordial.

En México nos encontramos a un Estado controlado el movimiento obrero, sin tener la


intención de crear su capítulo controvertido, si lo hago con la intención de analizar el
intervencionismo del Estado en la vida Sindical de nuestro País. Trataré de mencionar
algunos rasgos importantes en los cuales se presenta el fenómeno del control, represivo,

298
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

manipulativo y jurídico que ejerce el apartado gubernamental sobre el sindicalismo


mexicano. Para ello orientaremos nuestra discusión a esta interrogante primordial de
estudio, ¿cómo controla el Estado al Sindicalismo en México?

Es claro que ante un mayor control político se presentará menos estudios, menos
defensas y menos mejoras de los agremiados sindicales por las siguientes razones.

a).- Históricamente se ha discutido que existe un control sobre el movimiento sindical


mexicano.

b).- El sindicalismo en México según el Art. 356 de la L.FS. y 67 de la L.F.T.S.E., se le ha


enmarcado en la perspectiva de un objetivo muy claro: De esta manera, no se presentará
el objetivo sindical proclamado por la Ley Federal del Trabajo para ello es necesario
determinar ¿cómo se ha presentado ese control político en México? Y ¿de verdad, el
objetivo fundamental del sindicalismo mexicano se ha ido orientando a buscar la
reivindicación del Trabajo? Entiéndase el control político como aquella regulación,
intervención, inspección y vigilancia que hace el gobierno a los sindicatos en México.

Art. 356.- "Sindicato es la asociación de trabajadores o patrones, constituida para el


estudio, mejoramiento y defensa de sus respectivos intereses " L.F.T.

Art. 67.- "Los Sindicatos son las asociaciones de Trabajadores que laboran en una misma
dependencia constitucional para el estudio, mejoramiento y defensa de sus intereses
comunes." L.F. T.S.E.

Como se podrá notar mientras que la Ley Federal del Trabajo es de observancia
obligación para la denominación de iniciativa Privada que permite la asociación de
Trabajadores o patrones, mientras los primeros utilizan el sindicato como instrumento los
segundos lo usan como defensa. Por otro lado en la Ley Federal de los Trabajadores al
Servicio del Estado solo menciona asociaciones de trabajadores que laboran en una
misma dependencia, lo que en todo caso es innecesario mencionarlo ya que pertenezca a
la dependencia que sea, el patrón es el mismo, el Estado quiere como dijimos controlar
los sindicatos por medio de la política.

Ya que hablar de política, es hablar de poder, un poder que implica a los representantes
de las clases sociales, dando un proletariado lleva la tarea de excluir al poder de una
clase. La política también se aplica a formar de gobierno y es compatible con la soberanía
del hombre y para ello nos tendríamos que referir tradicionalmente a formas de gobierno.

A partir del renacimiento (mediados del siglo XV) se habla de términos Estado. También lo

299
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

político conceptualiza la relación gobernantes y gobernadores, implica de igual manera


una relación entre dirigentes y dirigidos. Igualmente se debería de tratar de propiedad
privada. La política implica libertad, obediencia, organización, poder. Lo político esfuerza,
es dominación, es astucia, es engaño, es una realidad que hay que vivirla, es interesarse
por manifestaciones de vida social, por el prestigio, por la justicia, por el honor de la
defensa de Estado. Es hablar del bien común, de territorio, de superioridad, de ideología,
de asumir una actitud frente al Estado, menor la neutral.

El Estado utiliza los siguientes tipos de control: CONTROL REPRESIVO

Manuel Camacho en su libro "Lecturas Políticas Mexicanas, afirma que existen seis, o
siete fases principales de control obrero:

1- La resistencia patronal a la organización obrera

2.- El Control burocrático de la asamblea obrera.

3.-La conciliación y el arbitraje gubernamental.

4.-La negociación.

5.- El entrenamiento político.

6.- El cohecho y la cooptación.

7.- La represión.

Sin embargo estas fases pueden variar dependiendo de la región y del sector de que se
trate, desde luego no en todo conflicto ocurren todas las fases aquí mencionadas pues el
proceso puede terminar en la primera fase y así sucesivamente, o iniciar en cualquiera.

Históricamente se analiza que la represión patronal, como las del Estado, es el primer
paso de control a la organización obrera. El control jurídico que ejerce el Estado sobre el
movimiento obrero es muy amplio y no se redice únicamente a la conciliación y al arbitraje
gubernamental, Es claro que el punto que se refiere a la primera fase, existe una
resistencia patronal a la formación de organizaciones obreras, ya que las empresas "
sufren " originalmente los efectos de la reivindicación obrera. Donde el movimiento obrero
- como lo afirma Néstor de Buen Lozano - identifica a un sector de dirigentes que hace lo
posible porque no se produzca movilización obrera de ninguna clase. Ya que estos
primeramente buscan conquistar su derecho a la existencia.

CONTROL MANIPULATIVO

300
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Dice Mario de la Cueva "... Nada puede justificar cualquiera que sea el sistema político y
económico de un pueblo, lo mismo en un régimen capitalista que en una socialista, que
los hombres sean despojados de sus derechos políticos, sociales, laborales y que éstos
se ejerzan por los líderes en el poder." Partiendo de este hecho, podemos pensar lo
siguiente: si nada justifica que los hombres sean despojados de sus derechos políticos,
sociales, económicos y laborales, entonces una forma de despojar de sus derechos al
trabajador es mediante el manipuleo. Un manipuleo que realiza los representantes del
Estado y de las empresas de dos maneras:

1- El Estado corrompe al líder del sindicato o central obrera, usándolo para sus fines y lo
limita en su acción reivindicativa transformando al mismo sindicato (La empresa también
lo hace).

2- El propio Estado promueve la creación de controles o de sindicatos que son sometidos


al control oficial (La empresa también lo hace).

La manipulación se presenta, corrompido al líder obrero o formando centrales oficialistas.

Si partimos del hecho de que el sindicalismo en México es manipulativo por el aparato


gubernamental, correspondiendo al líder sindical y/o creando organizaciones puestas a su
servicio, voluntad y decisión, entonces la opinión más inmediata cuestiona la soberanía
del sindicato, porque ésta - según Silva Gómez Tagle - radica en la voluntad de sus
miembros se manifiesta de conformidad con las prevenciones de sus estatutos, por
acuerdo de sus asambleas y congresos y se realiza a través de los cuerpos
representativos que se conseguían en sus propios estatutos.

Por lo que es de creer, que cualquier tipo de control sobre el sindicalismo en México no es
justificado, ya que convierte al obrero asociado en una masa deforme sin objetivos
propios, se esfuma la resistencia y se pierde la esencia del sindicalismo; porque se
convierte en "corderitos" de apoyo gubernamental. Afirma Gómez Tagle que; el papel de
los sindicatos obreros no es otro que el de mejorar, emplearlo para ello recursos propios
en la lucha de clases y la oposición del salario en la repartición del producto del trabajo.
Cuando los sindicatos no cumplan con esa función esencial de resistencia frente a la
presión de los beneficios capitalistas, simplemente no son sindicatos obreros. Y entonces,
los índices de salarios son fijados por las clases dominantes. Esto es, se reduce al
mínimo, mientras los beneficios aumentan al máximo, como ha ocurrido en México en la
era del desarrollismo.

301
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Así los sindicatos por medio de sus líderes se desvisten de su papel fundamental para
trocar en una función de apoyo que se revertirá en un momento determinado de la
historia. "Las personalidades, dirigentes de la organización, - estaban firmemente
convencidas de que si lograban sencillamente ganarse la buena voluntad del Presidente
de la República, se encontraría remedio para tales males sociales..." (Barry Corr) Es decir,
que busca inicialmente este apoyo el mismo sindicalismo, como producto de la represión,
para llegar posteriormente al manipuleo. Por ello debemos recordar que para 1879 el
Gran Círculo había caído por completo en manos de agentes oficialistas en la época de
Porfirio Díaz; (Barry Corr) La relación de la Casa del Obrero Mundial con el Gobierno
llegando a formar los batallones rojos (Barry Corr) la fundación de la Central Monstruo de
1918-1930, con la característica principal de su estrecha vinculación con el Gobierno
conformando una alianza: Líderes obreros y Gobierno; (Reyna Zapata) ejemplo de estos
acercamientos lo constituye la creación de la CTM. De la CROC; del BUO; y del CT; todo
ellos organismos poderosos e importantes en el movimiento obrero mexicano, con una
función de apoyo correspondida.

Este acercamiento inicial del movimiento obrero se presenta para posteriormente el


mismo gobierno cortejar a las asociaciones obreras; es decir se presenta una meta, que
es el apoyo mutuo para conseguir sus fines: La permanencia en el poder. Y esto según
Barry Corr- inicia entre 1914 y 1915, cuando el movimiento sindical dejó de ser políticos
nacionales con el fin deponerlo al servicio de sus propios intereses.

Definitivamente, esta permanencia en el poder, líder sindical gobierno, trae como


consecuencia que se desprendan ciertas ayudas y apoyos mutuos en determinados
periodos históricos; el Gobierno otorga y corrompe al líder sindical por medio de
concesiones políticas: Que por un lado dan cierto prestigio y poder al líder sindical y por el
otro otorgan posición y dinero. Y, ejemplo. Del anterior razonamiento los temores a
raudales: recuérdese el pacto obregón-CROM, donde se pedía la formación de una
secretaría en asuntos de trabajo dirigida por alguien de la misma CROM (Barry Corr).

Con la presencia del manipuleo y de la corrupción, la lucha obrera se detiene, no avanza,


hace un paréntesis interminable en las condiciones sociales del trabajador, del trabajador
de la base, no del líder. Porque éste al aliarse con la burguesía en el poder y al obtener
concesiones políticas comienzan a recibir ayuda por parte del gobierno y lo peor de todo
manipulación es que el sector oficial comienza a poner a los propios dirigentes sindicales.

Néstor de Buen nos refiere a que el liderismo sindical se ha convertido en una profesión,

302
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

en realidad, es una muy lucrativa profesión; ajenos a los controles hacendarlos en aras de
la autonomía sindical y en donde los comités ejecutivos de los sindicatos suelen manejar
los fondos como patrimonio personal, y lo que es peor, como patrimonio familiar.

Así es como el Estado manipula y corrompe, o bien, crea una o algunas centrales
gubernistas con la idea de manipular. Que por su puesto ante este fenómeno se tiende a
reaccionar, sacudiéndose el control sin resultado porque el sindicalismo en México al
escindirse o depurarse se enfrenta absurdamente a otro control infranqueable: El control
jurídico.

4.3.4 La Democracia en el diseño mismo de la política gubernamental.

En el terreno obrero y campesino también se da distintas actitudes entre las propias


clases y estratos dirigentes: unos piensan resolver el problema con el empleo de expertos
en relaciones públicas; otros a nombre de una armonía o unidad nacionales
"prefabricadas", buscan anular toda reorganización de las fuerzas políticas obreras,
campesinas y califican a los dirigentes de irrealistas, de inmadurez, e incluso, los privan
del derecho a luchar, mediante una guerra ideológica en que utilizan los estereotipos
anticomunistas para descalificar a todo dirigente e intenta cambiar esta estructura; en fin
oíros más utilizan el delito de la disolución social, para acusar y encarcelar a los dirigentes
de los movimientos obreros y campesinos e impedirles la lucha política. Todas estas
actitudes tradicionalistas tienen frente a sí dirigentes con actitudes más audaces y
reformistas, características del estado moderno. De triunfar estas últimas tendencias
sobre aquellas acelerarían efectivamente la democratización del país.

En la actual situación política de México, se advierten distintas actitudes en el diseño


mismo de la política gubernamental y de la democratización del país: a la reforma
electoral de la constitución se opone la Ley electoral vigente - que impide controlar en
forma efectiva los resultados de las elecciones - , y a quienes impulsaron y apoyaron las
reformas constitucionales se oponen quienes en el propio gobierno, o fuera de él piensan
que no se debe ir más lejos ni en la organización de las propias instituciones ni menos
aún, en las reformas de la Ley Electoral De no llevarse a cabo esta reforma los efectos
multiplicadores y aceleradores de la democracia que contiene la reforma constitucional se
detendrán necesariamente, y bajo nuevas formas seguirá operando la política tradicional.

Los elementos de juicio de que se disponen, la experiencia histórica que se posee, las
leyes sociológicas conocidas, no permiten proveer con exactitud científica cual vaya a ser
el resultado de esta lucha. Cualquier pronóstico que pretendiera ser científico tendría un

303
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

fuerte contenido de charlatanería.

La investigación sociológica sólo puede decirnos que el desarrollo de la democracia en


México está dentro de lo probable por el desarrollo mismo del país; y que democracia
efectiva es requisito necesario para que ese desarrollo continúe en forma pacífica.

Es importante llegar a esta conclusión en un momento en que la democratización del país


es un hecho posible, un hecho probable, aunque lleno de obstáculos avanza con tasas
mínimas de seguridad y exige grandes esfuerzos.

Por lo anterior, creemos necesario enumerar los aspectos y puntos principales que
influyen en nuestro país: la democratización como base y requisito indispensable para el
desarrollo, las posibilidades de la democracia aumentarán en la medida en que aumente
el ingreso per - cápita, la urbanización, la alfabetización, los obstáculos de primera
importancia como la sociedad plural deberá ser combatido mediante una integración
nacional; la condición prefasista de las regiones que han perdido status amerita planes
especiales de desarrollo para esas regiones; para esas regiones; las regiones con cultura
tradicionalista, con población marginal considerable, sin derechos políticos, sin libertad
política, sin organizaciones políticas funcionales son los veneros de la violencia, y exigen
para que ésta no surja esfuerzos especiales para la democratización y la representación
política de los marginales y los indígenas. Y tareas legislativas, políticas y económicas
que aseguren el ingreso de esa población a la vida cívica, la admisión e integración de los
estratos marginales a una "Ciudadanía económica y políticamente plena; que es
necesaria acentuar la unidad de muestra cultura política secular que mantiene el principio
constitucional de que los lineamientos políticos no deben estar ligados a los religiosos;
que es necesario redistribuir el ingreso y mantener y organizar a la vez las presiones
populares y la disciplina nacional que es necesario a la vez democratizar y mantener el
partido predominante e intensificar el juego democrático de los demás partidos lo cual
obliga a la democratización interna del partido como meta prioritaria y respetar y estimular
a los partidos de oposición revisado de inmediato la ley electoral; que la democratización
del partido debe estar ligado a la democratización sindical y a la reforma de muchas dé la
leyes e instituciones laborales, entre otras tareas; que un desarrollo económico constate
es el seguro mismo de la paz pública, y que para lograr esta meta la personalidad del
presidente, el carácter técnico del plan y la democratización del partido son requisitos
ineludibles en un país en el que el presidente tiene una extraordinaria concentración del
poder en un momento en que no se puede ni desconfiar de los planes técnicos ni hacer

304
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

demagogia con ellos, y en una etapa en que se necesite canalizar la presión popular,
unificando al país para la continuidad y aceleración de su desarrollo y, dejar que hablen y
se organicen las voces disidentes para el juego democrático y la solución pacífica de los
conflictos.

4.3.5 La política laboral.

El concepto de flexibilidad en el trabajo, concebido como un medio que permita a las


empresas contar con un mayor margen de control en la administración y en la
disponibilidad de recursos humanos a través de la adecuación de los contratos colectivos
y de normas de trabajo acordes a las nuevas necesidades de la planta productiva, y en un
ámbito más general, al redefinir la acción sindical de las organizaciones obreras con
objetivos similares, se encuentra presente en la política laboral contenida en el plan
nacional de desarrollo.

Ester principio de flexibilidad ha estado presente en las discusiones y análisis que de la


situación actual del sindicalismo mexicano se ha venido realizando. Los diversos sectores
económicos y políticos han vertido opiniones muy diversas en cuanto a lo que dicho
principio significa. Se pueden apreciar cuatro posiciones diferentes, mismas que también
reflejan en lo relativo a la Ley Federal del Trabajo, la que habrá de reformar
posteriormente el Art. 123 Constitucional. Este es un punto importante pues del giro que
tome dicho artículo y la Ley Reglamentaria, dependerá el futuro de las relaciones
laborales.

Las posturas que se presentan respecto de la flexibilidad y la reforma a la Ley Laboral


son:

A) Para los sindicatos y grupos políticos de izquierda, el principio de flexibilidad en el


trabajo implica una serie de medidas que tienden a favorecer al proyecto de desarrollo
neoliberal y por lo tanto afectan significativamente las conquistas y derechos de los
trabajadores en cuanto a sindicalización, huelga, estabilidad en el empleo, salario,
vigencia de conquistas establecidas en los contratos colectivos de trabajo, bilateralidad en
las relaciones laborales, etc. Por ello, estos sectores se han pronunciado en contra de la
aceptación de este principio y su inclinación en las medidas laborales establecidas por el
gobierno, como en los casos de TELMEX y PEMEX, que posiblemente reflejan en la Ley
Federal del Trabajo. El principal temor de este sector, mismo que ya han manifestado en
ocasiones diversas, es el de que el principio de flexibilidad sea incluido precisamente en
la Ley Federal del Trabajo, ya que es ésta la que regula las relaciones obrero-patronales.

305
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Para ello se han dado a la tarea de realizar una serie de foros de discusión acerca de lo
que en su concepto debe ser la Ley Laboral, los cambios que debe sufrir, lo que se debe
conservar y rescatar.

Dentro de los organismos que más actividad han realizado en este sentido destacan el
Sindicato Mexicano de Electricistas, el Frente Auténtico del Trabajo, el Sindicato de
Trabajadores de la UNAM y, fundamentalmente, el Frente Nacional de Abogados
Democráticos quien ha participado en todos los foros y prácticamente han marcado la
línea a seguir en las demandas de la izquierda. Algunos de los principales planteamientos
respecto a la nueva Ley Federal del Trabajo que han hecho este sector son los siguientes:

_ Establecimiento de Comisiones Mixtas de Productividad.

Derogación del Apartado " B " del Artículo 123 Constitucional. _ Derogación de los
requisitos para el registro sindical y que éste sólo se otorgue con la presentación del Acta
Constitutiva, como un medio para garantizar la libertad de asociación.

_ Restitución del derecho de coalición.

_ Prohibición de la filiación forzosa de los sindicatos a los partidos políticos.

_ Derogación de la requisa y respeto irrestricto al derecho de huelga.

. Escala móvil de salarios tanto en la contratación individual como en la colectiva.

Extensión de los aumentos de emergencia a los salarios contractuales.

• Irrenunciabilidad de los derechos de los trabajadores garantizados en la


Constitución.
• Terminar con la reglamentación excesiva que permite a las autoridades una
intervención indiscriminada en la vida de los sindicatos.

B) Para los sindicatos agrupados en el Congreso del Trabajo este Principio tiene serias
implicaciones en el ámbito sindical, por lo que acepta la flexibilidad en el trabajo aunque
en forma condicionada, es decir, siempre y cuando reúna dos condiciones: Que impulse la
eficiencia y la productividad, con el consecuente beneficio económico de sus agremiados
y que no represente merma alguna en los derechos de los trabajadores.

Dentro de las propuestas del sindicalismo oficial destacan algunos puntos dados a
conocer por el Congreso del Trabajo, la CTM y la CROC.

Congreso del Trabajo

306
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

_ Nueva Ley Laboral que armonice las relaciones obrero-patronales. _ Elevar la


remuneración real respecto del P.I.B. _ Mayor eficiencia en la Comisión Nacional de los
Salarios Mínimos. _ Expansión de la contratación Ley.

Ampliar en algunos aspectos las cargas procesales del patrón.

Confederación de Trabajadores de México _ Revisar y adecuar el concepto de salario


remunerados _ Jornada de 40 horas con pago de 56.

Federalización de los Tribunales de Trabajo.

Actualizar el sistema de seguridad social. _ Pensiones del 100% a los jubilados.

Seguros de desempleos.

Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CR.O.C.)

Modificación al Artículo 123 Constitucional

Federalización de la Juntas de Conciliación y Arbitraje y Descentralización de las mismas


en todo el país, con todas las facultades para atender los conflictos individuales y
colectivos.

_ Desaparición del Apartado " B " Constitucional en la aplicación del principio de


flexibilidad en el trabajo, mismo que ya se ha aplicado en algunas empresas
paraestatales, por lo que es posible que sea adaptable en la nueva legislación laboral,
aunque no sin problema, pues la oposición de izquierda y el sindicalismo oficialista
cuentan con una fuerza importante en el Congreso de la Unión.248

En las últimas fechas importantes e inequívocas la decisión de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación, que establece la oportunidad de que puedan formarse varios
sindicatos en una misma dependencia gubernamental Este es un poco más en el logro de
las verdades democracia que necesita tener y vivir este país.

La resolución emitida por el más alto Tribunal de la Nación no deja duda de lo que México
requiere en el ámbito de las libertades, bajo el amparo de la Ley Suprema que es nuestra
Constitución. El dictamen, emitido por la Suprema Corte, crea Jurisprudencia al respecto,
bajo la tesis número 43/1999:

“Sindicación única. Las leyes o estatutos que las prevén, violan la libertad sindical
consagrada en el artículo 123 Apartado " B ", fracción X Constitucional”.

248
Boletín de Prensa de la CROC, 8 de Agosto de 1989.

307
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En referencia a la determinación tomada por los magistrados, el secretario del trabajo


Mariano Palacios Alcocer, apoyó la resolución señalando • que " La jurisprudencia hace
una declaración de inconstitucionalidad del artículo 68 de la Ley de los Trabajadores al
servicio de los Poderes del Estado y abre la posibilidad de que puedan existir varios
sindicatos en una misma dependencia ". Esta nos lleva a pensar y decir que no queda
muy lejos el fin de cúpulas sindicales que ya no se preocupen por la defensa de los
trabajadores y que algunas, sino es que muchas centrales sindicales, se verán
disminuidas con respecto a sus agremiados. Podrían ser los casos del SUTERM, la
FSTSE y todos los sindicatos afiliados a la misma.

“Y para muestra basta un botón: el primer sindicato que se está formando al amparo de la
decisión de la Suprema Corte es el de la disidencia de los trabajadores del metro, hartos
del corporativismo que sume a los mismos en la más aberrante antidemocracia y lucro
desmedido con las aportaciones sindicales. Ojalá que este acto jurídico de nuestro
máximo tribunal sirva para entender que el destino de México es fundamentalmente la
libertad en la democracia, regido por un verdadero estado de Derecho".249

4.4 Irrenuciabilidad de los derechos laborales.

A continuación haremos un análisis sobre los derechos y las prestaciones que tienen los
trabajadores que están consagradas en la legislación laboral y en nuestra Constitución
Mexicana para proteger al trabajador de la explotación y la miseria; siendo de vital
importancia la creación de derechos irrenunciables que los protejan.

4.4.1 Referencia sobre las prestaciones que tienen los Trabajadores.

Las prestaciones de los trabajadores son distintas según las leyes que determine cada
país. En específico en nuestro país, es importante que los empleados posean toda la
información concerniente para que no existan abusos o injusticias. Tienen una importante
implicación económica en la vida de los trabajadores, a grandes rasgos podemos
mencionar que deben pagarse puntualmente a medida que se causan ya sea dentro de la
vigencia del contrato o en su terminación; tienen por objeto principal el que dichas
prestaciones cumplan el objetivo social y familiar a que están destinadas.

Sumados al sueldo como tal o a los incentivos financieros, existen otra clase de rubros
que reciben los trabajadores y que son de suma importancia. Nos referimos a las

249
Jaime Mendoza, Analista Político, Revista tapado p. 15 del 6 de Junio de 1999.

308
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

prestaciones y servicios a que tienen derecho todos los empleados dentro de una
empresa.

Primero, como quedó establecido en el capítulo segundo el concepto de prestación lo


entendemos, como cualquier complemento al salario que se entrega a los trabajadores.
Pueden ser vacaciones, la pensión, reparto de utilidades, seguros de vida, descuentos en
los productos de la compañía. Cada día toman más importancia estos temas, ya que
dentro de una organización deben estar legalmente instituidas. Existen planes de
prestaciones, las cuales detallaremos a continuación:

PRESTACIONES COMPLEMENTARIAS

Hacen referencia a remuneraciones por tiempo no trabajado y son diferentes de acuerdo


a las leyes de cada país. Entre las más importantes están el seguro de desempleo que
son compensaciones otorgadas a personas que no hayan conseguido trabajo por factores
ajenos a ellas. Asimismo las prestaciones a desempleados están dirigidas también a
trabajadores despedidos que no hayan cometido alguna falta, porque de lo contrario no
tienen derecho a éstas.

Dentro de las prestaciones se pueden incluir las legales que son las que proceden de la
ley, el decreto o el acuerdo; las extralegales son las que no provienen de un acto de
autoridad sino de la voluntad conjunta de los contratantes o de una decisión unilateral del
empleador.

Podemos mencionar también las comunes, son aquellas que en general, deben pagar
todas las empresas o empleadores y que por consiguiente, benefician a la gran masa de
asalariados como son: Descanso dominical remunerado.

Vacaciones anuales remuneradas Las provenientes de accidentes de trabajo o


enfermedad Profesional.

Las relativas a la protección de la maternidad.

Los gastos funerarios.

Calzado y Overoles.

Y las especiales, aquellas que otorgan las grandes empresas las que por su elevado
capital pueden soportar cargas sociales de mayor entidad enunciaremos algunos.

Seguro de vida.

309
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Seguro medico

Auxilios médicos para pensionados, familiares y herederos Escuelas o becas para


especialización de trabajadores Vacaciones semestrales para cierto grupo de
profesionales.

Sin reparar en su cuantía, las prestaciones son inembargables lo cual quiere decir que
salvo las excepciones que fija la ley en ningún caso ni por motivo alguno su valor puede
ser tocado, el trabajador tiene preferencia para conservar sus derechos.

4.4.2 Derechos irrenunciables a los trabajadores.

Es importante señalar que todo hombre cuenta con derechos esenciales y son en sí,
irrenunciables; ya que protegen su propia integridad sin los cuales ninguna persona
podría subsistir en una sociedad; estos derechos son derecho a la vida, dignidad humana,
a la libertad, al trabajo, derechos personales, derechos patrimoniales.

Pero también hay derechos laborales que no pueden ser renunciables por los
trabajadores, los derechos fundamentales serían aquellos derechos humanos que los
ordenamientos jurídicos nacionales e internacionales han reconocido como
indispensables y que necesariamente deben estar expresados en los documentos básicos
y superiores, sin que ello implique agotar la lista de los derechos inherentes a la persona
humana.

Los derechos y libertades de la persona humana no son obligatorios por estar


consagrados en la Constitución ni porque este sea la expresión del hecho natural, sino
que estos derechos existen, obligan y deben de ser respetados por todos, incluso el
estado, porque existen normas imperativas generadas por la comunidad Internacional que
obligan a respetarlos.

El mejor catálogo de los derechos del trabajador aparecen en el artículo 123


constitucional, donde se establece una jornada máxima, protección a menores y mujeres;
salarios mínimos, igualdad de salario al trabajo igual, protección al salario mínimo,
derechos a las utilidades, derecho a la vivienda, responsabilidad empresarial por riesgos
de trabajo, medidas de seguridad e higiene, estabilidad en el empleo, preferencia en los
créditos a los trabajadores, nulidad de las renuncias, Seguridad Social, en realidad un
listado de los derechos fundamentales y que son irrenunciables a los trabajadores, por ser

310
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

necesarios para su supervivencia y está consagrado dentro de nuestra Constitución


mexicana.250

No podemos dejar de mencionar el derecho al trabajo que tiene toda persona, mismo que
es protegido en todas sus formas por las leyes y eliminar la discriminación racial en todas
las formas; afirmado de este modo el derecho a que se ejerza libremente la capacidad
laboral sin restricciones. Por otra parte el derecho de trabajar implica primeramente la
disponibilidad individual de elegir libremente una actividad y que la libertad de contratar
impide obligar, tanto al empleador como al empleado, al celebrar un contrato de empleo y
a celebrarlo con persona determinada.

Los ataques más directos al derecho de trabajar se han registrado entre nosotros,
combinados con la violación de otro derecho fundamental como es la libertad sindical, en
el caso de imposición de afiliación sindical a una determinada asociación sindical como
condición para ser admitido en un empleo.

El derecho al trabajo se concreta en el aspecto individual en el igual derecho a un


determinado puesto de trabajo si se cumple los requisitos necesarios de capacitación, y
en el derecho a la continuidad o estabilidad en el empleo. En el aspecto colectivo, el
derecho al trabajo implica un mandato a los poderes públicos para que lleven a cabo una
política de pleno empleo.

Y no podíamos dejar de mencionar el derecho de negociación colectiva y de recurrir a la


conciliación y al arbitraje, es fundamental para todo trabajador para su defensa como lo
marca el artículo 33 de la Ley Federal del Trabajo, que manifiesta que todo convenio o
liquidación, para ser válido deberá hacerse por escrito y contener una relación
circunstanciada de los hechos que lo motiven y de los derechos comprendidos en él. Será
ratificado ante la junta de Conciliación y Arbitraje, que lo aprobará siempre que no tenga
renuncia de los derechos de los trabajadores.

Entonces fue preciso la creación de las Juntas de Conciliación y Arbitraje para que se
encargaran de cumplir el respeto a los derechos de los trabajadores mediante un proceso
equitativo para ambas partes y garantizar que no se fijen prestaciones inferiores a la ley,
ni que se renuncie a sus derechos.

4.4.3 Respeto a los derechos laborales.

250
Cfr. DE BUEN LOZANO, Néstor. Razón de Estado y Justicia Social, Porrúa, México, 1991 pág. 157

311
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Hablar de respeto a los derechos de los trabajadores es un tema inevitable, todo derecho
debe ser respetado, si no fuera así de nada serviría tenerlos establecidos en nuestros
ordenamientos jurídicos.

Podemos decir que los derechos de los trabajadores no se respetan por falta de
conocimiento de ellos y porque las autoridades respectivas no dan la orientación
necesaria en los casos que se requiere; otra realidad es que en las audiencias que se
llevan a cabo en las juntas que tiene carencias en el proceso y que muchas veces dejan
en estado de indefensión al trabajador.

Es indispensable mejorar de manera considerable las condiciones de trabajo las que fija
la Ley Federal del Trabajo que además son insuficientes por lo que se hace al trabajador
más vulnerable para que no se respeten sus derechos, nosotros podemos considerar
algunas alternativas como:

Consagrar la semana de cuarenta horas.

Suprimir la mayoría de los días de descanso obligatorio, que solo encarecen la


producción, deben de conservarse solo las que establece la Ley Federal del Trabajo.

Promover prestaciones de Previsión Social libres de impuestos que eliminen las


insuficiencias del salario.

Regular la obligatoriedad para ambas partes de la capacitación y el adiestramiento, por


medio de los convenios colectivos.

La protección contra el despido arbitrario, este ocupa un lugar central en relación


individual, se establece en el artículo 48 de la Ley Federal del Trabajo, el trabajador podrá
solicitar ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, a su elección a que le reinstale en el
trabajo que desempeñaba, o se le indemnice con el importe de 3 meses de salario. O si
en el juicio correspondiente no compruebe el patrón la causa de la rescisión el trabajador
tendrá derecho, además, cualquiera que hubiese sido la acción intentada, a que se le
paguen los salarios vencidos desde la fecha del despido hasta que se cumplimente el
laudo.

Este es uno de los preceptos legales que pugna por que se respetó uno de los derechos
del trabajador cuando es despedido sin causa alguna o por el arbitrio del patrón no se le
deje desprotegido ya que este solo cuenta con su salario producto de su trabajo, por eso
la importancia de indemnizarlo con tres meses de salario o reinstalarlo, además si no se

312
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

prueba la causa de la rescisión por parte del patrón se paguen los salarios vencidos, por
lo que este artículo hace justicia frente al abuso del poder.

En México se funda dos principios fundamentales la irrenunciabilidad de los derechos


básicos de los trabajadores y la nulidad de las renuncias. Se trata sin la menor duda, de
un derecho tutelar hacia los trabajadores; el problema es claro porque es evidente que en
estado de necesidad el trabajador sacrifica lo conveniente para lograr lo indispensable y el
contrato seria como lo fue el mejor vehículo para la explotación. No obstante la necesidad
de poner fin a los conflictos de trabajo provoca una renuncia reiterada de los derechos a
través del mecanismo de la conciliación y arbitraje.251

El sentido estrictamente tutelar del derecho individual del trabajo no parte del supuesto de
la incapacidad intelectual o jurídica de los trabajadores sino de un fenómeno económico
como es su permanente estado de necesidad que puede conducirlo a abandonar
derechos adquiridos a cambio de algo que le permita subsistir.

Es así como el trabajo representa el medio básico para obtener su sustento y el de su


familia; pero por otro lado, el trabajo se presenta como una obligación, dado que si no lo
hace resiente el funcionamiento de la vida social en la cual y todos y cada uno
dependemos al fin del trabajo del otro, por ello la importancia de que se respeten los
derechos de los trabajadores para lograr un equilibrio armónico en las relaciones
laborales y evitar con ello los conflictos de trabajo.

4.4.4 La justicia social en el artículo 123 fracción XVIII Constitucional.

Abordaremos el tema de la justicia social la cual es anhelada por los hombres para tener
un mejor equilibrio con los factores de la producción y tratar de erradicar la pobreza y
luchar por la defensa de los derechos laborales. Las situaciones de desigualdad social
que define la búsqueda de equilibrio entre partes desiguales, donde la justicia social
remite al derecho de los sectores más desfavorecidos de la sociedad, en especial los
trabajadores, al goce de los derechos humanos, sociales y económicos, de los que ningún
ser humano debería de ser privado.

Entonces la justicia social, sería aquella que tenga como fin principal, la creación de las
condiciones necesarias para que se desarrolle una sociedad relativamente igualitaria en
términos económicos. Comprende el conjunto de decisiones, normas y principios
considerados razonables para garantizar condiciones de trabajo y de vida decente para

251
Cfr. DE BUEN LOZANO, Néstor. El Estado de Malestar, Porrúa, México, 1997 pág. 82

313
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

toda la población. Involucra dotar a los desposeídos de medios adecuados de trabajo para
lograr la satisfacción de todas sus necesidades; esto es la justicia social, es
fundamentalmente proteccionista de los pobres; y la justicia general.252

En la justicia social encontramos como sujeto activo a la clase indigente, como sujeto
pasivo a los poseedores de los medios de trabajo; el objeto material lo constituyen los
bienes superfluos de los poseedores y que puedan transformarse en medios de trabajo
para los desposeídos, y el objeto formal, el derecho de estos últimos de exigir de los
primeros estos medios de trabajo.

El beneficio de la irrenunciabilidad de los derechos, uno de los baluartes de la justicia


social, se aplicara a favor del trabajador, decretándose la nulidad de cualquier concesión
que le hubiere sido arrancada.

El constitucionalismo social es una consecuencia de la revolución industrial, la aparición


de la clase obrera, y su organización en sindicatos y el derecho a la huelga, para reclamar
por los derechos específicos del trabajo.

En efecto el artículo 123 constitucional en su fracción XVIII protegen a la huelga como un


derecho de la mayoría de los trabajadores de una empresa o un establecimiento tiende a
obtener algo o a sancionar una petición que se hace con derecho, la constitución dice que
las huelgas serán licitas cuando tengan por objeto conseguir un equilibrio entre los
diversos factores de la producción armonizando los derechos del trabajo con los del
capital; es una defensa legal que tiene todo trabajador para proteger sus derechos de las
violaciones.

La huelga es una institución reconocida jurídicamente, establecida a favor de los


trabajadores, quienes para poder llevarla a cabo deben cumplir con los requisitos que la
propia Constitución de los Estados Unidos Mexicanos establece, así como también las
formalidades que estipula la Ley Federal del Trabajo. La huelga es un derecho, y como tal
este deberá ejercitarse con justicia para ambos sectores económicos y no convertirlo en
un instrumento de terrorismo empresarial.

Todo hombre tiene derecho de que se respete su integridad, su existencia y su dignidad


personal y familiar, por lo mismo cuenta el trabajador con la potestad de decir, en conjunto
con sus compañeros la forma de sus movilizaciones de lucha para enfrentar el abuso del
patrón o inclusive del Estado, cuando desconozcan o violenten su interés profesional; lo
252
Cfr. ALVIREZ FRISCIONE, Alfonso. La participación de utilidades, segunda edición, Porrúa, México, 1976,
pág. 171

314
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

que conlleva a la huelga a la defensa de los intereses profesionales de los trabajadores y


la promoción permanente y progresiva de sus reivindicaciones.

Este medio jurídico establecido en nuestra legislación laboral vigente hasta nuestros días
es una forma de solución a las demandas de los trabajadores cuando estas son
minimizadas por el patrón, como podemos ver en el contexto de nuestra realidad han
surgido nuevos modelos económicos que traen consigo nuevas demandas laborales
como la economía global ha crecido a una escala que carece de precedentes históricos.
Con la ayuda de las nuevas tecnologías, las personas, los capitales y las mercancías se
mueven entre los países con una facilidad y una rapidez tales que han creado una red
económica global interdependiente que repercute prácticamente en todos los habitantes
del planeta.

La globalización ha brindado oportunidades y beneficios a muchas personas, pero al


mismo tiempo millones de trabajadores y de empleadores de todo el mundo han tenido
que hacer frente a nuevos desafíos. No es sostenible ni deseable que la economía global
continúe desarrollándose en esta dirección. La desigualdad está en el origen de la
pobreza, determina un descenso de la productividad, genera inestabilidad social e incluso
conflictos.

Como resultado de la globalización y de la política actual de nuestro país se han generado


la desigualdad social y la pobreza lo que busca nuestra constitución es el equilibrio de los
factores de la producción, por tanto si el desempleo no puede ser explicado por la
globalización ni por los avances tecnológicos esta el plan político y no tanto el factor
económico. Es necesaria una política de creación de empleos que conlleva a una
corrección de desigualdades sociales.

Estas políticas requieren como mecanismos de presión el reforzar los instrumentos de


defensa de los intereses del trabajador como son los sindicatos, pero estos medios para
combatir el desempleo implica factores políticos, por lo que los derechos irrenunciables de
los trabajadores tiene como objetivo proteger los derechos de los trabajadores y la
Constitución garantizarlos eliminando el trabajo forzado, terminar la discriminación en el
empleo, en suma esos derechos básicos son la base de la paz social, la armonía y la
libertad.

La lucha por el bienestar común de los trabajadores significa desde su nacimiento y


configuración como un derecho intrínseco de autodefensa y autopromoción obrera frente
a los patrones y el Estado, por lo que los mecanismos que le otorga la ley para lograr el

315
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

equilibrio entre los factores de la producción deben de ser respetados y garantizados


como lo establece nuestra Constitución, para lograr la Justicia Social.

4.5 Formas de terminación de los conflictos individuales de trabajo.

El Doctor Mario De la Cueva señala que “La terminación es la disolución de las relaciones
de trabajo por mutuo consentimiento o como consecuencia de la interferencia de un
hecho, independiente de la voluntad de los trabajadores o de los patronos, que hace
imposible su continuación”253. Son causas disolventes de la relación de trabajo, la
cesación de sus efectos a partir de determinado momento, las cuales se encuentra
establecidas en el artículo 53 de la Ley Federal del Trabajo, por lo que las dividiremos en
dos categorías.

La Primera se encuentra establecida en su fracción I, que menciona como causa de


terminación de las relaciones individuales de trabajo “el mutuo consentimiento de las
partes”, circunstancia ésta que implica la renuncia del trabajador a su trabajo y por la otra
parte la conformidad del patrón, la cual es válida, dado que la ley admite la renuncia al
derecho a seguir laborando, siempre y cuando exista la licitud de esa terminación. En la
mayoría de las ocasiones nos encontramos que tal renuncia en realidad se trata de un
despido injustificado, la cual es obtenida en diversas ocasiones a través de la coacción
que se ejerce en contra del trabajador y generalmente se otorgan por escrito, en el que se
habla de una terminación por mutuo consentimiento o en su caso, suscribe otro en el que
declara el trabajador que se separa del trabajo por decisión libre, esto tal solo por una
cantidad de dinero por concepto de gratificación, que desde luego aprovechándose el
patrón de la suma necesidad económica del trabajador, de forma unilateral hace entrega
de una cantidad de dinero por debajo de las indemnizaciones que conforme a la Ley le
corresponden. Para evitar este tipo de abuso, la solución se encuentra en la educación, el
apoyo sindical y como última alternativa la demanda ante las Juntas de Conciliación y
Arbitraje, cuando el trabajador está en posibilidad de demostrar esa conducta indebida por
parte del patrón, por lo que corresponde al trabajador la carga de la prueba en el caso de
que afirme que fue obligado a renunciar.

La renuncia al no tener la categoría de un convenio ni de una liquidación (Art. 33 L. F. T.),


no requiere como requisito de validez, la ratificación ante los tribunales del trabajo; ahora
bien, por lo que respecta al despido tampoco es un convenio ni una liquidación, por tanto,
tendrá validez sin necesidad de que sea ratificado por la Junta de Conciliación y Arbitraje
253
DE LA CUEVA, Mario. El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, Tomo I, Óp. cit., p. 242.

316
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

con el consiguiente peligro de que aquél contenga renuncia de derechos, en perjuicio del
trabajador. Es importante señalar que no constituye una renuncia de derechos, en cuyo
supuesto sería nula (artículo 123, apartado “A”, fracción XXVII, constitucional), ya que la
renuncia al trabajo está reconocida en la Ley y solo se podrá invocar la nulidad, si la
voluntad del trabajador, al firmar su renuncia, estuviera afectada por un vicio.

La Segunda categoría la encontramos en las subsecuentes fracciones del artículo 53 de


la Ley Federal del Trabajo, causas de terminación que en la forma en que se encuentran
redactadas, es fácil su comprensión, pues en su fracción II, establece que “la muerte del
trabajador”, pero es importante hacer notar que nunca habla de la muerte del patrón,
porque ante tal evento la terminación se generaría por cierre de la fuente de trabajo; la
fracción III, se refiere como causa de terminación de la relación de trabajo “La terminación
de la obra o vencimiento del término o inversión del capital, de conformidad con los
artículos 36, 37 y 38”, circunstancia ésta que opera si fue legitima la fijación de un término
de duración y si al vencer no subsiste la materia del trabajo; la fracción IV señala como
causa de terminación de la relación de trabajo “La incapacidad física o mental o
inhabilidad manifiesta del trabajador, que haga imposible la prestación del trabajo”, la
primer es cuando el estado de salud del trabajador le impide continuar con su trabajo que
en ese momento desempeña, y la segunda es cuando el hecho de que el trabajador deja
de ser apto para realizar el trabajo encomendado. En el caso de la incapacidad, si ésta no
deriva de un riesgo profesional, el trabajador puede exigir que se le asigne un trabajo
compatible con sus aptitudes, esto sin afectar el hecho de que tenga otra prestación a que
tenga derecho, o bien, a su elección se le indemnice, en términos del artículo 54 de la Ley
Federal del Trabajo, es decir, con el importe de un mes de salario y doce días por cada
año de servicio, a título de prima de antigüedad; y por lo que corresponde a la inhabilidad
manifiesta del trabajador, hablamos de una causa de terminación de características muy
especiales, pues partimos de la idea de que el trabajador debe de ejecutar su trabajo con
la intensidad, cuidado y esmero apropiados (Art. 134, fracción IV, L. F. T.), por lo que en
caso de que su trabajo no lo hace intencionalmente, incurre en la falta de probidad (Art.
47, fracción II, L F. T.), dando causa a que se rescinda la relación de trabajo, pero si
estamos en el supuesto de que su trabajo ya no lo hace porque no es hábil, el patrón
podrá dar por terminado, sin que incurra en responsabilidad alguna, el contrato de trabajo.
Está causa de terminación es importante señalar que corresponde a cargo del patrón la
carga de la prueba de acreditar la inhabilidad del trabajador.

317
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Por último únicamente señalaremos la fracción V que habla de “los casos a que se refiere
el artículo 434”, es decir, de la terminación derivada de situaciones colectivas, en los
casos de cierres de empresas.

Nuestro derecho mexicano pone en práctica tres métodos para lograr dirimir los conflictos
de trabajo, siendo estos la negociación amistosa o auxiliada por alguna autoridad, la cual
se desarrolla a través de convenio que celebran entre el patrón y el trabajador, que tiene
como finalidad dar por terminada la relación de trabajo, pacto este que debe señalar el
pago de todas las prestaciones que conforme a la Ley tiene a su favor el trabajador; la
acción libre de los trabajadores, producto primario y natural de la idea del Derecho del
Trabajo como un derecho de la clase trabajadora, es decir, el derecho de huelga y el
derecho de poder conformar un sindicato por parte del trabajador; y el ejercicio de las
acciones de trabajo ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje, a fin este organismo, cuyo
fundamento se encuentra en el artículo 123, apartado “A”, fracción XX, de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, resuelva los conflictos individuales y colectivos,
jurídicos y económicos, que se presenten en las relaciones de trabajo o en ocasión de
ellas. De lo anterior únicamente nos referiremos a los métodos primero y tercero, para
solucionar los conflictos individuales de trabajo, que son temas a estudio en el desarrollo
de los siguientes puntos. Por tanto, toca a la Junta de Conciliación y Arbitraje el
conocimiento y resolución de los conflictos de trabajo que se susciten entre trabajadores y
patrones, solo entre aquéllos o solo entre éstos, derivados de las relaciones de trabajo o
de hechos íntimamente relacionados con ellas, por lo que su intervención es con la
finalidad de que se respeten los derechos de los trabajadores.

Las causas de los conflictos laborales surgen por un desequilibrio de los factores de la
producción o por la violación a un derecho, en el que las partes que forman la relación de
trabajo, que en ocasiones a fin de resolverse conlleva a un sacrifico para las mismas,
acudan ante los tribunales laborales, como actor o demandado, en el que pueden plantear
y resolver la pugna existente, y sobre todo en los abusos y opresión hacia la clase
trabajadora, que como solución para evitar ese tipo de pugnas, es el crear conciencia en
la clase patronal en el sentido de que deben de respetar la dignidad y equidad de sus
trabajadores, que tienen como consecuencia la disminución de conflictos que diariamente
se ventilan en defensas de sus derechos en las Juntas de Conciliación y Arbitraje,
interviniendo este órgano en las formas de terminación de las relaciones de trabajo, ya
sea en la ratificación y/o aprobación de convenio, desistimiento o transacción.

318
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

4.5.1 El convenio.

Esta forma de terminación de los conflictos de trabajo se encuentra encaminada a la


conciliación, que de manera cotidiana da por terminado anticipadamente los procesos, es
decir, sin esperar a que los tribunales de trabajo dicten el laudo, por lo que al celebrar
convenio las partes que integran la relación de trabajo es con la finalidad de poner fin al
conflicto y que sea aprobado por la Junta de Conciliación y Arbitraje.

El artículo 33 de la Ley Federal del Trabajo, lo interpretamos como un beneficio


establecido a favor de la clase trabajadora, que tiene como finalidad protegerlos contra la
celebración de convenios favorables al patrón, que son perjudiciales y lesivos a los
intereses del trabajador, lo que implica renuncia de sus derechos laborales; por tanto
mientras el pacto no cause perjuicio para aquéllos, el mismo es válido, aún cuando ese
convenio no haya sido sancionado por las Juntas de Conciliación y Arbitraje, pues el
aprobarlos no constituye la cosa juzgada, dado que no resuelve como órgano
jurisdiccional las situaciones sometidas en arbitraje.

Sirve de apoyo la Jurisprudencia sustentada por el Primer Tribunal Colegiado del Noveno
Circuito, publicada en la página 645, Apéndice 2000, Octava Época, Tomo V, Trabajo,
Jurisprudencia TCC, del tenor siguiente:

“CONVENIOS DE LIQUIDACIÓN DE LOS TRABAJADORES, SANCIONADOS POR LA


AUTORIDAD DEL TRABAJO. NO CONSTITUYEN COSA JUZGADA. (INDUSTRIAL
MINERA MÉXICO). Los convenios sancionados por una autoridad laboral, conforme al
segundo párrafo del artículo 33 de la Ley Federal del Trabajo, mediante los cuales los
trabajadores separados se dan por satisfechos en el pago de su liquidación, no
constituyen cosa juzgada, porque la Junta del Trabajo que lo aprobó, solamente sancionó
la manifestación de voluntad contenida en él, pero sin resolver al respecto como órgano
jurisdiccional; es por ello que no pueden ser equiparados a un laudo con los efectos
inherentes al mismo, pues no se dan dentro del juicio, como lo dispone el artículo 876,
fracción III, del ordenamiento legal señalado, ni puede sostenerse que el laudo con el que
concluyó el juicio en que se controvierte dicho convenio, constituya una revocación
respecto al contenido del propio convenio”.254

El artículo 123, apartado “A”, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
establece las condiciones nulas y que no obligan al trabajador, aún cuando se haya

254
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN. Semanario Judicial de la Federación, Octava Época,
Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia TCC, Apéndice 2000, p. 440.

319
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

expresado en el convenio, así como todas las demás estipulaciones que implican
renuncia de algún derecho consagrado a favor del trabajador, establecidas en la
legislación laboral existente. Por tal, si el convenio celebrado contiene renuncia de
derechos laborales es procedente la nulidad referente a la parte que lo contiene, dado que
la finalidad no es destruir los efectos del mismo, sino reclamar el reconocimiento de esos
derechos para ajustarlos a las normas establecidas en la ley o contrato.

Los convenios celebrados ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje, tiene plena validez,
ya que en su aprobación interviene la autoridad competente, cuya función es garantizar la
misma, así como la justicia y equidad del pacto. Los derechos laborales irrenunciables no
implica el hecho de hacer nulo el celebrar convenio y liquidación con el patrón, porque
tiene como consecuencia que en todos los casos en que existe diferencias sería
obligatorio acudir ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje para resolver las
controversias.

El artículo 33, segundo párrafo, de la Ley Federal del Trabajo, señala los requisitos que
como tales se exigen para la validez de todo convenio, al establecer: “Todo convenio o
liquidación, para ser válido, deberá hacerse por escrito y contener una relación
circunstanciada de los hechos que lo motiven y de los derechos comprendidos en él. Será
ratificado ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, la que lo aprobará siempre que no
contenga renuncia de los derechos de los trabajadores”.

En aras de dar debido cumplimiento a la disposición del artículo 33 de la Ley Federal del
Trabajo consideramos necesario reformar su texto, a efecto de adicionar un tercer párrafo,
mismo que proponemos determine lo siguiente: “Se dejará a salvo el derecho del
trabajador, para ser ejercitado en la vía legal correspondiente, cuando se le niegue
o restrinja derechos laborales”.

La reforma para adicionar el artículo en comento, es con la finalidad de evitar toda


limitación a los derechos del trabajador que implique renuncia, dado que sí se presenta
está situación en la que se beneficia al patrón en detrimento del primero y las Juntas de
Conciliación y Arbitraje al intervenir en las formas de terminación de las relaciones de
trabajo, ya sea en la ratificación y/o aprobación de convenio, desistimiento o transacción,
permiten que conlleven renuncia de derechos del trabajador y que aún así los aprueban,
ya sea por descuido o por exceso de asuntos que se ventilan a diario ante esos
funcionarios del trabajo, circunstancias éstas, por las que se deben dejar a salvo los
derechos del trabajador, para ejercitarlos en la vía que conforme a derecho le asista;

320
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

como ejemplo, en el ámbito penal, en el que al habérsele limitado los derechos laborales
del trabajador, independientemente de que se haya ratificado y/o aprobado convenio,
desistimiento o transacción, exista renuncia de derechos del trabajador, éste puede
querellarse por el delito de Discriminación, previsto y sancionado por el artículo 206,
facción III y penúltimo párrafo, del Nuevo Código Penal para el Distrito Federal, cometido
en su agravio y en contra del patrón y/o Junta de Conciliación y Arbitraje, pues dicho
dispositivo normativo establece: “Se impondrán de uno a tres años de prisión y de
cincuenta a doscientos días multa al que, por razón de edad, sexo, embarazo, estado
civil, raza, procedencia étnica, idioma, religión, ideología, orientación sexual, color de piel,
nacionalidad, origen o posición social, trabajo o profesión, posición económica,
características físicas o estado de salud: [ III.

Niegue o restrinja derechos laborales. Al servidor público que niegue o retarde a una
persona un trámite, servicio o prestación al que tenga derecho, se le aumentará en una
mitad la pena prevista en primer párrafo del presente artículo, y además se le impondrá
destitución o inhabilitación para el desempeño de cualquier cargo, empleo o comisión
públicos, por el mismo lapso de la privación de la libertad impuesta”. Tal reforma
consideramos necesaria, porque de esa forma se intimida a la clase patronal y a los
funcionarios del trabajo, evitando la renuncia a los derechos del trabajador, al ser de su
conocimiento que pueden incurrir en un ilícito previsto y sancionado por nuestra
legislación penal vigente.

En cuanto a los requisitos que debe contener todo convenio es aplicable la Jurisprudencia
sustentada por la Cuarta Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, visible en la
página 399, Apéndice 2000, Séptima Época, Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia SCJN, que
establece:

“RECIBO FINIQUITO LIBERATORIO. DEBEN ESPECIFICARSE


CIRCUNSTANCIALMENTE LOS CONCEPTOS QUE COMPRENDA. De acuerdo con lo
dispuesto en el artículo 33 de la Ley Federal del Trabajo de 1970, todo convenio o
liquidación para ser válido deberá contener una relación circunstanciada de los hechos
que lo motiven y de los derechos comprendidos en él; de manera que si en un finiquito
liberatorio no se especifican circunstancialmente los conceptos y no se determina el

321
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

periodo ni las prestaciones a que los mismos corresponde, es obvio que no se cumplieron
los requisitos a que se refiere el artículo 33 invocado255”.

Los requisitos que con anterioridad se señalan, tiene como objeto que el acuerdo de
voluntades celebrado, sea claro y preciso, con la narración correcta de los hechos y
derechos que lo motivaron, señalando la necesidad de que el convenio debe ser ratificado
ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, quien lo aprobara, siempre y cuando no contenga
renuncia de derechos del trabajador, lo que implica la defensa del trabajador contra todo
acto unilateral o arbitrario que se pretenda desarrollar por la necesidad económica, la falta
de educación y el desconocimiento de los derechos que como tal benefician al trabajador,
que por su importancia son irrenunciables, tal como exigir el cumplimiento de las normas
de trabajo, como el reclamar el pago de prestaciones devengadas.

En el convenio que celebran las partes que forman la relación de trabajo, en el mismo
debe claramente cuantificadas las indemnizaciones a que tiene derecho y prestaciones
adeudadas al trabajador, pues tiene como sanción la nulidad relativa, en caso de que sea
inexacta, exista error u omisión al determinarlas, lo que tiene como consecuencia que el
actor reclame el reconocimiento de esos derechos para ajustarlos a las normas
establecidos en la ley o contrato de trabajo, condenando al patrón a cubrir las diferencias
faltantes y el importe de las prestaciones omitidas, pero no origina la nulidad absoluta del
convenio, por no existir vicios respecto a la voluntad de las partes.

Es aplicable la Jurisprudencia sustentada por el Segundo Tribunal Colegiado del Quinto


Circuito, visible en la página 997, Apéndice 2000, Novena Época, Tomo V, Trabajo,
Jurisprudencia TCC, que señala:

“SALARIOS CAÍDOS, IMPROCEDENCIA DE, EN CASO DE NULIDAD RELATIVA DE


CONVENIO DE TERMINACIÓN DE LA RELACIÓN LABORAL.

Cuando una relación de trabajo concluye por voluntad de las partes, mediante un
convenio en el que se cuantifiquen las indemnizaciones correspondientes y las
prestaciones adeudadas, la circunstancia de que en el mismo se cometa inexactitud
matemática u omisión de precisar una prestación que se adeude, ello produce la nulidad
relativa del citado acuerdo de voluntades, que traería como consecuencia el que se
condenara al patrón a cubrir las diferencias faltantes y el importe de las prestaciones
omitidas, pero no origina la nulidad absoluta del convenio, por no existir vicios respecto a

255
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN. Semanario Judicial de la Federación, Séptima Época,
Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia, Apéndice 2000, p. 399.

322
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

la voluntad de los pactantes; luego, si el debate no versa sobre acción de despido alguno,
sino sobre la nulidad relativa del convenio, es inconcuso que de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 53 de la Ley Federal del Trabajo, con excepción de la hipótesis
aludida en los normativos 54 y 55, la terminación voluntaria del contrato laboral entre las
partes, aun con el defecto precisado, no genera la obligación del pago de salarios caídos,
toda vez que los mismos resultan ser una consecuencia inmediata y directa de las
acciones originadas en la hipótesis del despido o de la rescisión del contrato de trabajo
por culpa del patrón, al tenor de lo previsto en los numerales 48 y 52 de la ley en consulta,
por lo que la condena que en tal supuesto haga la Junta responsable respecto al pago de
salarios caídos deviene improcedente y violatoria de las garantías de legalidad y exacta
aplicación de la ley, tuteladas en los artículos 14 y 16 constitucionales”256.

El artículo 123, apartado “A”, fracción XX, de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, consagra que: “Las diferencias o los conflictos entre el capital y el
trabajo se sujetarán a las decisiones de una Junta de Conciliación y Arbitraje, formada por
igual número de representantes de los obreros y de los patrones y uno del gobierno”; de
aquí que ante estos órganos autónomos de la jurisdicción social, se resuelven los
conflictos laborales los que se realiza en dos etapas del procedimiento, que son la
conciliación y arbitraje.

La conciliación, como primera etapa del procedimiento, se desarrolla con la intervención


de una tercera parte neutral cuya función es que ayude a las partes en conflicto a
resolverlo, invitándolos a la negociación o continúen negociando, que les permita llegar a
un acuerdo en común; por lo que no estamos ante la renuncia de derechos laborales,
pues al no haber sido resuelto ese conflicto con un laudo, no implica cosa juzgada.

Y por lo que corresponde al arbitraje, es la solución proveniente de un tercero ajeno a la


relación de trabajo, cuya resolución es obligatoria, en virtud del acuerdo de las partes de
someterse a ese procedimiento, acuerdo que debe ajustarse, en todo caso, a los términos
permitidos por la ley.

Cuando ante la autoridad del trabajo se presentan el patrón y el trabajador, para presentar
un convenio o ante esa comparecencia celebran tal pacto, con la finalidad de dar por
terminado por mutuo consentimiento la relación de trabajo, en el que al trabajador se le
gratifica, esto con la finalidad de que ese convenio sea ratificado y aprobado, debe ser

256
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN. Semanario Judicial de la Federación, Novena Época,
Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia TCC, Apéndice 2000, p. 997.

323
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

cuidadosa la autoridad laboral, siendo su obligación estudiarlo, para que este en


posibilidades de aprobarlo o rechazarlo en caso de que contenga renuncia de derechos
laborales, pues ante la omisión de ese análisis existe la posibilidad que se aprueben
convenios que perjudiquen al trabajador y que fomente esa práctica en beneficio de los
intereses del patrón.

Resulta aplicable la Jurisprudencia 1.5o.T.J/2, sustentada por el Quinto Tribunal


Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito, publicada en la página 439, del
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo II, Noviembre de
1995, que establece:

“RELACIÓN LABORAL. TERMINACIÓN VOLUNTARIA DE LA, SUS LIMITACIONES Y


EFECTOS. Es indiscutible que el convenio de terminación voluntaria de la relación
laboral, con su ratificación y aprobación por la Junta de Conciliación y Arbitraje, en la que
constata la anuencia de las partes, así como la gratificación que hace la patronal al
trabajador, excluye a la acción rescisoria y a la renuncia de prestaciones legales o
pactadas que contempla el artículo 33 del código obrero, pues con tal recompensa se da
por satisfecho de lo que pudiera corresponderle respecto de su contrato, el cual concluye
de conformidad con el numeral 53, fracción I, de la legislación en comento257”.

Es común que el trabajador al celebrar un convenio con el patrón, manifieste que se da


por pagado de todas las prestaciones que nacieron a su favor derivadas de la relación de
trabajo, aun cuando este reconozca que no existe adeudo alguno a su favor,
conformándose con su liquidación; tales manifestaciones no implican que hayan sido
cubiertas en su totalidad por el patrón, por lo que el trabajador posteriormente puede
reclamar ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje, el pago de las prestaciones que se
omitieron, demandando la nulidad relativa de ese pacto, en lo que contenga renuncia de
derechos en perjuicio del trabajador pactante, siendo indispensable que al demandar
debe contener la expresión de nulidad de convenio en el que se da por terminado la
relación de trabajo, pues de lo contrario, surtirá efectos plenos ese instrumento.

Es aplicable la Jurisprudencia sustentada por el Segundo Tribunal Colegiado del Décimo


Noveno Circuito, visible en la página 1022, Apéndice 2000, Novena Época, Tomo V,
Trabajo, Jurisprudencia TCC, al tenor de lo siguiente:

257
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN. Semanario Judicial de la Federación, Novena Época,
Tomo II, Noviembre de 1995, p. 439.

324
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

“SUPLENCIA DE LA QUEJA EN MATERIA LABORAL. NO TIENE EL ALCANCE DE


ALTERAR LAS PRESTACIONES RECLAMADAS. Si en la demanda laboral el trabajador
no reclamó la nulidad del convenio en el que se da por terminada la relación laboral en
términos del artículo 53, fracción I, de la Ley Federal del Trabajo, ese acuerdo de
voluntades debe prevalecer en todos y cada uno de sus términos; pues la suplencia de la
queja en materia laboral no tiene el alcance de alterar las prestaciones reclamadas, amén
de que dicho convenio fue sancionado por la Junta en tanto que se estimó que no
contenía renuncia alguna de derechos del trabajador en términos de lo dispuesto por el
artículo 33 de la Ley en comento258”.

Las partes también pueden celebrar convenios para la ejecución de los laudos, a efecto
de poner fin al conflicto laboral; por lo que más adelante hablaremos de la problemática
existente que en la práctica se presentan, que implica renuncia de derechos laborales.

4.5.2 El desistimiento.

Es importante señalar que la Ley Federal del Trabajo en lo que toca al tema del
desistimiento no hace mención específica, pero en cierta medida no con sentido
estrictamente procesal, admite los convenios (Art. 33 L. F. T.) y habla ampliamente de la
caducidad. El desistimiento como tal es la conducta o declaración de la voluntad del actor
orientada a la renuncia, bien de la acción (pretensión) o de la demanda (instancia); por
tanto, los escritos que lo contengan, deben ser ratificados ante la Junta de Conciliación y
Arbitraje, ordenando su reserva, hasta en tanto sea reconocido su contenido y firma de la
promoción que la contiene, de esa manera la autoridad se asegurara si es o no la
voluntad del trabajador.

4.5.2.1 De la acción.

El desistimiento de la acción implica que se extingue el derecho, por tanto, si la Ley


Federal del Trabajo no condiciona el desistimiento a la voluntad del demandado, es
evidente que no es necesario recabarla para admitirla, ya que toda acción lleva consigo el
derecho a dejarla sin efecto, máxime que en el proceso laboral mexicano no contempla la
condenación en costas, esto como resultado al sentido proteccionista, dado la calidad de
actores resulta tener la mayoría de ocasiones el trabajador, lo que tiene como
consecuencia que el derecho sustantivo ha quedado prescrito. Este tipo de desistimiento

258
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN, Semanario Judicial de la Federación, Novena Época,
Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia TCC, Apéndice 2000, p. 1022.

325
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

se puede dar en cualquier etapa del procedimiento hasta antes de que se dicte el laudo
correspondiente.

El artículo 773, primer párrafo, de la Ley Federal del Trabajo, señala que se tendrá por
desistida de la acción intentada a toda persona que no haga promoción alguna en el plazo
de seis meses, siempre y cuando ésta sea necesaria para la continuación del
procedimiento; y en su segundo párrafo, establece un procedimiento específico cuando se
solicite que se tenga por desistido al actor de las acciones intentadas, dado que indica
que, en ese caso, la Junta citará a las partes a una audiencia en la que después de oírlas
y recibir las pruebas que ofrezcan, únicamente respecto de la procedencia o
improcedencia del desistimiento, dictará la resolución que proceda; lo que implica la
renuncia de los derechos sustantivos del actor. El desistimiento de la acción no implica
que exista cosa juzgada, pues para que se de esta modalidad se necesita que exista
acciones ejercitadas y un pronunciamiento de derecho, el cual no se emite y por tanto no
se entra al estudio de la procedencia de esas acciones.

En este orden de ideas, entendemos que al extinguirse la pretensión o contenido de la


acción, como consecuencia, se extingue la instancia, por esa razón hablaremos de dos
causas de extinción de la acción, que por su importancia destacan el en proceso, siendo
estas la prescripción y la caducidad.

La prescripción la entendemos como un medio para adquirir un derecho o liberarse de


una obligación, por el solo transcurso del tiempo. El primer supuesto lo que conocemos
como adquisitiva, y el segundo se conoce como prescripción negativa, que es la sanción
aplicable tanto para la instancia como a la pretensión, por abandono del derecho de la
parte interesada, antes de ejercitarse la acción, que atañe a la extinción de la preclusión
contenida en la misma.

La Ley Federal del Trabajo encontramos que contempla la prescripción negativa, en su


Título Décimo, que establece sus elementos, que son: 1) Tiene su inicio a partir de que la
obligación es exigible; 2) Que haya transcurrido determinado tiempo; 3) Que el titular de la
acción no la ejercite, en este caso perjudica al trabajador, y 4) Que exista una parte que
ejercite la acción o se excepcione haciéndola valer, que en este caso le beneficia al
patrón.

Por regla general es de un año, tal y como se aprecia del contenido del artículo 516 de la
Ley Federal del Trabajo, que señala: “Las acciones de trabajo prescriben en un año,

326
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

contado a partir del día siguiente a la fecha en que la obligación sea exigible, con las
excepciones que se consignan en los siguientes artículos”.

El artículo 517 de la Ley Federal del Trabajo, señala que prescriben en un mes:

“I. Las acciones de los patrones para despedir a los trabajadores, para disciplinar sus
faltas y para efectuar descuentos en salarios; y II. Las acciones de los trabajadores para
separarse del trabajo.

En los casos de la fracción I, la prescripción corre a partir, respectivamente, del día


siguiente a la fecha en que se tenga conocimiento de la causa de la separación o de la
falta, desde el momento en que se comprueben los errores cometidos, o de las pérdidas o
averías imputables al trabajador, o desde la fecha en que la deuda sea exigible.

En los casos de la fracción II, la prescripción corre a partir de la fecha en que se tenga
conocimiento de la causa de separación”.

El artículo 518 de la Ley Laboral invocada, establece:

“Prescribe en dos meses las acciones de los trabajadores que sean separados del
trabajo.

La prescripción corre a partir del día siguiente a la fecha de la separación”.

Está disposición legal es aplicable en los casos en que el trabajador ejercita la acción de
indemnización constitucional o de reinstalación, plazo que por su corta duración es
delicado el arriesgarse esperar hasta el último momento para ejercitaras, por lo que es
recomendable que de inmediato las haga valer ante las Juntas una vez que es separado
de la fuente de trabajo, a efecto de no perder sus derechos.

También la Ley Laboral en comento señala en su artículo 519 lo siguiente:

“Prescriben en dos años:

I. Las acciones de los trabajadores para reclamar el pago de indemnizaciones por riesgo
de trabajo;

II. Las acciones de los beneficiarios en los casos de muerte por riesgo de trabajo;

III. Las acciones para solicitar la ejecución de los laudos de las Juntas de Conciliación y
Arbitraje y de los convenios celebrados ante ellas.

La prescripción corre, respectivamente, desde el momento en que se determine el grado


de la incapacidad para el trabajo; desde la fecha de la muerte del trabajador, y desde el

327
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

día siguiente al en que hubiese quedado notificado el laudo de la Junta o aprobado el


convenido. Cuando el laudo imponga la obligación de reinstalar, el patrón podrá solicitar
de la Junta que fije al trabajador un término no mayor de treinta días para que regrese al
trabajo, apercibiéndolo que de no hacerlo, podrá el patrón dar por terminada la relación de
trabajo”.

La prescripción no puede comenzar ni corre, cuando se encuentran en los supuestos


establecidos en el artículo 520 de la Ley Federal, que dice:

“I. Contra los incapaces mentales, sino cuando se haya discernido su tutela conforme a la
ley; y

II. Contra los trabajadores incorporados al servicio militar en tiempo de guerra”.

Ahora bien, la prescripción se interrumpe, en los siguientes casos, que señala el artículo
521 del ordenamiento laboral multicitado, al establecer:

I. Por la sola presentación de la demanda o de cualquiera promoción ante la Junta de


Conciliación y Arbitraje, independientemente de la fecha de la notificación. No es
obstáculo para la interrupción, que la Junta sea incompetente; y II. Si la persona a cuyo
favor corre la prescripción reconoce el derecho de aquélla contra quien prescribe, de
palabra, por escrito o por hechos indudables”.

Y el artículo 522 de la Ley Federal del Trabajo, señala: “Para los efectos de la
prescripción, los meses se regulan por el número de días que le corresponda. El primer
día se contará completo, aun cuando no lo sea, pero el último debe ser completo y
cuando sea feriado, no se tendrá por completa la prescripción sino cumplido el primero útil
siguiente”.

La noción de prescripción fue ligada al concepto de preclusión, que tiene por efecto la
pérdida, extinción o caducidad de una facultad procesal por solo el transcurso del tiempo,
al no haberlo ejercitado en tiempo en que el interesado estuvo en posibilidad de hacerlo;
tal y como lo establece el artículo 738 de la Ley Federal del Trabajo, que señala:
“Transcurridos los términos fijados a las partes, se tendrá por perdido su derecho para
ejercitarlo, sin necesidad de acusar la rebeldía”.

Ahora bien, la caducidad la entendemos como la inactividad procesal por un cierto tiempo
que deja sin efectos el procedimiento, en virtud de la falta de interese de las partes de dar
continuidad con el mismo, supuesto que no se actualiza si una de las partes actúa,
aunque la otra se abstenga de hacerlo, por lo que no opera la caducidad, dado que tiene

328
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

la facultad procesal de impulsar el procedimiento. Cuando las partes o una de ellas se


encuentra impedida de ejercer ese atributo por encontrarse suspendido el procedimiento,
o que no requiera su actividad, por encontrase pendiente pruebas que desahogar, la
caducidad no se genera. Al respecto el artículo 773 de la Ley Federal del Trabajo, se
refiere a la caducidad como desistimiento tácito de la acción. Los artículos 771 y 772 del
ordenamiento legal antes invocado, impone como obligación a los Presidentes de las
Juntas y los Auxiliares cuidar, que los juicios no queden inactivos, previniendo en su caso
al trabajador para que promueva para evitar la caducidad, esto sí ha dejado de promover
dentro del lapso tres meses, el Presidente de la Junta ordenara se le requiera para que la
presente, apercibido que de no hacerlo, operara la caducidad. En el caso de que el
trabajador esté patrocinado por la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, le realizara esa
notificación para los efectos conducentes de su representación, o de no estar patrocinado
por esa Procuraduría, se le hará saber ese acuerdo, para que intervenga ante el
trabajador y le proporcione accesoria legal en caso de que el trabajador se la requiera,
haciéndole saber cuáles son las consecuencias legales de la falta de promoción. En caso
de muerte del trabajador, el procedimiento se suspende, como lo establece el artículo 774
de la Ley Federal del Trabajo, hasta en tanto comparecen a juicio sus beneficiarios, por lo
que la Junta hará solicitud al Procurador de la Defensa del Trabajo, en los términos y para
los efectos contenidos en el artículo 772 de la Ley Laboral invocada.

4.5.2.2 De la demanda.

El desistimiento de la demanda tiene como finalidad el dejar sin efectos el procedimiento,


volviendo las cosas al estado en que se encontraban antes de la presentación de la
misma; esto es, no es aplicable por analogía lo establecido en el artículo 773, párrafo
segundo, de la Ley Federal del Trabajo, en lo que respecta al que realiza en el juicio
laboral por parte del trabajador, pues como señalamos en el punto anterior, indica un
procedimiento específico cuando se solicite que se tenga por desistido al actor de las
acciones intentadas, puesto que señala que, en ese caso, la Junta citará a las partes a
una audiencia en la que después de oírlas y recibir las pruebas que ofrezcan, únicamente
respecto de la procedencia o improcedencia del desistimiento, dictará la resolución que
proceda. Ahora bien, tal párrafo no es aplicable para subsanar la laguna de la Ley Federal
del Trabajo respecto de la manifestación expresa del trabajador para desistir de la
instancia, porque este desistimiento, solo implica la renuncia de los actos procesales, sin
que ello afecte la acción intentada, lo que ocurre es que fenece el procedimiento,

329
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

volviendo las cosas al estado que tenían antes de la presentación de la demanda,


conservando su derecho de acción, pudiendo volver a promover un juicio mediante el cual
ejercite sus pretensiones, esto haciéndolo valer en un nuevo proceso, en virtud de que no
implica renuncia de los derechos sustantivos, sino implica de los actos procésales; es
decir, el desistimiento de la instancia implica exclusivamente la renuncia de los actos en el
proceso pero no de los derechos sustantivos del actor, por lo que en éste caso, si bien es
cierto que las cosas vuelven al estado que tenían antes de la presentación de la
demanda, también lo es que el actor puede volver a promover un juicio mediante el cual
nuevamente intente la satisfacción de sus pretensiones consagradas en el artículo 48 de
la Ley Federal del Trabajo, así como las prestaciones generadas a que tenga derecho al
momento de exigirlas, siempre y cuando no haya operado en su perjuicio la prescripción
de lo reclamado. Ahora bien, es importante señalar que el artículo 773, párrafo segundo,
de la Ley Laboral en cita, lo concibió el legislador con el objetivo inmediato de proteger en
el proceso respectivo los intereses de los trabajadores, mediante la tutela de sus
derechos, pero no de sujetos diferentes a esta figura, como en el caso lo es, la parte
demandada, que comúnmente es el patrón.

4.5.3 La transacción.

Entendemos la transacción como un contrato bilateral por lo cual las partes celebrantes,
haciéndose recíprocas concesiones, terminan una controversia presente o previene una
futura. La celebración de los mismos implica la renuncia de derechos de los trabajadores,
ya en forma parcial o total, la cual se da desde el inicio de la relación del trabajo o en un
convenio celebrado posteriormente, para darla por terminada, pues implica el hecho de
que se celebren contratos de trabajo en el que se fijan condiciones menores a las
consagradas por la Ley, dado que su único fundamento es la voluntad del patrón y
trabajador; pero aun cuando es verdad que los convenios que se celebran ante las Juntas
de Conciliación y Arbitraje tiene plena validez, si estos son aprobados, no menos cierto
es el hecho, que si el mismo contiene renuncia de derechos, como tal es nulo en su
parte conducente, por lo que el trabajador podrá hacer valer esa nulidad, con
fundamento en el artículo 123, apartado “A”, fracción XXVII, de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, y artículo 5° de la Ley Federal del
Trabajo, en el que señalan que disposiciones o condiciones son nulas.

Los derechos laborales irrenunciables entran en conflicto con la figura de la transacción,


pues en esta última las partes se hacen recíprocas concesiones, en el que el trabajador lo

330
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

hace cediendo sobre el monto de las prestaciones a que tiene derecho, no conteniendo la
verdad de las prestaciones reclamadas.

Para el otorgamiento de convenios o desistimientos es evidente que los mismos se dan


por la transacción que previamente conviene las partes, en virtud de que al celebrar un
convenio, difícilmente se le paga al trabajador lo que por ley le toca, con interdependencia
de la acción ejercitada o prestaciones reclamadas; por tanto es recomendable ante tal
desproporcionalidad, el orientar al trabajador a que continúe con el juicio hasta obtener un
laudo, en el que condene al patrón al pago de todas y cada una de las prestaciones
reclamadas, evitando así la renuncia de derechos consagrados a favor del trabajador.

Resulta aplicable la Jurisprudencia sustentada por el Primer Tribunal Colegiado en


Materia de Trabajo del Primer Circuito, publicada en la página 964, Apéndice 2000,
Octava Época, Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia TCC, que establece:

“REINSTALACIÓN, ALLANAMIENTO Y TRANSACCIÓN EN LA DILIGENCIA DE. El


allanamiento en nuestro lenguaje jurídico procesal es el acto que expresa la voluntad del
demandado de someter o de asentir, en forma total o parcial, sin lucha judicial al
contenido de la pretensión del actor, reconociendo expresamente su legitimidad, con lo
cual se da por terminado el conflicto en cuanto a la parte admitida, renunciando al
derecho de defenderse, de lo cual en los casos en que se reclama la reinstalación, a
virtud de aquella figura queda agotada la acción principal con la aceptación y restitución
material del reclamante a su trabajo, por tanto si en la diligencia correspondiente se varían
los términos, así como las condiciones en que originalmente se venía desempeñando,
aspecto que acepta el reclamante, ello no puede ser materia ya del laudo que dicte la
Junta, porque es consecuencia del allanamiento que no constituye ninguna excepción
encaminada a la controversia, sino es un acto diverso del demandado con el cual se
conforma el actor”259.

Ahora bien, el desistimiento para lograrlo a través de la transacción por parte del
demandado (patrón), le propone una cierta cantidad de dinero al trabajador, para que este
a su vez decline de la acción intentada.

Por lo que respecta a los laudos, en términos del artículo 945 de la Ley Federal del
Trabajo, éstos deben ser cumplidos en el término de setenta y dos horas siguientes a la
que surta efectos la notificación, en el que las partes pueden convenir las modalidades de

259
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACION, Semanario Judicial de la Federación, Octava Época,
Tomo V, Trabajo, Jurisprudencia TCC, Apéndice 2000, p. 964.

331
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

su cumplimiento. Por tanto si en el laudo respetivo existe condena al patrón de pagar una
cantidad de dinero al trabajador, este puede pagarse en diversas exhibiciones, ya que la
finalidad es que el laudo se cumpla en los términos contenidos.

El artículo 33 de la Ley Federal del trabajo, señala en su primer párrafo que: “Es nula las
renuncia que los trabajadores hagan de los salarios devengados, de las indemnizaciones
y demás prestaciones que deriven de los servicios prestados, cualquiera que sea la forma
o denominación que se le dé”; por tanto en la relación de trabajo no debe incluirse ni
permitir que existan cláusulas que implique renuncia de derechos laborales, pues ante la
transacción de derechos derivados de normas de trabajo, tiene como consecuencia la
nulidad , por tratarse de derechos adquiridos que no admiten renuncia por parte del
trabajador. Los derechos laborales irrenunciables tiene la finalidad de proteger al
trabajador, lo que significa que tanto este como el patrón no pueden convenir en dejar sin
efectos disposiciones del Derecho del Trabajo cuyas normas rigen las circunstancias para
lo cual fueron creadas, es decir, el trabajador no debe aceptar ni permitir condiciones
inferiores a las fijadas por la ley, ni durante la relación de trabajo ni después de terminada
ésta.

En el caso de la renuncia del trabajador, tal situación no requiere que la Junta de


Conciliación y Arbitraje la apruebe, pues antes de acudir ante este órgano jurisdiccional
para exigir el cumplimiento del contrato, realizan una transacción respecto de esa
renuncia con el patrón, que ponga fin al conflicto laboral, que evita llegar al laudo.

4.5.3.1 El laudo.

La Ley Federal del Trabajo clasifica las resoluciones laborales en tres categorías,
establecidas en su artículo 837, que son:

“I. Acuerdos: si se refieren a simples determinaciones de trámite o cuando decidan


cualquier cuestión dentro del negocio.

II. Acuerdos incidentales o resoluciones interlocutorias: cuando resuelven dentro o fuera


de juicio un incidente; y

III. Laudos: cuando deciden sobre el fondo del conflicto.

Las resoluciones laborales tienen carácter jurisdiccional; éstas no se circunscriben a la


decisión con la que culmina el proceso, sino que hay actividad jurisdiccional en todos los
proveimientos que recaigan en el curso del proceso mismo. Por lo que en éste punto nos

332
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

concretaremos hablar de las resoluciones de las Juntas de Conciliación y Arbitraje que le


dan fin al proceso laboral, que son los laudos.

El jurista Alberto Trueba Urbina señala que “El laudo es la resolución ipso iure
pronunciada por las Juntas de Conciliación y Arbitraje en el proceso que decide en
definitivamente el fondo de los conflictos del trabajo, ya sean jurídicos o económicos260”.
El carácter de definitivo está establecido en el artículo 848, párrafo primero, de la Ley
Federal de Trabajo, el cual señala: “Las resoluciones de las Juntas no admiten ningún
recurso. Las juntas no pueden revocar sus propias resoluciones”; pero sólo tendrán esa
calidad de firme cuando no haya sido impugnada dentro de término legal mediante el
juicio de amparo, como lo establece el artículo 44 de la Ley de Amparo, o si después de
haberse promovido éste se haya negado, alcanzando el carácter de cosa juzgada, de
conformidad con el artículo 80 de la Ley de Amparo.

En las Reformas Procesales de 1980 que se agregaron a la Ley Federal del Trabajo, en
especial, en su artículo 847, establece la aclaración de los laudos, que señala:

“Una vez notificado el laudo, cualquiera de las partes, dentro del término de tres días,
podrá solicitar a la Junta la aclaración de la resolución, para corregir errores o precisar
algún punto. La Junta dentro del mismo plazo resolverá, pero por ningún motivo podrá
variarse el sentido de la resolución.

La interposición de la aclaración, no interrumpe el término para la impugnación del laudo”.

La aclaración de los laudos, no es un recurso, ni mucho menos una resolución de la


Junta, se trata de una depuración del texto, sin alterar el sentido de los pronunciamientos
contenidos en el laudo.

Por la naturaleza del conflicto laboral los laudos pueden tener el carácter de declarativos
que son los que reconocen la existencia o inexistencia de un derecho o de una relación de
trabajo; los que condenan al cumplimiento de una obligación o al pago de determinadas
prestaciones; y los constitutivos son aquéllos que implantan una nueva condición en una
situación jurídica, económica o contractual existente, o modifica éstas. También cuando el
laudo resuelve un conflicto colectivo jurídico en atención a su naturaleza se le llama laudo
colectivo jurídico; y cuanto resuelve una controversia que por su naturaleza económica, se
le nombra laudo colectivo económico.

260
TRUEBA URBINA, Alberto. Nuevo Derecho Procesal del Trabajo, Sexta edición, Porrúa, México1982,
p.392.

333
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La jurisdicción del trabajo radica su importancia: por una parte de la aplicación e


interpretación de la Ley Laboral, y por otro lado implica una creación de derecho laboral,
es decir, al individualizar la norma crea una norma jurídica. La Ley tiene que estar dentro
de los principios constitucionales, que es la norma superior base de la fundamentación
jurídica para las norma inferiores, pues de lo contrario será una Ley inconstitucional; por
tanto, el juzgador al aplicar la Ley crea una norma y esa norma tiene que ubicarse en el
ordenamiento legal, dentro de los principios de la Ley, y nunca transgredirla.

La jurisdicción del trabajo es la jurisdicción aplicada a la resolución de los conflictos de


carácter laboral, y el órgano de las mismas son las Juntas de Conciliación y Arbitraje. La
Ley Federal del Trabajo rige los laudos de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, conforme
a los artículos 840 y 841, tanto en las reglas de procedimiento como en la estructura
jurídica de los mismos, que implica que deben estar fundados y motivados; como
consecuencia, están sujetos al control constitucional del juicio de amparo, en el ámbito de
las garantías de legalidad y seguridad jurídica de los artículos 14 y 16 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos.

La equidad en los laudos y la apreciación de los hechos, no solamente implica una


sutileza jurídica, sino que tiene alcances de gran trascendencia, pues atañe a la eficacia
de las funciones jurisdiccionales de las Juntas y especialmente al sentido de los laudos,
donde culmina su actividad jurisdiccional.

La equidad para las Juntas de Conciliación y Arbitraje constituye un principio medular que
está presente en toda la justicia laboral, esto es, no sólo como complementario de la Ley
para integrar las llamadas lagunas, sino encontrándose inmerso en toda la actividad
jurisdiccional de las Juntas; en consecuencia, si la norma rectora del laudo es la verdad
sabida que es la verdad del hecho hallada y probada en el proceso, su complemento de
ésta debe ser la buena fe guardada, que significa que se ha de guardar equidad de la
justicia, con el dulzor de la misericordia, porque la buena fe es equidad y la equidad es
temperamento del rigorismo.

En términos de los artículos 876 fracción III y 945 de la Ley Federal del Trabajo, a efecto
de poner fin al conflicto laboral las partes pueden celebrar entre ellos convenios dentro del
proceso, como ya nos hemos referido anteriormente en éste capítulo, y también se
celebran para la ejecución de los laudos; en éste último caso en específico, existe la
problemática que cuanto el convenio se pretende celebrarlo después de que los tribunales
del trabajo dicta laudo condenatorio que favorece al trabajador, encontrándose pendiente

334
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de resolverse el amparo planteado en su contra e inclusive ya resuelto ese juicio de


garantías en el que la Justicia de la Unión no ampara ni proteja al quejoso o en su caso,
por estar en alguna causal de improcedencia establecidas en los artículos 73 y 74 de la
Ley de Amparo, que resuelva sobreseer el juicio de amparo promovido por el imperante
de garantías, de tal forma que el laudo emitido queda firme de forma definitiva.
Problemática notable que implica renuncia de derechos laborales, es así porque, al
encontrarse en la práctica con litigantes experimentados buscan la negociación con el
actor (trabajador), por lo que una vez obtenido su consentimiento proceden a simular
convenios, que implica en ocasiones que el trabajador reciba una cantidad de dinero
inferior que conforme a la Ley no le corresponde, esto argumentando un pago previo
hecho por fuera de la Junta, que indebida y erróneamente el trabajador acepta haber
recibido, por lo que suman la cantidad entregada anticipadamente a la cantidad total de la
condena; tal simulación es en perjuicio del trabajador, porque no habrá constancia de
renuncia alguna y a su vez fomenta su práctica.

335
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

CAPITULO 5 Actualidad y Perspectiva en el derecho laboral y sindical

5.1 La nueva cultura laboral.

En la dinámica de la economía nacional, y de manera muy particular, desde la década de


los 80’ del siglo XX, la clase trabajadora ha tenido que contener sus ímpetus de
transformación de sus condiciones de trabajo con la esperanza de que la política laboral
en realidad se encaminara a dar respuesta a sus reclamos de justicia social.

En 1982 el déficit presupuestal llegaba a niveles cercanos al 230% del PIB261 , la crisis de
la deuda externa impedía seguir utilizando el financiamiento externo como mecanismo
corrector de los desequilibrios estructurales, el acuerdo con el Fondo Monetario
Internacional (FMI) significó un cambio de 180 grados en la estrategia y políticas
económicas, y a partir de 1983 el gobierno aplicó un severo programa de ajuste de corte
neoliberal, y se puso en marcha el Programa Inmediato de Recuperación Económica
(PIRE), que no era otra cosa que la puesta en práctica de los acuerdos establecidos con
el FMI y el bloque acreedor262.

Ante este escenario, a fines de 1987 se firmó el Pacto de Solidaridad Económica (PSE)
enfocado a controlar la inflación aguda, que había alcanzado un promedio de 159% y que
amenazaba en convertirse en hiperinflación; la experiencia de dicho instrumento político
económico, demostró que para detener

una inflación alta y persistente, era necesario aplicar políticas de ingreso, y en el caso
mexicano, la concertación en materia de precios y salarios se facilitó por la existencia de
un sistema político corporativo, donde las decisiones son tomadas por el gobierno y por
las cúpulas empresariales y del movimiento obrero, al margen de las bases que
representan.263

Con lo antes dicho, en los siguientes temas se mencionan los antecedentes de la nueva
cultura laboral, sus elementos y su relación con los derechos laborales, lo que se ha
traducido en un sometimiento de los trabajadores bajo la premisa de que ya no existe la
lucha de clases y que se deben romper paradigmas que obstaculizan el crecimiento y
desarrollo económico, que el trabajo se visualice como el medio para la superación y se
reforme la Ley Federal del Trabajo, para, supuestamente, generar las condiciones que

261
El Producto Interno Bruto es el valor total de la producción de bienes y servicios finales generados dentro
del territorio nacional durante un cierto periodo de tiempo.
262
Cfr., Guillén N, Arturo, óp. cit., nota 54, pp. 3739.
263
Cfr., Ibídem, pp. 6770.

336
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

favorezcan la creación de empleos, mayor productividad y, en consecuencia, mejores


retribuciones al trabajo flexible; propósitos o fines que son contrarios a la realidad
socioeconómica de los trabajadores.

5.1.1 Antecedentes.

En el año de 1982 la economía mexicana se encontraba paralizada, las autoridades


hacendarias recurrieron a la devaluación, el peso se dejó flotar y sufrió una devaluación
de 153 %, y el grupo en el poder, un grupo básicamente tecnocrático, optó por introducir
en México el enfoque neoliberal; que consistía, en resumen, introducir los principios
enunciados tiempo atrás por la escuela económica de Chicago: disminución drástica del
sector económico estatal, aliento a la lógica del mercado y destrucción de las barreras
proteccionistas e incorporación a los procesos de la economía global. Con la
incorporación de México al Acuerdo General sobre Aranceles y Tarifas (GATT) en 1986,
se inició el desmantelamiento de la histórica muralla proteccionista creada por el gobierno
mexicano desde 1940.264

Las decisiones que se tomaron entre 1982 y 1988 en relación con la reducción de
aranceles, la entrada de México al GATT y la privatización de empresas estatales,
contribuyeron a delinear el proceso de reestructuración de la economía mexicana, y en lo
referente a la dinámica de las empresas privatizadas se manifestaron diversas medidas
que transformaron a fondo las formas de operación de dichas empresas en términos de
empleo, administración, contratación colectiva y atribuciones de los delegados
sindicales.265

El Pacto de Solidaridad Económica se aplicó en tres etapas, y en la segunda, la


concertación de precios, el amarre del tipo de cambio mediante una política de
deslizamiento predeterminado y una política salarial de aumentos del salario mínimo
inferiores a la inflación pasada, fueron las anclas principales de la inflación y permitieron,
en ese entonces, la eliminación gradual de la inercia inflacionaria; dicho acuerdo resultó
exitosos en los dos primeros años de vigencia para abatir la inflación inercial, al reducirla
de 160% a 20%, pero al convertirse en un instrumento sucesivo y permanente, dio origen
a importantes distorsiones entre las que destacan la contención salarial en detrimento de
las condiciones de vida de los trabajadores.266

264
Cfr., Meyer, Lorenzo, óp. cit., nota 78, p. 898.
265
Cfr., Zapata, Francisco, óp. cit., nota 55, pp. 3336.
266
Cfr., Guillén N, Arturo, óp. cit., nota 54, pp. 7375.

337
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En el contexto de una política laboral que imponía topes a los incrementos salariales, y de
una postura de la clase empresarial para flexibilizar las relaciones de trabajo, a pesar de
que dicha flexibilización era contraria a las normas de trabajo vigentes y que en muchos
de los casos fue con el respaldo de las autoridades del trabajo, en mayo de 1992 se firmó
el Acuerdo Nacional para la Elevación de la Productividad y la Calidad, después de una
azarosa negociación por la vía de los tradicionales arreglos copulares entre el gobierno y
las representaciones sindicales y empresariales, lo que representó la oficialización del
propósito de vincular los salarios a la productividad generada en el nivel de la empresa.267

En el esquema de una economía competitiva y de innovaciones tecnológicas en los


procesos de producción, la postura de la clase empresarial se orientó al abatimiento de
los costos a expensas de la contracción de los salarios, la manifestación de una
flexibilidad del tiempo de trabajo y la exigencia de la polifuncionalidad de los trabajadores,
y de la instauración o imposición de ciertos principios de conducta entre ellos, para
modificaran el modo de ver y sentir el trabajo, lo que se tradujo en un modelo de
sometimiento cognitivo y axiológico por parte del capital y en el mes de agosto de 1996 se
firmaron los Principios de la nueva cultura laboral , entre el gobierno federal y los
representantes de las organizaciones sindicales y empresariales.

5.1.1.1 Concepto de nueva cultura del trabajo.

En el espacio donde se desarrollan las actividades laborales, es común que se


manifiesten o exterioricen, ya sea de manera individual o colectiva, actitudes que reflejan
la manera de percibir el trabajo, y sólo es posible hablar de una nueva cultura del trabajo
cuando se han interiorizado en las personas, ideas que modifiquen paradigmas del
pensamiento y se provoque en ellas, en consecuencia, un proceso de cambio para que le
encuentren sentido a las tareas que realizan y, por tanto, tengan voluntad por hacerlas
bien, y su comportamiento sea diferente y se encause hacia propósitos que se alineen a
sus intereses y requerimientos.

Lo anterior, como se aprecia, puede tener una orientación diferente y no responder a las
expectativas de los trabajadores para ser debidamente recompensados por su esfuerzo, y
se llega a confundir lo que realmente es la cultura del trabajo con las pretensiones de la
clase empresarial: una conducta de sumisión por parte de los trabajadores, flexibilización
de las condiciones de trabajo en detrimento de los derechos laborales sustantivos y
267
Cfr., Bensusán, Graciela, “Los determinantes institucionales de la flexibilidad laboral en México”, en
Zapata, Francisco, (comp.) ¿Flexibles y productivos?: estudios sobre flexibilidad laboral en México, El Colegio
de México, Centro de Estudios Sociológicos, México, 1998, p. 55.

338
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

reducción de costos a expensas de bajos salarios, entre otros aspectos relacionados con
el trabajo.

El término nuevo se deriva del latín novel, que significa nueva noticia, novedad y se
interpreta como novedoso e innovación268, y trasladado a la expresión nueva cultura del
trabajo, presupone algo que cambió o está innovándose en el mundo del trabajo y
específicamente en la dinámica de las relaciones laborales, y su manifestación en los
escenarios sociales y económicos.

La expresión de la nueva cultura del trabajo se inserta en las relaciones laborales


individuales y colectivas, e implica la postura empresarial de cómo visualizar el trabajo en
un contexto socioeconómico globalizado y competitivo, y de innovaciones tecnológicas.

En las administraciones de Carlos Salinas de Gortari y de Ernesto Zedillo Ponce de León,


y ante el escenario de un proyecto que surgió en algunas compañías líderes, orientado al
empleo de tecnología moderna y la introducción de nuevas formas de organización del
trabajo, se trató de cambiar la cultura del trabajo del mexicano, conminándolo a ser más
productivo y sistemático, que se preocupara por la calidad y tuviera un comportamiento
ético en el trabajo y lealtad hacia la empresa y en una concertación entre gobierno
federal, asociaciones empresariales y el corporativismo sindical, se firmaron los Principios
de la nueva cultura laboral.269

De acuerdo al documento suscrito el 13 de agosto de 1996, se estableció lo siguiente: 8


objetivos centrales, 5 principios básicos, 6 principios de ética en las relaciones laborales
que implican 10 deberes para los trabajadores, 10 para los patrones, 7 para las
asociaciones de trabajadores y patrones, y 8 para las autoridades del trabajo, 4 principios
en materia de derechos laborales, procuración e impartición de justicia laboral, principios
en materia económica, que se agrupan en 5 consideraciones generales y 7
consideraciones en materia de educación, capacitación y productividad270.

Quienes promovieron los denominados principios de la nueva cultura laboral, confunden,


desorientan y tergiversan la función de los valores jurídicos fundamentales (justicia, paz,
solidaridad, seguridad, orden y libertad) e inventan con facilidad "nuevas culturas", por lo
que no debe aceptarse esa laya de ideologías perturbadoras y perniciosas, las que con
intenciones malsanas, no aciertan con sus prédicas a librar del caos a la nación

268
Cfr., Corominas, Joan, óp. cit., nota 7, p. 417.
269
Cfr., Reygadas Robles Gil, Luis, óp. cit., nota. 134, p.151.
270
Cfr., “La nueva cultura laboral”, La Jornada 14 de agosto de 1996.

339
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

mexicana. Con la "nueva cultura" se intentó dar respuesta a las viejas exigencias"
patronales en favor de mayor productividad, calidad y rendimiento, ¿pero, cómo exigir al
trabajador mayores esfuerzos, cuando las expectativas para él y su familia continúan
inmutables?271

Los cinco principios básicos se establecieron para el logro de los objetivos centrales y se
mencionó que era indispensable que los factores de la producción sustentaran su relación
en dichos principios, también llamados de equidad, los que a continuación se mencionan:

1. La buena fe y lealtad entre las partes son principios indispensables para el buen
desarrollo de las relaciones laborales. Todos los sectores sociales deben estar
convencidos y comprometidos para actuar de buena fe para la plena realización de la
justicia y la equidad, debiendo afianzarse estos valores en las normas correspondientes.

2. La resolución de controversias, ha de sustentarse en el marco de la ley, en los valores


fundamentales de la justicia, la equidad y el diálogo, por lo que todos los sectores
propiciarán el desarrollo de una nueva cultura laboral que promueva la consecución de los
mismos.

3. La determinación de generar una cultura nacional de productividad y calidad que


coadyuve a la preservación y fomento de las fuentes de empleo, en un marco de justicia y
equidad social.

4. Los trabajadores han de percibir una remuneración justa y tener acceso a servicios de
seguridad social de la mayor calidad, indispensables para ellos y sus familias, que les
permitan asegurar un nivel digno de vida, durante y después de su actividad productiva,
recibiendo siempre un trato respetuoso.

5. El empresario ha de contar con el mejor desempeño de sus trabajadores, lo que


permitirá elevar la productividad y competitividad, y con ello obtener un valor agregado
que redunde en beneficio de la propia empresa, de los trabajadores y de la sociedad.

Parece que las aspiraciones en las que se fundamentó la nueva cultura laboral, fue
reiterativa de lo ya establecido en textos constitucionales y reglamentarios, y a los
factores productivos se les asignaban funciones que no les correspondían; como las

271
Cfr., Lastra Lastra, José Manuel, Principios para una nueva cultura en el viejo mundo del trabajo, Boletín
Mexicano de Derecho Comparado, núm. 100, 2001, pp. 68., revisado el 11/09/2007 en
http://www.jurídicas.unam.mx/publica/rev/boletin/cont/82/art/art7.htm.

340
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

jurisdiccionales, encargadas expresamente a las autoridades del trabajo en sus


respectivas competencias.272

Los principios de la nueva cultura laboral se refieren a una propuesta que invoca el
diálogo y la concertación como el instrumento único para la solución de los conflictos
laborales, y sin decirlo abomina del ejercicio del derecho de huelga; y en suma, la nueva
cultura laboral no intenta cambiar las reglas de juego y casi es una exigencia de
apaciguamiento sindical frente aquellos sindicatos que sí son representativos, los
trabajadores no deben protestar, sólo acatar las reglas que hagan posible la productividad
y la competitividad, y más allá del texto vigente de la Ley Federal del Trabajo, lo que se
propone ya es una flexibilización de las relaciones de trabajo que debe acabar con lo que
el sector empresarial y el gobierno entienden es cualidad negativa de la ley: la rigidez.273

En el periodo presidencial 20002006, se distorsionaron los denominados principios de la


nueva cultura laboral, y en los intentos de reformas a la Ley Federal del Trabajo, se
enarboló la premisa de que para ser más competitivos hay que establecer nuevas formas
participativas de producir, y tomando como punto de referencia la Doctrina Social de la
Iglesia católica referida al trabajo, específicamente que el ser humano es de esencia
humana y de libre albedrío, que merece el máximo respeto, que hay derechos inherentes
a las personas (por ser hijos de Dios), entre otros los derechos al trabajo y dentro del
trabajo, y, aunque no se afirma de esa manera, no se plantea que el derecho laboral deba
someterse al mercado pero tampoco al Estado. Es así, que los derechos laborales
parecieran una suerte de derechos naturales, por ser el hombre producto divino y tener
una alma inmortal, y ante su circunstancia no debe entrar en conflicto con los empresarios
y por el contrario someterse, sin ningún cuestionamiento, a las nuevas formas de
organización del trabajo, ya que empresarios y trabajadores no son enemigos por
naturaleza, y ambos se necesitan para que exista la empresa.274

Sin embargo, no puede menospreciarse un espíritu de solidaridad en esta postura, ya que


se afirma que se trata de tener relaciones laborales flexibles pero sin basar la
competitividad de las empresas en los bajos salarios, sino en una nueva cultura laboral y
empresarial, en un nuevo modelo de gestión de la empresa y de la mano de obra; pero las

272
Cfr. Ibídem, p. 9.
273
Cfr., De Buen Lozano, Néstor, “La reforma intentada a la Ley Federal del Trabajo”, en Kurczyn Villalobos,
Patricia (coord.), ¿Hacia un nuevo derecho del trabajo?, UNAM, Instituto de Investigaciones Jurídicas, México,
2003, pp. 4142.
274
Cfr., De la Garza Toledo, Enrique, “Los proyectos de reforma laboral de la UNT y del CCECT”, en De la
Garza, Enrique y Carlos Salas (coords.), La situación del trabajo en México, Plaza y Valdés, México, 2006, pp.
503504.

341
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

condiciones socioeconómicas de la clase trabajadora, demuestran que el neoliberalismo a


la mexicana no fue capaz de recrear una conciencia de que cada cual se beneficia por su
esfuerzo, porque se tradujo en mayor desigualdad social y sólo funcionó para una capa
reducida de empresarios.275

Desde la postura neoliberal de las autoridades del trabajo del periodo presidencial 2000-
2006, los principios de la denominada nueva cultura laboral se resumen en los
siguientes:276

1. El trabajador tiene un valor ético y trascendente.

2. El valor del trabajo es, en primer lugar, la dignidad de la persona que lo ejecuta.

3. El trabajo debe ser el medio de desarrollo integral de la persona.

4. El trabajo es fuente de derechos y obligaciones.

5. El lugar mayoritario del trabajo en la actualidad es la empresa.

6. El trabajo que genera desarrollo es garantía de paz social.

7. Los esfuerzos por asegurar mayores beneficios a los trabajadores, deben tener siempre
en cuenta la situación económica general del país.

8. La nueva cultura laboral mexicana permite alcanzar el pleno empleo con productividad
y calidad para la competitividad.

9. La cultura laboral mexicana debe tener como sustento fundamental el diálogo, la


concertación y la unidad de esfuerzos entre las organizaciones sindicales y los directivos
empresariales.

10. Generación de empleo digno y productivo.

11. Convocar a los organismos sindicales y empresariales a traducir en acciones


concretas esta Cultura Laboral.

5.1.1.2 El acuerdo nacional de productividad.

El concepto productividad está íntimamente ligado con el crecimiento económico, de tal


manera que el progreso de un país se determina por su nivel de productividad, la que se

275
Cfr., Ibídem, pp. 504507.
276
Cfr., Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Fragmentos sobre la nueva cultura laboral STPS ,
Coordinación General de Planeación y Política Sectorial, México, 2002, p. 89.

342
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

mide por medio de la relación que hay entre los insumos utilizados y la producción total; o
sea, se toma en cuenta la fuerza laboral y la producción derivada de ella.

Ante las circunstancias de la apertura comercial y, por tanto, de los embates de mercados
agresivamente competitivos, en la década de los ochenta del siglo XX, las empresas
mexicanas intentaron ser más productivas a costa de un esfuerzo de sus trabajadores y
bajos salarios, lo que explica la paradoja mexicana de una alta rentabilidad empresarial y
una productividad estancada. Dicha rentabilidad respondió, a la “ventaja competitiva de la
miseria” a lo largo de dos mil millas de frontera con el mercado más grande del mundo. En
los tres lustros comprendidos de 1980 a 1995, se manifestó un estancamiento de la
productividad social del trabajo, lo que se expresó en un deterioro continuo de la calidad
de vida y de las condiciones de trabajo de la mayoría de la población; la participación de
los asalariados en el Producto Interno Bruto disminuyó de 40% en 1976 a 22% en 1992, y
la reducción de la masa salarial fue el mecanismo utilizado para compensar la ineficiencia
del capital en la organización de los recursos productivos.277

En ese contexto macroeconómico, con la firma del Acuerdo Nacional para la Elevación de
la Productividad y de la Calidad, se intentó dar solución al problema salarial que consistía
en la postura de las autoridades laborales de que los porcentajes no fueran mayores al
índice inflacionario, lo que provocaba un círculo vicioso: los aumentos logrados a los
salarios mínimos no alcanzaban a recuperar el nivel de compra de la canasta básica, y,
por tanto, se exigía un nuevo incremento salarial sin que hubiera una respuesta favorable;
con el sometimiento del corporativismo sindical por parte del gobierno neoliberal, los
patrones no mostraron ningún interés por revertir dicho círculo vicioso, sino al contrario
existía una alza desmedida de precios en productos básicos de consumo, y el gobierno
intentó mediante el mencionado acuerdo, establecer lineamientos de productividad para
que cada empresa en convenio con su sindicato o trabajadores, establecieran
mecanismos de incremento de la productividad para mejorar los salarios.

Es así, que en dicho acuerdo se mencionaron diversos puntos básicos de consenso, los
cuales se indican a continuación:278

En el ámbito de este acuerdo, los sectores entienden a la productividad como un concepto


que trasciende a la mera relación operativa entre producto e insumos, e implica, como lo
277
Cfr., Velasco Arregui, Edur, “Productividad y empleo en la restructuración industrial mexicana: 19881993,
en Zapata Francisco, (comp.) ¿Flexibles y productivos?: estudios sobre flexibilidad laboral en México, El
Colegio de México, Centro de Estudios Sociológicos, México, 1998, pp. 2335.
278
Cfr., Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Acuerdo Nacional para la Elevación de la Productividad y la
Calidad, México, STPS, 1992.

343
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

establece el Programa Nacional de Capacitación y Productividad, un cambio cualitativo


que permita a nuestra sociedad –tanto en la empresa pública, privada o en el sector
social—hacer más y mejor las cosas, utilizar más racionalmente los recursos disponibles,
participar más activamente en la innovación y en los avances tecnológicos, abrir cauces a
toda la población trabajadora para su más activa y creativa participación en la actividad
económica y en los frutos generados en ella.

El incremento de la productividad y de la calidad no puede atribuirse a un solo factor. En


este sentido, no podría descansar en un esfuerzo unilateral del trabajador, o en la mera
sustitución de la maquinaria, o de la tecnología de todos los factores que actúan en la
empresa. Abarca desde la planeación y la organización misma de la producción hasta la
relación laboral, el desempeño, la motivación y la participación de la fuerza de trabajo; la
disponibilidad de recursos financieros suficientes y oportunos; la capacidad y actuación de
la administración; la vinculación con sus proveedores y consumidores; el ambiente de
trabajo; la capacidad de incorporación de los cambios tecnológicos y las condiciones del
entorno en el que actúa la empresa y las de los propios trabajadores.

Por todo lo anterior, el incremento sostenido de los niveles de productividad y de calidad


constituye una responsabilidad colectiva, que concierne a todos quienes participan en la
producción: los empresarios, los administradores, los trabajadores operativos, los
técnicos, los agricultores, las organizaciones laborales, campesinas y empresariales,
atañe también a las comunidades científica y académica, al gobierno y a la sociedad en
general, dentro de un marco en el cual la cooperación y la participación constituyen
premisas fundamentales.

Un requisito esencial para incrementar la productividad y la calidad es la transparencia en


la distribución de los beneficios que de ellas deriven. Solo mediante una participación
equitativa de todos los sectores y de la sociedad en las ganancias generadas mediante el
esfuerzo conjunto, podrá lograrse el mejoramiento sostenido de los niveles globales de
productividad y de calidad.

Una condición social y económica para el incremento de la productividad y de la calidad,


es que toda actividad preserve el equilibrio ecológico, en tal sentido, deben aunarse los
esfuerzos individuales y colectivos, en caso contrario, se estarán sentando las bases de la
degradación socioeconómica de la nación.

344
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En el mismo documento, se indican diversas líneas de acción279, entre las que se


menciona lo referente a las remuneraciones:

Entre la remuneración al trabajo y la productividad existe una importante relación


recíproca. Por una parte la percepción que se forma el trabajador sobre la valoración que
se da a su trabajo, a través de la remuneración que recibe, constituye un factor esencial
de la productividad, y al mismo tiempo, un elemento que puede actuar como limitante o
estímulo de la misma. Por otra, el fortalecimiento de las remuneraciones está relacionado
con las posibilidades del entorno económico y con la propia evolución de la productividad.

Esta doble relación entre las remuneraciones al trabajo y la productividad exige actuar en
ambas direcciones: hacer de las remuneraciones un elemento de estímulo al esfuerzo
productivo y propiciar que las ganancias generadas dentro de éste se reflejen
adecuadamente en los beneficios que recibe el trabajador.

En este sentido, será necesario:

Revisar y actualizar los esquemas de remuneración para que éstos contribuyan a la


motivación y estímulo del trabajador, reflejen adecuadamente su contribución a la
productividad y a la calidad, y garanticen la equidad indispensable en la distribución de los
beneficios.

Fortalecer el estímulo a la creatividad y a la participación; reconocer el incremento que


reportan al potencial productivo del trabajador la capacitación y experiencia; reducir la
dispersión de las estructuras ocupacionales y compactar la brecha que separa a los
niveles operativos, técnicos y directivos y, en general, dar –a través de las
remuneraciones—el debido reconocimiento a la capacitación, a la eficiencia, a la
iniciativa, a la responsabilidad y al esfuerzo realizado por el trabajador.

Las modalidades pueden ser múltiples, sin embargo, lo fundamental es que su desarrollo,
implantación y evaluación permanente sea producto de la concertación entre las
empresas, las organizaciones de trabajadores y, en su caso, los trabajadores.

Es de observarse en los puntos antes indicados, intenciones gubernamentales y


empresariales para que se modificaran las condiciones de trabajo con base a criterios de
calidad y productividad, sin que hubiera una política pública laboral orientada, en principio,
a cambiar las condiciones económicas de los trabajadores mediante mejoras salariales,
ya que no se mencionó la necesidad de modificar las percepciones de quienes con su

279
Cfr. Ídem.

345
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

esfuerzo contribuían a la generación bienes y servicios, y a las utilidades de los


empresarios, mediante una retribución justa. Adicional a lo señalado, no se previó atender
problemas de carácter educativo de la clase trabajadora, en virtud de los rezagos que en
la materia aqueja a la sociedad mexicana, y que se refleja en deficiencias del aprendizaje
de conocimientos relativos a ocupaciones laborales de nivel técnico, para poder innovar
los sistemas y procesos de trabajo, y asimilar los avances tecnológicos en áreas de las
telecomunicaciones y la electrónica.

Por último, en el Acuerdo Nacional para la Elevación de la Productividad y de la Calidad,


la cúpula empresarial, el sindicalismo corporativo y el gobierno federal signaron los
siguientes acuerdos:

1. Los sectores y el Gobierno Federal determinan unir sus esfuerzos para el desarrollo de
un amplio movimiento social productivo que conlleve a la construcción de una nueva
cultura laboral en el país, desarrollando las estrategias y acciones necesarias a nivel
nacional que contribuyan, a través de medios masivos de comunicación, de seminarios y
eventos de carácter técnico, y de otros medios de difusión, a generar una dinámica
propicia al desarrollo de la productividad y de la calidad.

2. El sector empresarial se compromete a fomentar entre sus organizaciones intermedias,


un programa de apoyo técnico, estímulo y difusión de las acciones específicas que
decidan adoptar las empresas, en torno a las líneas de acción que se desprenden de este
acuerdo.

3. Las organizaciones de trabajadores acuerdan implantar un plan de acción para


contribuir a generar, dentro de sus bases, una amplia conciencia sobre los cambios,
nuevas formas de producción, de organización del trabajo y de la competencia en los
distintos mercados, así como el papel activo que el trabajador y los organismos obreros
deben desempeñar en esta dinámica.

4. Las organizaciones obreras, campesinas y empresariales se comprometen, asimismo,


a apoyar los programas de capacitación y desarrollo de recursos humanos dentro de las
unidades productivas, los destinados a mejorar el ambiente de trabajo, y los que se
diseñen de acuerdo a las características y necesidades particulares de cada empresa
para motivar y estimular la contribución del trabajador a la productividad y a la calidad.

5. Los sectores obrero y empresarial convienen en suscribir dentro de cada empresa y/o
centro de trabajo los programas específicos que estimen necesario concertar, dentro de

346
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

las siguientes líneas de acción aquí planteadas: modernización de las estructuras


organizativas del entorno productivo, entre otras, las empresariales, sindicales y
gubernamentales; superación y desarrollo de la administración; énfasis en los recursos
humanos; fortalecimiento de las relaciones laborales; modernización y mejoramiento
tecnológico, investigación y desarrollo y, entorno macroeconómico y social propicio a la
productividad y a la calidad, para promover su incremento sostenido.

6. El gobierno, a través de los instrumentos a su disposición, y los programas emanados


del Plan Nacional de Desarrollo, promoverá las condiciones que permitan desarrollar un
entorno macroeconómico propicio al incremento sostenido de la productividad y de la
calidad.

De un análisis objetivo de los anteriores enunciados, se desprende que la clase


empresarial en contubernio con los representantes “oficialistas” del movimiento obrero
(léase: “charrísmo sindical”) pretendió flexiliblizar las relaciones de trabajo en un contexto
de modernización de los procesos y sistemas de trabajo, sin que existiera una verdadera
política pública orientada a la modificación de las condiciones laborales de los
trabajadores y una adecuada remuneración del trabajo realizado.

Es así, que dicho acuerdo fue otro instrumento de política pública de índole económico
laboral para intentar frenar el descontento de la clase trabajadora, y las grandes empresas
y las trasnacionales identificaron una área de oportunidad para innovar sus procesos y
sistemas producción, bajo la premisa de que la calidad y la productividad únicamente eran
factibles con la flexibilización de facto de la condiciones de trabajo, lo que requería el
apoyo incondicional de los sindicatos y autoridades laborales. Situación que se reflejó en
el establecimiento de convenios de productividad, en los cuales se enfatizó la
capacitación de los trabajadores, y se utilizó como pretexto para flexibilizar las
condiciones de trabajo el artículo 153F de la Ley Federal del Trabajo, en el que se
menciona que uno de los objetivos de la capacitación debe ser el incremento de la
productividad.

5.1.1.3 Los convenios de productividad.

En la década de los noventa del siglo XX, se esgrimía que los rezagos de la productividad
y eficiencia se debían a una deficiente asignación de recursos provocada por el proceso
sustitutivo de importaciones y por la activa participación del Estado en la economía, y que
la nueva orientación del aparato productor reclamaba del acrecentamiento de los
estándares de eficiencia y productividad de las diversas actividades económicas del país,

347
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

lo cual permitiría en el mediano plazo aumentar los niveles de ingreso per cápita y, en un
mayor horizonte prospectivo, aumentar los niveles de bienestar de las personas.280

Considerando el análisis de la productividad total de los factores (PTF)281, y de la


productividad laboral (producto por trabajador remunerado), el deterioro de la
productividad de la economía mexicana no ha sido homogéneo; para los años ochenta del
siglo XX el desplome de la productividad laboral obedeció de manera general a la caída
del proceso de acumulación de capital en casi todas las actividades económicas del país,
pero en los años del periodo 19872002, el deterioro de la productividad multifactorial no
fue sectorialmente generalizado, toda vez que la mayor parte de los sectores transables –
los que pueden ser comerciados en los mercados internacionales– registraron
incrementos positivos, en especial los manufactureros, como el de las industrias metálicas
básicas, productos metálicos, y el de maquinaria y equipo.282

En este escenario de la productividad, con la firma del Acuerdo Nacional para la Elevación
de la Productividad y de la Calidad, se creó un antecedente de reconocimiento de las
autoridades gubernamentales de la crisis por la que estaba pasando la clase trabajadora y
de sus precarias condiciones, y, por desgracia, la gran mayoría de la clase empresarial
aprovechó dicha coyuntura para solicitar al gobierno apoyo económico para enfrentar la
globalización y no asumió un compromiso efectivo para mejorar las condiciones de los
trabajadores.

Con el acuerdo se puso de manifiesto la necesidad de vincular los salarios a la


productividad generada en el nivel de empresa, por lo que algunas empresas y sindicatos,
principalmente de la industria manufacturera, asumieron un compromiso de encontrar
soluciones compartidas al problema de la baja productividad y de los salarios, mediante el
establecimiento de convenios de productividad que se tradujeron en suma de voluntades
al no tener el carácter de obligatorios para las partes firmantes, y no adquirían la forma de
un contrato colectivo de trabajo; en este tenor, un contrato colectivo de acuerdo al artículo
386 de la Ley Federal del Trabajo se interpreta como un convenio:

280
Cfr., Hernández Laos, Enrique, “La productividad en México: origen y distribución (1960.2002)”, en De la
Garza, Enrique y Carlos Salas (coords.), La situación del trabajo en México, Plaza y Valdés, México, 2006, p.
152.
281
La productividad total de los factores (PTF) se relaciona con todos los factores empleados en el proceso de
producción y representa una relación entre productos e insumos. Cfr., Prokopenko, Joseph, La gestión de la
productividad Manual práctico , OIT, Suiza, 1989, p. 26
282
Cfr., Hernández Laos, Enrique, óp. cit., nota 215, pp. 160162.

348
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Artículo 386.Contrato colectivo de trabajo es el convenio celebrado entre uno o varios


sindicatos de trabajadores y uno o varios patrones, o uno o varios sindicatos de patrones,
con objeto de establecer las condiciones según las cuales debe prestarse el trabajo en
una o más empresas o establecimientos.

Un aspecto de la innovación en los sistemas de remuneraciones, fue el hecho de que en


las negociaciones obrero patronales relativas al incremento salarial por el concepto de la
productividad, las empresas tomaron como referencia el porcentaje que en 1993 acordó la
Comisión Nacional de los Salarios Mínimos conforme a la productividad promedio de la
economía atribuible a la mayor eficiencia de la mano de obra; lo que causó confusión en
la formulación de los denominados convenios de productividad, toda vez que el Pacto
para la Elevación de la Competitividad y el Empleo (PECE) de 1993, estableció que el
aumento correspondiente debía calcularse a “nivel de cada centro de trabajo” y vincularse
a los indicadores específicos de la productividad laboral que determinen en cada caso las
organizaciones de trabajadores y empresas.283

La clase empresarial encontró en los convenios de productividad una manera de


encontrar culpables al problema de los bajos salarios y no instrumentó, a excepción de
determinadas empresas de la industria de la transformación, acciones que permitieran a
los trabajadores mejorar sus capacidades laborales para incidir el incremento de la
productividad, y los somete de manera cognitiva a un status de trabajadores
incompetentes y, por consecuencia, con percepciones bajas que no les permiten tener un
nivel de vida digno; por ejemplo, no proporciona la capacitación que deben otorgar a sus
trabajadores, tal como se indica en la fracción XIII del apartado “A” del artículo 123
constitucional:

XIII. Las empresas, cualquiera que sea su actividad, estarán obligadas a proporcionar a
sus trabajadores, capacitación o adiestramiento para el trabajo. La ley reglamentaria
determinará los sistemas, métodos y procedimientos conforme a los cuales los patrones
deberán cumplir con dicha obligación.

Obligación que se encuentra regulada en la fracción XV del artículo 132 y en el artículo


153.A de la Ley Federal del Trabajo:

Artículo 132.Son obligaciones de los patrones:

283
Cfr., Bensusán, Graciela, óp. cit., nota 202, p. 55.

349
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

XV. Proporcionar capacitación y adiestramiento a sus trabajadores, en los términos del


Capítulo III Bis de este Título.

Artículo 153A. Todo trabajador tiene el derecho a que su patrón le proporcione


capacitación o adiestramiento en su trabajo que le permita elevar su nivel de vida y
productividad, conforme a los planes y programas formulados, de común acuerdo, por el
patrón y el sindicato o sus trabajadores y aprobados por la Secretaría del Trabajo y
Previsión Social.

De manera particular, la capacitación es un elemento y un medio para que las personas


adquieran y/o actualicen sus conocimientos, mejoren sus habilidades y modifiquen sus
comportamientos en el ámbito del trabajo primordialmente, y cuando se planea de manera
estratégica y responde a necesidades de los procesos o sistemas de trabajo, su impacto
se manifiesta en el incremento de la productividad laboral y, en consecuencia, se
beneficie a los trabajadores; lo cual no es así en la realidad, ya que los patrones no
reparten lo que se obtiene con el incremento de la productividad; lo anterior se encuentra
regulado en el artículo

153F de la Ley Federal del Trabajo:

Artículo 153F. La capacitación y el adiestramiento deberán tener por objeto:

I. Actualizar y perfeccionar los conocimientos y habilidades del trabajador en su actividad;


así como proporcionarle información sobre la aplicación de nueva tecnología en ella;

II. Preparar al trabajador para ocupar una vacante o puesto de nueva creación;

III. Prevenir riesgos de trabajo;

IV. Incrementar la productividad; y,

V. En general, mejorar las aptitudes del trabajador.

5.1.2 Elementos.

La denominada nueva cultura laboral se instrumentó como política de Estado para intentar
modificar la manera de ver y sentir el trabajo, que permitiera a la clase empresarial y a la
clase política en el poder, operar sin descaro su modelo de economía neoliberal, con la
premisa de que ya no hay lucha de clases sino lucha por la superación de la empresa
entendida como una comunidad de personas que comparten objetivos y metas comunes.

350
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Con el apoyo del corporativismo sindical, las grandes empresas introdujeron cambios en
la organización del trabajo (flexibilización) y requerían de un instrumento que les facilitará
su proyecto de reingeniería fabril y la operación de programas de reestructuración para
hacer frente a la crisis, primero, y a la apertura comercial, después; dichos programas
implicaron, en diferentes proporciones, el empleo de tecnología moderna, la introducción
de nuevas formas de organización del trabajo, la orientación del esfuerzo de los
trabajadores hacia la calidad total, la productividad, el trabajo en equipo y las relaciones
armoniosas entre trabajadores y patrones.284

Los principios de la nueva cultura laboral representaron para la clase empresarial egoísta
que no reparte los beneficios de la productividad, una forma de evadir su responsabilidad
social y atribuyó todos los problemas organizacionales a los trabajadores y a factores
exógenos, y las autoridades del trabajo de la administración del sexenio presidencial
2000-2006 resumieron dichos principios en cuatro elementos: las personas y el trabajo,
las empresas y la productividad.

5.1.2.1 Las personas y el trabajo.

En un sentido etimológico 219 la palabra persona significa “máscara de actor”, “personaje


teatral” y se asocia a personalidad; jurídicamente los sujetos del derecho reciben el
nombre de personas y se dice que persona es el ser de existencia física o legal capaz de
derechos y obligaciones.285

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicano señala en su artículo 123, que
toda persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil, y que al efecto se
promoverán la creación de empleos y la organización social para el trabajo; para quien no
tiene un trabajo, su situación se agrava en un sistema de economía neoliberal que deja a
la suerte de la oferta y la demanda, la posibilidad de acceder a un empleo digno y
debidamente remunerado y, en su caso, de no perderlo ante la indiferencia de la
autoridad laboral para que no se deterioren sus derechos sustantivos.

El concepto persona en la nueva cultura laboral se constriñe a lo más importante de la


empresa, sin reconocerle el ejercicio pleno de sus derechos laborales ante los embates
de la flexibilización de la organización del trabajo, que implica cambios de horario de
trabajo, movilidad horizontal, aumento de la jornada de trabajo, en suma la modificación

284
Cfr., Reygadas Robles Gil, Luis, “Estereotipos rotos. El debate sobre la cultura laboral mexicana”, en
Guadarrama Olivera, Rocío (coord.), Cultura y trabajo en México: Estereotipos, prácticas y representaciones,
Universidad Autónoma Metropolitana – Unidad Iztapalapa, México, 1998, p. 151.
285
Cfr., De Pina, Rafael y De Pina Vara, Rafael, óp. cit. nota 88, p. 404.

351
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de sus condiciones de trabajo sin su consentimiento; situaciones que obligan a reflexionar


sobre la necesidad de las transformaciones del derecho del trabajo, que deben
entenderse en un sentido dinámico como cambios en proceso.286

En la nueva cultura laboral, se dice que lo más importante en el trabajo son las personas,
comprendidas tanto en su función de actores centrales de las actividades descubridoras y
transformadoras de la naturaleza, como el principal287 motivo y beneficiador de dicho
conocimiento y transformación288; postulado que hace de lado el reconocimiento de las
personas como sujetos de derechos y obligaciones, y las sitúa en un plano biológico
filosófico, para intentar modificar su percepción del trabajo y hacerles sentir que no
importa su condición socioeconómica, y que siempre serán el activo más importante de la
empresa y que sólo con su esfuerzo será posible hacer frente a la productividad y la
competitividad, para asegurar, en el mejor de los casos, su empleo.

Para la generación de los diversos bienes que demanda la población, se requiere la


manifestación de un proceso de trabajo en el que intervienen factores internos y externos;
dentro de los internos se identifican factores duros y blandos, y entre estos últimos a las
personas289, quienes hacen posible la transformación de materias primas en producto, las
que efectúan el trabajo, quienes hacen posible la calidad y el mejoramiento de la
productividad.

En la nueva cultura laboral, se dice que el trabajo no debe verse como mercancía y que
no debe haber división entre buenos (los pobres) y malos (los detentadores de los medios
de producción)290, lo cual rompe de tajo toda posible reflexión sobre el por qué unos pocos
todo tienen y muchos poco tienen, y pretende explicar de forma simplista que eso no
existe, y que sólo es importante que las personas revaloren su trabajo, el cual se afirma
es la expresión de la dignidad de la personas.

La OIT ha señalado que únicamente mediante un trabajo decente, lo que supone lo que
debe ser, se puede superar la pobreza; ya que el trabajo es el mejor medio para escapar
de la pobreza291; argumento que se relaciona con lo establecido con el artículo 123
constitucional de nuestra Carta Magna.

286
Cfr., Corominas, Joan, óp. cit., nota 7, p. 454.
287
Cfr., Sánchez Castañeda, Alfredo, óp. cit., nota 112, p. XX.
288
Cfr., Secretaría del Trabajo y Previsión Social, óp. cit., nota 211, p. 90.
289
Cfr., Prokopenko, Joseph, La gestión de la productividad Manual práctico, OIT, Suiza, 1989, p.10.
290
Cfr., Secretaría del Trabajo y Previsión Social, óp. cit., nota 211, p. 106.
291
Cfr. Somavia, Juan (Prefacio), Superar la pobreza mediante el trabajo, Memoria del Director General,
Conferencia Internacional del Trabajo, 91ª. Reunión, Ginebra, 2003.

352
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.1.2.2 Las organizaciones y la productividad.

Los conceptos de organizaciones y productividad se relacionan con la dinámica de las


empresas para la generación de determinados bienes o la prestación de servicios; la Ley
Federal del Trabajo señala en su artículo 16 que se entiende por empresa:

Artículo 16.Para los efectos de las normas de trabajo, se entiende por empresa la unidad
económica de producción o distribución de bienes o servicios y por establecimiento la
unidad técnica que como sucursal, agencia u otra forma semejante, sea parte integrante y
contribuya a la realización de los fines de la empresa.

En el mundo del trabajo y desde una óptica social administrativa, se interpreta a las
organizaciones como sinónimo de empresas, y se impregna de un conjunto de caracteres
que, supuestamente, considera al factor humano como sustancial a su definición; el
término organización, entendido como un ente, el diccionario de la Real Academia
Española, lo define como la asociación de personas regulada por un conjunto de normas
en función de determinados fines.

Es así, que en la nueva cultura laboral se pretende que los trabajadores no vean o
perciban a las empresas como entes ajenos a su existencia, sino como parte de ella y que
en ese lugar llamado empresa u organización, se manifiesta la potencialidad de las
personas, las cuales han de ser conscientes de que la empresa es una comunidad
socialmente productiva y no un espacio de confrontación de intereses sociales. El
concepto de productividad se asocia con el de las organizaciones, como consecuencia del
trabajo de calidad de los trabajadores, y se insiste que en la nueva cultura laboral su
participación es vital para proyectar su esencia de persona en lo que hacen, trabajando en
equipo para ser más eficientes y eficaces, y de esta forma ser más productivos; idea que
intentaron interiorizar en el pensamiento de las personas como un sometimiento cognitivo
de un círculo virtuoso: 1. reconocimiento, respeto y promoción de la dignidad de la
persona, 2. La participación proactiva y solidaria del trabajador con su empresa, 3.
incremento de la productividad, y 4. distribución equitativa de la riqueza generada,
teniendo como resultado, supuestamente, la satisfacción del trabajador.292

Organizaciones y productividad son un binomio dinámico que refleja la naturaleza de lo


que se produce, la instrumentación de acciones para el mejoramiento de las condiciones
de trabajo de las personas que hacen posible la calidad y la productividad, y ponen de

292
Cfr., Secretaría del Trabajo y Previsión Social, óp. cit., nota 211, pp. 106107.

353
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

manifiesto el interés de la clase empresarial por hacer frente a los retos de un mercado
competitivo, y que para desgracia de muchos trabajadores, es a costa de su esfuerzo sin
tener una debida remuneración; ya que la flexibilidad tecnorganizativa provista por los
modernos sistemas de producción no hace sino desembarazarse de las previsiones
proteccionistas y de las conquistas laborales acumuladas durante la época taylorista de
producción.293

Si se considera que la cultura del trabajo es la expresión del sentir y ser de las personas
en el mundo del trabajo, y que en muchos casos esa expresión no difiere de su
percepción del mundo y de sus relaciones sociales, el concepto de productividad como
parte de dicha cultura no corresponde con lo que se pregona con la denominada nueva
cultura laboral; es un hecho que las actitudes de los obreros se refieren a un conjunto
dinámico de creencias y valores derivados de conocimientos, experiencias, afectos y
significados que guían las intenciones y acciones de las personas en el lugar de
trabajo294, y por tanto, mientras los trabajadores no perciban un cambio en las formas de
conducirse de la clase empresarial para que remuneren debidamente y distribuyan los
beneficios de la productividad, no se puede hablar de un cambio cultural o de una nueva
cultura laboral.

Por otro lado, tampoco se puede ser indiferente a los avances tecnológicos y a los nuevos
requerimientos de las organizaciones (empresas en un sentido dinámico) para
instrumentar nuevas formas de organizar el trabajo, optimizar los recursos, que en el caso
de los no renovables es de gran importancia y trascendencia, para la generación de los
bienes o servicios demandados por la sociedad, lo que hace pensar en la idea de un
cambio, pero con justicia social y con el reconocimiento al trabajo digno y socialmente útil
en un marco de respeto al orden jurídico laboral; consideración que es ajena al
pensamiento empresarial, ya que sus planteamientos de reformas a la Ley Federal del
Trabajo se enmarca en un egoísmo sin medida, ya que sus propuestas se orientan al
interés exclusivo de debilitar los derechos de los trabajadores295.

5.1.3 La nueva cultura laboral y los derechos laborales.

293
Cfr., Covarrubias V., Alejandro, “Relaciones laborales y actitudes obreras en la industria automotriz
mexicana. Transformaciones bajo nuevos sistemas de producción”, en Guadarrama Olivera, Rocío (coord.),
Cultura y trabajo en México: Estereotipos, prácticas y representaciones, Universidad Autónoma Metropolitana
– Unidad Iztapalapa, México, 1998, p. 204.
294
Cfr., Ibídem, p. 224.
295
Cfr., Dávalos; José, óp., cit., nota 1, p. XIV.

354
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Se afirma que la única constante es el cambio y en el mundo empresarial se habla de la


necesidad del y la resistencia al cambio, pero lo que no se cuestiona es ¿cuándo van a
cambiar los empresarios? o dicho de una forma sencilla: ¿cuándo van a reconocer y
retribuir debidamente el trabajo de las personas?; Preguntas que no tienen una respuesta
clara y sencilla, y los empresarios se reformulan otras dirigidas a la necesidad de
modificar los modos, hábitos y conductas de los trabajadores; para lo cual, la pregonada
nueva cultura laboral representó la oportunidad de expiar sus culpas. En este tenor de
ideas, resulta indispensable recordar lo señalado en los artículos 3º y 90 de la Ley Federal
del Trabajo:

Artículo 3o.El trabajo es un derecho y un deber sociales. No es artículo de comercio,


exige respeto para las libertades y dignidad de quien lo presta y debe efectuarse en
condiciones que aseguren la vida, la salud y un nivel económico decoroso para el
trabajador y su familia.

No podrán establecerse distinciones entre los trabajadores por motivo de raza, sexo,
edad, credo religioso, doctrina política o condición social.

Asimismo, es de interés social promover y vigilar la capacitación y el adiestramiento de los


trabajadores.

Artículo 90.Salario mínimo es la cantidad menor que debe recibir en efectivo el trabajador
por los servicios prestados en una jornada de trabajo.

El salario mínimo deberá ser suficiente para satisfacer las necesidades normales de un
jefe de familia en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación
obligatoria de los hijos.

Se considera de utilidad social el establecimiento de instituciones y medidas que protejan


la capacidad adquisitiva del salario y faciliten el acceso de los trabajadores a la obtención
de satisfactores.

Como se aprecia, el trabajo ha de permitir, a quien lo tiene, asegurar la vida, la salud y un


nivel económico decoroso a él y a su familia, y, por tanto, el salario mínimo debe ser
suficiente para satisfacer las necesidades básica de alimentación, vestido y vivienda; lo
que contrasta con la pérdida del poder adquisitivo de los salarios que ha limitado la

355
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

adquisición de productos de la canasta básica296; por ejemplo, de 1994 a mayo de 2003,


el salario mínimo había perdido el 49.5% de su poder adquisitivo, y en el periodo de
diciembre de 2000 a mayo de 2003, el costo de la canasta básica se había incrementado
en 30.3%, mientras el salario se había incrementado15.1%297. De acuerdo a datos de la
Comisión Nacional de los Salarios Mínimos y del Banco Nacional de México reportados al
mes de abril de 2008, el salario mínimo tuvo una variación de 1.03%, un aumento de
$2.02 de 2007 a 2008, y respecto a la canasta básica se indica un incremento de 4.3%
para el 2007 y para el mes de abril de 2008 una inflación del 5.2%; datos que por sí
mismos hablan de la disminución del poder adquisitivo del salario de las personas que no
perciben una retribución justa para acceder a un nivel y calidad de vida decoroso.

5.1.3.1 Postura empresarial.

Una nueva cultura laboral es lo que han pedido los empresarios y hacen de lado los
derechos laborales consagrados en el artículo 123 apartado “A” de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos y en su ley secundaria, y esgrimen ideas de cambios de
reformas, que de no concretarse, señalaban de manera airada, impediría hacer frente a la
globalización y su consiguiente apertura de mercados y la presencia de la competitividad.

La postura, por tanto, de los empresarios es de flexibilización del marco jurídico laboral
vigente, y de facto no respetan los derechos laborales sustantivos bajo la bandera que los
tiempos son de cambio y de la urgencia de cubrir requerimientos organizacionales
orientados a la calidad total y el mejoramiento continuo, y en la práctica llevan a cabo
nuevas forma de contratar como el outsourcing298 y modifican las jornadas de trabajo,
entre otros aspectos que se engloban en el término de flexibilización de la organización
del trabajo.

La flexibilización del trabajo desde la óptica empresarial, se explica cómo la necesidad de


cambiar, ajustar o modificar la organización de los procesos o sistemas de trabajo sin que
exista ningún impedimento legal para disponer de la fuerza de trabajo de las personas
libremente, con el argumento de la calidad total, la productividad y la competitividad; en

296
La canasta básica es un conjunto de bienes y servicios indispensables y necesarios para que una familia
satisfaga sus necesidades básicas de consumo a partir de su ingreso (salario). Consultado el 16/06/2007en
www.profeco.gob.mx.
297
Cfr., Quintero Ramírez, Cirila “Condiciones de vida de los trabajadores”, en De la Garza, Enrique y Salas,
Carlos (coords.), La situación del trabajo en México, Plaza y Valdés, México, 2006, p. 184.
298
Básicamente se trata de una modalidad, según la cual determinadas organizaciones, grupos o personas
ajenas a la compañía son contratadas para hacerse cargo de "parte del negocio" o de un servicio puntual
dentro de ella. La compañía delega la gerencia y la operación de uno de sus procesos o servicios a un
prestador externo (Outsoucer), con el fin de agilizarlo, optimizar su calidad y/o reducir sus costos. Consultado
el 15/06/2007 en: http://www.monografias.com/trabajos3/outsourcing/outsourcing.shtml.

356
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

términos generales se identifica dos tipos de flexibilización: a) la externa que se refiere a


las acciones de los empleadores para ajustar rápidamente la mano de obra necesaria
para la producción, y b) la interna que se refiere a las calificaciones y las habilidades
polivalentes que pueden desempeñar los trabajadores dentro de una unidad de
producción, incluye la polifuncionalidad o multihabilidades y la flexibilidad del tiempo de
trabajo.299

Con la flexibilización externa, los empresarios aplican sistemas de contratación de


carácter temporal sin la mínima prestación social en aquellas actividades que no
requieren de una especialización y existe, por ende, oferta de empleo y una gran
demanda; situación que posibilita la rotación cuando los volúmenes de producción
fluctúan enormemente y es fácil reemplazar la mano de obra; con esta práctica de
contrataciones temporales, a los empresarios no les importa la continuidad de los
trabajadores, que en ocasiones es mayor a los trabajos fijos, y muchos menos la identidad
con la empresa, lo cual se interpreta como uno de los valores de la tan cacareada nueva
cultura laboral300.

En lo concerniente a la flexibilidad interna, se identifican prácticas empresariales que


atentan, sin descaro, contra los derechos sustantivos de los trabajadores enmarcados en
la Ley Federal del Trabajo; basta mencionar los aspectos relativos al: 1. tipo de trabajo
realizado por las personas, 2. la afectación del lugar de trabajo, y 3. el tiempo de
trabajo.301

El aspecto referido a la naturaleza y características del tipo de trabajo, implica que las
personas son contratadas para desempeñar de manera específica un conjunto de
funciones, actividades y tareas de un puesto de trabajo, lo que supone un salario
acordado en un contrato de trabajo; situación que es todo lo contrario, se les contrata con
la advertencia que su salario corresponde a una ocupación, pero que deben realizar
tareas, actividades y funciones distintas a las que fueron requeridos; y bajo la premisa del
trabajo en equipo y orientado a procesos de trabajo, la calidad total y la productividad
laboral, les pregonan que el trabajo debe ser visualizado como el medio por el cual las
personas se realizan plenamente mediante la manifestación de valores referidos al
compromiso, lealtad y solidaridad hacia sus compañeros para el logro de objetivos y
metas organizacionales, y que, supuestamente, tendrán un beneficio de realización

299
Cfr., Sánchez Castañeda, Alfredo, óp. cit., nota 112, p. 10.
300
Cfr., Ídem.
301
Cfr. Ibídem, p. 11.

357
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

personal, más que la pretensión de reconocimiento económico; lo anterior se traduce en


una postura empresarial: las personas necesitan más que un reconocimiento económico
un reconocimiento afectivo.

Las posturas de la clase empresarial se identifican con sus pretensiones de adecuar la


organización del trabajo a su modo, de tal manera que modifican, y en ocasiones con el
apoyo de las autoridades del trabajo y del corporativismo sindical, las formas de
contratación establecidas en la legislación laboral, no otorgan las prestaciones sociales
establecidas por ley, no indemnizan a los trabajadores despedidos; cubren sus
irregularidades con pretextos de la globalización y los mercados competitivos, y esgrimen,
por su definición que dan la nueva cultura laboral, que los trabajadores mexicanos no
contribuyen a la solución de los problemas nacionales con sus peticiones de aumentos
salariales y los llegan a calificar de intransigentes.

En el entendido de que las empresas, en especial las pequeñas y medianas,


efectivamente sí enfrentan problemas de calidad y productividad, originados por el modelo
económico neoliberal, es de considerar que no se hace de lado la necesidad de encontrar
soluciones conjuntas entre empresarios y trabajadores para solventar dichos problemas,
pero sin menoscabo de los derechos laborales que le son propios a quienes con su
esfuerzo aspiran a un salario justo; es así, que, a raíz del Acuerdo Nacional para la
Elevación de la Productividad y de la Calidad, empresas como las de telefonía,
siderúrgicas y de la industria automotriz, principalmente, establecieron mecanismos de
reingeniería organizacional que incorporaba el avance tecnológico, las innovaciones en
los sistemas de producción, que trajo como consecuencia una elevación de la
productividad, vía automatización de puestos de trabajo y mayor intensidad en el uso de
la fuerza laboral; por ejemplo, el caso de los trabajadores de Teléfonos de México
(TELMEX); en el año de 1990 empresa y sindicato firmaron el Convenio de Calidad,
Productividad y Capacitación302, que fue un antecedente de que era posible tomar en
cuenta los aspectos de flexibilización del trabajo en armonía con los derechos laborales
de los trabajadores.

5.1.3.2 Postura del movimiento obrero.

En la historia del trabajo en México, invariablemente se menciona que el capital ha


necesitado de la fuerza de trabajo de las personas para la transformación de las materias
302
Cfr., Sánchez Daza, Germán, “Flexibilidad y productividad laboral en Teléfonos de México”, en Zapata
Francisco, (comp.), ¿Flexibles y productivos?: estudios sobre flexibilidad laboral en México, El Colegio de
México, Centro de Estudios Sociológicos, 1998, México, p. 240.

358
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

primas en bienes requeridos por la sociedad, o para la prestación de un servicio, sin que
se encuentren evidencias de la no confrontación de intereses; sino por el contrario,
movimientos de la clase trabajadora por obtener mejores condiciones de trabajo y una
justa retribución por su trabajo para tener un adecuado nivel de vida.

En el periodo de 1940 a 1970, México experimentó un crecimiento económico debido al


modelo de sustitución de importaciones que permitió un mejoramiento en las condiciones
de vida de la población; a finales del siglo XIX la alimentación de la población mexicana
se limitaba a maíz, arroz y frijoles, y para el periodo señalado ya incluía cantidades
considerables de huevos, pollo, carne, pescado, verduras y alimentos preparados.303

La anterior situación cambió de manera drástica con la instauración del modelo


económico de libre mercado o neoliberalismo a ultranza, lo que dio origen a problemas de
desempleo, trabajo informal y bajos salarios, y, en consecuencia, la existencia de niveles
de extrema pobreza. De manera comparativa, con el modelo de sustitución de
importaciones (también denominado como modelo de la Revolución Mexicana) el poder
adquisitivo de los salarios mínimos se incrementó 96.9% durante el periodo 19351982, y
con el neoliberalismo, en cambio, dichos salarios perdieron 69.6% de su poder de
compra.304

En este contexto, no se puede afirmar que los problemas de los trabajadores se reducen
a: ¿cómo interpretan la nueva cultura laboral? o ¿por qué se resisten a los cambios
culturales del trabajo?; por el contrario, se identifican problemas como condiciones de
trabajo deplorables y salarios que no les permiten acceder a un nivel de vida decoroso.

A pesar de que la expresión movimiento obrero se ha empleado para denotar al


sindicalismo corporativo, es necesario apuntalar que dicha expresión se contextualiza en
un sentido amplio de la clase trabajadora: la que aspira a un ejercicio pleno de sus
derechos laborales, que no deja de reconocer que los tiempos son de avances
tecnológicos y de retos para solventar problemas de calidad, productividad y
competitividad, y que no encuentra eco a sus reclamos de justicia social para su bienestar
y el de sus familias.

Con el esquema de participación directa, varias organizaciones empresariales han


realizado ajustes en los sistemas de producción en función de la aplicación de nueva

303
Cfr., Damián, Araceli, Cargando el ajuste: los pobres y el mercado de trabajo en México; El Colegio de
México, Centro de Estudios Demográficos y de Desarrollo Urbano, México, 2002, p. 45.
304
Cfr., Calva, José Luis, óp., cit. nota 97, pp. 105107.

359
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

tecnología y la reorganización del trabajo, que ha implicado la adopción de nuevos valores


en los trabajadores en el contexto de los círculos de calidad y del mejoramiento continuo
(kaisen en japonés); aspectos del trabajo, que al margen de la indiferencia de las
autoridades laborales, representan la manifestación de la flexibilización y de la
modificación de las relaciones laborales305, y la postura de los trabajadores no ha sido de
un rechazo total a dicho esquema; por el contrario, a través de la negociación colectiva,
específicamente por medio de los convenios de productividad, por ejemplo, los sindicatos
de la industria automotriz, han encontrado soluciones viables a sus reclamos de
mejoramiento de sus condiciones de trabajo y de una justa retribución de su trabajo, sin
menoscabo de sus derechos laborales.

Esa postura de negociación a través de los convenios de productividad, no debe


entenderse como la adopción inercial de nuevos valores, lo que erróneamente se
interpreta como la expresión de la nueva cultura de trabajo de la clase trabajadora,
cuando simple y llanamente se trata de una adopción de actitudes en el trabajo para la
realización de tareas o actividades de un proceso o sistema de trabajo de acuerdo a
principios de eficiencia y eficacia laboral.

La anterior situación es un síntoma de que la clase trabajadora mexicana posee


capacidades laborales que se orientan al trabajo eficiente y productivo, y que lo único que
reclama es un trabajo digno y debidamente remunerado; en este sentido, la postura del
movimiento obrero se circunscribe al reconocimiento de sus derechos laborales, el pago
justo de su trabajo, condiciones de trabajo dignas y seguras, y el pleno ejercicio de sus
derechos sustantivos, como lo referente a la capacitación para hacer frente a los retos de
la nueva tecnología y a la innovación de los procesos o sistemas de trabajo productivos.

En aquellas empresas que de facto flexibilizan las relaciones de trabajo, encuentran


resistencia por parte de los trabajadores; cuando los nuevos sistemas de organización del
trabajo aparecen de manera paralela a compromisos que las empresas generan, y las
actitudes obreras aparecen medidas por ese nivel de compromiso, como acontece en la
industria automotriz, las percepciones obreras sobre los programas de productividad y
calidad son totalmente diferentes, se manifiestan nuevas correlaciones de fuerza entre

305
Cfr., Wannoffel, Manfred, “Interrogantes sobre la cultura laboral de la competitividad internacional”, en
Guadarrama Olivera, Rocío (coord.), Cultura y trabajo en México: Estereotipos, prácticas y representaciones,
Universidad Autónoma Metropolitana – Unidad Iztapalapa, México, 1998, pp. 166167.

360
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

ambos actores de la relación de trabajo, y las actitudes obreras ante los nuevos sistemas
son funcionalmente dependientes.306

Ante una ficción de armonía entre empresarios y trabajadores, la tan reiterada nueva
cultura laboral pretendió dejar de lado la postura del movimiento obrero respecto al
reclamo de un trabajo bien remunerado, e intentó imponer principios de corte neoliberal y
dejar a las fuerzas del mercado el problema de un empleo digno; consideraciones que se
entrelazan ante el dilema de una nueva cultural laboral para un mundo del trabajo
anquilosado y una clase empresarial egoísta; por tanto, se puede afirmar que en los
principios de la denominada nueva cultura laboral, en realidad no se encuentra mayores
“novedades” en el viejo mundo del trabajo.307

5.2 Prospectiva Laboral.

En los tiempos modernos del mundo del trabajo, es necesario hacer una reflexión
respecto al futuro inmediato de la situación de los trabajadores por lo que se refiere a sus
derechos laborales en el contexto de un sistema político económico de corte netamente
neoliberal, dadas las condiciones prevalecientes de la mayoría de las personas que
cuentan, en el mejor de los casos, con un empleo formal y de aquellas que han de
requerir incorporarse al trabajo, y enfrentan una realidad apabullante.

En otras palabras, en razón de las condiciones imperantes de la clase trabajadora,


aunque los pregoneros de la nueva cultura laboral nieguen el calificativo de clase por su
referencia a confrontación, es necesario visualizar en el mediano plazo el futuro de los
trabajadores por lo que se refiere a sus derechos laborales sustantivos y, por
consecuencia, su situación ante el capital, que históricamente los ha sometido y pretende
seguir haciéndolo con argumentos de incapacidad o incompetencia de quienes con su
fuerza de trabajo aspiran a un ingreso justo para tener un nivel de vida decoroso.

En este último capítulo se realiza un análisis prospectivo laboral con el propósito de


identificar lo que, en teoría, debe ser la política laboral con la premisa de absoluto respeto
a los derechos laborales en un entorno socioeconómico cambiante y de innovaciones
tecnológicas en los proceso de producción, pero con una postura gubernamental tutelar
hacia los que menos tienen y que son mayoría.

306
Cfr., Ibídem, p. 204.
307
Cfr., Lastra Lastra, José Manuel, óp. cit., nota 206, p. 10.

361
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Se mencionan los conceptos de productividad y competitividad, lo referente a las


denominadas competencias laborales, lo relativo a la política laboral y los proyectos de
reformas a la Ley Federal del Trabajo.

5.2.1 Los retos del mundo del trabajo.

Con el argumento empresarial de que las unidades económicas generadoras de bienes o


prestadoras de servicios, y en especial las micro, pequeñas y medianas empresas,
siempre han enfrentando problemas de naturaleza técnica organizativa, y que ante la
apertura comercial del modelo económico neoliberal dichos problemas se agravaron
debido a la baja productividad de la mano de obra y, por tanto, no era posible hacer frente
a la competencia de los mercados internacionales, la postura patronal fue de indiferencia
y no asumió su responsabilidad de modernizarse ante un contexto de innovaciones
tecnológicas en los procesos de producción.

Situación que se complicó para los pequeños y medianos centros de trabajo, que no
tenían una gran necesidad por innovar sus procesos o sistemas de trabajo y, en todo
caso, solicitaban del apoyo financiero del gobierno para hacer frente a los problemas de
mercado y a sus responsabilidades fiscales; en muchos casos los patrones no otorgaban
a sus trabajadores las prestaciones laborales que por mandato de ley tienen derecho,
bajo el argumento de la magnitud de dichos problemas.

Productividad y competitividad son dos conceptos que se enlazan como causa y efecto de
la economía de las empresas: si se identifica baja productividad, este factor no se
considera como un elemento competitivo empresarial; es así, que no debe olvidarse que
el incremento de la productividad se considera como uno de los factores determinantes
del crecimiento económico de largo plazo de los países.308

5.2.1.1 Productividad y competitividad.

El concepto de productividad se puede analizar en tres niveles: el económico a nivel país


o de una unidad económica, de eficiencia de los procesos productivos generadores de
bienes y servicios, y de eficacia y eficiencia del desempeño laboral de las personas, y en
este último, interesa su medición y proceder, en su caso, a la instrumentación de acciones
de mejora.

Para medir la productividad a nivel empresa, se requiere identificar los factores del
sistema de producción social, distinguiendo tres grupos principales: a) la ocupación o

308
Cfr., Hernández Laos, Enrique, óp. cit. nota 215, p. 152.

362
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

puesto de trabajo, b) los recursos disponibles y c) el medio ambiente309; por lo que se


refiere al aspecto de la ocupación, los empresarios achacan de manera insistente que la
baja productividad es por la falta de cultura del trabajo orientada a la calidad y de la
carencia de capacidades o competencias laborales de las personas, lo que se complica al
no cumplir con la obligación de capacitar a sus trabajadores, tal como lo establece el
artículo 132 fracción XV de la Ley Federal del Trabajo.

Por otro parte, no se puede hacer de lado el problema educativo de la población


mexicana, que se agrava por las condiciones de pobreza y de bajos salarios; por ejemplo,
para el periodo de 1980 a 1994 el número promedio de número de años de escolaridad no
aumentó al mismo ritmo del periodo de 1970 a 1980; en 1970 el promedio de escolaridad
era de 3.5 años y para 1980 de 5.4, lo que representó un incremento de 1.9 años en un
periodo de 10 años, y para 1994 el promedio fue de 7.2, que respecto a 1980 significó una
variación de 1.8 años en un periodo de 14 años; es así, que la calidad de la educación no
responde a los requerimientos del entorno de economía globalizada y sus efectos se
dejan notar por la falta de técnicos y de investigadores en las áreas de tecnología de
punta como la electrónica y de telecomunicaciones.310

De acuerdo a datos del Instituto Nacional para la Educación de Adultos (INEA), al mes de
mayo de 2007, 30 millones 145 mil mexicanos de más de 15 años se encuentran en
rezago educativo311 (entendido como aquel que comprende a las personas de 15 años o
más que no cuentan con secundaria y que no están en la escuela) lo cual se dificulta si no
se pone en práctica una política educativa en concordancia con lo señalado en el artículo
3º constitucional; por el contrario, hay un marcado descuido de la infraestructura educativa
nacional y se deja en manos de particulares la educación bajo la idea de que debe
imperar la competencia para mejorar la calidad de la educación.

Con la apertura indiscriminada de las fronteras nacionales a los mercados internacionales,


las empresas mexicanas se enfrentaron a una realidad distinta a la de años anteriores: no
estaban preparadas para competir con los productos extranjeros que inundaron los
mercados a precios por debajo de los productos similares a los que se producían en el
país, aunque la calidad de los primeros no fue como se decía que era.

309
Cfr., Prokopenko, Joseph, op. cit., nota 223, p. 9.
310
Cfr., Damián, Araceli, óp. cit., nota 235, p. 119.
311
Cfr., Székely Pardo, Miguel, “Se requieren nuevas acciones para atender el rezago educativo”, Boletín de
Mayo 2007, Secretaría de Educación Pública, México, 2007, revisado el 15/06/2007 en
http://www.sep.gobn.mx/wb2/sep/sep_Bol1160507.

363
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Como una estrategia para hacer frente a los productos extranjeros, los empresarios
mexicanos optaron por la reducción de costos de producción mediante la contención
salarial y la disminución del número de trabajadores con la aplicación de facto de la
flexibilización laboral, lo que significó un deterioro de las condiciones de trabajo y el no
cumplimiento de las normas laborales.

La competitividad empresarial se relaciona con lo que se denomina una ventaja


comparativa, la cual se interpreta como aquella que tiene una persona o país en una
actividad económica si puede desempeñar esa actividad a un costo de oportunidad
inferior al que incurriría cualquier otra persona o país312, y en el caso de México dicho
costo fue a expensas del costo de la fuerza de trabajo; situación que se tradujo en bajos
salarios en complicidad con el corporativismo sindical y de las autoridades del trabajo.

Si bien, productividad y competitividad son dos factores que representan el resultado de la


dinámica de una empresa y de un país, no siempre se identifica una correlación entre
ambos: en algunos casos hay un incremento de la productividad en el lugar de trabajo,
pero los precios de los productos se incrementan por el avorazamiento de la clase
empresarial y, por tanto, no hay una verdadera competitividad.

El escenario de la industria nacional a mediados de 2006, muestra un generalizado


deterioro del sector productivo y de su competitividad, tal y como se refleja en constantes
disminuciones en el posicionamiento global de la competitividad,313 realizado por Foro
Económico Mundial, el cual para el periodo 20062007, ubica a México en el lugar 52 de
entre 125 países; dicha fuente, para el periodo 20072008 coloca a México en esa misma
posición de entre 131 naciones.314

Se entiende que el crecimiento y desarrollo de una economía debe sustentarse en la


productividad de sus recursos, pero es necesario reorientar las políticas públicas laborales
hacia la formación y capacitación de la mano de obra, aunado a la innovación de los
procesos productivos, para que en una prospectiva laboral de trabajo digno y socialmente
útil, haya un verdadero esfuerzo por ser más productivos y competitivos, y se retribuya el
desempeño individual y grupal de quienes le encuentran sentido a lo que hacen y toman
conciencia del valor de su trabajo, y aspiran a un reconocimiento pleno de sus derechos
laborales sustantivos.
312
Cfr., Parkin, Michael y Esquivel, Gerardo, óp. cit., nota 64, p. 67.
313
Cfr., Dussel Peters, Enrique, “Hacia una política de competitividad en México”, México, Economía UNAM,
2006, vol. 3, núm. 9, p. 65, revisado el 04/09/2007 en http://www.economia.unam.mx/cechimex/.
314
Cfr., Foro económico del mundo “El informe global 20062007 de la competitividad: Toques de luz del país”,
2006, revisado el 11/09/2007 y el 07/04/2008 en http://www.weforum.org.

364
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.2.1.2 Competencias laborales.

Con las reformas a la Ley Federal del Trabajo de mayo de 1978, por lo que se refiere al
derecho de los trabajadores para que su patrón les proporcione capacitación, tal como lo
establece el artículo 153A, quedó de manifiesto que sólo es posible ser más productivos
cuando las personas poseen los conocimientos y habilidades requeridas para el
desempeño de una determinada ocupación laboral.

Los trabajadores realizan el trabajo que les encomiendan y los resultados pueden ser los
esperados si tienen la información mínima de los procedimientos operativos a seguir, las
condiciones de trabajo son las adecuadas, se les proporciona el equipo y, ante todo, hay
un respeto a sus derechos laborales como lo referente a la jornada de trabajo, el pago de
un salario justo y gozan de sus periodos de descanso, entre otros aspectos.

En el lugar de trabajo, la capacitación es un medio y un proceso para la adquisición y


actualización de conocimientos, el mejoramiento de habilidades y modificación de
actitudes, y presupone la existencia de un plan y programas de capacitación que oriente
las acciones a realizar para cubrir, en el mejor de los supuestos, las necesidades
específicas de los trabajadores en lo que se refiere al desempeño laboral.

Cuando se capacita a las personas de acuerdo a la naturaleza técnica de su ocupación


laboral, se considera que son aptos315 o capaces para el buen desempeño de las
funciones, actividades y tareas de dicha ocupación; sin embargo, los empresarios amplían
unilateralmente el horizonte de las responsabilidades de sus trabajadores y les exigen
más resultados en el entendido que han invertido en su capacitación y que, por tanto,
están obligados a ser más productivos.

La anterior consideración se manifiesta de manera radical en la relación de trabajo


derivada de un contrato individual de trabajo, ya que en el caso de la contratación
colectiva todavía hay atenuantes a dicha situación con el establecimiento de convenios de
productividad entre empresarios y sindicatos de trabajadores; basta recordar que de
acuerdo a lo señalado en el artículo 356 de la Ley Federal del Trabajo, un sindicato tiene
como fin el estudio, mejoramiento y defensa de sus respectivos intereses.

Al momento de que los empresarios tuvieron problemas de productividad y competitividad,


como efecto del neoliberalismo, se permeó en la imaginación de ellos un conjunto de

315
El término apto se interpreta como un calificativo; el diccionario de la Real Academia Española, lo define
como: capacidad y disposición para el buen desempeño o ejercicio de un negocio, de una industria, de un
arte, etc.

365
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

valores como, por ejemplo, los de eficacia y eficiencia, y se plantearon las interrogantes
de ¿cuáles son los retos que enfrentan para sobrevivir y hacerse cada vez más
competitivos?, cuando menos en el espacio del mercado nacional, y sin mayor recato
atribuyeron todos sus problemas al trabajador, calificándolo de incompetente.316

Con la expresión capacitación en el trabajo, se hace referencia a los requerimientos de


conocimientos y habilidades de los trabajadores para el desempeño de su trabajo, que les
permita elevar su nivel de vida y productividad, y presupone la identificación de dichos
requerimientos con base a parámetros de eficacia y eficiencia laboral del puesto de
trabajo que ocupan; pero, con la flexibilidad laboral de facto por parte de los empresarios,
la capacitación que se llega a impartir se orienta a modificar la percepción de los
trabajadores respecto al mundo del trabajo con la incorporación de paradigmas de una
cultura laboral que soslaya sus derechos laborales.

Es así, que en 1995 se incorporó en el mundo del trabajo el concepto de competencia


laboral317 que implica una confrontación entre iguales para hacer sentir incompetentes a
quienes no se ajustan a los parámetros de desempeño que impusieron los empresarios y
autoridades del trabajo en algunos sectores económicos, mediante el establecimiento de
las denominadas normas técnicas de competencia laboral (NTCL), lo que contravenía con
los dispuesto por la Ley Federal del Trabajo en materia de capacitación, en razón de que
se dejó de lado lo establecido por los artículos 153T, 153U y 153V:

Artículo 153T.

Los trabajadores que hayan sido aprobados en los exámenes de capacitación y


adiestramiento en los términos de este Capítulo, tendrán derecho a que la entidad
instructora les expida las constancias respectivas, mismas que, autentificadas por la
Comisión Mixta de Capacitación y Adiestramiento de la Empresa, se harán del
conocimiento de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, por conducto del
correspondiente Comité Nacional o, a falta de éste, a través de las autoridades del trabajo
a fin de que la propia Secretaría las registre y las tome en cuenta al formular el padrón de
trabajadores capacitados que corresponda, en los términos de la fracción IV del artículo
539.

316
Cfr., Reygadas Robles Gil, Luis, óp. cit., nota 218, p. 426.
317
De acuerdo con las Reglas generales y criterios para la integración y operación de los Sistemas
Normalizado de Competencia Laboral y de Certificación de Competencia Laboral (DOF 11 de enero de 2007),
se interpreta como: La capacidad de una persona para desempeñar una función laboral con las características
de calidad requeridas por el cliente o empleador.

366
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Artículo 153U.

Cuando implantado un programa de capacitación, un trabajador se niegue a recibir ésta,


por considerar que tiene los conocimientos necesarios para el desempeño de su puesto y
del inmediato superior, deberá acreditar documentalmente dicha capacidad o presentar y
aprobar, ante la entidad instructora, el examen de suficiencia que señale la Secretaría del
Trabajo y Previsión Social.

En este último caso, se extenderá a dicho trabajador la correspondiente constancia de


habilidades laborales.

Artículo 153V.

La constancia de habilidades laborales es el documento expedido por el capacitador, con


el cual el trabajador acreditará haber llevado y aprobado un curso de capacitación.

Las empresas están obligadas a enviar a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social para
su registro y control, listas de las constancias que se hayan expedido a sus trabajadores.

Las constancias de que se trata surtirán plenos efectos, para fines de ascenso, dentro de
la empresa en que se haya proporcionado la capacitación o adiestramiento.

Si en una empresa existen varias especialidades o niveles en relación con el puesto a que
la constancia se refiera, el trabajador, mediante examen que practique la Comisión Mixta
de Capacitación y Adiestramiento respectiva acreditará para cuál de ellas es apto.

Si bien, lo señalado en los artículos anteriores no corresponde a la realidad del mundo del
trabajo, en virtud de los avances tecnológicos y de la reorganización del trabajo en un
contexto de productividad y competitividad que obliga a la optimización de recursos, la
calidad orientada al cliente y la necesidad de la capacitación de los trabajadores para
asumir nuevas responsabilidades, que de facto lo hacen, se requiere una revalorización
del trabajo de las personas en un marco del trabajo digno y debidamente remunerado.

Desde una prospectiva laboral de un trabajo decente, la capacitación se inserta en el


concepto de formación318 de los trabajadores, ya que la engloba en un contexto de
aprendizaje permanente de las personas en relación con la productividad, y debe tener
como resultado el hecho de que las personas sean competentes; o sea, que posean las
competencias laborales requeridas para ser más productivos y tengan, como derecho
tutelado e irrenunciable, una justa remuneración al trabajo realizado; y su formación no

318
Cfr., Mertens, Leonard, Productividad en las organizaciones, CINTERFOR, Uruguay, 2002, pp. 79.

367
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sea producto de la imposición de los denominados principios de la nueva cultura laboral


dogmática.

Cabe mencionar, que la Conferencia General de la Organización Internacional del


Trabajo, convocada en Ginebra, Suiza, en junio de 2004 por el Consejo de Administración
de la OIT, adoptó la Recomendación 195 referente al desarrollo de los recursos humanos,
en la que se menciona que las competencias laborales son resultado de las acciones de
formación profesional y de capacitación en el trabajo, y que el término empleabilidad319 se
refiere a las competencias y cualificaciones320 transferibles que refuerzan la capacidad de
las personas para aprovechar las oportunidades de educación y de formación que se les
presenten con miras a encontrar y conservar un trabajo decente, progresar en la empresa
o cambiar de empleo y adaptarse a la evolución de la tecnología y de las condiciones del
mercado de trabajo.

Asimismo, se indica que los Miembros de la OIT deberían promover, con la participación
de los interlocutores sociales, la identificación permanente de las tendencias en materia
de competencias que necesitan las personas, las empresas, la economía y la sociedad en
su conjunto.

Consideraciones que no fueron tomadas en cuenta por el Poder Ejecutivo en la


administración del periodo 20002006, y no se aprecia en el gobierno federal actual,
ninguna política pública laboral orientada a la formación y capacitación de la clase
trabajadora que no implique el deterioro de sus derechos laborales sustantivos.

319
Se refiere a las competencias y cualificaciones transferibles que refuerzan la capacidad de las personas
para aprovechar las oportunidades de educación y de formación que se les presenten con miras a encontrar y
conservar un trabajo decente, progresar en la empresa o al cambiar de empleo y adaptarse a la evolución de
la tecnología y de las condiciones del mercado de trabajo. Recomendación 195, OIT.
320
Designa la expresión formal de las habilidades profesionales del trabajador, reconocidas en los planos
internacional, nacional o sectorial. Recomendación 195, OIT.

368
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.2.2 Política laboral.

A partir de la aplicación del modelo económico de libre mercado o neoliberalismo, es un


hecho irrebatible la falta de concreción de una política laboral que se oriente de manera
significativa al mejoramiento de las condiciones de trabajo y de las remuneraciones de las
personas sujetas a una relación de trabajo, amén de la informalidad y la subcontratación.

Por el contrario, las políticas públicas de tipo económico laboral se han orientado a la
contención salarial so pretexto de evitar una espiral inflacionaria, con los consabidos
resultados de un alto índice de desempleo, la informalidad del mercado laboral, reclamos
de justicia social para los más vulnerables (personas con discapacidad, adultos mayores y
mujeres discriminadas) y de los jóvenes que necesitan acceder a un empleo digno.

En este tema se analizan las políticas laborales que el Poder Ejecutivo ha diseñado e
instrumentado en el pasado inmediato y pone en práctica para el periodo de 20072012,
como parte de lo preceptuado en la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos y en la Ley de Planeación, tal como se indica en el artículo 2º de la ley citada:

Artículo 2o.La planeación deberá llevarse a cabo como un medio para el eficaz
desempeño de la responsabilidad del Estado sobre el desarrollo integral y sustentable del
país y deberá tender a la consecución de los fines y objetivos políticos, sociales,
culturales y económicos contenidos en la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos. Para ello, estará basada en los siguientes principios:

I. El fortalecimiento de la soberanía, la independencia y autodeterminación


nacionales, en lo político, lo económico y lo cultural;
II. La preservación y el perfeccionamiento del régimen democrático, republicano,
federal y representativo que la Constitución establece; y la consolidación de la democracia
como sistema de vida, fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural
del pueblo, impulsando su participación activa en la planeación y ejecución de las
actividades del gobierno;
III. La igualdad de derechos, la atención de las necesidades básicas de la población y
la mejoría, en todos los aspectos, de la calidad de la vida, para lograr una sociedad más
igualitaria, garantizando un ambiente adecuado para el desarrollo de la población;

IV. El respeto irrestricto de las garantías individuales, y de las libertades y derechos


sociales y políticos;

369
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

IV. El fortalecimiento del pacto federal y del Municipio libre, para lograr un desarrollo
equilibrado del país, promoviendo la descentralización de la vida nacional; y

VI. El equilibrio de los factores de la producción, que proteja y promueva el empleo; en un


marco de estabilidad económica y social.

5.2.2.1 Enfoque económico.

Desde una perspectiva sistémica no se pueden desligar los aspectos del mundo del
trabajo de las políticas económicas, ya que el crecimiento y desarrollo económico de una
nación se vincula con los factores de empleo, productividad laboral y remuneraciones de
la clase trabajadora.

El crecimiento económico se relaciona con el incremento de la producción de bienes y


servicios en un periodo determinado, 249 y su medición es factible a través del producto
interno bruto (PIB); el desarrollo económico se refiere al proceso mediante el cual una
nación pasa de una economía en estado atrasado a una economía en estado
avanzado321; consideraciones que permiten afirmar que a partir de la aplicación de
políticas económicas neoliberales, la economía mexicana ha tenido en algunos años un
crecimiento pero no un desarrollo económico que refleje un bienestar para la mayoría de
la población.322

Durante el periodo presidencial de 20002006, las políticas públicas laborales se


supeditaron de manera radical a las económicas, y en el Plan Nacional de Desarrollo para
dicho periodo se refuerza esta postura al mencionarse de manera tajante, en el apartado
3. MÉXICO: HACIA UN DESPEGUE ACELERADO, específicamente en el punto 3.4,
rubro: Cambio en el modelo económico mexicano, que el modelo de sustitución de
importaciones implicó la existencia de un gobierno extremadamente poderoso en materia
económica, bajo el argumento de que la vida misma de las empresas nacionales
dependió de la protección oficial que se les brindaba contra las importaciones, y que la
tendencia de largo plazo del crecimiento de la productividad es la clave para mejorar de
forma sostenida el bienestar de la población, y que todo esto avala la idea de que lo
indispensable para el aumento de la productividad es la política de cambio estructural.

Lo anterior se tradujo en políticas económicas que se orientaron a la productividad y


competitividad con esquemas de bajos salarios y la subcontratación (léase flexibilidad
laboral en la contratación sin goce de los derechos laborales), lo que provocó el
321
Cfr., Ídem.
322
Cfr., Zorrilla Arena, Santiago y Silvestre Méndez, José, óp. cit., nota 65, p. 47.

370
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

desempleo y la informalidad de la economía; y, de manera opuesta, en el denominado


gobierno del cambio se dio un desmedido enriquecimiento de la clase empresarial.

Aseveraciones que son validadas por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, en su
documento de Avances al mes de agosto de 2007; en el cual se menciona que 19.2
millones de un total de 42.4 millones de personas que conforman la población ocupada de
México labora en condiciones de informalidad, y que la tasa de desocupación durante el
periodo 2005 y 2006 fue del 3.65%, y por lo que se refiere a los jóvenes dicha tasa fue de
6.29%.323

Dado que la economía mexicana es afectada por el contexto internacional, y de manera


acentuada por la dinámica de la economía de los Estados Unidos de Norte América, se
previó para 2007 que la proyección del indicador de crecimiento a nivel mundial y para las
economías avanzadas mostrara una tendencia bajista, lo que se confirma con la
manifestación de algunos factores como la desaceleración de la economía de los Estados
Unidos.324

En virtud de que en forma reiterada en el ámbito internacional económico, instituciones de


corte neoliberal 253 han manifestado que se requieren reformas en materia de
energéticos, fiscal y laboral con el argumento de que dichas reformas son un instrumento
para impulsar la inversión, la creación de empleos, de empresas y la innovación, y que
urgen dichas reformas, la clase política empresarial en el poder para el periodo 20072012
se ve obligada a insistir en las reformas energética, fiscal y laboral, y pregona, sin tener
un sentido de la responsabilidad social, que la libre competencia se traduce en precios
más accesibles, mayor calidad, y como consecuencia, mayor competitividad, sin
mencionar la falta de la distribución de la riqueza producto del trabajo, el enriquecimiento
desmedido de los empresarios a costa de bajos salarios de los trabajadores, la
informalidad del empleo y la flexibilidad de facto en detrimento de los derechos laborales,
entre otros aspectos, que dan como resultado un decaimiento de la calidad de vida de
muchos mexicanos por sus bajas percepciones y la carencia de programas de seguridad
social que efectivamente les favorezcan.

El horizonte en materia económico laboral no se visualiza con una orientación a favor de


los derechos de los trabajadores; basta con mencionar que en el Plan Nacional de

323
Cfr., Secretaría del Trabajo y Previsión Social, México, 2007, revisado el 11/09/2007 en
http://www.stps.gob.mx.
324
Cfr., Romero Alarcón, Monserrat, Pesquisas[. América Latina, “Desempeño económico global 20042007”,
UNAM, Facultad de Economía, México, núm. 345, marzo-abril de 2007, p. 246.

371
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Desarrollo 200720012 se reitera que una mayor competitividad de la economía nacional


también contribuirá al incremento de la inversión y a una mayor creación de empleos que
permitan a los individuos elevar sus niveles de bienestar económico325, cuando en la
realidad hay problemas para la generación de empleos por parte del sector público y no
existen programas de inversión privada en ese rubro.

En el Plan Nacional de Desarrollo 200720012, específicamente en el Eje 2.326

Economía Competitiva y generadora de empleos, se menciona la importancia del


desempeño de la economía para lograr mayores niveles de competitividad y de generar
más y mejores empleos para la población, lo que es fundamental para el Desarrollo
Humano Sustentable, pero bajo la premisa de la delimitación clara de la participación
económica del Estado327; lo que representa un razonamiento contrario al artículo 25
constitucional, en el que se menciona que corresponde al Estado la rectoría del
desarrollo, y se subordine dicha responsabilidad social a su no participación en áreas no
estratégicas.

Por lo que se refiere al aspecto de flexibilización del trabajo, en el eje antes citado, se
pone como condición del crecimiento elevado de la productividad contar con individuos
suficientemente capacitados y flexibles328, sin que se indique el derecho de los
trabajadores a ser capacitados y se deja a la libre interpretación el término “flexibles”; lo
que, desde la óptica empresarial, representa disponer de trabajadores sometidos a su
concepción egoísta del trabajo: mayor riqueza a costa del trabajo de las personas.

De manera particular en el referido eje, específicamente lo indicado en el párrafo:

“2.4 Promoción del Empleo y Paz Laboral, Objetivo 4. Promover las políticas de Estado y
generar las condiciones en el mercado laboral que incentiven la creación de empleos de
alta calidad en el sector formal”, se menciona como estrategia la promoción de las
políticas de Estado para fomentar la productividad en las relaciones laborales y la
competitividad de la economía nacional, a fin de atraer inversiones y generar empleos
formales y de calidad329, y se agrega que la anterior estrategia se sustentará, entre otras,
en la política de creación de empleos; pero no se describen las acciones a realizar por
parte del Poder Ejecutivo para tal fin, y , por el contrario, se deja a la buena voluntad de
325
Cfr. Gurría, Ángel, “Foro Internacional sobre Políticas Públicas para el desarrollo de México”, Palabras del
Secretario de la OCDE, Febrero 2007.
326
Cfr., Plan Nacional de Desarrollo 20072012, Presidencia de la Republica, México, pp. 2427.
327
Cfr., Ibídem, p. 34.
328
Cfr., Ibídem, p. 90.
329
Cfr., Ibídem, p. 105.

372
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los actores del mundo del trabajo dicha responsabilidad social del Estado, en menoscabo
de los que requieren un trabajo digno.

Como remate a lo antes dicho, en la estrategia 4.5 referente a modernizar el marco


normativo laboral para promover la productividad y competitividad laboral, garantizando
los derechos de los trabajadores, se menciona lo siguiente:

Promover y vigilar el estricto cumplimiento de la normatividad laboral e impulsar su


actualización a fin de promover la productividad en las relaciones laborales, la
competitividad de la economía en su conjunto, la oferta de empleo formal y con dignidad,
y la salvaguarda de los derechos fundamentales de los trabajadores, señaladamente el de
la contratación colectiva del trabajo, la autonomía y libertad sindical y el derecho de
huelga.

Estrategia que refleja el sentir de una clase política económica en el poder, deseosa de
modificar radicalmente el marco jurídico laboral para dar cabida a su proyecto neoliberal
sin obstáculos; ya que se menciona la “actualización” de la normatividad laboral, lo que
representa poner al día los caprichos empresariales para el logro de sus fines, se insiste,
egoístas.

De manera particular, de acuerdo a lo estipulado por el artículo 16 de la Ley de


Planeación, las autoridades federales del trabajo tienen la responsabilidad de formular el
programa sectorial correspondiente, y el 28 de noviembre de 2007, el Poder Ejecutivo de
la Unión dio a conocer los programas sectoriales, incluyendo el Programa Sectorial de
Trabajo y Previsión Social 20072012.

Como se esperaba, dicho programa no contiene algo diferente a lo señalado en el Plan


Nacional de Desarrollo 20072012, y se remarca como política laboral la necesidad de
reformar la Ley Federal del Trabajo, considerando como ejes rectores la flexibilización de
la organización del trabajo, la adopción de valores orientados a la productividad y la
competitividad, para que, en teoría, se retribuya el trabajo de las personas con base a
indicadores.

No es necesario esperar que transcurran varios años para confirmar lo contrario, ya que
actualmente no existe voluntad por parte de la autoridades laborales y de la clase
empresarial, para que mejoren las condiciones actuales de los trabajadores, se recupere
el salario real, se reviertan los esquemas del trabajo informal, se ponga un alto a la
subcontratación como forma de evadir el cumplimento de obligaciones laborales y se

373
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

eliminen las prácticas empresariales que evitan el reparto de utilidades y el pago justo a
un trabajo digno.

5.2.2.2 Reforma laboral.

Ante los embates de la competitividad internacional, las empresas nacionales enfrentaron


problemas de naturaleza productiva, organizacional y tecnológica, y al no existir una
política pública rectora de la economía nacional, se generó desempleo, contención
salarial, economía informal y subcontratación de la mano de obra en perjuicio de sus
derechos laborales.

En este escenario, los empresarios exigen cambios a la Ley Federal del Trabajo para no
cumplir con lo preceptuado, y esgrimen, como se ha mencionado en el desarrollo de los
temas anteriores, la urgencia de reformar el marco jurídico laboral para ser más
productivos y competitivos, y enarbolan la bandera de la flexibilización laboral para tal fin.

Si bien es cierto, que la Ley Federal del Trabajo necesita ser revisada en un contexto de
cambios en la organización del trabajo por las innovaciones de la tecnología, y de
aspectos como el de la preservación del medio ambiente y el agotamiento de los recursos
no renovables, no se justifica el reclamo empresarial para institucionalizar aquella
flexibilidad laboral que deteriora los derechos laborales sustantivos en el marco de un
trabajo digno y socialmente útil.

Reformar la Ley Federal del Trabajo desde la óptica empresarial representa adecuarla o
“actualizarla” de acuerdo a sus pretensiones de flexibilizar las condiciones de trabajo, que
no se tutelen los derechos de los trabajadores, que no exista traba alguna para la
separación de los trabajadores por no convenir a los intereses patronales, entre otros
aspectos relacionados a contratación individual y la colectiva.

Conforme al inciso a) del artículo 72 de la Constitución Política de los Estados Unidos


Mexicano, para reformar la Ley Federal del Trabajo se deben observar los mismos
trámites establecidos para su formación, lo que significa que las dos Cámaras del
Congreso de la Unión participen de manera conjunta en la aprobación de las reformas
planteadas y el decreto correspondiente sea promulgado por el Poder Ejecutivo; y en
razón de lo dicho, cualquier proyecto de reformas a la Ley Federal del Trabajo que no
esté alineado a la política laboral de la clase política de corte neoliberal en el poder, será
vetado por el Poder Ejecutivo, el cual tiene esa atribución de acuerdo a lo señalado por el
inciso d) del artículo citado.

374
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La idea de reformas a la Ley Federales del Trabajo bajo bandera de la flexibilización


laboral, se inició en los años 90 del siglo XX, cuando se daban las reformas neoliberales
al modelo económico y los argumentos se orientaron a tener condiciones superiores de
productividad y calidad para que las empresas fueran productivas y competitivas, y que
debían flexibilizarse las relaciones laborales para tal propósito; ya que la rigidez laboral
era contradictoria con el nuevo modelo económico; y el argumento de fondo se ligó a la
concepción neoliberal de lo que es una relación: ésta es una relación individual, y lo
colectivo es sólo la agregación de individuos; los niveles salariales y el empleo deberían
fijarse según oferta y demanda de obra, sin restricciones institucionales330. Lo anterior es
una panorámica del pensamiento de los llamados tecnócratas en el poder y de la clase
empresarial que antepone a los derechos laborales ideas y principios de una gerencia
más preocupada en someter culturalmente a los trabajadores para que no cuestionen los
cambios en la organización del trabajo y consideren que los tiempos no son de
confrontación sino de sacrificios en aras de la productividad y la competitividad.

En la dirección de la evolución del derecho individual del trabajo, se explica la necesidad


de adecuar el marco jurídico laboral en razón de esquemas de trabajo orientados a la
productividad y la competitividad331, pero que consideren como punto central el derecho a
la formación y capacitación que incida en la empleabilidad de las personas; lo que implica
el reconocimiento de los derechos sustantivos laborales que permitan el mejoramiento del
nivel y calidad de vida de los trabajadores, el pago de un salario justo y el establecimiento
de sistemas de remuneración que retribuyan el esfuerzo individual y colectivo. Por
ejemplo, en 1994 a propuesta del Partido Acción Nacional (PAN), Carlos de Buen Unna y
Nestor de Buen Lozano elaboraron un memorándum sobre los puntos esenciales de lo
que debía ser una reforma laboral, que mejoraba las condiciones de trabajo reconociendo
la necesidad, suficientemente pagada, de la flexibilización.332

En los intentos de reforma a la Ley Federal del Trabajo, se identifican cuatro iniciativas, la
de los senadores del PAN en julio de 1995, la preparada por diputados federales de
diversos partidos, identificada como propuesta PRDUNT de octubre de 2002, la llamada

330
Cfr., De la Garza, Enrique, óp. cit., nota 209, pp. 497498.
331
Cfr., Marquet Guerrero, Porfirio, “México realidad laboral a finales del siglo XX”, en Pérez López, Valente
Gerardo (coord.), México su realidad laboral a fines del siglo XX, Análisis laboral, UNAM, Facultad de
Derecho, México, 1997, p.114.
332
Cfr., De Buen Lozano, Nestor, Revista Latinoamericana de derecho, La reforma intentada a la Ley Federal
del Trabajo, UNAM Instituto de Investigaciones Jurídicas, año III, núm.5, enero – junio, México, 2006, pp.
5758.

375
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

iniciativa Abascal de diciembre de 2002 y la del entonces Senador Fraile conocida como
“propuesta333”.

5.2.3 Proyectos de reformas a la legislación laboral.

Desde el momento en que los denominados tecnócratas pusieron en práctica políticas


económicas de corte neoliberal y los organismos financieros internacionales
condicionaron los empréstitos, se inició un movimiento de aculturación por parte de la élite
política en el poder y de la clase empresarial, de la necesidad de flexibilizar la
organización del trabajo y de la consiguiente reforma a la Ley Federal del trabajo, por lo
que trataron de imponer el concepto de nueva cultura laboral para el logro de sus
propósitos, a pesar de que las condiciones socioeconómicas de la población indicaban la
existencia de una economía informal y un alto desempleo en virtud de la aplicación de
políticas económicas laborales contrarias a los reclamos de los trabajadores de
condiciones de trabajo dignas y el pago de un salario justo y debidamente remunerado.

Es en el sexenio del Lic. Carlos Salinas de Gortari, con la firma del Acuerdo Nacional para
la Elevación de la Productividad y de la Calidad, donde se ubica lo antes señalado y
adquiere una gran intensidad en el periodo presidencial 20002006, con la presentación de
la iniciativa oficialista de reforma laboral, a la que se le llamó el proyecto Abascal.

Como contrapeso a las intenciones de imponer una reforma laboral a modo de la clase
empresarial, el movimiento obrero independiente, el no oficialista o corporativista, formuló
un proyecto alterno de reforma la que se le conoce como el proyecto UNT en referencia a
la Unión Nacional de Trabajadores.

5.2.3.1 Proyecto oficialista.

El origen del proyecto oficialista se ubica en 1988 con la polémica por parte de la clase
empresarial de su necesidad de reforma a la Ley Federal del Trabajo; continúa con la
consulta popular que realizó el Senado de la República en 1989, la propuesta que
presentaron la CONCANACO y la CANACINTRA en 1994, el proyecto del PAN de 1995 y
adquiere forma con el proyecto de la STPS de 2001.334

En la campaña para la presidencia, el Lic. Carlos Salinas de Gortari propuso reformar la


Ley Federal del Trabajo sin mencionar en qué consistirían los cambios, y al tomar

333
Cfr., Alcalde Justiniani, Arturo, “El difícil camino hacia la reforma laboral”, en Bouzas Ortiz, José Alfonso,
(coord.), La Reforma laboral que necesitamos, ¿Cómo transitar a una auténtica modernización laboral?
UNAM, Instituto de Investigaciones Económicas, México, 2004, p. 24.
334
Cfr., De la Garza, Enrique, óp. cit. ., nota 209, pp. 500501.

376
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

posesión del Poder Ejecutivo Federal nombró una comisión para la reforma, la cual se
disolvió al no haber presencia de especialistas laborales; por otro lado, en los trabajos
previos a la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la
COPARMEX proclamó la necesidad de adecuar la legislación laboral mexicana a la de los
países de Canadá y Estados Unidos, y posteriormente con el Acuerdo de Cooperación
Laboral se pretendió la sumisión del movimiento obrero a los conceptos de calidad y
productividad.335

El proyecto oficialista empieza a manifestarse en 1994 con la redacción de un


memorándun sobre los puntos esenciales de la reforma, que escribieron Carlos de Buen
Unna y Néstor de Buen Lozano, a solicitud de diputados del PAN de la LV Legislatura; en
1995 se convierte en iniciativa a instancias de Senadores del PAN, pero el PRI no la
apoya y no pasa a comisiones. En términos generales dicha iniciativa consideraba el
mejoramiento de las condiciones de trabajo reconociendo la necesidad, suficientemente
remunerada, de la flexibilización laboral, desaparecía el corporativismo y el control del
Estado sobre sindicatos, convenios colectivos y derecho de huelga336.

Con la promoción de la nueva cultura laboral, en el periodo presidencial 20002006, se


pretende introducir en el consiente colectivo la urgencia de reforma laboral para hacer
frente a los embates de la globalización, y se formula el proyecto llamado Abascal, en
referencia al Secretario del Trabajo y Previsión Social al inicio del sexenio foxista, de cuño
panista e ideas religiosas; dicho proyecto de reforma laboral se formula en la llamada
“mesa central de decisiones”, compuesta de once representantes por cada sector; por
parte del sector obrero hubo dos representantes de la UNT: Arturo Alcalde Justiniani y
Héctor Barba.337

En diciembre de 2002 a nombre de los Grupos Parlamentarios del PRI, PAN Y PVEM, se
presentó a la cámara de diputados la iniciativa de reformas integrales a la Ley Federal del
Trabajo, popularmente conocida como “Proyecto Abascal”; en dicha iniciativa se dibuja
pretensión de desnaturalizar al derecho laboral hasta convertirlo en su contrario, en un
código para la defensa del capital, en especial el transnacional, e impuesta por las

335
Cfr. De Buen Lozano, Néstor ,”Una ley en cambio permanente”, en Bouzas Ortiz, José Alfonso, (coord.),
Reforma Laboral, Análisis crítico del proyecto Abascal de reforma a la Ley Federal del Trabajo, UNAM,
Instituto de Investigaciones Económicas, México, 2003, pp. 151152.
336
Cfr., De Buen Lozano, Néstor, óp. cit. ., nota 208, pp. 3839.
337
Ibídem, pp. 4344.

377
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

potencias imperiales como medio de sobreexplotación económica y sometimiento


político.338

Los aspectos de la reforma de proyecto oficialista, o sea del proyecto Abascal, se refieren
a modificar de manera radical los elementos constitutivos de la relación de trabajo,
empezando con el cambio del término patrón por el de empleador y el de trabajador por el
de colaborador; se introduce el periodo de prueba o “contratos de prueba” que atenta
contra la estabilidad laboral de las personas; se permite la modificación de la jornada de
trabajo bajo la premisa de que no se incurra en una jornada inhumana, lo cual es dejar a
la subjetividad y capricho de los patrones tal circunstancia; se permite a los factores de la
producción la determinación del descanso obligatorio, sin que se manifieste el principio
tutelar de los derechos de los trabajadores; por lo que se refiere a la capacitación se
elimina la responsabilidad social de las autoridades del trabajo de constatar el
cumplimiento efectivo de los patrones de proporcionar capacitación a sus trabajadores.
De manera general, con dicha iniciativa se pretende afianzar los derechos de la clase
patronal y legalizar la sobreexplotación e inmovilismo de los trabajadores.339

Por la importancia de este documento, a continuación se transcribe de manera textual la


propuesta oficialista, específicamente el párrafo III de la iniciativa de reformas a diversos
artículos de la ley federal del trabajo, presentada por el diputado Roberto Ruiz Ángeles, a
nombre de integrantes de los grupos parlamentarios del PRI, PAN y PVEM en la LVIII
Legislatura del Congreso de la Unión el 12 de diciembre de 2002, referente a los
contenidos principales de dicha iniciativa; sin embargo, los comentarios se presentan al
final de la misma:

...III. Propuestas Principales

A. Propuestas de orden general.

1. Eliminar la connotación negativa del término "patrón", que remite a una relación de
conflicto entre los directores de la empresa y los trabajadores, reemplazándola por el
concepto actual de "empleador", que incluye tanto a las personas físicas como a las
empresas, y que supone un vínculo cooperativo y de colaboración con los trabajadores y
sus organizaciones sindicales en el seno de la empresa. Este concepto, asumido como
criterio general de reforma en todo el articulado, ha sido también adoptado y promovido a

338
Cfr., Amescua Ornelas, Norahenid, “Reforma de la Ley Federal del Trabajo” Panorama General. Debate
Parlamentario, LX Legislatura México, noviembre 2006, p. 5, revisado el 12/04/2007 en
http//prdleg.diputados.gob.mx/debate_parlamentario/noviembre_2006/pol_soc.htm.
339
Cfr., Ibídem, p. 11.

378
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

nivel internacional por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de la que México
es miembro desde su fundación.

2. Incorporar normas y preceptos que aseguren el equilibrio de los sectores productivos al


momento de la aplicación de la ley, respetando, en todos los casos, los derechos de los
trabajadores y de las organizaciones sindicales. Como muestra de lo anterior se establece
la obligatoriedad de la capacitación tanto de empleadores como de trabajadores, la
sanción a unos o a otros que incurran en actos de hostigamiento sexual, la posibilidad de
que trabajadores y empleadores convengan la modificación de los días de descanso
obligatorio, el señalamiento preciso de derechos y obligaciones de ambas partes cuando
apliquen alguna de las nuevas modalidades de contratación, así como los nuevos criterios
para ascensos en la empresa.

3. Fortalecer el respeto de los derechos laborales a través de diversas adecuaciones que


precisan y clarifican la forma correcta de darles cumplimiento.

4. Proceder a una adecuación general de la Ley Federal del Trabajo con el fin de llenar
lagunas, precisar normas, evitar contradicciones, incorporar definiciones, retirar
referencias en desuso o fuera de la realidad, establecer nuevas denominaciones a casos
específicos y realizar todo tipo de correcciones necesarias al articulado.

B. Propuestas de orden específico.

1. Respecto de las disposiciones generales. Se hacen precisiones a la norma legal que


fortalecen y dan certidumbre a las relaciones laborales. Asimismo, se incorpora a la
norma legal el respeto a la dignidad humana que en toda relación laboral debe ser
reconocida. Se expresa en forma contundente, que no podrán establecerse condiciones
que impliquen discriminación por ningún motivo, entre otras propuestas.

2. Se fortalece la capacitación y el adiestramiento en el trabajo.

3. Se fomenta la productividad mediante la instrumentación de incentivos para los


trabajadores.

4. Se establecen nuevas modalidades de contratos con la regulación necesaria para


asegurar la protección de los trabajadores, entre las que destacan, las disposiciones
relativas a los contratos de prueba o aprendizaje.

5. Se incorporan ordenamientos contra la discriminación de grupos vulnerables.

379
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

6. Se fortalece la libertad sindical, la libre sindicalización, la democracia y el pluralismo


sindicales.

7. Se establece la obligación de los sindicatos de registrarse ante la Secretaría de Trabajo


y Previsión Social o ante las juntas de conciliación arbitraje, según sea el caso.

8. Se faculta a las autoridades para que tomen en cuenta las circunstancias particulares
de contratación en los micros y pequeños centros de trabajo.

9. Se revisan la organización y funcionamiento de las autoridades del trabajo.

10. Se hacen diversas propuestas de orden procesal, entre las que destaca que en los
litigios deberán intervenir aquellas personas que cuenten con título profesional y cédula
profesional legalmente expedidos.

Del análisis de los puntos antes mencionados, se desprende que las intenciones de dicha
reforma laboral tiene como principal objetivo matizar la relación de trabajo a un vínculo
social entre “empleador” y “colaboradores” en el que no debe haber conflicto de intereses
(lo que presupone tratar de manera igual a los que económicamente menos tienen, y que
son mayoría, con los que mucho tienen y que son pocos) y señalan algunas regulaciones
como si fueran nuevas, cuando ya existen en la Ley Federal del Trabajo vigente, como lo
referente a la capacitación, y se indica la existencia de nuevas formas de contratación que
permiten a los patrones disponer del tiempo de los trabajadores a la medida de sus
intereses (cambios de horarios sin ninguna posibilidad de los trabajadores para cuestionar
o convenir de manera conjunta) y el establecimiento de nuevos criterios para el ascenso.

Es de llamar la atención, que en las propuestas señaladas, tanto las de orden general
como específico, no se indican el establecimiento de esquemas de remuneración que
respondan a criterios de justicia social que compensen debidamente el trabajo de las
personas, y que en la realidad se orienten a un distribución equitativa de la riqueza
generada con la fuerza de trabajo de quien hacen posible la generación de bienes y la
prestación de servicios demandados por la sociedad; por último, no se identifica una
verdadera intención de modificar las condiciones socioeconómicas de la clase
trabajadora, sino un sometimiento cognitivo cultural de los trabajadores en beneficio de
los empresarios que sólo ven por sus intereses egoístas en un contexto de política de
corte neoliberal.

Es así, que el proyecto oficialista se encaminaba a flexibilizar la jornada de trabajo y la


contratación, lo que daría satisfacción a los deseos de la élite política en el poder, para

380
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

poder, en consecuencia, anunciar a los organismos financieros internacionales, a los


mercados y a los inversionistas que se lograba la reforma laboral; pero no consideraron
que tal situación puede agravar la crisis social, pues frente a un sindicalismo corporativo,
debilitado al extremo, y un sindicalismo independiente y legítimo al que se busca imponer
una política represiva, se fomenta la inestabilidad laboral y las acciones de los
trabajadores fuera de los cauces institucionales.340

Como reforzamiento a lo antes señalado, cabe indicar lo dicho por el Centro de Reflexión
y Acción Laboral, Cereal, de Fomento Cultural y Educativo, en su XI Informe de
Violaciones a los Derechos Humanos Laborales durante 2007, en su sección Ante la
Reforma Laboral, en la cual se mencionan los conflictos del sector minero, los conflictos
con las maquiladoras transnacionales y el submundo laboral del sector servicios: casos en
que la actual autoridad laboral no sólo omite hacer respetar la ley y tolera cambios al
ordenamiento o interpretaciones torcidas de la misma, sino que interviene activamente de
modo parcial.341

Adicional a lo anterior, se requiere tener presente lo dicho en febrero de 2008342, por el


Secretario del Trabajo y Previsión Social, quien señaló que el proyecto de reforma laboral
del gobierno federal, contendría como principales temas la productividad y la
competitividad; comentarios que se traducen en aspectos que dejan de lado la garantía de
una adecuada retribución al esfuerzo de los trabajadores, y por el contrario, exige de las
personas una revalorización del trabajo (sometimiento cognitivo cultural) por medio de la
flexibilización laboral para modificar las jornadas de trabajo, cambio de horarios y ajustar a
capricho la movilidad ocupacional; lo que representa la maximización de la ganancia, la
maximización de la extracción de valor de la fuerza de trabajo, la maximización del
provecho, del lucro y del bienestar para unos pocos.343

5.2.3.2 Proyecto UNT.

El proyecto de reforma a la Ley Federal del Trabajo por parte de la clase patronal y de la
élite en el poder, en consonancia con los dictados de los organismos financieros
internacionales y con el beneplácito de los inversionistas y empresarios nacionales,

340
Cfr., Escobar Toledo, Saúl ,”El debate sobre las reformas a la LFT: un trabajo digno o un sindicalismo
indigno”, en Bouzas Ortiz, José Alfonso, (coord.), Reforma Laboral, Análisis crítico del proyecto Abascal de
reforma a la Ley Federal del Trabajo, UNAM, Instituto de Investigaciones Económicas, México, 2003, p. 177.
341
Cfr., XI Informe de Violaciones a los Derechos Humanos Laborales durante 2007, Centro de Reflexión y
Acción Laboral, Cereal, de Fomento Cultural y Educativo, México, p. 4.
342
Entrevista a Javier Lozano Alarcón, en el foro “El Derecho a la Alimentación de los Trabajadores”,
htt://www,esmas.com/noticierostelevisa/México/706383.html, 20/02/2008.
343
Cfr., Cordoba, Arnoldo, “La Constitución y la Ley del ISSSTE”, La Jornada, 07/09/2009, p. 16.

381
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

encontró desde su gestación un rechazo por el movimiento obrero independiente y, de


manera sorprendente, por el grupo parlamentario del PRI en la LVII legislatura cuando se
presentó como iniciativa en la cámara de diputados.

El proyecto de la UNT (Unión Nacional de Trabajadores) representó un camino alterno al


intento de reforma laboral a modo de la clase empresarial, ya que en su esencia se tutela
los derechos de los trabajadores en virtud de que reconoce el derecho de los trabajadores
a un justa remuneración sin detrimento de sus derechos laborales, para lo cual se otorga
competencia a la Cámara de Diputados para fijar los salarios mínimos y el porcentaje de
reparto de utilidades, creando en apoyo a tal finalidad el Instituto Nacional de Salarios
Mínimos, Productividad y Reparto de Utilidades con el carácter de organismo autónomo.
El 31 de octubre de 2002, el diputado federal Víctor Manuel Ochoa Camposeco, del grupo
parlamentario del PRD, presentó tal proyecto como iniciativa de reforma integral a la Ley
Federal del Trabajo ante el pleno de la cámara de diputados.344

La iniciativa presentada por del grupo parlamentario del PRD se identifica como el
proyecto UNT, en razón de la participación activa y decidida de organización de
trabajadores en su elaboración, aparte de la colaboración de otras agrupaciones
sindicales que se identifican como parte del movimiento obrero independiente; en el
apartado I de la exposición de motivos de la iniciativa de decreto de reforma integral de la
Ley Federal del Trabajo, en la cual también se reforman, derogan y adicionan diversas
disposiciones de los artículos 74, 78, 102, 115, 116 y 123 de la Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos, se menciona lo siguiente:

El punto de partida de las reformas que se proponen, en el marco de la transición del país
a la democracia y de una nueva inserción de México en la economía mundial, es la
necesidad de introducir cambios sustanciales al viejo sistema de protección a los
trabajadores con dos propósitos principalmente. Por una parte se busca eliminar la
discrecionalidad gubernamental, asegurar el libre ejercicio de los derechos colectivos y,
más en general, fortalecer el Estado de Derecho. Se trata, en consecuencia, de ofrecer un
nuevo marco institucional para las relaciones entre los trabajadores, sus organizaciones,
las autoridades laborales y los empleadores acorde con las transformaciones que ya
experimentó el régimen presidencial en otros ámbitos, en aras de establecer una
auténtica división de poderes y garantizar la pluralidad y la transparencia del sistema de
representación política, llevando la transición democrática al mundo del trabajo.

344
Cfr. Amescua Ornelas, Norahenid, óp. cit. ., nota 266, p. 11.

382
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Cabe señalar el enorme rezago que experimenta en este aspecto el sistema de


representación de los asalariados, después de tantas décadas de subordinación de los
sindicatos al Estado Mexicano y de las complicidades generadas bajo una supuesta
"alianza histórica" que terminó vulnerando el ejercicio de libertades fundamentales y
cobijando una inconmensurable corrupción, bajo una casi total impunidad y una ausencia
generalizada de democracia en las organizaciones, sin que existan las garantías jurídicas
para que los trabajadores acaben con dichas perversiones.

El segundo propósito de la reforma constitucional, relacionado estrechamente con el


anterior, es el de crear las condiciones institucionales para reorientar el rumbo de la
competitividad del país por la vía de la productividad y los compromisos entre los
interlocutores del mundo del trabajo. Esta meta, de interés para la sociedad en su
conjunto, no podrá jamás alcanzarse sin dejar atrás la simulación y sin que existan la
confianza y la transparencia que den legitimidad y fuerza a los acuerdos entre dichos
interlocutores. Cuando el Estado ha perdido, en razón de la globalización, gran parte de
su anterior capacidad para asignar ganancias y pérdidas y se requiere, más que nunca
antes, de actores sociales fuertes, dotados de autonomía y capacidades de negociación
equilibradas, la mayor parte de los trabajadores del país no tiene organizaciones
auténticas que representen sus intereses a la hora de tomar decisiones fundamentales en
diversos ámbitos: desde la empresa hasta el sector, la región o a nivel nacional. Sin
embargo, la búsqueda de soluciones equitativas a los complejos problemas de la
competencia y a la necesidad de adaptar las empresas a las exigencias de los mercados
abiertos no podrá tener éxito sin esa representación, como lo prueba la experiencia de
países altamente competitivos que supieron combinar la flexibilidad laboral con la
bilateralidad y la protección social. Aunque es cierto que los caminos institucionales
pueden ser muy variados, hay suficientes evidencias acerca de la importancia de la
cooperación y la inclusión social como principales ingredientes del éxito económico en
países con regímenes democráticos.

De la lectura a lo antes señalado, se aprecia una orientación opuesta a la propuesta


oficialista de reforma laboral, en virtud de que se reconoce la necesidad de introducir
cambios sustanciales al viejo sistema de protección a los trabajadores, pero con la
variante de eliminar la discrecionalidad gubernamental y asegurar el libre ejercicio de los
derechos colectivos; asimismo, se menciona la situación de que la mayoría de los
trabajadores no tienen organizaciones auténticas que represente sus intereses a la hora

383
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

de tomar decisiones; por ejemplo en la determinación de los salarios mínimos, que


corresponde a la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, CONASAMI345, de manera
tradicional hay una sometimiento de los representantes de los trabajadores por parte de
las autoridades laborales (léase complicidad de líderes charros con el gobierno) para fijar
los salarios mininos generales y profesionales.

También en esta propuesta se indica la importancia de combinar la flexibilidad laboral con


la bilateralidad y la protección social, lo cual no se identifica en el proyecto oficialista.

Consideraciones que reflejan el sentir de los trabajadores respecto a reconocer que se


requieren reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia
laboral y su ley reglamentaria correspondiente, pero con un enfoque integral de reformas
con la salvaguarda de los derechos fundamentales del trabajo; mediante un nuevo pacto
social entre capital y trabajo bajo el amparo de un auténtico Estado de Derecho y del
pleno reconocimiento de los derechos individuales y colectivos de los trabajadores.346

En las siguientes líneas se transcriben literalmente los contenidos de la reforma integral


propuesta en la iniciativa de decreto presentada por el diputado federal Víctor Manuel
Ochoa Camposeco, del grupo parlamentario del PRD en la LVIII Legislatura del Congreso
de la Unión el 31 de octubre de 2002347, y al final de la transcripción se hacen algunos
comentarios sobre dicha reforma:

Derogación del apartado B y de otros apartados de excepción. Esta iniciativa propone


derogar el apartado B del artículo 123 constitucional en virtud de que la existencia de una
norma sin apartados es condición fundamental para erradicar la discriminación de los
trabajadores, entre quienes tienen derechos plenos y quienes no los tienen. Cuando el
Constituyente de 1917 creó el artículo 123 constitucional, no hizo distinción alguna entre
los trabajadores; fue hasta 1931 cuando la primera Ley Federal del Trabajo estableció que

345
La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CONASAMI) es un organismo público descentralizado
creado mediante la reforma a la fracción VI del artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 21 de noviembre de 1962, así como las
correspondientes reformas y adiciones a la Ley Federal del Trabajo publicadas en el mismo Diario el 31 de
diciembre de ese mismo año. La CONASAMI tiene como objetivo fundamental cumplir con lo establecido en el
artículo 94 de la Ley Federal del Trabajo, en el que se le encomienda que, en su carácter de órgano tripartito,
lleve a cabo la fijación de los salarios mínimos legales, procurando asegurar la congruencia entre éstos y los
atributos que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos otorga al salario mínimo, así como
actualizar periódicamente el sistema de salarios mínimos (salario mínimo general, áreas geográficas y salarios
mínimos profesionales).
346
Cfr., Ochoa Camposeco, Víctor Manuel, “Iniciativa del Decreto por el que se reforman, derogan y adicionan
diversas disposiciones de los artículos 74, 78, 102, 115, 116 y 123 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos”, Gaceta Parlamentaria, Cámara de Diputados, México, núm. 11221, viernes 1 de
noviembre 2002, p. 1.
347
Cfr., Ídem.

384
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los trabajadores al servicio del Estado se regirían por sus propios estatutos,
excluyéndolos desde ese momento de los beneficios del artículo 123. La controversia de
si estos trabajadores estaban o no considerados en ese precepto constitucional la resolvió
la Suprema Corte de Justicia, declarando que no quedaban incluidos.

La lucha de los trabajadores de este sector consiguió que en 1960 se adicionara el


apartado B al artículo 123 constitucional, pero no logró evitar que se realizara con una
visión excluyente y discriminatoria. Con esta reforma se reconocieron en la Constitución
sus derechos laborales; sin embargo, quedaron en desventaja por lo que hace a sus
derechos colectivos, porque las causales establecidas para el derecho de huelga
resultaron de imposible realización, lo cual los orilló a estallar huelgas por la vía de los
hechos, mediante paros, sin las garantías que debe otorgar la ley.

La premisa para la creación del apartado B fue mejorar el cúmulo de derechos


individuales en relación con los trabajadores en general, coartando sus derechos
colectivos. Hoy en día, cuando la democratización se abre paso en el país, no
encontramos justificación alguna para conservar el apartado B, por ello proponemos la
existencia de un artículo 123 sin apartados. Como diría el maestro Mario de la Cueva: "se
les olvida que la ley debe ser igual para todos, pues la necesidad es la misma,
independientemente de las personas a la que se preste el trabajo todas las personas son
iguales, porque la igualdad es atributo de la naturaleza humana y no puede ser destruida
por el género de la actividad que se desempeñe".

También se incluye en el artículo 123 a los trabajadores al servicio de los estados y los
municipios, quienes por disposición de los artículos 115 y 116 de la propia Constitución
vigente se rigen por sus propias leyes. Estos artículos constitucionales facultan a las
legislaturas de los estados para expedir las leyes que regirán las relaciones laborales de
los estados y municipios con sus trabajadores, tomando como base el artículo 123
constitucional. Esto ha traído como consecuencia que algunos trabajadores se rijan por el
apartado A de ese artículo, otros por el B y un tercer tipo por leyes que son una mezcla
del apartado A y el B. Para tales efectos se requiere, además de incluirlos en el texto del
artículo 123, derogar las menciones respectivas en los artículos 115 y 116.

Es conveniente que al igual que se hizo en 1931, se expida una sola Ley Federal del
Trabajo por el Congreso de la Unión, cuya aplicación corresponderá a las autoridades
federales y locales, pues nada justifica que se dé tratamiento diferente a los trabajadores.

385
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

No pretendemos negar que el trabajo que realizan los trabajadores al servicio de las
entidades federativas y del Estado en general, tiene particularidades que especiales, con
la característica de que verán ampliados sus derechos colectivos y, desde la Constitución,
se preservarán sus derechos adquiridos.

El artículo 123 incluirá, asimismo, a los trabajadores al servicio del banco central y las
entidades que formen parte del sistema bancario mexicano. Este trabajo, que actualmente
se rige por la fracción XIII bis del apartado B, será considerado en la ley reglamentaria
como parte de los trabajos especiales, pero sus trabajadores tendrán mayores derechos y
seguirán conservando todos aquellos que sus condiciones de trabajo y reglamentos
otorgan.

Los asuntos de los trabajadores al servicio de los poderes de la Unión, del gobierno del
Distrito Federal, de las instituciones que presten el servicio público de banca y crédito y el
Banco de México serán competencia exclusiva de las autoridades federales.

Derechos colectivos y libertad sindical El derecho colectivo del trabajo integrado por la
sindicalización, la negociación colectiva y la huelga constituye en la actualidad el
instrumento mediante el cual la clase trabajadora puede lograr el establecimiento de
condiciones laborales que le permitan elevar su calidad de vida y tener acceso a la justicia
social. En atención a ello, un postulado básico para los legisladores proponentes es la
eliminación del corporativismo sindical, que fomenta relaciones autoritarias y de sumisión
y estimula que las organizaciones de los trabajadores sometan sus intereses a los del
Estado. En estas circunstancias, se requiere dar paso a organizaciones sindicales libres,
a un modelo de relaciones laborales en donde la injerencia estatal o de los patrones en la
vida interna de los sindicatos esté prohibida y sea sancionada conforme a la ley
reglamentaria. Estos postulados representan no sólo viejos anhelos de la clase
trabajadora, sino también el cumplimiento de compromisos y obligaciones que en el
ámbito internacional ha adquirido nuestro país, concretamente con la ratificación del
Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo relativo a la libertad sindical.

Por ello, en la fracción XIX del artículo 123 se estipula que tanto los trabajadores como los
empresarios tendrán derecho para coaligarse en defensa de sus respectivos intereses, y
en ejercicio de su libertad positiva de afiliación sindical, podrán integrar sindicatos,
federaciones, confederaciones, uniones, o cualquier otra forma de asociación profesional.
Que la ley reglamentaria proveerá lo necesario para garantizar el libre ejercicio de estos
derechos y sancionará con rigor cualquier impedimento para su ejercicio o cualquier

386
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

intervención en las asociaciones constituidas, de parte de autoridad o persona física o


moral.

Lograr la erradicación de la afiliación obligatoria de los trabajadores o sus sindicatos a un


determinado partido político es una de las finalidades de esta iniciativa. Actualmente,
existen sindicatos, federaciones y confederaciones que en sus estatutos establecen la
obligación de los sindicalizados de afiliarse a determinado partido político, hecho que los
trabajadores realizaban en la mayoría de los casos contra su voluntad. Disposiciones
como las que se comentan, violan flagrantemente una de las prerrogativas de los
ciudadanos mexicanos establecidas en el artículo 35 de la Constitución, consistente en
asociarse individual y libremente para tomar parte en forma pacífica en los asuntos
políticos del país. En atención a lo anterior, consideramos un imperativo establecer en el
artículo 123 la prohibición de afiliar obligatoriamente a los trabajadores o empresarios, ya
sea individual o colectivamente, a los partidos políticos.

En la fracción XX se eleva a rango constitucional del derecho a la contratación colectiva.


En el texto se señala que contrato colectivo de trabajo es el acuerdo celebrado entre uno
o varios sindicatos de trabajadores y uno o varios patrones, o uno o varios sindicatos de
patrones, con objeto de establecer las condiciones según las cuales debe prestarse el
trabajo en una o más empresas o establecimientos. Cuando la contratación colectiva se
extienda a una rama de actividad económica o a una cadena productiva se denominará
contrato colectivo sectorial. La contratación colectiva, en cualquiera de sus modalidades,
será un instrumento normativo complementario de las garantías sociales y principios
generales establecidos en la Constitución y en la ley reglamentaria. Además de las
condiciones de trabajo, el contrato colectivo o, en su caso, el contrato colectivo sectorial
deberá contener las normas relativas a la capacitación y adiestramiento de los
trabajadores, las que estén encaminadas a aumentar la productividad, así como aquellas
que permitan medirla y asegurar un reparto justo de los resultados alcanzados.

En la fracción XXI se instituye el Registro Público Nacional de Organizaciones Sindicales


y Contratos Colectivos de Trabajo, como organismo público y descentralizado con
personalidad jurídica y patrimonio propios, facultado para operar nacionalmente el registro
de sindicatos y contratos colectivos y competente para decidir en los conflictos de
titularidad de los contratos colectivos. Dicho organismo se regirá bajo los principios de
certeza, legalidad, independencia, profesionalismo, imparcialidad, objetividad y publicidad
en el desempeño de sus funciones. El titular del Registro Público será un profesional de

387
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

reconocido prestigio, cuyo nombramiento recaerá en Ejecutivo Federal quien lo designará


de entre una terna integrada por la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, por el
voto de la mayoría absoluta de los miembros presentes.

Esta instancia plenamente imparcial, ha sido concebida como un instrumento eficaz para
cerrar el paso a la generalizada corrupción y simulación en el mundo sindical, derivadas
de los viejos mecanismos de control corporativo de los sindicatos y la degradación de la
contratación colectiva a través de los contratos de protección celebrados entre
empleadores y falsos sindicatos con la intención de impedir a los trabajadores el ejercicio
de la libertad sindical y la auténtica bilateralidad en la determinación de las condiciones de
trabajo. Está inspirada en la institución del Registro Público de Sindicatos de la
Constitución de la República Española de 1931, existente actualmente en diversas
provincias españolas, en Chile y en Guatemala. Sin embargo, hay que reconocer que la
creación de un Registro Público Nacional de Organizaciones Sindicales y Contratos
Colectivos es evidentemente una solución excepcional, lo que se explica por la
igualmente excepcional desnaturalización del contrato colectivo en México, la más
importante de las instituciones de nuestro derecho colectivo. Esta propuesta, cercana a la
que dio lugar en su momento a la creación de un Instituto Federal Electoral plenamente
independiente como alternativa para garantizar la imparcialidad en el proceso de
reconocimiento de los partidos políticos y en las contiendas electorales, no resulta sin
embargo ajena a las organizaciones sindicales. Por el contrario, se planteó por primera
vez como parte de un proyecto de reformas a la Ley Federal del Trabajo en el Consejo de
Representantes de la Coalición Autónoma de Sindicatos de la Industria Automotriz
(CASIA) de los sindicatos de Volkswagen, Nissan, Dina y General Motors, celebrado el 23
de enero de 1990 y fue publicado íntegramente en el número 3008 del periódico Cambio
de Puebla, el 31 de enero de 1990. Posteriormente fue retomada por la FESEBS y más
tarde por la UNT, además de haberse incluido en el Anteproyecto de reformas del PRD.

Erradicar la aplicación de la requisa y de cualquier otra figura administrativa o judicial que


atente contra la huelga lícita es una tarea que hay que acometer en beneficio de la
libertad de sindicalización y, por ende, de huelga. Una de las mayores agresiones a los
sindicatos y coaliciones que llevan a cabo una suspensión legal de actividades es la
llamada requisa, prevista en las leyes de Aviación Civil, Reglamentaria del Servicio
Ferroviario, de Aeropuertos, Federal de Telecomunicaciones y de Registro Nacional de

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Vehículos; requisición, establecida en la Ley de Vías Generales de Comunicación, e *


Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios.

intervención administrativa, regulada en Ley de Expropiación. Un nuevo orden laboral, en


donde el gobierno "saque las manos" de los sindicatos, tiene que empezar por respetar
los derechos sociales constitucionales de los trabajadores.

Por ello, se propone establecer en el propio artículo 123 que la huelga no podrá afectarse
por medida administrativa alguna, quedando consideradas no sólo la requisa, la
requisición y la intervención administrativa sino cualquier otro acto administrativo que
vulnere los derechos de una asociación de trabajadores. Ninguna medida administrativa o
judicial debe ser obstáculo en el ejercicio del derecho de huelga.

Los derechos colectivos de los trabajadores al servicio del Estado, concretamente el


ejercicio del derecho de huelga, se encuentra vedado para éstos. De acuerdo con el texto
actual de la Constitución, sólo podrá ejercerse cuando se violen de manera general y
sistemática los derechos que a favor de éstos consagra el apartado B del artículo 123. El
contexto histórico de un Estado autoritario y corporativo en el que se creó el apartado B
del artículo 123, permitió la imposición de trabas insuperables para el ejercicio del
derecho de huelga. Sin embargo, la democratización del Estado a la que aspiramos se
encuentra confrontada con la existencia de relaciones laborales maniatadas. El sacrificio
de los derechos colectivos a cambio de derechos individuales más favorables debe
empezar a formar parte del pasado.

Otorgar a los trabajadores al servicio del Estado el derecho al ejercicio de la huelga,


permitirá dar paso a un nuevo modelo de relaciones laborales entre el Estado y sus
servidores. Dar un paso tan importante como liberar el derecho de huelga para estos
trabajadores debe ser tomado con cautela y analizando las consecuencias que ésta
puede ocasionar para el servicio que se presta. Así, se plantea la necesidad de que en la
ley reglamentaria se estipule un arbitraje obligatorio que dé por terminado el conflicto por
una resolución del juez laboral.

Por otra parte, con el propósito de proveer al Estado de personal que preste su servicio
con calidad y eficiencia, así como de profesionalizar el trabajo del servidor público, se
propone la creación de un servicio civil de carrera. Servicio que estimule la permanencia y
compromiso institucional del servidor público y genere mecanismos transparentes de
ingreso, promoción y ascenso. El servicio civil de carrera es una añeja aspiración del
servidor público, compatible con la indispensable modernización de la administración

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

pública. Hoy más que nunca es necesario acabar con designaciones por "compadrazgo"
que en nada benefician a la importante función que desempeña el Estado y reconocer a
quienes se han comprometido con la cosa pública.

Fijación de los salarios mínimos Una de las principales preocupaciones planteadas en la


iniciativa es la relacionada con el salario de los trabajadores. De acuerdo con la fracción
VI del artículo 123 vigente, los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para
satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y
cultural, y promover la educación obligatoria de los hijos.

Actualmente los salarios mínimos se fijan por una comisión nacional integrada por
representantes de los patrones, de los trabajadores y del gobierno. Aparentemente, la
fórmula de su integración resulta muy interesante: "los representantes de los trabajadores
integrarán esta autoridad del trabajo". Sin embargo, los resultados no son alentadores:

hoy en día vemos que los incrementos acordados por esta comisión en nada han
beneficiado a los trabajadores. La correlación de fuerzas en este organismo opera en
contra del trabajador, ya que en la mayoría de los casos el voto de los representantes del
gobierno y el de los representantes del capital es en el mismo sentido. Los resultados son
tangibles, cada vez nos alejamos más del salario constitucional, y la miseria impera entre
las familias de los trabajadores que reciben el salario mínimo. Las cifras oficiales lo
demuestran: el salario mínimo ha perdido 73 por ciento de su poder adquisitivo respecto a
1977 y 21.7 por ciento respecto a 1994. Estas cifras a simple vista representan sólo una
parte de la gravedad de la situación.

El problema se advierte más claramente si comparamos el salario mínimo con el costo de


la canasta básica. En 1994, con 1.6 salarios mínimos (trece horas de trabajo al día) un
trabajador podía obtener la canasta básica. En marzo de 2002, necesita 2.3 salarios
mínimos, es decir, 18.4 horas de trabajo para adquirirla.

De acuerdo con los datos oficiales, de los trabajadores con empleo formal, la mayoría
apenas recibe dos salarios mínimos en promedio. Si tomamos en consideración que para
adquirir la canasta básica alimentaria se requiere lo equivalente a 2.3 salarios mínimos,
en consecuencia, para sobrevivir los trabajadores se ven orillados a incorporar a otros
miembros de su familia a las labores productivas o de servicios del país o incluso al
empleo informal, lo cual ocasiona diversos problemas al núcleo familiar.

390
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La dramática caída de los salarios mínimos pone en evidencia que los procedimientos
establecidos para la revisión de éstos son inaplicables, sobre todo cuando se encuentran
en juego intereses ajenos a los trabajadores. Asimismo, la composición tripartita de la
autoridad encargada de fijar y revisar los salarios mínimos posibilita la asociación de los
representantes de los patrones y del gobierno en contra del voto de los representantes de
los trabajadores.

Con objeto de eliminar el control gubernamental corporativo sobre la determinación de los


salarios mínimos se propone que la decisión de fijar los montos de éstos, sea una facultad
exclusiva de la Cámara de Diputados, por ser un órgano de poder en el que se
encuentran representados los intereses de toda la nación. Para apoyar los trabajos de la
Cámara, se crea un organismo autónomo, descentralizado del Estado, denominado
Instituto Nacional de Salarios Mínimos, Productividad y Reparto de Utilidades, el cual
tendrá a su cargo realizar los estudios para presentar a la Cámara de Diputados la
propuesta de incremento de los salarios, así como del porcentaje de utilidades repartible.

Los incrementos que se conciben en la iniciativa serán anuales, pero el Instituto podrá
proponer a la Cámara de Diputados un ajuste en algún otro momento del año, en función
del deterioro salarial sufrido por el incremento del costo de la vida. A este incremento se
sumará otro, por concepto de aumento de la productividad promedio de la economía, a
propuesta del Instituto.

Para tales efectos, se requiere modificar el artículo 74 constitucional con el propósito de


establecer que la Cámara de Diputados fijará los salarios mínimos y la participación de los
trabajadores en las utilidades de las empresas a propuesta del Instituto Nacional de
Salarios Mínimos, Productividad y Reparto de Utilidades. Asimismo este órgano legislativo
nombrará a los miembros del cuerpo colegiado de dicho instituto. Cuando la Cámara de
Diputados no se encuentre sesionando, será facultad de la Comisión Permanente del
Congreso determinar, en su caso, el aumento del salario mínimo a propuesta del Instituto
Nacional de Salarios Mínimos, Productividad y Reparto de Utilidades, lo que implica
reformar el artículo 78 constitucional.

Los salarios mínimos, de acuerdo con la fracción VI del apartado A del artículo 123
constitucional vigente, serán generales o profesionales. Respecto a los primeros, de
acuerdo con dicha fracción regirán en las áreas geográficas que se determinen. El término
"áreas geográficas" fue introducido en la Constitución mediante reforma publicada en el

391
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Diario Oficial de la Federación el 23 de diciembre de 1986, lo que es ya insostenible e


injustificable.

De conformidad con la ley reglamentaria, quedó a cargo del consejo de representantes


"Conocer el dictamen formulado por la Dirección Técnica y dictar resolución en la que se
determinen o modifiquen las áreas geográficas en las que regirán los salarios mínimos".

Esta resolución publicada en el Diario Oficial de la Federación dividió la república en tres


áreas geográficas, "A", "B" y "C". En consecuencia, existen tres diferentes salarios
mínimos generales y profesionales; estos últimos toman como referencia, además de la
división en áreas, el oficio, profesión o trabajo que se preste. Por su parte, al área
geográfica "C" le corresponde el salario más bajo, y así sucesivamente hasta llegar al
área "A".

Nada justifica que a trabajadores que realizan la misma actividad se les paguen diferentes
salarios. Así, resulta a todas luces injusta una medida de este tipo, que asigna a las zonas
con mayor pobreza el salario más bajo. Si la Ley Federal del Trabajo se federalizó para
evitar los tratos diversos que daban las diferentes leyes de los estados a trabajadores que
realizaban la misma actividad, resulta de elemental justicia desaparecer los criterios de
área geográfica.

Recientemente el Ejecutivo Federal aceptó a través de sus dependencias la necesidad de


homologar por la vía de los hechos las áreas geográficas, reconociendo públicamente lo
injusto de tal disposición. Por tales razones la iniciativa propone la supresión de las áreas
geográficas, de tal manera que el salario mínimo sea igual para todos los trabajadores
que lo perciben.

Derechos individuales

El cúmulo de derechos individuales de los trabajadores no podía quedar intacto ante una
reforma de esta envergadura. Por lo que hace a la jornada de trabajo se rescata una vieja
demanda de la clase trabajadora: jornada de 40 horas con pago de 56, sin alterar de
manera alguna la duración de la jornada máxima, diurna, nocturna o mixta diaria. No
obstante, se establece que en el contrato colectivo de trabajo podrán pactarse otras
modalidades, a condición de que la duración máxima de la jornada semanal sea de 40
horas.

La razón de estas modificaciones se sustenta en la intención de humanizar el trabajo y


aprovechar los avances de la tecnología que permiten producir lo mismo en un menor

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

tiempo, medida acorde con la duración de la jornada en los países de la región


latinoamericana. Aunado a lo anterior se encuentra el incremento de los días de descanso
obligatorio; así, por cada cinco días de trabajo, disfrutará el trabajador de dos de
descanso. Esto, al igual que la reducción de la jornada, constituye un inveterado anhelo
de la clase trabajadora.

El derecho a vacaciones de los trabajadores es tan importante como el día de descanso


semanal, por ello es imprescindible que esté considerado en el texto constitucional y así
se propone en la fracción IV.

En materia de reparto de utilidades también se realiza una propuesta encaminada a


obtener el respeto íntegro de ese importante derecho para los trabajadores. A raíz de la
jurisprudencia que emitió la Suprema Corte de Justicia, declarando inconstitucional el
artículo 14 de la Ley del Impuesto sobre la Renta, se modificó por la vía de los hechos la
base para calcular el pago de utilidades. La jurisprudencia afectó directamente el monto
correspondiente a las utilidades que recibirían los trabajadores, quienes en algunos casos
veían disminuida la cantidad por recibir hasta en 80 por ciento. En atención a ello, se
pretende devolver al reparto de utilidades el sentido que tenía cuando se creó, por ello se
propone que a la renta gravable a la que se refiere el artículo 123 constitucional vigente
se le agreguen todos aquellos conceptos que durante un año fiscal pueden incrementar la
ganancia de la empresa. En este entendido, a la renta gravable se le suman los ingresos
por dividendos o utilidades en acciones, los intereses devengados a favor del
contribuyente en el ejercicio, la fluctuación de la moneda extranjera, cuando se contraten
deudas o créditos que no se paguen al momento de su exigibilidad y cualquier otro
concepto que pueda incrementar la ganancia de la empresa en un año fiscal, de acuerdo
con la situación económica del país. Por lo tanto, es necesario modificar la redacción del
artículo 123, en la fracción que lo considera, en el sentido que lo aprobó la Cámara de
Diputados durante la pasada legislatura y cuya minuta se encuentra pendiente de
dictamen en el Senado de la República.

La prevención consignada en el inciso f) de la vigente fracción IX, XII en la presente


iniciativa, que establece que el derecho de los trabajadores a participar en las utilidades
no implica la facultad de intervenir en la dirección o administración de las empresas, se
deroga porque a su amparo se ha obstaculizado indebidamente a las organizaciones de
los trabajadores la participación que legalmente les corresponde en la negociación
bilateral de las cuestiones colectivas e individuales derivadas de las relaciones de trabajo

393
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

y porque se considera que esta disposición inhibe la creación de espacios y mecanismos


de participación de los trabajadores para la adopción de nuevos procedimientos de trabajo
y tecnologías que mejoren la gestión productiva y propicien más ingreso para los
trabajadores así como otras forma idóneas de democracia industrial.

Un cambio importante que se propone es la sustitución de las juntas de Conciliación y


Arbitraje por jueces laborales dependientes del Poder Judicial federal o local según su
competencia. No es concebible que hoy en día, cuando se ha fortalecido la división de
poderes, tengamos tribunales que realizan funciones jurisdiccionales y dependan del
Poder Ejecutivo. Esa subordinación está en correspondencia con la época en que se creó
el artículo 123 constitucional, en la que el Ejecutivo fue diseñado para ejercer un poder
omnímodo. Hoy los conflictos laborales requieren tribunales independientes que impartan
justicia laboral en forma eficaz.

Por su estructura actual las juntas de Conciliación y Arbitraje dan la idea de ser tribunales
democráticos, en los cuales se encuentran representados los trabajadores, los patrones y
el gobierno que aparentemente es el miembro imparcial. Sin embargo, en la práctica
podemos cerciorarnos de que en la gran mayoría de los casos el representante del
gobierno, presidente de la Junta, no actúa con la imparcialidad que debiera y se suma al
voto del representante del capital; por lo tanto, esa estructura tripartita se convierte en
bipartita en perjuicio del trabajador. Si a ello agregamos la presencia de líderes venales,
se configura un cuadro desalentador para quienes mayoritariamente esperan justicia en
los laudos de dichas juntas.

El derecho laboral requiere tribunales independientes, que pertenezcan al órgano de


poder encargado de dirimir las diferencias entre los particulares, es decir, al Poder
Judicial. El elemento que diferenciará a los jueces laborales de los demás jueces es el
conjunto de principios de derecho tanto sustantivo como procesal bajo el que se regirán.

En ningún momento podrá aplicarse el principio de igualdad de las partes, pues partimos
de la concepción de que el trabajador y el patrón no son ni serán iguales; por eso, tanto
las normas sustantivas como procesales serán tutelares de la clase trabajadora,
aplicándose el principio de suplencia de la queja y todos los demás que han caracterizado
al derecho laboral. Los jueces de lo laboral conocerán no sólo de los conflictos entre el
trabajo y el capital, sino también de los conflictos individuales, colectivos o sindicales de
los trabajadores al servicio del Estado, entidades federativas o municipios, y formarán
parte del Poder Judicial Federal o local según corresponda. Los jueces laborales

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

federales conocerán, además, de cualquier conflicto derivado del régimen de seguridad


social, con las excepciones competenciales reservadas al Registro Público Nacional de
Organizaciones Sindicales y Contratos Colectivos de Trabajo.

Trabajo de mujeres

En cuanto al trabajo de mujeres se refiere, si bien la Constitución otorgó determinados


beneficios a éstas, la mayoría se refiere a la protección de la maternidad y muy pocos a lo
relacionado con otros ámbitos de su condición de mujer trabajadora, con presencia
creciente en el mundo laboral. Reconocer las condiciones de desigualdad y discriminación
en que la mujer realiza sus labores en la actualidad y atacar las causas desde la ley, es
una tarea inaplazable. Por ello desde el proemio del artículo 123 se precisa que no podrán
establecerse distinciones, exclusiones, preferencias o restricciones basadas en: sexo,
género, edad, credo religioso, doctrina política, condición social, condición física,
preferencia sexual, estado civil, etnia, discapacidad y condiciones de salud, que tengan
por efecto anular o alterar la igualdad de oportunidades y de trato en el empleo o la
ocupación, la formación profesional, las condiciones y la admisión al trabajo.

Además que el Congreso de la Unión, deberá expedir leyes sobre el trabajo, las cuales
regirán entre las personas obreras, jornaleras, artesanas y del empleo del hogar; así
como entre las personas trabajadoras y empleadas al servicio de los municipios, de los
poderes de cada una de las entidades federativas, además de los poderes de la Unión; y,
de manera general, todo contrato y relación de trabajo. Buscando eliminar con ello todo
sesgo discriminatorio hacia la mujer en la aplicación de las normas del trabajo.

En la fracción XVII se señala que los patrones serán responsables de crear un ambiente
laboral libre de riesgos y violencia y establecer condiciones, mecanismos e instancias
para impedir el acoso o el hostigamiento sexual en el lugar de trabajo.

Sin duda alguna la maternidad debe ser protegida, pero con una visión mucho más amplia
en donde se haga responsable a la propia sociedad. En tal virtud se incrementa de 12 a
16 semanas el periodo que por licencia de maternidad se otorgará a las trabajadoras
embarazadas, cuyo inicio será determinado por la propia trabajadora. Un ejemplo de la
injusticia de la actual rigidez de la Constitución, que con la iniciativa se pretende acabar,
consiste en impedirles a todas aquellas madres trabajadoras a quienes se les adelanta la
fecha del parto, la utilización del periodo prenatal, perdiendo por ese solo hecho todo o
parte del periodo prenatal de licencia.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En la iniciativa se adiciona que en los supuestos de parto múltiple, el período de


recuperación posnatal se incrementará en dos semanas.

En el periodo de lactancia se otorga a la trabajadora, a su elección, el derecho de elegir si


quiere utilizar los dos periodos de media hora para amamantar a sus hijos, por un lapso
de seis meses, o reducir su jornada diaria en una hora.

Las y los legisladores suscritos proponemos que se garantice a la trabajadora el ejercicio


de sus derechos reproductivos en el momento de su elección, protegiéndose su salud y la
del producto. Asimismo, que toda trabajadora que decida ejercer este derecho conservará
su empleo y puesto de trabajo, y sólo podrá ser despedida por causas graves o que
hagan imposible la continuación de la relación de trabajo.

Por otra parte, que la ley reglamentaria deberá estipular la protección de las trabajadoras
y trabajadores con responsabilidades familiares, asegurando la igualdad de trato y
oportunidades.

La iniciativa pretende proteger a la mujer no sólo en la maternidad sino también respecto


a otros ámbitos de su condición de mujer. La discriminación hacia la mujer está presente
en el trabajo; partiendo de esa premisa la iniciativa busca promover la participación de la
mujer en el centro laboral. Por ello impone en la ley reglamentaria la obligación de adoptar
las medidas de acción afirmativa para garantizar las condiciones efectivas de igualdad
entre el hombre y la mujer, en un tema tan importante como es la capacitación.

Trabajo y discapacidad La iniciativa también reconoce la importancia de incorporar al


mundo laboral de manera plena a las personas que padezcan alguna discapacidad. Por
ello se establecen medidas para que puedan ejercer su derecho al trabajo e incluso en
algunos casos serán preferidos respecto a otros trabajadores. La ley reglamentaria
desarrollará de manera más completa una serie de derechos para este sector de
trabajadores.

Seguridad social

La derogación del apartado B del artículo 123 constitucional obliga a unificar en una sola
fracción las disposiciones relativas a la seguridad social, que conserva en nuestra
propuesta su carácter público, solidario, redistributivo e integral. Orientación necesaria
ante la privatización de los fondos de pensiones de que ha sido objeto el Seguro Social y
la amenaza que se cierne sobre esta noble institución. Así se indica que la seguridad
social es un derecho de los trabajadores del campo y la ciudad, eventuales y

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

permanentes, no asalariados y otros sectores sociales y sus familias, estará a cargo


íntegramente de organismos públicos descentralizados y se organizará conforme a las
siguientes bases mínimas:

a) Prevendrá los accidentes y enfermedades profesionales y cubrirá las obligaciones


derivadas de los riesgos de trabajo, mediante un seguro pagado por el patrón.

b) Proporcionará servicios integrales que incluyen la prevención, curación y rehabilitación,


así como los medios diagnósticos y terapéuticos requeridos en cada caso.

c) En caso de accidente o enfermedad se conservará el derecho al trabajo por el tiempo


que determine la Ley.

d) Proporcionará seguridad económica al trabajador y su familia mediante los seguros de


invalidez y vida; retiro, cesantía en edad avanzada, jubilación, vejez y cualquier otro
encaminado a la protección y bienestar de los trabajadores, de conformidad con las leyes
de seguridad social.

e) Proporcionará guarderías con servicios integrales y personal especializado a los hijos


de las trabajadoras, así como de los trabajadores que tengan a su cargo exclusivo el
cuidado de los hijos. Además proporcionará asistencia médica y obstétrica, medicinas y
ayuda para la lactancia.

f) Proporcionará las demás prestaciones sociales especificadas en las leyes


reglamentarias correspondientes incluyendo centros deportivos, vacacionales y para
recuperación, así como tiendas económicas para beneficio de los trabajadores y sus
familias.

Se ratifica que las leyes de seguridad social son de utilidad pública.

Agentes del ministerio público y miembros de instituciones policiales La iniciativa propone


reconocer a los agentes del ministerio público y a los miembros de las instituciones
policiales de los municipios, entidades federativas y federación la calidad de trabajadores
que actualmente se les tiene negada. Si bien es cierto que la labor que realizan estos
trabajadores dista de ser la que el Estado y la sociedad requieren, no podemos negarles
todo derecho como trabajadores ni este camino es el adecuado para lograr la
profesionalización del servicio que prestan. Actualmente, estos servidores pueden ser
removidos en cualquier momento de su cargo, si no cumplen con los requisitos que las
leyes vigentes al momento de su remoción señalen para permanecer en dichas
instituciones, sin que proceda su restitución, cualquiera que sea el juicio o medio de

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

defensa para combatir su remoción. El trato que la fracción XIII del apartado B del artículo
123 vigente le da a estos servidores públicos es inhumano. Este precepto contradice
diversas garantías individuales como la irretroactividad y atenta contra el juicio de amparo
al impedir que restituya al individuo el goce de la garantía violada, a pesar de que se
acredite la existencia de dicha violación. Sin embargo, no podemos decir que la
disposición es inconstitucional, porque está precisamente en la propia Constitución. La
iniciativa propone reconocerles la calidad de trabajador y permite la creación de una ley
laboral que contenga normas claras de ingreso, promoción, capacitación, permanencia y
causales de cese.

Derechos laborales y derechos humanos

Finalmente con la iniciativa se propone facultar a la Comisión Nacional de los Derechos


Humanos para conocer de los asuntos laborales, atribución que se hace extensiva a las
comisiones estatales de derechos humanos, a través de la reforma al artículo 102
constitucional. Específicamente, estos organismos podrán conocer de quejas contra actos
u omisiones de naturaleza administrativa o jurisdiccional cuando se trate de asuntos
laborales. Con la reforma se persigue superar una absurda limitación que contraviene al
reconocimiento internacional contenido en diversos instrumentos jurídicos de derechos
humanos, en el sentido de que un elemento esencial de los mismos está en las reglas
laborales que dan derecho al salario suficiente, al empleo y a la organización sindical.

Régimen transitorio

En los artículos transitorios se señala que en un plazo no mayor de seis meses contados
a partir de la vigencia del presente decreto, el Congreso de la Unión modificará la Ley
Orgánica del Poder Judicial de la Federación para adecuarla a las disposiciones previstas
en el artículo 123 constitucional y demás relativas a los jueces laborales. Que en tanto se
reforma la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación para adecuarla a las
disposiciones previstas en el presente decreto, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje
y el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje continuará ejerciendo las facultades
legales que le correspondan en materia laboral. Asimismo, que en tanto se reforman las
leyes orgánicas de los poderes judiciales de las entidades federativas para adecuarlas a
las disposiciones previstas en el decreto propuesto, las juntas locales de Conciliación y
Arbitraje continuarán ejerciendo las facultades legales que les correspondan en materia
laboral.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Una disposición importante es que tanto el Poder Ejecutivo Federal como el Poder
Judicial Federal, en los ámbitos de su competencia, procederán a realizar los trámites,
asignaciones y modificaciones presupuestales, así como a designar o, según proceda, a
proponer la designación de los funcionarios que les corresponda, en términos de las
reformas, a efecto de que se constituyan y operen a la promulgación de las leyes
reglamentarias, el Instituto Nacional de Salarios Mínimos, Productividad y Reparto de
Utilidades, el Registro Público Nacional de Organizaciones Sindicales y Contratos
Colectivos de Trabajo y los jueces laborales.

Se precisa que los derechos, beneficios y prestaciones adquiridos por los trabajadores de
los municipios, de los poderes de cada una de las entidades federativas y de los poderes
de la Unión quedarán salvaguardados en un capítulo especial de la ley reglamentaria del
artículo 123 constitucional. La misma disposición se establece para trabajadores de las
instituciones que presten el servicio público de banca y crédito y Banco de México.

Por último se dispone que en tanto se crean el Instituto Nacional de Salarios Mínimos,
Productividad y Reparto de Utilidades y el Registro Público Nacional de Organizaciones
Sindicales y Contratos Colectivos de Trabajo, establecidos en el artículo 123
constitucional, la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, la Secretaría de Trabajo y
Previsión Social continuarán ejerciendo sus facultades legales en la materia.

Los objetivos de la propuesta de reforma integral identificada como proyecto UNT348, se


circunscriben a impulsar un cambio sustancial en el viejo modelo de relaciones laborales,
sin que exista un condicionamiento psicológico laboral mediante la imposición de una
nueva cultura del trabajo que se orienta de manera premeditada al beneficio de la clase
empresarial a costa del trabajo de los trabajadores que aspiran a un mejor nivel y calidad
de vida a través de un trabajo digno, socialmente útil y debidamente reenumerado. Dichos
objetivos se refieren a los siguientes:

a) Propiciar la igualdad jurídica de los trabajadores mexicanos.

b) Poner fin a la intervención discrecional del Estado en la vida interna de los sindicatos.

c) Acotar los abusos de la patronal sobre la terciarización, las empresas de mano de obra,
la contratación a honorarios, las renuncias voluntarias previas y los mecanismos de
elusión del reparto de utilidades de trabajadores.

348
Cfr., Franco Hernández, Pablo, “La trayectoria de la Reforma Laboral en México”, en Foro sobre la
Reforma Laboral, México, Cámara de Diputados, consultado el 04/10/07, en:
http//www3.ciputados.gob.mx/camara/001_diputados/006_centros_de_estudios/03.

399
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

d) Acabar con el corporativismo sindical.

e) Crear nuevas instituciones que busquen resolver eficazmente los conflictos de


intereses contrapuestos, como son los del capital y el trabajo (jueces de lo laboral y
Registro Público de Sindicatos y Contratos, por ejemplo).

f) Elevar el salario y las prestaciones, así como mejorar las condiciones de trabajo, en un
obligado ejercicio de justicia social.

g) Fortalecer la contratación colectiva legítima y acabar con los contratos de protección.

h) Promover organizaciones sindicales, representativas, democráticas, autónomas, con


presencia y capacidad de interlocución real en el ámbito productivo.

i) Responder a las innovaciones tecnológicas y organizativas y a los cambios productivos


sin afectar los derechos fundamentales de los trabajadores, garantizando la bilateralidad.
Estimular la productividad con reparto justo de beneficios.

j) Alentar la impartición de justicia laboral neutra y profesional, en la solución de conflictos


obrero patronales.

Por otro lado, por lo que se refiere a la revisión de los contenidos de la anterior propuesta
de reforma integral, se desprenden los siguientes comentarios:

1. Se propone la desaparición del apartado “B” del artículo 123 constitucional, lo que a
simple vista es un avance en materia de regulación de las relaciones de trabajo, sin
importar quién sea el empleador; sin embargo, se identifica un problema de naturaleza
económica: quien emplea (los gobiernos federal, local o municipal) no siempre generan
riqueza y no se puede hablar de una relación de trabajo sustentada en la generación de
utilidades y, por tanto, los sistemas de renumeración no pueden ser acotados a
indicadores netamente económicos.

2. Por lo que se refiere a los aspectos de derechos colectivos y libertad sindical, se nota
una influencia de los logros del movimiento sindical independiente para eliminar el
corporativismo sindical y se cristalice el derecho de libre asociación, que es contraria a la
afiliación obligatoria de los trabajadores; respecto a este punto, cabe mencionar lo
establecido en el convenio 87 de la OIT relativo a la libertad sindical y la protección del
derecho de sindicación, que señala en su artículo 2, que los trabajadores y los
empleadores, sin ninguna distinción y sin autorización previa, tienen el derecho de

400
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

constituir las organizaciones que estimen convenientes, así como el de afiliarse a estas
organizaciones, con la sola condición de observar los estatutos de las mismas.

3. Reviste de gran significación lo señalado en materia de salarios, ya que se propone la


desaparición de la CONASAMI y que sea la Cámara de Diputados la que fije los salarios
mínimos; propuesta de gran alcance, en virtud de las condiciones socioeconómicas de la
clase trabajadora que percibe una retribución injusta a su esfuerzo, hecho que no se
considera en la actualidad para la determinación de los salarios mínimos; al respecto, la
STPS en su avance de octubre de 2007, informa que de un total de 42 millones 906, 656
de población ocupada, un 41.7% percibe menos de dos salarios mínimos; cifra que da
una idea del problema de la pésima retribución de la clase trabajadora.

4. En la parte referente a las derechos individuales, se indica la jornada máxima de 40, lo


que generaría una fuerte oposición por parte de los empresarios a través de sus aliados
en el gobierno federal y en los partidos políticos que comulgan con las ideas económicas
de corte neoliberal, para su regulación; cabe mencionar lo propuesto en materia de
reparto de utilidades, que intenta distribuirlas de manera más justa entre los trabajadores;
sin embargo, la realidad se presenta adversa a los trabajadores con la simulación de
empresarios en la declaración de sus impuestos para evitar al máximo reportar lo que en
verdad obtienen de ganancias.

Resalta la importancia que se da al trabajo de las mujeres y de las personas con


discapacidad, y de nueva cuenta se debe mencionar que la realidad es adversa a mejorar
las condiciones de trabajo para las personas señaladas, en razón del abuso de la mano
de obra femenina y la no contratación de personas con discapacidad.

5. En lo tocante a la seguridad social se indica lo propio de los trabajadores del apartado


“A” del artículo 123 constitucional, y lo que se menciona es diferente a la realidad, debido
a la expedición de la nueva Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los
Trabajadores349, en la cual se suprimen de tajo derechos sustantivos en beneficio de los
trabajadores, específicamente lo relativo a la edad de jubilación y la privatización del
sistema de pensiones.

Se indican diversas notas periodísticas que hacen referencia a pronunciamientos de


distintos actores de la vida política laboral, y en los que se aprecia puntos de vista
totalmente opuestos por parte de empresarios y de representantes de trabajadores, y lo

349
Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 3 de abril de 2007.

401
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

único que se puede resumir como aspiración de la clase trabajadora es su derecho a un


trabajo digno y a una remuneración justa.

5.3 Sindicalismo, expresión formada para la defensa de intereses comunes.

La idea de la asociación profesional es universal. Es la agrupación de los trabajadores


para defenderse del poder capitalista. Tiene objetivos revolucionarios de ahí que, el
artículo 123 es el estatuto proteccionista y reivindicador de los trabajadores y de todos los
prestadores de servicios.

El derecho de asociación profesional está regulado en el artículo 123, fracción XVI de la


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los cuales están destinados para
ejercer la defensa de los intereses comunes de los agremiados, como derecho social de
los trabajadores y patrimonial de los empresarios, porque a la luz del precepto
constitucional y de la Teoría integral, los patrones no son personas, sino personificación
de categorías económicas, que se encuentran en una lucha social constante.

El uso del sindicalismo como medio para enfrentarse al capitalismo nació de la


concepción de algunas anarquistas que (de una manera honrada) consideraron que la
mejor forma de extender las ideas libertarias era agrupando a las trabajadores en
sindicatos de clase, pero la propia forma organizativa sindical conlleva una
burocratización, y una formación de élites que no pueden jamás hacer avanzar el proyecto
libertario.

5.3.1 Garantía social de la asociación de los trabajadores.

La efectividad de los derechos sociales, es el reto más necesario en la lógica de los


derechos humanos. Nuestras sociedades muestran y demuestran avances significativos
en materia de derechos humanos con todos los bemoles que también son evidentes. El
trabajo de las Organizaciones de la Sociedad Civil y el surgimiento de los Organismos
Públicos de Derechos Humanos, dan cuenta del avance en la materia. Pero en la
asignatura de los derechos sociales, lamentablemente las diferencias de acceso a dichas
prerrogativas entre los individuos que vivimos en este tiempo y en este espacio se hacen
cada vez más grandes. En México vive el hombre con mayores ingresos económicos en
el mundo, mientras la pobreza se apodera de las calles que a veces no están a la vista de
muchos.

Los derechos sociales son en gran medida, “derechos de igualdad” sustentados en la


diferencia. El Estado es un instrumento al servicio de los que lo crean, tesis fundamental

402
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

del “garantismo”, y el Estado es peligroso, en la medida en que tiene la posibilidad de


poner en peligro nuestros derechos.

La idea de igualdad en un sentido integral, ya la había desarrollado Aristóteles, cuando


dijo que se debía tratar igual a los iguales, y desigual a los desiguales. Así, tenemos una
idea de igualdad formal: todos somos iguales ante la ley, que de alguna manera se
contrapone al concepto de igualdad real, en el que tenemos diferencias sustanciales. El
Estado Social, entonces, recoge la idea aristotélica de igualdad, y cobra conciencia sobre
las desigualdades reales (sociales), así, los derechos sociales, significan esfuerzos de
compensación.

El concepto de desigualdades sociales, dirá el historiador Kaelble: a la distribución de


bienes y servicios escasos (materiales e inmateriales) en el seno de una sociedad, por
ejemplo: la distribución del patrimonio, de la renta, de la vivienda, de la calidad de las
condiciones de trabajo, de la educación, de la atención médica y sanitaria, del ocio y del
tiempo libre, de la seguridad ante la ley, ante la posibilidad de organizar libremente la
propia vida; el prestigio, la movilidad social y las oportunidades de contactar con otras
personas.

Nuestra Constitución, promulgada el 5 de febrero de 1917, recogió las causas por las que
se había luchado durante la revolución, así, el artículo 3, estableció que todas y todos
tenemos derecho a recibir educación; en el artículo 4 se consagró el derecho a la salud;
en el artículo 27, la Constitución tomó en cuenta las causas de los campesinos y por eso
ordenó que se repartiera la tierra y permitió que los campesinos trabajaran unidos en
comunidades agrarias o ejidos; y en el numeral 123 se establecieron condiciones justas
para las y los trabajadores.

No debemos olvidar que, una visión generalizada de los derechos sociales en el


transcurso del siglo pasado, fue precisamente la paternalista, que más que entender estas
prerrogativas como verdaderos derechos, los limitó a programas, y una de las
consecuencias de la legislación que desarrolló estos derechos, es que aborda problemas
fundamentalmente orgánicos, es decir que regula los órganos de la Administración
Pública y reparte competencias, pero no establece prerrogativas concretas para los
ciudadanos350. Y entonces ¿qué es lo que debe contener el desarrollo legislativo de los
derechos sociales?, según la explicación de Böckefor: una determinación de su
350
Resulta importante aclarar que la omisión legislativa, por ejemplo en el caso de los derechos humanos de
los pueblos indígenas, en donde gran parte de las legislaturas de los Estados, aún no desarrollan la
normatividad correspondiente.

403
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

presupuesto, de su contenido y de su alcance; por ejemplo, para satisfacer


legislativamente el derecho a la vivienda, debe decidirse de que medios financieros se
dispondrá, también se debe determinar con que extensión se aplicará, así como decidir si
la provisión de la vivienda debe ser en beneficio de todos los ciudadanos o sólo de los
menos favorecidos económicamente.

Nuestra Ley Suprema en su artículo 123, relacionado con el problema obrero, las
contradicciones se hicieron más visibles. Después de crear para las legislaturas de los
Estados la obligación de expedir leyes de trabajo, de acuerdo con las necesidades
regionales, fijaba los lineamientos generales a que habrían de sujetarse a las
disposiciones del derecho colectivo, por sólo mencionar algunas, la jornada máxima sería
de ocho horas. La jornada máxima nocturna sería de siete, prohibiéndose las labores
insalubres y peligrosas para mujeres y jóvenes de 16 años. A una y otras quedaba
prohibido el trabajo nocturno industrial, limitándose el trabajo en los establecimientos
comerciales antes de las diez de la noche. Los jóvenes mayores de doce y menores de 16
años, tendrían como jornada máxima seis horas. El trabajo de los menores de 12 años no
sería objeto de contrato, estableciéndose por cada seis días de trabajo, uno de descanso.
Las mujeres embarazadas, durante los tres meses anteriores al parto no desempeñarían
el trabajo físico, y al siguiente del parto gozarían de descanso, con salario íntegro.
Establecía la obligación de fijar el salario mínimo de acuerdo con las necesidades de cada
región, y por comisiones especiales dependientes de las Juntas de Conciliación. Además,
participación de utilidades: igualdad de salarios para trabajos iguales sin distinción de
sexo o nacionalidad; exención de embargo, descuento o compensación para el salario
mínimo; prohibición de efectuar el pago de salario con mercancías o vales de cualquier
especie; pago de horas extraordinarias con un ciento por ciento más de lo fijado para las
horas normales; obligación de los patrones de dotar a los trabajadores de habitaciones
cómodas e higiénicas; responsabilidad para los empresarios en casos de accidentes de
trabajo y de enfermedades profesionales en los trabajadores; derecho para obreros y
empresarios para asociarse; derecho de huelga y paros para obreros y parones; licitud de
las huelgas cuando su objeto fuera equilibrar los diversos factores de la producción,
armonizando los derechos del trabajador con los del capital; obligación, cuando se tratara
de servicios públicos, de avisar con diez días de anticipación a la fecha fijada para la
suspensión del trabajo, a la Junta de Conciliación y Arbitraje; ilicitud de las huelgas
cuando la mayoría de los huelguistas ejercieren actos violentos contra las personas o las
propiedades, o en caso de guerra, cuando se tratare de establecimiento y servicios que

404
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

dependan del Gobierno; obligación para el patrón que se negare a llevar sus diferencias al
arbitraje o a aceptar el laudo pronunciado, de indemnizar con tres meses de salario al
obrero reclamante. Igual indemnización debía pagar el patrón al obrero en caso de
despido sin causa justificada. En caso de quiebra los sueldos devengados por los
trabajadores tendrían preferencia sobre cualquier otra deuda. Además, el pago de las
deudas contraídas por los trabajadores podrá ser exigido a éstos, pero nunca a sus
familiares.

Hemos revisado algunos datos sumamente alarmantes que posicionan a una buena parte
de la población en situación de extrema pobreza, con todos los elementos que Naciones
Unidas ha establecido sobre este concepto, y teniendo muy en cuenta que como ya lo
hemos expresado, constituye el mayor problema de derechos humanos en el mundo.

Los retos actuales en materia de derechos sociales, se sintetizan en tres puntos:

• Consolidar y fortalecer el proceso de afirmación de la visión integral e indivisible de los


derechos humanos mediante la conjugación de derechos civiles y derechos sociales;

• Incorporar el enfoque de raza, género y etnia, y • Reforzar la responsabilidad del Estado


en la implantación de los derechos sociales.

Los derechos económicos, sociales y culturales (o derechos sociales, como lo hemos


venido apuntando), no son una bandera, ni el patrimonio de una determinada vertiente
política o ideológica; más bien son lisa y llanamente derechos, más precisamente,
derechos humanos, y en el sentido más propio de este concepto; “y como tales deben ser
considerados por todos, y muy especialmente por los Estados, sus órganos, y los
hombres y mujeres de derecho; y por lo tanto las banderas podrán adornarse con estos
derechos o despojarse de ellos, las paletas de las parcialidades políticas o ideológicas
podrán incorporar estos colores o diluirlos, pero nunca desconocerlos o ignorarlos a
riesgo de despojarse o diluir el sentido cabal de lo que debe ser entendido como Estado
de Derecho”.351

5.3.2 El pensamiento político y social.

En los años treinta se sentaron las bases del sistema político mexicano. La forma
particular que adoptó dicho sistema frente a la sociedad, resultó crucial para establecer un

351
GIALDINO, ROLANDO, E. “Los derechos económicos, sociales y culturales: Su respeto, protección y
realización en el plano internacional, regional y nacional”, en Revista Investigaciones, No. 2, Secretaría de
Investigación de Derecho Comparado de la Corte Suprema de Justicia de la República Argentina, Argentina,
1999. p. 43

405
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

conjunto particular de reglas y procedimientos (representación y participación política,


elecciones, concertación social, etcétera), que han perdurado y evolucionado a lo largo
del tiempo. Fue así como tuvo lugar la base política y social del corporativismo mexicano.
Después de esta etapa de conformación, la estructura corporativa que unió a los grupos
sociales con este sistema sirvió para ejercer el control de los actores más importantes del
proceso productivo, en un sentido que permitiera al gobierno dirigir y promover la
actividad económica. De tal suerte, el conjunto de organizaciones que propició la
institución de la lucha política de líderes y dirigentes sociales, también significó un arreglo
social mediante el cual se impulsó y condujo el proyecto económico del siguiente medio
siglo.

Los gobiernos que surgieron de la Revolución Mexicana, crearon organizaciones para


controlar a los grupos sociales y canalizar sus demandas mediante una estructura
corporativa. Se estimuló así la formación de organizaciones sindicales y campesinas,
incorporándolas al partido del gobierno. Dos condiciones fomentaron este tipo de
desarrollo político:

• Los revolucionarios triunfantes necesitaban desarticular a las diferentes fuerzas que,


surgidas de la lucha armada, se habían fraguado a nivel local y regional para consolidarse
en el poder y proveer la base real de un gobierno nacional. Para lograrlo, incorporaron
dirigentes y líderes al PNR (Partido Nacional Revolucionario) y ejercieron, en las regiones
clave del país un control militar definitivo.

• El naciente gobierno institucionalizó así la lucha política y llegó en la transformación del


Partido Nacional Revolucionario a PRM (Partido de la Revolución Mexicana), a un arreglo
entre los diversos grupos sociales que le permitió contar con una base de apoyo -incluso
para los procesos electorales- y una forma eficaz de controlar las demandas de diversas
organizaciones que en ese momento se gestaban. Todo ello significó la conformación de
una organización social en torno a proyectos nacionales y no a caudillos o figuras
regionales, emanadas de la Revolución.

En la segunda mitad de los setenta, el sector obrero reaccionó, sin embargo, ante los
cambios de la sociedad mexicana, que ya prefiguraban una evolución política hacia una
mayor pluralidad de actores y en consecuencia, a un sistema de representación más
complejo y diversificado. Ante estas realidades, el movimiento obrero sintió perder el lugar
privilegiado que tenía en el viejo arreglo corporativo: su papel de aglutinador de las
principales fuerzas sociales, y de interlocutor frente al gobierno en cuestión sobre las

406
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

grandes políticas nacionales y los cambios al proyecto económico.

No es casualidad que al realizarse la primera Asamblea Nacional Ordinaria del Congreso


del Trabajo en 1978, el andamiaje corporativo de organizaciones obreras (encabezado
por la Confederación de Trabajadores de México) reaccionara negativamente ante la
reforma política (electoral y de representación de nuevas fuerzas políticas) que efectuaba
el nuevo gobierno.

La central argumentaba que lo que el país necesitaba era una reforma económica y no
una reforma política. En realidad, la versión propuesta de reforma económica consistió en
enarbolar el tradicional discurso de justicia social frente a las medidas de austeridad
macroeconómica que el gobierno había tomado en 1977. En el fondo, lo que se planteaba
era resguardar el poder del sector obrero frente a otras fuerzas políticas emergentes. Por
lo demás, el papel central que en el discurso se asignaba al sector obrero en la
transformación de México, limitaba -como se apreciará a continuación- la relevancia
histórica de la actividad económica privada.

Bajo el contexto de la crisis de los años ochenta- los costos de una inflación fuera de
control y de una recesión considerable sin poder superar su posición retórica, y sin pasar
a una posición activa y autónoma (ya que ello habría vulnerado la "alianza histórica" y
aliarse en cambio con nuevas fuerzas políticas que consideraba rivales). El país
emprendió entonces un proceso de ajuste macroeconómico concluyó en un proceso de
reforma y apertura económicas. Ante ello, las estructuras corporativas permanecieron
prácticamente inmóviles: no podían trascender su posición fundamentalmente defensiva
ya que se mantuvo el tradicional discurso reivindicacionista del sector obrero (en el que,
sin más propuestas, el objetivo central ha sido avanzar en "las conquistas" del sector). Así
las cosas, el arreglo corporativo que se ha bosquejado, y cuyo pilar por excelencia está en
el sector obrero, ha tenido un papel crucial que corresponde al pasado esquema del
desarrollo mexicano. De la misma manera en que la vieja estrategia sustitutiva de
importaciones ha ido cediendo a la necesidad de consolidar en el largo plazo un sistema
abierto y competitivo para crecer sostenidamente, la tradicional fórmula de intercambio
corporativo (apoyo y control de demandas a cambio de políticas subsidiarias y prebendas)
ha sido progresivamente desplazada del centro de la vida política.

Más aún -y como se verá más adelante-, ello se dio paralelamente con un sindicalismo
cuyos dirigentes no tenían incentivos para profundizar en la vida laboral propiamente
dicha ni en la organización del trabajo.

407
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

A partir de la reforma política promovida por el Ex Presidente López Portillo el acceso de


los partidos políticos de izquierda a la Cámara de Diputados, generalmente por la vía de
la representación proporcional, ha permitido su intervención firme en las decisiones más
importantes para normar la vida del país, sin embargo, uno de los efectos colaterales de
mayor significación ha sido, el enlace entre esos partidos y los sindicatos, en una clara
acción de renovación de la vida sindical cuyas consecuencias inmediatas han sido la
acción enérgica de los sindicatos independientes en ámbitos antes reservados para
agrupaciones tradicionales. Tanto el Partido Social Unificado de México, que incluye a los
antiguos militantes del Partico Comunista Mexicano, como el Partido Mexicano de los
Trabajadores.352

Como se ha señalado, el corporativismo y particularmente el sindicalismo corporativo


sirvió para estructurar políticamente a los grupos sociales en un sentido funcional -es
decir, de acuerdo su papel en la división del trabajo-, pero también en un sentido
jerárquico y no competitivo. Ello permitió acotar en un ámbito controlable a líderes y
dirigentes sociales, y fue clave para dirigir el proceso de desarrollo de la actividad
económica. El problema del corporativismo surge, como veremos, de la incapacidad de
responder a un cambio global (económico, político y social) que se ha iniciado en México
sin experimentar cambios profundos en su estructura; es decir, el corporativismo no
puede seguir teniendo la misma función política ni las mismas prebendas cuando todo el
entorno ha cambiado desde su raíz. Las implicaciones de esta transformación en la vida
política del sindicalismo han sido múltiples y visibles.

En el terreno de la representación política, el corporativismo ha enfrentado desde hace


algunos años la precariedad de su presencia y convocatoria frente a la sociedad
mexicana. La tradicional relación corporativa entre el gobierno y el sindicalismo se
sustentó en la obtención de privilegios y concesiones en el terreno económico a cambio
de su apoyo político-electoral, entre otros factores. Sin embargo, el apoyo electoral que
actualmente otorgan las organizaciones sindicales es cada vez menos efectivo sobre todo
en las grandes urbes: en 1988 se evidenció claramente que el voto obrero en los grandes
centros urbanos había sido rebasado por una sociedad civil plural que rechaza la
imposición y el control férreo de las organizaciones corporativas.

Asimismo, los comicios de 1988 también demostraron que la capacidad movilizadora, del
propio sector obrero ya no era tan efectiva ni totalmente controlable por el gobierno, como

352
Cfr. DE BUEN LOZANO, Néstor. Óp. Cit. pág. 26

408
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

lo era en el pasado. De hecho, el gran perdedor de la elección de 1988 fue el sector


obrero y en particular los candidatos de la Confederación de Trabajadores de México
(CTM).

No debemos olvidar que, corresponde a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social el


registro de sindicatos de trabajadores al servicio de empresas o entidades de jurisdicción
federal de las ramas textil, eléctrica (de servicio público), cinematográfica, hulera,
azucarera, minera, metalúrgica y siderúrgica, de hidrocarburos, petroquímica, cementera,
calera, automotriz incluyendo autopartes, química incluyendo farmacéutica y
medicamentos, de celulosa y papel, de aceites y grasas vegetales, productora de
alimentos enlatados, empacados o envasados, bebidas enlatadas o embazadas,
ferrocarrilera, maderera básica, aserradero, triplay y aglutinados, vidriera de vidrio plano,
liso o labrado y envases, tabacalera, empresas administradas directa o
descentralizadamente por el Gobierno Federal, empresas que actúen en virtud de un
contrato o concesión federal (caso TELMEX) y empresas que ejecuten trabajos en zonas
federales. Procede también cuando se trata de sindicatos nacionales de industria por
tener miembros en dos o más entidades federativas.

Por otra parte, las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje tienen la competencia para
realizar los registros de sindicatos gremiales, de empresa, industriales o de oficios varios
cuyos trabajadores presten servicios a empresas no comprendidas en la jurisdicción
federal.

El pensamiento social del sindicalismo es lograr el mejoramiento de la clases trabajadora


y obtener al máximo las prestaciones que conforme a los contratos colectivos se celebren
con las empresas, y en relación con el pensamiento político es tener la fuerza necesaria
para hacer presión y que el estado de iniciativas de ley en beneficio de la clase
trabajadora, y hay que manifestar que en la actualidad existen contratos colectivos de
protección a favor de la parte patronal, y esto es una falta de conciencia social por parte
de los representantes sindicales. Es dable reconocer que, actualmente, los líderes
sindicales buscan sus intereses personales y no los de sus agremiados, por lo que
irrumpe el espíritu protector de las condiciones colectivas de los trabajadores.

5.3.3 Los medios y fines de protección de los derechos laborales.

El trabajo es un derecho fundamental y un bien para el hombre: un bien útil, digno de él,
porque es idóneo para expresar y acrecentar la dignidad humana.

409
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Resulta evidente que los derechos de los trabajadores, como todos los demás derechos,
se basan en la naturaleza de la persona humana y en su dignidad trascendente. Los
agentes promotores del trabajo han considerado enunciar algunos de ellos, indicando la
conveniencia de su reconocimiento en los ordenamientos jurídicos: el derecho a una justa
remuneración; el derecho al descanso; el derecho “a ambientes de trabajo y a procesos
productivos que no comporten perjuicio a la salud física de los trabajadores y no dañen su
integridad moral”; el derecho a subsidios adecuados e indispensables para la subsistencia
de los trabajadores desocupados y de sus familias; el derecho a la pensión, así como a la
seguridad social para la vejez, la enfermedad y en caso de accidentes relacionados con la
prestación laboral; el derecho a previsiones sociales vinculadas a la maternidad; el
derecho a reunirse y a asociarse. Estos derechos son frecuentemente desatendidos,
como confirman los tristes fenómenos del trabajo remunerado, sin garantías ni
representación adecuada.

Con frecuencia sucede que las condiciones de trabajo para hombres, mujeres y niños,
especialmente en los países en vías de desarrollo, son tan inhumanas que ofenden su
dignidad y dañan su salud.

El bienestar económico de un país no se mide exclusivamente por la cantidad de bienes y


producidos, sino también teniendo en cuenta el modo en que son producidos y el grado
de equidad en la distribución de la renta, que debería permitir a todos disponer de lo
necesario para el desarrollo y el perfeccionamiento de la propia persona. Una justa
distribución del rédito debe establecerse no sólo en base a los criterios de justicia
conmutativa, sino también de justicia social, es decir, considerando, además del valor
objetivo de las prestaciones laborales, la dignidad humana de los sujetos que las realizan.

En este orden de ideas, podemos hacer una clasificación de lo que podemos denominar
“los medios de acción”. Incluye entre ellos los siguientes:

• De acción directa;
• De negociación convencional colectiva;
• De acción orgánico jurisdiccional (comisiones);
• Asistenciales, y
• De acción política (el sindicalismo como fenómeno y como problema jurídico.

Los medios de acción directa.- Expresan la idea de una conducta agresiva, que puede
estar dentro de la ley o romper con sus limitaciones. En ocasiones suponen una conducta
ilegal pero que, bien por ser colectiva, bien por no ser suficiente, en sí misma, no genera

410
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sanciones. El legislador intenta poner traba a estas conductas si tiene, como


generalmente ocurre en los países de economía capitalista, la intención de preservar los
intereses patronales, aun dentro de una línea de democracia social.

La huelga.- El artículo 440 de la Ley Federal del Trabajo la define como:

“la suspensión temporal del trabajo llevada a cabo por una coalición de trabajadores”.
Consiste en el ejercicio de un derecho para suspender el trabajo en una empresa o
establecimiento y no solo el derecho de dejar de trabajar. En ese sentido constituya una
conducta activa además de pasiva, se considera violado ese derecho y ofensivo para la
sociedad como lo señala el artículo 4 de la ley de la materia cuando se trata de sustituir o
se sustituya a los huelguistas en el trabajo que desempeñan, sin haberse resuelto el
conflicto que la motiva.

Los sindicatos.- La sociedad mexicana reconoce la función fundamental desarrollada por


los sindicatos de trabajadores, cuya razón de ser consiste en el derecho de los
trabajadores a formar asociaciones o uniones para defender los intereses vitales de los
hombres empleados en las diversas profesiones. Los sindicatos se han desarrollado
sobre la base de la lucha de los trabajadores, del mundo del trabajo y, ante todo, de los
trabajadores industriales para la tutela de sus justos derechos frente a los empresarios y a
los propietarios de los medios de producción. Las organizaciones sindicales, buscando su
fin específico al servicio del bien común, son un factor constructivo de orden social y de
solidaridad y, por ello, un elemento indispensable de la vida social. El reconocimiento de
los derechos del trabajo ha sido desde siempre un problema de difícil solución, porque se
realiza en el marco de procesos históricos e institucionales complejos, y todavía hoy no se
puede decir cumplido. Lo que hace más actual y necesario el ejercicio de una auténtica
solidaridad entre los trabajadores.

A la organización sindical, además de la función de defensa y de reivindicación, le


competen las de representación, dirigida a la recta ordenación de la vida económica y de
educación de la conciencia social de los trabajadores, de manera que se sientan parte
activa, según las capacidades y aptitudes de cada uno, en toda la obra del desarrollo
económico y social, y en la construcción del bien común universal. El sindicato y las
demás formas de asociación de los trabajadores deben asumir una función de
colaboración con el resto de los sujetos sociales e interesarse en la gestión de la cosa
pública.

La negociación colectiva.- Esta figura jurídica no se encuentra regulada como en otros

411
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

países, ya que su propósito consistía en mejorar en beneficio de los trabajadores las


condiciones de trabajo previstas en la ley en términos acordes con las necesidades de los
trabajadores y las posibilidades del empresario. Habitualmente funciona, como ocurre en
México y en muchos otros países, en estrecha vinculación al derecho de huelga (artículo
450 de la Ley Federal del Trabajo), pero puede tener valor en sí misma, si bien su
eficacia, en esa alternativa, es mucho menor. Precisamente en el artículo 387 de la ley
laboral que dispone que es obligatorio para un patrón que emplee trabajadores
pertenecientes a un sindicato, celebrar con éste un contrato colectivo de trabajo, el
párrafo segundo señala que: “Si el patrón se niega a firmar el contrato, podrán los
trabajadores ejercitar el derecho de huelga consignado en el artículo 450”. A su vez, en
las fracciones II, IV y VII de éste último artículo se señala que el mismo derecho se podrá
hacer valer para exigir la revisión o el cumplimiento de los pactos colectivos.

Las comisiones mixtas.- Como un medio pacífico, de eficacia limitada, para resolver
determinados problemas de las relaciones laborales, suele autorizar la ley el
establecimiento de comisiones mixtas cuyo objeto es logar “el cumplimiento de
determinadas funciones sociales y económicas (artículo 392 de la ley laboral). Pueden
nacer de convenios colectivos pero, en ocasiones, tienen su fundamento en disposiciones
imperativas.

La ley laboral mexicana consagra el establecimiento obligatorio de las siguientes


comisiones:

• Comisión temporal para determinar la participación individual de los trabajadores en las


utilidades de las empresas.

• Comisión para formular el cuadro general de las antigüedades de los trabajadores.

• Comisión temporal para formular el reglamento interior de trabajo.

• Comisión de seguridad e higiene, que investiga las causas de los accidentes y


enfermedades, propone medidas para prevenirlos y vigila que se cumplan.

• Comisión de Capacitación y Adiestramiento, por mencionar sólo algunas.

De Buen Lozano, siguiendo a Gallar Floch, nos menciona que estas comisiones son
“medios orgánico-jurisdiccionales”, cuya integración debe de hacerse con los trabajadores
más capacitados.353

353
Cfr. DE BUEN LOZANO, Néstor. Óp. Cit., pág.135

412
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En la actualidad, los sindicatos están llamados a actuar en formas nuevas, ampliando su


radio de acción de solidaridad de modo que sean tutelados, además de las categorías
laborales tradicionales, los trabajadores con contratos atípicos o a tiempo determinado;
los trabajadores con un puesto de trabajo en peligro a causa de las fusiones de empresas,
cada vez más frecuentes, incluso a nivel internacional; los desempleados, los inmigrantes,
los trabajadores temporales; aquellos que por falta de actualización profesional han sido
expulsados del mercado laboral y no pueden regresar a él por falta de cursos adecuados
para cualificarse de nuevo.

5.3.4 El sindicalismo el brazo fuerte en el derecho laboral.

El poder es una libertad, es decir una fuerza intelectual y física propia y característica de
la persona humana, que por su propia naturaleza, es poseedora de una libertad
connatural puesta de manifiesto a través de actos de poder. No todo poder es causa de
un efecto político, pero sí causa de un efecto personal o social que en el caso de tener
implicancias e influencias políticas, es por la posesión de características políticas, que lo
convierten en poder político y al cual es necesario diferenciar del fenómeno común que es
el poder social.

En la obra: ¿Qué es una Constitución?, escrita en la época de Bismarck, Ferdinand


Lassalle comienza haciéndose la pregunta sobre qué cosa era una Constitución,
señalando que esta respuesta para un jurista de ideas monárquicas podría ser contestada
de la siguiente forma: “La Constitución es un pacto jurídico entre el rey y el pueblo, que
establece los principios básicos de la legislación y del gobierno dentro de un país”. Pero,
si este jurista tuviera ideas republicanas, seguramente la definiría así: “La Constitución es
la ley fundamental proclamada en el país, en la que se echan los cimientos para la
organización del Derecho Público de esa nación”.354

Para la creación de las Constituciones, debe tomarse en cuenta "los factores de poder".
Éstos podrían ser la monarquía, la aristocracia, la gran burguesía, los banqueros, la
conciencia colectiva y la cultura general; la pequeña burguesía y la clase obrera. La
Constitución va a ser entonces, la suma de los factores reales de poder que rigen en ese
país. En otras palabras, no es un código que regule unos hechos de acuerdo con ciertas
normas. Son unos hechos que expresan su inexcusable presencia en cuanto
condicionantes del poder a través de normas que les dan categoría legal. Un factor real
de poder es, en ciertos países, la Iglesia, otro la empresa, otro la gran burguesía,
354
Lasalle, Ferdinand. Óp. Cit., pág. 8

413
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

etcétera. Si no se manifiestan en la legalidad constitucional, la Constitución tiende a ser


una quimera. En nuestro país tenemos ejemplos notables de constituciones que olvidan
los factores reales de poder atendiendo a la idea y a las disparidades u hostilidades de los
grupos que luchan por el poder.

Una Constitución entendida de este modo suele coincidir con las ideologías que
predominan en cierto período, pero suele no coincidir con la realidad social y económica
por la sencilla razón de que las ideologías no están normalmente sincronizadas con la
realidad.

Por supuesto, si hablamos de un sistema político republicano, no estaríamos señalando


como factores reales a la monarquía y a la aristocracia.

Cada factor de poder es un fragmento de la Constitución según Lassalle.

Cuando este autor habló de la gran burguesía, la cual sucedió a los gremios laborales
representados en las corporaciones, llegó de manera regresiva a la siguiente conclusión
histórica: Basta esto para comprender que la gran producción, la producción mecánica y
el sistema de maquinismo, no podían prosperar ni un solo día con una Constitución de
tipo gremial.355

En todo grupo societario, incluyendo al sindicato, a pesar de ser una organización natural,
es inevitable la existencia del grupo que conduzca, el cual a su vez debe estar investido
del poder necesario para cumplir su finalidad y sin el cual la organización se disgregaría y
dejaría de existir como tal. Es más, pese al carácter natural del sindicato en el orden del
trabajo, como lo es la familia en el orden de la sociedad alguien toma la iniciativa le da
forma al constituirlas y asume ya y de por sí el poder. Bajo esta tesitura, debemos
recordar que el sindicato es la primera creación original del proletariado que busca los
límites de su propia estructura de clase, elige de su mismo seno a sus dirigentes,
adquiere los primeros elementos de una administración propia y de un propio gobierno, y
se propone limitar y controlar la arbitrariedad y la prepotencia de las clases dominantes,
sentando así las primeras bases de su propia emancipación y de su propio poder.

Como observamos en el Capítulo II de la presente investigación, la organización sindical


se presenta históricamente como la antítesis y la negación de la democracia burguesa y
del régimen parlamentario. Este hecho ha determinado el surgimiento de una ideología
fundada en toda una serie de creencias sobre los desarrollos del sindicato que la realidad

355
Ibídem, pág. 19

414
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

histórica ya se ha encargado de demostrar cómo absolutamente arbitraria y falaz: el


sindicalismo. Por su mismo origen y por los modos de su desarrollo, la organización
sindical tiene límites que no pueden ser superados orgánicamente, a través de una
expansión automática del movimiento inicial. La organización sindical se mueve
paralelamente al movimiento de la organización capitalista, como un reflejo de este
movimiento; junto al proceso de monopolización de los instrumentos materiales de
producción y de cambio se desarrolla el proceso de monopolización de la fuerza de
trabajo. Sin embargo, se trata de un fenómeno que objetivamente no se diferencia del
fenómeno capitalista, y la realidad ha demostrado cuán absurda es la creencia de que, en
la competencia, el monopolio de la fuerza de trabajo podría lograr el predominio y la pura
resistencia corporativa habría hecho derrumbar el poder industrial y, por consiguiente, el
poder político del capitalismo. La realidad histórica ha demostrado que si la pura
resistencia corporativa puede ser, o mejor aún lo es de hecho, la más útil plataforma para
la organización de las más amplias masas, esa sin embargo, en un momento dado,
cuando le place al capitalismo, que posee en el estado y en la guardia blanca un
poderosísimo instrumento de coerción industrial, puede también revelarse como un
fantasma inconsistente.

La organización subsiste, el proletariado no pierde su espíritu de clase, pero la


organización y el espíritu de clase ya no se expresan en el sindicato, que con frecuencia
es abandonado; se expresa en cambio en una multiplicidad de manifestaciones alrededor
del partido político al que la clase obrera reconoce como su partido. La pura resistencia
corporativa se vuelve pura resistencia política.

Los cuadros de las organizaciones sindicales habrían debido ofrecer una prueba
experimental de la capacidad de la clase obrera para gestionar directamente el aparato de
producción. El desarrollo normal de la organización sindical provocó resultados
completamente opuestos a los previstos por el sindicalismo: los obreros convertidos en
dirigentes sindicales perdieron por completo la vocación laboriosa y el espíritu de clase, y
adquirieron todos los caracteres del funcionario pequeñoburgués, intelectualmente
perezoso y moralmente corrompido o fácil de corromper.

En este orden de ideas, la actividad de los sindicatos entra indudablemente, en el campo


de la política, entendida ésta como una prudente solicitud por el bien común. Pero al
mismo tiempo, el cometido de los sindicatos no es hacer política en el sentido que se da
hoy comúnmente a esta expresión.

415
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Los sindicatos no tienen carácter de partidos político, que lucha por el poder político,
convirtiéndose en instrumentos para otras finalidades. Bajo esta tesitura no hay que
olvidar que las organizaciones sindicales, aunque de tipo predominantemente económico,
llegaron a constituir en potencia un indudable instrumento de acción política.

En nuestro país resulta evidente “la dimensión política” del sindicalismo, en el sentido de
la regulación pública de la economía o del trabajo. Si bien, el sindicalismo por su propia
naturaleza, no es ni debe ser la estructura llamada a reemplazar a la política, no menos
cierto que su importancia, su gravitación y su peso en el contexto general de los
organismos del estado hace que deba participar a través de una muy valiosa colaboración
orgánica en el terreno de las decisiones que le competan; quedando en definitiva la
acción legislativa y ejecutiva a cargo de los tradicionales poderes respectivos.

El sindicato como institución es sagrada, por lo tanto, debe tener poder, tener una imagen
nacional a favor de la justicia social.

Resulta necesario no olvidar, que el sindicalismo aglutina a todos aquellos que a través
del trabajo son los auténticos artífices de la producción de los bienes y servicios con que
cuenta la comunidad, esto es en cuanto a lo económico, que hoy en día se encuentra
inmerso en el fenómeno mundial que la lleva a la crisis a los países en desarrollo como es
México y que es la “globalización” que se ha desplegado a través de un sistema neoliberal
adoptado por casi toda las naciones del mundo.

Por otra parte, ese enorme conjunto humano dedicado a esa producción y a esos
servicios, que generalmente se estima en casi las tres cuartas partes de la población
industrial mexicana, significa una muy importante fracción de esa sociedad, por tanto
vemos que también es enorme su gravitación en el campo de lo social.

Bajo este rubro, resulta evidente la expresión de Adolfo Posadas: “El sindicalismo significa
una avance general en la reconstrucción e intensificación de las diferentes formas de vivir
colectivo, en consonancia con la creciente complejidad de las necesidades humanas y
para procurar a las sociedades políticas y a la humanidad en general la estructura social
más adecuada a la satisfacción de estas necesidades”356.

Los sindicatos reflejan una primicia en la estructura económica de los Estados. Desde la
perspectiva de la teoría económica actual el papel de los sindicatos puede analizarse bajo
dos enfoques distintos. Ambos enfoques consideran al sindicato como un agente
356
POSADA, Adolfo. Teoría social y jurídica del estado y sindicalismo, J. Menéndez Editor, Buenos Aires,
Argentina, 1922, pág. 295, citado por DEL CASTILLO, Efraín Raúl. Óp. Cit., págs.184.

416
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

económico con un comportamiento definido: se supone que el sindicato trata de


maximizar una función de utilidad que se hace depender generalmente del salario y del
nivel de empleo.

El primer enfoque considera que el sindicato se comporta como un monopolista que


controla la oferta de todos los trabajadores afiliados. Dada la limitación que la demanda
de trabajo (decreciente) de las empresas impone al sindicato, la idea básica que se trata
de transmitir es que el sindicato, si tiene la suficiente capacidad para controlar a sus
afiliados, puede imponer el salario o el nivel de empleo, pero no ambas variables
simultáneamente. Si la estrategia del sindicato es elevar el salario el resultado será una
disminución en el nivel de empleo. Si lo que pretende es mantener un determinado nivel
de empleo para sus afiliados, no podrá imponer el salario. Con una demanda de trabajo
muy atomizada, lo más probable es que la negociación entre el sindicato y las empresas
se centre en el salario y no en el nivel de empleo. La razón de ello es que se requeriría un
alto grado de coordinación entre las decisiones de contratación de las empresas
afectadas; y esto no parece posible.

El segundo enfoque lo integran los denominados modelos de acuerdos eficientes.

Estos modelos parten de una situación en la que un sindicato y una empresa pretenden
negociar simultáneamente el salario y nivel de empleo. En una situación como esta,
puede que exista una amplia gama de acuerdos eficientes que podríamos llamar conjunto
de negociación eficiente o curva de contrato: combinaciones de salario y nivel de empleo
que mejoran la situación de ambas partes con respecto de la situación previa a la
negociación. Lo más importante de todo es que estos modelos admiten la posibilidad de
que los aumentos del salario vayan acompañados de aumentos en el nivel de empleo.

Todo esto podría expresarse diciendo que la demanda de trabajo deja de existir en su
sentido habitual. Ahora salarios y empleo se negocian simultáneamente. Además es
posible que el sindicato disponga de los medios necesarios para lograr imponer aumentos
salariales que no repercutan en el nivel de empleo. Más aún, el sindicato podría hacer, si
tuviese la suficiente capacidad de presión, que los salarios y el empleo aumentarán al
mismo tiempo. Lo que se presupone en este tipo de modelos es que las empresas tienen
poder de mercado y que este poder da lugar a beneficios extraordinarios.

En el caso de empresas de tipo monopolístico u oligopolístico cabe la posibilidad de que


los empresarios se vean forzados a renunciar a una parte de sus ganancias
extraordinarias (resultado de su posición monopolística) y acaben adaptándose a unos

417
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

beneficios más reducidos.

De lo anterior podemos advertir que, el sindicato puede servir para reducir los costes de
transacción y las fricciones dentro del sistema productivo.

Los sindicatos no sólo hacen huelgas. También sirven como cauce de expresión de los
trabajadores y para resolver con rapidez, a través de procedimientos estandarizados, los
conflictos cotidianos. Pueden disminuir también los costes de información, tanto para los
trabajadores como para los empresarios (y reducir de este modo los costes de
contratación y formación).

Todo esto significa que la acción sindical puede lograr un aumento, sobre todo a largo
plazo, de la productividad marginal de la mano de obra, y que este aumento se traduzca
en un aumento de la demanda de trabajo.

Este argumento encierra probablemente una gran verdad empírica. Pero este efecto
positivo es muy difícil de medir empíricamente; aunque no por ello debe pensarse que
tenga poca importancia.

La organización de los trabajadores en sindicatos ha sido identificada tradicionalmente


como un derecho ganado a sangre y fuego por obreros y campesinos a lo largo de la
historia. La defensa colectiva de sus intereses fue, durante los siglos XIX y XX, una gesta
que se sigue conmemorando año con año. El choque entre los intereses del capital y del
trabajo, que era considerado como irreconciliable por los marxistas, fue finalmente
negociado como parte de un acuerdo de las empresas y los trabajadores en el marco de
la globalización mundial. El ideal revolucionario del fin del capitalismo, fue sustituido por el
del pacto entre aquellos que producen directamente y quienes invierten y arriesgan el
capital acumulado.

Desde los años noventa, el Estado Mexicano ha experimentado profundos procesos de


transformación que han modificado su lógica de relacionamiento con la sociedad. En otras
palabras, la vieja matriz estado céntrica, como la han llamado algunos autores, que
supuso un pacto o compromiso de corte corporativista entre Estado, partidos políticos,
empresarios y sindicatos, ha entrado en una crisis cuyos resultados parciales son, de un
lado, la reestructuración y desarticulación del aparato institucional propio del modelo
sustitutivo de importaciones y, por otro, la definición de nuevas correlaciones de fuerza
que expresan el conflicto y la pugna por posicionar agendas en un cambiante escenario
político y económico.

418
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En este sentido, la reforma del Estado no ha sido un proceso lineal ni mucho menos con
las mismas características en todos los países. En cada país, las condiciones
estructurales previas al período de reformas han afectado la dinámica de las mismas y
condicionado sus alcances. Pero en todos los casos observamos que la reforma del
Estado ha impactado de manera violenta al sindicalismo en tanto actor político. Es decir,
en la medida en que los sindicatos articularon los intereses de los trabajadores durante el
largo período del Estado Benefactor y la sustitución de importaciones, la pérdida de poder
y de legitimidad sufrida por los sindicatos también puede leerse como una pérdida de
importancia de los trabajadores como actores políticos. Ahora, se privilegia la categoría de
ciudadano versus trabajador en la constitución de las fuentes de legitimidad del poder
estatal, y esto sin duda alguna impacta a las organizaciones y a la capacidad de los
trabajadores para afectar el curso de las reformas radicales en los planos económico
(reforma del mercado y reconversión productiva) y político-institucional (reforma del
Estado).

Teniendo en cuenta el escenario anterior, nos parece muy importante la discusión sobre
cómo rearticular un sujeto social sindical capaz, por un lado, de seguir asumiendo la
representación de los trabajadores en el nuevo contexto del mundo del trabajo y, por otro,
de agregar agendas más amplias que permitan la generación de alternativas al modelo
económico adoptado por la región latinoamericana en los últimos 20 años.

No obstante, este tema debería estar lo más alejada posible de sectarismos e


ideologizaciones que impedirían analizar al sujeto sindical en sus propias especificidades,
partiendo de su herencia organizativa y de las expectativas de futuro que sea capaz de
construir y traducir en acciones. En otras palabras, una rearticulación del sujeto sindical
mexicano (con las diferencias admisibles en cada país o región) debería suponer una
nueva perspectiva para comprender que los sujetos sociales son momentos de
articulación entre las condiciones estructurales de una sociedad particular (por ejemplo,
en lo que atañe a la reforma del Estado) y las formas en que los sujetos dan sentido a
dichas estructuras e instrumentalizan sus acciones en términos de oposición o respaldo a
un determinado proyecto de sociedad, logrando la concreción de características como: la
flexibilización, globalización y el neoliberalismo.

Resumiendo, podemos afirmar que la reforma del Estado ha redimensionado la forma en


que el aparato estatal se relaciona con las organizaciones sindicales, perdiendo estas
últimas el lugar relativo privilegiado que ocuparon durante la larga fase del Estado

419
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Benefactor y el modelo sustitutivo de importaciones. En toda la región latinoamericana


hay que impulsar una discusión necesaria sobre la rearticulación de un sujeto social
sindical capaz de seguir representando a los trabadores pero también de enfrentar con
éxito el modelo dominante. Esto pasa por recuperar su propia capacidad y sus propias
potencialidades, en relación tanto con su herencia organizativa y programática como con
sus proyectos de sociedad. Es lo que podríamos denominar como el vínculo entre
memoria y utopía (ambas entendidas como categorías políticas).

En México, la lucha sindical terminó por insertarse en el marco del Estado revolucionario
autoritario, ajeno a las prácticas democráticas, y vinculado estrechamente a las cúpulas
burocráticas del corporativismo priista.

Más que un instrumento de defensa laboral, los sindicatos mexicanos se comportaron


como medios de coacción, presión y hasta chantaje para los propios trabajadores y sus
patrones, y un arma de control político en manos del partido hegemónico.

El llamado sindicalismo independiente, jamás dejó de ser marginal y paulatinamente


redujo su influencia en forma significativa. La capacidad de convocatoria electoral de las
centrales obreras disminuyó a partir de la crisis económica y política del Estado autoritario
priista. Los sindicatos mexicanos dejaron de servir como instrumento para atraer votos a
su partido (PRI) y tampoco cumplieron su función de defensa de los derechos obreros.
Con la llegada del primer gobierno no priista en 2000, las burocracias dirigentes del
sindicalismo mexicano perdieron la protección que los presidentes les otorgaban
tradicionalmente. Sin embargo, su debilidad estructural le fue enormemente funcional a un
gobierno como el de Fox que no quiso enfrentar los grandes cambios políticos y
económicos que el país demandaba.

La transición democrática mexicana pasó por el eje de los partidos políticos y de los
órganos de vigilancia electoral, pero no por el desmantelamiento del sindicalismo
corporativo, que sigue enquistado en la estructura productiva nacional.

Un esquema globalizador como el que existe a nivel mundial, en el marco de un Estado


democrático como el mexicano, no puede permitir la coexistencia con un sindicalismo
propio del pasado autoritario, y que reduce significativamente la competitividad de
industrias y servicios. Por supuesto que la reforma laboral, que tanto se ha mencionado
como parte de los cambios de fondo que requiere el país, pasa por la transformación del
aparato sindical y la democratización de sus órganos que siguen reproduciendo, una y
otra vez, a una gerontocracia corrupta e ineficiente.

420
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

No se trata de eliminar a los sindicatos de la vida nacional. Su existencia es fundamental


para contener los abusos del mercado, e impulsar una cultura de clase propositiva y
capaz de competir con el propio capital. Esto que se ha denominado sindicalismo nuevo, y
que rompe con los vicios de un pasado autoritario, es sin duda alguna lo que necesita el
país.

5.4 La situación que vive el sindicalismo en México.

Al crearse condiciones para alcanzar altos niveles de desarrollo, y donde los líderes
obreros participaron del poder, de diversas maneras, ya sea por nombramientos en
cargos de la administración pública o en puestos de elección popular. Adquirió
posteriormente el sindicalismo oficial declinaciones al no creer los trabajadores en sus
líderes sindicales, ya que presentan defectos nocivos para la clase que representaban.

El México actual

Han concluido años difíciles y críticos en la historia de nuestro país. La permanencia de la


crisis y de la injusta distribución de la riqueza ha acumulado una enorme deuda social con
millones de mexicanos que han quedado excluidos de las oportunidades que brinda el
desarrollo, mientras que muchos han perdido o disminuido los niveles de vida que en
otras etapas del país habían alcanzado. Los altos costos sociales, los conflictos políticos y
los climas de violencia y corrupción en el que estamos sumergidos han extendido el
reclamo de debatir el proyecto sobre el que se debe sustentar la viabilidad de nuestra
Nación en el marco de justicia y equidad, de soberanía y democracia.

Entonces, paralelamente al sometimiento de la sociedad a un partido de estado y como


engranaje de tal forma de dominio, se fija la impronta actual relación patológica entre
movimiento obrero organizado y estado/capital, en el cual deben considerarse también el
modelo de desarrollo y en particular, las formas de organización productiva.

Someramente, se trata de más de medio siglo de sometimiento de los líderes hacia el


gobierno y las instituciones a cambio de cuotas de poder, tolerancia frente a la creciente
corrupción y a la simulada democracia sindical y, hasta principios de los años setenta, de
ciertas ventajas reales para la clase trabajadora. Es un juego histriónico donde el obrero,
como ser que requiere de una vida armónica, que es lo de menos, la negociación es por
intereses de grupo y es por ello que puede derivar en rupturas internas, pero nunca
conducir a pérdidas de la compostura.

Entender todo lo dicho sería para el trabajador alcanzar un importante grado de cultura

421
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sindical, pero aun faltaría la acción. Si algo ha cambiado las organizaciones de los
trabajadores, aunque sea sólo en la retórica, es a causa de los golpes que han recibido
los sindicatos por parte del gobierno y de los Sindicatos independientes.

En esta etapa de constante crisis se plantea la redefinición de una reestructuración dentro


del sindicalismo mexicano, cuyos efectos no han sido favorables para la clase
trabajadora.

El movimiento sindical mexicano lucha por ser un factor fundamental en la historia


económica, social y política de nuestro país y ser una expresión representativa de nuestra
sociedad, de su pluralidad y diversidad, de sus anhelos de justicia, de equidad, de
bienestar y de progreso. El sindicalismo en nuestro país ha participado en un largo
proceso de luchas por la justicia social y una constante búsqueda por concretar su unidad,
con formas superiores de organización a través de su renovación y democratización.

Durante los últimos años, las diversas expresiones y organizaciones que integran el
movimiento sindical mexicano han enfrentado fuertes retos y asumido cambios
importantes como consecuencia de la crisis económica y social y por los efectos de las
políticas y estrategias con las que el gobierno mexicano ha enfrentado a la misma y a los
procesos de globalización y reestructuración internacionales.

La capacidad de acción unitaria de los sindicatos y de propuesta ha sido limitada y, en


algunos casos, nulificada, provocando que los peores costos de la crisis permanezcan y
se extiendan en detrimento de los niveles de vida de los trabajadores y de la mayoría de
la población. Se han agotado las posibilidades de una verdadera recuperación económica
del país sobre los esquemas y fórmulas seguidas en los últimos lustros: endeudamiento
interno y externo, devaluaciones, bajos salarios, desempleo, apertura comercial
indiscriminada y corrupción, entre otras.

Transitamos desde hace 14 años de un estado de bienestar social, que se consolidó a


través de un pacto social sobre la base de un estado con una fuerte intervención política
económica, concibiendo los derechos sociales como responsabilidad de la sociedad,
hacia un modelo de desarrollo neoliberal cuyos fundamentos políticos, económicos e
ideológicos rompen los pactos históricos y sociales generados tras la posguerra.

Las transformaciones en el ámbito laboral debido a los cambios tecnológicos, a la


reorganización del proceso de trabajo y a las derrotas de las luchas sindicales de finales
de los años setentas. La huelga de los mineros del carbón en Inglaterra, condujeron a una

422
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

crisis internacional del movimiento obrero, generando una caída en la sindicalización y


debilitando a los sindicatos como una fuerza social política. Se ha lanzado una ofensiva
internacional de capital con la intención de desmantelarlos o de someterlos.

La construcción de alternativas para el movimiento obrero ha pasado por diferentes


prácticas y experiencias a nivel internacional y nacional, la resistencia en el puesto de
trabajo comienza a transformarse en propuestas como las hechas por los sindicatos
europeos al formular la carta comunitaria de los derechos sociales fundamentales de
los trabajadores adoptada por la Comunidad Económica Europea (CEE), en diciembre
de 1991, a impulsar movilizaciones para frenar las reformas a la seguridad social en
México, así como la huelgas en Francia, la lucha de los sindicatos norteamericanos y
canadienses contra el Tratado del Libre Comercio (TLC), la resistencia de los trabajadores
centro y sudamericanos se manifiesta contra las privatizaciones, hasta las recientes
huelgas de los trabajadores en Corea, uno de los países modelo del neoliberalismo,
contra las reformas laborales.

Las condiciones existentes en México plantean a los trabajadores la necesidad de


impulsar un proceso de renovación del sindicalismo mexicano, que ya no esté sometido al
gobierno como lo ha estado por años. Es preciso generar opciones como la no
participación de los sindicatos dentro de los partidos políticos, que favorezcan la voluntad
de cambio para transitar hacia una mejor calidad de vida, donde se reconozca la
diversidad, se aseguren la autonomía e independencia de las organizaciones sindicales,
revalorando su participación ante los grandes problemas nacionales.

Consideramos y creemos necesario que el Estado y los líderes sindícales deben de


esforzarse por sentar las bases para el crecimiento de mejores niveles de vida de la clase
trabajadora, a través de diferentes medios, esto es que cuando se constituya un sindicato
cumpla con los objetivos para el cual fue creado, tal y como lo establece nuestra Carta
Magna y legislación laboral, conforme lo dispone el Artículo 356" estudio, mejoramiento y
defensa", ya que en la mayoría de los sindicatos los beneficios son sólo para los líderes
que manejan los sindicatos.

En nuestro país un conjunto de organizaciones integrantes del movimiento sindical se han


reagrupado en el foro El Sindicalismo ante la Nación ahora Unión Nacional de
Trabajadores (UNT) con el objetivo de estructurar propuestas ante la política neoliberal
así como construir una organización de los trabajadores independiente, plural y
democrática, saliéndose de las filas del Congreso del Trabajo como una alternativa a la

423
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

estructura anquilosada de la misma organización.

La globalización del capital nos está imponiendo de facto un marco laboral diferente al
que ampara nuestra legislación, estos cambios pretenden legitimarse a través de reformar
la Ley Federal del Trabajo desapareciendo las Juntas de Conciliación y Arbitraje y
creando Tribunales, eliminar una de las garantías constitucionales que especifica que los
derechos laborales son irrenunciables.

El proyecto a corto plazo del gobierno mexicano es la modificación a la mencionada ley


laboral. La negativa de fuertes sectores sindicales y de profesionistas ha logrado
suspender temporalmente esta iniciativa, sin embargo, con los acuerdos suscritos entre la
Confederación de Trabajadores de México (CTM) y la Confederación Patronal Mexicana
(COPARMEX), relativos a la nueva cultura laboral, se pone de manifiesto, de una parte, el
interés de la COPARMEX por avanzar en este terreno en cuanto las condiciones políticas
se lo permitan, mientras que la CTM por su lado lo que busca exclusivamente es ganar
tiempo y preservar en la medida de lo posible el modelo corporativo. En estas condiciones
lo único que se obtuvo fue un acuerdo cupular e inconcluso en que se evidencia la
ausencia de un verdadero proyecto que responda a los cambios en el proceso de trabajo.

La cúpula de las organizaciones sindicales oficialistas solicitaron que el 1o de mayo de


1995, a sus agremiados que se abstuvieran de desfilar con motivo del día del Trabajo; en
cambio los dirigentes del llamado Movimiento Obrero Organizado, prefieren conmemorar
la fecha en un encuentro privado con el Presidente de la República Mexicana en el Teatro
Ferrocarrilero.

Pero una agrupación sindical mejor conocida como los Foristas conjuntamente con la
Intersindical Primero de mayo (Sindicatos Independientes) los primeros marcharon del
Monumento a la Revolución al Zócalo y los segundos del Monumento a los Niños Héroes
rumbo at Zócalo causando un caos vial y social, todos con un mismo fin, demandar
cambios a la política económica vigente, construir un sindicalismo libre y democrático,
ratificando la muerte del viejo ritual corporativo en el que cada primero de mayo los
organismos laborales oficiales mandaban a sus afiliados al Zócalo para darle las gracias
al mandatario en turno y confirmar la alianza histórica entre los trabajadores y el régimen.

Los principales instrumentos laborales como son la CTM, CROM, la CROC y el CT, están
llegando a su fin, tales instituciones pueden perdurar por un tiempo indefinido en tanto
que siglas y logotipos, pero han perdido su fuerza política y sindical, su función social y
hasta su sentido.

424
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Durante el período del desarrollo estabilizador las corporaciones obreras fungieron como
mecanismos de redistribución de la riqueza y como instrumentos de control político que
anulaban, en la práctica, el derecho de libre asociación y la democracia sindical, y
aportaban al partido oficial una importante masa de votantes y afiliados. Pero desde 1987,
la principal tarea de tales corporaciones fue asegurar, mediante su participación en los
pactos, el acatamiento de los asalariados a orientaciones económicas que resultaron
funestas y su pasividad frente a una ofensiva sin precedentes contra los derechos
adquiridos de los trabajadores.

El 1o de mayo de 1996 los líderes oficiales fueron con el Presidente Ernesto Zedillo a
rendirle pleitesía en el Congreso del Trabajo (CT), llevando un grupo de trabajadores
incondicionales para darle las gracias por las supuestas mejoras salariales conseguidas a
través de sus sindicatos, parecían una clase laboral aparte, venida de quién sabe dónde,
ordenada sometida, elogiadora del Presidente de la República, primero de mayo que dejó
ver que et sindicalismo oficial mexicano parece no representar a nadie, frente al Congreso
de Trabajo (CT) no hubo marcha del 1o de mayo donde se conmemora un aniversario más
de los Mártires de Chicago, no se dieron gritos para demandar un cambio en la política
económica o para acelerar la creación de empleos, para restituir el poder adquisitivo del
ingreso. Pareció un día del trabajo sin trabajadores, un día del trabajo celebrado entre el
viejo sindicalismo, entre los caciques y el gobierno.

Conmemoración oficial del 1o de mayo, en donde los trabajadores ya no marchan, ya no


se expresan, ya no reclaman ni agitan mantas, ni agradecen o repudian la política salarial.
Conmemoración en la que los obreros parecen confiar tanto en sus líderes, que ya ni
siquiera asisten al más importante acto laboral, al día del trabajo.

El acto oficial del día del trabajo fue una ceremonia escenográfica, para la foto y para el
video, para los discursos y los elogios mutuos, para demostrar que los dirigentes obreros,
los más importantes caciques del sindicalismo, están con el Presidente Ernesto Zedillo
Ponce de León, Si de algún perdedor se puede hablar, ese sería el anquilosado
movimiento obrero, oficialista, o sea las organizaciones agrupadas en el CT, la C.T.M, que
se atemorizaron ante la posibilidad de manifestaciones exageradas de disgusto y
prefirieron la seguridad y la calma de sus propias instalaciones.

Parecían excesivas sus precauciones, teniendo el respaldo siempre importante que


significa la presencia del Presidente de la República, con lo cual su reunión se convirtió en
el acto oficial de celebración de las efemérides de los mártires de Chicago. Pero eso le

425
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

valió a la cúpula del CT mantenerse alejada - o distanciarse más, si se prefiere - de las


bases de trabajadores que optaron por hacer públicas sus demandas. Estando presentes
el dirigente del CT, Rafael Rivapalacio Pontones, (+) Fidel Velázquez Sánchez exlíder de
la CTM, y Leonardo Rodríguez Alcaine (actual dirigente de la CTM, a la muerte de Fidel
Velázquez).

En otro punto de la ciudad partían del Monumento a la Revolución los Foristas,


agrupación sindical que aspira a ser el cambio sindical en la actualidad con un primero de
mayo de protesta obrera y de reclamos al gobierno federal, donde pareció revivir y
adquirir sentido en la voz de miles de trabajadores, muchos de organizaciones afiliadas al
CT, en su desfile al Zócalo.

Los foristas lograron una movilización multitudinaria, encabezada por los dirigentes que
buscan un cambio en el sindicalismo, como lo manifestaron Francisco Hernández Juárez
{Secretario General del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, Antonio
Rosado García (Secretario General del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro
Social), Carlos Smith Picco (Secretario General de la Asociación Sindical de pilotos de
Aviación), Benito Bahena (Secretario General de Tranviarios), Alejandra Bárrales
(Secretaria General de Sobrecargos), Agustín Rodríguez (Secretario General del
Sindicato de Trabajadores de la UNAM), Pedro Castillo Medellín (Secretario General de
los Electricistas).

Al igual que en 1995 y 1996, el primero de mayo de 1997 se siguió bajo el mismo tenor la
celebración del día del Trabajo siendo los foristas, la Intersindical Primero de mayo los
principales actores demandando los reclamos de mejoras salariales, la muerte del
sindicalismo oficial y de las principales centrales obreras manejadas por los viejos
dirigentes, apegados al gobierno sin interesarles las demandas laborales de los
trabajadores.

El primero de mayo de 1998 se hizo un acto de acarreo de trabajadores al Zócalo por


parte de los dirigentes de la CTM, el CT, para seguirle agradeciendo las mejoras
salariales al señor Presidente, mientras que los trabajadores afiliados a la UNT, como en
los anteriores desfiles salían del monumento de la Revolución y los de la intersindical
Primero de mayo, del monumento a los niños Héroes con miras de llegar al Zócalo
cuando ya no hubiera trabajadores acarreados de las centrales oficiales que están con el
gobierno.

Los sindicatos tienen la representación de sus trabajadores, con la finalidad de que se

426
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

imparta justicia a la clase más desprotegida, trabajadores que se conduzcan con la


vocación y espíritu, por el cual fueron creados, los sindicatos nacen con la finalidad de ser
libres, los propósitos o fines que se tienen en mente, es la de la reivindicaciones
económicas, supresión de la propiedad privada de los medios de producción, integrar un
frente de defensa de los agremiados por el bienestar y mejoramiento del nivel de vida
tanto del trabajador y de sus familiares.

Si no se cumple con estos fines se tendría que disolver el sindicato tal y como lo
establece nuestra ley en la materia pero agregando que cuando no cumpla con los fines
por el que fue creado, haciéndole una reforma al Artículo 379 de la ley antes mencionada
y no nada más por los preceptos establecidos, que la dirección del sindicato no sea poder
de un sólo hombre con intereses propios y que sean dirigidos y controlados por los
trabajadores que se conviertan los sindicatos en organismos de resistencia y de lucha de
defensa de los derechos de la base trabajadora.

5.4.1 La crisis del sindicalismo en México.

En México históricamente se conforman tres grandes corriente sindical:

a) La del corporativismo sindical (también llamada oficial),

b) la sindical independiente y

c) la del sindicalismo blanco.

Las transformaciones que han ocurrido en el Estado, la economía y la producción han


ocasionado fuertes cambios tanto hacia el interior de cada una de las corrientes, como en
lo que se refiere al esquema en su conjunto. En gran medida, el saldo negativo que cada
una de dichas corrientes ha obtenido a lo largo de dichos procesos, puede relacionarse
con diversos grados de incapacidad para comprender el sentido de esos cambios y para
detectar la necesidad de mudarse de terreno.

El sindicalismo oficial es, con mucho, el destacamento más numeroso de la organización


obrera en México. La casi totalidad de sus integrantes pertenece al Congreso del Trabajo,
fundado en 1966, que agrupa al 78.9 % de los sindicatos registrados en el paso; aunque
cabe precisar que algunas organizaciones, como el Sindicato Nacional de Trabajadores
del Estado, el Sindicato de petroleros y el Sindicato de Trabajadores del Gobierno del
Distrito Federal, pertenecen al CT por partida doble, ya que se integran a él de manera

427
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

directa, y además a través de la confederación a la cual pertenecen.357

Los principales miembros del CT son la Confederación de Trabajadores de México (CTM),


la Confederación Regional de Obreros de México y Campesinos (CROC), la
Confederación Regional de Obreros de México (CROM), la Confederación Obrera
Revolucionaria (COR) y la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del
Estado (FSTSE).

Lo anterior lleva a que los sindicatos sean corresponsables, si bien de manera


subordinada, tanto del funcionamiento estable del sistema político, como de la buena
marcha de la economía; objetivos ante los cuales acaban por subordinar las políticas
laborales. En respuesta, obtienen posiciones en el sistema político, a través de esferas de
influencias y cargos de elección popular que realiza el Partido Revolucionario Institucional
(PRI), al cual pertenecen.

Como lo establece nuestra ley laboral en su Artículo 378, donde queda prohibido al
sindicato en intervenir en asuntos religiosos y ejercer la profesión de comerciantes con
ánimo de lucro, este Artículo debería de ser modificado ya que deberla de incluir otra
fracción en donde se prohíba a los sindicatos intervenir en asuntos de política nacional.

En este Artículo se estaría prohibiendo la participación de los Sindicatos en la política


nacional ya que pueden hacer política dentro de su organización interna década
Sindicato, si estos intervinieran en la elección de cargos políticos por diputaciones o
senadurías tendrán que ser sancionados, con la expulsión del Sindicato.

Así mismo se tendrá que regular en período de duración de los líderes sindicales
secretaría general en sus puestos, renovar constantemente las directivas sindicales para
evitar que se siga viciando y corrompiendo el sindicalismo en nuestro país, que haya más
participación de la mujer en el sindicato, que se suprima la reelección dentro del sindicato
para que no se den tentaciones de que siga enriqueciendo una sola persona dentro del
sindicato, adicionar un Artículo en nuestra Ley laboral donde se exprese que no hay
reelección en los puestos de Secretario General en los sindicatos y no solamente como lo
dispone el Artículo 376 laboral que se deja a criterio de lo que establezcan los estatutos
que son creados por los propios sindicatos.

El Artículo deberá de expresar que no puede haber reelección en el cargo de Secretario


General y así mismo lo deben de establecer los estatutos dicha premisa, ya que si estos
357
La Transformación del Sindicalismo en México. Cuaderno de Trabajadores 6 (Centro Nacional de
Promoción Social) México. 1995. p.p. 17.18.19

428
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

no se modifican se seguirá viciando el Sindicalismo mexicano.

Pero los dirigentes obtienen también el monopolio de la representación, que el estado les
garantiza a través de las cláusulas de exclusión y de exclusividad, a través de la
obligación legal de registrar los sindicatos ante la Secretaría del Trabajo o la Junta Local
de Conciliación y Arbitraje esto se da más bien a nivel de los Sindicatos locales y tendría
que ser a través de la reglamentación de los derechos de huelga y contratación colectiva.

Del Estado han recibido igualmente los dirigentes oficialistas apoyo para eliminar
corrientes sindicales alternativas fenómeno que ha contribuido substancial mente para la
consolidación de formas poco democráticas de funcionamiento de los sindicatos, en
donde la rotación del liderazgo y la competencia electoral están limitados.

Un último elemento que debe mencionarse para tener una visión sintética del sindicalismo
oficial consiste en la presencia de una cultura de tipo patrimonial, que caracteriza tanto a
las dirigencias como a las bases sindicales, y que ha contribuido en mucho a la
perpetuación de una gerontocracia sindical que, como es el caso de Fidel Velázquez
Sánchez, ya fallecido el mes de junio de 1997, Blas Chumacera, Leonardo Rodríguez
Alcaine, actual dirigente de la CTM, Emilio M. González, Alfonso Sánchez Mandariaga,
han permanecido más de 40 años en el poder.

El sindicalismo oficial ha tenido que enfrentar retos que han desbordado su capacidad,
sobre todo en el terreno de la productividad y la calidad, si bien ha sido una pieza clave en
la ofensiva flexibilizadora de las relaciones laborales. Resulta interesante apuntar que
muchos de esos problemas han sido trasladados al campo del enfrentamiento entre las
propias organizaciones del CT, ya sea por la dirección de este organismo cúpula o por la
afiliación de agrupamientos obreros que se desplazan entre la CTM, la CROC, la CROM y
la COR.

Ante la crisis que vive el viejo sindicalismo diversos dirigentes sindicales hablan de la
necesidad de que surja un nuevo movimiento sindical, señalando que ese nuevo
sindicalismo no deba ser oficial, que rescate la huelga como medio histórico de lucha, que
acabe con la cláusula de exclusión, democratice las estructuras y mecanismos sindicales
y fomente una cultura sindical abierta y propositiva.

La exdirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba


Esther Gordillo, considera que el sindicalismo se suma al siglo XXI con una sensación de
agobio y bajo la presencia de fuerzas que pretenden desplazarlo, por lo que no puede

429
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

evadir los retos. Que el sindicalismo en su representatividad y vialidad, se ve mermado en


su credibilidad, marginado en su papel de actor social, obligado, muchas veces, a asumir
un papel simbólico en la legitimación de concertaciones macro que empobrecen a los
trabajadores y desprestigian a sus líderes.358'

El distanciamiento entre las bases y sus dirigentes ha minado al sindicalismo mexicano, al


grado de que se califica a los gremios como estructuras atrofiadas, disfuncionales a la
eficiencia y a la productividad; incapaces de impulsar una nueva visión y de hacerla llegar
a la sociedad, de ahí que esté en juego su transformación y sobrevivencia, por eso es
necesario que se reformen determinados Artículos de la ley laboral para determinar las
funciones de los dirigentes sindicales.

El esquema del sindicalismo oficial, dentro del cual el poder sindical era determinado por
el Presidente en turno; al control autoritario sobre las organizaciones, que negaba en los
hechos su autonomía; a las prácticas caciquiles y corruptas, y a las movilizaciones que
esto desató en los años cincuenta y sesenta por parte de maestros, ferrocarrileros y
electricistas.

El sindicalismo oficial se entiende aquí no sólo una forma de representación, sino también
una forma de denominación, en la cual la función sindical en las relaciones laborales se
encuentra subordinada a las políticas del estado. Pero en la que se presenta también una
corresponsabilidad del sindicato en la marcha de aquél; un monopolio del sindicato en la
representación legal, que el estado garantiza; una exclusión de dirigencias alternativas a
las oficiales; y el privilegio de las posibilidades de influir en las políticas estatales por
sobre el resto de las funciones sindicales.

El movimiento sindical mexicano lucha por ser un factor fundamental en lo económico,


social y político de nuestro país y ser una expresión representativa de nuestra sociedad,
de su pluralidad y diversidad, de sus anhelos de justicia, de equidad, de bienestar y
progreso. El sindicalismo en nuestro país ha participado en un largo proceso de luchas
por la justicia social y una constante búsqueda por concretar su unidad, con formas
superiores de organizaciones a través de su renovación y democratización.

Las condiciones existentes en México plantean a los trabajadores la necesidad de


impulsar un proceso de renovación del sindicalismo mexicano. Es preciso generar
opciones que favorezcan la voluntad de cambio para transitar hacia una mejor calidad de

358
La Jornada Laboral 30 de mayo 1996.

430
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

vida, donde se reconozca la diversidad, se aseguren la autonomía e independencia de las


organizaciones sindicales, revalorando su participación ante los grandes problemas
nacionales.

Las transformaciones sociales y productivas plantean al movimiento obrero una serie de


retos: respetar las distintas expresiones políticas e ideológicas que coexisten; saber hacer
la lectura correcta de su tiempo y de la correlación de fuerzas; replantear la estructura, el
discurso, la práctica y la cultura sindicales que posibiliten nuevas relaciones de solidaridad
nacionales e internacionales, a través del impulso de su democratización y
reconocimiento de sus principios fundamentales: la pluralidad, la democracia, la
autonomía, el respeto y la tolerancia a la libertad de organizaciones, de expresión y de
manifestación, aunque en la actualidad se habla de democracia sindical pero esto sigue
siendo manejado por los líderes sindicales a como mejor les convenga a sus intereses.

El fortalecimiento y consolidación de un proyecto sindical, esencialmente democrático,


autónomo, participativo y propositivo, que permita recuperar la iniciativa histórica y la
fuerza social que le posibilite expresar y defender eficazmente los intereses de los
trabajadores, no puede ser tarea de un segmento del movimiento sindical, sino exige estar
sumando permanentemente a esta tarea a la mayoría de las organizaciones sindicales
representativas de nuestro país.

En el mes de noviembre de 1997 se creó la nueva central obrera con el indicio de un


sindicalismo verdadero y moderno, la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), se inicia
con el primer foro el Sindicalismo frente a la Crisis y ante la Nación, cuyos convocantes
son los precursores, con el Primer encuentro Nacional Sindical, cristalizándose con el
acuerdo de llevar a cabo la celebración de la Asamblea Nacional de los Trabajadores,
donde se libró una lucha multitudinaria, vigorosa y valiente pero dispersa, contra las
estructuras laborales del sindicalismo oficial el charrismo sindical, lucha a la que se le
denominó insurgencia obrera.

La Unión Nacional de Trabajadores no sería en lo inmediato una nueva central obrera,


porque en las actuales condiciones se convertiría bien pronto en una versión más de las
centrales obreras existentes. El carácter de central opcional sólo lo adquiriría al final de un
proceso de organización democrática, de abajo a arriba y de la periferia al centro. Su
función principal, por consiguiente, consistiría en centralizar, coordinar y dirigir la
insurgencia obrera, que es una lucha por la democracia sindical, por la liquidación de las
corruptas estructuras actuales del sindicalismo y por la creación de nuevas estructuras.

431
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Este proceso de construcción fue difícil y quizá sobrepasaba los medios de un sindicato
que además tenía que resolver sobre la marcha los numerosos incidentes de un conflicto
propio que se planteaba simultáneamente en los dominios político, jurídico, social.

La UNT es el camino de encausar la inconformidad obrera, de aliviar la presión social


sobre un Sindicato obligado a actuar como partido político, y de asegurarse la continuidad
en la lucha democratizadora frente a unos adversarios reforzados con todo el poder del
aparato gubernamental.

Teniendo como finalidad la UNT, formar comisiones organizadoras de democracia sindical


en el interior de los Sindicatos charristas, y buscar la expulsión de los líderes falsos,
encabezar la defensa de los intereses obreros y buscar la unificación por rama industrial
de los contratos colectivos.

La constitución de la UNT, viene a ser un hecho de importancia singular para el


movimiento sindical mexicano, entrando a una etapa promisoria, si los sindicatos y
dirigentes participantes en este ambicioso proyecto son consecuentes con los propósitos
anunciados en sus documentos fundacionales; los líderes, sobre todo, necesitan
encontrar las formas de unidad basada en la comunidad de propósitos, por encima de sus
ambiciones particulares, para que el nuevo organismo confederado se implante y
contribuya a la reconstrucción de un sindicalismo auténtico.

Durante medio siglo, los sindicatos, con notables excepciones, vivieron sometidos al
control gubernamental. Un conjunto de factores, pero de manera destacada la traición de
los dirigentes, el ensamblaje de éstos con la burocracia política oficial y la liquidación de la
democracia en su interior, anularon a los Sindicatos como organismos de representación
y defensa de los intereses económicos y sociales de los trabajadores. De organizaciones
combativas, con grandes luchas, los Sindicatos devinieron, desde fines de los cuarenta,
en simples instrumentos de control de los trabajadores, en pilares de poder político y
leales servidores de los gobiernos lo mismo del de Miguel Alemán que el de Díaz Ordaz o
Salinas de Gortari.

En México se han operado cambios que no siempre se han dado exclusivamente en et


derecho del trabajo, sino que muchas veces se han presentado en el contexto en el cual
el derecho del trabajo pretende ser aplicado, de tal suerte que las normas laborales, sin
sufrir alteración en sus textos. Aunque si en sus interpretaciones, han sido testigos de la
evolución que las condiciones de su entorno le han impuesto, quedando rezagadas de
manera inevitable.

432
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La UNT crea un programa que reivindica postulados de un sindicalismo auténtico. Por


ejemplo la democracia, autonomía e independencia sindicales; la libre afiliación política de
los trabajadores y la no pertenencia colectiva de los sindicatos a ningún partido; la
autonomía de los sindicatos respecto al gobierno, los empresarios, las iglesias y los
partidos; el derecho de la contratación colectiva y el rechazo de los contratos de
protección; reivindicación de derechos de libre asociación, salario remunerador, de
huelga, de seguridad social. Asimismo se manifiesta en favor de un régimen político
democrático y reclaman una política económica distinta que tome en cuenta las
necesidades y derechos de los trabajadores; reviven la vieja y justa idea de la alianza de
los obreros con los campesinos y los organismos de la sociedad civil.

El nacimiento de la UNT tiene, por ello, enorme importancia en la vida política nacional en
estos tiempos de transición democrática. Si no se queda a medio camino, con su actividad
y el apoyo a sus demandas será una contribución valiosa en este proceso de cambio y de
lucha en favor de un nuevo régimen político democrático y de justicia social, pues
alcanzar esta meta es imposible sin el concurso de una fuerza decisiva como son la
organización de los trabajadores, sin ponerle fin a los controles corporativos de las
organizaciones de masas.

La UNT sobrevivirá si es una interlocutora seria e inteligente en una época de cambios


veloces en la tecnología y en las relaciones de trabajo, si además de la representación y
gestión de los intereses tradicionales de los trabajadores, sabe identificar y defender sus
nuevos intereses en las circunstancias nuevas, si lucha abiertamente contra toda forma
de falsificación sindical como, los contratos de protección, si se compromete a fondo con
una transición democrática que es enteramente inconcebible sin la participación de los
trabajadores.

5.4.2 Las funciones de los dirigentes en el sindicalismo.

Los gobiernos de los nueve sexenios últimos no hubieran podido imponer fácilmente sus
políticas económicas sin la complicidad de las cúpulas sindicales. Al cumplirse diez años
de ininterrumpidas concertaciones económicas en el marco del corporativismo mexicano,
este procedimiento de legitimación de las políticas públicas parece haber llegado a su fin.
Varias son las razones de su agotamiento. Tal vez la más importante sea la presencia de
una Cámara de Diputados sin la histórica hegemonía del partido en el gobierno, que
aspira a cumplir su papel como contrapeso del Poder Ejecutivo interviniendo en la
definición de la política económica y exigiendo el avance de la postergada reforma del

433
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Estado.

Se puede explicar la desastrosa situación que han vivido los trabajadores, el descenso de
sus niveles de vida, la liquidación de numerosas prestaciones contractuales ganadas en el
pasado, y el golpe más reciente: la privatización de sus fondos de retiro, sin las
claudicaciones, los engaños constantes de Fidel Velázquez desde que estuvo al frente de
la C.T.M., hasta el día de su muerte, Víctor Flores líder del Sindicato Ferrocarrilero, así
mismo cuando fue dirigente del Congreso del Trabajo, Juárez Blancas o Rodríguez
Alcaine, actual dirigente de la C.T.M.

Hoy la progresiva concientización de la clase trabajadora y del resto de la sociedad ha


desgastado al sistema. El voto cautivo, como lo experimentamos en las pasadas
elecciones, está en afortunada extinción y sus patrocinadores, los líderes corporativos de
los sindicatos charros o amarillos, tantas veces premiados con puestos públicos, cada día
lo son menos.

El vetusto sindicalismo al amparo del gobierno, siempre confinado en el traspatio del


Estado, se sigue nutriendo con el negocio negro, pero cada vez es menos útil al sistema y
ya está siendo sustituido con simulaciones sindicales blancas -no participan en política -,
entre ellos los sindicatos Justo Sierra, al mando de una nueva versión de abogado -
central, Ramón Gámez Martínez, su dueño o prestanombres, y al parecer agrupados en la
llamada Federación Sindical

Coordinadora Nacional de Trabajadores, que dispone de múltiples registros en diversas


ramas, obtenidos merced a oscuras influencias que le han permitido desarrollarse en las
industrias aeronáutica, químico-farmacéutica y automotriz, y salas cinematográficas, al
punto de que colegas de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos estiman que
cuentan con aproximadamente mil 400 contratos de este tipo.

Los Artículos 375 y 376 nos hablan de la representación y defensa de los derechos
individuales de los trabajadores, pero en la realidad muchos de los sindicatos que eligen a
sus secretarios generales y los comités de los mismos no representan ni defiende los
derechos de sus agremiados es por ello que se debería de implementar dentro de estos
Artículos o crear uno o más Artículos donde se establezca que si no cumplen con las
funciones que fueron elegidos sean destituidos o cambiados por otros que si lleven a cabo
la defensa y representación de sus agremiados.

Muchos de los dirigentes firman contratos colectivos de trabajo, aumentos salariales, de

434
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

emergencia o contractuales, pactos o cualquier tipo de documentos que no benefician a la


clase trabajadora, solamente consiguen mejoras para su persona y no les interesan si
benefician a la clase que los llevo al poder, ya que en realidad no se apegan a lo
establecido en el Artículo 377, debería adicionarse que es obligación que cumplan con
determinados requisitos y el consenso de los trabajadores para que se pueda firmar
cualquier tipo de documentos, sin contravenir los derechos de la clase trabajadora.

El grave deterioro de los salarios de los maestros y la antidemocracia asfixiante en el


SNTE, aislaron y debilitaron al vanguardismo, con el apoyo masivo de la población, el
movimiento magisterial de 1989 puso punto final a ese dominio, y comenzó otro período:
el de la modernización, que ha encabezado Elba Esther Gordillo Morales y Humberto
Dávila Esquivel.

En el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, estando al frente de éste


Francisco Hernández Juárez desde hace más de veinte años, teniendo desafíos en contra
del gobierno al estallarles la huelga y declarándola ilícita por parte del mismo gobierno, e
incluso requisando con personal de confianza de dicha empresa, y los esquiroles,
personal del gobierno y de la Secretaría de Telecomunicaciones y Transportes, para
levantar la huelga estallada, con esto, teniendo altibajos dentro del sindicalismo para con
sus trabajadores, así mismo coqueteando por algún tiempo con la C.T.M, hasta el
rompimiento con el mismo, para después empezar hacer reuniones con diferentes líderes
sindicales para crear en un principio el Foro del Sindicalismo ante la Nación, fortaleciendo
con todo esto la creación de la nueva central obrera denominándola U.N.T., estando al
frente como presidente de este organismo con otros líderes sindicales.

Teniendo los trabajadores telefonistas que ceder en muchas de sus prestaciones al


revisar su contrato colectivo, negociar plazas y supuestamente hasta ser socios con una
minoría en sus acciones de teléfonos los trabajadores.

En Sindicato Único de Trabajadores de Ruta 100 SUTAUR-100, Arturo Fernández Arras


fundador de dicho organismo sindical, siendo un sindicato combativo declarando la huelga
en 1989 y lo mismo que con los telefonistas se les declaro nula su huelga, hasta la
quiebra de la empresa en el año de 1995 declarada por insolvencia, por el gobierno del
Distrito Federal hasta la encarcelación de su dirigente Ricardo Barco López y otros
funcionarios de dicho sindicato por supuestos malos manejos en tos fondos de las cuotas
de los trabajadores y personal jubilado de dicha empresa, nombrando como nuevo
Secretario General del sindicato en quiebra a Leonel Villafuerte Zavala quien estuvo al

435
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

frente de las negociaciones firmando bajo presiones para poder sacar de la cárcel a sus
anteriores dirigentes no teniendo otra salida ante la inminente ola privatizadora del
transporte.

El Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social, ha tenido desde sus inicios
grandes problemas desde su creación, donde se eligen a los diferentes Secretarios
Generales por periodos de cuatro años, no existiendo la reelección para que no se vicie el
mismo sindicato obteniendo logros importantes pero debido a los topes salariales
impuestos por el gobierno, no se ha podido ir más allá, hasta la salida del Congreso del
Trabajo a la formación y creación del Foro del Sindicalismo de la Nación, Antonio Rosado
García, siendo el primer Presidente del mismo y luego siendo uno de los Presidentes de
la nueva central obrera conjuntamente con Hernández Juárez y Agustín Rodríguez
Secretario General de los Trabajadores Universitarios (STUNAM).

Agustín Rodríguez actual Secretario General del STUNAM y presidente de la U.N.T., este
sindicato ha tenido también grandes problemas para revisar su contrato colectivo cada
año, así como las revisiones salariales, estando en huelga la Universidad en diferentes
ocasiones cuando se venía el cambio presidencial, accediendo posteriormente su
dirigente en esa época a un aumento muy por debajo de lo que habían solicitado
posteriormente, apareciendo este dirigente como uno de los asesores del Presidente de la
República, siempre siendo también un sindicato de línea combativa, no estando de
acuerdo ni agrupado a alguna central obrera.

Se puede seguir hablando de diferentes líderes sindícales en nuestro país, que son de
línea del sindical oficial, independiente y blancos, ya que se encuentra una diferente gama
de sindicatos a nivel nacional, pero que en realidad no cumplen con la función y cargo
para el que prometieron desempeñar, ya que solo buscan sus intereses personales y no
el bienestar económico de los trabajadores o de sus agremiados.

Con todo esto vuelve a cobrar importancia el análisis de los problemas y oportunidades
actuales para adoptar una nueva legislación laboral que, en el marco de la reforma del
Estado, dé respuesta a esos cuestionamientos y ofrezca canales institucionales
adecuados para atender los contradictorios intereses del trabajo y del capital.

Los trabajadores mexicanos han pagado muy caro el haber tenido que afrontar sucesivas
crisis económicas desde 1982 hasta 1997 y la integración regional sin instituciones ni
organizaciones capaces de oponer los correspondientes contrapesos al creciente poder
del capital para imponer sus condiciones y la sumisión de los diferentes líderes sindicales

436
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

ante las propuestas gubernamentales.

5.5 La autonomía de acción sindical.

5.5.1 Medios estatales para lograr el control.

En México, el movimiento obrero se ve afectado por las formas existentes de control


estatal entre las que se encuentran:

a) Los requisitos del registro,

b) El depósito de los estatutos,

c) El reconocimiento de nuevas directivas gremiales y

d) La calificación de las huelgas.

Tema controvertido dentro de los poderes de que goza el Estado, es el del Estado mismo
y la relación que guarda con los sindicatos.

Dichas formas, se sancionan por los procedimientos administrativos y la jurisdicción


correspondiente de que goza el Gobierno para someter a los sindicatos a su control.

Lo anterior, en virtud de que la existencia jurídica del sindicato está condicionada a su


registro, sin éste, la asociación sindical carece de personalidad jurídica para hacer valer
sus derechos frente al Estado, el maestro Juan Climent en su obra comenta respecto del
numeral 374 de la Ley Federal del Trabajo, que:

"...tendrán capacidad legal, los sindicatos para ejercitar las acciones encaminada a su
objeto para el cual fueron creados".359

La relación entre el Estado y los sindicatos constituyen hoy uno de los temas más
controvertidos a propósito de los poderes del Estado y, en definitiva, del ejercicio de la
soberanía. Si bien es cierto que los sindicatos actúan con ciertas facultades que aprueba
el Estado, a partir de la declaración de la libertad sindical, que le da autonomía, la cual no
debe transgredir, resulta difícil por no decir imposible, de acuerdo al concepto mismo de
Estado que se trata de dos poderes paralelos. Afirmar la independencia de los sindicatos
respecto del estado sería tanto como afirmar que la soberanía puede ser compartida.

Si bien es cierto, los sindicatos actúan "libremente” a partir de la declaración de la libertad


sindical, y con su actuar no deben transgredir el ejercicio de la soberanía del Estado, lo

359
CLIMENT BELTRAN. Juan B. Ley Federal del Trabajo. Comentarios y Jurisprudencia, octava edición.
Esfinge. México. 1994. pág. 267.

437
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

que resulta difícil.

Al respecto, Bodemheimer funda su tesis pluralista en las siguientes premisas:

"Los pluralistas afirman que la autoridad del Estado como creador del Derecho no es
exclusiva, hay dentro del Estado, grupos y asociaciones cuyo poder normativo está
subordinado con et del Estado y es de igual rango que el de éste"360

Dicho autor, sostiene que tales grupos (la iglesia, una organización sindical, un gremio, un
sindicato), deben ser autónomos y estar en paridad con el Estado; su existencia y
organización deben ser independientes y ajenas a la voluntad del Estado.

La tesis anterior quizá se contrapone a la idea de soberanía que Hermann Heller precisa
en los siguientes términos:

"La soberanía es la cualidad de la independencia absoluta de una unidad de voluntad


frente a cualquier otra voluntad decisoria universal.361

Desde esta óptica, la tesis de Bodenheimer que señala que habitualmente los sindicatos
están dotados de poderes legislativos que les permiten determinar su régimen interior y
de poderes ejecutivos otorgados a sus dirigentes, por otro lado, tales poderes deben
darse dentro del marco constitucional, implicando con ello, una concesión unilateral del
gobierno, derivada de un acto incondicional. El Estado siempre establece los límites de
actuación de los sindicatos que a diferencia de éste, no pueden determinar la acción de
éste.

Por otra parte, el Estado como representante de la clase social en el poder, puede
establecer vínculos de cooperación con los sindicatos e incluso, convertirlos en parte
esencial de su estructura.

Sin embargo, pueden existir variantes en la relación de ambos, en la que los sindicatos
pueden determinar su existencia por decisión unilateral, aunque difícilmente se les
autoriza a actuar sin el reconocimiento estatal, lo que resulta por razones de carácter
político-económico que originan dicha conducta estatal.

Podemos considerar una acción revolucionaria fundada en un deseo de los sindicatos de


cambiar ése orden de cosas, lo que provocaría una ruptura del orden jurídico.

Sajo esa hipótesis, lo más probable es que nuevamente se establecerían otros

360
DE BUEN L. Néstor, Organización y funcionamiento de los Sindicatos, óp. cit. Pág. 65.
361
DE LA CUEVA. Mario, La Soberanía. UNAM, México, 1965, pág. 197.

438
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

condicionamientos legales que seguirían ubicando a los sindicatos en segundo nivel


frente al Estado y jamás alcanzarían un poder soberano en la vida pública y social pues el
Estado dicta la última palabra.

En conclusión, el pacto existente entre el Estado y el sindicalismo mantiene asegurado al


primero, un control sobre las demandas de la dase popular, lo que constituye el apoyo
obrero en materia electoral al partido del Estado, el que a partir del Gobierno del General
Lázaro Cárdenas, han logrado imponer las medidas de política económicas necesarias
para mantener al Partido Revolucionario Institucional por más de cincuenta artos.

La burocracia sindical cuyos beneficios políticos le son retribuidos en posiciones políticas


otorgadas por el partido en el poder a su sector obrero, se determinan en relación a la
capacidad de control que cada sindicato ejerza sobre sus agremiados.

Este, a su vez, persigue la perpetuación de los líderes sindicales que favorezcan los
intereses del Estado, contando con el apoyo de la Secretaría del Trabajo y de la junta de
Conciliación y Arbitraje los que, en ejercicio de sus atribuciones aplican sanciones a los
disidentes por medio de la cláusula de exclusión.

De tal forma que existe una interdependencia entre la élite en el poder y la Dirección
sindical y, a pesar de lo anterior, ésta última tiene una autonomía relativa, toda vez que su
poder no depende totalmente de su relación con el Gobierno. Existiendo una dependencia
mutua entre los dirigentes de las grandes centrales y los líderes de los sindicatos; en la
medida en que éstos últimos ayudan a mantenerse en el poder y conservan un control
real sobre su base sindical.

5.5.2 Libertad oficial del sindicato.

La libertad sindical admite dos acepciones:

1.-Una genética y política, que expresa el medio con el cual los trabajadores esperan
obtener la igualdad que en el hecho carecen con los patrones y. conseguir la eventual
supremacía y hasta la existencia absoluta de la clase trabajadora en la sociedad del
futuro.

2- Profesional y jurídica, que equivalen a un conjunto de derechos profesionales de los


trabajadores y sus asociaciones, frente al Estado y a los empleadores.

Desde el punto de vista jurídico y en su contenido, la libertad sindical no comporta, en


ningún modo la supresión del derecho individual.

439
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Una de las aplicaciones de ese principio lo constituye el doble aspecto que la libertad de
asociación ofrece; ella puede ejercerse positiva o negativamente.

La primera se refiere a la facultad del individuo, dueño de) derecho de unir su voluntad a
la de otros sujetos para el logro de un fin común. Negativamente, en cuanto a que tiene el
derecho de rehusarse a celebrar ése acuerdo de voluntades siendo libre de asociarse o
no.

En ese mismo sentido, Gallan Folch señala: "Que el derecho del trabajador podría
explicarse diciendo con Ortega y Gasset, que los derechos del hombre son franquicias y
nada más, o sea abstenciones del poder público en un determinado campo".362

En cambio, la que llamamos libertad sindical presupone la voluntad de los asociados de


establecer entre sí y de extender a todo un sector profesional y de clase, una determinada
forma de actuación conjunta en defensa del interés y no de cualquiera de sus afiliados,
sino colectivo, por lo que et Estado debe asegurar una autonomía funcional de los núcleos
profesionales que espontáneamente surjan dentro de él.

Desde el punto de vista actual, la libertad sindical dice Riva Sanseverino, debe permitir a
los trabajadores y a los dadores de trabajo unirse con el poder de dar una disciplina de
categoría a la retribución y a las mejoras de las condiciones de trabajo.

En defensa de la libertad sindical dentro de los países capitalistas que basan su gobierno
en Constituciones Políticas y Políticas Sociales, los Sindicatos y el Estado mismo, tienen
el deber de respetar la libertad sindical.

La Organización Internacional del Trabajo, El Comité de Defensa de la Libertad Sindical,


La Comisión de Derechos Humanos, de la Organización de las Naciones Unidas, son
organismos que se encuentran impedidos para intervenir eficazmente en los países
miembros, lo anterior en base al respeto de la Soberanía de cada Nación, no obstante, las
quejas que se presentan ante el Comité de Defensa de la Libertad Sindical, obligan a los
países miembros a dar respuestas a tales quejas, y aunque el Tribunal de Defensa
Sindical no impone sanciones a los países miembros, si puede exhibirlas y declarar que
Naciones atenían contra la libertad de los sindicatos y hacer las denuncias respectivas en
las Conferencias Internacionales de Trabajo a efecto de formular convenios y
recomendaciones de la Organización para que se respete y se cumpla el principio de la
libertad sindical.

362
NAPOLI, Rodolfo, A. Manual de Derecho Sindical Abeledo-Perrot Buenos Aires, 1962, pág. 65.

440
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.5.3 El espacio dentro de la libertad sindical.

En lo que concierne a este enfoque encontramos básicamente dos perspectivas: La


histórica y la que alude a la función política del sindicalismo. La primera acentúa la
génesis y el desarrollo del sindicalismo mexicano, impulsado por el Estado pero con una
fuerte relación de dependencia con respecto a él. La segunda perspectiva describe y
analiza la función del sindicalismo en el sistema institucional y se avoca al estudio de los
mecanismos de control por parte del Estado.

El Estado incorpora a las organizaciones sociales a una estructura política ligada a él,
situación que determina las distintas formas de analizar el sindicalismo en México. Es por
eso, que la mayoría de los estudios relativos al sindicalismo en genera) acentúan la
relación de I03 sindicatos con el Estado y enfatizan el significado político de este hecho.

A partir de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, las


Constituciones acogieron la libertad como un elemento protagónico del derecho esencial
en la afirmación de las garantías individuales.

Así, la libertad se convirtió en un medio en el cual la audacia, la inteligencia y la técnica


generaron en un principio, nuevas relaciones económicas y después la Revolución
Francesa de 1789, al poder político.

Dentro de este ámbito surge el concepto de la libertad sindical que tiene su origen y punto
de partida la integración de los organismos de lucha de sus contrarios.

El Artículo 123 en su Fracción XVI Constitucional dispone: "Tanto los obreros como los
empresarios tendrán el derecho de coaligarse en defensa de sus respectivos intereses,
formando sindicatos y asociaciones profesionales. Pueden libremente redactar sus
estatutos y reglamentos, formular sus programas de acción, elegir a sus representantes,
organizar su administración y actividades, y comparecer ante toda autoridad en defensa
de sus derechos y de sus miembros”.

La libertad sindical es de imposible ejercicio individual, es substancialmente un derecho


de la clase trabajadora que se ejerce colectivamente, sin perjuicio de las prerrogativas
individuales por la mayor jerarquía del gremio.

En el ámbito de la libertad sindical, la relación personal con el grupo permite al hombre


intervenir en la realización del negocio jurídico colectivo o en la formulación de la solicitud
de ingreso. En México, la Ley Federal del Trabajo indica en su Artículo 358: "... a nadie se
puede obligar a formar parte de un sindicato o a no formar parte de él".

441
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Al estudiar la permanencia de los Dirigentes Sindicales en sus cargos et lema de la "No


Reelección" que sostuvo Francisco I. Madero, principio esencial en la vida de los
sindicatos que, de aplicarse, conllevará a la renovación y liberación del movimiento
obrero, transformando el sistema político dentro del cual vivimos.

Lo que significará la pérdida del control que ejerce el Estado sobre las Centrales Obreras,
y por ende, el poder Ejecutivo no propondría al Congreso una reforma de tal magnitud.
Por lo que únicamente, en los estatutos se incluye una cláusula que establece "el período
de la duración de la directiva.

Otra de las limitaciones de este tipo de acción reside en su ineptitud para definir lo que
está en juego, más allá de la recuperación del sindicato, existe la falta de capacidad para
autolimitar sus aspiraciones dentro de su transición de lo sindical a lo político para poder
asimilar lo ganado.

En una situación como la nuestra, en donde la reivindicación económica puede dar lugar a
una acción de crisis organizacional, porque de suceder amenazaría con provocar una
crisis política e implicarla un enfrentamiento directo con el Estado, en desventaja para el
movimiento y sin que el actor social se percate de ello.

5.5.4 Autonomía sindical.

Debemos entender por autonomía al Estado y condición de un pueblo que goza de entera
independencia política, es decir, la condición de que gozan tos entes jurídicos para
autogobernarse.

De tal forma que el término autonomía dentro de los sindicatos es la facultad de que goza
el sindicato la cual le permite actuar dentro de un margen establecido por el Estado, en
donde el sindicato podrá constituirse sin autorización previa y regularse internamente por
medio de sus estatutos.

En el lenguaje jurídico la palabra autonomía implica la autoterminación y la facultad de


dictar para sí, normas que regulen su conducta.

El jurista Néstor de Buen, señala que no debemos confundir este término con el de la
libertad, que es posibilidad de elegir conducta.363 Por lo que la autonomía atiende al
régimen jurídico mientras que la libertad al comportamiento, siendo autonomía o valor
relativo.

363
DE BUEN L. Néstor, Derecho del Trabajo. Tomo II, óp. cit. Pág. 625.

442
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La autonomía absoluta o plena, es más ficta que real, ya que se opondría con la
sociabilidad, es más frecuente la autonomía relativa, lo cual nace como resultado de una
cierta delegación de funciones y se restringe por límites personales, territoriales y de
materia.

La autonomía presupone la existencia del sindicato como un organismo social y como


consecuencia de un ente jurídico, que opera en un medio cuya determinación compete
bien al estado que de alguna forma mantiene el monopolio de la concesión de la
personalidad jurídica o bien al patrón, en cuanto que al sindicato limita su libertad.

La libertad sindical constituye el reconocimiento a la clase trabajadora a un fin asociativo,


resultando ser una cualidad que posee el sindicato en relación a otros entes jurídicos.

Y podemos señalar que la autonomía sindical se encuentra signada en la ley en términos


precisos.

El Artículo 359 de la Ley Federal del Trabajo establece los derechos de los sindicatos y su
autonomía sindical, no obstante lo anterior, dicha autonomía no es absoluta porque la
misma Ley señala expresa y directamente ciertos límites.

La autonomía jurídica, se encuentra plasmada en la Fracción XVI del apartado "A" del
Artículo 123 Constitucional, al señalar la posibilidad y la libertad de que gozan tanto los
obreros como los empresarios de asociarse en defensa de sus intereses.

En conclusión, la autonomía no es independencia absoluta de los órganos de gobierno


sindical, quiere decir facultad de acción pero dentro de las normas correspondientes a su
régimen interno. Es decir, el sindicato goza de autonomía interna, garantía que es elevada
al régimen constitucional.

La autonomía frente al estado.

Los Sindicatos, gozan de autonomía para organizarse y dirigirse en cuanto hace a sus
normas y órganos propios para autogobernase respetando los lineamientos
constitucionales.

El Maestro Pablo González Casanova, afirma que junto a los poderes públicos puede
hablarse de otros factores reales de poder y menciona que en nuestro país estarían
representados por los caudillos caciques, regionales y locales,

a) el ejército,

b) el clero,

443
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

c) los latifundistas y empresarios nacionales y extranjeros.

Nosotros creemos que podemos agregar a esa clasificación el del sector obrero que hace
referencia a la clasificación en sectores del Partido Revolucionario Institucional y a los
dirigentes vinculados al estado a cambio de prerrogativas políticas y personales como
Diputaciones, Senadurías. Gubernaturas e incluso, de apoyo en caso de conflicto con
otros grupos o entre los mismos trabajadores.

Este tipo de vínculos amén del régimen legal de los sindicatos: organización,
reconocimiento, vida y muerte nos permiten afirmar que entre el Estado y las
Organizaciones gremiales se encuentra subordinada a aspectos políticos y jurídicos entre
ellos:

A) Autonomía política

El diseño de la estructura del Estado Mexicano corresponde a la división de poderes


propia de la democracia atenuada por la hegemonía del Poder Ejecutivo y los poderes
reales son aquellos de tipo económico y político que lo enfrentan.

En un acto de dignidad, el General Lázaro Cárdenas restituyó al Presidente de la


República el poder que detentaba Plutarco Elías Calles, para conseguirlo, llevó consigo a
los gobernadores de los Estados, a los Jefes de las zonas militares, Diputados y
Senadores del H: Congreso de la Unión y a los caudillos locales, sin obtener el control
total, siendo esto gracias a su impulso nació la Confederación de Trabajadores de México.
Entre el 20 y 29 de febrero de 1936, que desplazó a la Confederación Regional Obrera
Mexicana, principal fuerza sindical del Poder político de Plutarco Elías Calles.

Hoy, el Partido Revolucionario Institucional, heredero dictado del Partido Nacional


Revolucionario creado por Calles, se constituye fundamentalmente como un partido de
sectores, formado con obreros, campesinos y el sector popular que agrupa a
profesionales, comerciantes, artesanos, industriales y banqueros. Y desde hace 54 años
es el único conducto político para acceder al poder y es gracias a la estrecha vinculación
de los Organismos Sindicales y al Estado, desde este punto de vista es difícil aceptar una
supuesta autonomía, pues se encuentra subordinada a las consignas del Partido.

A pesar de lo anterior, también existen corrientes de independencia sindical que enfrentan


el poder con gallardía y lo son el sindicalismo marxista y ortodoxo en ramas socialista,
hasta un sindicalismo renovador (de raíces cristianas) como el Frente Auténtico del
Trabajo y otros grupos que invocan marxismos sin afiliación partidaria como el de la

444
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Unidad Obrera Independiente, tos que mantienen una línea autónoma frente al Estado,
constituyendo fuerzas importantes pero insuficientes, ya que su autonomía se frustra con
obstáculos jurídicos, a veces reforzados por las represivas fuerzas de segundad.

Finalmente, la existencia de una autonomía jurídica con las limitaciones que la Ley
impone a la acción sindical, aunado a la existencia de la corrupción, la iglesia, el gobierno
y los partidos políticos repercuten seriamente para el fortalecimiento del sindicalismo.

La autonomía sindical frente al patrón.

La autonomía respecto de los empresarios constituye una necesidad plena si se quiere un


verdadero funcionamiento de las organizaciones de clase. En la Italia fascista, en la
Alemania nazi y posteriormente en España, los trabajadores se agruparon bajo un mismo
organismo sindical, a pesar de que ningún miembro democrático aceptaría la fusión de
intereses entre quienes son por propia naturaleza contrarios.

En México, desde el Artículo 123 Constitucional, se marca con claridad el perfil de la


autonomía sindical y se sanciona con energía la conducta del patrón que despida a un
trabajador por haber ingresado a una asociación o sindicato o por tomar parte en una
huelga lícita. Por su parte, la Ley Federal del Trabajo en su Artículo 133, señala en su
Fracción V: "Intervenir en cualquier forma en el régimen interno o del sindicato". La
violación a esta prohibición prevé una sanción pecuniaria consistente en una multa por et
equivalente a una suma que puede oscilar entre tres y trescientas quince veces el salario
mínimo general.

En otro sentido puede decirse, que está prohibido a los trabajadores de confianza el
ingresar en los sindicatos de los trabajadores.

Sin embargo, la realidad social discrepa esencialmente de los planteamientos legales,


entre nosotros existe un sistema de dependencia real de los sindicatos respecto de los
patrones, que se funda principalmente en la corrupción de muchos de los dirigentes,
compartida evidentemente por quienes, del otro lado de la relación compran su lealtad. Es
el fenómeno conocido como el "sindicalismo blanco o amarillo*, cuya finalidad es que el
líder controle a las masas en beneficio de los intereses de la empresa.

Desde hace algunos años y hoy, más evidentemente, se está produciendo una importante
reacción en contra de ese auténtico fraude y los trabajadores empiezan a tener conciencia
de clase, pero además, existe una constante politización del proletariado y aún de quienes
siendo trabajadores podrían considerarse, en términos económicos, en otra clasificación.

445
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Ello ha sido notable en el mundo universitario, en el que no solamente los trabajadores se


servicios administrativos sino, además los académicos, con condiciones económicas más
desahogadas participan activamente en la vida de los sindicatos en un impulso definitivo
hacia la democracia y la verdadera representatividad. Y en cierta medida, los sindicatos
de signo contrario empiezan a resentir tos efectos a intentan, poco a poco recuperar su
diluido prestigio.

La pérdida de la autonomía sindical.

La primera Ley Federal del Trabajo apareció en forma tardía y como consecuencia
también es forma tardía los sindicatos y los gobiernos, se dieron cuenta que los
problemas laborales rebasan en múltiples casos las fronteras de los Estados miembros de
la Federación, posteriormente la Ley de 1970, siguió la misma pauta que la Ley anterior,
con ligeras mejoras que podrían ser clasificadas dentro de la idea del desarrollo social.

En el sindicalismo evolucionista se evita el ejercicio del derecho de huelga y se emplea la


conciliación y el arbitraje para obtener las máximas ventajas dentro del orden jurídico.

Si el derecho de asociación significa que tanto obreros como patrones puedan crear sus
propias organizaciones, darles vida, regirlas, reglamentar su eficacia, proveer su
sostenimiento, dentro del orden público; con la pérdida de su autonomía los fines de los
sindicatos están predeterminados, sus autoridades vigiladas y su reglamentación
impuesta por personas extrañas a los mismos.

El Doctor Lastra Lastra, hace referencia en su trabajo a los sindicatos de movimiento


obrero y a las modalidades de éstos en Federaciones y Confederaciones, sin dejar de
advertir que el sistema sindical en nuestro país presenta una estructura jerárquica
piramidal, que ha permitido al Gobierno, mantener un estrecho convenio de beneficios
mutuos entre el pueblo y trabajadores por una parte y política electoral por otra.

Por esta razón, los líderes obreros tienen mucho interés en desempeñar puestos de
elección popular, olvidándose de su función natural, en detrimento del nivel de vida de los
trabajadores.

La pérdida de la autonomía sindical también se refleja en la pérdida de prestaciones, en el


seguro social, en el contrato colectivo de trabajo que día a día se signan con mutilaciones
y cuya flexibilidad tiende a la contratación por honorarios y sin prestaciones.

Por lo anterior, el Sindicato no es un órgano de libre expresión del obrero, ni un


instrumento de legítima defensa de sus intereses económicos o sociales, sino el marco en

446
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

el cual están encuadradas las fuerzas trabajadoras para recibir las directrices del Estado,
en orden a una mayor producción y a una ideología común.

La llamada justicia social, con sus modalidades de empleo, salarios justos, existencia
digna y decorosa, al igual que el equilibrio entre los factores de la producción son aún
inalcanzables para la gran mayoría de la población.

5.5.5 Cooperación patrón - sindicato.

Hoy, el sindicalismo en nuestro país a pesar de ser un instrumento de clases, se


encuentra en cambio como consecuencia de la realidad social.

Las razones que impulsan al empresario en la reconversión de la empresa, es la fuerte


presión de sostener el elevado nivel de producción y calidad que le permita continuar
dentro del mercado nacional o internacional que le permitan mantener o aumentar sus
ganancias. Y entre las medidas que el sector empresarial está adoptando para llevarla a
cabo, se encuentran:

• Material didáctico de apoyo a cursos y talleres de capacitación de los trabajadores.

• Incorporación de tecnologías duras y blandas en el proceso de producción.

• Incremento de la productividad.

• Preparación sindical, esto es, promover la colaboración con los trabajadores para que
éstos, se preparen en materia de tecnología.

• Acceso a la información que tenga relación con la situación del obrero.

• Seguridad e higiene, ante la incorporación de innovaciones tecnológicas del proceso de


producción y los efectos que tienen en la salud de los trabajadores.

5.5.6 La fortaleza del sindicato.

Es importante remarcar que la motivación de los agremiados, debe responder a un


sentido de pertenencia de la organización, en donde no exista la apatía, el desdén o la
falta de participación e integración, de esta manera, al existir una mayor participación de
los agremiados en los ámbitos de la economía, la educación y fa política se logrará una
mayor participación en la lucha sindical para alcanzar sus fines. Lo anterior, dado que
puede suceder que las actividades, ideas, proyectos o programas de una organización
sindical no encuentre las condiciones adecuadas para realizarías, y por ello, deben
fortalecerse los factores de motivación que permitan su desarrollo y hagan crecer sus

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

actividades y su organización.

Desde el origen de las organizaciones obreras, a través de su legislación y


conceptualización, se ha buscado un sistema que permanentemente motive a los
trabajadores a afiliarse a un sindicato, si consideramos que un factor importante para el
fortalecimiento y la existencia del sindicato lo constituyen primordialmente sus agremiados
y en la medida que éstos vayan cada día en aumento, contribuirá al crecimiento y
fortalecimiento de la asociación.

Otro factor necesario para el fortalecimiento de los sindicatos es el de la afiliación,


elemento básico que fortalece las demandas y permite mayores reivindicaciones
económicas y sociales de la clase trabajadora y como ya lo mencionamos anteriormente,
a mayor número de afiliados, mayores posibilidades de que conjuntamente logren todos
los objetivos deseados.

Lo anterior es importante, si consideramos que el trabajador solo o asociado en pequeños


grupos, no tiene la posibilidad plena de ejercer y lograr todas sus demandas o reclamos, a
que tiene derecho, dejando de ser atendido por la parte patronal.

A principios del siglo, en nuestro país, el movimiento sindical se acrecentó debido a la


incidencia del desarrollo industrial en las distintas ramas de la productividad, lo que dio
origen al aumento de la fuerza de trabajo, es decir, de los obreros.

Dicho crecimiento emerge en defensa de sus derechos básicos: salarios, jomada laboral y
condiciones de trabajo. Esta fuerza les dio una proyección a futuro para el logro de sus
demandas, logrando además, una mayor participación política- económica debida a su
alta tasa de filiación.

En la actualidad, ante la severa crisis económica que vive el país, se hace más importante
más que nunca la afiliación sindical para lograr que esas reivindicaciones no se pierdan.

Aunado a la motivación y a la afiliación o sindicalización, un factor más que contribuye al


fortalecimiento del sindicalismo, es sin duda, el de la educación obrera; tanto en la
formación técnica y profesional de los trabajadores como en el quehacer productivo.
Asimismo, se relacionan con la visualización clara del proyecto que como ciase se tiene
en la transformación de la sociedad. Ello puede permitir una identidad mayor y
multiplicada con el resto de la clase trabajadora, una legitimidad del quehacer dentro de la
organización sindical.

El proceso de educación obrera de los trabajadores no solamente debe ser en el sentido

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

estricto de su formación obrerista, sino también en sus relaciones con la producción. Por
ello, se insiste en que los trabajadores conozcan las técnicas para una mayor
participación en la toma de decisiones en este campo, además de tener una preparación
adecuada que les permita aumentar la productividad, una más alta calificación y mayor
especialización en el trabajo.

La educación se logra en diferentes niveles y con diversos procedimientos, desde cursos


o seminarios hasta periodos más largos de enseñanza, ofreciéndose en algunos
sindicatos, como en el caso del de la Confederación de Trabajadores de México, el cual
cuenta con escuelas de nivel Técnico y Superior, logros promovidos por los dirigentes
sindicales.

La conjunción de los factores anteriores es importante crear distintos canales de


comunicación social, que permitan difundir al interior de la organización sindical y con el
resto de las organizaciones afines, que permitirán una mayor identificación entre la base y
sus representantes.

5.5.7 Mejor calidad de vida.

El fenómeno del desempleo, las políticas monetarias que han hecho polvo los salarios, el
desmedido crecimiento de la economía informal, las exigencias fiscales contribuyen a la
desorganización de los trabajadores.

Tanto en la lucha de la dase obrera frente al capital y al Estado, como dentro de la propia
organización sindical, la reivindicación de los derechos del proletariado alienta a los
sindicatos obreros hasta que se transforme el régimen capitalista, y a través de ésta, los
sindicatos luchan no sólo por los derechos de sus miembros, sino en general de todos los
trabajadores o campesinos, de manera que así, el sindicato en su administración cumple
con su función social como instrumento de lucha de la clase obrera.

Los sindicatos están en constante lucha, a fin de que no llegue a ningún momento estática
la organización obrera, sino que siempre sea dinámica, en el sentido de que los
proletarios en su movimiento y en el devenir histórico mejoren realmente las condiciones
de bienestar personal y colectivo de sus agremiados.

El sindicalismo tiene como objetivo principal proteger y superar las condiciones


económicas y sociales de todos sus agremiados y se extiende a la promoción de la
participación política, el desarrollo cultural y al fortalecimiento de las relaciones
internacionales obreras.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En materia da relaciones laborales, los conflictos colectivos encuentran apoyo político

Ahora que los problemas económicos se han agudizado en nuestro país, existe una
conciencia más clara entre los líderes sindicales de velar debidamente por los intereses
de sus agremiados y para ello, buscan otras formas de participación.

Dicha participación incluye varios puntos:

-Redefinición de las prácticas de negociación sindical.

-Reorganización del trabajo sindical.

-Necesidad de la búsqueda del máximo de democracia interna y la mejor eficacia externa.

-Búsqueda de estrategias y respuestas novedosas a los grandes retos del avance


tecnológico y científico.

-Evitar el desempleo a través de la reestructuración industrial, procurando la mejor calidad


de productos y servicios y la mejora de las condiciones de vida trabajo para el
sindicalizado.

-Búsqueda de la identidad personal de los trabajadores, mejor formación personal.

-Manejo de los recursos sindicales con claridad y eficiencia.

-Integración de las variadas formas de acción sindical en un proyecto conjunto en contra


de la desigualdad social.

-Replantear el movimiento sindical de acuerdo con la modernidad tecnológica.

-Un nuevo diálogo con el sector patronal para lograr mayor justicia social dentro del marco
de la nueva cultura laboral.

-Lograr una dimensión internacional en la acción sindical, como respuesta a la


concertación económica, lo que implica establecer instituciones sindicales sobre
nacionales.

Los sindicatos son aliados del aumento a la productividad, aunado a la modernidad


tecnológica y sus efectos; se canalizan en beneficio de los trabajadores y los empresarios,
vía incrementos en la productividad.

En el concepto de la productividad se encuentra la idea de que las empresas deben


cumplir con sus responsabilidades sociales y los trabajadores en reciprocidad se
ocuparán de su éxito, generando empresas competitivas a nivel internacional.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Se busca establecer comités de apoyo entre los trabajadores y mayor comunicación entre
fábricas para buscar soluciones al problema del desempleo, evitar el despilfarro de
energía, materiales y de las capacidades del hombre, como el ingenio y la creatividad; con
el fin de desarrollar mecanismos que le permitan al trabajador realizar su función en un
entorno propicio a su seguridad y realización personal disminuyendo la vida improductiva.

La Confederación de Trabajadores de México, siempre ha estado a la vanguardia de las


demás organizaciones sindicales del país, promoviendo e innovando modalidades
educativas formales e informales, acercando a los trabajadores y sus familias a mejores
opciones educativas.

En el pasado se crearon escuelas de artes y oficios, a través de los cuales capacitamos a


una fuerza laboral demandada por los primeros grandes esfuerzos industrializadores.
Cuando el país pudo avanzar en la configuración de un sistema de educación tecnológica,
nuestro mayor esfuerzo se dirigió a consolidar los programas de lo que hoy se conoce
como educación sindical básica, a saber la historia del movimiento obrero, la negociación
colectiva y la integración de las comisiones mixtas, principalmente.

Esta educación fue la que forjó una cultura del acuerdo, de la búsqueda de consensos
entre los factores de la producción. Gracias a ello, hoy es posible concretar convenios,
pactos y acuerdos sociales.

La cultura de la concertación es la que permitió que la Confederación de Trabajadores de


México incursionara en la educación media y superior con instituciones como el Centro
Sindical de Estudios Superiores y recientemente, la Universidad tecnológica "Fidel
Velázquez". La capacitación está basada en un sistema de normas técnicas de
competencia laboral, con el fin de elevar la productividad y las expectativas de mejorar los
ingresos de los trabajadores.

5.5.8 El bien común sobre lo individual.

Dentro del sindicalismo, se permite el fortalecimiento de las demandas obreras para


mejorar las condiciones de vida de sus agremiados.

Las prestaciones que el sindicalismo promueve son: protección del empleo, garantía del
salario remunerados salud del trabajador y su familia, seguridad laboral, acceso a la
educación y capacitación, vivienda, trato digno, jornadas de labores justas y posibilidad de
superación.

El objetivo del sindicalismo laboral, económicamente busca:

451
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

• La transformación del sistema jurídico laboral a fin de dar mayores impulsos a las
prestaciones obreras;

• La formación y fomento de empresas de interés social.

• El fortalecimiento del fondo solidario para la habitación obrera y la exclusión en la


administración del sector patronal.

• Obligación de los patrones para absorber el pago de la cuota obrera al Instituto


Mexicano del Seguro Social.

• Centros vacacionales para el disfrute de los trabajadores y sus familias.

• Mejorar la eficiencia, aptitud y retribución de los trabajadores, mediante programas de


capacitación profesional con la intervención directa de las organizaciones sindicales.

• La solución íntegra del problema de la habitación obrera, mediante el cumplimiento y


depuración de los actuales instrumentos legales.

• El constante mejoramiento de las condiciones generales de vida de la clase


trabajadora.

El poder financiero, al igual que el de otras asociaciones es necesario para la subsistencia


de los mismos, por lo que se ha hecho costumbre fijar un porcentaje del salario del 1 %
hasta el 5%, según el volumen de ingresos más el tipo de actividad, no será lo mismo un
sindicato de industria que uno de pilotos, y no podrán ser elevadas hasta el grado de ser
"confiscatorias", por no estar permitido por la Constitución Federal, respecto de las que
impone et estado y que por mayoría de razón se deberá de aplicar a los sindicatos.

Las cuotas pueden ser ordinarias las que originan pagos regulares y sirven para los
gastos del sindicato, arrendamientos, mueblería, salarios, energía eléctrica, teléfonos,
papelería, compensaciones a dirigentes y servicios que se requieran para tal efecto.

Las cuotas extraordinarias se emplean para hacer frente a gastos no previstos o que
exceden de lo previsto, como reparaciones inusitadas.

Es importante señalar que sólo las cuotas ordinarias pueden ser descontadas
obligatoriamente del salario.

También se acostumbra tomar de la cuota ordinaria una parte para el Comité Central y
otra para la Sección, si el sindicato está organizado de ésta manera, y aún destinar una
parte a la Federación o Confederación a la que pertenezcan.

452
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

5.6 Efecto Social, Económico y Político.

Efecto Social:

Antes de entrar en el tema que nos ocupa es de suma importancia el que analicemos el
concepto del Sindicalismo, a saber el maestro José Carro y Gelmo expresa: Es el
movimiento desarrollado en los últimos cien años en el ámbito de la producción industrial
caracterizado por la tendencia de los trabajadores a agruparse en asociaciones estables
distribuidas profesionalmente y dirigidas a defender los intereses, reivindicar los derechos
y luchar por las aspiraciones colectivas de los mismos."364

Con lo antes expuesto es de desprenderse que el sindicalismo tiene tres grandes


apartados:

I.- El derecho a sindicarse;

2.- El derecho que rige la constitución, funcionamiento, composición y disolución de las


asociaciones profesionales y;

3.- El derecho que rige las actividades de la asociación o sea el derecho a la asociación
sindical.

Ya con antelación y en capítulos anteriores expresamos que las formas asociativas


profesionales son producto de todas las épocas y, concretamente el Medievo nos
presenta la espléndida floración gremial que poco a poco iban a lograr una arrolladura
fuerza política, económica y social.

Es así como el nacimiento de los movimientos sindicales tienen lugar cuando la


organización gremial se hizo inservible para las nuevas necesidades de la producción
industrial, incompatible con la ideología liberal que la revolución francesa había
instaurado. En estas circunstancias los gremios desaparecieron.

La historia nos habla de un amplio periodo de jornadas agotadoras, de salarios ínfimos y


de condiciones laborales infrahumanas que califican en los países más industrializados de
Europa, una leyenda en el mundo del trabajo; que se extiende incluso y específicamente
al de las mujeres y niños para quienes hubieron de dictarse las primeras leyes laborales.

Contribuyente a la aparición del fenómeno sindical es la situación de inseguridad de la


nueva organización industrial supuso para el asalariado, esto significa que con el auge del
capitalismo, se hace presente en la relación laboral la oferta y la demanda, que con toda

364
Enciclopedia Cultural UTEHA; Unión Tipográfica, Hispano América. T 13. México 1958.

453
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

seguridad ocasionó desequilibrios económicos producidos en el seno de la industria y a


estos siguieron los desequilibrios de paros masivos para la clase proletaria.

Esta inestabilidad cobra caracteres trágicos en casos de enfermedad, accidentes o


muerte; circunstancias que sitúan a la familia en situaciones de espantosa miseria. Esta
realidad de vivir al día sin posibilidad de construir reservas para los momentos de paro o
infortunio laboral o personal ante un mínimo salario que apenas llega para atender las
necesidades más apremiantes, se traduce en el trabajador y su familia en una de las
inquietudes que eran preciso salir en busca de la estabilidad, la contemplación de esta
realidad hicieron hacer un sentimiento de incomodidad y la sensación de opresión que
caracterizan al proletariado de esta época. De ahí que alguien haya podido decir que el
sindicalismo surge como una comunidad de oprimidos que no han logrado la satisfacción
de sus derechos.

Claro es que toda esta nueva escala de posiciones, esta nueva estructura social que ya
se vislumbraba, implica en que el Estado si bien tiene que contar con las organizaciones
profesionales en todos los pasos de dirección y administración de la vida pública también
le autoriza a moderar llegado el caso, la ruta emprendida por aquellas si se pusiera en
peligro la seguridad social o política de la Nación. Hoy el sindicalismo no puede ser
entendido reduciéndolo a un mero regateo de salarios o de condiciones de trabajo, va
más allá; incluso de la ordenación económica en su intervención en la nacionalización,
productividad, seguridad social, siendo un elemento básico de la organización social y una
fuerza política de primer orden; lejos de ser un instrumento para derrocar una sociedad
que margina al obrero ha de ser el instrumento para elevar el nivel de vida de este, al
lugar adecuado en un sistema que constantemente está en movimiento.

Es evidente que el sindicalismo en una sociedad como la nuestra repercute notablemente


no sólo a la clase patronal sino a la sociedad en general.

Efecto Político:

Primeramente es prudente que señalemos el concepto de política: " La parte de la


Ciencias Sociales que estudia al Estado y las relaciones que con él tiene el individuo se
llama Ciencia Política el estudio de las teorías y principios de gobierno en general, así
como las instituciones, leyes y deberes del ciudadano."365

Así pues es de analizarse que de diversos tipos de movimientos concretamente tenemos

365
Ibídem, pág. 37.

454
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

un movimiento político que es el de la clase obrera y que tiene como uno de los de los
principales objetivos la conquista del poder político para la clase a la que pertenece y a
este fin es necesario que dicha organización nacida en su propia lucha económica haya
alcanzado cierto grado de desarrollo, de tal manera que de los movimientos separados de
los obreros nacen en todas partes movimientos políticos, es decir un movimiento de la
clase cuyo objeto es que se dé satisfacción a sus intereses en forma general, de tal
manera que sea un equilibrio para la sociedad. Si bien es cierto que estos movimientos
presuponen cierta organización previa, no es menos cierto que representan un medio
para desarrollar esta organización, con esto las agrupaciones profesionales nacieron para
la defensa de unos intereses en este sentido y sus objetivos e ideología se limitaron
exclusivamente para tal efecto, al margen de cualquier matiz político, no como el maestro
Marcelo Cátala: " No para aprovechar el ejercicio del poder, las ventajas de su fuerza
natural, sino por la lógica influencia que las teorías políticas y económicas han de ejercer
cerca de un grupo de gentes normalmente descontentas de su situación de proletarios."366

Los primeros atisbos de la colaboración política pueden observarse en la iniciación de una


o más; o menos abierta colaboración entre los partidos políticos y las agrupaciones
sindicales y en ocasiones han sido las organizaciones profesionales quienes se han visto
girando en la órbita de un partido político y otros fueron los propios Sindicatos quienes
crearon su propio partido; sin faltar el sistema de actuación desligada de compromiso
político y sin perder su carácter de profesionalidad apoyado por un determinado partido o
candidato electoral.

Con lo antes expuesto se desprende que por uno u otro procedimiento la consecuencia es
la misma: La tendencia a influir en el gobierno cuando no en la dirección de los destinos
del país, adquiriendo así los sindicatos un sentido de responsabilidad pública muy
apreciable.

Lo cierto es que sea cualquiera la fórmula adoptada por los sindicatos resulta que en
estos no pueden permanecer al margen de los acontecimientos políticos y que influyen en
los mismos y son influidos por aquellos, haciéndose así necesaria una ordenación de las
relaciones entre los sindicatos y el Estado, a fin de conseguir una estructura equilibrada
que no coarte la maquina estatal ni oprima las organizaciones profesionales, así pues los
sindicatos aceptaron pronto la idea de utilizar la fuerza que políticamente encerraban y
consientes de la misma intentan llevarla a la realidad.

366
BLACKBURN; Robín, La Crisis de los Sindicatos Laboralistas. Ayuso. Madrid 1972.

455
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

El Estado se resistió a aceptarlos con carácter político y puso obstáculos a su intervención


en los asuntos públicos, obstáculos que a pesar de todo no fueron lo suficientemente
poderosos para impedir el desarrollo de la presión política sindical, lo cierto es que el
Estado no aceptó de buen grado esta problemática, y los sindicatos obreros recorrieron
lentamente todo un largo camino durante el cual las organizaciones profesionales
lucharon por conseguir ese papel que la política moderna le reconoce en el gobierno de
los pueblos.

La participación de las entidades sindicales constituyen una de las más importantes


instituciones de la Nación y en et caso de que la empresa o el gobierno de algún país
insistan en seguir siendo hostiles a los sindicatos se revestirá gran problema ya que a
nadie se puede permitir que menosprecie a los sindicatos, porque los mismos poseen
gran fuerza y los encama una organización muy completa, lo que resulta un ingrediente
determinante en los sistemas futuros.

Así se produce el último punto de reflexión: las posiciones de independencia recíproca del
sindicato y Estado vienen a ser superadas en una situación de interdependencia.

El sindicato es menos libre frente al Estado, el Estado es menos libre frente al sindicato.
Con ello se plantea un problema enteramente nuevo de equilibrio entre autonomía sindical
e integración por una parte y entre poder político y poder sindical por otra.

Concluyéndose de esta forma la gran trascendencia de los sindicatos en la política de un


país.

Efecto Económico:

Antes de analizar el tema en cuestión se determinaran las causas del nacimiento de las
asociaciones profesionales y como al crearse los sindicatos tienen repercusión desde el
punto de vista económico, por ello es prudente que se hagan la siguiente referencia.

Así tenemos, que el hombre, hasta entonces pieza insustituible de la producción artesanal
ve cercenado su valor ante la aparición de la máquina que de ahora en adelante iba a
pasar en primer plano de los procesos laborales, en estas condiciones se hacen
innecesarios los hombres, con el progresivo automatismo, los largos aprendizajes
profesionales característicos de la organización gremial.

Anteriormente en el régimen de los gremios el esfuerzo productor del muestro, jefe de la


reducida unidad empresarial y al mismo tiempo el más calificado de los trabajadores de la
misma y el de los oficiales y aprendices; su desarrollo era en pequeños talleres u

456
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

obradores que a menudo simplemente los instalaban en anexos de las viviendas


familiares de los jefes. Et factor humano, la energía física y la habilidad profesional eran
entonces lo más importante aún desde el punto de vista exclusivamente económico, pues
la herramienta y la incipiente maquinaria tenían limitaciones en la actividad productora; así
de esta manera se produce una radical transformación en la valoración del ser humano.

El hombre elemento central del proceso productivo, se ve desplazado por la máquina, las
instalaciones fijas y el equipo industrial ocupan el primer lugar en el orden industrial
naciente.

Así tenemos que en los talleres gremiales la maquina era la propia mano del operario
desde las rudimentarias instalaciones y ella era como consecuencia acreedora de las
mayores consideraciones. Por otro lado, con el capitalismo el sistema de producción
industrial aparece en el proceso productivo un factor aparentemente desconocido hasta
entonces: La competencia, la organización gremial se había ocupado de eliminar
escrupulosamente este problema, regulando anticipadamente a las necesidades de
consumo a las que había de adaptarse la cantidad de producción permitida a cada taller y
el cálculo había sido hecho procurando que la demanda fuera ligeramente superior a la
oferta. Con tal procedimiento el maestro sólo tenía que atender a la calidad de su obra,
que de antemano tenía el mercado garantizado; esta situación y la que regulaba tan
minuciosamente todos los aspectos de la producción, compra-venta, mercados, calidades
características, etc.

"La nueva economía por el contrario y absorta de las ideas liberales de la época, tenía en
consideración que la competencia constituía la base del progreso industrial y mercantil,
con lo que los empresarios para poder dar salida a sus productos a precios competitivos
habían de esforzarse en reducir su costo. Obviamente en donde habían hallado mayores
posibilidades era en el pago de los salarios que llegaron a convertirse según la autora
Falcon O'Neil Lilia en verdaderos salarios de hambre."367

Para lograr el necesario aumento de la producción se prolongaron así mismo las jomadas
de trabajo hasta límites inconcebibles.

Con estas condiciones laborales se origina la aparición de una clase social: El


proletariado que se nutre con los trabajadores asalariados que ofrecen en competencia,
su capacidad física empleándose incluso a las mujeres y niños a los que se les llamo -

367
Óp. Cit. BLACKBURN; Robín, La Crisis de los Sindicatos Laboralistas. pág. 3.

457
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

medias fuerzas - , pero a los que el maquinismo habilitaba para ofrecer y vender sus
servicios profesionales.

Estos grupos humanos que aumentan continuamente al iniciarse en este periodo el éxodo
del campo a la industria ha traído en el hábitat rural por un salario industrial que aunque
insuficiente le parecía menos aleatorio que los problemáticos resultados de la actividad
agrícola. De esta concentración deriva un nuevo factor psicológico en la vida pública que
es el espíritu y conciencia de clase y que poco a poco va haciendo nacer una nueva
tendencia asociativa, para una mejor defensa de los intereses del grupo; con lo antes
expuesto es de observarse que con el nacimiento de las organizaciones profesionales y
con la necesidad del ser humano de sentirse respaldado por un grupo, asociación que a la
postre se le denominará Sindicato y al cual ya nos hemos referido en capítulos anteriores,
por lo que se concluye que la introducción de la maquinaria, los salarios bajos a los
trabajadores y el sindicato tienen gran repercusión en la economía de un país.

Para concluir el tema expuesto se pone de manifiesto, la relevancia que tiene la institución
que se analizó y nos referimos al sindicato, siendo la base piramidal dentro de nuestro
Derecho, ya que es éste que busca el mejoramiento y la defensa de los trabajadores
constituidos en una nueva clase social, la cual encuentra su esencia en nuestra materia,
es por eso, que el Sindicato, es la institución esencial para el Derecho Colectivo del
Trabajo, resultando el medio más eficaz que tienen los obreros, para defenderse de la
clase empresarial.

Sin embargo, no hay que soslayar que en la actualidad ya no se cree en nuestra


institución, por la corrupción que se da dentro del mismo, ya sea por sus integrantes, o
por los mismos dirigentes, es por eso, que en México, al igual que el gobierno se han visto
amenazadas de un momento a otro todas y cada una de sus instituciones por la
corrupción, y los dirigentes sindicales no podían ser la excepción, ha sido tan grande la
misma que se ha llegado a extremos como el ser juzgados penalmente o bien perdonados
por gobiernos de acuerdo a su conveniencia o de su relación de amistad, explicaremos
adelante todas y cada una de las situaciones de corrupción, según el gremio de que se
trata, inclusive como algunos dirigentes en la actualidad se encuentran dentro de un plano
alto en las directrices del movimiento obrero han sido en diferentes épocas acusados de
diversos delitos y en otras ocasiones apoyados por el sistema para poder utilizarlos a su
conveniencia.

En los sindicatos, las voluntades son sometidas a los intereses políticos del sistema

458
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sindical que conviene al aparato gremial del país, que no entiende la pluralidad, sino en
términos de migajas parlamentarias, pero nunca en organizaciones sindicales, capaces de
promover la participación de trabajadores en la consecución de verdaderos objetivos de
clase bajo principios que permitan transformar el injusto a sus demandas que a diario les
son necesarias.

En donde hay una actividad política, se vive intensamente la democracia, es decir hay
confrontación de ideas, y en donde se ofrece la vía del diálogo y la negociación para
resolver cualquier situación conflictiva, quiera decir que se vive la democracia genuina.

En México la democracia sindical ha ido desapareciendo en la mayor parte de los


sindicatos, es decir, en la mayoría, y esto entre otras razones que ya se manifestaron por
la presión del gobierno hacia los mismos, ya son parte integral del sistema, cuando dentro
de algún sindicato liega a realizarse un movimiento, el gobierno deja de apoyar el mismo,
ya que le conviene seguir apoyando al sindicato, toda vez, que el gobierno es sexenal y el
sindicato es permanente, muestra de ello es la permanencia durante sexenios y sexenios
de los dirigentes al mando de los sindicatos, mismos que le dan poder al gobierno en
tumo.

En ocasiones resulta que cuando en los estatutos de un sindicato se encuentra


consignado la no reelección en el Comité Ejecutivo, de dicha organización, al principio de
que dicho dirigente toma posesión de su puesto para el que fue electo, lleva buenas
relaciones con la empresa cambia, hasta llegar a acusarlas de malos manejos
públicamente, sucediendo lo contrario en esos momentos con el candidato para
sucederlo, caso concreto que en ocasiones ha sucedido en el Sindicato de Trabajadores
Ferrocarrileros de la República Mexicana, en donde a pesar de realizar la denuncia en los
medios de difusión como ha sucedido a nadie le interesa aclararlo ni al que realiza la
denuncia.

Casi ninguno de los Sindicatos escapa a la corrupción de sus dirigentes, sólo que se
diferencian unos de otros, en que algunos cuando se enteran de que su dirigente es un
corrupto, lo eliminan de sus filas de alguna u otra forma, y otros sindicatos se Comían con
dirigentes corruptos en donde por el contrario no cabe persona alguna que quiera cambiar
sus sistemas de trabajo.

Es por eso apremiante que se legisle, en materia de delitos que cometen los
representantes sindicales en contra de sus agremiados para poner fin a dicha situación
que es insostenible.

459
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Un adelanto definitivo fue aportado por la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos de 1917, al incorporar en su texto, en calidad de garantías sociales, los
derechos laborales, consagrando así, al máximo nivel jurídico, el principio genérico
consistente en que los derechos de los trabajadores conllevan un elevado interés público
y social, en atención a que tales derechos depende la subsistencia y bienestar en la vasta
clase social productora por excelencia.

Sobre los derechos sociales en general, Recasens Siches expone algunos conceptos, en
los que adivina el contenido substancial de dicha justicia:" En otras épocas se había
confiado la misión de impedir o aliviar los efectos de factores adversos de la naturaleza y
de la sociedad (desvalimiento, desamparo, enfermedad, desocupación, etc.) a la acción
espontánea de los individuos y los grupos, por ejemplo, mediante acciones caritativas.
Hoy día se entiende correctamente que la seguridad social es una obligación de justicia,
que la sociedad tiene para con los individuos, y no sólo de misericordia; y se sostiene, por
tanto, que debe ser normada por el orden jurídico, de modo que se otorguen derechos a
los individuos y se impongan deberes legales al Estado y sus óiganos. Esta idea es el
fundamento de los llamados derechos económicos, sociales y culturales o educativos del
hombre"368

Por la importancia de esos derechos y de su tutela jurídica, ha resultado lógico que


también comprenda los daños y perjuicios, así como fas leyes penales, derivándose la
aplicación de la Ley Federal del Trabajo, como en algunos de sus reglamentos, y desde
luego, el Código Penal, para contemplar numerosos comportamientos vinculados con los
sujetos a las relaciones de trabajo.

Vienen a redundar tales derechos en las responsabilidades de daños y perjuicios, que la


misma Ley Federal del Trabajo, aunque ambiguamente resalta en su título dieciséis,
denominado Responsabilidades y Sanciones, mismo al que haremos alusión en este
tema, pero antes debemos explicar en qué consisten los daños y perjuicios, para lo cual
tendremos que hacer referencia al Código Civil para el Distrito Federal, así como al
Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal en vigor entendiendo en ambos
ordenamientos por Daños: el detrimento ocasionado en algún bien mueble o inmueble,
por alguna cosa o persona, y por perjuicio, aquello que con motivo del detrimento del bien
mueble e inmueble se ha dejado de percibir por el dueño o poseedor del mismo.

Concluyendo ambos conceptos en cierta manera en el enriquecimiento ilegítimo, misma


368
Óp. Cit. RECASENS SICHES; Tratado General de Filosofía del Derecho, pág. 120.

460
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

acción que de alguna manera se encuentra constituida por los elementos que a
continuación se mencionan:

I. Obtención de algo por parte de alguien que no lo contaba dentro de su patrimonio.

II. Empobrecimiento de alguien, que contaba dentro de su patrimonio ese algo, o que
simplemente dejo de recibir algo a lo que tenía derecho.

III. Debiendo existir un vínculo de causalidad entre los dos elementos anteriores, que
exista una correlación, es decir, que no pueda existir el empobrecimiento sin el
enriquecimiento de alguien en esa relación, de uno y otro.

IV. Que dicho desplazamiento patrimonial definitivamente no derive de un acuerdo previo


de los elementos de esa relación, no dejando más camino al que sufrió el
empobrecimiento, que demandar para reclamar la indemnización correspondiente.

Desde el punto de vista del Derecho Civil, para una organización sindical, que
lógicamente ha birlado los derechos del trabajador, en perjuicio lógicamente del mismo,
ocasionándole los daños y perjuicios consecuentes en su patrimonio, es decir se reúnen
los elementos de que hablamos anteriormente; ya que en el presente caso se trata de los
dirigentes sindicales, en relación al empobrecimiento de los trabajadores sus
representados, existiendo ese vínculo de causalidad y el desplazamiento patrimonial sin el
consentimiento, es decir, dejando en total estado de indefensión al trabajador sin otro
camino al que pueda recurrir que sea el de demandar los daños y perjuicios que le ha
ocasionado el enriquecimiento ilegítimo del dirigente sindical, usando como instrumento el
organismo sindical, quedando de esa manera plenamente se puede decir, tipificados tales
acciones de carácter civil, que además la misma Ley Federal del Trabajo, en algunos
artículos del capítulo citado da cabida para la aplicación de tal acción.

Los Presidentes de las juntas Especiales, los de las Juntas Federales Permanentes de
Conciliación, los de las Locales de Conciliación y los Inspectores del Trabajo, tienen la
obligación de denunciar al Ministerio Público al patrón de una negociación industrial,
agrícola, minera, comercial o de servicios que haya dejado de pagar o pague a sus
trabajadores cantidades inferiores a las señaladas como salario mínimo general.

Es decir, cuando dichas personas a las que se les autoriza son las que cometen
propiamente esos delitos en complicidad con el patrón quienes son los que tienen la
facultad para denunciarlos a ellos, aquí es necesario decir, que aunque no se encuentra
establecido en dicho ordenamiento, los trabajadores que se consideran afectados, serían

461
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

los que en su caso podrían tomar la facultad de denunciar a los misinos, o a las personas
físicas que resulten responsables.

Por otra parte, pero también como hecho que acredita la amplitud de las normas punitivas
de naturaleza laboral, debe especificarse que estas se clasifican en: las que castigan
delitos y las que sancionan faltas o convenciones, según sea mayor o menor la gravedad
de estas que se hayan cometido.

Por ejemplo como lo señala en su sistemática el maestro Trueba Urbina, nuestra misma
Constitución nos muestra ciertos lineamientos a seguir de acuerdo al Derecho Penal.

El artículo 5 Constitucional, que nos habla de la prohibición de servidumbre:

Nadie podrá ser obligado a prestar trabajos personales sin la justa retribución y sin su
pleno consentimiento, salvo el trabajo impuesto como pena por la autoridad judicial.

Se enuncia una de las garantías elementales del hombre situaciones que imponían a los
integrantes de las clases trabajadoras. En consecuencia, el Estado no puede permitir que
se lleve a cabo ningún contrato, pacto o convenio que tenga por objeto el menos cabo, la
pérdida o el irrevocable sacrificio de la libertad del hombre, ya sea por causa del trabajo,
de educación o de voto religioso, como lo manifiesta más adelante dicho artículo
Constitucional.

Es necesario ver cuáles son los delitos por principios de cuentas que nuestra Ley Federal
del Trabajo señala, para posteriormente poder mencionar cuales y como podrían ser
aplicables a los representantes de las organizaciones sindicales, ya sea estas de
trabajadores o patronales.

Así tenemos que a pesar de que el delito de fraude sea encuentra previsto desde hace
tiempo en el Código Penal, su tipificación exclusiva en dicho ordenamiento no tuvo al
parecer la suficiente eficacia entre los miembros de la clase patronal sobre todo, en razón
de lo cual llego a apreciarse que era muy significativo el número de ellos que incurrían en
las acciones constitutivas de dicha infracción. Motivando que en procura del carácter
penal de la misma tuviera un ámbito de mayor resonancia entre sus eventuales
destinatarios, se acogiera el delito también en la Ley Federal del Trabajo, de tal manera
que al respecto en la actualidad existe el precepto 1004 en la Ley citada, que especifica a
dicho delito.

Artículo 1004. Al patrón de cualquier negociación industrial agrícola, comercial o de


servicios que haga entrega a uno o varios de sus trabajadores de cantidades inferiores al

462
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

salario fijado como mínimo general o haya entregado comprobantes de pago que
amparen sumas de dinero superiores de las que efectivamente hizo entrega, se le
castigará con las penas siguientes:

I. Con prisión de tres meses a dos años y multa que equivalga hasta 20 veces el salario
mínimo general, conforme a lo establecido por el artículo 992, cuando el monto de la
omisión no exceda del importe de un mes de salario mínimo general de la zona
correspondiente;

II. Con prisión de tres meses a dos años y multa que equivalga hasta 50 veces el salario
mínimo general, conforme a lo establecido por el artículo 992, cuando el monto de la
omisión sea mayor al importe de un mes, pero no exceda de tres meses de salario
mínimo general de la zona correspondiente;

III. Con prisión de tres meses a tres años y multa que equivalga hasta cien veces el
salario mínimo general, conforme a lo establecido por el artículo 992, si la omisión excede
a los tres meses de salario mínimo general de la zona correspondiente.

Pero a manera de ir resumiendo hemos decir que por Delito Laboral lo debemos definir
por principio de cuentas: Como aquel que se constituye por los actos u omisiones de los
empresarios o los trabajadores que, alterando las relaciones de trabajo, afectan
gravemente el fenómeno de la producción o lesionan derechos fundamentales del
trabajador.

En materia de delitos laborales, la Ley Federal del Trabajo vigente adoptada, a la fecha de
su promulgación llevo a cabo un sistema contrario al de su predecesora de 1931, pues
excluyo en cierta forma la tipificación de aquellos delitos, en tanto que está llegó a
contemplar los siguientes: pago de salarios con elementos sustitutivos de la moneda;
violencia física o moral en las huelgas; obstaculización a la reanudación del trabajo y
participación en huelgas inexistentes o ilícitas y paro ilegal.

Aunque nuestra legislación señala que la tipificación que hemos señalado sólo podría ser
por el delito de fraude, se podría establecer que el delito de abuso de confianza se
tipificara, con fundamento en el depósito de la confianza que los trabajadores hacen al
dirigente sindical, en un contrato colectivo de trabajo, este abusando de la confianza
depositada, de la que el patrón haga de las suyas con el mismo, y deja que viole sus
derechos sin hacer nada por defenderlo.

Es aquí donde se podría dar causa legal a los actos u omisiones que cometen los líderes

463
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sindicales, en contra de su agremiados, e incluso podríamos adelantamos que en algunas


ocasiones los delitos que principalmente son cometidos por algunos dirigentes sindicales
que realizan maniobras gansteriles, se equiparan al robo, independientemente que la
consecución de sus fines realicen algún otro delito que amerite sanción diversa, o bien
que se compare a un delito común, para así proceder legalmente contra de ellos.

Recordando al respecto primeramente la definición de delito, a lo que diremos que toda


vez de que algunas nociones formales no aportan el conocimiento de los caracteres del
delito, numerosos autores han tratado de definirlo desde el punto substancial; y entre ellos
destaca muy especialmente Francesco Carrara, quien ha formulado una de las mejores
definiciones del delito, desde el punto de vista material a saber:

"Es la infracción de la Ley del Estado, promulgada para proteger la seguridad de los
ciudadanos, resultante de un acto externo del hombre, positivo o negativo, moralmente
imputable y políticamente dañoso."369

Pero para estar en posibilidades de entender lo que es el delito, mencionamos otra


definición de Rafael Garofalo, el cuál define delito en los siguientes términos:

"El delito social o natural es una lesión de aquella parte del sentido moral que consiste en
los sentimientos altruistas fundamentales de piedad y probidad, en la medida media en
que se encuentran en las razas superiores, medida que es necesaria para la adaptación
del individuo a la sociedad.370

Analizadas las anteriores definiciones y la exposición que delitos laborales nos señala la
Ley Federal del Trabajo, podemos concluir al respecto que si existen plenamente
comprobados los delitos cometidos tanto por los patrones como por los dirigentes
sindicales.

Dada la gravedad de los delitos y con la alevosía con la que son cometidos, imponer tanto
penas como acciones pecuniarias a tal grado, que hicieren pensar a estos individuos
antes de cometer dichos delitos siendo desde luego ejemplares, para que de esa manera
se protejan y tutelen debidamente los derechos de esas clases desprotegidas, y que
según nuestra Constitución el mismo Estado debiera tutelar sus derechos,
proporcionándoles la suplencia de la queja, en cualquier acción y por la vía que la
intenten.

369
CARRARA Francesco. Programa del Curso de Derecho Criminal. Depalma. V I. Buenos Aires. 1944.
370
GAROFALO Rafael, La Criminología, Daniel Jorro. Madrid 1912.

464
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Es de reconocer que en la actualidad, las autoridades cuando es la oportunidad de que


las mismas pongan un ejemplo a tales o cuales dirigentes, hacen hasta lo imposible ellas
mismas para desvirtuar un delito al respecto, que de por sí, a los trabajadores les es muy
difícil convencerse para intentar una acción de este tipo, y cuando lo hacen las
autoridades les contesta la improcedencia de tal o cual acción, aduciendo desde luego
que no reúnen los requisitos para su procedencia.

Situación la anterior, con la que las esperanzas de hacer cambiar, de hacer conciencia en
tos dirigentes sindicales, la cual es su verdadera tarea, de proteger a una clase que ya se
encuentra cansada de tanta explotación.

Cabe hacer reiterativo, que en nuestra legislación actual en ningún momento se refiere a
los delitos cometidos por los sindicatos, en perjuicio ni siquiera de sus agremiados, pues
mucho menos contra terceros, por lo que no puede apreciar que al respecto está muy
atrasada nuestra legislación, pugnando en el presente por el establecimiento de un
Derecho Penal Social con fundamento en lo manifestado anteriormente.

De tal suerte, que es apremiante que se incluya en algunos artículos modificaciones como
en el caso de los artículos:

Artículo 359. Incluir que dichos representantes deberán hacer declaración patrimonial al
inicio y al final además de que dichos representantes podrán ser reelegidos una sola vez.;
de existir una desproporción entre su salario real y con el que cuentan en su última
declaración, proceder penalmente contra ellos, en caso de malversación.

Artículo 369. 0 en el caso de que los trabajadores, ya no lo deseen, por causa de que no
se hayan cumplido con su propósito esencial que es el de resguardar la seguridad de sus
miembros, basados en la confianza que se deposita en sus dirigentes.

Artículo 373. Dicho informe debe hacerse del conocimiento de los miembros del sindicato
(Trabajadores), y de existir inconformidad por parte de éstos, someterse a una auditoría
externa, en caso de existir anomalías proceder contra los culpables penalmente.

Artículo 377. Incluir en la fracción I en el segundo párrafo (y trabajadores), para que al


igual que la autoridad conozcan de su actuación, y de no seguir los fines para que lo que
se constituyó se desintegre la Asamblea y se reelija una nueva.

Y en dado caso que el Sindicato, volviera a reincidir en su conducta, se anular su registro,


quedando inhabilitadas todas aquellas personas que hubiesen sido condenadas por
dichas anomalías.

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Siendo así la forma en que nuestra institución recobraría el prestigio y credibilidad, que
debe tener entre los trabajadores, ya que esta representa la máxima aspiración de
nuestro Derecho Colectivo del Trabajo, que es la defensa y mejoramiento de la clase
laboral, reivindicándola por medio del Sindicato.

5.6.1 Convenios laborales internacionales.

El convenio internacional, es un instrumento destinado a crear obligaciones


internacionales para los Estados que los ratifican y, a su vez, estos convenios forman
parte del derecho internacional y son fuente del derecho del trabajo, por ser portadores de
la creación de las normas.

La Organización Internacional del Trabajo, en el libro Las normas internacionales del


trabajo, nos señala en qué consisten los convenios, respecto de lo cual nos dice:

“Los convenios son semejantes a los tratados internacionales, aunque su campo


específico es el derecho del trabajo, y pueden ser ratificados. Todo Estado Miembro que
ratifica un convenio se compromete a aplicar las disposiciones del convenio de que se
trate.”; es por ello que, cuando nos referimos a estos convenios internacionales, en
particular a los que regulan el trabajo, es necesario también diferenciar de los convenios a
las llamadas recomendaciones que emite la Organización Internacional del Trabajo (OIT),
ya que como sabemos son normas dirigidas a orientar a los gobiernos sobre ciertas
acciones, que son el resultado de las funciones que esta organización desempeña.

Las recomendaciones que emite este organismo de las Naciones Unidas, están
destinadas a ser lineamientos de apoyo y auxilio de la política laboral de los países
miembros; comúnmente son complemento de los Convenios Internacionales y su función
es limitada. Esto quiere decir, que la implantación de éstas a la política de los países no
resulta obligatoria ni exigible, sino optativa.

La influencia que tienen estas normas internacionales del trabajo sobre las legislaciones
nacionales es variable, ya que comúnmente es en función de la utilidad y valor que dan
los convenios y recomendaciones, por lo cual, la distinción que se da entre unos y otras
es que los convenios establecen obligaciones; y en cambio las recomendaciones son
normas que no crean obligaciones, sino que más bien se dirigen a orientar a los gobiernos
sobre ciertas acciones.

Es necesario entender las implicaciones que lleva consigo el hablar de un derecho


internacional del trabajo, mismo que en su actuar, constituye entonces la creación de

466
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

normas jurídicas por una instancia internacional, que buscan el bienestar de la clase
trabajadora en un panorama internacional, y que su formación se ha considerado
indispensable para lograr un equilibrio principalmente social y económico, entre las
diferentes economías que forman parte del proceso productivo y que de alguna manera
pudiesen significar condiciones de desigualdad competitiva entre las naciones.

En este contexto, Georges Scelle afirma que los “convenios constituyen acuerdos de
voluntades múltiples que fijan normas aplicables a diversas colectividades estatales, por
lo tanto, son verdaderas leyes internacionales, dictadas por un organismo legislativo del
mismo carácter. La ratificación constituye un acto-condición e implica una adhesión del
Estado miembro a un acto legislativo preexistente”371.

Por cuanto hace a la ratificación de un convenio, la ratificación la conocemos como el acto


por el cual un Estado miembro se compromete solemnemente aplicar las disposiciones de
un convenio de la OIT, tanto en sus leyes como en la práctica, que tiene por efecto la
obligación de cada nación de vigilar el acatamiento de los procedimientos de control y
valoración con respecto a la aplicación del mismo en su política laboral interna. Es por ello
que la ratificación de un convenio tiene vital importancia, ya que un convenio en sí no crea
ninguna obligación para el Estado; sin embargo, una vez ratificados, las naciones
miembros se obligan a acatar e incorporar las normas del convenio dentro de su
legislación nacional. Asimismo, éste queda abierto a la ratificación de otros estados que
quieran adherirse372.

Como consecuencia de ello, la relevancia de estos convenios resulta ser esencial para la
legislación interna de los países, ya que deben adecuar sus políticas internas a las
normas que contraen de carácter internacional, las cuales en muchos de los casos
colocan restricciones a la soberanía de las naciones y, en ocasiones, estas
reglamentaciones pueden tener un efecto inmediato sobre la legislación nacional, ya que
automáticamente son incorporadas al derecho positivo del país para ser aplicados;
también pueden tener el efecto de que para poder ser incorporadas a la legislación
interna, deban ser modificadas.

En el caso de nuestro país, su ingreso como miembro a la Organización Internacional del


Trabajo fue en 1931, y desde este año hasta el 2007 ha ratificado convenios y puesto en
vigor 67 (Secretaría del Trabajo y Previsión Social, www.stps.gob.mx/marco_juridico.htm).

371
Charis, Roberto, 1996:291
372
Ídem

467
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Y la base legal que le permite celebrar tratados la podemos identificar en nuestra ley
fundamental, particularmente en los artículos 76, 89 y 133 de la Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos, los cuales se mencionarán a continuación:

“Artículo 76. Son facultades exclusivas del Senado:

I. Analizar la política exterior desarrollada por el Ejecutivo Federal con base en los
informes anuales que el Presidente de la República y el Secretario del despacho
correspondiente rindan al Congreso; además aprobar los tratados internacionales y
convenciones diplomáticas que celebre el Ejecutivo de la Unión.” (Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos)

Es en este artículo 76 constitucional, donde se señala la facultad que tiene el Senado de


aprobar un tratado o convenio que haya celebrado el Presidente, para que éstos formen
parte de nuestros ordenamientos legales y tengan efecto en nuestra nación.

“Artículo 89. Las facultades y obligaciones del Presidente son las siguientes: I. Promulgar
y ejecutar las leyes que expida el Congreso de la Unión, proveyendo en la esfera
administrativa su exacta observancia; ([)

X. Dirigir la política exterior y celebrar tratados internacionales, sometiéndolos a la


aprobación del Senado. En la conducción de tal política, el titular del Poder Ejecutivo
observará los siguientes principios normativos; la autodeterminación de los pueblos; la no
intervención; la solución pacífica de controversias; la proscripción de la amenaza o uso de
la fuerza en las relaciones internacionales; la igualdad jurídica de los Estados; la
cooperación internacional para el desarrollo; la lucha por la paz y la seguridad
internacionales.” (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos)

Queda como facultad exclusiva de del Presidente la promulgación y ejecución de las leyes
expedidas por el Congreso, siendo así que, como eje conductor de la política exterior,
debe vigilar y observar que nuestra política se encuentre dirigida por lo principios que se
nombran en el artículo que antecede.

“Artículo 133. Esta Constitución, las Leyes del Congreso de la Unión que emanen de ella
y todos los tratados que estén de acuerdo con la misma, celebrados o que se celebren
por el Presidente de la República, con aprobación del Senado, serán la Ley Suprema de
toda la Unión. Los jueces de cada Estado se arreglarán a dicha Constitución, leyes y
tratados, a pesar de las disposiciones en contrario que pueda haber en las Constituciones
o leyes de los Estados.” (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos)

468
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Se elevan a la categoría de Ley Suprema, todas las leyes o tratados celebrados en


función de lo establecido en los artículos anteriores; éstos son los que hacen posible de
cierta forma la relación y participación de México en el exterior, los fundamentos legales y
política que sigue México y las facultades que tiene cada poder del Estado para llevarlas a
cabo, analizarlas, promulgarlas y ejecutarlas.

El mostrado interés de México por participar en el ámbito internacional laboral, y su


preocupación por adherirse a los convenios internacionales y a la regulación internacional
de las condiciones de trabajo y de vida de los trabajadores, no se pone en duda. Sin
embargo, la aplicación de las mismas en el terreno nacional es lo que ha sido duramente
cuestionado.

Es posible ver que, en lo que se refiere al sindicalismo, México ha suscrito diversos


convenios de asociación sindical, siendo uno de ellos el Convenio núm. 87, en la
Organización Internacional del Trabajo, relativo a la libertad sindical, el cual fue producto
de la gestión de diversas organizaciones internacionales de trabajadores que pugnaban
por el derecho y la libertad sindical.

Con el citado Convenio núm. 87, suscrito en 1948 y ratificado por México en 1950,
tenemos el verdadero ejemplo de la aplicación de estas normas en nuestra legislación, en
el cual podemos observar que existen serias limitaciones establecidas en la ley, que no
corresponden con los compromisos contraídos internacionalmente, uno de ellos, la
libertad sindical, la cual contempla el derecho a formar sindicatos por trabajadores,
empleados, a la afiliación a estas organizaciones sin autorización previa y sin
discriminación alguna, ni distinción debido a su ocupación, sexo, color, raza, creencias,
nacionalidad, opiniones políticas, etc., y misma que en nuestro país se ve seriamente
coartada en el artículo 123 constitucional, apartado B, así como en los regímenes
especiales donde se excluye a los trabajadores del servicio exterior y a los que prestan
sus servicios en el Poder Judicial Federal de formar asociaciones.

Esto como una referencia, a fin de observar que la libertad sindical tiene una serie de
restricciones no nada más en los compromisos adquiridos a nivel internacional como son
los de la Organización Internacional del Trabajo, sino también en la misma ley
fundamental de nuestro país. Dichas limitantes se pueden resumir de la siguiente manera:

• La actividad sindical no puede rebasar los límites que establecen los fines y
objetivos de la asociación.

469
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

• La prohibición de asociarse a determinadas actividades por el carácter profesional


de las que se desarrollen.
• Control estatal.
• Distinción de los trabajadores con respecto a sus opiniones, creencia política y
religiosa.
• Las limitaciones jurídicas, de forma de la creación y nacimiento de las
organizaciones sindicales.
• El control del Estado que tiende a desvirtuar las funciones de las mismas.373

De esta manera, en México la exigencia de estos derechos está ligada a la fuerza de las
organizaciones sindicales que actualmente se encuentran en cierta manera subordinadas
al Estado, pero que a la vez el Estado se encuentra cargado de una gran responsabilidad,
al haber asumido la integración de estos compromisos a través de la adecuación de la
legislación interna.

Otro acuerdo internacional de carácter laboral de vital importancia para nuestro país es el
denominado Acuerdo de Cooperación Laboral de América del Norte (ACLAN), celebrado
entre los tres países de América del Norte que son Canadá, Estados Unidos y México, en
el cual se plantea un escenario de competencia justa y abierta, ante la procuración del
desarrollo de las condiciones de trabajo de los países miembros, con base en la elevación
de la productividad y la innovación.374

Promueve los principios basados en la libertad y los derechos sindicales como son: la
negociación colectiva, la huelga, la libertad de asociación, estándares mínimos de
empleo, la no discriminación en el empleo, igualdad de trabajo para hombres y mujeres,
prevención de accidentes profesionales y enfermedades y protección de los trabajadores
emigrantes.

El problema que presenta México ante estos principios es que, para poder cumplirlos,
tendrá que darse a la tarea de reformar la Ley Federal del Trabajo, que como ya se
expuso antes, tan sólo respecto de la libertad sindical va en contra del acuerdo.

5.6.2 La alta competitividad mundial, momento del fortalecimiento sindical.

Para entender realmente si las organizaciones sindicales en México han sido un


detonante para la competitividad y desarrollo o han sido un obstáculo para el mismo, será

373
González, José, 2006:55
374
Bensusán, Graciela, 1999: p.167

470
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

necesario remitirnos a los sucesos ocurridos a partir de la firma del Tratado de Libre
Comercio con América del Norte, mismo que entró en vigor en enero de 1994. Ello
permitirá tener una visión más objetiva, ya que tendremos una base de comparación con
nuestros socios comerciales, Estados Unidos y Canadá, no sólo si se han tenido
beneficios en el aspecto económico, sino que la incursión en este tratado ha traído
beneficios en las organizaciones sindicales o ha traído algunos descalabros en lo que se
refiere a la disminución de la planta laboral y obviamente en algunas prestaciones de
carácter económico y social.375

Antes de este tratado comercial, el modelo económico que se había venido operando en
México por más de cuarenta años llamado “sustitución de importaciones”, difícilmente nos
daría un punto de vista objetivo sobre el papel que jugó nuestra planta laboral, puesto que
las organizaciones sindicales en México en esa época estaban encaminadas a la
captación de votos para el partido oficial y eran recompensadas con algunas prestaciones
de carácter social como la vivienda, la salud etc. Con esto es posible entender que las
organizaciones sindicales se convirtieron en extensiones políticas del partido oficial en el
poder; por tal motivo se dejó a un lado la competitividad mundial y dichas organizaciones
se convirtieron en un obstáculo para el desarrollo de México.

No fue sino hasta la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio (TLC) cuando estas
organizaciones sindicales fueron sacudidas fuertemente en cuanto a la protección
gubernamental; esto aunado a la pérdida de la Presidencia de la República por parte del
partido oficial y a la implementación de nuevos esquemas de contratación, que en México
han generado una cultura antisindical que ha alejado a los trabajadores de la lucha por
sus derechos y sus reivindicaciones, provocando que dichas organizaciones poco a poco
hayan venido perdiendo terreno, lo cual se evidencia en el bajo nivel de personas que se
afilian a algún gremio.376

A manera de ejemplo se mostrará un comparativo en el diagrama 1, acerca de los


estragos que han sufrido las organizaciones sindicales en los últimos años, en el cual es
posible percibir la disminución del total nacional de afiliados de las asociaciones
registradas en la STPS. En dicho cuadro comparativo se aprecia de manera estadística
que los procesos de globalización económica han contribuido a disminuir la fuerza del
sindicalismo mexicano; pues el cierre de empresas, la subcontratación y la flexibilidad en

375
Bensusán, Graciela, 1999: p.168.
376
Ídem.

471
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

el trabajo han sido los principales factores que han influido y que han hecho disminuir a
los agremiados, tanto en las pequeñas como en las grandes organizaciones sindicales.

Diagrama 1

Disminución de la afiliación en organizaciones sindicales en México

2000-2008

Fuente: STPS, Periódico Reforma, jueves 1 de mayo del 2008.

Esta tendencia de disminución del número de afiliados, también se puede observar en el


número de Contratos Colectivos de Trabajo depositados por Central Obrera y que se
encuentran registrados desde 1994 al 2008, en la STPS, ante la Junta Federal de
Conciliación y Arbitraje (véase diagrama 2).

Diagrama 2

Contratos Colectivos de Trabajo depositados por Central Obrera

1994-2008

472
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

_1/ Incluye Confederaciones y Federaciones integrantes del Congreso del Trabajo.

_p/ Cifras preliminares a partir de la fecha que se indica.

Fuente: JFCA, STPS.

Será necesario mencionar que, antes de la entrada en vigor del TLC o la apertura de los
mercados, las organizaciones sindicales tenían como marco jurídico y protección a la Ley
Federal del Trabajo y a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, de la
cual menciono algunos puntos:

Protección al trabajador377

Salario justo

Se pretende con esto que quienes trabajan tengan un salario adecuado y digno, el cual
permita cubrir sus necesidades básicas y las de sus familias, como son: alimentación,
salud, vivienda, educación y recreación, entre otras.

Mejores condiciones de trabajo

Se considera que esto es un complemento indispensable del salario de los trabajadores,


ya que es necesario que las condiciones en que laboren no les afecten ni física ni
mentalmente y, por consiguiente, ni en su salud ni en su dignidad; por ejemplo, estas
organizaciones sindicales luchan por que tengan herramientas de protección cuando las
tareas que ejecuten así lo requieran.

Empleo estable

Es importante y necesario que el empleo sea lo más estable posible y obviamente


regulado por las leyes que protejan a las personas que pertenecen a estas organizaciones
contra despidos injustos, principalmente cuando dicho trabajador ha entregado lo mejor
de su vida productiva y ha acumulado una experiencia en el desarrollo de su actividad.

Mejoramiento de las reivindicaciones sociales y económicas

Es necesario, dentro del sector laboral, proteger y garantizar la continuidad de las


conquistas laborales y el mejoramiento social y económico de la clase trabajadora; por
eso es necesario que las organizaciones sindicales busquen que el estado promulgue
leyes y decretos que le den continuidad a dichas conquistas.

Permanente democratización

377
Fuente: Elaboración propia basada en Climent, Juan, 2000: 17-19; y González, José, 2006:107.

473
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Una de las principales luchas que deben tener estas organizaciones sindicales es el
reconocimiento de los derechos de la libre asociación, de pensamiento y de expresión, así
la lucha por la democratización debe darse dentro de los sindicatos, ya que sólo
practicando la democracia en lo interno, estas organizaciones se fortalecerán y
promoverán la participación directa de las mujeres y jóvenes dentro de la organización
sindical, garantizando que las decisiones de los sindicatos correspondan a un mayor
grado de consenso.

Se considera que estas organizaciones deben tener dentro de sus estatutos internos los
siguientes puntos:

Ser libre, independiente, democrático, participativo, responsable, realista solidario y


transparente.

Así como se hace mención de cómo se encontraban las organizaciones sindicales


anteriormente a la apertura de los mercados internacionales, será justo también
mencionar los efectos que han tenido las organizaciones sindicales respecto de su planta
laboral, a raíz de la incursión con nuestros socios comerciales, ya que ha habido un
incremento de los contratos de protección y de las llamadas outsourcing, que son
empresas terciarias dedicadas a reclutar personal a solicitud de las compañías, y su
tendencia principal reside en las modalidades de tiempo parcial, que determinan el
empleo atípico y también el trabajo precario378. Ésta llamada flexibilidad en la contratación
laboral, calificada por algunos como modernidad, significa realmente un retroceso en la
evolución del derecho del trabajo y un desconocimiento de numerosos convenios de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT), destinadas a proteger al trabajador. Dicha
fórmula ha traído implícito que el trabajo temporal haya derivado en la formación de
agencias para atender las necesidades inmediatas del personal requerido por los
empleadores, A continuación se mencionan algunos de sus inconvenientes:

Diagrama 3

Nuevos esquemas de contratación basados en contratos mercantiles o convenios


civiles que trajo consigo la apertura comercial

378
Climent, Juan, 2000: 19

474
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Fuente: Elaboración propia basada en Climent, Juan, 2000: 17-19; y González, José,
2006.

Con base en los esquemas anteriormente mencionados, se considera que debiese haber
un punto intermedio y no solamente hablar de flexibilización, sino de flexibilización y
seguridad, que implicaría flexibilidad para el empresario y seguridad para el trabajador. Si
no se diese esto, se considera que se estaría atacando frontalmente a la esencia del
contrato de trabajo; que consiste no sólo en la protección del trabajo, sino también del
trabajador que lo presta. Mediante este proceso, el trabajador queda desposeído de todas
las prestaciones derivadas de la prestación del servicio, como la estabilidad en el empleo,
prima de antigüedad, participación de utilidades, indemnizaciones por riesgo de trabajo,
por despido injustificado, etc., lo que estaría traspasando la responsabilidad de esta
relación a las llamados esquemas outsourcing; ya que éstas se encargan de encubrir las
relaciones laborales informales, favorecen la evasión fiscal y precarizan el empleo, sin
seguridad para los trabajadores.379

Por ello es importante regular las empresas outsourcing, ya que con el pretexto de que se
contrata a una tercera empresa para hacer un servicio, los patrones dejan de ofrecer a
sus empleados beneficios inherentes a la contratación, como son las prestaciones de ley.
Estos esquemas de contratación, obviamente no están regulados, por lo que los patrones
cometen abusos en contra de los trabajadores, como es el hecho de registrar a los
379
Climent, Juan, 2000: 17-19

475
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

trabajadores ante el Instituto Mexicano del Seguro Social con un salario inferior del que
perciben y, por consiguiente, los pagos por retiro, cesantía y pensión de los empleados se
ven disminuidos.

Esto es frecuente, ya que, en la práctica, se trata de evadir las leyes con contratos
mercantiles o civiles, debido a que en éstas está permitida la subcontratación, pero no se
encuentran regulados por la Ley Federal del Trabajo. Es necesario hacer un paréntesis y
reflexionar que de lo que se trata ahora es de colocar en primer plano las cuestiones
vinculadas a la obtención de empleos decentes en todas partes, cosa que cada día ocurre
menos, la protección de la seguridad social y la repartición equitativa de la riqueza, sobre
todo para quienes en realidad la producen, un aspecto fundamental que tendrá que
evaluarse, será la actitud de muchas empresas de negar el derecho de asociarse por
parte de los trabajadores, como ocurre con la trasnacional Wal-Mart, que es hoy la
principal empleadora del mundo y que reiteradamente se ha opuesto y se opone a ello,
dejando sin derechos a la gente que emplea a nivel global.380

Por tal motivo, se considera que la flexibilidad laboral debe tener límites, los cuales se
pueden englobar en cuatro categorías como lo menciona el autor Climent Beltrán:

a) Límites sociales, “consistentes en la resistencia social a la cultura de la flexibilidad,


mediante un sistema de negociación colectiva que dependerá principalmente del poder de
negociación y representatividad de los sindicatos”381. Estos límites sociales hacen
referencia al actuar de los sindicatos para poder contrarrestar el efecto que tiene esta
flexibilidad laboral.

b) Límites sindicales, “advirtiendo que los sindicatos han reaccionado vivamente contra la
flexibilidad que se dirige a limitar la intervención y poder de los mismos en las relaciones
obrero patronales; si bien no siempre existen las condiciones que hagan factible la
intervención de los sindicatos382”, es necesario mediar también el poder sindical frente a la
flexibilidad laboral.

c) Límites políticos, “en el sentido de que la flexibilidad tendrá menos posibilidades de


implantarse en regímenes democráticos, porque en ellos existen normalmente garantías
legales para los trabajadores”383. Por ello, es necesario que las leyes y los encargados de
que se cumplan sean quienes velen por los derechos y garantías adquiridos por los

380
www.eleconomist.es, Wal-Mart, 2007
381
Climent, Juan, 2000: 17
382
Ídem
383
Ídem

476
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

trabajadores.

d) Límites jurídicos, “en cuanto a que el principio de la protección del trabajo aparece en
los textos constitucionales de la mayoría de los países, y ésta además apoyado en
numerosos convenios de la OIT”384, consecuentemente la flexibilidad laboral se encuentra
con las limitantes jurídicas de protección al trabajo, que se han regulado nacional e
internacionalmente.

De igual manera, las críticas al sindicalismo requieren una clara distinción entre los
cuestionamientos legítimos a sus escandalosas desviaciones, y los cuestionamientos al
sindicalismo mismo. Es difícil pensar hoy en países democráticos, donde el sindicalismo
siga permitiendo con total impunidad el enriquecimiento de tantos dirigentes sindicales
corruptos; es indefendible, en el contexto del cambio democrático en México, la
persistencia de estructuras y prácticas autoritarias o abiertamente mafiosas para el control
sindical, prueba de lo cual es que los líderes de la CTM y de la CROC solamente los pudo
separar del cargo su fallecimiento, ya que duraron en su puesto 47 y 30 años,
respectivamente, y actualmente toman el ejemplo algunos líderes históricos, que se
mantienen en el poder por décadas385.

Frente a estas desviaciones, no cabe ninguna tolerancia. Nos hemos acostumbrado,


como si fuera una fatalidad, al cinismo de los líderes sindicales que ostentan su
impunidad. ¿Cómo combatir esto? La clave radica en normar debidamente la exigencia de
procesos democráticos en el interior de los sindicatos; en reconocer y garantizar la
libertad de sindicación y los derechos de las minorías en las organizaciones; y, por
supuesto, en establecer la obligación de transparencia y rendición de cuentas sobre los
recursos de los trabajadores que administran las dirigencias.

Asimismo, a raíz de los grandes procesos mundiales, se han profundizado más aún las
desigualdades entre los países, a tal grado que las decisiones y la economía se ha
centrado en la decisión de unos cuantos gobiernos y empresas transnacionales.

Desde 1982, en México, han aumentado las políticas neoliberales y las privatizaciones.
“Así, de las 500 empresas más importantes del país, las extranjeras, casi todas
trasnacionales, controlaban 14% del capital social total, y con sus alianzas con capitales
nacionales llegaban a controlar el 45.5%, encabezando las ramas más dinámicas de la
economía, en especial las automotrices y de autopartes, eléctrica y electrónica,

384
Ídem
385
Periódico Reforma, jueves 1 mayo 2008, p.1

477
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

maquinaria y equipos, química y farmacéutica, y cada vez más el comercio.

Sólo 2% de estas empresas concentran cerca de 80% del total de las exportaciones
mexicanas”386.

Con el TLCAN, “las grandes empresas originalmente nacionales, aceleran un proceso


doble de asociación con trasnacionales y de expansión trasnacional hacia otros países,
sobre todo latinoamericanos. Mientras tanto, en México se aceleran los niveles de
desigualdad económica y social, aumentan el desempleo y su precarización, se
profundiza el desmantelamiento de la planta productiva nacional con el cierre de miles de
micro, pequeñas y medianas empresas, y se mantienen los niveles de caída salarial y
deterioro social”387. Este deterioro se ha visto reflejado principalmente en el sector laboral.

Adicionalmente, “al mismo tiempo que se mantiene un régimen de control sindical que
permite la continuidad de las políticas de incremento a la productividad y de salarios
bajos, se amplía la brecha salarial entre los trabajadores de México, Estados Unidos y
Canadá. Hoy en día, el salario de una hora de trabajo de un obrero estadounidense
equivale a ocho horas de un mexicano, el porcentaje del producto que recibe el total de
los trabajadores en Estados Unidos es dos veces mayor que el que reciben los
mexicanos”388.

5.6.3 Reforma del derecho sindical.

Para poder expresar un verdadero pero convincente análisis sobre la modernización del
sindicalismo mexicano, será necesario reconocer que, a partir de la globalización, en
nuestro país se gestaron varios cambios importantes que impactaron el rumbo de las
políticas económicas que se venían practicando por décadas (privatizaciones, nueva
política industrial, reducción del gasto y apertura del exterior), algunas de ellas de una
trascendencia enorme, pues se vio afectada la planta productiva del país y el campo
mexicano. Como consecuencia de ello, se dio la decadencia del sindicalismo tradicional,
al perder éste sus privilegios por parte del Estado.

La modernización sindical, se entiende como la adaptación que debe haber los sindicatos
al entorno que se vive actualmente, un entorno sometido a permanentes cambios en el
que surgen nuevos retos y expectativas. Es la transición del sistema corporativo a otro
sistema capaz de definir objetivos, optar por la mejor forma de alcanzarlos y evaluar los

386
Bensusán, Graciela, 1999: p.166
387
Bensusán, Graciela, 1999: p.166
388
Bensusán, Graciela, 1999: p.166

478
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

resultados obtenidos.

Algunos de los principales obstáculos para la modernización sindical, han sido:

• Carencia de proyectos: salvo raras excepciones, las organizaciones sindicales no han


generado un proyecto alternativo que les permita delinear ágilmente una política laboral
acorde con las reformas del país389. La actitud general por parte de los sindicatos se ha
visto de carácter paternalista, sin cambios que permitan su adaptación a los cambios que
se viven día con día.

• Incapacidad de adaptación: ante las nuevas tecnologías, las nuevas formas de


organización del trabajo y la redefinición de las relaciones laborales, las organizaciones
sindicales han sido incapaces, las más de las veces, de superar las formas tradicionales
de intervención y acción sindical390. La resistencia sindical ha influido para poder
adaptarse a nuevos cambios, imposibilitando la implementación de algún cambio o
beneficio, en parte derivado a la cultura laboral que existe en el país.

• Erosión de la representación sindical: se vive una época en que las dirigencias


sindicales no logran expresar los intereses y anhelos de los trabajadores, afectando los
esquemas de interlocución con las empresas y las autoridades gubernamentales391. La
corrupción interna que existe en los sindicatos ha provocado, en cierta forma, el abuso en
las funciones de los líderes sindicales, dejando atrás aquello por lo cual están luchando.

• Deficiente democracia: los mecanismos de democracia sindical no siempre


corresponden a la expresión plural de los agremiados, debido a que se carece de cauces
institucionales para dirimir internamente las diferencias392. La democracia sindical es un
punto fundamental para lograr que las demandas internas de los trabajadores se den a
conocer, se representen y se les dé voz externamente.

• Divisionismo: compartir propósitos, sumar esfuerzos y abatir los rezagos sociales de


manera solidaria, son incompatibles con el déficit de unidad que aún prevalece en el
movimiento obrero393. En ocasiones, los sindicatos se crean divisiones, en cuanto a
seguidores de un líder o rencillas internas y no ven los beneficios que puede acarrear al
mantenerse unidos por un solo interés, que es el bienestar de los trabajadores.

Fue entonces que se empieza a argumentar que la modernización es incompatible con la


389
Delgado, Gloria, 1997: 544
390
ídem
391
Ídem
392
Ídem
393
Ídem

479
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

relación entre el sector laboral y el sector empresarial, debido a los obstáculos que
representa el sindicalismo corporativo en la competencia con los países industrializados,
ya que, con la apertura de las fronteras, traería consigo la desincorporación de las
empresas estatales y se afectaban los intereses y la fuerza del sindicalismo. Esto sin
considerar que dichos cambios afectarían las formas de organización del trabajo, que son
totalmente opuestas a las que se habían venido operando en el sindicalismo tradicional
mexicano.394

Una vez reconocidas las carencias y deficiencias en la evolución que ha tenido el


sindicalismo corporativo en México, se tratará de dar una opinión, a efecto de incursionar
en una modernización exitosa, competitiva y de calidad.

Este ejercicio debe ir apoyándose en diferentes pilares, para tener una economía sana y
saludable, en la cual se considere a la educación muy estrechamente ligada con la
ciencia, la tecnología y la energía.

Dado a que son muy extensos los puntos que se tendrían que tocar, y obviamente sería
objeto de un estudio más profundo, este trabajo se enfocará, en lo particular, a las
medidas que se podrían tomar para una modernización sindical, las cuales podrían ser las
siguientes:

a) Capacitación para implementar la calidad y el valor de los servicios; Capacitación


de los trabajadores para el desarrollo del capital humano.

Actualmente, en cualquier organización, se reconoce la importancia del capital humano y


la contribución que éste efectúa en la organización para el logro de metas específicas. La
preparación de los trabajadores para aumentar la productividad, a través de la
capacitación orientada a estrategias de desarrollo, identificando los criterios de
desempeño de los trabajadores, son los pilares para el logro de dichas metas, las cuales
deben ser acordes con la realidad, desafiantes pero alcanzables.

La calidad en el trabajo puede ayudar a incrementar el valor en los servicios y sólo se


logra a través de la capacitación. La capacitación es el proceso de aprendizaje mediante
el cual los individuos adquieren competencias laborales; la relación entre el trabajo y la
educación, como agente de cambio, es a lo que llamamos la competencia laboral. Se
refiere básicamente a la aportación de conocimientos, experiencia, tecnología
organizacional y la destreza profesional de quien hace que la empresa obtenga una

394
Ídem

480
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

ventaja competitiva en el mercado mundial.

La capacitación de los trabajadores para el desarrollo de productos energéticos y bienes


de capital, hace referencia a que en México la mayoría de la industria es manufacturera,
pero en cambio si la producción se especializa en bienes de capital, hace mucho más
rentable la producción y, como antes se menciona, los trabajadores se hacen capaces de
hacerlo y no únicamente de obtenerlo.

Lamentablemente, la mayoría de las empresas en México se encuentran con un gran


obstáculo para poder hacer cualquier cambio en su organización: los sindicatos. Y en este
trabajo lo que se busca es encontrar opciones para la implantación de mejoras que
conduzcan a mejores condiciones de trabajo, con la consecuente modernización y
participación sindical.

La concertación empresa-sindicato es una de las mejores armas que poseen ambos para
llegar a acuerdos; y para ello, se debe contar con objetivos perfectamente definidos antes
de emprender cualquier acción formativa. Todo plan de formación es un medio, no un fin
en sí mismo.

Los sindicatos tendrían que vislumbrar que, ante la inminente globalización, no se puede
continuar con prácticas corporativistas; se deben implementar medidas para que los
trabajadores de México estén preparados y debidamente capacitados para lograr ser
altamente competitivos.

b) Democratización de las fuerzas sindicales.

El proceso de democratización sindical implica la aplicación de mecanismos e


instrumentos de vigilancia, supervisión, fiscalización, transparencia y auténtica rendición
de cuentas de los representantes sindicales, propiciando la alternancia y la competencia
electoral interna, para provocar que los candidatos y aspirantes a los cargos de
representación, estén comprometidos y obligados a velar por los intereses de los
trabajadores.395

Para lograr una mayor efectividad en la defensa de los intereses de los asalariados, un
factor importante es la democracia interna sindical. Es por ello que se requiere de una
instrumentación más a fondo en cuanto a la regulación de los procedimientos electorales
sindicales, esto es, que sean transparentes y eviten la intromisión gubernamental. Implica
que la democracia interna debe convertirse en un requisito para legitimar las

395
González, José, 2006:161-164

481
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

organizaciones.

“La transparencia y la rendición de cuentas constituye una asignatura fundamental para la


democratización sindical en México”396. Sin embargo, el aspecto de la transparencia es
muy reciente y nada fácil, aún cuando se proclamen democráticas algunas
organizaciones, se resisten a ella, alegando razones de autonomía, por el temor a que los
trabajadores tomen un verdadero control de sus sindicatos.

c) Libertad y autonomía sindical de sus trabajadores.

Estos conceptos de libertad y autonomía sindical de los trabajadores se ven


caracterizados por las necesidades históricas de los trabajadores, pero a la vez se
contrapone este pensar con la difícil coyuntura actual, en donde el capital predomina a
nivel mundial y en el que cada país es protagonista de este escenario.

La libertad sindical, según el Convenio 87 sobre libertad sindical de la OIT, es el derecho


que garantiza a todos los trabajadores, sin ninguna distinción y sin autorización previa, el
derecho de constituir organizaciones que estimen convenientes y afiliarse a ellas.397

La suscripción del Convenio 87 en materia de Libertad sindical de la Organización


Internacional del Trabajo, en términos del artículo 133 constitucional, le ha otorgado un
status superior a la propia Ley Federal del Trabajo, donde deja claro que los trabajadores
sin distinción pueden constituir las organizaciones que consideren convenientes, redactar
con autonomía sus estatutos, elegir libremente a sus representantes, organizar su
administración y formular su plan de acción398; no obstante de que sean obligatorios estos
puntos, en ocasiones se han violado estos derechos a través de la injerencia del Estado
para mantener el control sindical. Por lo cual, se requiere dar un cumplimiento efectivo del
principio de sindicación.

La autonomía sindical es la posibilidad de dictarse para sí mismo normas de conducta,


establecer un régimen jurídico, ligado al principio de unicidad sindical399. Existe una
singularidad en esta autonomía, ya que mientras se tenga más autonomía sindical,
obviamente corresponde a menor fuerza y se puede producir el fenómeno de que la
independencia implica el riesgo de no tener fuerza suficiente y como consecuencia lleve a
la pérdida de autonomía, es por ello, que en ocasiones el adherirse a las centrales

396
Ibidem:168
397
Ibídem: 246
398
Ibidem:165
399
De Buen, Néstor, 1996: 674

482
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

representa desconfianza.

d) Nuevas formas de organización del trabajo.

Hacer más flexible la organización en cuanto al trabajo o funciones que desempeñen los
trabajadores. Esto, con la finalidad de que los trabajadores participen en las distintas
actividades de la empresa, procurando su especialización en determinada área y, para
evitar que se vuelva monótono su trabajo, rotar al personal de una misma área, hacerlos
de cierta manera polivalentes y capaces de adaptarse a distintas tareas para activar su
capacidad de aprendizaje.

e) Planteamientos sindicales apegados a la realidad del país.

Es cierto que los salarios en México están por debajo de la capacidad adquisitiva de los
trabajadores, pero aún así es necesario que los sindicatos se adecúen a planteamientos
que vayan de acuerdo a la actualidad económica y social del país, y que sean apoyados
haciendo propuestas o proyectos salariales empresa-sindicato, apoyada mutuamente
para lograr acuerdos y consensos.

Con estas medidas, se podrán enfrentar algunos retos actuales y aquellos que están por
venir, en lo que se refiere a la competitividad y modernización del sindicalismo en los
sectores de la economía, en donde predominen los principios de democracia, libertad y
participación.

¿Hacia dónde ir? Como es de todos sabido, los procesos de globalización están
obligando a los organismos sindicales a reformar sus estructuras y alianzas tradicionales,
ya que la misma globalización en sí no permite a los países permanecer aislados. Dichas
organizaciones de trabajadores se están organizando para revisar sus estructuras
internas y externas, para que no sólo se enmarquen dentro de las esferas de la
producción, sino también en las de consumo, bajo agendas de alianzas mucho más
amplias con distintos actores sociales, a nivel nacional e internacional, como son los
grupos indígenas, de mujeres, campesinos, jóvenes, etc., ya que el destino de estas
organizaciones tiende a integrarse internacionalmente ante el embate de las empresas
trasnacionales, orientándose y teniendo como finalidad principal una globalización del
derecho del trabajo, a efecto de disminuir la tendencia de eliminar los derechos adquiridos
y reconocidos a los trabajadores, defendiéndolos para evitar transgredirse con la
flexibilización.

Dichas organizaciones, necesitan transparentar sus operaciones; subir sus contratos

483
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

colectivos a internet es insuficiente, pues se necesita que también hagan públicos sus
estados financieros.

En México, el sindicalismo, como se ha mencionado anteriormente, ha tenido constantes


desviaciones y diferencias con respecto a los fines para los que fue creado.

Sin embargo, es momento de reivindicarse y pasar de ser actores políticos para ser
actores sociales, siendo los principales retos que tiene el combatir la flexibilización laboral
que impone el modelo neoliberal, así como revertir la baja tasa de agremiación400.

Se considera que la solución radica en modernizar al sindicato, ¿Cómo? A través de


normar debidamente los procesos internos, que sean democráticos y transparentes, con
rendición de cuentas sobre los recursos de los trabajadores, a través de una formación de
sus líderes eliminando las prácticas de reelección indefinida; que realmente el cambio
democrático en México llegue a todos los ámbitos y principalmente el laboral, motor de la
economía nacional.

La defensa de la existencia del sindicato no tiene nada que ver con la continuación de las
prácticas de impunidad y corrupción que se vienen dando; simplemente se considera que
debe continuar la existencia del sindicalismo en nuestro país, como medio de defensa de
los intereses de los trabajadores, ante empresas nacionales y trasnacionales, con su
consecuente modernización, para erradicar esas prácticas y mejorar continuamente,
mediante la adaptación a la realidad del país.

En este estudio no se propone eliminar al sindicalismo en nuestro país, puesto que se


estaría atentando contra la libertad de asociación. Asimismo, se vendría abajo la lucha
histórica que ha habido en nuestro país, y por el cual se ha evitado tanta represión; ni
tampoco puede continuar como hasta ahora, ya que día con día se vuelven obsoletas, se
consideran como dinosaurios, al igual que en un tiempo se consideró al partido oficial,
pero que a través de tener que impulsar una democratización, está cambiando. Por eso
es necesario hacer énfasis en que, como viene sucediendo con los partidos políticos, el
sindicalismo en México puede cambiar y transformarse, por efecto del cambio de las
viejas prácticas, por otras de realmente democráticas, generando estructuras
verdaderamente representativas de la fuerza de trabajo y de sus derechos laborales.

La conservación de estas organizaciones sindicales, sirviendo como actor social frente al


Estado y las presiones empresariales, ya que en sus principios básicos se fundamenta

400
Periódico Reforma, 1 de mayo de 2008, p.1

484
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

conservando el derecho básico de la libertad de asociación, base de los sindicatos y de


un sistema de libre negociación colectiva, es el reto para garantizar los derechos básicos
de los trabajadores, particularmente dadas las fuertes presiones por destruir estos
derechos históricos, debido a que la Organización Internacional de Trabajo resulta
incapaz de defender, porque carece de todo poder coercitivo, ya que las presiones de las
empresas trasnacionales por flexibilizar el trabajo son muy fuertes.

Es por ello que estas organizaciones sindicales sirven como marco regulatorio para evitar
excesos de parte de este grupo de empresas y, como actores sociales, deben defender
los derechos más elementales de la clase trabajadora.401

Es necesario considerar que el sindicalismo, a nivel internacional como en México,


debieran considerarse como un mal necesario, ya que por un lado se ha deteriorado su
imagen; pero por otro lado, la gente que se ha agremiado es la única posibilidad que tiene
de defender sus derechos laborales, puesto que con lo único que cuenta es con su trabajo
y no tendría medios de defensa si se llegase a dar un abuso por parte de los empresarios.

Porque “cuando se cuenta con un sindicato auténtico y representativo, muchos problemas


pueden ser solucionados por medio de la contratación colectiva o la gestión cotidiana en
la representación y defensa gremial. Temas de derechos humanos tan complejos como la
discriminación, equidad de género o la salud difícilmente pueden afrontarse de manera
individual, razón por la cual, contar con un sindicato auténtico es fundamental.402” Es por
eso que resulta necesario reiterar la necesidad de que existan estas organizaciones, para
que defiendan los derechos básicos de los trabajadores, como son una jornada normal de
trabajo, un salario digno, prestaciones sociales, etc.

La existencia de las organizaciones sindicales tiene sentido, solo sí cumple eficazmente


su función de ser instituciones útiles para los trabajadores, si representan sus legítimos
intereses con los empleadores y si coadyuvan al fortalecimiento de las fuentes de empleo;
se sabe que actualmente dichas organizaciones sindicales se caracterizan principalmente
por la corrupción que surge internamente y que realmente, como en todo el aparato
burocrático del país, es difícil eliminar de las prácticas cotidianas; sin embargo, lo que se
plantea en este estudio puede lograrse paulatinamente y más en función de las presiones
sociales y empresariales.

5.6.4 Surgimiento de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT).

401
González, José, 2006: 55.
402
Ibidem:174

485
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

La política económica desplegada por los gobiernos neoliberales a partir de los años
ochenta, erosiona severamente el pacto histórico entre et movimiento obrero organizado y
el Estado mexicano. Como resultado de lo anterior ocurren cambios importantes en la
política tradicional de los sindicatos hacia el Estado y hacia sus propios agremiados. Ya
habíamos de los pactos de productividad signados entre parte del sindicalismo oficial y el
empresariado.

Otro intento de modernización sindical se da un tanto en contra y al margen del


sindicalismo tradicional, en parte impulsado por el Estado y en parte merced a un impulso
propio, aparecen organizaciones como la FESEBES, el movimiento forista y, después, la
Unión Nacional de Trabajadores (UNT), como ejemplos de corporativismo neoliberal, que
aspira a generar una interlocución propia con el Estado, buscando el apoyo y
reconocimiento de éste.

El intento de creación de este nuevo tipo de sindicalismo perfilaba la aparición de un


nuevo equilibrio sindical que cuestionaba las viejas formas de representación de los
trabajadores.

La FESEBES, el forismo y la ulterior aparición de la UNT representan experiencias


disidentes al interior del Congreso del Trabajo y fuera de él, respecto de las políticas
neoliberales expresadas en el ámbito laboral sindical.

Si una parte del sindicalismo tradicional luego de oponer cierta resistencia a las nuevas
políticas, acaba aceptándolas y después participando en los convenios de productividad
enmarcados dentro de los lineamientos de la nueva cultura laboral, otros van más allá
adoptando una actitud más prepositiva y de colaboración con el gobierno y sus políticas
modernizadoras, intentando llegar a acuerdos con las empresas que incrementen la
productividad y mejoren las condiciones salariales de los trabajadores. Como se dijo
anteriormente el caso de TELMEX es el más ilustrativo en este tipo de experiencia.

El 22 y 23 de febrero de 1995 el Sindicato Mexicano de Electricistas, el Sindicato Nacional


de Trabajadores de la Educación (SNTE), y la Confederación Obrera Revolucionaria
(COR) llevaron a cabo el primer foro al que denominaron "El sindicalismo frente a la crisis
y ante la nación". El movimiento crece rápidamente y en poco tiempo lo integran 24
miembros, 11 del Congreso Del Trabajo y 13 de otros ámbitos. El 18 de octubre de 1995,
14 organizaciones foristas entregaron al presidente de la República, Ernesto Zedillo
Ponce de León, los resúmenes de las mesas de trabajo del II Foro denominado "El
Sindicalismo ante la Nación: Análisis sobre el Desempleo",

486
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En dicho documento el forismo solicitaba un nuevo acuerdo entre el Estado y sindicalismo


obrero, que permitiera a éste último su participación en el diseño y formulación de las
políticas públicas, en especial las referidas al empleo, seguridad social, y áreas
estratégicas de la industria nacional. El día 19 de septiembre de 1996 el forismo dio a
conocer otra declaración en la que afirmaba su respaldo a las políticas laborales
modernizadoras, al incremento de la productividad, así como a la pretendida reforma de la
Ley Federal del Trabajo, pero solicitaba una mayor interlocución y reconocimiento de su
representatividad ante el gobierno, para esos y otros efectos.403

Es importante destacar cómo el movimiento forista demanda de parte del Estado no sólo
reconocimiento e interlocución para sus organizaciones, sino que le sea reconocida su
capacidad de negociación frente a asuntos diversos, debido a que las políticas
neoliberales habían representado exclusión para los intereses de la base trabajadora. El
movimiento forista pretende llevar a cabo una nueva estructura obrera de carácter unitario
fundada en prácticas democráticas, a decir de los mismos foristas, pero las grandes
diferencias entre sus integrantes, especialmente entre los telefonistas y el SNTE, harían
fracasar el intento. Después de desaparecido el forismo y con la participación de varios ex
miembros de éste se crea la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) que habrá de
continuar la idea de impulsar un sindicalismo modernizado, capaz de insertarse de
manera exitosa en la reconversión industrial.

Otra agrupación sindical que se desarrolla durante la primera parte del gobierno zedillista
es la Coordinadora Intersindical Primero De Mayo, surgida de un proceso de unificación
entre el sindicalismo independiente iniciado a mediados de marzo de 1995. El 6 de Abril
de ese año organizaciones sindicales y sociales manifiestan su voluntad de marchar el día
1 de mayo de 1995, en conmemoración del Día Internacional del Trabajo, luego de que el
Congreso del Trabajo había manifestado su decisión de no participar en el evento.

Entre las agrupaciones que conformarán la Coordinadora prevalece un sentimiento de


rechazo y confrontación hacia las políticas neoliberales, hacia el Estado responsable de
su implantación, así como a las organizaciones del Congreso del Trabajo y a las mismas
foristas, a quienes denominan neocorporativas.

La Coordinadora en su manifiesto a la nación del 27 de abril de 1995 propugna por la


democratización de la vida sindical y la unificación de un sindicalismo libre y autónomo del
Estado, para lo cual establece como objetivo a conseguir la abolición de las estructuras
403
Ortega, Max, y Solís, Ana Alicia, óp. cit. p. 24.

487
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

corporativas prevalecientes. La Coordinadora Intersindical Primero de Mayo se integró por


agrupaciones como el Movimiento Proletario Independiente (MPI), el Frente Autentico del
Trabajo, y el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana
(SITUAM), entre otras más.

La Coordinadora enaltece las vías de la movilización, la huelga, la confrontación con el


Estado, a efecto de lograr un cambio profundo de las políticas laboral y social, así como
de lograr la democratización y unificación del sindicalismo mexicano. La Coordinadora no
sobrevivió mucho tiempo y a mediados de 1997 inicia su desaparición. Al finalizar el
sexenio de Ernesto Zedillo se tenía lo siguiente con respecto al mundo sindical. El
Congreso del Trabajo mostraba su incapacidad en la representación y defensa de los
trabajadores, aliado del Estado mexicano que cada vez lo desdeñaba más. LA UNT, a
excepción del sindicato telefonista, no había logrado sus propósitos refundadores y
modernizadores y competía con el Congreso del Trabajo por lograr la atención
privilegiada del Estado, en una especie de neolombardismo, como lo ha llamado Enrique
De la Garza, La Coordinadora intersindical Primero de Mayo, no pudo ir más allá de
reeditar formulas combativas de los años setentas y terminó naufragando.

Poco después aparecerá el Frente Sindical Mexicano, teniendo como base al Sindicato
Mexicano de Electricistas, que propugna por una política de corte nacionalista.

Así concluía el siglo entre el sindicalismo mexicano de cara a las políticas neoliberales
que habían venido a dislocarlo, y frente al cual no alcanzaban a dar una respuesta clara.

5.6.5 Política electoral y corporativismo sindical.

En el gobierno de Ernesto Zedillo se llevó a cabo una importante reforma electoral que
abriría cauce a la manifestación del descontento social acumulado durante más de dos
sexenios de neoliberalismo, así como a la inconformidad ante un sistema político que
luego de muchas décadas de existencia se negaba a superar sus anquilosadas prácticas
autoritarias.

Uno de los puntos de esta reforma que golpeaba directamente el corporativismo, era la
prohibición de la afiliación colectiva a los partidos políticos.

La reforma electoral representó importantes avances democráticos, que habrían de


permitir el avance de los partidos de oposición tanto en el Congreso de La Unión, como
en los gobiernos de diferentes entidades de la república mexicana.

Ante una realidad de gran descontento social y mayor competencia política el sindicalismo

488
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

corporativo oficialista reafirmaba su alianza con la causa priista y sus gobiernos, al tiempo
que hacia énfasis en la necesidad de que los candidatos del PRI realizaran campañas
intensas para contrarrestar el avance de la oposición.

En estos años el corporativismo obrero sumó a su decadencia, desprestigio y ya poca


representatividad, la muerte de su líder emblemático, Fidel Velázquez, que había
impulsado el sindicalismo oficial desde los inicios del siglo XX, y había sido visto como la
encarnación misma del priismo:

En las elecciones de 1997 el PRI obtuvo 239 diputados (47.8%); el PAN 121 diputados
(24.2 %); el PRD 125 diputados (25 %); el PT 7 diputados (1.4 %); y el PVE 8 diputados
(1.6 %).

Como se ve, luego de las elecciones federales de 1997 por primera vez en la historia de
México, en la cámara de diputados el PRI era minoría frente al conjunto de la oposición.

En lo que respecta a la cámara de senadores el PRI obtuvo 76 posiciones; el PAN 31; el


PRD 15; el PT 1 senador; el PVE 1 senador; así como 3 senadores independientes. De
las 239 diputaciones priistas el sector obrero logró 40 (15 %); el sector campesino 69 (29
%); el sector popular 135 (56 %)404

De las senadurías logradas por el PRI en 1997, 8 pertenecieron al sector obrero (11 %); 5
al sector campesino (7 %); y 63 al sector popular (83 %).

Como se puede advertir en los resultados electorales para el PRI en 1997, el sector
obrero resultó el menos favorecido, formándose una brecha muy grande con el sector
popular que aparecía con una gran mayoría priista, tanto en la cámara de diputados como
en la de senadores.

Los resultados parecían no dejar duda de los estragos que las políticas neoliberales
venían ocasionando entre la clase trabajadora, así como de la escasa representatividad
de las burocracias de la dirigencia sindical, que cada vez perdía más el control sobre [as
bases obreras ante su incapacidad para generar beneficios tangibles para las mismas.
Las diputaciones obtenidas por el sector obrero en 1997 se distribuyeron de la siguiente
manera. La CTM obtuvo 28 posiciones; la CROC 3; la CROM 3; la FSTSE 6; 1 el sindicato
ferrocarrilero.405

404
La sumatoria de las diputaciones por sector no arroja 239 sino 244, sin embargo esos son los datos
ofrecidos en el original. La diferencia de 4 diputaciones no afecta significativamente los porcentajes.
405
La sumatoria de las diputaciones por central obrera arroja 41, sin embargo son los datos ofrecidos en

489
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

En los lugares donde el sindicalismo corporativo afilia a un mayor número de trabajadores


como el D.F, EL PRI apenas logró el 23,1 % de los votos, mientras que en los años de
1991 y 1994 había logrado el 44.25 % y el 39.53 %, respectivamente. La caída de la
votación para el PRI en el DF en 1977 fue aún más drástica que en 1988, cuando alcanzó
el 27. 61 % de la votación total.

En otros estados donde el sindicalismo corporativo afilia también a una gran cantidad de
trabajadores los resultados fueron similares a los obtenidos en el DF. En Veracruz el PRI
en 1991 obtuvo 72.5 % de los votos, en 1994 el 55.22 %, y en 1997 el 46.73 %, En
Tamaulipas el PRI obtuvo 6116 % en 1991, 49.33 % en 1994 y 46.73 % en 1997.406

En el Estado de Jalisco la votación para el PRI fue de 60.24 % en 1991 y de 34.78% en


1977, enSinaloafuede63.81 % en 1991 y de 41.81 %en 1997.407

En Guanajuato fue de 50.77 % en 1991 y de 33.15 % e 1997. En Puebla de 66,63 % en


1991 y de 46.91 % en 1997. Se puede ver la tendencia decreciente de la votación priista
en estados donde en tiempos pasados las organizaciones corporativas obreras
aseguraban el voto "duro" entre los trabajadores sindicalizados. Como ya se ha dicho,
seguramente el desgaste del sistema político, el avance de la oposición, las reformas
electorales, pero también, los efectos de las políticas neoliberales puestas en práctica en
los años ochentas, llevaron a un desfondamiento del rígido control corporativo ejercido
durante muchas décadas.408

5.6.6 Propensiones del sindicalismo mexicano.

Al menos son cuatro los asuntos muy significativos frente a los cuales el sindicalismo tuvo
que manifestarse en un sentido u otro: la intención de gravar con el impuesto al valor
agregado (IVA) alimentos básicos y medicinas; la pretendida privatización del sector
eléctrico; las propuestas de reforma a la Ley Federal del Trabajo, y la modificación al
contrato colectivo de los trabajadores del Seguro Social realizada desde la Cámara de
Diputados.

Ha sido precisamente ante estas cuestiones que han aflorado las verdaderas posiciones
de los distintos dirigentes sindicales de cara a la administración foxista, más allá de
declaraciones que buscan esconder o simular las verdaderas intenciones de los actores

el original. La diferencia de un diputado no afecta significativamente el porcentaje.


406
Vargas Guzmán, Reyna, óp. cit. p. 100.
407
ibídem
408
ibíd. p.252.

490
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

del mundo laboral.

Ante el intento de gravar con el IVA alimentos y medicamentos la respuesta del


sindicalismo oficial e independiente en general puede decirse que fue de rechazo. La
CTM y el Congreso de Trabajo, a través de Rodríguez Alcaine, y la UNT, en voz del
dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), hicieron
saber al titular del ejecutivo su rechazo a la llamada reforma fiscal del foxismo.409

Una de las primeras manifestaciones de abierto rechazo a las políticas foxistas fue
precisamente la del evento del Museo de Antropología de la Ciudad de México, con
motivo de la conmemoración del I de mayo del 200I. En tal ocasión el presidente fue
duramente abucheado por los trabajadores que ahí se encontraban ante la mención del
asunto del IVA.

En lo que respecta al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) frente


al mismo asunto del IVA, su posición inicial fue de un sospechoso mutismo, que después
encontraría explicación en el franco apoyo de diputados priistas, fieles a Elba Esther
Gordillo, lideresa del SNTE, a esa propuesta presidencial que, no obstante, finalmente fue
derrotada al interior de la Cámara de Diputados.

Si alguna de las antiguas organizaciones corporativas ha mostrado un apoyo claro al


gobierno panista que tomo el poder en el año 2000, es precisamente el SNTE a través de
su lideresa Elba Esther Gordillo. La dirigente magisterial entabló una estrecha relación
con el presidente FOX y la esposa de éste, al grado de que su actuación ha sido vista
como una traición al propio Partido Revolucionario Institucional.410

Lo cierto es que Elba Esther Gordillo ha apoyado propuestas del foxismo en desmedro de
las posiciones del PRl, ha propiciado (a salida de una gran cantidad de burócratas de la
FSTSE, uno de los bastiones corporativos del revolucionario institucional, e incluso ha
pretendido la conformación de un nuevo partido político a partir de las bases magisteriales
por ella controladas.

Definitivamente ha sido en este sector donde el sindicalismo corporativo ha registrado sus


mayores descalabros luego de la pérdida del poder presidencial por parte del PRI. Apenas
el 1 de junio el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje concedió el registro a la
Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos (FEDESSP), grupo

409
Quiroz Trejo, José Othón, "Sindicalismo, núcleos de agregación obrera y corporativismo en México:
inercias, cambios y reacomodos en El Cotidiano, núm., 128, noviembre-diciembre de 2002 p. 12.
410
Ibíd. pág. 15.

491
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

disidente apoyado por Elba Esther Gordillo, con lo cual se rompió el monopolio de la
representación burocrática federal que por muchos años mantuvo la FSTSE.411

A partir de la fecha señalada la FEDESSP, que agrupa a más de un millón 600 mil
trabajadores de base sindicalizados, tiene reconocimiento legal para asumir la
representación legítima de sus agremiados ante todas las instancias de gobierno.

El Tribunal dio cumplimiento a la sentencia dictada por la Segunda Sala de la Suprema


Corte de Justicia de la Nación, que ya había concedió amparo a la FEDESSP.

En relación a la privatización del sector eléctrico el CT y la CTM han manifestado una


posición favorable. La UNT y el Frente Sindical Mexicano (FSM), por el contrario, han
manifestado su rechazo a tal medida. En especial el Sindicato Mexicano de Electricistas
(SME), integrante principal del FSM, ha mantenido una lucha constante en contra de los
intentos de privatización de la industria eléctrica nacional.

En lo relativo a reforma la Ley Federal del Trabajo el CT y la CTM han mostrado una
posición favorable, contrariamente a lo manifestado por el sindicalismo independiente,
sobre todo la UNT, a través de dos de sus principales organizaciones: el Sindicato de
Trabajadores Telefonistas de la República Mexicana (STTRM) y el Sindicato Nacional de
Trabajadores del Seguro Social (SNTSS).

Frente a las dos cuestiones señaladas, privatización eléctrica y reforma laboral, el SNTE
ha manifestado sólo silencio que podría interpretarse como un tácito consentimiento a las
mismas, dados los antecedentes del apoyo de diputados elbistas a la pretendida reforma
fiscal foxista, ya comentada con anterioridad.

El apoyo del CT-CTM a la reforma laboral obedece a que, como ya fue señalado, sus
contenidos no amenazan la posición de las dirigencias corporativas, antes, más bien, las
refuerzan; imposibilitando aún más el surgimiento de otras agrupaciones sindicales, o la
democratización de las ya existentes.

Las reformas al régimen de pensiones y jubilaciones de los trabajadores del Instituto


Mexicano del Seguro Social, aprobadas por los grupos parlamentarios del PAN, del PRI Y
del PVE en el Senado, merecen un comentario especial por la forma en que fueron
llevadas a cabo, por lo que implica tal modo de proceder por parte del gobierno, y por las
repercusiones de tal acción en el ámbito laboral.

411
Ovaciones. 2 de junio de 2005

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Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Como es sabido hubo un largo periodo de negociación de las reformas a la Ley del
Instituto Mexicano del Seguro Social entre el SNTSS y el propio instituto. Sin embargo,
luego de muchos forcejeos y desencuentros entre las partes, las reformas fueron
operadas desde el poder legislativo con los votos de los partidos mencionados y, por
supuesto, sin el concurso del sindicato de los trabajadores del Seguro Social.

Esta ha sido la confrontación más ríspida entre el gobierno foxista y el llamado


sindicalismo independiente, pues señaló los límites de la relación entre estos dos actores
del mundo laboral. La UNT, y en especial el Sindicato Nacional de Telefonistas de la
República mexicana (SNTRM), que a principios de sexenio buscaron un acercamiento con
el nuevo gobierno, presentándose como los portadores del sindicalismo moderno, pronto
toparon con el verdadero carácter del gobierno del cambio. Habría negociación siempre y
cuando no se rebasara los contornos de la política económica implementada por el
gobierno.

En realidad, la aprobación de las mencionadas reformas vinieron a confirmar lo que se


venía observando en los sexenios inmediatamente anteriores, la capacidad de
interlocución y negociación del corporativismo frente al Estado mexicano, estaba
severamente debilitada.

El corporativismo oficial, por su parte, manifestó un completo apoyo a las reformas hechas
a la Ley del Seguro Social.

Las reformas a la Ley del Seguro Social lograron concitar la manifestación más unificada
del sindicalismo independiente frente al Estado mexicano durante los primeros cuatro
años de la administración foxista. La UNT, de quien forma parte el SNTSS, directamente
afectado por la mencionada reforma, se lanzó a la calle junto con el FSM y la principal
organización de éste, el SME, demandando la anulación de las reformas operadas por el
legislativo mexicano.

Telefonistas, electricistas, universitarios, y muchos trabajadores más, se manifestaron


multitudinariamente en el zócalo capitalino, los días 31 de agosto y 1 de septiembre del
2004, exigiendo la derogación de las mencionadas reformas.

Las diferentes organizaciones sindicales independientes asumieron que las reformas


constituían un ataque a todo el sindicalismo no oficial, y que, por lo tanto, se imponía una
respuesta unificada de todos sus contingentes. La participación fue de tal magnitud que
se pudo llegar a pensar que el sindicalismo podía recobrar la importancia política que tuvo

493
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

en otros tiempos, y de que ese podría ser un momento adecuado para avanzar hacia una
mayor unidad orgánica del movimiento sindical independiente.412

No obstante la gran movilización de los independientes no fue posible revertir las reformas
a la ley del Seguro Social.

Durante la conmemoración de los festejos del día del trabajo de este ano del 2005 el
actual dirigente del CT, Víctor Flores Morales, dijo ante el presidente de la república que
el organismo que él representa está de acuerdo en nuevas privatizaciones, si es ese el
camino para lograr mayores niveles de empleo y de salario. Fernando Salgado Delgado,
representante de la CTM, señaló en el zócalo capitalino que su organización no atentaría
contra México, y que, por lo tanto, siempre seguirá el camino de las instituciones.413

Tanto el CT como la CTM en particular no cumplieron su promesa de solicitar un


incremento salarial de emergencia pues, dijo Rodríguez Alcaine, que era inútil solicitar
incrementos salariales al Presidente de la República. Isaías González, dirigente de la
Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, llamó a la firma de un pacto
político que incluya a toda la sociedad y que formule una gran política de objetivos
nacionales comunes.414

El sindicalismo independiente, por su parte, se manifestó por más empleo y mejoras


salariales, además de insistir en su rechazo a la reforma a la Ley Federal del Trabajo
pretendida por el gobierno federal. Otra parte importante de sus manifestaciones
estuvieron dedicadas a rechazar la privatización de la industria eléctrica nacional.

Los independientes se dijeron dispuestos a seguir defendiendo los derechos políticos de


Andrés Manuel López Obrador, y llamaron a conformar el frente patriótico nacional que
aglutine a todas las fuerzas de izquierda.415

412
Xelhuantzi López, María. El sindicalismo mexicano: entre la coyuntura y la historia, en El Cotidiano. núm. 128,
noviembre-diciembre de 2002, págs. 21 y 22.
413
El Financiero, 2 de mayo de 2005.
414
Ibídem.
415
Ibídem.

494
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Conclusiones

En México la regulación de las relaciones laborales tiene como principio a tutelar el de


proteger y mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, por eso el derecho laboral
mexicano desarrolló conceptos como el de irrenunciabilidad, la protección así como la
reivindicación al trabajador. En este sentido, cuando se plantea la necesidad de una
reforma laboral, se tiene que partir de aquella que respete el contenido del artículo 123
constitucional y sus elementos básicos como el derecho al empleo, a un salario digno y a
la libertad sindical.

Asistimos a un contexto de competencia global donde el mercado laboral no está exento


de la presión que dicha competencia implica; donde sobre todo los países del oriente, con
China a la cabeza, han pauperizado el salario y las condiciones laborables con el
propósito de elevar la producción y de concentrar el mayor capital externo para su
inversión. Los efectos negativos de tales prácticas inhumanas, han generado en el
mercado laboral mundial la quiebra de muchas industrias, como la del zapato en México;
o bien la recomposición de las grandes transnacionales que ven en esos territorios las
ventajas que los consoliden como líderes en el mundo, dejando de lado los impactos
negativos a la clase trabajadora de allende el oriente.

Tales circunstancias nos obligan a sumarnos al resto de los países en cuanto a proteger
los derechos laborales de todos los trabajadores en el mundo, en razón de sus derechos
humanos, tal y como se ha pactado en el concierto de las Naciones Unidas. En este
sentido, respetar el principio de un pago justo por las tareas realizadas es decir, una
remuneración adecuada por el trabajo realizado, así como los mínimos de seguridad
social asociados al empleo.

El reto en estas condiciones, obliga al Estado en su conjunto a conciliar las posiciones


justas de la relación capital-trabajo, en un marco de competencia global. Por un lado la
exigencia de la reforma laboral acorde a los reclamos patronales de flexibilizar la relación
y los esquemas de trabajo; y por la otra la de proteger los derechos laborales de los
trabajadores.

Luego entonces, el sindicalismo en México lejos de quedarse al margen debe informarse


plenamente de los nuevos retos así como de las mejores prácticas mundiales que
permitan incentivar la generación de empleos como la protección de los derechos
laborales. Su intervención debe ser cautelosa y certera, pero siempre encaminada a

495
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

aportar una mejor solución, que beneficie y garantice una estabilidad laboral para sus
agremiados.

La aportación de ideas y propuestas de nuestro sindicalismo, deben estar orientadas a


apoyar y elevar el nivel de producción, hacer consiente a los dueños del capital que una
alianza obrero-patronal como en Japón sienta las condiciones del despegue económico
del país. Por lo que sus aportaciones a la reforma deben ser concretas, congruentes y
pertinentes; sin menoscabo de la defensa de los derechos de los trabajadores y en
consideración al contexto de competencia actual.

Dar el paso a esta nueva visión, pasa por evolucionar en las relaciones del sindicalismo
con el Estado. Recordemos que el sindicalismo mexicano ha sido el pilar del
corporativismo, que en su momento histórico permitió al sistema político mexicano
articularse en torno al cumplimiento de las banderas y programa de la Revolución
Mexicana, y que rindió frutos para la estabilidad política de su momento, pero que derivó
en una concentración de poder donde los intereses de los trabajadores pasaron a
segundo plano.

El desafío es grande, actualmente los liderazgos sindicales no solo sufren un fuerte


desprestigio ante la opinión pública, sino que el mercado laboral ha generado cambios en
la forma en que las personas se emplean. Además, en su momento el Estado mexicano
propicio la creación de estructuras corporativas que permitían tomar decisiones e
instrumentarlas con el menor nivel de conflicto político posible. Mitigar y controlar el
conflicto producto de las demandas de los trabajadores, se volvió la vocación de los
liderazgos de los sindicatos, algunos de ellos creados exprofeso, dándole sustento a la
legitimidad del gobierno y a las carreras políticas de los que participaban con el partido en
el gobierno en la lucha por el poder.

En las nuevas reglas del juego, el Estado tiene que dejar de intervenir ya sea directa o
indirectamente en asuntos Sindicales, garantizando con el marco regulatorio un piso
parejo para todos. Por lo que la reforma debe unificar todos los marcos normativos en uno
solo, en el que se reproduzcan todas las condiciones y prestaciones que son iguales para
cualquier trabajador, y se marquen las diferencias y limitaciones que pueda tener el
ejercicio de ciertos derechos tomando en cuenta el servicio que se presta y la finalidad del
mismo.

El mercado laboral en México sigue manteniendo prácticas injustas y en la mayoría de las


ocasiones el trabajador se ve en la necesidad de aceptar las condiciones establecidas por

496
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

el empleador aún cuando tenga que firmar papeles en blanco para que el patrón a su libre
albedrío pueda hacer uso de él en forma de una renuncia y dejar sin defensa en sus
derechos al trabajador; por lo que la defensa de los derechos laborales solo es posible en
tanto sea transparente toda forma de contratación, conforme a la Ley.

Como hemos señalado, la tendencia a aumentar la competitividad y productividad en el


mercado global ha determinado en gran medida la flexibilización del trabajo, que tiene
como propósito la flexibilización de la contratación y la precarización del empleo,
impactando cuestiones de carácter global como el desempleo creciente del mercado
formal, la propagación del mercado informal, la disminución de la seguridad social, la
privatización de empresas estatales, propuestas de reformas para transformar las leyes
laborales, así como la disminución de la población sindicalizada.

A nivel mundial, la tendencia es flexibilizar las condiciones de trabajo, a través de la


subcontratación y el pactar individualmente las condiciones de trabajo, sin la necesidad de
pactarlas de manera colectiva, es decir, a través del sindicato, lo cual pone en riesgo los
derechos laborales de los trabajadores. Además de la reducción de la plantilla del
personal fijo, con la contratación de servicios de “outsourcing”. En México, el sector
empresarial pugna por la flexibilización, tomando en cuenta el desarrollo tecnológico, lo
que es negociable en tanto no atente contra la estabilidad en el empleo y la libertad
sindical para la negociación de las condiciones laborales.

El fenómeno del corporativismo también ha evolucionado, observamos cómo a partir del


cambio de régimen en el año 2000 con el ascenso del PAN a la presidencia de la
república, las grandes centrales obreras como la CTM, CROC, etc. Perdieron los niveles
de negociación del pasado, lo que debilitó y dividió aún más los vínculos entre la cúpula
sindical corporativa y el partido oficial, al no tener los apoyos y privilegios del pasado
reciente. Donde su capacidad de mediar por los derechos de los trabajadores no solo
perdió fuerza sino que la recomposición de los liderazgos se guio por una lógica de perder
el menor poder posible ante las nuevas autoridades, poniendo por delante los intereses
de los líderes que no los de los trabajadores.

Cambiar la visión del nuevo sindicalismo en México es urgente ante los vertiginosos
cambios del mercado laboral, y de las propuestas de un nuevo marco normativo que
regule las posibles nuevas condiciones laborales. Esta visión, deberá recobrar su calidad
de actor fundamental en el mundo del trabajo, convirtiéndose en factor de cambio, dando

497
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

sentido a las transformaciones laborales, que servirán para ser una institución útil a los
trabajadores.

Su participación es condición fundamental para evitar la desregulación masiva de los


derechos adquiridos con relación al trabajo. La nueva visión sindical debe entenderse
como la necesidad del sindicato de adaptarse al entorno, a los cambios y a los retos que
tiene frente a la globalización. Lo cual atraviesa por el reto de consolidar la unidad del
movimiento sindical, ya que se puede observar que el sindicalismo mexicano se
encuentra actualmente en decadencia, sin proyecto, disperso, confrontado y dividido,
tanto en el sindicalismo llamado oficial como en las grandes centrales como la CTM,
CROC, entre otras.

En ese contexto, urge la formación y capacitación de los cuadros sindicales y sus


dirigentes, para estar en condiciones de igualdad ante la negociación con los
empresarios, ya que de eso depende que en las reformas se tenga la capacidad de
entender el contexto, dimensionar la magnitud de los cambios propuestos, y garantizar a
la par los derechos de los trabajadores.

También es el momento ya de que la capacitación de los trabajadores deje de ser una


bandera solo para la presión en la negociación de condiciones laborales, y se convierta en
la plataforma de despegue de las nuevas condiciones para la productividad del país, al
garantizar al “capital” que contará con el talento humano que requieren los cambios
tecnológicos de la actualidad, con estándares a nivel mundial. Por lo que los modelos de
capacitación deben estar orientados a la certificación de competencias laborales que
demande el mercado laboral tanto nacional como internacional, abriendo con ello una
pluralidad de opciones de contratación, mejor remuneradas y enlazadas con las
necesidades de talento humano que exigen los cambios tecnológicos.

Esto permitiría un cambio sustancial de la cultura laboral en los sindicatos, para que los
trabajadores compartan la visión, misión y valores de la empresa, así como crear la
cultura de una mejora continua en todos los procesos que se realicen y, por supuesto,
desarrollar una cultura de servicio.

Como se analizó, los conflictos individuales de trabajo surgen por desequilibro de los
factores de la producción o por violación a un derecho, siendo los más comunes los de
naturaleza jurídica y de contenido económico, esto en virtud de que frecuentemente
existen violaciones de cláusulas de carácter económico; o que son el resultado del

498
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

incumplimiento de prestaciones otorgadas por la ley, en beneficio de los trabajadores o


por interposiciones a los convenios celebrados al inicio de la relación de trabajo.

En este sentido, la reforma laboral debe reconocer que los derechos laborales
irrenunciables tienen la finalidad de proteger al trabajador de los actos unilaterales y
arbitrarios por parte del patrón, lo que significa que ante las formas de terminación del
conflicto de trabajo como son el convenio, el desistimiento y la transacción, la Junta de
Conciliación y Arbitraje debe poner más atención para evitar que se dejen sin efectos
disposiciones del Derecho del Trabajo. Por lo que los funcionarios del trabajo deben
vigilar el pleno cumplimiento de los derechos laborales, inclusive mediante la asesoría
legal correspondiente, en el sentido de evitar el que celebren convenios con el patrón
después de que los tribunales del trabajo emiten laudo condenatorio que favorece al
trabajador, aun cuando se encuentre pendiente de resolverse el amparo planteado en su
contra e inclusive ya resuelto ese juicio de garantías, el cual no favorece al quejoso, de tal
forma que el laudo dictado queda firme de forma definitiva.

Lo anterior se complica en la realidad, cuando observamos que en los procesos se


dificulta cuando no es que se restringe el acceso a la información laboral, además de que
se hacen lentos los trámites de los asuntos, generando con ello desconfianza de los
órganos de atención.

Aunado a lo anterior, en la materia laboral no se requiere título profesional para defender


a un trabajador o un patrón, lo que provoca que el nivel de argumentación sea deficiente
técnicamente hablando, poniendo en riesgo los intereses del quejoso.

En este sentido, consideramos adecuado la creación de los tribunales judiciales de lo


social que se encarguen de resolver las controversias laborales, así como las de
seguridad social (esto supone la desaparición de las juntas con su característica tripartita
que constitucionalmente tiene el carácter administrativo, pues pertenecen al poder
ejecutivo). Estos órganos deberán ser equivalentes en lo federal como en lo local a todos
los aspectos ya señalados.

PROPUESTA DE POLÍTICAS PÚBLICAS

• Constituir tribunales judiciales de lo social que se encargue de resolver las


controversias laborales, así como las de seguridad social.

499
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Líneas de acción

1. Diseñar el nuevo marco de administración de justicia laboral con la


participación de las Juntas federales y locales de conciliación y arbitraje;
además de las barras de abogados y centros de enseñanza superior
especializados en derecho laboral.

2. Coadyuvar desde los centros académicos especializados en los


diagnósticos y propuestas para la constitución de los tribunales judiciales
de lo social.

• Unificar todos los marcos normativos en uno solo, en el que se reproduzcan todas
las condiciones y prestaciones que son iguales para cualquier trabajador, y se
marquen las diferencias y limitaciones que pueda tener el ejercicio de ciertos
derechos tomando en cuenta el servicio que se presta y la finalidad del mismo.

Líneas de acción

1. Compendiar todos los conceptos comunes de los marcos normativos en la


materia, a la luz de los derechos laborales establecidos en la Constitución.

2. Programar en un plazo no mayor a dos años la publicación del nuevo


marco normativo.

3. Instrumentar los mecanismos de actualización del nuevo marco respecto a


los posibles cambios constitucionales, en un marco de total transparencia y
acceso a la información.

• Diseñar y conformar el Instituto de Profesionalización en materia de derecho


laboral.

500
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

Líneas de acción

1. Establecer los alcances de formación del Instituto, bajo un modelo de


certificación de competencias laborales en materia laboral.

2. Definir los mecanismos de financiamiento, evaluación y supervisión de la


operación del Instituto.

501
Los sindicatos en su laberinto, vigencia de los Derechos laborales internacionales en México, 2000-2012

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