Visité el museo Tezozomoc que se llama “Centro de Difusión de Ciencia y Tecnología” del

Instituto Politécnico Nacional. El lugar estaba dividido en 3 áreas (Sustentabilidad, ciencia

y tecnología y matemáticas) donde me llamó la atención y me agradó bastante el área de
tecnología porque en ella se encontraba algunas cosas referentes a la espectroscopía; nos
mostraban un ejemplo de cómo se difractaba la luz por el paso de una rendija circular o una
cuadrada, y se veía como la luz que emitía un láser se separaba y se reflejaba sobre una
tabla en forma de línea horizontal, es decir, ya no salía del orificio como forma de haz de
luz, sino difractada con forma de línea recta horizontal, donde claramente se veía que el
área donde había mayor intensidad de luz era en medio y conforme se abría era menor.
También en esa misma área se encontraba una rejilla de difracción que separaba la luz en
diferentes longitudes de onda, se encendía una lámpara de hidrógeno y otra de neón, y
ambas al emitir luz y pasar por la rejilla se apreciaban todos los colores del espectro visible,
era algo demasiado bonito ya que lo aprendido en clase se vio y comprobó de manera
práctica. También habían unos tubos que comprobaban el efecto Tyndall, dice que cuando
el haz de luz pasa a través de un coloide o alguna sustancia turbia se pueden apreciar mejor
las partículas que en ésta se encuentran. Otro apartado del museo era la fluorescencia
donde ponía pequeñas piedras o minerales a los cuales les hacían pasar luz ultravioleta y
estos emitían luz visible, pero cuando se apagaba la lámpara de deuterio dejaba de emitirla
es una gran diferencia con la fosforescencia que en esta última al dejar de incidirle luz sigue
emitiendo luz visible por un tiempo más pero de menor intensidad, por último estaba el disco
de Newton, que es un disco que tiene todos los colores pintados en ella (excepto negro), y
al hacerlo girar rápidamente ya no se aprecian y se ve solamente color blanco, este
experimento es para demostrar que la suma de todos los colores da el color blanco, y la
ausencia de la misma da el color negro, de hecho habían pequeños letreros que decían
que la luz era color realmente, sólo que todos los colores combinados y para poder apreciar
uno es necesario separar esa luz en diferentes longitudes de onda y cada color tiene una
longitud de onda distinta.
Algo súper bonito es que nos mostraban parte de un espectrofotómetro UV-VIS de manera
ya visual, es decir, por dentro y me impresionó bastante, ya que estaban las partes como
la lámpara, el colimador, y la luz pasaba por una rendija de entrada que hace que cierta
parte de la luz pase a través de ella, e incide sobre un prisma el cual difractaba la luz y por
supuesto se veían los colores del espectro visible, reflejada en una tabla.
Habían otros apartados como un simulador de sismos, donde se encontraban edificios
hechos de acrílico y podías manipular la intensidad del sismo, realmente sí bastante fuerte,
pienso que simulaba un sismo de 9, pero como el acrílico es bastante fuerte y tenía unos
pequeños gatos hidráulicos, el edificio casi no se movía tan brusco, habían más cosas
interesantes como el uso de la energía eólica para generar corriente eléctrica y algo también
interesante y a la vez alarmante es que mencionaban que México es uno de los países más
contaminantes del mundo, no sólo en las toneladas de CO2 producidas diariamente sino
en el uso excesivo del plástico que va directamente a los mares afectando ecosistemas y
los animales; de hecho han encontrado piezas de plástico e incluso metálicas dentro de
peces cuando los pescan para consumo humano.
Por último en el área de matemáticas, nos mostraban las demostraciones del teorema de
Pitágoras, y la campana de Gauss y había más juegos divertidos en el que podíamos pasar
el rato con los amigos.
Mi experiencia en el museo fue asombrosa, ya que aprendí bastantes cosas nuevas,
además de que lo visto en clase queda más claro en ciertos aspectos que no entendía, valió
la pena ir y conocer nuevas cosas, y desde mi punto de vista es bueno ya que lo visto de
manera teórica queda reforzado con lo visto en el museo y de manera divertida, aparte no
es tan costoso el museo, la entrada cuesta 10 pesos.
El museo me pareció bastante interesante y me gustaría poder visitar más museos
posteriormente, para conocer cosas nuevas y aprender, porque lo importante de esto no es
sólo ir, sino llevarse conocimiento que podremos aplicar en el futuro.