LICENCIATURA EN ADMINISTRACIÓN

Fundamentos de Mercadotecnia

GRUPO: 21181

DOCENTE: VERÓNICA NORIEGA BALDERAS

ALUMNO: ROMERO SIFUENTES MARIO

N.C.:1820109

“EL ESCRITOR DE ANUNCIOS”

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ÍNDICE

Primera Parte

CAPÍTULO I…………………………………………………………………………....… 3
CAPÍTULO II……………………………………………………………………………... 3
CAPÍTULO III…………………………………………………………………………….. 4
CAPÍTULO IV…..………………………………………………………………………... 5
CAPÍTULO V…...………………………………………………………………………... 5
CAPÍTULO VI…...………………………...…………………………………………...… 6
CAPÍTULO VII…...…………………………………………………………..…………... 6
CAPÍTULO VIII....………………………………………………………………………... 7
CAPÍTULO IX…...……………………………...………………………………………... 7
CAPÍTULO X…...………………………………………………………………………... 8
CAPÍTULO XI…...……………………...………………………………………………... 9
CAPÍTULO XII.....………………………………………………………………………. 10
CAPÍTULO XIII…...…………….………………………………………………………. 11
CAPÍTULO XIV…...…………………………………………………………………….. 11
CAPÍTULO XV…...….………………………………………………………………….. 12
CAPÍTULO XVI…...………………………………………………………..…………... 12

Segunda Parte

CAPÍTULO XVII…...…………………...……………………………………..………... 13
CAPÍTULO XVIII…...……………………..………………………………………..…... 14
CAPÍTULO XIX…...………………………………………………………………..…... 16
CAPÍTULO XX…...………….……………………………………………………..…... 17
CAPÍTULO XXI…...……………………………………………………………..……... 18
CAPÍTULO XXII…...………………………...…………………………………..……... 19

OPINIÓN PERSONAL…...………………………………………………………..…... 21

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PRIMERA PARTE

Capítulo I
Dos empleados de una agencia de publicidad (Jorge y Sara), se encuentran
en un bar platicando sobre las palabras, las letras y como estas condicionan el
alma de cada palabra. El autor interrumpe la narración para describir un poco de la
procedencia de Sara y sus rasgos familiares, para después retomar la narración
de aquella escena en el bar, donde al cabo de una ronda de cerveza Sara
comienza a pensar en su gusto por Javier. Después de despedirse en el bar Jorge
decide ir a la oficina y revisar los bocetos de la campaña de Coca-Cola, los cuales
lo tenían con un poco de preocupación. Por otro lado Sara opta ir a casa de una
de sus amigas donde discute si su gusto por Jorge es sexual o simple atracción
intelectual, la cual es distanciada por sus diferencias sociales. El autor dentro de
este capítulo interrumpe varias veces la narración para describir el carácter, los
gustos, apariencia física y dar introducción al entorno en el que se encuentran
ambos personajes.

Capitulo II
El capítulo comienza con una breve descripción de los antecedentes
laborales de Jorge, el cómo fue que se convirtió en el creativo junior con más
futuro de su departamento y su afición por desmenuzar palabras obsesivamente
hasta que se resumen en una frase lo más breve y evocadora posible. En seguida
de esto el autor narra la llegada de Jorge a la oficina después de salir del bar
donde se encontraba charlando con Sara y puntualiza el ambiente ajetreado que
se vivía en dicha oficina por el deseo de entregar las maquetas un concurso,
posteriormente llega Ramón (Director Creativo de la Agencia) el cual se siente
eufórico y encantado con el trabajo realizado, y le propone a Javier salir a beber
unas cervezas pero Javier se niega y le propone tomar juntos el aperitivo al día
siguiente.
Tras marcharse Ramón, la agencia se vacía, Javier se queda a terminar el trabajo
y comienza a una breve platica con Raki que culmina con una invitación a cenar
justo después de que terminen su trabajo, y así lo hacen.
Al día siguiente, Javier es despertado por una llamada entrante en su celular, la
cual era efectuada por Ramón con el motivo de cancelar su cita ya que se
encontraba con malestares estomacales. Javier decide salir a ver una exposición
en Caixa Forum, donde se encuentra por casualidad con Sara y su amiga Ángela,
juntan su plan y entablan conversación sobre palabras, al terminar cada quien se
marcha por su lado, Sara a su casa y Javier a un jardín botánico. A él le
fascinaban los nombres de las plantas, aquellos carteles le mostraban al mismo
tiempo un universo de palabras por descubrir, entre las que podría navegar
durante toda su existencia como un explorador insaciable. Palabras que por su
exotismo y rareza han conseguido permanecer incólumes frente a la degradación
de la verborrea humana. Piensa en que las palabras más importantes sean
también las más cercenadas. <<Libertad>>, <<amor>>, <<justicia>>. Su mente
no puede evitar pensar en las dos amigas, y no puede evitar compararlas y al
hacerlo se sorprende de su propia inconsistencia.
Anoche estaba realmente enojado porque Sara no había dado señales de vida y
esta mañana, en cambio, se siente mucho más atraído por Ángela que por ella.

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Reconoce en Ángela algo perverso que le perturbe. Javier decide que el plan de la
tarde será una buena siesta y una buena película. Después de la siesta se sienta
frente a su ordenador y comienza a trabajar en unos textos pendientes, en eso le
interrumpe un mensaje que le llega y es de Sara. Después de un par de mensajes
de Sara pregunta si está sólo, él le contesta que sí, ella le dice que va para allá y
que lleva el vino.
Sara aparece vestida muy provocativamente, quería ver el deseo en los ojos de
Javier y, efectivamente, ahí está el problema en que ahora lo tiene que apagar sin
que esto perjudique la amistad entre ellos.
Javier se percata del juego de su amiga y le dice que no debería de jugar con los
sentimientos, solo por haber estado celosa de su amiga. Sara se va y Javier se
arrepiente de haberle dicho eso.

CAPITULO III
Al día siguiente, transcurre en un ambiente tranquilo para Javier. Es
domingo y está en casa de sus padres, con su hermana, su cuñado y su sobrina,
viendo una película en la vieja tele. De regreso a casa abre su ordenador para ver
si tiene mensajes de Sara, pero no, ni la menor noticia. Finalmente decide
mandarle un mensaje a Sara, diciéndole que <<si pueden borrar lo que paso ayer,
decidir sencillamente que no pasó nada>>. Llega el lunes y en la agencia había
una actividad frenética. Revisión de los bocetos, sonorización definitiva de los
robamatics, todo para la presentación ante Coca Cola.
Ramón es el director creativo de la agencia, le dice a Javier que la gente de Coca
Cola ha pedido que no haya más de cuatro personas en la reunión, por lo tanto
Eduardo, que es el presidente de la agencia, ha decidido que este el director de
servicio al cliente, el director de planificación estratégica, el director creativo y el
mismo. Javier piensa que no es justo ya que él fue quien tuvo la idea y la ha
ejecutado hasta el último detalle y que además tiene la mejor creatividad que
cualquiera de ellos y aun así no justifica en absoluto su presencia.
Ya en su despacho se limita a trabajar, en eso aparece Raki y Javier la invita a
cenar, lo cual Raki acepta, quedan directamente en Sacha, un pequeño bistró por
la zona de cuzco, Raki le cuenta que vive con su padre que es jubilado y viudo. Al
ser la menor de cuatro hermanos, todos varones salvo ella, la familia dio siempre
por su puesto que la responsabilidad de permanecer al cuidado de su progenitor
era cosa suya. Eso no le importaba mucho, puesto que quiere a su padre y se
llevan de maravilla. Pero esta situación, evidentemente, coarta su desarrollo
profesional y su libertad personal.
Después de la segunda botella se va creando en ellos una atmosfera, que no por
predecible deja de ser menos envolvente. Raki pasa la noche en casa de Javier,
Eduardo les manda un correo a todos los de la agencia para informarles que la
presentación de Coca Cola fue un éxito, que el cliente les ha felicitado a todos por
un trabajo tan extraordinario, Javier que conoce muy bien a su jefe sabe
perfectamente que han perdido la cuenta. Cuando llega a la agencia, la secretaria
de su jefe le dice que fuera a su despacho ahora mismo. Al entrar encuentra a un
Ramón desconcertado, tenso, paranoico y agresivo. Le dice que Eduardo le ha
pedido que deslinde responsabilidades. Por esas fechas se aproxima la fiesta de
navidad.

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Natalia la secretaria del departamento de administración le entrega u sobre con el
nombre de su amigo invisible, el nombre escrito en la cartulina es de Sara.
Javier necesita hablar con su jefe, pero no lo puede localizar, por la tarde Ramón
lo llama a su despacho y mirándolo fijamente le dice que Eduardo lo ha despedido,
Javier tarda en asumir la noticia, ya en su casa piensa en lo mucho que ha
cambiado los nombres en la publicidad en pocos años. Ahora llamamos claim a lo
que antes era eslogan, frame a lo que era un fotograma y script a lo que era un
guion. Pero a la idea seguimos llamando idea, porque afortunadamente, siempre
será lo único que importe en este absurdo negocio.

CAPITULO IV
En víspera de la fiesta de navidad Raki y Javier están tomando una cerveza
a la salida del trabajo, Javier le comenta a Raki que su familia es humilde, de un
modesto nivel cultural y costumbres sencillas, que su papa piensa que se dedica
al tráfico de armas, y que su madre en cambio cree que tiene un don. Terminan su
cerveza y se despiden, Raki tiene que irse ya que su papá tiene bastantes días
enfermos.
Ala mañana siguiente, la secretaria de Eduardo le dice que quiere verlo, él piensa
mal del asunto, todo mundo habla de una restructuración de la empresa, después
delo de Ramón. A Javier no le gustan las palabras que repiten vocales en su
interior “reelegir”, “reemplazar”, “reembolsar”, son cobardes alargan el sonido
innecesariamente para retardar el golpe final.
Al entrar al despacho de Eduardo, para sorpresa de Javier, le ofrece ser el
Director creativo ejecutivo, no lo puede creer.
Todos están en la fiesta de navidad y a la vez festejando el nombramiento de
Javier. Es el momento de la entrega del regalo del amigo invisible, cuando le toca
a Sara, abre su regalo y ve que es un libro de botánica, lo abre aparentando
interés y se encuentra con una frase escrita a mano que dice “no mires las
plantas, mira sus nombres. Las plantas se secan, los nombres permanecen”,
entonces sabe de quién es el regalo. Javier y Sara hacen el amor en casa de ella,
nada de planes ni promesas, tan solo una amistad recuperada y una gratificante
relación sexual que en el futuro podrían repetir si compromiso. Javier piensa en
Raki, cae en la cuenta de que está embarcado en una peligrosa bigamia, que va a
complicarle enormemente la vida, justo en el momento más crítico de su carrera. Y
encima con dos compañeras que trabajan en la misma agencia, para el mismo
cliente y que al parecer, comienzan hacer amigas.
Javier se comunica con Raki y se entera que su papá está muy mal y se
encuentra hospitalizado, él va haberla al hospital y conoce al hermano de Raki. El
Dr. Feijoo que atiende al papá de Raki se acerca a ellos, acompañado del médico
de guardia, para informarle sobre la gravedad de la situación. No esperan que su
padre sobreviva más de un mes.

CAPITULO V
La semana comienza con ajetreo para Javier, desde la mudanza que va a
su nuevo despacho, reuniones, entrevistas con la prensa. Su foto estaría en las
principales portadas de las revistas y en las páginas web del sector. Javier platica
con Raki en el hospital, con el fin de distraerla, como mejor sabe hacerlo con las
palabras.

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Gracias a los vericuetos del lenguaje, Javier es capaz de trasladarse de un
espacio al otro con esa destreza, que le permite desenvolverse con soltura en
cualquier papel que le asignen. El de hijo, el de amigo, el de creativo, el de
amante. De regreso a la agencia, Sara le comenta que el cliente desea que él este
en el rodaje de calvo, que es en Miami y que quiere que Sara también este en el
rodaje.
Es nochebuena y numerosos creativos de diferentes agencias se reúnen a
media mañana para tomar unas cervezas en Santa Barbará. En el día en que se
firma la paz, para poder empezar la próxima guerra desde cero.
Javier regresa a ver a Raki para ponerse al corriente de cómo sigue su padre, la
cena en casa de sus padres están predecible como cualquier otro año, hermana,
sobrina, cuñado, botella de cava, langostinos congelados, cordero asado, helados
de tres sabores y turrón.

CAPITULO VI
Es navidad y Javier se ha levantado dispuesto a tomar tranquilamente el
desayuno, pero recibe un mensaje de Raki, diciéndole que su padre ha muerto.
Javier apresuradamente se dirige al hospital, alguien le informa que está en el
sanatorio de M-30, poco a poco van llegando los compañero de la agencia. Javier
intenta contacto visual con Raki, sin el menor éxito, él empieza a sentir que para
Raki, una cosa es compartir cama y otra muy diferente formar parte de la familia.
Sara llega al Sanatorio, lo aparta para preguntarle si van a comer, ya que es
navidad, entonces salen del sanatorio tomados de la mano, y Raki se da cuenta
de eso, sin embargo eso no le duele, su pesar es mucho más grande, por el
momento. Sara y Javier se dirigen a un restaurante y de ahí se van a su casa.
Son dos amigos que disfrutan de su relación en el sentido más amplio de la
palabra, sin compromisos ni reproches pura simbiosis, puro sexo. Raki le manda
un mensaje diciéndole que el sepelio es al día siguiente por la mañana, pero que
no era necesario que fuera, ya que no conoce a nadie y es un día laborable.
En la agencia se celebra la primera reunión del comité directivo, desde que a
Javier le dieron el nombramiento, le rodean con enhorabuenas y felicitaciones.
Repasando la situación de los clientes del nuevo negocio y algunos temas
relativos al personal. Eduardo y Javier salen a comer, el presidente le comenta
cuanto es lo que ganará y las prestaciones que tendrá, que aunque está muy por
debajo de lo que ganaba Ramón es muy buena cantidad. A la mañana siguiente
Javier empieza fantasear con un nuevo apartamento y, por supuesto otro coche,
que como el actual apenas utilizará. Abre su ordenador y empieza buscar alquiler
de apartamentos de lujo. Ha seleccionado algunos contactos, y le propone a Sara
que lo acompañe, él piensa que le puede ser de mucha utilidad, ya que el criterio
de ella es mucho mejor que el suyo. Ella acepta y se quedan de ver. Sara da
muestra de saber cómo manejar la situación y Javier se empieza a imaginar una
vida a lado de ella, al día siguiente se ven para hacer algunas compras de
muebles, después se va a comer y por ultimo al cine.

CAPITULO VII
Sara tiene que organizar la fiesta de nochebuena, mientras Javier decide
echar una ojeada a la agencia, en su despacho se dedica a revisar el correo.
Siempre le ha dedicado al trabajo más tiempo de lo normal, como Sara se

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encuentra ocupada con lo de la fiesta de fin de año, él decide ir a comer sólo y se
dirige al Mc Donald’s, es allí donde llega Ángela la amiga de Sara acompañada
con dos clientes del despacho donde trabaja, Pablo y Alberto. Los tres se sientan
con Javier y la comida se va alargando ya que la están pasando muy bien. Se
despiden del restaurante y prometen hacer una reunión con todos incluyendo a
Sara. Al llegar a su apartamento Javier empieza a empacar para la mudanza, para
llevar sus cosas a su nuevo lugar de residencia. Por la noche Sara le llama para
cenar y ver una película juntos, lo cual él acepta. Sara aprovecha para decirle que
la fiesta de navidad será en el restaurante Villa Magna y que quiere que este con
ella, eso a Javier le incomoda, pero a la vez le halaga que su amiga desee
incorporarlo a su círculo más cerrado de amigos, pues le acerca a ella más que
nunca.
A la mañana siguiente visitan el establecimiento llamado El Corte Ingles, por lo de
su esmoquin.
La fiesta de nochebuena es mucho mejor de lo esperado. Todos en la fiesta lo
tratan con mucha familiaridad, el alcohol, la música y la deslumbrante elegancia de
Sara hacen que regresaran.
Javier se sienta en la cima del mundo. El primer día del año es de resaca y
preparativos, al día siguiente vuelan a Miami para comenzar el rodaje de calvo.
Javier revisa su correo y ve que hay uno de Raki, un largo correo en el cual le
explica que está bien y que había aceptado un trabajo en otra agencia y se estaba
despidiendo de Javier, el apaga el ordenador sin siquiera intentar responder, sabe
que esta ocasión, su habilidad para juntar palabras no le serviría absolutamente
de nada.

CAPITULO VIII
El vuelo a Miami sale puntual, son diez horas de vuelo, Sara se sienta junto
al cliente, Javier se sienta al lado de David para pasar el rato. David le pregunta a
Javier cuál es su letra favorita, a lo que él le contesta: sin duda la “v”, es una letra
con alas, no es casualidad que “volar”, “avión”, “ave”, “vela” y “viento” la
contengan. Resulta curioso comprobar que la grafía de las letras tienen mucho
que ver con lo que intentan describirnos.
La conversación dura hasta la hora de la comida, después ambos duermen un
rato. Llegan a Miami por la tarde, llegan a un hotel en South Beach, donde se
hospedaran durante los cuatro días siguientes. David y el cliente quedan en la
tercera planta, Javier y Sara dos plantas arriba
Eduardo lo está esperando y le comenta que le han llamado de Coca Cola, porque
a pesar de que perdieron el concurso de la campaña española, el concepto sobre
la dicha plena les había encantado en Atlanta y que querían utilizarlo para su
campaña regional en Asia-Pacifico, y que tenían apenas dos semanas para
mostrar nuevas ejecuciones, la campaña se presentaría en Tokio, Dentsu es la
asociada en ese país. Javier se siente aterrado y eufórico a la vez, pues es la
oportunidad de su vida.

CAPITULO IX
Javier convoca a una junta urgente, con los cuatro directores creativos, para
contarles lo ocurrido y decirles que al día siguiente se meterían al tope con ellos.

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Se va a su departamento a descansar ya que está agotado por el viaje, antes de
dormir le quiere llamar a Sara, pero tiene un mensaje de voz de ella diciéndole
que, su amiga Ángela había sufrido un intento de violación por parte de su portero
y le pedía a Javier que la fuera a ver. Javier le llama pero le contesta el padre de
Ángela y le dice que ella está descansando, esto le pone feliz a Javier y a que
podrá descansar, para después pasar a verla.
Ala mañana siguiente en la agencia, ya están todos reunidos para comenzar a
trabajar en la campaña de Coca Cola. Javier le expone que es lo que quiere para
dicha campaña, les comenta que lo que para unos países es gracioso, para otros
es ofensivo, que lo mejor es buscar verdades universales que funcionen en toda la
región y que se evitarían los diálogos, que revisaran la presentación anterior con
respecto a la dicha plena.
A medio día Javier le llama a Sara para ponerla al corriente de todo lo sucedido,
incluyendo lo de su amiga Ángela, y a su vez preguntarle de cómo va el rodaje de
calvo, diciéndole también que no deje de ir a ver a su amiga.
Ya por la noche Javier decide llamar a Ángela y queda que pasará a verla saliendo
de la agencia, él llega a la casa de Ángela y a primera vista la ve bien, pero poco a
poco ella se sienta a llorar abrazada por él. Pasan la noche juntos sin hacer el
amor, Javier llega tarde al trabajo la mañana siguiente, el día pasa rutinariamente,
le marca a Sara para contarle como le fue, pero ya Ángela se había adelantado y
ya le había contado, aunque no sabía que tanto.
Sara le vuelve a pedir que visite otra vez a su amiga, solo para ver cómo sigue,
Javier quiere decirle que no, pero Sara no le da oportunidad, cuelga el teléfono.
Hugo su antiguo compañero de equipo lo invita a tomar unas cervezas, el acepta
sin pensarlo, tras unas cuantas cervezas encima, se despide de su amigo y se va.
Toma un taxi y le da la dirección de su casa, pero le llega un mensaje de Ángela
preguntándole si va a ir a verla, y decide cambiar la dirección con el taxista y se
dirige a casa de Ángela, vuelven a pasar la noche juntos, Javier no se explica
cómo ha logrado contener su deseo como la noche anterior.
Esta vez sí acepta desayunar con ella, se despiden con un beso un poco más
largo que los anteriores, convencidos de que probablemente este será el último.

CAPITULO X
Sara llega a Madrid y se va directamente a su casa a descansar y a esperar
a Javier, él regresa temprano, llega con una botella de vino, ella celebra verlo y lo
llena de besos de todo tipo; sonoro, juguetones, mimosos y apasionados. La cena
tiene que esperar para más tarde, los dos se encuentra felices.
Por la mañana se van juntos a la agencia, ya no ocultan su relación. Sara invita a
Ángela a cenar esa noche en su casa, pero a Javier no le gusta. Le sorprende ver
a Ángela más en su papel de víctima ante Sara. En cuanto Sara se distrae un
poco, Ángela le dice a Javier que necesita verlo, que necesita un consejo, este se
compromete en ir a verla, antes de su viaje a Tokio. La semana siguiente es
complicada para Javier ya que tiene que compaginar el excesivo trabajo cotidiano
de la agencia con el proyecto de Coca Cola. Por lo tanto Sara compagina su vida
laboral con la decoración del apartamento. Por fin llega el viaje a Japón y con todo
el trabajo que ha tenido, no le ha dado tiempo de llamar a Ángela y se siente
culpable, pero decide que cuando regrese de su viaje le llamará, para ofrecerle
una disculpa.

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En la cene hablan de mil cosas y son muchas cuestiones que quedan claras. Por
ejemplo que podrían vivir en Londres o Madrid, que Javier reportaría solo al
director creativo mundial, pero tendría que compartir con Lidia las decisiones
claves. Al final de la noche se despiden acordando que Javier y Marcos se verán
en una semana, para seguir con las pláticas. Lidia promete regresar cuantas
veces sean necesarias para seguir avanzando en la propuesta. A Sara le
entusiasma la idea de poder ir a vivir a Londres, sin la presión de las dos familias,
que aunque por razones muy opuestas, representan un lastre para su vida. En
cambio Javier se siente inquieto, todo le parece maravilloso y excesivo al mismo
tiempo. Siente que le hace falta experiencia y autoridad para asumir tamaña
responsabilidad. Pero también sabe que si quiere seguir con Sara y todo lo que
ella representa, se tendrá que subir al tren.
Cuando Sara regresa le pregunta a Javier que cuando le presenta a sus padres, a
lo que él le responde que al siguiente día irían a comer con ellos. La comida con la
familia de él, resulta un éxito.

CAPITULO XI
Javier consigue ir a ver a Ángela, la cual se encuentra molesta porque
Javier no le había hablado, él de disculpa por haberle fallado y le dice que si aún
le puede ayudar en algo. También le dice que le gusta estar con ella, pero que no
quiere arriesgar su relación con Sara, ya que ella no creería que entre ellos solo
hay una amistad. Después de mucho platicar se despiden con un beso lleno de
desesperación y ternura.
Los siguientes días en la agencia, son muy vertiginosos, nuevas campañas para
Peugeot, BBVA. La secretaria de Eduardo le llama a Javier y le dice que este lo
quiere ver con urgencia, al entrar a su despacho se encuentran ya reunidos los
demás miembros del comité de dirección. Eduardo les da la noticia de que han
ganado la campaña de Coca Cola, todos celebran con unas copas de champan.
Javier se sienta en un sillón y con Eduardo ya con sus maletas y dos inmensas
carpetas para transportar todos los bocetos de la campaña de Coca Cola. El plan
es volar a Londres y conectar con otro vuelo directo a Tokio. La secretaria de
Eduardo ha reservado dos boletos de primera clase. Para llegar descansados, dijo
Eduardo a Javier está disfrutando el viaje, una buena cena y después puede
dormir durante todo el trayecto. Ya en el hotel Eduardo propone unos masajes
para relajarse a lo que Javier agradece mucho.
Al siguiente día llegan a la agencia, la cual se queda impresionado por la insólita
decoración de la entrada, sencillamente no hay nada, tan solo un inmenso espacio
vació con dos columnas de sonido que emiten una ligera reverberación para
aumentar aún más la magnificencia del lugar. En la sala de juntas esta Hiroki el
representante de la cuenta de Coca Cola para Japón y Tiaga el director creativo
de Dentsu. La reunión dura toda la mañana, por la tarde es la reunión con los
directivos de Coca Cola todo va bien, ahora es solo esperar a ver si les dan la
campaña.
Eduardo y Javier llegan a Madrid y se dirigen a la agencia a contar todos los
pormenores de la presentación y en seguida se van a descansar. El fin de semana
es tranquilo para Javier, Sara en cambio sigue de compras.
Llega el fin de semana y los padres de Sara les invitan a pasar el domingo en su
finca, él se siente nervioso a lo que Sara le dice que disfrute del día sin presiones.

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Javier pronto descubre que el don para el trato social que tanto admira en Sara es
compartido por toda la familia. Todo sale bien en esta reunión, Javier cada vez
más se va integrando a la familia y a su nuevo estilo de vida.

CAPITULO XII
Para el lunes, ya todo mundo sabía que habían ganado la campaña de
Coca Cola, el correo del director creativo, empezó a llenarse de felicitaciones de
dentro y fuera de la agencia. En publicidad las buenas noticias vuelan y las malas
también.
Por lo general, se encierran bajo siete llaves. Comprobando una vez más que ni
Ramón ni Raki están y concluyen que los nombres que empiezan con erre, llevan
el rencor, la rabia y el resentimiento en sus genes. Por la tarde Javier recibe la
visita de unos inspectores de policía, y siente una extraña sensación, pero los
hace pasar. Estos le explican que el motivo de su visita es: que están investigando
la muerte de Enrique Matas, ex portero de la finca de su amiga Ángela y le
preguntan si él recuerda algún detalle sobre la víctima. Él tarda en entender lo que
está pasando, ya que es la primera vez que escucha el apellido de Ángela y por
supuesto, el de Enrique, Javier le dice que nunca ha visto a Enrique y que de ella
es más amiga de su novia. El inspector le hace ver que sabe de los mensajes que
él y Ángela se han enviado, y eso lo pone en alerta para pensar mejor lo que dice,
entonces le dice que su novia conoce de las visitas de él para con su amiga. Los
inspectores se despiden no sin antes decirle que le llamarán a Sara para
interrogarla. Más tarde Javier llega a su casa y encuentra a Sara muy triste
llorando, esto le pone en alerta, le pregunta que es lo que paso. Ella le pregunta
que habló con su amiga, le dice que su amiga se ha estado acostando con
Enrique, que al principio todo iba bien pero que después su relación se volvió
enfermiza, sadomasoquista y él era muy celoso, y que el episodio de la ducha, no
fue otra cosa que un episodio más de su relación. Cuando ella se vio atacada por
Enrique y sorprendida por los vecinos, no le quedó más remedio que presentar la
renuncia u esto la volvería sospechosa de la muerte de Enrique. Javier se siente
aterrado porque se pudo a ver visto envuelto en ese asesinato, sin embargo
intenta tener calma e intenta calmar a su novia. A la mañana siguiente interrogan a
Sara sobre Enrique, Sara decide en ese momento alejarse de su amiga para no
verse envuelta en escándalos. No vuelven a saber nada de la policía y el trabajo
los absorbe por completo, todo lo relacionado con Ángela ha desaparecido de la
vida de ambos, es lo mejor que pueden hacer piensa Javier.
Sara le propone a Javier unas vacaciones de semana santa en el velero familiar,
él se entusiasma con la idea y toma un curso acelerado de náutica.
Es un hermoso día y se disponen a tomar un taxi que los llevará al club náutico, al
llegar los recibe el capitán, un valenciano llamado Daniel, les informa que Helga, la
cocinera está realizando las últimas compras y que los hermanos de Sara llegaran
más tarde. Entran en el velero y acomodan sus cosas en el camarote, por la tarde
llegan los hermanos de Sara. Lo primero que hacen al estar todos juntos es
brindar por un buen viaje, ese día deciden cenar en el velero, ya que Helga hizo la
cena de bienvenida, después se van a dormir. A la mañana siguiente, tirados en
una colchoneta a los rayos del sol, Javier le pide matrimonio a Sara.

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CAPITULO XIII
Han regresado del viaje, y en la agencia hay mucho trabajo, está metido
completamente en el rodaje de Coca Cola el cual deciden hacerlo en Barcelona.
Una semana antes Javier va a recibir a Taiga, su colega de Dentsu, Javier siente
cierta simpatía por ese hombre. Ya en Barcelona hablan sobre el rodaje y ya en
confianza comparten algunas experiencias vividas, en sus viajes por otros países.
Los días siguientes se concentraron en el rodaje del comercial. Es ahí donde
vuelve a ver a Raki, después de una breve discusión la invita a cenar, ella acepta,
Raki le cuenta de su desilusión de la vida.
Alejada del estrés capitalino se ha tropezado con un provincianismo inaceptable,
siempre los mismos problemas, con las mismas soluciones. Pero sobre todo un
absoluto desinterés generalizado por la calidad del trabajo, dedicarle más tiempo
es un despilfarro. Eso la mata, porque de lo que ella quiso escapar de Madrid era
del estrés y la competitividad enfermiza, pero no del trabajo bien hecho. Salen del
restaurante y casualmente se hospedan en el mismo hotel, pasan la noche juntos
a la mañana siguiente toma el vuelo de regreso a Madrid a las diez. Sara ya lo
está esperando y como siempre lo abraza y lo besa muy efusivamente, y se van a
cenar. El fin de semana pasa tranquilamente, salvo por la visita de los hermanos
de Sara, todo va de maravilla hasta que los hermanos tocan el tema de la reunión
de ambas familias para conocerse. Sara propone que sea en un restaurante, un
lugar neutro para ambas familias. Sara ha elegido el lugar perfecto, así como el
mezclar a las dos familias. Comienza hablar de los preparativos y Sara les dice
que ellos quieren algo discreto, pero su papa les dice que eso es algo que tienen
que discutir entre todos. Al terminar la cena se despiden en la puerta del
restaurante.

CAPUTULO XIV
El spot de Coca Cola ha quedado estupendo, le acaban de informar que
también ha ganado el concurso para la campaña de tráfico de este año. Antes de
reunirse con todo su equipo, su secretaria le pasa una llamada de una ex
compañera del departamento creativo y que ahora trabaja en la mayor agencia del
país. Le llama y le dice que porque una persona quería hablar con él, se trata de
Marcos Llorens el presidente de la agencia donde trabaja Silvia, es el hombre que
ha convertido su agencia en la más exitosa del sector. Marcos le dice que lo invita
a comer para tratar un asunto muy importante y que está seguro que le interesara
mucho, quedan de verse el martes siguiente. Javier se imagina que Marcos le va a
ofrecer trabajo, pero él no aceptara, dice, es cuestión de lealtad. Cuando lo
comenta con Sara, esta le dice que escuche lo que él le va a decir. Y que
pospondrían la boda hasta que él se sienta seguro en su trabajo. El planteamiento
de ella logra quitarle la presión que le estaba asfixiando, Javier agradece la
propuesta de Sara. A la semana siguiente Javier se reúne con Marcos, Javier llega
primero al restaurante, y se entretiene en revisar los correos.
Empiezan a platicar para concretar detalles, en eso estaban cuando Ángela entra
al restaurante, Javier la saluda pero ella no le hace caso y se dirige al privado. A él
le cuesta trabajo concentrarse en la plática. La oferta de trabajo resulta ser
escalofriante, el presidente de la agencia Madrileña acuerda mandarle una carta
firmada con la oferta para que el director creativo pueda hablar con Eduardo,
cuando se lo cuenta a Sara, ella le dice que es una oferta de vértigo.

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La carta le llega a Javier al siguiente día, le llama a la secretaria de Eduardo para
concertar una cita, ella le dice que inmediatamente ya que su jefe tiene que salir.
Cuando entra al despacho de Eduardo, solo le extiende la carta y le dice por favor
lea con detenimiento y que le dé su opinión de amigo. Eduardo le dice que de
aceptarlo habrá vendido su alma a los jefes de Marcas.
Javier únicamente se dedica a decir que ya ha aceptado, Eduardo dice que le
desea suerte, ya que la va a necesitar, y que si le llega a ir mal nunca llame a su
puerta. La noticia vuela por toda la agencia. Todos son miradas y silencios a su
paso a nadie le gusta que le hubiera aceptado el trabajo, pero finalmente lo
felicitan y quedan en ir al bar de enfrente para celebrarlo.

CAPITULO XV
Javier realiza su viaje a Japón, esta vez lo hace solo, el director creativo le
agradece ya que desea charlar a solas con Taiga.
Javier se encuentra con Taiga en su despacho para ver antes el anuncio de Coca-
Cola, por si hay algo que corregir, pero todo son felicitaciones.
Javier quiere comentar con el director creativo de Dentsu la oferta que ha recibido
y conocer su opinión. Cuando este le expone la situación Taiga lo piensa un
momento. El director creativo le dice que le honra que le pida su opinión y le dice
que la decisión que él tome es fundamental, ya que afectara su carrera profesional
y su vida personal. Que su mundo se hará más grande, pero también más
superficial, y en tal caso la profundidad que todos necesitamos para ser felices
tendrá que salir de el mismo. Le dice que admira su talento, su empuje y su
sinceridad. No tanto su ambición personal, que para su cultura es un signo de
flaqueza, Javier le pregunta que sim se puede llegar a su puesto sin ambición.

CPITULO XVI
Javier tiene una semana libre, le llama a Marcos para decirle que
comenzará el martes siguiente y también para comentarle su conversación con
Eduardo. Visita a sus padres, sale compras ya que pronto será el cumpleaños de
Sara, pasa los días deambulando por Madrid sin hacer nada, deteniéndose en
algún bar para comer y comprobando a través de los escaparates de las tiendas,
la cantidad de productos que jamás deseará comprase. Porque su objetivo, en
esta desbocada carrera profesional hacia delante, no es de acceder a todos con
ese mundo que jamás le atrajo en demasía, sino alejarse de la miseria en la que si
vio nacer.
El jueves decide ir a ver a Ángela, pero el portero le informa que ella ya no vive
allí, tras estudiar las posibilidades para localizarla opta por acercarse a su
despacho de abogados. La recepcionista le dice que ya no trabaja con ellos, tras
una corta plática, Javier consigue que le proporcione el lugar donde se encuentra:
Londres es donde vive ahora, la ciudad a la que tiene que pasar la mayor parte de
su vida. Cuando vuelve a su casa, Sara le dice que la han cambiado al grupo de
Iñigo, el responsable de las cuentas internacionales. Javier la consuela
fortaleciendo su autoestima diciéndole que con inglés y francés hablados y
escritos a la perfección, seguirá siendo una pieza clave en el equipo internacional.
Salen a cenar para celebrar el nombramiento del director creativo europeo, ya que
no habían tenido la oportunidad de celebrarlo ellos dos solos. Tras un viernes de
resaca y un sábado tranquilo, el domingo se van a Villarubia de Santiago a

12
celebrar el cumpleaños de Sara. El día va avanzando como si se tratara de otra
prueba que Javier debe recorrer. A media tarde comienza la entrega de regalos
por rigoroso orden generacional. Cuando le toca a Javier, Sara recibe un pequeño
estuche dentro del cual encuentra un reloj. Boucheron de exquisito diseño, pero
que deja a su novio en un buen lugar delante de tan distinguida concurrencia.
Regresan a su casa por la noche y se acuestan temprano. Ella tiene una
presentación al día siguiente y Javier disfrutara de su último día de libertad antes
de incorporarse a su nueva agencia a firmar sus papeles y recoger sus cosas. Por
fin llega el martes, Marcos le dice a Javier que llegue a las once, no antes, todos lo
reciben bastante bien, la secretaria de Marcos lo lleva hasta el despacho del
presidente, cuando abre la puerta Marcos se encuentra acompañado de Lidia. Se
sientan a tomar un café y charlar de todo un poco. Después Marcos le explica la
distribución física de la empresa a lo largo de las cinco plantas de la torre,
añadiendo que su despacho y el de su equipo, están situados en la esquina
opuesta de donde se encuentran en ese momento. Lidia le dice que en Londres
también tendrá una oficina, le presentan a su asistente personal se llama Ruth y al
director de servicios creativos responde al nombre de Jacinto. La tarde después
de comer y despedir a Lidia, es de papeleo. Al día siguiente volará a Londres, tras
un aterrizaje un tanto movido, Javier toma un taxi para que lo lleven al hotel en el
Carlton Tower. Por la noche pide un taxi para que lo lleven a la dirección que le
dieron en el antiguo trabajo de Ángela, ella abre la puerta y no puede creer que él
este allí, lo deja pasar, él la toma por el brazo y la besa. El sexo surge allí mismo.
Por la mañana le cuenta todo de su trabajo, de la culpa que sentía por no haberle
hablado, la relación con Sara. Ella le habla de lo irrespirable que le había hecho la
vida en Madrid y el deseo de romper con todo el pasado, él incluido. Tras pasar la
noche juntos quedan en volver a verse, después del trabajo.
Ya en la agencia, Lidia le presenta con los altos cargos de la compañía, todos le
reciben con cordialidad, le muestran su oficina y le presentan a su asistente.
Queda con Ángela para cenar cerca de su hotel, ella le cuenta todo lo referente a
su portero, después caminan hasta el hotel tomados de la mano. Él se despierta
primero y pide el desayuno, pues ya se le está haciendo tarde.
Cuando llega a su casa, ve a Sara más abatida que nuca, ella le dice que su
relación con Iñigo va de mal en peor, él le aconseja que mantenga la sonrisa y
cambiarse de agencia cuanto antes.

SEGUNDA PARTE

CAPITULO XVII
Ha pasado más de un año desde que llego a su nueva agencia, y sus
responsabilidades han crecido, y le acaban de asignar la dirección creativa de la
red de África y Oriente próxima. Él no sabe si es porque están satisfechos con su
labor, o si se trata de ahorrar costos, ahorra que la crisis económica empieza a
extenderse por medio mundo. Su relación con Sara continua, según la ruta
prevista, la boda la piensan realizar en la finca de Villarrubia. A estas alturas se ha
integrado completamente en la familia de su novia y disfruta de la calidad de vida
que le proporciona los privilegios cotidianos.
Con Ángela comienzan las turbulencias, no le cabe la menor duda que se trata de
una relación dependiente, en la que, al igual que Sara, es ella quien marca la ruta.

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Pero en este caso en dirección contraria. Es la fascinación que le produce esa
desvergüenza que a ella le hace libre y a él cautivo. Javier no sabe nada de
Ángela de su vida personal y profesional, pero la necesita.
Necesita convivir con su independencia para sentir la otra cara de la luna. Lejos de
su vida en Madrid, tan banal como imprescindible. Javier se dirige Johannesburgo
a la convención de Burger King en Sun City, allí lo está esperando el presidente de
la agencia local y la directora creativa ejecutiva.
Es la media noche y Javier le llama a Sara para saber cómo le ha ido. Sara le
dice que a Andrés le han hecho director general de Calvo y que quiere que ella
ocupe el puesto de directora de marketing, ella está feliz y piensa aceptar la oferta
de trabajo. El viaje de Javier por Johannesburgo transcurre entre las
presentaciones sobre las ventas comparables, los nuevos postres y las
promociones en marcha.
A la mañana siguiente, habrá tiempo libre. Alicia la directora creativa, le propone
Javier hacer “algo especial”, una Toyota todo terreno les está esperando a la
puerta del hotel para llevarles a la reserva, harán un safari, en globo.
Ni todas las palabras que Javier pudiera juntar, sería capaz de transmitir las
emociones que se adueñan de él, en cuanto sale el sol. Al aterrizar en un lugar
distinto, ya los están esperando para llevarlos al hotel para darse una ducha antes
de comer. Javier hace su presentación en la convención, lo cual es un éxito,
después un coche llega para llevarlo de vuelta al aeropuerto de Johannesburgo.
Alicia lo despide en el vestíbulo del hotel. Ya en el avión Javier le manda un
mensaje a Sara diciéndole que llegara por la mañana.
Como es sábado Sara lo está esperando en el aeropuerto, al verlo ella se le echa
encima llenándolo de besos. Camino a su casa, ella le cuenta que ha aceptado la
oferta de Andrés. Comen en la casa de Sara para cerrar los pormenores de la
boda que se celebran en dos semanas.
Por la tarde pasan a ver a los padres de Javier, su madre se encuentra enferma
desde hace unos días.
Tres jornadas de intenso trabajo para Javier y de cambios para Sara, llega el día
de la boda.
El director creativo viaja desde Madrid en su BMW X5 junto con sus padres,
siguiéndolos viene el Peugeot 308 de su hermana, el Seat León de su tía patricia,
el Ford Mondeo de Alberto, un primo segundo muy unido a la familia y el Kia
Picanto de los vecinos de toda la vida.
Al final de la tarde, el matrimonio se cambia de ropa para marcharse, duermen en
casa, donde tienen el equipaje preparado para salir al día siguiente en el vuelo de
Emiratos rumbo a Dubái, un viaje de casi ocho horas en primera clase, gentileza
de Lidia.

CAPITULO XVIII
Javier mira por la ventanilla del avión, contemplando una vez más la ciudad
de Londres bajo sus pies, es la cuarta vez que aterriza en Heathrow desde que
regreso de su luna de miel. En ninguno de los anteriores llamó a Ángela.
Cena con Lidia esa noche, la presidenta le ha propuesto pasar un rato a solas
para charlar tranquilamente. Mientras espera, Javier piensa en los motivos por los
que no ha vuelto a ver a su amante, Lidia llega puntual y mientras ordena la cena,
ella va poniendo al día a Javier, las noticias, en general no son buenas. Las crisis

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de la subprime se ha extendido como un virus por toda Europa, sencillamente no
van a cumplir el presupuesto. La presidenta le dice que ya quiere retirarse, que
Alfredo su marido no se encuentra bien. Jimmy se ha venido abajo. Piensa que
Europa entra en una fase crucial de nuestra expansión y que no existe una sola
persona en la red que la pueda sustituir. Entonces Lidia le dice, que ella piensa
que él la puede sustituir. Javier n o le puede creer, pero ella se mantiene firme, ya
que dice que Jimmy ha aceptado. Y Javier tampoco puede negarse. El necesita
hablar con alguien y le llama a Sara, a ella no le entusiasma mucho, ya que
tendrán que vivir en Londres. Quedan en platicar al regreso de Javier. Llegando a
Madrid, va a su casa directamente y encuentra a su mujer, feliz de verle, pero un
poco a la defensiva, Javier le cuenta la cena con Lidia.
La directora de marketing, no le gusta la idea de ir a vivir a Londres, puesto que
ahora tiene un buen empleo, el cual le permitiría embarazarse y además estaría
cerca de la familia. El director creativo le dice que tienen unos días para pensarlo y
que lo platicarían con calma. Al día siguiente la pareja pasa al hospital a ver a la
madre de él que sigue muy enferma.
Javier le dice a Sara que ha pensado las cosas y que ha decido rechazar la oferta.
En esos días vuelve a salir de viaje, tiene que ir a Venecia para, de allí, viajar a
Eslovenia, a su regreso Sara le pregunta si todavía la quiere y si la va a querer
cuando este gorda, entonces él cae en la cuenta que su mujer está embarazada, y
no sabe si la noticia le entusiasma, le aterra, le conmueve, le disloca o le deja
indiferente, al final opta por el entusiasmo.
Después de un fin de semana tranquilo, sin más novedades que la visita de los
hermanos, cuñadas de ella, para felicitarla por el embarazo. Javier viaja a Londres
en el primer vuelo del lunes. Va directamente a la agencia y trabaja.
Abre su correo con el fin de distraerse, su hermana le cuenta que su mamá no ha
mejorado, así que regresan al hospital.
Hugo le informa que en su antigua agencia acaban de despedir a varias personas.
Espera que la crisis dure pocos meses. Raki le cuenta que está embarazada, sin
novio ni ceremonias. Que sencillamente quiso ser madre antes de que se le
pasara el tiempo. Javier no puede evitar sonreír y preguntarse, como es posible
que su desastrosa amiga sea tan feliz haciendo todo mal y él tan desdichado
cumpliendo todo lo que es debido.
Es mediodía, hora en la que lidia pasa a recogerle para ir a comer, es allí en
donde el director creativo le dice a la presidenta que no va a aceptar, le dice que
Sara se encuentra con depresión emocional debido a su embarazo. El semblante
de Lidia cambio, se le nota la irritación en su rostro, finalmente ella corta la plática
con u frio “bueno hablare con Jimmy a ver que decide al respecto”.
Se toma su café despacio con el fin de darse ánimo para su segunda decisión
difícil del día, no tiene más remedio que acercarse a casa de Ángela.
Al llegar a su casa ve salir a Alberto, el amigo y socio de Ángela, junto con Pablo,
cuando el ascensor para en el piso de ella, llama a la puerta varias veces, hasta
que finalmente la abogada abre, pero con la cadena puesta, cuando ella abre la
puerta, Javier se encuentra con una Ángela con el rostro ensangrentado y
magulladuras por todo el cuerpo. El director creativo tiene que sujetarla para que
no se caiga, la lleva a la cama, e ignorando los deseos de ella, llama al servicios
de urgencias. El médico le aconseja llevarla a un hospital, al parecer las cosas son

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serias. Javier se siente enfermo, por lo que acaba de pasar y teme que todo llegue
a oídos.

CAPITULO XIX
Cuando Javier descubre la noticia en el digital de su país, le sorprende no
estar enfermo antes las posibles consecuencias de todo lo que últimamente le
está sucediendo. Probablemente porque la situación le ha superado, finalmente
decide afrontar la situación con descaro y una cierta manipulación de la realidad
que para eso cuenta con las armas de oficio. Termina su trabajo en la agencia y
regresa a casa temprano, al llegar a su casa encuentra a Sara con su mirada fría.
Después de una larga plática, Javier logra convencer a Sara que no tiene nada
que ver con Ángela, ella le pide que nunca la vuelva a ver, el acepta sabiendo que
miente. A estas alturas se siente tan casado con Ángela como con ella, con una
por la iglesia y con la otra por la vida. Necesita alimentarse de ambas, el hecho de
que la noticia no haya trascendido a la familia, va normalizando la situación. La
madre de Javier ya se encuentra mejor, y como habían quedado en el hospital,
van a conocer la casa. Sara es muy buena anfitriona, les muestra la casa y las
fotos de la boda. El embarazo de Sara avanza con altibajos. Cuando se quedan
solos, ella se siente agotada y decide meterse a la cama temprano. Javier opta por
terminarse el vino, pone algo de música suave y enciende el ordenador con el fin
de revisar el correo, cuando de forma instintiva, casi sin saber lo que hace
comienza a escribir. Se detiene para leer lo que lleva escrito y con lo que se
encuentra es con la última capa de su existencia, la más profunda de todas, el
soló quería juntar palabras. Lleva años prosperando en su trabajo, luchando en
unas de las profesiones más competitivas que existen, intentando alejarse cada
vez más de la calle Argumosa y, sin embargo, su vida, jamás se ha escapado de
los bordes de aquel plato de su infancia.
A la mañana siguiente recibe un mensaje de Lidia, para convocarle a una reunión
en Londres, al día siguiente los dos solos, esta vez la cita es en su despacho.
Toca a su puerta a las 11:30 am, la hora convenida, entra expectante. La
presidenta le dice que Jimmy desea hablar con él personalmente. Dice que él
piensa hacer una profunda restructuración en la dirección de la compañía, pero
que a ella no le ha comentado nada. Javier le pide a su secretaria que concrete
una reunión con Jimmy, luego se encierra en su despacho para realizar unas
llamadas. La primera es a Sara pero ella está ocupada. Regresa a Madrid ese
mismo día, allí asistió a una convención de ventas que calvo realiza.
En Toledo aprovecha para realizar una llamada telefónica ala hospital donde está
ingresada Ángela. Le informan que ha sido dada de alta, cuelga con el fin de
llamar a su móvil. En una conversación extraña, próxima y distante. Él habla de lo
mucho que le ha afectado lo sucedido, que el miedo a perderla le ha revelado
cuanto la necesita, aunque no sabría concretar el sentimiento que envuelve esa
dependencia. Porque hay pasión pero también rencor por no haber confiado en él
y que también va a luchar por ella, que la quiere a su lado porque sin su
presencia, jamás alcanzará lo que quiere ser. Ángela lo escucha con atención,
aunque no está segura de sí todo lo que dijo es cierto. La conversación termina
con un “iré a verte” y un no se “si estaré”. Al día siguiente pasa el día en la
agencia, pasa mucho tiempo preparando las respuestas a todas las preguntas que

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Jimmy pueda hacerle. Vuelve a Nueva York a las once de la mañana, sale de la
agencia a las ocho de la noche.
El Jet Lag le despierta temprano, decide tomar algo ligero antes del desayuno. No
quiere encontrarse con Jimmy, con el estómago vacío. Mientras le sirven el
desayuno, abre el ordenador, para ver si tiene respuesta de Taiga y la tiene. Él le
dice escucha a Jimmy con atención, ponte de su parte, no en su lugar, entonces él
te mostrara las puertas y solo tendrás que abrir una, aquella que sea la mejor para
ti, pero comprendiendo que lo más satisfactorio, será que al cerrarla os deje a los
dos del mismo lado.
El presidente mundial de la agencia se presenta antes de la hora acordada y
saluda a Javier con un cálido abrazo que el director creativo agradece
enormemente. Entonces el presidente le da un panorama general y le dice que el
asumirá la responsabilidad general de la agencia española, ya que despedirá a
Marcos, y la presidencia Europea y así podría seguir viviendo en Madrid sin
problemas y dar un salto espectacular a su carrera. Javier no lo duda y acepta,
acuerdan que el director del departamento legal, junto con la de recursos
humanos, viajaran la semana siguiente a Madrid, para reunirse con Marcos e
informarle de su cese. Unos días más tarde el propio Jimmy ira a la agencia para
comunicarle a todo el mundo el doble nombramiento de Javier. Todo ha sucedido
en menos de una hora, que poco tiempo lleva destruir o favorecer el destino de
una persona, se dice Javier cuando se queda sólo.
Se pide otro café y abre su ordenador para comprobar si hay algún vuelo anterior
al suyo, para regresar a Madrid, ahora solo quiere regresar a casa y abrazar a
Sara. El avión aterriza en Madrid a las siete de la mañana, el todavía director
creativo llega a casa, antes de que Sara se haya marchado. Le cuenta su
conversación con Jimmy, Javier está feliz de verla tan contenta, ella le dice que si
ya no tendrá que volver a Londres, duda por un instante y le dice que por un
determinado tiempo, hasta que las cosas queden resueltas en Londres, pero que
después ya no será necesario.

CAPITULO XX
Durante la siguiente semana evita cruzarse con Marcos, él reorganiza su
agenda, visita a su madre para comprobar que este mejor. Su hermana es la que
no está bien, acaban de despedir al marido, y no la tendrá fácil para encontrar
trabajo.
El jueves recibe un correo confidencial de Nueva York, en el que detallan los
pasos para ejecutar el plan previsto. El próximo lunes el abogado y la directora de
recursos humanos llegarán a Madrid. A Javier le falta el aire, nunca se había
tenido que enfrentar a una situación así, sustituir a una de las leyendas de la
publicidad española, tener que enfrentarse a cientos de personas que no conoce y
después viajar a Londres para despedir a los que si conoce, le produce nauseas.
Ese fin de semana lo pasan en la finca Villarubia de Santiago, necesitan
descansar. Regresan a Madrid el domingo por la noche. La semana comienza y
hay mucho alboroto en la agencia, al mediodía recibe un correo diciendo que el
abogado y la directora de recursos humanos llegaron a Madrid y que desean que
cene con ellos. La reunión con Marcos está fijada para las nueve, Javier llega
antes y se encierra en su despacho a la espera que le avisen. Ruth viene a
comunicarle que lo están esperando en el despacho del presidente. Le explican la

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situación y les dice que lo dejen solo con Marcos, para ultimar detalles, todo es
tensión en esos momentos en la agencia. Javier tiene la misma situación agridulce
que cuando sustituyó a Ramón, el director creativo de su primera agencia, se
pregunta ¿Por qué siempre tengo que ascender pisando cadáveres?
La jornada siguiente resulta más fácil, con Marcos, después el nuevo presidente
tiene que volar a Londres, con el fin de enfrentarse a la segunda parte de esta
tragedia. Va a ver a Ángela, para contarle las novedades de la agencia de Madrid
y lo que le espera al día siguiente. También le habla de su ascenso, tras la
segunda copa, la conversación regresa a sus mejores tiempos. Ángela también le
cuenta lo mal que la paso tras el ataque sufrido.
Al día siguiente en la agencia, es Lidia la que habla y les dice que todo el
departamento regional desaparecerá, el nuevo presidente Europeo y de España
regresan a Madrid. El lunes siguiente es una locura en la agencia de Madrid,
presentación de los clientes, el organigrama, la situación financiera.
Javier recibe un mensaje de Ángela, diciéndole que se regresó a Madrid y que por
el momento está en casa de su amiga, que también conoce a Sara y que no iban a
poder verse.
Entonces él le propone escaparse el fin de semana a Roma, Ángela acepta con
mucho gusto, para un fin de semana fantástico.

CAPITULO XXI
La ginecóloga adopta el tono más adecuado para decirles la mala noticia:
su bebe padece síndrome de Down. La doctora les dice que deja en sus manos la
decisión de continuar o no con el embarazo. Ellos abandonan la clínica
destrozados. Sara no quiere perder él bebe, en cambio Javier no.
Él se enoja porque dice que se tomó la decisión de seguir con el embarazo sin
tomarlo en cuenta a él.
Durante la cena cada uno encerrado en sus propios pensamientos. En los de ella
pesa su sentido de la maternidad, pero también la certeza que cualquier decisión
que suponga la interrupción del embarazo implicara la ruptura con su mayor
soporte vital: la familia. Por su parte Javier se siente en una encrucijada sin salida.
El aborto es inabordable, y solo tiene dos opciones: separarse de Sara, con lo que
quedaría ante todos como el mayor canalla de la humildad, o aceptar una vida en
la que, está seguro, queda desterrada cualquier posibilidad de ser feliz.
Finalmente, decide seguir con Sara pero sin Sara su matrimonio queda desde este
preciso momento disuelto para siempre. Se divorcia del compromiso adquiero con
una mujer que no está respetando el suyo.
Sara lo adivina desde el primer momento, basto el beso de buenas noches para
que comprenda que su vida nunca será la misma. Javier se encierra en su trabajo.
Viajando sin descanso, apenas ve a Sara y cuando coinciden solo mantienen una
actitud atenta, como siempre la madre de ella se está encargando de que todo
salga perfecto. Llega el día de noche buena y va al bar donde siempre se reúnen
los del medio. La pasa realmente bien. No recuerda cuando ha sido la última vez
que se río con tantas ganas y se congratula por haber venido.
El matrimonio celebra las fiestas de Navidad en familia. La cena de noche buena
con los padres de ella, con la comida del día siguiente con los de él. En ambos
casos todos fingen una dicha que nadie siente. Llega la fiesta de noche buena

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acuden a la fiesta de los Figueroa. Javier espera y pasadas las doce le dice a Sara
que no se siente bien y sale del hotel.
Al salir en lugar de dirigirse a su casa, va a casa de Ángela. Cuando ella le abre la
puerta, encuentra a un Javier transformado. Han desaparecido los últimos
rescoldos de temor, pero también de inocencia. En términos evolutivos, muestro la
característica más identificativa del último eslabón de su especie: el conformismo.
Javier le dice que necesita verla para contarle todo lo relativo con Sara. Su
embarazo, el comportamiento de ella en no tomarlo en cuenta, su obsesión con el
trabajo. Regresa a casa ya casi amaneciendo. Pese a ello, su mujer no le hace el
menor comentario. Esa tarde ella tendrá una reunión con unas amigas y el decide
buscar a Hugo. Al revisar su correo, tiene un mensaje de Rack: la cual insiste en
tenerlo al tanto de su embarazo.
Le dice que es niño y que le gustaría que el fuera el padrino. El acepta aunque no
muy entusiasmado. Le empieza a escribir a Taiga, pero le cuesta mucho trabajo
escribir sus sentimientos. Se aparta de la mesa tratando de convencerse de que
es normal el cansancio, y la falta de sueño le han bloqueado, por un instante
queda con Hugo en el mismo bar de siempre. Hugo le comenta que a él le va muy
bien. La crisis económica lo ha alcanzado.
Por otra parte Javier le confiesa lo del embarazo de Sara y del problema del bebe.
Su ex compañero le dice que se está planteando un problema inexistente. Un hijo
con dificultades es un peso cuando eres tú el que tienes que encargarte ello. Los
padres de Sara cuentan con niñerías, choferes, jardineros que se encarguen de
todo eso y que él ahora es uno de ellos. Se despiden con un fuerte abrazo. De
vuelta a casa Javier intenta volver a escribir a Taigo, pero sigue sin conseguirlo,
entonces se acuerda de un correo de Rack en el que le decía que algún día ese
redactor de anuncios dejaría de existir, que dentro de algún tiempo no sabrá qué
hacer con las palabras.
Javier empieza a contar los beneficios que tiene: es el presidente europeo, tiene
buenos ingresos está casado con una mujer rica, cuyo cariño aún puede
recuperar, tiene la amante más hermosa, se ha liberado para siempre de aquella
absurda obsesión infantil de juntar palabras en el borde del plato materno. A partir
de aquel momento Javier se instala en la mentira. Les miente a todos, en cuanto al
trabajo parece que pueda llegar más alto. Pero su poder ha alcanzado ese nivel
en que la ambición se retroalimenta y no puede detenerse.
Ya no hay de donde huir a donde dirigirse. Se trata solo de acceder, sin meta ni
destino. Arriba, más arriba… hasta llegar al vacío.

CAPITULO XXII
Es el festival internacional de publicidad de Cannes. En ese lugar se
reunirán a desayunar durante una semana los líderes de la publicidad mundial
para decidir qué sucederá en la industria durante el próximo año.
Coincidirán presidentes de todas las multinacionales para establecer las
estrategias con las que intentan destruirse unos a otros. Sara no lo acompaña en
esta ocasión. Su embarazo, en el séptimo mes, ya no le permite estar viajando.
Tardaron tres años para volver a querer tener otro hijo, ahora que todo va bien no
quieren arriesgar. Una vez acreditado regresar a su habitación a darse una ducha
y ponerse algo más liviano, se dirige a un centro comercial, quiere comprarle un
regalo a su invitada que llegara tres días después.

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Javier se la pasa de reunión en reunión. Su agencia incluye conversaciones con
directivos de la agencias, lo reciben con la deferencia debida al máximo
responsable de tres regiones y con la certeza de que muy probablemente será el
nuevo presidente mundial en cuanto Jimmy decida abandonar el cargo. Jimmy
llega hasta el jueves, el presidente mundial les comenta como le ha ido en la
reunión con Sony, a él le gustaría terminar su carrera con un éxito como ese.
El viernes Javier y Jimmy desayunan juntos en la terraza del majes tic. El
presidente mundial le comenta: todos se están preguntando si voy a proponerte
que seas mi sucesor. Me quieren enterrar cuanto antes porque piensan que tú lo
harás peor. Infelices, no saben la que les viene encima. Tienes menos
experiencia, es cierto, pero necesitas triunfar más que yo lo necesite jamás. Nunca
he sabido la razón, me limito a beneficiarme de ellos. Pero ahora será la red
entera la que se favorezca.
Terminan el desayuno y cada uno se marcha por su lado. Javier sale a caminar,
para similar lo que acaba de pasar, repite la palabra despacio, “Pre-si-den-te”,
para poder contar las letras. Como “predecesor” “preferente” previsible…
“precipicio”. De pronto se da cuenta que las palabras vuelven a jugar con él.
Sonríe sin entusiasmo, pues sabe que eso hecho tan trivial cierra todo un ciclo de
su vida.
La convención sigue con más reuniones. Esa noche Jimmy convoca a los altos
directivos presentes en el festival, a una cena. Unas cuarenta personas, allí el
presidente mundial hace público el revelo. Su jubilación tendrá lugar en diciembre,
tras la cena navideña de la oficina en nueva york, a partir de ese momento Javier
será el nuevo presidente mundial.
Al día siguiente hace sus maletas, dividiéndolo en dos partes. Paga su cuenta en
recepción, pidiendo que le guarden una de las maletas, hasta la semana siguiente.
Previsto de todo lo necesario para partir inmediatamente. En eso ve a lo lejos a su
invitada, el recuerda el primer beso que se dieron durante el safari el globo por la
reserva de Sun City.
Tienen por delante siente días.

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OPINION PERSONAL

En mi opinión este libro no fue tanto de mi agrado ya que no acostumbro a

leer este tipo de literatura, pero si algo me pudo haber llamado la atención fue el
enfoque que parecía tener hacia las palabras y como vivimos y convivimos con
ellas. Como alguien a quien el uso de la palabra siempre le ha parecido
fascinante, realmente quería ver que me ofrecía la trama.
Y si bien me he encontrado con algunos detalles muy buenos, repito no es de mi
agrado esta literatura.

Quizás será que no logré conectar jamás con Javier, el protagonista experto en
palabras. Será que no me convenció su personalidad de hombre conquistador.
Será que no me conquistó como solía conquistar a sus compañeras de
trabajo. Será que lo único que me gustó de él fue su conocimiento del idioma y su
palabrería constante sobre letras sobresalientes y letras engañosas.

Y es que Javier, a pesar de ser muy exitoso en su trabajo, en realidad me parece

inestable en su vida. Saliendo de una relación a otra sin preocupación, haciendo
ver como si sus parejas o citas fueran solo un juego. Enamorándose de una y
acostándose con otra. Me faltó el amor propio de esas mujeres que sólo veían a
un encantador, a un hombre guapo que sabía hablar más que bien. Pero no es
sólo que su actitud de "Todas Mías" me pareciera mala. Su actitud me pareció
mala incluso más allá.
Me faltó la lealtad de Javier. No sólo para ellas, sino para quien lo había hecho
crecer. Justo él lo reconoce cuando dice que va acumulando cadáveres a lo largo
de su carrera.
En resumen, no me gustó Javier. Por otra parte, las co-protagonistas no lograron
equilibrar la personalidad extraña de él. De las tres (Sara, Ángela y Raki), sólo una
logró convencerme y fue justo la que se alejó de Javier.

En el aspecto de la narrativa, si bien, me parece entretenida, creo que puede

resultar pesada e incluso aburrida en algunos casos. Es un libro bien escrito, pero
no creo que para todos o tan lo menos no para mi. Lo cotidiano de la historia no
logra hacer que me se sienta identificado, sino por el contrario, provoca confusión
al leer una realidad que rara vez vivimos.

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