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UNIVERSIDAD CATÓLICA LOS ANGELES DE CHIMBOTE

FACULTAD DE CIENCIAS POLITICAS

ESCUELA DE DERECHO
TEMA

ESTADO Y PODER

CURSO

SOCIOLOGIA JURIDICA

CICLO

DOCENTE

Dr. Oscar Martin valladares Moncada

ESTUDIANTES

JUAN CARRILLO SILVA

2018
AGRADECEDIMIENTO

A la Universidad ULADECH-Tumbes…:

Por compartir y brindarnos sus conocimientos, doctrina,


valores, mística Institucional y amor a la Patria, a la Institución y
Sociedad que son la razón de esta noble Profesión.

A mis Padres….:

Mis primeros maestros, a ellos por darme la vida y por guiarme


siempre por el bueno camino y por sus valiosas enseñanzas.
DEDICATORIA

A Dios…..:

Quién nos supo guiarnos por el buen camino, darnos las fuerzas
para seguir adelante y no desmayar en los problemas que se
presentaban, enseñándome a encarar las adversidades sin
perder nunca la dignidad ni desfallecer en el intento.
INTRODUCCIÓN

El estado y el poder son fenómenos sociales muy complejos. No podemos describir o explicar

adecuadamente el aparato del estado, los proyectos del estado y el poder del estado sin hacer

referencia a su articulación diferencial con este conjunto. Se reclama un tipo distintivo de

orientación teórica que pueda dar cuenta no sólo de la especificidad histórica e institucional

del estado como una realización distintiva de desarrollo social sino también de su rol como

elemento importante dentro de la estructura y la dinámica global de las formaciones sociales.

El Estado es la institución en que se concentra el poder político de una sociedad, es decir, el

poder de tomar las decisiones que afectan al conjunto de la población.

El poder es una consecuencia lógica del ejercicio de las funciones por parte de las personas

que ocupan un cargo representativo dentro de un sistema de gobierno en un país. Por ello el

poder político se identifica en sistemas democráticos con el poder Ejecutivo y legislativo de

un país, mientras que el tercer poder del Estado, el poder judicial está dentro de un esquema

distinto ya que su legitimidad no está sostenida por el voto del pueblo como los otros dos

poderes.

El estado y el poder trabajan de la mano siempre son los dos grandes poderes de un país, pero

cabe resaltar que nunca debemos utilizar ninguna de las dos cosas para cometer otro tipo de

situaciones ya sea enriquecimiento ilícito, extorción o amenazas, ya que estaríamos abusando

de nuestro cargo público.


ESTADO Y PODER

Según (Jessop, 2010) el estado y el poder del estado son fenómenos hipercomplejos y

variables, y ninguna teoría o perspectiva teórica por sí misma puede capturarlos

completamente y explicar su dinámica estructural y estratégica. Además, a pesar de las

tendencias recurrentes a cosificarlos como si estuvieran afuera y por encima de la sociedad,

el estado y el sistema político pertenecen a un conjunto más amplio de relaciones sociales.

No podemos describir o explicar adecuadamente el aparato del estado, los proyectos del

estado y el poder del estado sin hacer referencia a su articulación diferencial con este

conjunto. Se reclama un tipo distintivo de orientación teórica que pueda dar cuenta no sólo

de la especificidad histórica e institucional del estado como una realización distintiva de

desarrollo social sino también de su rol como elemento importante dentro de la estructura y

la dinámica global de las formaciones sociales. En este artículo se apuesta por un enfoque

que se refiere al estado en términos “estratégico-relacionales”. Ello nos permite explorar la

naturaleza del poder del Estado como la condensación material de un equilibrio siempre

cambiante de fuerzas políticas. Explicitado por primera vez por el teórico político griego

Nicos Poulantzas1, tal enfoque ha necesitado mucha elaboración. De hecho, el enfoque

estratégico-relacional, en su aplicación teórico-estatal, podría ser descrito como el proceso

de elaboración meta-teórico, teórico y empírico de las implicancias que traen aparejadas las

proposiciones iniciales de Poulantzas.


NÚCLEO PROBLEMÁTICA DEL ESTADO Y DEL PODER

Dice (AYALA, 28/01/2009 )El núcleo “Estado y poder” permite comprender y analizar, de

manera autónoma, la problemática del Estado y, de modo consecuente, entenderlo como la

máxima instancia de organización política y de las relaciones de poder que le son

consustanciales. Analiza los diferentes niveles de expresión y concreción de la dinámica del

Estado como eje de vital importancia para la comprensión del papel del Administrador

Público. El estudio del Estado y del poder obedece a que durante los últimos siglos las

sociedades accidentales modernas han asumido el Estado como una forma de organización y

unidad política dominante según entraban a plegarse, articularse y proyectarse

colectivamente las variables territoriales, sociales, económicas, culturales y militares de

dichas sociedades. Pero, de igual manera, ha de reconocerse que la concreción de tales ideas

colectivas requirió la organización de aparatos administrativos que dieron origen a las

instituciones de carácter público, sin un interés individual o privado. De otra parte, no se

puede desconocer cómo este tipo de organización ha sufrido cambios históricos, políticos,

culturales y económicos que la han redimensionado hasta el punto de ofrecer una compleja

red de relaciones que afectan el pasado, el presente y el futuro de las naciones. Por ejemplo,

en este tiempo, el sistema capitalista, las tendencias políticas neoliberales, los conflictos

ideológicos, el terrorismo, la autonomía de las naciones son, entre otros, evidencias del

redimensionamiento de los Estados. Ahora bien, la administración pública y la

administración estatal se hallan estrechamente relacionadas, puesto que el campo de lo

público se encuentra mayoritariamente en el aparato estatal.


Orígenes del Estado.

Dice (Jessop, 2010)Durante siglos fueron los filósofos los que se preguntaban sobre la

conducta del hombre y la organización de la sociedad. Podría decirse que es hasta épocas

relativamente recientes que surgieron disciplinas especializadas en el estudio de las ciencias

humanas. A excepción de las europeas, las antiguas culturas, orientales principalmente, no

llegaron nunca a desarrollar una teoría política, sólo podemos encontrar fragmentos de

pensamientos o de reflexiones políticas que hacían en libros filosóficos y religiosos por

ejemplo Confucio y Lao Tse, o en la misma Biblia; pero nunca son formulaciones concretas

acerca del estado, del poder o de la sociedad.

¿Por qué no se desarrollaba el hombre en estas áreas? La razón más importante fue que las

reglas religiosas que había en esas civilizaciones prohibían los análisis críticos y esto es

fundamentales para la investigación y la formulación de ideas. Fue en la libre atmósfera de

la Grecia clásica, donde por vez primera se desarrolló la reflexión y la discusión política y la

literatura correspondiente.

El Estado es la institución en que se concentra el poder político de una sociedad, es decir, el

poder de tomar las decisiones que afectan al conjunto de la población. Como tal, al Estado

se le asigna el monopolio de la violencia legítima. Además de ello, el Estado desarrolla un

conjunto de funciones que lo convierten en un agente económico de suma importancia: por

una parte cobra impuestos, que constituyen su fuente de ingresos, y por otra parte realiza

gastos, que incluyen el pago de los funcionarios que prestan servicio en sus distintas

dependencias y las adquisiciones de los bienes que requiere para desempeñar sus actividades;
además provee a los ciudadanos de diversos bienes públicos y, en muchos casos, realiza

funciones de empresario, pues es poseedor y/o administrador de empresas públicas. El

Estado, en las sociedades modernas, asume asimismo las funciones de emitir dinero, de

regular diversos mercados y de influir en el comportamiento económico del país mediante su

política económica y las diversas regulaciones que puede imponer.

En la actualidad existe una multiplicidad de definiciones del concepto Estado. Sánchez

Agesta, señala que el concepto Estado puede ser observado desde tres perspectivas, las

mismas que han sido utilizadas de manera excluyente y omisiva entre sí en lo referente a sus

respectivos aportes doctrinarios: deontológica, sociológica y jurídica.

a) Perspectiva Deontológica: Radica en explicar la noción, estado en atención a los fines o

metas que éste persigue alcanzar, entre los cuales se puede mencionar la libertad, el bienestar

común, la seguridad, etc. Se considera, en gran medida, la connotación de los fines y metas

estatales como factores de cohesión y criterios legitimadores para la existencia y pervivencia

de una sociedad política.

b) Perspectiva Sociológica: radica en explicar la noción Estado en atención a las propiedades

y cualidades del tipo de poder de que goza y ejerce el Estado.

c) Perspectiva Jurídica: Radica en explicar la noción Estado en atención a la función

normativa compulsiva que necesaria e irremediablemente emana y proyecta de su seno el

Estado. Opinamos que estas perspectivas no son totalmente excluyentes ni antagónicas entre

sí, sino que, por el contrario, de su fusión y complementariedad surgen las connotaciones y

propiedades que dan sentido a la noción Estado. En ese contexto, esta acepción alude a una
sociedad política autónoma y organizada para estructurar la convivencia que ejerce un poder

soberano desde una titularidad abstracta y permanente, la cual, para legitimar, establece un

orden jurídico coactivo. El estado es una sociedad política autónoma y organizada para

estructurar la convivencia, en razón de que se trata de un conjunto permanente de personas

que se relacionan por la necesidad de satisfacer imperativos a fines de supervivencia y

progreso común.

Importancia de Sociedad con o sin estado

La sociabilidad no es un hábito creado por la vida en el hombre, sino un ingrediente de su

esencia. Así lo reconoció Aristóteles en el libro I de su obra “Política” cuando afirmaba que

el ser humano es “por naturaleza sociable” y que el que vive fuera de la sociedad por

organización y no por fuerza del azar, es o un ser superior o un degenerado. El hombre

aislado, al margen de la sociedad, es o una abstracción o una hipótesis falsa. En la realidad,

observa Martin Buber, se da siempre “el hombre con el hombre”. La categoría “entre” es tan

primaria como el yo o como el tú”, por eso, nos aproximamos “a la respuesta de la pregunta

¿Qué es el hombre? Si acertamos a comprenderlo como una dialógica, en cuyo “estar dos en

recíproca presencia” se realiza y se reconoce cada vez el encuentro del “uno” con el “otro”.

La vida está rodeada de hechos sociales porque todos somos integrantes de un grupo y gran

parte de nuestros actos se dirigen a los demás o a la sociedad misma; además, nuestra

conducta está condicionada por lo social que se impone en forma de mandatos y de

prohibiciones, y, finalmente se halla orientada por factores de esa índole que la encaminan

hacia realizaciones intersubjetivas, puesto que el hombre vive también para los otros.
DEFINIR EL ESTADO

Teniendo en cuenta las observaciones anteriores, ahora puedo definir al Estado, a partir del

análisis estratégico-relacional, como una “abstracción racional” re-especificada de diferentes

maneras y con diferentes propósitos. En resumen, a fin de iniciar el análisis, y como adelanto

de una exploración más exhaustiva, sostengo que el núcleo del aparato estatal puede ser

definido como un conjunto distintivo de instituciones y organizaciones cuya función

socialmente aceptada consiste en definir y hacer cumplir las decisiones colectivamente

vinculantes en una población dada en nombre de su “interés común” o “voluntad general”.

Esta definición amplia identifica al estado en términos de sus características genéricas como

una forma específica de organización macro-política con un tipo específico de orientación

política. También indica que existen importantes vínculos entre el estado y la esfera política

e, inclusive, con la sociedad en general. Por lo tanto, no todas las formas de organización

macro-política pueden ser clasificadas como de tipo estatal, ni el estado puede simplemente

ser equiparado con el gobierno, la ley, la burocracia, un aparato coercitivo u otra institución

política. De hecho, esta definición ubica a las contradicciones y dilemas que entraña el

discurso político en el centro del trabajo sobre el estado, ya que las afirmaciones acerca de la

voluntad general o del interés común son una característica clave del sistema estatal, que lo

distingue de la dominación política directa o de la opresión violenta. Este enfoque también

puede servir de base para la descripción de estados específicos y regímenes políticos, y para

la exploración de las condiciones en las cuales los estados surgen, evolucionan, entran en

crisis y se transforman. Esta definición inicial también resulta compatible con los diversos

enfoques analíticos sobre el estado, y con el reconocimiento de lo que Mann llama la


cristalización polimorfa del poder del estado, asociado con principios alternativos de

socialización.

ESTRUCTURA DEL ESTADO PERUANO

1.- PODER EJECUTIVO:

Es el órgano autónomo encargado de hacer cumplir y ejecutar las leyes, así también es

responsable del buen funcionamiento de los servicios públicos que la colectividad necesita

para su desarrollo y bienestar. Está conformado por: Presidente de la República, los vice

presidentes y los ministros del Estado. El presidente de la República es el jefe del Estado y

personifica a la Nación. Es elegido en sufragio directo por un periodo de cinco años.

2.- EL PODER LEGISLATIVO.

Es el órgano del Estado encargado de dictar, modificar y derogar las leyes. También tiene

atribuciones de fiscalización con respecto a las instituciones públicas y a los funcionarios que

las ejercen a través de comisiones investigadoras.

El Congreso de la República es la expresión del poder legislativo. Está integrado por cámara

única compuesta por 130 representantes, elegidos por cinco años mediante voto electoral

directo, secreto y obligatorio. Los requisitos para ser congresistas, las funciones, atribuciones

y otros están en la Constitución Art. 90 – 102.


3.- PODER JUDICIAL.

Es el poder del Estado, que tiene autonomía política, administrativa, económica, disciplinaria

e independiente en lo jurisdiccional, encargado de administrar justicia conforme a la

Constitución y a las Leyes, a las personas y las instituciones que conforman la sociedad.

Principios y derechos de la función jurisdiccional, implica que el Poder Judicial a través de

sus órganos jurisdiccionales, es el único llamado a administrar justicia en todo el territorio

nacional, con la excepción de la extensión jurisdiccional y el derecho consuetudinario.

UN EXCURSUS SOBRE EL PODER

Los teóricos del estado han debatido extensamente sobre la mejor manera de definir el poder

del estado. Estos intercambios se reflejan en encendidos debates ontológicos que revelan la

naturaleza esencialmente controvertida del poder, y en debates epistemológicos y

metodológicos sobre cómo identificar y medir el poder entendido como relación social. La

EER se centra inicialmente en el poder como capacidad más que en el poder como la

actualización de dicha capacidad. En su forma más básica, el poder es la capacidad de una

determinada fuerza para producir un evento que de lo contrario no ocurriría. Tal capacidad

es inherentemente relacional porque depende de la correspondencia recíproca entre

capacidades y vulnerabilidades - las capacidades de la fuerza causal, las vulnerabilidades de

aquel sobre el cual tal fuerza opera. En el mundo social existe al menos una doble

contingencia en el trabajo, expresada en la relación amo-esclavo, en el sentido de que cada

parte de la relación social tiene capacidades y vulnerabilidades. En la mayoría de los casos,

la cantidad y variedad de fuerzas relevantes son mucho más amplias. (Jessop, 2010).
Revisión Conceptual de Poder

Según (Dr. Raúl Cisneros González)A continuación se presenta una revisión conceptual

desarrollada en torno a la definición del Poder.

Para Thomas Hobbes (1651) el poder es la gran fuerza que permite al hombre articular

intereses integrados y comunes que se formalizan en un contrato social. Conforme a su teoría

del contrato social los miembros de una sociedad utilizan al poder como forma de existencia

del Estado y de las organizaciones, mismo que aglutina la gran fuerza o poder individual de

los que se han apegado a ese contrato para conformar una gran fuerza o poder supremo que

permita salvaguardar la paz en la sociedad, dándole al Estado el nombre simbólico del

“Leviatán”.

Conforme a John Lock (1690) el poder es una condición de creación o conformación,

permanencia y supervivencia de una forma legítima que surge de la asociación de individuos.

Para Lock, el poder se circunscribe a límites concretos donde debe privar un orden e igualdad

para los miembros, sea este el gobierno civil o cualquier tipo se agrupación que tenga por

objetivo la relación social libre o soberana. La ejecución del poder puede utilizar la fuerza

siempre que se trate de ajustar o reajustar el comportamiento de los miembros de la

asociación, entendiéndose este como gobierno civil.

En J. Rousseau (1762), el poder es un medio en la realización dentro del valor significativo

de lo social, es decir de las relaciones sociales. Siempre interpretado como resultado de una

especie de convenio o contrato social. El poder, entonces, es el instrumento que vence las
diferencias y hacer prevalecer los intereses generales sobre los individuales; es una condición

del contrato social, evitando la guerra de todos contra todos.

Friedrich Nitzsche1 (1878) aborda la cuestión del poder desde el punto de vista de los

valores y del voluntarismo entre los miembros para garantizar condiciones de agrupaciones

de individuos que están asociados para alcanzar fines concretos o determinados. Atribuye al

poder la voluntad del ser, siendo esta el motor de todos los procesos de la sociedad, por tanto,

la sociedad debe conducirse a alcanzar el poder como forma de existencia y permanencia

social, de no ser así se perdería la connotación del ser para ser simples “trabajadores dóciles”

(moral de esclavos).

Con Abraham Zaleznick5 (1980) el poder es la capacidad de controlar a los miembros de

una organización, lo que proporciona la base para la dirección de las organizaciones y el

logro de metas sociales. El poder implica dominio, sumisión y hasta imposición.

John P. Kotter (1982) define al poder como una medida del potencial que tiene una persona

como representante de la naturaleza de una organización para que sus miembros hagan lo

que deseen que hagan para ajustar su conducta a las normas y a los roles organizacionales.

DEFINICIÓN DE PODER

El poder es la: fuerza, medio, valor, imposición, derecho, capacidad, medida, acción, relación

o condición, de una organización para lograr o alcanzar las oportunidades que brinda el marco

institucional en el que se sustentan sus intereses (alcanzar metas, evitar entorpecimientos

indeseables, imponer el respeto a la autoridad, controlar las posesiones), en este sentido, el

poder puede ejercer influencia sobre los procesos para normar y regular la convivencia
conjunta entre sus miembros, de forma que se evite la desintegración de sus componentes y

se desvirtúe el sentido de la oportunidad en que se fundamenta la razón de ser de su existencia

social.

Al considera la definición anterior, hay un conjunto de aspectos relevantes que tienen que ser

puntualizados y relacionados con el entendimiento del poder:

1. Al considerar tanto la perspectiva de los teóricos clásicos como los de los representantes

de la teoría organizacional, es innegable que el poder tiene un origen racional tendiente a

lograr la existencia, coexistencia y supervivencia de las sociedades, entendiendo a éstas como

grupos organizados. Se trata de un poder que tiene su origen en la sociedad, por ello, la

perspectiva del objeto del poder debe ser visualizado como antagónico, porque por una parte

el poder debe ser valorado como positivo o propositito; bajo esta acepción, el poder permite

a la organización la interrelación de los miembros garantizando que la división del trabajo se

apegue al orden legítimo y que se aboque a la realización de los propósitos, sean vistos éstos

como fines, metas, objetivos o productos concretos; por otro lado, la valoración negativa está

relacionado con la acción del dominio, del uso de la fuerza e influencia para lograr un ajuste

en el comportamiento de sus miembros; este tipo de poder tiene por fin la protección de

intereses organizacionales o de la clase que posee el poder. La valoración negativa debe ser

considerada como la respuesta organizacional a las formas informales; es decir, los elementos

no reconocidos e ilegítimos.

2. El poder no tiene como función esencial decir no, prohibir y castigar, sino ligar a los

individuos según la espiral de la coerción, el placer o la verdad, por ello el poder puede
implicar un contra-poder. La forma de análisis del poder en sus dos valoraciones puede ser

encontrada por medio del análisis de las estructuras organizacionales.

3. El poder dentro de las organizaciones debe ser entendido como el elemento articulador,

vinculador, de enlace y represor del comportamiento humano, apegado al marco institucional

como límite estructural, con forme a ello se permite distinguir lo legítimo y lo ilegítimo en

las actitudes y comportamiento de sus miembros. (Dr. Raúl Cisneros González)


CONCLUSIONES

- El estado y el poder son fenómenos muy complejos que hasta ahora ninguna teoría puede

lograr estudiarla completamente.

- El estudio del Estado y del poder obedece a que durante los últimos siglos las sociedades

accidentales modernas han asumido el Estado como una forma de organización y unidad

política dominante.

- nuestra conducta está condicionada por lo social que se impone en forma de mandatos y de

prohibiciones.

- El estado peruano está constituido por tres poderes y son: Poder Ejecutivo, Poder

Legislativo y Poder Judicial.

-El poder no tiene como función decir NO, prohibir o castigar sin razón.

-. En el mundo social existe al menos una doble contingencia en el trabajo, expresada en la

relación amo-esclavo, en el sentido de que cada parte de la relación social tiene capacidades

y vulnerabilidades.

-El hombre vive fuera de a ciudad por organización mas no por fuerza de azar.
BIBLIOGRAFIA

-JESSOP, B. (2014). El Estado y el poder. Utopía y Praxis Latinoamericana, 19 (66), 19-35.

- (AYALA, 28/01/2009 )http://www.esap.edu.co/portal/wp-content/uploads/2017/10/2-

Teorias-del-Estado-y-del-Poder.pdf

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