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Los teoremas fundamentales del cálculo y sus aplicaciones

Carlos Eduardo Gómez Sánchez

1. Antecedente
El cálculo es una de las ramas más poderosas de las matemáticas con el que se pueden analizar una gran de
situaciones de la naturaleza y también del comportamiento social del ser humano. Ejemplo de esto es el análisis
del movimiento de los objetos para describir su posición, su velocidad, su aceleración y su fuerza. También, se
pueden describir las variaciones de individuos de una población en función del tiempo, de la disponibilidad de
nutrientes, de la temperatura, etc. También, usando el cálculo, es posible determinar el flujo de corriente eléctri-
ca que pasa por un conductoy y el flujo magnético total que fluye perpendicularmente a fluje corriente en el
conductor (Wikipedia, s.f.). En otras palabras, el cálculo tiene una gran cantidad de aplicaciones y seguramente
podrá tener muchas más, siempre y cuando este se entienda bien.

El objetivo de este proyecto es, por un lado, buscar una forma sencilla de explicar los teoremas fundamentales
del cálculo y, por otro lado, investigar sobre las aplocaciones que tienen estos conceptos, utilizando ejemplos
útiles en las áreas de ingenierı́a y ciencias sociales.

2. Marco teórico
El cálculo se puede dividir en dos grandes áreas: el cálculo diferencial y el cálculo integral. El primero estudia las
razones de cambio, por ejemplo, estudia cómo cambia la distancia que recorre un objeto por unidad de tiempo
cuando este es acelerado. Por su lado, el cálculo integral estudia, por decirlo de forma simplista, las áreas que
se forman bajo las curvas. Por ejemplo, el cálculo integral se utiliza para calcular el trabajo que desarrolla un
cuerpo cuando este se mueve una cierta distancia.

2.1. Fundamentos del cálculo diferencial


El origen del cálculo diferencial se dió debido a la necesidad de conocer el valor de la pendiente de curvas en
cualquier punto. Supanga el caso de una lı́nea recta como la que se muestra en la figura 1

Figura 1: Pendiente entre dos puntos sobre una lı́nea recta. Aquı́ la pendiente de la recta es constante.

Como se observa en la gráfica anterior, la pendiente entre los puntos P y Q se puede expresar como:

1
∆y
m= (1)
∆x
La ecuación (1) indica cuánto cambia la distancia en el eje y respecto de cómo cambia la distancia en el eje x.
Es decir, si la distancia en dirección y cambia mucho respecto al cambio en la distancia la direcció x, entonces
el valor numérico de la pendiente es grande. Por el contrario, si la distancia en la dirección en y cambia poco
respecto a la distancia en dirección x, entonces el valor de la pendiente es pequeña.

Como se puede ver en la figura 1, las pendientes entre el punto P y puntos intermendios entre el punto Q, sobre
la lı́nea recta, son constantes. Sin embargo, cuando la curva ya no es una lı́nea recta, la pendiente cambia de
punto a punto. Piense ahora en una gráfica como la que se muestra en la figura 2

Figura 2: Determinación de la pendiente de la curva en un punto especı́fico. Aquı́ la pendiente cambia en cada
punto.

Lo que se puede observar en esta figura es que el valor de la pendiente de la lı́nea recta que cruza a la curva
en los puntos P y Q no representa los valores de las pendientes en cualquiera de los puntos intermedios entre
P y Q. Lo anterior quiere decir que la pendiente (o pendientes) de una curva en cualquier punto no se pueden
calcular a partir de la ecuación (1). Aquı́ la cuestión es, si no se puede usar la definición de la pendiente (Ec.
(1)) para determinar el valor de las pendientes en cualquier punto de una curva que no sea lı́nea recta, entonces
¿cómo se pueden calcular dichos valores de las pendientes? La respuesta a esta pregunta surge del concepto del
lı́mite (James, Sestier Bouclier, Romo, y cols., 2002).

Para ejemplificar este concepto1 , considere nuevamente la gráfica de la figura 2, pero ahora imagine que el punto
Q se mueve poco a poco hasta el punto P sobre la curva, pero sin que el punte Q se transforme en P . En otras
palabras, imagine que Q se aproxima cada vez más, más, más, más, y más hasta P , pero sin que se toquen.
Cada vez que Q se acerca a P , los puntos en los que la lı́nea recta corta la curva también se van aproximando
y cuando Q está en el lı́mite con P , entonces la recta toca en solo un punto a la curva (Figura 3).
Matemáticamente, esta idea se expresar si evaluamos a la función f (x) que representa a la curva en diferentes
valores de x. En este sentido, la razón de cambio de f (x) respecto a x se puede escribir como:

f (x + ∆x) − f (x)
(2)
∆x
Cuando Q → P significa que la distancia de estos se reduce hasta el punto en el que ∆x → 0. Entonces, al
evaluar la ecuación (2) en el lı́mite cuando ∆x → 0 se obtiene
 
f (x + ∆x) − f (x)
lı́m =m (3)
∆x→0 ∆x
El lado derecho de la ecuación (3) es por definición la derivada, por lo que se puede decir que la pendiente en
cualquier punto de la curva no es otra cosa que la derivada de la función evaluada en ese punto.
1 El concepto formal del lı́mite se puede revisar en libros de textos de Cálculo. Aquı́ solo se menciona un aspecto intuitivo y

aplicado de cómo se usa el lı́mite para llegar al concepto de la derivada.

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Figura 3: Determinación de la pendiente de la curva en un punto especı́fico. El punto Q se aproxoxima más y
más al punto P .

dy
=m (4)
dx

2.2. Fundamentos del cálculo integral


El objetivo del cálculo integral, desde un principio, fue evaluar el área bajo lı́neas curvas, por ejemplo la de un
cı́rculo.

Para calcular el área de una sección rectangular, por ejemplo, la de un terreno (Fig. 4),

Figura 4: Cálculo del área de bajo de un segmento de lı́nea, delimitada en un intervalo en la dirección x.

se calcular como:

A = f (x)∆x (5)
donde f (x) y ∆x representan la altura y la base, respectivamente, del rectángulo. Sin embargo, para calcular
el área de bajo de una segmento de lı́nea curva, acotada en un intervalo en la dirección x (Fig. 5) no es tan simple.

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Figura 5: Cálculo del área de bajo de un segmento de lı́nea curva, delimitada en un intervalo en la dirección x.

Utilizar la ecuación (5) tal y como es no suele funcionar, ya que f (x) cambia conforme cambia x. Esto hace que
al calcular el área como si fuera una región rectangular se tendrı́a solo una aproximación que, dependiendo de
la función, podrı́a ser sobre calculada o subcalculada. Sin embargo, como se sugiere en la figura 5, él área bajo
la curva en una región acotada se podrı́a calcular si la región se divide en muchos rectángulos más pequeños y
se calcula el área de cada uno de estos rectángulos como

Ai = f (xi )∆xi (6)


donde el subı́ndice i indica el i-ésimo intevalo en la dirección x en el que se divide la región acotada. De aquı́,
el área total de la región se caclula como la suma de todas las áreas en las que se dividio la región completa
n
X
A= f (xi )∆xi (7)
i=1

donde n es el número de intervalos en los que se divide la región completa. Ahora, como se puede inferir, entre
más grande sea en número n, mejora será la aproximación del área total de la región bajo la curva. Por lo tanto,
la mejor aproximación del cálculo del área se dará cuando n → ∞, de tal forma que

X
A= f (xi )∆xi (8)
i=1

La ecuación (8) se puede representar con la siguiente nomenclatura

Zb
A= f (x)∆x (9)
a

En esta ecuación, a y b son los lı́mites inferior y superior, respectivamente, que delimitan la región bajo la curva.

La ecuación (9) es lo que se conoce como la integral de la función f (x) respecto al cambio dx, la cual es el
objeto de estudio del cálculo integral.

Referencias
James, S., Sestier Bouclier, A., Romo, J., y cols. (2002). Cálculo: trascendentes tempranas.
Wikipedia. (s.f.). Calculus. Descargado de http://en.wikipedia.org/wiki/Calculus

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