Atención a quemaduras

En caso de emergencia, es bueno saber algunas pautas para atender a quemaduras un

instante después del accidente. Es importantes mantener las manos limpias antes de
seguir las pautas. Los accidentes son impredecibles y nunca se sabe el grado de
quemadura que puede ocasionar.

Hay 3 tipos de quemaduras.

1. Quemaduras leves (de primer grado):

Estas quemaduras producen un cambio de color de la piel. No se necesita un

tratamiento. Después de bajarle la temperatura con agua fría, use aspirina o
paracetamol para el dolor.

2. Quemadura que producen ampollas (de segundo grado):

Enfrié la quemadura cuidadosamente. Después de enfriar la quemadura, no abra las

ampollas porque puede causar una infección o un traumatismo peor. Si la ampolla se
rompe por alguna razón, use tijeras esterilizadas para retirar la piel muerta sobre y
alrededor de la ampolla y poder observar la piel rosada nueva. Limpie la quemadura con
jabón suave, trapos desinfectados o gasas y algodones estériles remojados en agua
hervida y enfriada. Al observar la piel rosada nueva, cúbrala con un pedazo de gasa
estéril con un trapo desinfectado. Para evitar que se infecte, por 3 días, cúbrala con una
gasa desinfectada o con un trapo que haya sido remojado en una solución acida. Si en
caso se haya infectado la quemadura, usar multibióticos como dicloxicilina o cefalexina.

3. Quemaduras profundas (de tercer grado):

Tranquilice al paciente porque estas quemaduras siempre son graves. Trate la

quemadura como una de segundo grado, mientras consigue ayuda médica. Denle suero
constantemente hasta que el paciente orine con frecuencia. Si el paciente esta
inconsciente, póngale el suero por el recto. La persona puede caer en estado de choque
por la pérdida de líquido originado en la que madura.
Atención a quemaduras químicas

El primer paso es el lavado abundante con agua fría, tras una quemadura química, lo
principal es retirar la sustancia química que provoca la quemadura. Si la sustancia es
sólida, debe ser cepillada antes del enjuague o puede causar peores daños. El paciente
tiene que quitarse todo tipo de joyerías para facilitar el enjuague. El enjuague puede ser
doloroso, pero es impredecible para detener el avance de la quemadura, ya que el
agente químico puede alcanzar los tejidos profundos.

Una vez retirado la sustancia química, se debe secar la quemadura y luego cubrir con
una gasa estéril seca. No se recomienda el uso de crema para que la herida pueda
respirar. Buscar ayuda médica de inmediato, ya que la quemadura está expuesta a una
infección muy riesgosa e incluso recurrir a una intervención quirúrgica para retirar el
tejido necrosado.

Otra opción sería neutralizar la sustancia acida por otras sustancias alcalinas. Este
proceso no lo puedo hacer uno mismo y se requiere un profesional porque puede
ocasionar una reacción inesperada.

Atención a quemaduras eléctricas

Las quemaduras eléctricas son generalmente de tercer grado y la transmisión de

electricidad puede ser inmediata de cuerpo a cuerpo con solo un pequeño acercamiento
a la víctima. Lo más esencial es cortar la electricidad de inmediato. Si en caso no se
pudiera cortar la electricidad, se debe seguir las siguientes pautas.

 Colocarse en una plataforma de caucho o de madera.

 Retirar a la persona con un objeto que no sea conductor de electricidad.
 Se debe valorar los signos vitales, si no se presentar acudir a una reanimación
cardiopulmonar.
 Cubrir la quemadura con una tela esterilizada para evitar infección.
 Recurrir a una ayuda médica de inmediato.
Atención a las flictenas

Se conocen como ampollas si son mayores a 0,5 cm de diámetro y como vesículas o

flictenas si son menores a 0,5 cm de diámetro. Es una protuberancia en la piel que
contiene líquido, el cual puede ser transparente (líquido serosos o plasma) o
sanguinolento (con hematíes), dependiendo de la gravedad de la lesión que haya
provocado la ampolla. La ampolla puede estar situada en el estrato córneo y la
epidermis, entre la epidermis y la dermis (las más comunes) y por debajo de la dermis
(subcutáneas).

Las ampollas pueden ser producidas por lesiones, reacciones alérgicas o

infecciones, que pueden incluir las siguientes:
1. Quemaduras o escaldaduras.
2. Quemaduras por exposición al sol.
3. Fricción (de un zapato, por ejemplo). La fricción provoca la separación de la s
capas de la piel.
4. Dermatitis de contacto.
5. Impétigo (una infección contagiosa de la piel).
6. Infecciones virales (incluidas la varicela y el herpes zoster).

Tratamientos:
Normalmente, las ampollas se curan por sí solas con el tiempo. El líquido es
reabsorbido por la piel y la piel de la ampolla se seca. Las infecciones ocurren
cuando la ampolla se revienta y tiene que será protegida con una venda o algún
protector. Las ampollas deben mantenerse intactas para evitar las infecciones.
Si se observa algún aumento de temperatura, inflamación, enrojecimiento, drenaje,
formación de pus o dolor; llame al médico.
Contra las ampollas en los pies ayudan el calzado adecuado, que no rocen asi como
otras medidas:
-Atar los zapatos lo más firmemente posible para que entre el zapato y el pie se
produzca tan poco movimiento o roces como sea posible
-Usar calcetines sintéticos delgados bajo calcetines de excursión más gruesos: la
fricción aparece así entre los dos calcetines y no en la piel
-Usar parches protectores previos a una caminata, bien fijados y teniendo cuidado
de que no se formen arrugas
Regla de los nueve

La regla de los nueve (Regla de Pulask y Tennison) es esencial para hallar el porcentaje
del cuerpo quemado. Esta es una regla fácil y rápida de utilizar y puede ser aplicados
en adultos o niños según la edad. En adultos la cabeza corresponde a un 9% de la
superficie corporal total, cada extremidad superior, otro 9%, el tronco un 18%, y el dorso
otro 18% cada extremidad inferior, un 18%, y los genitales extremos, el 1 % restante.
En niños y bebés, en cambio, la cabeza es un 18% de la superficie corporal total, cada
extremidad superior un 9% cada inferior un 14% y el tronco 18% dorsal y 18% frontal.

Se llama regla de los 9 porque, como se puede observar, en el caso de los adultos todos
los porcentajes con divisibles entre nueve, a excepción de los genitales.
Conclusiones

Las quemaduras es un tema importante para la sociedad moderna, ya que está

expuesta a situaciones más riesgosas que a otras generaciones. Es importante conocer
los tipos de quemaduras y las causas de estas para poder acceder al tratamiento
adecuado mientras una ayuda profesional está viniendo. Es necesario saber las pautas
dadas y seguir con sumo cuidado para evitar complicaciones en el paciente y lograr una
satisfacción a tu salud. Se deduce que las quemaduras son accidentes que pueden ser
ocurridos en casa o en el trabajo: es un evento impredecible, en consecuencia, en
necesario poner en práctica todas estas situaciones.