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CONSERVATORIO NACIONAL DEL MÚSICA

CURSO: HISTORIA DE LA MÚSICAI


MAESTRA: MARISOL CHAY
ESCRITURA MUSICAL

En los inicios de la Edad Media, se continuaba utilizando, la Notación neumática derivada


del ancestral sistema judío Ta´amim de acentos, neumas o signos que representaban las
alturas, el número de notas de cada tono que debía cantarse y la dirección de la línea
melódica ascendente o descendente, pero sin precisar exactamente, el régimen de
intervalos existente entre cada una de ellas, ni la relación de duración de las mismas.
Así pues, los manuscritos musicales pertenecientes a los más remotos tiempos de la
Iglesia están escritos en esa Notación Neumática.

Del siglo IX al X la Notación pasó de los oscuros Neumas al uso de las Letras o Caracteres
latinos para identificar los diferentes sonidos o alturas y se inició el proceso de escribirlos
con pautas o líneas, a partir de una primera línea. Pero con una sola línea no se podían
establecer parámetros claros y precisos de referencia sonora; se inició entonces, un largo
proceso de desarrollo de las investigaciones para lograr la elaboración de un sistema más
perfecto y completo de escritura musical. Muy pronto, a la primera línea escrita en rojo y
la cual representaba un sonido equivalente al fa, le siguió otra más; escrita en amarillo
esta línea horizontal y paralela representaba el do; el monje y músico francés llamado
HUCBALDO (c.840-930), en sus escritos teóricos, y especialmente, en el tratado llamado
también: Harmonica Institutiones, uno de los primeros compendios de la teoría musical
occidental, utiliza estas dos líneas que marcan diferencia de Quintas, es decir una
distancia de cinco tonos (fa-do).Para mayor claridad, Hucbaldo les dio los diferentes
colores. A él también se le atribuye el uso del Organum como procedimiento musical para
armonizar al canto gregoriano.Casi simultáneamente con las primeras líneas que se
trazaron para fijar alturas de sonido, se idearon las CLAVES para establecer parámetros
que dotaran a las líneas de sentido.
Aparecieron así, las Claves de Fa (F) y de Do (C), respectivamente. Un poco después, la de
Sol (G).
Pero los aportes más importantes cambios y renovaciones se producen a mediados del
siglo XI, gracias a los trabajo del monje benedictino y teórico musical de la Abadía de
Saint-Maur-des-Fossés, llamado Guido (Guy), conocido más popularmente, por haber
nacido probablemente, en la ciudad italiana de Arezzo (Toscana), como Guittone o GUIDO
D´AREZZO (c.990-1050), quien ha sido llamado con propiedad El Padre de la Música
Occidental. En su tratado Micrologus (c.1025), desarrolló un Sistema de cuatro líneas
(Tetragrama) precursor del actual Pentagrama.

Guido fue el inventor del Sistema de Solfeo y de la Notación actual: Cambió en forma
simple, la notación neumática y la de las letras latinas (Notación Alfabética) para ello
utilizó el Himno para las Vísperas de la Fiesta de San Juan Bautista (24 de Junio), que
había sido compuesto en el siglo VIII por el diácono, teólogo, historiador y poeta
descendiente de una noble familia lombarda, llamado Paulus (Friuli, c.720-c.799) conocido
también como Paulus Casinensis o Levita, y cuyo apellido era Warnfridus. Guido D’Arezzo,
adaptó las primeras sílabas de cada verso de dicho Himno para facilitar de esta manera,
la Solmisación, memorización y entonación de las notas del Hexacordum:
“Ut queant láxis, Resonare fibris, Mira gestorum, Fámuli tuorum, Sólve pollúti, Labii reátum,
Sáncte Ioannes”…(Oh! San Juan, Desata el reato de los labios de estos tus siervos, para
que puedan cantar con voz resonante tus maravillas).
Así mismo, inventó la Mano Guidoniana, como punto de referencia para la entonación y el
canto, cuyas articulaciones permitían al cantor recordarse de las notas. Además,
difundió la aplicación y uso de recursos quironímicos para la enseñanza del canto y la
dirección coral.

El polémico Papa Juan XIX (Papa del 1024 al 1032), protector de Guido, le llamó
para que le explicara su sistema de Solmisación y quedó tan emocionado que: …ordenó
que todas las iglesias y claustros adoptaran el modelo de Guido para la enseñanza y
práctica de la música…

Todos los esfuerzos y logros de los trabajos realizados durante casi seis siglos, a
partir del siglo IV, para obtener una manera práctica de representar con la mayor
exactitud y fidelidad los textos y músicas para los usos litúrgicos y ceremoniales del
Cristianismo, se vieron concretados con la sustitución de la notación neumática por la
Notación Diastemática.

Ello representó un nuevo proceso de apertura y un importante paso para la


Universalización de nuestro Sistema Musical, ya que las herramientas de trabajo logradas,
permitieron a los músicos poder expresar y perpetuar sus creaciones y manifestaciones
musicales profanas y populares, utilizándolas de la misma manera como se aplicaban
para los usos musicales litúrgico-religiosos.

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