INGENIERÍA QUÍMICA

4to SEMESTRE

INGENIERÍA AMBIENTAL

CINTHYA CITLALY SÁNCHEZ CASTRO

ARTICULO

 AGUAS RESIDUALES

Lunes, 26 de febrero del 2018

 INTRODUCCIÓN

La falta de plantas de tratamiento para las aguas residuales en las ciudades y en

las industrias, hoteles y explotaciones mineras, agrícolas y ganaderas, ocasiona
grandes desechos de aguas contaminadas que hacen mucho daño al medio
ambiente. La mayoría de esas aguas es descargada en los ríos, lagos, mares, en
los suelos a cielo abierto o en el subsuelo, a través de los llamados pozos sépticos
y rellenos sanitarios.

La primera prioridad que demanda una comunidad es el suministro del agua, con
calidad adecuada y cantidad suficiente. Ya logrado este objetivo, surge otro no
menos importante que consiste en la adecuada eliminación de las aguas ya
utilizadas que se convierten en potenciales vehículos de muchas enfermedades y
trastorno del medioambiente.

Las fuentes de agua (ríos, acuíferos, lagos, mar), han sido incapaces por sí
mismas para absorber y neutralizar esta carga contaminante, y por ello estas
masas de agua han perdido sus condiciones naturales de apariencia física y su
capacidad para sustentar una vida acuática adecuada, que responda al equilibrio
ecológico que de ellas se espera para preservar los cuerpos de agua. Como
resultado, pierden aquellas condiciones mínimas que les son exigidas para su
racional y adecuado aprovechamiento como fuentes de abastecimiento de agua,
como vías de transporte o fuentes de energía.
 AGUAS RESIDUALES EN MOTOZINTLA CHIAPAS

En este artículo se presenta el

marco biofísico y social del manejo
del agua en la cuenca del río Xelajú,
tributario del río Grijalva y principal
fuente de servicios ambientales
hidrológicos de la ciudad de
Motozintla de Mendoza, Chiapas.

Se utiliza para ello una combinación

de métodos, entre ellos: recopilación
de información secundaria,
entrevistas con actores clave,
recorridos de georreferenciación, análisis de más de 20 parámetros de calidad del
agua, y medición de caudales base en momentos contrastantes del año.

Las condiciones en la cuenca sugieren que la pérdida de la cobertura forestal y la

falta de un manejo adecuado del agua y de la cuenca misma han ocasionado una
progresiva reducción de la capacidad de los bosques para ofrecer el agua en la
calidad y la cantidad que requiere la población, y además la propia ciudad es una
fuente de contaminación para el río del cual se abastece. En este escenario poco
alentador son evidentes los conflictos por el uso del agua y por la contaminación
de sus fuentes para el uso doméstico.

La contaminación del río Xelajú afecta negativamente a los ecosistemas aguas

abajo y a los mismos pobladores del área urbana y circunvecina, como revelan
algunos parámetros de calidad del agua que sobrepasan los límites permisibles.
En contraste se observa al analizar los caudales que en ocho parámetros de
metales pesados no hay hasta el momento una notable contaminación; queda
pendiente el análisis de una posible contaminación en los sedimentos.

El estudio de caudales reveló que ha disminuido el agua de los ríos que fueron
fuentes permanentes de este recurso para la ciudad. Tales resultados, junto con la
información de las entrevistas, llevan a anticipar que en el futuro habrá problemas
de déficit del abastecimiento, y que si no se atienden oportunamente podrían
generar mayores conflictos. Planteamos aquí algunas recomendaciones basadas
en la restauración hidrológica y forestal, el tratamiento de aguas residuales, el
establecimiento de esquemas de financiamiento, y la atención explícita a la
resolución de conflictos.
 CONCLUSIÓN

Llamamos aguas residuales a las aguas que resultan después de haber sido
utilizadas en nuestros domicilios, en las fábricas, en actividades ganaderas, etc.

Las aguas residuales aparecen sucias y contaminadas: llevan grasas, detergentes,

materia orgánica, residuos de la industria y de los ganados, herbicidas y
plaguicidas… y en ocasiones algunas sustancias muy tóxicas.

Estas aguas residuales, antes de volver a la naturaleza, deben ser depuradas.

Para ello se conducen a las plantas o estaciones depuradoras, donde se realiza el
tratamiento más adecuado para devolver el agua a la naturaleza en las mejores
condiciones posibles.

Todavía existen muchos pueblos y ciudades de nuestro país que vierten sus
aguas residuales directamente a los ríos, sin depurarlas. Esta conducta ha
provocado que la mayoría de los seres vivos que vivían en esos ríos hayan
desaparecido.