4) Luego de la revolución industrial se dieron una serie de cambios muy importantes que

afectaron a toda la masa de población asentada recientemente en los centros urbanos. Estos
crecieron considerablemente debido a que nuevas técnicas de nutrición y medicina innovaban y
generaban un mejor nivel de vida disminuyendo así el índice de mortalidad y favoreciendo al
índice de natalidad.
Las ciudades adquirieron ya un sentido distinto y se diferenciaban notablemente del campo
porque comenzaron a tener modificaciones tanto laborales como territoriales.
En el plano laboral hubo muchas innovaciones productivas que incrementaron la producción
como es en el caso de las industrias metalúrgicas, con el perfeccionamiento del proceso de
pudelado para la conversión simplificada de hierro fundido en hierro forjado, y textiles con las
máquinas de hilar y luego con el telar mecánico.
La unión que se produjo entre la ciudad y la industria fue de una gran importancia ya que era
necesario poder facilitar a las ciudades los diferentes productos que se estaban elaborando. Es
así como surgieron nuevas formas de transporte por medio del vapor. La locomotora, inaugurada
junto a su respectiva línea ferroviaria en 1825, marcó un gran hecho que tuvo repercusiones en
las décadas posteriores. Luego, en 1865, la navegación a vapor facilitó la unión de grandes
distancias beneficiando las migraciones europeas hacia lejanos puntos del planeta.
Todos estos cambios modificaron el paisaje urbano, ya que había que pensar de que modo se
podía organizar semejante crecimiento poblacional. Es así como se transformaron antiguos
barrios en asentamientos obreros. Estos eran un conjunto de viviendas muy precarias, de
construcción barata, cercanas a las industrias ya que no se contaban con medios de transporte
público que pudiera alcanzar a los obreros a las zonas de trabajo. Además era la forma mas
barata de facilitar un hospedaje en las cercanías de dichos sectores. La mayoría de las viviendas
carecía de los requerimientos sanitarios y de higiene mínimos, no poseían luz ni ventilación,
tenían un limitado número de baños comunes y reducidos espacios donde arrojar los residuos.
También contaban con desagües rudimentarios que provocaban acumulación de aguas en
diferentes sectores y sumado a los residuos comenzaron a provocar diversas enfermedades que
afectaron considerablemente a la población como la tuberculosis y el cólera. Estas epidemias
pusieron en alerta el tema de la higiene en la ciudad lo que ayudo a iniciar diferentes
reformaciones urbanas y a prestar atención al mantenimiento urbano. Toda esta situación generó
miseria y pobreza en las clases obreras que desembocaron en conflictos sociales: las protestas
obreras. Junto a esto surgieron leyes que hicieron responsables a las autoridades frente a
conflictos urbanos como lo son la provisión de aguas y el desecho de residuos, entre otros.
Debido a esto nace la urbanística como esperanza para revertir los problemas en las ciudades,
quien es la encargada de organizar los espacios colaborando en la construcción de una
comunidad democrática. Se manifiesta como una manera de conseguir una armonía en las
construcciones a través de modificaciones parciales de las mismas.
A lo largo del tiempo, muchas personas se han involucrado en la urbanística moderna para
tratar de solucionar grandes dilemas de cada época, cabe destacarse la presencia de Georges
Haussmann en Paris en 1853 quien se dedicó a varios puntos conflictivos como lo son la
contaminación de las aguas y la carencia de un sistema adecuado de alcantarillado, entre otros.