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¿POR QUÉ LAS PERSONAS PIERDEN SU PERSONALIDAD

CONSCIENTE A CAUSAS DE OTRAS PERSONAS?

Para entender de qué manera las personas pierden su personalidad


consciente, me centro en la psicología social y la psicología de las masas de
Le Bon y Sigmund Freud, sabemos que el sujeto es un conjunto de
características toda ellas impuestas por el medio y la herencia de un pueblo,
pero también sabemos que las masas han desempeñado un papel muy
importante, sin embargo nunca de forma tan considerable. La acción
inconsciente de las masas, al sustituir a la actividad consciente de los individuos
representa una de las características de la época actual. Por ello estoy de
acuerdo con ambos autores al hablar específicamente de “contagio mental”
agregando que tiene relación con los lazos afectivos.
En primer lugar, la actividad de todo individuo se proyecta socialmente
hacia la formación social de la cual forma parte. Por ello se le enfatiza a un
movimiento unidireccional, al integrarse socialmente, al unir su acción a la de
otros en un sistema de relaciones sociales, el individuo recibe la esencial
influencia de esa formación social. Es decir, no se trata de un vínculo que cada
individuo establezca directamente y por separado con la sociedad. Se trata de
un vínculo mediatizado por diversos procesos, es por ello que la relación
concreta entre individuo y sociedad pasa por ciertas instancias colectivas, en
las cuales la actividad individual se transforma cualitativamente al integrarse
socialmente, también se habla de un “sistema de integración psicosocial” es
donde el individuo acentúa su identidad personal, y al mismo tiempo se hace
social; es por eso que los procesos colectivos tienen un interés específico y
propio para la psicología social y colectiva donde se observan las
modificaciones impresas a las reacciones individuales, el individuo posee una
ocupación, carácter genero de vida, etc. Pero con un fin en común eso es lo
que le hace un alma colectiva, como por ejemplo te puedes dar cuenta como
influyen los otros sobre la conducta individual. “la masa psicológica está
compuesta de todo tipo de personas, diferentes características, pero existe algo
que los enlaza unos a otros y este algo caracteriza a la masa lo que le resulta
más arduo es descubrir las causas de tal diferencia, pienso que en una multitud
se borran las adquisiciones individuales” Le Bon (1983).con respecto a lo que
dice ultimo Le Bon yo estoy de acuerdo con ello ya que pienso que en una
multitud el individuo desciende ya que siempre habrán personas que no
piensan de la misma manera pero por democracia se acoplaran y muchos
adoptaran un sentimiento de identidad y se verán influenciados por un contagio
mental.
En segundo lugar, Le Bon (1983) decía: “en las masas se adquiere un
sentimiento de potencia invisible que le permite ceder a instintos que por si se
lo había frenado forzosamente, y cederá con mayor facilidad puesto que al ser
la masa anónima y en consecuencia irresponsable desaparece por completo el
sentimiento de responsabilidad, que retiene siempre a los individuos”. Tal como
menciona Le Bon el individuo por mas observador que sea no llega a descubrir
si no una mínima parte de los móviles conscientes que les guían, ya que nuestro
actos conscientes se derivan de un substrato inconsciente formado en su mayor
parte por influencias hereditarias, así mismo en una multitud se borran las
adquisiciones individuales y es así que la personalidad va desapareciendo, se
forma primero lo inconsciente social ya que la superestructura psíquica queda
destruida, es de esta manera que se forma el carácter en los individuos
constituidos en una multitud. Según Freud dice que una masa desaparecen
todas las inhibiciones individuales, mientras que todos los instintos crueles,
brutales y destructores residuos de épocas primitivas, latentes en el individuo,
despiertan y buscan su libre satisfacción. Es así que el psicoanálisis ha
demostrado que este mismo fenómeno se da en el niño como también en el
neurótico. En cuanto a la identidad actual Freud también decía que se debía a
su vida pasada (sobre todo las primeras relaciones afectivas).la personalidad
pues no es considerada innata si no que es construida mediante las
experiencias personales más significativas, es por ello que en la edad adulta
las experiencias emocionales que hemos tenido durante la infancia a menudo
pasa desapercibida, las personas no son conscientes de ello y pueden dar un
significado a lo que hacen o a los que le pasa muy diferente o muy alejado del
que tiene realmente. Así pues el psicoanálisis se propone a estudiar en primer
lugar como el pasado (la historia emocional a partir de las relaciones) de la
persona afecta al presente, lo cual implica considerar la identidad como algo
dinámico/racional y no como una entidad fija ni tampoco consciente.se dice que
la personalidad depende en gran medida de la experiencia racional con
respecto a dos pulsiones básicas, el eros y el thanatos (la primera referida al
placer y al principio de vida, y la otra, al dolor o al principio de muerte), que
están en el centro del universo motivacional de la persona, sea está consciente
de ello o no. La definición que hizo Freud de estas pulsaciones básicas es las
siguientes: fuerzas internas, fuertemente arraigadas en la biología pero que no
se corresponden con la idea de instinto, que nos conducen a la relación con
otros y con las cosas e idead del mundo externo. Creo que la valoración de
Freud no puede ser global, ya que pone en juego diferentes formas de significar
el funcionamiento del “yo” que pueden ser contra argumentadas. Sin embargo
soy consciente de que esta teoría ha aportado algunos aspectos que se han
mostrado bastante útiles para las aproximaciones actuales al concepto de
identidad.
En tercer lugar existe un contagio mental, “se refiere a la homogenización
del pensamiento y estado emocional que una persona o más absorben por
influencias de otra u otras. No necesariamente tiene que existir persuasión o
manipulación para que surja, basta con algunos elementos (tener contacto,
apego a la tecnología, falta de valor para ser auténtico, apego a ídolos
inadecuados)” Zéfiro (2011). La vida en grupos es un fenómeno muy común,
que se agrupan por diversas razones en cada caso, estos comportamientos
contribuyen a la adaptación y a la propagación de los genes de los individuos y
de las poblaciones de las que forman parte. Así, la conducta de cada individuo
tiende a ser muy interdependiente de su vida en grupo. Es difícil conocer el
papel de la conducta individual en los procesos de toma de decisiones, en los
que hay mucha sincronización y poca latencia, como el decidir una dirección.
No todos los comportamientos colectivos de los seres humanos se pueden
explicar en función de un líder, aunque pueden existir grupos o personas que,
dentro de una colectividad, ejerzan mayor influencia que otros debido a la
amplitud de sus redes sociales, a sus conocimientos especializados o su
capacidad de vender nuevas ideas. De esta manera, el comportamiento de
unos cuantos puede explicar grandes cambios en las tendencias o
comportamientos sociales. Le Bon y Freud, despreciaban y temían a las masas,
el primero Le Bon (1985) afirmo que el individuo, por el hecho de formar parte
de una masa; “pierde su personalidad consciente”, y sus sentimientos y
acciones se gobiernan por un “alma colectiva”, también llego al extremo de
advertir que el acrecentamiento del poder de las masas podría llevar al fin de
la civilización occidental. Según Le Bon, solo los grandes hombres, los líderes
hipnotizados por una idea, eran capaces de dirigir a las masas y canalizar sus
peligrosos impulsos, que lo mismo podían conducir a actos de heroísmo que
de salvajismo. Solo el prestigio de un hombre superior poda controlar a un
conjunto de seres humanos incapaces de pensar, que habían perdido su
individualidad para así descender. Así, un líder hipnotizado por una idea,
hipnotiza a su vez a la masa. El hombre superior es esclavo de una idea, la
muchedumbre se somete a él y se contagia, y tanto líder como seguidores son
presa de un estado alterado de conciencia. Para Freud (1921) “la sugestión, el
poder de los líderes y la existencia misma de los grupos y las masas se debían
a la libido”. Freud decía que esto se debe a que existen lazos afectivos tanto
con el líder como los otros integrantes de la multitud. Si seguimos a un líder es
porque buscamos obtener su amor, como en el pasado anhelábamos el amor
de un padre y lo amábamos en la medida que hemos proyectado nuestro “ideal
del yo” en él. En pocas palabras le atribuimos las cualidades que quisiéramos
tener. Para Freud el líder representa el ideal del yo conforme a los más diversos
modelos.
En cuarto lugar el cuerpo humano es un sistema abierto y las primeras
etapas del ser vivo dependen de la interacción coordinada con sus figuras de
apego. Se dice que este intercambio es posible gracias al sistema límbico, este
sistema hace posible: la regulación límbica por la que cada individuo transmite
información que regula la fisiología (niveles hormonales, funciones
cardiovasculares, ritmo de sueño, etc.) y la resonancia límbica por lo que los
mamíferos sincronizan sus estados emocionales. Por ejemplo, un animal actúa
como cuando observa que otro lo hace ello sucede de igual forma con los seres
humanos, estas explican la imitación, la empatía y el contagio emocional.
Finalmente también existe hipnotización en el ámbito del enamoramiento,
el hipnotizador se sitúa en el lugar ideal del “yo”. Para el hipnotizado su centro
de atención será el hipnotizador, todo lo demás se borra ante él. Es así que una
relación hipnótica llega a ser un abandono total amorosa, llega a ser una
formación colectiva constituida por dos personas. Es por ello a lo que
naturalmente se le llama enamoramiento esta influencia por la hipnotización, te
enamoras inconscientemente. La hipnosis también nos revelaría fácilmente el
enigma de la constitución libidinosa de una multitud si nos es de extrañarse
también por su parte, rasgos que escapan a la explicación racional. Es como si
la persona que es tu centro de atención fuera algo místico en la cual provoca
en ti una parálisis, siendo tú un sujeto impotente sin defensa.se puede suponer
que en la hipnosis se encuentra realizada una condición aún desconocida, pero
creo que todo ello es esencial para la pureza de las actitudes libidinosas. Todo
ello fue conceptualizado por Freud en su libro Psicología de las masas, en otros
términos se refirió como identificación, es decir el punto ideal del yo, desde
donde el sujeto se verá cómo visto por el otro, situación atrapante pero
satisfactoria desde el punto de vista del amor. Se habla también de un esquema
de enamoramiento donde lo que propone es el siguiente: “el ideal del yo
fijándose en el objeto del deseo, ve al yo ideal”. De lo que trata es de amarse
uno en su yo ideal, y esto es producido por medio de la identificación, muy
aparte también de que se debe a los instintos por naturaleza, ya que son
hereditarios de la filogénesis de la libido humana. Por ejemplo, individuos que
se reúnen en torno a un mismo objeto que ocupa el lugar ideal del yo,
generándose entonces entre ellos fenómenos de identificación.
En conclusión, estoy de acuerdo con ambos autores, pienso que la masa
tiene gran influencia en el individuo, en su vida anímica y como nos obliga a
obedecer a esta tendencia “la imitación” llamado también contagio mental, todo
ello de orden hipnótico, hasta el punto de que la personalidad consciente va
desapareciendo a causa del hipnotizador y este lo manipula como esclavo a su
antojo, es así que aparece la personalidad inconsciente, la persona pierde sus
rasgos personales y pasa a convertirse en un autómana sin voluntad. También
se debe a un miedo colectivo que crece hasta adquirir inmensas proporciones
bajo la influencia de la inducción, muchas veces producido por el peligro o por
la ruptura de lazos afectivos, que garantizaban la cohesión de las masas. Ello
se puede ver en varios campos cognitivo, conductual y afectivo y como el
sistema límbico es uno de los agentes primarios en sintetizar todo aquello. Es
así también que Freud dice que las ligazones amorosas de las masas no
persiguen metas sexuales directas, si no que en principio están desviadas con
respecto a la meta, como ocurre en el enamoramiento o idealización por medio
de la hipnosis.

BIBLIOGRAFIA
 Sigmund Freud (1921), psicología de las masas y análisis del yo. Madrid:
Biblioteca Nueva.
 Le Bon (1920), Psicología de las masas. Madrid: Ediciones Morata.
 Braunstein y otros (2005), La reflexión de los conceptos de Freud en la obra
Lacan. México: siglo xxi editores, s.a. de C.V. cuarta edición.

WEBGRAFIA
 BOEREE: El Sistema nervioso emocional, psicologia online.
 ZEFIRO(2011), El contagio mental (post 130 de inteligencia emocional),zefiro
del cielo

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