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TESIS, TESINAS, MONOGRAFiAS r tA , Nuevas normas y técnicas de —— : : dase gacién estudio esertua sno las normas mas actuaizadas pars abordarla eset. de teat tess, monagrai,informes de invesigalon yas ataog eae eee actividad intelectual en lengua espaiola. Estos son los temas eseneales que se plane war dr un ema sce ya i we tour sentaee rs oa tn varus pote cano oar itn dc mga Eieaipods ie tigeete olagnicey serine eioe ae ae seseretase cecmiokosidomovionrenrecic aia aa Seca vissneme metros ease Ener ipendcs we cfeen I revcine omnes ie ore sacnaatederomatincin sb dsetpson emilee ea tho ls vofudes moi de Sans teens eae oe ge tts decrirsr ns ne scat ce sos yan Mirta Botta se gradué en Letras en la Universidad de Buenos Aes. Fue profesora titular del Teller de Monografiasy del seminar de Técnicas Procedimientos de ES tuulo y Eseritura en Trabajos de Investigacion en la Facultad de Ciencias Sociales de «sa universidad. Fue profesora y conferencista invita por la Universidad de Columbia ¥ por la Universidad de West Chester de Pensilvania (Estados Unidos). Ha publicado ‘Comunicaciones escritasen lo empresa(198%4) y Comunicacién eserita para secretorias (1994), ademas de obras de fecion Jorge Warley es graduado en Letras en el Instituto Superior del Profesorado “Dr. Joa~ 4quin V. Gonzélez". Es docente en las universidades de Buenos Ares y La Pampa. Entre otras obras, ha publicado La cultura, Versiones y definiciones (2003) y Semvdtico de los ‘medias. Signo, representacis, ideologia, politica (2007). Es eoautor de La fectura yla escritura en el inicio de os estudios syperiores (2007). Nora Fasano de Roig es bibliotecaria graduada en la Facultad de Filosofia y Letras dé la Universidad de Buenos Aires. Es jefa de Publicaciones Periddicas y responsable del servicio de atencién al usuario en el Sistema de Bibliotecas y de Informacion (ssa) de la Universidad de Buenos Aires. Representa al ssp en el Subcomité de Doeumentacién del Instituto Argentino de Normalizacién (ra) y ala una en la Comisién Asesora de la Biblioteca Electrénica de Ciencia y Tecnologia de la Secretaria de Ciencia, Tecnologia € Innovacién Produetiva de la Nacion(secy?). Editorial Biblos METODOLOGIAS TESIS, TESINAS, MONOGRAFIAS E INFORMES _ MIRTA BOTTA / JORGE WARLEY. JORA FASANO DE ROIG TESIS, TESINAS, e —MONOGRAFIAS — EINFORMES de investigacion NUEVA EDICION AUMENTADA sss TESIS, TESINAS, MONOGRAFIAS E INFORMES Nuevas normas y técnicas de investigacién y redaccién COLECCION METODOLOGIAS Dirigida por Ana Lia Kornblit oC MIRTA BOTTA JORGE WARLEY TESIS, TESINAS, MONOGRAFIAS E INFORMES Nuevas normas y técnicas de investigacion y redaccion Apéndices: Nora Fasano de Roig Bees teaeeeeRee eee seseeeeceeceeecseceeeeeeecea eee Botta, Mirte A, ‘Teas, teainas, monografias¢ informes - 2° ed, Buenos Aires: Bibles, 2007, 126 pp. 28x 16 em. ISBN 978.950-786.610-4 1 Metodologia de la Investigacin. 1. ‘Titulo cop 001.42 Primera edicidn; enero de 2002 Disesio de tapa: Luciano Tirabassi U. Armado: Ana Souza Coordinaciéa: Ménica Urrestarazu © Mirta Botta, Jorge Warley, Nora Fasano de Roig, 2007 © Editorial Biblos, 2007 Pasajo José M. Giuffra 318, C1064ADD Buenos Aires info@editerialhiblos.com / www.editerialbiblos.com Hecho el depésito que dispone la Ley 11.723 Jmpreso en la Argentina Ninguna parte de esta publicacién, incluido ol disoiio de la eubierta, puede repro- Gucirse, almacenarse o transmitiese en forma alguna, ni tampoco por medio algu- no, sea éste cléctrico, quimico, mectinico, éptico de grabacién o de fotocopia, sin la previa autorizacién escrita por parte de la editorial Esta segunda edicién ampliada se termind do imprimir en Primera Clase California 1231, Buenos Aires, Repablica Argentina, en julio do 2007, Indice Prefacio ala nuova ediciso, por Jorge Warley : .u Introduecén 13 1. Géoeron académicosy eveitura profesional " 1.1 Lesa diferentes géneros en la investigacién y sus caracteristic 111. La monografia 112 La tesina LIS, La tosis 114. Elinforme 1.1.4.1. Elinforme univeretario 1.1.42, Hl informe de investigaciéa 1.5, Bh e809 oe enmn i 1.1.6, Los trabajos de divulgaciéa 1.16.1, El artieulo periodistico 11.6.2. La ponencia .. 1.2, Las faces de la investigacisn 1.21, Seleceiéa del tema 12.1, Planteamiento de una o varias hipstesis 26 1.22, Bleccién de un método para comprobar las hi yyla reeoleceién de las datos 26 1.23. Interpretacidn de los datos y formulacin de las conelusiones 27 2. Elplan y la everitura del trabajo 2.3. Bl titulo y el plan de trabajo a) Esquema )Deseripeién ©) Proposicicn de fuentes, mtd y procedimiencas 2.1.1, Variaciones del indice 2.2. La estructura del trabajo 2.2.1. Portada o earétula 2.22. fodico general 2.23, Lista de tablas y figuras, y lista de dlustraciones 2.2.4, Introduccion. 225. Cuerpo . 2.2.6, Conelusiones 2.2.7. Apendice . 2.2.7.1, Aponc 2.2.8. Bibliografia se 3, La biequeda bibliograficn 31. Bitliotecas,contros de informacién, archivos « 3.2, Recursos al servicio dat investigador mm 3.2.1. Referencista o bilioteeario de referencia 3.2.2, Catélogos (ficheros) en bibliotecas .. 3.253. Obras de referencia 3.2.4, Préstamos intorbibliotecarios 325, Series de busquoda bibiogréfiea ene nterior | ‘el exterior del pais 9.2.6. Miorofilmes 0 microfichas 3.2.7. Pichas de citedras afines SER Cattlosoe de publicaciones on editoriale, ibreria nacionales y extranjeras 3.8. Bl orden de la basqueda bibliografica ‘34 Basquedas por internet .. SLL Referencing a osvrson eletrénicos 4. EL fichero 4.1. Diversos pos de fichas 4.1.1, La ficha de instituciones 4.1.2. La ficha bibliogréficn saat La cceiura y in puntaaccn de ln Sha biblingréica 44123, Guta para lo sia de pontusin en ha iri, 41.28. Uso de mayssculas 4194. Reps cepeiales de ntacin para as fchas Sliogiins 4.1.8, La ficha do Lectura 4.14 Ta fcha do citas 4.1.5. Otras ficha: 442, Medidas internacionales de las fchas ‘43. Criterios de ordonacisn de las fichas 5. Las clas textuales 5.1, Cuando y e6mo go cita 5.2. Reglas para citar a otros autores 5.3. Abreviaturaa mAs importante ...n- B.A. Los riosgos de la parafrasis 6, Las notas 6.1. Concepto : 6.2. Las euaro formas basican de is notas 63. Notas a ple de pagina o agrupadas sen TB 6.5.1, Ubicacion de Ie notas en el texto 2 68.2. Bxtensién de las notas 8 6.3.8. Requisitos de forma ‘a 6.3.4, Orden de los elementos en una nota correspondiente a cita o pardfrasis de un autor : wn TS 6.8.5. Notas hibliograficas y eus abreviaturas més comunes 3 6.4, Sistema de referencia con mencisn de autor y allo % 7. La redaceiém final i" 9 7.1. Bl lenguaje a . 9 7.11. La importancia del lenguaje informative on el abajo profesional 82 7.1.2. Predominio de la funciéa referential rnenmineinennsn aL 7.1.8. El receptor como condicionante del estilo 82 4. {Cémo debe expresarse el autor del trabajo? Que ‘persona. ‘anata ‘convione clogir para redactar? f Alunas normas sencitlas pare fener en cuenta 82 1.2, Palininares del cueiars ee “ai Resin aust adn farce 122 Omenadn doles Gas de lca do chan dc ais nents & 172..H1 dom d on tae a slain ila & 18.Blpriner tora neat Tid Tawsevniono data vlan fa & 8. La presentacién formal 8.1. Los aspoctos gréficos 8.1.1. Un ejemplo de diseio grafico . Estructura del trabajo 8s 83. La numeracién de paginas BA, Las citas textuales 8.5. Las notaa al pie 8.6. Apéndicw/s 8.8. Abreviaturas Apéndices, por Nora Fasano de Roig Apéndice A. Redacsién de fichas bibliograficas ” Apéndice B. Biblioieens y archives nacionales en paises de babla higpana o.oo M5 ibliogratia Prefacio a la nueva edici6n Aunque de un modo un tanto superficial se insiste una y otra vez con que In entrada al nuevo sigio supone una serie de transformaciones profundas en relacién con Jos modos en que los hombres nos comunicamos y s¢ st braya el particular Jugar que en ese sentido estan Hamadas a ocupar las imagenes y las nuevas tecnologias, lo cierto es que los requerimientos par aun correcto y diversificado uso de la tradicional préctica de la eseritue ra se han ido multiplicando, En primer lugar, ello sucede por la ampliacién del sistema educativo, a través de la extensién del cardcter obligatorio hacia la escuela media, y, en ol otro extremo, por la proliforacion de macstrias, posgrados y doctora- dos que han determinado de hecho la prolongacién de los estudios supe- riores. En segundo lugar, porque la ampliacién del campo profesional, de la mano de una actualizacién que sigue un ritmo constante e indetenible, obliga a sus miembros a concurrir a uno 0 mas congresos por aio, elabo- rar abstracts, papers e informes de investigacién, para meneionar s6lo al- panos ejemplos, que los enfrenta al desaiio de mostrarse eficaces en el tra- tamiento por escrito de los temas de su especialidad de aeuerdo con nor- mas de presentacién fuerlemente eonvencionalizadas. Noes una exageracién decir que todo profesional debe estar prepara- do para ser, hoy por hoy, un técnico en el manejo de la lengua eserita on sus diferentes formatos. La diversifieacién del quehacer profesional en curso, ademss, obliga, permanentemente a ajustes de iiltimo momento y « Ja toma de deci nos empiricas y particularizadas frente a los problemas que se enfren- tan, Ocurre que un manojo tal exige, sin duda, el dominio previo y flui- do, por parte de quien lo realiza, de los marcos genérieos tradicionales de las formas de la eseritura estandarizadas, precisamente para que la a 2 Tesi, asinas, monografis¢Intres adecuacién necesaria sea justa y productiva y no se pierda en la mera improvisacién. eoeiros cambios educativos en curso, por ejemplo, han Nevado un desafio ‘de este tipo al espacio de Jos colegios secundarios. Las reformas de los pla- hes de estudio, todavia en curso en cl area de la Jengua y la literatura, yhan derivado en Ja extensién de las actividades de lo que habitualmente se denominaba “taller” o un poco més téenicamente “préeticas del lengus- je”. La popularizacién de los informes de laboratorio en el érea de las cion- Cias fisico-naturales y la confeccién de monografias para las ciencias so- Ciales y las disciplinas ostétieas ya son una préctica bien extendida en la escuela media. De igual modo, Ia incorporacién de las tesinas como cierre Ge ciclo y, ala vez, como puente hacia los estudios superiores, es un requi- Sito para el egroso de los bachilleratos de muchos establecimientos de Ia ciudad de Buenos Aires y otros puntos de la Argentina, Fl libro de Mirta Botta que ahora se reedita ya ha pasado con gran éxito la prucha del aula en el caso de Ia escuela media, asf como se ha con- Vertido en bibliografia basiea de consulta para la organizaciGn y la confec- {ign de los trabajos eseritos de aquellos estudiantes y profesionales uni Yersitarios que desarrollan tareas de investigacién. Acorde con su funcién practica, esta nueva edicién ofrece como ampliacién la definicién y earac- terizacign genérica de la tesina, asf como una diltima actualizacién acerca Ge la normativa establecida para eonfeccioner las referencias a fuentes bi- bliograficas y los soportes que ofrocen las nuevas teenologias, incluida in- ternet. Jonos Waruty ‘Mayo de 2007 Intraduccién Este libro no es um manual de composicién literaria sino un conjunto de normas de general aeeptacién en los ambitos académicos, y un repertorio do procedimientos y recursos basicos para abordar Ia escritura de trabajos profesionales que facilitarén el proceso de produccién de textos. El conoci- miento de los aspectos formales de la eseritura profesional libera al inves- tigador de la pesada carga de pensar simulténeamente en la correccién de Ia forma y on la originalidad del contenido. Esté destinado a los docentes, estudiantes, investigadores que se ini- cian y a los profesionales que deben escribir trabajos de distinta indole re- lncionados con su actividad: ensayos, ponencias, articulos de divulgacién, periodistica o libros de su especialidad. La primera elaboracién de este manual surgié de las fichas y apun- tes que tuve que redactar como titular de un seminario para estudiantes universitarios, quienes debian presentar monografias, informes y even- tualmente tesis. Este Seminario de téenicas y procedimientos de estudio y escritura en trabajos de investigacién, que dicté desde 1988 hasta 1992 ‘en Ja carrera de Sociologia de la Facultad do Ciencias Sociales de la Uni- versidad de Buenos Aires, fue una idea muy itil de las autoridades aca- aémicas, porque este tipo de aprendizaje metodolégico-instrumental re- vviste una gran importancia en Ja formacién de los alumnos, al aportar el conocimiento de normativa en In presentacién de trabajos de investiga- cién, desde una simple monografia hasta una tesis de licenciatura 0 de doctorado. Tesis, monografias e informes conduciré al estudiante o profesional en la realizacién de un trabajo escrito, desde el plan inicial hasta la redac- cién final, pasando por la informacién, en lo que respecta a los recursos que tiene a su aleance y que tal vez cl investigador no eonozea; los instru- mentos de que debe valerse y eémo utilizarlos; el dominio de organizacién ta) “ Tess, ssnas, monoprafis e informe. del aparato critico y los aspectos formales de presentacién del texto, res- petando las convenciones académicas y las nuevas normas. ‘La bibliotecaria Nora Fasano de Roig elaboré los dos apéndices que pose este libro, E] Apéndice A aporta ejemplos de la més amplia variedad de fichas bibliogréficas, algunas de ellas de reciente adopcidn, como las correspondientes a documentos electrénicos. Su aporte a este respecto es Clave, debido no sélo a su experiencia profesional en bibliotecas de la Uni- Yersidad de Buenos Aires, sino también a su participacién on el Subeomi- té de Documentaeién del Instituto Argontino de Normalizacién (RAN) que sse ocupé durante 1999, entre otros temas, de establecer las normas para referencias bibliogréficas, especialmente de documentos electrénicos. El Apéndice B incorpora un listado de bibliotecas y archivos naciona- Jes de paises de habla hispana, a los que se puede accoder por las vias tra- dicionales de consulta o por medios electrénicos. Espero que este libro pueda lenar un vacio de bibliografia en espariol sobre el tema, con el que me encontré al asumir como titular la cétedra mnencionada procedontemente, vacio que atin subsiste, salvo algunas va~ osas exeepeiones. Existen en el mercado, por un lado, manuals traduci- dos de otros idiomas que cubren algunos aspectos de la normativa para escribir trabajos do investigacién, pero que, naturalmente, desconocen normas y reglas de la oseritura en espafiol; por otro, exeelontes manuales de profesores de habla hispana, que en su momento cumplieron su come- tido pero que a esta altura resultan anticuados porque no se han publies do ediciones actualizadas. Todos ellos figuran en la Bibliografia de este I bro, porque me ayudaron inicialmonte a construir las bases del seminario y también las del presente manual. Finalmonto quiero advertir a los lectores que Jas normas y Tos ejem- plos de este manual corresponden especialmente a ciencias sociales y hu- mmanidades porque responden a mi experiencia docente en ese eampo y & mi especialidad profesional. ‘Mirra Borta 1. Géneros académicos y escritura profesional 1.1. Los diferentes géneros en la investigacién y sus caracteristieas 1.1.1. La MoNOoRAFIA La monografia es el tratamiento por escrito de un tema especifico estudia- do ¢ investigado. Con este nombre se conoce en la vida universitaria el primer intento de escribir un articulo cientifico. Requiere un previo adiestramiento en las téenicas de leetura, de es- tudio, de fichado bibliogréfico, de metodologia de la disciplina que se eul- tiva y hasta de la escritura de informes. Es una tarea que debe ser encargada al alumno que ya tiene un cier- to tiempo de dedicacién a la carrera, y constituye el primer paso impor- tante dirigido hacia la investigacién. Una monografia bien hecha puede ‘eonvertirse, después de una tarea de ampliacisn y reajuste, en un traba- jo de investigacién mayor. Respeeto al tema de la monografia conviene: ) sentir interés personal por él; b) que sea sencillo y no esté ligado a otro tema con el cual se confunda o se complique; ©) que esté claramente delimitado, es decir que lo entendamos eon pre- cisién conociendo sus limit ) que sea pequefio en extensién. Dejar los temas mas amplios para la tesis 0 trabajos de investigacién de mayor envergadura, ¥ ¢) noes indispensable un tema absolutamente original. Cualquier tema claro y pequetio sirve para ol aprendizaje de los métodos y es digno de ser estudiado en una monografia, si constituye un aporte al esclare- cimiento de algiin aspecto del objeto de estudio seleccionado. a7 “esis, eins, monagrtias nfomes 8 Pasos a seguir En el planteamiento inicial: ~eleceién del tema, ‘ w Adquisiciin de la informacién bésica, ~ Mlaboracién del plan de trabajo. ‘Allo largo del trabajo: = recoleceiGn de datos, ~ Brdenacién e interpretacion de los materiales. En la redaccién final: a ormulaci6n coherente de los argumentos, = firmeza de las eondusiones, = procisa distribucion final de la exposicién. ‘Asi la monografla estard cxidadosamente realizada, 112. La resin ‘Tesina es ¢) vérmino wtilizado para designar un tipo de trabale ec" to qan ne ubiea entre Tos requorimiontos formales de In monogratia » doa tesia, Do algun modo se trata do un sarod 5 diminaivo ve: reeucrda los problemas de clasifieacién que encubren, Jo sugiore 7 salvar uo pb tne ate ses triad de considerar cl trabajo de investigacién on el dmbito emivenst> eereomo una secueneia o recorrido de una actividad que comet Jaen eatudianto ingresn a una doterminada facultad a travis 26/8 00 ign y entrega de monograflas, y que tiene como 1ne a teccmenta al investigador con su desafio mayor y més complelo, se ereaz es una forma, asimismo, cuyas normas Bo parecen todaia hi ber sedimontado 9 por Io tanto no puede correlacionarco con une Aer oer eeten y cara. Las autoridades educativas han fijado con ose nonlin” ae ref trabajo que los estudiantes secundarios deben entregar OP Tan Poneralmonte eon el cierre que brinda la defonca oral de = uty ar, generalmente a fenen oral dom taba aa Beequisito para st egreso: En esto easo, fesina refiere, aD ee come roquisis por monngedfica de mayor dosasrolloeinvestgacin, Por eZonoral jos estudiantes cumplon en la eseuola media una scenes 0 genera} area do ia oscritura, tione une primera culminaeién ep 18 1° ae oe que, aegin Ia nuova concepei6n, coneibe un peldano més 0°78 nogrdgaina como una reduplicacién de los pardmetros utilizados pat © 2 inaction del trabajo monogrétfico, tanto cuantitativa como cual ‘Géneros académics yesritura protesionl 19 mente. En Ja escuela media Ia tesina es una forma que “mira hacia atrée” y busea aleanzar un objetivo do salida que se disefia en la medida ~ pro- poreién de la monografia, En el nivel universitario, la tesina es concebida institucionalmente de otro modo. Est4 en relacién con los requisitos para obtener la licenciatu- ray es un trabajo que “mira hacia adelante”, o sea que tiene como meta crear en los estudiantes el habito de la investigacién para que en un futu- ro inmediato encaren trabajos de investigacién originales y propios, euyo espejo es 1a ambiciosa tosis y la obtencién de un doctorado. ‘Que las tesinas se hayan convertido en constante tema de debate en el interior de las facultades (entre otras cosas, en cuanto a detorminar los pa- rrémetros objetivos que acomparian Ia tarea del wor que dirige y orienta al eetudiante durante la gostacién de la tesina y del evaluador que es el en- cargado de dictaminar Ia aprobacién final del trabajo) demuestra hasta qué ‘punto no existen criterios claros con relacién a este género. Por ejemplo, ast como en la escuela secundaria se pionsa la tesina eon una extensién cerea- na a las veinte carillas; en el ambito universitario, donde en las materias introductorias se exigen trabajos monogréficos de cinco a ocho carillas, la extensién de una tesina oscila entre las ochenta y las cien carillas. ‘La tesina, al igual que la monografia, tampoco exige que el tema ele- gido sea original, pero si se pretende que sui autor se acerque de un modo mucho més exhaustivo, profimdo y propio al tratamiento de las fuentes consultadas. in el caso de su implementacién en el espacio de 1a universidad, el mayor desarrollo cuantitativo supone como consecuencia una expansién del apartado referido al enfoque metodoléyzieo ~que es, en definitiva, una reflexién epistemolégica-, Io que lo leva fuera de 1a introduccién donde suele estar concentrado en una monografia, La tesina universitaria tam- bién exige el desarrollo de un cierto “estado de la cuestién”, propio de las tesis, es decir un apartado en ol cual ol investigador deja asentado el re- levamiento que llevé a cabo acerea de todo el material bibliogréfico exis- tente acerea de un cierto tema 0 problema, con su debida actualizacién. En el caso de la tesina este relevamiento no aspira, como en la tesis, ala totalidad, sino que mAs bien se detiene en el establecimiento y la deserip- ign de aquellas fuentes que se estiman mas relevantes acerca de la cues- tidn tratada, 1.1.8. La rests Es un trabajo cientifico original, de una mayor extensién o importan- cia que la monografia, Es el primer libro que se escribe al graduarse, y de hecho merecerd ser publicado. Puede servir 0 no como titulo de grado (li- ss, tesinas, monogrns ntrmes ~ “st, esi ar sultosa Ia elaboracién cenciatura, maestria 0 doctorado). Resulta muy difieultosa a Sola tosis, y dudosos sus resultados, si alguien no se ha entrenado y dis- tiplinado en la realizacién de monografias, pues son demasindas cosas me hay que aprender de golpe. : sm Tay Tenis debe tener entre 120 y 400 paginas. Lo que Ja distingue de ln monografia es, cuantitativamente, Ia extensién y, cualitativamente, 1x riginaligad, que os tna exigencia de este tipo de trabajo. ‘La metodologia es prdcticamente la misma y, gracias a la préctien Ja eleboracidn de monografias, se habrén asimilado los métodos de Ia in- yestigacién cientifica, Sin embargo, no debe convertirse en tesis una mo- hhografia ya hecha, mediante una inflacién verbal engafiosa que no hace ino pervertir el trabajo intelectual : : Sino Bfro recaudo importante es solieitar la asesoria, tutoria direecién de la tesis a un profesor experimentado en Ja materia. 1.14. EL INFORME arte de la tendencia libresea en las disciplinas bistérico-culturales perso en otras diplinas cue ojetive de extol 2 Sty mundo en torno y el acontecer de la vida social, se trabaja directa SRonte con Ia realidad, sea en el “campo”, sea en una experiencia de labo~ Tatorio. El informe es el tipo de trabajo escrito adecuado a esta tarea de vIeervacion direeta y, como experiencia de realizacién, antecede en ta vi- da universitaria a la monografia. 1.14.1. El informe universitario El informe universitario es un simple esbazo 0 ensayo provisional a propésito de un fendmeno también simple y Timitado, con una exposicién prePites, muy diferente del verdadero trabajo de “investigaciéa de eam- de “investigacién de laboratorio”. aoe ceeribir tna situacion real de cualquier fenémeno na- orale cultural, hechos que interesan a diversas disciplinas cientifieas. Baal trabajo de laboratorio —fundamental en ciencias fisico-quimicas, Dislogieas y psieobiolozieas, después de haberse diseado un experimen: to cogo objeto es verifiear an principio o un proceso~ el informe consiste we seamonte on una descripeisn de los fenémenos observados y una in- caenretacion de ellos en términos del conocimiento tebrico con que cuen~ te ane poracién de este tipo de trabajo ol alumno aprende a obser- ‘yar con atencién, a depurar y recoger datos de la realidad, a ordenarlos y wplear las nociones tedricas adquiridas en la interpretacién sisteméti- Génerosaradknicosy escrura profesional a ca de los hechos. También desde este trabajo, contando con una buena guia, aprenderé a plantear una investigacién de campo o de laboratorio raucho mas compleja e importante, cuya realizacién necesita mayor infor- macién y experiencia cientifieas y técnicas descriptivas, estadisticas 0 in- torpretstivas més rigurosas. Debe ser encabezado por una introduceién breve que ineluiré la expli- citacién de] interés despertado por el fondmeno que se observa y se de cribe, los limites de la deseripeién y la enumeraeién de las fuentes infor- mativas e instrumentos de que se ha dispuesto, lo mismo que el plan de ‘observacién que se ha seguido. El cuerpo del informe deber4 exponer objetiva, clara y ordenadamen- te todo el conjunto de fondmenos observados indicando los elementos que intervienen en ellos y las circunstancias en que aparecen. Al mismo tiem- po, en las ciencias de campo se indicardn en cada caso las caracteristicas y ol valor atribuidos a las fuentes informativas, generalmente persona- les y orales, euidando ofrecor las razones pertinentes ‘De este modo el lector podré informarse exactamente, a través de nues- tros ojos, acerca del eardcter y proceso real de los fenémenos descriptos, Para ofrecer una descripcién mas ordenada se debe intentar la orgar nizaciGn estadistica de los datos, de manera que se pueda disponer de cus dros que faciliten la visién e interpretacién de los materiales, En las ciencias de eampo, conviene ofrecer los mapas correspondientes para presentar la distribucién geogréfica y, asimismo, organigramas que permitan apreciar mejor las ostructuras de las orgenizaciones descriptas. En una tiltima accién el informe deberd brindar, eon una cierta pru- dencia, las conchusiones que se desprenden de Jos materiales informativos ofrecidos y sefalara con claridad los prineipales fenémenos o aspectos de ellos que deban ser mas ampliamente investigados y los métodos que se consideren més idéneos para realizar tales estudios posteriores. Es preciso observar la mayor objetividad y, por lo tanto, se pondré mucho euidado en evitar las apreeiaciones subjetivas. El lenguaje deberé ser por lo mismo lo més preciso posible y adecua- do a una presentacién sistematics y evitard cualquier ambigiedad o com- plieacién formal 1.1.4.2. EL informe de investigacién ‘Se ama también “informe” a la presentacién por eserito de los resul- tados de una investigacién, a la obra que un investigador principiante o formado presentard a una institucién 0 a la publieacién de esa obra para difundir sus aportes a la disciplina que cultiva. Independiontomente de las criticas a las que es sometido un informe de investigacion, es preciso que desde la concepeién del mismo hasta su 2 “Esl, esas, monogafis¢ Informes presentacién final el autor haya eumplido con los siguientes pasos de la investigueion: a) eleccién de un tema y su respectiva evaluacién; b) exploracién en las fuentes de informacién; ©) formulacién de un plan de trabajo completo y detallado; d) recoleccién de Jos datos; e) ordenacién de los materiales e interpretacién de los datos, formula- cién de las conclusiones, confirmacién de la o las hipstesis, y 8) composiciéa del trabajo escrito. 1.5. BL ENSAYO. Es el comentario libre en torno de un fenémeno, un tema o un libro. La libertad de enfoque del autor de este trabajo es muy grande. Suele prescindir, casi en absoluto, del aparato eritieo exterior, aunque siempre esti obligado a mantenerse dentro de los limites del rigor intelectual. Admite las opiniones personales sin exigencia de pruebas. Al investi- kador formado le da la posibilidad de presentar libremente una amplia sintesis de sus investigaciones (conferencias, notas periodisticas en revis- tas y periddicos). En el ensayo se parte de una tesis que incluye juieios de valor sobre el tema tratado. Un buen ensayo revela siompro una tesis personal, una originalidad ereadora. Su libertad de adoptar un onfoque personal y de afirmar una tesis, asi coma su derecho a prescindir del aparato critico ex- terno, no lo dispensa del rigor y de Ia firme coherencia expositiva. Se puede afirmar que un buen ensayo es aquel que puede, en cual- quier momento, recuperar su andamiaje de citas y notas que constituye el aparato eritico. ParEl ensayo tiene un estilo diferente del fio lenguaje cientifico, aspira avuna cierta eleganeia formal literaria sin legar al exceso retérico. 1.1.6, LOS TRABAJOS DE DIVULGACION El profesional en ejercicio a menudo tiene que escribir un articulo pe- riodistico, una ponencia o una conferencia. La estructura de estos traba- jos de divalgacién es basicamente la misma que Ta de un trabajo de inves- tigacién, pero su forma de presentacién difiere esencialmente de la de es- te ultimo. Es mas: la estructura 0 arquitoctura, ol osqueleto del trabajo, permaneceré secreto, vertebrando no obetanto todo el contenido. No debe ser una presentaeién arbitraria y desordenada de unos pocos aspoctos del tema elegido Generesacadtmoosy eserra profesional % 116.1. El artiewlo periodistica Sea para un medio de comunicacién masiva como un diario, oun me- dio especializado de la profesién,e1 articulo periodistico responders en su presentacién a las formas periodistieas usvales: ) titulo con “gancho"; b) _copete o /ead (optativo). Consiste en un apretado resumen de pocas Ii- reas que se imprime en un tipo de letra destacada y que se ubica en- tre el titulo y el euerpo del trabajo, con la doble funcién de atraer al lector y alertarlo sobre el contenido; ©) subtitulos que vayan pautando la lectura y eviten la presentacién en logue de todo el texto. De ninguna manera llevarén nimeros como los capitulo de un trabajo de investigacién; @)_lenguaje adceuado al nivel del lector medio de la publicacién, y ©) firma del trabajo y pequefio curriculum del autor. La organizacién del contenido responder al triptica: introduccién, cuerpo del trabajo, conclusions, ovitando subtitular con estos nombres ¥ sustituyéndolos con otros més atractivos. 1.1.6.2. La ponencia Rs el texto escrito para participar en un congreso, seminario, jornada otros encuentros de especialistas, y tiene la doble earacteristica de la ¢o- municacién oral (serd lefda por el autor o su representante) y de la comu- nicacidn eserita (debe concebirse como texto para publicar). Se organiza sobre un plan indice que no serd reproducido en el texto. Ellenguaje seré més especializado que el del articulo periodistico, te- niendo en euenta el nivel profesional de los oyentes; mas atrayente que el de un informe de investigacién y moderadamente més coloquial El texto incluira algunos aspectos del aparato critico (citas, notas al pie, bibliografia) que podrén obviarse en la exposicién oral, para no obs- taculizar la fluidez de Ia expresién, El abstract 0 resumen que se exige en Ia etapa previa a Ia realizs cidn del encuentro debe estar redactado con claridad, precision y belleza de expresién, puesto que frecuentemente por razones de falta de recur- sos suele publicarse solamente el repertorio de abstracts y no los traba- Jos completos. Ademés, la posibilidad de ser aceptado como expositor también depende de este breve texto con el que haremos conocer nuestro aporte, 24 “ess, tesinas, manage Intormes 1.2, Las fases de la investigacion Investigar supone aplicar Ia inteligencia a la comprensién exacts de ja realidad, con el fin de desentrafiar sus secretos, conocerla en profundi- dad y dominarla. Asi, la investigacién nace do un sentimiento de insatis- faccién intelectual y Tequiere, a través de una observacién atenta y minu- ciosa, prolongada y realizada bajo ciertas condiciones, una explicacién de Jos hechos que sustituya aquellas explicaciones que resultaron insuficien- tes 0 falsas. "A primera vista, Ia labor del investigador aparece como una tarea res- tringida a la mera comprobacién empfrica de algo que se sabe. Sin embar- go, el hecho de que las conclusiones finales, que son formuladas luego de Gna compleja experimentacién, pueden modificar Ja hipétesis inicial a la Yer que permiten postular nuevas hipétesis caya validez debers también ter comprebada empfricamente, es una prueba de que esta tarea requic re creatividad. El aporte de una investigacién es un aporte al crecimien- to de los conocimientos cientificos. ‘Ademés, ao dobe tener en cuenta que el pensamiento erftica no im- plica oponerse a las coneepciones establecidas y criticarlas, La investiga tin debe ser entendida como el aporte de nuevos conocimientos. Ast, las Viejas concopeiones deben aparecer como un paso previo o como una con- Secuencia secundaria de la investigacién. Solo en el mejor de los casos puede ocupar un capitulo especial de revision y eritica de las doctrinas Enteriores (al comienzo de cada tema 0 como nota, cuando no merece dis- cusién). El disetio de una investigacion es el ajuste de las decisiones requeri- das para el hallazgo de un nuevo conocimiento por medio de Ta comproba- cin de una hipétesis. Estas decisiones son: 1a) scleecién del tema; 1b) planteamiento de una o varias hipétesis; ©) eleccién de un método para comprobar las hipétesis; @)_recoleecién de Tos datos, y finalmente ©) interprotacién de los datos y formulacién de las conclusiones. 1.2.1, SELECOION DEL TEMA Se debe establecer una delimitacién conceptual y la consiguiente ver~ balizacién del problema existente. Se deben distinguir cuidadosamente as semejanzas y diferencias con otros temas, para determinar qué es lo que constituye la excepeionalidad de nuestro objeto y poder visualizar las razones por las cuales ¢l tema merece ser estudiado. (bora académicosyessturaprtesoral 6 Ahora bien, emo realizar una buena seleccién del tema? Tal selec- cién puede resultar penosa, pues frecuontemente se tiene la impresiGn de aque la mayorfa de los temas han sido agotados, y se descarta uno tras otro sin advertir que muchas veces puede darseles nuevos y originales enfo- {ques a esos mismos temas. A contiauacidn se dan algunas sugerencias pa- ra elegir un tema: a) examinar las experiencias personales; b) considerar temas o problemas que alguna vez Jo inquictaron; ©) ontrevistarse con expertos on dreas de actividad que sean de interés; 4) informarse acerca de investigaciones publicadas 0 en proceso; e) revisar sugerencias de lecturas en articulos o publicaciones de otros cespecialistas; 1) ver las bibliograffas de los libros, encielopedias y eatdlogos de libre- vias, ¥ ®) revisar ficheros en las bibliotecas. La eleccién del tema debe considerarse en funcién del interés, Ia nti- lidad, la factibilidad y ol riesgo de duplicidad = El interés por el tema clogido debe ser gonuino, pues ello implica ma- yor curiosidad intelectual: una actitud eritica y alerta, y persistencia ‘en el esfuterzo para terminar felizmente la tarea. Conviene considerar mas de un tema como de posible desarrollo para luego seleccionar ol que se estime de mayor interés y posibilidades. La curiosidad debe ser siempre imparcial y alejada de presiones externas. = Lautilidad esté en relacién con cl interés. Se considera que a mayor uid dl esa o trabajo, abr mayor interés en a persona que lo realiza = La factibilidad se refiere a la posibilidad de realizar el proyecto en cuanto a Ja oxistencia de fuentes de informacién, a los medios econé- :micos y al tiempo de que se dispone. — La duplicidad se refiere a evitar, sobre todo, que en un tema ya estu- diado anteriormente por otros investigadores no se vayan a repetir el uso de las mismas téenicas de investigacién y el mismo enfoque. Una ver elegido el tema, se lo debe delimitar y definir, Este proceso consiste en formular una serie de preguntas completas y detalladas que: ‘a)establezcan las dreas y el perfodo de tiempo a cubrir; b) _planteon los temas y subtemas del estudio; ©) expliquen los puntos de vista y las teorias sobre los cuales descansa el problema (marco teérico); 4) indiquen las semejanzas y diferencias con otras éreas, y @) describan el método a seguir para buscar los datos, 28 ‘ess, tesinas, manogmafse informs 1.2.1.1. Planteamiento de una o varias hipstesis ‘La idea central o tesis del estudio est contenida en la pregunta “qué puedo probar con mi estudio?”, y requiere una euidadosa olaboracién pues fonstituye 1a médula del proceso mental del investigador. Bs la guia de to- das sus indagaciones y andlisis subsiguientes, ‘Luego deben establecerse las ideas auxiliares o subproblemas que complementan la idea central, escogiéndose aquellas que puedan ser res- pondidas con los recursos disponibles: datos, tiempo y dinero. ‘La hipétesis de trabajo seré una explicaciGn provisional escogida en- tro varias explicaciones posibles, y que responda mejor a Tas caracteristi- cas del problema planteado por los hechos y que ademds pueda ser verifi- cable empiricamente. Esta hipétesis debe ser simple en comparacién con el tema a resolver, pero est claro que de ella nos serviremos como guia dde la investigacién y para sacar a luz nuevos hechos. En sintesis, esta hi- pétesis debord ser comprobada en las conclusiones del trabajo, ‘Al plantear Ia hipétesis es necesario, ademas, definir con términos precisos y lo mas claro quo soa posible tanto la unidad de andlisis como las variables y sus atributos. EyeMrio: El tema del trabajo es “La mujer en el mereado de trabajo”. La hipditesis: “Las mujeres no llegan a los puestos de conduceién porque en el mercado de trabajo existe discriminaciGn en contra de las mujeres”. ‘La unidad de andilisis: las maujores que estén insertas en el mercado de trabajo (pero hay que delimitar el mercado de trabajo en funcién del espacio y el tiempo; por ejemplo: Capital Federal en la década del 80). ‘La variable principal en oste caso es discriminaci6n. Habré que defi- nir por lo tanto qué entendemos por discriminacién. 1.2.2, ELECCION DE UN METODO PARA COMPROBAR LAS HIPOTESIS Y LA RECOLECCION DE 10S DATOS Una vez plantesda la hipétesis se debe realizar una comprobacién metédica de su validez gue permita explicar los hechos observados. S cuidara la idoneidad de los medios empleados para la recoleccién de Ios datos, y Ja exactitud y pertinencia de éstos. ‘La recoleccién dé datos supone una previa distincién entre dato per tinente y no pertinente, para lo cual es indispensable saber por qué se di- ce que un dato es pertinente, es decir quo constituye un dato siti para una determinada investigacién. Constituye un dato pertinente todo hecho o fo- ‘némeno que sirve para probar, rectificar 0 negar nuestra hipétesis, para justifiear o descalifiear los métodos, para evaluar los instrumentos, en {éretesacadéioas yescritraprfesonal 2 cuanto todo esto se conecte directamente con la verificacién de la hipéto- sis. Todo lo demas no es pertinente, no sirve para nuestra investigacion, "La recoleccién requiere, en concreto, deslindar la autenticidad y obje- tividad de los datos, tomando todas las precauciones necesarias para des- cubrir las caracteristicas que les imponen las fuentes de donde emanan y las circunstancias historicas, sociales, culturales, naturales y hasta expe- rimentales en las que aparecen, asi como también para libratlos de mucs- tras subjetividades. Por lo tanto, sin intentar una enumeracion de todos los diversos criterios empleados para evaluar Ia objetividad del dato, dire- mos que el investigador debiera formularse algunas preguntas al enfren- tar un conjunto de datos y en el acto mismo de recoger cada uno de ellos: a) {qué caracteristicas histéricas, sociales, culturales, naturales 0 expe- rimentales tiene la fuente de informacién?;, b) {qué condiciones histéricas, sociales, culturales, psicolégicas 0 de ex- perimentacién, y que caracteristicas morales ¢ intereses personales tione ol informante?; © jeudl es, por lo tanto, su valor como fuente o informante?; 4) Zeudles son mis condiciones historicas, sociales, culturales o natura: Jes; eudles mis earacteristicas morales @ intelectuales como investiga dor, y cuales mis intereses?; ©) Zedimo y en qué medida el dato depende de la fuente informativa o de las condiciones de experimentacién?; 1) geGmo y en qué medida depende de mi éptica personal; 8) Zeudl es ol valor informative del dato?; h) {para qué y cémo podré emplear este dato?; y 3) due valor probatri iene este date bsoluto, relaivo, total parcel, 1.2.8, INTERPRETACION DE LOS DATOS ¥ FORMULACION DE LAS CONCLUSIONES El éxito de un trabajo de investigacién depende en gran medida de que una vez planteada la o las hipétesis y antes de proceder a su verifi- cacién empirica el investigador tenga idea clara de cudles son los pasos a seguir para aleanzar el objetivo propuesto en el trabajo. Se debe tener Ja capacidad de disear detalladamente 1a acsin y de erie el diet, a fin de poder prever el eurso general del trabajo y sus limitaciones u tbstéeulos. : eect ‘Asf, una ver recogidos los datos a través de las técnicas disefiadas con anterioridad, pasamos al andlisie do los datos recogidos. Este andlisis in- luye ante todo una cuidadosa revisién para deseubrir si cl plan de la in- vestigacién y de la comprobacién han sido rigurosamente seguidos 0 si ha habido excepeiones para notarlas y reconocerias en el trabajo. 8 ‘els, texas, manage intormes ‘Acontinuacién se deben revisar los criterios conforme a los cuales va- ‘mos a considerar la tesis comprobada o refutada, Una ver, que hemos de- Gidido el grado de probabilidad y de error probable que podemos permitir- thos, debemos Verificar si el nimero de casos es suficionte para comprobar huestra hipétosis en el grado de probabilidad que hemos detorminado, “Bl trabajo de la recoleccién de los datos no sélo va comprobando la 0 las hipétesis sino que ademas la o las precisa, matiza y enriquece. ‘También puede ocurrir que la 0 las niegue radicalmente, pero este fe- némeno es razo si se ha trabajado con esmero en Ia investigacion. Convie- ne advertir que la recoleccién e interpretacién estan estrechamente vin- culadas y no existe divisién tajante entre ambas etapas. ‘Los nuevos datos obtenidos son examinados a través de los prineipios teorias que sirven de marco te6rico. Finalmente se claboran las eonclu- siones y se puede proceder & la redaccién final del trabajo. 2. El plan y la escritura del trabajo 1 i‘ ‘ | 2.1, El titulo y el plan de trabajo Después de haber realizado un largo trabajo de lectura, de busqueda de informacién, de eleccién y delimitacién de un tema especifico, se debe for- mular el plan de Ia investigacién. ‘Asimismo, es imprescindible sefialar la importancia del diseito de un, plan de trabajo con Ia finalidad de permitirle al investigador un ordena- do manejo del tiempo. ‘Tanto en el universo de 1a escuela media como en. el de la universidad los investigadores realizan una gran cantidad de di- versas tareas (cursan materias 0 seminarios, concurren diariamente & clases, ete.); si a eso se le suma que en muchos casos las instituciones fi- jan fechas tope para Ia entrega de los escritos, la confeccién de un organi- rama o cuaderno donde aparezean las diversas fases que constituyen el trabajo global y la asignacién de tiempos estimativos para cada una de las tapas gon muy importantes, aunque en muchos casos cumplan una fan= in més bien orientativa. La formulacién del plan no puede prescindir del trabajo anterior, ya que on osta etapa ol investigador tendr necesariamente un objetivo defi- nido con claridad y una completa y ordenada informacion sobre ol tema. No contar con esta informacién significarA decidir a oscuras y correr el riesgo de formular un planteamiento ingonuo que delate la ignorancia s0- bre el tema a estudiar. Por lo contrario, el trabajo de lectura, busqueda, leceién y delimitacién de un tema permitiré al investigador contar con un conjunto de ideas acorea del tema, de sus aspectos mds interesantes, de las fuentes directas utilizables, de la diseusiGn posible con la bibliogra- fia eritica, de Ia aplicabilidad de los métodos de anélisis y de interpreta- i6n, de la utilidad de ciertos instrumentos de trabajo, de la posible orga- (at 8 “ess, tsinas, monogratase intormes nizacién de los diversos puntos comprendidos en nuestro estudio y de las probables conclusiones a las que se egaré. La formulacién oportuna del plan sirve de instramento para promo- ver con eficiencia la investigaciGn. Esto nos permitira eludir asuntos in- significantes y riesgos innecesarios. Un plan de trabajo consta de tres partes complomentarias: a) Esquema Se realizaré un esbozo de los aspectos més relevantes en los que se divide el toma a investigar, a los que Hamaromos capftulos, y el investiga dor les colocaré un titulo adecuado al objetivo que persigue en la investi- gacidn. Luego, con él mismo procedimiento, se analizaran los aspectos se- candarios comprendidos en cada capitulo (subeapitulos). Esta parte es una especio de indice previo del trabajo, a tal punto que es conveniente reservar un lugar antes de enumerar los capitulos, para la introduccién y, después de éstos, uno para las conclusiones, El modo de ordenar Ia secueneia de los capitulos y subeapstulos va a responder a Ja légiea expositiva que requiera el tema. La eonstruccién del ‘esquema del plan debe poseer una arquitectura ccherente y funcional. Ca~ da parte del trabajo debe integrar un conjunto unitario. De este modo no podré haber secciones independientes donde quepan consideraciones he- terogéneas. b) Deseripeién Paralelamente se realizaré una deseripeién de la investigacién, En Ia introduecién se ofrecera una explicacién del problema, indieando sus an- tecedentes, necesidades eoncretas e intereses intelectuales que motivan al investigador a realizar el trabajo Gustificacién). Se sefialardn también los aleances y objetivos fundamentales indieando la hipétesis principal y las secundarias. De aqui sale el titulo del trabajo. ‘Se dard un resumen del contenido y la finalidad de cada capitulo y también de su sentido dentro del conjunto del trabajo. En las conclusiones se presentarén ordenadamente las hipétesis que se espera comprobar a lo largo de la investigacién. Casi todas las seeciones de este plan constituiran materiales para es- cribir la introduccién del trabajo en su redaccién final ©) Proposicidn de fuentes, métados y procedimientos En cada eapitulo se deberan indicar en Iineas generales las fuentes principales que se utilizardn, los enfoques, métodos y técnicas, y la criti- a, qu serdn emplead pany fa osortura del trabajo 2 2.1.1, VARIACIONES DEL fNDICE ‘Como hemos visto, la tarea de elaborar el plan es minueiosa. A partir de este cuidado tofido de categorias y métodos se intentara captar y analizar la informacién que ofrezca la realidad, sin correr el riesgo de pasar por alto da- tos relevantes o recoger una cantidad excesiva de datos no pertinentes. Pero las realidades a las que diriggimos nuestra atenci6n, después de es- tudiadas, pueden revelarnos una estructura totalmente distinta de Ia que esperdbamos encontrar al inicio del trabajo. Por lo tanto, el plan indice solo debe servir como un “mapa” del recorrido de la investigacién. Este “mapa” so ird adaptando al objetivo perseguido, que puede variar la direocién y los métodos. La misma naturaleza del indice inicial y su funcién permitirn una transformacién sucesiva del mismo, que desembocaré en un indice final abgolutamente representativo del contenido ¢ intencionalidad del trabajo. 2.2, La estructura del trabajo ‘Todo trabajo de investigacién tiene una determinada estructura, es decir, una manera de disponer los elementos que componen ese todo orga nizado. Las partes en que se subdivide no son fijas. De cualquier manera es usual que posea: Portada Indice general Lista de tablas y figuras Intro¢uecién Cuerpo Conctusiones Apéndicels Bibliografia 2.2.1. PORTADA 0 CARATULA Es la presentacién del trabajo. Debe contener: a) titulo del trabajo y, si fuera necesario, inmediata- mente debajo, el subtitulo en letras menos destacadas; b) el nombre del auvoi 9 autores (en este titimo caso los apellidos en orden alfabstico); ¢) inmediatamente debajo, el nombre del director, tutor 0 asesor; d) institu- cién; e) lugar (ciudad), y £) fecha (ano). Ey “Tess, tesias, manografise intormas ‘MopELO DB FORTADA: MOVIMIENTOS SOCIALES Y PRACTICAS COMUNICACIONALES ‘Algunas reflexiones a partir de la experiencia argertina (1980-1989) Bonitez, Gabriel Marini, Ana Laura Yatiez, Carlos Directora: Prot. Alcra Argumedo, titular del Seminario Las ideas nacionales-populares en América Latina Carrera de Sociologia Facultad de Ciencias Sociales - UBA 1989 2.2.2. INDICE GENERAL El Indice general final se confecciona una vez mecanografiado el tra- bajo. Es como el esquema del plan de trabajo, wna tabla que contiene sélo los titulos de las socciones més importantes del estudio: partes, eapitulos, subeapttulos y aun, a veces, divisiones de éstos (pardgrafos y subparégra- fos), En Ia:misma Iinea a la derecha de donde aparece cada uno de los tf thlos, se verd el mimero de pagina donde empieza, d Este indice rovelaré el orden y la sistemtica del trabajo. La exacti- tud, In belleza de exprosion de los titulos y su capacidad de sugerir con breve frase el contenido de la seecién, eonstituyen la prueba del dominio intelectual del investigador. Es conveniente colocarlo después de Ja porta- day antes de la Introduccién. plan yl ase dl tabafo 8 2.2.8, LSTA DEE TABLAS ¥ FIGURAS, ¥ LISTA DE ILUSTRACIONES Las ilustraciones facilitan la comprensién de la explicacién eserita, To- da ilustracién -sea que represente directamente (fotografias y dibujos), es- ‘quematice (mapas, eronologias y cuadros sindptieos), ordene los datos (ta- blas estadisticas) 0 muestre ciertos valores absolutos o relativos (gréficas estadisticas)~ permite ver en figuracidn entera con claridad y evidencia aquello que la explicacién verbal, o muy abstracta o muy conereta, entre- {ga sélo paulatinamente. Son complementarias o supletorias de'lo escrito. Cuando un trabajo de investigacién incluye tablas y figuras, debe confeceionarse un indice de éstas, de acuerdo con las secuencias numéri- cas dispuestas por orden de aparicién en el texto. Bajo el titulo de "Lista de tablas y figuras” se indicara el nombre de cada figura, 0 el néimero si no tuviera nombre, de eada una y a continuacién, a la derecha, el niime- 70 de pagina donde se halla. Esta lista serd presentada en una pagina que siga al indice gencral. Las ilustraciones responden cada dia a técnicas més precisas y complejas y corresponden a un tipo de conocimiento especializado que no se descri- bird en esta guia. No es conveniente que se agrupen las ilustraciones al final o ex el me- dio del trabajo. La ilustracién debe ser ilustracién inmediata del texto ex- positivo. Pierde mucho de su utilidad si no se la exhibe en el lugar corres- pondiente. Es tradicional utilizar en el sistema de notacién los nimeros romanos para diferenciarla del indice general 2.2.4, INTRODUCCION La retérica clasica, siguiendo las indicaciones que vertiera Aristéte- les, enfatizaba que en Ja introduccién habia dos componentes fundamen- tales que en su denominacién latina se corresponden con la eaptatio be- nevolentiae y la partitio, Bl primer término refiere a los modos que el ora- dor 6 autor utiliza para sensibilizar a su audiencia, para conmoverla, y, ‘en consecuencia, predisponer y eapturar la atencién para que se siga con interés lo que a continuacién se expondra. En el caso de los escritos que aqui se describen, tal funcién deberia ser entendida en los términos de que necesariamente en la introduccién debe incluirse una cierta estrate- gia tendiente a convencer a la audiencia para que lea lo que sigue. La pregunta que tendria que hacerse el autor es spor qué deberta alguien in- vertir su tiempo y leer lo que yo escribo sobre este tema? La respuesta an- ticipada a esta pregunta estratégicamente debe formar parte de la intro- duceién. 8 ‘Tess tsinas, monografise Informes E] segundo término, la partitio, puede interpretarse como una “gen- tileza” hacia el lector, asf como también como un mareador estructural y ogico, Refiere a esa parte de la introduccién que se ofrece como una suer- te de “indice”; es decir, algunas frases en las que el autor le adelanta al auditor o lector los pasos que va a seguir su trabajo: “Primero haré esto, Jy Tuego esto otro, y mas tarde aquello otro...”. Bl desarrollo en extensién, {ante de Ia captatio benevolentiae como de la partitio, es directamente pro- orcional a la extensién del trabajo, lo cual determina quo en algunos ca- Pos pueda sor resumido en unos pocos renglones, pero aun asi su eonside- acién es importante para dar forma cabal a la introduccién. ‘Su funeién es empezar a orientar al lector. Se expondré brevemente 1 problema de que trata el trabajo, los antecedentes de In cuestién, los I mites de la investigacién, aleances y objetivos; al mismo tiempo que las fuentes, enfogues, métodos y téenicas utilizados en la tarea. Pueden agre- garse en esta parle las expresiones de reconocimiento del autor hacia per- Sonas e institueionos que contribuyeron a la realizacién de la obra, que en tun libro iria desglosado de la Introduccién, en un prélogo o nota de agra~ decimiento, 2.2.8. CUBRPO Fs lo exencial del trabajo de investigacién y suele dividirse en partes ‘ylo capttulos. Alli se expone el desarrollo del tema y la demostracién de la 3 las hipétesis. También incluye las informaciones recogidas expuestas sisteméticamente, las tablas, gréficos ¢ ilustraciones ‘Se muestra el método de elaboracién de datos y se establecen las com- paraciones, se analizan lus elasificaciones y se sintotizan los eontenidos. ‘La introducciGn proparé al lector para aquello que va a encontrar en el cuerpo de la obra como una manera eficaz de atraer su interés y de fa- ‘ilitar la eomprensién del contenido. Al mismo tiempo se mencionan los procedimientos intelectuales empleados, como elemento de seguridad pa- ra que nadie pueda acusar al autor de poca seriedad, ambigiedad o defi- tieneia si so Tos juzgara desde otras perspectivas, propésitos o métodos. En todo caso podré discutirse el plantéamniento mismo del trabajo, pero di ficilmente, si el autor es consecuonte con sus declaraciones sobre objeti- vos y procedimientos, se le podrén pedir rosponsabilidades cientificas que no haya asumido explicitamente. ‘Después del cuerpo de la obra es necesario reservar un lugar especial para las conelusiones del estudio, tan necesarias como la introduccién. Eifan yf esortue de taba a 2.2.6, ConcLusioves Recoge todas las tosis, tanto basieas como socundarias, que han sido probadas en el cuerpo del trabajo. Al mismo tiempo deberé dejar constan- cia de los problemas pendientes. Es conveniente sefialar tras cada conelusién, entre paréntesis, los nu- merales de los capitulos o subcapitulos en los que esté demostrado lo q: so afirma. Es docir quo on esta ultima parte se le presenta al lector orde- nadamente, en forma sintética y en un lenguaje claro, todo el conjunto de resultados de la investigacién. 2.2.7. APENDICE, El apéndice o apéndices, denominados también “anexos”, constituyen una secciGn que sigue inmediatamente a las conclusiones, Contienen ma- torial complementario o ilustrativo. Cuando una nota crece en dimensién e importancia propia y no eabe en Ia seeuencia que imprime unidad y agilidad al trabajo, porque su in- clusién en los capstulos entorpecerfa la lectura, puede ser convertida en apéndice si es importante para la comprensién del texto, Figurardn en apéndice también cuadros, figuras, diagramas y datos estadisticos que, por diversas razones, no pudieron ser insertados como ejemplos puntuales dentro del texto. Elo los apéndices no son estrictamente indispensables, pero hay trax bajos que lo exigen. Por ejomplo, una obra histéiea en la que hay cons tantes referencias a un documento lo Ilevaré en el apéndice. Otra sobre un texto Literario en el que se estudian aspectos sociales debe incluir el 0 los fragmentos de ese texto en apéndice. son PheneAl dbo ponerse enol apéndice todos los datos y documen- 15 necesarios para la comprensién del trabajo, diffeultarian la fluider de su lectura. lea aac Una advertencia final: el ntimero de los apéndices debe ser discreto y también su volumen aunque se trate de un solo documento. 2.2.7.1. Apéndice metodolégico Sibien en la introduecién se anuncia la metodologia utilizada, se eon- sidera como un rasgo de seriedad intelectual incorporar el llamado “Apén- dico metodologico” donde se deseriben minuciosamente las condiciones en las cuales se realizé la investigacién. a Tiss, testes, monogrfs nformes 2.2.8, BIBLIOGRAFIA La bibliogratia es una base capital on el planteamiento y desarrollo del trabajo. Las normas para la presentacién de los datos bibliogréficos - garan en el Apéndice A de este libro. La bibliografia final no debe faltar en un trabajo de investigacién, sea éste una monografia, una tesis o un libro, ya veees en trabajos de di- vulgacién, ‘Si bien la bibliografia consultada se encuentra pormenorizada en las referencias en notas, conviene agruparlas en Ja bibliografia final, para que el lector no esté obligado a buscar pagina por pégina la informacién que le interesa y pueda tener una visién de conjunto de los materiales usados en l trabajo. La bibliografia debe contener la lista de obras consultadas, aunque hayan sido usadas solamente para un capitulo 0 una parte mfnima de su trabajo. De ninguna manera debe citarse en Ia bibliografia un libro no consul- tado, porque este proceder es contrario a la ética del investigador. (Ofre- cer una bibliografia mas amplia que la consultada es una modalidad pa- 1a libros muy eruditos o para manuales ¥ en este easo hay que utilizar un sistema para diferenciar la bibliografia general sobre el tema, de la con- sultada.) ‘No es conveniente citar diccionarios, enciclopedias, gramatieas, ma- nuales gonorales que, aunque hayan servido do orientacién, no constitu. yen elementos de relacién directa con cl toma del trabajo. La bibliografia se cita en orden alfabético apellido del autor, luego el nombre y los demas datos segtin las normas de las fichas bibliogréficas (vedse 4.1.2, “La ficha bibliogréfiea”). ‘A veces es posible establecer una clasificacién dentro de ella, aunque el orden alfabético debe mantenerse en cada seccién. Una de las posibles clasificaciones es: bibliografia general y bibliografia especifiea sobre el te- ma; fuentes directas y critica; libros y manuseritos; libros y publicaciones periédicas, aclas parlamentarias, documentos de colecciones particulares © archivos. Se elija Ia clasifieacién que se elija, dentro de cada seecién se respetard el orden alfabsético. La elaboracién de esta bibliografia final ostara proparada por ol fi- chero bibliogréfieo que, recogido a Io largo de toda la investigacién, con- tendré todos los datos indispensables de cada unidad bibliogrétfica. Las lasificaciones y 1a ordenacién alfabética también sorén simplifieadas yor el sistema de fichas. 3. La busqueda bibliografica Una ver elegido el tema del trabajo, el titulo, y elaborado un indice hipo- tético (la primera versién) con su correspondiente resumen del contenido por cada seccién, se puede proceder a la biisqueda sistematica del mate- rial bibliogrdfico que formar parte del aparato critico. La bibliografia es ol punto de partida de todo trabajo de investigacién. No es posible intentar el tratamiento de un tema, ni analizarlo, ni aportar un nuevo punto de vista, sin tener en cuenta las conclusiones & que han Ilegado los espocialistas en la materia; en definitiva: el estado de la cucstion. Por lo tanto, la bibliografia permite al investigador, al erudito, al es- tudioso, confrontar los resultados a los que legaron en sus trabajos, asi ‘como la originalidad de sus tesis. Ademés, el hecho de que cl investigador ‘pueda enterarse répidamente de todo lo escrito sobre el asunto que Ie in- teresa representa para 61 un shorro considerable de tiempo y esfuerzo. La bibliografia general y In especial son instrumentos de investiga- ign y de informacién, capaces de hacer surgir de la oscuridad todos los productos det pensamiento pertenecientes al pasado més lejano.o al mo- ‘mento actual. Aunque el investigador se haya propuesto trabajar en un tema de- terminado con otras téenicas, es indispensable que conozea la bibliogra- fia previa. ‘Ya veremos paso por paso eémo se realiza una biisqueda bibliografica y eudles son en nuestro pais Tos recursos de Ios que se puede valer un in- vestigador, ‘Se sabe que ol dosonvolvimiento aleanzado por los servicios de biblio- teca y contros de informacién y documentacién esta relacionado con el adelanto tecnolégico y cientifico de un pais. Los profesionales y los inte- lectuales en general, incluidos los estudiantes, deben conocer los mecanis- ‘mos més sencillos de acceso a Ia informacién y las herramientas que pue- tat 2 Tesi, teins, monoqratis @ intormes den utilizar, sean de acceso local 0 remoto, en su pais o en el extranjero, facilitados por las nuevas tecnologtas. 3.1. Biblioteeas, centros de informacién, archivos Las primeras listas de libros que aparecieron fueron elaboradas por libreros de los siglos Xv y Xv1y vinioron a continuar la tradicién de los nu merosos catélogos de las bibliotecas de los eonventos a partir del siglo x No se ajustaban a ninguna regla y no se las titulaba atin “bibliografias” sino que levaban alguno de estos nombres: Catalogus, Inventarium, Bi- bliotheca, Index o Repertorium. Sin embargo, el origen de la bibliografia en su forma manuserita es ‘mucho més antiguo: los miles de volimenes de ia biblioteca de Alejandria se encontraban perfectamente clasificados en las 120 materias que consti- tuian el Pinakes, verdadero cuadro de elasificacién de fondos bibliograficos. Desde antiguo, entonees, las primeras manifestaciones de la nocién. bibliografiea equivalen a lista de obras”. El nombre “bibliografia” no apa- recié sino hasta 1633 en Francia. Las listas bibliograficas se multiplican en los siglos xvmt y xvi confor- ‘me aumenta la produccién impresa. Ya para fines del siglo xix se hizo patente que la situacién bibliogréfi- ‘ca era cada vex. mas dificil de controlar. Bn e] siglo xx se la ha considerado dosde diversos y nuevos puntos de vista, pero las complicaciones han au- mentado por el incremento de los medios de eomunicacidn, y el resultado os un panorama que constantemente cambia, se amplia y se desarrola. En Ia antiguedad se trataba de compilaciones cuyo objeto primordial era salvar del olvido las obras del pasado. Ahora la bibliografia tiene una, nueva misién que cumplir: informar dia a dia los progresos de las diferen: tes ramas del conocimiento humano. No obstante, Ia situacién actual es de tal naturaleza que los auxiliares bibliogréficos amenazan sepultar al usuario. Existen organizaciones mundiales que constantemente proporeionan ayuda y gufa en este terreno El investigador a la hora de elaborar una bibliografia rel con el tema de su investigacién puede acudir a la Biblioteca Nacional, a las bibliotecas de las organizacionos mundiales segtin el tema (Organiza. cién de Estados Americanos oral; Organizacion Mundial de la Salud (ons); Organizacién Internacional del ‘Trabajo [orr], Unesco, ete.); a las Libliotecas de las universidades y sus facultades correspondientes; a las bibliotecas de las agregadurias culturales de embajadas o consulados; a las bibliotocas de institutos especializados; a los centros de informacion y documentacién existentes en cada pats (véase Apéndice B). La bisquoda blogriticn 46 La misma direceién que le impone el trabajo de investigacién en la Diisqueda de la bibliogratia, le iré indicando al investigador los lugares donde puede hallar materiales bibliograficos do su interés, Puede suceder que en una investigacién sobre genealogia y heréldi- a, pongamos el caso, el referencista de alguna biblioteca le ofrezca al in- teresado la direceién de una pequefia institueién que guarde materiales inhsllables. Si se tratara de un tema histérieo nacional, podria indicarle también, eventualmente, que acudiera a algunas de las biblioteeas de los, museos de la especialidad o al Archivo Historieo Nacional. Bstos son dos ejemplos para clarificar e6mo iniciando Ia invaati cidn en institueiones de informacién general la direccién de los estudios inf orientando al investigador hacia lugares de informacién menos cono- cidos y més especifieos, incluso a veces hacia archivos 0 bibliotecas pri- vados. 4.2, Reeursos al sorvicio del investigador Los recursos al servicio de un investigador en las bibliotecas son los siguientes: 3.2.1. REFERENCISTA 0 RIBLIOTECARIO DR REFERENCIA Es el bibliotecario encargado del servicio de asistencia intelectual a los lectores a fin de que éstos puedan aprovechar racional y metédieamen- te los recursos de que dispone la biblioteca, En las bibliotecas grandes suele existir un referencista que por su fun- cin es de mucha utilidad en los primeros pasos de la investigacisn biblio- gréfiea. Puede ser consultado en cuanto al material de que dispone la bi- bliotoca, ademas de asosorar en los métodos para el hallazgo de lo que de- 3.2.2. CATALOGOS (FICHEROS) EN BIBLIOTECAS El eatsilogo es lamémina ordenada de las obras existontes en una bi- blioteca pitblica, privada o libreria, con la indieacién, mediante una cla- ve o simbolo (signatura topogréfiea) del lugar donde puede ser hallado cada libro. De alli se deduce que 1a misién del catdlogo es doble: identificar los li- bros por los datos que se consignan en el asiento y localizar su ubicacién en el espacio con mimeros clasificadores, “4 ‘si, tesinas, monogralase Informes Hay distintos tipos de catélogos: a) Catdlogo alfabético por autores: es 1 que dispone los asientos por los apellidos de los autores. b) Catdlogo alfabético por titulos: es el que dispone las obras por las pa- abras textuales que forman el titulo de las mismas. ©) Catélogo colectivo o centralizado: 08 ol eatélogo que rige los asientos de los libros existentes en varias bibliotecas situadas dentro de deter- minado émbito geogratfico. Hl investigador encontraré la ficha del li- ‘bro que le interesa y alli estard indieado en eusl de las bibliotecas se encuentra la obra. El catalogo colectivo puede ser local o municipal, departamental, provincial, regional, nacional e internacional. Facilita los préstamos interbiblioteearios y os un valioso instru- mento para localizar libros. ) Catalogo por materias: dentro de este tipo de catélogos, debemos dis- tinguir dos modalidades: 4.) el eatalogo por materias propiamente dicho, que dispone los libros con un eriterio légieo o cientifico por grandes grupos de conoci- mientos, y 4.2) cl eatélogo alfabético por materias quo rene las obras segtin los feneabezamientos de materias o epigrafes, es decir, de acuerdo con la palabra clave, earacteristica del asunto sobre el que trata el libro, Toda biblioteca dispone de un catélogo por materias, Bs importan- to su consulta en més de una biblioteca, porque su elaboracién depen- de siempre de la interpretacidn 0 eriterio del bibliotecario. e) Catdlogo en linea (on line public accesion catalog): eada vez. hay més bibliotecas que tienen catilogo en linea y la busqueda se realiza por ‘accesos multiples y por cualquier elemento de la obra buscada: autor, titulo, responsables secundarios, traductor, dibujante, prologuista, editorial o cualquier otro punto de acceso. Una vex consultados los eatdlogos, ol investigador euenta con una bi- liografia bisica y, mientras contimia con la biisqueda de la bibliografia, puede empezar a leer algunos de los libros registrados ya en su fichero personal, 3.2.8, OBRAS DE REFERENCIA Existen en casi todas las bibliotecas y son Las siguientes: Labiisquda ibiogrtica 6 a) enciclopedias; b) diccionarios; ©) _Tepertorios bibliogréticos; 4) dibliografias; e) catélogos; )anuarios, ) almanaques; 1) gufas; y) estadisticas, ¢ }) indices y otras. Estas obras forman Ia eoleccién de referencia de una biblioteca y so pueden consultar libremente sin restrieciones ni formularios previos. Por Jo general ostin al aleance de cualquier lector en la sala de lectura y en cestanterias a la vista. Reeuerde que son orientativas y no suelen incluir- se en la Bibliografia cle un trabajo de investigacién, 8.2.4, PRisraMos INTERBIBLIOTECARIOS En algunas bibliotocas y para ciertas disciplinas existe el sistema de préstamos interbibliotecarios, que consiste on un servicio que se presta al Iector ubicando un material solicitado por é1 en otra biblioteca y, median- te un convenio previo entre ambas, se realiza un trémite por el cual el lee- tor puede disponer del material en poco tiempo, sin acudir personalmen- te a la biblioteca que lo posee. Estos préstamos pueden ser nacionales o internacionales. Algunos de estos traimites son arancelados. 3.2.5, SERVICIOS DE BUSQUEDA BIBLIOGRAFICA EN EL INTERIOR © EL EXTERIOR DEL Pals A través de bibliotecas especializadas 0 centros de documentacién se puede obtener informacién especializada en distintas areas cientificas y humanisticas. En la actualidad, estas bibliotecas 0 centros de documentacién pue- den permitirle el acceso a internet con el asesoramiento adeeuado para conseguir la informacién que necesita, a través del apoyo de profesionales en bibliotecologia y documentacién. Consultas en bases de datos, compilacién de bibliografias especiales, traducciones de materiales on lengua extranjera... éstos son algunos de los servicios a los que puede acceder hoy el estudiante y el investigador, personalmente, por fax, por carta, por e-mail o por internet (véase 3.4) 6 Tesi, tesnas, monoorais enformes 8.2.6. MICROFILMES © MICROFICHAS ‘Mediante el pago de una suma de dinero, el investigador nacional pue- do obtener la microfilmacién o el microfichado de un libro entero de alguna biblioteca extranjera o las copias de alguin capitulo que necesite consultar. Estos recursos se utilizan cuando los materiales son muy antiguos 0 muy valiosos y el fotocopiado o el préstamo constituyen un riesgo. 3.2.7. Frcwas DE CATEDRAS APINES En ciertas disciplinas on las que se maneja material en lengua origi- nal que no tiene traduccién al castellano, los docentes de las catedras afi- nes con el tema elaboran y publican fichas traducidas, para el uso inter- no de Ja materia y que consisten en toxtos muy actualizados. 8.2.8, CaTALOGOS DE PUBLICACIONES EN EDITORIALES, LIBRERIAS NACIONALES ¥ EXTRANJERAS En estos catdlogos el investigador encontraré los més recientes apor- tes al tema que le interesa. Es indispensable su consulta en los casos en que los diccionarios, repertorios y bibliografias no estén actualizados. 3.8. El orden de la busqueda bibliogrética Se acude como primer paso a una biblioteca para elaborar una biblio- grafia sobre aquello cuya existencia no se conoce. Una bibliografia es un registro sistematico y ordenado de publicacio- nes consultadas para la realizacién de un trabajo intelectual. {Por dénde empezar? Hay que consultar: 1a) Diccionario respetado y actualizado de la disciplina, que conduciré hacia una bibliografia bésica, registrada al final del tema. Aparte de encontrar en él la definicién del tema o subtemas elegidos, se fichar Ja bibliografia final (fichas bibliogr sficas). b) Reperiorio bibliogréfico o bibliografias (del latin repertorium, que ‘quiere decir inventario). En su significado genérico significa coleccién o recopilacién de obras. Para decitlo sencillamente, consiste en el re- gistro de la bibliografia existente sobre una disciplina o materia en particular. Labisquedabibogrtoa a Existen en las grandes bibliotecas 0 en las especializadas (se de- be consultar al referencista 0 bibliotecario). De hallar un repertorio bibliogréfico sobre el tema de nuestra in- vestigacién, debemos fichar las publicaciones que menciona y fijarnos en la fecha de la edicién del repertorio, asf sabremos a partir desde qué fecha deberemos buscar por cuenta nuestra més material actualizado ‘qué se publicé después de la elaboracién del repertorio en cuestién, 1Los repertorios pueden ser por autor, titulos, tema, materia o pa- labra clave. EJEMPLOS DE REPERTORIO O BIBLIOGRAFIAS ° Biblografia argentina de Ciencias Sociales neaicsa (Reed de infornacién sobre Ciencias Sociales) 1983. Buenos Aires. Fundacién Aragén. Frecuencia anual |sQN: 0326-3576 Sociological Abstracts. Cambridge Scientific Abstract. v. 1- 1983 Bethesda, MD 1953 ~ Frecuancia bimestral Tene versién en linea y co Rox issn 0088-0202 | Augusto Radi Cortazar. N° 1-52, 1959-1977 liografia argentina de Artes y Letras ‘Buenos Aires: Fondo Nacional de las Artes, 1959-1971 Frecuencia trimestral Tiene Subseria. 8. 'ssw: 0006-0868 Compilactones especiales (ssw 0529-1883) Compitacién especial: 1a compilacién especial no es obra de creacién original sino una tarea de seleecién y ordenamiento de materiales de otros autores. Se organiza a partir do un toma espocifico o bien sobre la obra completa de un autor. En un sentido més estricto, se trata de obras o articulos de origen vario y pertoneciontes a uno o varios autores. 8 Tesi, esinas, monograas enformes Es necesario saber si las compilaciones asi como los repertorios estén actualizados. Bn nuestro pais estas publicaciones suelen estar incompletas, pero en algunos casos abarean grandes perfodos que simplifiean mucho la bisqueda del material. 3.4. Basquedas por internet Aparte de los recursos tradicionales para las bisquedas bibliografieas que se deseribieron precedentemente, es preciso mencionar las busquedas por internet, un reciente y poderoso recurso de informaciones de un espec- tro muy amplio. Cualquier investigador de hoy esta familiarizado con las btisquedas do informacién en Iinea (on Fine). Para los que se inician en este tipo de biisqueda, a confinuacién se de- finen los términos més usuales en la red. ~ Internet: os 1a red global que conecta miles de millones de computa doras con direcsiones tmicas para que intercambien datos. Se cree que actualmente existen 800 millones de usuarios. = Portal: es el acceso a los espacios en la red que ofrecen una variedad aamplia de eontenidos y servicios: e-mails, foros, listas do correo, cha- ‘eo, buseadoros de informacién sobre una multipticidad de temas. Son puertas de acceso a los sitios (Yahoo, AOL, Excite, Terra, Netseape y Microsoft Network, entre otros) ~ Sitio: se laman asi los espacios de la Web con diversidad de conteni- dos y que constituyen fuentes do datos accesibles por computadora. 8.4.1. REFERENCIAS A RECURSOS ELECTRONICOS Un mimero cada vez mayor de publicaciones y documentos aparecen en forma clectréniea, de modo que 6! investigador que obtiene respuestas a una bisqueda en documentos clectrénicos se ve en la necesidad de ha- cer referencia a ellos en su trabajo, para documentar la investigaciéa, Los documentos electrénicos en linea, CD-ROM son diferentes de las publicaciones impresas y deben citarse de otra manera. Las referencias de estos documentos deben reflejar su identidad como fuente electréniea. En el Apéndice A de oste manual puede hallarse la norma (IRAN. £82053) para que los autores de tesis y otras publicaciones puedan aplicar- Inen las referencias a documentos electrénicos que serdn citados e inl dos en una bibliografia. 4. El fichero Cada tema de investigacién quo se aborde rosultara en la elaboracion do un fichero. Tendremos basicamente un fichero que indicara diversos tipos de fichas: ~Fichas do bibliotocas, centros do documentacion, institueiones. — Fichas bibliogréticas. ~ Fichas de leetura. —Fichas de citas. = Otras. Estas fichas sobre un tema especifico tienen a posteriori un alto vac Jor, no solo para el investigador que las confeccioné (podria ampliar la in- vestigacién en el futuro y tendria que hacer uso de ellas) sino para otros investigadores que toquen el mismo tema o algunos aspectos secundarios. En consecuencia estos ficheros pueden prestarse o cederse a otra persona, COMO COMENZAR A FIOHAR Para hacer una bibliografia basica hay que consultar muchos libros, Es indispensable hacer una consulta preliminar en el sector de la bibliote- ca donde se encuentran las obras do consulta, Revisdindolas nos eneontra- remos con tuna breve pero importante bibliografia al finalizar el tema que nos interesa. Se aconseja como primer paso, en nuestra primera visita a la biblioteca, fotocopiar la bibliografia de las principales obras de consulta.” + Bsta recomendacion, quiero preciar,e limita 2 la bibliogafla. Vale la pena recordar que fo- tocopiar Libres es un delito, pues vulnera los derechos del autor y el editor al impedir que et libro, que es el producto del trabajo intelectual del autor y del trabajo material (a inversién) {ol editor, preduzea la ganancia nocesaria para ambos. ¥ vulnera también tm derecho (eash tuna obligaciin) de quien se dedic sla invenigncin: formar su propia biblitees, (51) 8 “sl, tesnas, macogaise infores Con este material pasamos al segundo paso que es hacer un eruza- miento de las obras citadas por todos. Esta lista de obras constituye una primera jerarquia garantizada por especialistas y el punto de partida pa- ra una amptiacién. El tercer pas os consultar el eatélogo por materia y buscar all te- ma de nuestro interés y las publicaciones existentes acerca del mismo, Finalmente, consultaromos e catdlogo por autor cuando ya estemos seguros de lo que vamos a buscar. A esta altura comenzaremos a pasar los datos de cada publicacién a la ficha bibliogréfica. 4.1. Diversos tipos de fichas 4.1.1, La FIoHA DE INSTITUCIONES La ficha de instituciones no es on absoluto indispensable para el trabajo, pero le ahorra dolores de cabeza al investigador. Se aconseja, utilizar el tamafio pequofio de las fichas para registrar eon tinta de co- Jor (para no eonfundirlas con Las bibliogrficas, ya que serian del mismo tamaiio) las bibliotecas, centros do informacién, archivos y otras insti- tuciones de consulta, Este fichero es particularmente titil porque los datos en él anotados simplifican mucho la bisqueda. Estos son: Nombre: Direccion: Teléonos: Dias y horarlos do atencién: Nombre del referencista 0 biblitocario 4.1.2. La FICHA BIBLIOGRAFICA Al empezar a fichar libros y otras publicaciones debemos disponer de ‘una cantidad de fichas de tamafio pequefio. Al buscar una bibliografia, segiin se vayan encontrando titulos, deben registrérselos, y el mejor sistema y més comodo es llevar un pequefio fi- chero que se ira ordenando alfabéticamente (por autor) y se puede trans: portar cada vez quo se acude a una biblioteca. Arriba y ala dorecha de la ficha, se colocaré el nombre de Ia bibliote- ca donde se encuentra la obra y su signatura topografiea (eédigo de ubiea- | | i | | | | | 1 | Efichero 83 «ign de la obra en Ja biblioteca para su répida localizacién), para no tener ‘que recurrir al catalogo eada vez que se quiera pedir el libro en euestién. El fichero bibliogrétfico debe registrar todos los libros que se busearsn yno solo los que ys se encontraron o leyeron, So puede tener un fichero bibliografico de muchos titulos y un fiche- rade lectura de pocos titulos, con los que realmente procederemos a la es- critura del trabajo de investigacién y serin los que figurardn como biblio- grafia final. El fichero bibliogrifico debe ser hecho de acuerdo con las normas pa- ra la redaccidn de las fichas bibliogréficas (Apéndice A) pues constituyen Ja base para la redaccién de Ia ficha bibliografies, la ficha de lectura, las, referencias a publieaciones en las notas a pie de pagina y la redaccién de la bibliografia final. Estas normas son observadas por todo investigador serio y su cuida- do habla de la sélida formacién on su disciplina, de modo que es impor- tante respotarlas. Su violacién, por el contrario, siempre va en desmedro del autor, aunque el trabajo esté bien realizado. Aconsejo a los investigadores la adopcién de las normas ereadas por los organismos internacionales y nacionales: International Organization for Standardization (180) y el Instituto Argentino de Normalizacién (aN, respectivamente, para documentacién y referencia bibliogréficas. Estas normas fijan un ordon determinado para los elementos de la refe- reneia y establecen convenciones para la transcripcin y presentacién de Jos datos de las fuentes. El Apéndice A incluye estas nuevas normas, que introducen algunos cambios en la forma de elaborar las fichas que mar- caba la tradicién académica. La finalidad de 180 e Ram es propender al conocimiento y la aplica- cién de la normalizacién como base de la calidad y las normas que esta- blece son frutos del consenso técnico de especialistas. Existen manuales de estilo para autores de trabajos de investigacién en otras lenguas, como los clasicos Ma Handbook for Writers of Research Papers (de la Modern Language Association of America), para redactar trabajos de orientacién humanistica en inglés; 0 The Chicago Manual of Style, para claborar manuscritos con vistas a su publicacién. Existen tam- bién gufas elaboradas por una asociacién como la Publication Manual of the American Psychological Association (APs), para la escritura de traba- jos en esa disciplina. En el émbito hispanoamerieano encontramos algu- nas guias de instituciones para sus investigadores o fichas de edtedras en as universidades, que establecen normas para la redaccién de monogra- fins o tesis de los alumnos y graduados. Lo importante, sin embargo, es que una vez clogida la forma de transeripeién por el autor del trabajo, ‘mantenga la eoherencia del principio al fin en la aplicacién de las normas en sus citas, notas y bibliografia. 8 Tesi, esinas, monograiseinformes MODELO DE FICHA BIBLIOGRAFICA Foucault, Michel. wicrotisica del poder, 2*. ed. Madrid: ua Piqueta, 1979. 189 p. (Coleccién *Genealogia del poder", N# 2) 4.1.2.1. La eseritura y la puntuacién de la ficha bibliogréfica Las formas de escritura y puntuacién de las fichas bibliogréficas se ‘encuentran en el Apéndice A. Alli pueden hallarse casi todas las varian- tes de insercién de signos de puntuacién entre los elementos de una ficha. 4.1.2.2, Guta para los signos de puntuacién en la ficha bibliogrdfica® 1. Elnombre del autor, primero los apellidos y después de coma los nom- bres de pila. Después punto y sequido. 2, El titulo del libro subrayado o on cursiva; después punto. Bl subtitu- lo, silo hay, también subrayado o en cursiva y separado del titulo por dos puntos, después de los euales se comienza con maytscula. 3. El ntimero de edicién (la primera edicién no se registra; las siguien- tes, si) después punto, 4. El lugar de la edicién (la ciudad, no el pais: Barcelona, Bogotd, Bue- nos Aires, ete.) después dos puntos. 5, La editorial, después coma. 6. La fecha de Ia ediciém (afio) después punto. 7. Numero de paginas del libro si es un solo volumen, después punto (832 p.) 8, Elmimero de voltimenes sin mencionar pagina; después punto (3 vols.). (OnROos SIGNOS DE PUNTUACION a) Se encierran entre corchetes los datos que se agreguen y que no figu ren en la portada o en In pagina donde deberia encontrarse. Por ejemplo, 5i falta ol dato del /ugar de Ia edicién podemos consultar el colofén (texto que cierra cl niimero de paginas), donde suele mencio- narse: “Este libro se terminé de imprimir..”, y donde figuran la im- prenta, su direccién y la fecha de impresion. Si faltan el lugar y el Alo en el sitio correspondiente, se usarén los del colofén de esta ma- nera; Bogat4?, 19937, marcando la imprecisién. + Aqui go brinda y 2 sigue uma convencisn datorminada, pero en las publicaciones se obserea que muchas editorials adoptan tras coavenciones, que son generalmente variantes de Eta | / ' eificiewo 55 b) Se omiten puntos finales y comas antes y después de corchotes, pun- tos suspensivos y paréntesis, © Se usan puntos suspensivos para indicar que un titu’o largo est abreviado. 4) Se usa guién breve (1983- ) seguido de espacio, para indicar publica ‘ign en curso o abjerta. Igual para el nimero de la publieacién (N° 7). 4.1.2.8, Uso de maytiseulas Eluso de cada lengua determina su empleo. En espanol os el siguiente: a) Para el apellide de autor 0 autor corporative @ iniciales de los nom- bbres de pila: Pérez, Darin - PEREZ, Damiin ‘SUBSECRETARIA DE LA MUJER 0 Subsecretaria de la Mujer b) Se scribe con maydiscula s6lo ta primera letra del titulo: Lanaturaleza de los pronombres ©) Inicial de epitetos, apodos, sobrenombres que designen origen 0 eua- idades morales o fisicas (Isabel la Catélica, Federico el Grande, Don Quijote de la Mancha, eteétera). 4) Los adjetivos de nacionalidad y los que designan puntos cardinales se escriben con mindscula (Antértida argentina, América meridional). ©) Los puntos cardinales se escriben con maytisculas (Extremo Oriente, el Norte), excepto cuando se los usa en un sentido general (por ejem- plo, “al nordeste del pais”) 1) Los nombres del calendario deben escribirse con mintiscula (enero-fe- brero de 1991; martes, otofio) 8) Los prefijos de los apellidos que forman parte del mismo se escriben con mayuiseula (De Angelis, La Torre). h) Las particulas que no forman parte del apellido deben eseribirse con miniscula (Enrique de Gandia; Ramén Maria del Valle Inclén; Isabel Latour do Botas, Guillermo de Torre). i) Los titulos de nobleza van con maytscula inieial (Duquesa de Or- leans, Marqués de Fortunago, Conde Duque de Olivares); los titulos de realeza (Imis X¥, Rey de Francia), y la particula apocopada de San- to (San Francisco de Asis).* Norma de la Real Acadomia Bspatola muy diseutida, incluso en la misma Bxpasa. Muché simos manual do ostilo rocomiondan ol uso de mingseulae para las dignidadee (por ejen plo, el de La Nacién) % Tesi, tesnas, monoraias @ iformes 4.124, Reglas especiales de notacién para las fichas bibliograficas 2) Cuando el nombre del autor permancce desconocido, se asienta bajo el titulo y se lo ordena alfabéticamente por la inicial del mismo en el fichero y en la bibliografia: El alma de Tacna: Ensayo do intorpretacién histérica Se omite el articulo (£1) y se busea por alma. 2) Siel libro esté firmado con seudénimo, se anota como si fuera el nom- bre. Si éste se conoce, se aiiadira entre corchetes: Carin (Leopoldo Alas) 8) Dos autores: después de apellido y nombre del primero, se agrega “y", y se afiade nombre y apellide del segundo en su orden natural o invertido; LLépez, Elpiio y Jorge Casanova 0 Lépez Elpidio y Casanova, Jorge 4) Tres autores: después de apellido y nombre del primero, se pone pun- toy coma y se afiade el segundo, se agrega “y”, y luego apellido y nom- bre del tercero. El segundo y tercer autor se registran con los nom- bres y apellidos on su orden natural o invertido: Magrassi, Guillermo E,; Alejandro Frigerio y Marla Boatlz Maya Magrassi, Guillermo E.; Frigerio, Alejandro y Maya, Maria Beatriz 5) Si son més de tres los autores, el primero se consigna como tinico y dospués se aftade “y otros” o et al. (on cursiva), que en latin quiere de- cir también “y otros" (et alii: Puente y Flores, Arturo y otros ° Puente y Flores, Arturo et al 6) Sies una coleccién de obras independientes de diferentes autores yen 1a portada so nombra a una persona como compilador, se afiade la de- signacién “comp.” después del nombre del compilador (forma mas usual en bibliografia en espafiol) y separada por coma. Medonald, Henry Malcolm, comp. Et intelectual en la politica | tafehero 7 “Los ensayos on obras colectivas pueden aparecer en otras formas: Habermas, Jrgon. "Modemidad y proyecto incompieto" en Casuls, Nicolas, od. £1 dobato modamidad-posmodemidad. Buenos Aires Puntosur, 1989. 400 p, Casullo, Nicolas, 0d." E] debate modemicac:posmodemnidad. Buenos Aires: Puntosur, 1989. 400 p. 7) Si es una traduccién, después del titulo de la obra 0 del nimero de ‘edicién, si lo hay, se pone el nombre del traduetor, precedido por la abreviatura “Trad.” Lessing, Doris. Dentro de mf: Primer volumen de mi autobiogratia, hasta 1944, Trad. Marta Pessarrodona 8) Sila obra emana de una institueién (autor eorporativo), so pone of nombre de la institucién como nombre del autor: ‘SUBSECRETARIA DE LA MUJER. Guia para la presentacién de pro- vyectos. Prél. de Rosalia Cortés. Buenos Aires, 1987, 118 p. 9) Cuando se tiene algiin dato incompleto se pone en su lugar un guién, Por ejemplo si se tiene nada mas que la década en que se edité el li- bro, pero no el afio exacto, se puede poner: 198-. Si no figura el lugar de la edicién se pone entre corchetes: 6. Si lo que no figura os la fecha: 4. (sin fecha) a. (sin ao) ‘sd, (sin data) 10) Si se tienen dudas acerea de un dato que se pone en la ficha, se lo acompaiia de signos de interrogacisn, con 0 sin paréntesis: Acagén, Joaquin, Las clases sociales. México (2): Volador, 1812 (2) 2p. 11) Si no aparece ol nombro de la editorial, se la omite simplomente. 12) Si el libro pertenece a una coleccién va el nombre de ésta, después co- may el ntimero de esa coleccién, wi lo hay. Por ejemplo: (Coleccién Au tobiografias), N° 7, después del ano de publicacién, “od.” significa editor, queen inglés no es In editorial sino el que esté a cargo de la edicién. 58 Tesi, tasinas, monogras oinformes 4.1.8, La FICHA DE LECTURA, Se debe utilizar ol tamafio grande. Constituye una unidad auténoma yy recoge el contenido integro de una publicacién 0 libro entero, o a lo su- ‘mo un capitulo consultado, y en tal caso hay que indicarlo. Entre todos los tipos de fichas de investigaciOn o de trabajo, como se Jas Hama en su conjunto, son las més habituales y las mas indispensables, Se utiliza para la literatura eritica. No se aconsejan las fichas de lee- ‘tura para las fuentes primarias sino las de citas. Son muchos los mocios de fichar un libro o un articulo, per el méto- do mas comtin es el siguiente: a) ») ° a e) Indicaciones bibliogréficas més completas que las de las fichas bi- bliogréficas porque en realidad son estas fichas de lectura las que se utilizerén para elaborar Ia bibliografia final que debe contenor todos, os materiales lefdos y utilizados en el trabajo. (Véase: Apéndice A 2. “Richa bibliogedfiea compleja”.) Ala derecha de la ficha y en la parte superior colocar indicacicn de a ‘qué capitulo de! indice de nuestro trabajo corresponde, sea con la in- dicacién del nombre del capitulo o el color que se le habra asignado, Resumen del libro 0 articulo en el cuerpo de la ficha. El resumen de- be ser realizado con nuestras propias palabras y no copiar pérrafos enteros del libro con las palabras de su autor, porque al utilizar el contenido en la redacci6n del trabajo correremos el riesgo de plagio. Citas entre comillas de los fragmentos que se supone habré que re- producir textualmente con la indieacién de Ia o las paginas (para ci tas y referencia en notas al pie de pagina). Los comentarios personales que se nos pueden ocurrir acerca de al- gzin pasaje, de un capitulo o del libro entero, registrarlos entre cor- chetes. Una ficha de lectura puede ocupar varias unidades, las que irdn nue meradas y abrochadas. | | | | | | | | | | etfichero ‘MobELO DE FICHA DE LECTURA (FRENTE) capitulo 2 Foucault, Michel."Capitule 9. Curso del 14 de enero de 1976" en Microfisica del podar. 2" ed. Trad. gulia Va~ rela y Fernando Alvoz-Uria. Madrid: La Piqueta, 1979 (coleccién Genealogia del poder, N# 1) p. 139-152 Exist una relacién entre poder-derecho-verdad. La relacién entre derecho y poder es analizada des- de la 2dad Media en Occidente. Se llega a la conclusién | de que el derecho sirvié para legitinar el poder de la soberania y mdz ain cono instrimento de doxinacién [s0- metimiento para otros] Tanto 1a dominacién cono el sometimiento debenos es- | eudiarios en las instituctones porque es alli donde to~ man forma, don¢ slican una técnica y métodos in- | ctuso viclentes, en les casos de castigo. Adends de la recién mencionada, hay distintas precau- ciones que se deben tener en cuenta para estudiar MODEL Dx FICHA DE LECTURA (DoRso) poder, cone por ejemplo, las siguientes: se crata de estudiar el poder cuando se da en rela> in directa con su objeto, donde se pucdan ver los efectos Ver el peder coma algo a Lizado en los individuos, mien los grupos, porque el poder transita, [eltar, es interesante la idea) Se doben estudiar los mecanisno de exclusién, como 1a locura, porque gon la base del poder. [22] Dentro de 1a Ricrofisica del poder se encuentran estos instrumentos de exclusion, de vigilancia, de control que son utili- zados a favor de log grupos dominances. El poder, para ponerse en marcha, necesita formar, organizar y por s0- todo poner en circulacién un caber EL poder se da entre dos Limiter: por un lado recho publics de ecberania, y por otro, un mecanisno de Aisciplina circula, munca esté loca un de- 2 “Tess, tesinas, morogrfis# informes 4.1.4. LA FICHA DE CHTAS Es adecuado usar el tamaito mediano, La ficha de citas es intogra y exacta en cuanto al texto recogido, Este requisito hace posible la objetivi- dad y verificabilidad de Ia fuente. En cada ficha debe recogerse un solo dato completo (una sola cita) con todos aquellos elementos que son necesarios para que conserve su autén- tico sentido, aun desgajado del contexto. Datos que debe contener una ficha de citas: a) El titulo més apropiado del texto, en relacién siempre con el indice del trabajo y sus titulos, se coloeard en el extremo superior izquierdo. Puede utilizarse también el sistema de colores por eapitulo de nues- tro indice, b) Enel cuerpo de la ficha, el texto copiado exactamente, entre comillas. Si hay comillas internas se utilizardn las comillas simples: “El eardc- ter ‘heroico’ del personaje principal de esta novela...” Si se decide suprimir ciertos tramos del texto en su principio, me- dio 0 fin, debe indicarse con tres puntos suspensivos entre eorchetes © paréntesis. Las supresiones no deben alterar en lo mas minimo el sentido. Los corchetes 0 paréntesis sélo son obligatorios en medio del toxto. Exempo: "la informatica estudia el diseri y ia utlizacién de equipos, sistemas y procadimientos que parmiten captar y ratar os datos adecuados pa- 12 obtener informacién ttl (J. Definimos la informatica como el estu- dio que establace las rlacionos entre los medios (equipos), los datos ¥y la informacién... ©) Al pie de la cita y en el extremo inferior derecho se colocard In refe- reneia, que debe eontener: = Nombre y apellido del autor. = Titulo de la obra. ~ Pagina o paginas. ei tichero 6 ‘MODELO DE FICHA DE cms poder YE] poder tiene que ser analizado como algo que circula, 0 mia bien, como alge quo no funciona sino en cadena. No ecta Localizado aqui o alli, no esté nunca en las manos de algunos, no ¢ un atrilouto como la riqueza o un bien.” Michel Foucault 4.1.6. O7pas rionas: Algunas veces cl investigador, por la naturaleza de su trabajo, nece- sita otro tipo de fichas: ficha tematica, ficha biogréfica de autores, ficha de ideas u otras. Las fichas presentadas en esta gufa son los instrumentos m{nimos in- dispensables para la preparacién de un trabajo de investigacién, 4,2, Medidas internacionales de las fichas No hay proseripeiones estrictas sobre el particular y el investigador, ala hora de adquirir sus fichas, optara por el eriterio de funcionalidad y comodtidad. Sin ombargo hay tamaios bastante generalizados en los comercios, que coinciden con el tamaiio de los ficheros. Segin sea su funcidn ha de elegirse el tamaiio. Por regla general las bibliograficas suelen ser fichas de menor tamafio que las de trabajo. Se transeriben a continuaeién las medidas de los sistemas interaacio- nales de fichas: Tipo 'o! pm Pequetio 75 x 125 mm 74x 105 mm Mediano 100 x 150 mm 105 x 148 mm Grande 428 x 200 mm. 148 x 210mm 6 Tesi, tesnss, raga @ formes 4,3, Criterios de ordenacién de las fichas Las fichas bibliogréficas y de lectura se ordenan alfabéticamente por autor. Las de citas se ordenan por tema o por capitulo de nuestro indice. ‘Al concluir el fichado y 1a ordenacién alfabéties de Las fichas haremos una nueva ordenacién con vistas a la redaccién del trabajo, de la siguien- te manera: a) Le asignamos un color @ cada capitulo del indice final b) Coloreamos el extremo derecho superior do las fichas de loctura y de citas segin Ia pertenencia a cada capitulo y las reagrupamos por co- lor manteniendo el orden alfabétieo. ‘Ya estamos en disposieién de escribir capitulo por eapftulo de la obra on los materiales reunidos a tal efecto. 5. Las citas textuales 5.1. Cudindo y cémo se cita Las citas pueden ser de dos tipos: por un lado, se cita un texto para some- terlo a eritica 0 interpretacién; y por otro, se cita un texto que apoya nues- tra afirmacién. La abundancia y frecuencia de las citas estard dada por el tipo de tra- bajo que estemos realizando, En este sentido se debe tener en cuenta que: a) cuando se realiza un andlisis erftico de una obra, grandes fragmentos deben sor transcriptos y analizados pero, a veces, b) las citas numorosas y largas pueden sor tna manifestacién de deseui- doo incampetencia cuando el autor no quiere o no es capaz de proce- sar Ia informacién, y prefiere copiar lo que dice otro autor.* Respecto de In manera como se consignan los datos de una obra que se cita, véanse los apartados 4.1.2.1, 6.8, 6.4 y el Apéndice A. 5.2. Reglas para citar a otros autores a) Los fragmentos que serén sometidlos a un anélisis critico deben ser ci- tados con una amplitud razonable para que conserven su sentido. ») La literatura eritiea s6lo se debe citar euando sirva para corroborar 0 confirmar una afirmacién nuestra, o cuando aporte algo nuevo. * No esté de més recordar que, sel trabajo resultara editado, hay que pedir pormiso a ti- ‘ular del copyright para ol ex20 de la citae textuales que excedan las mil palabras, (65) 88 “Tess, tesinas, monografise infomes ©) _Lacita siempre supone que uno comparte Ja idea del autor de la mis- ma. De lo contrario, nuestra critica debe preceder o seguir a la cita. 4) Cada cita debe remitir claramente al nombre del autor y la fuente, de alguna do las siguientes formas: con llamada y envio a nota; = con el nombre y el afio de publicacién de la obra entre paréntesis (sistema con mencién de autor y afio, véaso apartado 6.4); 0 ~con simples paréntesis que transcriben ¢ ntimero de la pagina si todo el capitulo o todo el trabajo versa sobre la misma obra de un autor, ©) Las citas de las fuentes primarias se hacen refiriéndose a una edicién critica o a la edicién més acreditada. Normalmente se cita de la pri- ‘mera edicién si las siguientes son meras reimpresiones, y de la ulti- ma si ésta fue corregida y aumentada Cuando se estudia una obra de autor extranjero, lo éptimo es poner las citas en la lengua original; lo corriente es usar una buena tradue- cin. Fn ambos casos es aconsejable agregar, entre paréntesis o en no- ta al pie, Ia traduceién. Cuando las citas son muchas y continuas, so debe partir de una buena traduecién, indicando quién es el traductor (ficha compleja) ¢ ir insertando breves fragmentos en la lengua original cuando se quie- re haeer preciso el uso de ciertos términos. g) Elenvio al autor y a la obra tiene que ser claro, es decir que estén de- jamente indicados el autor y su fuente. ‘h) Cuando la cita no supera las dos o tres Iineas se puede insertar den- tro del parrafo, entre comilla. Poro cuando Ia cita es més larga es preferible ponerla a un espacio y con un margen menor. (Si el traba- Jo esté eserito a doble espacio, a cita puede ir a uno con sangria y sin comillas.) 4) Las citas deber ser fieles. Esto significa que se deben transeribir las palabras tal y como son; no se debe eliminar parte del texto sin sefia~ larlo con tres puntos suspensivos entre paréntesis 0 corchetes; cuan- do deseamos aclarar o especificar algo dentro de una eita, se debe ha- cor también entre paréntesis o corchetes. ) La referencia debe ser exacta, puntual y verificable. 5.8, Abroviaturas mas importantes (Wéanse apartados 6.3.5 y 8.8) Lasts teuales or 5.4. Los riesgos de la parafrasis Se debe tener cuidado de utilizar las comillas y citar a un autor eada vez que se esté franscribiendo algén fragmento de su obra, para evitar el riesgo de cacr en plagio. Se debe estar seguro de que los fragmentos que se copian de las fichas de leetura son verdaderamente pardfrasis, es de- cir, repeticién con nuestras palabras del pensamiento del autor, y no citas sin comillas. Sil loctor advirtiera que la pagina no ests parafraseada del texto original sino que est copiada sin utilizar las comillas, se Nevaria ‘una muy mala impresién y dudaria de la seriedad del investigador. 6. Las notas { | 6.1. Concepto Las notas « pie de pdgina (también Hamadas notas al calce, notas margi- nales 0 escolios) son las que dan informacién o noticia de cualquier tipo: advertencia, explicacién, comentario, remisién a otras secciones del mis- mo trabajo, tradueciones del idioma original o en el idioma original de un pasaje en el cuerpo de la obra, eteétera. No son de la misma importancia que el cuerpo del texto o argumen- tacién fundamental del trabajo y esta diferenciacién esta seftalada por el distinto tipo de letra que se emplea para uno y otro. La referencia es un medio para sefialar la fuente, Se utiliza la Hamna- da en el texto para establecer la rolaet6n fisica entro ol toxto y la nota utilizando: 1) _Asteriscos (*): cuando existen apenas una o dos notas, 0 por eriterio estético detras de un titulo para hacer una aclaracién que lo expliqu 2) Letras: han servido tradicionalmente para interealar notas introduci das con posterioridad de modo que no se perjudique el orden muméri- co (por ejemplo: 10, 10a, 10b), aunque cualquier procesador de texto numera y renumora autométicamente. 3) Niimeros (arébigos): la numeracién usual de las notes en un trabajo de investigacién so hara con ntimeros arébigos. La Uamada es el niimero, asteriseo o letra, que se inserta dentro del texto y se reproduce al pie de Ia pagina o eneabezando las notas agrupa- das al fin del capitulo o del trabajo, Colocacién: 1) detras de una palabra en el texto que necesita aclaracién; 2) después de la frase, aprovechando coma o punto y coma si queremos aclarar algo que termina alli; Im. n “ess, tsinas, monografias intrmas 3) después de In oracién y del punto seguido cuando se quiere explicar algo sobre la misma; 4) después del punto final para comentar sobre lo contenido en el largo pérrafo concluido; y 5) después de una cita textual y a continuacién de las comillas de cierro. 6.2. Las cuatro formas basicas de las notas Existen cuatro formas bisicas de las notas: a) la referencia de una cita textual a su fuente o nota de referencia bi- bliogréfica; b) la nota explicativa que serviré para ampliar algunos aspectos men- cionados en el texto; © lanota donde se hace referencia a otra parte de Ia misma obra o bien a otra obra, A veces es necesario remitir al lector a otro punto del tra- ajo donde se toca el tema 0 se presenta la necesidad de remitir al lec- tor a otro libro o articulo que eorrobora una afirmacién (“ver” 0 “véa- se”) o presenta una discusién eritica al respecto (“eft.”: eonfréntese). 4) Nota de agradecimiento: es frecuente emplear en un trabajo propio ‘una idea o una informacion extrafdas de otro autor, o que han servi- do de estimulo para generar ideas personales desarrolladas en el tra- bajo. Rs una norma de correccién cientifiea hacer manifiesto el agra- decimiento en nota al pie. Independientemente de esta categorizacién basica, Ias notas son un vehieulo apropiado para que el autor de un trabajo haga cualquier tipo de aclaracién que considere pertinente. 6.8, Notas a pie de pagina o agrupadas 6.3.1. UBICACION DE LAS NOTAS EN EL TEXTO a) Apie de pagina: ésta es 1a més usual y la més eémoda para el lector. En Ios trabajos pequerios camo la monografia es la mas correcta. En cada pagina se empezar por el nimero 1 b). Alfinal de cada eapitulo: en trabajos mas extensos, agrupadas y con nu- meracién corrida, Cada capitulo comenzara con la nota nimero 1. Se utilizaré una pagina aparte bajo el titulo “Notas al capitulo 1", eteétera, Las nots % ©) Alfinal de un libro con numeracién corrida, bajo el titulo “Notas” yen pagina aparte. 6.3.2, EXTENSION DE LAS NOTAS Sila nota es muy larga, puede pasar a la pagina siguiente, también, a pio de pagina y sin ninguna indicacién especial 6.3.3. ReQUISITOs DE FORMA a). Salvo que se esté eseribiendo en procesador de texto de una computa- dora que realiza automaticamente la inserciéa de la nota en el lugar deseado, se hace una linea corta debajo del texto y dentro de caja (el margen inferior debe quedar libre), y después de una Iinea vacia se coloca la 0 las notas, }) El texto de la nota se empieza a escribir después del niimero corres- pondiente, seguido por un punto. 1. Omar Borré. Tofo Salazar. Buenos Alres: Tres Tiempos, 1986. p. 36. ©) Entre una nota y otra se dejardn dos lineas en blanco o vacias. d) Las notas torminan siempre con un punto. 6.3.4, ORDEN DE LOS ELEMENTOS EN UNA NOTA CORRESPONDIENTE A CYEA 0 PARAFRASIS DE UN AUTOR Autor: nombre y apellidos en su orden natural. ‘Titulo del libro subrayade o on cursiva y del “articulo" entre comillas. Lugar, editorial y afto. P-o pp. Abreviatura de piigina paginas y el mimero de Ia o las pa- ginas. 6.3.5, NoTAS BIBLIOGRAFICAS ¥ SUS ABREVLATURAS MAS COMUNES 1) Cuando se cita 0 parafrasea a un autor por primera vou: Autor. Titulo. Lugar, editorial y afio. Ntimero de pagina/s. 1. Ramén Tamames. Ecologia y desarrollo. Macri: Alianza Editorial, 10985. p. 23. ™ 2) 3) 4) 5) 6) D esas, tonogralseinformes Cuando aparece por segunda vez otra cita 0 pardfrasis del mismo li bro, sin ninguna referencia intermedia a otro autor y hasta cuatro o cinco paginas de distancia se pone: ibidem 0 ibid., que quiere decir “en la misma obra y en la misma pagina”; si se trata dela misma obra pero de otra pagina, se coloca op. cit. (0 la variante ob, cit.) p. 6. 4 Ibidem Cuando dos referencias contiguas remiten a la misma pégina del mi: mo libro, pero por estar separadas por una intervencién del invest gador no se pueden reunir en una misma referencia, se reemplazan en la segunda todos los datos por Loe. eit. Vocus citato o lugar citado). 4. KR. Sperling, “Protection of de North Sea: balance and prospects’, ‘en Marine Pollution Bulletin, Londres: 1986. v. 17, n. 6. p. 242 2. Loe. eit En referencias no contiguas, cuando se vuelve a citar a un autor del que se utiliza un solo libro, se reemplaza el titulo pot 1. Alcia Argumedo, op. cit. p. 12-14. Si se tratara de un articulo de revista la abreviatura sord art. cit. 1.KR. Sperling, art. it Si trabajamos con mas de un libro de un mismo autor, hay que colo- car antes de op. cit. no s6lo el nombre sino también el titulo. 8. Umberto Eco, Apocaliicas e integrados. ob. cit p. 104-105. La abreviatura “cfr.” 0 “ef” (confrdntese, comparoso) se utiliza antes de las referencias bibliograficas cuando se trata de hacer constar un proceso de discusisn intelectual. 1. Ott, Umberto Eco, Cémo se escribe una tasis. México: Gedisa, 1974. p. 102, La abreviatura ¥, 0 las palabras “véase” o “ver”, se utilizaran en cam- bio como reafirmacién del tema: 1. Véase Umberto Eco. Cémo se escribe una tosis. México: Gedisa, 1974, pp. 103-105. | Ls rots 6 6.4, Sistema de referencias con mencién de autor y afio Hasta ahora hemos visto las notas de referencia bibliogréfica en su forma clisica con llamada y nota al pie o agrapadas al final del eapitulo 0 del trabajo [EJEMPLO CON EL SISTEMA CLASICO 7. Salvatore Candido. Giuseppe Garibal; corsarioriograndense. Roma: Ist- tuto per la Storia del Risorgimento Italiano, 1964. p. 41, EL MISMO EJEMPLO CON EL SISTEMA AUTOR-ARO. Se iniola entonces un periodo de negociaciones dlctes entre el gobiemo del Rio de Janeiro y el de Montevideo, mientras “ls representantes del gobierno riograndonse rabelde son recibidos con todos los respetos y protecciones en Unaguay” (Candido, 1964: 41). La ventaja de este sistema consiste en la eliminacién de todas las no- tas de referencia bibliogrifica, y la indicacién de abreviaturas como ibi- dem, ob. cit. loc. cit., teétera. ‘Las otras notas ~explicativas, de discusiGn critica, de agradecimien- to, ete conservaran el sistema de referencias clasico. BIBLIOGRAFIA CON EL SISIEMA AUTOR-ANO Para utilizar este sistema en el texto, hay que presentar la bibliogra- fia final de otra manera, ‘Veamos: sie] autor de un trabajo de investigaci6n escribe a continua- cién de una cita o una parafrasis: (Candido, 1964: 41), le esté indicando al lector que Candido es el apellido del autor que se cita 0 parafrasea, 11964 el afio de la primera edicidn de la obra (aunque haya reediciones se ‘ita de la primera) y 41, la pagina de donde se extrajo la cita 0 Ja idea En la bibliografia, el lector debe encontrar todos los elementos de des- cripcién de la obra. Se puede presentar de dos maneras Candido, Salvatore. Giuseppe Garibale;corsaro riograndense {1964}. Pr. Alberto M. Ghisabert 1970 Roma: Istituto per la Storia del Risorgimento Italiano, (2° e8) ¥V. XX (Biblioteca Scientiiea, Sere I Memorie) Candido, Salvatore (1970), Giuseppe Garibaldi; corsario riograndense [1964] Prél, Alberto M, Ghisaberi. Roma: Istituto per la Storia def Risorgimento Ita liano, {2" ed.) V. XX (Biblioteca Scientiiea, Serie Il: Merorie) % Tesi, eins, monogras infarmes Se eolocard el aio de la edicién consultada, en este caso Ia segunda, de las formas transeriptas en los ejemplos precedentes. Siempre es conve niente citar por la edicin usada y consignar, entre paréntesis o corchetes, el aio de la odieién original Este sistema resulta ttil cuando se maneja una bibliografia muy es: pecializada, Por ejemplo, en un libro sobre Garibaldi, utilizaria una bi bliografia breve, espectfica y bastante eonocida por los lectores especialis- tas, por Jo cual esto sistema funcionaria de maravillas, evitandole al au- tor el esfuerze de poner notas al pie una y otra ver citando las mismas fuentes. Si la monografia, la tesis o el trabajo de investigacion requiriera de una bibliografia muy variada, la recomendacién es usar el sistema clasi- co. Por ejemplo, en’ un trabajo sobre Politicas culturales en la Argentina (2945-1995), donde la bibliografia sera extensa y muy ecléctica, poco eo- nocida por los leetores. 7. La redaccién final | ( i i : | | 71. Ellenguaje En la redaccién de los resultados de una investigacién, de un ensayo, de ‘una tesis 0 do otro tipo de trabajo profesional, es preciso definir el lengua Je a emplear. En principio vamos a definir Ios términos: = lenguaje: es la facultad que poscen todos los seres humanos para co- municarse; lengua: es la totalidad de signos de que se vale una comunidad para entenderse; = habla: es el uso individual de la lengua. Cada vez que los hablantes emplean los signos que les afrece la len- ‘gna realizan un acto de habla. Una obra literaria, un discurso, una leesién, una eonversacin, son actos de habla, actos individuales porque el eseritor, el orador, e! hablan- te, eligen de todo el conjunto de la lengua determinados signos para com- Dinarlos y comunicar al lector, al oyente, sus pensamientos y emociones. El lenguaje es un hecho de comunieacién. A través del lenguaje los se- res humanos se comunican, establecen relacién social Para que haya comunicacién lingitstica deben presentarse los si- guientes elementos: 1. Un hablante, el que habla o escribe (llamado también emisor) 2. Un mensaje, lo que dice o escribe el hablante. 3. Un oyente, que recibe e interpreta el mensaje (llamado también re- ceptor). 19 0 Tass, testes, monografis¢informes 4. Un referente, porsona, hechos, ideas, lugares, épocas, ote., que men- ciona el lenguajo; os decir, los elementos que toma de la realidad 5. Un cédigo, la lengua utilizada, en este caso: el espaol, sus unidades ¥ combinaciones. 6. Un eanal por donde se transmite el mensaje: las ondas aetisticas si se trata de un mensaje oral; el papel, 1a publicacién periédiea, el libro, si se trata del mensaje escrito. 7. Las circunstancias, un determinado tiempo y lugar en quo se produ- ce el mensaje. Referente canal i emisor ———278"__ Mensaje. canal | Cédigo, receptor CIRCUNSTANCIAS ‘LAS FUNCIONES DEL DISCURSO Clasificamos los textos o discursos en tres tipos principales: informa- tivos, expresivos y apolativos, teniendo en euenta las funciones del lengua- Je, e8 decir, ol prodominio de una funcién sobre las demés. Existen otras funciones pero a los fines del trabajo de investigacién no son relevantes, Frente a una realidad se pueden adoptar diferentes actitudes: "Se produjeron distur “Cudntos disturbios hu- “Te advert! que habria bios en fa manifestacién bo ayer en la manifesta- _disturbios en la manifes- de ayer" ciént* Iacién de ayer” Predominio de la funcién Predominio de la funcién Predominio de la funcién INFORMATIVA EXPRESIVA APELATIVA La eacci al 81 Si en un texto prevalece la intencién de sugerir el mundo afectivo del hablante, se manifiesta en él la funcion expresiva del lenguaje (importan- cia del emisor). Si en un texto prevalece la intencién de influir, de persuadir, con res- pecto al oyento, se manifiesta en él la funcién apelativa del longuzje (im- portancia del receptor) Si prevalecen los hechos, las ideas, los datos (el referente), se dird que en él predomina la funcién referencial del lenguaje y se lo Hamara “texto informative” (importancia del referente). ‘Nunca una furcién es absoluta. Veamos: "Se esperan disturbios “No vayas a la manifestacién ‘en fa manifestacién de hoy" de hoy porque se esperan disturbios" INFORMATIVO (pero hay APELATIVO (Intencién luna intenci6n de influr de modo que existe un matiz apelativo) de persuadi y de informar al mismo tiempo) 7.1.1. La IMPORTANCIA DEL LENGUATE INFORMATIVO EN EL TRABAJO PROFESIONAL En nuestro trabajo profesional, ciontifico o intelectual, utilizaremos un Ienguaje netamente informativo. El lenguaje expresivo es mas propio para la literatura: poesia, novela, cuento, ete. En este tipo de obra se puede mostrar todo un mundo afeetivo a través de expresiones lingiifsti- ‘eas que sefialan las emociones del narrador o de los personajes; hecho in- concebible en el informe de una investigacién donde deben aportarso to- dos los elementos cientfficos que apoyen o demuestren las hipétesis planteadas. Asimismo, el enguaje apclativo no tiene lugar en el discurso cientifi- co debido a que la intencién de persuadir al lector se considera de poca se- rriedad intelectual. El lector debe convencerse de Ia exactitud de nuestras afirmaciones a través de las pruebas que podamos aportar. 71.1.2. PREDOMINIO DE LA FUNCION REFERENCIAL ‘Llamamos “funcién referencial del lenguaje” a la que es caracteristi- ca del texto informativo, donde se le da importancia al reforente: los he- ‘chos, las ideas, los datos que aportamos tomados de una realidad ineues- tionable. Si miramos el grafico, sabremos que el lenguaje informative que B Tesi, teins, monogra enformes elegimos para Ia eseritura de nuestro trabajo profesional estar centrado en ose referente, siendo el emisor y el receptor aspoctos secundarios en la claboracién del texto. Esto no significa que el emisor no sienta emociones frente a su tra- bajo o no tenga la intenciGn de persuadir o de influir sobre ol receptor. Si 8 asi, no debe notarse en el mensaje, si él trabajo esta bien realizado, porque lo que cuenta son los datos que aportamos con Ia objetividad pro- pia del investigador. 7.1.8. BL, RECEPTOR COMO CONDICIONANTE DEI. ESTILO Cuando se escribe un trabajo cientifico, un condicionante fundamen- tal del estilo lo constituyo ol lector a quien va dirigido. Debemos plantear- nos para quién escribimos: gal profesor de una citedra?, gal director del trabajo? ga todos los estudiosos que luego tendrén le ocasién de consultar nuestro informe, monografia, tesis? o ja lectores no especialistas? Estas son preguntas fundamentales que debemos hacernos a la hora de elegir el estilo de nuestro trabajo Aqui es preciso eliminar un prejuicio, Aunque ostemos escribiendo una monografia para una eétedra en particular, una tesis o un informe de investigacién para una institueién, no deberemos ceder a la tentacién de utilizar un lenguaje de especialistes, eno de cobreentendides dado ol ni- vol do esos recoptores, porque es preciso tener en cuenta que seré leido por muchas personas y consultado por otras, que a veces no son precisa mente especialistas en la diseiplina, Hay que explicar cada cosa con claridad y definir los términos que se utilizan a no ser que se trate de términos aprobados ¢ indiscutidos dentro del Ambito de la disciplina en cuestién. 7.1.4. {COMO DEBE EXPRESARSE EL AUTOR DEL TRABAJO? {QUE PERSONA GRAMATICAL CONVIENE KLEGIN PARA REDACTAR? La cuestiGn aqui planteada os si debe personalizarse el discurso cien- tifico. E] autor de un trabajo ¢diré “yo” o “nosotros”? Por una euestion de objetividad del discurso cientifico, no se debe utilizar la primera persona singular, yo, al estilo de “yo opino que...” Por otra parte, el nosotros es tradicionalmente muy usado en esto ti- po de trabajo, como si el autor aun siendo una sola persona representara a varios. Entonces, nos encontramos con expresiones como “nosotros opi- namos que...” 0 “..e1 arlfeulo que hemos citado...”. El uso de este plural, Uamado “plural mayostético”, es una tradicién universitaria y resulta li: La dace tal 8 Cito utilizarlo, pero lo recomendable es la opeitn que damos a continua- ign: la del Lenguaje impersonal, més a propbsito para el ejercicio de la es- critura cientifica o intelectual, al estilo de: “Se podria docir al egar a os- te punto que...” 0 “..1 articulo citado precedentemente...”. Aun en un trabajo en equipo donde Ios autores son varios, debe ete- girso osto modo de oxpresién, sin prejuicio de utilizar modalidades como “el articulo citado precedentemente nos demuestra...”, porque este plural no impliea una personalizacién del discurso sino que ese “nos” esta englo- bando al lector (0 receptor) para que comparta Ia propuesta del autor (0 emisor); y es aqu{ donde aparece legitimado, en el Jenguaje informativo propio del trabajo, un matiz. apelativo (0 de persuasién) que no puede ser condenado. ALGUNAS NORMAS SENCILLAS PARA TENER EN CUENTA, a) No eseriban perfodos largos. Utilicen oraciones cortas, con el minimo de subordinadas. b) Empleen un voeabulario preciso y claro, sin palabras rebuscadas 0 “dificiles”. ©) Usen un lenguaje referencial y no un lenguaje figurado. Hl lenguaje roferencial llama & las cosas por su nombre con términos bien defini- dos y de un solo sentido. Por ejemplo, debe decirse: periodismo ha tenido un papel preponderante en los recientes aconteci- ‘mientos poticos..” yno: "El cuarto poder ha tenido un papel preponderante en los recientes aconteci= ‘mientos pottcos..." En el primer caso el lenguaje es referencial; en el segundo, figurado. La palabra ‘figurado’ proviene de las figuras retéricas que se usan on literatura (metéfora, metonimia, litote, ete.). Dejemos las figuras retérieas para la poesia y la ficcién y lamemos a Jas cosas por su nombre. 4) No utilicen signos de admiracién (propios del lenguaje expresivo) pa- +a indicar que se est diciendo algo importante. La importaneia de un pasaje debe surgir del contenido mismo de lo que se expresa. Los signos de pregunta (también propios del lenguaje expresivo y ‘que expresan duda o perplejidad) pueden utilizarse como cuestién que se propone para ventilar 0 responder en el mismo trabajo. Por 84 ‘sis, tasinas, monogrfse informes ejemplo, en una investigacién cuyo titulo y tema es “Composicién so- cial de los estudiantes de Ia Universidad de Buenos Aires en la déca- da del 80” puede aparecer la siguiente pregunta: “gPor qué en carreras como Derecho hay paces estudiantes que trabajan te- ‘iendo en cuenta la baja cantidad de horas cursadas?”” "Se concluye que en el caso de las carreras que exigen un alto nivel de ho- ras cursadas, es ésia la condiciin principal (que hay pocos estudiantes que ltabajan). Mientras que en e! caso de las casreras con pocas horas de cursa- a ol factor princloal que detorminara la proporcion de estudiantes que ta bajan es el nivel socloeconémico de fos mismos." Ha sido lo que se Hama una pregunta retérica, porque ya se ponia de la respuesta y se coloed alli para despertar més el interés ©) Evitar el uso de mayiisculas para destacar tna palabra o frase. Si se desea hacerlo, usar cursivas 0 subrayado. 0 Evitar el uso de abreviaturas (Prof, Lic, St, etestera). ) Incluir el nombre de pila de cada autor o personaje hist6rico la prime- ra vez que se lo cite. Las veces siguientes, usar s6lo el apellido, 1) Cuando se usen siglas, desarrollar la primera vez la denominacién com- pleta correspondiente y consignar entre paréntesis la sighs. Por ejemplo: "Las resoluciones de la Organizacién de Estados Americanos (OFA). 7.2, Proliminares de la escritura 7.2.1, REVISION ¥ AJUSTE FINAL DEL INDICE EL esquema dol plan de trabajo y ol indice so habrén ido modifieando a medida que avance la ordenacién 6 interpretacién de los materiales acu- mulados. En algunos casos puede haberse enriquecido y hasta cambiado en la es- tructura de los capitulos, subcapitulos y pardgrafos, al punto que resulte su- ‘mamente detallado y refleje el orden estrieto obtenido al finalizar las tareas. Podremos, entoneos, dar inicio a la composicién de la obra escrita y de redaccién final del trabajo siguiendo un verdadero esquema expositivo. De la comparacién critica entre el esquema original del plan y el es- quema final, obtendremos una clara conciencia de la paulatina clarifica- ‘in de los problemas y de la formulacién de las respuestas a las hipéte- is planteadas. El ahorro de tiempo que un indice final bien estructurado nos depa- ra ¢s inealeulable porque constituye la gufa imprescindible para organi- a redaccin final 85 zar la redaceién del trabajo hilvanando un dato a otro hasta Iegar a las conclusiones. 7.2.2, ORDENACION DE LAS FICHAS DE LECTURA, DE CITAS Y (OTROS MATERIALES POR CAPITULO Remitimos al capftulo 4 de esta guia (4.3, “Criterios de ordenacién de las fichas”) Una vez organizado ol indice final en su forma definitiva, pasaremos ala ordenacién de las fichas por capitulo y asimismo de las itustraciones; y estaremos listos para la consulta organizada de los materiales que in- Cluiremos en la redaccién del trabajo. Ya no es necesario volver a consul- tar los libros porque tendremas los datos ordenados en el fichero sobre muestra mesa de trabajo. 17.2.8. EL, DOMINIO DE LOS MATERIALES Y LA ASIMILAGIGN INTELECTUAL Esto no quiere decir que la redaceién se convierta en una mera arti- culacién de fichas. El investigador ha conseguido una especie de recopi- lacién de frases, hechos y sucosos, dividida on capitulos. Nuestra inteli- gencia no debe someterse exclusivamente a los materiales fichados sino que debe recomponer con esptritu de sintesis interpretativa un cuadro completo donde las fichas ocupen su lugar de unidades hilvanadas erea- tivamente en una argumentacién hicida. Los datos de las fichas deben aparecer como elementos al servicio de la reconstruccién intclectual o intograrse on Ia unidad superior de las hipétesis, Si se consigue este dominio de los materiales, al servicio de la labor interpretativa, los datos fichados aparecersin como sélidas pruebas de nuestra argumentacién, 71.8. Bl primer borrador Ante la redaecién del primer borrador se produce frecuentemente un fenémeno: el investigador se siente impotente para empezar a redactar. Sin embargo, suele ser capaz de hablar con fluidez.y agilidad acerca del tema de su investigacién, pore es incapaz de sentarse a escribir un ni- ‘mero razonable de paginas. La causa de este fracaso es ereer que en la pri- ‘mera redaccién de un trabajo se obtiene la perfeccién de una forma defi- nitiva intocable, 85 Tess, tsias, monografase informs Cualquier trabajo, aun el més sencillo, nace con una forma imperfee tay requiere varias revisiones, muchos retoques, antes de darlo por con- cluido. Lo importante, si ésta es la situacién del investigador frente a la concrecién del trabajo por escrito, es comenzar a redactar sin demasiada autocritica, poniendo especial cuidado en el orden ldgico, dejando la per- feccién del estilo para una segunda etapa. En la primera redaceién, debemos resignarnos a emplear provisional- mente algunas expresiones con las cuales no estamos satisfechos, pero que nos permitirén seguir adelante. Aleanzaremos asi a construir una pri- mera base de redaccién donde, si no ejercemos un control rigido del dis- curso, habremos dado finalmente con algunos pérrafos brillantes o con so- Tuciones acertadas a eiertos planteos que la soltura adoptada permitira hacer surgi, De esta manera, venciendo la inercia inicial, ya no corremos peligro de no hacer nada, ste primer ensayo ahuyents el fantasma de renunciar a la escritura definitiva de la obra. 7.3.1. LAS REVISIONES DBL TEXTO ¥ LA REDACGION FINAL. Contamos con un borrador provisional y un primer ensayo de escritue ra del trabajo. Procederemos, entonees, a la revisién del texto. ‘Vamos a encontrar algunos desniveles en la composicién y el estilo, algunos baches en la coherencia de la argumentacién; pero existe una di ferencia enorme entre el peor de los borradores y Ia pagina en blanco. Es més facil corregir, tachar y rehacer, que inventar y ercar, El 80 por ciento de la tarea esté realizada. Mucho mejor que corregir aisladamente ciertas partes del trabajo, es empezar a revisar slo cuando se cuenta con una primera redaceiin com- pleta, porque sélo entonees es posible ajustar con mayor rigor cada una de Jas partes dentro de una estructura total y corregir en funcién de ella, ‘A continuacién, debemos revisar a fondo cada capttulo y sus relacio- nes internas y luego podemos pasar al siguiente, y asf sucosivamente. Quedaré para el final la tarea de revisar la introduccién y las conelu- siones, qu deben recibir nuestras correcciones sélo cuando hayamos ter- minado la revisin de todo el cuerpo del trabajo, puesto que constitayen, Ja primera intencién y ol resumen total de la obra, respectivamento. 8. La presentacién formal Es muy importante una presontacién formal de los escritos profesionales que convierta en agradable y fécil la lectura, para lo cual es indispensa- ble adoptar criterios coherentes que deben ser mantenidos a To largo de todo el trabajo y constituyen un sistema de presentacién caracterizado por ls puleritud y ol buen gusto. No existe un tinico modelo formal de presentacién de trabajos. Se puede elogir entre diversos estilos. 8.1. Los aspectos graficos Los aspectos gréficos son: — Tipo y formato del papel. ~ Margenes, = Taterlineados. = Tipografias. — Numeracién de paginas. = Titulos y su diferenciacién jerarquica por niveles (titulo, subtitulo, parégrafo y subpardgrafo). 8.1.1. UN EJEMPLO DE DISENO GRAFICO La eleccién provia de un estilo grafico facilitado por la computadora constituye un valioso auxiliar para: = estrueturar el contenido; hacer legible el texto, y = crear plantillas Power, Point a partir de los formatos Microsoft. (89) ‘Tipo y formato del papel Ad blanco Margenes Superior 30 mm Inferior 20mm Izquierdo 30mm Derecho 10mm Interlineado Sencillo Alineacién del texto: justificada Titulos y tipografia ‘Recomiendo utilizar la fuente Times New Roman, por su legibilidad y disponibilidad en cualquier equipo. La utilizacién de los titulos y del estilo normal de Microsoft Word fa-

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