Você está na página 1de 1

Anna Karenina

Nos encontramos en el año 1874. La preciosa y vivaz Anna Karenina lleva la vida deseada por
todas sus contemporáneas: está casada con Karenin, un importante funcionario al que ha dado
un hijo, y su posición social en San Petersburgo es envidiable. Viaja a Moscú después de recibir
una carta de su hermano, el mujeriego Oblonsky, pidiéndole ayuda para salvar su matrimonio
con Dolly. En el tren, Anna conoce a la condesa Vronsky, a la que espera su hijo, el elegante
oficial de caballería Vronsky. Cuando Anna es presentada al oficial, surge una chispa mutua
que ninguno de los dos ignorará.

Levin, un terrateniente compasivo y sensible, es el mejor amigo de Oblonsky y tiene la


intención de pedir la mano de Kitty, la hermana pequeña de Dolly, pero no sabe que la joven
está perdidamente enamorada de Vronsky. Ante el rechazo de Kitty, el entristecido Levin
regresa a sus tierras de Pokrovskoe y se entrega a los trabajos del campo, mientras Kitty
descubre con dolor, durante un baile, que su gran amor Vronsky no le quita ojo a Anna
Karenina, que parece compartir sus sentimientos.

Anna, en un esfuerzo por recuperar la cordura, se apresura a regresar a San Petersburgo,


donde la sigue Vronsky. Ella intenta recuperar su vida familiar, pero no deja de pensar en el
joven oficial. Tienen una apasionada aventura que lleva a Anna a tener una hija de Vronsky
pero aún seguía casada con Karenin. La situación de Karenin es insostenible y se ve obligado a
dar un ultimátum a su esposa. En un desesperado intento por ser feliz, la decisión de Anna es
escapar con Vronsky. Viajan y llevan una vida feliz, tiempo después regresan y Anna se da
cuenta que no es aceptada por la sociedad ya que no se divorció de Karenin y llevaba una vida
de pasión con Vrosky. Anna tiene la idea que Vrosky le está siendo infiel con alguien más joven
y sin encontrar una mejor solución a sus tormentos decide suicidarse aventándose a las vías
del tren.

El autor de la obra logro realizar un gran trabajo ambientado las escenas en un antiguo teatro
ruso, en el que es posible pasar del interior de una mansión a una estación de trenes con sólo
un ligero cambio de escenografías en la cual siempre estuvieron presentes rasgos distintivos
de dicha época, gracias a que toda la utilería fue acorde a la película, los efectos especiales
jugaron un gran papel para poder dar una mejor comprensión al espectador de todo lo que se
estaba pasando, así como el elenco ayudo a cambiar el escenario y la escenografía mientras la
película continuaba

Você também pode gostar