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incano csundo tende, come es habia, « consaga: en mismo momento, lo pierde “ Tos epacios en los que lust se gerce no son com partments exancosy Io sedon por longus relia no on neutrals pacts condicin, No cabe dda de que e dcsarllo de los meios de comonieacén de masa tai dhsria de a clear, han eranstormado ls gustan exstntes yyhan aera profindamnte la pespectva con la ques Contemplaron Ios objeto de gusto del pasido, Tampoco me Gabe ninguna de que no slo mismo, acecs del gusto ver un mms a taves def pantalla el endenador ques Corriendo apie ssl -yclo a pear de lo que digan fos vendedores de eniclopeias~. Hl espacio ye empe Genen mucho que vr cone gusto, afftan de modo sensible a la Colecvidad que lo ejere 2 ca uno de sus miembros Aceprndo el comin odisingigndose de lo inividuos forman pare de una general ala ques senten pert nccer, peo ene ere del gusto nada ext dado de ante ‘mano sung loparezca,y el sujeto de gst lo sen ada nance yen rec al qu poste, pues slo cc edie Esa tens se aomods alas pas de la vida comer: pep elec doy defensin, nica 4 dejan lear por lo que hay y por lo que edie, pero tél se seo scepeénola, seen lo que de maksto 1 Autonoma 1. Gauss los ha babi siempre Por gusto entiendo un sistema de preferencias indivi- dual o coletivo. La colectvidad que hace suyo el sistema puede definire a partir de crierios diversos, sociales y pli- tions, geogrificas ¥ cronolégicos, cultural, econémi- cot ete Es porible hablar de gustos de époce, pero también de gusto de una determinada clase social o de un colctiv. CConcebirel gusto como un sistema de prferencss obliga 2 pprguntare por ls criterio de las mismas y antes, por st fundamento "Tees son los aspectos que, en principio y de modo muy. somero, conviene abordar:ademés dl propio desarollo de una teoria del gusto, sus relaciones con la males que a este especto deben st tiny el uouwe Litéuive asatico en el que cal cota sutge ‘Gustor los ha habide siempre, pero no siempre el gus- toa tenido el mismo fundamenco. Me arevo a afrmar {que el fundamento del gusto ha sido, hasta el siglo xvm, ‘exrinseco y que los juicios de gusto han poseido un ca xer subsidiaio, dependiente. Asi, por ejemplo, para los clsicistas bartocos, obras de buen gusto eran las que se ajustaban a la Idea, de mal gusto las que se limitaban a ‘copiar la realidad sin mejorala. Estas mantenfan una ac- tinud servile ance la realidad, impropia de personas culeas ‘grupos sociales clevados, El rechazo de artistas dedicados ‘ala representacin de I cotidianidad, tales como los bars- bocca, las cautelas ante aquellos que, como Caravag- gio, atendian «en cxcezo» alas cualidades de la cotidiani- dad, son cestimonio de esta concepciéa'. Mejorar la naruraleza mediante la Idea es embellecera: esta belleza se convirié en eritrio de preferencias, Ia Mea era su funda~ ‘mento, Conviene destacar que el concepto de belleza ari cl los juicios ritcos, polarizindolos en torno a sa real zacién 0 su catencia, " Giova Piew Bello Le ie dpier sb ace made Roma 1672, Ei aera po a ue etl ciao de Evelina Bo- ‘may ton ioducsn de Gorann eva Tino, Gui Ela 197 ll fr pb gluon pid bl glo che sno commen mene ol clegpe fpeco conceal .) pet non exes ERG ego ce ome ello pe rf atu aga omni legen cotempsnd Sd cane). Sched rane dl Sone dm on £5 popongane als men ies asa copa ied compos fo all raters el gi er ghrando saci ae modo ‘ome lo precror gual lo dag oh r,s pare nse da ‘Sita Tae (2) La dove 8 popol ice Bo a emo dlfoc ‘hin, lod cose pine dl ars, perc 8 salto veel ee, Spprens i bli clr © non le bale forme che aon nen: fn esate, ppm a svi pes raga. ape Tope. fre atallontine dll era dlfae, pel ue corms in pops Bo dete deta i sotto Snot G2) Por pare, Carsagio, en opin de Bello, opine purament I opt come sparen i oh, es denne G2) Sue lon cbamboccsts G. Beg L. Tea y L Lawea 7 enbvcint. Pr dl vie uoins « Roa a Se, Rh ‘Up Bon 1983 spout qu In consundenia de afrmaiones de Balog ete motrads por ol cares plein gues Previa eo 9 fnedesén yen wisn conc oenrle movimento veo a sor que etl Bigunt «propio de oy sbanbocant 2% No cs ee un mug echo de lo dscns aro, endo cons Srecndemor ene Sexo sla lad Me- {nos encotanos con mache planets que Baen det seco un place depends fc s nu Gi w mene depend ind iba. de Be, po sjmplo, a kama sacri sobre a mporanci a Ene mundo cvolingo aca a angen nese sus laoba de Vitro que pn ex prime’ plan po ‘Nts des poprconsy een, Pus bes cl ste ta vane os proporonc decane she concep tes gue pov debn tle aga cnpico y mucho 2a esis bale ya pec, en el enundo medion! 3 (face connie cbs con endo profane ‘Sogo sogn ura com que poste rsutine cxpee Cette a onenacg dln wsla dela seco propo, y és andogea la corpo bran cn proprcionao)y shor bin el mplo fsa n hombe Teno co fr bro nl us deine conde Tinimagn del Cuciade unos de los debs sob I pina ya pos sue rove ed enn deus surance et ip de prble imac Alcuon, por empl, considers spe a pos psa pr pn ata agra bh PE, de Braye, Bader dBahiiue midis, Beye, De Tepe, 194 (apices Ein of eos ral edd, vk, 19512587 seine Aranda Sar O,F, Maa ‘ges cota pulent a iagen del Casha, del Hombre y Ex airs. ¢No ecu elon Pt dal fifo yd pares Aiea temp del Expins Sane? Now ela cela ula ‘a eo sooner vena columaa eRumareacum ves? Pace, stat ql lea de pets smb l Bombe pax (hams [path econo sobre ence sends de usin uta y ‘Econ laid por nin ya Bie antiguas, ha de ener sao alec, no depoads de eta sc, si, 277 5 Ti veneras los colores superfcaless nosotros, que prefrimos a esriura, penetamos havea el mas excondi- do sentido, Ta te dejar encandilar por supeticis pinta as, nosotos nos emocionamos ante la plabra divina ‘Quéate com cu imagen engaios, sin vida y sin alma, de Tas cosas, nosotros nos elevamar ala realidad de los valor es morales yreligisos. Ys tl, amante y adorador de Jimégenes, nos reprochas murmurando en’ covazbn ol Aelestarnos en figuras y zopos,sdbete que, en efecto, ex- perimentamos ot mis vivo places, saciados con la duleura fe as Feces, placer que ti no puedes sentir miranda las inigence > Thi 1,295. De Brees fee continua «Rabano Maur, en ipo ratomamizao se arc elemento pte, plat de oe ‘endo ln memoria la verdad, ccs pme!namero de The Suet, pin fndado por Richard Sac steal de ma de711 jsp Aon, qu habia con ldo a Sede darante ws cs de cidion colors scuaren ex a when» fer de algo de oes Loy ess foe Sod lo lav of ae nage paren abe olacnoe ‘ae snes de os publ come ina Dead Fond ent 30 Loe ances de Addison, de earn minentemente mo- derail como pone de mania lena eral, fortis un cam ndamenea en la fxn sabe ee pode probkins Bor price vers plana a cxsion como al pacer guerra as brs dese o> dian prods y busca para ce places tn indamenro qe a remiiaze «mbites morales, polls, hisioe, {Eval ys busaba un dbo propo neros lp Cet mst, Addnon babi de a inaginaié, pero cone, Spe o uo de maces -7 co aunt dd que mis Salant se hablar con erento aba camino para Invetgctones muy dines ans hasta shor she Wan vedo, Ls ensyon de Addin, al gal que los de tro nurs de os qu hablremosinmdiatsmente, saa don el fo de tenn dede el obo arco haa ‘apertnia cue El gut fic prom a ctgoia cet dees epee. Cond muchas vers cas eno imag tucda, sentmieno, emodén, sensclén. es dei ode {eptrgue tava hoy nos prion ba ea oat ‘lea diade un punto de vite eee, Simuleneumente, eae 4 hableal concsponcén cou baler y falda, Addison propio una dived de faces del imagination -belo subline pitreco> 3 ono de os cals balan sido wadconsmente excludes Ac la maifeaciones artes lo pincreso, por empl, tend a idenicane con la impetkerign de narra, Gos mone abla ido considera bell, pro que shor Sein ew placentern, Le Paced Son na sla ici de The Span (Oxford, Carendon Pras, 1955). De lace “Tnarisnflsencia dal lode Te Spear y de los cso de Aon, Pde ar eae sparisn aon 1734 de una mp relent Tila ct por Thecus Bich pel The Gimond Dinar Hira “ied Cel Landes, Suan, 1734-174), E744, Mak Ai bli Pare of aynaon (Landis, Deby, 1744), desobo Enver dela et de Addon, 3 ampliaban el ambito en el que el gozo esécico era posible, también articulaban ese dmbico de una manera diferente ‘dems, al esablecer una relacién directa ence la contem- plein estéicay la creacion aristica por una part, con fa maginacién, por otra, y al central relacién sobre el caréc- ter placentero dela relacin, Addison abria un tertitorioat- énomo para la exttica, el de un gusto no fundado sobre cxigencias morales, plitiss,ete., un gusto fundado sobre ‘nx naturaezaplacenters yp consecuentemente, unas criterias {que podian — deblan~ spoyarse en ese teritoio auno- ‘mo, al margen de cualquier prejuicio, Mas, al proceder de crt manera, Addison abria también un horizonte de pro- blemas, el primero de los cuales no eta irelevante en ningu- ro de sus dos extremos:cudl era la naturalea de ese places, ceadl I facultad que lo permit Que el arte y la poesia producen placer, es afirmacion {que el lector encontrard en épocas muy diversas ya desde la antigiledad. Aristtcles habla en su Poéice del placer que produce la mimes, y aclara que ello se debe 2 que mimeti- zat es una forma humana de aprender. También habla del placer que suscta la mimesis de motivos horribes, crueles, f., y en este punto fundamenta ese placer en el hecho mismo de la mimes”, pero poco después, cuando se centra * ial, Pdi b- 149 a «ay sete cayo ape rel os mc, pro nos pasa yer agen eet on a yor Be eRe aL Se So aap age okie 10 slo os isn, oo iguana os dom ange compa ‘ev ecummente. Doro, en fn, dle vend lar agen Pass ‘ale qual cntemplas,apendesydeducen qué cada com, por ‘empl, que se agua dW Gala Yen, Maid, Gedo, 1974 nda a car dela Pats hacen sein rts dai) 1s consideracn de placer qu produce ft mnt de mtivos ho- ssl y crude are un ris de ele que sl en algun momen- ‘os iba er seul, pero que avo ene Sig de hs Lacs una iden” cn I explicacién de la aged cl placer ha pasado ase gundo plan yson oxo or gor que desis (nome pe fee alecundoidentiar el placer que produce I mir 1 igor la mma de motos tril con la caarl props dls rgei). En epocae porters, el placer ed Akecminado por factors que exeapan lo propiamente esti, tclglws 9 morale, polar o sociale, Cuando Kane propongs most el desinets del juicoextico 1 Hands en ene desnrers su canker eco, enfentard fe manera rigurosamente radial todos eos plantes Kast deol en ete punto una concepcin que tiene en Hime ou expresin rue oportana Ea un ensyo de 1757, Of the Sandro ate (ha norma dept) ee te Hane aa confomilad ened oem deus ecions os Sgatoro fades el sje. Tal conformidad, Rn ements de une even ida de axe y naan, ol dno del gusto, pode place ye previa «cali julio sobre la verdad ola morlidad def as conocido. Et cellent, ecibe Hume, sempre er verdad, pero ada ce de la verdad del objeto, no eprenatalo qu real iments hay en al objeto soo su confided con dejo. Elsen ca desineesia Tcuestin del conformidad no e, en modo alguno, swe. Bl propio Tonis de Aqui conc aban en stein ala debida proporin delat cos, en exo sete: jantesa la ficalad cognoeccva, que pose ain wa de- Bids poporin, [a svedad ali shor nf ein cue dploblema dela confwridad ence, una renin Gc mire al menos una seacon de rapt la confor ‘da coniderile a as del ead lo ebiline exp por el Ped Longin después, por Bea (gues inteesé psu watdo YT te dos 1074), "Hume, Lenore dl gy yey, Baten, Penis, 198,27 Py ‘midad esablecda (y eadicionalmente aceprada sin proble- mas) ha saltado por los aires. La relaciGn sujeto-naturalera es el marco problemético cen el que se desarola la concepeién del gusto. Semejante relacién no es neutrals, se produce de forma concrets, tal, como Addison adviere con presi: los sentimientos de bello, sublime y pintoresco constituyen otras eantas modali- dades de esa relacin. En ella no se predican culidades ob- jetivas de belleza, sublimidad y pintoresquismo, no se pre- dica cualidad objetiva alguna, slo la que aparece en el modo de la relacién. Me arevo a adelantar que éstas son formas de representacién propias del gusto, 7 digo ahora sepresencacién» en atencién a varias razanes: a) no som cualidades objetiva de las cosas b) son modos propios de la sensibilidads ) som figuras (ise quiere, imigenes); d) tie~ ren canicter hisrric, Sobre la objeividad y subjerividad de estas imagenes aspecto que también ocupa a Hume se hablaré mas ade- lante, ahora slo sefialar que es posible extablecer doe nive- les motivo de lareflexién: en el primero tendré lugar (ono) la conformidad entre el objeco y las facultades, producién- dose en su caso una sensacin placentera; en el segundo, adquiere forma sal conformidad en sus diferentes modos © representaciones, bien entendido que la conformidad exige realizar en alguno de esos modes, estos son inmedistos, ‘tanto como la conformidad misma. Podemos decir que e¢ preciso analiza a qué se debe la conformidad entre los obje- tos las facutadcs, cules aon sus cecror, pero de inmesiae ‘to hay que afadir que, puesta que se produce de un modo ‘conereto ~como bellezs o sublimidad, por ejemplo, se hace necesatio abordar la nauraleea de exe modo, su carie- ter reprecentacional, pues slo en la representacin sublime, bella, o pintoresca, tiene la conformidad efecto. ‘Los ensayas de Addison que se ocupan ante todo de eos ‘modes, con ocasionaes alusiones al problema de la confor- u midad- cjerceron una considerable influencia, tanto en In- elatera como en el continence, 2 través de ls waducciones y de las exposiciones de sus seguidores. Podemos considerarlos ‘como punto de partda de una eayecrria de la eséica die- cdochesca que es posible ealificar de sempiristas aunque este ‘amino englobe posiciones muy diferentes sobre aspectos conceaor. Autores centales a 6 tendencia fueron, por lo squeal estéica se refiere, Hogarth, Burke, Hume, Bhi, etc No es adeciado decir que sguieron a Addison, pues no hi- cieron tal cost, pero s{ que se movieron en el horizonte de problemas que Addison habla definido. Caales fueron las razones desu éxito? Es indudable que lL empirismo empezaba a abrise paso tas la publicacién en 1690 de A Essay concerning human Understanding, de John Locke, reeditado en 1694, 1695, 1700 y 1706 (con una tae cluccién francesa que incoxporabs importantes variantes en 1705), de Characteristics of Men, Manners, Opinions, Times (171), del Conde Shaftesbury ~y no porque te fuera, en sentido stricto, un empirsts-, y que se afianzaba definit- vvamente con las obras de Hume, pero tampoco cabe duda de que el &ito de Addison excedié con mucho los émbitos académicos y filoséficos y parecié encontrar un terreno abonado pata sus ideas. [a nacuralea de su prosa puede ser tuna de las razones que petmiten explicar su éxito’, la difa- * Ee el némazo 10 de The Scar (123-1711) esc Addison Salas de Steatn qu a la bral del i pre brs rt by hombres yo ambicione gue edge que he nado sa loa (dle stan y de ue bine, de oe cole y Bcd pare ‘qe dacs tions, ube, nese dey es. Een sppulac ‘cis del los, ben pops del siglo 27, y nda para Comprnder el pape juga por x prensa, core ple la popular eign de sdemocratacine sha babado- del are wade dels Sener yl dobre aco Tica un cambio ene engse loro que va més all de lo neo, smn ol propio Hume sfaiad ol faa de gtbeo ea 8 si6n del empitismo, otra, pero creo que la expicacién que~ daria incompleta sino tuviésemos en cuenta las eansforma- cones que ya en estos momentos se estaban produciendo cenel mundo de la literatura y Ia artes plistias."Tansforma- cones para las que, a todas luce, resultaban insuficientes las exposcionesteirias tradicional, peo de ls que Addi- son daba cuenta con clridad més que notable. 'El desarrollo del gusto y de una teoia del gusto se ari- culé con la evolucidn del arte y Ia literacura, de la musica y cl reat, simulténcamente a las transformaciones producl- das en las costumbresy en las modas. Ente toda esta cons- telacién de fendmenos me cabe destacar aqul, por su im- portancia para la teoria del gusto y el desarrollo del ‘proyecto iustrado, el que se conace bajo la denominacién sautonoenia del arte, un acontecimiento paralelo al de la ‘auronomia del gusor. 3. Autonoma del are Desde los primeros afios del siglo asistimos a una rans formacién de las orientaciones artistas que reciben diver- sas denominaciones estilistcas, pero que, en todo caso, ofrecen tun rago comin: cl abandono de as pautasidealiza: sync y pla el camino que a dese ls sdoce a os eomver- indanente con al able dee fifi ional y de ru mado faron pinta a parr de 1775. La ie ‘Sdenes dels piotur anc alana sobre ets carta los ‘Ene de abn com sounoe mater ce muy notable en ay poco pode eine al neciacmo. 3 ble advertiren este motivo un sentido més complejo: en realidad ane as obras rocoed,y no s6la ls erties, todos somos un poco «voyeur. En La canis alade (1765-72, Paris Loutre), una de las pinaras mis mos, y més es candalosa, de Fragonard, se dene laensacion de vera eee za através del ojo de una cerradureo de wn agujero prac ado en la pared. Sin lara ests exes, los propia de esas imigenes esque han sido consrudas como a fat exce- tas fea visas por un miséa, ea muchas ocasiones, sin ue sus protagonists tengan concienca de que son obser “ads, Sempre con la sensicion de instances y temporal dla, de la mirada que sorprende un acotecimiento © dex ‘bie un objeto. La tension enze bjero mira en as natuaezas mueras de Chardin es socom de ea nueva condicgn dela pinera, que leva hasta sus Wlkimas conser encias algunos de los recursos ensayados por los pintores hholandes de génezo de siglo anterior. La aicién por ls visas, un género que adguere ahora un desarrollo como no haba tenido igual en los sigs aneriors, es otra mani= fesacin rlevane de la importancia adquirida por ee vir tual sujeo que mia, por ese mirén ficicio que ext en la base de as imagenes pctricas de ls extmpas y los dibu- jon ‘La presencia implica o explica de un voyeur no es un rage de eso un secu tenico para la represent cin de los motivos, va mis alli. La imagen se funda en un rmitén, se quite, en una mirada, No slo son agradablee Tus whey i bj, an yj y bs gras, eomplace Ja mirada que, como medio, lor ofece. La mirada, convene recordailo, de un sujto, de un mirén que no busca su complacenca sino ene aco mismo de mitaey en el mun- ado que «la mirada se remit, en lo que al mar descubre Su delete se satisface en esa acciGn 7 en tale ebjetos,n0 transeiende hacia oes dmbieox: gusta de eos, que le son propos pebximos » [Al msn, exci o viral, de muchas obras rocoob, costesponde dl gjeo de gut: al como el min perfla ‘toate (de min, em esl que shore non concer 1) on tl acd, mporane ha ol unt ae imagen adquiere ea o aul sonoma en fncién de a mst den emai senda cl gus sobre oe > que despleg las pobldade viruses de u jerciin tn eatgoras Concrete fundadst sobre la naturlers dl placer que oben, ene po de lain que con el abje- Ta mirsda encuentra en el jetccio Hteraio formas era de relate testo qu ofc en cj ae lana, fa naracén novelesa, la novela epistlan. son coe tanos procedimientor de exe ejercico. El mixén puede ver el epecador qu, stad en el saldn de in pa eGo privado, asse a ln etcenicaidn de una pies, naradoreapaz de ena en intimidad de sus héroesy Kevoins, ambien xt inimidad deaplgada en el iver Cambio piclar dein gern ranco ue ahorsencen- tr, con Lacls, peo no ado con frmulas nueva. EL guvco de ese mirdnselecciona entre lo que ve y nos Jo Siece a nosotoe, epectadores, lecotes, pars micro POET a debs ideas de Adon y la poaracén de a tefleiénextica en ol concep de gure encieatan ade cua epiacién eo la progress autonomla que lo at Seo yl esto adgulten en el siglo al. El gusto et ee fandasncava de es ausonemta, pore le proporcions wn Anniv sapecicn,tbsicoy prctio, Al andar el placer eso et d,s config un dino que esi fom, que no necesita deotos referees execs para slcanza la legiad de on explicacin, que no apel 3 Tamora ni aa relgén,campoco ala pola o ala histo: to siquicn la lidad socal (aunque en ee pun, justo et dei que te contempa slid scl de for © smacién y la educacién,y que tal formacié lo es ambi del gusto)". Eimovimieno de ls ests ya difisin y progres de as ideas oes suficientes pas explicar la nueva sition. Ao t= £5 de siglo se produce na nueva vonginizacine de a rcep- fin dele. Fendmeno fundamental en ete sentido ra Consoldacisny desollo de los slonesy del comer, que levanapaejo el naciicnt y dfs de a eca de ae Fn lo, slones se muesran al gusto del public las obras mais nobis, ye gust adqucre forma de jucio en los eos que alos slones se dedcan, ya ex en fllets especialmente ceeds al espe, ya en pllicaciones de canker pesca {que ahora daican au tenia eos aonteimiens Lahistoria de los salons se remonta 41667, fecha en que por inciativa de a Academia real de porary eseultira se caebra en Pari el primero. Cantintaron rsinindose en los afios siguientes, aunque se produjo una gran inte- "Bleue se encontrar conan i en lar anterior pais n- Senegal tear oie, itis mores 9 plicn dempecen el ae la errs No racede a lv a seeder ago deli Biew al Conta, en su segunda mitad aumenearin lar mos qe fica ane po de coenioe Logie age intents esr er ue es ‘notva reprocntador ena paar, oedema lt ps pore fn alr eco que scp pic sora ~aungse oe icine ‘yun lor edo gue elon que lor cds pucksn—y deb set Wtepladsy gue poses rar come abeor de ontenplacn "Sob sista de los sles, Abani, Ze Sloe Car Pai ious ds Maas Nason, 1931. Un ana far eee Salons eel de Uap ran de Sa, ve Salon de Acaémic de 175941781 en Die it de Boner t Dad Lr Sins 1759- 178, ar, Eons dea Rénion dex Maes nations, 1584, Pars inp eusfoomcions dal pio en el are ancl, Thomas E Crom, ‘Paired Puc Lift Eighenh-Cenuy Par, New Haven sad London, Yale Univesity ros, 1985 lead pata: Madd, Neve, 1889). Soe eet e nt tsloner ses de Diet, Hone Zan jews, eLaeigue det Salons en Face mane Darcy Gert ae Sen ir jo spr 197, a retard lor arus come lo ints ern oficalmente invades Seine een ima mreauc mire aaeri seit ert Seine meee ‘minors yo gue de manera is cls dfanden Saag a sélo porque desrolla un glaeto lero central al mov teat del are a pare dl siglo Sv, tmbién porque sve nla clic de pregunta ors obras mejor alias tis logs, polarons uc macren vee jo de ju Jon orl modo, aco o descr enue tin fx Tada Las aeciacones generals que hasta shor hablan scr para fundamen cl presto de algunos arta, Celen po uae is Steno de as bas yo a ata la argumentacion, La accion de todo a Ker nano pnts eau dele vemascntls de dex Hl impli, expla o inpictment, una teflon sobre lenguaje En este mateo, ls diferencias ene la poe ya pin- tarts contemplan como difrenciasente el lengiaje de Ia posta y del pintrs, rina de lo pics al ws y hse pats ua ction yuna lnerpetacion de las obras conc tas que va mucho me all de los limites exableidos por Is pobicat asicias El Lancome (1768) de Lessing te cone en pea fndannental de era aatoconcienc tn feimeno qu leans peso desrallo en eo- Hucign del ase ya reflein seca To largo del siglo 1 El lengunje dea pitas Randa sobre fs condicon {cleo yao en el eujto encuentra apoyo parts cer ‘deneifescin de pint y I oc ha produc una pec oc eapar devs oe moe stan a pss po ‘uci a mania desea, en I piace el pact por ls loge ngs hs qucido bce de ota una patra puns sn saber Exicanencla que paste yo que dae pinay whe quo cer de Ue pins une psa muda sia aber seianado ane sobre en que ‘mala ee are capar de expres conepos gents sia spartae ‘Seay isin yu dasa propio, yea contre en us form de ‘xbirabieatay fra Lasting en el Prclogo del Laem Bei, ‘Chin Fadi Van 1765 dn eptolay Madd, Ea. Nc tal, 1977, 39; enduocn de Fstgui Basa). Sobre el pen os {5 por Ling, RenmcnerW. Le, Ui pun pot. Ls te baa de pnt, Medi, Cede, 1982, “ teza y legtimidad para su operacién. Se abre asf un pro- caso en el que la verosimilirad de la epresemtaci6n afecta ala capacidad de aprehender y representar el mundo eal ‘como es, tal como para un sujeto es. La condicién de eal Ssujeto se converte en un arunto fundamental para la ex- plicacién del gusto, cambién para la natucalera del len- sual. [La auronomla ardstica que se manifiesta paulatinamence cen el desarollo de los estils, la evolucién de la ideas y el Ambito de su difusién y critica es rasgo central del que se hha venido denominando «proyecto de la modernidads'* y remite directamente a la configuracién de un sujero ausé- rnomo que tine en el gusto uno de sus rasgos centales. Un gusto, ahora, autofundado, mediador él mismo de la rela- rién con el mundo, y no mediado por crterios externos {que den cuenta de sus preferencas, ‘a afirmaciéa de un gusto autofundado condujo los autores diceiochescos a preguntarse tanto pot I efacultad> gue lo permitia, cuanto por los mods en los que concre- tamente se realizaba. Si hasta ahora estos dos problemas hhabian ocupado un lugar secundario en el panorama de interes de la reflexién flosdfica, ahora pasaban a oto ‘central, pues el ejercicio del gusto no podia depender ni de Ia rzz6n ni de los sentdos, con los que, sin embargo, ‘mantenfa una estrecha relacién, y sus modalidades concre- ‘as no podlan limitarse por los prejuicios tradicionales. De cxte modo, un gusto autofundado obligé a investigar so bre la naruralera de un sujeto aucénomo, asunto que ini- cialmente se abordé desde una perspectiva que calificaia- mos de picologis “Jangn Habermas, Der Plepbske Dit dr Moderne, Fa ‘arta Mala Sulla Valug 1985 (oad cpl H dcr fle fos dele madirided, nd, Tass, 1989, “ Adklison, Burke o Hume, pero también Hucheson y Hogarth, par imiarme acing figuras Fundamentals de Jn stein dl sgl 7m, indagaron sobre el sujet aude tomo proguatndose por el cmaportamieno picldyico delindvidu, la naturale picologica del gusto ~un sen. fimiento, una emocidn, ana ides. y de facltad witnaginaci6n, seni interno. Las diftcultades alas aq ae enfrencaron ~xpicsamente en muchas ocasions, itplceamenes en oua-satan ala visa en cuanto inca sce mi leer, son las difcolades que saan als luz eh Canto se contaponen ls exigenciar del gusto con ls lie ttiaciones dl ubjecvismes ebmo conclara individu Tidsd del gurro con su pretension de univeraidad, su venta) subjeivided con la atmaciin de un jai ln predicacin de las cuaidads ein dels cons els, Pircorescas sublimes. con la predcacion de cuaidades Ubjvas de las misma? Buen parte del debate eno de siglo © cenré en fa adaracion de estos problemas, po, ademas, ene seno de se debate se prio con nota: Preprecisién ia concepcién del gusto que todavia hoy rntenemos. Eset a tan porque volvemes bred Y también la ran por la que debertos hace in daimo Tier alguno 6

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