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Diagnóstico
Los problemas de aprendizaje de los niños pueden tener consecuencias negativas para el
desarrollo intelectual y afectivo de los niños. Si no se identifican y se tratan a tiempo, la
autoestima, la valoración personal, la sociabilidad y, en general, las actividades diarias del niño
se pueden ver afectadas.
En contra de lo que pueda pensarse, los problemas de aprendizaje no tienen una relación directa
con el cociente intelectual del niño, sino con su capacidad de trabajo, el interés que presta a los
estudios y las técnicas que pone en marcha para aprender.
La última versión del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (Diagnostic
and Statistical Manual of Mental Disorders), el DSM-5, cataloga los criterios diagnósticos para el
Trastorno específico del aprendizaje de la siguiente manera:
Lectura de palabras imprecisa o lenta y con esfuerzo (p. ej.,lee palabras sueltas en voz
alta incorrectamente o con lentitud y vacilación, con frecuencia adivina palabras,
dificultad para expresar bien las palabras).
Dificultad para comprender el significado de lo que lee (p.ej., puede leer un texto con
precisión, pero no comprende la oración, las relaciones, las inferencias o el sentido
profundo de lo que lee).
Dificultades ortográficas (p. ej., puede añadir, omitir o sustituir vocales o consonantes).
Dificultades con la expresión escrita (p. ej., hace múltiples errores gramaticales o de
puntuación en una oración; organiza mal el párrafo; la expresión escrita de ideas no es
clara).
Dificultades para dominar el sentido numérico, los datos numéricos o el cálculo (p. ej.,
comprende mal los números, su magnitud y sus relaciones; cuenta con los dedos para
sumar números de un solo dígito en lugar de recordar la operación matemática como
hacen sus iguales; se pierde en el cálculo aritmético y puede intercambiar los
procedimientos).
Dificultades con el razonamiento matemático (p. ej., tiene gran dificultad para aplicar
los conceptos, hechos u operaciones matemáticas para resolver problemas
cuantitativos).
Juegos para definir y afianzar conceptos espaciales y temporales básicos que actuarían,
por un lado, como referentes que guían las ejecuciones de las actividades en general y,
por otro, gracias a su función estructurante, como facilitadores del almacenaje en la
memoria inmediata de los datos que se exponen en las instrucciones (o en la memoria
a largo plazo, de los conocimientos que se van adquiriendo).
Juegos de atención visual y auditiva (búsqueda de datos concretos en una configuración
visual compleja; captación de diferencias; composición de palabras partiendo de
deletreos, listas de cálculos sencillos sostenidos y cronometrados; etc).
Actividades de razonamiento visual (ordenación de secuencias temporales; series de
figuras y matrices que deben completar después de descubrir el principio lógico que las
rige...).
Razonamiento verbal (captar diferentes relaciones entre palabras; clasificación por
categorías; relaciones jerárquicas; analogías; adivinanzas; metáforas; inferencias; etc.).
Juegos de lenguaje (evocación de términos en función de diferentes criterios;
encadenamientos; adivinanzas; invención de palabras y significados; crucigramas
creados por ellos mismos; pasa-palabra; etc.).
Estructuración del discurso verbal (conversaciones; respuestas; definiciones;
descripción de objetos, situaciones, escenas, sentimientos; construcción de
proposiciones con suficiente elaboración y corrección morfosintáctica; relatos de
experiencias; etc.).
Desarrollo del conocimiento del código alfabético (análisis sonoro de las palabras;
discriminación de sonidos parecidos; instalación de las asociaciones sonido-letra;
segmentación de las palabras en sus diferentes componentes: fonotreos, deletreos,
silabeos, morfemas; reflexiones ortográficas- letras fáciles, letras confusas-; etc.).
Mecánica lectora y escritora (Lectura de sílabas, palabras, frases y textos haciendo uso
de las dos vías de procesamiento lector: subléxica o descomposición de las palabras en
sus segmentos silábicos y léxica o lectura de las palabras como unidad; ejercitación de
los movimientos gráficos de las letras y de sus enlaces; aplicación en la escritura de la
“habilidad metafonológica”, manejo mental de los componentes fónicos de las palabras
y de su secuencia coordinándolo con el acto motor; identificación de las unidades léxicas
de las frases; etc.).
Productividad de la lectoescritura (extracción del significado de enunciados escritos con
variada dificultad -frases simples, proposiciones compuestas, párrafos, textos narrativos
y expositivos-; localización de determinados datos; autopreguntas que incidan en la
búsqueda de información; inferencias; predicciones; deducciones; captación de
agrupaciones temáticas que favorezcan la retención de las ideas expuestas en los textos;
estructura de escritos de diferente extensión; elaboración escrita de ideas con suficiente
cantidad de datos; empleo de diferentes recursos de la escritura; etc.).