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UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

ASIGNATURA:

EDUCACIÓN PARA LA PAZ Y


FORMACIÓN CIUDADANA

TEMA:

Trabajo Final

NOMBRE:

LISSETT DEL CARMEN SOLORIN R


MATRICULA:

15-4635

PRESENTADO A:

LIZANDRA CRUZ MA
INTRODUCCIÓN
En los últimos treinta años América Latina ha experimentado la transición y la
consolidación democrática. Se han producido grandes avances para garantizar el
derecho universal al voto, elecciones libres y transparentes y el acceso y la
permanencia en el poder de los cargos elegidos; sin embargo, estos elementos no son
suficientes para garantizar la solidez de los regímenes democráticos. Los
acontecimientos recientes de Honduras son emblemáticos del riesgo de un retroceso
autoritario y cómo éste puede materializarse de manera repentina.

La democracia en América Latina presenta elementos de debilidad relacionados con la


incapacidad del Estado de extender los derechos humanos fundamentales a toda la
población, requisito fundamental para convertir a los habitantes de un estado en
ciudadanos a todo efecto y para garantizar la cohesión social, la participación, el
sentido de pertenencia de la población hacia el Estado y el apoyo estable de la
población a esa democracia, es decir, como elemento legitimador.
ESPACIO PARA ENVIAR TRABAJO FINAL

Estimados estudiantes
Estas son las indicaciones para su trabajo final:
1)Realiza un estudio sobre la situación social y democracia que se
vive en América Latina y El Caribe. Mediante un croquis, presenta los
países que viven en democracia en América Latina.

¿Cuáles son los países más democráticos de América Latina?

La democracia plena en América Latina todavía es un reto por conseguir. De hecho,


sólo dos países, Uruguay y Costa Rica, están considerados como "democracias
plenas", según señala un informe de 'The EconomistaInteligencieUntad' (EIU). El
estudio, que intenta calificar el estado de la democracia liberal en 164 estados
independientes y dos territorios con un índice que va de 0 a 10, clasifica a los países en
cuatro categorías: los que tienen "democracias plenas", los que son "democracia.

EEUU

Argentina

Bolivia

Chile

Ecuador
Colombia

Brasil

Nicaragua

Honduras

Guatemala

Rep. Dominicana

Haití

Uruguay

Paraguay
Su riman

España

Francia

Inglaterra

Italia

Grecia

Alemania

África
LA TRANSICIÓN A LA DEMOCRACIA

De 2005 a 2007 en muchos países de América Latina se celebraron elecciones


democráticas, que contribuyeron en gran medida al mayor avance económico de las
últimas décadas en la región.

Los resultados de la publicación anual de 2009 de Freedom House enseñan que 25 de


las 35 naciones están clasificadas como libres, nueve son "parcialmente libres" y sólo
Cuba está clasificada como "no libre" (Freedom House, 2009).

La clasificación de "libre" se refiere a un régimen electoral de tipo democrático donde el


derecho al voto es universal, el acceso a las principales posiciones del gobierno se
logra mediante elecciones, que son a la vez competitivas e institucionalizadas, y
existen durante y entre esas elecciones diversas libertades políticas, tales como las de
asociación, expresión, movimiento y de disponibilidad de información no monopolizada
por el Estado o por un agente privado (O'Donnell, 2004).

Sin embargo, es posible distinguir entre un régimen democrático en sentido formal y


una democracia de tipo integral. La segunda, más allá de una dimensión meramente
electoral, se relaciona con su capacidad de incluir grupos sociales diferentes, de
garantizar la libertad y el respeto de los derechos de toda la población, así como la
posibilidad real de participar en la política de su país. Esas son las bases que a
nosotras nos interesan, pues resultan fundamentales para el desarrollo sostenible de la
humanidad.

Los avances democráticos

La observación del Índice de Democracia Electoral (IDE)1 sugiere que se han


producido grandes mejoras desde 1977 (en un rango de 0 a 1, el valor era de 0.25)
hasta hoy (valor de 0.87) en toda la región, y que los progresos más importantes se
registraron entre 1977 y 1985.

En la actualidad, en todos los países de la región se reconoce el derecho universal al


voto, pese a la permanencia de algunos problemas como el subregistro, las dificultades
para la obtención de documentos de identidad o restricciones de voto a ciudadanos que
viven en el extranjero. En la mayoría de las elecciones, desde 1980 no se verificaron
irregularidades que influyeran de manera decisiva en el resultado, con excepción de
República Dominicana en 1994 y Perú en 2000. Se han hecho relevantes progresos en
la posibilidad de presentarse como candidatos y de expresar la propia preferencia
electoral: el Estado ha mejorado su capacidad para garantizar la integridad física de los
candidatos (con excepción de Colombia). También la efectiva ocupación de los cargos
públicos por los candidatos ganadores ha aumentado, lo mismo que su permanencia
durante los plazos establecidos. Además, a pesar de las caídas de gobernantes como
producto de la movilización social, estas crisis casi nunca se han resuelto con
intervención militar (ni siquiera en momentos de crisis como en Bolivia y Ecuador), lo
que ha terminado con la secuela de golpes de Estado que caracterizaron el pasado
reciente de América Latina. Sin embargo, el golpe de estado de Honduras de junio de
2009 constituye un inesperado paso atrás para las democracias centroamericanas.

Es probable que la disminución en los cambios violentos de gobierno sea resultado del
rechazo de las experiencias de dictaduras sangrientas y corruptas. Por eso podemos
decir que, aunque la población siente un cierto malestar hacia el funcionamiento de la
democracia, no la cuestiona como mejor forma de gobierno (Latinobarómetro, 2008).
Sin embargo, como veremos más adelante, la pobreza y la falta de bienestar ponen en
riesgo esta postura en el largo plazo.

A pesar de los pasos que todos los países latinoamericanos han dado en los aspectos
formales de la democracia, tenemos que profundizar nuestro análisis según una
definición más amplia de democracia, que incluya el concepto de ciudadanía integral,
formada por la ciudadanía política, civil y social, cuestión a la que nos vamos a dedicar
en las siguientes líneas.

La Democracia en América Latin

Hace alrededor de 37 años atrás la democracia en América Latina era un espejismo, en


Suramérica Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay y Brasil se encontraban bajo una
dictadura militar, Bolivia era propensa a gobiernos militares Perú, Ecuador, Colombia y
Venezuela mantenían un gobierno con cierto grado de democracia. Centroamérica
presentaba características similares.

En la actualidad Latinoamérica exhibe un panorama radicalmente diferente. En


nuestros días, y pese a todas sus carencias y déficit, la democracia es la forma
mayoritaria de gobierno que se practican en la región.

2) Investiga y analiza de manera reflexiva cuál es la misión de las


organizaciones no gubernamentales, ONG y cita estas organizaciones.
Aunque cualquier organización privada es, en sentido estricto, una organización no
gubernamental (por ejemplo, una empresa sin fines de lucro), el término ONG se utiliza
para identificar a organizaciones que no son parte de las esferas gubernamentales ni
son empresas cuyo fin fundamental es el lucro. Por lo general son conformadas y se
encuentran a cargo de ciudadanos comunes que comparten una visión y misión común,
pudiendo obtener financiamiento del Gobierno, de otras ONG (como fundaciones), o de
individuos o empresas particulares. Algunas ONG, con el fin de mantener autonomía de
gestión e imparcialidad, evitan la financiación oficial y trabajan a través de voluntarios.

El universo de las ONG lo conforman un grupo muy diverso de organizaciones que se


dedican a una amplia gama de actividades y se encuentran en diferentes partes del
mundo. Algunas pueden tener carácter benéfico, mientras que otras se acogen a una
exención de impuestos basada en el reconocimiento de sus fines sociales, y otras
pueden ser frentes de intereses políticos, religiosos o de otra índole.

Se estima que el número de ONG que operan en los Estados Unidos alcanza más de
un millón y medio.

Rusia cuenta con 277.000 ONG.

En India se estima que hay alrededor de dos millones de ONG (datos de 2009), poco
más de una ONG por cada 600 habitantes, el mismo número de escuelas primarias y
centros de salud que se encuentran en India.

Las ONG son difíciles de definir y clasificar, pues el término no siempre se usa
consecuentemente. En algunos países, el término ONG se aplica a una organización
que en otro país se denominaría ONL (organización sin ánimo de lucro), y viceversa.
Como resultado, existen muchas clasificaciones diferentes. El enfoque más común está
en la 'orientación' y el 'ámbito de operación'. La orientación de una ONG se refiere al
nivel de participación en sus actividades de la comunidad destinataria. Estas
actividades pueden incluir derechos humanos, medio ambiente, salud o desarrollo. El
ámbito de operación de una ONG indica la escala en la que trabaja, que puede ser
local, regional, nacional o internacional.

Una de las primeras menciones del término ONG fue en 1945, año en que se creó la
Organización de las Naciones Unidas (ONU). La ONU, que es en sí misma una
organización intergubernamental, logró que ciertas agencias especializadas no
estatales aprobadas internacionalmente, es decir, organizaciones no gubernamentales,
pudieran obtener el estatus de observadoras en sus asambleas y algunas de sus
reuniones. Más tarde, el término se utilizó ampliamente, y hoy en día, según la ONU,
cualquier organización privada independiente de la administración del Gobierno, puede
ser llamada ONG siempre y cuando no tenga fines de lucro, y no sea un grupo criminal
o un partido político.

Una característica que comparten estas organizaciones diversas es que, al no tener


ánimo de lucro, no se ven obstaculizadas por objetivos financieros a corto plazo. En
consecuencia, pueden dedicarse a asuntos que se prolongaron en el largo plazo, como
el cambio climático, la prevención de la malaria o la prohibición mundial de las minas
antipersona. Las encuestas públicas revelan que las ONG disfrutan de un grado de
confianza muy alto por parte de la ciudadanía, lo que puede ser un indicador útil,
aunque no siempre suficiente, de las preocupaciones de la sociedad y de los agentes
implicados.

UNESCO

Su propósito es intervenir frente al crecimiento de la violencia en las escuelas y su


negativo impacto en los aprendizajes. El objetivo del plan de trabajo es “mejorar las
capacidades y la gestión de políticas nacionales, programas y prácticas educativas
sobre Cultura de la Paz en América Latina y el Caribe”. El proyecto del que se da
cuenta en el presente documento incluye componentes de la tercera fase de este plan
de trabajo.

En sus inicios le proyecto proponía lanzar un Programa Iberoamericano de Educación


para la Paz que pudiese fortalecer las acciones gubernamentales a favor del
planeamiento, adopción e implementación de políticas en este ámbito. Las dos
primeras fases del proyecto avanzaron en elaboración de contenidos y acciones para
ese propósito. Sin embargo, el contexto regional e institucional han ido mostrando otras
necesidades que han modificado las acciones planificadas, pero sin cambiar sus
objetivos y propósitos.

Una de las nuevas variables es el Programa de Acción Mundial a Favor de una Cultura
de la Paz, que fue presentado por la Directora General a petición de los Estados
Miembro en la sesión 185 del Consejo Ejecutivo de la UNESCO. El programa
comprende un conjunto de actividades intersectoriales e interdisciplinarias que están en
armonía con los objetivos del proyecto, pero que no avanzaban en la dirección de un
Plan Iberoamericano, lo cual habría duplicado esfuerzos.

En todos los países en que se desarrollaron las intervenciones la implementación


buscó generar y sistematizar aprendizajes, conocimientos e información. Esta
información debió ser relevante, transferible y escalable para ser utilizada por todos los
países de la región.

O.E.A.

La necesidad de trabajar en el ámbito de la prevención y resolución de conflictos, ha


sido uno de los objetivos fundamentales de la Organización de Estados Americanos
desde su creación. Dentro de los objetivos esenciales de la OEA, en su carta
constitutiva establece la prevención y resolución de conflictos desde distintas
perspectivas. "La Organización de los Estados Americanos, para realizar los principios
en que se funda y cumplir sus obligaciones regionales de acuerdo con la Carta de las
Naciones Unidas, establece los siguientes propósitos esenciales:

Afianzar la paz y la seguridad del continente;

Promover y consolidar la democracia representativa dentro del respeto al principio de


no intervención;

Prevenir las posibles causas de dificultades y asegurar la solución pacífica de


controversias que surjan entre los Estados miembros;

Organizar la acción solidaria de éstos en caso de agresión;

Procurar la solución de los problemas políticos, jurídicos y económicos que se susciten


entre ellos;

Promover, por medio de la acción cooperativa, su desarrollo económico, social y


cultural;

Erradicar la pobreza crítica, que constituye un obstáculo al pleno desarrollo


democrático de los pueblos del hemisferio, y

Alcanzar una efectiva limitación de armamentos convencionales que permita dedicar el


mayor número de recursos al desarrollo económico y social de los Estados miembros.

Con el objetivo de cumplir estas determinaciones, en el ámbito de la prevención y


resolución de conflictos es que se ha optado por desarrollar acciones en dos áreas: en
el apoyo y fortalecimiento de la democracia y en la seguridad hemisférica.

UNICEF

En el UNICEF, la educación para la paz se define como “un proceso de promoción del
conocimiento, las capacidades, las actitudes y los valores necesarios para producir
cambios de comportamiento que permitan a los niños, los jóvenes y los adultos
prevenir los conflictos y la violencia, tanto la violencia evidente como la estructural;
resolver conflictos de manera pacífica; y crear condiciones que conduzcan a la paz,
tanto a escala interpersonal, como intergrupal, nacional o internacional.”

Las actividades relacionadas con la educación para la paz que promueve el UNICEF
siguen las directrices de los Objetivos de Desarrollo para el Milenio y los principios de
los derechos humanos, como por ejemplo los incluidos en la Convención sobre los
Derechos del Niño, es decir, los intereses directos de los propios niños, la no
discriminación y el derecho de los niños a la participación y a ser escuchados. Estos
principios implican un compromiso con la construcción de la paz, la reducción de la
pobreza a través de la inversión en la infancia, y la reducción de las diferencias
mediante medidas dirigidas a los niños más vulnerables, más marginados y más
necesitados.

La educación para la paz contribuye a crear entornos de aprendizaje de calidad,


adaptados a las necesidades del niño, basados en el respeto a los derechos, las
diferencias de género, la salud y la seguridad de los niños, su protección y la
contribución positiva a su educación. Una educación de calidad inspirada en la paz
produce alumnos bien alfabetizados, conocedores de la aritmética básica y de una
adecuada preparación para la vida activa, como el pensamiento crítico, la capacidad de
tomar decisiones, la comunicación, la negociación, la resolución de conflictos, la
capacidad para hacerles frente y una actitud personal aplicable a contextos específicos,
entre otros la construcción de la paz, la prevención de la violencia, la higiene y el
saneamiento , las prácticas saludables y nutricionales, la prevención del VIH/SIDA y la
protección medioambiental.

El UNICEF sostiene que la educación para la paz tiene razón de ser en todas las
sociedades, y no solo en aquellas que sufren conflictos armados o emergencias. Dado
que el cambio duradero en los comportamientos de los niños y los adultos solo tiene
lugar a largo plazo, una educación para la paz que sea efectiva es un proceso
necesariamente largo, no una intervención puntual. Si bien se basa a menudo en la
escuela y otros ambientes de aprendizaje, la educación para la paz debería idealmente
implicar a la comunidad entera.

LA ONU

Según la definen las Naciones Unidas, la educación para la paz es un conjunto de


valores, actitudes, modos de comportamiento y estilos de vida que rechaza la violencia
y previene los conflictos afrontando sus causas de raíz, a fin de solucionar los
problemas a través del diálogo y la negociación entre las personas, los grupos y las
naciones.

En términos de política internacional, misión de paz se entiende por aquella amparada


por las Naciones Unidas (ONU) en la que se establecen medidas preventivas para la
salvaguardia de la paz en un país o territorio, o coercitivas para imponerla.

La clasificación establecida en 1992 por la Secretaría General de las Naciones Unidas


establece como misiones de paz las siguientes:

Acción diplomática: En situaciones de alto riesgo, se establece un mecanismo que


activa la diplomacia de los países más influyentes en la zona para que, mediante
negociación, eviten la declaración de hostilidades.
Establecimiento de la paz (en inglés, Peace building): Aquella en la que se trata de que
las partes beligerantes se acojan al Capítulo VI de la Carta de las Naciones Unidas.

Mantenimiento de la paz y seguridad (en inglés, Peace keeping): Que requiere la


presencia de fuerzas militares o civiles en la zona ya en conflicto, con el beneplácito de
las partes, y cuyo objetivo es separar a los contendientes y garantizar la ayuda
humanitaria.

Imposición de la paz (en inglés, Peace enforcement): Al amparo del Capítulo VII de la
Carta de las Naciones Unidas, las medidas de imposición de la paz se establecen
como la última solución cuando las partes no han aceptado o ha sido imposible alguna
de las medidas anteriores. Es establecida por el Consejo de Seguridad y se utilizan
fuerzas armadas bajo bandera de las Naciones Unidas o bien bajo su amparo en un
conflicto abierto.

Consolidación de la paz (en inglés, Peace making): Bien por acuerdo de las partes,
bien tras el éxito de las medidas de imposición de la paz, las fuerzas armadas bajo
amparo de la ONU realizan tareas de separación de las partes y mantenimiento de un
mínimo de orden civil. Puede incluir la ayuda humanitaria y el desarme de los
beligerantes. Al mantenimiento de la paz, se unen los procesos de consolidación de la
paz, tales como la supervisión de procesos electorales, canalización de ayuda a la
reconstrucción y establecimiento de un poder civil legítimo.

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