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I. DEFINICIONES:
Tipo Biológico: Está relacionada con las respuestas del organismo al medio. Por
ejemplo: Un individuo pasa del medio oscuro de un cine al medio intensamente
iluminado de la calle. Sus pupilas en el acto se contraen para defender las delicadas
estructuras de la visión contra el exceso de luz. He ahí un tipo de ajuste biológico.
Nuestros ojos disponen de un mecanismo de defensa que funciona automáticamente,
sin intervención de la conciencia ni de la voluntad.
Tipo Social: Tiene que ver en como el hombre se ajusta y reacciona respecto a su medio
social. Por ejemplo un estudiante que recibe malas notas en el primer semestre del
curso. Se encuentra en una situación problemática; pero entonces, aplicándose al
estudio con renovado brillo, recupera el terreno perdido y sale airoso en las pruebas de
fin de curso. Se ha ajustado bien. Pero si en vez de enfrentarse cara a cara con la
realidad y reconocer sus propios errores y su falta de aplicación, el estudiante puede
disimular ante los demás su fracaso diciendo que “El profesor se la ha agarrado
conmigo’’. Puede engañar a sus padres con esta mentira, e inclusive no es difícil que
termine creyendo el mismo sinceramente en una antipatía que solo existe en su
imaginación. He ahí un tipo de ajuste desacertado o falso ajuste.
Cuando nuestros órganos funcionan bien, no los sentimos. Nadie siente el estómago o
el hígado, a no ser que los tenga enfermos. Lo mismo ocurre en nuestra vida
psicológica. Cuando nuestros procesos de ajuste al medio social se desarrollan fácil y
felizmente, casi ni nos damos cuenta de ellos. Pero si esos mecanismos psicológicos no
funcionan bien, el individuo se encuentra sometido a una tención muy fuerte, está
desajustado. Al psicólogo le interesa los signos que acompañan a esos estados de
desajuste, como al médico le interesan los síntomas que presentan las diversas
enfermedades.
Es decir son recursos inconscientes que utilizan las personas para hacer frente a
situaciones más o menos difíciles de frustraciones, ansiedad, miedo, inseguridad, etc.
Con el objetivo de que dichas situaciones no les hagan daño. La mayoría de las veces
estos mecanismos de defensa son un medio con el que la persona se engaña a sí misma,
y para protegerse recurre inconscientemente a tácticas mentales para falsificar y
distorsionar experiencias e ideas amenazantes. Cuando una persona se encuentra ante
una situación de estrés, miedo, angustia, etc., lo más usual es que erija ante sí un
escudo, un mecanismo de defensa para protegerse de dicha situación, aumentando su
sensación de seguridad, efectividad o utilidad.
3. Ajustes por retirada. Consiste en huir de las situaciones difíciles. Ante la impotencia
para resolver el problema, se opta por ser ignorado, fingir demencia. Cuando se sienten
incapaces de adaptarse al grupo, lo que sucede con los introvertidos o los tímidos,
suelen recurrir a este mecanismo. Un alumno supone continuamente la preparación de
un examen difícil; trata de olvidar que dejó materias pendientes en el semestre
anterior, porque le obligaría a enfrentarse a la preparación del nuevo examen, o quizá a
los problemas con sus padres si se enteran. Por supuesto que esa retirada sólo trae
consecuencia: la ansiedad presente y mayores problemas cuando, aunque no lo quiera,
lo enfrenten con el problema.
4. Ajustes por fantasía. Es una de las formas más fáciles de substituir la realidad
desagradable. El sujeto se encuentra en el reino de la fantasía un escape para sus
sentimientos de inseguridad e insuficiencia. En sus sueños o ensueños, conquista con
gran facilidad la aprobación social que tanto desea, obtiene éxitos y dinero que la
realidad le niega. Una de las formas más comunes es la del héroe conquistador que
quizá vio en el cine o le cayó de una novela.
Pero hay el reverso: es el héroe del mártir. El del individuo que se pinta (en su
imaginación) como la víctima inocente de la maldad humana. El niño o el joven, que se
venga de sus padres o compañeros, imaginándose fugitivo o víctima de un accidente.
Goza en secreto con el remordimiento y congojas de los responsables por crueldad, de
su dolorosa desgracia.
Soñar y hacer catillos en el aire es cosa común en personas normales, siempre que se
hagan en forma moderna. En un proceso del equilibrio para plantear
imaginativamente éxitos futuros.
Sublimación: El impulso es canalizado a una nueva y más aceptable salida. Se dice que
una pulsión se sublima en la medida en que es derivada a un nuevo fin, no sexual, y
apunta hacia objetos socialmente valorados, principalmente la actividad artística y la
investigación intelectual. Ejemplo: el deseo de un niño de exhibirse puede sublimarse
en una carrera vocacional por el teatro.
En realidad la niñez es una época mucho más aciaga que la madurez, llena de muchas
más frustraciones imprevisibles e inevitables. Esto se debe a la falta de capacidad del
niño para resolver problemas, inmadurez y otros. No es de sorprender entonces que
entre los ajustes de la niñez estén comprendidos muchos mecanismos para hacer
frente a los distintos aspectos del fracaso.
* Mecanismos de Retirada: Se da cuando la ruta del niño hacia el fin es obstruida por
obstáculos indestructibles. Estos obstáculos producen que el niño no logre su fin, lo
cual llevaría lo una frustración. Para evitar, apaciguar o escapar de estas frustraciones,
el niño reacciona utilizando diversos mecanismos de ajuste:
Son reacciones o mecanismos de ajuste que naturalmente usa el niño para afrontar el
fracaso pero que en determinadas ocasiones son usadas por adultos para disimilar su
fracaso y evitar frustraciones.
-Mecanismo de Poliana: Consiste en ver tan solo el aspecto agradable de las cosas.
Constituye el clásico “No admitiré que me siento desesperanzado ni imposibilitado. Por
el contrario, seré feliz. Cada día y en todos sentidos me siento mejor y mejor. Al
comienzo esto puede parecer una buena manera de levantar ánimos y mejorar la
autoestima pero a la larga esto puede originar conductas de mediocridad. Es más
muchos terapeutas inexpertos aconsejan a la gente frustrada “si no puedes tener lo que
deseas, quiere lo que tienes”.
V. EL BUEN AJUSTE:
Sin embargo los ajustes a motivos más sutilmente psicológicos no son tan fáciles de
juzgar. Esto se debe a las consecuencias que estos traen al momento de ejecutarse. Por
tal razón hay una serie de aspectos que se deben tener en cuenta al momento de juzgar
un ajuste:
* La satisfacción ilimitada de un impulso puede entorpecer la realización de otras
finalidades. En otras palabras, los buenos ajustes tienden a satisfacer todos los motivos
de una persona, considerados como sistema integral.
* La persona bien ajustada fracasa al menos con tanta frecuencia y tal vez con mayor
frecuencia como la mal ajustada ya que son mayores sus empeños. Esta persona bien
ajustada acepta el hecho del fracaso y está mucho más interesa en corregirlos y
aprender de ellos que en atribuirse la culpa.
Ahora bien, ¿Cómo puede mejorar la calidad de sus ajustes una persona que no está
muy segura de sí misma? Los psicólogos y psiquiatras están de acuerdo en las
siguientes reglas generales de existencia efectiva:
* Mantener buena salud física: Como los ajustes involucran a la persona por entero, la
persona que quiera mejorar sus propios ajustes debe visitar a un médico. Como se ha
demostrado, ciertos defectos en la personalidad son debidos a deficiencias orgánicas.
Es más, las preocupaciones por el dolor o malestar pueden llevar a tomar malos
ajustes.
* Hacer labores que satisfagan: Una de las mayores fuerzas de equilibrio de la
personalidad es el sentimiento de satisfacción y plenitud que se deriva de una exitosa
tarea importante.
* Planear y hacer algo acerca de cada problema: esto tiene que ver sobre todo con que
ser dinámico en la toma de decisiones ayuda a serlo también al momento de realizar
los ajustes, es decir si se da el fracaso con determinado ajuste, la persona tendrá
capacidad para enfrentar el problema con otros tipo de ajuste.
* Ser objetivo: La persona objetiva abre los ojos ante los hechos, es decir los analiza en
lugar de dejarse cegar por sus deseos. En consecuencia es capaz de lograr una
satisfacción en concordancia con sus motivos.
1. Frustración y conflicto:
la conducta de esta persona está determinada en parte por sus motivos, inclinaciones,
necesidades, por una parte, y por la otra por los estímulos del medio ambiente. Cuando
hay adaptación entre sujeto y medio ambiente, la persona vive armónicamente, si su
adaptación es parcial, tendrá conflictos y reflejara esos conflictos por ciertas
perturbaciones de su comportamiento. Si su desadaptación es muy marcada, su
conducta será anormal. Sin embargo, algunas personas pueden estar desacuerdo con
su medio y tener una conducta normal.
La adaptación del ser humano es complicada porque sus necesidades y motivos son
muy complejos, más en la vida moderna de una ciudad.
ELEMENTOS DE LA ANORMALIDAD
a) Sufrimiento
b) Inadaptación
c) Irracionalidad
Decimos entonces que esa persona experimenta una frustración, porque las
dificultades bloquean la satisfacción.
a) Negativas: la agresividad hacia el estímulo frustrado (la puerta cerrada), hacia las
personas que lo causaron o hacia si mismo. Empobrecimiento de las respuestas y hasta
bloqueos de la conducta: En el niño acostumbrado a las recompensas, cuando no las
recibe, no hará esfuerzo para portarse bien o estudiar.
La ansiedad ante el conflicto de motivos por no saber qué decisión tomar. Puede llegar
a producir una neurosis como en el caso del perro al no saber distinguir el estímulo
círculo-elipse.
VII. CASO:
* La segunda manera: el alumno lo toma de la peor manera hasta tal punto que no
quiere saber nada del cuso y agarrarle una enorme antipatía y de sentirse inútil y
totalmente frustrado, hasta sentirse estresado además de marcarlo de por vida esto
ocurre debido a que su yo ideal es totalmente diferente al yo percibido. Al ver esto
decimos que ha habido un mal juste emocional.
* La tercera forma: el alumno lo toma con serenidad y calma observa sus errores y en
qué puntos corregir estos y pone empeño en hacer las cosas bien en busca de alcanzar
su yo ideal , entonces empieza a mejorar sus debilidades , recupera el terreno perdido y
al final sale airoso de las pruebas de fin de curso .podemos decir que la persona se ha
ajustado bien y va a estar en armonía con el mismo ya que su yo ideal y su yo percibido
va a ser lo más igual posible generando en este un estado de elevada autoestima y
mayor aceptación, entonces podemos decir que hay un buen ajuste de la persona con
su medio.
VIII. BIBLIOGRAFÍA
* José Rafael Prada R.; Terapia a su alcance: Psicología y profesiones, página 105.
Conclusiones
Gracias, a este tema pudimos comprender lo que es la frustración y los conflictos, este
tema
esto nos sirvió para entender estos problemas y encontrar una solución creativa.
Para finalizar podemos decir que los desajustes emocionales, son temas importantes
que se deben