Proyecto FAO - TCP/ARG-2802 (A)

"Manejo sustentable de ecosistemas forestales

de la cuenca Los Pericos Manantiales”

Cartilla de divulgación Nº 2

Manejo sustentable del suelo (parte I)

Ing. Agr. Pedro Williams

Dirección de Bosques
Secretaría de Ambiente
Programa Nacional
y Desarrollo Sustentable
de Bosque Modelo

Organización de las Naciones

Unidas para la agricultura
y la alimentación

Gob. de la Pcia. de Jujuy

Bosque Modelo Grupo Yavi de Ministerio de Producción
Jujuy Investigaciones Infraestructura
científicas y Medio Ambiente
 El suelo es el bien más valioso de la finca,
porque de lo que hagamos con él dependerán los
resultados de nuestra actividad.
Hemos visto que el productor agrícola tiene
por misión organizar los elementos del sistema
para que las plantas de cultivo se desarrollen y
generen productos comercializables.
En tal sentido, conviene recordar lo que
necesitan las plantas para crecer y mantenerse.
Esta el la lista de "elementos" que una plan-
ta requiere:

Luz. Que capta del sol por medio de las hojas, verdaderos "paneles solares".

Dióxido de carbono. El gas que eliminamos al respirar; el que forma las burbujitas de la soda.
La planta lo absorbe del aire por sus hojas, y junto con la energía de la luz fabrica azúcares que
le sirven de alimento.

Oxígeno. Como en la mayoría de los seres vivos, es utilizado para "quemar" el alimento y obte-
ner energía. Todos los órganos de la planta lo obtienen del aire a través de sus células.

Agua. Es el medio en el que ocurren todas las reacciones bioquímicas y por el cual se trasla-
dan las sustancias. Las raíces de las plantas la absorben del suelo.

Nutrientes minerales. Son elementos químicos diferentes del carbono, el oxígeno y el hidró-
geno; que resultan indispensables para que las plantas realicen sus procesos vitales. Son extra-
ídos del suelo por las raíces.

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Con estos ingredientes, correctamente
balanceados, una planta podrá desarrollar sus
procesos vitales siempre que esté dentro de nive-
les aceptables de temperatura.
¿Sobre cuales de esos ingredientes puede
influir normalmente un agricultor?
No es posible modificar la composición del
aire; a menos que dispongamos de un invernade-
ro herméticamente cerrado y de garrafas con
dióxido de carbono u oxígeno.
Tampoco se puede alterar la intensidad de la
luz, si no contamos con iluminación artificial o
estructuras que intercepten la luz solar (umbrá-
culos).
Salvo en situaciones muy especiales, los
agricultores no cuentan con esas posibilidades; y
deben contentarse con lo que la naturaleza les
provee.
¿QUE CONTIENE UN SUELO?
Nuestro planeta alberga la vida. Solo eso lo
hace especialísimo en el universo. Pero no toda
la tierra posee esa cualidad. Si nos olvidamos de
los mares, la vida en la tierra existe solo en una
estrecha franja de unos pocos metros de super-
ficie sólida - el suelo- y algunos miles de metros
de atmósfera. Alguien visualizó esa franja como
una delgada esfera que rodea al planeta, y la
llamó Biosfera.
Manejo sustentable del suelo
Todos sabemos, en cambio, que es posible
dar agua a las plantas por medio del riego; y que
también se puede proveerles nutrientes minera-
les mediante fertilización o abonado.
En ambas situaciones, el intermediario obli-
gado es el suelo.
Si tenemos en cuenta que además el suelo
debe absorber y almacenar agua, disponer de
oxígeno para que las raíces no se asfixien, fabri-
car, acumular y dosificar los nutrientes minera-
les, y tener la estructura justa para que las raí-
ces puedan anclarse y crecer; es fácil darse
cuenta de que la frase del comienzo no es exa-
gerada.
Pero además es importante porque el suelo
es el único recurso natural que el agricultor es
capaz de modificar con sus prácticas cotidianas.
En pocos años puede mejorarlo o destruirlo.
Esto nos ayuda a tomar conciencia de la
importancia del suelo para la vida en su conjunto.
Por definición, un suelo debe - para conside-
rarse tal - permitir y favorecer el desarrollo de las
plantas. En esto tiene que ver su especial com-
posición.
Un suelo agrícola típico posee los siguientes
elementos:
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 Partículas minerales. Son el resultado de la lenta fragmentación y descomposición de las
rocas. Su cantidad y proporción es la cualidad más estable del suelo.

Seres vivos. Existen numerosísimas especies adaptadas a vivir en el suelo; encargadas de

descomponer los restos de los seres vivos y realizar importantes transformaciones bioquí-
micas. Por ejemplo, un solo gramo de suelo puede contener ¡mil millones de bacterias!

Materia orgánica. Todo lo que ha dejado de estar vivo, y se encuentra en proceso de con-
vertirse en mineral para volver a ser utilizado por las plantas.

Agua y aire. Los espacios entre las partículas constituyen la Porosidad del suelo. Dichos
espacios pueden estar ocupados por agua o por aire. Generalmente los mas grandes contie-
nen aire; y los mas pequeños, agua.

Considerando el volumen, las proporciones adecuadas para las plantas son las siguientes:

Composición de un suelo en buen estado (porcentajes)

25%
Partículas minerales

45%
Materia orgánica

Aire

25%
Agua
5%

Es bueno aclarar que los métodos de análisis normales determinan en conjunto materia orgánica
y seres vivos.

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LA TEXTURA DEL SUELO
Intuitivamente podemos darnos cuenta de
que una propiedad llamada "textura"; debe per-
cibirse al tacto. En efecto, hay suelos que al
pasarlos entre los dedos se sienten suaves como
el talco; otros son ásperos; y la mayoría mani-
fiesta características intermedias.
Partícula mineral
Grava o piedras *
Arena
Limo
Arcilla
* presentes sólo ocasionalmente.
Como vemos, existen partículas pequeñísi-
mas, de menos de dos milésimas de milímetro, y
otras detectables a simple vista. La diferencia
entre las más pequeñas y las más grandes es
algo mayor de la que existe entre la cabeza de un
alfiler y una pelota de fútbol.
No nos debe sorprender, entonces, que la
presencia de mayores o menores proporciones de
cada categoría, modifique notablemente las
características agrícolas del suelo.
Esto sucede porque las partículas minerales
son de tamaños muy distintos, y se encuentran
en los suelos en diferentes proporciones.
Esta es la clasificación más común:
Diámetro en milímetros
Mas de 2
Entre 0,05 y 2
Entre 0,002 y 0,05
Menos de 0,002
Al respecto, se consideran más aptos los
suelos que contienen 40% de arena, 40% de
limo, y 20% de arcilla; o valores próximos.
Dichos suelos -denominados "francos"- poseen
el mejor equilibrio entre poros grandes y peque-
ños; son razonablemente fértiles, se trabajan con
facilidad; y contienen agua y aire en las propor-
ciones adecuadas.
En la medida en que un suelo se aleje de esos
valores, las dificultades serán progresivamente
mayores.
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 Cuando predominan las partículas pequeñas,
se dice que la textura es "fina", y el suelo resul-
ta "pesado". Por el contrario, el predominio de
arena hace que la textura sea "gruesa", y el
suelo "liviano".
Puesto que la textura es una característica
permanente, que no se modifica con las prácti-
cas agrícolas habituales; es de suma importan-
cia que un productor conozca la textura de su
suelo, y sepa manejarlo en función de ella.
Un análisis rutinario de laboratorio determi-
nará con suficiente exactitud este parámetro. Si
no se cuenta con dicha posibilidad, existen méto-
dos de campo, rápidos y sencillos, que pueden
brindar información para tomar algunas decisio-
nes. Describimos uno de ellos:

1. Tomar una muestra de suelo representativa del lote en cuestión.

2. Desmenuzarla bien y retirar piedras, palitos, insectos, etc.
3. Agregar agua, mezclar hasta formar una masa maleable, que pueda trabajarse con las
manos.
4. formar bolitas de un par de centímetros de diámetro.
5. Amasar las bolitas en forma de cilindros tan largos como se pueda.

Los resultados se interpretan así:

Sensación áspera al tacto. Dificultad para formar una masa trabajable. Los cilindros se cuar-
tean y desarman con facilidad: TEXTURA GRUESA - SUELO LIVIANO.
Sensación suave al tacto. Se forma una masa trabajable, como plastilina o masilla. Se arman
cilindros largos y estables: TEXTURA FINA - SUELO PESADO.
Sensación suave con leve aspereza. La muestra se amasa bien, pero con tendencia a agrie-
tarse. Se forman los cilindros pero se fracturan al estirarlos: TEXTURA MEDIA - SUELO
FRANCO.

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 Manejo sustentable del suelo

CARACTERÍSTICAS DIFERENCIALES Y PAUTAS DE MANEJO

Suelos Pesados Suelos Livianos

Características diferenciales.

- Poseen cantidades excesivas de arcilla y/o - Poseen cantidades excesivas de arena.

limo.
- Predominan poros pequeños. - Predominan poros grandes.
- Presentan aireación dificultosa. - Suelen ser bien aireados.
- Almacenan mucha agua pero no la ceden - Almacenan poca agua.
fácilmente a las raíces.
- El agua infiltra lentamente. - El agua infiltra rápidamente.
- Son pobres en nutrientes.
- Son ricos en nutrientes.
- Poseen baja capacidad para almacenar
- Poseen alta capacidad para almacenar
nutrientes.
nutrientes.
- Poca "inercia térmica", se enfrían o
- Alta "inercia térmica", se enfrían o
calientan rápidamente.
calientan lentamente.

Pautas de manejo

- Surcos de riego largos. - Surcos de riego cortos.

- Regar en forma abundante pero lenta-
mente.
- Fertilizaciones "de fondo" al comienzo de
la temporada.
- Atrasar unos días las fechas de siembra.
- Cultivar especies tolerantes a la escasez
de oxígeno en el suelo.
- Riegos cortos y frecuentes.
- Fertilizaciones fraccionadas (varias
veces, poco por vez).
- Adelantar unos días las fechas de siem-
bra
- Cultivar especies con órganos subterrá-
neos comercializables.

- Mantener altos contenidos de materia orgánica.

- Mantener cubierta la superficie del suelo.

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LA ESTRUCTURA DEL SUELO

Además de la textura, también es impor- algunos casos puede ocurrir lo contrario.

tante la forma en que se combinan y adhieren
las partículas entre sí. Esto es responsabilidad
de ciertas cargas eléctricas que pueden esta-
blecerse, de la materia orgánica y de la activi-
dad biológica del suelo.
Así como la textura es permanente; la
estructura puede modificarse con facilidad.
Como sea, la estructura ideal es la llamada
granular o migajosa, en la que el suelo presenta
pequeños agregados (terrones) de tamaño uni-
forme, que se desmenuzan con facilidad. Esta
disposición facilita la absorción de agua, el
intercambio de gases, la penetración de las raí-
ces, la germinación de las semillas, etc.

Los suelos arcillosos suelen ser mejor Estas son algunas de las cosas a tener en
estructurados que los arenosos, aunque en cuenta para conservar la estructura del suelo:

· Labrar lo mínimo indispensable de acuerdo con las necesidades de cada cultivo.

· Evitar el uso de maquinaria pesada.

· Trabajar el suelo con implementos en buen estado, y a las velocidades recomendadas.

· Preferir herramientas que alteren mínimamente la disposición vertical del suelo.

· Realizar las operaciones con la humedad adecuada y en horas de poco viento.

· Conservar el suelo cubierto de vegetación o rastrojos el mayor tiempo posible.

· Mantener niveles adecuados de materia orgánica.

Los suelos naturales con buena cobertura
vegetal suelen estar bien estructurados. Las
prácticas de labranza rompen las uniones entre
partículas, aceleran la descomposición de la
materia orgánica, alteran las condiciones de los
organismos vivos y someten al suelo a la com-
pactación por el paso de la maquinaria.
Posteriormente el agua tiende a separar las
partículas según su peso, y estas se agrupan
nuevamente formando costras y terrones duros,
que es necesario desmenuzar con nuevas labran-
zas; en un círculo vicioso que puede afectar
seriamente la fertilidad del suelo si no se lo
detiene a tiempo.

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