Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Título del Seminario de posgrado: Memoria, trauma y escritura: de una facultad mental
a la representación de los acontecimientos límites del S. XX.
Destinatarios:
Estudiantes de la Maestría en Estudios Sociales y Culturales, graduados/as de
universidades nacionales, provinciales y privadas en el área de Comunicación Social,
Letras, Historia, Sociología, Trabajo Social, Ciencias Políticas, Psicología, Filosofía,
Antropología.
Fundamentación:
Los llamados acontecimientos radicales del siglo XX, del genocidio armenio a las
dictaduras latinoamericanas pasando por el nazismo alemán hasta llegar a los conflictos
en la ex Yugoslavia o el genocidio ruandés, dispararon en sus funciones una facultad
hasta entonces reservada a otros ámbitos: la memoria, ya no sólo como atribución de
distintas comunidades en el recuerdo de sus costumbres ancestrales, sino como función
política, de resistencia, verdad y justicia. Sin embargo, mucho antes de que el siglo XX
inaugurara una capacidad de destrucción desconocida hasta entonces, la memoria venía
siendo preocupación de diversas indagaciones filosóficas, literarias, psicológicas y
sociológicas. Volveremos sobre ellas para avanzar hacia el horror que se abrirá con lo
que la modernidad prometía como el tiempo de la paz perpetua: el S. XX.
Esta paz no se produjo y, en su lugar, fue la sangre. El “Duelo y melancolía” que Freud
teorizaba en 1915 se invirtió en la imposibilidad del duelo ante el soldado desaparecido
–y entonces su monumento–, o la ausencia de lápida donde llorar los muertos. Hay
sociedades que crecieron interrumpidas, con los puentes dinamitados entre generaciones
(Benjamin, 1936; Mundo, 2010). Unas de las formas en que han sido pensado estos
problemas es bajo la idea de trauma, lo cual posee sus virtudes como desventajas.
La primera ventaja es que trauma brinda una herramienta conceptual con la que abordar
las sociedades post-trauma: son sociedades traumadas, porque todavía portan en sí los
signos del terror recibido directamente o indirectamente. El trauma es la desaparición, el
hecho de que personas que estaban ya no estén, pero también y quizá sobre todo el
factum de que no se sepa su destino y no se cuente con la materialidad de su cuerpo para
dar sepultura y comenzar el duelo. El duelo, en tanto procesamiento de la pérdida, daría
lugar al proceso de olvido y perdón, no de los culpables de la destrucción sino de la
relación que la persona afectada, o la sociedad en su conjunto, estableció y establece
con lo que estaba que ya no está. En tanto no se inicie este proceso, mediado por la
justicia (punitiva) y la verdad (judicial) de lo sucedido, los efectos del trauma, en tanto
recuerdo de lo literalmente reprimido, seguirán volviendo como la mosca a la nariz,
bajo la forma de una repetición indiferenciada de lo sucedido.
El párrafo anterior posee sus cursivas, y por estas declinaciones pueden avizorarse
ciertos peligros de la categoría: trauma fue pensada para analizar casos individuales, no
para ser transpoladas a un marco general donde el analizante es la sociedad en su
conjunto. Se corre el riesgo, no sólo de cierta psicologización de lo social, sino de
obliterar o forcluir las mediaciones que van del consultorio a la sociedad. Sin embargo,
la categoría de trauma porta en su inmanencia cierta potencia: la de ser uno de los
conectores entre la psicología freudiana del yo y una efectiva psicología de las masas,
para más, en la herencia de Wilhelm Reich, de las masas bajo el fascismo. Al que, dirá
este último, las masas alemanas desearon, no es que fueron engañadas o no sabían qué
estaba sucediendo. Por lo cual, quizá uno de los objetivos de este seminario sea el de
explorar las intrincadas relaciones entre deseo y trauma, el trauma provocado por lo que
deseamos, o, más dilemáticamente, el deseo del trauma.
Sin embargo, las memorias sobre las sociedades traumadas post-acontecimientos
radicales fueron escritas. Tercera pregunta de esta fundamentación entonces: ¿el trauma
puede escribirse? ¿Podemos hablar desde él, con él? El problema de su representación
fue contemporáneo a los mismos sucesos: desde la conocida y sobreinterpretada frase
adorniana sobre la barbarie de escribir poesía luego de Auschwitz, hasta su defensa por
Celán. Algunos sobrevivientes del exterminio (Primo Levi, Semprun) volvieron en
silencio ¿Era el trauma, estaban traumados? Lo cierto es que, en cierto momento de su
sobre-vida, respondiendo a lo que sentían como la obligación de testimonio del
sobreviviente, tomaron la palabra, escribieron, y en ciertos casos fue la puerta de auxilio
a la interrupción de su propia (sobre)vida. Hay un hilo entre memoria, trauma y
escritura que es el de la sobrevida. Pero también al menos hay otro, que es el de cómo
hablar de “(la escritura) del desastre” (Blanchot, 2002), de la masacre. Barthes teorizó
acerca de una voix moyenne para dialogar con los textos (y por ende, decimos aquí, con
los muertos), una voz ni empática ni desafectada: LaCapra primero, White después,
retomarán esta idea para escribir sobre las voces que nos l(l)egan del horror.
octubre 2017.
Objetivos:
Contenidos:
1° encuentro: martes 6/6, 10 hs.
La memoria pre-genocida o pre-masacres: la historia como forma del Estado-Nación.
Los diferentes tipos de historia y su relación con la vida. El vitalismo como gramática
interpretativa de las disciplinas nacientes. La memoria en relación con el tiempo y el
espacio. El espacio y el tiempo como categorías y prácticas en modificación. La historia
y la memoria en relación con el yo, que también muta.
LEMKIN, Rafael (1946), “Genocidio”, American Scholar, abril, pp. 227-230, trad.
Carlos Mario Molina Arrubla.
KERSHAW, Ian, La dictadura nazi. Problemas y perspectivas de interpretación, Bs.
As. S. XXI, 2004, trad. Julio Sierra.
AGAMBEN, Giorgio, (2000), Lo que queda de Auschwitz. El archivo y el testigo.
Homo Sacer III, trad. Antonio Gimeno Cuspinera, Valencia, Pre-textos.
FREUD, Sigmund (2009 [1919]), “Lo ominoso”, Obras completas, Amorrortu, Bs. As.
REICH, Willheim (1973 [1933]), La psicología de masas del fascismo, México, CA, trad. de
Raimundo Martínez Ruiz.
DELEUZE, Gilles y Félix GUATTARI (2013), “Las máquinas deseantes”, El antiedipo.
Capitalismo y esquizofrenia, Bs. As., Paidos.
Bibliografía complementaria:
DIDI-HUBERMAN (2006), Lo que vemos, lo que nos mira, trad. Margarita Martínez,
Bs. As., Manantial.
LYOTARD, Jean-Francois (1998), “Representación, presentación, impresentable” (123-
132), Lo inhumano. Charlas sobre el tiempo, trad. Horacio Pons, Bs. As., Manantial.
NANCY, Jean-Luc, La representación prohibida. Seguido de La Shoah, un soplo, Bs.
As., Amorrortu, 2007, trad.: Margarita Martinez [La représentation interdite, en Au
fond des images, Ed. Galiée, Paris, 2003 ; La Shoah, en souffle, Ed. Galilée, Paris,
2005]
TODOROV, Zvetan (2000), Los abusos de la memoria, Barcelona, Paidos.
LEVI, Primo /1989), Los hundidos y los salvados, trad. Pilar Gómez Bedate, Barcelona,
Muchnik.
SEMPRUN, Jorge (1995), La escritura o la vida, trad. Thomas Kauf, Barcelona,
Tusquets.
WIERVIORKA, Annette (2002), L’ére du temoin, Paris, Hachette.
7° encuentro: miércoles 21/6, 10 hs.
Escritura sobre el trauma. La letra como cuerpo, el cuerpo como texto. La voz media
barthesiana, ni empática ni desafectada. La historia como texto, ¿la memoria como
textura? Literatura, historia, memoria y subjetividad. Las verdades históricas, literarias y
judiciales. Del “il n’y a pas un dehors du texte (no hay afuera del texto)” derridiano al
negacionismo. Postestructuralismo y posverdad sobre los pasados recientes.
Bibliografía complementaria:
LONGONI, Ana (2007), Traiciones. La figura del traidor en los relatos acerca de los
sobrevivientes de la represión, Bs. As., Norma.
Bibliografía:
Forma de evaluación:
Certificados:
-Se entregará certificado de asistencia a aquellos inscriptos que hayan cumplido con el
75% de la asistencia requerida para aprobar la cursada.
-Se entregará certificado de aprobación cuando los alumnos hayan cumplido con los
requisitos mencionados en el punto”Forma de evaluación”.
__________________
Firma del docente responsable