Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
001
Objetivo. Conocer la capacidad evaluadora del MEASUREMENT OF THE English version available at
cuestionario CVP-35 para valorar la calidad EVALUATIVE CAPACITY OF THE www.elsevier.es/258.977
de vida profesional. CVP-35 QUESTIONNAIRE FOR
Diseño. Estudio prospectivo y observacional. PERCEIVING QUALITY OF A este artículo sigue
Emplazamiento. Un área de atención primaria PROFESSIONAL LIFE un comentario editorial
de la Comunidad de Madrid. (pág. 334)
Participantes. Participaron 149 trabajadores Objective. To establish the CVP-35 evaluative
sanitarios con algún signo de «desgaste properties to measure the professional quality
profesional» medido con el Maslach Burnout of life (PQL).
Inventory (MBI). Design. Prospective, observational study.
Mediciones. Se cumplimentaron el MBI, el Setting. A primary care area in the Community
cuestionario de Salud General de Goldberg of Madrid, Spain.
(GHQ-28) y el CVP-35 al inicio y al año Participants. A total of 149 sanitary workers
de seguimiento. Se evaluaron el cambio with some burnout sign measured by Maslach
de la CVP y de sus componentes, el apoyo Burnout Inventory (MBI) participated.
directivo (CVP-AD), la carga de trabajo Measurements. They fulfilled MBI, Goldberg
(CVP-CT) y la motivación intrínseca Health Questionnaire (GHQ-28), and
(CVP-MI) en los sujetos con variaciones CVP-35 questionnaires at the beginning and
en la puntuación del MBI o del GHQ-28 after a year of follow-up, in which 73 subjects
superiores a 0,5 desviaciones estándar (DE) took part in activities for coping stress. It was
de la distribución basal. assessed the change of PQL and their domains
Resultados. Las variaciones en el CVP-35 managerial support (PQL-MS), work load
y sus dominios se correlacionan débilmente (PQL-WL), intrinsic motivation (PQL-IM)
con los cambios en el MBI y GHQ-28 for the subjects with variations at the MBI,
aMedicina de Familia. Centro de
(r < 0,500), pero concuerdan con el modelo or GHQ-28 punctuation greater than 0.5 SD
Salud San Martín de Valdeiglesias.
conceptual. En los individuos con variaciones of the initial distribution. Área 8 de Atención Primaria.
significativas en el GHQ-28, se aprecian Results. Variations in CVP-35 and their SERMAS. Madrid. España.
unos cambios medios en la CVP y sus domains correlate weakly with changes in bMedicina de Familia. Centro
MBI and GHQ-28 (r<0.500), but they are de Salud Guayaba. Área 11 de
dominios comprendidos entre 0,18 y 0,55 Atención Primaria. SERMAS.
puntos. En aquellos casos con variaciones congruent with the conceptual model. In the Madrid. España.
significativas en los dominios del MBI, la individuals with significant variations in the cMedicina de Familia. Profesor
GHQ-28, they appreciate an average change de Relajación Transpersonal.
CVP presentó variaciones medias absolutas Centro de Salud Legazpi. Área 11
entre 0,23 y 0,45 puntos, CVP-AD entre in PQL and their domains between 0.18 and de Atención Primaria. SERMAS.
0,30 y 0,67, CVP-CT entre 0,01 y 0,55 0.55 points (absolute value). In those with Madrid. España.
y CVP-MI entre 0,22 y 0,83 puntos. significant variations in the MBI domains, dMedicina de Familia. Centro de
Correspondencia:
Key words: Job satisfaction. Questionnaires. Dr. J. Martín Fernández.
Centro de Salud San Martín
Validation. Sensitivity-to-change. de Valdeiglesias.
La Bola, s/n. 28680 San Martín
de Valdeiglesias. Madrid. España.
Correo electrónico:
jmartinefe@hotmail.com
Manuscrito recibido
el 29 de noviembre de 2007.
Manuscrito aceptado para su
publicación el 7 de enero de 2008.
TABLA Correlación entre los cambios en la puntuación del CVP-35 y los cambios en la puntuación
2 de los cuestionarios MBI y GHQ-28
CVP global –0.154 (0,068) –0,262 (0,002) –0,126 (0,140) 0,200 (0,020) Pearson (significación)
–0,099 (0,245) –0,270 (0,001) –0,135 (0,114) 0,204 (0,022) Rho Spearman (significación)
CVP–AD –0,266 (0,001) –0,421 (< 0,001) –0,246 (0,004) 0,324 (< 0,001) Pearson (significación)
–0,240 (0,004) –0,399 (0,001) –0,259 (0,002) 0,291 (0,001) Rho Spearman (significación)
CVP–CT 0,249 (0,003) 0,301 (< 0,001) 0,150 (0,078) 0,032 (0,713) Pearson (significación)
0,219 (0,009) 0,307 (< 0,001) 0,119 (0,163) –0,035 (0,684) Rho Spearman (significación)
CVP–MI –0,174 (0,040) –0,390 (< 0,001) –0,307 (0,001) 0,509 (< 0,001) Pearson (significación)
–0,148 (0,081) –0,353 (< 0,001) –0,220 (0,009) 0,353 (< 0,001) Rho Spearman (significación)
CVP-35: Cuestionario de Calidad de Vida Profesional; GHQ-28 Cuestionario de Salud General de Goldberg de 28 ítems; MBI-CE: Maslach Burnout Inventory-cansancio emocional;
MBI-DE: Maslach Burnout Inventory-despersonalización; MBI-RP: Maslach Burnout Inventory-realización personal; CVP: calidad de vida profesional; CVP-AD: apoyo directivo;
CVP-CT: cargas de trabajo; CVP-MI: motivación intrínseca.
TABLA Cambios en la puntuación del CVP-35 para los sujetos con variaciones en el GHQ-28
CVP-35, y cada uno de sus domi-
3 de magnitud moderada o importante* nios, en la misma dirección, esto
Variación GHQ28 > 3,21 puntos Variación GHQ28 < –3,21 puntos
es, se evidencia que es un instru-
mento «sensible» al cambio.
Media IC del 95% n Media IC del 95% n
Al relacionar los cambios en el
Variación CVP –0,39 –1,17 a 0,39 28 0,18 –0,33 a 0,68 40
CVP-35 con el cuestionario de
Variación CVP-AD –0,49 –0,92 a –0,07 28 0,35 0,03-0,67 40
salud GHQ-28 se observa que
Variación CVP-CT 0,14 –0,26 a 0,53 28 –0,55 –0,90 a –0,19 40
la correlación es siempre débil
Variación CVP-MI –0,48 –0,95 a –0,02 28 0,22 –0,08 a 0,53 40
(r < 0,300), y sólo se aprecia cla-
*Se entienden como variaciones de magnitud moderada o importante en la puntuación del GHQ-28 las que poseen un valor ramente una disminución de
absoluto superior a 0,5 desviaciones estándar (DE) de la distribución basal de dicho test (0,5 DE = 3,21 puntos).
CVP-35: Cuestionario de Calidad de Vida Profesional; GHQ-28 Cuestionario de Salud General de Goldberg de 28 ítems; 0,49 puntos (0,07-0,92) en la
CVP: calidad de vida profesional; CVP-AD: apoyo directivo; CVP-CT: cargas de trabajo; CVP-MI: motivación intrínseca.
percepción de apoyo directivo
(CVP-AD) en los sujetos que
empeoran su percepción de salud
en más de 3,2 puntos y una me-
TABLA Cambios en la puntuación del CVP-35 para los sujetos con variaciones en el MBI-CE
jora de similar magnitud (0,35
4 de magnitud moderada o importante*
puntos) cuando mejora la percep-
Variación MBI-CE > 5,81 puntos Variación MBI-CE < –5,81 puntos
ción de salud general. Los cam-
Media IC del 95% n Media IC del 95% n bios en el CVP-35 se asocian de
Variación CVP –0,43 –1,11 a 0,24 23 0,52 0,16-0,88 63 manera más constante con los
Variación CVP-AD –0,67 –1,08 a –0,26 23 0,31 0,04-0,59 63 cambios en el MBI, especialmen-
Variación CVP-CT 0,01 –0,57 a 0,60 23 –0,55 –0,81 a –0,28 63 te en el dominio cansancio emo-
Variación CVP-MI –0,83 –1,40 a –0,27 23 0,36 0,18-0,53 63 cional. También cabe señalar por
*Se entienden como variaciones de magnitud moderada o importante en la escala MBI-CE aquellas de valor absoluto su magnitud (r = 0,509) la asocia-
superior a 0,5 desviaciones estándar (DE) en la distribución basal de esta escala (0,5 DE = 5,81 puntos). ción entre los cambios en la per-
CVP-35: Cuestionario de Calidad de Vida Profesional; MBI-CE: escala de cansancio emocional del Maslach Burnout
Inventory; CVP: calidad de vida profesional; CVP-AD: apoyo directivo; CVP-CT: cargas de trabajo; CVP-MI: motivación cepción de la motivación intrín-
intrínseca.
seca (CVP-MI) y el dominio
realización personal (MBI-RP)
del cuestionario de Maslach.
TABLA
Al estudiar la dimensión de los
Cambios en la puntuación del CVP-35 para los sujetos con variaciones en el MBI-DE
5 de magnitud moderada o importante* cambios de la valoración global
de la CVP y de cada uno de sus
Variación MBI-DE > 2,95 puntos Variación MBI-DE < –2,95 puntos
dominios se observa que, en ge-
Media IC del 95% n Media IC del 95% n
neral, se evidencian más cambios
Variación CVP –0,23 –0,95 a 0,49 31 0,41 0,30-0,80 58
en los CVP-AD y CVP-MI, que
Variación CVP-AD –0,30 –0,68 a 0,07 31 0,37 0,11-0,63 58
en la percepción de las cargas de
Variación CVP-CT 0,06 –0,25 a 0,36 31 –0,36 –0,63 a –0,09 58
trabajo (CVP-CT). Tanto para la
Variación CVP-MI –0,38 –0,82 a 0,05 31 0,23 0,05-0,41 58
medición global de la CVP como
*Se entienden como variaciones de magnitud moderada o importante en la escala MBI-DE aquellas de valor absoluto para CVP-AD y CVP-MI se ob-
superior a 0,5 desviaciones estándar (DE) en la distribución basal de esta escala (0,5 DE = 2,95 puntos).
CVP-35: Cuestionario de Calidad de Vida Profesional; MBI-DE: escala de despersonalización del Maslach Burnout Inventory; servan cambios de entre 0,33 y
CVP: calidad de vida profesional; CVP-AD: apoyo directivo; CVP-CT: cargas de trabajo; CVP-MI: motivación intrínseca. 0,68 puntos en aquellos sujetos
que varían sus puntuaciones de
forma relevante (más de 0,5 DE)
TABLA en el GHQ 28 o en los dominios
Cambios en la puntuación del CVP-35 para los sujetos con variaciones en el MBI-RP
6 de magnitud moderada o importante* MBI-CE o MBI-RP. En los su-
Variación MBI-RP > 3,69 puntos Variación MBI-RP < –3,69 puntos
jetos que presentan mejoras rele-
Media IC del 95% n Media IC del 95% n
vantes en el dominio de desper-
sonalización (MBI-DE) sí se
Variación CVP 0,37 –0,01 a 0,76 59 –0,45 –1,20 a 0,30 29
observan mejorías en la CVP, en
Variación CVP-AD 0,38 0,09-0,67 59 –0,54 –0,95 a –0,13 29
el CVP-AD, en la CVP-MI y
Variación CVP-CT –0,23 –0,50 a 0,04 59 –0,19 –0,65 a 0,26 29
Variación CVP-MI 0,33 0,13-0,53 59 –0,68 –1,20 a –0,16 29
disminuciones de las CVP-CT
comprendidas entre 0,23 y 0,40
*Se entienden como variaciones de magnitud moderada o importante en la escala MBI-RP aquellas de valor absoluto puntos. Sin embargo, los empeo-
superior a 0,5 desviaciones estándar (DE) en la distribución basal de esta escala (0,5 DE = 3,69 puntos).
CVP-35: Cuestionario de Calidad de Vida Profesional; MBI- RP: escala de realización personal del Maslach Burnout ramientos relevantes en esta esca-
Inventory; CVP: calidad de vida profesional; CVP-AD: apoyo directivo; CVP-CT: cargas de trabajo;
CVP-MI: motivación intrínseca.
la no se asocian con cambios cla-
ros en los dominios del CVP. El dominio MBI-DE es el Likert entre 7 y 9 categorías, y se ha encontrado que la
que tiene más problemas de consistencia interna en pobla- MDI se sitúa en la totalidad de los casos alrededor de 0,5
ciones no anglosajonas25, por lo que esperábamos que los DE de la distribución basal de la medida28. Por otra parte,
cambios de CVP en estos grupos no fuesen demasiado es- esta diferencia, que podemos considerar relevante, tiene la
tables. misma magnitud que la propuesta en otras escalas de medi-
Se podría señalar como MDI el valor de 0,5 puntos en la ción de calidad de vida con respuestas tipo Likert de 7 pun-
valoración global del CVP-35 o de cada uno de sus domi- tos de amplitud. Esto llevó a algunos autores a proponer
nios, desde el punto de vista poblacional. Esta magnitud del que en este tipo de escalas los cambios relevantes podrían
cambio puede fijarse como relevante por contener la mayor encontrarse en un rango de alrededor de los 0,5 puntos29,30.
parte de las variaciones observadas en sujetos que han pre- Como aspecto complementario al objetivo de este estudio,
sentado cambios relevantes en las escalas usadas como refe- puede señalarse que los dos dominios más sensibles al cam-
rencia. bio en los sujetos observados son los que en el modelo de
Podrían ser objeto de crítica varias de las decisiones adopta- Karasek (demandas-control) recaen en el grupo de los re-
das al diseñar el estudio, como utilizar un método basado en cursos para afrontar las demandas. Esto no nos permite
la distribución de las respuestas y también el punto de cor- afirmar que el dominio CVP-CT no presente una adecua-
te elegido para considerar un cambio como relevante en las da capacidad evaluadora, ya que por otros trabajos sabemos
escalas de referencia. que la percepción de cargas de trabajo ha aumentado en los
Los métodos para estudiar la capacidad de interpretación últimos años en la población de la que procede la muestra2
de las medidas de calidad de vida pueden clasificarse entre y, además, puede que ninguno de los cambios en el tiempo
las basadas en referentes externos (anchors) y las basadas de seguimiento influya de manera sustancial en la carga de
en distribuciones. En este caso, se ha elegido un sistema ba- trabajo real de los profesionales. Aunque está bien docu-
sado en la distribución de las puntuaciones en las escalas de mentada la asociación entre las cargas de trabajo y la per-
referencia. Para elegir un método basado en referencias ex-
ternas, éstas deben ser fácilmente interpretables y además
correlacionarse de manera importante con las medidas pro-
porcionadas por el instrumento evaluado26. Los cambios en Lo conocido sobre el tema
las escalas de referencia no tienen una interpretación única
y, según nuestros conocimientos, la correlación de alguna
de estas escalas con el CVP-35 es sólo moderada15. Por otra
• Lade interés
calidad de vida profesional es una variable
para el sistema sanitario y, por tanto,
parte, los resultados prácticos del estudio de MDI en algu- debe ser medida con precisión y exactitud.
nos estudios sobre calidad de vida ofrecen resultados simi-
lares bajo el abordaje de las distribuciones y el tamaño del
• Existen varias herramientas de medida de la
calidad de vida profesional validadas en lengua
efecto y bajo la comparación con referencias externas (an- castellana en el ámbito de atención primaria, entre
chors) 27. las que ha sido ampliamente utilizada el CVP-35.
No tenemos referencias sobre la posible sensibilidad al
cambio de los instrumentos que miden la CVP o la satis- • Aun estando bien establecidas las capacidades
discriminadoras de estos cuestionarios,
facción laboral ni en los validados en castellano11-13, ni
no tenemos datos sobre su sensibilidad
existe tampoco una referencia clara en cuestionarios utiliza-
frente al cambio.
dos internacionalmente20. Por tanto, cabría discutir si la
magnitud del cambio escogida en las escalas de referencia
(0,5 DE de la distribución basal) resulta adecuada, ya que Qué aporta este estudio
condiciona el tamaño de la MDI. Se eligió este punto de
corte porque coincide con la definición de un tamaño del • evaluadora
l CVP-35 presenta una adecuada capacidad
E
y es sensible a cambios en la
efecto «moderado» y porque permite que las agrupaciones percepción de la calidad de vida profesional
de sujetos que habían presentado estos cambios tuviesen un a nivel poblacional.
tamaño suficiente (al menos 30 sujetos). Creemos que el re-
sultado obtenido con esta medida, una MDI de 0,5, con-
cuerda con el estado de conocimiento sobre la detección de
• Lapuntuación
mínima diferencia importante en la
sobre calidad de vida global
cambios significativos mediante cuestionarios de calidad de o en cada uno de los dominios del CVP-35
vida. La MDI de 0,5 puntos representa aproximadamente puede establecerse en 0,5 puntos.
el 50% de la DE observada para el cambio de las puntua-
ciones totales en la percepción de la CVP y de cada uno de • Sela percepción
pueden producir cambios relevantes en
de la calidad de vida profesional
sus dominios, y entre un 33 y un 50% de la variabilidad de sin que varíe por parte de los trabajadores
la distribución basal. Se han intentado establecer estánda- la percepción de las cargas de trabajo.
res en los cuales pueda encontrarse la MDI para escalas tipo
cepción de la CVP2,15-18, podemos suponer que la CVP 5. Johnson JV, Stewart W, Hall EM, Fredlund P, Theorell T. Long-
term psychosocial work environment and cardiovascular morta-
puede mejorar sin que cambie significativamente la apre-
lity among Swedish men. Am J Public Health. 1996;86:324-31.
ciación de las cargas de trabajo. Esta situación puede ser 6. Siegrist J. Place, social exchange and health: proposed sociologi-
trascendente a la hora de diseñar estrategias para mejorar la cal framework. Soc Sci Med. 2000;51:1283-94.
percepción de la CVP, pues nos encontramos ante un siste- 7. Karasek R. The political implications of psychosocial work rede-
ma burocratizado, rígido y con poca capacidad de motiva- sign: a model of the psychosocial class structure. Int J Health
Serv. 1989;19:481-508.
ción e incentivación en un momento de compromiso debi-
8. García Sánchez S. La qualitat de vida professional com a avantat-
do al aumento de la presión asistencial y a la escasez de los ge competitiu. Revista de Qualitat. 1993;11:4-9.
recursos humanos31. 9. Cabezas Peña C. La calidad de vida de los profesionales. FMC.
Los resultados obtenidos con esta herramienta de medida 2000;7 Suppl 7:53-68.
en los últimos años2,15-18 apoyan la necesidad de un cambio 10. Warren N, Hodgson M, Craig T, Dyrenforth S, Perlin J, Murphy
F, Veterans Health Administration. Employee working conditions
cultural esencial del sistema nacional de salud desde una
and healthcare system performance: the Veterans Health Admi-
cultura organizativa basada en el control de sus «recursos nistration experience. J Occup Environ Med. 2007;49:417-29.
humanos» para optimizarlos y llevarlos hacia otra cultura 11. Escriba-Aguir V, Mas R, Flores E. Validación del Job Content
de futuro basada en la construcción de confianza en sus per- Questionnaire en personal de enfermería hospitalario. Gac Sanit.
sonas para potenciarlas. Los profesionales se han de sentir 2001;15:142-9.
12. Meliá JL, Peiró JM. El cuestionario de satisfacción S10/12: es-
apoyados por el sistema, representado por todos y cada uno
tructura factorial, fiabilidad y validez. Rev Psicol Trab Org.
de sus responsables jerárquicos. En el futuro será muy inte- 1989;4:179-87.
resante aplicar ésta u otras herramientas de medida de la 13. Mira JJ, Vitaller J, Buil JA, Aranaz J, Rodríguez-Marín J. Satis-
CVP después de implementar estrategias de intervención facción y estrés laboral en médicos generalistas del sistema públi-
dirigidas no sólo a aumentar los recursos de afrontamiento co de salud. Aten Primaria. 1994;14:1135-40.
14. Martín J, Cortés JA, Morente M, Caboblanco M, Garijo J, Ro-
de los profesionales asistenciales, sino también dirigidas a
dríguez A. Características métricas del Cuestionario de Calidad
aumentar las competencias de liderazgo y apoyo por parte de Vida Profesional (PQL -35). Gac Sanit. 2004;18:129-36.
de sus responsables jerárquicos. 15. Jorge Rodríguez F, Blanco Ramos M, Issa Pérez S, Romero Gar-
En conclusión, podemos establecer que el CVP-35 es un cía L, Gayoso Diz P. Relación de la calidad de vida profesional y
instrumento de utilidad tanto para medir la CVP como el burnout en médicos de atención primaria. Aten Primaria.
2005;36:442-7.
para evidenciar cambios «naturales» en el tiempo, o tras
16. Alonso M, Iglesias AI, Franco A. Percepción de la calidad de vida
las intervenciones de mejora. El CVP-35 es una herra- profesional en un área sanitaria de Asturias. Aten Primaria.
mienta sensible a los cambios desde el punto de vista po- 2002;30:483-9.
blacional, y, por tanto, posee una capacidad evaluadora 17. Cortés Rubio JA, Martín Fernández J, Morente Páez M, Cabo-
que ya se le suponía pero que no estaba acreditada hasta blanco Munoz M, Garijo Cobo J, Rodríguez Balo A. Clima labo-
ral en atención primaria: ¿qué hay que mejorar? Aten Primaria.
este momento. Cambios del orden de 0,5 puntos en la per-
2003;32:288-95.
cepción de la CVP o en cualquiera de sus dominios pueden 18. Muñoz-Seco E, Coll-Benejam JM, Torrent-Quetglas M, Lina-
tener trascendencia al asociarse con cambios relevantes en res-Pou L. Influencia del clima laboral en la satisfacción de los
la percepción de cansancio emocional, de realización per- profesionales sanitarios. Aten Primaria. 2006;37:209-14.
sonal o, incluso, de salud general. Existen ciertas diferen- 19. Guyatt GH, Feeny DH, Patrick DL. Measuring health-related
quality of life. Ann Intern Med. 1993;118:622-9.
cias entre la sensibilidad de cada dominio, lo que quizá
20. Van Saane N, Sluiter JK, Verbeek JH, Frings-Dresen MH. Relia-
pueda justificarse por el hecho de que la carga de trabajo es bility and validity of instruments measuring job satisfaction-a
un elemento que, objetivamente, varía poco a nivel pobla- systematic review. Occup Med (Lond). 2003;53:191-200.
cional. 21. Maslach C, Jackson SE. The measurement of experienced burn-
out. J Occup Behav. 1981;2:99-113.
22. Gil-Monte PR, Peiro J. Un estudio comparativo sobre criterios
Bibliografía normativos y diferenciales para el diagnóstico del síndrome de
quemarse en el trabajo (burnout) según el MBI-HSS en España.
1. Verhaeghe R, Vlerick P, Gemmel P, Van Maele G, De Backer G. Rev Psicol Trab Org. 2000;2:135-49.
Impact of recurrent changes in the work environment on nurses’ 23. Lobo A, Pérez-Echeverría MJ, Artal J. Validity of the scaled ver-
psychological well-being and sickness absence. J Adv Nurs. sion of the General Health Questionnaire (GHQ-28) in a Spa-
2006;56:646-56. nish population. Psychol Med. 1986;16:135-40.
2. Martín-Fernández J, Gómez-Gascón T, Beamud-Lagos M, Cor- 24. Wyrwich KW, Bullinger M, Aaronson N, Hays RD, Patrick DL,
tés-Rubio JA, Alberquilla-Menéndez-Asenjo A. Professional Symonds T, The Clinical Significance Consensus Meeting
quality of life and organizational changes: a five-year observatio- Group. Estimating clinically significant differences in quality of
nal study in Primary Care. BMC Health Serv Res. 2007;7:101. life outcomes. Qual Life Res. 2005;14:285-95.
3. Escribá-Aguir V, Martín-Baena D. Psychosocial work environ- 25. Moreno Jiménez B, Bustos R, Matallana A, Miralles T. La eva-
ment and burnout among emergency medical and nursing staff. luación del burnout. Problemas y alternativas. El CBB como
Int Arch Occup Environ Health. 2006;80:127-33. evaluación de los elementos del proceso. Rev Psicol Trabajo Org.
4. Van Vegchel N, De Jonge J, Bosma H, Schaufeli W. Reviewing 1997;13:185-207.
the effort-reward imbalance model: drawing up the balance of 45 26. Guyatt GH, Osoba D, Wu AW, Wyrwich KW, Norman GR,
empirical studies. Soc Sci Med. 2005;60:1117-31. Clinical Significance Consensus Meeting Group. Methods to ex-
plain the clinical significance of health status measures. Mayo 29. Jaeschke R, Singer J, Guyatt GH. Measurement of health status.
Clin Proc. 2002;77:371-83. Ascertaining the minimal clinically important difference. Con-
27. Norman GR, Sridhar FG, Guyatt GH, Walter SD. Relation of trol Clin Trials. 1989;10:407-15.
distribution- and anchor-based approaches in interpretation of 30. Juniper EF, Guyatt GH, Willan A, Griffith LE. Determining a
changes in health-related quality of life. Med Care. 2001;39: minimal important change in a disease-specific Quality of Life
1039-47. Questionnaire. J Clin Epidemiol. 1994;47:81-7.
28. Norman GR, Sloan JA, Wyrwich KW. Interpretation of changes 31. Ministerio de Sanidad y Consumo. Proyecto AP21. Estrategias
in health-related quality of life: the remarkable universality of half para la Atención Primaria del siglo XXI. Madrid: Ministerio de
a standard deviation. Med Care. 2003;41:582-92. Sanidad y Consumo; 2006.
COMENTARIO EDITORIAL