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CONSERVADURISMO Y DEMOCRACIA

«El conservadurismo es un fenómeno de la historia de las ideologías y las doctrinas políticas,


determinado históricamente. Es un fenómeno que surge con el peligro de disolución de las
estructuras sociales existentes; y que consistiría en el intento de agrupaciones sociales
amenazadas por dominar los desafíos del cambio.»
Dora Kanoussi

El conservadurismo es la formación de un grupo social, generalmente


personas con muy buena posición económica quienes se agrupan con el fin de
seguir manteniendo sus riquezas, sus privilegios y sobre todo que perpetúe la
estratificación de clases. Por ello, cuando este grupo de personas ve en riesgo o
en amenaza de que se produzcan cambios en algunos de estos aspectos, por culpa
de otros grupos de personas las cuales buscan igualdad y equidad para todos los
miembros de la sociedad, tratan de conservar las estructuras sociales
fervorosamente, así como sus privilegios. En tal contexto, el presente ensayo
tomará por tema el conservadurismo, el cual es relevante porque es necesario
analizar la perspectiva de dicha visión debido a que se llegarían a conocer las
justificaciones de los argumentos a favor de actos considerados conservadores
para el “mantenimiento” del sistema. De este modo, si surgiera una nueva forma
de gobierno que es apena aplicable, donde se atenta y se arriesga a perder la
estabilidad para un desarrollo armonioso) que la democracia ha podido
mantener y se ha defendido durante varias decenas de años, se intentará
protegerla, entonces ¿se considera este acto, un acto “conservador”? ¿Puede
manifestarse el conservadurismo, en una democracia?

La interrogante a la cual se intentará responder es contradictoria ya que la


democracia se le conoce por la manifestación de las libertades, pero una de las
libertades, es que el individuo pueda escoger como se determinará, y si éste así
lo decide mantener un estado en un mismo sistema este podrá hacerlo, por el
derecho de ejercer su libertad a lo que él cree conveniente. Así, la respuesta es
que el conservadurismo si puede manifestarse en una democracia, pero el
contexto histórico influye demasiado más que las ideologías en sí. Este contexto
similar se vivió en épocas pasadas donde los estados monárquicos (por diferentes
razones) comienzan a dejar esta forma de gobierno para poder adoptar la
democracia.

Primero, es necesario enumerar las características esenciales del


pensamiento conservador, así como los elementos que definen este pensamiento.
De acuerdo a Kanoussi el primero es la convicción de que la sociedad requiere
orden, y un sistema diferenciado de clases sociales, y que la justificación de esas
clases se apoya en un Dios que las avala; el convencimiento de que la libertad del
hombre está ligado al respeto del derecho de propiedad; el tercero, la aceptación
de un cuerpo de creencias basadas en la fe y desconfianza en el cambio y la
innovación; la aceptación de que la costumbre, la tradición y los códigos de
conducta, son los mejores diques en contra el deseo desmedido de poder.
Asimismo, la aceptación de que un moderado ritmo de cambio es aceptable en
una sociedad, pero siempre y cuando éste sea controlado y dirigido por la
autoridad constituida. Y sobre todo, que debe haber una autoridad competente,
que regule las acciones morales, políticas y económicas de la sociedad, la cual no
está sujeta a cuestionamientos por parte de los subordinados.

El conservadurismo se sustenta en tres valores fundamentales: la


autoridad, la lealtad y la tradición. Rinde culto a la espiritualidad y al valor de lo
inconmensurable. En ese sentido, puede ser descrito como reaccionario,
buscando una reafirmación, no solo de formas políticas, si no sociales anteriores,
que se perciban como una restauración de los principios de la autoridad
monárquica absoluta y del catolicismo como fuente única de valores y estabilidad
social.

Del mismo modo, para entender el conservadurismo es necesario


comprender su inicio con lo que se establece según los parámetros que ya se han
marcado. La tendencia se marca con la finalización de una guerra que marca una
pauta distinta que afecta directa e indirectamente a toda la población que se
encuentre en situación de estado-nación. La Revolución Francesa expandió
algunas ideas innovadoras para el tiempo en que se colocan, ideas que atentan
contra toda una sociedad ya acostumbrada a varios argumentos monárquicos-
religiosos. Así pues, pensar que el pueblo está por encima del ente supremo era
un acto que atenta contra valores morales de una nación arraigada a la
costumbre. El conservadurismo es considerado como algo identificable
sociológicamente. Las bases sociales entonces serian el rey, la gran propiedad, los
privilegios de los nobles. A opinión de Kanoussi: «El conservadurismo sería
expresión e ideología de determinados intereses definidos que se refieren a un
movimiento de capas aristocráticas en contra de la emancipación impulsada por
las clases burguesas».

Edmund Burke1, considerado el padre del conservadurismo debido a lo


que plantea que ha sido consecuencia de la Revolución de Francia, no es que esté
en contra del cambio si no que lo que tratará de mostrar será lo bueno de la
monarquía, como afectaría un cambio tan radical. Así, expresa la idea: «Me
complazco en afirmar que deseo una libertad regulada, moral y viril, con la
misma intensidad que cualquier miembro de esta sociedad, sea quien fuere; y en
todo el curso de mi carrera pública he dado buenas pruebas de mi fidelidad a esa
causa». De igual forma, hace mención sobre cómo se tiene que evaluar a un
gobierno que derive de la revolución de Francia, ya que critica que como unos
hombres sin experiencia en la administración pública puedan llevar acabo el acto
de gobernar con eficiencia y eficacia, ya que debido a la falta de experiencia sería
ilógico que el primer gobierno emanado de esta revolución no fuera perfecto.

Es necesario recalcar que las ideas liberales repercuten en el campo del


absolutismo a sobremanera, como un acto que Burkel menciona, en Declaración
de los derechos del hombre: «su doctrina afecta a nuestra constitución en sus partes
vitales [...]. Es casi el único rey legítimo que hay en el mundo, porque es el único
que debe su corona a la elección de su pueblo». De este modo, el
conservacionismo primitivo o monarquía, en la mayoría de los sistemas, se basa
en la sucesión al trono, pero esta sucesión será avalada por la religión que
refuerza la mayoría en un sistema, cuando se dice que el pueblo recae el poder
de elección, se entiende que no es un ser divino el que da este mando si no que
ahora hay alguien por encima de él. En tal contexto, se puede entender por qué
el conservadurismo como ideología es considerado un fenómeno de crisis: su
auge ha siempre coincidido con los grandes cambios como lo fueron la
Revolución Francesa, la Revolución bolchevique o el keynesismo que otorgó al
capitalismo cierto carácter igualitario.

El conservadurismo en Alemania puede ser visto como el primero que


puede ser llamado moderno en que, a diferencia de los otros, toma en
consideración el hecho de que hay desigualdad social que lleva no solo a la
pobreza sino a la inestabilidad social. Por su parte, en Estados se encontró,
después de las Guerras de la Independencia, desproveído de una corriente
monarquista y se expresó, por lo tanto, en la mantención del orden social
existente y en la preservación de las instituciones republicanas emergentes.

Los conservadores favorecen tradiciones, y que son adversos a los cambios


bruscos o radicales. En lo social, los conservadores defienden valores familiares
y religiosos. Generalmente el conservadurismo se asocia al nacionalismo y el
patriotismo. En lo económico, los conservadores históricamente se posicionaron
como proteccionistas en oposición al librecambismo económico. Actualmente
esta asociación es menos clara, ya que durante el siglo XX algunos de los partidos
conservadores adoptaron posiciones liberales al fusionarse con partidos de esta
tendencia, aliados en la defensa del orden socioeconómico capitalista.
Consecuentemente, en la actualidad en el conservadurismo político coexisten
diversas posturas sobre lo económico. Acá se podría hablar de democracia en
cierta medida, si es que se toma el concepto adecuado de modo que quede
enlazado con las ideas liberales.

Igualmente, aun cuando muchos conservadores contemporáneos se


definen como partidarios de la democracia, algunos otros conservadores
proponen o defienden posiciones monárquicas. De este modo, mientras algunos
buscan mantener las condiciones presentes, otros buscan volver a situaciones
anteriores, existe una cierta confusión -incluso dentro de una misma cultura
política- acerca de quiénes serían, en un momento dado, “conservadores”. Por
ejemplo, Kanoussi en su discurso: “¿Quiénes son los conservadores en la Rusia de
estos días? Son los estalinistas irredentos o los reformadores que han aceptado
las visiones políticas de derecha de los conservadores modernos, tal como
Margaret Thatcher"

Es difícil, en la actualidad tener una gran referencia del conservadurismo


en su más pura esencia ya que hoy en día el sistema que nos rige sigue siendo
conservador, pero conservador a en la medida que se acopla a lo que el
gobernante y la época lo requieran. Ya está muy establecido dentro de la
sociedad, un grandísimo ejemplo: la religión católica, aun se sigue creyendo que
realmente existe un ser supremo que nos salvara de todos nuestros males, esto
no es más que la herencia del conservadurismo. Dependiendo de la época la
democracia se puede manifestar en dicha ideología, pero tiene que existir
condicionantes históricos que lo permitan. Así en un inicio, las ideas liberales
pueden reducir el campo de acción del absolutismo monárquico pero conforme,
se va avanzando y se llega a un conservadurismo moderno, se puede hacer
referencia a la conciliación de ambas posturas.

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