Trastorno disocial

Conjunto de comportamientos persistentes, que suelen incumplir normas sociales e intentan

vulnerar los derechos de otros. Además hay un deterioro significativo en las actividades dentro de
la familia, la escuela y la sociedad del sujeto, esto puede acarrear consecuencias tales como medidas
judiciales, educativas y sociales que conllevan a la contención, alejamiento y exclusión.

Se caracteriza por la presencia de comportamientos agresivos:

 Amenazas
 Intimidaciones
 Provocación de peleas
 Utilización de armas
 Crueldad física con personas y animales
 Robos con enfrentamiento e intimidación
 Violencia sexual
 Violación de normas sociales

Comportamientos menos graves que suelen aparecer antes

 Mentir
 Robar en tiendas
 Peleas físicas

Comportamientos graves que aparecen posteriormente

 Robos con asalto

 Uso de armas
 Violaciones

Inicio temprano: Una persona con trastorno disocial en una edad temprana pueden presentar TDA-
H o trastorno desafiante.

 Inicio precoz: Riesgo de presentar un trastorno de conducta persistente y desarrollar un

trastorno antisocial de la personalidad en la edad adulta.

Inicio en la adolescencia: Presentan un grado menos de agresividad pero suelen incumplir normas,
especialmente en presencia de otros. El pronóstico en menos grave dependiendo de los
comportamientos o conductas que presenten y de las condiciones de su entorno social.

El tipo de comportamientos en sus ambientes familiares y sociales generan conflictos que se pueden
gravar con el tiempo, donde su entorno se va volviendo más hostil y ante esto el comportamiento
del niño es cada vez más agresivo.

Las personas con trastorno disocial suelen presentar en menor o mayor grado características
específicas de personalidad:

 Escasa empatía
 Preocupación por los demás
 Dificultades para percibir los sentimientos
  Deseos e intenciones ajenas (interpretan de manera hostil
 Poca capacidad para reconocer la culpa o mostrar remordimiento
 Baja o alta autoestima
 Inestabilidad emocional
 Frustración

Responsables: Proceso diagnostico recae en los servicios de salud mental. Informantes con más
validez: Familia, bienestar social y agente judicial y policial.

Procedimientos:

Las técnicas utilizadas, observación y registro de comportamientos, entrevistas y recopilación de

datos sobre la historia de vida del paciente.

Debido a que puede haber presencia de uno o más trastornos además del trastorno primario, hay
que establecer procedimientos para diferenciar cada sintomatología propia de cada uno.

Diagnóstico diferencial:

1. Trastorno negativista desafiante:

Un patrón continúo de comportamiento desobediente, hostil y desafiante hacia las figuras
de autoridad, el cual va más allá de la conducta infantil normal.
Un patrón de conducta negativista, hostil y desafiante que ha durado al menos seis meses,
durante los cuales cuatro o más de los siguientes están presentes:
Nota: Considérese cumplido un criterio sólo si el comportamiento ocurre más
frecuentemente de lo que es típico para individuos de una edad y nivel de desarrollo
comparables.
1. Pierde los estribos con frecuencia
2. Discute con adultos frecuentemente
3. Desafía activamente o rehúsa acatar las peticiones o reglas de los adultos, con
frecuencia
4. A menudo deliberadamente irrita a los demás
5. A menudo culpa a otros de sus errores o mala conducta
6. Con frecuencia aparece enojado y resentido
7. Con frecuencia se muestra rencoroso o vengativo
2. La alteración en la conducta causa un impedimento clínicamente significativo en su
funcionamiento social, académico u ocupacional.
3. Las conductas no ocurren exclusivamente durante el curso de un trastorno psicótico o del
estado de ánimo.
4. No se cumplen los criterios para trastorno disocial y, si el individuo tiene 18 años o más,
los criterios no se cumplen para el trastorno de personalidad antisocial.
Si el niño o niña cumple al menos cuatro de los anteriores criterios, y estos interfieren con
su vida normal, entonces técnicamente cumple con la definición.

2. Trastorno por déficit de atención con hiperactividad:

Presencia de comportamientos hiperactivos que suelen ser perturbadores, pero no suelen
violar las normas sociales básicas.
 3. Trastornos del estado de ánimo: Alteración del estado de ánimo del individuo.

4. Trastorno antisocial de la personalidad: El trastorno de personalidad antisocial es una

afección mental por la cual una persona tiene un patrón prolongado de manipulación,
explotación o violación de los derechos de otros. A menudo este comportamiento es
delictivo. Se diagnostica después de cumplidos los 18 años. El trastorno disocial en cambio
rara vez comienza después de los 16.

Evaluación psicopedagógica:

1. Determinar cuáles son las NEE que presenta en un momento determinado.

2. Se utiliza: Observación, pruebas estandarizadas, cuestionarios, entrevistas, escalas, pruebas
de nivel, etc.
3. Como se puede presentar oposición por parte del paciente al procedimiento a utilizar, toca
saber diseñarla e informar los objetivos que se pretende con ésta.
4. Los pacientes con TD suelen manipular las situaciones, como ocultar datos, dar información
equivocada, estrategias de seducción, etc… Por esto toca establecer un distancia
psicoafectiva con el paciente.
5. Para algunos casos se requerirá la participación de agentes sociales, como amigos,
profesionales de salud mental, agentes sociales, familiares, etc. Por tanto se debe
establecer mecanismos y procedimientos de coordinación entre ellos.