Comparece, don CRISTIAN HERNAN CORTEZ LILLO, chileno, casado bajo el
régimen de separación total de bienes, empleado, cédula nacional de identidad número quince millones doscientos setenta y nueve mil setecientos cuarenta guión cero, domiciliado en calle Armada de Chile con Francisco Vergara sin número, en la comuna y ciudad de Iquique, mayor de edad, quien acredita su identidad con la cédula respectiva y expone: PRIMERO: Antecedentes.- Que según consta en la inscripción de matrimonio número ciento cuarenta y tres del año dos mil doce de la circunscripción de Temuco con fecha diez de febrero de dos mil doce, contrajo matrimonio con doña Andrea Elizabeth Silva Quiñeiñir, cédula nacional de identidad número trece millones trescientos diecisiete mil cuatrocientos cuarenta y tres guion cinco, domiciliada en calle Bolonia número dos mil trescientos veinticinco, Amanecer, comuna y ciudad de Temuco. El matrimonio se celebró bajo el régimen de separación total de bienes. De esta unión nació una hija de filiación matrimonial llamada Mariana Isidora Cortez Silva, cédula nacional de identidad número veinticuatro millones quinientos cincuenta y un mil setenta y tres guion K, inscrita en la oficina de Iquique bajo el número novecientos cuarenta y siete del año dos mil catorce. SEGUNDO: Mandato.- Que por el presente instrumento, viene en conferir mandato judicial a doña CECILIA ALEJANDRA VERA MARDONES, chilena, abogada de la clínica jurídica de la Universidad Santo Tomás, divorciada, cédula nacional de identidad número trece millones quinientos quince mil novecientos ochenta y siete guion cinco, domiciliada en calle Thiers número quinientos veintiocho de la ciudad y comuna de Temuco, para que lo represente en todo tipo de juicios y actos judiciales contenciosos y no contenciosos, de cualquier clase y naturaleza que sean y que actualmente tenga pendientes o le ocurran en lo sucesivo, con la especial limitación de no poder contestar nuevas demandas ni ser emplazado en gestión judicial alguna por su mandante sin previa notificación personal del compareciente. Se confieren al mandatario las facultades indicadas en ambos incisos del artículo siete del Código de Procedimiento Civil y especialmente las de demandar, iniciar cualquier otra especie de gestiones judiciales, así sean de jurisdicción voluntaria o contenciosa, reconvenir, contestar demandas, reconvenciones, desistirse en primera instancia de la acción deducida, aceptar la demanda contraria previo emplazamiento personal del mandante, renunciar a los recursos y términos legales, transigir judicial o extrajudicialmente, comprometer, otorgar a los árbitros facultades de arbitradores, aprobar convenios y percibir. En el desempeño de este mandato el mandatario podrán representar al mandante en todos los juicios o gestiones judiciales en que tenga interés actualmente o lo tuviera en lo sucesivo, ante cualquier Tribunal de orden judicial, de compromiso o administrativo, en juicios de cualquier naturaleza, sea que intervenga el mandante como demandante, demandado, tercerista coadyuvante o excluyente, querellante o querellado, o a cualquier otro título o en cualquier otra forma hasta la completa ejecución de la sentencia, pudiendo nombrar abogados patrocinantes y apoderados habilitados en derecho con todas las facultades que por este instrumento se le confieren, y pudiendo delegar ese poder y reasumirlo cuantas veces lo estime conveniente. TERCERO: se faculta expresamente al mandatario para que represente al mandante en juicio de divorcio ya sea unilateral o de común acuerdo y además para que pueda suscribir escrituras públicas y privadas que tengan por objeto llevar a cabo el mandato encomendado y hasta la obtención del divorcio y en especial para suscribir acuerdo de relaciones mutuas y además para que pueda asistir a las audiencias de divorcio seguido con su cónyuge doña Andrea Elizabeth Silva Quiñeiñir, tanto preparatoria como de juicio, a renunciar de manera expresa al derecho a compensación económica que pudiere o no tener derecho y, en caso de inasistencia del mandante a la audiencia de estilo, representarlo en el llamado a reconciliación especial del artículo sesenta y siete de la Ley de Matrimonio Civil, señalando al Tribunal, -según sus expresas instrucciones-, que no tiene interés alguno en recomponer el vínculo matrimonial y a rechazar el llamado del juez a conciliación. Escritura redactada por la abogado Cecilia Alejandra Vera Mardones. En comprobante y previa lectura, firman el compareciente. Anotada. Se da copia.- DOY FE.-