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Fermentación sumergida

La fermentación sumergida es la técnica más popular para la producción de un gran número de


productos que utilizan una amplia gama de microorganismos. El medio utilizado para la
fermentación sumergida contiene ingredientes relativamente altamente procesados. La actividad
del agua del medio es alta, lo que la hace propensa a la contaminación si no se mantiene la
asepsia. Se pueden encontrar problemas reológicos a altas concentraciones de sustrato. La
transferencia de masa del gas a la fase líquida suele ser un factor limitante, pero debido a una
mejor mezcla, la limitación difusional de los nutrientes no se encuentra en la fermentación
sumergida. Es posible un mejor control de bioprocesos del proceso de fermentación con la ayuda
de sensores en línea.

Fermentación en estado sólido

La fermentación en estado sólido (SSF) se utiliza para la producción de bioproductos a partir de


microorganismos en condiciones de bajo contenido de humedad para el crecimiento. El medio
utilizado para SSF normalmente es un sustrato sólido (por ejemplo, salvado de arroz, salvado de
trigo o grano), que no requiere procesamiento. Para optimizar los requisitos de actividad de agua,
que son de gran importancia para el crecimiento, es necesario tener en cuenta las propiedades de
sorción de agua del sustrato sólido durante la fermentación (6). En vista del bajo contenido de
agua, se observan menos problemas debido a la contaminación. Los requisitos de potencia son
menores que la fermentación sumergida. Inadecuado la mezcla, las limitaciones de la difusión de
nutrientes, la acumulación de calor metabólico y el control ineficaz del proceso hace que la SSF sea
generalmente aplicable para productos de bajo valor con menos supervisión y control. Los
requisitos de potencia son menores que la fermentación sumergida. Inadecuado la mezcla, las
limitaciones de la difusión de nutrientes, la acumulación de calor metabólico y el control ineficaz
del proceso hace que la SSF sea generalmente aplicable para productos de bajo valor con menos
supervisión y control. Existe un potencial para conducir SSF sobre soportes de sustrato inerte
impregnados con medios definidos para la producción de productos de alto valor (7).

CONFIGURACIONES BIOREACTOR

Sistemas de fermentadores sumergidos

El fermentador es el corazón de cualquier proceso bioquímico en el que se empleen sistemas de


células microbianas, de mamíferos o de plantas para la producción económica de productos de
fermentación. Se debe usar un fermentador diseñado adecuadamente para proporcionar un
entorno aséptico y controlado que facilite el crecimiento óptimo y la formación de un sistema
celular particular. En vista del amplio alcance del fermentador para el cultivo de células
microbianas, de mamíferos o de plantas, se denomina más comúnmente biorreactor; este término
se usará debido a su aplicación global.

La eficiencia del rendimiento de un biorreactor depende de la concentración de biomasa, el


mantenimiento de las condiciones asépticas, la transferencia eficiente de masa y calor y el
funcionamiento en las condiciones de proceso óptimas. Los biorreactores se pueden clasificar en
tres grupos en función del tipo de proceso bioquímico empleado (8):
1. Bioreactor sin agitación y aireación (procesos anaeróbicos, por ejemplo, producción de vino y
cerveza)

2. Biorreactor con agitación y aireación (fermentación sumergida aerobia procesos, por ejemplo,
producción de ácido cítrico y penicilina)

3. Biorreactor con aireación, pero sin agitación (fermentación aeróbica en estado sólido procesos,
por ejemplo, producción de enzimas alimentarias)

Sin embargo, en la práctica industrial, los biorreactores se distinguen por su configuración y


diseño. Los modos comunes de configuraciones de biorreactores se discuten a continuación.

El biorreactor más comúnmente utilizado para aplicaciones industriales es el reactor de tanque


agitado convencional (STR). El STR ofrece las ventajas de las altas velocidades de transferencia de
oxígeno requeridas para una alta productividad de biomasa junto con bajos costos de inversión y
operación, que forman la base de cualquier proceso de fermentación aeróbica exitosa. En la figura
3.1 se muestra un esquema de un biorreactor de tanque agitado. Los STR generalmente tienen
relaciones de altura a diámetro de 1: 3 a 1: 6. El agitador puede ser accionado por la parte superior
o inferior según la escala de operación y otros aspectos operativos. La elección del impulsor
depende de las características físicas y biológicas del caldo de fermentación. Por lo general, se
utiliza un burbujeador de tipo anillo con perforaciones para suministrar aire al fermentador. Los
deflectores se proporcionan para evitar la formación de vórtices y mejorar la mezcla.

La mayoría de los procesos de fermentación utilizan ingredientes medianos complejos como el


licor de maceración de maíz, la melaza y la harina de soja como fuentes nutricionales de bajo costo
(para el carbono y nitrógeno), complementado con factores de crecimiento vitales (aminoácidos,
proteínas y vitaminas) (9). La alta turbulencia impartida por los impulsores en un STR puede dar
como resultado la formación de espuma debido a la presencia de sustratos proteináceos. Aunque
se pueden agregar agentes antiespumantes químicos (silicona o polipropilenglicol) para controlar
la espuma, estos pueden tener efectos perjudiciales sobre el crecimiento microbiano y la
recuperación del producto. Con el fin de superar esto, los métodos mecánicos de supresión de
espuma tales como rastrillos en el eje del agitador montados por encima de la crítica nivel también
se han adoptado. El énfasis en la asepsia del biorreactor, desde el final del ciclo de esterilización
hasta el final de la fermentación, ha llevado al mantenimiento de una presión positiva mínima en
el fermentador para garantizar la esterilidad. Un aspecto más importante de la esterilidad es el
punto de contacto entre el eje del agitador y el recipiente, que se puede sellar de manera efectiva
con un sello mecánico doble lubricado. Los dispositivos de muestreo y los puertos de inyección
deben estar contenidos en cierres esterilizables con vapor

Airreactor Bioreactor

Para las fermentaciones que tienen bajos requerimientos de corte y energía, un reactor de
elevación de aire puede ser útil. La cantidad de aire requerida para el proceso de fermentación
suele ser suficiente para actuar como la única fuente de mezcla líquida. En este proceso, el aire
bombeado desde la parte inferior del reactor crea burbujas flotantes que ejercen un arrastre
sobre el fluido circundante. Un elevador y un "pliegue hacia abajo" dentro del biorreactor
imponen un patrón de movimiento de fluido circulante, que proporciona la oxigenación y la
mezcla del caldo de fermentación. Los cuellos de botella asociados con los biorreactores de
elevación de aire a gran escala son una esterilización inadecuada, una mayor inversión de capital y
requisitos de aireación. Debido a que la mezcla en un elevador de aire es causada únicamente por
la aireación, la potencia requerida para la circulación y dispersión del fluido puede ser más alta
que la que necesita un agitador en un biorreactor de tanque agitado. Los biorreactores de
elevación de aire también se han usado para fermentaciones altamente viscosas, pero los
coeficientes de transferencia de masa volumétrica son predeciblemente bajos (10). Un biorreactor
de elevación de aire equipado con un tubo de extracción da como resultado una mejor circulación
de líquido y mayores áreas interfaciales de gas a líquido, y proporciona una mayor eficiencia de
mezcla y capacidad de transferencia de oxígeno (11). Un ejemplo significativo de un biorreactor de
elevación de aire que ha sido escalado exitosamente hasta niveles comerciales muy grandes es el
fermentador de ciclo de presión ICI (12). En este proceso, el metanol se usa como sustrato para
producir proteína de célula individual (SCP) utilizando Methylophilus methylotrophus a una
capacidad de producción de 60,000 toneladas por año.

Se utilizó un biorreactor de elevación de gas de bucle interno de tres fases para estudios
experimentales en fermentación de cerveza (13). Este reactor tiene las ventajas de alta carga de
sólidos y mejores propiedades de transferencia de masa que los lechos fluidizados. Los vehículos
de baja densidad de células de levadura, tales como partículas de gel de alginato y carragenano, se
usan típicamente en reactores de elevación de gas trifásicos para fermentaciones de cerveza. Los
atributos positivos de los biorreactores de elevación de gas son la construcción simple, el bajo
riesgo de contaminación, el ajuste y el control sencillos de los parámetros operativos y la
ampliación de capacidad simple (14,15). Se han llevado a cabo estudios de investigación sobre
biorreactores de elevación de aire para la producción de ácido itacónico (16) y! -polilisina (17).

Biorreactor de lecho fluidizado

En las últimas décadas, se ha informado un aumento significativo en la aplicación de sistemas de


reactores de lecho fluidizado. Estos se han utilizado principalmente para las células que se han
inmovilizado en partículas. Esto tiene la ventaja de que se puede usar una alta densidad de
partículas, y que la velocidad de flujo requerida para la fluidización se puede lograr
independientemente del rendimiento del reactor.

Las principales ventajas de un sistema de biorreactor fluidizado como se observa en la producción


de etanol de S. cerevisiae (18) son características superiores de transferencia de masa y calor, muy
buena mezcla entre las tres fases, requisitos de energía relativamente bajos y velocidades de
cizallamiento bajas (lo que hace que reactor de lecho adecuado también para células sensibles al
cizallamiento tales como células de mamíferos y plantas).
Los reactores de lecho fluidizado se han utilizado con células adsorbidas dentro del transportador,
hechas ya sea de vidrio o de cerámica (19-21). El caudal de alimentación hacia arriba en un
biorreactor de lecho fluidizado es suficientemente alto para proporcionar la fluidización de los
vehículos, lo que da como resultado mejores propiedades de mezcla y distribución del medio; pero
esto también puede inducir la abrasión y el daño del portador.

Además, la fluidización de los portadores de vidrio y cerámica puede requerir altas tasas de flujo
de medio que podrían resultar en mayores costos de bombeo y eventualmente fugas de células.
Los biorreactores de lecho fluidizado sólido de gas líquido se han empleado para la producción de
ligninolítico

Microreactor Bioreactor

La mayoría de las células de mamífero necesitan una superficie sólida tal como un microvehículo o
un lecho compacto sobre el cual crecer. La idea inicial de cultivar células de mamífero
dependientes de anclaje en microvehículos fue desarrollada por van Wezel (25). El crecimiento de
las células en perlas microportadoras depende directamente de la superficie disponible para el
crecimiento hasta el punto donde las partículas del microvehículo alcanzan suficiente
concentración para inhibir las células y así reducir el rendimiento celular. Los microvehículos
deberían tener una densidad entre 1.02 y 1.10 kg / m3 para permitir una fácil suspensión en
reactores agitados. La toxicidad del soporte puede causar largas fases de retraso, la muerte de las
células en las primeras etapas de desarrollo y un rendimiento celular limitado. Los sistemas de
microreacción de biorreactor se han utilizado para el cultivo de células de fibroblastos humanos
para producir masa celular (26) y en la producción de interferón (27). Una gran ventaja de los
microvehículos es el área de superficie elevada para el crecimiento celular proporcionada en
condiciones de bajo cizallamiento, al mismo tiempo que permite el uso de equipos de
fermentación convencionales. Sin embargo, el talón al talón y el talón a las colisiones del impulsor
y las fuerzas de corte hidrodinámicas pueden causar una viabilidad reducida.

Biorreactor de membrana

Los biorreactores de membrana que comprenden sistemas de fibra hueca se han desarrollado y
probado para el crecimiento de células de mamíferos y plantas, y para la inmovilización de
bacterias, levaduras y enzimas. Los reactores de fibra hueca se han utilizado en la hidrólisis
enzimática de celulosa (28), penicilina (29), almidón (30), hemoglobina (31), síntesis de proteínas
(32) y cultivo de células vegetales (33) y células de mamíferos ( 34).

Las fibras huecas pueden estar hechas de acetato de celulosa con una matriz de pared uniforme, o

de copolímeros acrílicos o fibras de polisulfona con configuraciones de pared asimétricas.

Estas fibras huecas tienen una pared superficial altamente porosa de aproximadamente 70 "de
espesor sobre la cual crecen las células, y una luz cilíndrica de aproximadamente 200" m de
diámetro. La superficie de la luz se cubre con una fina capa de ultrafiltración, que separa las
células inmovilizadas y la luz. La difusión libre de iones y moléculas tiene lugar a través de la capa
de ultrafiltración, que puede tener un corte de peso molecular nominal (NMWCO) en el rango de
10 kDa a 100 kDa. Un biorreactor de fibra hueca consiste en un haz cilíndrico de un gran número
de fibras individuales, que se mantienen juntas en una disposición de intercambiador de calor de
tipo carcasa y tubo. Las unidades de biorreactor de fibra hueca comercial están disponibles con
una capacidad de superficie luminal de entre 0.01m2 y 1.0m2.

Las ventajas de utilizar un reactor de fibra hueca para sistemas microbianos incluyen altas

densidad del crecimiento celular, usando un sistema de perfusión para la separación simultánea
de producto y biomasa, y regeneración de biocatalizador. Sin embargo, una gran desventaja es la
dificultad de controlar y controlar el crecimiento y el metabolismo de la cultura. Otras limitaciones
del proceso asociadas con los reactores de fibra hueca microbiana son las bajas tasas de
transferencia de oxígeno a alta densidad celular y el bloqueo, y la ruptura de las membranas
debido al crecimiento excesivo. La acumulación de productos tóxicos en la fibra hueca también
podría inhibir la actividad metabólica del sistema celular. Además, el efecto de la contención
microbiana en la fisiología, la viabilidad a largo plazo y la productividad sigue sin estar claro. La
técnica se ha utilizado en la producción de ácido láctico (35), conversión de L-histidina y biosíntesis
de # -galactosidasa.

Los biorreactores de membrana se han usado ampliamente para microbios, plantas y animales

cultivos de células (36). Un biorreactor de membrana de alto rendimiento ha sido estudiado para
su uso en etanol (37) y fermentación de ácidos orgánicos (38). La fermentación continua en un
biorreactor de membrana realizado a una tasa de dilución muy alta aumentó la productividad (39).
Se informó que se empleó un biorreactor de membrana de doble recipiente para la producción de
vino a partir de jugo de uva (40), donde el bajo nivel de azúcar residual mantuvo una producción
de vino mayor favorecida en comparación con un solo recipiente en fermentación continua. Se ha
informado sobre la producción de activador del plasminógeno tisular (tPA) en biorreactores de
fibra hueca de microfiltración (MFHF) para el cultivo de células de mamíferos (41).

Fotobiorreactor

Las microalgas se han utilizado con éxito, con una alta productividad en comparación con las
plantas superiores. La alta productividad en estos sistemas se debe a la alta biomasa producida en
el biorreactor. Las microalgas se han usado para la preparación de vitaminas, pigmentos,
antioxidantes y ácidos grasos, y como alimento para la acuicultura. Las técnicas de cultivo
empleadas son sistemas abiertos y fotobiorreactores al aire libre cerrados o semicerrados. Los
fotobiorreactores comunes utilizados son reactores de tipo tubular y tipo placa (42). La
cianobacteria Spirulina platensis se ha estudiado en fotobiorreactores discontinuos y continuos
bajo diversas condiciones de energía de luz incidente y limitaciones de nutrientes (43).

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