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Mis Obras: India Antigua Bhagavad Gita Bhartrihari Vida del Buda
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Dicto clases presenciales
LAS RELIGIONES DE LA INDIA o via Skype sobre
“Historia de las Religiones
No pretendo aquí más que esbozar a grandes rasgos las grandes religiones nativas de la India, tema infinitamente
y Filosofías de la India”
rico que una entera biblioteca no lograría agotar. La religión védica es objeto de un tratamiento mucho más
detallado en páginas subsiguientes. La renovación espiritual y mística de las Upanishads que, junto con la anterior, como se
es una de las raíces del Hinduismo no figura aquí sino en la página correspondiente. El destino de las tres grandes explica en este enlace
religiones estuvo ligado, en gran medida, a su respeto o crítica de los valores tradicionales. El Hinduismo fue
considerado ortodoxo y, a pesar de un desarrollo lento y de un eclipse parcial por el Budismo, terminó por
predominar aunque sin traspasar las fronteras de la India. El respeto de la mayor parte de esos valores por el
Jainismo aseguró su supervivencia, pero por los rigores y exigencias impuestos a sus fieles permaneció minoritario Para aquellos que planeen
aunque influyente. Más heterodoxo, el Budismo después de un gran éxito inicial comenzó poco a poco a perder viajar a la India y para
terreno hasta terminar por desaparecer del suelo indio no sin antes haberse expandido por una buena parte de Asia, todos los interesados dicto
gracias a su mayor universalidad. clases sobre el arte y
arquitectura de la India.
Más información en este
A. Religión Védica o Vedismo enlace.
1) El Nombre
Deriva de Veda, título aplicado a un conjunto de tres o cuatro textos sagrados, los más antiguos de la India, que
contienen lo esencial de esta religión. El término sánscrito veda significa “saber” o “conocimiento”, entendiéndose
sobre todo el conocimiento verdadero, sagrado o ritual.
2) Los Antecedentes
El Vedismo hunde sus raíces en la primitivas creencias indoeuropeas teniendo algunos puntos de contacto con las
de griegos, latinos, eslavos y germanos. Sin embargo, sus conexiones más estrechas son con las de los antiguos
iranios como lo revela la lectura comparativa del Avesta, el texto más sagrado de estos últimos. El Vedismo era la
religión de los indoarios, pueblos de origen indoeuropeo, que habrían arribado a la India en sucesivas oleadas desde
comienzos del segundo milenio aC.
3) Los Dioses
Divididos en celestes, aéreos y terrestres, algunos encarnan los elementos y fuerzas de la naturaleza tales como el
fuego, el viento, la lluvia, las tormentas, el sol, el cielo y la tierra, pero otros simbolizan el orden del universo, la
verdad y el respeto de los contratos. Indra, el líder del panteón, representa el espíritu guerrero, y el Soma es la
personificación de la bebida euforizante empleada en ciertos rituales. Varios de estos dioses asumen funciones
creadoras, pero en los estratos más antiguos de esta religión no hay un demiurgo único. Sólo en el tardío libro X del
Rig Veda se encuentran himnos especulativos sobre el origen del cosmos y su posible hacedor.
Una posición especial es la de Yama, el primer hombre y el primer muerto, quien rige el mundo de los ancestros o
“padres”, ubicado en el cielo más alto. Llamado usualmente rey, su estatus es muy cercano al de un dios. Una La Civilización de
cohorte de seres semidivinos, sabios y sacerdotes míticos dotados de poderes sobrenaturales acompaña a los dioses
quienes, a veces, actúan como intermediarios entre estos últimos y los hombres. A los dioses asociados con el día se la India Antigua
oponen los asuras asociados con la noche, casi tan poderosos como ellos, y una multitud de demonios inferiores,
algunos de los cuales poseen cuerpos monstruosos y hábitos repugnantes.
4) El Ritual
• la base del ritual era el sacrificio, una suerte de contrato en el que a cambio de ofrendas a los dioses se esperaba
obtener beneficios concretos en este mundo: hijos, salud, ganado, posesiones, protección contra enfermedades y
enemigos.
• los sacrificios más elaborados eran los públicos costeados por el beneficiario. Realizados a cielo abierto, sus
elementos centrales eran un simple altar y una o más hogueras ya que no había templos ni imágenes. Era oficiado
por varias clases de sacerdotes (el brahmán y sus dependientes) y se acompañaba de ofrendas al fuego (leche,
manteca clarificada, aceite, tortas de arroz), canto de himnos y recitación de plegarias y mantras. En ciertas
ocasiones, para celebrar el culto del Soma, se realizaban libaciones a los dioses con el jugo de esta planta siendo el
resto consumido por los sacerdotes y el oferente. Otros sacrificios marcaban el ciclo anual celebrando la aparición
de la luna llena y de la nueva y el cambio de las estaciones del año. A veces, se realizaban sacrificios animales,
generalmente el de una cabra. Mucho más raramente el sacrificio de un caballo (aśvamedha) para simbolizar el
generalmente el de una cabra. Mucho más raramente el sacrificio de un caballo (aśvamedha) para simbolizar el
poder del rey y demarcar su territorio.
• los sacrificios domésticos o privados eran realizados en el hogar en beneficio del dueño de casa y de su familia.
Aparte de las simples ofrendas cotidianas ejecutadas por él mismo, otros ritos más importantes, dirigidos por un
sacerdote, marcaban las etapas cruciales de la vida: nacimiento, pubertad, matrimonio, muerte.
5) Los Textos
Como el Vedismo prosperó antes de la aparición de la escritura en la India, los “textos” disponibles hoy no existían
en un principio como tales. Estos son, en cambio, el producto de siglos de transmisión oral ininterrumpida. Se
dividen en dos grupos: Vedas y Brahmanas. El más importante y antiguo es el Rig Veda compuesto por algo más de
mil himnos en honor de los dioses. Le sigue el Yajur Veda conteniendo plegarias y fórmulas para ser pronunciadas
en cada etapa del ritual. El Sama Veda incluye estrofas y porciones de himnos del Rig Veda, modificados con el fin
de ser cantados durante rituales especiales en un estilo florido. El Atharva Veda se diferencia de los otros Vedas por
no estar directamente relacionado con el ritual, por ser más tardío y por no haber gozado de la misma reverencia que
los otros Vedas. Contiene, sobre todo, fórmulas propiciatorias y expiatorias y conjuros para contrarrestar maleficios
y combatir enfermedades y demonios. Los Brahmanas son comentarios en prosa, anexos a los Vedas, obsesionados
por las particularidades del ritual que incluyen ocasionales mitos breves para justificarlas.
B. Budismo
1) El Nombre
Proviene de la palabra sánscrita buddha, “el que ha despertado”, epíteto dado a su fundador una vez alcanzada la
Iluminación. El término español, a diferencia de lo que sucede en otras lenguas occidentales, no respeta la fonética
del original.
2) El Fundador
Fue Siddhartha Gautama, apodado Sakyamuni, Tathagata y Buddha. Sakyamuni (śākyamuni) significa “el sabio
de los Sakyas” por ser originario de una pequeña república del noreste de la India y del Nepal meridional gobernada
por el clan Sakya. Tathagata (tathāgata) que significa literalmente “así venido”, aludiendo quizás a los budas que
lo habían precedido en el pasado, era el término utilizado por el Buda para referirse así mismo. La cronología
tradicional afirma que Buda vivió entre 560480 aC., pero hoy se cree que habría nacido más tarde, a principios del
siglo V aC. Si bien se trata indudablemente de un personaje histórico, las únicas fuentes para su biografía son las
propias escrituras budistas. La mayor parte de su existencia transcurrió y su prédica se desarrolló en el actual Bihar,
estado que puede considerarse como la cuna del Budismo y cuyo nombre (derivado de vihāra) recuerda la profusión
de monasterios en la región.
3) La Doctrina
• el Budismo niega que haya una esencia perdurable, un espíritu o alma individual (anātman), una diferencia
radical con el Hinduismo. Acepta, sin embargo, la transmigración, precisando que lo que “muere” y “renace” no es
el alma sino un grupo de principios psicofísicos transitorios conocidos como los cinco agregados o skandhas:
forma, es decir el cuerpo físico; sensación; percepción; formaciones mentales, o sea construcciones respecto al Vida del Buda
mundo exterior; y conciencia. Los agregados están sujetos a aparición, duración, cambio y desaparición y son, por
lo tanto, transitorios.
• el mecanismo llamado de originación dependiente (pratītyasamutpāda) explica el surgimiento de los cinco
agregados en el curso de tres vidas sucesivas. En la vida pasada la ignorancia (1) es la raíz de las formaciones
mentales o creaciones sin correspondencia con la realidad (2) causantes del renacer. Así pasamos a la vida presente
cuya primera manifestación es la conciencia (3), seguida de mente y cuerpo (4), órganos de los sentidos (5),
percepción (6), sensación (7), deseo (8), apego a la existencia (9) y devenir (10) que condiciona, en la vida futura,
nacimiento (11) seguido de vejez y muerte (12).
• las “cuatro nobles verdades” predicadas por Buda en su primer sermón en Sarnath identifican la “enfermedad” de
la condición humana:
✤ Todo es sufrimiento (diagnóstico).
✤ El origen del sufrimiento es la avidez (etiología).
✤ El sufrimiento puede extinguirse (pronóstico).
✤ El óctuple sendero es la vía para la extinción del sufrimiento (tratamiento).
El sufrimiento (duḥkha) al que alude Buda no sólo es el dolor físico y moral causado por la fragilidad de la vida,
sujeta a enfermedad, vejez y muerte, sino también un malestar profundo, una insatisfacción ante la impermanencia
de todas las cosas.
• el óctuple sendero conduce a la extinción de las pasiones y, consecuentemente, a la de los cinco agregados para
alcanzar un estado inefable, más allá del tiempo y del espacio, llamado nirvana. El nirvana es como el apagarse de
una llama cuando se agota su combustible, cesando definitivamente el renacer y deteniéndose la rueda de las
transmigraciones. El nirvana sólo puede ser definido negativamente y su naturaleza ontológica es vaga pues el
Buda nunca quiso explayarse al respecto.
4) La Conducta
El sufrimiento puede eliminarse con la sabiduría, es decir disipando la ignorancia, la causa primera de la avidez. El
camino a la sabiduría y al nirvana es la “Vía Media”, intermedia entre el ascetismo y el hedonismo, constituida por
el óctuple sendero:
✤ visión correcta para obtener una clara comprensión de las enseñanzas de Buda.
✤ resolución correcta para poner en práctica el credo budista.
✤ habla correcta evitando la mentira, el insulto y la difamación.
✤ acción correcta absteniéndose de robar, matar o de conducta sexual impropia.
✤ acción correcta absteniéndose de robar, matar o de conducta sexual impropia.
✤ subsistencia correcta dedicándose a ocupaciones acordes con la moral budista.
✤ esfuerzo correcto esmerándose en obtener buenos estados mentales (amabilidad, desapego, lucidez)
y descartando los nocivos (avaricia, odio, autoengaño).
✤ atención correcta vigilando el estado del cuerpo y de la mente, pero cobrando conciencia de su
transitoriedad.
✤ concentración correcta ejercitando la meditación con el fin de lograr la sabiduría.
5) Los Tres Vehículos
Theravada o Hinayana
Es la forma de Budismo predominante en Sri Lanka y el sudeste asiático (Myanmar, Tailandia, Laos y Camboya).
Theravada es una palabra de la lengua pali que significa “La Vía de los Antiguos” pues, según sus seguidores,
ellos se atienen a las enseñanzas originales del buda histórico transmitidas por los antiguos maestros. Antes de su
arraigo en Sri Lanka era conocida como Sthaviravada, la versión sánscrita del mismo nombre.
Para alcanzar la liberación uno debe haber renunciado a la sociedad y haber sido ordenado monje, pero a pesar de
formar parte de una comunidad monacal el camino a la salvación es individual. De ahí, el nombre peyorativo
otorgado a esta escuela por sur rivales: Hinayana o “Pequeño Vehículo”. El ideal del Theravada es devenir un
arhat (“un merecedor”) para poder, después de la muerte, alcanzar el nirvana. Para ello, se requiere un proceso de
perfeccionamiento progresivo, durante innumerables vidas, guiado por las enseñanzas de Buda.
El Theravada cree que existieron otros budas en el pasado y que otro buda surgirá en el futuro (Maitreya), pero la
mayor atención y reverencia es para el Buda histórico. Rechaza, sin embargo, la profusión de budas y
bodhisattvas del Mahayana.
Esta forma de Budismo se implantó tempranamente en Sri Lanka, alrededor del siglo III aC., donde prosperó de
manera ininterrumpida hasta la actualidad, sin una mayor evolución doctrinaria o filosófica. Sus escrituras
conforman el Canon Pali.
Mahayana
Es la forma de Budismo imperante hoy en China, Corea y Japón y, en el pasado, fue popular también en Asia
Central. Un tiempo después de la desaparición de Buda surgieron un buen número de escuelas que manifestaban
ciertas diferencias doctrinarias en algunos casos y que en otros discrepaban sobre las regulaciones monásticas. Si
bien muchas de estas disputas eran menores, con el paso de los años se fueron afianzando algunos grupos que
preconizaban una interpretación más amplia y menos conservadora de las enseñanzas de Buda hasta que en el
primer siglo dC., la división se hizo más profunda con la emergencia del Mahayana.
Mahayana o “Gran Vehículo” era el nombre dado por sus seguidores a esta nueva interpretación del Budismo
pues consideraban que era más accesible y abarcadora que la del Theravada al cual llamaban Hinayana o
“Pequeño Vehículo”. El ideal de esta nueva vía era el del bodhisattva, un ser provisto con las cualidades de un
Buda que posterga indefinidamente su propio nirvana por compasión a los hombres, transmitiéndoles parte de su
mérito para ayudarlos a progresar en el camino a la salvación. Por otra parte, el buda histórico pierde en parte su
dimensión estrictamente humana pues es considerado la encarnación de un buda numinoso o primordial (ādi
buddha). Buda es, ahora, uno de varios budas terrestres o manuṣibuddhas, algunos de los cuales lo han
precedido y uno está por venir. Existen, además, budas celestiales que habitan en paraísos situados en los puntos
cardinales (dhyānibuddhas).
Vajrayana
Vajrayana es el “Vehículo del Diamante” o Vehículo del Rayo”. Llamado también Budismo Tántrico, emergió en
el norte de la India, de donde se propagó, en torno al siglo VII, al Tibet y más tarde a Mongolia y Asia Central.
Su origen acompaña a la eclosión dentro del Hinduismo de una forma de culto esotérica, en la cual divinidades
femeninas jugaban un rol central, conocida como tantrismo. En cierta medida, el Vajrayana es una síntesis entre
el Mahayana y el Tantrismo hindú al cual se agregaron elementos extraños no budistas, particularmente en el
Tibet donde asimiló creencias de la religión local, llamada Bon. Sus enseñanzas son esotéricas y prácticas
aspirando mediante el yoga y un ritual teñido de magia a resultados inmediatos. Las fórmulas auditivas y visuales
juegan un rol esencial en el ritual en la forma de mantras y maṇḍalas, siendo estos últimos pinturas circulares
figurando simbólicamente al universo. En el Budismo Tántrico los budas y bodhisattvas, paradigmas de
compasión, tienen una contrapartida femenina, símbolo del vacío y de la sabiduría, con la que se unen
sexualmente en pos de una síntesis.
6) Las Escrituras
Las escrituras canónicas del Budismo se preservan en pali, una lengua indoaria media que fuera otrora popular en
el norte de la India y que, luego, devino la lengua litúrgica y de comunicación del Budismo Hinayana. El Canon Pali
recibe el nombre de Tipitaka (“Tres Cestas”) por dividirse en tres grandes partes: Vinaya sobre disciplina monástica,
Sutta sobre la doctrina budista, conteniendo los discursos atribuidos al Buda y a sus discípulos, Abhidhamma
albergando las especulaciones filosóficas. El Sutta Pitaka incluye, además, una quincena de obras autónomas entre
las que se encuentran: el Dhammapada, una síntesis magistral de las ideas budistas; el Suttanipata, poemas sobre
ética y sociedad; Theragatha y Therigatha, experiencias personales de monjes y monjas respectivamente; Jataka,
narraciones de las vidas anteriores de Buda.
El Budismo Mahayana acepta el Sutta Pitaka, pero rechaza parcial o totalmente las otras dos cestas. Posee sus
propias obras, muchas de las cuales son la base de distintas escuelas filosóficas que florecieron no sólo en la India
sino también en China y Japón. Originalmente redactadas en sánscrito, muchas de ellas subsisten solamente en
traducción china o tibetana. “El Sutra del Loto” es uno de los textos Mahayana más populares pues propone la
existencia de varios vehículos para acceder a la liberación accesible a todos. “El Sutra del Corazón” y “El Sutra del
Diamante” son famosos textos breves que sostienen la insubstancialidad de toda realidad. “El Sutra de la Guirnalda”
expone una concepción unificadora en la que cada fracción del tiempo y del espacio participa de la totalidad y en la
que el universo entero es el Buda.
C. Jainismo
1) El Nombre
Jainismo significa “seguidores de los Jinas”, es decir de los “vencedores”, aludiendo a los guías espirituales del
Jainismo significa “seguidores de los Jinas”, es decir de los “vencedores”, aludiendo a los guías espirituales del
pasado que se conquistaron a sí mismos para alcanzar la liberación.
2) Los Antecedentes
El Jainismo emergió del mar del ascetismo. Desde comienzos del primer milenio aC., era corriente que algunos
individuos abandonaran la sociedad para retirarse a los bosques u otros lugares aislados donde habitaban en
pequeñas comunidades o en soledad practicando una vida simple, adoptando otras veces una vida itinerante para
vagar de pueblo en pueblo. Además de renunciar a la sociedad solían entregarse a diversas penitencias y prácticas
mortificatorias. Tanto las escrituras budistas como las jainistas mencionan a una secta ascética, llamada Nirgrantha
(“sin lazos” o “sin posesiones”), liderada por un tal Parsvanatha, la cual parece prefigurar al Jainismo, pero de la
cual se sabe muy poco. Sin embargo, el Jainismo recién surgió de manera claramente reconocible un par de siglos
más tarde, al mismo tiempo que el Budismo y en la misma región del noreste de la India.
3) El Fundador
Su fundador fue Vardhamana, un miembro al igual que Buda de la clase gobernante. Más conocido por su apodo
de Mahavira (“Gran Héroe”), fue considerado el vigésimo cuarto de los Jinas o Tirthankaras y el último los grandes
guías espirituales del Jainismo. Habría vivido en la primera mitad del siglo V aC., en la misma época que Buda, y si
bien nadie duda de su historicidad los hechos de su vida se confunden con la leyenda.
4) Los Jinas o Tirthankaras
Las escrituras jainistas reconocen la existencia de 24 maestros llamados Jinas, por haberse conquistado a sí
mismos, y también Tirthankaras o “hacedores del vado”, por haber atravesado la corriente de los nacimientos
continuos allanando el camino para la salvación espiritual de otros. Sólo hay evidencia histórica de los dos últimos
Tirthankaras: Parsvanatha y Vardhamana. Los otros habrían vivido, según afirma la tradición, en un tiempo
inconmensurablemente remoto, incluso en otros ciclos temporales. Las estatuas de los Jinas son veneradas en los
templos, pero estos no tienen estatus divino.
5) La Doctrina
• la realidad, en última instancia, puede reducirse a dos categorías: jīva y ajīva. La primera es lo sensible y lo
consciente, constituida por las almas cuyo número es infinito, encontradas no sólo en animales y vegetales sino
también en el agua, rocas, etc. La segunda se manifiesta en cinco entidades primordiales: materia, dharma
(necesaria para el movimiento), adharma (necesaria para el reposo), espacio y tiempo las que sumadas a jīva
constituyen las seis substancias básicas.
• no hay un dios creador, el universo es eterno evolucionando en ciclos ascendentes (cuando progresan los valores
morales) y descendentes (cuando estos declinan) que se suceden indefinidamente. A diferencia de los hindúes, los
jainistas no creen en una aniquilación periódica del universo.
• el camino a la salvación es esencialmente individual, pues los Jinas, si bien han mostrado el camino hacia la
misma, no pueden ayudar directamente por ser almas liberadas. Los dioses, por otra parte, desempeñan un papel
muy secundario a pesar de que algunos tales como Sarasvati, patrona del conocimiento y de las artes, son
reverenciados en los templos.
• las consecuencias de nuestras acciones, el karma, devienen una materia que aprisiona al alma. Para terminar con el
ciclo de reencarnaciones debemos destruir el karma y liberar el alma. La concepción del karma como material es
peculiar del Jainismo pues en el Hinduismo es considerado insubstancial.
• el alma es potencialmente omnisciente, pero se halla oscurecida por el karma. Se requiere un larguísimo proceso
de perfeccionamiento moral e intelectual para alcanzar un estado llamado kevala (“aislamiento”) en el cual el alma
se libera recuperando su conocimiento perfecto.
• la base de la moral jainista es la no violencia (ahiṃsā) tanto de pensamiento como de acción, tanto física como
moral, hacia todos los seres vivos lo que requiere un vegetarianismo estricto y, en el caso de los ascetas, medidas
extraordinarias para no destruir inadvertidamente ninguna vida (taparse la boca con un barbijo, filtrar las bebidas,
barrer el camino para no pisar ningún insecto, etc).
• los laicos no pueden lograr la liberación posponiéndola para una vida futura, ésta se reserva a los monjes quienes
deben sumar a una conducta moral, un ascetismo riguroso y la meditación del yoga para obtener la sabiduría
necesaria para destruir el karma.
6) La Conducta
Los monjes deben respetar cinco votos muy restrictivos y los laicos doce menos exigentes, siendo los pequeños
votos de estos últimos una versión atenuada de los grandes votos de aquellos.
• los 5 grandes votos (mahāvrata) reservados a los monjes:
✤ no dañar jamás ninguna forma de vida.
✤ no mentir evitando la ira, miedo, avaricia y el regocijo en las palabras.
✤ no robar ni acaparar espacio o comida.
✤ no tener relaciones sexuales ni realizar actividades que puedan aumentar el deseo sexual.
✤ renunciar completamente a las posesiones personales.
• los 5 pequeños votos (aṇuvrata) de los laicos:
✤ no dañar intencionalmente o gratuitamente ninguna forma de vida.
✤ no mentir excepto cuando decir la verdad provoque un perjuicio.
✤ no robar.
✤ fidelidad conyugal.
✤ limitar las posesiones personales.
•los 3 votos meritorios de los laicos (guṇavrata):
✤ restringir los viajes y desplazamientos innecesarios.
✤ limitar la ingesta de comida y bebida y el usufructo de objetos suntuarios.
✤ no cometer actos reprensibles intencional o innecesariamente.
•los 4 votos instructivos de los laicos (śikṣāvrata):
✤ practicar meditación y renunciación por un breve período.
✤ realizar ayuno en ciertos días estipulados en el calendario.
✤ restringir la actividad a ciertos lugares y a ciertas horas del día.
✤ realizar donaciones a los monjes y practicar actos caritativos.
7) Las Sectas
El Jainismo se divide en dos sectas, Śvetambara y Digambara, que difieren en la vestimenta permitida a sus
ascetas, en algunos ritos y en su literatura sagrada. Los Śvetambara o “Vestidos de Blanco” permiten a sus ascetas
portar vestidos sencillos mientras que los Digambara o “Vestidos de Espacio” deben ir desnudos. Los primeros
reverencian un Canon de 45 textos sagrados mientras que los segundos lo rechazan, aceptando un grupo mucho más
reducido de textos, pues estiman que las enseñanzas de Mahavira se perdieron.
8) Las Escrituras
Las escrituras de los Śvetambara se agrupan en un Canon constituido por 45 tratados o agamas redactados en una
lengua popular llamada ardhamāgadhī, perteneciente al Indoario medio (el sánscrito pertenece al Indoario
antiguo). De contenido muy variado, exponen la doctrina jainista y sus concepciones del universo y del tiempo,
narran historias edificantes, dictan normas de conducta... Uno de los libros más populares del canon, el Kalpasutra,
contiene las biografías de los 24 tirthankaras. Los Digambara, en cambio, aceptan como válidas un par de obras
diferentes que tratan, sobre todo, del efecto negativo del karma sobre el alma. A partir del comienzo de nuestra era
floreció una abundante literatura postcanónica, en varios idiomas, cubriendo los más diversos tópicos que van de lo
secular a lo religioso y de lo técnico a lo literario destacando las contribuciones en el campo de la filosofía.
D. Hinduismo
1) El Nombre
Hindú deriva del persa hindu y este de la palabra sánscrita sindhu que significa “río”, la cual era también el
nombre propio dado al río Indo en la antigüedad. Los griegos, que abordaron a la India por el noroeste y que
estaban familiarizados con el Indo, pero conocían poco del interior del subcontinente, extendieron su nombre a todo
el país dando origen al término India. Si bien Hindú e India son las versiones persa y griega de un mismo nombre,
debería restringirse el nombre de hindú para los creyentes de esta religión y emplearse, en cambio, el de indios para
designar a todos los habitantes de la India.
2) Los Antecedentes
El Hinduismo es un vasto conjunto de creencias en el que se superponen múltiples estratos comenzando por el
ritualismo védico, continuando con la renovación mística de las Upanishads y con la posterior emergencia de
concretos dioses todopoderosos para concluir integrando y dando relieve a divinidades femeninas, absorbiendo en el
proceso una variedad de cultos populares. La naturaleza abierta y tolerante del Hinduismo hace difícil sino
imposible delimitarlo con precisión de otros conjuntos de creencias o señalar una fecha para su nacimiento. En
contraste, con el Budismo y el Jainismo, no hay aquí un fundador ni un hecho decisivo sino una cadena de maestros
espirituales, algunos anónimos o vagos, otros famosos, que fueron haciendo un aporte continuo. Lo que puede
afirmarse es que muchas de las hebras del complejo tejido del Hinduismo estaban ya presentes en los siglos finales
del primer milenio aC.
3) La Doctrina
• uno de los pilares del Hinduismo es la creencia en un ente individual perdurable denominado, por lo general,
Atman (ātman) palabra polivalente cuyo primer significado fue aliento vital y luego sí mismo y, también, alma. La
naturaleza última del alma es investigada por varios sistemas filosóficos hindúes, no siempre coincidentes, pero
siempre afirmativos sobre su participación, de una manera u otra, en lo divino y por lo tanto en su inmortalidad.
• simultáneamente con la concepción de un alma individual, surge la teoría de la transmigración o reencarnación. A
la muerte del cuerpo, el destino del alma es vario. Lo más habitual es la reencarnación en otro ser terrestre, sea
vegetal, animal o humano. A diferencia de otras religiones, los hindúes no concibieron un paraíso o un infierno
eternos si bien aceptaron la posibilidad de que el alma residiera allí temporariamente para, luego de agotar su
mérito o su demérito, continuar con el ciclo de los nacimientos y las muertes.
• son las acciones de los individuos las que determinan el destino presente y futuro del alma. Esas consecuencias
metafísicas de las acciones constituyen el karma, palabra sánscrita que significa, precisamente, “acción”. Más
importante que las “buenas” o “malas” acciones de la moral convencional, son los actos que refuerzan los lazos
del alma con el mundo material que la aprisiona tales como fundar una familia, adquirir riquezas y buscar el poder.
• para liberarse de la sucesión interminable de reencarnaciones las escuelas hindúes proponen diversos caminos
cuyo fin es rescatar al alma que, ignorante de su propia divinidad, es esclavizada por los sentidos y apariencias.
Ascetismo, acción desinteresada, meditación, yoga y la gracia divina solos o combinados son algunas de las vías
propuestas.
• a diferencia de budistas y jainistas, los hindúes depositan su fe en dioses todopoderosos y concretos. El concepto
de trimūrti (“tres formas”) es un intento de englobar a los dioses mayores del Hinduismo en una fórmula única,
bastante artificial por cierto, en la que se considera a Brahma, Vishnu y Siva como el creador, el preservador y el
destructor, respectivamente. En realidad, más que a Brahma, el rol de tercera divinidad suprema le cabe a Devi,
diosa polimórfica que encarna bajo formas nuevas el antiquísimo culto de la diosa madre.
• Los hindúes consideran como sagrados una variedad de textos, fruto de distintas épocas y tradiciones, algunos de
los cuales gozan de aceptación universal mientras que otros son específicos de distintas sectas.
4) Los Dioses
❖ Vishnu. Está ligado al ciclo del tiempo cósmico y al proceso creador de Brahma quien brota, al comienzo de
cada ciclo temporal, de su ombligo. Periódicamente adopta la forma corpórea para descender al mundo con
el fin de ayudar a hombres y dioses a restaurar el equilibrio y la virtud. Estos avatares son diez disponiéndose
en una jerarquía ascendente, desde los zoomórficos hacia los antropomórficos: el pez, la tortuga, el jabalí, el
en una jerarquía ascendente, desde los zoomórficos hacia los antropomórficos: el pez, la tortuga, el jabalí, el
hombreleón, el enano, Rama, Rama con el hacha (Parasurama), Krishna, Buda, y Kalki (quien vendrá en el
futuro). Vishnu es, normalmente, representado con cuatro brazos portando sus emblemas: el loto, el disco,
una maza y un caracol marino. Su montura es el ave Garuda, mitad águila y mitad humana, feroz enemiga de
las serpientes. Su compañera es Lakshmi, diosa del loto, de la salud y de la buena suerte cuya importancia
creció con la difusión del concepto de sakti, la energía femenina y creadora.
❖ Siva (Shiva). Dios polifacético, poseedor de una doble naturaleza, creadora y destructora, erótica y ascética. Nombres sánscritos
Es la resultante de un largo proceso evolutivo en el que se amalgamaron una divinidad de las tormentas (el de algunos dioses
Rudra de los Vedas), un culto popular de la fertilidad, el ideal ascético y la creencia en un principio creador
universal masculino complementado por un aspecto femenino. En la mayoría de los templos dedicados a él Śiva: Siva, Shiva
es adorado como un icono fálico o liṅga. La imagen antropomórfica más común lo retrata con cuatro brazos Viṣ
ṇ
u: Vishnu, Visnu
entre los que se enrosca una serpiente, amortiguando con su cabellera la caída del Ganges (simbolizado por Kṛ
ṣ
ṇ
a: Krishna, Krisna
Brahmā: Brahma
una mujer) sobre la tierra, con un rodete como el de un asceta, la luna creciente como diadema y el tercer ojo
Devī: Devi
de la visión interior capaz de fulminar como un rayo. De tez sumamente blanca, porta una guirnalda de Gaṇeśa: Ganesa, Ganesha
calaveras y se cubre con una piel de tigre. Sus armas son el tridente, una lanza, un hacha, un arco, un mazo, y Kūmara: Kumara
su vehículo es el auspicioso toro Nandi. Kārttikeya: Karttikeya
❖ Devi. El culto de Devi (“la Diosa”) surgió con posterioridad a los de Vishnu y Siva, cobrando ímpetu en los Kāma: Kama
siglos VIVII en Bengala y Bihar, aunque la creencia en una diosa madre existía ya desde un tiempo
inmemorial en toda la India. Esta última adquirió una nueva importancia cuando se asignaron esposas a los
dos principales dioses. La personalidad de Siva resultó ser un terreno mucho más fértil que la de Vishnu para
el crecimiento de esta nueva idea y muchos de los rasgos de su naturaleza misteriosa y ambivalente se
fusionaron con el de la diosa madre dando lugar a una divinidad femenina proteiforme llamada
genéricamente Devi y con diversos nombres según su aspecto particular. Así se la conoce como Parvati (hija
de la montaña), Durga (inaccesible), Sati (virtuosa), Chamunda (cruel) y Kali (negra o tiempo), etc.
❖ Brahma. Personificación de varios principios creadores concebidos en el período védico, especialmente
Prajapati, es considerado el creador del universo aunque se encuentra supeditado a Vishnu o Siva y casi no
hay templos dedicados a su culto en la India. No obstante, sus esculturas abundan apareciendo en ellas con
cuatro caras y cuatro brazos teniendo los Vedas, un rosario e instrumentos sacrificiales en sus manos, sentado
o parado sobre un loto o montando un cisne, su vehículo tradicional.
❖ Otros Dioses. Los hijos de Siva y Parvati, Ganesa y Kumara, son populares particularmente el primero.
Ganesa, el dios con cabeza de elefante y voluminoso vientre, es necesario para el éxito de cualquier empresa
por su capacidad de poner y remover obstáculos y por esa razón se lo invoca al comienzo de las
composiciones literarias y religiosas encontrándose su efigie, con frecuencia, en el exterior de los templos al
igual que en puertas y umbrales.
Kumara, “El Muchacho” eternamente casto, es el terrible dios de la guerra. Amamantado por seis estrellas,
se lo llama también Skanda y Karttikeya (“hijo de las Pléyades”) y por ello se lo representa, a veces, con seis
caras. Hoy, es sobre todo popular en India del sur, donde se lo conoce como Subrahmanya (“querido por los
brahmanes”), donde fue asimilado al belicoso dios tamil Murugan. Poseído de una fuerza descomunal, su
arma favorita es la lanza y su montura el pavo real.
Kama es el dios del amor, quien como su análogo griego flecha a sus “víctimas”. Es bastante edulcorado
pues su arco es de caña de azúcar, la cuerda del mismo una hilera de abejas y sus flechas están hechas con
flores. Fue fulminado con el tercer ojo de Siva por perturbar su ascetismo y, desde entonces, fue apodado
Ananga (“el incorpóreo”).
5) Las Escrituras
En contraste con el Jainismo Svetambara y el Budismo Theravada, el Hinduismo no tiene un canon fijo de
escrituras sagradas. Los textos reverenciados por los hindúes son, sin embargo, numerosos pues provienen de
diversas épocas y tradiciones. Los principales son:
- gran épica Mahabharata, que afirma, por primera vez, la supremacía de un dios universal y concreto a la par
la Bhagavad Gita (“El Canto del Señor”): es un poema de 700 estrofas sumamente popular, contenido en la
que propone diversos caminos hacia la liberación.
- repositorio
los Puranas (“Antiguas Historias”): son un vasto y heterogéneo grupo de textos de difícil datación, un
inagotable de mitos, leyendas, creencias y preceptos abarcando muchas de las innumerables
facetas del Hinduismo. Todo este material fue sistematizado en diez y ocho Puranas mayores y diez y ocho
menores, la mayoría de los cuales se centran en una de las divinidades mayores.
- Agamas Sivaítas: redactados a partir del siglo VIII, los 28 agamas principales son aceptados por la mayoría
de las sectas sivaítas aunque su autoridad es reconocida, particularmente, en el sur de la India.
- Samhitas Vishnuitas: los más tempranos son los numerosos manuales de los Vaikhanasas, una secta de
ascetas, donde se codifica en detalle la conducta a adoptarse en los templos. Más tarde, fueron desplazados en
popularidad por los de otra secta, la de los Pañcaratras (“Cinco Noches”), ocupados también en especificar las
prácticas cultuales, pero de un alcance más amplio al incluir consideraciones teológicas y filosóficas.
- Tantras: Los Tantras propiamente dichos, es decir aquellos en que Devi juega un rol central, son en conjunto
posteriores a otros textos sagrados del Hinduismo reflejando la difusión ulterior del culto de la Diosa.
Ninguno es anterior al siglo X. Adoptan, casi siempre, la forma de un diálogo entre Siva y su esposa.
© 200911 Alejandro Gutman
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