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DISCURSO DESPEDIDA

Autoridades presentes, estimados padres y familia que nos


acompañan y Querida comunidad escolar del Colegio de Maipo, sean
ustedes bienvenidos.
Es un honor para esta institución recibirlos en este día tan especial en
el que con un vuelco de emociones, una vez más nos despedimos de
otra generación de queridos alumnos de educación parvularia, para
que ellos puedan caminar hacia un nuevo reto como lo será la
educación general basica.
Estamos seguros y confiados en que ellos lo harán bien, pues durante
los años que estuvieron bajo nuestro regazo, han demostrado pasito
a pasito ser unos luchadores constantes, tal vez si, hubo tropiezos
pero su empeño y valor les permitió levantarse y dejar que les
sacudiéramos sus rodillitas y les mostráramos de nuevo el camino.
Camino, que tal vez para ellos ha sido largo, mientras que para
nosotros ha transcurrido en un abrir y cerrar de ojos, Aun
recordamos la primera vez que con lagrimitas en los ojos, soltaban la
mano de su mamá para aferrarse con un poco de miedo a la de sus
tías, pero en este camino, han logrado mucho, no solo el dominio de
numerosas competencias que les permitirán desempeñarse con
seguridad ante cualquier reto que se les presente, sino también han
logrado entablar sus primeras relaciones de amistad, las cuales
estamos seguros que llevaran en sus corazoncitos toda la vida.
Este, es uno de los logros, el primero de los que tendrán en toda su
vida, es el primer triunfo, la conclusión de una meta trazada, pero no
solo por ellos, también es un logro para nosotros, los adultos que los
hemos acompañado.
Este trayecto también encierra 1, con otros 2 años de mi vida, la
inquietud por conocerlos el primer día, mis ganas de aprender para
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poder ofrecerles lo mejor, mi desafío por superarme, por crecer junto


a ustedes… Hicimos muchas cosas juntos. Día a día hemos
compartido momentos alegres cuando las cosas salían bien y otros
más duros, en los que era necesario ayudarte a persistir hasta
alcanzar tus metas. La etapa terminó, debemos separarnos. Hoy
emprendes un viaje cargado de sueños y es fácil sentir la emoción de
este gran día en que sueltas mis manos, porque ya has aprendido a
volar... Mucha suerte en este viaje, aunque estoy seguro que
conseguirás todo lo que te propongas porque recuerda, que lo que
importa verdaderamente en la vida no son los objetivos que nos
marcamos, sino los caminos que seguimos para lograrlo…
Ahora, iniciaran un nuevo camino, tal vez más largo, tal vez más duro,
pero estamos seguros que están preparados, y que al lado de sus
familias, lograran alcanzar todas sus metas.
Hoy, ya no vamos a volver a ser los personajes principales de sus
cuentos, porque ya crecieron y tenemos que terminarlo. La historia
llega a su fin y el libro se cierra, pero sabemos que pronto van a
encontrar otros nuevos personajes que puedan ofrecerles todo lo
que ustedes necesiten y entonces ahí, el libro de sus vidas, el libro de
los recuerdos volverá a abrirse, pero esta vez en otra página, porque
todo será mágico pero distinto. El cuento comenzará en otro lugar y
con otros personajes...
Sabemos que los vamos a extrañar un montón y que si miramos
atrás podremos ver cada una de sus caritas dulces y esas miradas que
nos transmitieron tanto...
Gracias por permitirnos vivir junto a ustedes en el maravilloso mundo
de la niñez, donde el asombro es cosa de todos los días y la risa nos
invade todo el cuerpo transformándose en contínua alegría.
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Hoy nuestros corazones están llenos de todo el amor que nos dieron.
Conserven siempre toda esa espontaneidad, dulzura y pureza de sus
almas.
Los llevamos en el corazón.
No me puedo despedir sin decirles un lindo poema que refleja todo el cariño que les
tengo

Esas manitos traviesas


que tantas cositas hicieron,
hoy ya se van preparadas,
para iniciar otro vuelo…
Cargaron en sus alitas,
trabajos, risas y juegos,
aventuras, buenos amigos,
y muchos muchos sueños…
Hoy me toca despedirte,
y quiero pedirte una cosa:
que nunca olvides mi niño
esa sonrisa hermosa…
Que seas feliz mi pequeño
sabiendo que cada día,
puede ser maravilloso si
te animas y “vuelas” la VIDA…
¡Abre tus alas...
y a volar bien alto!
El Jardín te queda chiquito…
¡Primer año te está esperando!

¡¡Vivan cada día con la emoción del primer día de clases!!


¡Los quiere su tía Celia!

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